Vous êtes sur la page 1sur 10

INTRODUCCIÓN

El asma bronquial es una enfermedad inflamatoria que se caracteriza por la existencia


de hiperreactividad bronquial con obstrucción reversible al flujo aéreo y que se
manifiesta por síntomas intermitentes que incluyen tos, disnea, y sibilancias. Las tres
características que definen el asma bronquial son la inflamación de la vía aérea, la
hiperreactividad bronquial y la obstrucción al flujo aéreo. Esta enfermedad ocurre a
todas las edades, pero es más frecuente en personas jóvenes. Se considera que afecta
hasta un 3 a 6% de la población en los países industrializados.
La Sociedad Americana del Tórax ha definido el status asmático como "un ataque agudo
de asma en el cual el grado de obstrucción bronquial es severo desde el comienzo o
empeora progresivamente y no mejora con el tratamiento médico habitual" (3). En la
práctica clínica, sin embargo, es preferible utilizar el término asma grave agudo cuando
la severidad de la crisis asmática amenaza la vida del paciente independientemente del
tratamiento que haya recibido. En este capítulo se revisa brevemente la fisiopatología
de la obstrucción bronquial severa y los diferentes aspectos del tratamiento con especial
referencia a la ventilación mecánica.
EL ASMA
Objetivos de la investigación:

 Objetivo General
Determinar los Factores Ambientales que contribuyen al desarrollo de crisis
asmáticas, en pacientes con diagnóstico de asma bronquial en todos los lugares.

 Objetivos Especificos.
 Distribuir los pacientes asmáticos por grupos etáreos, según edad y sexo, a
través de instrumento elaborado por el autor.
 Identificar la clínica predominante en los pacientes asmáticos, según grupos
etáreos, a través de instrumento elaborado por el autor.
 Determinar según el sexo, la clínica predominante en los pacientes asmáticos, a
través de instrumento elaborado por el autor.
 Identificar las características de la vivienda donde habitan los pacientes
asmáticos, a través de instrumento elaborado por el autor.

1. Concepto:
El asma es una enfermedad crónica de los pulmones que inflama y estrecha las vías
respiratorias. Las enfermedades crónicas son enfermedades que duran mucho tiempo.
El asma causa períodos repetidos de sibilancias (silbidos al respirar), presión en el
pecho, dificultad para respirar y tos. Con frecuencia la tos se presenta por la noche o en
las primeras horas de la mañana.
El asma afecta a personas de todas las edades, pero por lo general comienza durante
la infancia. En los Estados Unidos hay más de 25 millones de personas con asma
comprobada. De estas personas, cerca de 7 millones son niños.
2. Clasificación:

 Asma producida por esfuerzo. Entre el 40 y el 80 % de la población asmática


infantil presenta broncoconstricción durante el ejercicio, de breve duración.
 Asma nocturna. Es otra presentación, más frecuente en pacientes mal
controlados, cuya mortalidad (70 %) llega al máximo en la madrugada.
 Asma ocupacional
 Asma alérgica
 Asma estacional
 Asma inestable o caótica
Basada en los patrones de obstrucción bronquial medida a través de aparatos de
registro de tipo flujometría o espirometría:

 Asma intermitente: el síntoma aparece menos de una vez por semana con
síntomas nocturnos menos de dos veces cada mes. Las exacerbaciones tienden
a ser breves y entre una crisis y la siguiente el paciente está asintomático. En
las pruebas de respiración pulmonar la PEF o FEV1 son mayores del 80 %

 Asma persistente: tiene tres variedades, la persistente leve con síntomas más
de una vez por semana y PEF o FEV1 >80 %, la persistente moderada con
síntomas diarios y PEF o FEV1 entre 50 y 80 % y la persistente grave con
síntomas continuos
Como fundamento en los niveles de control del paciente ya diagnosticado con asma:

 Controlado: sin síntomas diarios o nocturnos, no necesita medicamentos de


rescate, sin exacerbaciones y un PEF normal.
 Parcialmente controlado: síntomas diurnos o más de dos veces por semana,
algún síntoma nocturno, a menudo amerita uso de medicamentos de rescate
más de dos veces por semana, con una o más crisis por año.
 No controlado: tres o más características del asma, con exacerbaciones
semanales.

