Contrato de empleado público

Se entiende como contrato de empleado público en Venezuela aquella

relación contractual que sujeta al empleado respecto del estado. Es decir, el
empleado que tiene un contrato de empleado público en Venezuela es el que
trabaja como funcionario en alguna de las administraciones del estado.

Si estás interesado en encontrar trabajo en este sector, puedes buscar en

algunos directorios que encontrarás en Internet, como por ejemplo en la página
web empleate.com, donde encontrarás bolsas de trabajo y los datos que necesitas
obtener acerca de los empleos del sector público en Venezuela. Algunos de los
órganos e instituciones en los que puede optarse a un contrato de empleado
público en Venezuela son los Ministerios, como el de Trabajo y el de Ciencia y
Tecnología, empresas públicas de Venezuela como Hidroven o SISDEM (Sistema
para la Democratización del Empleo de Petróleos de Venezuela, S.A.), u otros
organismos como el Centro Nacional de Tecnologías de Información, el Banco
Central de Venezuela o el Instituto Venezolano del Seguro Social.

Obtener un contrato de empleado público en Venezuela garantiza tener un

empleo fijo, buenas condiciones laborales en cuanto a horarios y remuneración,
además de posibilidades de ascender.

Eso sí, no es fácil llegar a conseguir un contrato de empleado público en

Venezuela ya que son pocas las plazas y muchos los interesados en llegar a ellas.
Se requiere que los aspirantes estén muy bien preparados, estudiando
oposiciones, para acceder al puesto deseado y, además, una dosis de suerte.
Pero no por ello hay que renunciar a intentarlo, ya que, si se consigue, son
muchas las ventajas de tener un contrato de empleado público en Venezuela. Los
empleados en organismos públicos o funcionarios realizan tareas regidas por unos
estatutos propios, ajenos a los convenios de las empresas privadas. El estado se
responsabiliza del sueldo de todos aquellos que dispongan de un contrato de
empleado público en Venezuela y existe, por tanto, una mayor seguridad a la hora
de conservar el puesto y recibir la remuneración adecuada sin restricciones ni
aplazamientos.

También tienen derecho a ausentarse del trabajo sin que el sueldo se vea
afectado por una serie de circunstancias personales, como por ejemplo por
matrimonio, exámenes oficiales, traslado de domicilio… Por otro lado, tener un
contrato de empleado público en Venezuela hace difícil que pueda
compatibilizarse el trabajo con un segundo empleo o realizar actividades
empresariales privadas que puedan entrar en conflicto con las responsabilidades
públicas del funcionario.

Por supuesto, el hecho de tener un contrato de empleado público en

Venezuela da muchas ventajas pero no impunidad. Los funcionarios pueden ser
sancionados o incluso despedidos si cometen alguna falta. Por supuesto, la
sanción siempre estará relacionada con la gravedad de la falta cometida. Las
sanciones pueden ser civiles, cuando causan daños a la Administración o a
terceros, o penales cuando pasan a convertirse en un acto delictivo. Tener un
contrato de empleado público en Venezuela es, pues, tener un cargo de
responsabilidad, para llegar al cual es necesario prepararse y formarse mucho
pero que, una vez logrado, cuenta con muchas ventajas que valen realmente la
pena.