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APUNTES DE BIOETICA

REVISIÓN REALIZADA POR EL DR. JORGE PINEDA MURCIA


CLINICA DE CIRUGIA CL-205

Sócrates fue el primero en señalar y definir las virtudes éticas y en cuestionar la forma como
debemos vivir. Puso la filosofía al servicio de las costumbres y definió que la sabiduría suprema es
distinguir los bienes de los males. La virtud es única y a partir de ella se puede establecer lo que es
lícito y lo que no lo es, las leyes son de naturaleza divina2. Además de establecer una cultura
ciudadana, lo cual le da créditos para considerarlo fundador de la ética social.

La "era técnica, en cambio, se inicia con Alcmeón de Crotona e Hipócrates de Cos. Esta era
técnica se distingue porque el médico se propone curar al enfermo, sabiendo por qué hace aquellos
que hace. Esta nueva actitud mental lo conduce a preguntarse por lo que en sí mismos son el
remedio, la enfermedad y el hombre; para dar respuesta a lo anterior, estudia la naturaleza, es decir,
se propone conocer la naturaleza propia de las cosas.

Hipócrates: La razón le permite al médico preguntarse: ¿qué son las enfermedades? ¿Cómo
tratarlas? Con ello la medicina pierde su carácter sagrado. En efecto, la medicina sacralizada es
sustituida por la medicina razonada, y el médico, al hacerse un técnico, se seculariza también.

La profesión tenía carácter de secta; era como un sacerdocio profesionalizado, aunque también
ejercían curadores empíricos y autodidactos. La sociedad, en general, desconfiaba de los que hacían
de médicos. No existían disposiciones que obligaran al practicante a ser responsable de sus actos,
como sí ocurría en la Mesopotamia. Recordemos que en Babilonia el rey Hammurabi, que reinó
unos 1.800 años antes de Cristo, registró en su famoso Código derechos y obligaciones de los
profesionales de la medicina.

Esta falta de disposiciones reglamentarias del ejercicio médico en Grecia, junto con la natural
desconfianza de la sociedad hacia los médicos, indujo a la secta a dictar sus propias normas de
conducta, las cuales quedaron consignadas en un documento que pasó a la posteridad con el
nombre de "Juramento hipocrático", que ha sido tenido como un paradigma de ética profesional,
de responsabilidad moral e impunidad jurídica. El rnismo es considerado como "un documento
venerable del patrimonio moral de Occidente, testamento ecuménico y transhistórico de la
Antigüedad clásica para la ética médica".

En 1948 la Asociación Médica Mundial lo adoptó como base deontológica. A pesar de que el
Juramento no fue proclamado por la generalidad de los médicos ni se ha tenido muy en cuenta
desde la antigüedad. Unos cuantos de éstos se comprometieron a través de un documento público
a seguir normas de conducta que le proporcionaran garantía al paciente. Para mayor seriedad, esas
obligaciones tenían compromiso religioso y todas estaban encaminadas hacer bien al enfermo, a no
perjudicarlo. De esa manera el médico asume, motu proprio, responsabilidades que ni la sociedad
ni el Estado habían fijado, a diferencia, como ya vimos, de lo que ocurrió en la antigua Mesopotamia
con el código de Hammurabi.

Hacia el año 190 a.C. fue escrito en Alejandría el Libro Sagrado denominado el Eclesiástico (del
latín eclesiastes, profeta), tenido como un tratado de ética ya que diserta sobre las virtudes y la
sabiduría práctica18. Uno de los capítulos está dedicado a honrar al médico. Jesús, autor del Libro e
hijo del sabio profeta Sirácides, nos legó un testimonio importante acerca de los conceptos que sobre
la medicina y el médico tenían personas cultas e influyentes como él. El capítulo en mención no es
propiamente una guía de comportamiento para el médico sino para el enfermo. Dada la gran
influencia que los sagrados Libros ejercieron en el mundo cristiano y en la vida de Occidente, es
bueno revisar los conceptos que nos son de particular interés y que registra el Eclesiástico. En
resumen, establece que de Dios viene toda medicina, vale decir, tiene carácter divino, es teúrgica
lo que se quiere significar es que la enfermedad es consecuencia del pecado y la curación se obtiene
con la oración y el arrepentimiento.
El Renacimiento, que es el punto de partida del mundo moderno. Comienza entonces a surgir la
idea de los derechos humanos, a contraponerse el orden moral científico al orden natural divino. El
Idealismo, la ilustración, el Romanticismo y el Positivismo son épocas que le dan más firmeza al
orden revelado por la razón. La visión del cosmos, de la naturaleza y del hombre continúa
modificándose. Atrás quedan los criterios religiosos y metafísicos que fundamentaban la ética, pues
la racionalidad científica otorga, además de la lógica, la formación de una Ética y una estética. La
nueva fundamentación, la de orden científico, apareja una nueva moral: la moral positiva.

Descartes en el siglo XVII y Voltaire en el XVIII colocan los cimientos para que Augusto Compte
construya su filosofía positivista. En ella establece la incompatibilidad de la ciencia con la teología.
Según ese nuevo espíritu filosófico, sólo hay que aceptar lo asequible a nuestra inteligencia, con
exclusión de los "impenetrables misterios". Para Compte, independizar la moral de la teología y de
la metafísica era una necesidad.

En 1948, la Organización de las Naciones Unidas promulga la Declaración Universal de los


Derechos Humanos, que fue como una actualización ecuménica de la Declaración de los Derechos
del Hombre y del Ciudadano, aprobada en las postrimerías del siglo XVIII por la Asamblea Nacional
Francesa. El enfermo gana su condición de ser pensante y autónomo. Con ello la ética sufre un
proceso de renovación, conservando, claro está, principios morales de carácter intemporal,
verdaderas constantes éticas heredadas del Juramento hipocrático, como son el respeto por la vida
humana y el propósito de beneficiar al paciente.

