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MOVIMIENTOS

SOCIALES
Para Wladimiro della Porta y Vittorio Diani, en memoriam
SOCIAL
SEGUNDA EDICIÓN

MOVIMIENTOS
Una INTRODUCCIÓN
DONATELLA DELLA PORTA
Y MARIO DIANI
© 1999, 2006 por Hacernatella della Porta y Mario Diani
BLACKWELL PUBLICANDO
350 Calle Principal, Malden, MA 02148–5020, EE.UU.
9600 Garsington Carretera, Oxford OX4 2DQ, Reino Unido
550 Swanston Calle, Carlton, Victoria 3053, Australia
El correcto de Donatella della Porta y Mario Diani para ser identificado como los
Autores de este Trabajo ha sido afirmados de acuerdo con el Copyright de Reino
Unido, Diseños, y Acto de Patentes 1988.
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permitted por el Copyright de Reino Unido, Diseños, y Acto de Patentes 1988, sin el
permiso previo del editor.

Primera edición publicó 1998


Segundo editiencima publicó 2006 por Blackwell Editorial Ltd
1 2006
Biblioteca de Catalogación de Congreso-en-
Dato de Publicación Della Porta, Donatella,
1956–
Movimientos sociales : una introducción / Donatella della Porta y Mario
Diani. – 2.º ed.
p. Cm.
Incluye bibliographical references y índice.
ISBN-13: 978-1-4051-0282-7 (pbk. : alk. Papel)
ISBN-10: 1-4051-0282-9 (pbk. : alk. Papel) 1. Movimientos sociales. Yo.
Diani, Mario, 1957– II. Título.
HN17.5.D45 2006
303.48¢4 – dc22
2005011636
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Kong Imprimió y atado en el Reino Unido
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CONTENIDOS

Prefacio a la Segunda Edición vii

1 El Estudio de Movimientos Sociales: Recurring Cuestiones,


(Parcialmente)
Cambiando Respuestas 1
Cuatro Cuestiones de Núcleo para Análisis de Movimiento
1.1 Social 5
1.2 Qué es Distintivo sobre Movimientos Sociales? 20
1.3 En Este Libro 29
2 Cambios Sociales y Movimientos Sociales 33
2.1 Estructura social, Político Cleavages, y Acción Colectiva 36
2.2 Estados, Mercados, y Movimientos Sociales 42
2.3 Conocimiento, Cultura, y Conflictos 47
Transformaciones estructurales, Conflictos Nuevos, Clases
2.4 Nuevas 52
2.5 Resumen 62
3 La Dimensión Simbólica de Acción Colectiva 64
3.1 Cultura y Acción: La Función de Valores 67
3.2 Cultura y Acción: La Perspectiva Cognitiva 73
3.3 Problemas y Respuestas 85
3.4 Resumen 87
4 Acción Colectiva e Identidad 89
4.1 Qué Hace Trabajo de Identidad? 93
4.2 Identidades múltiples 98
4.3 Hace la identidad Facilita Participación? 100
4.4 Cómo Es la identidad Generada y Reprodujo? 105
4.5 Resumen 113
5 Individual, Redes, y Participación 114
Por qué Hacer las personas Consiguen Implicadas en Acción
5.1 Colectiva?
La Función de Redes 117
vi CONTENTS

5.2 Hacer Redes Siempre Asunto? 121


5.3 Individual y Organizaciones 126
5.4 Participación individual, Subculturas de Movimiento,
Y Redes Virtuales 131
5.5 Resumen 134
6 Movimientos Sociales y Organizaciones 135
6.1 Dilemas organizativos en Movimientos Sociales 140
6.2 Tipos de Organizaciones de Movimiento Social 145
6.3 Qué Hacer Cambio de Organizaciones de Movimiento Social? 150
De Organizaciones de Movimiento a Redes de Movimiento
6.4 Social 156
6.5 Resumen 161
7 Formas de Acción, Repertorios, y Ciclos de Protesta. 163
7.1 Protesta: Una Definición 165
7.2 Repertorios de Acción 168
7.3 Las Lógicas y Formas de Protesta 170
7.4 Protesta y Opciones estratégicas 178
7.5 Los factores que Influyen Elección de Repertorio 181
7.6 El Cross-Difusión Nacional de Protesta 186
7.7 Ciclos de Protesta, Olas de Protesta, y Campañas de Protesta 188
7.8 Resumen 191
8 El Policing de Protesta y Oportunidades Políticas para Sociales
Movimientos 193
8.1 El Policing de Protesta 197
8.2 Instituciones políticas y Movimientos Sociales 201
8.3 Prevaleciendo Estrategias y Movimientos Sociales 206
8.4 Aliados, Adversarios, y Movimientos Sociales 210
Discursive Oportunidad y el Sistema de Medios de
8.5 comunicación 219
8.6 Resumen 221
9 Movimientos Sociales y Democracia 223
9.1 Estrategias de Movimiento social y Sus Efectos 226
9.2 Cambios en público Política 229
9.3 Movimientos sociales y Cambios Procesales 233
9.4 Movimientos sociales y Teoría Democrática 239
9.5 Democratización y Movimientos sociales 245
9.6 Resumen 248

Notas 250
Referencias 261
Índice de Nombres 329
Índice de Temas. 341
PREFACIO Al
SEGUNDA
EDICIÓN

Muchas cosas han pasado desde la primera edición de este libro aparecido en
enero 1999. Sólo unos cuantos meses más tarde, en noviembre del mismo año,
qué habría devenido sabido como “la batalla de Seattle” dibujó opinión pública
atten-tion en todo el mundo hacia el reto sostenido que coaliciones anchas de
muy het-erogeneous los actores montaban contra neoliberal globalización y sus
protagonistas institucionales principales, como el IMF o el WTO. De repente,
neolib-eralism girado de ser considerado como el camino posible único a
desarrollo, en la base de la TINA ( hay No Alternativo [a mercado libre])
dogma y el tan-llamó “consenso de Washington,” a un altamente discutido e
increasingly opción impopular. Principal financiers, economistas, y
policymakers así como dirigentes políticos a través del izquierdos–el espectro
correcto estuvo afrontado con la reclamación que otro mundo era de hecho
posible.
El tiempo dirá si el últimos pocos años tienen actoually visto la aparición de una
fuerza política importante nueva, en la forma del movimiento de justicia global(s) activo
a través de los cinco continentes. Pensamos que tienen, cuando intentaremos señalar
fuera durante este libro, pero podríamos ser incorrectos. Cualquier cosa el caso, los
últimos años ciertamente han visto los problemas nuevos que surgen para analistas de
movimiento social, y allí-fore también para a un libro le gustar el nuestro. La primera
edición de Movimientos Sociales era fuertemente embedded en, y reflectante de, la
experiencia de los “movimientos sociales nuevos”: that es para decir, los movimientos
qué había desarrollado desde el tardío 1960s en asuntos como los derechos de las
mujeres, relaciones de género, protección medioambiental, etnicidad y migración, paz
y solidaridad internacional – con un fuerte (nuevo) base de clase mediana y un clear
diferenciación de los modelos de de clase trabajadora o nación-alist acción colectiva
que hubo históricamente les precedió. Mientras hay seguramente continuidades entre
aquellos movimientos y la ola actual de campañas de justicia global, hay también
muchos suggestions que los patrones globales de collec-tive acción muestran es
significativamente diferente de aquellos habíamos crecido accus-tomed a. Después de
que muchos años “en el doldrums,” para tomar prestado Leila Rupp y Verta la expresión
adecuada de Taylor, la acción de clase trabajadora parece para estar de vuelta con un
viii PREFACE Al S ECOND EDITION

Venganza; encima todo, movilizaciones por el dispossessed (ser ellos unskilled


trabajadores en ocupación precaria en los EE.UU., las poblaciones afectaron
por hambruna y enfermedad en Sudán Del oeste, o las comunidades locales
acecharon por diques nuevos en India) ha obtenido visibilidad y atención
crecientes. Derechos de supervivencia básica y sociales titular-ments parece
para jugar una función más equilibrada en movilizaciones contemporáneas, a
lo largo de-lado más postmaterial unos, relacionados a calidad de vida, que era
el caso en el pasado reciente.
No es para nosotros para hablar aquí si el oblivion en qué acción colectiva
en desigualdad social ha quedado antiguamente las décadas se debió a su
pertinencia disminuida real, o a descuidos en la parte de movimiento más social
investigadores (seguramente no todo, cuando a personas les gusta Colin Barker
o Paul Bagguley en el Reino Unido o Judith Stepan-Norris, Maurice Zeitlin,
Rick Fantasia, Kim Voss, o Gio-vanni Arrighi en los EE.UU. han
constantemente nos recordé). Cualquier manera, el conse-quence para esta
edición nueva de Social Movements ha sido que el contexto dentro cuál
habíamos localizado nuestro trabajo apareció a nosotros, después de que sólo
cinco años, muy dif-ferent. Nuestra primera respuesta ha sido aquello de
cambiar la mayoría de los ejemplos de col-lective-procesos de acción con qué
empezamos cada capítulo del libro. En esta edición nueva mayoritariamente
refieren a casos de conflictos o experiencias personales de activismo, de alguna
manera enlazado con campañas de justicia global o quizás mobi-lizations en
una escala transnacional. Adaptando nuestro marco conceptual ha sido,
unsurprisingly, lejos más difícil. Al final, hemos ido para un “mini-malist”
solución: en vez de probar para formular una aproximación radicalmente
nueva, inspirado en los fenómenos nuevos, hemos mostrado cómo las
categorías analíticas establecidas podrían ser utilizadas y – cuándo necessary
– modificados a cuenta para desarrollos recientes.
El grado al cual hemos sido exitosos es evidentemente un asunto para los
lectores para evaluar. hay sin duda, aun así, que somos tan habituales indebted
a muchas personas que, en maneras diferentes, ha hecho esto un libro mejor
que él habrían sido otherwise. En Blackwell, Susan Rabinowitz primero y Ken
más tardío Provencher ha probado ambos paciente y supportive editores,
mientras Hank Johnston nos ha presentado con un exceptionally revisión
minuciosa y útil de our primer borrador. Tres colegas anónimos revisaron
nuestra propuesta para la segunda edición, otra vez proporcionando consejo e
idea valiosos. Entre miembros de nuestro “círculo interior,” nos gustaría ante
todo mencionar Echar Tilly para su relent-menos, crítico appreciation. Gracias
También a Massimiliano Andretta, Delia Baldas-sarri, Colin Barker, Bob
Edwards, Olivier Fillieule, Marco Giugni, Doug McAdam, John McCarthy,
Hanspeter Kriesi, Lorenzo Mosca, Friedhelm Neid-hardt, Alessandro
Pizzorno, Herbert Reiter, Chris Rootes, Dieter Rucht, David Snow, y Sidney
Tarrow. Finalmente, Christina Tischer probó un ayudante muy fiable con la
bibliografía del libro, mientras Sarah Tarrow nada para averiar su reputación
como un editor de lengua excepcional en capítulos 2 y 7–9.
PREFACE Al S ECOND EDITION ix

Acknowledgments

Partes de secciones 5.2 y 5.3 anteriormente aparecidos en M. Diani, “Redes y


Participación,” en El Blackwell Compañero a Movimientos Sociales, editados
por D. Snow, S. Soule, y H. Kriesi (Oxford: Blackwell, 2004), pp. 339–59. La
prensa editorial il Mulino graciously concedió permiso para reproducir
materiales que originalmente aparecidos en M. Bianchi Y M. Mormino,
“Militanti di Se Stesse. Il Movimento delle Donne Un Milano,” en Altri Codici,
editado por Un. Melucci (Bologna: il Mulino, 1984), pp. 159–60.
1
EL ESTUDIO DE
MOVIMIENTOS SOCIALES:
RECURRING CUESTIONES,
(PARCIALMENTE)
CAMBIANDO RESPUESTAS

En el tardío 1960s, el mundo aparentemente experimentaba profundo, dramático


transfor-mations – incluso una revolución, algunos pensaron. Derechos civiles
americanos y antiwar movimientos, el Mai 1968 repugna en Francia, alumnado'
protestas en Alemania, Gran Bretaña, o México, el trabajador–estudiantil
coalitiones del 1969 “Otoño Caliente” en Italia, el pro-movilizaciones de
democracia en ubicaciones como diversos como Madrid Franquista y Praga
comunista, el crecimiento de catolicismo crítico de América Del sur a Roma, las
señales tempranas de las mujeres es y medioambientales movements aquello forma
la política nueva del 1970s: todos estos fenómenos – y muchos más – sugirió que
los cambios profundos eran en el haciendo.
Consiguientemente, el estudio de movimientos sociales desarrolló en un
unpre-cedented paso a una área importante de búsqueda. Si, al final del 1940s,
críticos lamented el “crudely nivel descriptivo de comprensivo y una carencia
relativa de teoría” (Strauss 1947: 352), y en el 1960s renegó que “en el estudio
de cambios sociales, los movimientos sociales han recibido relativamente poco
emphasis” (Killian 1964: 426), por el mid-1970s, la búsqueda a acción
colectiva estuvo considerada “una de las áreas más enérgicas de sociología”
(Marx y Madera 1975). Al final de los 1980s comentaristas hablaron de “una
explosión, en los últimos diez años, de theoretical y escrituras empíricas en
movimiento social-ments y acción colectiva (Morris y Arenque 1987: 138; ve
también Rucht 1991un).
Hoy, el estudio de movimientos sociales es solidly establecido, con especializó
revistas, serie de libro, y asociación profesionals. La emoción y opti-mism del
rugiendo 1960s puede ser mucho tiempo ido, pero acontecimientos sociales y
políticos sobre las últimas cuatro décadas haber difícilmente rendered la
investigación de grassroots activismo cualquier menos pertinente o urgente. A los
movimientos contrarios, sociales, acciones de protesta, y, más generalmente,
organizaciones políticas unaligned con los partidos políticos importantes o los
sindicatos han devenido un componente permanente de democracias Occidentales.
Es ya no posible de describir política de protesta, grassroots participación, y retos
simbólicos como “unconventional.” En cambio, referencias a un “movimiento
2 TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS

La sociedad” parece cada vez más verosímil (Neidhhardt y Rucht 2002;


Melucci 1996; Meyer y Tarrow 1998b).
Para ser seguro, ha habido fluctuación considerable en la intensidad de collec-
tive acción sobre este periodo, tan ha habido en su grado de radicalismo, su spe-
cific formas, y su capacidad de influir el proceso político. Aun así, previsiones que
la ola de protesta del tardío 1960s deprisa subside, y que “busi-ness como
habitual,” cuando representado por interés-política basada, organizado según
divisiones políticas tradicionales, regresaría en su despertar, en gran parte ha sido
probado mal. En maneras diferentes, y con una gama ancha de objetivos y valores,
varias formas de protesta han continuado emerger en años recientes (Kriesi et al.
1995; Beissinger 2002; Titarenko, McCarthy, McPhail, y Augustyn 2001; Smith y
Johnston 2002; Fillieule y Bennani-Chraibi 2003; Giugni 2004). No sólo aquello:
en el inicio del milenio nuevo, posiblemente por primera vez desde entonces 1968,
la ola de movilizaciones para una globalización desde abajo (a menudo identificado
como el movimiento de justicia global), parece para tener el potencial para un
global, generalized chal-lenge, combinando temas propio de movimientos de clase
con temas propio de movimientos sociales nuevos, gusta ecología o igualdad de
género (Arrighi, Hopkins, y Waller-stein 1989; Fox y Brown 1998; Brecher,
Costello, y Herrero 2000; Walton y Seddon 1994; Pianta 2001b; Wieviorka 2003;
della Porta, Andretta, Mosca, y Reiter 2005; Madera 2004; Tarrow 2005).
En verdad, asociando expresiones como “movimiento de justicia global”
con unitario, homogeneous los actores serían muy misleading. Las iniciativas
contra neola globalización liberal es muy heterogénea, y no necesariamente
conectado a cada cual otro. Dirigen una gama de asuntos, de la explotación de
trabajo de niño por marcas globales a deforestación, de derechos humanos en
países en desarrollo a intervención militars por poderes Occidentales. Y hacen
tan en una miríada de formas, de enunciaciones individuales de disentir y
comportamiento individual para concentrar acontecimientos colectivos, y de
una variedad de puntos de vista. Mirando en ellos bien ilustra qué haciendo
“análisis de movimiento social” de hecho significa. En su práctica de
búsqueda, la mayoría de las personas quiénes estudian los movimientos
sociales centran cualquiera en individual, organiza-tions, o acontecimientos,
en los casos mejores intentando capturar el interdependence entre ellos.
Primero, oposición a neoliberal la globalización puede ser mirada en cuando el
ensemble del individual que expresan opiniones sobre asuntos seguros, defendiendo u
opposing cambio social. La globalización ha seguramente levantó miedos y esperanzas
en medida igual, pero el equilibrio ha distribuido unequally a través de países y áreas
socioeconómicas. Repetidamente, encuestas de opinión pública indican preocupaciones
difusas sobre el impacto de globalización en las vidas de las personas, tanto
económicamente y políticamente. A pesar de que esto puede ser más diffused una
preocupación en Europa occidental que los EE.UU. o aún más tan en otro lugar, la
globalización es indudablemente en el núcleo del interés de la opinión pública estos
días (Inglehart 1999; Magnífico y Kull 2002; Noland 2004). Quienes son escépticos y
a menudo hostiles a él representa un distinto y vocal
TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS 3

Sector de opinión pública. Sus vistas están forjadas y reforzados en diálogo con
una gama de prominente opinionmakers y figuras públicas, exponiendo los costes
y culpas de globalización de un Occidental/Northern así como una perspectiva/ Del
sur Oriental, como escritor indio Arundhati Roy, Philippine sociolo-gist Walden
Bello, periodista australiano John Pilger, o economista y Nobel lau-reate Josef
Stieglitz. A Libros les gusta Naomi Klein es Ningún Logotipo (1999) puede ser sin
incidentes abonado con el mismo impacto que la primavera Silenciosa de Rachel
Carson (1962) o el Club del informe de Roma en Los Límites a Crecimiento
(Prados, Randers, y Behrens 1972) tuvo en el spread de preocupaciones
medioambientales atrás en el 1960s y 1970s.
Oftentimes, preocupaciones y opiniones individuales convierten en varias
formas de polit-ical y participación social. Moral y filosófico worldviews y
profundamente sentía las condenas son entonces paralleled por intentos concretos
por individual para parar amenaza-ening desarrollos, rojosress casos de injusticia,
promueve opciones alternativas al dirigiendo de vida social y actividad económica.
Una manera posible de mirar en el movimiento de justicia global es, entonces, por
centrar en aquellos individual quién activamente expresa su oposición a neoliberal
control de transformaciones globales. Por firmar petitions pidiendo la anulación de
países en desarrollo' deuda, contribuyendo dinero a las actividades de
organizaciones como Attac o Greenpeace, mobilizing para parar el edificio de
diques en India o deforestation en Brasil, protestando en comportamiento policial
en Genoa en julio 2001, intentando para parar los barcos que exportan residuos
tóxicos a países en desarrollo o entrena llevar equipamiento militar en preparación
para el 2003 ataque encima Iraq, los ciudadanos individuales pueden contribute a
las campañas contra neoliberal globalización. Pueden hacer tan, aun así, también
a través de acciones qué afectar estilos de vida individuales y privados behav-ior
tanto – y posiblemente más – que la esfera pública. Durante el Del oeste, los años
recientes have vistos el spread de organizaciones de comercio justo y prácticas. Por
consumir productos seguros o escogiendo hacer empresariales sólo con bancos
com-mitted a uphold estándares morales y éticos, el individual pueden intentar
afectar el equilibrio de poder económico en una escala ancha (Micheletti, Follesdal,
y Stolle 2003; Forno y Ceccarini próximo).
Aun así, antiglobalization difícilmente puede ser reducido a conjuntos de
individual con comportamiento y vistas similares. Más que concentrar en
individual characteris-tics, pueda also estar interesando para concentrar en las
propiedades de acontecimientos featur-ing conflictual interacciones entre
powerholders y sus adversarios; así como acontecimientos en qué individual y las
organizaciones que identifican con una causa conoce para hablar estrategias, a
elaboplataformas de índice, y para revisar sus órdenes del día. Activistas de justicia
global han sido particularmente bien en escenificar acontecimientos o
interrumpiendo oppo-nents' acontecimientos, con un impacto emocional fuerte en
participantes y opinión públicos igualmente. Ya antes de que Seattle, periodical
reuniones por cuerpos internacionales associ-ated con el neoliberal orden del día,
como la Organización de Comercio Mundial, el Fondo Monetario Internacional, el
Banco Mundial, o el G8, ha proporcionado la oportunidad para una cuerda de
altamente visible, muy bien-atendido demonstrations
4 TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS

Probando a ambos interrumpir las reuniones concretas y la atención para alterar de


personas de sorteo-órdenes del día nativos (Podobnik 2004). Los acontecimientos
promovieron por activistas de justicia global, más notablemente las reuniones de
Foro Sociales Mundiales en Porto Alegre y en Mumbai, su europeos counterparts
en Florence (2001), París (2003), o Londres (2004), las reuniones correspondientes
en el Del sur, como el Foro Social africano que conoció primero en Bamako, Malí,
en enero 2002, tiene todo confirmó la vitalidad y fuerza del “movimiento de
movimientos” (Pianta 2001un). Encima febrero 15, 2003, hun-dreds de antiwar los
acontecimientos a través de los globos generaron qué probablemente ha sido la
manifestación política coordinada más grande en historia, con opponents del ataque
encima Iraq que toma a las calles en millones a través de cinco continentes
(Walgrave y Rucht próximos). Bajo el nivel global, los críticos de globalización
han pro-moted miles de acontecimientos, variando de confrontational
manifestaciones a pre-sentations de informes o notas de prensa, de religiosos vigils
a en cuclillas en edificios militares. Localizado anywhere del nacional a los niveles
muy locales, aquellos acontecimientos también apoyan vistas populares sobre la
existencia de un distintivo antiglobalization movement.
Otro tiempo, por “movimiento de justicia global” significamos, en primer
lugar, las organizaciones que operan en aquellos asuntos. La oposición a neoliberal
globaliza-tion ha sido conducido por coaliciones anchas de organizaciones,
normalmente con una base transnacional (Bystydzienski y Schacht 2001; Bandy y
Herrero 2004). Algunos – probablemente más – de ellos tuvieron una historia larga
de activismo político y social, bien extendido sobre el espectro político. En Seattle
así como en Genoa o en otro lugar, establecido político parties estuvo implicado
en las manifestaciones, mayoritariamente si no exclusivamente del izquierdos; así
que era sindicatos, labradores, y otros trabajadores' organizaciones; las
organizaciones étnicas que representan ambos nativos popula-tions y grupos
emigrantes; asociaciones de consumidores challenging compañías de
multinacional; iglesia y organizaciones religiosas grupos; grupos
medioambientales; las asociaciones de las mujeres; centros de jóvenes autónomos
radicales (Italia “centri sociali'); y el gustar. Pero la crítica de neoliberal la
globalización ha también productod spe-cific organizaciones, entre qué Attac,
quiénes defienden el tan-llamados Tobin impuesto para reducir beneficios
financieros en el mercado de valores internacional; la acción Global de las
personas, una coalición de centenares de grupos en el Del norte y el Del sur; o el
Rete Lil-liput, un network de grupos, asociaciones, y el individual activo en Italia
en envi-ronmental, comercio justo, y asuntos de justicia social. La función de
organizaciones que no es directamente político es particularmente el valor que
menciona. El spread de prácticas de comercio justo es facilitated por la existencia
de extendió redes de cooperativas y operadores minoristas pequeños en el Del
oeste, quiénes prueban de alguna manera para lograr un equilibrio entre ethic-
acción pública conducida y requisitos de mercado. La reproducción de coun-
tercultural las redes que enlazan radical activistas de por todas partes el sitio es así
mismo facilitado por la existencia de cafeterías alternativas, librerías, sociales y
casales, ofreciendo puntos de encuentro – así como en alojamiento de tiempo – a
las personas que identifican con radicales milieus. De un totaliado perspectiva
diferente, la red
TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS 5

De escuelas islámicas, mezquitas, y otras instituciones que ofrecen soporte a funda-


mentalist versiones de Islam también puede ser considerado cuando
proporcionando la infraestructura organizativa para la difusión de aquella versión
particular de la oposición a globalización Occidental (Fillieule y Bennani-Chraibi
2003; Lubeck y Reifer 2004; Langman 2004). Cualquier cosa su especificidad,
organizaciones continuidad segura a ión de actocolectivo incluso cuándo el
potencial para espontáneo, unmediated par-ticipation de alguna manera subsides.
También proporcionan recursos y oportunidades para acción a escalate cuándo las
oportunidades son más favorables; así como fuentes para la creación y
reproducción de loyalties e identidades colectivas. Mientras recog-nizing la
importancia de las organizaciones que operan dentro de movimientos, no
tendríamos que hacer la equivocación de identificar el último con el anterior. Tan
lejos, el movimiento de justicia global ha sido menos expuesto a este risk que otros
movimientos, p. ej., ecologismo, donde a organizaciones transnacionales grandes
les gusta Greenpeace, WWF, o los amigos de la Tierra han a menudo acabó robar
el espectáculo – si quizás a disgusto.

1.1 Cuatro Núcleo Cuestiones para


Análisis de Movimiento Social

Cuandoth e ejemplo de la justicia global que hace campaña sugiere, estudiando


movimiento social-ments significa centrar encima al menos algunos de las
dimensiones hemos justo intro-duced, así como, muy en particular, encima
cómo ideas, individual, acontecimientos, y las organizaciones están enlazadas
a cada other en procesos más anchos de acción colectiva, con alguna
continuidad con el tiempo. Dado su complejo, naturaleza multidimensional, es
ninguna sorpresa que los movimientos sociales pueden ser acercados en
referencia a muy diverso cuestiones intelectuales. En este libro, nosotros
shtodos centran encima cuatro conjuntos de ellos, en términos generales
articuló. Intentaremos relacionar les al más anchos teóricos y prácticos se
preocupa aquello ha inspirado el análisis de grassroots acción política y
resistencia cultural desde el 1960s.
El primer conjunto de questions refiere a la relación entre transformaciones y
cambio estructurales en patrones de conflicto social. Puede vemos movimientos
sociales como expresiones de conflictos? Y lo que conflictos? Allí ha sido los
cambios en general choca dirigidos por sociales movements? Y a lo largo de qué
líneas?
Otro conjunto de cuestiones tiene que hacer con la función de
representaciones culturales en conflicto social. Cómo es los problemas sociales
identificaron objetos tan potenciales de col-lective acción? Qué hacer los
actores sociales seguros venidos para desarrollar un sentido de com-monality
y para identificar con el mismo “colectivo nosotros”? Y cómo puede
acontecimientos de protesta concreta venidos para ser percibidos tan parte del
mismo conflicto? Dónde hacer culturas de movimiento social y los valores
originan de?
Un tercer conjunto de cuestiones dirige el proceso a través de qué valores,
intereses, y las ideas consiguen convertidas en acción colectiva. Cómo devenga
posible a
6 TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS

mobilize Y afrontar los riesgos y costes de actividad de protesta? Qué es las


funciones de identidades y símbolos, emociones, organizaciones, y redes, en
explicar el inicio y persistencia de acción colectiva? Qué formas hacen las
organizaciones toman en sus intentos a maximize la fuerza de retos colectivos
y sus resultados?
Finalmente, frecuentemente ha sido preguntado cómo un seguro social,
político, y/o cul-tural el contexto afecta movimientos sociales' posibilidades de
éxito, y las formas toman. Qué explica la intensidad variable con el tiempo de
violencia colectiva y otros tipos de retos públicos contra powerholders? Hacer
el traits de polit-ical sistemas y sus actitudes hacia ciudadanos' influencia de
demandas challengers' impacto en el arena político? Qué hacer táctica de
protesta y las estrategias cambian con el tiempo, y por qué?
Mientras esta cuestións ciertamente no refleja enteramente el richness de
debates actuales en acción colectiva y movimientos sociales, han seguramente
jugó una función significativa en shaping discusiones sobre las últimas décadas.
De hecho, el 1960s era importante porque vieron no encimaly un aumento en
formas nuevas de participación política, pero también un cambio en general
conflictual asuntos. Tradicionalmente, los movimientos sociales habían centrado
principalmente en asuntos de trabajo y naciones: desde el 1960s, “los movimientos
sociales nuevos” han emergido en cambio centrared en preocupaciones como
mujeres liberation, protección medioambiental, etc. Estos cambios en la cantidad
y calidad de protestar innovaciones significativas incitadas en científicos sociales'
aproximación a aquellas cuestiones. Los modelos teóricos principales disponibles
en el tiempo para la interpretación de conflicto social – el modelo marxista y el
estructural-functionalist modelo –ambos vinieron para ser considerados tan en gran
parte inadecuados.
En Europa, los becarios afrontaron con la ola nueva de protestar a menudo
confiado encima marxismo. Aun así, tintentos de heredero para explicar desarrollos
en las formas de con-flict en el 1960s había encontrado un número de problemas.
El social transfor-mations cuál ocurrió después del fin de la Segunda Guerra
mundial había puesto el centrality del conflicto de trabajo capital a question. El
ensanchando de acceder a educación más alta o la entrada en masse de las mujeres
al mercado de trabajo habían creado posibilidades estructurales nuevas para
conflicto, y aumentó la pertinencia de otros criterios de estratificación social –
como relaciones de género. De hecho, incluso el observador más superficial del
1960s no podría ayudar notando que muchos de los actores comprometieron en
aquellos conflictos (juventud, mujeres, grupos profesionales nuevos) era sólo
parcialmente relacionado a los conflictos de clase, el cual había constituido el
principal componente de político cleavages en sociedades industriales (Rokkan
1970; Tilly 2004un). Las interpretaciones marxistas no fueron, aun así, socavó sólo
por dudas sobre la existencia continuada del de clase trabajadora en postindustrial
sociedad: la lógica del explanatory el modelo era también debajo ataque. Los
críticos rehusaron el disuadir-ministic elemento de la tradición marxista – la
condena que la evolución de conflictos sociales y políticos estuvo condicionada en
gran parte por el nivel de desarrollo de fuerzas productivas y by la dinámica de
relaciones de clase. Ellos también espoused la tendencia, particularmente fuerte
entre orthodox marxistas, para negar el multi-
TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS 7

plicity De preocupaciones y conflictos dentro de movimientos reales, y para


construir, en pref-erence, outlandish imágenes de movimientos como
homogeneous actores con un nivel alto de capacidad estratégica (ve p. ej.
Touraine 1977, 1981).
En contraste, los becarios americanos a menudo sierran acción colectiva cuando
comportamiento de crisis. Teniendo reducido fenómenos colectivos al resumen de
comportamientos individuales, psicológicamente derivó las teorías definieron
movimientos sociales como la manifestación de sentimientos de la privación
experimentada por individual en relación a otros temas sociales, y de sentimientos
de agresión resulting de una gama ancha de frustró expectativas. Fenómenos como
el aumento de nazismo, la Guerra Civil americana, o el movimiento de americanos
negros, por ejemplo, estuvo considerado para ser aggres-sive las reacciones que
resultan tampoco de un fin rápido e inesperado a periodos de eco-nomic que son
bien y de aumentó expectativas en un en todo el mundo escala, o de mecanismos
de incongruencia del estado (Davies 1969; Gurr 1970). De un un poco diferente
pero punto de vista compatible, la aparición de extremismo político era también
unssociated con el spread de sociedad de masa en qué integrative los lazos sociales
basaron en el familiares o el comunitarios tendidos para devenir fragmented (Korn-
hauser 1959; Gusfield 1963). El aislamiento y el cubicaje produjeron individual
con menos intelectual, professional, y/o recursos políticos, quién era par-ticularly
vulnerable a la apelación de antidemocratic movimientos del correctos y el
izquierdos.1

Hasta cierto punto, estos problemas estuvieron compartidos por la versión más
famosa de estructural-functionalist aproximación, aquello de Neil Smelser (1962),
aquello sierra movimientos sociales como el lado-efectos de overrapid
transformación social. Según Smelser, en un sistema hecho de equilibró
subsistemas, el comportamiento colectivo revela tensiones qué homoeostatic
rebalancing los mecanismos pueden no absorb a corto plazo. En tiempo de rápido,
transformaciones de escala grande, la aparición de comportamientos colectivos –
cultos religiosos, sociedades secretas, sectas políticas, Utopías económicas – tiene
un doble fondo, reflejando por un lado la incapacidad de institutions y mecanismos
de control social para reproducir cohesión social; en el otro, intentos por sociedad
para reaccionar a situaciones de crisis a través del desarrollo de compartió
creencias en qué para basar fundaciones nuevas para solidaridad colectiva.
Smelser valor-añadido model del comportamiento colectivo consta de seis
pasos: struc-tural conduciveness, i.e. una configuración segura de estructura
social que puede facilitar o apremiar la aparición de tipos concretos de
comportamiento colectivo; tensión estructural, i.e. el hecho que al menos algún
trait del sistema social es expe-rienced por una colectividad como fuente de
tensión y problemas; crecimiento y extendido de creencia generalizada, i.e. la
aparición de una interpretación compartida por actores sociales de su situación
y problemas; precipitating factores, i.e. acontecimientos estresandos que
induce actores para pasar a la acción; movilización, i.e. la red y organiza-tional
actividades que transforma potencial para acción a acción real; operación de
control social, i.e. la función de agencias de control social y otros actores en
shap-ing la evolución de comportamiento colectivo y sus formas (Smelser
1962; ve también Crossley 2002, ch. 2).
8 TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS

Algunos becarios consideran tan unfortunate que Smelser el trabajo acabó ser
strongly asoció con la crisis del functionalist paradigma. A pesar de su prob-lems, su
era un intento importante de conectar en un modelo integrado procesos diferentes que
más tarde ha sido tratado disparately, y a firmemente localizar movimiento social
analysis en el marco de sociología general (Crossley 2002: 53–5). Aun así, dado el
clima cultural dominante en los años que siguió su pub-lication, Smelser la
contribución vino para ser subsumed bajo el conjunto más ancho de las aproximaciones
que ven movimientos sociales tan puramente respuestas reactivas a crisis social y
cuando el resultado de mal-integración, y devenía el objetivo para el mismo criti-cisms.
Dejado nos ver ahora cómo la crítica de marxista y functionalist las aproximaciones
estuvieron elaboradas en relación a las cuatro cuestiones hemos identificado más
tempranos.

1.1.1 Es el cambio social que crea las condiciones para


la aparición de movimientos nuevos?

Dado la importancia de marxismo en debates intelectuales europeos, es no sur-


prise que las ciencias sociales europeas eran el más ansiosos a explain el aumento
de los movimientos del 1960s y el 1970s en crítica explícita de los modelos
marxistas de interpretación de conflicto social. La crítica dirigió ambos la mayoría
de estructural-ist corrientes de pensamiento marxista, derivando conflicto de clase
directamente del modo de producción, y aquellos interesados en la formación de
consciencia de clase (o clase en él ). Ciertamente, becarios de los movimientos
nuevos no fueron el únicos unos para ser conscientes de estos problemas. Las
mismas dificultades habían sido levantadas por quienes had estudió el movimiento
de trabajo con el objetivo de explicar la formación de un col-lective actor,
desafiando la idea extendida de un casi automático transfor-mation de tensiones
estructurales en comportamiento consciente (Thompson 1963).
A menudo departing de un fondo marxista, los becarios asociaron con el tan-
llamados “aproximación de movimientos social” nueva2 hizo una contribución
decisiva al desarrollo de la discusión de estos asuntos por reflectores a la
innovación en los las formas y los fondos de contemporáneos movements. Becarios
de movimiento nuevo-ments estado de acuerdo que el conflicto entre las clases
industriales es de pertinencia de decrecimiento, y de modo parecido que
representación de movimientos tan en gran parte homogeneous los temas es ya no
factibles. Aun así, había diferencias de énfasis en relación a la posibilidad de
identificar el nuevo central chocar cuál caracterizaría el modelo de la sociedad de
emerger, definido en tiempo como “postindustrial,” “correo-Fordist,”
“technocratic,” o “programó.” Un exponente influyente de este approach, Alain
Touraine, era el más explícito en upholding esta posición: “los movimientos
Sociales no son un rechazo insignificante de orden, son las fuerzas centrales
luchando un contra el otro para controlar la producción de sociedad por él y la
acción de clasees para el shaping de historicity [i.e., el sistema global de significar
cuál pone reglas dominantes en una sociedad dada]” (Touraine 1981: 29). En
TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS 9

La sociedad industrial, la clase gobernanta y la clase popular oppose cada cual otro,
cuando hicieron en el agrarios y las sociedades mercantiles, y cuando harán,
acuerdo-ing a Touraine, en la sociedad programada, donde las clases sociales
nuevas reemplazarán capitalistas y la clase laborable como los actores centrales del
conflicto.3
La rotura entre movimientos de la sociedad industrial y los movimientos nuevos
era también acentuado en el 1980s por el sociólogo alemán Claus Offe (1985). En
su vista, los movimientos desarrollan un fundamentales, metapolitical crítica del
orden social y de democracia representativa, desafiando suposiciones
institucionales con respecto a maneras convencionales de “hacer política,” en el
nombre de un radical democ-racy. Entre las innovaciones principales de los
movimientos nuevos, en contraste con los trabajadores' movimiento, es un críticoal
ideología en relación a modernismo y progreso; descentralizado y estructuras
organizativas participativas; defensa de solidaridad interpersonal contra las
burocracias grandes; y la recuperación de espacios autónomos, más que ventajas
materiales.
Unnother contribución a la definición de las características de movimiento
nuevo-ments en la sociedad programada provino Alberto Melucci (1982, 1989,
1996). Dibujo a la imagen propuesta por Jürgen Habermas de una colonización de
vida-mundos, Melucci describió contemporary sociedades tan altamente diferenció
sistemas, los cuales invierten cada vez más en la creación de centros autónomos
individuales de acción, al propio tiempo requiriendo integración más cercana y
extendiendo control sobre los motivos para acción humana. En su vista, los
movimientos sociales nuevos prueban a oppose la intrusión del estatal y el mercado
a vida social, reclaim-ing individual' correctos de definir sus identidades y para
determinar sus vidas privadas y afectivas contra el omnipresent y comprensibles
manipulatión del sistema. A diferencia de los trabajadores' movimiento,
movimientos sociales nuevos no, en Melucci vista, límite ellos a buscar beneficio
material, pero desafiar las ideas difusas de políticas y de sociedad ellos. Los actores
nuevos no tanto piden un increase en intervención estatal, para garantizar
seguridad y que es bien, pero especialmente resistir la expansión de político-
intervención administrativa en vida diaria y defender autonomía personal.
Sea misleading para hablar de la aproximación de movimientos social nueva
without reconociendo que sus exponentes principales haber considerablemente
modificó sus posiciones con el tiempo. Ya en el tardío 1980s, Offe (1990)
reconoció la influencia de tradicional-estilo acción política en las prácticas de
los movimientos. Melucci increasingly Concentró en los mecanismos por qué
seguros repre-sentations del mundiales y de identidades individuales y
colectivas están producidas y transformó con el tiempo (1989; en este punto ve
Bartholomew y Mayer 1992). Además, vaya según lo que a decles el debate
sobre el “newness” de movimientos contemporáneos para ser outdated o
irrelevantes (ve por ejemplo Melucci 1994).
No obstante, esta perspectiva tenida – y todavía tiene – muchos merece. Primero,
dibuje atención a los determinantes estructurales de protest, reevaluating la importancia
10 TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS

De conflicto, a la vez cuándo nonclass los conflictos eran a menudo ignoró.


Comparado con marxistas, teóricos de movimiento sociales nuevos tuvieron
dos ventajas concretas: ellos una vez más actores colocados en el centro de la
etapa; y capturaron las características innovadoras de movimientos qué ya no
los definió principalmente en relación al sistema de producción. Ni tener que
olvidamos la existencia del área notable de research en gran parte inspirado en
sus hipótesis originales (Maheu 1995).
A pesar de la influencia de la “perspectiva de movimientos social” nueva,
atención a la relación entre la estructura social y la acción colectiva es de ninguna
manera restringido a él. El marxismo ha continued para inspirar analistas
numerosos de collec-tive acción quién todavía asigna el concepto de clase social
una función central (ve por ejemplo Barker y Dale 1999; Lavalette y Mooney 2000;
Cleveland 2003). En muchos sentidos, las aproximaciones estructurales
fuertemente influidas por el marxismo puede ser considerado como los
predecesores de la búsqueda próspera actual en fenómenos de justicia global. En
términos generales Immanuel inspirado en Wallerstein “teoría de sistema
mundial” (1974, 2004), los becarios han intentado para localizar la ola nueva de
popular mobi-lization en países en desarrollo así como dentro del mundo
Occidental en el contexto de muchos procesos más grandes de reestructuración
económica en una escala global, y de un largo-denominar perspectiva histórica
(Arrighi, Hopkins, y Wallerstein 1989; Plata y Slater 1999, ch. 3; Moody 1997;
Reifer 2004).
En crítica explícita de los análisis que sugieren la defunción de conflicto social
y su individualización, y más explícitamente el fin de conflicto sobre distributive
participaciones, los becarios de esta perspectiva consideran la crisis de los
trabajadores' movimiento en el 1980s y 1990s, siguiendo reestructuración
financiera en el nivel global, como en gran parte conjunctural fenómeno. Systemic
Fracaso de conocer las expectativas de la clase laborable de países en desarrollo
alimentará una ola nueva de sustained conflictos de clase, aquello también reflejará
el creciendo feminization de la fuerza de trabajo y su dimensión étnica más fuerte,
siguiendo dinámica de migración de la masa (Arrighi y Plata 1999). La pertinencia
creciente de “justicia global” como preocupación central (Undretta, della Porta,
Mosca, y Reiter 2002, 2003) parece para apoyar estos argumentos. Además, y
bastante inesperadamente, movimientos sociales haber devel-oped en el Del sur,
bridging marcos y estructuras organizativas con su Del norte counterparts.
Especially En algunas áreas geográficas (como Latinoamérica y el Este Lejano),
búsqueda de movimiento social desarrolló, a menudo dentro de un Gramscian
aproximación, acentuando la función de hegemonía cultural.
Otro intento importante de relacionar social-cambio estructural para concentrar
collec-tive la acción ha provenido Manuel Castells (1983, 1996). En una fase más
temprana de su trabajo, Castells ha contribuido a nuestro entendiendo de la
aparición de movimientos sociales urbanos por acentuar la importancia de procesos
de consumo (en par-ticular de collective consumo de servicios públicos y bienes
públicos) para relaciones de clase, por emotivos el foco de análisis de clase de
relaciones capitalistas dentro del workplace a relaciones sociales en la comunidad
urbana (Castells 1983). Más tarde, Castells enlazó el growing pertinencia de
conflictos encima identidad ambos en el Del oeste –
TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS 11

P. ej. el movimiento de las mujeres – y en el Del sur – p. ej. Zapatistas,


fundamentalismos religiosos, etc. – a la aparición de una “sociedad de red,”
where tecnologías de información nueva juegan una función central.
Aún así otro esfuerzo original para enlazar el análisis estructural y análisis de
movimiento social ha sido sociólogo francés inspirado Pierre Bourdieu. Los
investigadores comprometieron en el análisis de hábitos culturales (o the
predisposiciones culturales pro-duced por procesos de socialización) así como sus
determinantes estructurales han utilizado Bourdieu ideas para explorar casos
concretos de conflictos políticos, tensión-ing sus significados culturales dentro de
los campos concretos to cuál el individual pertenecen. Yendo allende intereses
económicos, algunos becarios explicaron de hecho movimiento social-ment
activismo como necesidades siguientes y desea aquello deriva de valores y normas
que es propio de culturas concretas (o campos). En este sentido, la acción no es
racional, pero razonable (Bourdieu 1980: 85–6; Eckstein 2001; Sommier 2003).
De un dif-ferent ángulo, y con referencia explícita a teoría general à la Smelser,
Crossley (2002) ha utilizado Bourdieu conceptos claves de habitus, estructura, y
agencia a propose un modelo teórico nuevo, capaz de integrar las ideas de
aproximaciones europeas y americanas sobre los años. En hacer tan ha procedido
en paralelo con otro trabajo teórico en el marco más ancho de structuration teoría
(Sewell 1992; Livesay 2003).
Una crítica importante de teoría de movimientos social nueva ha sido que tome
características tan fundacionales de los movimientos sociales nuevos seguros traits
aquello no fue necesariamente nuevo y lejos de generalizable – como activistas'
orígenes de clase mediana, o formas organizativas sueltas (D'Anieri, Ernst, y Kier
1990; Calhoun 1993; Rootes 1992; Rüdig 1990; Koopmans 1995; Tarrow 1994;
della Porta 1996un: ch. 1). Las aproximaciones estructurales en general también
han sido faulted para fallar para especificar los mecanismos que dirigen de
tensiones estructurales a acción. Sinceramente, esta crítica no aplica a Melucci
trabajo, y sólo parcialmente a Touraine es; mientras es seguramente apropiado para
becarios como Offe o Castells, o teóricos de sistema mundial, cuyo foco es
claramente no en micro o meso procesos. Cualquier cosa el caso, las
aproximaciones presentaron aquí tiene que ser considerado ante todo tan teorías de
conflicto social; más específicamente, del impacto de transformaciones
estructurales en participaciones y formas de conflicto. Y es justo de decir then las
cuestiones más directamente relacionados al desarrollo de acción colectiva ha sido
más cogently dirigido por otras tradiciones intelectuales.

1.1.2 Cómo definimos asuntos como objetos


dignos, y actores como temas dignos de
acción colectiva?

En el 1950s y 1960s, el alumnado de comportamiento colectivo tendió para


clasificar bajo los mismos fenómenos de encabezar como diversos como
multitudes, movimientos, pánicos, manías, modas, y tan encima. Dos problemas
surgieron de este. Por un lado, although
12 TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS

Muchos de ellos definieron movimientos como fenómenos resolutos, alumnado de


col-lective el comportamiento colocado más atención en dinámica inesperada –
como circu-lar reacciones – más que en deliberados organizational estrategias o,
más generalmente, en las estrategias ingeniaron por actores. Cuando James
Coleman recordó (1990: 479), la hipótesis que situaciones de frustración,
rootlessness, privación, y crisis social automáticamente el producto repugna reduce
colectivo actiencima a un agglomera-tion de comportamientos individuales. El
funcionalismo ignora la dinámica por qué sentir-ings experimentado en el (micro)
el nivel del individual da aumento a (macro) fenómenos como revoluciones o
movimientos sociales.
Una respuesta a estos theoretical los vacíos ha provenido interacción simbólica-
ists cercano al tan-llamó “Escuela de Chicago,” abonado con haber desarrollado el
análisis de comportamiento colectivo como campo de especialista dentro
sociología. El concepto de comportamiento colectivo – contrastado con aquel de
psicología colectiva – indicó el cambio de atención de la motivación de individual
a sus acciones observables. Ya en el 1920s, los fundadores de esta aproximación –
entre ellos Robert E. Parque y Ernest W. Burgess – Había acentuado que los
fenómenos colectivos no sencillamente reflejan crisis social sino producir normas
nuevas y solidaridades nuevas, y movimientos sociales vistos como motores de
cambio, principalmente en relación a sistemas de valores. Posteriormente, otro
alumnado de comportamiento colectivo era para hacer reference al tenets de la
Escuela de Chicago, centrando su atención en situa-tions de cambio rápido en
prescripciones y estructuras sociales (Blumer 1951; Turner y Killian 1987[1957];4
Gusfield 1963). Tendencias hacia grandes-escala organiza-tions, populatmovilidad
de ión, innovación tecnológica, comunicaciones de masa, y la disminución de
formas culturales tradicionales era todo consideró para ser emergiendo con-ditions
empujando individual para buscar patrones nuevos de organización social. El
comportamiento colectivo era de hecho definido tan el comportamiento
preocupado con cambio (por ejemplo, Blumer 1951: 199), y movimientos sociales
como ambas una parte integral del funcionamiento normal de sociedad y la
expresión de un proceso más ancho de transformación. 5
Arraigado en simbólico interactionism, la escuela contemporánea de
comportamiento colectivo ve pertinencia particular en el atributo de actores del
significado a social struc-tures; y el menos estructurado las situaciones afrontaron
por el individual, el más rel-evant este aspecto aparece para ser. Cuándo existiendo
sistemas de significar no constituye una base suficiente para acción social, las
normas nuevas emergen, definiendo la situación de existir como unjust y
proporcionando una justificación para acción (Turner y Killian 1987: 259). Cuando
una actividad nacida fuera de preestablished social definitions, el comportamiento
colectivo está localizado más allá existiendo normas y relaciones sociales
ordenadas. El estudio del comportamiento colectivo así concentra en la
transformación de comportamientos institucionales a través de la acción de
definiciones normativas emergentes. Estos definitions aparecer cuándo la
estructura normativa tradicional viene a conflicto con un continuamente
evolucionando situación.6 Cambio, de hecho, está concebido de tan parte del
funcionamiento fisiológico del sistema: los movimientos sociales son accom-
TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS 13

panied Por la aparición de normas y reglas nuevas, y representar intentos de


transformar que existen normas.7
La génesis de movimientos sociales es en el co-existencia de contrastar sistemas
de valor y de grupos en conflicto con cada otro. Estos están considerados tan dis-
tinctive partes de vida social (Killian 1964: 433). Cambios en la estructura social y
en el orden normativo está interpretado dentro de un proceso de la evolución
cultural a través de qué ideas nuevas emerge en las mentes de individual. Cuándo
las normas tradicionales ya no tienen éxito en proporcionar una estructura
satisfactoria para comportamiento, el individual está forzado para desafiar el orden
social a través de varias formas de no-conformidad. Un movimiento social
desarrolla cuándo un sentimiento de insatisfacción spreanuncios, e
insuficientemente las instituciones flexibles son incapaces de responder.
La sociología de movimientos sociales debe muchos de sus ideas a alumnado
de la escuela de comportamiento colectiva. Por primera vez, los movimientos
colectivos están definidos como actos significativos, driving a menudo necesario y
cambio social beneficioso. Observaciones de procesos de la interacción
determinada por acción colectiva más-encima constituir fundaciones importantes
para quienes, en tiempo más reciente, ha apechugado con la tarea de movimiento
comprensivo dynamics. El énfasis en búsqueda empírica ha dirigido a
experimentación con técnicas nuevas, proporcionando a través de varios métodos
de campo investigan una integración válida de dato de archivo. Desde el 1980s, el
interactionist versión de la teoría de comportamiento colectivo ha acentuado los
procesos de producción simbólica y de construcción de iden-tity, ambos de los
cuales son componentes esenciales de comportamiento colectivo. Esto ha dirigido
a un programa de búsqueda duradero, cuando demostrado por el trabajo de becarios
como Joe Gusfield (1963, 1981, 1994), y cuál ha devenido al mismo tiempo muy
influyente y diversificado (Nieve, Rochford, Worden, y Benford 1986; Snow y
Oliver 1995; Melucci 1989, 1996; Eyerman y Jamison 1991; McPhail 1991;
Johnston y Klandermans 1995). En un parallel esfuerzo, Rochon (1998: 179) ha
mostrado cómo los movimientos desarrollan valores e ideas nuevos, trabajando
como agentes de cambio cultural, con la “tarea de traducir el problema crónico
cuando descrito por la comunidad crítica a un problema agudo que atraerá medios
de comunicación atten-tion es la provincia de social unos movimientos políticos.”8
En el 1990s, aun así, algunos investigadores crecieron descontentos con una
vista de la función de cultura en acción colectiva que consideraron tan demasiado
estratégicos y proporción-nalistic (en particular becarios gusta Nieve y Benford
[1988, 1992], quién era con-versant con teoría de movilización del recurso), y
empezado a reemphasize otra vez la parte jugada por emociones en la producción
y reproducción de movimiento social-ments. En su vista, la producción simbólica
no es only (o principalmente) estratégicamente orientado, pero implica más
sentimientos y emociones. Los shocks morales que desarrollan cuándo
profundamente aguantó las reglas y las normas están rotas es a menudo el primer
paso en individ-ual movilización; y, de hecho, trabajo de organizaciones de la
protesta en transforming miedo a rabia e indignación morales (Jaspe 1997: 107–
14). Producto de movimientos con-densing los símbolos y la retórica orientaron
para levantar varios tipos de emociones en qué
14 TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS

Ha sido definido como libidinal economy de movimientos. Cuando Jaspe


(1997: 220) observa, “virtualmente todos los placeres que los humanos derivan
de la vida social está encontrada en movimientos de protesta: un sentido de
comunitario e identidad; compañero actual-barco y vínculos con otros; la
variedad y reto de conversación, coopera-tion y competición. Algunos de los
placeres no son disponibles en las rutinas de vida.”
Vale notar al menos dos problemas principales generaron por la perspectiva
de comportamiento colectiva. Por un lado, a pesar de ver movimientos cuando
propósito-ful fenómenos, mucho alumnado del comportamiento colectivo
colocado la mayoría de atención en dinámica inesperada – como reacciones
circulares – más que en estrategias organizativas deliberadas o, más
generalmente, en las estrategias ingeniaron por racionales, estratégicos actors.
Por otro lado, centrando en el análisis empírico de behav-ior, eran a menudo
limitados a una descripción – albeit detallado – de realidad, sin dedicar mucha
atención a los orígenes estructurales de conflictos qué posteriormente bien
arriba enparticul ar movimientos. Mientras las aproximaciones estructuralistas
como los movimientos sociales nuevos trataron el últimos shortcoming, a
perspectivas organizativas les gusta teoría de movilización del recurso dirigió
el anterior. A su básico tenets nosotros ahora vuelta.

1.1.3 Cómo es la acción colectiva posible?

En contraste deliberado a conceptualizations de movimientos sociales como


irracionales, en gran parte fenómenos reactivos, sociólogos americanos en el 1970s
empezado para reflejar en los procesos por qué los recursos necesarios para la
acción colectiva es mobi-lized. En su vista, los movimientos colectivos constituyen
una extensión del con-ventional formas de acción política; los actores
comprometen en este acto en una manera racional, siguiendo sus intereses;
organizaciones y movimiento “entrepreneurs” tener una función esencial en la
movilización de los recursos colectivos en qué acción está fundado. Los
movimientos son por tanto parte del proceso político normal. Tensión-ing los
obstáculos externos e incentivos, las piezas numerosas de búsqueda tienen examen-
ined la variedad de recursos para ser mobilized, los enlaces qué movimientos
sociales tienen con sus aliados, la táctica utilizada por sociedad para controlar o
incorporar col-lective acción, y sus resultados. Las cuestiones básicas dirigieron
relacionar al evalua-tion de costes y beneficios de participation en organizaciones
de movimiento social.
En contribuciones tempranas en esta vena, Mayer Zald (Zald y Ceniza 1966;
McCarthy y Zald 1987un, 1987b), Anthony Oberschall (1973; 1980), y Charles
Tilly (1978) definió movimientos sociales como racionales, resolutos, y o
ganizedacciones. La acción colectiva deriva, según esta perspectiva, de un cálculo
de los costes y beneficios, influidos por la presencia de recursos – en particular por
organización y por las interacciones estratégicas necesarias para el desarrollo de
un movimiento social. En una situación histórica en qué sentimientos de unease,
diferir-ences de opinión, conflictos de interés, y opposing las ideologías son
siempre
TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS 15

Presente, la aparición de la acción colectiva no puede ser explicada sencillamente


cuando habiendo sido causado por estos elementos. No es bastante para descubrir
la existencia de diez-sions y conflictos estructurales: también tenemos que estudiar
el condiciona cuáles habilitan disgusto para ser transformado a movilización. TÉl
la capacidad para movilización depende de los recursos materiales (trabajo, dinero,
beneficios concretos, servicios) y/o recursos inmateriales (autoridad, compromiso
moral, fe, amistad) disponible al grupo. Estos recursos están distribuidos a través
de objetivos múltiples según un cálculo racional de costes y beneficios. Allende la
existencia de tensiones, la movilización deriva de la manera en qué movimientos
sociales es capaz de organizar disgusto, reducir los costes de acción, utiliza y crear
solidaridad networks, incentivos de participación entre miembros, y conseguir
consenso externo. El tipo y naturaleza de los recursos disponibles explicar las
elecciones tácticas hicieron por movimientos y las consecuencias de acción
colectiva en el sistema social y político (McCarthy und Zald 1977; Edwards y
McCarthy 2004).
La existencia de redes de solidaridad una vez más cuestionaron una suposición
ampliamente extendida en el tiempo, concretamente, aquellos reclutas de
movimiento son principalmente aislados y rootless individual quiénes buscan a
immerse ellos enel m asno como surrogate para su marginación social. Según
aproximaciones racionales, la movilización así puede ser explicada cuando siendo
más de la gratificación de perseguir un collec-tive bueno; también promueve la
existencia de enlaces de solidaridad horizontal, wiadelgazar el colectivo, y enlaces
verticales, integrando diferentes collectives. En la base de una gama ancha de
búsqueda empírica, uno por tanto puede prever que “participantes en activistas y
alborotos populares en organizaciones de oposición serán recruited principalmente
de anteriormente activos y relativamente individual bien integrados dentro de la
colectividad, mientras que socialmente aislado, atomized, y uprooted el individual
serán underrepresented, al menos hasta el movimiento ha devenido sustancial”
(Oberschall 1973: 135). Consiguientemente, becarios de movilización de recurso
concen-trate su atención encima actores qué colectivos operan, cómo adquieren
recursos y mobilize soporte, tanto dentro y fuera de sus partidarios' grupo.
Recientemente, la búsqueda en organizaciones de movimiento social ha
extendido su atten-tion a las relaciones entre organizaciones y la dinámica que va
en en orga-nizational poblaciones. Cada vez más estudios de red sofisticada han
mirado en las interacciones entre las organizaciones y el individual identificaron
con movimientos sociales (Diani y McAdam 2003), con un diálogo crítico con
búsqueda en capital social (Diani 1997), y una atención creciente para la dimensión
transnacional y las conexiones entre las organizaciones que operan en aquel nivel
(Caniglia 2001; Smith 2004un). Los conceptos y los métodos tomaron prestado de
organiza-tional la ecología ha sido aplicada al estudio de los factores detrás de
organizaciones' posibilidades de supervivencia, otra vez con referencia a ambos el
nacionales (Minkoff 1993, 1999; Edwards y Marullo 1996) y las esferas globales
(Boli y Thomas 1999; Johnson y McCarthy 2005).
La definición de movimientos sociales como los actores conscientes que
hacen las elecciones racionales es entre las innovaciones más importantes de
la movilización de recurso
16 TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS

Aproximación. Aun así, los críticos han cobrado él con indiferencia a las fuentes
estructurales de conflicto y las participaciones concretas para el control del cual
actores sociales mobilize (Melucci 1982; Piven y Cloward 1992). Su énfasis en los
recursos controló por unos cuantos político entrepreneurs, en el coste de pasar por
alto el self-potencial de organización por el más dispossessed grupos sociales,
también ha sido crit-icized (Piven y Cloward 1992). Finalmente, ha sido notado
que en su explanation de acción colectiva esta aproximación overdoes la
racionalidad de acción colectiva, no tomando la función de emociones
adecuadamente a cuenta (Ferree 1992; Taylor y Whittier 1995; Jasper 1997). De
hecho, cuando algunos del más influyentes proponents de this aproximación
recientemente recurso admitido “, temprano modelos de movilización exag-gerate
el centrality de deliberative decisiones estratégicas a movimientos sociales”
(McAdam, Tarrow, y Tilly 2001: 7), overemphasizing semejanzas entre interés y
movimientos sociales politics.

