A principios del siglo VII (7) Mahoma predicó una nueva religión: el islam.

Cuando él muere, los que tenían esta religión, eran llamados musulmanes,
empezaron a extenderse por muchos territorios y formaron un imperio que
llamaron califato.

En al año 711, había dos bandos que luchaban por el poder en el reino
visigodo. Entonces uno de esos bandos le pidió ayuda a los musulmanes.
Entonces los musulmanes cuando ya entraron en la Península derrotaron al rey
visigodo Rodrigo y acabaron con el reino de Toledo.

Los musulmanes se quedaron con toda la Península y le dieron el nombre de

Al-Andalus y a los musulmanes que vivían en la península les llamaban
andalusíes. Establecieron su capital en Córdoba.

En el año 929 Abd-al-Rahman III se proclamó califa, que era el título más
importante para un gobernador musulmán.

En el norte de la península empezaron a aparecer reinos cristianos y esto unido

a problemas internos, hicieron que el califato de Córdoba en el año 1031 se
rompiera en pequeños reinos llamados reinos de taifas.