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Primeras comuniones
Procesión
Los niños vienen de atrás en procesión, de dos en dos, al final el sacerdote. Mientras el coro canta la canción
de entrada.

Monición de entrada
La comunidad parroquial hoy se viste de fiesta y se llena de alegría: unos niños y niñas de nuestra
comunidad van a recibir por vez primera a Jesús. Esto quiere decir:
Que son admitidos a la mesa eucarística de los adultos y que para poder llevar a cabo sus compromisos
bautismales, tendrán la fuerza de Jesús.
La eucaristía nos debe transformar a ellos y a nosotros y tiene que notarse en nuestra vida de familia, trabajo
y amistades.
Vamos a intentar dejar, por unos momentos, todo lo que suene a social: vestidos, regalos, banquete… y
vamos a intentar vivir este gran acontecimiento.

Saludo del sacerdote


Queridos niños: vamos a celebrar la eucaristía. En ella Jesús se nos da y se ofrece por nosotros para ser el
mediador entre Dios y los hombres. También escucharemos su Palabra que nos dice cómo tenemos que vivir
los que participamos en la eucaristía.
Canto: Despiértame, Señor

Perdón
Sacerdote
Antes de celebrar la eucaristía, pedimos perdón.
Padre/madre
- Jesús, te pedimos perdón por las veces que no ayudamos a nuestros hijos a entender qué significa
tomar la primera comunión, dejándolo todo a la catequesis. Señor, ten piedad.
- Te pedimos perdón por preocuparnos tanto de la fiesta social de la primera comunión de nuestros
hijos y tan poco de lo realmente importante, que es lo que ello significa para su vida cristiana. Cristo,
ten piedad.
- Perdón por las veces que no fuimos para nuestros hijos ejemplo y modelo de vida cristiana. Señor,
ten piedad.
Sacerdote
El Padre de Jesús, que es también nuestro Padre, perdone nuestros pecados y un día nos lleve a la vida plena.
Canto: Más allá

Lecturas
Monición
Nos sentamos para escuchar la Palabra de Dios.
En la primera lectura, de los Hechos de los Apóstoles, se nos hablará de la libertad del cristiano para vivir su
fe y trasmitirla a los demás. En el Evangelio se nos habla de dos discípulos, Pedro y el discípulo amado, que
darán testimonio de Jesús durante toda su vida, como nosotros estamos llamados a hacerlo hoy.
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Lectura de los Hechos de los Apóstoles


Cuando llegamos a Roma, le permitieron a Pablo vivir por su cuenta en una casa, con un soldado que lo
vigilase.
Tres días después, convocó a los judíos principales; cuando se reunieron, les dijo: «Hermanos, estoy aquí
preso sin haber hecho nada contra el pueblo ni las tradiciones de nuestros padres; en Jerusalén me
entregaron a los romanos. Me interrogaron y querían ponerme en libertad, porque no encontraban nada que
mereciera la muerte; pero, como los judíos se oponían, tuve que apelar al César; aunque no es que tenga
intención de acusar a mi pueblo. Por este motivo he querido veros y hablar con vosotros; pues por la
esperanza de Israel llevo encima estas cadenas.» Vivió allí dos años enteros a su propia costa, recibiendo a
todos los que acudían, predicándoles el reino de Dios y enseñando lo que se refiere al Señor Jesucristo con
toda libertad, sin estorbos.
Palabra de Dios
Salmo
Todos: Los buenos verán tu rostro, Señor
El Señor está en su templo santo,
el Señor tiene su trono en el cielo;
sus ojos están observando,
sus pupilas examinan a los hombres. R/.
Todos: Los buenos verán tu rostro, Señor
El Señor examina a inocentes y culpables,
y al que ama la violencia él lo odia.
Porque el Señor es justo y ama la justicia:
los buenos verán su rostro.
Todos: Los buenos verán tu rostro, Señor
Canto: Aleluya de la Tierra
Evangelio según San Juan
Pedro se vuelve y ve siguiéndoles detrás, al discípulo a quién Jesús amaba, que además durante la cena se
había recostado en su pecho y le había dicho: «Señor, ¿quién es el que te va a entregar?» Viéndole Pedro,
dice a Jesús: «Señor, y éste, ¿qué?» Jesús le respondió: «Si quiero que se quede hasta que yo venga, ¿qué te
importa? Tú, sígueme.» Corrió, pues, entre los hermanos la voz de que este discípulo no moriría. Pero Jesús
no había dicho a Pedro: «No morirá», sino: «Si quiero que se quede hasta que yo venga.» Este es el
discípulo que da testimonio de estas cosas y que las ha escrito, y nosotros sabemos que su testimonio es
verdadero. Hay además otras muchas cosas que hizo Jesús. Si se escribieran una por una, pienso que ni todo
el mundo bastaría para contener los libros que se escribieran.
Homilía
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Preces
Sacerdote
Presentemos al Señor nuestras necesidades y deseos.
Catequista
- Por estos niños que van a recibir a Jesús, para que vivan lo que han aprendido en catequesis durante
los tres años de preparación. Roguemos al Señor.
Niño/a
- Para que los que recibimos hoy a Jesús por primera vez, seamos de verdad sus seguidores y amigos.
Roguemos al Señor.
- Por los niños maltratados por los mayores, para que encuentren su alegría en Jesús. Roguemos al
Señor.
- Por la Iglesia y por nuestra parroquia, para que sean lugares de acogida y de reconciliación.
Roguemos al Señor.
Padre/madre
- Para que los padres seamos un ejemplo a seguir para nuestros hijos y vean en nosotros cómo viven
los cristianos. Roguemos al Señor.

