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Ya está visto que la solución al problema de la relación fe-razón pasa en Agustín por la
subordinación de la razón (y por lo tanto de la filosofía), a la fe (y, por lo tanto, a la teología).
1) Por algunos de sus contenidos: aun cuando el objeto final de las cosas sea Dios, hay un
campo que es específico de la razón: las verdades del mundo natural, y uno específico de la fe:
los artículos de fe.
2) por el método de que se valen para acceder a los mencionados contenidos: la razón se vale
de la abstracción, mientras que la fe se vale de la revelación. Aunque ciertamente hay cosas
que se pueden conocer simultáneamente a través de la razón y de la fe.
No hay contradicción entre ambas: para empezar Dios es el autor de todo, del mundo
natural accesible para la razón y del sobrenatural accesible para la fe; pero además Dios es el
autor de la misma fe y de la misma razón. Sin embargo, a veces hay contradicciones entre fe y
razón, en este caso Tomás de Aquino sostiene que la contradicción sólo puede ser aparente y
habrá que revisar la razón, debido a que la fe no puede engañarnos en ningún caso, puesto
que es revelación divina.
Hay una zona de confluencia entre ambas. Tomás niega que la fe y la razón puedan conducir
a dos tipos de verdades contradictorias entre sí. Ahora bien, admite que hay dos tipos de
verdades independientes también entre sí:
1.- Aquellas a las que sólo se puede acceder a través de la fe: a este tipo de verdades le llama
artículos de fe, y son verdades tales como que Dios es uno y trino.
2.- Aquellas que son dominio exclusivo de la razón: las que tratan del mundo natural.
Pero junto a este tipo de verdades que son materia exclusiva de la fe o materia exclusiva de la
razón, Tomás admite un tercer tipo de verdades a las que se puede acceder desde los dos
ámbitos: a este tercer tipo de verdades les llama preámbulos de la fe, y son verdades tales
como que Dios existe, que es uno, que es creador del mundo, etc. En este tipo de verdades
confluyen fe y razón.
La confluencia de fe y razón se produce porque Dios ha revelado verdades que la razón podría
descubrir por sí misma. ¿Por qué ha hecho esto?; ¿por qué ha revelado verdades que la razón
es capaz de descubrir por sí sola? Porque hay un determinado tipo de verdades (ejemplo: Dios
existe) que son necesarias para la salvación. Tales verdades pueden ser descubiertas por la
razón pero el procedimiento es complejo y no está al alcance de todos los hombres; por lo
que, si Dios no revelase tales verdades, muchos hombres serían condenados, al no disponer de
tiempo o de inteligencia para descubrirlas.