Cuando la ciencia en su afán inquisitivo y transformador, se convirtió en amenaza para él individuo,


la sociedad y la especie toda, se vio la necesidad de ponerle un freno a ese afán, dándole un nuevo
rostro a la ética científica. Así surgió La Bioética. Su enfoque ha sido esencialmente médico, pues
su ocupa especialmente de los asuntos relacionados con las ciencias médicas: reproducción
humana asistida, distanasia, eutanasia, muerte digna, genoterapia, trasplantes, derechos del
paciente, aborto, etc. En otros términos, se trata de una Bioética medicalizada

Junto con la formulación y vigencia de los principios de libertad política y libertad religiosa, se impuso
también el principio de libertad moral. Todo ser humano es agente moral autónomo, y como tal
debe ser respetado por todos los que mantienen posiciones morales distintas". Si lo moral es la
esencia de lo ético, deberá aceptarse entonces que la Ética Médica con el advenimiento de la
Bioética ha sido modificada en su esencia.

En efecto, fue en los inicios de los años 70 cuando al paciente se le concedió la ciudadanía libre y
responsable. Esa ciudadanía quedó refrendada con la "Declaración de los derechos del
paciente", aprobada por la Asociación Americana de Hospitales en 1973 y que, como era de
esperar, ha venido haciendo carrera en todo el mundo, siendo un ingrediente más de los muchos
que han hecho del ejercicio profesional de la medicina una disciplina francamente conflictiva. Junto
con el de autonomía, los principios morales de beneficencia y justicia constituyen el trípode que
sirve de base de sustentación a la ética médica actual. El primero tiene que ver con el paciente, el
segundo con el médico y el tercero con el Estado y la sociedad.

Etica, en sentido estricto, es lo que tiene que ver con la moral y con las obligaciones del hombre.
Por su parte, moral hace relación al fuero interno y al respeto humano. "Toda ética como sistema
dice Abel Naranjo Villegas en sus Disertaciones sobre Etica- está compuesta de unas reglas
tendientes a conducir al hombre a su fin. Según la concepción que se tenga de ese fin del hombre
se adecuan las reglas prácticas que lo conduzcan a él. Y como ese fin siempre se supone que es
bueno, ninguna ética propone las reglas como malas porque tampoco cree que sus fines sean malos
sino buenos".

DEFINICIÓN
Estudio sistemático de la conducta humana en el campo de las ciencias de la vida y de la salud, en
la medida en que esta conducta sea examinada a la luz de los valores y principios morales
(Enciclopedia de Bioética

Pero, ¿quién dicta las leyes de moral? ¿Quién determina lo que es bueno o malo? Se ha aceptado
que la moral puede ser objetiva y subjetiva. La primera la fijan las costumbres a través de normas
que dicta la sociedad. Los eticistas norteamericanos T. L. Beauchamps y L. B. y Mc Cullogh3 dicen
que la palabra "moral" designa una institución social, compuesta por un conjunto de reglas que
generalmente son admitidas por sus miembros. Un ejemplo: en una colonia de nudistas, andar
desnudo no es inmoral, pues ese grupo social lo considera una costumbre lícita.

Hay instituciones, como el Estado y la Iglesia, que se encarga de dictar normas o leyes de moral.
Estas se constituyen en espíritu objetivo de lo moral, o lo que Erich Fromm llama la "conciencia
autoritaria"4. Se trata de un conjunto de principios u obligaciones -el "código moral" de la comunidad-
que hay que cumplir con carácter prima facie, vale decir, como imperativo categórico. En el caso de
la Iglesia, el cumplimiento de las normas que ella dicta sólo compromete a quienes se consideran
seguidores o adeptos suyos. En cambio, las leyes de un Estado comprometen a todos sus asociados.

Se considera como ética tradicional aquella sustentada en el "orden natural". En la actualidad ha


sido sustituida por una Etica Más liberal, a tono con los principios que alientan la vida espiritual del
mundo libre de Occidente. Lo que caracteriza a esa nueva ética es el principio de libertad moral, y
que el médico y filósofo español Diego Gracia Guillén ha descrito así: "Todo ser humano es agente
moral autónomo, y como tal debe ser respetado por todos los que mantienen posiciones morales
distintas. Lo mismo que el pluralismo religioso y el pluralismo político son derechos humanos, así
también debe aceptarse como un derecho el pluralismo moral. Ninguna moral puede imponerse a
los seres humanos en contra de los dictados de su propia conciencia. El santuario de la moral
individual es insobornable"'. El actuar de manera recta tiene que ver con lo que la comunidad
considera bueno. Dado que lo bueno y lo malo están sujetos a interpretaciones, se hace necesario
aprender a darles su justo sentido. Para ello la sociedad y sus instituciones han elaborado normas
de conducta encaminadas a que las personas actúen en función del bien individual y colectivo. No
obstante que el pluralismo moral haya sido elevado a la categoría de derecho y como tal respetado,
las leyes de moral aprobadas por la comunidad deben ser cumplidas, a riesgo de ser sancionado
quien las contraríe. La moral objetiva no basta para actuar moralmente. Es, la moral subjetiva, la
conciencia, la que en definitiva determina la moralidad de la acción. Ciertamente, el verdadero actuar
ético no está sujeto a ley coactiva alguna. Cuando se deja de hacer una mala acción, dice Kant, no
por miedo al castigo, sino por repulsión hacia ella, la acción es moral.
La Declaración de Helsinki

La Declaración de Helsinki fue publicada por primera vez por la Asociación Médica Mundial
en 1964. Se cita comúnmente como una referencia en la mayoría de las normas nacionales o
internacionales y es considerada por muchos como la primera norma internacional para la
investigación biomédica. En el centro de la declaración figura la afirmación de que "el bienestar de
los seres humanos debe tener siempre primacía sobre los intereses de la ciencia y de la sociedad".
También se presta particular atención a la importancia del consentimiento informado por escrito.
La Declaración de Helsinki ha sido modificada cinco veces, últimamente en el año 2001 para incluir
temas de relevancia particular para el tipo de investigación que se está llevando a cabo actualmente,
como el uso de los controles de placebo. Propone que todo nuevo método se someta a prueba
contra los mejores métodos actuales comprobados profilácticos, diagnósticos o terapéuticos. La
declaración modificada también afirma que la "investigación médica sólo se justifica si existen
posibilidades razonables de que la población, sobre la que la investigación se realiza, podrá
beneficiarse de los resultados de la investigación".

