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Cristian Camilo Reyes Rodríguez

UNAM Facultad de filosofía


Textos Filosóficos IV
Profa. Nora María Matamoros
Ensayo final para Extraordinario: La Astronomía de Galileo como una Nueva Manera de
Hacer Filosofía de la Naturaleza

Este trabajo tiene como objetivo poder entender los cambios que va a sufrir la
filosofía de la naturaleza dentro del Renacimiento, y muy en especial con uno de los ahora
llamados “físicos”, que en este caso será, Galileo. Por ello revisaremos el pensamiento de
este erudito personaje, muy especialmente el material que hable sobre el cosmos o universo,
y así podremos observar cómo se realiza un cambio dentro del pensamiento filosófico y como
de alguna manera se plantea y se empieza a gestar la que será la “física moderna”.
Para lograr este objetivo, lo que primero tendremos que realizar es revisar un
poco a cerca del rumbo previo de la filosofía de la naturaleza; esto es necesario pues así
tendremos un análisis que nos permitirá ver cuáles fueron los puntos que atacó o discrepó
nuestro autor, para luego poder, él mismo, acercase a una nueva manera de ver el mundo
físico.
Adelantándonos un poco, podemos decir que parte del desarrollo de nuevas
formas de ver a la Naturaleza, se deben a que se empieza aplicar de forma más recurrente el
método empírico y, sobre todo, observacional, lo cual viene a ser muy contrario con los
análisis que podamos encontrar en la Física de Aristóteles, o con la visión del cosmos en el
Timeo de Platón.
Es evidente que el giro que se dio en Renacimiento fue muy grande, pues
pasamos de ver a la Naturaleza como algo que parecía ser cuasi divino a verla como un objeto
de estudio cuantificable y demostrable. La cosa está en que la evolución misma de la ciencia
se fue forjando poco a poco gracias a estos ideales, y a nosotros nos toca investigar por qué
se empieza a ver a la Naturaleza de modo diferente. Quizá podríamos hacer una breve
hipótesis de que el hombre del Renacimiento a ya no conformarse con las teorías clásicas,
intenta demostrar el cómo se equivocaban y el cómo se podía dar una mejor respuesta. Y
también será nuestra labor revisar hasta qué punto el pensamiento físico se va alejando del
pensamiento filosófico. Esto lo decimos pues hay que tener en cuenta que, tanto la filosofía
de la naturaleza que encontramos tanto en Aristóteles como Platón, no solo se encargan de
intentar a responder fenómenos físicos; sino de encontrar la verdad última del cosmos, por
decirlo de alguna manera. Al mismo tiempo tenemos que revisar cómo de los postulados
físicos, afectan o no a la misma visión de la filosofía.
Una cosa que es importante no dejar a notar es que la gran mayoría de estos
nuevos filósofos y físicos es que la gran mayoría de su trabajo intenta rebatir las teorías de
Aristóteles1; gran parte de su pensamiento se oficializó en las instituciones de la Edad Media;
por consiguiente, si había alguien a quien la mayoría criticaba, era al filósofo estagirita,
dentro de sus escritos sobre la physis, el cual parecía que le importaba más el estudio de las
causas (en sí) que de los fenómenos que acontecen en el mundo. O entender que, para él
mismo, el método de abordar a este campo de estudio parecía que se hacía más por silogística
deductiva, que por comprobación inductiva2. Lo cual a los físicos les parecía insuficiente y
por ello no es raro observar que, en ocasiones, de forma literal, evidenciaban los errores del
filósofo griego3 y claro, podemos encontrar todo esto en el pensador que nos atañe, Galileo.
Por ello nuestro trabajo es encontrar, acabado el primer momento de éste, los
puntos de discusión en torno a lo que se aquejan de las deficiencias metodológicas para poder
explicar a la Naturaleza y de este modo encontrar el hilo conductor que pueda justificar tanto
las controversias que tuvo nuestro autor, así como la relación que se tenía con la filosofía.
Así mismo las concepciones que del espacio exterior que se tenían no eran
inmensamente diferentes, lo que cambiaba en ocasiones eran las consecuencias de lo que ello
se decía, no por nada la iglesia católica condeno a Galileo por su idea heliocéntrica4, la cual
sabemos, lo que explica es que la tierra gira alrededor del sol y no al revés, como se había
creído hasta entonces. Pero si nos ponemos a pensar un momento, esta idea no hace mucho
más amplia la idea del universo o cosmos, solo la sitúa en otro lugar; pues Galileo, no sabía
(o nosotros no sabemos si sabía) que el universo era más grande de lo que hasta el momento
se pensaba. Por este tipo de razones es que podemos dudar que el pensamiento de los “físicos”
renacentistas pudieran ser extremamente revolucionarios, como usualmente lo queremos ver.

