Antropología a II B, curso 2017-18

Christian García Andreu

En el tercer capítulo de The mismeasure of the desire, Stein abre la pregunta sobre si la
forma de agrupar a la población según su orientación sexual, es puramente arbitraria o si
por el contrario esta responde a aspectos mas profundos de la propia naturaleza humana.
De esta distinción sobre el modo de abordar la orientación sexual, surgen dos corrientes
de pensamiento, la corriente esencialista y la construccionista. La corriente de la teoría
esencialista, plantea que la orientación sexual es una categoría profunda de la naturaleza
humana, y que por lo tanto esta puede estudiarse mediante un análisis científico. Por el
otro lado la corriente construccionista, entiende que la orientación sexual no es un valor
intrínseco de la naturaleza humana y que esta tiene un origen cultural, que depende del
contexto histórico y sociocultural donde se viva.
Para entender mejor estas dos posturas, el autor introduce los conceptos de clase natural
y clase social. Este lo hace mediante analogía con una sociedad hipotética, la del país de
Zomnia, donde se categoriza a la gente según su orientación a la hora de dormir. Frontiers
serían los que duermen sobre su estómago, mientras que backers serían los que duermen
sobre su espalda. De esta distinción, surgen ciertos prejuicios y estereotipos sociales, ya
que, según los estudios científicos de este país, la postura al dormir está estrechamente
relacionada con la personalidad y el carácter de los individuos.
Stein, piensa que este modo de categorizar la naturaleza humana, es un error tanto ético
como metafísico. Ante esto, la gente de Zomnia podrán responder de dos modos. De un
modo parecido a la corriente esencialista, argumentarán que hay estudios científicos que
demuestran esto, por lo que no supondría ningún problema metafísico. Mientras que la
respuesta sociológica, similar a la construccionista, argumentará que estas categorías son
totalmente validas socialmente hablando en sociedad de Zomnia, ya que, aunque no se
nazca con una “orientación del sueño”, esta se desarrolla en la psyche del individuo ante
presiones o expectativas sociales.
Por lo tanto, clase natural sería un conjunto ontológicamente real, que no depende de la
intervención humana, mientras que la clase social, sería una construcción humana. Las
clases humanas naturales, serían las presentes en la naturaleza, como el grupo sanguíneo,
los cromosomas, etc.
Pero, aunque suene fácil definir estas clases, la dificultad estriba a la hora de
diferenciarlas, ya que dependiendo de como se defina el concepto, esto puede cambiar.
Con el ejemplo de los yuppies se nos muestra dos modos de definir una clase. La
definición estrecha, como es “miembro de la clase media alta entre 20 y 43 y que consume
x productos”, o la definición amplia, la definición de la cual no refiere a objetos o ciertas
propiedades propias de cierta cultura.
Finalmente, Stein concluye definiendo como clase natural aquella que cumple el requisito
de definirse ampliamente y a la vez tener evidencia empírica de que formar parte de este
grupo juega un papel determinante en leyes científicas o sociales en todas las culturas.
En mi opinión, sigue siendo complicado distinguir entre clase natural o clase social y creo
que tanto la corriente esencialista como la constructivista tienen parte de razón, ya que
existen tanto aspectos biológicos como sociales que influyen en la orientación sexual. El
autentico dilema radica en si es correcto clasificar a la gente por su orientación o no, ya
que esta solo tiene importancia en nuestra vida a nivel reproductivo y se le da importancia
a este derivado de la importancia del modelo de familia establecido culturalmente en la
sociedad y su presión cultural. Creo que en sociedades futuras, donde este modelo
desaparezca por completo y haya avances en genética reproductiva, solo se mirará la
orientación sexual a la hora de buscar pareja o reproducirse, dependiendo del caso, y
haciendo que ambas teorías se igualen o surja una síntesis de las dos.

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