3. Epidemiología.
El asma es una enfermedad frecuente que varía mucho de un país a otro. Afecta
alrededor del 3 al 7% de la población adulta, siendo más frecuente en edades infantiles.
Es una de las más importantes enfermedades crónicas, es decir, de duración
prolongada, en niños.3 Es más frecuente en el sexo masculino en una relación de 2:1,
pero al llegar a la pubertad, esta relación tiende a igualarse.5 En los últimos veinte años
se ha registrado un aumento en su incidencia debido en parte a la contaminación
ambiental y las consecuencias de esta, y en parte al aumento de la población mundial.
Por ejemplo, la Organización Mundial de la Salud reportó que un 8% de la población
suiza padecía de asma, comparado con solo 2% hace 25-30 años.6
La enfermedad tiene un fuerte componente hereditario, expresado como un antecedente
familiar de rinitis, urticaria y eccema, por ejemplo. Sin embargo, muchos asmáticos no
tienen antecedentes familiares que indiquen una asociación atópica. Hasta el momento
no se ha demostrado ninguna de las hipótesis infecciosas propuestas como origen del
cuadro.
Los niveles más elevados de asma mundial, de acuerdo con el Global Initiative for
Asthma (GINA) en febrero de 20047 ocurrieron en aproximadamente 30% de los niños
en el Reino Unido, Nueva Zelanda y Australia o 20% de los niños en el Perú, Nueva
Zelanda y Australia (varía dependiendo del método de investigación usado para los
cálculos) y aproximadamente 25% de los adultos en Gran Bretaña, Australia y Canadá.
Hay un mayor porcentaje de fumadores y de enfermedades concomitantes alérgicas
tales como rinitis, conjuntivitis y dermatitis entre los pacientes diagnosticados de asma
alérgica que en otros pacientes
4. Fisiopatología
El asma es una enfermedad inflamatoria por excelencia, en la cual intervienen varios
grupos celulares, principalmente mastocitos, eosinófilos y linfocitos, con una
contribución menor del endotelio, neutrófilos, macrófagos y epitelio bronquial. Tales
células producen una compleja red de mediadores químicos al ser activadas, los cuales
son responsables de la obstrucción e hiperreactividad características de la entidad.
Luego de la exposición a un alérgeno suceden dos fases inflamatorias: una temprana
que aparece en el transcurso de minutos y otra tardía que se presenta después de seis
horas. Los mastocitos residentes en la pared del bronquio constituyen los principales
efectores de la respuesta temprana.
Respuesta temprana en asma: Los alérgenos forman complejos con IgE en la superficie
de los mastocitos, activándolos. Tales células liberan mediadores inflamatorios:
-histamina: compuesto que induce bronco constricción, vasodilatación, edema y
aumento en la producción de moco per oxidasas, adenosina) que producen la bronca
constricción inicial. De igual forma, produce otros compuestos de novo, como
leucotrienos C4, D4 y E4, factor activador de plaqueta, prostaglandinas, factores
quimiotácticos para eosinófilos y neutrófilos, factor de necrosis tumoral, interleucina 4
(IL-4), interleucina 5 (IL-5) e interleucina 6 (IL-6), que relacionan al mastocito también
con la respuesta tardía del asma. La liberación de factores quimio tácticos atrae
linfocitos T y eosinófilos, los cuales son las células mediadoras de la respuesta
inflamatoria tardía.
Respuesta inflamatoria tardía: Los linfocitos T producen una serie de citosinas que
estimulan a los eosinófilos y linfocitos B, perpetuando la cadena inflamatoria
característica de la fase tardía del asma.
Los eosinófilos aparecen en la pared del bronquio 4 horas después de la exposición al
estímulo alergénico inicial, pero el máximo reclutamiento aparece a las 24 horas. Estas
células proceden de la médula ósea donde maduran bajo la acción de IL-3, IL-5 y factor
estimulante de colonias granulocito macrófago. Los eosinófilos también poseen
múltiples compuestos preformados, la mayoría de los cuales son proteasas que inducen
daño tisular y provocan denudación del epitelio bronquial. Una vez se encuentran en la
sangre periférica, son atraídas rápidamente hacia los tejidos por medio de citosinas (IL-
4, IL-5, IL-6 y TNF-a. Tales moléculas aumentan la producción de IgE, favorecen la
expresión de moléculas de adhesión en el endotelio y producen eosinofilia) liberadas
principalmente por los linfocitos T. Poco después de alcanzar el órgano blanco comienza
el proceso de degranulación y muerte celular.
5. Etiología.
El asma bronquial es común en personas jóvenes con una historia clínica de catarros
recurrentes, o con antecedentes familiares asmáticos. Las crisis de asma se relacionan
con el consumo de ciertos alimentos o la presencia de determinados agentes alérgenos.
Las causas que provocan el asma bronquial y motivan la respuesta de los mecanismos
principalmente inmunológicos se clasifican en:
Extrínsecas. Iniciada en la infancia con antecedentes familiares positivos para alergias
y se asocia con una hipersensibilidad tipo 1 y otras manifestaciones alérgicas (IgE),
inducidas por agentes alérgenos como el polen, lana, polvo, etc., o contaminación
atmosférica, materias irritantes, variaciones meteorológicas, aspergilosis y otros. En
aproximadamente 50% de los niños con asma y un porcentaje menor de adultos, la
exposición a alérgenos es responsable parcial o sustancialmente de la inflamación
asmática por medio de reacciones de hipersensibilidad. Las crisis son súbitas,
autolimitadas y breves en duración. Cursan con buen pronóstico, responden a la
inmunoterapia y a esteroides a largo plazo por vía inhalada con absorción sistémica
minúscula, de modo que los efectos sobre el resto del cuerpo son virtualmente
inexistentes.
Intrínsecas o idiopática. Por lo general comienza en mayores de 35 años y sin
antecedentes personales ni familiares. Se inicia por estímulos no inmunológicos, sin
elevar IgE, representados por microbios, hongos, tos, trastornos psíquicos, estrés, etc.
Mixtas. Combinación con frecuencia de naturaleza bacteriana de factores intrínsecos y
extrínsecos.
6. Perspectivas