1
Cfr. Galileo, Diálogos concernientes a dos ciencias nuevas, en Antología, P. 81.
2
Cfr. Aristóteles, Física, 184 a.
3
Ver nota 2
4
Cfr. http://www.voltairenet.org/article126059.html, revisado el día 20 de abril de 2017.
Será interesante ver qué cosas seguían pensado con respecto a las ideas de la Naturaleza
dadas por la tradición.
Y cambiando un poco de tema, hay que mencionar con que materiales vamos a
utilizar dentro del trabajo; pues es importarte saber con qué contamos para realizar éste. Así
como dijimos al principio, vamos a trabajar con los pequeños fragmentos que tenemos en
nuestra antología, pero de igual manera, vamos a revisar los textos que hablen sobre
astronomía, como lo dijimos al principio, con el fin de poder estudiar con mayor cuidado el
proceder metodológico y conceptual de nuestro autor.
Así mismo, vamos a apoyarnos del escrito de Debus5, el cual nos irá guiando a
través del renacimiento en el cambio de los paradigmas científicos, los cuales, creemos, pinta
bastante bien; pues sabe darnos luces en cuanto a las visiones cambiantes de la Naturaleza y
del cómo estaban pensado los grandes críticos de la tradición. De la misma manera el libro
de Koyre6 será de gran ayuda en torno a los cambios que va a sufrir la forma de ver a la
Naturaleza como phyisis.

La Filosofía de Naturaleza Clásica


Quizá la primera división que tenemos de la filosofía sea con Aristóteles, y esto
lo podemos fácil en la división que hace de la filosofía7, en donde deja muy claro que la
física, o filosofía de la naturaleza es una ciencia con su propia facultada de hacer filosofía
sobre algo específico. Y si nos preguntamos que estudia la física clásica el Estagirita nos
respondería que <<intentar determinar, en primer lugar, cuanto se refiere a los principios. [de
la Naturaleza]8>>. Aunque el mismo filósofo tiene en cuenta que el estudio de los principios
de la physis no era algo nuevo9, él solo hace una distinción conceptual de las materias, aunque
claro, es obvio que también mete su aporte y sus investigaciones a este campo.
Pero dentro de lo que nos atañe a esta breve investigación, es hablar de la
astronomía, lo que es cierto, pero hay que recordar que tanto para la física clásica (griega y
medieval), como la física moderna, el estudio de las estrellas se ha visto como un estudio del

