En atención a la solicitud realizada por ustedes, respecto a
dar respuesta a la carta enviada solicitando la entrevista realizada el 17 de abril de 2018, me permito realizar la siguientes consideraciones: Para quien suscribe y su Equipo de Gobierno, sostener el más amplio y profundo relacionamiento con el Asociación de Empleados y Obreros Municipales (ADEOM) no es sólo una decisión política, sino un imperativo ético demostrado a lo largo de toda nuestra práctica política. En ese marco propuse la realización de una instancia mensual a los efectos de intercambiar sobre las diferentes problemáticas de la gestión de la Administración. Estas reuniones se han realizado sistemáticamente excepto en situaciones puntuales que las impidieron, dada la existencia de compromisos que como Intendente de Montevideo he debido asumir. Estos intercambios han sido complementados con una innumerable cantidad de instancias de carácter bipartito en la IM, o tripartito en la órbita del MTSS. La existencia de un número importante de Comisiones de carácter regular (Seguridad y Salud Laboral, Carrera Funcional, Vivienda, Ayudas Económicas, etc.) confirma nuestra voluntad de diálogo permanente. El Convenio Colectivo alcanzado en el año 2016, que abarca la totalidad del período de Gobierno, es la demostración contundente del resultado de este diálogo. Vale la pena destacar el estricto cumplimiento del Convenio Colectivo por parte de la Administración (se adjunta documento). También es importante destacar los convenios sectoriales alcanzados en el Servicio de Locomoción, TV Ciudad, entre otros. En la Comisión de Carrera hemos tenido reuniones a lo largo de estos 3 años, con intermitencias temporales. De ellas se destacan tres puntos relevantes, a saber: a) en referencia a un grupo de funcionarios y funcionarias de DTI que no fueron tenidos en cuenta en una promoción anterior, llegando a una solución de compromiso que alcanza a unas 20 personas; b) en referencia a funcionarios y funcionarias de Imprenta, en el que se reconocen los conocimientos adquiridos en nuevas tecnologías, y se incluye un período de tiempo para culminar la educación formal (PROCES), abarcando a 8 personas; c) en este caso, es el proceso de los Operadores Ambientales que trabajan en Inspección General. Se elaboró una instancia formativa, con prueba de valoración posterior, y también se les concedió un tiempo para terminar los estudios secundarios (PROCES), involucrando a unas 80 personas. Esta situación se amplió con un trabajo de campo en tareas específicas de inspección. A modo de síntesis, en todos los casos significó una reasignación de actividades, con el consiguiente beneficio económico para los funcionarios. Considero que es necesario repensar las instancias mensuales, dada la gran cantidad y variedad de temas hacen imposible en la práctica el abordaje de los mismos, por lo cual hemos propuesto el ordenamiento de los temas, de los participantes y el levantamiento de actas que permitan mantener la continuidad de los intercambios, preparando mas profundamente las reuniones que pasarán a ser cada tres meses. La Administración ha sido absolutamente consecuente promoviendo la negociación colectiva y el diálogo, siendo conscientes que la misma obliga a negociar pero no necesariamente a acordar, y que la responsabilidad de la conducción de la gestión fue otorgada por la ciudadanía a esta fuerza política y a este Intendente. No queremos dejar de mencionar que en toda relación debe haber voluntad de las dos partes para hacerlo y en ese sentido, la sistemática actitud de informar a la opinión pública cosas absolutamente distantes de la realidad y carentes de veracidad por parte de algunos/as dirigentes de ADEOM, en nada ayudan a la construcción de un diálogo constructivo Respecto a los temas planteados sobre la cantidad de funcionarias y funcionarios necesarios para el desarrollo adecuado de las funciones, la Administración mantuvo durante los primeros dos años de gestión una política austera y responsable, en función de la realidad presupuestal. Esta actitud austera, en términos generales, permitió realizar ahorros que no sólo equilibraron las finanzas de la IM, sino que permitieron sumar más obras a las previstas en el Presupuesto Quinquenal, en beneficio de toda la ciudadanía. El Servicio de Planeamiento y Desarrollo de Gestión Humana realiza un relevamiento periódico a través del Observatorio de Gestión Humana, atendiendo los planteos de los distintos servicios. Vale la pena destacar, porque ha sido planteado en forma repetida en los medios de comunicación, que dicho Observatorio constató que a lo largo del Quinquenio aproximadamente dos mil funcionarios y funcionarias generarían causal jubilatoria. Este dato para nada significa que se producirá tal cantidad de retiros, dado que el promedio de edad de retiro en la Administración es de 64 años, y que en función de esa realidad se viene planificando los llamados y concursos. Reafirmamos entonces que, por el retiro de funcionarios y funcionarias, no está en riesgo ningún servicio que presta la IM. Dicho esto, es de destacar que como sucede en el mundo del trabajo, la IM no es ajena a los cambios, la introducción de nuevas tecnologías, el surgimiento de nuevas demandas, y teniendo siempre presente que nuestro objetivo es mejorar la calidad de vida de los montevideanos y las montevideanas, debemos estar atentos a perseguir la mejora continua de nuestros servicios. Seguramente en el correr de esta Administración se crearán nuevos Departamentos o Servicios (Departamento de Desarrollo Sostenible e Inteligente, Servicio de Atención a la Ciudadanía, por ejemplo), y seguramente otros servicios se modificarán. Atentos a esta situación, nos parece un error asociar la cantidad de funcionarios y funcionarias, y la ubicación de los mismos, en la estructura, al rol de lo público y lo privado. El objetivo de la IM es, y debe ser, brindarle servicios de calidad y contribuir a la mejor calidad de vida de los y las ciudadanos/as y no mantener un número determinado de funcionarios. Este debe salir en cada División de las necesidades para el cumplimiento con excelencia de los servicios y de acuerdo a las herramientas tecnológicas de las que se disponga. En función de lo antedicho, la Administración reafirma su voluntad de mantener y mejorar sustancialmente la calidad de los servicios municipales. La compra de camiones para la División Limpieza, la renovación de más de 6.000 contenedores, la renovación de la flota del Servicio de Locomoción, de Servicio Fúnebre y Necrópolis, la compra de autoelevadores para los cementerios de Montevideo, la reparación y compra de hornos incineradores, las decenas de obras proyectadas y en marcha utilizando los recursos destinados a Seguridad y Salud Laboral ($25.000.000 anuales). Entre muchas otras inversiones, son demostración palpable del objetivo de mejorar nuestros servicios a la ciudadanía. También debemos decir que, lamentablemente como contrapartida no hemos encontrado en ADEOM el compromiso necesario para asegurar en todos los casos los servicios a los ciudadanos/as. Por esta razón hemos recurrido y lo seguiremos haciendo, a todos los recursos que nos permite la ley, y a todas las herramientas operativas necesarias que nos permitan cumplir con las obligaciones para las que estamos mandatados por la ciudadanía y para las cuales hacemos y haremos todo lo necesario para cumplir.