UNA EXPERIENCIA EN EL CONTEXTO ESCOLAR

Esta experiencia surge a partir del ejercicio de mis prácticas pedagógicas en la

Institución Educativa Camilo Torres, sede Mis Amiguitos, en la cual tuve la
oportunidad de dirigir el grado segundo de primaria, con niños cuyas edades
oscilaban entre seis y nueve años, pertenecientes a familias de estratos
socioeconómico bajo y con una diversidad de problemáticas, asociadas a la
violencia intrafamiliar, y pese a todas estas dificultades se evidenciaban en ellos,
con unos niveles de comportamiento normal, pues jugaban, cantaban y se
relacionaban con otros compañeros de escuela, y ante todo cumplían con las
obligaciones exigidas por la institución, puesto que sus intenciones, por encima de
las circunstancia, era aprender cada día para mejorar su nivel de vida.

Ahora bien, el aula de clases, es el espacio que facilita el contacto con los
elementos que constituyen el contexto educativo y el estar allí, nos permite
comprender el mayor grado, que el sistema educativo colombiano tiene muchas
deficiencias, ya que algunas Instituciones Educativas como Mis Amiguitos, no
cuentan con los recursos físicos suficientes que incentiven a lograr una buena
formación académica en el alumnado, como la seria una excelente biblioteca, que
le posibilite tener un acercamiento con diversos textos y autores de distintas
nacionalidades, y así de esta manera acrecentar sus procesos cognitivos. Por lo
tanto; la falta de estos implementos hace evidente el poco gusto por la lectura y la
ineficiencia en las labores de consulta de las diferentes asignaturas, es por esto
que el docente tiene que hacer el mayor esfuerzo para que sus estudiantes
puedan adquirir sus conocimientos de la mejor manera, aun con la falta de ciertos
materiales didácticos y lúdicos que fortalezcas sus procesos de aprendizaje.

Luego de concluir la primera etapa de las prácticas pedagógicas, puedo decir

que fue una experiencia transformadora e inolvidable, donde aprendí muchas
cosas para mi profesión, gracias a los consejos de la docente asesora que me
guiaba en este proceso y de igual manera a mis estudiantes, ya que en el
desarrollo de cada clase que les daba, me aportaban elementos significativos para
nutrir mi formación docente. También me di cuenta que es fundamental la relación
maestro-alumno y alumno-maestro en el camino de la enseñanza, de la misma
manera, el docente debe ser un amigo y mediador que les brinde la confianza a
sus discentes, para que éstos le comentes los problemas y debilidades que les
presenten, para que así el docente actué como un buen consejero, que no sólo los
oriente por el buen camino del aprendizaje, sino que participe asimismo en la
formación personal y ética de sus estudiantes.