5
Cfr. Debus, Breviarios, FCE, México, 1985.
6
Cfr. Koyre, Del mundo cerrado al universo infinito, Siglo Veintiuno de España editores, España, 1979. ; ___,
Estudios Galileanos, Siglo Veintiuno Editores, México 2009.
7
Crf. Aristóteles,
8
Física, 184 a, 15.
9
Ibíd. 184 b, 15.
cosmos o de la naturaleza toda. Ya el mismo Aristóteles nos lo deja ver cuando en su estudio
sobre el cielo, este mismo lo deja como parte de la naturaleza, y de hecho empieza hablando
sobre el estudio mismo de ésta: <<La ciencia de la Naturaleza trata, prácticamente toda ella,
de los cuerpos, de las magnitudes, de las modificaciones o de las cualidades de estos seres y
sus movimientos, y además de los principios que son propios en una sustancia de esta
clase10>>. Lo que nos pone en evidencia que el estudio mismo de los astros era parte de la
filosofía de la naturaleza.
El estudio de los astros no era una novedad por el pensamiento aristotélico, ya
Platón en el Timeo, hizo un estudio de los astros; pero si nos quisiéramos ir para atrás
podemos ver el ejemplo que el mismo Aristóteles habla de Tales de Mileto, haciendo una
ejemplificación del hacer del filósofo, nos cuenta que se hizo rico a partir de estudiar las
estrellas11. Pero, de hecho, la historia nos narra que en muchas y muy variadas civilizaciones
antiguas el estudio de los astros era común. Aunque lo importante de nuestro tema es
enfatizar sobre el estudio filosófico que se tenía de la naturaleza, pues muchas ideas sobre el
movimiento de los planetas, las esferas estelares, entre otras cosas, serán muy apegadas a la
filosofía tanto de Platón12 como de Aristóteles13.
La mayor parte del pensamiento de los autores griegos fueron heredados tanto
por el imperio romano como, lo será después por la tradición medieval. Lo importante del
asunto es que la iglesia católica se hizo con este conocimiento y sabemos que de alguna forma
se difundió y se institucionalizó (tal es el caso que sabemos de varios procesos inquisitoriales
que nacieron al ir en contra este tipo de tesis, como lo es el caso de nuestro mismo pensador).
La Iglesia tenía mucha fe y seguridad de la teoría geocéntrica, tal es el caso que eso mismo
se veía como una verdad revelada14. Recordemos que el libro de mayor autoridad para el
mundo occidental, dentro de la Edad Media, fue la Sagrada Escritura, la cual sabemos es
tomada por los cristianos como una verdad dada por Dios, y lo grave era ir en contra de una
revelación divina, pues eso era tomado como herejía y en automático falso, un error de la

10
De Coello, 168 a, 5.
11
Cfr. Política, 1259 a.
12
Ver Timeo de Platón
13
Ver De Cielo, de Aristóteles.
14
Cfr. Sentencia de la Inquisición a Galileo.
razón y un desvío de la fe, y aún más cuando filosofías como las platónicas o aristotélicas
ayudaban a sostener estas tesis.
Todo astrónomo tenía que aprender los sistemas que ya se habían hecho
institucionales, prueba de ello es la misma carta que escribe el mismísimo Copérnico, al
criticar las explicaciones que hasta ese momento se habían tenido15. La labor de la mayoría
de los estudiosos de las estrellas en el medievo (y gran parte de los renacentistas) parecía que
era estar parchando a las incongruencias o errores que no respondían a las curiosidades o
anomalías que el cielo parecía presentar.

La Sospecha del Renacimiento


Como es bien sabido, los renacentistas buscan separase de su historia inmediata,
que fue el medievo. Sabemos que ellos no se sentían herederos de su tradición16 y, en fin,
buscan comenzar, en su mayoría, desde un regreso a los clásicos y de allí partir hacia nuevos
conocimientos. Y esto, evidentemente, llegó también a toda la filosofía de la naturaleza, y no
sólo desde el punto de vista astronómico o cosmológico; sino también desde la vista de la
alquimia17, la cual, por un razonamiento analógico, se intentaba comprender el micro y macro
cosmos; pero regresando al punto que nos compete, es importante saber que las revoluciones
cósmicas, por llamarlas de alguna forma, no comenzaron con Galileo, ni siquiera con
Copérnico, como usualmente no los hacen creer. Koyre, en su libro Del Mundo Cerrado al
Universo Infinito (1979), nos deja en claro que no sólo los autores ya mencionados tenían un
aire de sospecha acerca de que el universo no es lo que nos habían enseñado. Por un lado,
nos demuestra el autor mencionado, tenemos al cardenal de Cusa, que va a poner en cuestión
la centralidad universal de la tierra; por otro lado, tenemos al desafortunado Giordano Bruno,
el cual va a sostener la infinitud del universo mismo. Y por otro lado tenemos al más conocido
hasta entonces, que fue Copérnico, el cual va hacer más grande la idea del universo (aunque
no tanto) por medio del heliocentrismo, idea que recogerá Galileo (sólo por mencionar
algunos autores).