www.colmed5.org.ar/ Codigoetica/codigosetica2.htm

In November 1906, Richard Pearson Strong, then head of the Philippine Biological Laboratory,
inoculated 24 men--inmates of Manila's Bilibid Prison--with a cholera vaccine that somehow had
been contaminated with plague organisms; 13 men died. The governor-general of the Philippines
appointed a general committee to investigate the affair, and the U.S. Senate demanded
information about the episode. Although the Senate, the secretary of war, and even the president
were kept informed of developments, no mainland investigations ensued. The general committee
concluded that Strong was negligent for not having locks on his incubators and for leaving a
visiting physician alone in the laboratory, where he might have mixed up the cholera and plague
cultures on the fateful day. The committee's charge was referred to the attorney general, who
found Strong innocent of criminal negligence, whereupon the governor-general exonerated
Strong. Strong was despondent over Bilibid but recovered and developed a noteworthy career in
American tropical medicine. In retrospect, the disaster at Bilibid presents an epitome of the
problems surrounding the use of prisoner-subjects without authorization and without their
voluntary consent.
Del Informe Belmont al Código de Reglamentos Federales

En 1972, el público estadounidense se enteró del estudio de Tuskegee sobre la Sífilis, en el cual se
les negó tratamiento para la sífilis a 399 aparceros afroamericanos pobres del condado de Macon,
en Alabama, quienes fueron engañados por los médicos del Servicio de Salud Pública de Estados
Unidos desde 1932 hasta 1972. Como parte del estudio, diseñado para documentar la historia
natural de la enfermedad, a estos hombres se les dijo que estaban recibiendo tratamiento por
"sangre mala". En realidad, los funcionarios gubernamentales hicieron todo lo posible para
asegurarse de que no recibieran ninguna terapia de ninguna fuente. El 26 de julio de 1972, el New
York Times describió el estudio como "el experimento no terapéutico en seres humanos más largo
en la historia clínica". La divulgación de este estudio por la prensa fue un gran escándalo en
Estados Unidos. Para tratar este problema, en 1974 el gobierno de Estados Unidos estableció la
Comisión Nacional para la Protección de Sujetos Humanos. En 1978, la comisión presentó su
informe, el Informe Belmont: Principios éticos y pautas para la protección de sujetos humanos de
la investigación. El informe abogó a favor del respeto por las personas, la beneficencia y la
justicia como los principios fundamentales para la realización ética de investigaciones con
participantes humanos. Los reglamentos federales actuales para la realización de investigaciones
en Estados Unidos se basan en los principios éticos del Informe Belmont. El Código de los
Reglamentos Federales, comúnmente conocido como 45 CFR 46 o Regla Común, expone las
políticas básicas del gobierno de Estados Unidos para la protección de los seres humanos en la
investigación. Incluye, entre otros, reglamentos detallados para los consejos de revisión
institucional o los comités de la ética de la investigación y el consentimiento informado.
En documentos desclasificados por EU, el 28 de Marzo del 2011, se hace referencia a un
nuevo informe, compuesto por 51 folders, 6 fichas, 4 diarios y 9 juegos. Reportado por el Dr. John
Cutler, director del proyecto, aprobado por la OPS y el Ministerio de Salud pública de Guatemala,
realizado entre 1946 a 1948, en la que tenía como objetivo de investigación, el establecer si la
penicilina era eficaz como profilaxis de la sífilis y la gonorrea, y en que dosis. Utilizando como
población de estudio, a militares, privados de libertad, prostitutas y hasta menores de edad. A los
cuales se les exponía a la infección, o inclusive se les inoculaba a pacientes sanos y se observa la
respuesta. Por supuesto que sin el conocimiento de los “Voluntarios”. Estableciéndose un
presupuesto anual, de $6900; de los cuales, $3600, eran para dos médicos Guatemaltecos.
Normas del Consejo de Organizaciones Internacionales de las Ciencias Médicas

El Consejo de Organizaciones Internacionales de las Ciencias Médicas (CIOMS, por sus siglas en
inglés), en colaboración con la Organización Mundial de la Salud, ha sido activo en la ética de la
investigación por muchos años. El CIOMS emitió la primera publicación de sus Normas en 1993 y
las modificó en 2002. Su finalidad fue: "preparar normas para indicar cómo los principios éticos
que deben guiar la realización de la investigación biomédica en seres humanos, según se estipula
en la Declaración de Helsinki, podrían aplicarse eficazmente, en particular en los países en
desarrollo, dadas sus circunstancias socioeconómicas, sus leyes y sus reglamentos, así como los
arreglos ejecutivos y administrativos". Las Normas del CIOMS reconocen el reto de aplicar los
principios éticos universales en un mundo con recursos contrastantes. Las Normas consisten en 21
normas específicas, cada una seguida de observaciones interpretativas. Entre las normas de
particular interés para los representantes comunitarios figuran:

Comités de revisión ética

Obtención de consentimiento informado: información esencial para futuros sujetos de


investigación

Beneficios para los participantes y sus comunidades

Prestación de servicios de salud

Distribución de las cargas y beneficios

Las Normas del CIOMS son muy influyentes y se han difundido ampliamente. Se usan con
frecuencia como una obra de consulta para formular las normas nacionales o locales.
En medicina, el consentimiento informado o consentimiento libre esclarecido, es el
procedimiento médico formal cuyo objetivo es aplicar el principio de autonomía del
paciente, es decir la obligación de respetar a los pacientes como individuos y hacer honor a
sus preferencias en cuidados médicos.1

En algunos casos, tales como el examen físico de un médico, el consentimiento es tácito y


sobreentendido. Para procedimientos más invasivos o aquellos asociados a riesgos
significativos o que tienen implicados alternativas, el consentimiento informado debe ser
presentado por escrito y firmado por el paciente.

Bajo ciertas circunstancias, se presentan excepciones al consentimiento informado. Los


casos más frecuentes son las emergencias médicas donde se requiere atención médica
inmediata para prevenir daños serios o irreversibles, así como en casos donde por razón de
incompetencia, el sujeto no es capaz de dar o negar permiso para un examen o tratamiento.