1.1.4 Qué determina las formas e intensidad de


acción colectiva?

El más cogent y la respuesta sistemática a esta cuestión ha provenido la perspectiva


normalmente definida como “proceso político” (Tilly 1978; McAdam 1982). Este
ingenio de participaciones de la aproximaciónh teoría de movilización del recurso
una vista racional de acción – tanto de modo que son a veces tratados como
perspectiva unificada – pero paga atención más sistemática al entorno político e
institucional en qué movimientos sociales opera. El central el foco de “teorías de
proceso” político es el rela-tionship entre actores políticos institucionales y
protesta. En desafiante un orden político dado, los movimientos sociales
interaccionan con actores quiénes disfrutan una posición consolidada en el polity. 9
El concepto which ha tenido el éxito más grande en defin-ing las propiedades del
entorno externo, pertinente al desarrollo de movimientos sociales, es que de
“estructura de oportunidad política.” Peter Eisinger (1973) utilizó este concepto en
una comparación de los resultados of protesta en ciudades americanas diferentes,
centrando en el grado de transparencia (o clausura) del local polit-ical sistema. Otra
búsqueda empírica indicó variables nuevas importantes, como electorales
instability (Piven y Cloward 1977), la disponibilidad de aliados influyentes
(Gamson 1990 [1975]), y tolerancia para protesta entre la élite (Jenkins y Perrow
1977). Sidney Tarrow integró estas observaciones empíricas a un el-oretical marco
para su estudio de ciclos de protesta en Italia, singling fuera del degree de
transparencia o clausura de acceso político formal, el grado de estabilidad o insta-
bility de alineaciones políticas, la disponibilidad y postura estratégica de aliados
potenciales (Tarrow 1983: 28), y conflictos políticos entre y dentro de élites
(Tarrow 1989un: 35).
A estas variables otros han sido añadidos, relacionando al institucionales condi-
tions cuáles regulan que ponen orden del día y que hacen decisión procesos.
Characteris-
TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS 17

Los tics que relacionan a la división funcional de poder y también a geográfico


decen-tralization ha sido analizado para entender los orígenes de protesta y las
formas ha tomado. En general, el objetivo ha sido para observar qué características
estables “o” móviles del political el sistema influye el crecimiento de menos-acción
política institucionalizada en el curso de qué está definido tan ciclos de protesta
(Tarrow 1989un), así como las formas qué estas acciones toman en contextos
históricos diferentes (Tilly 1978). Comparativo analysis ha mejorado nuestro que
está debajo del tema central representado por la relación entre movimientos
sociales y el sistema político institucional (Kitschelt 1986; della Porta 1995; Kriesi
et al. 1995; Rucht 1994; Giugni 2004).
El “político process” la aproximación ha tenido éxito en cambiar atención hacia
interacciones entre actores nuevos y tradicionales, y entre menos formas
convencionales de acción e institucionalizó sistemas de representación de interés.
De este modo, es ya no posible de definir movimientos como fenómenos qué es,
de necessity, insignificante y anti-institucional, expresiones de disfunciones del
sistema. Una ruta más fructífera hacia la interpretación del político dimen-sion de
los movimientos contemporáneos ha sido establecidos.
Uno should no ignorar, aun así, algunos áreas persistentes de dificultad. Por un
lado, los seguidores de esta perspectiva continúan debatir problemas delicados
como la elección de los indicadores más apropiados para medir complejo insti-
tutional fenómenos. Primero, tcarezca de de consenso en las dimensiones
pertinentes del concepto de oportunidades políticas (McAdam 1996) ha resultado
en su crecimiento exponencial (della Porta 1996c). Los estudios tempranos de
oportunidades políticas centraron en un número pequeño de variables. Desde el
1980s, aun así, un número de estudios de caso y cruz-las comparaciones nacionales
han añadido variables nuevas al orig-inal conjunto (ve, en particular, Marca 1985;
Kitschelt 1986; Rucht 1989; Kriesi 1991). Esto ha expandido el poder explicativo
del concepto, pero reduced su speci-ficity. El concepto corre el riesgo de devenir
un “dustbin” para cualquier y cada vari-capaz pertinente al desarrollo de
movimientos sociales. La mayoría de los problemas del concepto surgen de la
manera en qué lo ha sido desarrollado, cogiendo variables from una variedad de
estudios en una variedad de movimientos. Esta acumulación de het-erogeneous las
variables que reflejan autores diferentes' las preocupaciones y las ideas ha resultado
en un concepto qué, para citar Sartori (1970, pero también 1990), denota mucho
pero con-notas poco. Particularly En estudios comparativos internacionales, es
imposible de manejar el número grande de variables y correctamente evaluar su
poder explicativo. El foco en variables estructurales podría cambiar atención fuera
de cómo normas y valores, refiriendo enparticul ar a objetivos de movimientos (o
discursive oportunidades), estrategias de movimiento de la influencia así como sus
posibilidades de éxito (Goodwin y Jaspe 2004un).
Un segundo problema surge cuándo deseamos distinguir entre “realidad”
objetiva y su construcción social (Berger y Luckmann 1966). Algunos cambios en
la estructura de oportunidad política no tiene cualquier efecto en un movimiento
social
18 TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS

A no ser que están percibidos como importantes por el movimiento él. Estructural
avail-la capacidad tiene que ser filtrada a través de un proceso de “cognitivo
liberation” para unleash confusión (McAdam 1986). Para protestar para emerger,
los activistas tienen que creer que una oportunidad existe, que tienen el poder de
traer aproximadamente cambio; y tienen que culpar tél sistema para el problema.
Mirando en estructural opportuni-lazos sin considerar el cognitivo procesa cuáles
intervienen entre struc-ture y la acción puede ser muy misleading (Gamson y
Meyer 1996, Diani 1996). Es importante, por tanto, para analizar actoivists'
comprensiones de disponibles oppor-tunities, el lenses a través de qué ven
oportunidades potenciales para sus movimientos (McAdam, McCarthy, y Zald
1996). Las percepciones de respuesta estatal pueden ser particularmente influidos,
para caso, por su más dramatic manifestaciones, como represión, causando las
menos respuestas visibles, como negociación, para ser pasado por alto (della Porta
1996c).
La aproximación de proceso política también ha sido criticada externally, de
varias perspectivas. A Becarios les gusta Piven und Cloward (1992) ha criticado
proceso político (y movilización de recurso) teóricos para rechazar mal-integración
(o desglose) teoría para una reclamación él nunca hecho, concretamente, aquel
cambio social rápido trajo aproximadamente por procesos de urbanización,
grandes-escala economic crisis, etc., gen-erates acción colectiva. Pero, teoría de
desglose de hecho centrada en violencia colectiva y disruptive comportamiento, y
no en la gama más ancha de formas de con-tention que teóricos como Tilly incluir
en sus estudios (Piven y Cloward 1992). Teóricos de proceso político también han
atraído crítica para su tendencia para adoptar una clase de “reduccionismo político”
(Melucci 1987, 1989). En efecto, su proponents ha pagado poca atención al hecho
que muchos movimientos contemporáneos (of juventud, mujeres, homosexuales, o
minoría grupos étnicos) ha sido afectado al menos tanto por su contexto cultural
cuando por su político un (Melucci 1996; Rupp y Taylor 1987, 2003; Rochon
1998). Finalmente – tan ya hemos notado cuándo introduciendo resource teorías
de movilización – rationalist aproximaciones al estudio de acción colectiva ha
tendido para desatender los orígenes estructurales de protesta. Otros becarios, a
menudo asociados con la aproximación de movimientos nueva, ha explorado esta
área.
Afrontado con algún relevant transformaciones en las dos fuentes principales
de oppor-tunities para movimientos – la nación-estatal y los partidos políticos –
investigar desarrollado en dos direcciones principales. Por un lado, y especialmente
en Europa, la atención centrada en la función jugada por movements, no justo
dentro del sistema político, pero también dentro de la esfera pública. En esta
dirección, el discursive oppor-tunities – i.e., la presencia de discursos públicos
dominantes en seguros controver-sial asuntos, los cuales probablemente pueden
afectar movimientos' posibilidads de éxito – ha sido acentuado (Koopmans y
Statham 1999). Además, más y más la atención ha sido pagada a oportunidades
transnacionales, o, para ponerlo una manera mejor, a un multilevel estructura de
oportunidad para movimientos (della Porta y Tarrow 2005). The devel-opment De
la Unión europea como un arena para demandas de movimiento ha sido
TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS 19

Hablado en más profundidad (Imig y Tarrow 2001; Balme, Chabannet, y


Wright 2002). Considerando movimientos cuando parte y paquete del sistema
político, los estudios recientes también han centrado en sus efectos,
especialmente en plazos de política pro-cess y decisiones de política (della
Porta 2004c; Giugni, McAdam, y Tilly 1999; Giugni 2004).

1.1.5 Es estos cuestiona concretos de análisis


de movimiento social?

Antes de que sistemáticamente dirigiendo las cuestiones perfilaron en la


sección de preceder, vale preguntar si son extraños a búsqueda de movimiento
social. Nuestra respuesta es: no necesariamente. En muchos casos hace más –
o al menos cuandom uch – notar para hablar sobre acción colectiva en grande,
más que movimientos sociales. Col-lective La acción en términos generales
refiere al individual que comparten recursos en persecución de collec-tive
objetivos – i.e., objetivos que no puede ser privatizado a cualquiera de los
miembros del collectivity en behalf del cual la acción colectiva ha tenido
lugar.10 Tales objetivos pueden ser producidos dentro de movimientos, pero
también en muchos contextos que normalmente no es asociado con
movimientos.
Por ejemplo, los partidos políticos también afrontan el problema de
mobilizing elir miembros y proporcionándoles con incentivos para unir y de
alguna manera apoyar la organización – si cualquier cosa a través del pago de
costes de afiliación; tan hacer inter-est grupos sólo importando el sectoral – a
menudo, muy parochial – intereses de su concretos reference grupos (Knoke
1990un; Jordania y Maloney 1997). Así mismo, incluso los partidos políticos
o grupos de interés estrecho afrontan el problema de adaptar sus estrategias y
táctica a cambiar entornos, cuando el contexto en qué operan puede devenir
más o menos favorable – p. ej. a través de cambios en el atti-tudes de
powerholders hacia partidos concretos' o el interés agrupa' demandas, cambios
en oportunidades legales para representación de interés, o cambios en el cul-
tural modelos con qué sentido de marca de personas normal de theredero
mundo político y social (Panebianco 1988). De un ángulo diferente, muchos
las organizaciones voluntarias no identifican cualquier adversario social o
político para protestar en contra, y su strate-gies foco enteramente encima
entrega de servicio más que advocacy, political representa-tion, o retos a estilos
de vida o normas dominantes. Incluso estas organizaciones, aun así, problemas
de cara quieta de atraer y manteniendo miembros, asegurando los recursos
necesarios de promover acción, elaborando los modelos culturales neces-sary
to persigue objetivos a lo largo del deseó líneas, y enmarcando sus asuntos para
hacerles tan atractivo como posible a sus miembros de seguidores/probables
(Wilson 2000).
Cuando pasa, análisis de análisis y acción colectivos de movimientos sociales
son inextricably enlazó. Dejado nos decir que la experiencia de movimientos
sociales refleja fenómenos con más de pasar analogías a otros casos de
20 TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS

Político o acción colectiva cultural, teniendo lugar dentro de partidos políticos,


inter-est grupos, o sectas religiosas. Por tanto, cuándo analizamos
movimientos sociales, tratamos procesos sociales que también puede ser de
interesar a investigadores que no definen ellos en absoluto movimiento tan
social analistas.
Recientemente ha habido muchos intenta a synthesize beca en movimientos
sociales con el objetivo de enlazarlo a más ancho teórico y/o preocupaciones
empíricas. Algunos de estos intentos han apuntado en integrar teoría de
movimiento social con general sociológico frameworks. Un la mayoría de
desarrollo ambicioso por becarios de movimiento social, abiertamente criticando
el insularity del movimiento social-ment comunidades de estudios, y cuál también
dibuja fuertemente encima no compañero Occidental-rials, es la Dinámica de
Contienda (DOC) programa (McAdam, Tarrow, y Tilly 2001). La sugerencia
principal que proviene esta aproximación es la posibilidad de combinar el
conocimiento desarrollado en los campos de movimientos sociales con aquellos se
extendió sobre revoluciones, democratización, y conflictos étnicos, singling fuera
de un campo de política contenciosa, definido tan “episodic, público, interacción
colectiva entre fabricantes de reclamación y sus objetos cuándo (un) al menos un
gobierno es un claimant, un objeto de reclamaciones, o un partido a la reclamación
y (b) las reclamaciones , si dados cuenta, afectar tinterese de al menos uno del
claimants” (McAdam, Tarrow, y Tilly 2001: 5). Defendiendo un dinámico más que
uso estático de conceptos, los becarios implicaron en este proyecto ha probado a
solo fuera de mecanismos generales de contienda (ve Diani et al. 2003 para una
discusión).

1.2 Qué es Distintivo sobre


Movimientos Sociales?

Si las cuestiones de núcleo dirigieron por analistas de movimiento social no son


necesariamente concretos, uno se podría preguntar si los movimientos sociales
tienen un analíticos pecu-liarity cuál justifica el desarrollo de un campo distintivo
de búsqueda. Para dirigir esta cuestión tenemos que hablar el concepto de un
movimiento social.

1.2.1 El concepto de un movimiento social

En un número de piezas, Mario Diani (1992un; 2003un; 2004un; Diani y Bisonte


2004) ha mantenido que los movimientos sociales son un proceso social distinto ,
constando de los mecanismos a través de qué actores comprometieron en acción
colectiva:
• Está implicado en conflictual relaciones con claramente identificó
adversarios;
• Está enlazado por redes informales densas;
• Participación una identidad colectiva distinta.
TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS 21

Conflictual Acción colectiva. Actores de movimiento social están


comprometidos en políticos y/o los conflictos culturales significaron para
promover u oppose cambio social. Porc onflict significamos un oppositional
relación entre actores quiénes buscan control de la misma participación – serlo
político, económico, o poder cultural – y en el proceso hacer reclamaciones
negativas en cada otro – i.e., reclama cuál, si dado cuenta, averiaría el interests de
los otros actores (Tilly 1978; Touraine 1981: 80–4). Consiguientemente, dirigiendo
problemas colectivos, produciendo bienes públicos, o expresar-ing soporte para
algunos valores morales o principios no automáticamente corre-spond a acción de
movimiento social; ella tter requiere la identificación de objetivos para esfuerzos
colectivos, específicamente articulados en plazos sociales o políticos. En con-trast,
cuándo foco de acción colectiva exclusivamente en el comportamiento y/o el legit-
imacy de individual concretos, o culpas problems encima género humano
globalmente, en desastres naturales o voluntad divina, entonces es difícil de hablar
de procesos de movimiento social (Gamson 1992un; Melucci 1996, parte yo). Por
ejemplo, acción colectiva encima asuntos de globalización es conflictual a la
extensión que organizations como la Organización de Comercio Mundial o el
Fondo Monetario Internacional son culpó no debido a sus oficiales' misconduct o
equivocaciones de política concreta, pero tan repre-sentatives de coaliciones
distintas de intereses.
Redes informales densas. Las redes informales densas diferencian movimiento
social-ment procesos de los casos innumerables en qué acción colectiva tiene lugar
y está coordinado, mayoritariamente dentro de las fronteras de organizaciones
concretas. Un proceso de movimiento social es en colocar a la extensión que ambos
individual y organizó actores, mientras manteniendo su autonomía e
independencia, compromete en sostuvo intercambios de recursos en persecución
de objetivos comunes. La coordinación de iniciativas concretas, el control de
actores individuales' conducta, y el defi-nition de estrategias todos dependen de
negociaciones permanentes entre el individ-uals y las organizaciones implicaron
en acción colectiva. Ningún actor organizado solo, ningún asunto cómo potente,
puede reclamar para representar un movimiento globalmente. Sigue que más las
oportunidades surgen para altamente cometidos y/o especializados indi-viduals
para jugar una función independiente en el proceso político que sería el caso
cuándo la acción está concentrada dentro de organizaciones formales.
Identidad colectiva. Los movimientos sociales no son meramente la suma de
acontecimientos de protesta en asuntos seguros, o incluso de campañas concretas. Al
contrario, un movimiento social-ment el proceso es en colocar sólo cuándo las
identidades colectivas desarrollan, los cuales van allende iniciativas y acontecimientos
concretos. La identidad colectiva es fuertemente asociada con recog-nition y la creación
de connectedness (Pizzorno 1996). Trae con él un sentido de propósito común y
compromiso compartido a una causa, el cual habilita activistas solos y/u organizaciones
para considerar ellos tan inextricably enlazados a otros actores, no necesariamente
idénticos pero seguramente compatibles, en una movilización colectiva más ancha
(Touraine 1981). Dentro de movimientos sociales, criterios de afiliación son
extremadamente inestables y finalmente dependientes en reconocimiento mutuo entre
actores; la actividad de definición de frontera – i.e., de definir quién es y quién es
22 TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS

No separar de la red – de hecho juega una función central en la aparición y


shaping de acción colectiva (Melucci 1996, ch. 3).
Por ejemplo, búsqueda reciente encima el ecologismo sugiere que activismo
de derechos animales ser más distintivo y menos identificado con ecologismo
en Gran Bretaña que en Italia: como resultado, hace mucho más notar para
considerar el dos cuando implicado en el mismo movement proceso en el
último que en el anterior (Rootes 2003; Diani & Forno 2003). Así mismo, no
todas las redes entre gustar-importó las personas necesariamente reflejan
procesos de movimiento social: por ejemplo, el internacional Zapatista red de
soporte no es regarded por muchos analistas como movimiento social debido
a la carencia de una identidad centrada y el resultado-ing vínculos, incluso
aunque recursos de la solidaridad ciertamente circula a través de él (Olesen
2004).
La identidad colectiva que construye también entails los actores que establecen
connections entre ocurrencias diferentes, privados y público, localizado en puntos
diferentes en tiempo y espacio, los cuales son pertinentes a su experiencia, y
tramándoles a más ancho, abarcando narrativas (Melucci 1996). Como resultado,
organizativo e indivilos actores duales implicaron en la acción colectiva ya no
meramente persigue objetivos concretos, pero venidos para los considerar como
elementos de mucho más grandes y encom-pasando procesos de cambio – o
resistencia para cambiar. Por ejemplo, en el caso de la justicia global movement,
participantes en acontecimientos como distantes como la “batalla de Seattle” y la
oposición al Narmada dique de Valle en India puede ser enlazado junto en el mismo
movimiento a través de procesos de que construyen identidad basados a
organizativos networking y supranational comunicación.
Mirando en las combinaciones diferentes de estos tres elementos nos
habilito a con-trast movimientos sociales a otros procesos de acción colectiva.
Aquí proporcionamos unos cuantos ejemplos; aun así, tenemos que mantener
en importar que no episodio empírico de recogerive acción – los que
convencionalmente definimos movimiento “tan medioambiental-ments,”
“movimientos de solidaridad,” “movimientos discapacitados,” o el gustar –
plenamente cor-responde a cualquier tipo puro. Al contrario, normalmente
podemos detectar más de uno procesa dentro de cualquier empirical caso de
acción colectiva. La exploración de cómo tales procesos interaccionan con
cada otro representa un paso fundamental de análisis de movimiento social.

1.2.2 Conflictual y consensual


acción colectiva

No es raro de presenciar coaliciones anchas de caridades y otro voluntarios associ-


ations mobilizing encima asuntos de solidaridad, por ejemplo en exclusión social
en domos-política de tic, o encima desarrollo o asuntos de derechos humanos en
una perspectiva internacional, y para referir a ellos movimientos tan sociales. En
muchos casos, aun así, podrían ser más caracterizados tan “movimientos de
consenso.” En ambos movimiento social-
TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS 23

ment Y dinámica de movimiento del consenso, solidaridad de participación de los


actores y un inter-pretation del mundo, habilitándoles para enlazar acontecimientos
y actos concretos en una perspectiva de tiempo más larga. Aun así, en el último, la
acción colectiva sostenida no toma un conflictual elemento. Los bienes colectivos
son a menudo producidos a través de esfuerzos cooperativos que tampoco implicar
ni require la identificación de concreto adversaries, intentando reducir las ventajas
y las oportunidades de una es grupo o impidiendo posibilidades de expandirles.
Prospected Las soluciones no implican redistribución de poder ni alteraciones en
estructura social, pero foco instead encima entrega de servicio, self-ayuda, personal
y comunitario empowerment.11 Así mismo, la práctica y promoción de los estilos
de vida alternativos no requiere la presencia de adversarias definió en plazos
sociales y políticos. Los actores colectivos pueden luchar etéreos adver-saries,
variando de gusto malo o convencional, en el caso de artístico y estilo-orientó
movimientos, a “el enemigo interior” en el caso de algunos movimientos religiosos,
sin necesariamente culpando cualesquier actores sociales para el estado de cosas
pretenden modificar.
Aun así, insistiendo en la presencia de conflicto como distintivo trait de
movimiento-ments necesita no forzar analistas de movimiento social fuera de
la investigación de aquellos casos de acción colectiva donde un conflicto es
difícil de identificar, como aquellos orientado a cambio personal (p. ej. el tan-
llamado “movimiento potencial humano-ment,” o muchos countercultural,
redes de estilo de vida alternativo) y aquel foco-ing en la entrega de alguna
clase de ayuda o asistencia a un aggrieved colectividad (p. ej., el tan-called
“movimiento de solidaridad”: Giugni y Passy 2001). Esto por-spective implica,
en cambio, aquellos analistas reconocen la presencia de varios mecanismos
sociales o dinámica dentro de cada caso de acción colectiva, y centrar sus
esfuerzos encima explorando cómo tal mechanisms operar e interaccionar con
cada otro.

1.2.3 movimientos Sociales, acontecimientos, y


coaliciones

Tenemos un movimiento social dinámico yendo en cuándo los episodios solos


de acción colectiva están percibidos como componentes de un más largos-
acción duradera, más que discrete acontecimientos; y cuando quienes están
comprometidos en ellos sienten enlazados por lazos de solidaridad y de
comunión ideal con protagonistas de otras movilizaciones análogas. El curso
del movimiento para el control de los residuos tóxicos en los Estados Unidos
proporciona un buenos example de este dinámicos. De una serie de iniciativas
qué desarrollados de una base local y en relación a objetivos concretos como
bloqueadores la construcción de plantas de eliminación de los residuos en
particular áreas, el movimiento gradualmente desarrollado a un colectivo force
con una base nacional, preocupado con aspectos numerosos de la relación entre
naturaleza y sociedad, y con un mucho más sofisticados culturales elaboration
(Szasz 1994: 69–99).
24 TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS

Que construye identidad también significa que un sentido de pertenencia


colectiva puede ser principal-tained incluso después de una iniciativa concreta o
una campaña particular ha llegado a su fin. La persistencia de estos sentimientos
haber al menos dos consecuencias importantes. Primero, haga el resurgimiento de
movilización en relación a los mismos objetivos más fáciles, siempre que
condiciones favorables recur. Los movimientos a menudo oscilan entre fases
breves de actividad pública intensa y periodos “latentes” largos (Melucci 1984b;
Taylor 1989), en qué self-la reflexión y la producción cultural prevalecen. La
confianza y sol-idarity enlaces, activados en el europeos antinuclear movimientos
durante el mobi-lizations de la segunda mitad del 1970s, por ejemplo, representó
la base en qué una ola nueva de protestas momento reunido en el despertar del
Cher-nobyl incidente en 1986 (Flam 1994d). Segundo, representaciones de las
identidades mundiales y colectivas qué desarrollados en un periodo seguro también
puede facilitar, a través de una transformación gradual, el desarrollo de
movimientos nuevos y nuevos solidarities. Por ejemplo, la relación cercana que
existe en varios países entre movimientos del nuevos dejados del tempranos 1970s
y movimientos de ecología políticos sucesivos ha sido notados en un número de
ocasiones (Dalton 1994; Diani 1995un; Duyvendak 1995).
Reference A otros ejemplos de redes informales de acción colectiva, como
coaliciones, también ilustra por qué la identidad colectiva es un característica
tan crucial de movimientos sociales. En dinámica de coalición, los actores
colectivos son densamente conectados a cada cual otro en terms de alianzas, e
identificar adversarios explícitos, pero aquellos enlaces no son necesariamente
respaldados por enlaces de identidad fuerte. Las redes entre actores mobilizing
en un objetivo común toma una naturaleza puramente contingente e
instrumental. Movilización de recurso y campaigning es entonces conducido
principalmente a través de intercambios y pooling de recursos entre
organizaciones y grupos distintos. El último más que la red es la fuente
principal de participantes' identidades y lealtades. Actores instrumentally
recursos de participación para conseguir objetivos concretos, todavía no
desarrolla cualquier sentido particular de pertenecer-ing y de un futuro común
durante el proceso. Una vez una batalla concreta ha sido luchada, allí necesita
no ser cualquier legado de plazo largo en plazos de identidad y solidaridad, ni
attempts para conectar la campaña concreta en un marco más ancho. 12
Asociando los movimientos con una identidad colectiva distintiva implica
ninguna suposición sobre la homogeneidad de los actores que comparten que
identidad (en con-trast con qué está sugerido por, paraexa mple, Rootes [2000] o
McDonald [2002]). Tenemos una identidad de movimiento social dinámica a la
extensión que grupos y/o el individual sienten parte de una colectividad, mobilized
para apoyar u oppose cambio social; aquello identifican compartió elementos en
su pasado, present, y futuro expe-riences; y que otros actores sociales o políticos
ser responsabilizados para el estado de ser de asuntos desafió. Si una identidad
colectiva concreta será inclu-sive o exclusivo, y el grado a qué titulares de tal un
identity compartirá uno o varios traits, es cuestiones empíricas (ve capítulo 4).
TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS 25

1.2.4 movimientos Sociales y


procesos organizativos

Movimientos sociales, partidos políticos, y grupos de interés son a menudo


comparados con cada otro, en la suposición que ellos todos encarnan estilos
diferentes de organización política (por ejemplo, Wilson 1973). En tiempo, están
identificados con cultos y sectas religiosos (por ejemplo, Robbins 1988). Aun así,
la diferencia between movimientos sociales y estos y otras organizaciones no
consiste principalmente de diferencias en patrones o características organizativos
de comportamiento, pero del hecho que los movimientos sociales no son
organizaciones, ni siquiera de un pecu-clase de mentiroso (Tilly 1988; Oliver
1989). Son redes cuáles tampoco pueden incluir organizaciones formales o no,
dependiendo de cambiando circunstancias. Como conse-quence, una organización
sola, cualquier cosa su dominante traits, no es un movimiento social-ment.
Naturalmente pueda ser implicado en un proceso de movimiento social, pero los
dos no son idénticos, cuando reflejan principios organizativos diferentes.
De hecho, muchos los becarios influyentes en el campo han a menudo utilizó el
plazo “movimiento social” para significar ambas redes de interacción y órgano
concretoizations: cit-izens' grupos de derechos como Causa Común,
organizaciones medioambientales como la Sierra Club, o incluso sectas religiosas
como Nichiren Shoshu (McAdam et al. 1988: 695; ve también Lofland 1996). Aún
así tenemos que no uncritically aplicar a movimiento social-ment conceptos de
análisis tomaron prestado de teoría organizativa: “todo demasiado a menudo
hablamos de estrategia de movimiento, táctica, liderazgo, afiliación, reclutamiento,
divi-sion de trabajo, éxito y fracaso – plazos qué estrictamente aplicar sólo a
decisión coherente-haciendo entities (aquello es, organizaciones o grupos), no a
multitudes, col-lectivities, o movimientos sociales enteros” (Oliver 1989: 4).
Hablando de Causa Común o la Sierra Club o Nichiren Shoshu como “los
movimientos sociales” dirige uno para formular conceptos como “profesionales
social movimiento-ment” (McCarthy y Zald 1987un) o “movimientos de
organización sola” (Turner y Killian 1987: 369–70) para enfatizar las diferencias
obvias entre estos casos y la naturaleza de movimientos sociales como redes
informales. Pero categoriz-ing Causa Común como “el movimiento social
profesional” no añade mucho a las ideas proporcionadas por conceptos como
“grupo de interés público” (ve, entre otros, Etzioni 1985). De modo parecido, una
organización religiosa como Nichiren Shoshu o Liebre Krishna puede ser
oportunamente analyzed como “secta.” Este concepto tiene en cuenta la rigidez
organizativa más grande y la estructura más jerárquica que esta exhibición de
organizaciones por comparación con redes de movimiento social (Robbins 1988:
150–5). También reconoce el grado más alto de control social que está ejercido en
miembros. En contraste, lo que los plazos “grupo de interés público” y “secta” no
realmente la captura es los procesos de interacción a través de qué actores con
orientaciones e identidades diferentes venidas para elaborar un compartido system
de creencias y un sentido de pertenecer, el cual lejos supera las fronteras de
26 TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS

Cualquier grupo solo u organización, mientras manteniendo al propio tiempo


su speci-ficity y distintivo traits.
El instability de la relación entre organizativo e identidades de movimiento
significa que los movimientos son por definición fenómenos fluidos. En el
para-mation y fases de consolidación, un sentido de pertenencia colectiva
prevalece en enlaces de solidaridad y lealtad which puede existir entre
individual y asociaciones o grupos concretos. Un movimiento tiende para
quemar fuera cuándo las identidades organizativas venidas para dominar una
vez más, o cuándo “sintiendo la parte de él” refiere principalmente a un
organización y sus componentes, bastantet han a un más anchos colectivos con
fronteras borrosas (Diani 2003un).
Para cambiar el énfasis de las organizaciones solas a redes informales nos dejo,
además, para apreciar más plenamente el espacial reservado para individual dentro
de movimientos. Individual participation es esencial para movimientos, y uno de
sus características es, de hecho, el sentido de ser implicado en un esfuerzo colectivo
– sin habiendo automáticamente para pertenecer a una organización concreta.
Estrictamente hablando, los movimientos sociales no tienen members, pero
participantes.13 La participación del individual, detached de lealtades organizativas
concretas, no es necesariamente limitado a acontecimientos de protesta sola.
También pueda desarrollar dentro de com-mittees o grupos laborables, o más en
público reuniones.14 Alternatively (cuándo la posibilidad surge) uno puede apoyar
un movimiento por promover sus ideas y su punto de vista entre instituciones, otros
actores políticos, o los medios de comunicación. Aun así, la existencia de una gama
de maneras posibles de devenir implicado significa que the afiliación de los
movimientos nunca pueden ser reducidos a un acto solo de adhesión. Consiste,
bastante, de una serie de diferenció actos, el cual rienda junta tomada-forzar el
sentimiento de pertenecer y de identidad (ve también Gusfield 1994: 62).
Si movimiento socials es analíticamente diferente de movimiento social organi-
zations, cualquier organización qué está implicado en un movimiento social
dinámico puede ser considerado como “organización de movimiento social.” Esto
puede también control para agencia-cratic grupos de interés, e incluso partidos
políticos. Por decir que los partidos políticos pueden ser parte de movimientos
sociales no significamos para sugerir que “movimiento social-ments” es una
categoría teórica más ancha en qué varios tipos de organizaciones (grupos de
interés, grupos comunitarios, partidos políticos, und tan adelante) es repre-sented
cuando muchos subtipos. Bastante, sugerimos que bajo seguros y concretos con-
ditions algún partido político se puede sentir para ser parte de un movimiento y ser
reconocido como tal ambos por otros actores en el movimiento y por el general
public. Esto probablemente puede ser la excepción más que la regla, y para ser en
gran parte restringido a partidos cuya mentira de orígenes en movimientos sociales,
como los partidos Verdes (Kitschelt 1989; Richardson y Rootes 1994).
Uno razonablemente podría objetar que no matter qué fuerte su identificación
con un movimiento, los partidos políticos de hecho actúan funciones concretas en
el nivel de representación de interés y en este sentido es diferente de movimientos
sociales.
TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS 27

Aquellas diferencias existen en el nivel funcional es sin duda. Todavía, la


peculiaridad principal de los movimientos sociales no consta de su manera concreta
de por-formando la función de representación de interés. Naturalmente sus redes
de favor de interacción the formulación de demandas, la promoción de campañas
de movilización, y el elaboration y difusión de creencias e identidades colectivas.
Estos factores todo, en vuelta, contribuye a redefinir el encuadre cultural y político
en qué la acción de interest la representación tiene lugar. Aun así, cuándo
centramos en la función de representación de interés en plazos estrictos, no
miramos en la manera “el movimiento” actúa esta función. Miramos en la manera
difiere-ent organizaciones de movimiento sociales concretas esto. Si o no deciden
incluir participación en elecciones dentro de su repertorio de acción es depender-
ent a varios factores, incluyendo oportunidades externas, tácticos y/o ideo-
consideraciones lógicas, y sus enlaces a otros actores enel mo vement. El hecho
mero que deciden hacer tan, aun así, no automáticamente excluirles del
movimiento. Bastante, serán parte de dos sistemas diferentes de acción (el sistema
de partido y el sistema de movimiento social), donde jugarán funciones diferentes.
La manera tales funciones son de hecho shaped constituirá una área crucial de
investigación (Kitschelt 1989).
Va sin decir que acentuando la peculiaridad de movimientos como infor-mal las
redes no implica gobernando fuera de analistas de movimiento social' remitir el análisis
de organizaciones concretas, cuando algunos críticos han sugerido (p. ej. Pickvance
1995: 46). En cambio, fuerza analistas a explícitamente reconocer, por elaborar
conceptos concretos, la distinción entre procesos de movimiento social y organizational
procesos. Más que mirar en grupos como diversos como Causa Común o el partido Nazi
como “movimientos,” aplicando a ellos la misma etiqueta utilizada para redes de
organizaciones múltiples, sugerimos utilizar una definición rigurosa de movimientos
para identificar el co-presence e interacción dentro de cada de ellos de ambos
movimiento-ment y (burocrático) procesos organizativos. Por ejemplo, reconociendo
tales diferencias nos habilito a mejores especificar la distinción entre el partido Nazi y
el movimiento Nazi, y para explorar tél interacción entre los dos procesos. Podríamos
mapa la extensión y la forma de los enlaces, conectando el varios correctos-ala y
paramilitary organizaciones qué proporcionados en el tardíos 1910s y el 1920s el
backbone a qué era para devenir el partido Nazi (Anheier 2003). Entonces podríamos
documentar cómo el NSDAP y su más directamente conectó las organizaciones
vinieron para jugar una función cada vez más central en la red de ala correcta.
Finalmente, podríamos ilustrar qué finalmente enlaces formales entre el partido, su
indi-vidual miembros, y sus organizaciones colaterales vinieron a casi totalmente
reemplazar los enlaces informales entre ellos a través de (un) la definición de criterios
formales para afiliación individual en el partido, y (b) la dominación del partido sobre
cualquier otro organizatiencima, incluyendo el SS. Lejos de impedirnos de analyz-ing
movimientos qué en gran parte overlap con una organización concreta, una vista de un
28 TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS

Movimiento como una red informal de varios individual y las organizaciones


nos ayudarían para identificar la tensión entre movimiento y dinámica
organizativa dentro de casos empíricos complejos de acción colectiva, y
posiblemente para localizar su evolución con el tiempo.15

1.2.5 movimientos Sociales y protesta

Hasta el temprano 1970s los debates en movimientos sociales enfatizaron su


noninstitu-tionalized naturaleza (Alberoni 1984). Incluso ahora, la idea es
todavía muy popular que los movimientos sociales pueden ser distinguidos de
otros actores políticos debido a su adopción de “patrones” inusuales de
comportamiento político. Varios becarios principales-tain que la distinción
fundamental entre los movimientos y otros actores sociales y políticos es para
ser encontrados en el contraste entre estilos convencionales de polit-ical
participación (como votar o cabildeo political representantes) y protesta
pública (Rucht 1990un, 1995).
Hay algunas objeciones a considerar protesta una característica de núcleo de
movimientos sociales. Primero, juegos de protesta pública sólo una función
insignificante en movimientos con-cerned con cambio personal y cultural, en
movimientos religiosos, y el gustar. El conflicto cultural y los retos simbólicos a
menudo toman formas, como la práctica de estilos de vida concretos, la adopción
o corte de pelo o ropa seguros, la adopción de rituales, aquello sólo puede ser
considerado tan protesta si extendemos el concepto a un grado muy considerable
(Nieve 2005). Además, incluso en el reino político es cada vez más discutible si la
protesta todavía puede ser considerada un “unconven-tional,” o incluso violento o
“confrontational,” actividad. Varias formas de la protesta política cada vez más ha
devenido parte del repertorio consolidado de collec-tive acción, al menos en
democracias Occidentales. En general, la protesta parece ya no restringida a
sectores radicales, sino una opción, abierto a una mucha gama más ancha de actores
cuándo sienten su posición relativa en el proceso político para venir debajo
amenaza (p. ej., Dalton 1996).
Al mismo tiempo, aun así, la protesta todavía diferencia movimientos sociales
de otros tipos de redes, como aquellos referidos a tan “epistémicos communities”
(Haas 1992; Keck y Sikkink 1998). Estas comunidades están organizadas alrededor
de netos-trabajos de individual y grupos con concretos científicos y/o directivos
com-petences en áreas de política distinta. Como movimientos sociales, sus
miembros comparten un marco común de referencia y tomar lados en conflictual
asuntos. Las formas de intercambio y lazos estructurales de los recursos dentro de
aquellas redes son, aun así, diferentes de los que tienden para caracterizar
movimientos sociales. Las comunidades epistémicas implican los actores
habitualesly dotó con poder que hace decisión y conocimiento certificado, así
como, a menudo, imputabilidad electoral. En cambio, actores de movimiento social
normalmente ocupan una posición periférica en que hace decisión pro-cesses, y
necesidad a mobilize opinión pública para mantener su capacidad de presión.
TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS 29

Incluso si algunas formas de protesta están “normalizadas,” los movimientos


sociales tienden para inventar nuevo disruptive formas de acción – desafiante el
estado en asuntos de orden público. Cuando la ola nueva de justicia global
movilización colectiva en la vuelta del siglo ha confirmado, política de movimiento
social es todavía en gran medida “política en las calles.” El uso de protesta como
la fuente importante de presión tiene efectos pertinentes en la estructura unnd
estrategia de movimientos sociales.

1.3 En Este Libro

Mirando en movilizaciones de justicia globales recientes, en este capítulo tenemos,


ante todo, identificó cuatro llave cuestiona aquello ha atraído la atención de
analistas de movimientos sociales desde el 1960s. These Refiere a qué cambios en
el sociales struc-ture en países Occidentales, más específicamente el paso de un
industrial a un postindustrial modo de organización social, podría afectar las
formas de acción colectiva (sección 1.1.1); qué cultural y la producción simbólica
por actores sociales habilita la identificación de problemas sociales como objetos
dignos de acción colectiva y la construcción de identidad colectiva (sección 1.1.2);
qué organizativo y los recursos individuales hacen acción colectiva no sólo
possible pero también exitoso, al menos potencialmente (sección 1.1.3); cómo las
formas de la acción adoptada por movimientos sociales, sus desarrollos con el
tiempo, y su clustering en las olas más anchas de contienda son todos afectados por
el traits de los sistemas políticos y sociales en qué movimientos sociales operan
(sección 1.1.4).
Para cada de estas cuestiones hemos también identificó algunos del más influ-
ential las respuestas proporcionadas por becarios de movimiento social sobre los
años. Esto nos ha habilitado para introducir, si brevemente, elmo st influyente se
acerca aquello haber char-acterized el campo en las últimas décadas:
particularmente, si no exclusivamente, los movimientos sociales nuevos,
comportamiento colectivo, movilización de recurso, y aproximaciones de proceso
político. Mientras ninguno de estas perspectivas es reductible a cualquiera de los
asuntos identificamos, dirigen algunos más pulcramente que otros. La perspectiva
de movimientos social nueva puede ser considerada en primer lugar como teoría
de cómo las participaciones y los actores centrales de conflicto social están
modificados bajoc colgar-ing condiciones estructurales; la aproximación de
comportamiento colectiva principalmente theorizes la función de producción
simbólica en shaping acción colectiva y las condiciones para la aparición de
asuntos nuevos y/o identidades; teoría de movilización del recurso explora elc
onditions dirigiendo a la aparición de acción colectiva entre personas quién podría
tener más de uno razón buena no para comprometer en él; finalmente, las miradas
de aproximación de proceso políticas en las formas de acción colectiva y su
variación a través de diferente political regímenes y puntos diferentes en tiempo.
En la segunda parte del capítulo, mostramos movimientos qué sociales pueden
ser considerados como procesos sociales y políticos distintivos. En particular,
identificamos
30 TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS

their distinctiveness En su constando de redes informales, enlazando actores


individuales y organizativos comprometieron en conflictual relaciones a otros
actores, en la base de una identidad colectiva compartida (sección 1.2.1). Esto
nos ha habilitado para diferir-entiate social movimientos de un número de otro
relacionó procesos y phe-nomena. Estos incluyen las acciones colectivas
orientaron a nonconflictual objetivos, como en el campo de trabajo de caridad
(sección 1.2.2); coaliciones mobilizing en acontecimientos o asuntos concretos
para instrumental razones (sección 1.2.3); organizaciones políticas como
partidos y grupos de interés tradicional (sección 1.2.4); y protesta reper-toires
(sección 1.2.5).
Cuando repetidamente hemos argumentado, las cuestiones hemos identificado
es tampoco restringido a ni concreto de análisis de movimiento social, y puede ser
de interesar a un mucho espectro más ancho de analistas sociales y políticos. Al
mismo tiempo, son seguramente centrales a búsqueda de movimiento social cuando
ha desarrollado desde el 1960s, por ello nuestra decisión a órganoize el resto del
libro alrededor de tales cuestiones. Empezamos con una discusión de las bases
estructurales de movimientos contemporáneos (capítulo 2). Por este referimos por
un lado a los mecanismos por qué grupos sociales nuevos y los intereses nuevos
toman forma, mientras other grupos e interesa cuál centro aguantado anteriormente
la etapa ve su pertinencia que declina; y en el otro, al impacto qué cambios
estructurales como el crecimiento y contracción de bienestar público, y la
expansión de educación más alta, tiene en formas de politi-cal participación y, en
particular, en noninstitutional participación. El impacto de procesos de
globalización es particularmente pertinente a nuestra discusión.
Allí seguir dos capítulos dedicaron a producción simbólica. Capítulo 3
espectáculos qué culturales elaboration facilita la definición de problemas sociales
como el producto de asimetrías de poder y conflictos de interés, y la identificación
de sus causas en factores sociales y políticos qué es subject a humano inter-vention.
En capítulo 4 muestramos how la creación y refuerzo de los símbolos también
representa la base para el desarrollo de sentimientos de identidad y solidar-ity, sin
qué acción colectiva no puede tener lugar.
Un tercer nivel importante de análisis consta de los factores organizativos qué
dejar ambos la producción de significar y la movilización de recursos neces-sary
para acción. Tomamos a consideración tanto informal networking y el componente
más estructurado de la dimensión organizativa. Capítulo 5 tratos en particular con
tél análisis de participación individual. Miramos en el mecha-nisms detrás de
decisiones individuales para devenir comprometido en acción colectiva y para
sostener su compromiso con el tiempo, pero nosotros también mirada en cómo el
individual crean, a través de su participación, several oportunidades para el
desarrollo de neto-trabajos que mantiene movimientos sociales y oppositional
milieus juntos. Capítulo 6 concentra en propiedades seguras de organizaciones de
movimiento, hablando los factores – internos y externos – cuáles influyen el
adoption de seguros organi-zational modelos, y las consecuencias qué seguir para
movilización.
TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS 31

La cuarta dimensión crucial es la interacción entre movimientos y el


sistema político. Movimientos repreenvió innovador, a veces radical,
elementos tanto en la manera en qué el sistema político trabajos, y en su muy
estructura. Las características de la oferta de sistema política o negar
oportunidades esenciales para el desarrollo de acción colectiva. Esun lso, si
no exclusivamente, en referencia al sistema político que podemos evaluar el
impacto de movimientos de protesta y sus consecuencias en el plazo de medio.
En capítulo 7, reconstruimos algunos de las propiedades de ciclos de protesta
qué tiene marcado el history de décadas recientes, y los repertorios de acción
colectiva qué estuvo formado dentro de estos. En capítulo 8, presentamos
aspectos seguros de la relación entre el config-urations de oportunidades
políticas y el desarrollo de movilización. En chapter 9 hablamos, finalmente,
el problema de los efectos de movimientos. Mientras el centro de nuestro
análisis está representado por cambio político, empero intentaremos parar
atención también al impacto de movimientos en las esferas sociales y
culturales.
Los asuntos con qué estamos preocuparse es indudablemente central al analy-
sis de acción colectiva. Nuestro tratamiento, aun así, es cualquier cosa pero
comprensible. Primero, los estudios al cual referimos ha sido en gran parte
inspirado en la experiencia de “movimientos sociales nuevos” und, más
recientemente, del “movimiento de justicia global-ment.” En nuestro análisis, no
hay ninguna carencia de la referencia a trabajos dedicó a conflicto de clase
trabajadora o, aún más evidentemente, a ethnonationalist movimientos, o a
movilizaciones qué desarrollados en el último siglo, pero centramos en contri-
butions cuáles tienen analizó fenómenos como nacionalismo (Johnston 1991un;
Jenson 1995) o solidaridad de clase trabajadora en América (Fantasia 1988) por
tomar prestado-ing conceptos de analistas de “movimientos” nuevos; o cuáles han
devenido essen-tial lectura para todo aquellos preocupado generalmente con acción
colectiva (como Tilly 1978). No somos preocupados en cualquier manera
sistemática con el cuerpo enorme de literatura dedicó a fenómenos colectivos qué
es de alguna manera relacionado a “movimientos” sociales nuevos. 16
Más generalmente, nuestro trabajo no es una reconstrucción del “estado del
arte” en este campo, o capaz de reconocer el valor de todas las contribuciones
significativas en esta línea de búsqueda. Afortunadamente, en el últimos pocos
años los trabajos importantes han sido published, exhaustivamente y
comprehensively cubriendo búsqueda de movimiento social de un metodológico
(Klandermans y Staggenborg 2002) y perspectiva más general (Nieve, Soule, y
Kriesi 2004b). Este libro es en cambio un intento de presentar problemas centrales
seguros of debates recientes. Hemos escogido, además de los estudios esenciales
que relacionan al análisis de movimientos, una selección de otros trabajos qué, para
varias razones sentimos para ser ilustraciones útiles de nuestra línea de argumento.
De este punto de vista, hemos paid particulares, aunque no exclu-sive, atención a
estudia cuáles han combinado análisis teórico y empiri-cal búsqueda (entendido en
su más ancho y más inclusive sentido: Diani y
32 TÉL STUDY DE S OCIAL MOVEMENTS

Eyerman 1992; Klandermans y Staggenborg 2002). Entre el mejor-trabajos


sabidos hemos concentrado en aquellos cuáles hasta cierto punto han roto con
las hebras dominantes anteriores de theorizing y búsqueda. Para hacer nuestro
tratamiento más coherente, hemos escogido a introduce los asuntos cubrieron
por cada capítulo con los ejemplos dibujados de un movimiento particular,
centrando nuestro atten-tion en una manera selectiva en la búsqueda pertinente.
Varias razones nos forzamos para dedicar atención esparcida sólo a muchos por-
spectives, el cual nevertheless contuvo indicaciones de interés considerable a las
cuestiones posamos. Estos son en parte prácticos, de carencia de espacial, a nuestro
diffi-culty en controlar una literatura particularmente extensa. Aun así son también
en parte teóricos. Reflejan the heterogeneidad de los instrumentos conceptuales
con qué movimientos y la acción colectiva han sido analizados hasta ahora. La
gama de contextos sociales y políticos en qué movimientos desarrollan marcas él
aún más problemático de elaborar modelos qué es capable de tratar un nivel tan
alto de variación entre “condiciones” locales para acción. Es ciertamente cierto que
venciendo estas dificultades es una preocupación central para estudiantes de
movimientos; pero para incorporar todas estas líneas de pensar habría requerido un
intento de traducir conceptos y teorías a un homogeneous lengua, el cual todavía
parece un objetivo muy distante, no sólo para el dos de nosotros, pero para la
comunidad científica globalmente (ve también McAdam, Tarrow, y Tilly 1996,
2001).
2
CAMBIOS SOCIALES Y
MOVIMIENTOS
SOCIALES

En el mid-nineties Francia vio el “regreso de la cuestión social,” con un


(uneasy) alianza entre el sector público, parados, y marginalmente empleó.
En 1995, la huelga extendida del cheminots (trabajadores de transporte
público) inesperadamente soporte grande obtenido en público opinión:
“traiga millones a la calle en manifestaciones notables de solidaridad a través
del país, y forjado enlaces organizativos y simbólicos directos entre el
trabajo movement y varios grupos de excluidos, incluyendo inmigrantes
ilegales, trabajadores desempleados, y el homeless, así como el lycée y
alumnado universitario y un intelligentsia que había sido ampliamente
rechazado como apático y uninterested” (Fantasia y Stepan-Norris 2004:
556). Varios grupos insignificantes mobilized en el tan-llamados
“mouvements de sans” en behalf del “tener-nots”: nómadas sin permisos de
residencia legal, homeless personas, los parados. Los analistas describieron
una coalición entre el “moral dejado” de la clase media que mobilized en
derechos humanos, y el “sociales dejó” que mobilized los trabajadores. En
particular, los parados protestaron en 1997 contra una reforma que redujo la
financiación para unem-ployment compensación y centralizó su
administración. En 1994, el grupo Agir contre le chomage! (AC!; En inglés,
Acto Contra Unemploy-ment!) Organizó cinco marchas que empiezan de las
provincias y convergiendo en París, reclamando una reducción en horas
laborables para crear trabajos nuevos, así como más inversión “against
exclusión.” Durante y después de las marchas, los parados organizaron en
los niveles locales y nacionales. En el invierno de 1995–6, los grupos de
parados escenificaron una campaña de “trabajo req-uisitions”: con bien-
publicized blitz acciones, ellos marched a factories y empresas comerciales
con vacantes de trabajo, dejando su CVs. El fol-lowing el invierno allí sería
manifestaciones semanales y una serie de occu-pations de agencias de
ocupación local – el ASSEDICS – así como del Ecole Normale Supérieure,
los ayuntamientos, y la sede del
34 SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS

Partido socialista, reclamando la Navidad especial doles que había sido


abol-ished por la reforma.
Los parados también protestados en el nivel europeo: francés, alemán,
español, y los parados italianos convergieron en March europeos en contra
paro, inseguridad de trabajo, y exclusión en 1997; dos años más tarde, 30,000
mobilized en los mismos asuntos en la cumbre de UE en Cologne, unido
como la Red europea de Unemployed (ENU). Los recursos para estas
protestas provinieron una coalición heterogénea, transnacional que implica
Trotskyite y grupos católicos, movimientos sociales nuevos y sindicatos
– Entre el último, el francés Confédération Générale du Travail, el
italiano Confederazione Generale Italiana del Lavoro, y el alemán mag-
azine Expresa (cercano a las uniones alemanas). Notwithstanding Los
costes altos de movilización, el debate de emerger en la dimensión social
de la UE estuvo percibida como ventana de oportunidad. Con pocas
excepciones, el órgano-izations participando en la marcha no rehusó
integración europea, pero en cambio pidió una UE social y política
diferente (Chabannet 2002). AC! Declarado: “Una ‘Francia social' nunca
fue dado espontáneamente por capitalistas e irvernors . . . En una manera
similar, una Europa social vendrá sólo de intervención activa y unida de
trabajadores europeos” (en Salmones 1998: 218).
Sea durante este ciclo de protestar que los parados franceses formaron
recursos colectivos para movilización. Although Los parados son con-
sidered políticamente apáticos, con propensión muy pequeña para acción
colectiva, las organizaciones de movimiento “tuvieron éxito en modificar, al
menos para un periodo seguro, la percepción de los parados sobre su
movilización propia poten-tial. Animaron los parados para expresar
reclamaciones colectivas y convenció miles de ellos a mobilize” (Royall
1998: 362). De hecho, proporcionaron un espacio para agregación,
socializing personas quién era a menudo iso-lated (Mauer 2001), y
aumentado their habilidades relacionales y savoir faire (Maurer y Pierru
2001). La movilización proporcionó un reto a la imagen de paro como un
problema individual y consiguientemente el estigma social sujetó a él.
Además, los parados atrajeron aliados. Si el traditionally unem-ployed ha
encontrado soporte en el dejado del espectro político, en el caso francés ellos
mobilized contra qué estuvo percibido tan “traición” por el izquierdo y por
el gobierno nacional Socialista eligió en mayo 1997, acusado de haber
cambiado from “un socialismo con una cara humana a liberalismo con
humanitario undertones” (Bourneau y Martin 1993: 172). No obstante, los
parados tuvieron éxito en soporte ganador en público opinión: no sólo era la
Navidad doles reintroduced, pero comprensivo media la cobertura cambió la
imagen pública de los parados: de personas pobres queuing
SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS 35

Para caridad, a se rebela luchar para sus derechos (Salmón 1998; Maurer y
Pierru 2001: 388). Actuando en un campo institucionalizado, con bienestar-
las instituciones estatales que centran en el asunto de paro (Fillieule 1993b),
el protestors dirigió el asunto político del reconocimiento del unem-ployed
ellos – ganador una batalla simbólica cuándo su organizatel ión estuvo
invitado para conocer Presidente François Mitterrand.

Esta cuenta de la movilización de los parados franceses acentúa algunos de las


dimensiones principales que ha estructurado el debate en la interacción entre
características sociales y movimientos sociales. Ante todo, indica que los
movimientos normalmente refieren a una base que, en varias maneras, está
definido por algunas características sociales. A pesar de que en búsqueda de
movimiento social americana, crítica de rotura-abajo teoría (ve capítulo 1)
tiene para tiempo largo (e ingenioh pocas excepciones, entre qué Piven y
Cloward 1992) desvió atención de quejas estructurales (Buechler 2004), hay
no negar que la estructura socioeconómica de una sociedad influye el tipo de
conflictos que desarrolla en él. Desde el 1970s, indeed, Euro-pean becarios de
movimiento social especialmente han centrado en conflictos nuevos en
democracia Occidental: el movimiento ecológico o el movimiento de las
mujeres era los objetos típicos de esta corriente de búsqueda. Los movimientos
sociales han sido con-sidered de hecho como los portadores de
postmaterialistic valores, mientras la clase cleavage en qué los movimientos
de trabajo hubieron mobilized parecidos para ser pacificados. El “regreso” de
movimientos del pobres representa un punto de partida útil para la discusión
de la relación entre cambios en la estructura social y acción colectiva.
El cambio social puede afectar las características de conflicto social y
acción colectiva en maneras diferentes. Pueda facilitar la aparición de grupos
sociales con una ubicación estructural concreta y potencial specific intereses,
y/o reducir la importancia de existir unos, cuando el cambio de agricultura a
industria y entonces al sector de servicios sugiere. Cuando la cuenta en los
parados franceses indi-cates, aun así, las tensiones estructurales no
directamente traducen ena movilización: el misery de los parados disuade
protesta, más de facilitarlo. Social con-ditions también tener influencias
importantes a la distribución de recursos que es conducive a participación en
acción colectiva, como educación, y /o facili-tatela articulación de intereses.
El cambio a costa afuera y fábricas más pequeñas pro-duction de las
actividades industriales ha jugado contra trabajadores' capacidad de actuar
como clase, mientras el acceso creciente de las mujeres a educación más alta y
el mercado de trabajo hcuando facilitó el desarrollo de lazos nuevos entre ellos
y su aparición como actor colectivo nuevo.
36 SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS

Manteniendo en importar estas clases de efectos, centraremos encima tres tipos


de trans-formación qué tiene interesado sociedades Occidentales desde la Segunda
Guerra mundial: en la economía, en la función del estado, y en la esfera cultural.
Sin intentar para cubrir los procesos innumerables qué hacer qué es normalmente
considerado como la transición a postindusprueba (o postmoderno, disorganized,
correo-Fordist, y tan encima) sociedad (Amin 1994; Lash y Urry 1987; Castells
1996 1997; Kumar 2005), prpers limitaremos para mencionar aquellos procesos de
cambiar aquello ha sido explícitamente citado en el litro de movimiento socialature
cuando afectando movimientos sociales. Entonces hablaremos las implicaciones
más anchas de estos cambios para el análisis de innovaciones en formas de acción
colectiva. En particular, dirigiremos dos problemas: qué hace la experiencia de
“movimientos” nuevos affect nuestro entendiendo de a conceptos les gusta
“conflicto de clase” y “acción de clase”? Y cómo tener que interpretamos la
presencia agobiante de miembros del tan-llamados “clase media nueva” en
movimientos sociales al final del vigésimo siglo? En la sección próxima nosotros
de hecho foco en cambios en la estructura social y su reflexión en político cleavages
(2.1); entonces en los impactos sociales de cambios en la esfera política (2.2), y en
los efectos de cambios culturales en movimientos sociales (2.3). Nosotros
conclude por hablar la hipótesis de movimientos sociales nuevos como actores de
conflictos de clase nueva (2.4).