15
Cfr. Copérnico, Breve Comentario, en Lecturas Universitarias 15. Del Renacimiento a la Ilustración, Textos
de Historia Universal, P. 74.
16
Cfr. Nisbet, R. Historia de la Idea del Progreso, Cap. 4.
17
Cfr. Debus, A. El hombre y la cultura en el Renacimiento, Cap. II.
Los dos primeros pensadores, que antes mencionamos, no son tan reconocidos
por la historia de las ciencias, gracias a que el tipo de argumentación que tratan era más
deductiva y hasta metafísica que experimental u observable (poco científica en el sentido
moderno); mientras que tanto a Copérnico y Galileo se les da un lugar muy reservado y se le
toma como los grandes pensadores que revolucionaron el pensamiento en “científico”, y a la
historia nos les molesta tomarlos con el nombre de “físicos” en sentido moderno, lo cual es
una anacronía, pues, como hemos estado viendo, el pensamiento de estos autores no pensaba
ser científico en ese sentido; sino que se tenían nociones filosóficas de la naturaleza y lo más
seguro es que estuvieran pensando en un sentido de entender al cosmos a la manera del mismo
Aristóteles, aunque con otros métodos y formas. Es más, hasta el mismo Newton, ya más
estrado a la modernidad, tenía en la mente de hacer un trabajo filosófico, no físico, que se
llamó Philosophiae naturalis principia mathematica18 (1687).
Lo que va a cambiar bastante de los físicos renacentistas o más bien pone las
bases a lo que será la ciencia moderna, y por ende también la física moderna, es que ya
empieza a ver un cambio de mentalidad dentro los métodos de investigación. Lo que quiere
decir es que para conocer la physis ya no bastaba con contemplar la naturaleza y deducir sus
leyes; sino que empieza a ver un campo amplio de observación y experimentación. Claro, un
punto que permitió nuevas observaciones fue el avance tecnológico, como lo veremos en
breve.

Galileo y el Heliocentrismo
Como hemos venido viendo, la idea del Heliocentrismo, no es una idea propia de
Galileo; sino que la recoge de Copérnico, lo que sí es que parece ser que Galileo conocía el
trabajo de su colega y le interesó bastante. Pero lo que le permitió avanzar más dentro del
desarrollo de esta teoría fue la invención del telescopio. Y cómo el mismo lo dice:
<<Porque, ante todo, es absolutamente es indispensable que se apareje
un telescopio perfectísimo, que haga ver los objetos luminosos con
nitidez y sin mancha alguna, y los que aumente cuando menos
cuatrocientas veces; porque así se los hará ver como si estuviesen tan
sólo a un vigésimo de su distancia real. Pues de no tener el instrumento

18
Principios Matemáticos de la Filosofía de la Naturaleza (traducción mía)
un poder así, en vano se intentará ver todas las cosas que en los cielos
he visto yo>> 19