Contenido
 1 Historia
 2 Características
 3 Excepciones al consentimiento informado
o 3.1 Capacidad de decisión
o 3.2 Competencia
 4 Consentimiento en investigaciones
 5 Documentación
 6 Derecho de rechazo
 7 Véase también
 8 Referencias
 9 Enlace externo

Historia
El consentimiento informado tiene sus raíces legales en 1947 con el Código de Núremberg,
a través del cual se juzgó a un grupo de médicos acusados de realizar experimentos
caracterizados como crímenes en contra de la humanidad, cometidos contra prisioneros de
guerra en campos de concentración nazis durante la Segunda Guerra Mundial, los cuales se
realizaban sin información o consentimiento sobre los riesgos a los que se enfrentaban las
víctimas.2

En 1964 se promulgó en la Asamblea Médica Mundial la Declaración de Helsinki, que ha


sido modificada en varias ocasiones, agrupando un conjunto de reglamentos que orientan a
los médicos en experimentos con seres humanos, y resalta la importancia del
consentimiento voluntario dentro de los protocolos de estudio. 2

Características
El consentimiento informado debe reunir al menos cuatro requisitos que son:

 Capacidad: el individuo debe tener la habilidad de tomar decisiones.


 Voluntariedad: Los sujetos deben decidir libremente someterse a un tratamiento o
participar en un estudio sin que haya persuasión, manipulación ni coerción. El carácter
voluntario del consentimiento es vulnerado cuando es solicitado por personas en posición
de autoridad o no se ofrece un tiempo suficiente al paciente para reflexionar, consultar o
decidir.
 Información: Las opciones deben ser comprensibles y deben incluir el objetivo del
tratamiento o del estudio, su procedimiento, los beneficios y riesgos potenciales y que
siempre existe la opción del paciente de rechazar el tratamiento o estudio una vez iniciado
en cualquier momento, sin que ello le pueda perjudicar en otros tratamientos.
 Comprensión: Es la capacidad del paciente de comprender la información relevante.

Estudios a nivel internacional demuestran que hay una fuerte tendencia a considerar el
consentimiento informado como una herramienta que protege a los proveedores de salud de
problemas legales y reclamos, en vez de un proceso en el que se toman las decisiones en
forma conjunta y responsable por parte del paciente y el profesional. 3 Dado el aumento en
los últimos años de las demandas contra profesionales sanitarios, éstos se protegen con la
práctica de la llamada "medicina defensiva". 4
Excepciones al consentimiento informado
Todo paciente tiene el derecho a no ser informado si así lo expresa previamente, es decir, el
paciente puede revocar libremente por escrito su consentimiento en cualquier momento. En
caso de que el paciente pose un riesgo para la salud pública, se admite la ausencia del
consentimiento informado para el internamiento, cuarentena u hospitalización del paciente.5
En caso de riesgo inmediato grave para la integridad física o psíquica del paciente, el
consentimiento puede obviarse. En caso de pacientes menores de edad o de incapacidad del
paciente legalmente reconocida, física o mental, se admite que el consentimiento informado
sea pedido a su representante legal, que será generalmente el familiar más próximo. En caso
de riesgo grave para la salud pública o la vida del paciente el consentimiento del
representante legal sólo se tendrá en cuenta.

Capacidad de decisión

El consentimiento informado está basado en el principio de autonomía,6 es decir, el derecho


del paciente a ser reconocido como persona libre y dueña de tomar sus decisiones. 3 El
paciente debe estar en condiciones de comunicar su decisión y éste ha sido informado
adecuadamente de sus opciones, es decir, no pueden ser decisiones hechas como resultado
de delirio o alucinaciones. La decisión del paciente es consistente con sus valores y metas y
se mantiene estable en el tiempo si no han habido modificaciones hechas por el mismo
sujeto. Los familiares de un paciente no están en el derecho de requerir al médico del
paciente que no se le comunique ciertos detalles o información al mismo.

Los componentes de la capacidad de tomar decisiones incluye la habilidad de comprender


las opciones, de entender las consecuencias de escoger una u otra opción y poder evaluar el
costo y beneficio personal de cada consecuencia y relacionarla a sus valores y prioridades.

En algunos casos cuando el paciente no es capaz de comprender los componentes y


opciones que le son presentadas, sus familiares o representantes designadas por una corte
pueden servir para tomar decisiones por el individuo.

Competencia

La capacidad de tomar decisiones se conoce legalmente como «competencia». El término


se usa a menudo de manera ámplia en la medicina para indicar si una persona tiene
capacidad de decisión. Técnicamente, una persona sólo puede ser declarada "incompetente"
por un tribunal de justicia.

Consentimiento en investigaciones
Artículo principal: Informe Belmont.

El informe Belmont estadounidense identificó los principios éticos básicos a tener en


cuenta durante una investigación biomédica y los catalogó «de beneficio» (beneficencia y
no maleficencia), «de respeto por las personas» (autonomía) y «de equidad» (justicia).7 El
principio de beneficencia se refiere a la obligación ética de medir la relación
riesgo/beneficio, es decir, lograr los máximos beneficios y de reducir al mínimo el daño y
la equivocación. De manera que el diseño de la investigación sea acertado y que los
investigadores sean competentes, tanto para realizar la investigación como para
salvaguardar el bienestar de las personas que participan en ella.

El proceso de consentimiento informado se consideran uno de los principios de autonomía,


que obliga a la selección equitativa de los sujetos de investigación.

Documentación
Para muchos procedimientos, como exámenes de sangre de rutina, radiografías, y férulas o
yesos, el consentimiento suele estar implícito. Para otras pruebas invasivas o para
tratamientos con riesgo significativo, se le debe dar un formulario de consentimiento escrito
al paciente y una explicación verbal, de preferencia en su idioma nativo. Por lo general, se
incluye en el formulario de consentimiento informado una explicación de la condición
médica que justifique la prueba, procedimiento o tratamiento, así como una explicación de
la finalidad y los beneficios de la prueba propuesta de procedimiento o tratamiento. El
profesional de la salud suele verse obligado a dar una explicación o descripción de la
prueba procedimiento o tratamiento propuesto, incluyendo las posibles complicaciones o
efectos adversos y una descripción de las opciones alternativas, si las hubiere, y sus
beneficios y riesgos relativos, así como un análisis de las consecuencias de no aceptar la
prueba, procedimiento o tratamiento en cuestión.

El formulario de consentimiento debe estar firmado y fechado tanto por el profesional de la


salud como por el paciente o su representante legal. Una copia del formulario de
consentimiento firmado siempre está disponible para el paciente y su médico.

