Análisis semiótico de la música y el discurso

Music and Discoursive Toward a Semiology of Music es libro que recoge años de
investigaciones del semiólogo canadiense Jean Jaqcues Nattiez, uno de los
pioneros de esta disciplina. El libro, publicado originalmente en francés en
1987, y traducido luego al inglés en (1990 por Carolyn Abbate con edición de
Princeton University Press de New Jersey), es una suerte de revisión crítica de los
estudios que él y varios semiólogos han realizado acerca la materia.

La música, considerada un arte, medio de expresión y posiblemente la

representación máxima de la creatividad humana. Es este arte se aprecia la
complejidad en su composición, con una variedad rica en significado y
simbolismo. Además tiene una capacidad infinita para ser interpretada, Es
decir, una obra musical jamás será interpretada de la misma manera por el
ejecutante y el receptor, esto radica en diferentes factores como: los contextos
inherentes del individuo, el marco de creencias o incluso las emociones que
se tengan al momento de apreciar la obra.

Ahora bien ¿cómo se podría comprender? ¿Que la hace tan interesante y

complicada? para responder estas incógnitas nos remitiremos al trabajo de
Jean Jaques Nattiez. Que por medio de la semiología nos permite analizar el
discurso musical o como él lo denomina una semiología de la música.

Según Nattiez “Para analizar la complejidad de la música es necesario

observarla desde varios puntos de vista y así se consumara el análisis
en su totalidad. Esto, es llamado el “hecho musical total”, el cual lo
conforman tres etapas o niveles: el inmanente o neutral (que es la obra
como texto o estructura, el nivel poiético (es decir, los procesos
compositivos para la creación de la obra), y el nivel estético (el nivel de
los interpretantes y el receptor de la obra)”. (1987)

Cabe recalcar que el objetivo de la semiología pretende demostrar la relación

entre el poiético y el estético frente a la obra material. Por ende el análisis se
inicia por describir los elementos que constituyen la obra y así se da el
ambiente necesario para que con los campos poético y estético puedan
vincularse. Al respecto se puede retomar, “El análisis musical convencional se
reduce a una descripción de las propiedades inmanentes de la obra. Es la
posición que toman los estructuralistas puros, y en general, la de muchos
teóricos y musicólogos”. (Nattiez 1990)

Se considera importante e interesante que la semiología de la música de Jean

Jacques, que explica el concepto de música más como una representación
simbólica que como un lenguaje. Esto se debe a su naturaleza asemántica. Lo
anterior puede ser asociado directamente a Pierce y su definición de signo que
nos dice que el signo se identifica con el significante. Es decir lo que saussure
llama imagen acústica, así el referente del significante ya no es un significado
si no que se convierte en otro signo

La semiología del discurso sobre la música:

para completar el análisis de la música hacia una semiología, Es imprescindible
analizar los discursos que habitan en ella, esto comienza con la capacidad
que el lenguaje tiene para hablar de la música, verbalizarla. Para consumar el
análisis discursivo, Nattiez plantea la consideración de algunos aspectos
antes de abordar cualquier análisis musical: las dimensiones del corpus estudiado, y
la correspondiente consciencia que hay de su contra corpus; el nivel de relevancia estilística
entre las propiedades particulares de una obra y los universales de la música; la situación
analítica que ha sido adoptada; y el estilo analítico que se ha escogido.

En conclusión, la música nos transporta a nuevos campos del razonamiento y es a partir

de estas expresiones en donde se logra consolidar el espíritu creativo. Que , para mí, es la
representación máxima de la humanidad , además se enfatiza como máxima general la
búsqueda del saber, esta búsqueda, que nos lleva a caminos desconocidos pero
sustanciosos, y que no nos deja descansar hasta que todas las preguntas estén resueltas.El
autor es ingenioso y bastante generoso al darnos este análisis semiológico de la música lo
cual nos da nuevas perspectivas y de alguna manera cambia los parámetros que de
alguna manera pueden estar establecidos.
Bibliografía