No podemos decir que los grandes aportes a la astronomía que este gran pensador
hizo, se pudieron hacer discrepando del telescopio; pues como lo acabamos de leer, fue
fundamental para el desarrollo y estudio de los cuerpos celestes. Pero con todo lo dicho, aun
no llegamos hacia el aporte de la teoría heliocéntrica que Galileo va a dar. Lo único que si
podemos decir es que ya aquí va haber un cambio importarte de método, ya no va ocupar la
deducción, sino, ante todo, la observación como método oficial para estar haciendo ciencia.
Ya adentrándonos en las observaciones hechas por Galileo, y gracias a la
invención de su telescopio potentísimo, pudo observar las formaciones que se hacían a lado
del planeta Júpiter, primero creyendo que eran estrellas que se encontraban detrás de esté,
pero luego dándose cuenta que eran sus lunas. Lo cual es importantísimo para empezar a
justificar que la tierra gire alrededor del sol pues él mismo dirá al final de su libro Sidereus
Nuncius (1610), que esto mismo lo lleva a pensar en un argumento inexorable de que la tierra
gira alrededor del sol, y es:
<< Ahora pues, con mayor motivo, dado que no tenemos un solo planeta
girando alrededor de otro mientras ambos recorren una gran órbita
alrededor del Sol, sino que a nuestros sentidos están cuatro estrellas en
movimiento alrededor de Júpiter, como la Luna alrededor de la Tierra,
mientras al mismo tiempo todas recorren junto a Júpiter durante doce años
una gran órbita alrededor del Sol. No se debe olvidar tampoco por qué
razón sucede que los Astros MEDICEOS, en cuanto llevan a cabo
rotaciones muy cortas alrededor de Júpiter, ellos mismos parezcan a veces
más del doble más grandes. En absoluto podemos achacar la causa a los
vapores terrestres, pues estos astros aparecen aumentados o disminuidos,
en tanto el tamaño de Júpiter y de las estrellas fijas más próximas no se
observa cambiado en absoluto. No es fácil pensar que la causa de semejante
cambio se encuentre en el hecho de que se acerquen o se separen de la
Tierra en el perigeo o el apogeo de sus propias revoluciones, pues un
movimiento circular tan cerrado de ninguna manera puede ser responsable

19
Galileo, El mensajero Sideral, en Lecturas Universitarias 15. Del Renacimiento a la Ilustración, Textos de
Historia Universal, P. 79.
de este hecho. Por otro lado, un movimiento oval (que en este caso sería
casi recto) es difícil de imaginar, y para nada está de acuerdo con las
apariencias. Expongo con gusto lo que en esta cuestión se me ocurre, y lo
ofrezco claramente al juicio y censura de los filósofos. Me consta que el
Sol y la Luna aparecen mayores debido a la interposición de vapores
terrestres, mientras que las estrellas fijas y los planetas aparecen menores.
De aquí que, cerca del horizonte, esas lumbreras parezcan más grandes, y
las estrellas parezcan más pequeñas y a menudo invisibles. Disminuyen en
la medida en que esos vapores están inundados de luz, de manera que las
estrellas aparecen absolutamente débiles de día y durante los crepúsculos,
no así la Luna como también advertimos arriba. Además, que no sólo la
Tierra, sino también la Luna tiene su propia esfera envuelta en vapores de
esos se sabe por lo que antes dijimos, y sobre todo, por lo que se explicará
más ampliamente en nuestro Sistema>>20

Lo que Galileo hace para hacer su inferencia es, por medio de una analogía de
Júpiter, se da cuenta que hay cuerpos celestes girando alrededor de otros cuerpos celestes
(como la luna a la tierra), que a su vez gira alrededor de otro cuerpo celeste, y se da cuenta
que hace revoluciones alrededor del sol. Por consiguiente, se da cuenta que la tierra es un
planeta más, de los que se encuentran en el sistema (solar) y no el centro de este.
Galileo sabe que le faltan cosas para poder hacer demostraciones más evidentes
y lo sabe tanto así que previo a sus conclusiones escribe que << Estas son las observaciones
de los cuatro Planetas MEDICEOS realizadas recientemente por mí por primera vez,
conforme a las cuales se me permite anunciar algo digno de mención, por más que aún no
sea posible deducir numéricamente sus periodos.>>21. Cosa que quizá lo hubiere salvado de
la condena de la inquisición.