Derecho de rechazo
Salvo para tratamientos autorizados legalmente de manera involuntaria, los pacientes
legalmente competentes para tomar decisiones médicas o que sean calificados por los
proveedores salud de tener la capacidad de decisión, tienen el derecho legal y moral de
rechazar cualquier tratamiento. Esto aplica incluso si el paciente opta por hacer una "mala
decisión" que pueda resultar en una discapacidad grave o incluso la muerte. 8

Con el fin de documentar que se le ha dado al paciente la opción de obtener un tratamiento


recomendado, y ha optado por rechazarlo, se le suele pedir que firme un formulario «contra
opinión médica», que es la forma de proteger al médico de responsabilidad legal de no
proporcionar el procedimiento en cuestión. El rechazar una prueba, tratamiento o
procedimiento no significa necesariamente que se niegan todos los cuidados. Se espera que
se le ofrezca al paciente las mejores opciones disponibles después de rechazar la ofrecida
en inicio.
Si a causa de la intoxicación, lesión, enfermedad, estrés emocional, u otra razón, un
proveedor de cuidado de salud decide que un paciente no tiene capacidad de decisión, el
paciente puede no ser capaz de rechazar el tratamiento. por lo general, la ley presume que
una persona razonable diera consentimiento para tratamientos en la mayoría de las
situaciones de emergencia para prevenir la discapacidad permanente o muerte.

En una declaración jurada o documento de voluntades anticipadas se puede dejar en escrito


la voluntad de un sujeto antes de que ocurra una emergencia. Estos documentos legales
encaminan a los médicos y otros proveedores de atención de salud en cuanto a qué
tratamientos específicos el individuo desea o rechaza, en caso de enfermedad o lesión que
le impida tener la capacidad de decisión.6

GUIA PARA LA ELABORACIÓN DEL CONSENTIMIENTO INFORMADO

DEFINICIÓN
El consentimiento informado o consentimiento libre esclarecido, es el procedimiento médico formal
cuyo objetivo es aplicar el principio de Ética de autonomía del paciente, es decir la obligación que tiene
todo investigador en que se involucren personas, de respetar a los pacientes como individuos y reconocer
su decisión de aceptar un procedimiento médico, ó de formar parte de un una investigación basándose
en que el participante tenga una comprensión completa y profunda de sus propósitos , procedimientos,
riesgos, beneficios, alternativas y cualquier otro factor que pueda afectar su decisión de participar.

PARTICULARIDADES
No es un simple evento, ni es solo un formulario para ser firmado
Es un proceso educativo que toma lugar entre el investigador y el participante
Implica tres elementos:
– Información completa de los objetivos, propósitos, beneficios y daños que puedan
implicar para el participante.
– Comprensión: Se debe adaptar el mensaje a la capacidad intelectual del participante
– Voluntariedad.
– Consignación escrita de los tres elementos anteriores.

REQUERIMIENTOS GENERALES
Debe ser obtenido del sujeto o representante legalmente autorizado, En lenguaje entendible
por el participante
Darle suficiente oportunidad a los sujetos para decidir si quieren o no participar, Sin coerción o
influencia indebida
No debe dar la impresión de que ha renunciado a sus derechos legales.

COMPETENCIA
No puede ir en contra de las leyes del País.
Solo pueden dar Consentimiento Informado los adultos legalmente competentes
Solo los padres o tutores de menores de edad pueden dar el permiso respectivo
Adultos con deficiencia de su desarrollo mental, ancianos con limitaciones cognitivas, personas
inconscientes o semi-inconscientes no pueden dar un Consentimiento Informado
La evaluación de competencia debe revisarse caso a caso

ELEMENTOS DEL CONSENTIMIENTO INFORMADO


Debe tener una descripción de la investigación y la participación que tendrá la persona
incluyendo la identificación del procedimiento ó método experimental que plantee el estudio.
Se debe referir adecuadamente los riesgos, incomodidades ó daños razonablemente previsibles.
De encontrarse posteriormente un nuevo riesgo, deberá contactarse nuevamente a los participantes he
informarles.
Puntualizar los beneficios esperados, no se deben magnificar, ni es ético ofrecer una
compensación económica ó en especies.
Explicación de como se establecerá la protección a la confidencialidad, (como los datos estarán
protegidos)
Exponer cual sería el procedimiento que se tendrá para compensar los daños, en el caso de que
se presentara alguno, relacionados con la investigación (físico, psicológico, social, financiero o de otro
tipo).
Manifestar claramente que la participación es voluntaria y que puede interrumpir su
participación en cualquier momento, sin que exista pérdida de los beneficios esperados ó incurra en una
penalidad.
Consignar con quién se debe contactar el participante en caso de dudas, es aconsejable poner
al menos dos nombres de contactos con números de teléfonos y direcciones, ya que puede existir un
conflicto de intereses.
Los contactos deben ser los responsables del estudio y además se debe agregar un miembro
del comité de ética local y su dirección en la institución.

DOCUMENTACION DE CONSENTIMIENTO
El Formulario de comprensión debe ser aprobado por el Comité de Ética de la Institución.
Si existiera la aprobación previa realizada por otro Organismo Similar externo, ¿El Ministerio de
Salud? ¿Dpto. de Regulación? Deberá adjuntarse una copia a la solicitud.
Debe entregársele una copia a la persona que firma el formulario
Debe estar escrito en un lenguaje apropiado para su comprensión, evitando todo lenguaje
técnico
Se recomienda enfáticamente el uso de “primera persona” ejem: Yo he sido completamente
informado acerca de.....

NO APLICACION DEL FORMULARIO


Se puede establecer no aplicar el formulario en los siguientes casos:
– Cuando la investigación presenta un riesgo tan mínimo y envuelva procedimientos que
no requieran consentimiento por escrito
– Cuando la pérdida de la confidencialidad no implique ningún riesgo
El hecho que un sujeto haya firmado el Consentimiento Informado no significa que el/ella
entiende que estuvo de acuerdo o que en realidad dio su consentimiento voluntario
En algunos casos, tales como el examen físico de un médico, el consentimiento es tácito y sobre
entendido. Para procedimientos más invasivos o aquellos asociados a riesgos significativos o que tienen
implicados alternativas, el consentimiento informado debe ser presentado por escrito y firmado por el
paciente.
Bajo ciertas circunstancias, se presentan excepciones al consentimiento informado. Los casos
más frecuentes son las emergencias médicas donde se requiere atención médica inmediata para
prevenir daños serios o irreversibles, así como en casos donde por razón de incompetencia, el sujeto no
es capaz de dar o negar permiso para un examen o tratamiento.

