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Facultad de Humanidades y Artes

Escuela de Antropología de Rosario

Cátedra de Etnolingüística

Trabajo Práctico:

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Alumno: Marcelo Irigoyen

Legajo I-0414/6

Año 2016
Reseñas de los autores que se solicitaron a lo largo de las clases.

Comenzare con el autor que más textos engloba en lo que se nos ha pedido.

Héctor Díaz Polanco.

Etnia, clase y cuestión nacional

Comienza su exposición considerando que los movimientos de este tipo tanto


los étnicos como los nacionales no han desaparecido, sino que se ha
intensificado y han estado ganando un lugar en el desarrollo sociopolítico en
distintos lugares del globo. Se consideraba que las diferencias étnicas se irían
paulatinamente unificando en virtud del concepto del enfoque que la
burguesía tenia considerando que esos mismos, tienden paulatinamente a
civilizarse.
En el marxismo, esa misma homogeneización se hace presente como una idea
de particularidad de que esas minorías serian absorbidas por los más grandes
conjuntos nacionales que ya se habían conformado en estados, con el
consecuente desplazamiento y desaparición de los mismos. Tanto Marx como
Engels siempre estuvieron al tanto del movimiento de esas minorías sentando
bases teóricas de gran interés sobre el tema. No obstante a lo anterior y a
pesar de que se concebía que los mismos irían fusionándose, por el contrario
mostraron una vitalidad casi con carácter revolucionario y que a través del
tiempo se convirtieron en una fuerza social pujante, Si bien hay un corpus
teórico sobre el tema, el autor nos indica que existen ciertas diferencias o
obstáculos al momento de los análisis, por un lado la confusión en el uso de
las nociones de fenómenos diferentes, la imprecisión o incluso el
reduccionismo de muchos de los conceptos y por último, la falta de
historicidad con que son asignadas las categorías de análisis y los fenómenos
que ella designa.
Tras esa introducción, comienza a desandar las relaciones, como la relación
etnia-clase aclarando que se puede encuadrar en cuatro grupos, aquel que
niega reconocimiento de eso étnico como un fenómeno irrelevante , en lo
social o lo político; en segundo lugar el enfoque por el cual lo étnico no es
irreductible a la problemática clasista, sino que además es irrelevante para el
entendimiento del primero, el tercer enfoque por el cual se postula fenómenos
de naturalezas distintas que cuando pasan por otro, se convierten en
fenómenos aun mucho mas distintos, y aclara que este enfoque corresponde a
la visión burguesa. La cuarta posición postula que etnia y clase no son del
mismo orden y que no pueden reducirse a lo mismo, y que además no se
puede esperar esa reducción de etnia a clase como esperan los indígenas. Esta
ultima termina por mantener todos los términos separados con lo cual se
dificulta la vinculación entre ellos.
En lo tocante a etnicidad y etnia, denomina la primera como un término que
por lo general se utiliza para referirse a etnia de Latinoamérica, siendo cuando
se menciona etnicidad, se lo hace para referirse a los grupos étnicos, aclarando
más tarde que sería bueno admitir que todo grupo social que ya está
conformado y puede constituir una etnicidad propia. Por ello, toda clase o
grupo social posee una dimensión étnica propia.
Algo más abajo, considera las condiciones de ocurrencia y los factores
históricos en el análisis, y poder encontrar tras ello, una etnia o grupo étnico.
Así entonces, la etnia no es el contenedor específico de esa etnicidad, es en
cambio el conjunto social que ya ha desarrollado formas de identidad que
enfatizan los componentes étnicos. A pesar de la historia de los lugares donde
están, los grupos étnicos no se mantienen invariables a medida que corre el
tiempo y que puede estar en distintos estadios evolutivos o fases históricas
pero que están sometidos a la dinámica de la historia.
La etnia conjuga un fenómeno que se limita a ciertos grupos que se han
constituido en una clase determinada. Más adelante el autor comienza a
plantear las cuestiones que se relacionan con la nacionalidad, definiendo que el
fenómeno nacional abarca una estructura compleja de clases sociales que ha
establecido relaciones reciprocas asimétricas, una nacionalidad constituye una
formación clasista de distintos componentes étnicos y que intenta definir un
proyecto de autodeterminación dado que se encuentra enmarcada en un
espacio estatal.
Acerca de etnia y su relación con el campesinado, nos dice que por lo general
los grupos forman parte del campesinado y que por lo general se vinculan de
forma socioeconómica a través de un sistema mercantil simple, y que este
mismo sistema mercantil nos permite poder comprender algunas otras cosas
de estos grupos. A su vez, le dan un fuerte vigor y firmeza, a las formas de
identidad étnicas que ya se han comentado.
Tras esto, nos introduce en los conceptos de regionalismo, en la problemática
del espacio y su abordaje desde el hecho del espacio regional, sostiene que
estos espacios explican fenómenos sociales que se motorizan en la etnicidad,
dicho de otro modo, los hechos étnicos y nacionales crean su propio espacio,
el cual es delimitado por la unidad popular que puede constituirse frente o
contra determinadas relaciones sociales. Finalizara considerando que sería algo
vano poder determinar la naturaleza de una etnia, dado que no es un
fenómeno que se da de manera estática, sino de forma dinámica, con un
amplio abanico de variabilidad incluso histórica.