A Modo de Conclusión
El trabajo de Galileo será históricamente reconocido, sus logros y su alcance
sobre pasó la filosofía y dio pie a dos cosas, la primera, una nueva forma de hacer filosofía

20
Galileo, Noticiero Sideral, Pp. 93 -94.
21
Ibíd.
de la naturaleza, que no será otra que la observación; y la segunda, dar pie para empezar a
fundamentar la física moderna. Y dentro de esto cabe aclarar que si dista mucho de llamarlo
físico moderno; pues, a pesar que de que haya observado por bastante tiempo las esferas que
giraban en torno a Júpiter22, o que planteara las ideas para el estudio de galaxias23, le hizo
falta una comprobación mucho más elabora.
Pero, de cualquier modo, Galileo fue una pieza clave para cambiar la forma en
que vemos al mundo y no sólo como algo más grande, sino con las repercusiones tanto
antropológicas y teológicas que la Iglesia defendía al sostener lo contrario. ¡El hombre no es
el centro del universo! y ¡Ni la tierra es el lugar más preciado de la creación! Lo cual significa
un cambio significativo para la época, pues poco a poco se empieza a desestabilizar el sistema
de creencias que se tenía tan claras, tan firmes, tan divinas. Es casi evidente que la Iglesia
tuvo que hacer cambios notables dentro de la interpretación a la escritura, pues, al pasar el
tiempo aquello por lo cual acusaron a Galileo, a saber: << La proposición de ser el Sol el
centro del mundo e inmóvil en su sitio es absurda, filosóficamente falsa y formalmente
herética, porque es precisamente contraria a las Sagradas Escrituras.>>24, fue completamente
errónea.
Sin duda que la reforma protestante llevada a cabo por Lutero y Calvino,
principalmente, llevo a una tensión de fe a la Iglesia, y sumado todos aquello aportes que
derrumbaban los cimientos que se tenían más fuertes, es claro que llevaran a sentencia a
Galileo, y junto a él, otros muchos pensadores (como lo vimos más arriba) que ya estaban en
contra de estas ideas, lo cual no justifica su acto, éticamente hablando.
Por consiguiente, es menester decir que Galileo, junto con otros pensadores,
ayudo a cambiar la forma de ver el mundo, que tuvo repercusiones tanto en los ámbitos
teológicos, por su forma de ver a la creación; físicos (tanto en el sentido clásico como
moderno), pues ya no hubo un conformismo con el conocimiento clásico, sino que hubo un
numeroso despliegue de pensadores y científicos que bajo sus enseñanzas descubrieron
nuevas y muy variadas formas de ver al mundo. Pero no sólo eso, tenemos que pensar que

22
Óp. Cit. P. 71-92.
23
Cfr. Koyre, Del Mundo Cerrado al Universo Infinito, P. 88.
24
Sentencia de Galileo vista en http://recuerdosdepandora.com/personajes/galileo-galilei/sentencia-de-la-
inquisicion-a-galileo/ , vista el día 12 de mayo de 2017.
estas revoluciones también repercuten en el ámbito antropológico, ético; pues al no ser el
hombre el centro del mundo entonces ¿Qué es?
Bibliografía:
 Nisbet, R. Historia de la Idea del Progreso, Gedisa, España, 1980.
 Debus, Breviarios, FCE, México, 1985.

 Galileo, Noticiero Sideral, MUNCYT, La Cuña y Madrid, 2010
 Koyre, Del mundo cerrado al universo infinito, Siglo Veintiuno de España editores,
España, 1979.
 ___, Estudios Galileanos, Siglo Veintiuno de España editores, España, 2009.
 Herrera A. (Compilador), Lecturas Universitarias 15. Del Renacimiento a la
Ilustración, Textos de Historia Universal, UNAM, México, 1973.
 Aristóteles, Física, Gredos, España, 1995.
___, Política, Gredos, España, 2002.
___, De Coello, Gredos, España, 1997.
 Platón, Timeo, Gredos, España, 1987.
 Kristeller, P. El Pensamiento Renacentista y sus Fuentes, FCE, México, 1982.
 Sentencia de Galileo vista en http://recuerdosdepandora.com/personajes/galileo-
galilei/sentencia-de-la-inquisicion-a-galileo/ , vista el día 02 de enero de 2018.
 Ortega, Jesús, http://www.voltairenet.org/article126059.html, Revisado el día, 02 de
enero de 2018

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