El asma no tiene cura. Aunque usted se sienta bien, sigue teniendo la enfermedad y
podría empeorar en cualquier momento.

Sin embargo, debido a los conocimientos y tratamientos que tenemos en la actualidad,


la mayoría de las personas con asma pueden controlar la enfermedad. Es posible que
tengan pocos síntomas o que no los tengan. Pueden vivir una vida normal y activa, y
dormir toda la noche sin interrupciones causadas por el asma.

Si usted tiene asma, puede participar activamente en el control de la enfermedad. Si


desea un tratamiento exitoso, completo y constante, forme un equipo sólido con su
médico y otros profesionales de salud encargados de atenderlo.

7. Causas del asma.


No se sabe cuál es la causa exacta del asma. Los investigadores creen que ciertos
factores genéticos y ambientales interactúan para causar el asma, generalmente en los
primeros años de la vida. Estos factores son:

 Una tendencia hereditaria a presentar alergias, que se llama atopia


 Presencia de asma en el padre o la madre
 Ciertas infecciones respiratorias durante la infancia
Contacto con alérgenos que se transportan por el aire o exposición a algunas
infecciones virales en los primeros meses o años de vida, cuando el sistema inmunitario
se está desarrollando
Si en su familia hay asma o atopia, la exposición a irritantes (por ejemplo, el humo de
tabaco) podría hacer que sus vías respiratorias reaccionen con más intensidad ante
sustancias presentes en el aire.
Algunos factores tienen más probabilidad de causar asma en unas personas que en
otras. Los investigadores siguen tratando de averiguar qué causa el asma.
8. Hipótesis de la higiene
Una de las teorías de los investigadores respecto a las causas del asma se conoce
como la "hipótesis de la higiene". Los investigadores creen que el estilo de vida
occidental, en el que se hace énfasis en la higiene y la limpieza, ha producido cambios
en nuestras condiciones de vida y ha causado una disminución global de las infecciones
de los primeros años.
Muchos niños pequeños ya no tienen las mismas exposiciones ambientales y las
infecciones que ocurrían en la infancia en el pasado. Esto influye en la forma en que el
sistema inmunitario de los niños pequeños se desarrolla durante la infancia temprana y
puede aumentar el riesgo de que estos sufran atopia y asma. Esta situación se presenta
especialmente en niños que tienen familiares cercanos que sufren ambas enfermedades
o una de ellas.
¿Quiénes corren el riesgo de sufrir asma?
El asma afecta a personas de todas las edades, pero por lo general comienza en la
infancia. En los Estados Unidos hay más de 25 millones de personas con asma
comprobada. De estas personas, cerca de 7 millones son niños.
Los niños pequeños que tienen a menudo sibilancias e infecciones respiratorias, junto
con otros factores de riesgo, tienen más probabilidades de presentar un asma que dure
hasta después de los 6 años. Los otros factores de riesgo consisten en tener alergias,
sufrir eccema (una enfermedad alérgica de la piel) o que el padre o la madre tenga
asma.
Entre los niños, hay más varones que niñas con asma. Pero después de los 15 años de
edad, más mujeres que hombres padecen de asma. No se sabe con certeza si el sexo
y las hormonas sexuales tienen que ver con las causas del asma ni cómo intervienen.
La mayoría de las personas que tienen asma tienen también alergias.
Algunas personas presentan asma debido al contacto con ciertos irritantes químicos o
polvos industriales en el trabajo. Este tipo de asma se conoce como asma ocupacional.
9. Signos Y Síntomas Del Asma
Los signos y síntomas comunes del asma son:

 Tos: Por lo general, la tos del asma es peor por la noche o en las primeras horas
de la mañana, por lo cual impide un sueño tranquilo.
 Sibilancias: Las sibilancias son silbidos o chillidos que se producen al respirar.
 Presión en el pecho: Usted siente como si algo le estuviera apretando el pecho
o como si tuviera a alguien sentado en el pecho.
 Dificultad para respirar: Algunas personas con asma dicen que les cuesta trabajo
respirar o sienten como si les faltara el aliento. Usted puede sentir como si no
pudiera sacar el aire de los pulmones.
No todas las personas que tienen asma presentan estos síntomas. El hecho de tener
estos síntomas tampoco indica siempre la presencia de asma. El mejor método de que
disponen los médicos para diagnosticar el asma consiste en realizar una prueba de
función pulmonar, hacer preguntas sobre los antecedentes de salud del paciente (entre
ellos el tipo y la frecuencia de los síntomas) y hacer un chequeo físico.
El tipo de síntomas que tenga, la frecuencia con que ocurran y la gravedad de los
mismos pueden variar con el tiempo. Es posible que a veces los síntomas sean apenas
una incomodidad. Otras veces pueden ser lo suficientemente molestos como para limitar
sus costumbres diarias. Los síntomas graves pueden ser mortales. Por eso es
importante tratarlos apenas los note para que no se agraven. Con un tratamiento
adecuado, la mayoría de las personas no presentan síntomas ni de día ni de noche, y
si lo hacen, los síntomas son pocos.
¿Qué provoca los síntomas del asma?
Muchas cosas pueden provocar o empeorar los síntomas del asma. El médico puede
ayudarlo a averiguar qué factores desencadenan o pueden empeorarle el asma si usted
tiene contacto con ellos. Entre los factores que desencadenan el asma pueden estar:

 Los ácaros del polvo, el pelaje de animales, las cucarachas, el moho y el polen
de árboles, pastos y flores
 Los irritantes como el humo de cigarrillo, la contaminación del aire, las sustancias
químicas o el polvo en el lugar de trabajo, los compuestos presentes en
productos decorativos para el hogar y los atomizadores (por ejemplo, el fijador
para el cabello)
 Medicinas como la aspirina y otros antiinflamatorios no esteroideos, o como los
betabloqueantes no selectivos
 Los sulfitos presentes en alimentos y bebidas
 Las infecciones de las vías respiratorias superiores, como los resfriados
 La actividad física (incluido el ejercicio)
Otros problemas de salud pueden hacer que el asma sea más difícil de controlar. Entre
estos problemas de salud se cuentan el goteo nasal, las sinusitis, el reflujo (acidez
estomacal), el estrés psicológico y la apnea del sueño. Estos problemas de salud deben
tratarse dentro del plan global de atención médica del asma.
El asma es diferente en cada persona. Es posible que algunos de los factores que
hemos mencionado no lo afecten a usted. Tal vez en la lista no aparezcan otros que sí
lo afectan. Dígale a su médico qué cosas parecen empeorarle el asma.
10. Diagnóstico del asma.
Su médico de atención primaria le diagnosticará el asma con base en sus antecedentes
personales y familiares de salud, el chequeo físico y los resultados de unas pruebas.
El médico determinará además la gravedad del asma, es decir, si es intermitente, leve,
moderada o grave. El tratamiento que recete dependerá de la gravedad.
El médico puede recomendarle que vaya a un especialista de asma si:

 Necesita pruebas especiales para diagnosticar el asma.