2.1 Estructura Social, Político Cleavages, y


Acción Colectiva

Los efectos de características socioeconómicas a conflictos sociales y políticos a


menudo han sido dirigidos por mirar en político cleavages; aquello es, en el
principal politicized líneas de conflicto (Lipset y Rokkan 1967). Político cleavages
haber tradi-tionally sido asociado con un modelo de acción colectiva en qué
actores: (1) luchó contra cada otro para proteger intereses materiales o políticos; y
(2) Definido ellos (como miembros de una clase, una facción, o un grupo
nacional) en relación a estos intereses.
Interpretaciones estructurales de los movimientos sociales en sociedad
industrial tienen ni-mally les asoció con dos procesos fundamentales. El primero
relaciona a la aparición del mercado; el segundo a la creación de la nación-estatal
y de ciudadanía moderna (Rokkan 1970; Lipset y Rokkan 1967; Giddens 1990). El
advenimiento de la economía de mercado resultada en el centrality de conflictos
entre capitales y trabajo, pero también produjo otro cleavage, opposing urbano y
agrar-ian sectores sociales. La construcción de nación-los estados es un resultado
de territori-el aliado basó conflictos qué puestos el centrales estan de estados
nuevos contra áreas periféricas; así como de conflictos entre el emergiendo pone
estatal y quienes negaron su legitimidad, apoyando en cambio el temporal poder
de estructuras eclesiásticas (iglesia–conflicto estatal). El principal choca cuáles han
caracterizado con-
SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS 37

Las sociedades provisionales han desarrollado alrededor de estas tensiones: la


consolidación de cleavages y su institucionalización ha producido para
sistemas políticos (y, enparte icular, sus sistemas de partido) una configuración
aquello se ha mantenido estable hasta las últimas décadas del vigésimo siglo
(Rokkan 1970; Bartolini y Mair 1990).1 En esta evolución, movimientos
sociales nuevos, como el movimiento de ecología, parecido para representar
una ovaciónde mesón, careciendo de una base social concreta y siendo en gran
parte indiferente al objetivo de conquistar el estado.
La estructura afecta acción colectiva no sólo por crear formas de dependencia
entre grupos sociales, y por ello el potencial para chocar intereses. Consoli-Dató
formas de la organización de vida social (de económico a acción política, de vida
familiar a asociaciones) también influir el maquillaje de actores colectivos. Acción
colectiva en la parte de grupos sociales particulares es de hecho facilitado cuándo
estos grupos son: (1) fácilmente identificable y diferenciado en relación a otros
grupos sociales; (2) dotó, gracias a redes sociales entre sus miembros, con un nivel
alto de cohesión interna y con una identidad concreta. Acción colectiva depend
por tanto en la presencia simultánea de concreto categori-cal traits y de redes qué
enlace los temas que comparten tal traits (Oberschall 1973; Tilly 1978). De esta
perspectiva, la cuestión central para el análisis de la relación entre estructura y
acción será si los cambios sociales lo han hecho más fáciles de desarrollar tales
relaciones sociales y sentimientos de solidaridad y de pertenencia colectiva, para
identificar intereses concretos, y para promover movilización relacionada. El
movimiento hacia capitalism no sólo creó conjuntos de indi-viduals unidos juntos
por el hecho que poseyeron el medio de producción (los capitalistas) o su fuerza
de trabajo propia (el proletariado); también cree sistemas de relaciones sociales qué
facilitados eld evelopment de un internos solidar-ity en estos conjuntos y su
transformación a actores colectivos. El inte-gration de la clase capitalista estuvo
facilitada por su medida limitada, el overlapping de relaciones y lazos familiares
de una naturaleza económica, y por acceder a – y control de – comunicaciones.
Muchos de los cambios estructurales describieron en las páginas siguientes – por
ejemplo aquellos relacionando a transformaciones en el organiza-tion de trabajo y
en el localization de actividades productivas – tener consecuenciasde hormiga de
la importación para la organización de interacción dentro de grupos sociales.

2.1.1 cambio Económico, fragmentación social, y


movimientos

La clase laborable era un actor central en los conflictos de la sociedad


industrial no sólo debido a su medida o la pertinencia de su función económica,
pero también como consecuencia de una gama más ancha de factores
estructurales. En el Fordist fábrica, un número grande de trabajadores actuó
tareas similares dentro de unidades productivas grandes, donde movilidad de
trabajo estuvo limitada. Estos factores certainly facilitó
38 SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS

Identificación de un actor social concreto y cohesión interna reforzada. El con-


centration del proletariado en unidades productivas grandes y en cascos urbanos
pro-duced densos networks en qué una clase concreta la identidad desarrollada
junto con una capacidad para acción de masa colectiva (Thompson 1963; Lodhi y
Tilly 1973; Snyder y Tilly 1972; Calhoun 1982; Lash y Urry 1987; Fantasia 1988;
Urry 1995).
Las bases del industriales conflict ha sido debilitado por las modificaciones que
afectan las condiciones describieron encima. Dentro industria, las maneras en qué
trabajo está organizada ha cambiado. Automatizó las tecnologías y grupos de
trabajo pequeño han reemplazado el Fordist transportador-aproximación de
cinturón y el related masa-modelo de trabajador. La solidaridad colectiva derivada
del llevando a cabo de los mismos deberes ha sido debilitados como resultado.
Empezando en el 1980s, la producción empezó para mover de fábricas grandes a
más pequeños unos como empresas costa afuera de producción cambiada unnd
empezó para confiar en proveedores para producir partes de componente de sus
productos, más que producirles ellos. Esto traído sobre una descentralización
significativa de procesos de producción dentro de una área geográfica y dirigido al
crecimiento de la economía escondida e informal (Castells 1996: chs. 2–3; Amin
1994). También el phys-ical closeness de la fábrica y los barrios habitaron por las
clases laborables, el cual una vez representó una fuente de solidaridad, es ahora
roto (Lash y Urry 1987; Hirsch 1988).2
La importancia de algunos sectores productivos cambió también, con un aviso-
disminución capaz en trabajo industrial a favor de administrativo y ocupaciones de
servicio. Altamente el trabajo cualificado en el sector terciario ha crecido durante
el mundo, cre-ating una clase media nueva profesional, el cual es muy diferente de
tradicional cler-ical trabajadores en industria o burocracias públicas. El cambio ha
afectado tanto el sector privado, con un aumento marcado en “servicios de
productor,” y el sector público, con una expansión fuerte de “servicios sociales”
relacionó a educación, salud, y cuidado social (Castells 1996: 208–20). La clase
media nueva es, aun así, lejos de un homogeneous grupo; de hecho, allí aparecer
para ser diferencias considerables en plazos de recompensas sociales dentro lo. El
status de los profesionales nuevos no es siempre comparables con aquel de los
profesionales de clase mediana tradicionales (abogados, doctores, y tan encima).
En el sector de servicios de productor nuevo (como adver-tising, marketing,
comunicaciones) precarios y abajo-pagó las formas de trabajo son bastante
extendidas y constituir discrepancias marcadas entre la capital cultural qué
individual tienen en su eliminación, y el reconocimiento – en plazos de ingresos
así como de prestigio social – cuál está obtenido de estos.3
Paro unlso aumentó en muchos países, y vino para ser considerado como
característica estructural de economías capitalistas. La relación entre el empleado
y los parados también ha cambiado, en plazos más generales: la entrada al mercado
de trabajo está retrasada másy mo re, excesivamente prolongando un nonadult
estilo de vida; cada vez más menos sectores de la población pueden contar en
estables y protegió formas de trabajo. Si es difícil de determinar eficazmente el
nivel de paro, y sus determinantes estructurales, en developed países,
SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS 39

La incidencia de trabajo precario y provisional ha aumentado enormemente


(Castells 1996: ch. 4). Creciendo las desigualdades emergen no sólo entre el
Del norte y el Sur (Pianta 2001b), but también dentro del Del norte, incluso en
las ciudades globales más modernas (ve Sassen 2000). La pobreza es también
más y más extendido: según la ONU Informe de Desarrollo Humano de 1999,
en la vuelta del siglo 80 coun-prueba tener unos ingresos per cápita qué es
bajoer que hace 10 años; 1.2 miles de millones personas viven en condiciones
de pobreza extrema, incluso por el Banco Mundial ridiculously umbral bajo
de un dólar un día.
Presión demográfica y otras dificultades en un número creciente de las áreas en
el hemisferio del sur han provocado migraciones significativas hacia las economías
más fuertes, promoviendo la expansión en sociedades Occidentales de un subpro-
letariat con un carácter étnico fuerte (Castells 1996: ch. 4, especialmente 233–4).
Mientras de ninguna manera un fenómeno nuevo (O'Sullivan Ve 1986; Olzak
1992), la escala de migraciones hacia el fin del vigésimo siglo ha ciertamente
aumentó el potencial para conflictos raciales dentro de democracias Occidentales
y creó oportunidades para la resurgencia de grupos correctos extremos (Hainsworth
1992; Llave inglesa y Solomos 1993; Wieviorka 1995; Koopmans 1996un, 1997).
Otra fuerza fundamental de cambio ha constado de la entrada masiva de mujeres
a la fuerza de trabajo pagada. Dentro de sociedades Occidentales, el fenómeno ha
sido particularmente pronounced en el sector de servicios, el cual sugiere una
relación entre dematerialization de la economía y aumentó oportunidades para
mujeres (Castells 1997: 163). Este proceso ha afectado tacha de diferenciación y
criterios para definición de interés dentro de social grupos, el cual era
anteriormente por-ceived como homogeneous. Continuando diferenciales de
sueldo entre hombres y mujeres representan, por ejemplo, una fuente obvia de
división y conflicto potencial dentro de las clases asalariadas (Castells 1997: 169).
Enel mismo ti me, el impacto combinado de mujeres está creciendo independencia
económica y profesional cometer-ments ha sacudido la base de patriarchalism
ambos en casa y dentro del pro-fessions y creó oportunidades para el desarrollo de
incluso conflictos de género más profundo ent él esfera privada (Walby 1997).
Estos procesos han debilitado el estructurales preconditions que hubo facili-
tated la aparición de una clase cleavage, particularmente en el modelo de clase
trabajadora de acción colectiva. En general, la medida de grupos sociales qué
carencia acceso lleno a ciudadanía y su entitlements ha crecido, si porque son
nómadas (legales o ilegales), porque están empleados en la economía escondida,
o comprometido en bajo-trabajo pagado. El sentido de inseguridad general ha sido
más allá reforzado port él crecimiento de movilidad individual, principalmente
horizontal: y así más las personas tienden para cambiar trabajos varios tiempo en
el curso de su vida – si fuera de elección o fuera de necessity (Esping-Andersen
1993; Castells 1996). El multipli-catión de funciones y de profesiones y del
relacionó estratificaciones, y el (re)aparición de etnicidad o género-basó líneas de
fragmentación dentro de socioe-conomic los grupos lo han hecho más difíciles de
identificar categorías sociales concretas.
40 SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS

La frecuencia más grande de cambios de trabajo y los enlaces más débiles con
territoriales com-munities haber también hizo relaciones entre quienes una vez
compartieron la misma condición estructural más inestable y fragmentary. El
trabajo parece para ser gradu-el aliado que pierde su naturaleza colectiva, un
proceso Manuel Castells ha definido tan “indi-vidualization de trabajo” (1996:
265). Es más difícil a deduct actores' intereses de su posición estructural, y
para organizar su protección en aquella base (Dalton 1988: ch. 8).
El primer efecto de estos cambios ha sido un debilitamiento del movimiento
de trabajo-ment. Si la disminución de actividades de huelga podría ser
interpretada como señal de institu-tionalization de las relaciones industriales y
depoliticization del industriales conflicts, especialmente en el nineties, la
disminución en afiliación de unión ha sido citada como un indicador de una
crisis inevitable del movimiento de trabajo. También en el sector de servicios,
un fragmented la base social es dura de organizar, especialmente con el
creciendo flexibilization del mercado de trabajo y el conectado creciente inse-
curity. Y los parados más y más numerosos y los nómadas eran también
difíciles a mobilize.
A principios del milenio nuevo, aun así, conflicto encima asuntos de trabajo otra
vez parece para ser en el aumento, a pesar de que en formas nuevas: la protesta
desempleada, incluso si esporádicamente; los trabajadores han organizado en el
Del sur, donde las uniones a menudo aumentaron su afiliación (Norris 2002: 173
ss.); grassroots las redes enlazaron trabajadores transnationally (Moody 1997).
Nuevo grassroots las uniones emergidas (ve abajo), y las uniones tradicionales
empezaron para invertir más en la movilización de los trabajadores – para caso, el
AFL-CIO ahora invertir tanto como 30 por ciento de su presupuesto en organizar
(como opposed al habitual 5 por ciento) (Fantasia y Stepan-Norris 2004: 570).
Mientras trabajo demobilized en el sector privado, en el sector público (cuando en
el ejemplo del francés cheminots) trabajadores voiced su opposi-tion a neoliberal
reforma aquello corta servicios sociales (Eckstein 2001). Cuando Piven y Cloward
(2000) notó, en los Estados Unidos allí ha sido un regreso a formas viejas de acción
secundaria como boicots comunitarios, huelgas de compasión, y huelgas generales.
En Francia (pero también en Italia y España) la vuelta del milenio ha sido
caracterizada por huelgas generales en contra reforma de pensión, privatización de
servicios públicos, corta en público salud y educación. En estas acciones, los
sindicatos estuvieron unidos por varios movimientos, bridging asuntos de trabajo
con justicia global, defensa del entorno, peas, e igualdad de género. El desarrollar-
ment de un marco de la injusticia global de hecho ha sido percibida como otra
tendencia reciente en el movimiento de trabajo. El NAFTA acuerdos de comercio
libre produjeron aumentar campañas transnacionales de canadienses, EE.UU., y
mexicano workers (Ayres 1998; Evans 2000). El dockers de Seattle, quién ya había
participado en unas huelgas transnacionales empezaron por el dockers en Liverpool
(Moody 1997), también apoyados la protesta contra el WTO, extendiendo su
solidaridad del local al enternational nivel (Levi y Olson 2000). En estas olas de
mobi-lization, el movimiento de trabajo conoció otros movimientos – ecologista,
feminista,
SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS 41

Urbano, etc. (della Porta, Andretta, Mosca, y Reiter 2005). Además, aumentando
las desigualdades estimularon el aumento de movimientos de solidaridad con
grupos insignificantes en el Norte (Giugni e Passy 2001), así como protesta por
insignificante les agrupa-selves (Simeant 1998; Kousis y Tilly 2004; Chris Tilly
2004).

2.1.2 globalización Económica y conflicto social

Los procesos estructurales también influyen la dimensión territorial de


conflicto. Tradi-tionally, los movimientos sociales han organizado en el nivel
nacional, apuntando gobiernos nacionales. Cuando el ejemplo del French los
parados ilustra, hoy las protestas nacionales son más a menudo acompañados
por transnacionales unos, en un proceso de cambio de escala (McAdam y
Tarrow 2005). Pero la relación entre eco-nomic las actividades y la geografía
ha cambiado también, en el sentido que tales actividades son cada vez más
transnacionales en ambos “sectores” fuertes “y” débiles. Por ello la
importancia de las multinacionales ha crecido: el énfasis en la división
internacional de trabajo ha facilitado la transferencia de actividades con altos
environmen-tal riesgos a las áreas más pobres. La descentralización de
producción fue mano a mano con la centralización de control económico, con
el fusionando de empresas a empresas más grandes y más grandes.
Mientras el proceso de global interdependence tiene sus raíces enel dist pasado
de hormiga (Wallerstein 1974; Tilly 2004un: ch.5), la revolución tecnológica del
1980s contribuido a intensificar “tanto la realidad de global interdependence, y
también la concienciación del mundial cuando uno unidad sola” (Robertson 1992:
8). En el eco-nomic sistema, creciendo interdependence ha significado la
transferencia de producción (en teoría económica, el “delocalization de procesos
de producción”) a países con sueldos más bajos; un fortalecimiento de empresas
de multinacional; y especialmente la internacionalización of mercados financieros,
a la extensión que algunos hablan de una “economía sin fronteras.” Global
económico interdependence ha sido un factor en empujar números grandes de
personas del Del sur y Este del mundial a su Del norte y Del oeste, pero también
en transformar the división de trabajo internacional por deindustrializing el Norte
(dónde la economía es cada vez más servicio orientado) e industrializando algunas
áreas en el Sur (en particular en Latinoamérica y Asia Central y ahora también en
Europa oriental), donde el economy utilizó para ser basado en la exportación de
materiales crudos.
La capacidad contractual de sindicatos ha sido significativamente debilitado por
la amenaza de producción emotiva a ubicaciones con costes de trabajo más bajo
(Castells 1996: ch. 2). La globalización económica también ha levantado
problemas concretos alrededor de qué actores, ambos viejos y nuevos, ha
mobilized. En el mundo Del norte, ha traído paro y especialmente un aumento en
inseguridad de trabajo y unpro-tected condiciones laborables, con comercio
frecuente-movilización de unión enth e agrícola, industrial, y sectores de servicios.
En el Del sur, también, el neoliberalist
42 SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS

Las políticas impusieron por las organizaciones económicas internacionales


importantes ha forzado países en desarrollo para hacer cortes sustanciales en
sociales gastando, provocando protestas feroces (Walton y Seddon 1994;
Eckstein 2001; Ayuero 2001). Otra vez, ya regímenes políticos débiles haber
a menudo dejó la explotación privada de recursos naturales así como ingenio
de proyectos del desarrolloh impacto medioambiental importante. Poblaciones
nativas haber mobilized contra la destrucción de su hábitat físico – para caso,
vía la destrucción de los bosques de Amazona o el con-struction de diques
grandes, a menudo patrocinados por IGOs como el Banco Mundial o el IMF
(Passy 1999).

2.2 Estados, Mercados, y Movimientos Sociales

La política y el estado han experimentado igualmente cambios pertinentes. La


acción estatal es capaz de producir actores colectivos en al menos dos maneras: por
fijar el territo-rial límites de acción política (i.e. poniendo fronteras); y por facilitar
o bloqueando el desarrollo o el crecimiento de grupos sociales seguros –
dependiendo de el pri-orities de política pública, y en particular en el destino de
público gastando.

2.2.1 fronteras Territoriales y conflictos sociales:


El transnationalization de protesta

Tradicionalmente, la acción política en la sociedad industrial presupuso un


concepto concreto de espacial y territorio, el cual tradujo al modelo de la
nación-estatal. Teniendo el monopolio de la piernaitimate uso de fuerza en una
área segura, el estatal fijado sus fronteras, y por ello el “límite” natural del
complejo de muchas relaciones más anchas convencionalmente definidos tan
sociedad. Las relaciones sociales eran, en primer lugar, las relaciones internas
a un particular nación-estatal.4 había, ciertamente, muchas comunidades
dentro de estados que estuvo dotado con formas e instituciones concretas de
self-gobierno, pero estuvieron considerados para ser en gran parte fenómenos
residuales, destinados de desaparecer tan proceso de modernizaciónes
adelantado (Herrero 1981).
Los actores colectivos pertinentes eran, en aquel tiempo, aquellos grupos
sociales capaces a influ-ence la formulación de política nacional: por ejemplo,
grupos con centrales eco-nomic y funciones profesionales, o trabajo organizado.
Político y conflicto de clase tendió para ser visto tan el conflicto entre grupos
sociales definió a escala nacional, y preocupado con el control de nacional
policymaking. La existencia de con-flicts entre el centro y la periferia que no fue
basado encima asuntos de clase no belie esta percepción: nacionalidades de
minoría, agrupa aguantar un particular cultural, histórico, y/o identidad lingüística,
definió sus estrategias y sus imágenes propias en referencia a un estado central y
al dominion cuál el estado
SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS 43

Ejercitado en su territorio, y ellos a menudo apuntados en construir su nación


propia-estados. En este caso, el objetivo no fue preocupado con política
nacional sino con la modificación de las fronteras de la nación-estatal. Aun así,
los actores se definieron en plazos del estatales y sus fronteras.
La correspondencia de nación-estatal y la sociedad es hoy en día más débil que
sea antiguamente. En este sentido, la globalización económica ha llamado a
question no sólo la función de la nación-estatal, menos y menos capaz de gobernar
dentro de sus fronteras propias, pero también, en plazos más generales, la
capacidad de políticas para intervenir en la economía y regular conflicto social. El
capitalismo global ha de hecho breached el longstanding alianza histórica entre
capitalismo, el estado de bienestar, y democracia (Crouch 2004). El cambio de
Keynesian-economía conducida – con el estatal jugando una función importante en
gobernar el mercado – a neoliberal gorra-italism implicó un reduction de
protección de trabajo así como trabajadores' derechos (Brecher, Costello, y Herrero
2000). Para impedir hemorrhages de capital, incluso izquierda gov-ernments ha
espoused los conceptos liberales de flexibilization del personal y cortes en sociales
gastando.
Overall, la capacidad del estatal de regular comportamiento dentro de un seguro
terri-tory ha claramente menoscabó. Primero, la importancia de las estructuras
políticas territoriales dentro de estados solos ha crecido. En más casos este tiene
sido intertwined con la consolidación de varias formas de descentralización
territorial (Keating 1988; Sharpe 1988; Bukowski, Piattoni, y Smyrl 2003). En
algunos casos, los movimientos hacia autonomía han dirigido a la aparición de
genuino subnational entidades, a menudo en sitios donde las tradiciones históricas
de autonomía eran fuertes, pero incluso dónde eran débiles (para caso, en España).
Al mismo tiempo, el creciendo interdepend-ence entre estados y el fortalecimiento
de algún IGOs ha debilitado la idea de los estados como las unidades pertinentes
únicas en el international sistema. El devolu-tion de poder regulador a IGOs como
la UE ha unsettled nacional atado-aries (Bartolini 2004).
La globalización no es sólo un asunto de tecnologías nuevas pero también del
polit-ical las herramientas puestas en colocar para regular y reproducir el modo de
producción a través de la proliferación de internacional gubernamental y
nongovernmental organiza-tions (U. Beck 1999; Boli y Thomas 1999). Mientras el
contexto político nacional todavía filtra el impacto de cambios internacionales en
política nacional, creciendo eco-nomic interdependence fue mano a mano con “un
significativo internationaliza-tion de la autoridad pública asociada con una
globalización correspondiente de actividad política” (Aguantado y McGrew 2000:
27). De esta perspectiva, el internacional system basó en la nación-estatal parece
para ser mutando a un sistema político compuesto de overlapping multilevel
autoridades con bajos funcionales differentia-tion y scant legitimidad democrática.
En el sistema político, la globalización ha traído un transnationalization de
relaciones políticas. De hecho, la búsqueda reciente a relaciones internacionales ha
destacado un pluralization de actores pertinentes (Nicholson 1998: 131 ss.). Desde
la segunda guerra mundial, y cada vez más en reciente
44 SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS

Años, hemos visto crecimiento en el número de órgano gubernamental


internacional-izations con ambos un en todo el mundo alcance de acción (como las
Naciones Unidas) y un regionales un (como la Unión europea, pero también
Mercosur en latinoAmeri ca y NAFTA en América del Norte); con objetivos
militares (DE LA OTAN o el Pacto de Varsovia ahora difunto) o con el objetivo
declarado de fostering desarrollo económico (el IMF, Banco Mundial, o WTO)
(Princen y Dedo 1994: 1).
Organizaciones internacionales haber contributed al spread de normas y
controles internacionales, el cual en algunos casos supersede soberanía
nacional. Cuando a menudo ha sido señalado fuera, “ninguno estados de
controles de autoridad oficiales en el contem-porary sistema mundial, pero
muchos son subject a potentes unofficial fuerzas, pres-sures e influye aquello
penetra la concha dura supuesta del estado” (Russett y Starr 1996: 62).
Además, mientras la mayoría de intergovernmental función de organizaciones
como conocer sitio y foro de discusión donde las decisiones están tomadas
unánimemente y entonces ratificados por órganos nacionales, un número de
crecer de decisiones de marca de organizaciones internacionales en una base
de mayoría que atar todos estados de miembro (ibid.). Las organizaciones
gubernamentales internacionales han sido ambas herramientas para
económicos globalization, a través de las políticas que liberalizan comercio y
el movimiento de capital, y una manera de gobernar procesos que ya no puede
ser manejado en el nivel nacional.
Esto no significa que el estado ha perdido su centrality. Analistas del recientes
impresionantes creceth de punto de economías Del este Lejano, por ejemplo, a la
función del estado como facilitator de desarrollo (Castells 1996: 89). Pero
indudablemente el pres-ence de movimientos simultáneos hacia la constitución de
supranational y sub-las autoridades nacionales ha traído sobre cambios
significativos en la construcción de actores colectivos. Por ejemplo, en el caso de
nacionalidades de minoría dentro de mul-ticultural estados, la presencia de
supranational las entidades tiende para cambiar el cri-teria según qué actores les
definenselves, así como sus estrategias. La integración europea ciertamente ha
contribuido al remobilization de minorías étnicas en estados europeos occidentales,
proporcionándoles con un nuevos interlocutor y objetivos nuevos: de la
construcción de los estados nuevos que siguent él breakup de aquellos ya en
existencia, ha habido, cada vez más, un movimiento hacia el rene-gotiation de
relaciones entre regiones centrales y periféricas de un estado, dentro de una
“Europa regional.” Al mismo tiempo, hemos visto un cambio de nación-alist
identidades con un componente étnico fuerte, a identidades que combina referencia
a la nación con atención más grande a multiculturalism y el cohab-itation de grupos
culturales diversos (Johnston 1991b; Melucci 1996). La lucha para self-gobierno
de indigenous los pueblos dirige no sólo derechos concretos, pero también los
derechos muy políticos de nonterritorially comunidades acotadas (Brysk 2000;
Yashar 1996).
Además, no sólo tiene la globalización debilitó el poder de políticas sobre eco-
nomics, ha generado conflictos transnacionales en las políticas de instituciones
internacionales, produciendo los resultados diferentes que dependen de la
organización y campo
SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS 45

De la intervención implicó. En particular, opposition ha surgido al neoliberalist


políticas del tan-llamados instituciones financieras internacionales (como el IMF o
el WB), los cuales ejercen poder coactivo fuerte a través de la amenaza de
sanciones económicas y conditionalities en crédito internacional. Más
generalmente, además de la adquisición de poder por estos en gran parte
nonrepresentative, nontransparent cuerpos, la crítica ha centrado en su manifestar
déficit democrático. Similar con-siderations puede aguantar para otros órganos
internacionales, por ejemplo, en la esfera de las Naciones Unidas, o para otros tipos
de política enacted por la Unión europea él, de asuntos medioambientales a
derechos humanos. En todo de estos casos, las oportunidades nuevas han emergido
para la movilización y las campañas condujeron en un transnacionales scale
(Tarrow 1995; Chatfield et al. 1996; Marcas y McAdam 1998). Cuando governance
empezó para implicar niveles territoriales múltiples, protestors también empezados
para desarrollar multilevel estrategias (Imig y Tarrow 2001un y 2001b; della Porta
y Tarrow 2004; della Puertoun 2004b; della Porta y Caiani 2006; ve también
capítulo 8 abajo).

2.2.2 Estatal y clases: los conflictos alrededor del


estado de bienestar

El estado no influye la formación de actores colectivos sólo a través de la definición de


fronteras territoriales a political acción. Es bien sabido que la función del estado en la
economía ha aumentado progresivamente en el curso del vigésimo siglo, peaking en el
1970s, y entonces, incluso si unequally en cruz-comparación nacional, declinando con
gastos sociales en la vuelta del siglo (Crouch 1999). Aun así considerado, el estado ha
movido de ser un guarantor del mercado a actividades económicas gestoras a través de
públicos introducir-prise; además, el estado de bienestar ha contenido desigualdades
sociales (para una discusión global, ve Aumentó 1988). Esto ha dirigido algunos
observadores para aguantar que el princi-el colega social cleavage es ya no basado en
el control del medio de producción, pero relaciona, bastante, al aprovisionamiento del
medio de supervivencia tampoco en el mercado privado o a través de intervención
pública (Saunders 1987, citado en Cromp-tonelada 1993: 103–4; ve también Taylor-
Gooby 1986; Papadakis y Taylor-Gooby 1987). Ciertamente, criterios para asignación
de recursos públicos, a menudo aquellos preocupados con la satisfacción de necesidades
básicas como albergar o transporte, ha representado una área significativa para acción
colectiva, en particular, para grupos sociales de un contexto urbano (Dunleavy 1980;
Castells 1983; Lowe 1986: Pickvance 1977, 1985, 1986).
Procesos de una naturaleza política, más que basó encima dinámica de mercado,
afectar la existencia de grupos sociales seguros. Cuando mencionado, el campo de
paro es fuertemente influido por instituciones estatales que afecta el número de
parados así como sus condiciones. Después de la Segunda Guerra mundial, el
fenómeno ha devenido más marcado, con el desarrollo del estado de bienestar, así
como de
46 SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS

neocorporatist Patrones de representación de interés (ve capítulo 8 abajo). En


décadas recientes, los movimientos sociales han criticado el modelo del
interventionist estado, así como aquello del estatal cuando mediador entre las
fuerzas de producción. Varios factores han convergido hacia un más lejanos
ensanchando del potencial para conflicto. Primero, cuando la función activa del
estado en la distribución de recursos ha devenido cada vez más evidente, las
oportunidades para movilización para proteger nunca más het-erogeneous intereses
y grupos sociales también han crecido. Segundo, mientras el expan-sion de los
derechos sociales ha ciertamente brought oportunidades más grandes para aquellos
de las clases sociales más bajas, ha también entailed redistribución fiscal
considerable. Esto ha sido considerado, en el plazo de medio, tan particularmente
pesado para las clases medias, así como insuficientes de cubrir los costes de crecer
del estado de bienestar, par-ticularly en el contexto de una población de envejecer.
El resultado ha sido una crisis de bienestar universal que es al mismo tiempo fiscal
y político. La naturaleza explícitamente política de los criterios para la asignación
de social los recursos tiene, de hecho, movilización estimulada entre las clases
medias, no sólo en la forma de antitax movimiento-ments, pero también de una
perspectiva qué es globalmente crítico del estado de bienestar (Fabbrini 1986;
Brissette 1988; Lo 1982, 1990).
Más recientemente, aun así, el movimiento de justicia global ha mobilized
principalmente en defensa del estado de bienestar. En diferir maneras en varios
países, comercio-organizaciones de unión han unido en protesta, acusando
neoliberal globalización de subor-dinating ciudadanos' aparejohts al mercado libre,
por ello aumentando las desigualdades tanto entre el Del norte y Del sur y dentro
de sus países propios. El forerunners de las protestas de Seattle de hecho pueden
ser encontradas, al menos en parte, en el mundo de trabajo. Cuando mencionado,
en varias maneras, depending en los patrones de prevalecer de representación de
interés en varios países, el 1990s vio una transformación de acción de trabajo.
Mientras, en términos generales, las federaciones de unión en países europeos
privatización aceptada, desregulación, y el “flexibilization” de trabajo, la oposición
creció en otros sectores tanto interior y uniones exteriores. En Francia, Italia, y
Alemania, por ejemplo, la protesta extendió particularmente a servicios públicos,
expresar-ing oposición a privatización y sus efectos en trabajo doméstico
conditions y la eficacia global de servicios. Acusado de defender privilegios viejos,
las uniones de sector público consenso buscado a menudo en público opinión por
reclamar para defender público contra valores privados, servicio contra bienes.
Aparte de transporte público, opposition a neoliberal las políticas económicas
extendieron particularmente a educación y salud. En estas áreas, en países con patrones
de pluralista de relaciones industriales (con varios representativos organiza-tions
compitiendo con cada otro), las uniones nuevas altamente críticas de las varias formas
de privatización surgieron y expandidos – de Coordonner, Ressembler, Constru-ira
(CRC), y Solidaire, Unitaire, Démocratique (SUD-PTT) en Francia (Béroud, Mouriaux,
y Vakaloulis 1998: 49; Sommier 2003), a Cobas en Italia (dellun Porta 2005c). En el
tan-llamado neocorporative países, con ocupacionales representa-tion limitados a una
unión sola, público-sector unionists tomó el más radical
SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS 47

Posiciones (para caso, first el OETV y entonces Ver.di en Alemania). Sea


ninguna coincidencia que estas uniones eran el más implicados en las
campañas de protesta contra neoliberal globalización (della Porta 2005c,
2005d).
A summarize: el crecimiento de la función del estado ha multiplicado el número
de actores sociales cuya existencia y las oportunidades parecen para ser enlazado
al menos par-tially a decisión política-haciendo mecanismos. Al mismo tiempo, los
procesos de globalización qué acabamos de describir, ha socavado la capacidad de
consolidated actores políticos a eficazmente mediar entre los varios intereses.
Cambios en los criterios para definir actores y para determinar las participaciones
para jugar para, ha promovido la multiplicación de identidades colectivas y de
mobilized intereses und, por tanto, también su segmentación.

2.3 Conocimiento, Cultura, y Conflictos

Los movimientos sociales también reaccionan a cambios en el sistema de valor


y la cultura en general. Hablaremos en un capítulo más tardío el discursive
oportunidades para movimientos (ve chapter 8), y sus efectos en valores,
conocimiento, y actitudes. Pero en esta sección queremos solos fuera algunos
generales culturales cambia aquello a menudo ha sido mencionado en relación
a movimientos, mirando en particular en el con-ception del públicos y el
private, el crecimiento de contracultura de movimiento, así como el desarrollo
de cultura global.

2.3.1 Cambiando fronteras entre el públicos y el


privados

Antiguamente, la expansión de la función del estado ha contribuido al modifi-


catión de las fronteras entre el públicos y el privados. El estado ha inter-vened con
crecer frecuencia en las áreas que relacionan a vida privada, en particular, a través
de la provisión de servicios sociales y la acción de agencias de bienestar. La forma
principal de soporte de ereda los ciudadanos ha sido, aun así, acompañados por
control aumentado sobre aspectos de vida que anteriormente habría quedado al
control autónomo de actores sociales. La extensión del servicio de salud público,
por ejemplo, ha favorecido el standardization de métodos terapéuticos y el
tratamiento de acontecimientos cruciales en la experiencia de individual, como
mater-nity. Una tendencia hacia la burocratización y la racionalización de la esfera
privada ha seguido (Habermas 1976, 1987; Melucci 1989, 1996).
De este modo, definiciones de criterios para determinar normalidad y deviance
en áreas qué era anteriormente dejado al control de otras instituciones (como la
iglesia o el familiar), ha devenido el objeto de intervención pública. Por ello las
premisas han sido creadas para el aumento de conflictos nuevos cuyos
protagonistas son grupos sociales nuevos – por ejemplo, profesionales y usuarios
de servicios sociales,
48 SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS

O directores con responsabilidad para la coordinación y corriendo de público


agen-cies (Hoffman 1989). En muchos casos, la protesta ha relacionado no sólo
a la eficacia de servicios pero también a su impersonality y su tendencia para
crear y repro-duce deviance y marginality en vez de combatirles.5
preocupaciones Similares están expresadas por movimientos que critica grupos
privados de profesionales (por ejemplo, sectores seguros del establecimiento
médico, farmacéutico compa-nies, y tan encima) acusó de subordinar cuidado
para usuarios de servicio a organizational y lógicas económicas (Scotch 1988;
Desario 1988; J. Gamson 1989; Chesler 1991; Oliver y Campbell 1996).
En la sociedad industrial, un (relativamente) distinción clara entre público y
privado dejó personas para definir derechos de ciudadanía como complejos de
civiles oppor-tunities (relacionando, por ejemplo, a libertad de expresión y
asociación), politi-cal oportunidades (relacionando a la derecha para votar, por
ejemplo), y beneficios sociales (relacionando para acceder a niveles mínimos de
que son bien y educación) without cualesquier cualificaciones más lejanas
(Marshall 1976). Estos derechos, de hecho, referidos al ciudadano cuando
entendido generically – normalmente macho, adulto, Occidental. La movilización
apuntada en extender derechos de ciudadanía entailed provisión del mismo
conjunto de entitlements a social agrupa cuál había sido excluido: analfabeto y
nonaffluent personas, pero también mujeres y minorías étnicas (Barbalet 1988).
Hacia el fin del vigésimo siglo, aun así, varios factores han revelado la
naturaleza problemática de esta idea de citizenship. No sólo lo tiene sido señalado
fuera cómo el modelo de Marshall era difícilmente aplicable en países otro que
Gran Bretaña (Giddens 1983; Barbalet 1988), pero también una serie de procesos
estructurales ha socavado anteriormente tomado-para-concedió comprensiones.
Ingenioh el con-solidation de la presencia de mujeres en la esfera pública (en
ambos plazos profesionales y políticos), la contradicción ha devenido clara entre
los derechos formalmente reconocidos como universales, y existiendo formas de
organización de familiar y pro-fessional vida qué tiene restringió la diversión de
las mujeres de aquellos derechos. Immi-gration Las olas a países Occidentales han
hecho el problema más urgente de cómo para articular ciudadanos' derechos de tal
manera tan para dejar para la existencia de diferir-ent grupos culturales.
Particularly, el número de crecer de nonnational los residentes empujaron para una
adaptación del muy idea de derechos de ciudadanía, con los efectos de varios
grados de protección para sombras “diferentes” de ciudadanía (Bonazzi y Dunne
1994; Soysal 1994; Cesarani unnd Fulbrick 1996).
Las iniciativas numerosas también han sido lanzadas en defensa de los derechos
de chil-dren y más generalmente de menores. Encima algunas ocasiones, estas
movilizaciones han apechugado con un significado político ancho. El
acontecimiento más visible tan lejos ha pro-bably sido la “Marcha Blanca” que en
octubre 1996, en Bélgica, dio voz a ultraje público en la protección ofrecida por
algunos cuerpos estatales a un grupo de pedófilos criminales. Con los padres del
asesinó niños entre sus promotores de jefe, la marcha era la cumbre en una ola de
masa protesta cuál cuestionó la legitimidad de las élites belgas globalmente. En
este caso, identifi-catión con una causa relativamente concreta – ningún asunto qué
emocionalmente cobrado –
SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS 49

Proporcionado la base para movilizaciones con un impacto político más ancho


lejano (Cartuyvels et al. 1997; Tondeur 1997; Rihoux y Walgrave 1997;
Walgraave y Maassens 2000).
Todos estos ejemplos sugieren que, a pesar de que la nación-estatal y
moderno citi-zenship los derechos tomaron su inspiración de identidades
universales, otras fuentes posibles de identidad colectiva y del conflicto no ha
desaparecido. Otro crite-ria regularmente aparecer al lado aquellos de un
functionalist o tipo universal, para definir actores colectivos. Estos están
basados encima “adscritos” traits como género, origen étnico, o edad. En
consecuencia, la ciudadanía aparece para ser menos un conjunto de dotar-
ments, y más un proceso de una naturaleza de chocar, donde qué es en juego
es los criterios que definen lo que un ciudadano is.6 El hecho que el estado ha
ensanchado su alcance para la intervención sólo hace la naturaleza política de
aquellas asimetrías y desigualdades más obvios.7

2.3.2 Culturas y contraculturas

Creciendo la diferenciación en estilos de vida representa otra fuente de


“problematiza-tion” de identidades sociales. En un mundo en qué lealtades de
clase parece fragmented y las ideologías políticas son en crisis, consumo
cultural, el uso de uno es tiempo libre, maneras de organizar un vida
emocional, comiendo hábitos, o estilos de coágulohes puede todo representa
un factor potente para diversificación y, en el análisis final, de estratificación
nueva, entre grupos sociales (Bourdieu 1984; Eder 1993). En muchos casos, es
sencillamente un asunto de comportamiento de consumidor individual, ningún
diferente de otro fashion fenómenos. En otros casos, aun así, el estilo de vida
deviene la participación en con-flicts con respecto a la legitimidad de emerger
formas culturales o el defensa de tra-ditional unos.
Movimientos de juventud y otro oppositional las contraculturas
proporcionan ejemplos de cómo individual el estilo de vida puede tomar arriba
de un carácter antagonista. La aparición de punk al final del 1970s tuvo
elementos cuál fácilmente podría ser reducido a moda, pero también un
antagonismo simbólico potente, en el sentido de romper fuera de consolidó
cánones de decoro y gusto bueno. En otras palabras, también tenga un
distintivo countercultural sabor. Los comentarios similares pueden aplicar a
otras formas de juventud experiencia cultural, de rap a rave.8 Más
recientemente, estilos de vida y culturas alternativos han sido nurtured en el
italianos y españoles squatted centros de jóvenes, así como en el ala radical del
antiroad movimiento en el Reino Unido (Doherty 1998; della Porta, Andretta,
Mosca, y Reiter 2005). En el tardío twen-tieth siglo, varios sectores de
movimientos sociales haber de hecho reserved consid-erable espaciales a la
acción que se preocupa bienes de consumidor y culturales elaboration. Las
mujeres es, squatters', o movimientos de juventud han promovido la
construcción de las redes alternativas que ofrecen oportunidades autónomas
para soporte y contactos sociales a their participantes (Melucci 1984un; Lyons
1988; Taylor y Whittier 1992).
50 SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS

En otros casos, la acción colectiva en estilos de vida ha sido preocupada con


el defensa de valores y tradiciones qué, esté aguantado, estuvo acechado.
Movimientos como la Mayoría Moral americana o aquellos contra la
introducción de divorcio en Italia en los años tempranos del 1970s también
escogió la esfera privada y el cri-teria por cuál puede definir un estilo de vida
particular como ethically deseable como su terreno favorecido para
movilización política (Madera y Hughes 1984; Wallis y Bruce 1986;
Oberschall 1993: ch. 13).
La importancia de crecer del estilo de vida también ha dirigido al consumismo
que deviene un objeto concreto de acción colectiva. TÉl el consumidor ha sido cada
vez más iden-tified como político, y no sencillamente como un económico, actor.
Consumidor organiza-tions ha dirigido sus intentos de movilización al públicos en
general. Estructuras para la producción y distribución de g alternativooods, por
ejemplo en el sector alimentario, ha sido creado; campañas y movilizaciones a
favor de los consumidores también han sido lanzados. Han tomado forma variar
de quasi-contraculturas (por ejemplo, en las redes alternativas que promueven y
dis-tributing comida orgánica en las etapas tempranas de movimientos
medioambientales) a interés público clásico-acción de grupo (por ejemplo, en la
forma de concentrar órgano profesional-izations como Causa Común) (McFarland
1984; Forbes 1985; Gronmo 1987; Mayer 1989; Pinto 1990; Ranci 1992). Boicots
y comercio justos han crecido enor-mously en años recientes, con una tendencia
particularmente exitosa entre personas jóvenes (Micheletti 2003; ve también
capítulo 7 abajo).
A pesar de que no siempre conectado con cada otro, todas estas actividades, de
dif-ferent puntos de vista, sorteo nuestra atención una vez más a la importancia
nueva supuesta por la acción colectiva preocupada con el defensa de modelos
seguros de comportamiento y códigos morales, más que con la conquista de poder
político o la protección de económico enterests. Varias transformaciones en la
esfera privada y en las formas de producción cultural aparecen para tener potencial
aumentado para conflictos de una naturaleza simbólica. La variedad de
experiencias de vida al cual el indi-vidual tiene el acceso es un resultado del
multiplication de lealtades de grupo. Cada cual de estos puede proporcionar
relación y recursos de identidad esenciales en girar algún de las fuentes posibles de
desigualdad a un debate público, definiéndoles problemas tan sociales más que
dificultades individuales. Cuando Pierre Bourdieu observa, de hecho, “Cada
sociedad, en cada momento, elabora un cuerpo de los problemas sociales tomados
para ser legítimos, dignos de ser debatidos, de ser hechos público y a veces offi-
cialized y, en un sentido, guaranteed por el estado” (1992: 236; emphasis en el orig-
inal). Típicamente, en el asunto de paro, esfuerzos de movilización son thwarted
por los sentimientos extendidos entre los parados que su económicos difficul-los
lazos derivan de fracasos individuales. Un precondition para la protesta es el
cambio a un con-ception de paro como problema de sociedad qué requiere
autoridades públicas para intervenir.
Ninguno de estos problemas sociales concretos ha tenido éxito, aun así, en
becom-ing la fuente primaria de identidad, capaz de representar los criterios
centrales para el
SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS 51

Organización de acción, comparable con aquel de clase o lealtad nacional en la


sociedad industrial (ve, por ejemplo, Melucci 1996). En paralelo, el mapa de
adversaries contra qué collective las energías pueden, de vez en cuando, ser mobi-
lized es igualmente variado: medios de comunicación de masas, technoscientific
élites, bienestar educativo y social instituciones, entrepreneurial clases qué
consumo de masa del control, y tan encima. En esta situación de incertidumbre,
enstead de representar el precondi-tions para la acción preocupada con objetivos
económicos o políticos, la definición de col-lective la identidad tiende para devenir
un problema autónomo, un objeto de acción colectiva como tal (a pesar de que esto
también puede aplicar a clase conflict: Pizzorno 1978). La misma cosa puede ser
dicha sobre el buscar estilos de vida y maneras de suplentes cuáles son éticamente
deseables y apropiados. Estas necesidades no resultan inevitablemente en el
desarrollo de movimientos sociales. Por ejemplo, ingenio de insatisfacciónh el con-
el estilo de vida urbano provisional no necesariamente dirige para apoyar para
environmen-tal movimientos; pueda tomar una variedad de formas, de
compromiso político en un partido político tradicional a, bastante sencillamente, la
transformación de individual con-sumer behavior, un sentido de alienación
personal, o deviant comportamiento. Aún así el crecimiento de necesidades enlazó
a la identidad representa potencial para el conflicto alrededor de qué acción de
movimiento puede, bajo condiciones favorables, desarrolla.

2.3.3 Entre el global y el lugareño

Las identidades son cada vez más definidas dentro de un proceso de acelerado
cultural glob-alization. La globalización ha producido cambios culturales
significativos en hoy mundo, un creciendo interdependence en qué acciones
sociales en unos tiempos dados y el sitio son increasingly influyó por acciones que
ocurre en sitios distantes. Tan Giddens sugerido (1990: 64), la globalización
implica la creación e intensifica-tion de una “relación en todo el mundo social qué
enlaces distintos localities de tal manera que locales happenings essha ped por los
acontecimientos que ocurren millas fuera y viceversa.” El acortamiento de espacial
y el tiempo en procesos de comunicación afecta la producción y reproducción de
bienes, cultura, y las herramientas para políticos regu-lation. De hecho, la
globalización ha sido definida como “un proceso (o puesto de procesos) cuál
encarna una transformación en la organización espacial de transacciones y
relaciones sociales – evaluados en plazos de su extensity, intensidad, velocidad e
impacto – generando transcontinental o interregional flujos y redes de actividad”
(et al Aguantado. 1999: 16).
Uno de los peligros percibió en la globalización es el predominio de una manera
sola de pensar, el cual aparentemente emergido de la derrota de “socialismo real.”
El sistema internacional había sido ligado a una estructura bipolar en qué cada cual
de los dos bloques representó una ideología diferente; la caída de la Pared de
Berlín, el cual simbólicamente marcado la defunción del bloque Oriental, el
capitalismo hecho parece el modelo solo, dominante . En plazos culturales,
“procesos” de modernización promovieron
52 SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS

Por la ciencia y la industria de ocio han adoquinado la manera para qué Serge
Latouche ha llamado “el westernization del mundo” (1989), i.e., el spread en
una escala global de creencias y valores Occidentales. A pesar de que el
escenario de un solo “McDonaldized” cultura mundial (Ritzer 1996: 2000) es
una exageración, hay un undeniable aumento en interacciones culturales con
el exportation – albeit filtrados a través de cultura local – de Occidental cultural
products y valores (Robertson 1992). La metáfora de un “pueblo global”
acentúa que estamos apuntar en el tiempo real por mensajes envió del más
faraway sitios. El spread de televisión de satélite y el internet han hecho la
comunicación instantánea posible, easily cruz-ing fronteras nacionales.
Mientras nacional y subnational las identidades no se apagan, el impacto de
valores de otras culturas y el crecimiento de la interacción entre culturas aumenta
el número de identificaciones que entrelaza a y competir con tla manguera anclada
en el territorio. La globalización no es sólo “allí” pero también “en aquí” (Giddens
1990: 22): transforma ventajas y vida diarias a resistencia local orientaron a
defender tradiciones culturales contra la intrusión de ideas extranjeras y global
asuntos. La resurgencia de formas de nacionalismo, movimientos étnicos,
movilizaciones religiosas, e islámicos (y otro) fundamentalismo(s) es en separar
una reacción a este tipo de intrusión. Mientras la globalización cultural arriesga
causar una pérdida de identidad nacional, las tecnologías nuevas también
proporcionan una variedad formidable de herramientas para movilización global,
aliviando comunicación entre los mundos una vez distantes, con una lengua que
desafía censura. Percepción aumentada de asuntos como globales también aumenta
la disposición de las personas a mobilize en un nivel transnacional. A través de la
presencia de redes transnacionales de ethnocultural comunidades, lugareño tradi-
tions también devenido delocalized y re-adaptar a contextos nuevos (Thompson
1995).

2.4 Transformaciones Estructurales,


Conflictos Nuevos, Nuevos Classes

Los procesos de cambio estructural, el cual hablamos brevemente en las


páginas de preceder, contribuye en varias maneras al debilitamiento de las
bases de conflictos sociales tradicionales y su recientes reemergence en formas
nuevas. Es más discutible si es posible de establecer una caracterización
global de conflictos nuevos en esta base. Las transformaciones hemos hablado
– y aún más así que el inter-pretations que los becarios diferentes han
proporcionado de ellos – parecer para señalar en buzo-gent y a veces
contradictory direcciones.

2.4.1 clases Quietas?


Varios de los cambios hemos mencionado punto en dos elementos comunes.
Primero, hay un aumento marcado de las actividades enlazaron a la producción
de conocimiento
SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS 53

Y a manipulación simbólica, y la identificación en el control de aquellos activ-ities


como participación importante de conflicto. El desarrollo de un adelantado
administra-tive/el sector de servicios de hecho refleja la pertinencia de crecer ent
él esfera económica de que procesa información, comparado con la transformación
de recursos naturales. La misma expansión de áreas de intervención estatal, el cual
dirige a la multiplicación de identidades y de políticamente basó intereses, hace
nunca más essential la función de decisión-fabricantes y comunicadores capaces
de desarrollar síntesis eficaces entre valores y preocupaciones heterogéneos.
Segundo, muchos las transformaciones recientes han producido el potencial
para con-flicts cuáles atajan distinciones convencionales sertween las esferas
privadas y públicas. Evidencia de este incluye la influencia que estilos seguros de
conocimiento científico y maneras seguras de organizarlo ha encima el
psychophysical que es bien del individual (por ejemplo, en el campo de terapias y
los servicios de salud). Alternativamente, uno puede pensar de la pertinencia
pública y colectiva de comportamiento de consumidor individual y modos de vida,
el cual anteriormente habría sido relegated a la esfera privada. O, otra vez, uno
podría considerar el impor-tance de unscribed traits como etnicidad o género en
conflictos respecto de la extensión y realización llena de ciudadanos' derechos.
Estos procesa punto en una área concreta de conflictos inmateriales. Su participación
está representada por el control de recursos qué produce significado, y cuáles dejan
actores para intervenir no sólo en su entorno propio pero también en el por-sonal esfera,
y sobre todo en el enlace entre estos dos niveles. Más que eco-nomic o poder político,
el conflicto social contemporáneo tiene, segúnt o esta vista, más para hacer con la
producción y circulación de información; condiciones sociales para producción y el uso
de conocimiento científico; y la creación de los símbolos y los modelos culturales se
preocuparon con la definición de individual y colectivo identities. Esta tesis ha sido
formulada en un número de maneras y con varios niveles de generalización teórica
(Touraine 1981; Lash y Urry 1987; Melucci 1989, 1996; Eder 1993), a pesar de que un
poco las conclusiones diversas han sido dibujadas según lo que el relationship entre
estructura, conflicto, y el movimiento está preocupado.
Para intentar hacer sentido de qué es indudablemente un debate altamente
diversificado ante todo tenemos que mantener en importar que quienes investigan
la relación-barco entre estructura, clase, y acción colectiva a veces movimiento de
puntos bastante diferentes de salida, y utilizar los mismos plazos en maneras
bastante diferentes. Para empezar con, tenemos que notar la diferencia entre un
“histórico” y un “estructural” (Eder 1995) o “analítico” (Melucci 1995) concept de
clase. En el primer significado, la clase es un producto histórico de sociedad
capitalista (refiriendo en otras palabras, al laborable y la clase capitalista, y a los
procesos estructurales concretos qué producidos y reforzó su identidad). Enel
segundo , una clase es un grupo de personas con las relaciones “similares dentro
de qué recursos sociales están producidas y appro-priated” (Melucci 1995: 117).
Las desigualdades en poder y estado, extraños a postindustrial sociedad, poder bien
no ser conducive al reproduction de indus-conflicto de clase de la prueba, pero
todavía proporcionar las raíces estructurales para la aparición de nuevo
54 SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS

Actores colectivos. La tensión entre estas dos aproximaciones diferentes ha


afectado reciente debates en la persistencia de clase como factor shaping
conven-tional comportamiento político, y en particular, participación electoral
(Dalton et al. 1984; Dalton 1988; Heath et al. 1991; Clark y Lipset 1991;
Franklin et al. 1992; Pakulski y Abreva 1996; Wright 1996; Manza y Brooks
1996; Szelenyi y Olvera 1996).9
Un segundo asunto entre quienes quietos reconocer la pertinencia de
interpretaciones estructurales considera la existencia de una estructura jerárquica
de tipos diferentes de conflictos, y la posibilidad de identificar el núcleo choca
comparable a aquellos cuál según interpretaciones dominantes shaped la sociedad
industrial. El intento más coherente para identificar los conflictos de núcleo de
postindustrial (o “pro-grammed”) la sociedad ha sido Alain Touraine es.10 Según
él, la categoría de movimiento social cumple una tarea fundamental, ambos en
definir las reglas por qué funciones de sociedad y en determinar el objetivo
concreto de sociología: “La sociología de movimientos sociales” escribe Touraine
(1981: 30), “no puede ser separado de una representación de sociedad como
sistema de las fuerzas sociales que compiten para control de un campo cultural.”
Aquello es, la manera en qué cada funciones de sociedad refleja la lucha entre dos
actores antagonistas quiénes luchan para control de cul-tural se preocupa cuál, en
vuelta, determinar el tipo de transformar acción qué una sociedad actúa a él
(Touraine 1977: 95–6). Es en relación al concepto de historicity – definido por el
entrelazando de un sistema de conocimiento, un tipo de acumulación, y un modelo
cultural – que los tipos diferentes de sociedad pueden ser identificados, junto con
las clases sociales qué acompañarles. Touraine Identifica cuatro tipos de sociedad,
cada presentando un par distintivo de central antag-onistic actores: agrario,
mercantil, industrial, y “programado” (un denominar cuál prefiere a
“postindustrial” sociedad). Un particular trait de la sociedad programada es la
“producción de bienes simbólicos qué modelo o transformar nuestro rep-
resentation de naturaleza humana y el mundo externo” (A uraine1987: 127; 1985).
Es el control de información que constituye la fuente principal de poder social. En
consecuencia, los conflictos tienden para cambiar del workplace a áreas como
búsqueda y desarrollo, el elaboration de información, biomedical y ciencias
técnicas, y los medios de comunicación de masas. Los actores centrales en
conflicto social son ya no clases enlazó a producción industrial pero grupos con
opposing visiones respecto del uso y asignación de recursos cognitivos y
simbólicos. En contraste with marxismo, las clases no son definidas sólo en
relación al sistema de producción (ve, por ejemplo, Miliband 1989), y acción de
clase es, de hecho, el “comportamiento de un actor guiado por orientaciones
culturales y puestos dentro de sociales rela-tions definidos por un unequal conexión
con el control social de estos orienta-tions” (Touraine 1981: 61). En cuanto a Pierre
Bourdieu, la esfera cultural es el sitio principal para el ejercicio de dominación
social. Aun así, Touraine difiere de la aproximación determinista de su colega
francés en aquel concibe movimiento social-ments cuando luchando para influir
la esfera cultural (Girling 2004).
SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS 55

Movilizaciones por dirección de movimientos sociales, por tanto, el defensa de


la autonomía de sociedad civil de los intentos de públicos y privados technocratic
grupos para extender su control encima áreas que ensanchan nunca de vida social. 11
Si Touraine la formulación coloca el análisis de conflictos y movimientos en el
centro de su general theoretical modelo, otros becarios todavía han parado atención
a la dimensión estructural, pero sin intentar para identificar nuevo dominante
cleavages. Originalmente influido por Touraine, Alberto Melucci aguantó para ser
improb-capaz la aparición de conflictos nuevos con un centrality comparables a
aquello del conflicto de trabajo capital de la sociedad industrial. 12 Melucci ha
nunca negó el por-sistent la importancia de conflictos tradicionales basó en
desigualdades de poder y riqueza, y de los actores políticos, protagonistas de estos
conflicts. Aun así, ha identificado la peculiaridad de conflictos contemporáneos
en procesos de individ-ualization cuál todavía tiene sus raíces en dinámica
estructural, todavía de un diferente amable – por ejemplo, la influencia dominante
de preocuparse instituciones sobre el self, la globalización de comunicaciones y
experiencias de vida, el crecimiento de sistemas de medios de comunicación. Y ha
negado la posibilidad de reducir las respuestas a estas difieren-entiated tensiones
estructurales a cualquier clase de paradigma unificado de acción colectiva. El
último – él en una variedad de formas – es, bastante, justo uno de opciones
innumerables abre al individual que luchan para una definición autónoma de su
self.

