TÚ
Un esfuerzo que merece ser dedicado a mi familia y a mi amor de adolecente y de vejes, mi Rouss.
– ¿Quién es?
– Hola, hijo.
– Buen día, mamá.
– Ya ésta listo el desayuno.
Cogió su móvil, encendió la pantalla. Vio la hora «8:15» decidió ingresar a la casilla
de mensajes recibidos. Comenzó a leerlos uno por uno. Eran los únicos que le gustaban
almacenar. Cada vez que lo hacía se le escapaba una pequeña sonrisita y también sentía
como aumentaba gradualmente los latidos de su corazón.
Salió de donde había entrado, para ingresar a mensaje nuevo, donde escribió un
SMS «Espero que estés bien, brujita» no esta convencido de lo que escribió. Lo borra.
Vuelve a escribir «Que la pases bien en este día, mi brujita» Lo lee y lo vuelve a leer. Ahora
se le ve más convencido que al inicio. Esta apunto de enviar. Antes de presionar. Decide
volverlo a leer « ¿Mi brujita? ¿Cómo se me ocurrió escribir aquello? Últimamente me han
Se coloca los audios y enciende la radio. Los primeros sonidos que se oyen es la de
una canción que en su vida ha escuchado, envés de cambiarlo decide aumentar el
volumen. Le agrada. Al parecer el cantante le esta cantando a su esposa. Imagina
dedicándole esa canción a la persona indicada. Por el momento queda indagar a quien
pertenece aquella hermosa melodía. Termina la canción y entran a un corte comercial. Lo
único que puede recordar de lo que acaba de escuchar «Me conoces bien, siempre te
amaré» tararea con la poca letra que se lo acaba de grabar « ¿Dónde podría anotarlo? »Es
consciente de que no es bueno recordando cosas « ¡ya sé! Anotare en un nuevo SMS » lo
anoto y lo guardó. Minutos más tarde vuelve a encender su móvil, ve que ya son las
«8:52» y no hay ninguna respuesta. Esta muy preocupado, quiere una respuesta y no la
tiene, considera que lo mejor es respirar un poco de aire fresco y poder pensar en cómo
disculparse, considera que aquel mensaje le ha molesto, ahora solo le queda pensar en
cómo disculparse. Guarda su móvil en el bolsillo y abre la ventana, mientras lo hace
alguien le habla «joven su pasaje» antes de responder interviene su tío «yo pago de los
dos» retomo lo que estaba haciendo antes de ser interrumpido por el cobrador. Desde lo
alto del cerro observo un pequeño pueblo de nombre Vinchos que cada año se expandía
más. Había sido el lugar de origen de su familia. Una pequeña ciudad donde no se
respiraba contaminación, un hermoso lugar donde se sentía como el viento abrazaba a
cada momento, se respiraba solidaridad, amor y mucho respeto hacia el prójimo.
Había que pintar una pared y hacer una limpieza general. Recordaba que alguna vez ayudo
a sus hermanos pintando, pero no recordaba cómo es que se hacía. Hizo lo que pudo,
pero no le salió tan mal. Una vez de haber terminado de pintar, había que hacer la
limpieza. Pero antes de empezar salió de la habitación donde se encontraba y se dirigió a
la habitación donde había dejado su móvil. A cada paso que daba, las emociones se
aceleraban. Tenía la sensación de que había un SMS esperando una respuesta. Llega a la
habitación, entra, coge su móvil. Enciende la pantalla y enseguida se le dibuja una sonrisa
en el rostro, en esta y en otras veces sus emociones habían acertado. Abrió la casilla de
mensajes « No tengo nada que perdonarte. Gracias por escribirme, ten un lindo día » la
preocupación que había tenido desde el momento que envió el SMS hasta hace poco que
había leído, se había desvanecido. Ahora estaba más tranquilo, su nuevo estado le
motivaba a expresar lo que estaba sintiendo por ella. Decide escribir un nuevo mensaje.