COLEGIO médico DE HONDURAS

CODIGO DE ÉTICA
SE TOMARON LOS CAPITULOS PERTINENTES AL ACCIONAR DE UN
ESTUDIANTE DEL 5TO AÑO DE CLÍNICA DE CÍRUGIA

CONSIDERANDO

1 Que la Ley Orgánica del Colegio Médico de Honduras en el Capitulo I, Artículo 3, inciso
c), le confiere al mismo “una función ética, cual es, la de mantener incólume la integridad de la moral
profesional y el prestigio del gremio que la sustenta”; y en el artículo 6 establece los siguientes
fines:
a) “Enaltecer el ejercicio de la profesión en todos sus aspectos manteniendo el decoro, la
disciplina y la fraternidad del gremio médico
b) Velar por la honestidad, eficiencia técnica y el mantenimiento de la ética en el ejercicio
de la profesión médica.
c) Aplicar y propender reformas a las normas de ética profesional;

CAPITULO III
RELACIONES DE LOS MEDICOS CON LA SOCIEDAD

ARTICULO 4. El médico tiene el deber primario de servir a la humanidad, con lealtad a su


país y con el pueblo, a través de la atención personal, familiar y/o comunitaria de quienes necesiten
de sus servicios. En consecuencia, no hará discriminación por religión, raza, edad, género,
nacionalidad u origen, clase social, afiliación política, condición económica, estado de salud,
situación legal o de otra naturaleza.
ARTICULO 5. Constituirá preocupación preferente del médico prestar su colaboración al
progreso de la ciencia, a través de una metodología científica y sus acciones deberán ser destinadas
a elevar el nivel de la salud del país, con respeto a la vida y la dignidad humana.
ARTICULO 6. Bajo ningún pretexto o circunstancia podrá el profesional médico asociarse o
vincularse ni siquiera transitoriamente, con quienes ejerzan ilegalmente la práctica médica.

CAPITULO IV
RELACIONES ENTRE COLEGAS

ARTICULO 7. Es deber del médico que las relaciones con sus colegas sean basadas en el
respeto, tolerancia y consideración a las funciones de su ejercicio profesional, sea cual fuere la
relación jerárquica o el nivel de especialización que exista entre ellos.
ARTICULO 8. El médico tiene el deber de solidarizarse con sus colegas en circunstancias
adversas.
ARTICULO 9. El médico que fuera convocado para emitir opinión o reemplazar a otro médico
en la atención de un paciente, deberá abstenerse de atenderlo si constatare o tuviere conocimiento
de que el médico tratante no ha sido convenientemente advertido del hecho por parte del paciente.

CAPITULO VIII
RELACIÓN MÉDICO PACIENTE

ARTICULO 26. La relación médico paciente se entenderá como la comunicación fluida,


sincera y honesta en función de satisfacer una necesidad, tanto del que pretende curar un mal ajeno
como del que busca el servicio para su dolencia, en el entendido que dicha comunicación se
extenderá al entorno del paciente y sus familiares con el único objetivo de que puedan estos últimos
coadyuvar en el restablecimiento de su salud.
ARTICULO 27. La relación médico paciente, se basa en un mutuo respeto de la dignidad de
las personas que la establecen, cuyo valor moral es invaluable y que se acrecienta con la conducta
de servicio del médico a quien se ha consultado para la satisfacción de una necesidad. - Ninguno
puede obligar al otro a violentar sus propias convicciones.
ARTICULO 28. La relación médico paciente, se establece en un clima de confianza con un
trato personal amable, alto grado de calidad técnica y calidez humana en la atención médica, que
optimicen la eficacia de la misma.
ARTICULO 29. El médico respetará las ideas, creencias convicciones del enfermo o de sus
allegados, sin que ellas sean causa de discriminación ni que influyan negativamente en la calidad de
la atención médica.
ARTICULO 30. Los pacientes tienen derecho a participar en las decisiones de su terapia,
para lo cual el médico le propondrá las diferentes opciones terapéuticas, a fin de brindarle el mayor
bien posible.
ARTICULO 31. El médico deberá prestar al paciente los cuidados que le dicte su
conocimiento y conciencia profesional, comunicándole con palabras comprensibles y en forma
ponderada sobre su estado de salud, los diferentes métodos técnicos diagnósticas y opciones
terapéuticas, así como los riesgos y beneficios de éstos, a fin de que él pueda ejercer su derecho de
elegir, dar su consentimiento o rehusar el manejo propuesto. En los casos en que el paciente no esté
en capacidad de comprender y/o decidir, habrá de comunicarlo a los familiares o a las personas
legalmente responsables.
ARTICULO 32. Cuando el paciente no estuviese en condiciones de dar su consentimiento a
la actuación médica y resultare imposible obtenerlo de su familia o personas legalmente
responsables, el médico deberá actuar con diligencia en la búsqueda de la protección de la vida
humana.
ARTICULO 33. La acción del médico se complementará proporcionando información y
educación al paciente, estimulando en el mismo, a través de un acompañamiento cálido, el
compromiso de adoptar una conducta saludable.
ARTICULO 34. El médico debe ejercer la profesión con amplia autonomía, salvo en los
casos que expresa la normativa vigente.
ARTICULO 35. El médico deberá respetar la privacidad personal, la intimidad y el pudor del
paciente.
ARTICULO 36. El trabajo en equipo de salud, no exime de responsabilidad profesional
individual a cada uno de los miembros del equipo en cuanto a sus acciones personales. A su vez no
excluye el derecho del paciente de conocer quién es la persona que asume la responsabilidad de su
atención.
ARTICULO 37. El médico no abandonará a su paciente por ser portador de una enfermedad
incurable y/o contagiosa, sino más bien le atenderá aplicando las normas básicas de bioseguridad
para evitar el contagio que pueda poner en riesgo su salud, la de su familia o la de otros pacientes.
ARTICULO 38. El médico emitirá sus dictámenes con objetividad, imparcialidad y veracidad
observando las normas ético-morales.
CAPITULO X
ETICA EN LA ACTIVIDAD ACADEMICA