 Ha tenido un ataque de asma que pudo haber sido mortal.
 Necesita más de un tipo de medicina o dosis más altas de la medicina para
controlar el asma, o en general se le dificulta controlar bien el asma.
Está pensando en recibir tratamientos contra las alergias.
Antecedentes médicos y familiares
El médico puede preguntarle sobre sus antecedentes familiares de asma y alergias.
También puede preguntarle si tiene síntomas de asma y cuándo y con qué frecuencia
se presentan. Dígale si sus síntomas parecen presentarse solo durante ciertas épocas
del año o en ciertos lugares, o si empeoran por la noche.
Es posible que el médico quiera saber qué factores parecen provocar o empeorar sus
síntomas. Si desea más información sobre posibles factores que desencadenan el
asma, vea "¿Cuáles son los signos y síntomas del asma?"
El médico puede preguntarle si tiene problemas de salud relacionados que puedan
interferir con el control del asma. Estos problemas pueden consistir en goteo nasal,
sinusitis, reflujo, estrés psicológico y apnea del sueño.
Chequeo físico
El médico le auscultará el pecho para oír sus sonidos respiratorios y buscar indicios de
asma o alergias. Entre estos signos están las sibilancias, el goteo nasal o la inflamación
de las vías respiratorias nasales, así como los problemas alérgicos de la piel, tales como
el eccema.
Tenga en cuenta que usted puede tener asma aunque no tenga estos signos cuando el
médico lo examine.
Pruebas de diagnóstico
Prueba de función pulmonar
El médico usará una prueba llamada espirometría para ver cómo están funcionando sus
pulmones. Esta prueba mide cuánto aire puede inhalar y exhalar. También mide qué tan
rápidamente puede sacar el aire de los pulmones.
El médico puede darle una medicina y luego hacerle de nuevo la prueba para ver si los
resultados han mejorado.
Si los resultados iniciales eran inferiores a los normales y mejoraron con la medicina, y
si sus antecedentes médicos muestran características de síntomas de asma, es
probable que el médico le diagnostique asma.
11. Prevención del asma:

 El asma no se puede prevenir. Sin embargo, usted puede tomar medidas para
controlar la enfermedad y prevenir los síntomas. Por ejemplo:
 Aprenda sobre el asma y sobre maneras de controlar la enfermedad.
 Siga el plan de acción contra el asma que le dieron por escrito. (El Instituto
Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre tiene en su sitio web un ejemplo
de un plan de acción para el control del asma.
 Use las medicinas como se las recete el médico.
 Identifique y trate de evitar en la medida de lo posible las cosas que le empeoren
el asma (los factores que desencadenan el asma). Sin embargo, un factor que
no debe evitar es la actividad física. La actividad física es un componente
importante de un estilo de vida saludable. Pregúntele al médico acerca de
medicinas que le ayuden a permanecer activo.
 Lleve un registro de sus síntomas de asma y del grado de control en que se
encuentra la enfermedad.
 Hágase chequeos periódicos para el asma.

12. El tratamiento.
El tratamiento convencional del asma bronquial puede ser:4

 Sintomático: Tiene por objeto interrumpir la crisis mediante medicamentos de


acción rápida, como la adrenalina, corticoides, oxigenoterapia, etc.
 Preventivo: Indica el uso regular de broncodilatadores, antihistamínicos,
corticosteroides, terapia respiratoria, inmunoterapia específica, etc.
El tratamiento debe incluir la identificación de los elementos que inicien la crisis, tales
como polenes, ácaros, pelos de mascotas o la aspirina y limitando o, de ser posible,
eliminando la exposición a dichos factores. Si resulta insuficiente evitar los factores
estimulantes, entonces se puede recurrir al tratamiento médico. La desensitización
(proceso gradual por el que se elimina la respuesta a un estímulo mediante la repetición
del estímulo hasta que no se produce más respuesta) es, por el momento, la única cura
disponible para esta enfermedad.26 Otras formas de tratamiento incluyen el alivio
farmacológico, los medicamentos de prevención, los agonistas de larga acción de los
receptores β2, y el tratamiento de emergencia.
Lo que los padres deben hacer y evitar:
Si su hijo, un familiar joven o un amigo de la familia padece asma, puede hacer muchas
cosas para ayudarle a sentirse mejor y a permanecer activo aprendiendo un poco sobre
la enfermedad y respetando esta lista de sugerencias que deben hacerse y evitarse:

 Si cuida a un niño con asma:


 Permita que su hijo participe lo más posible en el trabajo escolar habitual, los
deportes y otras actividades de ocio, y anímele a explorar nuevas áreas de
interés.
 Informe a su hijo sobre su trastorno, como controlarlo con medicamentos y qué
factores pueden desencadenar una crisis.
 Permita que su hijo tenga más responsabilidad en sus actividades diarias al
crecer, incluido el tratamiento del asma.
 No le trate de forma diferente porque sufra asma.
 No le consienta conductas inaceptables.
 No se preocupe mientras el asma de su hijo/a esté controlado y él/ella sepa lo
que debe hacer si se presentan problemas respiratorios.

13. Recomendaciones.
El asma es una patología de carácter alérgico que cursa con espasmos bronquiales y
aumento de la secreción de moco, pueden ser elementos desencadenantes del proceso
asmático desde el humo del tabaco al frío, pasando por alérgenos como el polen o el
polvo.
Además de las sesiones de Fisioterapia es preciso atender a las siguientes
recomendaciones:

 Es muy importante la practica cotidiana del ejercicio de Relajación que le hemos


enseñado, ya que su practica cotidiana favorece el control del bronco espasmo.
Asimismo el efecto tranquilizador hace que la reacción al inicio sea de calma, y
por tanto al disminuir el estrés el proceso no se amplifica.
 Practique los ejercicios respiratorios que le ayudaran a aumentar su caudal y
favorecerán asimismo su expulsión.
 Debe realizar una actividad física aeróbica, como mínimo camine una hora al
día, siempre que ello no desencadene los síntomas.
 En caso de que observe un recrudecimiento de los síntomas acuda a tratamiento
con Diatermia Capacitiva.
 Preste especial atención a eliminar de su Dieta alimentos que tienen alto poder
alergénico, como huevos, crustáceos, Chocolate, nueces, etc., preste atención
a las reacciones particulares que tiene frente a estos y otros alimentos, obrando
en consecuencia.
CONCLUSIONES

El asma infantil no es un cuadro homogéneo y como se ha descrito, incluye diferentes


fenotipos que comparten una misma clínica y probablemente mejoren con el mismo
tratamiento sintomático, pero que tienen etiologías, anatomía patológica, evolución
natural y posiblemente abordajes terapéuticos diferentes.
Estas características deben ser tenidas en cuenta para explicar a las familias la situación
de su hijo o hija y el por qué a veces no hay una buena respuesta a tratamiento,
distinguiendo aquellos casos que posiblemente no sean una verdadera asma, con
remisión en los primeros años de vida o bien otros que responden bien al tratamiento
preventivo estándar del asma, con una utilidad de pronóstico, prediciendo la posible
continuidad del cuadro pasados los 6 años de edad
La educación sobre asma es una parte integral del tratamiento de esta enfermedad y se
debe ofrecer a todas las partes implicadas.
Futuros estudios clínicos de intervención con fármacos controladores, como corticoides
inhalados, antileucotrienos u otros, permitirá que el grupo de asmáticos atópicos reciban
el tratamiento farmacológico precoz y puedan quizás, modificar el curso natural de la
enfermedad asmática.
La educación debe aumentar los conocimientos de la enfermedad, despejar los temores
sobre la medicación e incrementar la comunicación entre los niños, los cuidadores y lo
profesionales sanitarios.
La falta de cumplimiento de los planes terapéuticos13 se ha traducido en malos
resultados y a los padres les suele preocupar la necesidad de tratamiento de por vida.
También es de crucial importancia reforzar la confianza en sí mismo de los padres.
Cuanto más y mejor comprendan qué está sucediendo en los bronquios de sus niños y
qué es lo que deben hacer para controlar el asma, más fácil será el control.
El asma, o como queramos definir esos síntomas que están agobiando al paciente y a
su entorno, es la principal enfermad crónica entre los niños y adolescentes en la mayoría
de los países industrializados. Sin embargo, la base de datos sobre aspectos
específicos del asma a estas edades, y más aun en menores de 3 años, es limitada aún
queda mucho camino por recorrer y utilizando los conocimientos adquiridos hasta la
fecha, el sentido común y la evidencia científica, iremos aproximándonos al objetivo.

Vous aimerez peut-être aussi