Está muy feliz. Este último mensaje que leyó lo puso muy contenta. Se levanta de la cama
con el móvil en la mano y salta de felicidad. Tiene tanta felicidad que se le escapan
algunas lágrimas, cuando cae la primera, recuerda lo que una vez le dijo su chico o bueno
el chico que no es su chico, pero que pronto será suyo « Las únicas lágrimas que toda
mujer deben derramar son las lágrimas de felicidad» siente que su corazón se le quiere
salir del pecho, tiene tantas ganas de abrazarlo. En ese momento de felicidad,
repentinamente se le viene a la mente una pequeña sensación de inseguridad, de no
ilusionarse con algo que tal vez interpreto mal al leer el mensaje. Esta inseguridad derriba
esa intensa felicidad de hace un momento. Decide sentarse y releer con calma «Hay algo
que quiero decirte desde hace mucho tiempo… » Termina de leer y lo vuelve a leer y
nuevamente vuelve a estar feliz. Ahora esta muy segura de lo que decía en el mensaje.
Aun sentada en la cama coge su almohada, lo abraza con todas sus fuerzas. Esa felicidad
que siente tiene un nombre y lo grita y justo en ese momento que va a volver a gritar. «¡
Te amo, Jua…¡» Alguien abre la puerta de su habitación y entra.
– ¡¿Mamá que paso, por qué regresaste tan pronto de tu viaje!? – dice muy sorprendida.
– Hoy me fue bien y vendí toda la mercadería.
Se acerca a su madre y lo abraza.
– Me alegra mucho que hayas vuelto tan pronto, así podemos cocinar juntas.
–Sí claro. Dime ¿Qué es lo que ibas a gritar antes de que yo ingrese a tu cuarto?– pregunta
mientras sonríe.
–Iba a decir Juuu, Juuu, Juu –hace contacto sus dos dedos índices, en respuesta a su
nerviosismo –. Nada, mamá. Olvídalo. Mejor vamos a cocinar debes de tener muchísima
hambre.
La madre decide no insistir más. Solo atina a mover la cabeza y salen del cuarto.
Móvil en mano espero una respuesta a su mensaje. Pasó algunos minutos y no había
legado dicha respuesta. No sabía si dejar el móvil entre sus cosas y continuar con su
trabajo o llevárselo consigo y seguir con el trabajo. Pensó por un corto tiempo y opto por
llevarlo consigo. Antes de guardar en su bolcillo programo en modo vibrador y así pueda
sentir el mensaje cuando llegue, porque si no el sonido podría confundirse con la bulla
que podría hacer. Ya con el móvil en el bolcillo se dirigió al baño para poder sacar
herramienta de limpieza. Sacó una escoba; un trapeador y un balde para sacar agua.
Comenzó por la cocina. Mientras trapeaba iba pensando en las posibles respuestas que
Jueves 13 de marzo.
Ha encendido la radio. Las primeras voces que se oyen son las del noticiero que dan las
primeras noticias de la mañana «que tiempo es hoy, que los corruptos gobiernan…» hoy
no tiene ganas de escuchar noticias. Le apetece escuchar algo de música. Sigue cambiando
de emisora «llamen y hagan sus pedidos musicales…» ha ido hasta el final de las emisoras
y nada bueno ha encontrado. Retorna al inicio. Entre tantas, idas y vueltas, no ha
encontrado nada bueno que escuchar. Cuando esta apunto de apagar la radio, escucha
una canción «late el corazón late hoy por vos y si canto y lloro canto para ti mi vida entera
toda te la doy… interrumpimos la trasmisión, para informarles de una penosa noticia. El
norte del país vuelve a ser sacudido por un terremoto. Para mayores detalles damos el
pase a nuestra filial en Ica. Adelante Alex Todo Ayacucho te escucha. Gracias Max. Hace
unos instantes, exactamente a las 7:37 de la mañana el norte del país vuelve a sufrir otro
terremoto de 4.5 grados. Hasta el momento se han registró 40 personas heridas… » Le
apena lo sucedido, decide escuchar hasta el final «mandamos nuestra solidaridad a
nuestros hermanos de Ica... Nos informan que ya es momento de ir a los cortes
comerciales, pero antes de irnos continuaremos con la canción que hace un momento
estaba sonando, la de Alex Campos y su hermoso tema, Tu poeta, para todos esos chicos
enamorados» antes de que suene la canción, salta de su cama, coge un lápiz y una hoja,
después anota el nombre del cantante y su tema «…seré tu poema y tu razón de ser tu
serás mi reina mi única mujer…» mientras va sonando la canción piensa en lo bello y lindo
que sería cantarle esa canción, tiene las esperanzas de que algún día lo ara. Considera que
es la canción ideal para cantarle a su futura brujita «nunca me cansare de amarte, solo le
pido a Dios del cielo que me haga mejor para ti» la canción ha terminado.