Ofrendas
- Juguetes: con estos juguetes queremos simbolizar la alegría y la ilusión de los niños y los ofrecen
para que no haya niños tristes, ni abandonados, ni explotados, y todos se sientan queridos.
- Libros: Estos libros expresan nuestro trabajo diario. También en ellos conocimos a Jesús y la manera
de vivir como cristianos.
- Flores: Las flores indican lo más bonito de nuestra vida: la alegría, el cariño, nuestros padres. Lo
ofrecemos a Jesús para que nos lo conserve.
- Cirios encendidos: Estos cirios quieren expresar nuestra fe en Jesús Resucitado y queremos pedirle
que nunca se apague esta fe en nuestras vidas.
- Pan y vino: Este pan y este vino son el alimento que Jesús nos dará hoy. Queremos ofrecerlo para
que Dios santifique el trabajo de tantas personas que colaboraron en su elaboración.
- Padre: Los padres de estos niños queremos hacerles el mejor regalo de su primera comunión:
queremos seguir amándolos. Siempre contarán con nuestros desvelos y nuestras ganas de ser para
ellos un ejemplo. Nos seguiremos preocupando de sus cosas, de sus alegrías y sus tristezas.
- En estos sobre cada familia ha aportado voluntariamente su donativo para las necesidades de los
niños de Guinea Bissau. De esta manera queremos expresar nuestro deseo de compartir con los más
necesitados en proyectos de desarrollo de Guinea Bissau, para que los niños reciban educación.

Ofertorio y plegaria
Canto: Santo
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Comunión

Acción de gracias
Niño
Damos gracias a Jesús por la eucaristía: por el pan que nos da y por su sangre derramada en la cruz. Le
agradecemos que nos acepte ser uno de los suyos para seguirle.
También damos gracias por la comunidad parroquial y en ella por nuestros catequistas y sacerdotes, que se
han preocupado durante tres años de enseñarnos el camino de Jesús. Queremos ser miembros activos de esta
comunidad.
Catequista
Los catequistas queremos dar gracias a Dios porque el Espíritu Santo nos ayudó en el trabajo de la
catequesis y también a los niños, ellos nos han enseñado muchas cosas y nos han animado a seguir, sobre
todo en los momentos de desánimo.
Padre/madre
Damos gracias a Dios por nuestros hijos y por la alegría que hoy nos dan. Agradecemos a la parroquia y a
los catequistas todo lo que han dado a nuestros hijos para que hayan llegado a este día tan grande. Una vez
más, queremos comprometernos en ayudarles a que esto no termine aquí, sino que les dure toda su vida.

Despedida
Canto: Somos ciudadanos de un mundo

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