2.4.2 clases medias Nuevas para


movimientos sociales nuevos?

La relación entre el cambio estructural y los conflictos nuevos también ha sido vistos
de otra perspectiva. Un número de becarios ha acentuado el hecho que el cambio social
ha producido un estrato social nuevo – el tan-llamado clase media nueva. Según este
punto de vista, esta clase es capaz, comor esult de los recursos controla y de su posición,
para jugar una función central en conflictos nuevos. Para algún tiempo, análisis de
postindustrial la sociedad ha revelado, en paralelo con el crecimiento del sector de
servicios/administrativo en sociedad, la aparición de social agrupa cuáles destacan,
debido a su nivel de educación, las funciones juegan, y su ubicación social concreta,
de las clases medias tradicionales (Campana 1973; Gouldner 1979; Goldthorpe 1982;
Lash y Urry 1987; Scott 1990). El medio nuevo class, según estos análisis, está
constituido de sectores de la población que tiende para ser empleado en el sector de
servicios: son altamente educados, todavía no es comparable con directores o
profesionales tradicionales. A raíz de su tecnología-nical y cultural competence y de su
económico-posición funcional, los miembros de la clase media nueva son más
probablemente a mobilize en conflictos del tipo nuevo hemos justo describió: aquello
es, para luchar contra technocrats, el público y las agencias privadas comprometieron
enth e diseminación de información y en el con-struction de consenso, el militar y el
aparato responsable para social
56 SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS

Control. Este argumento ha sido presentado en ocasiones numerosas en años


recientes, y varias investigaciones han confirmado la presencia persistente de la
clase media nueva entre sympathizers y activistas de los movimientos nuevos.13
Aun así, es unclear si el enlace entre la clase media nueva, movimientos nuevos,
y tipos nuevos of choca eficazmente demuestra la existencia de una base estructural
concreta para estos tipos de conflicto. La presencia en masse de la clase media
nueva en movimientos de protesta podría, de hecho, sencillamente reflejar el tradi-
tional inclinación de la clase media intelectual para participar en cualquier tipo de
con-flict (Bagguley 1992, 1995un; Pakulski 1995) – su confianza más grande en
sus derechos propios y capacidad de hablar arriba y participar en vida política
(Bourdieu 1984). De esta perspectiva, la referencia a specific contradicciones
estructurales en la base de los conflictos nuevos un poco pierde consistencia. Es,
bastante, el caso que perteneciendo a la clase media, por un lado, facilita el
tomando arriba de con-cerns cuáles son generically favorables a público
involvement; y en el otro, pone en uno es eliminación recursos individuales y
competences cuáles pueden ser gastados en varios tipos de acción política.
En efecto, el análisis comparativo de participación política ha revelado en
ocasiones numerosas que variables de uns ociodemographic el tipo tiende para
explicar con eficacia igual tanto unconventional participación (particularmente
extendido entre movimiento sympathizers y activistas) y participación
convencional. hay, por ejemplo, una correlación fuerte entre dos factores tel
sombrero es normalmente considerado como indicadores de la clase media nueva
– juventud y un nivel alto de edu-catión – y varios tipos de actitudes políticas y/o
participación política (Barnes et al. 1979; Jennings et al. 1990; Opp 1989: ch. 7;
Norris 2002: 201 ss.). Intelectuales haber tradicionalmente constituyó el liderazgo
de movimientos étnicos (Herrero 1981). Además, algunas comparaciones entre
movimiento de ecología política-ments y ecologista más tradicional las corrientes
muestran que los activistas de la clase media nueva son presentes en medida igual
en ambos sectores, a pesar del hecho que es difícil de identificar conservationist
grupos como movimientos sociales nuevos (Diani 1995un: 58).
Más que en dinámica de clase extraña, el undeniable relación entre afiliación in
la clase media nueva e implicación en movimientos de protesta contemporánea
bien podrían ser dependientes encima aún así otros factores. Por ejemplo, pueda
ser el resultado del aumento enorme en acceder a educación más alta, el cual otra
vez originado en el 1960s. Más specifically, la educación más alta puede no sólo
proporcionar personas con habilidades intelectuales distintivas; pueda también
adoptivo el crecimiento de un igualitario y anti-conjunto autoritario de valores, los
cuales son overrepresented entre al menos algunos sectores del medio nuevo class
(Rootes 1995). Alternativamente, radicalismo de juventud podría ser relacionado a
generational experiencias, cuando los miembros actuales de las clases medias
nuevas tienen todo ser expuestos a aquel particulares com-bination de condiciones
sociales, constando de el fin del FríoW ar y el spread a las clases medias de
prosperidad económica sin precedentes (Pakulski
SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS 57

1995: 76; Braungart y Braungart 1986, 1992). O podría haber lifecycle efectos,
personas tan más jóvenes political la implicación podría ser dependiente en su
disponibilidad biográfica, dado su estado más incierto, su quieto unsettled vida
profesional, y su independencia más grande de conexiones familiares y
comunitarias (Piven y Cloward 1992; et al de Sinvergüenza. 1992: 146–7;
contra Inglehart 1985, 1990un).
Además, la idea de clase media arriesga comprender bastante heterogénea
sectores sociales: quienes trabajo en el sector de cultura y los servicios personales
y quienes cumplen directivos u otro technocratic las funciones arriesgan quedar
unclear; los sectores de la clase media nueva qué es más cercano a los problemas
de la administración de organizaciones (directores) y quienes, en cambio, sorteo su
legitimidad y su estado de ser controladores de recursos profesionales, inde-
pendent de concretos organizativos structures (profesionales) (Kriesi 1993: 31–2).
En particular, el proceso de globalización está supuesto para producir nuevo
cleavages entre “ganadores” y “perdedores” dentro de la clase media (Kriesi 2003).
A evalu-comió apropiadamente la importancia de la clase media nueva en
movimientos sociales, es útil, por tanto, para diferenciar entre sus componentes
internos. Tomando inspiración de Wright (1985), quién considera clases cuando
definidos por diferentes com-binations de “ventajas en el medio de producción,
asno organizativoets y habilidades o credentials,” Hanspeter Kriesi ha identificado
la característica distintiva de la clase media nueva en el hecho que ejercita algún
control sobre recursos organizativos y/o sobre habilidades profesionales, pero no
posee el medio de pro-duction (Kriesi 1993: 28; ve también Kriesi 1989b). 14 En
particular, es necesario de mirar en tres sectores diferentes de la clase media nueva:
junto al “sociocul-tural especialistas”15 es los directores y quienes cumplen
claramente funciones técnicas. TSu último grupo incluye personal administrativo
y comercial de público y entidades particulares, especialistas técnicos – algún
altamente cualificados y otros menos tan – y aquellos trabajando en “servicios
protectores” (la policía, el ejército, civil pro-tection o ganizations,y el gustar).
Concienciación de los varios componentes de la clase media nueva y evaluación
de su impacto en participación política, al lado que de aquella pertenencia a las
clases tradicionales (la clase media vieja y la clase laborable) éllp a inter-pret más
con exactitud la relación entre condición de clase y (nuevo) formas de
participación. Según una encuesta en el Netherlands, directores y socio-los
profesionales culturales son de hecho más prone que cualquiera otro grupo
socioeconómico a mobilize en movimientos nuevos, incluso cuándo controlando
para variables qué, en teoría, correlate, como educación y niveles de salario (Kriesi
1993: 196 ss.). Piel-thermore, esta tendencia es más fuerte entre personas debajo
40 años de edad, un hecho que soportes el hypothesis de un enlace entre
movimientos y recientes transfor-mations de las clases medias (1993: 198). Esto
aparece aún más significativo si uno considera que en general, posición de clase
explica participación de movimiento mejor que participación en parte tradicionaly
política; y que esto emerge de
58 SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS

Un contexto en qué el impacto de variables de clase en políticas aparece, a


muchos ana-lysts, en disminución (ve también Dalton 1988: ch. 8; contra
Heath et al. 1991).
Este dato es compatible con qué tiene emergido del análisis de envi-
ronmentalist militancy (Cotgrove y Duff 1980; Jamison, Eyerman, y Cramer
1990; Dalton 1994: ch. 5; Diani 1995un). Aquellos llenando las posiciones más
altas en grupos comprometieron en este kind de la actividad no es sólo
altamente educado y – en el sentido más ancho – miembros de la clase media,
pero también traer concreto compe-tences para aguantar en el trabajo del
grupo. El caso de ecologismo y, más generalmente, de los movimientos nuevos
analizaron por Kriesi, espectáculos tanto el continu-ity y la discontinuidad en
la relación entre las clases medias educadas y participación política. La
posición central de grupos intelectuales en collec-tive acción – un constante
trait en sociedad moderna – no ha sido desafiado por desarrollos recientes. Al
mismo tiempo, aun así, el competences y el perfil global de los activistas de
clase mediana parece para los adaptar a qué es en juego en “conflictos” nuevos.
Análisis del enlace entre ubicación de clase individual y el comportamiento
político ciertamente han traído para encender una serie de características
pertinentes de formas nuevas de participación política. Tienen, en particular,
proporcionados importantes informa-tion sobre viejos y activistas de movimiento
sociales nuevos y sympathizers. En doing tan, aun así, han postulated un enlace
directo entre la posición estructural de individual y acción colectiva que es de
ninguna manera definido. De hecho, mientras es posible de mirar en clases como
conjuntos de temas quiénes ocupan análogos posi-tions en el sistema de
estratificación social, en plazos de los recursos controlan, el prestigio disfrutan, y
sus oportunidades sociales, esto no es necesariamente una estrategia apropiada
cuándo tratando el problema de acción colectiva.16
Alternativamente, es aconsejable de analizar clases como actores colectivos
con un spe-cific identidad y self-concienciación, y enlazado a otros grupos sociales
por relación-barcos de un cooperativos o chocando naturaleza. En esta perspectiva,
la clase existe sólo en circunstancias donde las personas mutuamente reconocen y
está reconocido tan parte de un grupo social distintivo, si solidaridad e intereses
concretos entre el occu-los pantalones de posiciones sociales particulares han sido
identificados, y si, en esta base, spe-cific formas de colectivos action es para ser
promovido (Thompson 1963; Tilly 1978; Touraine 1981; Fantasia 1988; Urry
1995).
Esta perspectiva mantiene que cambios estructurales (por ejemplo, en la
economía o en la esfera privada) proporciona una base para el desarrollo de
identidades políticas nuevas, y criterios nuevos para la organización de conflicto,
sólo en casos donde estos son el objeto de acción política explícita (Bartolini y
Mair 1990; Kriesi et al. 1995). Cuando Martin Lipset y Stein Rokkan (1967)
observó, un cleav-la edad es de hecho un politicized interés. Las distinciones de
clase importantes de la sociedad industrial operada como criterios para la
organización de conflicto político porque movilización de clase había sido hecha
posible por extendió redes enlazando clase-basó organizaciones y clase
communidades entre ellos así como a sectores de
SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS 59

Otros grupos sociales con una ubicación más ambigua, en particular las clases
medias. De este modo, dos antagonistas definidos – burguesía y clase laborables –
finalmente había emergido fuera de la estructura compleja de preindustrial
sociedad. Gusta-sensato, para un nuevo cleavage para emerger, basado en la clase
media nueva – aun así definido – y/o proporcionando una articulación política
estable a los iones de decenas estructuralesnuevos acabamos de hablar,
organizaciones políticas concretas y sistemas de ambos individuales y relaciones
de grupo tienen que desarrollar. Aun así, para datar, esto parece para tener ocurrido
sólo muy parcialmente.
En primer lugar, es todavía unclear a qué extensión el servicio de clase
medio/nuevo la clase será capaz de consolidar como actor colectivo concreto, y
desarrollar un rela-tively identidad colectiva estable. La cuestión es
particularmente apropiada, dado la multiplicidad de funciones y posiciones
sociales en qué when está definido como la clase media nueva es de hecho
fragmented; y dado que movilidad frecuente – entre posiciones sociales así como
locality – está considerado cuando uno distintivo trait de postin-dustrial sociedad
(difícilmente una propiedad conducive al establishment del neto-los trabajos
necesitaron girar un conjunto a un actor colectivo) (et al de Sinvergüenza. 1992:
117; Eder 1995; Urry 1995; Melucci 1995, 1996).
La relación entre la clase media nueva y la clase media tradicional parece
para ser igualmente ambiguo (Offe 1985).17 Muchos observadores han referido
a tradi-tional los grupos de clase mediana como sectores sociales “acecharon
por modernización y por cambio.” Según esta lectura – cuál es popular entre
becarios de los movimientos de anti-nuclear (Rüdig 1990; Flam 1994d; ve
también Klandermans y Tarrow 1988; Pichardo 1997) – los movimientos
sociales contemporáneos también organizan, en parte, la protesta de aquellos
grupos sociales (como tenderos o, en general, el autónomos petite burguesía)
quiénes ven su estado acechado por socioeco-nomic transformation. Nuevo y
clases medias viejas a menudo alianzas de complexión en ciudadanos' los
comités organizaron en contra “localmente usos de tierra indeseada” (della
Porta 2004c).
De esta perspectiva, oposición a poder nuclear, y de hecho a otro dan-gerous
planta, no es sólo la señal de un cambio progresivo hacia batallas alrededor de
“postindustrial” conflictos como aquellos relacionando al control de desarrollo.
También muestra el diffidence de las clases medias tradicionales hacia actividades
y técnicos competences que are fuera de su ámbito tradicional, como aplicaciones
de tecnología alta; las señales de morales repugnar contra la subordinación de
“tradi-tional” valores al imperatives de eficacia y modernidad; la reacción a la
amenaza qué deriva de viviente con un tarroential fuente de daño medioambiental.
Las consideraciones similares podrían ser aplicadas a la propensión del medio-
clases a mobilize en la oposición a situaciones percibió para ser acechando a su
prestigio propio y decoro social, como en el caso de protests en contra delito y
urbano deviance, o aquellos contra nómadas. Estos traits no es restringido a
movimientos con una connotación de ala correcta clara; en contraste, muchos
“movimientos” sociales nuevos (incluyendo, pero no exclusivamente, ecologismo)
también parecer a
60 SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS

Presente más de características esporádicas propio de tradicionales, protesta


moral de clase mediana defensiva (Eder 1993, 1995).
En otras palabras,, condiciona favorecer el regreso de varias formas de política
de estado parecen a ha sido reproducido. En estos, la función central está tomada
por los grupos sociales amistaron por niveles seguros de prestigio y códigos
morales concretos (Turner 1988; Eder 1993). Diciendo contra la versión más
estructural del medio-class tesis, la atención pagada por la clase media a su grupo
propio iden-tity y el posicionamiento es ciertamente no un característico exclusivo
a reciente mobiliza-tions (Calhoun 1993; D'Anieri et al. 1990). Cuando la
experiencia histórica del anti-alcohol movement nos recuerdo (Gusfield 1963), la
clase media ha distin-guished él con el tiempo por su continual atención a códigos
morales, socialmente aceptar-reglas capaces de conducta, y los principios que
definen la “vida buena.” Las razones para esta actitud son para ser encontrados en
el posicionamiento históricamente ambiguo de las clases medias entre la burguesía
industrial y la clase laborable. De hecho, el petite la burguesía vino para centrar en
producción simbólica y en el defensa de su estado social propio a raíz de su sitio
incierto en el sistema de clase. Para razones similares, pueden haber sentido la
necesidad de diferenciar ellos de los grupos sociales principales, y particularmente
de aquellos – el proletariado industrial, durante el vigésimo siglo – cuál la mayoría
de estrechamente threatened su prestigio (Turner 1994; Calhoun 1993; Oberschall
1993: ch. 13; Eder 1993, 1995). Al mismo tiempo, hay razones para argumentar
que las diferencias sustanciales separan muchos ejemplos recientes de política de
estilo de vida de la versión tradicional de política de estado. Cuando Featherstone
(1987) notas, referencia a valores y estilos de vida no neces-sarily caracteriza
grupos distintivos con identidades concretas y mucho tiempo-estableció
estructuras. Los actores implicaron en la acción colectiva de hecho puede compartir
poco, apart de la referencia común a un conjunto dado de valores y preferencias
(ve también Madera y Hughes 1984; et al de Sinvergüenza. 1992, esp. p. 144; Urry
1995).
La relación entre la clase media nueva y la clase laborable no es muy más claras,
ni lo tiene sido el tema de masivo en-investigación de profundidad. En el caso del
Netherlands estudio por Kriesi, parece, por ejemplo, que incluso perteneciendo a
la clase laborable puede facilitar movilización en movimientos nuevos,
particularmente según lo que las personas más jóvenes están preocupadas. Así allí
would aparecer para ser al menos una convergencia parcial en los movimientos
nuevos de aquellos sociales agrupa cuál era ya particularmente activo en
“movimientos” de oposición histórica: hay una continuidad segura, en otras
palabras,, entre “formas” viejas “y” nuevas de oposición de clase. También en el
movimiento de justicia global, una base social heterogénea ha sido alto-encendido
como una característica innovadora o un trucaje por comparación a movimientos
del pasado (Epstein 2000; Gill 2000; Ayres 2004; Piven y Cloward 2000; Andretta,
della Porta, Mosca, y Reiter 2002 y 2003).
En suma, si hay ample la evidencia que sugiere la aparición de nuevo struc-
tural conflictos, las formas de estos conflictos y su capacidad de persistir con el
tiempo dista mucho de obvios. Nos gustaría cerrar nuestro discoussion por
mencionar unos cuantos
SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS 61

Razones más lejanas para amonestación. Primero, no hay ninguna evidencia que el
material y redis-tributive la dimensión ha perdido toda importancia en conflictos
en qué contemporáneos, nonworking-movimientos de clase son protagonistas
(Brooks y Manza 1994: 562–3). Por ejemplo, movilizaciones para el desarrollo de
servicios colectivos en cascos urbanos y para la renovación urbana ciertamente ha
sido determinada por potente con-cerns con bienes colectivos e inmateriales, como
aquellos asociados con la calidad de vida. Aun así, también han centrado en la
redistribución de recursos materiales, colocando los grupos sociales más
penalizados por transformaciones en indus-actividad de prueba y por procesos de
renovación urbana en oposición a económico agrupa cuál era los protagonistas y
promotores de estos procesos (Castells 1977, 1983, 1997; Lowe 1986; Feagin y
Capek 1991; Bagguley 1994). Estas luchas a menudo han visto la aparición de
alianzas nuevas entre trabajoing-clase y com-munity grupos (Brecher y Costello
1990). Además, formas nuevas de collec-tive la acción ha emergido basada en
condiciones de particulares unease, preocupados, por ejemplo, con la lucha contra
“pobrezas nuevas.” Movimientos y mobi-lizations de homeless las personas han
desarrollado (Cress y Nieve 1996); las iniciativas que apoyan los parados y los
grupos insignificantes han saltado arriba en todas partes, a menudo en colaboración
cercana con el sector voluntario (Bagguley 1991, 1995b; Pearce 1993). En todos
estos casos, tchoque ha sido preocupado, una vez más, no sólo con una idea general
de la calidad de vida, pero con la asignación de compañero-rial recompensas entre
grupos sociales diferentes. Atención a compañero y justicia sociales-rial
condiciones (como pobreza) devenía – uns a menudo mencionado – central en la
ola reciente de protesta contra neoliberal globalización.
Uno también tendría que notar que, según muchos observadores, movimiento
contemporáneo-ments no necesariamente demostrar una transformación actual
radical en las participaciones de collective acción así como en sus actores.
Movimientos de los años recientes bastante tendrían que ser considerados como
manifestación de las dificultades los sistemas representativos tienen en tratar las
demandas nuevas qué cambio social inevitablemente productos. De esta
perspectiva, “los movimientos nuevos” no son necesariamente el reflec-tion de
transformaciones estructurales globales, o forerunners del aumento de nuevo cri-
teria para determinar la estructura de conflictos políticos. Son, bastante, el
próximos en una serie larga de manifestaciones delc yclical naturaleza de protesta
política.18 Esta objeción es un serio un, particularmente cuándo apuntado en
inapropiado o se dio prisa generalizaciones respecto de elementos de “newness”
revelados en años recientes. Es importante de ser consciente aquello no todos los
ejemplos de collective la acción en décadas recientes es automáticamente del tipo
nuevo. El 1960s y 1970s ha visto no sólo el aumento de fenómenos políticos nuevos
pero también el resurgimiento de las iniciativas tomadas por “actores” colectivos
viejos como la clase laborable y ethnolinguistic minorías. El último la capacidad
para movilización ha manifestado él en una variedad de formas en años recientes
(Herrero 1981; Melucci y Diani 1992; Breuilly 1993; Connor 1994).
Al mismo tiempo, aun así – cuando Alberto Melucci, en particular, ha
remarcado on varias ocasiones (1988, 1994, 1995, 1996) – la cuestión del newness
de
62 SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS

Los fenómenos contemporáneos de acción colectiva tendrían que ser tratados


en un analyti-cal más que en un nivel empírico. Mirando en las características
empíricas de un dados movimiento social histórico (del movimiento
medioambiental [Jordania y Maloney 1997] al movimiento de las mujeres
[Roseneil 1995; Walby 1997] al movimiento de clase trabajadora [Calhoun
1982]) inevitablemente dirigirá al dis-covery de una mezcla de ambos
“actores” nuevos “y” viejos, “conflictos” nuevos “y” viejos (no para mencionar
“repertorios” nuevos “y” viejos de acción: capítulo 7, este volumen). Aun así,
qué realmente los asuntos es – según Melucci – evaluando el newness de
procesos concretos seguros en plazos de su centrality al systemic apropiados-
lazos de adelantó sociedades. Por ejemplo, énfasis en la identidad colectiva de
un grupo social es de ninguna manera restringido a movimientos
contemporáneos. Pero lo que renders este proceso peculiar, y por tanto
“nuevo,” en postindustrial la sociedad es su centrality, debido al actual
dominance de producción simbólica, y de las relaciones sociales qué forma él
(para una crítica de Melucci el argumento ve Elegir-vance 1995).

2.5 Resumen

En este capítulo prpers hemos preguntado si mirando en la estructura social y en


los cambios en esto pueden proporcionar una llave útil a la interpretación de collec-
tive acción. Hemos examinado una serie de modificaciones recientes a la
estructura social y política, und su potencial innovador en relación a consolidado
tacha de choca estructurar. La transformación de la esfera económica – en partic-
ular, el movimiento a un servicio más o menos adelantado y sector administrativo
y la descentralización de producción industrial – ha socavado no sólo la
consistencia numérica de la clase laborable pero también el viviente y laborable
con-ditions cuál facilitó acción de clase. Hoy afrontamos diversidad más grande
en profes-sional funciones e intereses. En el lado político, the la legitimidad del
estado se apellida a cuestionar ambos por la tendencia hacia globalización y por
aquel hacia localization, pero también por un retiro del estado en la cara del
mercado. Más allá-más, la capacidad del estatal de crear y reproducir social los
grupos a través de intervención pública ha dirigido a un número creciente de
demandas qué es frag-mented y cada vez más difícil de mediar. Potencial nuevo
para conflicto origi-nates por tanto en las fronteras cada vez más borrosas entre el
públicos y el private esferas, particularmente de la multiplicación de criterios para
definir derechos de ciudadanía y la capacidad de crecer para intervención entre
instituciones públicas y privadas, en áreas de vida privada como salud física y
mental. Los conflictos desarrollaned alrededor de la definición de identidades
nuevas con particular énfasis en asuntos culturales, estilos de vida, conocimiento.
Las movilizaciones y los movimientos han desarrollado en años recientes
alrededor de inter-ests implicando actores quiénes pueden ser asociados en varias
maneras con el transfor-
SOCIAL CHANGES Y S OCIAL MOVEMENTS 63

mations Cuál hemos justo revisó. Becarios como Touraine ha identificado los
conflictos centrales en postindustrial sociedad en luchas para el control de sym-
bolic producción. Otros ha enfatizado el nivel alto de implicación de miembros
de clase mediana nuevos en conflictos nuevos, a raíz de su posición profesional
particular y de los recursos intelectuales qué controlan. Aun así, el flex-
ibilization del mercado de trabajo ha producido pobreza creciente en el Del
norte y el Del sur; y el ataque en el estado de bienestar por dominante
neoliberalist y libre-mercado las políticas económicas ha producido el regreso
de protesta en “materialistic” asuntos de justicia social.
Es importante, aun así, para recordar que la acción colectiva no salta
automáticamente de tensiones estructurales. Al respecto es todavía dudoso que un
nuevo político cleavage, con la capacidad de estructurar los conflictos similares a
aquel demostrados por el capitales–laboratorioo o el centro–periferia cleavages en
sociedad industrial, ha emergido, dejado sólo sido consolidado. Los factores
numerosos determinan si o no esto ocurrirá. Estos factores incluyen la
disponibilidad de recursos organizativos adecuados, la capacidad de movement
dirigentes para producir appropri-comió representaciones ideológicas, y la
presencia de un contexto político favorable. El resto de nuestro libro está dedicado
a los mecanismos qué contribuir a una explicación del cambio de estructurar a
acción.
3
LA DIMENSIÓN
SIMBÓLICA DE
ACCIÓN COLECTIVA

Encima noviembre 6, 2000, la semana Empresarial dedicó una sección


especial a campañas de justicia global. Escriba: “Muchos de los
radicales que dirigen las protestas pueden ser en el fleco político. But
Han ayudado para chutar empezar un profundo rethinking
aproximadamente globalización entre gobiernos, mainstream econo-
neblinas, y empresas que, hasta que recientemente, estuvo llevado
encima mayoritariamente en oscuro pensar-tanques y seminarios
académicos” (citados en Bircham y Charlton 2001: 390). En el Foro
Económico Mundial en Davos, una reunión anual del grande y el bueno,
gurú de finanza George Soros dijo: “Este movimiento de protesta es
plugging a algo aquello es ampliamente sentía. . . . Por su disrupción han
creado una preocupación then no fue allí antes de que” (ibid.).
Estas declaraciones reflejan cambios dramáticos en ambas la
visibilidad pública de “globalización” como un asunto, y actitudes hacia
él. Hasta el 1990s, para opinión pública en todo el mundo y para muchos
actores políticos, ambos en el insti-tutions y en el grassroots, la
globalización era todavía una palabra en gran parte sin sentido. Una
década más tarde, haya devenido el concepto clave para cualquiera
hablando cambio social y político.
El crecimiento reciente de la pertinencia de globalización en público
discurso y los medios de comunicación (Andretta, della Porta, Mosca, y
Reiter 2002: ch. 1) ha visto un número creciente de actores – intelectuales,
agencias públicas, empresas privadas, dirigentes religiosos, activistas
políticos, nacionales e interna-tional nongovernmental que intentan
organizaciones para definirlo, para acentuar los riesgos sujetaron a él, así
como para destacar sus promesas (Nederveen Pieterse 2000; Ayres 2004). A
pesar de que cada vez más están reconociendo sus problemas de encargado,
actores empresariales transnacionales unnd las instituciones financieras
internacionales son todavía las seguidoras más incondicionales de globales-
ization (Anheier, Glasius, y Kaldor 2001: 9–10). Desregulación y el
comercio libre resultante de capital y los bienes están retratados como el
necesarios pre-
TÉL SYMBOLIC DIMENSION DE C OLLECTIVE UnCTION 65

Condiciones para el inicio de procesos de desarrollo sostenido fuera del


mundo Occidental. Lejos de único protegiendo intereses potentes, la
globalización económica generará difusa bien-being entre la mayoría de la
población mundial, así también facilitando el spread de prácticas
democráticas. Consiguientemente, restricciones en financieros y comercio
de bienes tendría que ser vehe-mently opposed, y los poderes económicos
importantes son plenamente justificados en jugar un active función política,
incluyendo acción militar, en aquellos países donde la libertad de los
mercados y el acceso a recursos claves es debajo amenaza.
Críticos de neoliberal la globalización de ninguna manera puede ser
reducida al tan-llamado antiglobalization movimiento, o movement para una
globalización desde abajo. También incluyen a una extensión variable
agencias e instituciones transnacionales, como el FAO o UNESCO, expertos
escépticos, mainstream medios de comunicación, iglesias, etc. Aun así,
incluso aquellos actores de sociedad civil más fre-quently comosociated con
el movimiento (redes de activista radical, organizaciones religiosas,
industriales y labradores' uniones, activistas comunitarios, envi-ronmental
grupos, izquierda partidos políticos) todavía definir el asunto y rep-
molestarse los objetivos principales y estrategias del movimiento en maneras
muy diferentes. En su identificación de globalización como un overarching
tema, este movimiento ha sido capaz de enlazar junto muchos otros asuntos
concretos y preocupaciones: cuestiones de preservación medioambiental y
justicia social; ques-tions de trabajadores' derechos en países desarrollados
y derechos de países en desarrollo para obtener acceso más fácil a mercados
Del norte, un resultado que la mezcla de nacionalismo y políticas
proteccionistas entre el movimiento de trabajo Del norte habían hecho
difíciles de conseguir en el pasado reciente; equilibrio entre derechos
comunitarios locales y tradiciones y aspiraciones a globales, universalistic
culturas.

Hay muchos señala valor notando en el encima ejemplo. Primero, los asuntos no
tienen una vida independiente exterior de los esfuerzos para caracterizarles de las
personas cuando tal. Muchos de los problemas que el antiglobalization caras de
movimiento hoy en día eran ya allí bien antes de la globalización “de palabra”
empezó circular (Tilly 2004un; Wallerstein 1974, 2004). Hambre y enfermedad en
no-Del oesteern países, guerra, imperialismo, y el colonialismo había sido
emprendido por acción colectiva sostenida tiempo innumerable en el mundo de la
posguerra, no para mencionar casos más tempranos como los derechos humanos y
antislavery movimientos, o nationalistic movimientos con un transnational base
(Hobsbawm 1994: ch. 15; D'Anjou 1996; Hanagan 1998b). Aquello ellos ahora
venidos bajo el encabezando de la globalización no puede ser explicada
exclusivamente por el creciendo interdependence entre nación-estados y suprana-
tional cuerpos. Uno también tiene que mirada en cómo los actores sociales han
elaborado defini-tions de aquellos asuntos que les enlaza a un proceso más ancho,
globalización llamada.
66 TÉL SYMBOLIC DIMENSION DE C OLLECTIVE UnCTION

Segundo, la aparición de los asuntos no es un proceso obvio. En contraste, él


orig-inates de sostenido conflicto simbólico y cultural entre actores diferentes. En
uno nivela, la globalización deviene tampoco un reclamo a synthesize todo el posi-
tives y obtiene uno puede conseguir de la extracción de barreras comerciales y elg
lobal triunfo del mercado libre; o un reclamo para todos los males, misery, y
explotación que total dominance por fuerzas de mercado pueden generar. En otro
nivel, aun así, hay diferencias sustantivas en maneras que los actores definen glob-
alization a pesar de ser en términos generales favorables o críticos de él. Even pro-
fuerzas de mercado expresan grados diferentes de soporte; los críticos pueden
oppose globalización en su entirety – cuando pasa, dice, entre correcto-ala
organizaciones nacionalistas – o bastante favorecer un democrático, grassroots
versión de él.
Tercio, los movimientos también pueden ser considerados como la
expresión de valores concretos. Movimientos sociales no objetivo único en
cambios de política concreta o la sustitución de élites políticas concretas, pero
en transformaciones más anchas en prioridades sociales, in los mecanismos
básicos a través de qué una sociedad opera. Dentro del movimiento global
nuevo encontramos la influencia fuerte de valores relacionó a ambos la
experiencia histórica del izquierdo y a experiencia religiosa. Aun así, los restos
de cuestión, lo que factores matter la mayoría? Es valora que forma
movimiento social activ-ity? O es en cambio actores de movimiento' capacidad
de representar sus preocupaciones en maneras que motiva personas para actuar
y ampliar soporte para su causa? Este dilema refleja dos vistas diferentes del
relationship entre cultura y acción colectiva.
Históricamente, la función de la cultura en acción colectiva ha sido subsumed
bajo el encabezando de ideología. La ideología es normalmente concebida como
“un conjunto relativamente estable y coherente de valores, creencias, y los
objetivos asociaron con un movimiento o un más ancho, abarcando entidad social,
[. . .] Supuso para proporcionar el rationale para defender o desafiando varios
arreglos sociales y condiciones” (Nieve 2004: 396). Piensa, p. ej., de los debates
entre pensadores marxistas unnd los dirigentes políticos que argumentan que
cultura – en particular, cultura revolucionaria – raíz del desarrollo de fuerzas
productivas y el material apropiado condi-tions; y aquellos asignando ideología
una función más activa en animar activistas y masnos para actuar (p. ej. Gramsci).
Piensa también de la atención pagada por social psy-chologists en el 1950s o 1960s
a las personalidades atrajeron a pensamiento ideológico (p. ej. Kornhauser 1959;
para una discusión ve Nieve 2004: 381).
El últimos pocos años han visto un deepening de la discusión de la función de cultura
en movimientos sociales. El marco ancho está proporcionado por el debate encima
estructura y agencia (Bourdieu 1977, 1990; Giddens 1984; Emirbayer y Mische 1988):
acto de actores sociales en el contexto de estructural constraints, los cuales no sólo
tienen que hacer con recursos materiales pero también con culturales unos. Actores'
interpre-tations de su situación, su preconceptions, sus suposiciones implícitas sobre
vida social y sus principios de guiar, sobre qué es digno o unworthy, todo dras-tically
apremiar su capacidad de actuar y la gama de sus opciones. En el mismo
TÉL SYMBOLIC DIMENSION DE C OLLECTIVE UnCTION 67

Tiempo, a través de acción, los agentes también prueban – y a veces tener éxito
– en modificar las estructuras culturales en qué son embedded. La agencia
social es de hecho al mismo tiempo orientado en la reproducción de sus
estructuras de apremiar, y la creación de nuevo unos. Esta duplicidad puede
ser encontrada incluso en la experiencia de movimientos sociales, el cual
pordef inition tendría que ser el más orientado hacia cambio (Sewell 1992;
Crossley 2002; Livesay 2003).
Este debate también ha traído sobre un reassessment de la función y carácter-
istics de ideología. A pesar de que el plazo ha quedado popular sobre los años
(Turner und Killian 1987; Oliver y Johnston 2000; Zald 2000), ha venido debajo
creciendo crítica desde el 1980s, para implicar niveles poco realistas de integración
y coherencia ideológicas, de ideológicos proximity entre movimiento social par-
ticipants, de correlation entre ideas y comportamiento (ve Nieve 2004: 396 ss. para
un resumen; Melucci 1989, 1996 para una versión clásica de esta crítica).
La crítica importante probablemente ha sido que esta idea de ideología
colapsa dos aspectos bastante diferentes de cultura: valores y las herramientas
interpretativas – hábitos, memorias, prejuicios, mentales schemata,
predisposiciones, cordura común, prac-tical conocimiento, etc. – aquello
habilita personas para hacer sentido de su mundo (Swidler 1986). Los dos
aspectos no necesariamente operan en el mismo direction. Por ejemplo,
quienes mobilize más fácilmente e intensely no es necesariamente aquellos con
los valores más fuertes pero aquellos cuya interpretación de la situación pro-
vides un claro rationale para suplente (en plazos de su percepción no sólo del
opportunities para actuar, pero también de las alternativas disponibles o de la
presión emocional ejerció encima les). En lo que sigue dirigimos estos dos
aspectos sepa-rately, empezando con valores.

3.1 Cultura y Acción: La Función de Valores

Podemos pensar de acción social cuando conducido en gran parte por los
principios fundamentales con qué actores identifican. Según esta perspectiva, los
valores influirán cómo los actores definen objetivos concretos, e identificar
estrategias qué es ambos eficaz y moralmente aceptable. Además, values
proporcionará las motivaciones necesarios de sostener los costes de acción. El más
intenso un socialización a un particu-lar visión del mundo, el más fuerte el ímpetu
para actuar. Las características de un sistema dado de valores forma los
componentes de acción.
Cómo es este modelo articulado en el caso de acción colectiva en movimientos?
Cómo, en otras palabras,, es posible de describir valores como la variable
explicativa central en el caso de acciones qué, por definición, llamada a cuestionar
al menos tanme del (culturalmente legitimized) ventajas de poder en una sociedad
dada? Por un lado, podemos relacionar acción colectiva para carecer de de
integración social en el sistema, o, alternativamente, a la incapacidad del sistema
para reproducir y reforzar su fundamental valores. La tradición de búsqueda a
movimientos con anterioridad al
68 TÉL SYMBOLIC DIMENSION DE C OLLECTIVE UnCTION

1960s, el cual en gran parte centrado en movimientos revolucionarios del


correctos y el dejados en la primera mitad del siglo, pagado great atención a
interpretaciones de este tipo (Kornhauser 1959). Hoy en día, según esta
perspectiva, la aparición de movimientos de justicia global podría ser
interpretada tan evidencia del fracaso de sociedad a instill valores de mercado
libre entre sus miembros, most notablemente la generación más joven. No
infrequently, para caso, las escuelas están culpadas por busi-ness para su
hostilidad hacia entrepreneurial cultura, y neoliberal políticos (incluyendo a
reclutas recientes les gusta Tony Blair: Beck 1999) ha a menudo criticó
escuelas en la tierra muy misma.
Por otro lado, también podríamos interpretar acción colectiva cuando evidencia
de la aparición de tendencias hacia reintegración social más que desintegración;
cuando prueba, en otras palabras,, de la formación y consolidación de new sistemas
de valor. De este punto de vista, el éxito de activismo de justicia global podría ser
enlazado al spread de valores nuevos, combinando en atención de medida igual a
justicia social, derechos humanos, preservación medioambiental. En tiempo
reciente, el enlace between la aparición de los conflictos nuevos y la dimensión de
valor ha sido acentuados con fuerza considerable en el contexto de varias formas
de “nuevos poli-tics,” conectados con asuntos medioambientales, feminismo, paz,
y derechos civiles (Dalton 1988; Kriesi 1993: 60 ss.; Rohrschneider 1988; Norris
2002). En la formulación más ambiciosa de este modelo, el aumento de
“movimientos” políticos nuevos del 1970s en adelante está asociado con procesos
más generales de cambio de valor (Inglehart 1977, 1990un, 1990b; Clark e
Inglehart 1998). Inglehart el argumento está basado encima dos suposiciones.
Según qué define como el “scarcity hypoth-esis” (Inglehart 1990un: 56), hay una
jerarquía de necesidades, y necesidades de un orden más alto (relacionando, por
ejemplo, al intelectual y personal growth del indi-vidual) es concebible sólo cuándo
aquellos de un orden más bajo (relacionando, por ejemplo, a supervivencia física)
ha sido satisfecho. Además, según el “socializa-tion hipótesis” (Inglehart 1990un:
56), hay una continuidad en vida de adulto which deja en términos generales
unaltered ambos los principios fundamentales y el orden de pri-orities establecido
en los años formativos que dirigen a madurez.
Las experiencias y estilos de vida de aquellos nacidos en el Del oeste en el
periodo fol-lowing la Segunda Guerra mundial, y quién devenía adultos en el
1960s o más tarde, ha sido muy diferente de aquellos de preceder generaciones. En
particular, han disfrutado niveles sin precedentes de affluence, acceso más fácil a
educación más alta, y exposición reducida a los riesgos de guerra. En Inglehart
vista, esta situación probablemente puede al producto condiciona cuáles son
particularmente favorables a cambios en necesidades y orientaciones básicas. En
particular, un debilitamiento gradual del sistema de “valores” materiales y su
sustitución por “postmaterial” los valores probablemente puede poner en. Mientras
el anterior refleja se preocupa relacionar a económico que es bien y seguridad
personal y colectiva, el último está orientado, bastante, hacia la afirmación de
necesidades expresivas. Ellos , en otras palabras,, prioriza individual achievement
TÉL SYMBOLIC DIMENSION DE C OLLECTIVE UnCTION 69

En privado, y una expansión de libertad de expresión, participación


democrática, y self-gobierno en el dominio público.
Para entender plenamente este fenómeno, parece esencial a charac-terize el
1960s cuando uno de aquellos momentos raros en historia qué producido las
condiciones para un cambio radical en perspectiva. De este standpoint, uno podría
argumentar que acontecimientos y transformaciones sociales de impacto y
pertinencia particulares, como el desvaneciéndose de la Guerra Fría y crecimiento
económico generalizado, pro-duced un cambio irreversible en concepciones de
vida social y política, y que una generación nueva1 de ciudadanos (y, en muchos
casos, de políticos militantes) estuvo formado. Él would así ser posible de hablar
de una 1960s generación, tan uno habla de generaciones cuándo refiriendo a los
acontecimientos de 1848, del correo-era victoriana, o de la Gran Depresión del
1920s y 1930s (Braungart y Braun-gart 1986: 217; Jamison y Eyerman 1994). La
1960s generación habría pasado encima – al menos en parte – estos nuevos
conceptualizations a grupos más jóvenes, incluso aun así los contextos políticos
posteriormente diferidos mucho.2
La aparición de postmaterial los valores ha sido documentados por un impres-
sive cantidad de dato de encuesta recogido en los EE.UU. y en países europeos
claves desde el principio del 1970s.3 Desde entonces, el vacío entre el número de
las personas que aguantan valores materialistas (i.e., en la formulación básica de
los cuestionarios de encuesta, identifying “manteniendo orden en la nación” y
“luchando aumentando precios” como sus prioridades de política superiores fuera
de una lista de cuatro) y aquel correo de holding-valores materialistas (i.e.,
asignando prioridad a “dar las personas más dicen en impor-tant decisiones de
gobierno” y “protegiendo libertad de discurso”) ha angostado sustancialmente,
incluso aunque materialists sigue en la mayoría. Además, el más joven cohorts de
la población ha sido mostrada para ser coherentemente más sen-sitive a
postmaterialist valores que más viejos cohorts (Inglehart 1990b: 75).
La evidencia empírica que relaciona para valorar el cambio ha generado un
número notable de análisis de la política nueva, la aparición de partidos verdes, y
las características de activistas y seguidores de movimientos nuevos (ve p. ej.
Rohrschneider 1988, 1993b; Dalton 1988, 1994). Han demostrado que aquellos
con postmaterial los valores son fuertemente colocados para apoyar formas nuevas
de acción colectiva o para participar en alguna manera en actividades de protesta
(Inglehart 1990b). En particular, tiene seren sugirió la situación ha dirigido al
desarrollar-ment de nuevo cleavages y el relacionó procesos de políticos
realignment a lo largo de materialistas vs. postmaterialist líneas (Dalton 1988;
Jennings et al. 1990).
Inglehart las tesis han provocado considerables debate. Sugerencias que el
crecimiento de postmaterialist los valores no podrían ser una señal de cambio
profundo sino un fenómeno transitorio, la consecuencia de un unrepeatable
conjunción histórica como aquel cuál tuvo lugar en el 1960s, ha sido rechazado por
los datos que muestran que generational sustitución de hecho resultados en un
aumento firme de postmaterialists entre Occidental – y no sólo Occidental –
públicos (Abramson
70 TÉL SYMBOLIC DIMENSION DE C OLLECTIVE UnCTION

E Inglehart 1992; Inglehart 1990b; de Graaf y Evans 1996; Inglehart 1997,


1999; Inglehart y Panadero 2000; Inglehart y Norris 2003).
El enlace entre postmaterialist las orientaciones y los movimientos sociales
nuevos también ha sido cuestionados. Hostilidad hacia la política de “orden
público” es cer-tainly una característica distintiva de estos movimientos. Han
ciertamente mobi-lized en un número de ocasiones en soporte de libertad de
expresión y democracia directa. Pero han igualmente promovió otras
movilizaciones (por ejemplo en contra guerra, nuenergía clara, o
contaminación medioambiental) cuál es difícil a con-sider independientemente
de preoccupations con seguridad personal y colectiva, o, en otras palabras,, de
puramente “preocupaciones” materialistas (Brooks y Manza 1994: 558–63).
Así mismo, la distancia de valor entre el materialista y el postmaterialist el
campamento podría ser al menos parcialmente un resultado de las cuestiones de
manera está posado, cuando requieren personas para escoger entre los elementos
que miden un o la otra orientación básica.4 Cuándo la posibilidad de un co-la
existencia de las dos orientaciones de valor está tenida en cuenta, configuraciones
más complejas pueden emerger. Por ejemplo, en su estudio de grassroots activistas
en el más Grandes Vancouver área, Carroll y Ratner (1996) encontró que un
político-economía representation de conflicto social – en términos generales
preocupaciones “materialistas” inspiradas en – a menudo co-existidos con un
representa-tion enfatizando la importancia de identidad lucha aquello era más
cercano a un “postmaterialist” punto de vista. Además, un foco exclusivo en el
materialist vs. postmaterialist la distinción un poco podría encubrir otro importante
dis-tinción, opposing actitudes autoritarias y libertarias, el cual no overlap con el
anterior (et al de Acero. 1992). A pesar de una correlación sustancial entre correo-
materialism y soporte para movimientos nuevos, la cuota de postmaterialists
abrazando autoritario, bien-valores de ala (por ejemplo, opposing el bienestar que
gasta, o defendiendo políticas autoritarias de protección de naturaleza) dista mucho
de insignificante (et al de Acero. 1992: 350–1; Middendorp 1992; Inglehart 1997:
48).
Es también necesario de preguntar a qué extensión postmaterialism puede ser
dicho a rep-molestarse la base de un nuevo político divide. En este contexto, es
importante de tomar cuenta de la relación entre el materialist–postmaterialist
dimensión y la identificación más general con izquierdo y correcto. Dado la
tendencia de movimientos sociales nuevos para los identificar con el izquierdos, el
materialistas– postmaterialist la ruptura podría ser dicha para ser sencillamente un
reworking del izquierdo–correcto divi-sion, por ello negando la existencia de
nuevo y perspectivas políticas diferentes. Hasta ahora, hay no evidencia
concluyente para apoyar o refute esta hipótesis. Es cer-tainly el caso que ambos
seguidores de partido y sindicalistas en el “viejos” left tiende para ser
postmaterialists, tan hacer movimiento izquierdo y nuevo nuevo activistas y sym-
pathizers (Inglehart 1990un: ch. 11; 1990b: 90).
Por otro lado, dista mucho de aclarar lo que el izquierdo–la dimensión correcta
refiere a en plazos estrictos. En el muy mínimo, pueda be deconstructed a dos inde-
pendent dimensiones, uno midiendo orientaciones a asuntos socioeconómicos, el
TÉL SYMBOLIC DIMENSION DE C OLLECTIVE UnCTION 71

Otro, orientaciones a libertarios versus actitudes autoritarias. Postmaterialism A


veces ha sido encontrado para ser un pobre predictor de ambos tipos de
orientaciones (Middendorp 1992; ve también Kriesi 1993). Respecto a la relación
entre orientaciones izquierdas generales y movimientos, es sólo sectores seguros
del izquierdo – de la tradiciónno comunista – cuáles parecen para ser claramente
comprensivos a los movimientos nuevos (Inglehart 1990un: ch. 11). Además,
mientras un genérico identi-fication con el izquierdo proporciona una explicación
adecuada para el interés en los asuntos levantó por los movimientos nuevos,
postmaterialism ofrece una explicación mejor de la disposición de individual para
participar en estos movimientos (1990un). Uno también podría argumentar que,
más que postmaterialism siendo la base para un nuevo político cleavage, la
interpretación opuesta podría well ser cierto. En otras palabras,, donde un nuevo
cleavage ha emergido para razones históricas concretas (gusta en Alemania, donde
los Verdes han devenido un jugador político importante), entonces esto bien puede
haber sido organizado alrededor del materialista vs. postmaterialist dividir; dónde,
aun así, esto no ha sido el caso (por ejemplo, en los EE.UU.), entonces
postmaterialist los valores no pueden ser asociados con cualquier facción política
concreta (Triunfo 1991).
Dudas sobre la relación entre movimientos y postmaterialism ha sido reinforced
en años recientes por dos desarrollos muy diferentes. Por un lado, la aparición del
antiglobalization el movimiento ha levantado duda sobre el enlace entre
postmaterialism y política progresiva. Ciertamente, el corto-edad de encuestas
explícitamente measuring actitudes hacia este movimiento, y/o par-ticipation en él,
renders lo difícil de comparar él con los movimientos sociales nuevos. Es
ciertamente cierto que un grado seguro de overlap existe cuándo viene a mobi-
lizations encima la paz/medioambiental/human asuntos de derechos. En tales
asuntos, el cor-relación a postmaterialism es bien demostrado (Norris 2002). Y es
también cierto que las encuestas condujeron entre participantes en reuniones
importantes como Genoa o el Florence el foro Social europeo sugiere que muchos
encuestados (aproximadamente 20 por ciento) residuos para localizar ellos en el
izquierdos–correctos cleavage. Al mismo tiempo, aun así, movimientos de justicia
global también la dirección emite aquello es claramente ma-terialist, relacionado a
condiciones laborables y vivientes básicas, a pesar de que son a menudo definidos
en una manera qué combina intereses materiales con asuntos de sostenibilidad,
protección medioambiental, y el gustar. Además, la mayoría grande de quienes
consideración quieta el izquierdo–distinción correcta como significativo identificar
con el dejado del political espectro: aproximadamente 25 por ciento de activistas
entrevistaron en el Foro Social europeo en Florence localizó ellos en el lado
izquierdo extremo del izquierdo–correcto continuum y 50 por ciento en el
izquierdos, con un adicionales 10 por ciento que escogen el centro-izquierdo (della
Porta, Andretta, Mosca, y Reiter 2005). Finalmente, mientras dato disponible
(Inglehart 1997; Norris 1999) sugiere una relación positiva entre postmaterialism
y democracia en ambas democracias viejas y nuevas, también sugieren que
postmaterialists es a favor de mercados globales abiertos (otra vez, esta evidencia
es difícil de interpretar tan pueda significar ambos un democráticos y
nondemocratic globalización).
72 TÉL SYMBOLIC DIMENSION DE C OLLECTIVE UnCTION
El últimos pocos años también han traído sobre un ejemplo totalmente diferente del
enlace entre valores y acción colectiva. Mientras que la discusión había centrado en
valores (en particular, cambio de valor) y política democrática participativa, el
reemergence de conflictos étnicos y tribales en muchas áreas del mundo, y más
particularmente el spread de fundamentalismo (bien antes de que septiembre 11 y no
restringido a Islam: Moaddel 2002; Bennani-Chraïbi y Fillieule 2003; Madera-baya y
Herrero 1998), ha puesto un orden del día intelectual dramáticamente diferente. Samuel
Huntington es (1993, 1996) enfrentamiento bien “sabido de tesis” de civilización y
cognate argumentos, sugiriendo un conflicto fundamental entre Islam y el Del oeste, ha
asignado valora una función muy diferente que el implicado por postmaterialist el-
orists. Ellos proposar una vista de movimientos sociales tan profundamente embedded
en fuertemente aguantó conjuntos de valores, los cuales representan la participación
para conflictos fundamentales, suscep-tible de orientar relaciones futuras entre áreas
importantes del mundo.
Aun así, pruebas empíricas de esta tesis suggest un cuadro más complejo:
con-trary a expectativas, Norris e Inglehart (2002) encontró actitudes hacia
democracia para ser muy similar en los dos campamentos; pero ellos también
encontrados profundos e irreconcilable diferencias en la definición de estilos
de vida privados, especially en relaciones de género y libertad sexual. Esto
aguanta cierto a pesar del sustancial pres-ence de valores cristianos
conservadores en países Occidentales importantes, más notablemente los
Estados Unidos (Woodberry y Herrero 1998). Norris E Inglehart conclusión
que “Los valores centrales que separan Islam y el Del oeste revuelve lejos más
centrally alrededor Eros que Demos” (2002: 3) trae soporte más lejano al
argumento de un cambio gradual en prioridades de “política pública” a
“política personal,” y no es necessarily en contradicción con argumentos
aproximadamente correo-valores materialistas en el Del oeste.
Una objeción más fundamental a la teoría de cambio de valor dirige la relación
entre valores y acción. Si los valores de las personas pueden explicar su divertidos-
damental sensibilidad a problemas y cuestiones particulares, su impacto necesita
no necesariamente ir allende este nivel. En su estudio de activistas de derechos
civiles en los EE.UU. en el 1960s, McAdam (1986), para caso, encontrado que
activistas probables' com-mitment a valores de libertad y ela calidad era un pobre
predictor de su participación real. Mirando en dato de encuesta de varios países
europeos del oeste, Fuchs y Rucht (1994) encontró ninguna correlación entre
soporte ancho para envi-ronmentalism y participación. La decisión para actuar – y,
specifically, para actuar col-lectively – depende no sólo en básico interiorizó
principios y/o actitudes pero en una evaluación compleja de las oportunidades y
constreñimientos para acción. Los valores están articulados a través de objetivos
concretos y está asociado con strategies de appro-priate conducta. Es así necesario
de interpretar la situación externa como favorable a acción, o al menos tan
requiriendo la movilización del individual, más que retirada o conformidad. Y es
esencial de ser capaz de transformar endividual valores a colectivos unos,
identificando elementos de convergencia y solidaridad con otros compartiendo los
mismos valores (Klandermans 1988; Melucci 1989, 1996; Gamson 1992un).
TÉL SYMBOLIC DIMENSION DE C OLLECTIVE UnCTION 73

Enothe r palabras, es necesario de tener una vista de realidad qué enlaces el


ámbito de valores con el estratégico y solidaristic ámbito en una moda coherente.
Atten-tion Mosto también ser pagado ambos a la dimensión cognitiva de acción,
cuando haremos en el siguientes sections de este capítulo, y a la relación entre
acción e identidad colectiva – un tema qué consideramos en el capítulo próximo.

3.2 Cultura y Acción: La


Perspectiva Cognitiva

3.2.1 acción Colectiva como cognitivo praxis

La idea que cultura, y específicamente su impacto en acción colectiva, puede ser


reducido a los valores ha sido polémicos para bastante algún tiempo. En particular,
ha sido observado que “acción de influencias de la cultura no por proporcionar los
valores definitivos hacia qué acción está orientado, but por shaping un repertorio o
‘caja de herramienta' de hábitos, habilidades, y los estilos de qué personas
construyen ‘estrategias de acción' ” (Swidler 1986: 273). Es decir, la cultura
proporciona el aparato cognitivo qué necesidad de personas para los orientar en el
mundo. ThEs el aparato consta de un mul-tiplicity de cultural e ideational
elementos qué incluir creencias, ceremonias, formas artísticas, y prácticas
informales como lengua, conversación, historias, rituales diarios (Swidler 1986:
273). El contenido de modelo culturals, del cual los valores son un componente
clave , es de importancia secundaria aquí en relación a la visión de cultura como
puesto de instrumentos que uso de actores sociales para hacer sentido de sus
experiencias de vida propias (ve también Eyerman y Jamison 1991).
En relación al estudio de acción colectiva, este standpoint nos dejo a con-sider
problemas qué un análisis que centra exclusivamente en valores haber neg-lected.
Nos ayudo para reflejar encima por qué los sistemas de valores análogos son, en
circunstancias seguras, capaces de apoyar collective acción pero fallar para
proporcionar adecuado moti-vation en otros. Por ejemplo, el mobilizing capacidad
de medioambiental y movimientos de anti-nuclear era significativamente más altos
en Alemania que en Francia en el 1980s, a pesar de los niveles de postmaterialism
being bastante similar en el dos coun-prueba. Segundo, la flexibilidad y habilidades
de actores en adaptar a diferente environ-las condiciones mentales emergen muy
claramente. Un importante precondition para el éxito de mentiras de movimientos
en sus activistas' capacidad a reformulcomió sus valores propios y motivaciones
para adaptarles en la manera más eficaz a las orientaciones concretas de los sectores
de opinión pública qué desean a mobilize (et al de Nieve. 1986; Tarrow 1994). En
el contexto de esta necesidad para flexibilidad y adaptar-capacidad, identificación
fuerte con valores y normas seguros incluso pueden representar un obstáculo a
actores' libertad, limitando su capacidad para acción (Kertzer 1988; Swidler 1986;
Lofland 1995).
Por tanto, es siempre posible de interpretar la experiencia de movimiento social-
ments como el unceasing producción y reproducción de códigos culturales
(Melucci
74 TÉL SYMBOLIC DIMENSION DE C OLLECTIVE UnCTION

1989, 1991; Benford y Cazar 1992; Caza y Benford 1994; Benford 1993). Algunos
observanrs ha venido para equiparar movimientos con una forma de obra “en qué
los protagonistas y los antagonistas compiten para afectar audiencias'
interpretaciones de relaciones de poder en una variedad de ámbitos” (Benford y
Cazar 1992: 38; ve también Melucci 1984b, 1989; Sassoon 1984un, 1984b;
Gusfield 1994; Rupp y Taylor 2003). Uno no necesita, aun así, para aceptar todas
las implicaciones teóricas de este argumento para reconocer que actividad de
movimiento social en gran parte consta de prac-tices más o menos directamente
enlazado a simbólico production; y que este elemento no es un precondition para
conflicto pero, bastante, uno de sus partes de elector.

