por fin la tengo a mi lado, conmigo, por fin de su cuerpo saldrá mi abrigo, quizás logre lo que mi cuerpo añora. ¿Que de qué se trata? Al llegar la aurora quizás lo sepa si soy el testigo de su desnudez, y siendo su amigo pueda ser el hombre que un beso implore. Así, beba el vino de la alegría, el licor rojizo que la complace, con su vestido que tan bien le queda, que conseguiré que hoy sea el gran día en que nuestro amor se engrandece y nace y que me dé sus braguitas de seda.