La rebelión zapatista y la autonomía.

I-Autonomía y territorialidad.
Polanco comienza diciéndonos que los países latinoamericanos son
sociedades plurietnicas, aunque el estado nación en el que se encuentran es un
estado mono étnico. Planteara hasta donde existe en el movimiento indio un
concepto de las implicancias de las cuestiones sobre la territorialidad, esta
misma, que es frenada o contrarrestada por el estado donde se encuentran
estas sociedades. Que existe una revolución en lo que a teoría se refiere en
cuanto término como autodeterminación, autonomía, territorio, y
autogobierno, ideas todas que germinan dentro del movimiento indio.
Nos dice que el reconocimiento territorial contiene implicancias que no son
solo políticas, sino también culturales, ecológicas y económicas, que el
régimen de autonomía debería contener lineamientos sobre los vínculos que
tendrá con el estado que los contendría, o sea, los fundamentos para cambiar
la política. Por lo tanto, nos dice que la autonomía no es el programa rector y
la propuesta global que permita organizar un estado multiétnico, con una lista
de demandas. Pero desafortunadamente estas mismas demandas, conformadas
como una lista, es lo que sigue siendo aun en muchos países. Mientras esto
sucede y el tiempo corre, se trata de atacar con todos los medios, incluso
desde el interior de la misma comunidad.

Polanco nos dice que habida cuenta del choque de la conquista en 1492, les
fueron impuestos a los habitantes el lugar de pueblos oprimidos y dominados,
aunque más tarde se adoptaría la forma de un gobierno auto determinado,
aunque con limitaciones y vigilancia por parte de los opresores.
Derivado del proceso colonial, es la creación de la comunidad como núcleo
sociocultural donde se alojaron las nuevas identidades que se habían formado,
y la jerarquía que se forma tras años, deberá vincularse directamente con el
poder español sin que intervenga en ello ninguna comunidad ni estructura
política intermedia. La territorialidad entonces, se vio reducida solamente a la
superficie de la misma comunidad. Más tarde, esa misma comunidad seria
tildada de corporación, sosteniendo que bloqueaba el desarrollo al menos
económico.
Cabe aclarar que estas mismas comunidades han ido desarrollándose a lo largo
del tiempo desde el periodo colonial, adoptando una forma de organización
alternativa a la hegemónica, con una cosmovisión exclusiva que facilita la
relación con el medio ambiente y es mucho menos conflictiva.
Todos estos desarrollos son sumamente valiosos para la humanidad misma,
dado que ellos desarrollaron sus propios sistemas y estrategias de
reproducción aunque la organización comunal enfrenta hoy, el peligro que
representa la globalización.

La rebelión zapatista.

La experiencia autonómica.