3.2.2 marcos Interpretativos e ideología

Entre los becarios interesaron en aspectos simbólicos de acción colectiva, la idea del
schema de interpretaration, o marco, tomado prestado del trabajo teórico de Erving
Goffman (1974) ha probado muy influyente. Los marcos han sido definidos como
schemata de interpretación que habilita individual “para localizar, percibe, identifica y
ocurrencias de etiqueta dentro de su espacio de vida y el mundo en grande” (et al de
Nieve. 1986: 464). Un marco así “es un general, estandarizado, predefined estructura
(en el sentido que lo ya pertenece al conocimiento del auricular del mundial) cuál deja
reconocimiento del mundo, y guías perceptiencima . . . Dejándole/le a la complexión
definió expectativas sobre qué es para pasar, aquello es para hacer sentido de su/su
realidad” (Donati 1992: 141–2; ve también Johnston 1991un, 1991b, 1995un, 2002).
Análisis de marco nos dejo para capturar el proceso de la atribución de significar
qué mentiras detrás de la explosión de cualquier conflicto. De hecho, la producción
simbólica nos habilito para atribuir a acontecimientos y comportamientos, de
individual o grupos, un significando cuál facilita la activación de movilización.
hay tres stages a este proceso, correspondiendo al reconocimiento de ocurrencias
seguras como problemas sociales, de estrategias posibles cuál resolvería estos, y
de motivaciones para suplentes en este conocimiento. Snow y Benford (1988)
define estos pasos como el “diagnóstico, prognostic, y dimensión” motivacional de
enmarcar. Nosotros illus-trate les dibujando principalmente de los documentos
presentaron en varias reuniones del Mundiales y el Foro Social europeo en el
últimos pocos años.

Elemento de diagnóstico

En primer lugar, appropricomió los marcos interpretativos dejan la conversión a un


problema social, potencialmente el objeto de acción colectiva, de un fenómeno
cuyos orígenes eran anteriormente atribuidos a factores naturales o a
responsabilidad individual (Melucci 1989, 1991; Snow et al. 1986). Los problemas
sociales de hecho existen sólo a la extensión que los fenómenos seguros están
interpretados como tal por personas.
TÉL SYMBOLIC DIMENSION DE C OLLECTIVE UnCTION 75

Los problemas emergen, crece, y desaparecer, sólo a reemerge periódicamente,


trans-formado a una extensión más grande o menor (Blumer 1971; Hilgartner y
Bosk 1988; Más 1989; Gusfield 1963, 1981; Downs 1972; Rubington y Weinberg
2003).
Diagnosticando un problema siempre entails identificando los actores quiénes
están titulados para tener opiniones encimalo . Esto es siempre un proceso
altamente contencioso. Varios actores sociales (agencias estatales, partidos
políticos, grupos con intereses hostiles, medios de comunicación oper-ators)
intenta afirmar su control propio de asuntos concretos, imponiendo su propios
inter-pretation de estos, a the el detrimento de representaciones propuso por
movimientos sociales. Por tanto, el mosto último, en primer lugar, reclamación la
legitimidad para tratar problemas particulares en las maneras compatibles con su
propios más anchos orien-tations (Gusfield 1989; Shemtov 1999). Es a través de
conflicto simbólico que los actores seguros tienen éxito en ser reconocidos tan
titulados para hablar en el nombre de tendencias e intereses seguros. En el caso de
movilizaciones en asuntos globales, interpre-tations del conflicto ha acentuado el
extremo heterogeneity de los actores implicaron en tales campañas, implícitamente
sugiriendo su entitlement para hablar en behalf de la clase humana: “ fuerzas
Sociales de alrededor del mundo ha reunido aquí en el Foro Social Mundial en
Porto Alegre. Uniones y NGOs, movimientos unnd organizaciones, intelectuales y
artistas . . . Mujeres y hombres, labradores, trabajadores, parados, profesionales,
alumnado, negros e indigenous pueblos, proviniendo el Del sur y del Norte” (del
documento preparatorio del Primer Foro Social Mundial en Porto Alegre, enero
2001; citado en Andretta 2003).
Otro paso crucial en la construcción social de un problema consta de la
identificación de aquellos responsable para la situación en qué el aggrieved
pop-ulation se encuentra. Para los parados así como para miembros de grupos
insignificantes, una restricción potente a movilización es la creencia extendida
que la pobreza depende de fracaso individual (ve para caso Gaventa 1982;
Maurer 2001). De hecho:

El calor de juicio moral es íntimamente relacionado a creencias sobre qué actos o con-
ditions tiene causó personas para padecer undeserved trance o pérdida. La dimensión
crítica es el abstractness del objetivo . . . Cuándo vemos fuerzas impersonales ,
abstractas como responsables para nuestro sufrimiento, estamos enseñar a accept qué
no puede ser cambiado y hacer el mejor de él . . . En el otro extremo, si uno atribuye
unde-sirvió padecer a malicious o actos egoístas por claramente grupos identificables,
el emo-tional componente de un marco de injusticia casi ciertamente ser elre.
(Gamson 1992b: 32)

Otra vez del Porto Alegre los documentos emerge una atribución clara de
responsabilidad: “el neoliberal globalización, promovido, reforzado y defendido
por un conjunto de IGOs (WTO, WB, IMF, OTAN y tan encima), por un
hegemónico super potency (EE.UU.), y por grupos sociales dominantes (empresas
de multinacional) . . .
76 TÉL SYMBOLIC DIMENSION DE C OLLECTIVE UnCTION

Según el primer WSF documento, las quejas imputaron a neoliberal glob-


alization es muchos: “del exploitatión de trabajadores en condiciones de
debilidad de derechos de la unión a pobreza, a género, discriminación racial y
étnica, de envi-ronmental enfermedades a la carencia de derechos emigrantes
y tan encima” (citados en Andretta 2003).
Los movimientos transnacionales recientes son un buenos example de la
naturaleza selectiva de marcos interpretativos. Mayoritariamente, han
adoptado un enmarcar cuál redujo una serie de disparate fenómenos sociales a
un tema dominante, neoliberal globalización. Así, fenómenos cuál inicialmente
podría haber sido pensado diverso ha sido incorporado al mismo marco
interpretativo. Otros marcos podrían haber sido ingeniados. Por ejemplo, si Del
norte–las tensiones Del sur habían sido representadas a través de un
anticapitalist marco sólo, esto no tendría hizo alianzas para moderar sectores
de clase media, preocupados con éticos ques-tions, tan fáciles. Cada cual de
los marcos summarized cuentas más tempranas para interpretaciones
concretas, tan verosímiles como el otro. Pero ninguno de ellos habría trabajado
tan bien.
Por otro lado, adversarios de antiglobalization los movimientos han intentado
para negar la existencia de la “cuestión de globalización” – por ejemplo, por
enfatizar las consecuencias positivas de la liberalización de mercados. Han
señalado en el crecimiento de bienestar e ingresos globales en en desarrollo coun-
tries; la estadística que sugiere que la participación de mercado de países en
desarrollo es más alta que antes de que; el aumento de personas por encima del
nivel de pobreza; el crecimiento de una clase media próspera. Aparte de negar el
asunto, también han intentado para invertir el responsibility: la privación
económica es el producto de gobiernos nacionales corruptos cuyas políticas
quedarán desastrosas hasta que no son expuestos para cerrar escrutinio de
instituciones internacionales como WTO o IMF; además, por pedir proteccionista
measures, “ningún-global” protestors es actu-el aliado que ayuda poderes
corporativos fuertes en el Norte (ambos empresarial y uniones) por negar países
pobres la posibilidad de competir en el mercado global – un cargo qué activistas
no globales afortunadamente refute (ve también Haydu 1999, Einwohner 2002,
para otros ejemplos de counterframing por adversarios de movimiento).
La identificación de problemas sociales y aquellos responsables para ellos es,
inevitablemente, altamente selectivos. El destacando de uno ventajas de problema
particular a la negligencia de otras fuentes potenciales de protesta o movilización
qué aparece no para caber la interpretación de realidad adoptó. Por ejemplo, para
un tiempo largo, la preeminencia dentro de sociedad Occidental de
representaciones de conflicto según una clase/funcional o national la dimensión ha
hecho la identificación de otras fuentes de conflicto – como diferencias de género
– muy difíciles. Cultural devel-opment actores de sitios en la posición de ser capaz
de escoger, de entre varias fuentes posibles de frustración y venganza, aquellos en
contra cuál tendrían que dirigir todas sus energías, no para mencionar su
identificación emocional. El proceso puede, en este sentido, ser visto como
reducción de complejidad social. En el mismo
TÉL SYMBOLIC DIMENSION DE C OLLECTIVE UnCTION 77

Tiempo, aun así, una vez los marcos interpretativos sólidos han sido
establecidos, el possi-bility de identificar otros conflictos potenciales deviene
limitado y otras maneras de representar el mismo tema está necesitado. En este
sentido, la construcción de realidad, creado por relativamente los actores
insignificantes responsables para mobilizing movimientos, es inextricably
enlazado a asimetrías de poder.

Prognostic Elemento

La acción de interpretar el mundo va más allá identificando problemas, aun así. Implica
buscar soluciones, hypothesizing patrones sociales nuevos, maneras nuevas de reg-
ulating relaciones entre grupos, articulaciones nuevas de consenso y del ejercicio de
power. hay a menudo un presente de dimensión utópico fuerte en este esfuerzo. El
simbólico elaboration de un movimiento es así no necesariamente limitado a la
selección, en la base de los parámetros de racionalidad instrumental, de “objetivos”
prácticos en un dados tancial y contexto cultural. Bastante, abre espacios nuevos y
perspectivas nuevas para acción, haciéndolo posible para pensar de objetivos y
objetivos qué la cultura dominante tiende en cambio para excluir del principio. En este
sentido, es posible de concebir de movements como medios de comunicación a través
de qué conceptos y perspectivas, el cual puede otherwise ha quedado insignificante, es
dissemi-nated en sociedad. Michel Foucault (1977) notó, por ejemplo, que con el
tiempo no sólo qué es pensó cambios, pero qué puede ser pensado o conceived de
también. Esto aplica a cada fase de insurgency en acción colectiva: es, de hecho, en
estas circunstancias que espacía cuál era anteriormente inconcebible inesperadamente
aparecer, habilitando acción para tener lugar (Alberoni 1984; Melucci 1989, 1991).
Various prognostic los elementos podrían ser presentes dentro del mismo
movimiento. Por ejemplo, los críticos de globalización adoptan vistas muy diversas
con respecto al alterar-indígenas. Algunos de ellos tienen una aproximación que
Anheier et al. (2001) define tan “rejectionist”: ellos express una negativa global de
globalización como manifestación de capitalismo global. En general, aun así, esto
es un frente muy diverso , compatible con el hecho que la oposición a capitalismo
ha históricamente provenir orígenes muy diferentes. Leftist Organizaciones unnd
anticapitalist los movimientos sociales pueden acentuar el exploitative prácticas de
mercados libres globales y pedir un derrocamiento de capi-talism. Los adversarios
nacionalistas pueden fundar su oposición a capitalismo encima tierras muy
diferentes, acentuando la amenaza a national soberanía por poderes
transnacionales, y así pidiendo políticas económicas proteccionistas y más estrictos
limita-tions a la circulación de bienes y personas. Los fundamentalistas religiosos
pueden apuntar ante todo el spread de individualistic, americano-dominated
worldviews y estilos de vida y las amenazas resultantes a la identidad y valores
morales de spe-cific poblaciones. Cualquier cosa los orígenes de la crítica,
intervención política en el arena global por cualquier militar superpowers o la ONU
es para ser condemned como imperialistic intervención a asuntos locales.
78 TÉL SYMBOLIC DIMENSION DE C OLLECTIVE UnCTION

Otra posición crítica proviene aquellos quien Anheier et al. (2001) define
tan “alternativas.” Muchos grassroots grupos, countercultural networks,
agrupa buscar alternativas viables a prácticas económicas dominantes y estilos
de vida, no apunta tanto para destruir capitalismo cuando para ser capaz de
“optar fuera” de él; concretamente, para promover experimentos en desarrollo
económico sostenible local, proyecta in el área de sostenible, GM-agricultura
libre, alternativa y socialmente comercio responsable. De esta perspectiva, el
elemento político es relativamente periférico por com-parison a otro crítico
stances. Intervención política en los conflictos alrededor del mundo pueden ser
útiles mientras es bajo el control de civil-sociedad organiza-tions y está basado
exclusivamente en nonviolent medio; por ejemplo, piensa de acciones de paz
e iniciativas de resolución del conflicto en áreas contenciosas como Israel o los
Balcanes enth e 1990s.
Aún así otra actitud extendida hacia globalización, abarcando ambos
internacional nongovernmental organizaciones (INGOs), representantes de inter-
instituciones nacionales, gobiernos, así como muchos movimientos sociales,
podría ser caracterizado como “reformista” (Anheier et al. 2001). Mientras la
circulación de crecer de personas, bienes, y la información a través de fronteras
regionales y nacionales está considerada en plazos positivos, qué viene debajo
crítica – incluso crítica feroz – es la forma de tales procesos para datar.
Consiguientemente, una gama entera de medidas está requerida para reducir el
poder de negocio transnacional y ópera financiera-tors y para aumentar la función
de económico así como instituciones políticas en reg-ulating flujos de
intercambios. Medidas activas a redress desigualdad e injusticia sociales son en
orden. La participación política más activa de instituciones internacionales puede
ser aceptada mientras es explícitamente apuntado en aplicar derechos humanos y
protegiendo sociedades civiles locales en nondemocratic countries, más que
proteger estados Occidentales e intereses especiales empresariales.
A suma arriba, ningún-los movimientos globales no son justo anticapitalist,
el cual les haría, en los ojos de muchas personas, “outmoded”; ni puramente
altruista en el tra-ditional sentido (de modo parecido outmoded); y ni siquiera
puramente fuerzas reaccionarias (aún más outmoded). El intento de encontrar
maneras nuevas de definir el mundo, summa-rized por el eslogan “Otro mundo
es posible,” no va mucho más lejano que definiendo un objetivo definitivo con
qué cualquiera can fácilmente identificar. Es todavía un debate abierto si el
antiglobalization el movimiento más tendría que ser visto como movimiento-
ment con marcos múltiples , sueltos más que un dominantes un (una
característica que algunos, p. ej. Westby 2002, atributo a la mayoría de
movimientos en todo caso); o whether empero podemos identificar algunos
relativamente homogeneous ideas de núcleo, cuando otros (p. ej. Andretta
2003) sugiere.

Elemento motivacional
En otro nivel, simbólico elaboration es esencial para producir el moti-vation y los
incentivos necesitaron para acción. Los resultados incognoscibles y el
TÉL SYMBOLIC DIMENSION DE C OLLECTIVE UnCTION 79

Los costes asociaron con la acción colectiva puede ser vencida sólo si los actores
son con-vinced (intuitively incluso antes de rationally) de la oportunidad para
mobilizing y del practicability y la legitimidad de la acción. Es por tanto importante
que los marcos no sólo dirigen el nivel de grupos sociales y de actores colectivos,
pero enlazar la esfera individual con that de experiencia colectiva. Al mismo
tiempo, tienen que generalizar un problema seguro o controversia, mostrando el
con-nections con otros acontecimientos o con la condición de otros grupos sociales;
y también demostrar la pertinencia de un problema dado a individual experiencias
de vida (Benford y Nieve 2000: 619; Williams 2004: 105). Junto con la crítica de
representaciones dominantes de orden y de patrones sociales, los marcos
interpretativos por tanto tienen que producir definiciones nuevas de las fundaciones
de colectivos solidar-ity, para transformar actores' identidad en una manera qué
acción de favores. Gamson (1992b) captura esta multiplicidad de dimensiones
cuándo identifica tres central com-ponents de la construcción colectiva de los
plazos: injusticia, agencia, e iden-tity marcos. Tanm otivational enmarcando
fuertemente conecta con que construye identidad, hablaremos este punto en detalle
más grande en el capítulo próximo, cuándo tratando la función de identidad.

Marcos maestros

Las diferencias entre marcos e ideología tendrían que ser más fáciles de coger
ahora. Enmarcando es más flexible un producto cultural que ideología, al mismo
tiempo más concreto y más genérico que el último. No requiere un conjunto
coherente entero de inte-suposiciones y principios rallados pero proporciona en
cambio un clave de hacer sentido del mundo. En muchos casos, los marcos originan
de ideologías – para caso, cuándo trabajadores de cuello azul que experimentan
degradados sorteo de condiciones viviente urbano en ideología marxista para
sugerir que la crisis urbana medioambiental podría ser leída como un resultado del
spread de mechanisms de explotación capitalista de la fábrica y el mercado de
trabajo a su comunidad circundante. En otros casos, aun así, los marcos pueden
afectar ideologías. Por ejemplo, en temprano decimonoveno-sociedad de siglo,
representaciones genéricas de máquinas industriales y condiciones laborables
cuando el mal no fue restringido a organizadores de clase trabajadora pero
compartidos con actores con puntos de vista muy diferentes y objetivos, como
iglesias u organizaciones benéficas. Nev-ertheless, proporcionaron activistas de
clase trabajadora con un conjuntoo f imágenes y símbolos que podrían utilizar para
elaborar más articulado ideologías políticas.
Diferencias entre las ideologías y los marcos no nos impiden de pensar de
marcos como capaces de entregar interpretaciones anchas de realidad. Esto es
partic-ularly cierto de marcos maestros. La expresión refleja el hecho que los
movimientos y los conflictos no desarrollan en aislamiento pero tender bastante
para ser concentrado en particular periodos políticos e históricos (Tilly, Tilly, y
Tilly 1975; Tarrow 1989un, 1998). Este hcomo consecuencias en el nivel de
simbólico elaboration, y el discurso de un movimiento solo (o la organización de
un movimiento) tiene que ser
80 TÉL SYMBOLIC DIMENSION DE C OLLECTIVE UnCTION

Colocado en relación a las orientaciones generales de un periodo dado. Si es


posible de identificar conjunciones qué es particularmente favorable al
desarrollo de acción colectiva, las visiones dominantes del mundo en aquel
periodo informará – o al menos influencia – las representaciones produjeron
por elmo vements tomados juntos.5 Por ello un número restringido de marcos
maestros (o dominantes interpreta-tive marcos: Snow y Benford 1989, 1992)
emergerá, al cual el concreto elaborations de las varias organizaciones o los
movimientos pueden ser reducidos, más o menos directly.
En el temprano 1970s en Italia, movimientos sociales conflicto definido en
plazos de lucha de clase. En aquel tiempo, varios tipos de conflicto eran a menudo
interpretados y clas-sified en la luz del modelo marxista. El movimiento de las
mujeres era primero visto de la perspectiva de emancipación y conquista de
oportunidades iguales más que cuando una afirmación de diferencias de género. En
la misma manera, representaciones de movimientos de juventud a menudo
conectaron su acción colectiva con su posición social y su precarious estado. En un
más directamente nivel político, la transformación rápida del movimiento
estudiantil a grupos pequeños organizó para parecerse a – o para caricaturizar – el
Leninist el partido también puede ser prueba considerada de la dominación cultural
del marxismo. Modelos de culturade contador y político propo-sals como aquel de
los ecologistas, el cual hubo poco en común con rep-resentations de una naturaleza
de clase, era accorded poco espacio en el desarrollo de los movimientos, a pesar de
que eran también presentes (Lumley 1990). Él was sólo después del salience de
dominante cleavages era drásticamente reducido en el 1980s que col-lective la
acción estuvo enmarcada bajo modelos culturales diferentes como environmen-
talism (Diani 1995un). Así mismo, Noonan es (1995) análisis de las movilizaciones
por mujeres chilenas muestra que su activismo en los años antes de que Pinochet
era en gran parte enmarcado en plazos de maternidad, debido a la combinación de
movimientos sociales' pesados marxistas enmarcando y conservadores antifeminist
sentimientos. Sea sólo cuándo un “regreso a marco” de democracia, menos
cobrado en plazos de conflicto de clase, se estableció en el sector de movimiento
social en el 1980s que espacial para marcos feministas nuevos reemerged.
En contraste, en los EE.UU., los marcos interpretativos enlazaron a la función
de individu-als, a sus derechos y unspirations para crecimiento personal y cívico,
adquirido con-siderable peso después del inicio de la ola de protesta del 1960s. El
clima cultural resultante facilitó el spread de los movimientos profundamente
diferentes de aquellos cuál había desarrollado en Italia. En un más directamente
nivel político, movimientos mobilized para libertad de expresión (como el
Movimiento de Discurso Libre), o ciudadanía llena para americanos africanos, o
contra implicación americana en Vietnam (McAdam 1988b; Eyerman y Jamison
1991: ch. 5). El presence de alternativo y countercultural los movimientos era
también más evidentes. Estos no fueron limitados a estrictamente communitarian
y otras formas que rehusan mundiales, propio del hippy movimiento y varias
corrientes religiosas de neo-orientalist derivation. Ellos también mostrados algún
overlap con intentos más anchos para apoyar las prácticas diseñaron a
TÉL SYMBOLIC DIMENSION DE C OLLECTIVE UnCTION 81

Anima crecimiento interior y realización individual, cuando en el caso del


movimiento potencial humano.6
Más recientemente, oposición a neoliberal la globalización ha operado, según
algunos observadores, como marco maestro (Andretta 2003). La idea que el
creciendo interdependence de vida económica y la reducción resultante de barreras
a la circulación de capital acechar las condiciones vivientes de la mayoría grande
de la población del mundo tiene amistó labradores del Del sur, afectados por el
dominance de multinacional agribusinesses y el spread de genéticamente modificó
organismos, con sindicalistas de the Norte, quiénes ven globales liberales-ization
y la caída resultante en ingresos de impuesto corporativo como golpe importante
al estado de bienestar moderno. Las preocupaciones para los obstáculos posaron a
la circulación libre de personas, en contraste duro a la circulación libre de bienes y
ventajas financieras, para la globalización de beneficios a menudo está trayendo a
regímenes autoritarios corrompidos en países Del sur (Tilly 2004un: ch.5), y para
la indiferencia de aumentar a derechos humanos incluso en democracias
Occidentales, siguiendo 9/11, todo crea una tierra común entre activistas de
movimientos libertarios radicales en el Del oeste y las caridades que trabajan en
países en desarrollo. La indiferencia a la preservación medioambiental mostrada
por los actores muy mismos que en los países en desarrollo dirigen crecimiento
económico a lo largo de unuthoritarian líneas, oblivious a trabajadores' derechos,
y el abiertos hos-tility demostrados por gobiernos de ala correcta en el Del oeste,
más notablemente la administración de Arbusto en los EE.UU., hacia estándares
medioambientales, crear una tierra común para Occidental environmentalists y las
coaliciones anchas oppos-ing destrucción medioambiental y explotación social en
países en desarrollo (Rothman y Oliver 1999; Doyle 2002). Naturalmente, queda
para ser visto si la capacidad global del marco para conectar tantos diferente
experiences es también emparejado por una capacidad correspondiente de articular
asuntos y estrategias en contextos locales (Tarrow 2005). Todavía, antineoliberal
globalism parece para representar un pow-erful unificando símbolo para muchos,
muy diversos, actores en todo el mundo.

3.2.3 Sense-haciendo actividades: enlazando


valores y marcos

Bajo qué condiciones son enmarca exitoso? La resonancia es shaped por credibilidad y
salience (Benford y Nieve 2000: 619). Los marcos tendrían que ser creíbles, ambos en
su contenido y en sus fuentes. Incoherente messages, o los mensajes que provienen
actores con un shaky reputación, o quiénes son desconocidos, probablemente no puede
a elicit la misma recepción como mensajes de actores con una imagen pública
establecida.7 Marcos también tendrían que ser salientes, i.e. tacto a aspectos
significativos e importantes de las vidas de las personas, y mostrar una fidelidad
“narrativa alta” (Benford y Nieve 2000). La mayoría de importante, tienen que resonate
no sólo con sus objetivos, pero con la estructura cultural más ancha en qué un
movimiento desarrolla (Williams 2004: 105–8).
82 TÉL SYMBOLIC DIMENSION DE C OLLECTIVE UnCTION

Los marcos exitosos emergen a través de una variedad de maneras y formas de


producción cultural que lo haría poco sentido para probar y sistemáticamente
presenta aquí. Para ponerlo muy sencillamente, y perhaps bastante simplistically,
el básico precondition para el éxito es que los procesos de “alineación de marco”
tienen lugar entre activistas de movimiento y las poblaciones pretenden a mobilize.
En otras palabras,, qué es nec-essary es una “conexión de individual y SMO
enterpretative orientaciones, tal que algún conjunto de intereses individuales,
valores y creencias y SMO actividades, los objetivos y la ideología son congruentes
y complementarios” (et al de Nieve. 1986: 464; ve también Gamson 1988; Gamson
y Modigliani 1989). Acción colectiva thus deviene posible en el punto en qué
mobilizing los mensajes están integrados con algún cul-tural componente de la
población al cual están dirigidos.
Una forma importante de alineación de marco es qué Nieve y asocia marco “de
llamada bridging.” Esto pasa when representaciones por organizadores de
movimiento incor-porate interpretaciones de la realidad producida por sectores de
opinión pública cuál puede otherwise quedar separado de cada otro. Marco
bridging puede tener lugar en niveles diferentes. Por ejemplo, críticas de los
excesos de neoliberal glob-alization necesita no necesariamente tomar un
anticapitalist o anti-forma imperialista. También pueden ser compartidos por
actores que no objetan a globalización por se, pero a la carencia de control sobre
actores económicos globales y a sus implicaciones para democ-racy (reformistas,
en Anheier et al. Es plazos [2001]). Un ejemplo proviene el bestselling libro, La
Absorción Silenciosa, por empresarial y experto de administración-cum-escritor
Noreena Hertz (2001). Su reconocimiento que las actividades empresariales
pueden ser tan beneficiosas como pernicious y su autor está estando como un
académico y empresarial con-sultant puede hacer sus puntos accesibles a ambos
sectores críticos del empresariales com-munity y a la izquierda-críticos de ala de
globalización (a pesar de que algunos del últimos podría considerar personas como
Hertz como adversarios más que defensores amigos). En un dif-ferent nivel,
ejemplos numerosos de marco bridging puede ser encontrado en el docu-ments
producido por organizaciones en el movimiento de justicia global. Por ejemplo, la
Organización de Sindicato Mundial, una red de uniones qué también comprende
los Sindicatos europeos, conecta justicia social y medioambiental como sigue: “Las
instituciones internacionales tienen que contribuir alb alanced eco-nomic y
desarrollo social de todos los países, con comercio y el uso de los recursos
naturales que tienen lugar en el marco de políticas de desarrollo sostenible que
respeto el entorno, en ambos productor y países de consumidor” (citados en
Andretta 2003).
Otra forma importante de alineación de marco es qué et al de Nieve. (1986)
extensión de marco de la llamada. Deja las preocupaciones concretas de un
movimiento u organización para relacionar a objetivos más generales, en contextos
donde la conexión no podría ser en absoluto evidente. Dejado nos pensar por
ejemplo de ATTAC, la red originalmente nacida en Francia de la entrada de leftist
intelectuales como Ignacio Ramonet (Ancelovici 2002). Dado ATTAC objetivo
original e importante de introducir un impuesto en transacciones financieras (elT
obin Impuesto, así que llamado después de su proponent, economista
TÉL SYMBOLIC DIMENSION DE C OLLECTIVE UnCTION 83

James Tobin), fácilmente pueda ser percibido como organización de asunto


solo con un ámbito relativamente limitado de acción. De ahí, marco extension
es de la importancia suma para ATTAC u organizaciones similares. Estos
resultados en mensajes articu-lating la conexión entre globalización financiera
y la gama ancha de problemas genera: “la globalización Financiera aumenta
inseguridad económica y desigualdades sociales. Él bypasses y socava
decisión popular-haciendo, demo-cratic instituciones, y los estados soberanos
responsables para el interés general. En su sitio, sustituye una lógica
puramente especulativa que expresa nada más de the intereses de empresas de
multinacional y mercados financieros . . . col-lected Mayoritariamente por
industrializó países, donde los mercados financieros principales están
localizados, [el dinero que origina del Tobin impuesto] podría soler lucha de
ayuda against desigualdades, para promover educación y salud pública en
países pobres, y para seguridad alimentaria y desarrollo sostenible” (citado en
Andretta 2003).
Alineación de marco en términos generales confía en una relación dinámica
entre el devel-opment de un movimiento y tél patrimonio cultural de ambos el país
en qué opera y sus instituciones.8 Primero, referencia de marca de los movimientos
a cultural cur-alquileres qué, mientras bien arraigados en un país dado, es de alguna
manera overshadowed (Alberoni 1984). Esto aplica a progresivo und movimientos
conservadores igualmente. Por ejemplo, el derecho nuevo en los EE.UU. ha
dibujado inspiración en gran parte del autoritario, communitarian, illiberal
tradiciones de sociedad americana. Mientras la cultura liberal era, en el 1960s y el
temprano 1970s, capaz de limitar timpacte del derecho nuevo en discurso público,
estas corrientes han quedado vivas en secciones anchas de opinión pública, y desde
el 1980s haber resurfaced para ejercer una función muy importante en público
discurso – especialmente con las administraciones de Arbusto (Wallis y Bruce
1986; Bruce 1988; Oberschall 1993: ch. 13; Herman 1997; Blee 2002; Woodberry
y Herrero 1998; Kniss y Burns 2004).
Segundo, emergiendo sorteo de movimientos en su patrimonio tradicional
propio y encima que del más ancho oppositional movimientos en un país dado,
presentándoles, aun así, de una perspectiva nueva. Occidental ethnonational
movimientos del 1960s y 1970s era a menudo exitoso en enlazar temas
tradicionales de nacionalismo periférico, como territorio o lengua, el cual era
anteriormente por-ceived para ser predominantemente un asunto conservador, con
radical, anti-perspectivas de establecimiento propio de contraculturas de juventud,
o con antimilitarist y antinu-luchas claras del periodo. La crítica de la distorsión de
capitalista devel-opment proporcionado una base común para retos a la
subordinación económica de “colonias internas” y para solidaridad con tercer-
mundial anticolonialist movimiento-ments (Touraine, Dubet, Hegedus, y
Wieviorka 1981; Touraine, Dubet, Wieviorka, y Strzelecki 1983; Cerveza 1980;
Melucci y Diani 1992; Connor 1994). Así mismo, activistas de ningún-los
movimientos globales dibujaron en varias tradiciones recientes diferentes de
acción colectiva como ecologismo, justicia social, e internationalism, y de alguna
manera dirigido para integrarles, o al menos a
84 TÉL SYMBOLIC DIMENSION DE C OLLECTIVE UnCTION

Identifica algunos compartieron temas que sonó bastante verosímil para


motivar personas para actuar.
Movimientos sociales' los marcos son a menudo elaborados en referencia a
elementos qué parte de forma del institutionalized cultura de unas personas dadas.
En aquel contexto, reli-gion juega una función muy importante. Incluso en
democracias industriales adelantadas la función de religión como la fuente de
símbolos e identidad dista mucho de insignificante (Platt
& Williams 2002; Young 2002; Williams 1999 y 2002; Inglehart y Norris
2005). Rhys Williams (2004: 107–8) ha recientemente summarized las razones
por qué la religión juega tal una función importante en los EE.UU.: el reto
inherente uno puede encontrar en cualquier mensaje religioso, a pesar de su
concreto contents, y el reluctance a sencillamente aceptar el mundial cuando
es; la disponibilidad de lengua y símbolos religiosos a una gama muy ancha de
grupos sociales, del más establecidos a la mayoría de dispossessed; la
capacidad de más religiones – con la excepción posible del más sectario unos
– para hablar para la mayoría de la población y sonido legit-imate incluso a
quienes no son religiosos ellos (piensa del Papa en el anti-iniciativas de guerra
iraquí).
Por ejemplo, las “Iglesias de la red” Mundial articula su oposición a neoliberal
globalización en los plazos siguientes: “ somos parte del prophetic ecumenical la
camaradería que mira critically en globalización. Y desde bíblico ref-erences está
utilizado, entre otros cosas, para justificar globalización, nuestra tarea es para
desafiar que en la luz de nuestra lectura propia de la Biblia” (citado en Andretta
2003). En los EE.UU., las congregaciones religiosas también han sido un contexto
en qué para transmitir mensajes a audiencias no particularmente receptive de
explícitamente political mensajes. Por ejemplo, los grupos religiosos que hacen
campaña para los derechos humanos en América central utilizaron congregaciones
religiosas para extender el ultraje e indignación para los asesinatos de
personalidades religiosas prominentes como Arzobispo Romero en El Salvador
(Madera 2003; Nepstad 2001, 2004).
Otro ejemplo bien sabido proviene Martin Luther King. En contraste a otros
dirigentes del Afro-movimiento de derechos civil americano en el 1960s, King era
prudente en sus discursos no para enfatizar las diferencias entre negros und
blancos. De hecho, tienda para evitar la construcción de “polemical identidades.”
En cambio, utilice referencias a los temas y los valores del patrimonio de las élites
americanas blancas de aquel periodo, como la relación entre individ-ual libertad y
un sentido de responsabilidad hacia la comunidad (McAdam 1994: 38). Sea
precisamente estos valores, más que valores antagonistas, el cual le proporcionó
con una base de qué para argumentar la legitimidad llena de las demandas del
movimiento de derechos civil (McAdam 1994; Eyerman y Jamison 1991: 166–74).
En maneras diferentes, estos ejemplos de simbólicos re-elaboration nos
recuerdo que la acción colectiva es ambos una manipulación creativa de símbolos
nuevos y un reaffir-mation de tradición. El insurgence de una ola nueva de
mobilization no, de hecho, representa sencillamente una señal de innovación y
cambio, en relación a la cultura y los principios prevalent en un periodo dado. Es
también, si a una extensión variable, un
TÉL SYMBOLIC DIMENSION DE C OLLECTIVE UnCTION 85

Confirmación de la continuidad fundamental de valores y memorias históricas


qué tener, en tiempo reciente, sido desatendido u olvidado (ve también
Stamatov 2002; Jansen 2003).
La referencia al pasado puede operar ambos como un obstáculo y cuando
una oportunidad para acción. Pueda representar un obstáculo en aquel largo-
estableció maneras de pensar y sistemas de valor sensiblemente pueden reducir
la gama de las opciones disponibles al actor (Lofland 1995; Johnston y
Klandermans 1995). Demasiado fuerte un identifica-tion con tradición, o, en
la misma manera, una distancia excesiva entre la cultura de los activistas y
sympathizers en un movimiento, y el resto de sociedad, puede en los casos
seguros reducen la eficacia de simbólico re-elaboration (Swidler 1986). Pueda,
en particular, marca el processes de realignment de marcos interpretativos,
cruciales para el éxito de movilización, muy difícil. Por otro lado, la capacidad
de referir a un el patrimonio cultural pone el cognitivo y valor-relacionó
recursos en la eliminación de actores. Enel b asis de estos recursos, es posible
de fundar proyectos alternativos y una identidad política alternativa. En la
ausencia de referencias a un historia propia y a la naturaleza particular de una
es raíces, una apelación a algo los riesgos nuevos que parecen inconsistent y,
al final, careciendo de en legitimidad.

3.3 Problemas y Respuestas

Recientemente, la función de los marcos también ha sido el tema de discusión


considerable. Análisis de la acción colectiva centrada en el concepto de marcos
interpretativos – tan aquellos cuáles centran en la función de recursos organizativos
o de políticos opportunities – no es eximir de explicaciones ad hoc. En cualquier
momento es posible a uncover la existencia dentro de una sociedad dada de una
multiplicidad de cul-tural modelos. No es, por tanto, difícil para aquellos
estudiando cualquier movimiento disfruta-ing un éxito seguro, para identificar los
elementos culturales con qué el marco interpretativo concreto del movimiento está
alineado. Esto posa el problema de para-mulating hipótesis sistemáticas respecto
de la relación entre actividades de producción simbólica y el éxito de entienta en
la movilización instalada por movimiento-ment organizaciones. Es por tanto
necesario de enlazar las propiedades de modos diferentes de categorización de
realidad a la naturaleza concreta de los movimientos y los conflictos qué estos
representan. Pero es esencial de identificar, como paso preliminar, criterios de
clasificación para marcos interpretativos (ve Eyerman y Jamison 1991; Diani 1996
para algunos ejemplos).
La capacidad explicativa de marcos vis-à-vis interpretaciones alternativas de col-
lective la acción ha también abejan polémico. Es más importante, para el éxito de un
movimiento social, para tener comunicadores buenos, o para operar en favorable polit-
ical condiciones, como élites políticas divididas? Por ejemplo, en su investigación de
conflictos en poder nuclear in el 1970s y 1980s en varios Occidental
86 TÉL SYMBOLIC DIMENSION DE C OLLECTIVE UnCTION

Países, Koopmans y Duyvendak (1995) argumentó que para toda la importancia de


comunicación, sea una configuración favorable de oportunidades que ulti-mately
ayudados algún antinuclear movimientos y no otros para ganar el discursive
batalla. Otros estudios, aun así, sugirió el opuesto. Cress Y la nieve es (2000)
análisis de éxito de 15 homeless las organizaciones en ciudades de EE.UU.
diferentes sugiere que elwa y en qué el asunto de falta de vivienda estuvo
enmarcado de hecho afectó aquellas organizaciones' posibilidades de asegurar
reconocimiento político o alivio concreto. El mismo aplica a un estudio reciente de
organizaciones de sufragio en los EE.UU. de 1866 a 1914 (McCammon 2001;
Hewitt y McCammon 2004). Naturalmente, en evaluat-ing estos resulta tenemos
que tener en cuenta las unidades diferentes de análisis. Mientras en una
comparación entre naciones es difícil de identificar el impacto de enmarcar
estrategias, más bien-grained exploraciones of los casos concretos bien podrían
asignar factores simbólicos un peso más grande.
La perspectiva de enmarcar en acción colectiva ha también venir debajo fuego
de investigadores, más interesados en dinámica cultural, incluyendo el original
propo-nents del concepto (Benford 1997; Benford y Nieve 2000; Goodwin y Jaspe
2004un; Mische 2003). En muchos marcos de casos de hecho han sido tratados
como estructuras cognitivas estáticas; atención muy pequeña ha sido pagada, según
críticos, a los marcos de manera están generados y evolucionar over tiempo,
normalmente en un dialogical rela-tionship entre actores diferentes. En la última
década, los estudios numerosos han intentado dirigir este problema por centrar en
los elementos dinámicos de discursive prac-tices. En un estudio importante de
conflictos encima aborto en elU S y Alemania, Ferree, Gamson, Gerhards, y Rucht
(2002) ha ilustrado la naturaleza contenciosa y las esferas múltiples implicaron en
los procesos por el cual asuntos de aborto devienen el objeto de chocar discursos
públicos. Steinberg (1999) ha documentado las transformaciones en las formas
retóricas adoptaron por decimonoveno-siglo algodón inglés-spinners como sus
movilizaciones evolucionaron con el tiempo (ve también Ellingson 1995; Polletta
2002; McCaffrey y Llaves 2000). Mische (2003) ha movido uno da un paso más
allá, illustrating cómo discursive y la dinámica conversacional no sólo crea
representaciones nuevas de experiencia, pero también constituir relaciones entre
actores sociales (ve también Somers 1992). Principal defiende de la aproximación
de marco ha colocado énfasis más grande encima enmarcando practices más que
en marcos por se, y en los procesos a través de qué marcos están transformados
(Nieve 2004: 393–6; ve también Cadena-Roa 2002).
La función dinámica de la producción cultural también ha sido notada por
investigadores de un fondo diferente que cultural sociología, y más cercano al valor
por-spective a cultura que a la perspectiva de marco. En su investigación ancha de
cambio cultural, con prevalent pero no referencia exclusiva a los EE.UU., Rochon
(1998) ha acentuado su dinámico y proceso-orientado elements. Más que ser
generado, à la Inglehart, por macrostructural transformaciones (como crecimiento
de educación o aumentando affluence) afectando los individual de manera
conciben de su situación propia y proyectos de vida, cambio de valor es una lucha
crítica in cuál múltiple
TÉL SYMBOLIC DIMENSION DE C OLLECTIVE UnCTION 87

Los actores están implicados. Para valores críticos para los establecer, la
función de comunidades críticas es esencial. Es de tales comunidades – que
puede incluir de vez en cuando activistas, artistas, intelectuales, y el gustar –
que los movimientos sociales emergen agentes tan importantes de cambio
cultural (ve también Melucci 1989, 1996; Rupp y Taylor 2003; Williams 2004:
99).
Otro el asunto relacionado es si marcos – y en particular enmarcando
habilidades – tendría que ser tratado como tipo particular de recurso, tema a uso
estratégico por especializado político entrepreneurs. Varios pasos en las
formulaciones originales de la perspectiva de enmarcar de hecho sugiere una vista
de esta clase (et al de Nieve. 1986; Gamson 1990, 1992un). La crítica más enérgica
de esta posición tiene provenir teóricos que recientemente han traído atrás el
estudio de emociones a movimiento social-ment análisis. De su punto de vista,
interpretaciones culturales conducive a col-lective action no tanto originar de
procesos cognitivos y estratégicos enmarcando tan de procesos colectivos con una
dimensión emocional fuerte. Es a menudo confrontación explícita con rabia e
injusticia, o experiencia directa de col-lective solidaridad, bastanteth un político
entrepreneurs' manipulación hábil, aquellas personas de movimiento a acción
colectiva (Goodwin, Jaspe y Polletta 2001 y 2004; para ilustraciones: Barker 2001;
Berezin 2001).

3.4 Resumen

hay al menos dos maneras de mirar en la relación entre cultura y acción colectivas.
Las primeras tensiones sobre todo la función de valores. La acción es así vista para
originar de la identificación de actores sociales con conjuntos seguros de prin-
ciples y preocupaciones. Interpretaciones de movimientos en décadas recientes,
basados en estas premisas, ha insistido en particular en el cambio de valores
materialistas a postmaterialist valores. Más recientemente, aun así, la pertinencia
de crecer de funda-mentalist movimientos religiosos (no sólo dentro de Islam pero
también dentro de cristianos-ity) ha dibujado analistas' atención a otro, versión muy
diferente de la relación entre valores y acción colectiva.
La segunda aproximación, el cual hemos tratado aquí, subraya en cambio
los elementos cognitivos de cultura. En este contexto, mobilization no depende
tanto en valores tan encima actores qué sociales asignan significar a su
experiencia: i.e., en los procesos de interpretación de realidad qué identificar
problemas sociales como “sociales” y hacer sonido de acción colectiva como
una respuesta adecuada y factible a una condición percibió tan unjust. La
acción está facilitada por “alineación de marco,” en otras palabras,, por la
convergencia de modelos de interpretación de la realidad adoptada por
activistas de movimiento y aquellos de la población qué pretenden a mobilize.
Movements' La producción cultural implica una relación qué implica ambos
conquistando y revitalizing aspectos (o al menos algunos aspectos) de un dados
88 TÉL SYMBOLIC DIMENSION DE C OLLECTIVE UnCTION

Las tradiciones de la población. Esto es ambos un impedimento y un recurso para


acción. Es también valor notando que explicaciones de acción colectiva, centrado
en el concepto del “marco interpretativo,” a menudo llevar el riesgo de
explicaciones ad hoc. Una manera fuera de of estas mentiras de dificultad en
enlazar varios tipos de marcos interpretativos desarrollaron por actores con
percepciones seguras de las oportunidades políticas pro-vided por el entorno.
Recientemente, la perspectiva de enmarcar ha sido criticada para su excesivo
dependence en elementos cognitivos, en detrimento del emo-tional elementos de
acción colectiva. En el capítulo próximo, el cual mira en mecha-nisms para
producción de identidad, veremos cómo las dimensiones culturales y simbólicas
están enlazadas al subjetivos experience del individual.
4
IDENTIDAD Y ACCIÓN
COLECTIVAS
Pienso que está hecho me más fuerte. Pienso que está
hecho me realmente claro aproximadamente quién
soy . . . Casi siento mi vida tiene un tema. No es justo
gusta soy esta poca hormiga allí viviendo y
trabajando con todo las otras hormigas en el anthill.
Hay cosas que me preocupo realmente, realmente
profundamente aproximadamente, y que clase de
infuses mi vida entera con significar. Y he retenido
que, y pienso yo siempre .
–Activista feminista radical, Colón, Ohio,
EE.UU., citados en Whittier (1995: 95)
Hasta que hace dos años, era una mujer quién
perteneció a un hombre. Entonces conocí las mujeres
del colectivos, y despacio he adquirido la capacidad
de desarrollar relaciones nuevas y diferentes con
personas. Hoy, yo feel yo para ser igual en mi relación
con este hombre y en mis relaciones con las mujeres
del colectivos.
–Martina, miembro de unas mujeres colectivos, Milán,
Italia, citado en Bianchi y Mormino (1984:
160)

Después de que Greenham me di cuenta qué de hecho


me ponía abajo en ocasiones. Sencillamente porque
había hombres alrededor no fui verbalizing mis
pensamientos bastante. No venía adelante . . . Los
hombres dominaban, y les dejaba para dominarme.
–Carola Addington, Greenham activista Común,
Reino Unido, citado en Roseneil (1995: 146)
No somos un unionist movimiento, ni tenemos
cualquier cosa para hacer con sindicalismo. Tienen
sus organizaciones y nosotros tienen el nuestro.
Estamos ofreciendo una alternativa por y para
mujeres.
–Laura, trabajador y activista, Managua, Nicaragua,
Citado en Bandy y Bickam-Mendez (2003: 179)
90 COLLECTIVE UnCTION Y yo DENTITY

Si alguien me pregunto, “Quién eres?” Soy un


feminista radical . . . Y veo feminismo radical como
el trabajo de mi vida, incluso aunque soy spending la
mayoría de mis días, la mayoría de mis semanas, la
mayoría de mis años, haciendo algo más.
–Empleado de una organización de interés pública,
Colón, Ohio, EE.UU., citados en Whittier (1995: 95)

Para mí, siendo parte del grupo de unas mujeres es


una influencia esencial no sólo en mi modo de vida
pero también en mi pensamiento. Es importante de
saber tú. El colectivo ha muerto y sido reborn muchas
veces encima, junto con mis aspiraciones propias.
Wherever Voy, siempre encontraré el grupo de unas
mujeres.
–Irma, Miembro de unas mujeres colectivos,
Milán, Italia, citado en Bianchi y Mormino (1984:
159)

Había los mineros' huelga y muchos mineros' las


mujeres utilizaron para venir abajo . . . Y había el
indio americano de la reserva india . . . Y había
delegaciones de Sudáfrica. Y we era justo mujeres de
clase trabajadora normales muertas de las ciudades
interiores y nosotros hablaban a personas quién era
directamente implicado en luchas de en todo el
mundo.
–Trisha, Greenham activista Común, Reino
Unido, citado en Roseneil (1995: 149)
Este [visita] nos doy más confianza para continuar
con nuestra lucha, para vemos que no somos sólo. . .
. Esperamos cada cual de ti [trabajo norteamericano
y organizadores comunitarios en una visita a México]
continuará adelante con amor, para vuestros
hermanos y hermanas, para a comunidades les gustar
el nuestro. Esto es la misma lucha en todas partes el
mundo.
–Hortensia, trabajador y activista, Tijuana, México,
citado en Bandy y Bickam-Mendez (2003: 179)

Irma y Martina era parte del Ticinese Colectivo, un grupo de las mujeres activas
en Milán alrededor del fin del 1970s y el principio del 1980s (Bianchi y Mormino
1984). Trisha y Carola eran entre las mujeres quién participó en la ocupación del
Greenham área Común, donde misiles de crucero dónde localizados en Gran
Bretaña entre 1983 y 1991 (Roseneil 1995). Hortensia y Laura eran activas en la
movilización de trabajadores hembra de maquilas , las unidades industriales
pequeñas que producen toda clase de bienes para exportación, normalmente bajo
atroz laborable
COLLECTIVE UnCTION Y yo DENTITY 91

Condiciones, en América Central (Bandy y Bickam-Mendez 2003). El dos


anónimo cita1 pertenece a mujeres quién estuvo implicado en el movimiento
feminista radical en la ciudad americana de Colón, Ohio, entre el 1970s y el
temprano 1990s (Whittier 1995, 1997). El carácteristics de estos movimientos eran
diferentes, y así que era el contexto político y cultural en qué desarrollaron. Y
todavía, para todas las diferencias, estas menciones revelan más de aleatorios com-
monalities. Ellos todos aparecen representativos, en sus maneras propias, of la
relación entre experiencia colectiva e individual en movimientos sociales. En
particular, nos decimos aproximadamente la intersección de implicación colectiva
y personal comprometer-ment cuál caracteriza tanta acción colectiva (Melucci
1989, 1995; Rupp y Taylor 1987; della Porta 1992; Calhoun 1994un; Goodwin,
Jaspe, y Polletta 2001; Downton y Wehr 1997; Passerini 1988).
Por un lado, estas historias son sobre cambio personal: atestiguan al sentido
nuevo de empowerment, y al fortalecimiento del self, el cual origi-nate de acción
colectiva. Luchando los misiles de crucero en el contexto de unas “mujeres
campaña” única, Carola devenía consciente de cuánto haya debajo-valoró su
potencial antiguamente, especialmente en situaciones con un strong macho pres-
ence. Para Trisha, siendo en Greenham Común abierto arriba de espacios para
contactos y experiencias que le los orígenes de clase trabajadora habrían negado su
otherwise. Para Laura, acción en el workplace significa desarrollar una experiencia
original de interés representation de una perspectiva de género, por ello
reafirmando su auton-omy de los modelos machos reflejaron en uniones' práctica.
Para Martina, uniendo un self-grupo de concienciación signified transformando su
vida privada, sin en desarrollo un compromiso fuerte a compromiso público.
Incluso en su caso, aun así, sea la naturaleza de colectivo experimentar cuál hizo
su crecimiento personal posible.
Por otro lado, estas historias son sobre la continuidad en una es vida que un
sentido de pertenencia colectiva proporciona. Para Irma cuandow ell en cuanto
al Colón mujeres, siendo un feminista proporcionó una conexión entre etapas
de vida diferente y dif-ferent tipos de experiencias. La conexión no es
necesariamente entre puntos diferentes en tiempo; es también – cuando Trisha
es y las menciones de Hortensia suggest – entre las personas que actúan en
diferentes localities y en asuntos concretos diferentes, pero unidos por un
conjunto común de valores y aspiraciones.
Estas historias son, en otras palabras,, aproximadamente identidad: en particular,
sobre el rela-tionship entre identidad y collective acción (Pizzorno 1978; Cohen 1985;
Melucci 1989; Calhoun 1991, 1994un; Mach 1993; Stryker, Owen, y Whyte, 2000;
Horton 2004; Caza y Benford 2004). En hablar de identidad no somos referir-anillo a
un objeto autónomo, ni a una propiedad de social unctors; significamos, bastante, el
proceso por qué actores sociales reconoce ellos – y está reconocido por otros actores –
tan parte de agrupaciones más anchas, y desarrollar anexos emocionales a ellos
(Melucci 1989, 1996; Polletta y Jaspe 2001; Goodwin et al. 2001: 8–9). Estas
“agrupaciones” necesitan no ser definidos en referencia a concreto social traits como
clase, género, etnicidad, orientación sexual, o el gustar, ni en referencia a
92 COLLECTIVE UnCTION Y yo DENTITY

Organizaciones concretas (although a menudo consiguen definidos en aquellos


plazos). Collec-tive Las identidades también pueden ser basadas encima compartió
orientaciones, valores, actitudes, mundiales-vistas, y estilos de vida, así como
encima compartió experiencias de acción (p. ej., el individual pueden sentir
cercanos a holding de personas similar postmaterialist vistas, o de modo parecido
aprobando de acción directa, sin expresar cualquier sentido fuerte de clase, étnico,
o género proximity). En tiempo, las identidades pueden ser exclusivas, y regla fuera
de otras formas posibles de identificación (cuando en el caso de religious las sectas
que expresan un rechazo mayorista del mundo mundano). Otro tiempo (de hecho,
la mayoría del tiempo), aun así, pueden ser inclusive y múltiplo, cuando el
individual pueden sentir cercanos a varios tipos de colectividades al mismo tiempo.
Edificio o reproduciendo las identidades es una componente importante de
los procesos a través de qué individual dan significar a sus experiencias propias
y a sus transformaciones con el tiempo. Vale notar la complejidad de la
relación entre la dimensión individual y la dimensión colectiva en identidad-
complexión-ing. Por un lado, a través de la producción, mantenimiento, y
revitalización de identidades, el individual definen y redefinir proyectos
individuales, y posibilidades para la acción abierta y cercano. El individual
stories nosotros justo informados nos muestro pre-cisely que “las identidades
son a menudo proyectos personales y políticos en qué nosotros par-ticipate”
(Calhoun 1994un: 28). Por otro lado, la construcción de identidad y el
rediscovery de uno es self no puede ser reducido sencillamente to mecanismos
psicológicos; son procesos sociales (Berger y Luckmann 1966; Moscovici
1981; Billig 1995).
En las páginas siguientes hablamos algunas características de identidad construc-
tion. Muestramos, primero, aquella producción de identidad es un esencial component
de col-lective acción, a través de la identificación de actores implicó en conflicto, la
facilitación de confiar en relaciones entre ellos, y el establecimiento de con-nections
enlazando acontecimientos de periodos diferentes. Compatible con qué mucho tiempo
ha sido tanserted por ambos sociológico (Touraine 1981; Pizzorno 1978; Melucci 1989,
1996) y sociopsychological (Moscovici 1979; Drury y Reicher 2000; Howard
2000) perspectivas en acción colectiva, consideramos identidad tan tampoco
una cosa uno puede poseer, ni un property de actores, pero cuando el proceso
a través de qué individual y/o actores colectivos, en interacción con otros
actores sociales, atributo un spe-cific significado a su traits, sus ocurrencias de
vida, y los sistemas de relaciones sociales en qué son embedded.
Posteriormente, afrontamos algunos de las paradojas qué un concepto cuando
flota-ing cuando aquello de la identidad inevitablemente crea. Primero, la
identificación social es simultane-ously estático y dinámico. Por un lado, la
referencia a identidad evoca la continuidad y the solidez de lealtades con el tiempo.
En el otro, la identidad es también abrir a constante redefinitions. Enlaces
postulated por actores sociales con seguros su-torical experiencias y con los grupos
seguros aparecen, de hecho, siempre para ser contin-gent. Son la fruta de
simbólicos reinterpretations del mundiales cuáles son inevitablemente selectivos y
parciales (Calhoun 1994un; Melucci 1996). Además, identi-
COLLECTIVE UnCTION Y yo DENTITY 93

Los lazos están forjados y adaptados en el curso de conflicto, y their las


fronteras pueden ser modificadas bastante drásticamente en el proceso
(Bernstein 1997; Drury y Reicher 2000; Drury, Reicher, y Stott 2003). Como
resultado, a pesar de su estabilidad relativa, incluso los sentimientos de
identificación pueden ser – y de hecho es – subject a recurring modificaciones.
Una segunda paradoja está representada por la presencia de identidades múltiples –
o, en otras palabras,, individual' sentimientos de pertenecer a varios diferente
collectives, a veces definido en referencia a criterios muy diversos. De un certain punto
de vista, la identidad opera como un principio de organizar en relación a individual y
col-lective experiencia: por ejemplo, ayuda actores para identificar sus aliados y su
adversaries. Al mismo tiempo, aun así, la definición de líneas de solidarity y de la
oposición es a menudo cualquier cosa pero claro: el aumento de movimientos feministas
ha creado, por ejemplo, líneas nuevas de identificación qué tener a menudo les reveló-
selves para ser en contraste con aquellos cuál les precedió (por ejemplo, aquellos de
clase). Rather Que uprooting estas líneas más viejas de identidad, identidades nuevas
co-existir con ellos, generando tensiones entre actores' diferentes self-
representaciones,2 o entre activistas quiénes identifican con el mismo movimiento
todavía pertenece a generaciones diferentes (Whittier 1995, 1997; Schnittker, Freese, y
Powell 2003). A pesar de que una idea de semejanza es seguramente detrás del concepto
de identidad colectiva (p. ej. Berezin 2001: 84), esta homogeneidad es raramente si
nunca multidimensional. Actores quiénes son similares en algún traits/attitudes/las
experiencias pueden diferir sustancialmente en otras dimensiones (Simmel 1955, Diani
2000un). Uno ha también para notar, aun así, aquellas identidades múltiples necesitan
no necesariamente ser en una relación tensa a cada cual otro.