ARTICULO 49. El médico dedicado a la actividad académica, enseñará las normas éticas de
manera teórica y práctica en su quehacer diario, transmitiendo conocimientos a través del ejercicio
de la profesión, con miras a preservar la salud de las personas y de la comunidad, haciendo énfasis
en que el amor y el respeto al ser humano son la base de la buena práctica médica.
ARTICULO 50. El médico enseñará y practicará con el ejemplo, el principio de hacer bien a
los demás, respetando el legado de Hipócrates: “Primero no hagan daño” (Primun non nocere).
ARTICULO 51. El médico enseñará y practicará el respeto a la Constitución de la República,
El Código de Salud, Código de Ética, Leyes y Reglamentos del Colegio Médico de Honduras y de la
institución donde labora.
ARTICULO 52. Cuando el médico se dedique a la enseñanza de la medicina, se someterá a
las normas morales sobre la materia, así como a los dictados de la ciencia y a los principios
pedagógicos basados en la ética profesional.
ARTICULO 53. El médico docente respetará el principio de autonomía de cada alumno y
guardará para ellos, la consideración, aprecio y respeto que se merecen, dándoles un trato justo,
humanizado y digno, sin menoscabo del cumplimiento de sus deberes.
ARTICULO 54. El médico docente bajo ninguna circunstancia se aprovechará de los
alumnos en contra de los principios morales, éticos y científicos.
ARTICULO 55. El médico docente no debe tener predilección o discriminación para con sus
alumnos, sabiendo que todos tienen los mismos derechos, independientemente de sus capacidades,
condición social, política, económica o religiosa, raza y género.
ARTICULO 56. El médico docente deberá enseñar a sus estudiantes el respeto por el
paciente en todos los ámbitos de la atención médica. Asimismo, deberá mostrar consideración en el
proceso de la muerte y del silencio de los que aún muertos sirven para el aprendizaje.
ARTICULO 57. El médico docente transmitirá sus conocimientos libres de egoísmo
profesional, con pleno dominio de la materia que imparte, manteniéndose actualizado en los
aspectos éticos, científicos y tecnológicos sobre los nuevos adelantos que surgen en su campo para
preparar al estudiante a un ejercicio digno de la medicina.
ARTICULO 58. Todo médico, aunque no devengue salario como docente, tiene el deber
moral de transmitir y enriquecer al personal de salud y estudiantes sus conocimientos, habilidades y
experiencias.

CAPITULO XI
EL MEDICO Y LOS DERECHOS HUMANOS

ARTICULO 59. Con respecto a la protección de presos y detenidos, contra la tortura y otros
tratos o penas crueles, inhumanas o degradantes se estipula que es una grave contravención a la
ética médica que los médicos y el personal de salud bajo su cargo, tome parte activa o pasiva, en
actos que constituyen participación, complicidad, incitamiento, intentos de tortura u otro trato cruel,
inhumano o degradante.
ARTICULO 60. El médico deberá informar o denunciar los casos de tortura o trato cruel,
inhumano o degradante de los que tenga conocimiento y dependiendo de las circunstancias, el
informe o la denuncia será dirigida a las autoridades médicas, legales, nacionales o internacionales,
a las organizaciones no gubernamentales o a la Corte Penal Internacional. Así mismo los médicos
deben ser prudentes en este asunto y tomar en cuenta los protocolos internacionales de denuncia.
ARTICULO 61. En aquellos casos en los cuales existen obligaciones éticas que entran en
conflicto, el médico deberá adherirse al Protocolo de Estambul, el cual contempla recurrir a los
códigos internacionales y los principios éticos que exigen se notifique a un órgano responsable toda
la información relativa a torturas o malos tratos, siendo el principio fundamental de lo anterior, evitar
el daño. Asimismo, el profesional de la salud deberá buscar soluciones que promuevan la justicia sin
violar el derecho de confidencialidad que asiste al individuo.
ARTICULO 62. A toda persona privada de libertad se le reconoce el derecho a la atención
médica, a su privacidad sin discriminación ni prejuicio alguno, siempre que ésta sea solicitada por
las autoridades competentes y se cumplan las normas de seguridad y condiciones adecuadas para
su atención, garantizando la integridad física del médico y del paciente.
ARTICULO 63. El médico que presta atención a una persona y sospecha o detecta alguna
violación de sus derechos en sus diferentes aspectos físico, sexual y psicológico, deberá de mutuo
acuerdo con el paciente hacer la denuncia respectiva ante el organismo competente y procurar una
atención integral ofreciéndole bienestar emocional, mental y físico. ARTICULO 64. El médico que
presta atención a un niño o niña menor de dieciocho años y sospecha o detecta alguna violación de
sus derechos en sus diferentes aspectos físico, sexual y psicológico, deberá hacer la denuncia
respectiva ante el organismo competente y procurar una
9 atención integral ofreciéndole bienestar emocional, mental y físico tanto al paciente como a su
familia.
ARTICULO 65. El médico orientará a sus pacientes a través de la consejería genética sobre
las diferentes enfermedades genéticas y sus riesgos de transmisión respetando su dignidad y
derechos de libre elección.
ARTICUO 66. El médico podrá participar en las investigaciones de tipo genético siempre y
cuando se oriente a aliviar el sufrimiento y mejorar la salud del individuo y de toda la humanidad,
respetando la dignidad de la vida humana.
ARTICULO 67. El médico no consentirá ni desarrollará prácticas que sean contrarias a la
dignidad de la persona como la clonación humana. Así también promoverá ante el Estado,
instituciones de salud y organizaciones nacionales e internacionales competentes, la cooperación
para identificar estas prácticas y la adopción en el plano nacional o internacional de las medidas que
correspondan para asegurar su respeto,
ARTICULO 68. El médico promoverá y prescribirá una alimentación y nutrición sana sin
contaminación tóxica infecciosa ni manipulación genética que pongan en riesgo la salud y dignidad
humana.
ARTICULO 69. El médico atenderá y promoverá el cuidado con esmero y calidez de los
pacientes con enfermedades discapacitantes, terminales o infectocontagiosas como VIH/SIDA.
ARTICULO 70. El médico velará y promoverá el cumplimiento de las normas universales de
bioseguridad sobre cualquier tipo de desechos generados en su práctica médica.
ARTICULO 71. El médico velará y promoverá acciones para la adecuada conservación del
medio ambiente que contribuyan a prevenir enfermedades derivadas de la contaminación.