Polanco comienza de manera contundente: en la medida en que las


autonomías se perfilen es de esperar que sean combatidas, dado que en ellas
se puede ver una amenaza a otros intereses. La estrategia que el recomienda es
la de centrar e impulsar el proyecto autonómico desde la óptica de la
legitimidad de la misma demanda aborigen. Nos dice que esa misma estrategia
fue la que ellos aplicaron en México, sustentándola en mantener en todo
momento fuera del eje de los problemas técnicos propios de este proceso a
los objetores de estas autonomías. Aunque mas allá de todo, los procesos
autonómicos tienen una lógica consecuencia técnica y de instrumentación que
se debe discutir, Polanco sostiene que todos estos procesos se encuentran en
la matriz del conocimiento público, y político que favorece el dialogo.
Plantea la necesidad de considerar cual serán las escalas de las autonomías,
bajo qué criterios serán delimitados los territorios, como será la resolución de
los conflictos en lo que refiera a la administración de los recursos, y las
implicancias del marco jurídico y político e incluso hasta la modificación de la
carta magna. Polanco sostiene que para poder solucionarlo, se deberá hacer
uso de la imaginación y crear propuestas con revisionismo paradigmático, el
éxito del esfuerzo depende de la capacidad de construir conceptos
transculturales que sean operativos y que puedan efectuar un buen pacto entre
las diversas tradiciones civilizatorias.
Tras ello, Polanco se centrara en los planteos respecto de las escalas de las
autonomías, en lo que refiere a las escalas comunales y a las escalas regionales,
la forma de ambas contienen, cuales son los puntos que se deben considerar
en ambos casos, refiere al principio de simultaneidad, esto es, que el concibe la
autonomía como un sistema que engloba tres niveles, el comunal, el municipal
y el regional. Describirá para terminar, los objetivos de ambos conceptos y
tras ello, nos sumerge en una comparativa entre sistemas autónomos que ya se
ha conformado, en Dinamarca y en Nicaragua considerando algo muy
importante: en ninguno de los dos casos, ninguno de los dos procesos atentó
contra la integridad del estado nacional.

Héctor Díaz Polanco.

Caracoles, la autonomía regional zapatista.


Comienza el autor, mencionando que la creación de los Caracoles abre un
nuevo capítulo en la marcha compleja de los pueblos indígenas en la búsqueda
de su autonomía, Marcos, da cuenta de todos los cambios que se operaron en
las comunidades zapatistas de Chiapas en relación a la práctica de la
autonomía. Aun lograda, se busca una nueva esfera de coordinación
autonómica, que les permita consolidarse en el avance hacia la solidificación
de su auto gobierno. Cuando se publico la Treceava Estela, la sexta parte
informaba que las Juntas del Buen Gobierno, o JBG, se asentarían en los
nuevos Caracoles, conformando con esto, mas allá del hecho en sí, una nueva
conformación cartográfica, un mapa dentro de otro mapa, de cinco regiones.

Polanco nos dice que se tomaron para la división de las regiones los criterios
de la historia y de las relaciones que se consolidaron en el tiempo entre estas
regiones resultantes, y las condiciones para equilibrar el peso de los
municipios y pueblos de esas regiones.
En lo que refiere a la escala regional, el autor nos indica que se afianza la
tendencia a la autonomía a escala regional, tras la instauración de las JBG,
aunque con la llegada de Caracoles, se aceptaría el principio de que los mismos
pueblos deben de construir sus autonomías en todos los niveles y escalas.
Esta es entonces la función de la escala regional, la de coordinar y acorazar el
poder local que está en construcción, por eso es importante para los pueblos
indios.
La autonomía no nace desde abajo, el proceso de construcción autonómica
que se realiza en Caracoles se da en acuerdo al autor a contrapelo del marco
legal dado que tras las reformas de la constitución de 2001 esto no es legal.
Para evita ese movimiento de pasar a contra corriente de la ley es que se debe
sostener el reconocimiento de los pueblos indígenas. Todo lo anterior nos
lleva entonces al punto de la legalidad de los Caracoles y las JBG,
considerando si estos mismos entran en conflicto con las bases legales. En
acuerdo a la base legal del país, tanto los Caracoles como las JBG podrían
constituirse en desobediencia, pero esta desobediencia tendría como objetivo
llamar la atención de la mayoría y convencerla de que esa mala decisión
supone la imposición de una injusticia que debe de ser rectificada.
La autonomía zapatista cumple con todos esos lineamientos legales que la
conformaría en ilegal, pero la precede un acto claro y manifiesto de negación
de sus derechos, considerando que sus autores ya han arbitrado todos los
medios legales para enmendarse sin haber tenido respuesta. De manera que
los Caracoles y las JBG se constituyen como una forma de desobediencia civil
que es válida y legítima ante la falta de reconocimiento de sus derechos.