4.1 Qué Hace Trabajo de Identidad?

Construcción de identidad no tendría que ser considerada sencillamente como


precondition para col-lective acción. Es ciertamente cierto que actores sociales' las
identidades en un periodo dado guían su conducta subsiguiente. La acción ocurre,
de hecho, cuándo los actores desarrollan la capacidad de definir ellos, other actores
sociales, y el “enjeu” (participación) de su relación mutua (Touraine 1981). Al
mismo tiempo, aun así, la identidad no es una característica inmutable, preexisting
acción. Al contrario, es a través de acción que sentimientos seguros de pertenecer
venido para ser tampoco reforzado o débil-ened. En otras palabras,, la evolución
de productos de acción colectiva y anima continuo redefinitions de identidad
(Fantasia 1988; Hirsch 1990; Melucci 1995; Bernstein 1997; Goodwin et al. 2001;
Drury et al. 2003).
Dejado nos mirada más estrechamente en los mecanismos por qué acción
“constituye” identidad. Esto pasa, primero, a través de la definición de las fronteras
entre actores comprometieron en un conflicto. En contraste a macrostructural
aproximaciones al análisis de conflictos sociales, the la sociología de acción ha
dibujado atención al problema-atic naturaleza de la estructura–acción nexus,
acentuando que el conflicto no puede ser
94 COLLECTIVE UnCTION Y yo DENTITY

Explicado exclusivamente en la luz de relaciones estructurales y tél contrastando


interesa cuál estos han determinado. Origina, bastante, en la interacción entre
tensiones estructurales y la aparición de un actor colectivo que se define y su
adversaries en la base de valores seguros y/o intereses (Touraine 1981). La acción
colectiva no puede ocurrir en la ausencia de un “” caracterizamos por comunes
traits y una solidaridad concreta. Igualmente indispensable es la identificación del
“otro” definido como responsable para la condición del actor y contra qué la
movilización se apellida (Gamson 1992b). La construcción de identidad allí-fore
implica ambos una definición positiva de aquellos participando en un grupo seguro,
y una identificación negativa de quienes no son sólo excluidos pero activamente
opposed (Touraine 1981; Melucci 1996; Taylor y Whittier 1992; Robnett 2002;
Tilly 2004un). También incluye una relación con quienes se encuentran en una
posición neutra. Es con referencia a “protagonistas, antagonistas, y audiencias”
(Caza, Benford, y Nieve 1994) que identidades de movimiento están formadas y
venidos a vida.
En segundo lugar, la producción de identidades corresponde al emer-gence de
redes nuevas de relaciones de confianza entre actores de movimiento, operando
dentro de entornos sociales complejos.3 Aquellos relationships movimientos de
garantía una gama de oportunidades (ve capítulo 5 abajo). Son la base para el
desarrollo de redes de comunicación informal, interacción, y, cuándo soporte
necesario , mutuo. Parecen para ser una sustitución esencial para el scarcity de
recursos organizativos; además, la información circula rápidamente vía redes
interpersonales, compensando al menos en parte para acceso limitado a los medios
de comunicación; confianza entre quienes identifican con el mismo esfuerzo
político y cultural habilita aquellos se preocuparon para afrontar con eficacia más
grande los costes y los riesgos enlazaron a represión; finalmente, identificando
ellos – y ser iden-tified – tan parte de un movimiento también significa ser capaz
de contar encima ayuda y soli-darity de sus activistas (Gerlach e Hine 1970;
Gerlach 1971).
La presencia de sentimientos de identidad y de la solidaridad colectiva lo hace más
fácil de afrontar los riesgos y las incertidumbres relacionaron a acción colectiva. En el
caso de los trabajadores' movimiento, cercano proximity de workplaces y livinespacios
de g facilitaron la activación y la reproducción de solidaridad (ve capítulo 2 encima).
Las subculturas socialistas construyeron “áreas de igualdades” donde los participantes
se reconocieron como iguales, y sentía pertenecieron en un comunes destiny (Pizzorno
1996). En postindustrial sociedad, aun así, las relaciones sociales directas fundaron en
territo-rial proximity ha devenido más débil. Mientras esto ha no necesariamente
significó el dis-aspecto de relaciones comunitarias, en general, los sistemas de
relaciones sociales son más distantly conectados que eran antiguamente a un espacio
territorial definido. Sus fronteras extienden ahora para abarcar entero nacional y
supranational com-munities (Wellman et al. 1988; Giddens 1990; Castells 1996; Sassen
1998; Vertovec y Cohen 2003). Como resultado, los actores colectivos son ahora menos
probables que antiguamente para los identificar en referencia a locality. La identidad
colectiva es menos depender-
COLLECTIVE UnCTION Y yo DENTITY 95

ent En interacciones directas , presenciales qué desarrollar en la comunidad


local y en espacios diarios. Los fenómenos de este tipo hubieron ya signaled el
cambio de premodernity a modernidad, y la aparición de la opinión pública
integrada vía la palabra imprimida (Anderson 1983; Tarrow 1998). Pero han
undergone una aceleración más lejana con la expansión del sistema de medios
de comunicación y la revolución electrónica (Calhoun 1992; Wasko y Mosco
1992; Bennett 2003; Wellman y Haythornwhyte 2002).
Para identificar con un movimiento también entails sentimientos de
solidaridad hacia personas a quien uno no es normalmente enlazado por
contactos personales directos, pero con quien uno empero comparte
aspiraciones y valores. Activistas y movimiento sympa-thizers es consciente
de participar en realidades qué es mucho más vasto y más complejo que those
del cual tienen experiencia directa. Es en referencia a esta comunidad más
ancha que la motivación de sorteos del actor y ánimo a acción, incluso cuándo
el campo de oportunidades concretas parece limitado y hay un sentido fuerte
de aislamiento. Es de course un asunto abierto la extensión al cual el spread
de ordenador la comunicación mediada puede facilitar la difusión de
identidades desenredó de referencias a cualquier tiempo concreto y espacio (ve
capítulo 5, sección 5.4 abajo).
Tercio, identidad colectiva connects y asigna algunos significado común a
experiencias de acción colectiva dislocated con el tiempo y espacio (ve p. ej.
Lumley 1990; Farrell 1997). En tiempo este toma la forma de enlazar
acontecimientos juntos asso-ciated con una lucha concreta para mostrar la
continuidad del esfuerzo detrás de los casos actuales de acción colectiva. Dejado
nos buscar ejemplo en la “Llamada de los Movimientos Sociales europeos,”
emitidos antes del Foro Social europeo en Florence en noviembre 2002: “ hemos
venido juntos del social y citi-zens movimientos de todas las regiones de Europa,
Este y Del oeste, Del norte y Del sur. Hemos venido juntos a través de un proceso
largo: las manifestaciones de Amsterdam, Seattle, Praga, Niza, Genoa, Bruselas,
Barcelona, el grande mobilisa-tions contra eln eoliberalism así como las huelgas
generales para el defensa de derechos sociales y todas las movilizaciones en contra
guerra, espectáculo la voluntad de construir una otra Europa. En el nivel global
reconocemos la Carta de Principios de WSF y la llamada de movimientos sociales
of Porto Alegre” (citados en Andretta 2003). Aquí, ocurrencias qué tuvo lugar en
los puntos diferentes en tiempos están amistados como el fondo de la 2002 reunión,
para mostrar continuidad entre ellos. Gusta-sensato hay un intento obvio de
conectar a través de spmovilizaciones de as que tienen lugar en todas las esquinas
de Europa, y para relacionarles también a desarrollos recientes de acción colectiva
en una escala global.
El asunto de la continuidad con el tiempo es también importante porque los
movimientos sociales característicamente alternan sertween “fases” visibles “y”
latentes (Melucci 1996). En el anterior, la dimensión pública de acción prevalece,
en la forma de demonio-strations, iniciativas públicas, intervenciones de medios de
comunicación, y tan encima, con niveles altos de cooperación e interacción entre
el various mobilized actores. En el último,
96 COLLECTIVE UnCTION Y yo DENTITY

Acción dentro de las organizaciones y la producción cultural dominan.


Contactos entre las organizaciones y los grupos militantes son, en general,
limitados a inter-relaciones personales , informales, o a interorganizational
relaciones que no generalmente producir la capacidad para movilización de
masa. En estos casos, collec-tive solidaridad y el sentido de pertenecer a una
causa no es tan obvia cuando son en periodos de intense movilización. La
identidad es nurtured por las acciones escondidas de un número limitado de
actores. Y es precisamente la capacidad de estos grupos pequeños para
reproducir modelos y representaciones seguros de solidaridad con el tiempo
cuál crea las condiciones para el resurgimiento de acción colectiva y deja
aquellos con-cerned para localizar los orígenes de olas nuevas de acción
pública a preceder mobi-lizations (Melucci 1996; Rupp y Taylor 1987;
Johnston 1991b; Mueller 1994; Whittier 1995).4
Esto enlazando función de identidad does no operar sólo en el nivel de col-
lective representaciones y socialmente percepciones extendidas de seguros sociales
phe-nomena. También relaciona el último a experiencia individual. En construir su
identidad propia, coherencia de atributo de los individual y significando a las varias
fases de su público propio e historia privada. Esto es a menudo reflejado en su vida
histo-ries y biografías, i.e., el “[i]ndividual constelaciones de significados
culturales, personalidades, sentido de self, derivado de biográfico experiences”
(Jaspe 1997: 44). Mucho tiempo-las carreras militantes duraderas desarrollan con
un compromiso constante a una causa, incluso si articulado en maneras diferentes
en tiempo diferente (Downton y Wehr 1997). Es cierto que cualquier ola de
movilización atrae a social movements personas sin experiencia anterior de acción
colectiva – al menos para razones biográficas. Todavía, continuidad en militancy
– el hecho que quienes haber ya par-ticipated antiguamente es más probablemente
para devenir activo una vez más que quienes nunca han hecho tan – ha sido
confirmado por un número grande de estudios, dedicados a ambos contemporáneos
(McAdam 1988b; Whittier 1995 y 1997; Klandermans 1997: ch. 4; Robnett 2002)
y “ejemplos” históricos de acción colectiva (Thomp-hijo 1963; Gould 1995;
Catanzaro y Manconi 1995; Passerini 1988). La “1968 generación,” por ejemplo,
ha remobilized en varias olas de protesta – más tardío en las campañas de justicia
globales (della Porta 2005e).
Hablando de continuidad con el tiempo no necesariamente significa suponer
que la identidad persiste, dejado sólo que está fijado. La referencia al pasado es,
de hecho, siempre selectivo. “La continuidad” en este caso significa bastante el
activo re-elaboration de ele-ments de uno es biografía propia y su reorganización
en un contexto nuevo. De este modo, deviene posible de mantener ocurrencias
personales y colectivas juntas cuál puede otherwise aparecer para ser incompatible
y contradictorio. Cuando un ejemplo, dejado nos mirada en un caso de acción
colectiva radical cuál parecería para presuponer una transformación personal
drástica en el momento de movilización – que de terrorismo. Biografías de
terroristas italianos del 1970s (della Porta 1990) muestra que tuvieron en muchos
casos movieron de militancy en católicos organiza-tions a lucha armada. En este
caso, había claramente una rotura marcada en formas
COLLECTIVE UnCTION Y yo DENTITY 97

De acción y programas políticos. No obstante, había también elementos de


coherencia en estas historias qué parecer, en la superficie, para ser tan falto en
con-tinuity. Uno de estos era la aspiración para construir relaciones sociales
qué fue allende las desigualdades y las distorsiones del presente. También
común a ambas fases biográficas era una concepción de acción colectiva como
el procla-mation de verdades absolutas unnd el testimonio concreto de uno es
ideal propio (e ideológico) principios, ningún asunto cómo distorsionado.
Por otro lado, el principio de cada experiencia nueva de la acción colectiva
inevitablemente significa también rompiendo con el pasado a algún grado. En
algunos casos, eld ecision para comprometer en acción colectiva, o unir una
organización o un proyecto, el cual es claramente diferente de qué individual
han hecho hasta aquel punto, resultados en una transformación personal
radical. En estos casos, las personas experimentan genuinas con-versiones, el
cual a menudo ruptura mala con sus vínculos sociales anteriores. El trans-la
formación de identidad puede ser mucho más profundo en estos casos. Afecte
no sólo el político leanings de individual y sus niveles de implicación en acción
colectiva, peroun lso elecciones de vida global e incluso la organización de
vida diaria.
Los mismos fenómenos son a menudo encontrados entre quienes unen
movimiento religioso-ments (Robbins 1988: ch. 3; Snow et al. 1980; Wilson 1982;
Wallis y Bruce 1986).5 Conversión a un culto o una secta often implica un más o
menos radical trans-la formación de una es identidad y lealtades, y esto es más
profundo la afiliación más exigente los criterios en el grupo nuevo son. Por
ejemplo, uniendo a un grupo le gusta la liebre Krishna implica la aceptación de un
altamente ritualized estilo de vida en qué todo tiene que ser de acuerdo con los
preceptos de la secta (Rochford 1985). Además, la historia de los conflictos propio
de sociedad industrial documenta la fuerza de “tra-ditional” identidades políticas y
el a menudo exclusivos y sectarian naturaleza de col-lective acción. En el siglo de
ideologías grandes, abandonando políticos y/o posiciones de clase – aquello es,
dejando un sistema seguro de relaciones sociales y de identificaciones afectivas
para adoptar otro – era siempre costly. Un ejemplo bueno de este está
proporcionado en la segmentación de Irlanda del Norte a lo largo de reli-gious
líneas (uno también podría pensar del israelí–conflicto palestino para otra
ilustración obvia de este patrón). En Irlanda del Norte, las identidades religiosas
tienen proporcionó criterios para la organización de relaciones sociales en absoluto
niveles, incluyendo conexiones comunitarias y familiares. Los lazos que atajan las
barreras sectarias son infre-quent y las personas implicaron en ellos regularmente
conocen con ostracismo de sus comunidades propias (Bew et al. 1979; McAllister
1983; O'Sullivan Ve 1986; Maguire 1993). Esto ha rendered la activación de lazos
con miembros del opposing grupo un muy costoso y a menudo ejercicio muy
peligroso. Esto aplica a organizaciones de movimiento social también, y ha often
resultó en fracaso de atajar sectario divide. A pesar de que muchos intentos han
sido hechos sobre las últimas dos décadas por tipos diferentes de organizaciones,
del ecologista a mujeres es (Connolly 2002; Cinalli 2002), para desarrollar forma
intercultural nuevas de político
98 COLLECTIVE UnCTION Y yo DENTITY

Participación, incluso después del acuerdo de viernes Bueno de 1998, la


segregación social en Irlanda del Norte es todavía alto (McGarry 2001).

4.2 Identidades Múltiples

En sociedad moderna, los movimientos sociales son a menudo representados


como “caracteres” con una capacidad estratégica para acción y aguantando una
función cultural concreta. Para estas razones, son también vistos cuando
habiendo un homogeneous e identidad integrada. Poca atención ha sido dada a
los sistemas de las relaciones en qué actores están implicadas, y esto ha
impedido la multiplicidad de identidades y lealtades entre militantes y grupos
de movimiento de ser reconoció. Bastante, ha favorecido la tendencia para ver
identidad como el espejo de un underlying realidad objetiva. 6
De hecho, aun así, la identificación colectiva es raramente expresada a través
del inte-rallado y homogeneous identidades qué estas visiones de movimientos
presup-pose.7 Cuando la identidad es, primero, un proceso social y no una
propiedad estática, feelings de pertenecer entre grupos y collectives cuál originó de
estos es, a una extensión segura, fluido. Una menos aproximación rígida a la
cuestión de identidad nos dirijo para reconocer que no siempre presuponga un
fuerte “colectivo nosotros” (Lemert 1994; Billig 1995). Identificando con un
movimiento no necesariamente significa compartir una visión sistemática y
coherente del mundo; ni impida los sentimientos similares que son dirigidos a
otros grupos y movimientos también. Formas de alle-giance cuáles no son
particularly intensos o exclusivos puede, en contextos seguros, continuidad de
garantía de acción colectiva (Melucci 1984un; Diani 1995un). En realidad, es raro
que una identidad dominante es capaz de integrar todo el otros. Más normalmente,
las identidades tienen un polycentric rather que una estructura jerárquica. 8 Pero
insistencia excesiva en la función de identidad como fuente de la coherencia a
menudo dirige para desatender-ing la importancia de formas de identidad múltiple
(Calhoun 1994un).
Tensiones entre varios tipos de identificación tienen que hacer, primero, con el
hecho que las motivaciones y expectativas detrás del individual que participan en los
movimientos sociales son, de hecho, mucho más ricos y más diversificados que las
imágenes públicas de aquellos movimientos, cuando producidos por sus dirigentes,
sugeriría. Por taparte de rey en la vida de unas personas de movimiento a menudo
buscan respuestas a su propios concretos aspira-tions y preocupaciones. El Milanese las
mujeres estudiaron por Melucci y su collabora-tors en el tempranos 1980s, por ejemplo,
vio su implicación en feminismo en muchos maneras diferentes. Algunos dieron orgullo
de colocar a reflexión personal, otros dieron pertinencia más grande a intervención
externa. Algunos acción de grupo valorado, sobre todo solidaridad y elementos
afectivos, mientras otros insistidos en la importancia de formas nuevas en desarrollo de
interpreting el mundo (Bianchi y Mormino 1984). A lo largo de líneas similares, Reger
(2002) muestra que es posible de acomodar diferir-ent posiciones dentro de la misma
organización. Su ejemplo es el capítulo de Nueva York
COLLECTIVE UnCTION Y ABOLLOITY 99

De la Organización Nacional para Mujeres (AHORA), el cual incluido ambos


feministas orientaron a políticos advocacy y aquellos privileging prácticas de
personales empow-erment. Incluso la identidad de un grupo solo por tanto puede
ser visto como punto de encuentro parahola historias, necesidades personales, y
representaciones heterogéneas.
Los mecanismos similares son para ser encontrados en la relación entre órgano solo-
izations y movimientos, en el sentido ancho. Por un lado, objetivo de organizaciones
para afirmar su formulación concreta propia de su identidad colectiva como la identidad
global del movimiento. Por otro lado, el refuerzo de un organi-zational la identidad
deja, al mismo tiempo, para diferenciación del resto del movimiento (Taylor 1989). Por
tanto, uno identifica with una organización no sólo para sentir parte de un esfuerzo
colectivo más ancho pero también para ser un particular, componente autónomo ,
distintivo de tal un esfuerzo. De este modo deviene pos-sible para anclar identidad a
formas organizativas, los cuales son más structured y sólidos que aquellos constituidos
por redes de relaciones informales entre los varios componentes de un movimiento. Qué
es cursorily movimiento “denominado iden-tity” es, en realidad, en gran parte un
producto contingente de las negociaciones entre imágenes colectivas produjeron por
varios actores y varias organizaciones. Además, incluso los grupos pequeños pueden
experimentar las orientaciones múltiples qué caracterizar la identidad de un movimiento
en su entirety (Melucci 1984un). En Milán, por ejemplo, análisis de la experiencia del
Ticinese Colectivo facilitado la identificación de dos tensiones básicas en la manera en
qué práctica feminista estuvo percibida (Bianchi y Mormino 1984). El primer señalado
entre la acción apuntada en sociedad allende el movimiento y aquello cuál era inwardly
dirigió, hacia grupos pequeños; el segundo entre acción qué era puramente afectivo y
solidaristic y acción qué apuntado para valorar mujeres competences y calidades
profesionales. Las mismas dicotomías ofrecieron una llave útil a leer la identidad del
movimiento-ment globalmente. había, de hecho, grupos que levantan consciencia, o la
lesbiana agrupa cuál era virtualmente unconcerned con acción pública y concentrado
en el afectivo-solidaristic lado de acción. Por otro lado, escritores' grupos y aquellos
concerned con reflexión en asuntos intelectuales de unas mujeres perspec-tive asoció
un nivel bajo de intervención externa con su objetivo de llamar atten-tion a capacidades
intelectuales y profesionales de las mujeres. Entre los grupos se preocuparon con
intervención externa, algunos colocados un valor alto en el soli-daristic elemento, como
feminista collectives en squatter comunas; otros estuvieron preocupados con consolidar
la presencia social de las mujeres, ambos en el nivel económico y encima que de
producción cultural (Bianchi y Mormino 1984: 147).

Tenga que ser recordado que identidades de movimiento pueden ser


compartidas por individu-als, detached de cada lealtad organizativa. De hecho, es
posible de sentir parte de un movimiento sin identificar con cualquier organización
concreta y ,de hecho, incluso expresar un explícito disentir hacia la idea de
organización en general. En particularmente effervescent condiciones,
sencillamente para participar en las reuniones y las manifestaciones da el sensation
de ser capaces de contar en la definición
100 COLLECTIVE UnCTION Y yo DENTITY

De estrategias y en objetivos, incluso sin haber pasado a través del filtro de spe-
cific organizaciones. De hecho, cuándo mecanismos de identificación tienden para
cambiar principalmente hacia concreto organizó actores, esto es un indicador de
una defunción de movimiento. Uno del característico traits de la ola de de clase
trabajadora protestar cuál cruzó Italia entre 1968 y 1972 era la modificación de la
relación entre militancy en comercio concreto-organizaciones de unión y militancy
en los trabajadores' movimiento en su sentido ancho (Pizzorno et al. 1978). Formas
nuevas de representa-tion estuvo introducido en fábricas (consejos de fábrica).
Ofrecieron ample oppor-tunities para participación incluso a quienes no fueron
matriculados en cualquier de the uniones tradicionales. El empujón hacia
comercio-unidad de unión y para vencer preex-isting lealtades de grupo era
también fuertes en aquellos años. Lealtades de grupo vinieron para dominar una
vez más sólo cuándo la movilización agonizó e identidad de movimiento era débil.
Analysis De grassroots acción de clase trabajadora en los EE.UU. también apoya
esta reclamación: fases de aumentar el conflicto tiende para fortalecer más ancho
collec-tive solidaridades más que identificación con uniones concretas (Fantasia
1988).
En algunos casos, las identidades colectivas expresaron por movimientos
diferentes o dif-ferent organizaciones de movimiento pueden ser mutuamente
incompatibles. El aumento de fem-inism ha revelado la subordinación
persistente de mujeres dentro de trabajadores' organizaciones de movimiento
o en muchos de los “movimientos nuevos” themselves. De este modo, han
mostrado las contradicciones profundas en actores' identidades qué, nunca-
theless, generalmente puede ser explicado con referencia a la misma área de
“progres-sive” movimientos. De otro punto de vista, el salience de religioso o
ethnonationalist las identidades ha a menudo actores izquierdos de frente a
dilemas dramáticos, en vista de la dificultad de integrar estos y otras fuentes
de identificación. Por ejemplo, lealtad a una ideología nacionalista radical
como aquel del Serbs, o a un movimiento religiosoment como
fundamentalismo argelino, coloca dificultades considerables en el camino de
aquellas mujeres quiénes quieren ambos para mantener y afirmar su identidad
de género (Calhoun 1994un; ve también Fantasia e Hirsch 1995). Por otro lado,
activistas de justicia global have tan lejos mostró una tolerancia grande hacia
cada otro es combinaciones de identidades múltiples (della Porta 2005e;
Bennett 2004c).

4.3 la identidad Facilita Participación?

La referencia a identidad es esencial – incluso si, cuando veremos, polémicos – para


entender los mecanismos individual subyacente' decisiones para devenir implicadas en
acción colectiva. El debate empezado en el 1960s con Mancur Olson es (1963)
provocative tesis en la irracionalidad de acción colectiva. Olson argu-ment esw ell
sabido y por tanto puede ser revisado en unas cuantas frases. El inicio-ing punto a favor
su reflexión es el concepto de acción colectiva cuando preocupado con la producción
de bienes colectivos. Estos derivan su naturaleza del hecho que,
COLLECTIVE UnCTION Y yo DENTITY 101

Una vez obtenido, pueden ser disfrutados por cualquier miembro de un grupo
social, consideración-menos de su/su contribución a la causa. A veces el “grupo
social” consta de personas viviendo en un territorio dado. Por ejemplo, una vez un
local la coalición medioambiental ha tenido los controles más estrictos en
emisiones automovilísticas implementaron en su commu-nity, el aire “más limpio
bueno colectivo” es accesible a todos los residentes, ningún asunto si apoyaron la
campaña o no. En otro tiempo, el “social group” puede constar de una colectividad
definida por características concretas. Por ejemplo, una vez votando los derechos
estuvieron extendidos a mujeres, cualquier mujer estuvo titulada a ellos, otra vez
irrespective de su contribución al movimiento de sufragio. O, si un negocio
regional association exitosamente presiones el gobierno para lanzar un plan de
inversión masiva en público comunicaciones en el área, todo solo-operadores
empresariales beneficio de él, incluyendo quienes no son miembros del asso-
ciation. Las propiedades de collective los bienes determinan el fundamentales irra-
tionality de acción colectiva, si valorado en la base de criterios de instrumentales,
individualistic racionalidad. No sea en absoluto racional para actores individuales
para invertir recursos en una garantía – el production de un colectivo bueno – si
tuvieron que aguantar todos los costes de fracaso pero podría disfrutar todas las
frutas de éxito sin haber contribuido directamente a la producción del bueno.
Para acción colectiva para ocurrir, político entrepreneurs u organizaciones
haber tampoco para coaccionar participantes probables o para distribuir
incentivos selectivos – por ello habilitando participantes para recibir beneficios
más grandes que quienes no partici-pate. Este problema aplica sobre todo a
grupos grandes – o en otras palabras, a aquellos groups en qué contribución no
individual es tan pertinente cuando para afectar el resultado final de una
garantía colectiva. Dos factores aumentan las dificultades de mobi-lization
para grupos grandes: primero, su medida grande implica costes de
coordinación alta; segundo, certain incentivos sociales – prestigio, respeto, o
amistad – cuáles pueden trabajar con los grupos pequeños devienen más
difíciles de activar como las dimensiones del aumento de grupo.
No sorprendentemente, reacciones a Olson el modelo ha sido muy diferente. 9
Algunos becarios have extendió la idea de incentivos selectivos de tal manera tan
para incluir recompensas de un solidaristic y tipo normativo. Estos pueden, en su
vuelta, ser dividido a al menos dos categorías. Los incentivos selectivos externos
constan de expec-tations cuál individuals tener del grupo al cual refieren; estos
están vistos, más generalmente, cuando recompensas y cuando sanciona cuál este
grupo y otros actores sociales pueden hacer uso de cuando de frente a una decisión
o más una negativa para devenir implicada en conjunto. Interno selectivo
incentives cubre los mecanismos internos qué traer individual para atribuir a acción
colectiva un valor normativo seguro, o más para derivar de este un placer intrínseco
o para experimentar un catártico trans-formación (Opp 1989: 58–9). Según
numerous piezas de búsqueda en indi-vidual participación, entre los “incentivos
selectivos” es referencias a los valores y los vínculos de solidaridad compartieron
dentro del grupo, más que motivaciones de una clase material, los cuales han
emergido como el mejores predictors de acción colectiva
102 COLLECTIVE UnCTION Y yo DENTITY

(Marwell Y Ames 1979; Walsh y Warland 1983; Oliver 1984; Opp 1988, 1989;
Passy 2003).
La incorporación de elementos normativos y simbólicos a selectivos incen-tives
no, quénunca, resuelve uno de los problemas principales de Olson modelo,
concretamente su carencia de atención a la dimensión diacrónica. El
microeconomic racionalidad en qué Olson el argumento está basado se desenreda
en periodo a escaso de tiempo. En contraste, la acción colectiva es un procesar cuál
desarrolla con el tiempo, en particular cuándo considerando la consecución de
objetivos. Es difícil, si no impos-sible, para determinar costes y beneficios
apropiadamente, por tanto. Por un lado, hay la certeza de compromiso y del
acceptance de arriesgar a corto plazo; en el otro, el territorio desconocido de
resultados qué no es sólo difícil de calcular del punto de vista del individual pero
cuya consecución también parece una perspectiva distante. La identidad colectiva
reduce estos difficulties. Olson la aproximación supone margen de tiempo de plazo
a escaso para la maximización de utilidad individual. En contraste, cuando hemos
visto, la identidad colectiva toma un tiempo más largo por-spective. Incluso la
definición de actores' los intereses es un proceso social qué requires una definición
de un “nosotros” y un “les,” y así es inextricably enlazado a construcción de
identidad. Como resultado, sintiendo parte de un esfuerzo compartido e
identificando un intereses propios no sólo en el nivel individual pero también en
los costes de marcas de nivel colectivos y arriesga más aceptable que ellos
otherwise ha sido. Riesgos físicos y privación material, difícilmente racional de un
individualistic, perspectiva de plazo corto, puede ser justificado si mirado en
cuando los costes sujetaron a llevar en un más largo-denominar proyecto histórico
(Pizzorno 1978, 1983, 1986).
Además, la intensidad y, sobre todo, el exclusiveness de identidad colectiva en
definir actores' los límites pueden variar. Una cuestión clave es por tanto si varias
identidad traits decisiones de influencia para mover a acción, y si tan qué. Algunos
haber hypothesized un enlace, en inverse proporción, entre el nivel de inclusiveness
y transparencia de una definición particular de identidad y la capacidad para
movilización: “Algunos agrupa intento a mobilize sus electores with un todo-
inclusive nosotros.
. . . Tal un marco de conjunto gira el ‘nosotros' a una piscina de individual más
que un actor colectivo potencial . . . Marcos de acción colectiva, en contraste,
es adver-sarial” (Gamson 1992b: 85). Esto no significa que todos los
movimientos sociales en todo momento desarrollan identidades exclusivas:
una riqueza de ejemplos, recientemente incluyendo justicia medioambiental y
global movimientos, de hecho sugiere el opuesto. Aun así, la carencia de
explícito adversaries para el ecologismo mucho tiempo ha sido señalado out
como fuente de debilidad para aquel movimiento (p. ej. Diani 1995un), y
algunos han levantado duda sobre la capacidad del movimiento de justicia
global a mobi-lize su constituency más allá los acontecimientos más visibles
encima tierras muy similares (Tarrow 2005).
El problema es por tanto cómo para conseguir un equilibrio entre lograr y selec-
tivity (Marwell y Oliver 1993: 157–79); concretamente, cómo para definir
identidad para incluir tan muchas personas como posibles en un movimiento
potencial constituency, mientras
COLLECTIVE UnCTION Y yo DENTITY 103

Continuando proporcionar incentivos fuertes a los seguidores de núcleo del


movimiento. Un inclusive y la identidad flexible no asociará un movimiento con
un grupo social particular, una ideología concreta, estilo de vida, o código
simbólico. De este modo, facilite comunicación entre activistas de movimiento y
el mundo exterior, así como su capacidad de hablar a contextos culturales y
políticos diferentes. Una identidad exclusiva qué define el perfil de un movimiento
particular con alguna fuerza instead tender para acentuar aislamiento en relación
al mundo exterior: pero probablemente será capaz de proporcionar más notable
(selectivo) incentivos para acción, haciendo la definición de ambos el actor y de su
adversaries más preciso en el proceso (Friedman y McAdam 1992).
Uno tendría que ser consciente, aun así, que cómo para combinar estas dos demandas
contradictorias eficazmente es sólo parcialmente bajo actores' control. La identidad
colectiva es seguramente afectada por actores' intentos deliberados a oficio y manipular
identificando symbols. Es, en otras palabras,, en parte un resultado de acción
estratégica. Pero también depende
– Y en todo likelihood, mucho más fuertemente – en actitudes mentales y memorias
colectivas, consolidó con el tiempo, y sobre qué activistas de movimiento haber poco
control. No para mencionar el hecho que otros actores sociales pueden ser capaces de
manip-ulating en grados variables la imagen qué un particular colectivo tiene de él (por
ejemplo, los medios de comunicación: Gitlin 1980; Gamson y Wolfsfeld 1993;
furgoneta Zoonen 1996; Gamson 2004; Earl, Martin, McCarthy, y Soule 2004; Myers
y Caniglia 2004).
Además, es importante de distinguir a este particular entre el mobi-lization de
personas y la movilización de otros recursos, por ejemplo organi-zational o
financieros (Oliver y Marwell 1992). Las identidades exclusivas aparecen para ser
más eficaces en participación directa motivadora. Inclusive Identidades, aun así,
parece más útil, en principio, a la movilización del segundo tipo de recurso (Diani
y Donati 1996). Intentos a mobilize resources en la parte de movimiento-ment las
organizaciones son cada vez más conducidas por tecnología de marketing
tradicional-niques y estrategias como correo directo (McFarland 1984; Donati
1996; Jordania y Maloney 1997). A pesar de que los mensajes de este tipo son a
menudo cuidadosamente tailored a sectores concretos del mercado público y
concreto nichos, todavía sus contenidos tienden para ser lejos más inclusive y todo-
abrazando que aquellos activistas de movimiento pasado de largo a través de sus
redes personales (et al de Nieve. 1980). El acceso al público general es por tanto
globalmente más fácil para actores de movimiento quiénes son portadores de un
inclusive identidad. En cambio, organizaciones con un más definidos identidad
cultural y política tendrá acceso fácil sólo a la mayoría de sectores comprensivos
de opinión pública.
Mientras they reconoce ambos los límites de una lectura estrictamente
económica de col-lective acción, y la oportunidad de tener en cuenta incentivos
inmateriales, las posiciones acabamos de presentar es compatible con un rationalist
paradigma. Otros becarios de movimiento have, aun así, reservas serias expresadas
sobre la oportunidad de aplicar al análisis de conceptos de acción colectiva qué era
originalmente desarrollado con referencia a acción individual de un utilitarian tipo
104 COLLECTIVE UnCTION Y yo DENTIDAD

(Bombero y Gamson 1979; Ferree 1992; Melucci 1989). Hablando de nonmate-


rial incentivos, o mirando en identidad como criterio, habilitando los costes y bene-
acceso de acción para ser calculada con el tiempo, es inapropiado para varias
razones. En primer lugar, la suposición que actores sociales siempre movimiento
en la base de principios racionales es discutible. Al contrario, nonrational
elementos, como emociones, afectos, y sentimientos, es también muy importante
(Melucci 1989; Flam 1990; Taylor y Whittier 1995; Scheff 1994un, 1994b; Jasper
y Poulsen 1995; Jasper 1997; Goodwin et al. 2001). El predominio de rationalist
por-spectives desde el 1960s es fácilmente explicable en la luz de la necesidad de
desafiar aquellos analiza cuál redujo movimientos a un espectáculo de
irracionalidad, el producto mero de vacíos en procesos de socialización (Taylor y
Whittier: 179–80). Aun así, esto no autoriza soporte para la idea que las emociones
y la razón son irreconcilable (Turner y Killian 1987; Goodwin et al. 2001: 2–16;
Kim 2002).

Los críticos también cobran el rationalist aproximación con pasar por alto
el hecho que acto de actores sociales y elecciones de marca dentro de un
sistema de interdependence con otros actores. La decisión para participar en
acción es, en realidad, condicionado por el actor expectativas de aquellos al
cual está enlazado. La capacidad del actor para la elección autónoma varía
según la clase social al cual pertenece, y está limitado por asimetrías en la
distribución de poder y recursos sociales (Ferree 1992). Cuándo uno reconoce
que incluso la acción económica está gobernada por redes de relaciones y por
actor-normas sociales obligatorias (por ejemplo, Blancos 1988; DiMaggio y
Powell 1991; Granovetter 1985), recourse al concepto de un actor racional para
el análisis de collective los fenómenos aparece a los críticos aún más
discutibles.
Un problema más lejano deriva del hecho que los bienes entre qué el actor tiene
que escoger naturalmente sería diferente de aquellos a qué modelos de eco-nomic
derivation normalmente referir (Bombero y Gamsencima 1979: 23–7). El legiti-
macy de las analogías entre intereses individuales y colectivos no tendrían que ser
descontados. Muchos de los “bienes” para qué movimientos mobilize deber su muy
existencia a acción colectiva. Dejado nos pensar por ejemplo del reforzarment de
la identidad de las mujeres y las transformaciones en estilos de vida privados y
públicos de las mujeres. Este bien “particular” viene a existencia también debido
al muy hecho que la acción colectiva de las mujeres tiene lugar. Esto no es para
negar que muchos “bienes” para mujeres (p. ej., aquellos originando de cambio de
política) puede ser tratado dentro de las fronteras de Olsonian modelos. Pero
queremos señalar fuera que el dilema de acción colectivo también puede ser visto
en plazos no necesariamente compatibles con Olson aproximación a bienes
públicos.
Finalmente, incluso el último presupuesto de rationalist paradigmas – que del
sta-bility de las estructuras de preferencia en qué decisiones individuales a acto
están basadas – parece muy improbable en el caso de acción colectiva. El asunto
sería en términos generales plausible si el problema de acción colectiva era uno de
decisiones
COLLECTIVE UnCTION Y yo DENTITY 105

Limitado a un momento solo, como aquellos relacionando a si o no a partici-


pate en una manifestación particular. Aun así, la acción colectiva es a menudo
un procesar cuál desarrolla con el tiempo, en qué las motivaciones qué ventaja
a acción, y las preocupaciones subyacentes, está modificado a través de
relaciones con otros actores, y donde decisiones para quedar implicadas es
continuamente renovó. Enpartic ular, muchos participantes en acción colectiva
no necesariamente mobilize en la base de sólido preexisting identidades, pero
estos pueden desarrollar en el curso de acción (Hirsch 1990; Fantasia 1988).
Esto lo hace difícil de apoyar la idea que una estructura de preferencias existe.
A summarize, el modelo del actor racional propone una visión de acción
qué, según sus críticos, es bastante poco realista y falla para tomar cuenta
tampoco de la naturaleza dinámica de acción o de la importancia de procesos
de identity creación. Además, la adopción de una perspectiva de elección
racional, paradoxi-cally, acaba por ocultar incluso la función de intereses:
actores no mobilize en behalf o en soporte de demandas o preocupaciones
concretas. Bastante, tienden para devenir involved en aquellas formas de
acción colectiva para qué el más grande incen-tives es disponible. Finalmente,
extendiendo el modelo a normativo y solidaristic los incentivos implicarían
ampliar el concepto de incentivo al punto de tau-tology (Bombero y Gamson
1979).
Cuando esto es una controversia qué cubiertas el enteros gamut de las ciencias
sociales, sea poco realista de soñar de una síntesis apropiada del dos perspec-tives
cuál hemos revisado aquí (Cohen 1985). Basta para recordar aquel soporte-ers de
aproximaciones de elección racional han intentado para afrontar la crítica dirigida
en ellos por aquellos upholding el paradigma de identidad. En particular, han
intentado analizar la ubicación de actores en relaciones interdependientes
complejas, devel-oping una visión de iónde acto qué es más realista y más allá
fuera del orig-inal hipótesis del actor independiente (Marwell y Oliver 1993; Gould
1993b; Opp y Gern 1993; Oberschall y Kim 1996; Heckathorn 1996).

4.4 Cómo Es la identidad


Generada y Reprodujo?

4.4.1 Self- y hetero-definiciones de identidad

Si la identidad es un proceso social más que una propiedad de actores sociales,


entonces sentimientos de belongingness y solidaridad en relación a un grupo
seguro, el reconocimiento de elementos de continuidad y discontinuidad en la
historia de individual, y la identificación de una es propia adversaries, poder todo
ser subject a recurring re-elaboration. La identidad emerge de los procesos de self-
identificación y exter-nal reconocimiento. Actores' self-las representaciones son,
de hecho, continuously afrontó con imágenes qué instituciones, comprensivos y
grupos sociales hostiles, público
106 COLLECTIVE UnCTION Y yo DENTITY

Opinión, y el producto de medios de comunicación de ellos (Melucci 1996;


Drury y Dreicher 2000; Howard 2000).
El construction de la identidad al mismo tiempo contiene una aspiración a
dif-ferentiate oneself del resto del mundial y para ser reconocido por él
(Melucci 1982; Calhoun 1994un). Un actor colectivo no puede existir sin
referencia a expe-riences, símbolos, y mitos cuáles pueden formar la base de
su individualidad. Al mismo tiempo, aun así, la producción simbólica no puede
contar sólo en self-legitimidad. Es necesario para representaciones seguras de
self para encontrar reconocimiento en la imagen qué otros actores tienen del
subject. Los movimientos hacen de hecho lucha para el reconocimiento de su
identidad. Es sólo en el contexto de reconocimiento mutuo entre actores que
conflicto y, más generalmente, las relaciones sociales pueden existir (Simmel
1955; Touraine 1981). Sin este, self-affirmed identidad en la parte de un grupo
inevitablemente dirigirá a su marginación y su reducción a un deviant
fenómeno.
La historia de movimientos es por tanto también la historia de sus miembros'
capacidad de imponer imágenes seguras de ellos, y para contrarrestar intentos por
grupos dominantes a denigrate sus aspiraciones para ser reconocidas como
diferentes. Un ejemplo importante proviene los conflictos relacionaron a la
construcción de la nación moderna-estatal. El desarrollo de vasto, altamente las
unidades políticas centralizadas dirigieron a un énfasis en homogeneización
cultural, a través de la afirmación de uno “lengua” nacional y uno “cultura”
nacional. Assimilationist Las políticas a menudo seguidas de este, en vista del
multicultural naturaleza de los territorios que vienen bajo el dominion de
formaciones estatales nuevas. Las tradiciones culturales diferentes de aquellos de
los grupos sociales, promoviendo la construcción de la nación nueva-estados, era
stig-matized como reliquias del pasado. Por ejemplo, la construcción de la
identidad nacional francesa dirigió al insignificanteization del Provençal y Breton
culturas. Estos devenían residuos meros de un backward, premodern sociedad,
cuya supervivencia repre-sented un unwelcome obstáculo al spread de los valores
positivos de progreso del cual el estado francés se hizo el portador (Cerveza 1977,
1980; Safran 1989; Canciani y De La Pierre 1993).
El poder de imponer negativo y estigmatizó definiciones de la identidad de otros
grupos constituye, de hecho, un mecanismo fundamental de social domina-tion.
Especialmente en las etapas tempranas de movilización, activistas de movimiento
social son routinely descritos por powerholders como depraved, moralmente
débiles, corrompió personas, incapaces de adaptar a los valores básicos de la
sociedad. Esto aplica al temprano nueve-teenth-los reaccionarios del siglo de frente
a masivos sociales change (Tilly 1984un: ch. 1) así como a los intentos del
establecimiento a delegitimize protestors siguiendo el 2001 anti-G8 movilización
en Genoa. En el periodo entre agosto 2001 y noviembre 2002, cuándo el Florence
el foro Social europeo tuvo lugar paz-fully, el gobierno italiano y medios de
comunicación comprensivos waged una campaña masiva que retrata el
movimiento como un unruly ramo, e invocando restricciones severas en derechos
de demostrar (Andretta et al. 2002; ve también capítulo 7 abajo). Cuando el
COLLECTIVE UnCTION Y yo DENTITY 107

Cuentas de protagonistas del correo-Genoa la fase sugiere (Agnoletto 2003:


ch. 3), un esfuerzo grande tuvo que ser puesto a counterframing actividad por
activistas de movimiento.
Al mismo tiempo, definiciones de identidad de movimiento por movement
los adversarios no son necesariamente del dismissive tipo. Por ejemplo, sobre
el últimos pocos representantes de años de empresariales repetidamente ha
intentado para retratar justicia global protestors como transportistas de fe buena
de dignos sentiments y orientaciones, quién despite su medio a menudo
inaceptable tendría que ser tomado seriamente (piensa p. ej. de George Soros
mención, informado en la historia de caso a principios de capítulo 3 encima).
Ha sido sugerido que el negocio grande activamente tendría que comprometer
con protestors eno der para encontrar tierras comunes y crear un espacio para
diálogo (Callinicos 2001: 391).
Los movimientos sociales que desafían formas de dominación profundamente
embedded en cul-tural prácticas, estilos de vida, hábitos mentales, e inbred los
estereotipos ofrecen un particu-larly cabiendo enfermosustration de esta dinámica.
Estigmatización del exterior a menudo acaba bloquear el desarrollo de una
identidad autónoma fuerte y limitando las posibilidades para acción colectiva. Esto
es muy claro, para caso, en el caso de gay y lesbiana movements (Armstrong 2002;
Bernstein 1997; Valocchi 1999) así como en menos movimientos polémicos como
aquellos actuando en behalf de derechos animales (p. ej., Einwhoner 2002). En
todos los casos, desafiando negativos stereotyping es un componente importante
de movimientos' producción cultural. Un la mayoría de ejemplo descarado es el
stereotyping de mujeres como uninterested en el públicos y políticos dimen-sions
de vida social, inclinado hacia la esfera privada, más particularmente vida familiar,
y cuando careciendo de las capacidades racionales qué es held para ser esencial
para acto en la esfera pública (Taylor 1996; Ferree y McClurg Mueller 2004: 596).
Al lado creando oportunidades prácticas para facilitar la participación de las
mujeres, el feminismo político mucho tiempo ha intentado a overturn tales
imágenes en places como diversos como el ricos postindustrial Oeste (p. ej., Taylor
y Whittier 1995; Taylor 1996; Ferree y Roth 1998) o América Del sur privada
(Auyero 2004; Bandy y Bickham-Mendez 2003) o India (Rayo 1999). “No acepté
siendo batido y quedándose quiet . . . Más. No le acepté [controlando] mi cuerpo.
. . . Si pinté mis uñas, diga, ‘ les voy a aplastar con un martillo,' y no acepté que
más” (citado en Thayer 2001: 250). Esta frase proviene un comunitario organizer
de uno de las periferias extremas del mundo, el brasileño sertão, pero pueda tener
provenir mujeres anywhere en el mundo.

4.4.2 Producción de identidad: símbolos,


prácticas, rituales
Entre movimientos contemporáneos, los movimientos nacionalistas son
probablemente aquellos más explícitamente arraigados en experiencia
histórica. Even alumnado de nacionalismo,
108 COLLECTIVE UnCTION Y yo DENTITY

Aun así, es escéptico de essentialist vistas de identidad. Las diferencias


corridas en el su-torical fundaciones de los símbolos y los mitos utilizaron a
fabricate identidades nacionales modernas. Algunos argumentan que sorteo de
identidades nacional moderno a acontecimientos, insti-tutions, mitos, y
narrations cuáles preceden por un periodo largo de cronometrar el exis-tence
de la nación-estatal (Herrero 1981, 1986). Otros objetan que partes grandes de
los mitos en qué estos están basados no tiene cualquier fundación histórica, y
que uno tiene que bastante charla de “invención de tradición” (Hobsbawm y
Ranger 1983; ve también Anderson 1983; Hobsbawm 1991).
Incluso dónde apelaciones de identidad a la historia del grupo y a sus raíces
territoriales y culturales, simbólicos re-elaboration es siempre presente.
Estudios de collec-tive la memoria ha mostrado que actores reappropriate
historia y experiencias sociales, manipulando tdobladillo y transformándoles
creativamente, forjando mitos nuevos e instituciones nuevas (Swidler y Arditi
1994: 308–10; Franzosi 2004). De hecho, no es necesario de atribuir
“fundaciones” objetivas a identidad para reconocer su continuidad con el
tiempo. Un national sentido de pertenecer, por ejemplo, no es repro-duced sólo
en tiempo de grande patriótico fervor. Al contrario, su revitalización con el
tiempo también depende – quizás muy en particular de todo – en preconscious
prac-tices y en la persistencia de mental formas y consolidó estilos de vida
(Billig 1995). Pero si esto es el caso , entonces deviene importante de mirar
en las formas a través de qué identidad está desarrollada y sostenidos, allende
intelectuales y doc-trinal producción.
Sea peligroso a hazard una clasificación completa, pero es neverthe-menos
posible de identificar algunos manifestaciones básicas.10 La identidad de un
movimiento es, primero, reforzado por referencia a modelos de comportamiento
qué definir en varias maneras la especificidad de sus activistas en relación a
“personas normales” o su adver-saries. En adoptar estilos seguros de
comportamiento o rituales seguros, movimiento mili-tants directamente expresar
su diferencia. Piensa por ejemplo del Bloque Negro y el Tute Bianche
(literalmente, “blanco overalls”) en el global movimiento de justicia (Andretta et
al. 2002, 2003). También refieren a una serie de objetos, asociados en varias
maneras con su experiencia. Entre estos es una serie de identificadores qué habilitar
seguidores de una causa particular para ser instantáneamente reconocible (como el
sol de sonreír de antinuclear manifestantes, o el palestinos keffiyeh, o los tatuajes y
shaven cabezas de movimientos de ala correcta [Blee 2002]); caracteres quiénes
han jugado una función importante en la acción de un movimiento o en el desarrollo
de su ideology (M. L. King y Malcom X en las 1960s movilizaciones negras en los
EE.UU. , Ronald Laing y Franco Basaglia de los movimientos de salud mentales
radicales en el 1970s y 1980s [Crossley 1998, 1999]); artefactos, incluyendo libros
o documentos visuales qué ayuda people para reconstruir la historia del
movimiento y sus orígenes en tiempo, o para identificar sus participaciones (la
primavera Silenciosa de Carson [1962], Klein es Ningún Logotipo [1999], o
incluso Lenin es Qué Es para Ser Hecho? [1961/1902]); y acontecimientos o sitios
de un particulares simbólicos significance (la Seattle anti-WTO demonstra-tions
en 1999 [Herrero 2001], el asesinato de Carlo Giuliani durante el anti-G8
COLLECTIVE UnCTION Y yo DENTITY 109

Manifestaciones en Genoa en 2001 [Andretta et al. 2002, 2003], el Tiananmen


masacre cuadrada de 1989 en Beijing [Calhoun 1994c]). Estos elementos están
fusionados a historias o narrativas (Somers 1994) cuáles circulan entre miembros
de un movimiento, reflejando su visión del mundial y reforzando solidaridad.
Combinando estos elementos a menudo produce identidades que es difícil a
asso-ciate fuertemente con cualquier concreto social trait o experiencia histórica.
Por ejemplo, ha sido observado que en las sociedades caracterizaron por culturas
múltiples y tra-ditions, cuando en los EE.UU., condiciones exist para el desarrollo
de formas de “sym-bolic etnicidad” (Gans 1979). Estas formas de identificación
tienen ninguna fundación en el patrimonio histórico y cultural de un grupo dado,
pero mezclar referencias y símbolos juntos que derivan de grupos sociales diversos
para formar una síntesis nueva. Por ejemplo, identidades colectivas como
Rastafarianism está fundado sólo en parte en modelos culturales concretos y
lealtades religiosas. Son también el producto de las elecciones hicieron por
individual quiénes provienen una gama de fondos pero derivar sentimientos de
pertenecer e incentivos para acción a través de referencia a una cultura particular.
Es por tanto posible de ser un “Rasta” sin habiendo raíces históricas en este grupo
(Kuumba y Ajanaku 1998).
Modelos de comportamiento, objetos, y las narrativas son a menudo fusionadas
en formas rituales concretas. El componente ritual cumple una función importante
en práctica de movimiento, y sobre todo en la producción de identidades. En
general, los rituales representan formas de expresión simbólica por qué
comunicaciones concerning relación social-los barcos están pasados encima, en
estilizados y dramatized maneras (Whutnow 1987; Kertzer 1988). Estos consisten,
en particular, de procedimientos qué es más o menos codified, a través de qué una
visión del mundo está comunicada, un básico histórico experi-ence está
reproducido, un código simbólico derrocado (Sassoon 1984un, 1984b).
Contribuyen al refuerzo de identidad y de sentimientos colectivos de pertenecer-
ing; y al mismo tiempo, habilitan actores de movimiento para dar rienda libre a
sus emociones (Goodwin et al. 2001).
Recurrences De particularmente acontecimientos significativos en la historia de
movimientos de oposición o su constituency es a menudo marcado por prácticas
rituales (Kertzer 1996). Por demostrar encima mayo 1.º o Marcha 8.º, trabajadores'
y mujeres' movimiento-hombrests los recordar y sociedad en grande de sus raíces,
así revitalizing su identidad. En una escala más modesta, movimientos de protesta
a través del mundo tienen promovió manifestaciones en los aniversarios de
acontecimientos cruciales en su devel-opment, del assassinations de dirigentes
americanos negros Martin Luther King y Malcolm X, al Chernobyl accidente
nuclear, al Milán bombings cuál, en 1969, marcado el principio de un periodo
particularmente dramático en la vida de Italia. Los rituales quedan importantes
incluso en aquellos cases donde movimientos haber suc-ceeded en obtener poder.
El gobierno revolucionario francés celebrado el advenimiento de “hombre nuevo”
en ceremonias en el Champs de Marte; el régimen Fascista italiano, para su parte,
acentuado su continuidad con el pasado magnífico de Italia by celebrat-ing el
aniversario de la fundación de Roma (Caza 1984; Berezin 2001).
110 COLLECTIVE UnCTION Y yo DENTITY

Religión, especialmente pero no sólo en regímenes autoritarios, ofrece muchos


con-textos para la producción de identidad (Smith 1996). Oposición al régimen
comunista en Polonia fuertemente confiada en prácticas y símbolos religiosos para
reforzar identidad y compromiso a la causa (Osa 2003un, 2003b). Las
celebraciones religiosas proporcionaron el contexto para la producción y extendido
de nationalist marcos interpretativos en el Baltic repúblicas en el tiempo de su
asociación aplicada con la Unión soviética. Las iglesias catalanas y vascas jugaron
una función similar durante la dictadura de Franco en España (Johnston 1991un,
1991b, 1994). El legitimizatel ión de rituales religiosos crea oportunidades para
reuniones colectivas, y por tanto para el fortalecimiento y la difusión de mensajes
alternativos, en repressive regímenes. El funeral del Abad de monasterio de
Montserrat, un catalán bien sabido nationalist y adversario del franquismo, en
1968, representó una oportunidad para sectores diferentes de oposición catalana
para conseguir junto y rienda-forzar su solidaridad colectiva (Johnston 1991b:
156–8). Así mismo, religioso func-tions en Reza Pahlevi Irán no sólo apoyado la
aparición de culturas de oposición en aquel país, pero también aseguró que estas
culturas desarrollaron un carácter teocrático marcado, adoquinando la manera para
el advenimiento de los ayatolás' régimen (Moaddel 1992).
Las prácticas rituales pueden no, aun así, ser reducidos sencillamente a
manifestaciones públicas de un celebratory naturaleza. Todos protestan los
acontecimientos promovieron por los movimientos tienen una dimensión ritual, el
cual a menudo supone una calidad poderosamente dramática y espectacular. Las
formas qué manifestaciones toman, el tipo de slogans gritó, las pancartas o placards
agitó, incluso la conducta de cuerpos de mariscal, es todos los elementos qué,
potencialmente, render la práctica de un movimiento distintivo. Adversarios de la
energía nuclear a menudo ha actuado fuera, en el curso de sus manifestaciones, el
cata-strophic consecuencias de una explosión atómica. De modo parecido, las
mujeres es, ethnonation-alist, y movimientos de juventud han incluido
rendimientos de tipo teatral en su repertorio de acción colectiva, junto a
manifestaciones políticas (ve también capítulo 7 abajo). A través de rituales, los
códigos simbólicos tradicionales son overturned y las reglas qué habitually
determina el comportamiento social apropiado está negado. Por ejemplo, por
recounting en público sus experiencias de abuso sexual, muchos Amer-ican las
mujeres han transformado episodes, el cual puede otherwise ha producido
sentimientos únicos de vergüenza y aislamiento personal, a una fuente de orgullo
(Taylor y Whittier 1995).
Las identidades son a menudo creadas y reproducidos en concretos sociales y/o
commu-nitarian encuadres. Encima hace 20 años, Melucci (1984un) habló de
“áreas de movimiento” para identificar los actores implicaron en varias formas de
política de identidad en Milán, y las relaciones qué enlazados les, no sólo a través
de participación en associa-tions pero también y muy en particular a través del
involvement en cultural activi-lazos, el patronaje de cafeterías concretas, librerías,
centros de meditación, etc. En hacer tan, refiera a una forma de organización social
que era lejos menos rígido y exclu-sive que sectas o comunidades alternativas que
rehusan mundiales, but todavía proporcionados el
COLLECTIVE UnCTION Y yo DENTITY 111

Contexto social a experimento con estilos de vida nuevos. Sobre las últimas
décadas, el con-cepts de la subcultura y la contracultura a menudo han solido
caracterizar sectores de la población que comparte orientaciones culturales
similares (ve también capítulo 3 encima), todavía con grados variables de
hostilidad y retos abiertos a poder cultural y estilos de vida dominantes (p. ej. el
gay y escena lesbiana: Duyvendak 1995; Rupp y Taylor 2003). Algunos have
hablados de “escenas de movimiento social” para acentuar la asociación de estos
sub- y contador-culturas a espacio físico concreto, ni-mally barrios de ciudad
(Haunss y Lixiviar 2004). Otros (Kaplan y Lööw 2002) ha utilizado el concepto de
“cultic milieu” a characterize la colección de ecologista y trabajo organizados
grupos, anarquistas y Chris progresivo-tians, gay y organizaciones lesbianas, y los
católicos implicaron en las campañas de justicia globales recientes y analogías de
tensión al subterráneo cultural del 1960s.
Rituales qué relacionar a la vida interna de un grupo y no es en público la vista
no tendría que ser olvidada. Señalización de procedimientos la admisión de
miembros nuevos a organizaciones de movimiento a menudo apechugan con la
forma de ritos “genuinos de paso” (furgoneta Gennep 1983; Sassoon 1984un,
1984b). El hecho que afiliación entails – a un grado, al menos – la muerte y rebirth
de uno es personalidad , es de pertinencia particular en el caso de neoreligious
movimientos (Berger y Suerte-mann 1966). Además, procedimientos cuáles
señalan alguna forma de transforma-tion de la posición de militantes, en tiempo
cuándo su implicación parece para tener aumentado, está encontrado en
virtualmente cada tipo de organización. En radical extra-grupos parlamentarios,
deviniendo un miembro de cuerpos de mariscal era normalmente pre-ceded por
otras formas de militancy cuál era menos exigente y menos arriesgado, como
distribuir folíolos. Estos deberes también cumplieron la tarea de determinar el
trustworthiness y firmeza de la pasión política del militante nuevo (della Porta
1990). En muchos grupos feministas, los rituales conductistas apoyan la acción de
que levanta consciencia y transformación personal (Taylor y Whittier 1995); igual
puede ser encontrado en blanco supremacist organizaciones (Blee 2002).