GLOSARIO

Actividad Académica. Conjunto de operaciones o tareas propias de una persona o entidad


con diligencia eficacia y prontitud en el proceso enseñanza aprendizaje.
Bioética. Disciplina científica que estudia los aspectos éticos de la medicina y la biología en
general.
Bioseguridad. Medidas preestablecidas por organismos internacionales y nacionales para el
manejo de pacientes con el propósito de evitar contaminación al personal tratante y al paciente.
Buenas Costumbres. Práctica virtudes, hábitos y actitudes positivas propias de las personas.
Son reglas de moral a que deben ajustarse todas las personas y que no pueden ser derogadas
convencionalmente.
Clonación. Acción y efecto de reproducir células u organismos genéticamente idénticos,
originado por reproducción asexual a partir de una única célula u organismo o por división artificial
de estados embrionarios iniciales.
Código de Ética. Conjunto de principios y normas que orientan la conducta del profesional
de la medicina.
Deontología. Tratado del deber.
Derechos Humanos. Facultad de actuar en un determinado sentido con respecto a la
conducta de otra persona, siendo estos derechos inherentes, inalienables e imprescriptibles; que
reclaman reconocimiento, respeto, tutela y promoción de parte de todos en el ámbito real del Estado.
Distanacia. Tratamiento terapéutico desproporcionado que prolonga la agonía de enfermos
desahuciados, sin respetar los legítimos deseos del paciente.
Encarnizamiento o Ensañamiento Terapéutico. Abuso de procedimientos terapéuticos que
causan daño y dolor a pacientes que no están en condiciones de defenderse
12 Enfermo Terminal. Enfermo o paciente que está en situación grave e irreversible y cuya
muerte se prevé muy próxima.
Estado Crítico. Momento de agravamiento severo en la evolución de la enfermedad del
paciente, con riesgo de muerte.
ETICA. Rama de la filosofía que tiene como finalidad la orientación racional de la conducta
moral de los seres humanos.
Eutanasia. Acción u omisión que, para evitar sufrimiento a los pacientes desahuciados,
acelera su muerte con su consentimiento o sin él.
Incapacidad. Falta de preparación, entendimiento o de medios para realizar un acto.
Índice de Karnofsky. Tabla o categorización que mide la capacidad funcional del paciente
mediante un porcentaje.
Inhabilidad. Defecto o impedimento, falta de talento o instrucción para obtener o ejercer un
empleo u oficio.
Ley. Precepto, regla o norma constante e invariable dictado por la suprema autoridad, en
que se manda o prohíbe algo en consonancia con la justicia y para el bien de los gobernados.
Moral. Acciones humanas en orden a su bondad o maldad.
Persona Humana. Individuo de la especie humana de constitución corpórea-espiritual.
Persona Jurídica. Persona u organización de personas y/o de bienes a la que el derecho
reconoce capacidad unitaria para ser sujeto de derechos y obligaciones. Principio de Autonomía.
Estado y condición de la persona, pueblo o entidad que goza de independencia y respeto en sus
decisiones vitales. Capacidad de decidir del individuo suponiendo una adecuada información sobre
lo que implica su decisión.
Principio de Totalidad El bien de las partes que integran un todo organizado, se subordinan
al bien del todo.
13 Principio de Doble Efecto o Voluntario Indirecto Cuando de una acción se produzcan dos
efectos, uno bueno y otro malo, puede ser lícita con las siguientes condiciones:
1. Que la acción sea buena en sí misma o indiferente.
2. Que el fin o intención del sujeto sea recto.
3. Que el efecto bueno no sea consecuencia del malo.
4. Que el motivo sea proporcionalmente grave como para tolerar el efecto malo.
Principio de Libertad y Responsabilidad Para ser libres y responsables se requiere estar
vivos
Principio de Objeción de Conciencia Nadie puede violentar la conciencia de otro
Principio de Beneficencia. Virtud, norma o idea fundamental que rige el pensamiento o la
conducta para hacer el bien.
Principio de Justicia. Virtud que inclina a dar a cada uno lo que le corresponde o pertenece.
Principio de no maleficencia. Virtud, hábito o costumbre de no hacer el mal.
Reglamento. Colección ordenada de reglas o preceptos, que por autoridad competente se
da para la ejecución de una ley o para el régimen de una corporación, una dependencia o un servicio.
Órgano. Aquella parte diferenciable del cuerpo humano, constituida por diversos tejidos que
mantiene su estructura, vascularización y capacidad para desarrollar funciones fisiológicas con un
grado importante de autonomía y suficiencia.
Donante vivo. Se considera donante vivo a aquella persona que, cumpliendo los requisitos,
efectúe la donación en vida de aquellos órganos, o parte de los mismos, cuya extracción sea
compatible con la vida y cuya función pueda ser compensada por el organismo del donante de forma
adecuada y suficientemente segura.
Donante fallecido. Se considera donante fallecido a aquella persona difunta de la que se
pretende extraer órganos, que, cumpliendo los requisitos hubiera dejado constancia expresa de su
donación.
Extracción de órganos. Proceso por el cual se obtienen el o los órganos de un donante vivo
o fallecido para su posterior trasplante en uno o varios receptores.
Trasplante de órganos: utilización terapéutica de los órganos humanos que consiste en
sustituir un órgano enfermo, o su función, por otro sano procedente de un donante vivo o de un
donante fallecido.

BIBLIOGRAFÍA

AMERICAN COLLAGE OF PHYSICIANS. Manual de Ética 4A Ed. USA. 1998.


BIOETIMED. Boletín de bioética y deontología Médica. Asociación Guatemalteca de
Bioética. “Eutanasia”. Año V, N°10, Abril 1997
CODIGO DE DEONTOLOGIA MEDICA, Federación Médica Venezolana.

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