Los pueblos de Chiapas


Andrés Fábregas Puig

En este caso, comienza Puig, definiendo cuales son las tres tradiciones que
conforman Chiapas, la de los pueblos originarios, la variante europea y la
variante afro antillana. Luego de ello el mismo comenzara con una serie
descriptiva de los distintos grupos, pueblos que se conforman dentro del
territorio de Chiapas, comenzando con descripciones de los troncos
lingüísticos, de la etnografía, el idioma de los mismos, como se conforman las
unidades familiares, algo de su historia y cuanto más o menos debieron de
sufrir el embate del proceso colonial. El primero de los que describe son el
pueblo Zoque, y tras ellos, siendo este primero el más extenso de todos los
descriptos por Puig, continuara con los Choles, Lacandones, Tojolabales,
Chujes, Jacaltecos, Tzotziles, Tzeltales, con quienes el autor cierra una
descripción.

El significado político del zapatismo


Neil Harvey
Los zapatistas sostendrá Harvey, se han mantenido en una lucha pacífica por
la creación de otras formas de vivir y de pensar, desafían a la integridad del
poder mientras practican forma de gobierno autónomas a lo largo del tiempo.
Comparten con distintos movimientos indígenas el problema de cómo poder
cambiar el sistema político nacional y al mismo tiempo, mantener espacios de
autonomía dentro de los cuales se respete el derecho a la diferencia.
Luego el autor nos recordara cuales eran los mecanismos de la dominación
por aquellos días, previos a la rebelión, centrándolo en el corporativismo, el
clientelismo y el caciquismo, describirá y profundizara un poco en cada uno
de ellos para continuar con la línea histórica al momento en el cual se da la
revolución zapatista. Nos explica cómo se gesto el Acuerdo de San Andrés y
lo que representaba, hasta la modificación paternalista por parte del presidente
Fox en 2000. El zapatismo se configura como una forma de poder cuestionar
el poder. Se han configurado en una nueva forma de repensar la política, se
plantea entonces la política de una manera totalmente diferente.
Describirá en el texto las características particulares de cómo es que el
zapatismo muestra la forma en que se hace política desde la dominación, la
propuesta zapatista por el contrario, se encamina en el sentido de que es
posible hacerla sin necesidad de tendencias autoritarias. Nos dice que para los
zapatistas la autonomía es un proceso que se construye a través de la práctica,
y que también la manera de hacerlo puede ser modificada en el tiempo.
Quizá en esto mismo es donde resida el verdadero significado político del
zapatismo, en la necesidad de que se tengan respuestas a los reclamos, y a
favor de la democracia, la justicia y la equidad.
La economía de un sistema de mercados en México

Bronislaw Malinowsky

En este texto, su autor, nos indica que la antropología en México puede y


debe llegar a ser una fuerza vital que de estructura y mejore la política
nacional, social y económica. El dice que se deberá comprender en estas
investigaciones, la totalidad del aborigen, esto es, todas las contras y ventajas
que tienen hoy día, por eso la investigación abarca casi el día a día, los asuntos
ordinarios, combinando la descripción de fases vitales con el análisis de
procesos económicos, sociológicos y educativos.
Estudiara la completa realidad cultural seleccionando la generalidad del
principio, pero no por el mero encanto de la antigüedad de los indígenas. Su
objetivo de estudio nos expone el autor, es un trabajo de campo abierto,
antropológico y sociológico, inspirado en el reconocimiento del criterio de
aplicabilidad y de valor práctico.
El enfoque funcional combina el interés histórico con la orientación práctica y
científica, se dirige a efectuar una investigación histórica en el campo de
científico y en el sentido de la economía y la sociología, la jurisprudencia y el
gobierno. Por todo esto mismo es que el selecciono el sistema de mercados
del Valle de Oaxaca, dado que allí es donde se puede estudiar a la gente, sus
objetos materiales y los valores y costumbres que se exhiben en acuerdo a
Malinowsky, como en un museo, dramático y efímero.
Es un lugar donde de acuerdo a su observación, es mucho más fácil
considerar cual es el pulso de la economía dentro de una región y desde la cual
pueden seguirse las corrientes de la vida económica y de lo que entra y sale de
ella.

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