4.4.3 Identidad y el proceso político

Para movimientos políticos, la construcción de identidad es a menudo


condicionado por vari-ables de una naturaleza estrictamente política. Los criterios
por qué grupos sociales identifican ellos y está identificado externally
características de eco del political sistema y de la cultura política de un país dado.
Parece que el devel-opment de la identidad colectiva puede ser explicada por
referencia a un reformulated versión del argumento bien sabido que formas de
policymaking determinar formas de political acción, y no viceversa (Lowi 1971).
Actores sociales, de hecho, tiende para estructurar su acción y establecer alianzas
en las maneras diferentes encima difieren-ent asuntos de política, con el interés
grande agrupa dominar distributive políticas y más pluralistic reds caracterizando
políticas reguladoras.
112 COLLECTIVE UnCTION Y yo DENTITY

Otras peculiaridades de áreas de política también han sido singled fuera para su
impacto en la estructura de política contenciosa en aquellas áreas (Bartholomew y
Mayer 1992; Jenson 1995). Por ejemplo, la aparición en los EE.UU. de una
identidad concreta que enlaza asiático-americanos, y el desarrollo de “cacerola-
acción colectiva étnica” (Okamoto 2003) en aquel nivel, ha sido puesto abajo al
hecho que, en áreas cruciales como aquellos de política de inmigración y los
derechos de grupos de minoría, las agencias públicas tendieron para tratar grupos
étnicos como homogeneous. Esto a pesar de su viendo cada otro tan profundamente
diferente, como el vietnamita o los coreanos. En este caso, la adopción de un
criterio/administrativo político seguro ha pro-duced intereses e identidades qué
habilitar grupos diferentes para actuar en conjunto en un número de asuntos (Omi
y Winant 1994).
En otro nivel, actores' las identidades están definidas también en el contexto de
domi-nant political divisiones/cleavages en una sociedad dada. Los movimientos
desarrollan en polit-ical sistemas qué ya tener una estructura: intentan modificarlo
y para activar procesos de políticos realignment (Tilly 1978; Dalton et al. 1984;
Bartolini y Mair 1990). Cuándo las identidades políticas establecidas son salientes,
i.e. todavía capaces de shaping solidaridades y comportamiento políticos (Kriesi et
al. 1995: ch. 1), emergiendo los movimientos sociales tienen que identidades de
producto qué es suficientemente concreto de proporcionar las fundaciones para la
diversidad del movimiento en relación a su adver-saries; pero al mismo tiempo,
suficientemente cerrar a identidades colectivas tradicionales para hacerlo posible
para actores de movimiento para comunicar con quienes se continúan reconocer en
consolidó identidades. Bajo aquellas condiciones, oportunidades para
sinceramente “movimientos” nuevos, i.e. los movimientos que atajan establecidos
cleavages, será relativamente limitado (Diani 2000un).
Interacciones con las autoridades a menudo representan fuentes importanteso f
identidad. Mucho tiempo ha sido notado cómo “encuentros con unjust autoridad”
(Gamson, Bombero, y Rytina 1982) puede facilitar la consolidación de ambas
motivaciones para actuar y hostilidad hacia powerholders y sus representantes (ve
también capítulo 8 below). Por ejemplo, cuentas de terroristas italianos del 1970s
a menudo mencionado mistreatment por policía o por el judiciary cuando uno de
las fuerzas de conducción detrás de su radicalization (della Porta 1990; Catanzaro
y Manconi 1995). En mucho más ancho – y más suave – plazos, podemos ver
interacciones con agentes estatales que no behave según expectativas o
representantes políticos quiénes fallan para reconocer las necesidades genuinas de
las personas como facilitators del desarrollo de politi-cal identidad. Por ejemplo,
Drury et al. (2003) analizado cómo las identidades de residentes locales,
participando en un antiroad protesta en Inglaterra en 1993–4, evolucionado durante
el conflicto. Encontraron que la función de la policía en de apoyo los alguaciles
en el desahucio de protestors del área contributed para ampliar partic-ipants'
sentimientos de identificación de las fronteras de las comunidades locales hacia un
movimiento social global. Investigando la relación entre protesta y vida diarias en
1990s Argentina, Auyero (2004) mostró que el transforma-tion de unos parados,
mujer divorciada sin tradición de interés político
COLLECTIVE UnCTION Y yo DENTITY 113

Cualquier cosa a un organizador comunitario prominente dependido en


ninguna medida pequeña en el sentido de indignar que experimente en sus
interacciones con dos tipos de “unjust autoridades”: “autoridad política,” en la
forma del gobernador local, quién retrató famélico protestors como mob; y
“autoridad social,” en la forma de un macho amigo protestor quién reprodujo
gender estereotipos por dis-desaparecidos la función de mujeres en la lucha.

4.5 Resumen

Construcción de identidad es una componente esencial de acción colectiva. Habilita


los actores comprometieron en chocar para los ver como las personas enlazaron por
intereses, valores, comunes histories – o más tan divididos por estos factores mismos.
A pesar de que sentimientos de identidad son frecuentemente elaborados en referencia
a concreto social traits como clase, género, territorio, o etnicidad, el proceso de
identidad colectiva no neces-sarily implica homogeneity de los actores que comparten
que identidad, o su identifica-tion con un grupo social distinto. Ni es sentimientos de
pertenecer siempre mutuamente exclusivo. Al contrario, los actores frecuentemente
identifican con heterogéneos collec-tives quiénes no son siempre compatible entre ellos
en cuestiones de fondo. Para reconstruir las tensiones a través de las versiones diferentes
de identidad de un movimiento-ment, y cómo estas versiones están negociadas,
representa, según algunos becarios, un problema central para el análisis de collective
acción.
La identidad juega una función importante en la explicación de acción colectiva
incluso para quienes ven en acción colectiva una forma extraña de comportamiento
racional. Quienes perciben en identidad colectiva criterios seguros para evaluar, en
el medium y plazos largos, los costes y beneficios de acción, es numeroso. Aun así,
quienes aguantan que este uso del concepto de la identidad no puede ser propuesta
es igualmente numeroso. Debido a su fuertemente emotive y componentes
afectivos, así como su controversial y naturaleza construida, es difícil de asociar
identidad con comportamiento de un tipo estratégico. La identidad desarrolla y está
renegociado vía varios procesos. Estos incluyen conflictos entre coche- y hetero-
definiciones de realidad; varias formas de symbolic producción, prácticas
colectivas, y rituales. Es importante, además, para aguantar en importar las
características del proceso político, los cuales pueden influir definiciones de
identidad.
5
INDIVIDUAL, REDES, Y
PARTICIPACIÓN

Viale Sarca Es un largo, carretera bastante anónima en el Milanese periferia,


tachado con tenements que mayoritariamente utilizado a trabajadores
anfitriones del Pirelli la fábrica cercana. En el tardío 1990s, la renovación
urbana trajo nueva intelectual glamour al área, siguiendo la ubicación, en el
anterior Pirelli propiedad, del campus de la segunda universidad estatal de
Milán. Los desarrolladores eran en ninguna parte para ser vistos, aun así, en
1985, cuándo Mario Diani viajó allí para conocer Antonio, un activista
medioambiental y político local. Mario era búsqueda -ing el Milanese el
nombre de Antonio y movimiento medioambientales había sido pasado a él
cuando la persona de contacto para un grassroots grupo de ecología política
que opera en el área. La descendencia de labradoras italianas del sur giró
trabajadores industriales quién emigró a Milán en el 1950s, Antonio hubo
fol-lowed un camino bastante común de socialización política: expuesto de
comerciar sindicalismo y política de partido comunista en sus adolescentes,
haya devenido implicado con grupo izquierdo radical Lotta Continua
(Continuo Struggle) en el 1970s y hubo más tarde desarrolló un interés en el
enlace entre privación social y degradación medioambiental. Sea también un
miembro activo de una Lista Verde local que formaba en el tiempo. Para
promover haciendo campaña en medioambiental esdemanda en el altamente
contaminado del norte Milanese periferia, haya dibujado a los contactos
desarrollaron durante su anteriores militancy. Los activistas de núcleo en su
grupo medioambiental nuevo todo compartió un pasado de activismo en la
misma rama local de Lotta Continua. Acquaintances Y los contactos
desarrollaron sobre los años también habían probado útiles con la promoción
de acciones concretas: Antonio había colaborado con una gama de
organizaciones locales a través del espectro ancho del Nuevo y la Izquierda
Vieja, incluyendo ramas locales de partidos y uniones, asociaciones
culturales y cooperativas.
YoNDIVIDUALS, NETWORKS, Y P ARTICIPATION 115

La historia de Antonio está interesando para varias razones. Ante todo, a pesar de
que está puesto en el 1980s, bien antes de antiglobalization los movimientos
desarrollaron, hay más de pasar las analogías a qué ha sido yendo en desde el
tardíos 1990s. Antonio era de hecho un ejemplo temprano de qué ahora
llamaríamos un “environ-activista de justicia mental” (Çapek 2003), exitosamente
integrando preocupación fo desigualdad social con interés en condiciones
medioambientales en cascos urbanos. Su historia también es una ilustración buena
de los temas principales de este capítulo, concretamente la naturaleza dinámica de
la relación entre redes y participación, y la dualidad de the enlace entre individual
y actividades organizativas. Ante todo, las redes sociales afectan participación en
acción colectiva, mientras en redes de formas de participación de vuelta,
reforzando preexisting unos o creando nuevos unos. Social neto-los trabajos
pueden aumentar posibilidades individuales para devenir implicado, y fortalecer
activistas' intentos a más allá la apelación de sus causas: cuándo Antonio decidió
empezar un grupo de acción medioambiental local, él exitosamente probado y
convenció sus camaradas anteriores en Lotta Continua para unirle en la empresa
nueva. Aquello ellos no sólo deprisa consiguió implicado con los asuntos
medioambientales, pero soporte apalabrado el orden del día particular Antonio
proponía, dependido en ninguna medida pequeña en la confianza mutua, sentido
de companionship, solidaridad, y el compartió comprensiones y worldviews que
había sido forjado y desarrollado a través de su largo-plazo acquaintance en Lotta
Continua. De esta perspectiva, por tanto, las redes sociales anteriores facilitaron el
desarrollo de formas nuevas de colectivos action en etapas más tardías.
Al mismo tiempo, las redes sociales no son sólo un facilitator pero también un
producto de acción colectiva: mientras las personas a menudo devienen implicadas
en un movimiento concreto o campaña a través de sus enlaces anteriores, su muy
participación también forges enlaces nuevos, los cuales en vuelta afectan
desarrollos subsiguientes en sus carreras de activista (y de hecho en sus vidas en
grandes). Dejado nos mirada en la implicación de Antonio con Lotta Continua de
este ángulo: los miembros de su rama local habían sido recruited a Nuevos Left
radicalismo vía una gama de lazos, desarrollados en escolares y peer grupos, en
organizaciones políticas (p. ej., ramas de juventud de partidos izquierdos
tradicionales) así como en otras asociaciones (p. ej., iglesia-relacionó unos).
Participación en Lotta Con-tinua era therefmena tanto el producto de redes
anteriores (incluyendo previ-ous formas de participación) cuando sea la fuente de
redes a qué personas les gusta Antonio podría dibujar a en etapas más tardías.
Aun así, hay otro importante dinámico los sorteos de historia de qué Antonio
our atención a, concretamente la dualidad de individual y organizaciones: nuestro
único-ness como el individual está determinar por la combinación particular de
nuestras afiliaciones de grupo; al mismo tiempo, por ser miembros de grupos
diferentes, creamos conexiones entre them (Simmel 1955; Breiger 1974). Mirando
en personas mem-bership en asociaciones y organizaciones, y en su participación
en actividades sociales y culturales cierra a movimiento social milieus, podemos
derivar información importante sobre su implicación en acción colectiva. Antonio
es un caso en
116 YoNDIVIDUALS, NETWORKS, Y P ARTICIPATION

Punto. Su identidad como “hombre político” estuvo determinada por la


intersección de mil-itancy en un grassroots grupo de ecología y en un izquierda
Lista Verde local; en esta tierra, difiera markedly de otros activistas
medioambientales, quién combinó ecologismo con afiliación en mainstream,
moderado recreativo, o asociaciones culturales. Al mismo tiempo, aun así, por
ser activo en un local polit-ical ecology grupo y en un partido Izquierdo Nuevo,
y por participar ocasionalmente en otros grupos locales, Antonio de alguna
manera les enlazó todo; proporcione un canal de comunicación qué probado
útil para promover iniciativas de junta, y también facilitó el crecimiento de
mutual confianza y solidaridad entre los grupos diferentes. Uno no podría ir
según lo que hablando sobre “identidad colectiva” en este caso, aún así un
vínculo social era sin duda allí: las personas no normalmente unen
organizaciones qué percibir cada cual otro tan radicalmente incompatible y
hostil. Es también valor-mientras notando que el individual también conectan
organizaciones a través de tiempo: por ejemplo, Antonio es y sus amigos'
implicación anterior con Lotta Continua también enlazado – vía sus biografías
individuales – grassroots politics del 1970s y el 1980s.
A suma arriba, la relación entre individual y las redes en qué son embedded es
crucial no sólo para la implicación de personas en collec-tive acción, pero también
para el sustenance de acción con el tiempo, y parath e particu-lar forma que la
coordinación de acción entre una multiplicidad de grupos y organizaciones puede
tomar. En la sección próxima, preguntamos si siendo enlazados a personas quiénes
ya participan puede facilitar individual' decisiones para dedicar tiempo y energía a
acción colectiva. Nosotros mapa los orígenes de esta cuestión, así como las críticas
que una respuesta basada en la función de redes ha atraído. Detrás de estas
cuestiones lurks un mucho debate más ancho en la relación entre struc-ture y
acción. Sobreth e década pasada esta discusión ha atraído muchos contri-butions
de becarios con un interés concreto en acción colectiva (Sewell 1992; Emirbayer y
Goodwin 1994; Emirbayer 1997; Emirbayer y Mische 1998; Livesay 2002). A
pesar de que no podemos dirigir aquel debate aquí, no obstante tenemos que ser
conscientes del contexto teórico más ancho en qué nuestra búsqueda concreta los
intereses están localizados.
Más tarde en el capítulo, movemos al otro lado de la relación de redes individuales,
aquello es, la contribución que el individual dan al haciendo de movimientos sociales
fuera de la multiplicidad de grupos, asociaciones, y preocupados indi-viduals
implicados en acción colectiva en asuntos anchos seguros. A pesar de que algunas
organizaciones requieren compromisos exclusivos, la mayoría no. Exploramos estos
procesos de que construyen red y comprensión mutua, hecho posible por indi-viduals'
afiliaciones múltiples en varios tipos de grupos informales y asociaciones más formales.
En hacer tan conectamos nuestra discusión – una vez más mayoritariamente implicitly
– al debate más ancho en la función de redes sociales como fuente de individual así
como oportunidades colectivas (Coleman 1990; Putnam 1993; Putnam 2000; Edwards,
Foley, y Diani 2001; Prakash y Selle 2004). De aquel
YoNDIVIDUALS, NETWORKS, Y P ARTICIPATION 117

Ángulo particular, las redes que facilitan la implicación en actividades de


movimiento social puede ser considerada cuando uno versión particular de “capital
social” (Diani 1997).
Aun así, el individual no crean conexiones sólo through afiliaciones
organizativas, pero también a través de su participación en varios tipos de
actividades sociales y culturales (festivales de música, comunidades de gusto,
leyendo grupos, alterar-cafeterías nativas, cines, teatros, etc.). Por hacer tan
reproducen specific subcul-tural o countercultural milieus que oferta tanto
oportunidades para actividades de protesta y para el mantenimiento y
transformación de orientaciones críticas incluso cuándo la protesta no es vibrante
(Melucci 1996). La parte final del capítulo trata this asunto; él también direcciones
en aquel contexto la cuestión de si la difusión de ordenador-la comunicación
mediada puede alterar las condiciones bajo qué alterar-las comunidades críticas
nativas y los encuadres culturales están reproducidos. La literatura en la función de
networks y comunidades virtuales y reales en la “sociedad de red” (Castells 1996;
Calhoun 1998; Wellman y Haythornwhyte 2002; Rhein-oro 2002; furgoneta de
Donk, Loader, Nixon, y Rucht 2004) proporciona el contexto más ancho para esta
discusión.

5.1 Por qué Hacer las personas Consiguen


Implicadas en Acción Colectiva? La Función de
Redes

Qué frecuente es reclutamiento a través de redes sociales vis-à-vis otro mobiliza-


tion canales, como exposición a mensajes de medios de comunicación, o
espontáneos, unsolicited decisiones para participar? En uno de los primeros
estudios para documentar la importancia de redes personales para procesos de
reclutamiento, Nieve, Zurcher, y Ekland-Olson (1980) mostró redes sociales a
cuenta para la adhesión de una participación grande (60 a 90 por ciento) de
miembros de varias organizaciones religiosas y políticas, con la Liebre de ser de
excepción única Krishna. Sugirieron que sectas únicas, overtly hostiles a su
entorno social, atrajo una participación significativa de personas con dificultades
personales y careciendo de recursos relacionales extendidos (ve también Duro y
Bainbridge 1980). Mirando en nonreligious organizaciones, Diani y Lodi (1988)
encontró un de modo parecido fuerte role para redes, mostrando que 78 por ciento
de envi-ronmental activistas en Milán en el 1980s había sido recruited a través de
los contactos personales desarrollaron cualquiera en encuadres privados (familia,
círculos de amistad personal, colegas) o en el contexto de otro associational
actividades.
Mientras uniendo sectas religiosas que es profundamente hostil al mundo
secular no puede requerir redes fuertes, el opuestos parece para aguantar para
adhesión a organizaciones políticas radicales. La evidencia disponible sugiere que
el más costoso y dan-gerous la acción colectiva, el más fuerte y más numeroso los
lazos requirieron para individual para participar. Estudiando reclutamiento a la
Libertad de proyecto de derechos civil Verano, apuntado en negros crecientes'
participación en políticas en el del sur estataless de los EE.UU. en el 1960s,
McAdam (1986) sugirió que uniendo
118 YoNDIVIDUALS, NETWORKS, Y P ARTICIPATION

No fue correlativo con actitudes individuales sino con tres factores: el número
de individual de organizaciones era miembros de, especialmente el político
unos; la cantidad de experiencias anteriores de acción colectiva; los enlaces a
otras personas quién era también implicado con la campaña. En su estudio de
un de modo parecido arriesgado, aun así muy diferente, tipo de activismo, della
Porta (1988) found que implicación en grupos de izquierda terrorista en Italia
estuvo facilitado por fuertes inter-conexiones personales, muchos para cerrar
amigos o kin. Un estudio reciente de la función jugada por miembros solos en
el desarrollo del partido Nazi en 1920s Alemania (i.e., mrescoldos quién no
fue asociado con cualquier capítulo local: Anheier 2003) añade una dimensión
más lejana a este argumento. En uno nivela, Nazi político entrepreneurs distó
mucho de aislado. Al contrario, eran fuertemente embedded en las redes más
anchas connecting correctos-ala, nationalistic, y paramilitary organi-zations en
los años turbulentos que había seguido derrota en la Primera Guerra mundial.
Al mismo tiempo, aquellos eran fuertemente “concéntricos” (Simmel 1955)
redes: i.e., redes que era denso internamente, pero secluded de otros tipos de
organizaciones sociales o políticas.
Embeddedness En redes sociales no asuntos únicos para reclutamiento; él
también trabajos como un antídoto a dejar, y como apoyar a participación
continuada. Por ejemplo, miembros de voluntarios associations en América de
quién lazos sociales son mayoritariamente a otros miembros de organización son
más probablemente para quedar cometido a aquellas organizaciones que es quienes
en cambio tienen una participación más grande de connec-tions a nonmembers
(McPherson, Popielarz, y Drobnic 1992). En su estudio de dropouts de sueco
temperance organizaciones, Sandell (1999) también descubiertos sustanciales
positivos y negativos bandwagon efectos, cuando las personas tendieron ambos
para unir y dejar en grupos, y para ser afectados más fuertemente por sus enlaces
más cercanos (ve también Sandell y Popa 1998; Tindall 2004).
La pertinencia de estos hallazgos no es restringidos a reclutamiento a
movimientos sociales u organizaciones religiosas. Los mecanismos similares
parecen para existir en organizaciones, como caridades y grupos de voluntario,
with no objetivos políticos explícitos, y/o cuáles son reticentes de incluir protesta
y acción directa entre sus opciones tácticas (Wilson 2000); el mismo parece para
aplicar a grupos de representación de interés establecidos como uniones (Dixon y
Roscigno 2003). Accordingly, es aconsejable de acercarse el asunto por considerar
mecanismos de red en referir-ence ambos a radical, grassroots organizaciones y
otros tipos de asociación (Knoke 1990c; Knoke y Sabiamente 1990; Kitts 2000;
Oliver y Marwell 2001; Passy 2001, 2003; Diani 2004b).
Qué hacer las redes sociales afectan decisiones para participar en acción
colectiva? A través de qué mecanismos operan? Florence Passy (2003) ha
dibujado una distinción entre la socialización, conexión estructural, y decisión-
shaping functions de redes en el proceso de movilización. En el primer caso, las
redes operan para crear predisposiciones a acción. Siendo enlazado a personas
quiénes son ya cometidos a una causa segura habilita individual para sentir parte
de un “col-
YoNDIVIDUALS, NETWORKS, Y P ARTICIPATION 119

lective Nosotros,” para elaborar sistemas de significar que render acción colectiva
tanto un significativo y una garantía factible, para percibir asuntos seguros tan
socialmente rel-evant y dignos de esfuerzos colectivos. Al mismo tiempo, las redes
sociales a menudo crean oportunidades para transformar predisposiciones a acción
(qué Passy llama la función de conexión estructural). Las personas con
predisposiciones seguras serán más probablemente para contactar organizations y
encontrar oportunidades para par-ticipation si están conectados a las personas ya
implicaron. Finalmente, aguantando vistas seguras y teniendo oportunidades al
acto no garantiza que mobiliza-tion ocurrirá. Decisiones al acto también será
afectado por uno es lazos de red . Indi-viduals No hace decisiones en aislamiento
pero en el contexto de qué otras personas , por ello la importancia de conexiones
de red (Passy 2003: 23–7). Passy También mostrado cómo estas funciones toman
las formas diferentes que dependen de el traits de la organización que prueba a
recluta, y su visibilidad en el espacio público. Por ejemplo, la función de conexión
social es más importante para adhesión a organizaciones que no es muy visible en
el espacio público, como la Tercera solidaridad Mundial grupo Bern Declaration
estudió por Passy, que para organizaciones con una presencia pública fuerte, como
la rama suiza de WWF.1
Reconociendo la función de redes en facilitar reclutamiento y sosteniendo la
participación en acción colectiva ha sido crucial para el desarrollo de sounder
interpretaciones de comportamiento de protesta, porque tiene habilitó becarios
para desafiar vistas de protesta y countercultural comportamiento como unruly y
deviant. Todavía en el temprano 1970s, la cordura académica establecida consideró
implicación individual en movimientos sociales como el resultado de una “mezcla
de patología personal y social dis-organización” (McAdam 2003: 281). En el micro
nivel, la acción colectiva estuvo explicada por la ubicación insignificante de las
individual implicó en actividad de protesta, y la carencia de integración en su social
milieu; en el macro nivel, por el dis-ruption de arreglos sociales rutinarios, trajo
aproximadamente por procesos radicales de cambio y modernización. Ambas
explicaciones postularon una oposición fundamental entre protesta politics y
política democrática (Kornhauser 1959; Lipset 1960; Buechler 2004).
La separación de protesta y routinized la política estuvo desafiada por becarios quién
reclamó que grassroots, la acción colectiva contenciosa era finalmente “poli-tics por
otro medio.” From Esta perspectiva, los movimientos sociales eran meramente uno de
las opciones que challengers podría dibujar a para perseguir sus resultados de política
y su búsqueda para afiliación en el polity (Tilly 1978). En contraste a cuentas de
participación en movimientos sociales uns dysfunctional comportamiento, activistas de
movimiento social y sympathizers estuvo retratado como rico en ambos recursos
cognitivos y entrepreneurial y habilidades políticas (Oberschall 1973; McCarthy y Zald
1977). La mayoría de importante a nosotros, eran también encontrados para ser rich en
recursos relacionales, i.e., bien integrados en sus comunidades, y fuertemente
implicados en una gama ancha de organizaciones, de políticos unos a asociaciones
voluntarias y grupos comunitarios (et al de Nieve. 1980; McAdam 1986; Diani y Lodi
1988). El development
120 YoNDIVIDUALS, NETWORKS, Y P ARTICIPATION

De cruz-las encuestas nacionales que analizan la participación individual ha en


gran parte respaldó este argumento con referencia a ambas política
institucional y política de protesta, cuando la participación en la dos es
fuertemente correlativo (Barnes, Kaase, et al. 1978; Jennings et al. 1990;
Norris 2002).
Teóricos de sociedad de la masa postularon que las asociaciones
desalentarían radicales col-lective acción debido a su capacidad de integrar
élites y ciudadano normals, socialize sus miembros a las reglas del juego,
darles un sentido de eficacia política, y proporcionarles con anexos primarios
y una vida más satisfactoria. Ahora sabemos que la participación organizativa
puede trabajar en el opuesto direc-tion también: para caso, la afiliación en
asociaciones puede también socialize personas a las orientaciones críticas del
estado quo más que supportive de él; pueda poner personas quién sympathize
con una causa segura en tacto con ciudadanos amigos con el necesarios
políticos skills para movilización; pueda causar individual a experi-ence
sentimientos de presión moral si no participan cuándo su cercanos
acquaintances es activo en una causa dada (Pinard 1968: 683; Kitts 2000; Passy
2003).
Movilización en movimientos sociales frequently ocurre a través de
mecanismos de “reclutamiento de bloque” (Oberschall, 1973): células, ramas,
o sencillamente grupos significativos de miembros de existir las
organizaciones son recruited globalmente a un movimiento nuevo, o contribuir
al inicio de campañas nuevas (cuando enUn ntonio caso, donde la rama local
de Lotta Continua era instrumental a la fundación de una Lista Verde en el
área). Lejos de necesariamente impidiendo conflicto social, inter-mediar las
estructuras también tienen mobilizing efectos, y puede motivar y legitimar
ambas participación individual y colectiva. Otro argumento enérgicamente
puesto adelante por teoría de sociedad de la masa, concretamente que las
organizaciones formales están atadas para devenir la referencia más importante
grupo para sus miembros en sociedad contemporánea, también ha sido probado
mal; a los grupos contrarios, primarios y redes sociales dentro de las
comunidades pequeñas a menudo juegan aquella función para individual
(Pinard 1968: 684; ve también Bolton, 1972; Pickvance, 1975; Fantasia 1988;
Lichterman 1995un).
Reconociendo el impacto de redes sociales en ambas participación individual y
niveles globales de acción colectiva entre una población dada también proporciona
las fundaciones para una crítica de teorías estructuralistas de acción colectiva
(incluyendo versiones deterministas de marxismo). Ellos explained acción como el
resultado del compartió atributos de una población dada (si una clase, una nación,
o un otro-grupo definido sensato). Por este token, la capacidad de movilización
global de un grupo social dado tendría que ser relacionada a sus dimensiones, y tan
should sus cambios con el tiempo; por ejemplo, el disminuyó niveles de
movilización por la clase laborable en democracias Occidentales está imputada a
su contracción y su en general reducido cen-trality en el proceso económico.2 En
contraste, mucho alumnado de social movements hoy en día asociar acción
colectiva con catnets, i.e., con el co-presencia en una población dada de
gato(egorical traits) y red(trabajos). Compartiendo clase segura loca-
YoNDIVIDUALS, NETWORKS, Y P ARTICIPATION 121

tions, género, nationality, o las creencias religiosas ciertamente proporciona


los elementos en la base del cual reconocimiento e identidad-construyendo
puede tener lugar. Pero es a través de los canales de comunicación e
intercambio, constituidos por sociales netos-trabajos, que la movilización de
recursos y la aparición de actores colectivos deviene posible (Tilly 1978).

5.2 Redes Siempre Asunto?

La función de las redes en procesos de reclutamiento ha sido cuestionadas de


diferir-ent ángulos. En tierras lógicas, la tesis de red sería inconsistent con el hecho
que aquellos más inclinados a la acción es personas jóvenes , biographically avail-
capaz porque sus lazos familiares originales ya no les atan tan utilizaron a, y la
familia nueva y los lazos profesionales son todavía en desarrollo (Piven y Cloward
1992: 308–9). Más fundamentalmente, la tesis de red también sería en gran parte
tautologi-cal, dado el spread de lazos a través de grupos e individual: “integración
lateral, aun así frágil, es ubiquitous, por ello haciendo oportunidades para protesta
ubiquitous” (Piven y Cloward 1992: 311). Más que destacar exclusivamente
aquellos casos en qué lazos están encontrados para ser predictors de implicación,
los analistas tienen que también mirada en aquellos casos cuándo las redes son
presentes aún así la participación no resulta.
También ha sido sugerido que centrando en las redes desvía atención fuera
del proceso realmente crucial para movilización, concretamente la transmisión
de cog-nitive mensajes culturales (Jaspe y Poulsen 1995). A pesar de que esto
puede pasar a través de redes, también pueda tener lugar a través de otros
canales como los medios de comunicación. Los defensores pueden tener que
recurrir a “shocks morales” con impacto emocional fuerte para desconocidos
de recluta que no pueden acceder vía personales netos-trabajos. Esto puede ser
particularmente el caso para movimientos quiénes intentan traer new asuntos
al orden del día político, y/o cuyos dirigentes no tienen un fondo político
significativo:

El uso de condensar los símbolos sin redes sociales pueden significar que un
movimiento-ment es más probablemente para emplear extremo moralistic apela que
demonize su oppo-nents. Pueda ser más probablemente para confiar en profesional o
altamente motivó bandas para hacer mucho de su trabajo, cuando con activistas de
derechos animales quiénes rompen a laboratorios. En con-trast . . . Organizadores de
movimiento [quién] puede tocar a una subcultura activa de politi-cally implicó
ciudadanos . . . Puede confiar en más temprano enmarcando actividad . . . Han
correspondingly menos necesidad de shocks morales administró al público.
(Jaspe y Poulsen 1993: 508)

Implicación sostenida en la acción colectiva también puede ser facilitada por el


par-ticipation, no necesariamente planeado o anticipado, en acontecimientos que
resulta para tener un impacto emocional potente – a veces en colectividades
enteras, otro tiempo,
122 YoNDIVIDUALS, NETWORKS, Y P ARTICIPATION

on Individual concretos (Turner y Killian 1987; Goodwin et al. 2001). Ya


hemos encontrado Javier Auyero análisis de los mecanismos a través de qué
una mujer sin interés en políticas ni los lazos a activistas políticos convirtieron
en un dirigente comunitario en una ciudad argentina pequeña en menos de una
semana, siguiendo su implicación ocasional en un bloqueo, promovido por
residentes locales para renegar sobre joblessness y trance en la región. Dado
su fondo, una explicación de red para tales desarrollos vems implausible.
Aquello esto pasó era previsto en mucha medida más grande a la interacción
de varias expresiones de ultraje: en un judiciary sistema que fallaba su en su
lucha para asegurar ayuda para sus niños' crianza de su estranged marido; en
local politicians intentando para manipular las protestas para perseguir de las
personas locales sus fines políticos propios; en el gobernador provincial está
enmarcando de la acción colectiva de las personas famélicas como
comportamiento criminal; no para mencionar dismissive actitudes por socio
macho protestors (Auyero 2004).
Empíricamente, podemos identificar varios casos de movilización tanto
ocurriendo en gran parte fuera de redes sociales, o no ocurriendo a pesar de la
presencia de redes sociales. Por ejemplo, sólo un-quinto de participantes en anti-
aborto mobiliza-tions en California había sido recruited a través de redes (Luker
1984); y ya hemos visto que los miembros de sectas religiosas les pueden haber
unido en gran parte independientemente de sus conexiones anteriores (et al de
Nieve., 1980). En cambio, Mullins (1987) mostró that la riqueza de contactos
interpersonales en un Brisbane la comunidad local no resultó en movilizaciones
contra planes para una cruz de autopista-ing el barrio. Incluso cuándo efectos de
red están descubiertos, los hallazgos son a veces ambiguos. Por ejemplo, Oliver
(1984) encontró las personas familiarizaron con sus vecinos para ser más
probablemente para devenir implicado en barrio associa-tions, pero efectos de red,
en general, estuvo mezclado en su análisis. Más recientemente, Nepstad y Herrero
(1999) duplicó McAdam estudio de Libertad Summer por mirar en participantes y
dropouts en la Brigada de Intercambio de la Nicaragua en el 1980s. En aquel caso,
lazos a las personas directamente implicaron era el más potente pre-dictor de
participación, pero el número de participantes probables' lazos a otro organizations
no importó. Aun así, la relación estuvo invertida para personas quién unió después
del tercer año de la organización en existencia, con el número de los enlaces
organizativos que son importantes y lazos a participantes reales ya no ayudando.
Esta críticas tiene incitó analistas de redes sociales a sustancialmente cualificar
sus puntos. Es ahora ampliamente reconoció que, cuándo mirando en el rela-
tionship entre redes y participación, es importante de especificar sus plazos.
Cuestiones como “Qué reds de hecho explicar qué?” Y “Bajo qué con-ditions las
redes concretas devienen pertinentes?” Es crucial a este particular. En el momento,
aun así, tenemos no respuestas concluyentes a tales cuestiones. En tiempo, es la
posición uno ocupa dentro de una red which asuntos, más que el hecho mero de
ser implicado en alguna clase de red. En uno de sus exploraciones
YoNDIVIDUALS, NETWORKS, Y P ARTICIPATION 123

De participación en Verano de Libertad, Fernandez y McAdam (1989) miraba en


individual centrality en la red, el cual constó de todos los activistas quién había
aplicado para participar en la campaña en Madison, Wisconsin. Afiliaciones de
junta en las organizaciones sociales de todas las clases representaron los enlaces
entre individual. Quienes eran más centrales en aquella red (i.e., quién era tampoco
enlazado a un número más alto de participantes probables, y/o estuvo conectado a
personas quién era también central en aquella red) era más probablemente para
pasar por el proceso de formación undeterred, y finalmente para unir la campaña.
En aquel caso, implicación en las redes no contaron tanto como uno es ubicación
dentro les.
El contexto en qué intentos de movilización tiene lugar es también muy
importante, condiciones tan locales afectan redes qué sociales operan. Kriesi
(1988b) estudió reclutamiento a las 1985 Personas Petition campaña, el cual
recogió firmas contra el despliegue de SS20 misiles de crucero en el Netherlands.
En áreas donde countercultural milieus era débil, las personas ya tuvieron que ser
miembros de locales political organizaciones para mobilize en la campaña; dónde
contador-cultural milieus era fuerte, y las actitudes globales hacia acción colectiva
eran en general más favorables, había menos necesidad para enlaces a miembros
de spe-cific órgano políticoizations para animar adhesión: más las personas eran
recruited a través de redes de amistad personal o incluso en otras formas no basadas
en enlaces de trabajo neto en absoluto (p. ej. self-aplicaciones: Kriesi 1988b: 58).
Fuerte countercultural milieus parecía para tener un autonomous capacidad de
motivar personas, el cual en girar hecho conexiones organizativas concretas menos
necesarios. A lo largo de líneas similares, McAdam y Fernandez (1990) encontró
que el reclutamiento a la campaña de Verano de la Libertad dependió más
fuertemente encima afiliación en organizational redes en un campus con una
tradición débil de activismo gusta Madison, Wisconsin, que en un campus con una
tradición fuerte de política alternativa gusta Berkeley.
Ya hemos visto (sección 5.1) que el activismo radical a menudo necesita denso sup-
porting networks. En el otro extremo, participación en actividades organizativas que no
es muy exigente poder no necesariamente requerir el respaldando de redes sociales
fuertes. Por ejemplo, adhesión a asociaciones culturales o incluso grupos religiosos que
promueve practices bastante cercano a actividades de mercado (p. ej., meditación
individual, a prácticas de salud alternativa les gusta el yoga, etc.) fácilmente puede
ocurrir incluso aunque las decisiones para conseguir de las personas implicados no es
apoyado por concreto social neto-trabajos (Duros y Bainbridge 1980). Incluso grupos
de interés público, como aquellos activos en el movimiento medioambiental, puede
confiar en redes a una extensión variable, dependiendo de sus niveles de moderación e
institucionalización. Por ejemplo, Diani y Lodi (1988) encontró que reclutamiento a
organizations en el más estab-lished sector de conservación dependió más en redes
privadas que reclutamiento a grupos más críticos, el cual en gran parte tuvo lugar a
través de los lazos desarrollaron en pre-vious experiencias de acción colectiva.
Explicaron esta diferencia por sug-gesting que exclusivamente lazos privados (i.e., liga
desarrollado en contextos detached de acción colectiva milieus) puede ser bastante para
facilitar adhesión a organizaciones
124 YoNDIVIDUALS, NETWORKS, Y P ARTICIPATION

Aquello ampliamente ha aceptado objetivos de política (por ejemplo, apoyando un


grupo local que hace campaña para crear espacios verdes nuevos en el barrio). En
contraste, uniendo organizaciones con algún radical stances, como ecología
política unos, puede requerir personas para vencer más altas barriers.
Consiguientemente, esto puede ser más fácil si las personas están enlazadas a
acquaintances conocidos durante experiencias concretas de acción colectiva más
que en a encuadres más genéricos les gusta uno es barrio. Aun así, adhesión a
formas muy exigentes de la acción colectiva también puede ocurrir sin las redes
que juegan una función importante. En el caso de sectas religiosas que rehusan
mundiales, quiénes requieren de sus miembros una rotura total con sus estilos de
vida anteriores y hábitos, la implicación puede ser más fácil para individual
aislados que para personas quiénes son bien embedded en redes sociales. En todo
likelihood, enlaces de red ejercerían alguna clase de cruz-presión, por ello
desalentando expertos probables de unir (et al de Nieve. 1980).

Cada vez más, los investigadores han reconocido que las personas están
implicadas en multiple lazos, y que mientras algunos pueden facilitar participación,
otros lo pueden desalentar (Kitts 2000). Tomando esta posibilidad a cuenta,
McAdam y Paulsen (1993) intentó determinar lo que las dimensiones de lazos
sociales son más importantes, y qué diferentes types de decisiones de forma de los
lazos para participar. Sus conclusiones substan-tially argumentos más tempranos
cualificados (incluyendo su propios: McAdam 1986) en el enlace entre
participación y afiliaciones organizativas anteriores. Cuando tal, embed-dedness
en organizativo links no pronosticó activismo, ni lazos fuertes a personas quién ya
volunteered. En cambio,qué importó la mayoría era un compromiso fuerte a una
identidad particular, reforzado por lazos a participantes, si de un tipo organizativo
o privado. Habiendo sido un miembro de, dice, grupos de izquierda antiguamente
no representaron un predictor de participación en Verano de Libertad a no ser que
sea coupled con una identificación fuerte, subjetiva con aquel milieu.
Siendo directamente enlazado – mayoritariamente vía lazos organizativos – a
people quiénes ya participan poder así no ser un esencial precondition para
reclutamiento. La carencia de lazos directos puede ser vencida si los participantes
probables son embedded en organi-zational las redes compatibles con la
organización/de campaña son consid-ering uniendo (Kriesi 1988b; McAdam y
Fernandez 1990; McAdam y Paulsen 1993). Aun así, también podemos pensar de
la situación inversa, con personas mobiliz-ing a través de los contactos
desarrollaron en contextos no directamente asociados con partici-pation, pero que
nonetheless crea oportunidades para personas con presupuestos similares para
conocer y finalmente desarrollar acción de junta. Búsqueda en adhe-sion a dos
comités de acción que hacen campaña contra jets militares que vuelan bajos en dos
pueblos alemanes (Ohlemacher 1996), mostró que recruitment los intentos eran
lejos más exitosos para el comité cuyos miembros eran mayoritariamente parte de
organizaciones neutras en su pueblo más que de explícitamente político unos.
Afiliación en aparentemente organizaciones inocuas como padre–profesor asso-
ciations o clubes de deporte habilitaron miembros del comité para lograr, y obtener
el
YoNDIVIDUALS, NETWORKS, Y P ARTICIPATION 125

Confianza de, una gama más ancha de las personas que ellos podrían haber tenido
ellos ser miembros de organizaciones con una identidad política más definida. Los
mecanismos similares pueden también implicación de influencia en nonprotest
acciones. Por ejemplo, Becker y Dhingra (2001) ilustró qué afiliación en
congregaciones religiosas, y los lazos resultantes a miembros amigos, habilitó
personas para comprometer en una variedad de activ-ities en la comunidad, pero
sin cualquier aguantando en niveles de implicación en el congregational
actividades. Las congregaciones ofrecieron individual la oportunidad de formar
enlaces cercanos de amistad y soporte, pero el resultantes social la capital parecía
para ejercer sus efectos principalmente allende las fronteras de la congregación.
A suma arriba, estudios de la relación entre redes y participación ha ido una
manera larga hacia especificar sus plazos. Cuestiones como “qué cuenta de trabajos
netos para qué tipo de participación?” Ha sido dirigido de una variedad de
perspectivas. A pesar de que los hallazgos no son siempre compatibles, ni neces-
sarily comparables, es posible de identificar algunos recurring temas. Primero, la
función de redes parece para variar, depending en los costes sujetaron a la acción
qué están supuestos para facilitar. Si los costes definieron en plazos de riesgos
personales, o de la energía y el compromiso requirieron para unir una acción
concreta u organiza-tion, formas más exigentes de acción han often (pero no
siempre: Snow et al. 1980) sido respaldado por redes más fuertes y más concretas.
Número e inten-sity de los lazos a otros participantes han sido encontrados para
jugar una función en reclutamiento a acciones peligrosas del violentos (della Porta
1988) así como del pacíficos (McAdam 1986, 1988un) clase. Una posición central
en las redes que enlazan prospec-tive los participantes también ha sido
identificados como un importantes predictor de reales par-ticipation (Fernandez y
McAdam 1989).
La extensión al cual el mobilizing messages y la orientación cultural de un
movimiento difiere de, y es en odds con, las orientaciones dominantes en la
sociedad también parece para hacer redes seguras más eficaces que otros. Redes
privadas, consistiendo por ejemplo de lazos a amigos o acquaintances sin
implicación en organizaciones concretas o subcultural milieus, ha sido encontrado
para importar más en casos cuándo el mensaje de un movimiento era bien aceptado
en el social milieus en qué participantes probables vividos y operados – si con-
servation estilos de activismo medioambiental en 1980s Milán (Diani y Lodi 1988),
acción de derechos civil radical en 1960s subculturas de Berkeley (McAdam y
Fernandez 1990), o campañas de paz en ciudades holandesas en el 1980s (Kriesi
1988b). Redes más directamente embedded en políticos y en tiempo
organizaciones radicales y sub-las culturas han sido encontradas para contar
relativamente más para reclutamiento a organiza-tions cuyo mensaje era menos
mainstream, a pesar de que no necesariamente antagonista, en su contexto concreto
(como political ecologists en Milán, activismo de derechos civiles en Madison, o
acción de paz en ciudades holandesas con una presencia débil de subculturas
alternativas).
Finalmente, no sólo hacer asunto de redes diferentes en contextos diferentes,
también actúan funciones diferentes, corrióging de socialización a la creación de
con-
126 YoNDIVIDUALS, NETWORKS, Y P ARTICIPATION

crete Oportunidades de devenir implicadas, y a influir probable partici-pantalones'


decisiones en puntos capitales en tiempo (Kitts 2000; McAdam 2003; Passy 2001,
2003; Tindall 2004). La pertinencia de tales funciones puede cambiar, dependiendo
de si estamos mirando en reclutamiento más que en el fortalecimiento de com-
mitment y la extensión de militancy sobre periodos largos de tiempo. El diferente
public exposición de las organizaciones diferentes también pueden afectar el peso
relativo de tipos concretos de redes encima otros (Passy 2003).

5.3 Individual y Organizaciones

Cuando la historia de Antonio, con qué abrimos este capítulo, ilustró bien, la
importancia de redes sociales para la acción colectiva en movimientos va allende
su soporte de activismo individual. Al contrario, por participar en la vida de un
movimiento y, en particular, en aquel de sus varias organizaciones, los activistas
crean nuevos channels de comunicación entre ellos y aumentar el alcance para
promover campañas comunes. Los enlaces fundaron en las lealtades múltiples son
también importantes cuando crean canales de comunicación entre movimientos y
su entorno. hay, naturalmente, exclusive las lealtades en qué una organización sola
monopoliza el compromiso y la inversión afectiva de sus miembros individuales;
pero el inclusive el modelo es más común.

5.3.1 afiliaciones Exclusivas

En algunos movimientos, la participación implica cometer a organizaciones


concretas. Las organizaciones exclusivas reclaman un noviciado largo, disciplina
rígida, y un nivel alto de compromiso, intruding a cada aspecto de sus miembros'
vidas (Zald y Ceniza 1966; Curtis y Zurcher 1974). En general, el más grande el
degree al cual una organización está fundada en incentivos simbólicos – cualquiera
ideológico o soli-daristic – el más exclusivo lo será.
Las ilustraciones más obvias de este patrón incluyen self-referenciales com-
munities o sectas cuyas características principales unre clausura en la cara del
mundo exterior, una estructura totalitaria, incompatibilidad con otras formas
de compromiso colectivo, y la vista – entre ellos – que los partidarios son el
reposi-tories de verdad (Wallis 1977). Aunque no son necesariamente
residenciales com-munities, el estilo de vida de estos grupos es markedly
separado. La interacción con otros grupos es normalmente limitado, mientras
la tendencia para concentrar en las actividades internas al grupo es muy fuerte.
Las organizaciones activas en neoreligious o neocommunitarian movimientos
a menudo fácilmente caída a esta categoría; pero politi-cal el fundamentalista
y las organizaciones radicales no son disímiles (Blee 2002; Anheier 2003).
YoNDIVIDUALS, NETWORKS, Y P ARTICIPATION 127

En estos casos, el single activista/de partidario habita un mundo en qué rela-


tionships y las normas son altamente estructuró: estas ventajas a una
transformación radical de personalidad (ve capítulo 4 encima). El prevalence de
organizaciones sectarias dentro de unos productos de sector del movimiento
networks cuáles son altamente, si no completamente, fragmented. El nivel
significativo único de interacción es entre partidarios a un spe-cific organización.
En algunos casos (por ejemplo, aquellas sectas cuáles pueden contar en grupos
locales numerosos, como los testigos del Jehová, pero también órgano político-
izations con una presencia territorial fuerte) estos contactos también pueden
desarrollar sobre una área geográfica ancha. Aun así, contacta raramente extender
allende el limita de la organización sola. La “red de movimiento” consiste por tanto
de una serie de cliques3; es decir, grupos de actores – miembros de un dados organi-
zation – quiénes son fuertemente enlazados a cada cual otro y apenas o en absoluto
con adher-ents a otros grupos.

5.3.2 afiliaciones Múltiples

En más casos, aun así, la participación tiene lugar en inclusive organizaciones que
deja afiliaciones múltiples y tener ninguna aspiración para monopolizar sus
miembros' compromiso. Ya en el temprano 1970s, Curtis y Zurcher (1973)
consideró activistas individuales como interorganizational enlaces, y así tan
básicos struc-tural características de movimiento “campos organizativos” (ve
también Di Maggio y Powell 1983; Di Maggio 1986). A lo largo de líneas
similares, Bolton (1972) habló de “cadenas de afiliaciones de grupo” en relación a
la estructura de overlapping afiliaciones en organizaciones voluntarias. Muchos las
investigaciones empíricas han seguido, añadiendo detalles al cuadro ancho. Diani
Y Lodi (1988) ha documentado compromisos múltiples en ecologismo italiano,
con 28 por ciento de los activistas que son implicados en varias otras
organizaciones medioambientales, y el mismo porcentaje activo en ambos
medioambiental y otros grupos políticos o sociales. Mirando en ecologismo
holandés, Kriesi (1993: 186) encontró 43 por ciento de activistas de núcleo para
tener enlaces personales a otros activistas de movimiento (25 por ciento en Italia
según Diani y Lodi), y 67 por ciento para ser conectados a otros participantes de
movimiento sociales nuevos. Los patrones de participación múltiple parecen para
ser afectados por organiza-tional características. Investigando miembros de
voluntary asociaciones en los EE.UU., McPherson (1983) encontró que las
organizaciones más grandes no sólo eran capaces de asegurar sus miembros'
compromiso para un tiempo más largo, pero también podría confiar encima más
lazos a otros grupos, generados por sus miembros' overlapping afiliaciones. Aun
así, otro dato (p. ej. Diani 1995un: 113) sugiere una relación más ambigua entre la
medida de una organización y sus miembros' propensión para comprometer en
multi-ple actividades.
Las afiliaciones múltiples juegan una función importante en integrar áreas
diferentes of un movimiento. Para pertenecer a las mismas organizaciones de
movimiento (tan, más
128 YoNDIVIDUALS, NETWORKS, Y P ARTICIPATION

Generalmente, a organizaciones de otros tipos) facilita contacto personal y el


desarrollo de redes informales which, en vuelta, anima individual partic-ipation y
la movilización de recursos. Los contactos personales son también instrumen-tal
en enlazar organizaciones a cada cual otro. Cuando pasa en organizaciones
económicas (Stokman et al. 1985; Mizruchi y Schwartz 1987), political las
organizaciones son a menudo conectadas por el hecho que comparten activistas
seguros; o más por amistades y relaciones personales entre sus miembros y
dirigentes.
Carroll Y Ratner es (1996) estudio de activismo de movimiento en el más
Grande Vancouver el área ejemplifica estos procesa bien. Por mirar en la junta
affilia-tions de encima 200 activistas en 7 movimientos sociales (trabajo,
urbano/antipoverty, lesbiana/de gay, feminismo, ecologismo, paz, aborigen) han
sido capaces de documentar no sólo la extensión of overlapping afiliaciones, pero
su pat-terning. Entre Vancouver activistas, sólo 27 por ciento eran activos en una
organización sola, mientras que 28 por ciento colaborados con múltiples organiza-
tions dentro del mismo movimiento, y 45 por ciento con múltiples organizationes
en varios movimientos (Carroll y Ratner 1996: 605). Activistas en paz y
urbanos/antipoverty los movimientos eran el más inclinados hacia múltiples mem-
berships (67 por ciento y 71 por ciento estuvieron implicados en organizaciones
múltiples en movimientos múltiples), while lesbiana/de gay, feminista, ecologista,
y abo-riginal los activistas parecían para ser el menos así que (34, 32, 39, y 42 por
ciento de ellos, respectivamente, era de hecho cometido a una organización sola).
Overlapping Las afiliaciones constituyeron un bloque de núcleo de trabajo, paz, y
urbano/antipoverty organizaciones. Organizaciones feministas y
medioambientales estuvieron enlazadas a este bloque a través de sus conexiones a
trabajo y movimientos de paz (1996: 605–6). Mientras el patrón concreto de
conexiones descubrió por Carroll y Ratner necesita no ser tomado como la norma,
y bien pueda variar sustancialmente en periodos diferentes y localities, el
Vancouver el estudio todavía muestra la potencialidad de una aproximación de red
al estudio de sectores de movimiento.
Dato reciente en personas quién demostró contra la guerra de Iraq encima
febrero 15, 2003, en 8 países Occidentales4 así mismo indicar la extensión de
múltiple mem-berships. De los manifestantes quién era miembros de
organizaciones de paz antes de que febrero 15, 53 por ciento eran también activos
en otras organizaciones mobiliz-ing en asuntos transnacionales como Tercer
desarrollo Mundial o nómadas' derechos; 45 por ciento en sociales, culturales, u
organizaciones religiosas; 35 por ciento en clásicos inter-est organizaciones de
representaciones como partidos y uniones; 32 por ciento en envi-ronmental o las
organizaciones de las mujeres. Entre primer-paz de tiempo protestors, los índices
de implicación cayeron drásticamente, aunque quedaron lejos de insignificantes
(11, 29, 15, y 13 por ciento respectivamente en las cuatro categorías hemos justo
mencionó: Diani 2005b).
Overlapping memberships Contribuir a actividad de movimiento social en una
variedad de maneras. En muchas maneras, uno podría decir que hacen para
organizaciones de movimiento lo que las redes interpersonales hacen para
activistas individuales. Primero, facilitan el
YoNDIVIDUALS, NETWORKS, Y P ARTICIPATION 129

Circulación de información y por lo tanto la velocidad del proceso que hace


decisión. Esto es esencial, inasmuch como la velocidad de movilización
compensa al menos en parte para la carencia de los recursos organizativos
sobre qué movimientos tienen control. En la ausencia de coordinación formal
entre organizaciones, mobiliza-tion deviene posible a través de enlaces
informales entre activistas (Killian 1984; Knoke y Sabiamente 1990). Las
personas que trabajan a través de las organizaciones también facilitan el
desarrollarment de compartió representaciones de conflictos. Entre Vancouver
los activistas allí eran maneras diferentes de enmarcar los conflictos, uno
basado en una perspectiva de economía política, otro basado en una perspectiva
de identidad, y un tercer basado en una perspectiva liberal. TÉl distribución de
estos marcos variados dependiendo de activistas' compromiso a overlapping
afiliaciones: quienes actuados como las conexiones entre organizaciones y
movimientos diferentes eran desproporcionadamente cerrar a un marco de
economía política, mientras que adopters de un marco de identidad era más
inclinado para concentrar en organizaciones individuales (Carroll y Ratner
1996: 611).
Otra función importante de mentiras de afiliaciones múltiples en su
contribu-tion al crecimiento de confianza mutua. Si es una cuestión de
economic activ-ities o de movilización política, cometiendo recursos a una
iniciativa de junta que implica otros actores es siempre, hasta cierto punto,
arriesgados. En cada caso, la ruta a movilización requiere actores para conducir
alguna exploración de, o “investigativeproc ess” respecto a (Diani 1995un: ch.
1), su entorno, en búsqueda de confianza-aliados dignos. Este proceso es
mucho más sencillo si hay enlaces actuales entre los activistas centrales de las
varias organizaciones se preocuparon. Esto no significa que otro alliances no
es posible, o aún más frecuente. Pero el coste relativo de forjar estas otras
alianzas normalmente serán más altas, inasmuch tan con-tacts entre los grupos
diferentes no son “routinized” a través de conexiones interpersonales.
La hipótesis que cooperation entre las organizaciones es más probables donde
los contactos personales existen entre sus dirigentes se ha mantenido con unos
cuantos estudios, dedicó ambos a movimientos y a organizaciones políticas en el
sentido más ancho. En ambos casos ha devenido claro que el leaders de
organizaciones quiénes trabajan o hacer campaña junto tiende para ser enlazado
por compartido experimenta cuáles preceden la formación de la coalición él
(Galaskiewicz 1985: 293; Turk 1977; Diani 1990 y 2003c). El más denso las
relaciones entre los dirigentes y the activistas de varias organizaciones de
movimiento, el más altos las posibilidades de cooperación entre ellos (Zald y
McCarthy 1980). Hay ninguna razón para creer que el impacto de redes qué pre-
datar la aparición de un movimiento particular está limitada a decisiones
individuales para participar; bastante, ellos también oportunidades de influencia
para cooperación entre organizaciones.
Finalmente, mirando en activistas' las afiliaciones múltiples pueden constituir
una manera útil de comparar la estructura de movimientos particulares en
diferentes periods, y de localizar sus modificaciones con el tiempo. En su estudio
pionero del organiza-
130 YoNDIVIDUALS, NETWORKS, Y P ARTICIPATION

tional Afiliaciones de 202 figuras claves en los movimientos de las mujeres del
estado de Nueva York entre 1840 y 1914, Naomi Rosenthal y sus colaboradores
recon-structed la estructura del interorganizational redes en tres diferentes su-
torical fases, identificando las organizaciones centrales en cada fase (Rosenthal et
al. 1985; Rosenthal et al. 1997). Una fase de activismo potente entre 1840 y el fin
del 1860s sierra numeroso overlaps entre participación en las organizaciones de las
mujeres y en antislavery o temperance organizaciones. El fol-lowing fase, hasta el
fin de 1880, vio una reducción en conflicto, y en contraste a la fase anterior estuvo
caracterizada por la desaparición de muchos organi-zations y por la dificultad de
revitalizing organizaciones de importancia nacional. Entre 1880 y 1914, había un
resurgimiento de activismo y una intensificación nueva de afiliaciones múltiples,
correspondiendo a campañas para sufragio universal.
La configuración de redes parece para tener dependido significativamente en
las características del entorno en qué los movimientos operaba y en la
disponibilidad de recursos para movilización. En redes locales, donde los recursos
eran normalmente limitados, la integración y la densidad de relaciones era más alta.
Cuando sea esencial de utilizar recursos disponibles a efecto mejor, había poco
espacio para factionalism y núcleo unctivists distribuyó sus afiliaciones múltiples
bastante equitativamente en general de las organizaciones de las mujeres locales.
En contraste, órgano-izations con las estructuras nacionales y cuál eran por tanto
capaces de contar en recursos organizativos más grandes, podría ser más tempted
para acentuar sus rivalidades y distinciones ideológicas. Como resultado, las redes
crearon por multi-ple las afiliaciones eran más fragmented y subgrupos diferentes
constados de (o cliques) apenas conectados a cada cual otro.
En otra exploración de tél dato mismo, Rosenthal et al. (1997) miraba en
mul-tiple afiliaciones en las organizaciones de las mujeres en cuatro diferentes
milieus (tres comunidades locales, plus una red de las mujeres activas en nivel
estatal en Nueva York) entre 1840 y 1920. Destacaron el different las
funciones jugaron por las organizaciones de mujeres nacionales y locales (p.
ej., en plazos de su relación diferente a otros movimientos radicales); la
división de trabajo entre pocos multi-órgano de asunto-izations y la
multiplicidad de los grupos que operan en un más pequeños scale y en semi-
aislamiento; el limitó contactos entre organizaciones de sufragio y benéficos
unos.
Mientras la mayoría de estudios de la dualidad de individual y grupos centra
encima rango-y-activistas de archivo, también podemos aplicar esta perspectiva a
relaciones entre dirigentes de movimiento, finalmente extendiendo el análisis a los
lazos que implican miembros de otros sectores de las élites. Por ejemplo, Schmitt-
Beck (1989) exploró las conexiones entre figuras centrales en el movimiento de
paz alemán-ment del 1980s. Dato sobre elo verlapping las afiliaciones que enlazan
activistas de núcleo de organizaciones de movimiento de la paz a miembros de
otros grupos políticos docu-mented la integración fuerte del liderazgo de
movimiento con iglesias, sindicatos, universidad, medios de comunicación, y otro
establecidos sociales und organizaciones políticas
YoNDIVIDUALS, NETWORKS, Y P ARTICIPATION 131

(Ve también Schou 1997). Por otro lado, activistas de movimiento quiénes son bien
con-nected a los actores externos también pueden aumentar el centrality de su
propios organiza-tions en sus redes de movimiento concretas. Por ejemplo,
mirando en organizaciones de movimiento medioambientales transnacionales,
Caniglia (2001) encontró que su cen-trality e influencia en la red medioambiental
dependida en ninguna medida pequeña en la extensión de sus miembros' lazos
informales a oficiales claves de agencias de Naciones Unidas u otras
organizaciones gubernamentales internacionales.