Mientras escucha la canción, se imagina a su chico que todavía no es suyo, pero que
pronto lo será; cantándole al oído esta canción. Tiene ganas de escuchar su vos
«Iré a una reunión con unos amigos» escribe y espera una respuesta « ¿por dónde es?»
pregunta a uno de sus amigos sobre el nombre del lugar «estoy en Alameda» está al tanto
de su móvil «¿sobre qué es tu reunión?» piensa en la manera de explicar, ya lo tiene y
escribe «es sobre un reencuentro de amigos» antes de recibir una respuesta envía otro
mensaje «¿y tú que haces?» tarda algunos minutos y responde «estoy viendo TV, pero no
hay nada interesante» ya esteba oscureciendo «¿por qué no ves una película de terror?»
tarda unos minutos, porque busca sus películas y no las encuentra «me gustaría, pero mi
madre boto todas mi películas y no tengo ninguna» recuerda que el sí tiene algunas «Yo
puedo prestarte si deseas» considera que este es una oportunidad para tenerlo cerca «me
encantaría, pero no conoces mi casa» piensa que es el momento apropiado para verla
«dime. Donde vengo» esto le parece interesante «vivo por reservorio» no conoce, pero
quiero conocerlo «yo estaré ahí dentro de 2 horas. A más tardar a las 9:05» considera que
es muy tarde, pero no importa, porque ella saldrá cuando él este allí «cuando estés en
reservorio me mandas un mensaje y yo estaré allí» esta muy contento, ahora queda
despedirse de sus amigos e ir a su casa por la película «entonces allí nos vemos» llega a su
casa y busca entre sus películas y lo encuentra. Cena lo más rápido que puede y sale
corriendo hasta el paradero que lo llevé a dicho lugar. Llega con una anticipación de 8
minutos y decide enviar un mensaje «Ya llegué, te espero»
Había estado esperando, sentado en una esquina con el video en la mano. Ella llegó con
una chompa rosada, unos pantalones y unas zapatillas ambos de color negras. Estaba
preciosa. Había tenido razón su corazón, cuando decidió enamorase de ella. «Hola» le
saluda con un beso en la mejilla y él responde de la misma manera. Ambos estaban muy
nerviosos. Antes se habían visto y no habían sentido estos nervios que ahora estaban
sintiendo «no podemos estar aquí. Sígueme» sin decir nada obedece y va detrás de ella.
Llegan a la puerta de una casa, donde se sientan. Están separados por unos pocos
centímetros. Conversan parte de la noche; él le va contando algunas etapas de su vida y
ella hace lo mismo. Ya han pasado muchas horas, el frio ha aumentado. Surge la necesidad
de juntarse y se juntan. Él había deseado muchas veces tenerlo tan cerca, hoy que la
tenía, su corazón latía de una forma increíble. La misma necesidad del cuerpo, del corazón
y del momento hace que él ponga sus manos en los hombros, lo abrazo. Piensa mientras
lo hace «¿estará sintiendo lo mismo que yo? ¿Y si no siente nada?» esta algo nervioso,
aun así vuelve a pensar «si en caso no siente nada, lo apartara y si en caso siente algo ¿lo
dejara?» prefiere no atormentarse más con esos pensamientos y decide dejar a que pase