5.4 Participación Individual, Subculturas


de Movimiento, y Redes Virtuales

Participación individual en la vida de un movimiento es de ninguna manera


restricted a mem-bership en concreto (principalmente político) organizaciones.
Por ir sitios, ser con-nected a varios grupos o asociaciones, patronizing locales
concretos, cafeterías, o librerías, el individual crean y reproducir webs densas
de intercambios informales. Como resultado, las redes sociales informales
constituyen subcultural oppositional dynam-ics. Esta ayuda para mantener las
identidades colectivas vivas incluso cuándo retos abiertos a la autoridad no
puede ser teniendo lugar (cuándo, en Melucci es [1989, 1996] palabras, los
movimientos estányendo t hrough fases de “latencia”). En este sentido, las
redes proporcionan la estructura de movimiento social “espacios libres”
(Polletta 1999), i.e., áreas de interacción social en qué titulares de concretos
worldviews reforzar experimento y solidaridad mutuos con alternative estilos
de vida (ve también Haunss y Lixiviar 2004).
Participando en la vida de varias organizaciones y viniendo a contacto con sus
activistas y seguidores, el individual construyen una serie de único social rela-
tionships. En estos, la dimensión política de acción cruza y overlaps con la
dimensión privada, para generar las fundaciones de una forma concreta de subcul-
ture. En una red de movimiento, el individual persiguen objetivos qué no es sólo
con-cerned con fines políticos pero también y a menudo más significantly con
personales self-realización. Even individual quiénes no son miembros de cualquier
concretos organiza-tion puede venir junto de vez en cuando para actividades e
iniciativas concretas organizaron por operadores culturales, estructuras de servicio,
y tan encima. Afiliación a un par-ticular área de movimiento por tanto puede ser
vista como estrictamente elección personal, el cual trae con él un nivel bajo de
identificación con organizaciones de movimiento. Simi-larly, la adopción por
activistas de movimiento de códigos simbólicos alternativos no automatically
crear un homogeneous identidad, ni proporcione la legitimidad para estructuras
organizativas rígidas. Algún grado de identidad compartida ciertamente char-
acterizes un movimiento entendido en su entirety, pero esto es entonces articulado
con extremo variability y flexibilidad por actores diferentes (Melucci 1984un).
Las versiones diferentes de estos modelos pueden ser encontradas en los
movimientos qué tiene emergido desde el 1960s. En el 1980s, Melucci y asocia
documentado qué
132 YoNDIVIDUALS, NETWORKS, Y P ARTICIPATION

En Milán el fin de un Leninist modelo de políticas, basó encima masa,


“organizaciones” revolucionarias con una estructura rígida, había dado manera a
un estilo de movimiento par-ticipation aquello era en gran parte individualistic y
vio la implicación de las personas en varios tipos de actividades culturales y
políticas, de grupos que levantan consciencia a campañas de asunto solo. Algunos
sectores del movimiento de justicia global contemporáneo y del sector de acción
directa también refleja este modelo (Pared 1999; McDonald 2002; J. Jordania
2002; T. Jordania 2002). Estos sectores expresan una indiferencia radical, si no
hostilidad, a la función de organizaciones como promotores y/o coordinadores de
acción colectiva. Para las personas implicaron en estas redes, politi-cal el activismo
es primeroy forem ost un asunto de estilo de vida, la expresión de profundamente
sentía orientaciones culturales y políticas más que adhesión a cualquier concreto
polit-ical proyecto y las organizaciones que lo podría apoyar.
En estos casos, participación en una vida de movimiento la mayoría del tiempo
consta de implicación en cultural y/o actividades sociales – conciertos de música,
dramáticos por-formances, happenings, siempre con un borde crítico y un elemento
de simbólico y/o reto político a alguna clase de autoridad – más que de público
demonstrations. El último dista mucho de ausente, y algunos pueden ser masivos y
con un impacto público grande – pensar de las manifestaciones que tienen lugar en
el contexto de G8 o WTO reuniones (Herrero 2001; della Porta et al. 2005; Pianta
2001un, 2002), pero también del unticapitalist se amotina aquello destrozó la
Ciudad de Londres encima junio 18, 1999. Pero las manifestaciones no son la
actividad más importante, ni son asoció con la idea de organización formal. Cuándo
pooling los recursos está requerido, esto tiende para tomar la forma de “grupos de
afinidad” (McDonald 2002; Bennett 2004b) que forma para perseguir un objetivo
concreto (parón una carretera nueva, salvar un árbol, monte un boicot a la rama
local de una marca global) y disband dentro de periodo a escaso de tiempo. Los
partidos de calle promovieron por el Reclaim la red de Calles en el tardío 1990s en
el Reino Unido proporcionó oportunidades para retos radicales a dom-inant ideas
de urbanos espaciales cuál era público todavía no confió en cualquier organiza-
tional estructura, dependiendo en cambio en el denso subcultural redes de los
participantes (J. Jordania 2002). Mientras es lejos demasiado simplista de concluir
de estos ejemplos que una transformación radical de la acción colectiva de hecho
ha tenido lugar (McDonald 2002), es ciertamente importante de reconocer la
presencia de estas formasun longside otros – la mayoría vasta – en qué
organizaciones y las identidades organizativas todavía juegan una función
importante (Diani 2005un; Diani y Bisonte 2004; Rootes 2003).
El debate en la función de subcultural y countercultural actividades dentro
de contemporáneos social los movimientos ha devenido incluso más animados
desde el 1990s, con el spread de ordenador-comunicación mediada (de ahora
en adelante, CMC). Cuestiones si las organizaciones todavía tienen una
función en grassroots movilización, si redes comunitarias presenciales densas
es todavía necesario de apoyar acción colectiva, si vínculos de identidad
todavía necesitan alguna clase de experiencia directa compartida y/o
“interacción” real para desarrollar, tiene todo sido hecho más agudo por
desarrollos tecnológicos.
YoNDIVIDUALS, NETWORKS, Y P ARTICIPATION 133

La extensión de este impacto es más discutible. Algunos han sido


particularmente vocales en argumentar que las tecnologías nuevas generarán –
mejores, haber ya gen-erated – la multiplicación de identidades personales y la
diferenciación y seg-mentation del self (Rheingold 1993; Turkle 1995; Castells
1997). Muchos concluyen de este que los patrones de acción política serían
profundamente afectados también (p. ej. Castells 1996, 1997; ve también
Washbourne 2001; Bennett 2004un, 2004b). En relación a political y participación
social, sin incidentes podemos esperar CMC para operar como potente facilitator a
través de “el mantenimiento de redes presenciales dispersadas,” el desarrollo de
cultural y “socio-enclaves espaciales,” y soporte técnico para interesar actividad de
grupo (Calhoun 1998: 383–5). Y es cer-tainly razonable de esperar el internet para
jugar una función decisiva en conectar todas las clases de comunidades que es
tampoco geográficamente dispersado (Rheingold 1993; Pini, Brown, y Previte
2004) o forzado a opesubterráneo de índice por el muy naturaleza de sus
actividades (p. ej. grupos de odio).
Aun así, la contribución de CMC a la creación de tipos nuevos de identidades,
y en particular identidades colectivas, dista mucho de claro. Ante todo, más casos
de interacción personal en grupos de discusión electrónica de hecho pierden
algunos de los requisitos normalmente asociados con el concepto de relaciones
sociales (Cerulo 1997; Cerulo y Ruane 1998). Participantes en aquellas listas a
menudo esconden su identidad personal, participa occasionally, no es ligado por
cualquier clase de relación comprometida-barco, y es mayoritariamente implicado
en interacciones diádicas o como máximo triádicas. Para skep-tics, esto parece
improbable de generar los niveles de confianza y compromiso mutuo que la
búsqueda pasada sugiere es requirojo de participantes en costosos y potencialmente
dis-ruptive acción colectiva (Calhoun 1998: 380; Diani 2000b; Tilly 2004un: ch.
5). Para otros, aun así, el internet crea un conjunto concreto de interacciones más
que ser la interfaz mera de “vida” social real. En aquel contexto, recourse a
identidades escondidas, anonimato, etc. puede representar en su propio correcto
una manera concreta a chal-lenge poder y destabilize él (Wright 2004: 84; Bennett
2004un).
Evidencia empírica en el tipo de lazos estableció por CMC tan lejos está mezclado.
Es ciertamente cierto que hay ahora varias ilustraciones de sociales enlaza cuáles
implican algún grado de solidaridad y confianza mutua, y cuál desarrolló entre personas
quién entró tacto a través del internet (p. ej. Freschi 2000, 2003; Nip 2004). Por otro
lado, los ejemplos de redes comunitarias sugieren que las redes virtuales operan en su
más cuándo están respaldados por conexiones sociales reales en específicamente
localized comunidades, mientras su capacidad de crear la marca nueva unos es uncer-
tain (Virnoche und Marx 1997; Pickerill 2000; Hampton y Wellman 2001; Tranvik
2004). En cuanto a redes transnacionales, otra vez, hay evidencia fuerte que
contribuyen a la coordinación eficaz de campañas globales (Bennett 2004un; Furgoneta
Aelst y Walgraave 2004). Perot hey parece mayoritariamente para enlazar personas (un
inter-élite de activista nacional) quién también sabe cada cual otro y conocer en persona
en el occa-sion de reuniones y otros acontecimientos, más que ciudadanos “virtuales
normales” (Keck y Sikkink 1998; Lahusen 2004). A suma arriba, el jurado es todavía
fuera en el asunto de si CMC ha mayoritariamente facilitó la acción de activistas y
organizaciones por
134 YoNDIVIDUALS, NETWORKS, Y P ARTICIPATION

Reforzando existiendo enlaces, o si ha creado tipos nuevos de alternativos


com-munities de arañazo.

5.5 Resumen

En este capítulo hemos ilustrado algunos aspectos del impacto encima


reclutamiento y procesos de participación y en la estructura global de movimientos
sociales, de las redes en qué activistas de movimiento sociales son embedded.
Primero, hemos mostrado que el individual a menudo devienen implicados en
acción colectiva a través de sus conexiones personales a las personas ya implicaron.
Aquellas conexiones les ayudan vencidas los obstáculos innumerables y dilemas
que las personas normalmente afrontan cuándo considerando si para devenir activo
en una causa segura. No sólo aquello: la cantidad y tipo de las redes individuales
también afectan las posibilidades de personas quedan-ing activos para un tiempo
largo, o en cambio reduciendo su compromiso, o cortándolo altogether, after
período breves. En reacción a críticas de la función de redes en movilización
individual, los investigadores han cualificado sus argumentos por explorar lo que
los tipos de redes son más probablemente para afectar lo que tipos de acción
colectiva, y cómo el relationship entre los dos pueden cambiar bajo circunstancias
sociales y políticas diferentes.
También hemos parado atención al hecho que el individual no sólo devienen
activos en un movimiento a través de sus conexiones anteriores, pero también
crear nuevo connec-tions por el muy hecho de ser implicado en formas
múltiples de activismo y asso-ciations. De esta perspectiva, los activistas
individuales operan tan puentes entre diferentes organizativos milieus,
enlazando, por ejemplo, movimiento social organi-zations a actores políticos
establecidos o instituciones, u organizaciones mobilized para causas
diferentes. Por hacer tan, afectan la estructura global de movimiento social-
ment “industrias” (McCarthy y Zald 1987un) o “familias” (della Porta y Rucht
1995). Al mismo tiempo, aun así, lazos resulting de overlapping mem-berships
no es siempre restringido a organizaciones; activistas de movimiento
individual son también frecuentemente implicados en countercultural o
subcultural prácticas. Esto puede tomar la forma de “experiencias de vida” real,
a través de personales participation en actividades concretas, pero también
desarrollar a través de implicación en virtual com-munities, como aquellos
hecho posible por la difusión de ordenador-comunicación mediada.
6
ORGANIZACIONES Y
MOVIMIENTOS
SOCIALES

Neoliberal La globalización tiene muchos enemigos – o al menos críticos –


en el suroeste de Inglaterra en el inicio del milenio nuevo. Incluso en una
ciudad con una reputación para su moderado y nonconflictual cultura política
como Bristol, el espectro de organizatlos iones que desafían neoliberal
políticas, destacando su impacto negativo en el bienestar de las personas así
como en la integración de comunidades locales, defendiendo opciones
económicas alternativas y respeto más grande para derechos humanos por
compañías globales y g nacionalov-ernments igualmente, es muy ancho de
hecho (Diani 2005un). Dejado nos tomar una mirada más cercana en algunos
de ellos. Por un lado tenemos organizaciones como Oxfam, una caridad
grande activa nationwide, con muchas ramificaciones en el extranjero.
Oxfam Promueve ambos advocacy en behalf de dispossessed poblaciones y
entrega de servicio. Tiene una estructura formal y un coste enorme-pagando
afiliación qué, combinado con una gama de estrategias de marketing y ayuda
sustancial de unpaid voluntarios, resultados en una capacidad impresionante
a mobilize resources en proyectos concretos. También activo en asuntos de
justicia global es el capítulo local de Greenpeace. Coherentemente con la
estrategia de esta organización particular, las actividades locales son
mayoritariamente significadas como contribución al alto-el perfil hace
campaña que elo rganization promueve en una escala global. El corriendo
del último confía en trabajo voluntario sólo a una extensión muy limitada.
Greenpeace de hecho opera mayoritariamente como grupo de protesta
profesional. Partidos de izquierda pequeño, críticos de Trabajo Nuevo, es
también muy active en el asunto. Una vez más, estos son organizaciones con
una estructura bastante definida, criterios de afiliación que diferencian entre
quién es y quién no es un miembro, y una identidad organizativa clara junto
a la identidad del movimiento de justicia global globalmente..
Al mismo tiempo, globalización en Bristol es opposed por sectores de
activistas radicales quiénes adoptan formas muy sueltas de organización.
Mientras la ciudad ha devenido sabida sobre los años para su countercultural
escena y su
136 SOCIAL MOVEMENTS Y O RGANIZATIONS

Transparencia hacia formas alternativas de participación en asuntos como el


entorno, animal y derechos humanos, y feminismo (i.e., los asuntos clásicos
asociaron con “movimientos sociales nuevos”), la transformación del
potential para grassroots activismo en formas organizativas, incluso del tipo
radical, ha probado problemático (Purdue, Diani, y Lindsay 2004). Radicales
mobilizing encima globalización – y de hecho en un número de otros
asuntos, de que construyen carretera para vivir exportación animal to asilo-
buscadores a trabajadores' derechos – mayoritariamente ha refrenado de
implicación en órgano concreto-izations. Bastante, han adoptado más
sueltos, métodos más informales de coor-dination. Confían en lazos
personales, ayudados a lo largo de por el hecho que el núcleo de activists es
no más de unos cuantos docena (i.e., quienes pueden ser considerados tan
virtualmente defensores de dedicación exclusiva, si en un totalmente
nonprofessional base); utilizan tan puntos de encuentro cafeterías
alternativas u otro culturales y ocio-locales de tiempo; coordinan a través de
letrasnoticiosas, fanzines, o listas de email. En estos casos, el modelo
organizativo mucho overlaps con el estilo de individualized subcultural o
countercultural participación describimos al final del capítulo anterior.
En entre estos dos polos de organizational caída de estructura
organiza-tions con grados variables de formalización y complejidad
internas: grupos de barrio interesaron en integración mejor entre blanco
y nonwhite residentes locales; asociaciones de minorías étnicas –
incluyendo muchos women que apuntan asociaciones en mejorar
oportunidades privadas y públicas para su grupo; las asociaciones
culturales que promueven altera-estilos de vida nativos en áreas como
alimentarios o salud, para caso a través de prácticas de comercio justo;
grupos de profesionales – p. ej. leyyers – dispuesto de ofrecer sus
servicios a privó grupos o personas sin derechos básicos, como nómadas.
Mientras todas las formas organizativas diferentes acabamos de describir
es funcional a actividades concretas de interesar a miembros de organización
– o, en el caso de redes de activista informal, a quienes están implicados en
ellos
– A menudo convergen en coaliciones y campañas más anchas en asuntos
concretos. En el últimos pocos años, los ejemplos de tales acciones incluyen
campañas encima buscadores de asilo' derechos, la anulación de países en
desarrollo' deuda, y naturalmente oposición a las guerras afganas e iraquíes.
Además, la densidad de lazos entre organizaciones con un interés fuerte en
transna-tional asuntos como globalización, Tercera deuda Mundial,
migración, paz y guerra, es de hecho mucho más alto en Bristol que la
densidad de lazos entre organizaciones con otras prioridades de asunto
(Diani y Bisonte 2004). Arriba de aquel, los enlaces extensos corridos entre
los varios sectores de Bristolian sociedad civil a través del activities de sus
miembros, su miembro múltiple-barcos, su personales acquaintances (los
enlaces describimos en el anteriores
SOCIAL MOVEMENTS Y O RGANIZATIONS 137

Capítulo). Y naturalmente, las conexiones de estos grupos son de ninguna


manera restringidos al área local: cualquiera a través de enlaces formales a
cabeza nacional-trimestres, gusta en el caso de Oxfam, o incluso
transnacional unos, como Verdes-paz, o a través de implicación en redes
transnacionales como Jubilee 2000, Gota la Deuda, o el Climate Red de
Acción, o a través de los intercambios informales con organizaciones
basaron en otros países, Bristol organiza-tions es parte de muchas redes de
movilización más anchas.

Qué encontramos en Bristol es ciertamente no nuevo. Los movimientos sociales


mucho tiempo han sido identificados con loosely estructuró conflicto colectivo, en
qué “centenares de grupos y organizaciones – muchos de ellos cortos-vividos,
spatially esparció, y comunicación directa falta, una organización sola, y un
dirigente común-barco – episodically tomapa rt en muchos clases diferentes de
acción colectiva local” (Oberschall 1980: 45–6). Lejos de ser un caso único, Bristol
proporciona un excel-ejemplo dejado de ambas la función de organizaciones en
promover y sosteniendo col-lective acción, y del diferente organizational lógicas
que uno puede localizar dentro de movimientos sociales (Edwards y Foley 2003;
Andrews y Edwards 2005; Davis, McAdam, Scott, y Zald 2005). Incluso aun así
los movimientos sociales no equiparan con las organizaciones activas en ellos (ve
capítulos 1 y 5 above), las organizaciones a menudo juegan funciones muy
importantes dentro les. Como cualquier clase de organización, las organizaciones
activas en los movimientos sociales cumplen – si a grados variables y en
combinaciones variables – un número de funciones: induciendo participantes para
ofrecer elir servicios; definiendo objetivos organizativos; gestor y coordinando
contri-butions; recogiendo recursos de su entorno; seleccionando, formación, y
reemplazando miembros (Scott 1981: 9). Organizaciones de movimiento social
tienen que mobi-lize recursos del surrounding entorno, si directamente en la forma
de dinero o a través de trabajo voluntario por sus partidarios; tienen que neutralizar
adversarios y soporte de aumento de ambos el público general y la élite (ve p. ej.
McCarthy y Zald 1987b [1977]: 19).
Organizations Es también importante porque actúan fuentes tan potentes de
identidad para un movimiento propio constituency, sus adversarios, y bystander
públicos. Ningún asunto cómo las personas conscientes pueden ser de la
complejidad y hetero-geneity de cualquier movimiento, su público perceptiencima
probablemente puede ser asociado con su la mayoría de conspicuous caracteres.
Estos necesitan no necesariamente ser organizaciones, cuando la función de
personas gusta Martin Luther Rey en los EE.UU. movimiento de derechos civiles
del 1960s, o de Vandana Shiva o Jose Bove en el movimiento de hielojusto global,
nos recuerdo. No obstante, es a menudo organizado agrupa aquello está asociado
con un movimiento-ment, para mejor o peor: para caso, Greenpeace o WWF con
environmen-talism, la amnistía Internacional con activismo de derechos humanos,
Attac o el tan-Bloque “Negro llamado” con el movimiento de justicia global.
138 SOCIAL MOVEMENTS Y O RGANIZATIONS

Para las personas cometidas a una causa segura, las organizaciones son una
fuente importante de continuidad, no sólo en plazos de identidad, pero también en
plazos de iónde acto. En tiempo de efervescencia colectiva, cuándo el entusiasmo
es alto y la voluntad a par-ticipate es fuerte, es más fácil a mobilize personas y
recursos incluso informalmente tan individual. Pero cuándo las oportunidades para
acción son más modestas y consigue más difficult para atraer personas
espontáneamente “a las calles,” entonces las organizaciones pueden asegurar
continuidad a acción colectiva precisamente debido a su tendencia a self-
perpetuation. Naturalmente no todas las organizaciones sobreviven el fin de olas
de protesta de particularesi ntensity (Minkoff 1995), todavía sin organizaciones la
acción colectiva sería subject a niveles extremos de variabilidad, y challengers' el
peso político sería lejos más limitado que de hecho es. La función de
organizaciones como fuentes de identidad y tan los actores que aseguran
continuidad a acción colectiva también resultados en ellos jugando representación
y, hasta cierto punto, funciones de liderazgo en behalf de un movimiento. Uno de
las razones por qué los actores políticos tienen problema tratando movimientos
sociales, y lucha de actores de los medios de comunicación para representarles en
sus cuentas, es la carencia de representantes de movimiento reconocido. Con
niveles variables de aceptación de movimientos' grassroots, las organizaciones a
menudo acaban jugar tal función sencillamente por virtud de su visibilidad más
grande und facilidad más grande de acceso (Diani 2003b).
Al mismo tiempo, las organizaciones actúan sus tareas por tomar arriba
formas muy diversas. El tratamiento clásico de Scott siguiente (1981: ch. 2),
podemos mirar en organiza-tions como racionales, naturales, y sistemas
abiertos. La primera aproximación ve organiza-tions principalmente tan las
colectividades orientaron a relativamente objetivos concretos, con una
estructura social relativamente formalizada; la segunda aproximación
mantiene que las organizaciones son colectividades cuyos participantes/de
miembros son poca influencia d por formales struc-tures u objetivos oficiales,
pero compartir un interés en la supervivencia del sistema y comprometer en
actividades, coordinó informalmente, para asegurar tal supervivencia; la
tercera aproximación concibe de organizaciones principalmente coaliciones
tan inestables de interest agrupa aquello determina objetivos a través de un
proceso de negociación: la estructura de la coalición, sus actividades, y sus
resultados son fuertemente afectados por factores medioambientales.
Necesita ser hecho muy claro que estos son modelos analíticos y no empir-ical
descripciones de tipos concretos de organizaciones; en otras palabras,, también
podemos aplicar las tres lógicas diferentes a la misma organización para identificar
dif-ferent aspectos de su manera de operativo y dirigir problemas diferentes. Por
ejemplo, pueda make sentido eminente para mirar en Greenpeace por centrar en
su explícitamente declaró objetivos y estructura (adoptando, en otras palabras,, una
perspectiva de sistema racional); por mirar en las prácticas informales a través de
qué las personas que operan dentro Greenpeace asegura la reproducción de la
organización (i.e., tomando una perspectiva de sistema natural); o por mirar en
cómo Greenpeace puede ser el resultado de tensiones y luchas entre actores
diferentes dentro lo, y qué
SOCIAL MOVEMENTS Y O
RGA
NIZATIONS 139

Tales luchas también pueden ser afectadas por el sociales, económicos, y


políticos envi-ronment en qué la organización opera (así siguiendo un modelo
de sistema abierto).
De nuestro punto de vista, aun así, es también legítimo y útil de reconocer que
cada modelo más conviene uno de las formas organizativas hemos justo identi-
fied. Más específicamente, en el Bristol movimiento de justicia global, así como
en cualquier otro movimiento, podemos tampoco foco en las características de los
grupos y organizaciones quiénes son mobilized dentro lo, o en la organización del
movimiento-ment globalmente, i.e., en el camino que los grupos diferentes,
organizaciones, e incluso los activistas individuales interesaron en asuntos de
globalización relacionan a cada cual otro. Si tomamos la primera línea de
investigación, probablemente podemos mirar en primer lugar para combinaciones
variables de sistemas racionales y naturales aproximaciones. En general, una
aproximación de sistema racional hace más sentido para fuertemente
organizaciones burocráticas con relativamente objetivos concretos como empresas
u hospitals, que para organizaciones advo-cating más anchos y a menudo vaguely
cambios sociales definidos, gusta muchos de aquellos implicados en movimientos
sociales. Aun así, también pueda proporcionar ideas útiles en rela-tion a la mayoría
de formalizó las organizaciones activas en movimientos (in nuestro ejemplo, el
gusta de Oxfam y Greenpeace).
El más referimos a formas organizativas sueltas, como aquellos reflejados en
infor-mal redes de activistas radicales, el más la perspectiva de sistemas natural
parece útil. Las aspiraciones a cambio radical held por aquellos activistas
probablemente no pueden ser cumplidos; consiguientemente, para la reproducción
de activismo con el tiempo, interno sol-idarity e identidad – y por ello los enlaces
informales entre las personas implicaron
– Es de importancia primordial (Pared 1999; McDonald 2002; Routledge 2003;
Doherty, Arados, y Pared 2003). Finalmente, si nuestras mentiras de interés en la
estructura organizativa de un movimiento tomado globalmente, entonces la
aproximación de sistema abierta probablemente puede generar ideas muy útiles.
Otra vez, es todo demasiado obvio que negotia-tions sobre objetivos, instability
de las coaliciones, y exposición fuerte a environ-los efectos mentales pueden forma
cualquier organización concreta; aun así, esta dinámica es probablemente más
visible cuándo estamos hablando sobre una gama ancha de organizaciones
diferentes, como aquellos haciendo movimientos sociales.
En nuestra discusión de dinámica organizativa en movimientos sociales
distinguiremos entre las organizaciones tomadas como actores concretos
individuales y la organización del movimiento tomado como sistema complejo de
connected, inter-organizaciones dependientes. Más específicamente, nuestro
argumento desarrollará como sigue: primero, introduciremos un número de
alternativas o dilemas organizativos que cara de organizaciones; entonces
identificar unos cuantos modelos organizativos básicos; entonces look en patrones
de cambio organizativo, centrando primero en la relación entre organizaciones y la
estructura institucional en qué operan, y más tarde en el impacto de cambio
tecnológico (la revolución de internet) en movimientos sociales' organizational
formas. Finalmente, analizaremos los factores
140 SOCIAL MOVEMENTS Y O RGANIZATIONS

Detrás de la segmentación de las redes que enlace organizaciones diferentes a


cada cual otro.

6.1 Dilemas Organizativos en Movimientos


Sociales

En análisis de movimiento social, el acrónimo SMO (estando para “organización


de movimiento social”) ha probado uno del más popular (McCarthy y Zald 1977).
Pero también ha probado muy ambiguo, cuando ha tomado significados muy
diferentes entre autores diferentes. Su original proponents definió la organización
de movimiento social como “complejo, o formal, organización qué identifica sus
objetivos con las preferencias de un movimiento social o countermovement e
intentos de implementar aquellos objetivos” (McCarthy y Zald 1987 [1977]: 20),
una concepción que sólo cabe altamente organizaciones estructuradas y formales.
En cambio, otro def-inition ve SMOs como “asociaciones de las personas que
hacen idealistas y moralistic reclamaciones aproximadamente qué humanos
personales o vida de grupo ought ser organizado que, en el tiempo de sus
reclamaciones que hacen, es insignificante a o excluido de mainstream sociedad”
(Lofland 1996: 2–3), pero que difícilmente parece aplicable a organizaciones
fuertes como Greenpeace, la amnistía Internacional, o el gustar. Todavía otros (p.
ej. Rucht 1994) distingue movimientos sociales (y por ello SMOs) de partidos y
grupos de interés debido a su fuente principal de poder y legitimidad (protesta-
mobilizing capac-ity como opposed a votos e influencia respectivamente), pero
esto no necesariamente implica distinto organizational formas.
A pesar de que la mayoría de investigadores en el campo no iría según lo que
sugiriendo consiguiendo librado del SMO etiqueta altogether (pero ver Burstein
1999; Burstein, Ein-wohner, y Hollander 1995; Burstein y Linton 2002; Diani
2004un), es defi-nitely importante de ser consciente de la heterogeneidad de
formas organizativas adoptó por activistas de movimiento social (Rao, Morrill, y
Zald 2000). En un sys-tematic análisis de tales formas, dibujando en la experiencia
del del oeste movimientos sociales nuevos europeos del 1980s, Hanspeter Kriesi
(1996) ha descrito su interno structuration cuando derivando de: (1) formalización,
con la introducción de criterios de afiliación formal, escritos gobierna,
procedimientos fijos, dirigente formal-barco, y una estructura fija de oficinas; (2)
professionalization, entendido como la presencia de personal pagado quiénes
persiguen una carrera dentro de la organización; (3) diferenciación interna,
implicando una división funcional de trabajo y la creación de terri-torial unidades;
y (4) integración, a través de mecanismos of horizontales y/o ver-tical
coordinación.1 El grado a qué concreto SMOs conocer aquellos criterios refleja
algunos dilemas organizativos básicos, aquello no es extraño a movimiento social-
ments único (ve p. ej. Janda [1970] en partidos políticos), pero es ciertamente muy
importante a nuestro entendiendo de dinámica de movimiento. Dejado nos foco
encima tres
SOCIAL MOVEMENTS Y O
RGA
NIZATIONS 141

De ellos, sin reclamar para proporcionar un todo-abarcando revisión (ve en


cambio Lofland 1996).

6.1.1 Mobilizing people o recursos?

Organizaciones políticas – en nuestro caso, específicamente SMOs – puede probar


a mobilize el soporte posible más grande del público general, y por lo tanto los
recursos qué es esencial al mantenimiento de un semi- o quasi-profesional group.
Gama de estrategias disponibles de llamar a en términos generales conjuntos
soportados de valores a la provisión de incentivos selectivos a suscriptores de
miembros/probables en la forma de servicios, ocio-actividades de tiempo, paquetes
de descuento, etc. Pero esto no es la opción única: SMOs también puede probar a
mobilize más pequeño pero más cuidadosamente seleccionó grupos de activistas
comprometidos. Estos son esenciales para las tareas más exigentes de participación
de movimiento, incluyendo compromiso organizativo persistente y la promoción
de formas costosas de acción colectiva.
Poniéndolo de manera diferente, hay una alternativa básica entre la
movilización del dinero” o “el tiempo de “las personas” (Oliver y Marwell
1992). Estas opciones no son fácilmente compatibles. Mensajes emocionales,
los cuales proporcionan una definición definida de la identidad y los
adversarios de un movimiento, es esencial a mobilize activistas de núcleo
(Gamson 1992un). Todavía, su agudeza puede alienar sectores de sympathizers
y seguidores probables con menos orientaciones definidas y motivaciones
(Freídos-hombre y McAdam 1992). También pueda desalentar seguidores
potenciales entre estableció actores, no sólo agencias públicas pero también
“preocupados” privados spon-sors, cuya contribución será más fácil de atraer
el más grande la medida de soporte público para un movimiento dado.2 La
elección de si a mobilize el tiempo o el dinero tiene implicaciones importantes
para SMOs: las dos opciones requieren tecnologías “de movilización
diferente” y por tanto modelos organizativos diferentes (Oliver y Marwell
1992).
SMOs Difiere en las oportunidades unvailable para su grassroots miembros'
par-ticipation. Muchos de ellos enfatizan participación y democracia directa,
oppose delegación de poder, y privilegio consensual que hace decisión. Esto aplica
a Foros Sociales contemporáneos (Agnoletto 2003; Baiocchi 2001, 2002un; della
Porta 2005b) así como a virtualmente todos los movimientos sociales quiénes han
seguido cada cual otro del 1960s (Breines 1989; Rosenthal y Schwartz 1989: 46;
Polletta 2002). Una estructura participativa también favorece solidaridad interna.
Teniendo único limited acceso a recursos materiales, organizaciones de
movimiento social pueden sustituir para este con recursos simbólicos.
Consiguientemente, muchos SMOs dar particular impor-tance a relaciones
internas, transformando el muy costes de acción colectiva a beneficios through las
recompensas intrínsecas de participación él. Así como organizaciones formales, los
grupos pequeños aguantaron juntos por las relaciones personales sobreviven
durante periodos de latencia, proporcionando bases importantes para el
resurgimiento de movimiento
142 SOCIAL MOVEMENTS Y O RGANIZATIONS

Actividades (Taylor 1989; Melucci 1996). En particular, un grupo pequeño de


activistas “utiliza naturalmente ocurriendo relaciones sociales y conoce una
variedad de organiza-tional y necesidades individuales para soporte emocional,
integración, compartiendo de sacri-fice, y expresión de compartió identidades”
(Gamson 1990: 175). Dentro de cohesive grupos las condiciones para el desarrollo
de sistemas de valor alternativo es con-stituted y “las asociaciones comunales
devienen espacios libres, criando tierras para democráticos change” (Evans y Boyte
1986: 187). En estos “espacios libres,” un “sentido de un bien común” desarrolla
junto a la construcción de “directo, presencial, y relaciones igualitarias” (Gamson
1990: 190–1). Así, un todo-abrazando par-ticipation tiende a permeate cada
aspecto de activistas' vidas diarias. “En el clima del tardío 1960s,” Whalen y Flacks
nota con referencia a los EE.UU. movimiento estudiantil, “el compromiso a
revolución tuvo implicaciones para llevar a cabo virtualmente cada detalle de vida
diaria: para ser un revolutionary era para vestir, come, hace el amor, y hablar en
maneras seguras y no otros” (1989: 249). Dónde la política “marca cada momento
del día,” los militantes amigos devienen una “familia,” cuando es a veces puesto
en el extremo dejado en Italia (della Porta 1990: 149–50). Tanto de modo que, en
su sistema de valor y estilo de vida, “quienes participados en la juventud repugna
continúa ser afectado por él” (Whalen y Flacks 1989: 247).

6.1.2 estructuras Jerárquicas u horizontales?

La distribución de poder dentro de un organization también necesita ser


considerado. Power puede ser más o menos centralizado, cuando la literatura en
partidos políticos en par-ticular ha revelado. Las estructuras nacionales pueden
tener más grandes o menos peso; puede haber participación más grande o menor
en decisiones concerning asignación de recurso, definición de objetivo,
candidaturas, o procedimientos disciplinarios; y puede haber centralización más
grande o menor de liderazgo (Janda 1970: 104–12). Organizaciones de movimiento
social tienen estilos diferentes de liderazgo. Mucha organizacións de reli-gious
sectas a movimientos estudiantiles, vía partidos revolucionarios como el
Bolsheviks o el Nazis, ha mostrado formas carismáticas de liderazgo cuya
legitimidad era dependiente sobre todo en dirigentes' capacidad de manipular
recursos ideológicos y para encarnar el movimiento globalmente, contribuyendo a
la creación de su col-lective identidad (ve, por ejemplo, Alberoni 1984). En
general, aun así, varios dif-ferent estilos de liderazgo han sido notados en la
literatura: agitator, profeta, administrador, o statesman (Lang y Lang 1961);
carismático, administrador, o intelectual (Killian 1964); carismático, ideológico, o
pragmático (Wilson 1973); instrumental o afectivo (Downton 1973).
Dado su naturaleza participativa y – orientación frecuentemente democrática,
organizaciones de movimiento social haber siempre afrontó el dilema de cómo a
rec-oncile funciones de liderazgo con los requisitos de grassroots democracia. A
menudo rehusan autoridad y jerarquía encima principio (Pearce 1980; Diani y
Donati
SOCIAL MOVEMENTS Y O
RGA
NIZATIONS 143

1984; Brown 1989; Lichterman 1995un: 196), pero esto no necesariamente


elimi-nate la necesidad para funciones de liderazgo, como coordinación y
público repre-sentation (Melucci 1996: 344–7). Si we piensa de liderazgo de
movimiento social en plazos relacionales (Melucci 1996: 335–8; ve también
Downton 1973), entonces “funciones de liderazgo necesitan no entail control
sobre una organización unificada, o reconocimiento explícito de carisma de
seguidores. Pueden también, lejos menos obtrusively, resultado de actores
seguros' ubicación en el centro de intercambios de recursos prácticos y
simbólicos entre organizaciones de movimiento. Esto no generará dominación,
si por aquel significamos actores' capacidad de imponer sanciones encima
otros enorden t o controla su comportamiento, sino grados variables de
influencia” (Diani 2003b: 106).
De esta perspectiva, más que con carisma o autoridad, “el liderazgo” puede ser
asociado con actores' capacidad de promover trabajo de coalición entre
movimiento-ment organizations, o para establecer conexiones a los medios de
comunicación y políticos insti-tutions, el cual en ventaja de vuelta a operativo de
facto cuando representantes “de movimiento” (ve p. ej. Diani y Donati 1984;
Rosenthal et al. 1985, 1997; Staggenborg 1988; Mushaben 1989; Schmitt-Beck
1989; Diani 1995un, 2003b; Schou 1997). El plu-rality de las funciones
importantes para movilización de movimiento social también significa que jugando
influyente, “funciones” de liderazgo depende de posesión de constantemente
chang-ing recursos. Recientemente, por ejemplo, los expertos a menudo han
reemplazado ideologues movimiento tan social dirigentes (Moore 1995).
Implicado cuando son en asuntos tecnológicos, los movimientos contemporáneos
asignan una función muy importante a natural scien-tists e ingenieros: “tecnologías
sofisticadas desafiantes . . . Tal o ganizedlas protestas son dependientes encima
reconoció expertos para interpretar los asuntos y conseguir credibilidad pública”
(Walsh 1988: 182). A raíz de estas funciones múltiples y requisitos, el liderazgo en
movimientos sociales es a menudo ad hoc, corto vivido, relaciona a specific
objetivos, y está concentrado en una área limitada de los movimientos ellos (Diani
y Donati 1984; Barker, Johnson y Lavalette 2001; Morris y Staggenborg 2004).

6.1.3 Challengers o “proveedores de servicio”?

No todas organizaciones de movimiento sociales son directamente preocupadas


con externos chal-lenges, orientados en políticos powerholders. Las organizaciones
también pueden actuar principalmente con referencia a las necesidades de
movimiento social constituencies, y/o para apoyar retos culturales y simbólicos o
el practice de estilos de vida nuevos. Kriesi (1996) llamó estas asociaciones de
movimiento de las organizaciones, pero otros plazos haber también devenir popular
(p. ej. hasta la mitad casas [Morris 1984] o abeyance estructuras [Taylor 1989]).
Comunas, grupos de terapia, y centros de crisis de la violación estuvieron formados
a través del movimiento feminista, por ejemplo (Ryan 1992: 135–44; Minkoff
1995; Kaplan 1995; Daniels y Brooks 1997). Dentro de movimientos estudiantiles,
utilizados-libro
144 SOCIAL MOVEMENTS Y O RGANIZATIONS

Paradas y centros de consejo de varionos las clases ofrecieron soporte logístico


a sympa-thizers, dejando acción de protesta a favor del correcto a educación
para ser combinada con la actividad concreta apuntada en “poner el objetivo a
práctica,” mientras al mismo tiempo ayudaron ensanchar soporte. Asno de
movimientoociations, también, es diverso en plazos de niveles de
organización, distribución de poder interno, y grado de par-ticipation. Self-
Grupos de ayuda, por ejemplo, tiende para ser informal, descentralizado, y es
frecuentemente totalizing, mientras las asociaciones que ofrecen servicios a un
público más ancho puede adoptar una estructura más formal, y una distribución
jerárquica de poder, y fusionar incentivos simbólicos e instrumentales (ve p.
ej. Taylor 1996; Taylor y furgoneta Willige 1996).
Además agrupa implicado en movimiento y movilización políticos
asociaciones, tanto predominantemente inward-mirando, supportive
organizaciones (Kriesi 1996) es también parte del movimiento social estructura
organizativa. Estos constan de organizaciones de servicio como diarios, centros de
recreación, educativos insti-tutions, o publicando pulsa, los cuales contribuyen a
los objetivos de un movimiento pero al mismo tiempo trabajo en el mercado
abierto. Los clubes de película, teatros, publicando las casas crearon dentro de
varios movimientos para movilización colectiva más lejana cada vez más became
mercado-empresas comerciales orientadas con auditó cuentas, personal asalariado,
y un mercado competitivo ethos. El mismo aplicado a salud y comida naturales
tiendas, originalmente instalados por sympathizers si no activistas de movimientos
medioambientales.
El spread de esta clase de estructura contribuye a la creación de contraculturas
de movimiento en qué compromiso político permeates la totalidad de vida. 3 Los
centros sociales italianos (centri sociali) que originados del autonomist y anar-chist
sectores de movimiento de tél tarde 1970s, con el tiempo ha evolucionado de
inward-mirando countercultural comunidades hacia un modelo organizativo qué es
más cercano a aquello de supportive organizaciones (a pesar de que esto no ha
pasado sin conflictos y dissension entre diferentes o ientationsdentro del sector:
Cena 1999; Ruggiero 2000; Mudu 2004). Los negocios de comercio justo y éticos
amontona aquello ha desarrollado en paralelo con el movimiento de justicia global
también caída bajo este encabezando (Micheletti 2003; Micheletti, Follesdal, y
Stolle 2003; Diani 2005un; Aguiton 2001). Tan hace una red de operadoras de
medios de comunicación alternativos enlazó junta a través de varios sitios web,
como Indymedia (ve también sección 7.4.). Varios neoreligious organizaciones
sobre las últimas décadas también han adoptado organizational los modelos que
combinan elementos de las asociaciones de movimiento y el soporte-ive tipos de
organizaciones. Por ejemplo, Hank Johnston (1980) caracterizó el grupo de
Meditación Trascendental como “marketed movimiento social.” Mientras refiere-
anillo a un “marketed organización de movimiento social” podría haber sido más
accu-índice, el análisis de Johnston empero aspectos importantes capturados de la
función jugada por las organizaciones que proporcionan servicios concretos a “los
clientes que” anhelan por-sonal y cambio social.
SO CIAL MOVEMENTS Y O
RGA
NIZATIONS 145

6.2 Tipos de Organizaciones de Movimiento Social

Las respuestas diferentes a los dilemas ilustraron encima generar diferente


organi-zational modelos. Aquí introducimos algunos de ellos, sin cualquier
aspiración para generar tipologías sistemáticas (para ejemplos, ve Kriesi 1996;
Diani y Donati 1999; Rao et al. 2000).

6.2.1 movimiento Profesional organizaciones

Una organización de movimiento social profesional está caracterizada por “(1) un


liderazgo que dedica tiempo lleno al movimiento, con una proporción grande de
los recursos que originan fuera del aggrieved grupo que las reclamaciones de
movimiento para representar;
(2) Una afiliación muy pequeña o inexistente base o una afiliación de papel (mem-
bership implica poco más de dejar un nombre para ser utilizado a corros de
afiliación); (3) intentos de impartir la imagen de ‘hablar para un constituency,' y
(4) Intentos de influir política hacia aquel mismo constituency” (McCarthy y
Zald 1987un [1973]: 375).4 miembros Normales haber poco poder y “tener
ninguna función seria eno rganizational policymaking corto de withholding
afiliación dues. El personal profesional en gran parte determina las posiciones
la organización toma a asuntos” (McCarthy y Zald 1987un [1973]: 378).
Aun así, profesional SMOs no necesariamente dirigir themselfos a sus
“electores” naturales, i.e., aquellos grupos (si dispossessed como el unem-ployed
o el homeless, o bastante bien-fuera gustar en muchos nuevos de clase mediana
mobi-lizations) de quién interesa promueven, la manera un grupo de presión
normal . Rather, tienen un “conscience constituency” compuso de quienes creen
en la causa apoyan. Sus dirigentes son entrepreneurs cuyos “resultados de impacto
de sus habilidades en manipular imágenes de pertinencia y soporte a través de los
medios de comunicación de comunicación” (McCarthy y Zald 1987un [1973]:
374). Confían más
En su reputación para pericia técnica en asuntos concretos que encima masa
mobi-lization (McCarthy y Zald 1987un [1973]: 379; 1987b [1977]: 29).5
Hay ventajas reconocibles asoció con professional organizaciones. Atrás en el
1970s, en su análisis comparativo de movimientos sociales americanos, Gamson
(1990 [1975]) encontró que challengers es más probablemente para ganar cuándo
poseen una organización bien estructurada. Las organizaciones formales
aparecerían better colocados a mobilize “porque facilitan participación de masa,
táctico inno-vations, y decisión rápida-haciendo” (Morris 1984: 285). Estructuró
las organizaciones son también más probablemente para sobrevivir allende una ola
de protestar para favorecer movilización en tener éxito waves (McCarthy y Zald
1987b [1977]). Organizadores profesionales masa extendida a menudo defiance
más que humedecerlo, y “professionalization de
146 SOCIAL MOVEMENTS Y O RGANIZATIONS

Liderazgo y la formalización de organizaciones de movimiento no son


necesariamente incompatibles con hierba-protesta de raíces” (Staggenborg
1991: 154–5; también Jenkins 1985). Además, mucho tiempo-supervivencia
de plazo está favorecida por la presencia de motivos para y métodos de acción
qué es ya legitimado (Minkoff 1993, 1995; Clemens y Minkoff 2004).
Aun así, hay también problemas. Mientras las organizaciones profesionales pueden
gen-erate un flujo constante de financiar están atados por los deseos de su benefac-tors.
“El crecimiento y mantenimiento de organizaciones cuyo formales goals está apuntado
en ayudar una población pero quién dependen de una población diferente para financiar
es finalmente más dependiente al último que el anterior” (McCarthy y Zald 1987b
[1973]: 371). Patrons Proporciona recursos importantes, pero son normalmente
available sólo para grupos con reclamaciones de nivel bajo y consensual legitimidad –
el discapacitado más que los parados, por ejemplo (Walker 1991).
Las consecuencias similares pueden resultar de crecer colaboración con
authori-lazos: “El establecimiento de un laborable relatión con las autoridades
también tiene implicaciones ambivalentes para el desarrollo del SMO: Por un
lado, reconocimiento público, acceso a procedimientos que hacen decisión y
los subsidios públicos pueden proporcionar recursos cruciales y representar
éxitos importantes para el SMO; por otro lado, la integración al sistema
establecido de interés inter-la mediación puede imponer límites en la capacidad
de movilización del SMO y alienígena-comió partes importantes de su
constituency, con la consecuencia de debilitar él enel largo r un” (Kriesi 1996:
155–6; ve también Lahusen 2004)
Repitiendo Robert Michel' análisis de la burocratización de partidos socialistas,
Piven y Cloward (1977) ha sido más explícito en considerar el desarrollar-ment de
organizaciones formales cuando dificultando objetivo attainment en movimiento
de protesta-ments del pobre. Inversión en construir una organización de masa
permanente estuvo vista como residuos de recursos escasos. Además, tales
organizaciones tendieron para reducir el recurso único disponible al pobre: masa
defiance. Es ciertamente true que incluso las organizaciones burocráticas
profesionales pueden promover radicales chal-lenges y defiance, y comprometer
en varias formas de activismo vicario en behalf de una afiliación pasiva que paga
coste (ve p. ej. Greenpeace, Diani y Donati 1999). Pero organizacións centró
enteramente encima que levanta fondo y la atracción de recursos financieros
probablemente puede tarde o temprano para afrontar problemas con su capacidad
a mobilize personas (Donati 1996; Diani y Donati 1999). En general, según
críticos, professionalization might ventaja para derrotar por domar protesta (Piven
y Cloward 1977; ve también sección 9.1 y, para un argumento más ancho, Skocpol
2003).
Los mismos dilemas caracterizan un tipo organizativo aquello recientemente ha
obtenido atención creciente, el “transnacional social movement organización”
(TSMOs). Jackie Smith define TSMOs tan “internacional nongovernmental las
organizaciones comprometieron en intentos explícitos a [cambio] algunos
elementos de la estructura social y/o distribución de recompensa de sociedad”
(1999: 591), y espectáculos cómo ellos grew de 110 en 1953 a 631 en 1993 (ve
también capítulo 9 abajo). Su
SOCIAL MOVEMENTS Y O
RGA
NIZATIONS 147

El crecimiento ha superado que de internacional nongovernmental organizaciones


en grandes (Anheier y Themudo 2002). TSMOs Comprende un número pequeño
(algunos-el tiempo refirió a como “el Grande Diez”) de organizaciones con
capítulos nacionales numerosos, afiliación en los millones, y niveles fuertes de
burocratización. Estos incluyen el gusta de la amnistía Internacional (encima un
millón de miembros, formales chapters en 56 países, 7,500 grupos de acción en
casi 100 países: Anheier y Themudo 2002: 193), Greenpeace (entre 2 y 3 millones),
Amigos de la Tierra (una federación de 61 asociaciones nacionales que
coordenadas aproximadamente 5,000 grupos locales y unmilli en miembros
[Anheier y Themudo 2002: 203]), WWF (5 millones), u Oxfam (una confederación
de 12 organizaciones). Estas organizaciones muestran muchos traits de la
organización profesional, incluso aunque la participación está animada – si en gran
parte en la forma de voluntary trabajo y contribuciones a spe-cific proyectos, más
que en procesos que hacen decisión, y con niveles bajos de inversión en el edificio
de solidaridad interna. Aun así, TSMOs también incluir organizaciones con un
perfil distintivo pero mucho más pequeño en plazos de recursos, y menos
pulcramente cabiendo el modelo profesional. Ejemplos bien sabidos incluyen
ATTAC, una organización que campañas contra la desregulación de mercados
financieros, fundados en 1997 en Francia aunque ha hecho significativo inroads
en otros países Occidentales (Ancelovici 2002; Kolb 2004); ACTÚA ARRIBA,
activo desde el 1980s en desafiante las consecuencias de AYUDAS (Gould 2002);
u organizaciones de conservación como la conservación Internacional o el Fondo
de Defensa Medioambiental (Lewis 2000).

6.2.2 movimiento Participativo organizaciones

Utilizamos el plurales intencionadamente, para referir a tipos organizativos


diferentes que puede ser agrupado bajo este modelo más ancho. En particular
diferenciamos entre organizaciones de protesta de la masa y grassroots grupos.

Masa protest organizaciones

Este modelo combina atención a democracia participativa con niveles seguros de


formalización de la estructura organizativa. En los movimientos sociales del 1970s,
muchos organizaciones políticas como el comunistas K-Gruppen en Alemania, los
partidos Izquierdos Nuevos en Italia, el Trotskysts en Francia, había adoptado
bastante rígido y estructuras organizativas jerárquicas, cercanos al modelo del
Leninist partido (della Porta 1995: ch. 4; Lumley 1990). Gradualmente, aun así,
este modelo cayó fuera de favor para su énfasis excesivo en la función
revolucionaria profesional, y su indiferencia a grassroots democracia. Con la crisis
de los 1970s movimientos de protesta, las formas alternativas de organización
desarrollaron, cuando ejemplificados por el
148 SOCIAL MOVEMENTS Y O RGANIZATIONS

Aparición de partidos verdes. Estos estuvieron formados mayoritariamente


durante las 1980s campañas en asuntos medioambientales, y energía nuclear
en particular, a pesar de que nunca han sido los representantes políticos
oficiales del envi-ronmental movimiento (Rootes 1994). En buscar para
defender naturaleza, estos partidos también buscados para aplicar el “pensar
globalmente, acto localmente” principio a su organiza-tions. Los verdes
rehusaron, inicialmente al menos, cualquier poder organizativo estructurado,
tan rehusaron centralizar tecnologías. Desarrollaron un ritual de democracia
directa por introducir consensual que hace decisión, rotación de funciones de
silla, y tan encima.
El modelo de asambleas abiertas y siempre los delegados revocables no
sobrevivieron mucho tiempo, however. La democracia participativa a menudo
puede reducir la eficacia que hace decisión de asambleas y ventaja a periodos muy
largos de confusión e incerti-tude. Particularmente después de que introdujeron
primeros parlamentos regionales y entonces nacionales, los verdes empezaron para
desarrollar estructuras organizativas estables, con tarjetas de afiliación,
representante más que democracia directa dentro del partido, y un liderazgo
estable. La financiación pública de los partidos creó un flujo constante y generoso
de financiar qué solió desarrolla un professional clase política, instalado newspa-
pers y supportive asociaciones. Los partidos verdes' la estructura así devenía formal
y centralizó. La participación movida hacia excluir afiliación de otras
organizaciones, y los incentivos ideológicos empezaron a predominate.
Recientemente, aun así, grassroots las prácticas democráticas han sido revitalized
en el contexto del crecimiento de movilizaciones de justicia global, y también
extendidos a nontraditional uniones como el Cobas en Italia o Sud en Francia (ve
capítulos 2 y 9 enel pr esent volumen).
No es difícil de identificar los procesos detrás de estos cambios recurrentes. No
sólo tienen que hacer con el oligarchic tendencias para ser encontradas en cualquier
clase de organización, pero también con los problemas asociaron con el modelo de
participa-tory organizational democracia. Sinceramente, la realización concreta del
orga-nizational principios de grassroots la democracia nunca ha sido un asunto
sencillo. Muchos activistas han renegado de las oligarquías de facto qué tender
para formar e imponer su voluntad cuando decisión colectiva-haciendo deviene
difícil. Una minoría organizada puede ganar fuera en una asamblea por llevar abajo
la mayoría, y forzándoles para dejar y dejar después de horas de agotadores
discussion. En unos cuantos casos extremos la fuerza física ha sido utilizada por
algunos grupos para ocupar impor-tant posiciones que hacen decisión como la silla
de reuniones. Incluso sin lograr aquellos excesos, los riesgos de una “tiranía de
emociones,” por el cual el más comprometidos activists beneficio de la carencia de
procedimientos formales y control seguro de procesos que hacen decisión, ha sido
señalado fuera en referencia a varios movimientos del recientes y no-tan-pasado
reciente (Breines 1989: 49; Polletta 2002). También han sido reafirmados en
referencia al movimiento de justicia global (Epstein 2001; ve también sección 9.4
abajo).
SOCIAL MOVEMENTS Y O RGANIZATIONS 149

Grassroots Organizaciones

En contraste al modelo de protesta de la masa, el grassroots el modelo combina


fuerte par-ticipatory orientaciones con niveles bajos de formales structuration. La
existencia de las organizaciones de esta clase depende de sus miembros'
disposición para participar en sus actividades. Tal participación puede ser animada
a través de diferente com-binations de ideológico y solidaristic incentivos.
Oftentimes Esto está relacionado a locality. Por ejemplo, los grupos locales que
opposed edificio de carretera en muchas esquinas de Gran Bretaña en el 1990s
(Doherty 1999; Pared 1999; Drury et al. 2003) no podría confiar en un fuerte
ideological el perfil dado la heterogeneidad de su partici-pantalones, y en cambio
enfatizó compartió preocupaciones en asuntos concretos; tan hacer los ciudadanos
de asunto solo' comités que caracteriza tanta actividad política en democracias
contemporáneas (della Porta 2004c) o las asociaciones de vecinos que promueven
justicia medioambiental acción colectiva en privó cascos urbanos (Taylor 1995;
Lichterman 1995un). Otro tiempo, las actitudes críticas compartidas juegan una
función más fuerte y más explícita en participación motivadora, cuando en el
semiformal la acción directa agrupa aquello ha desarrollado en el contexto de
crecer oposición a neoliberal globalización (Doherty, Arados, y Pared 2003), o en
el local inde-pendent los grupos de las mujeres que marcados el spread de
movimientos feministas en el 1970s y 1980s (Rupp y Taylor 1987; Whittier 1995).
A pesar de su carencia de recursos, hay ejemplos innumerables de grassroots
organizaciones que ha sido exitoso en la búsqueda de sus objetivos, ambos en coun-
prueba carecer de una sociedad civil vibrante (Desai 1996; Broadbent 1998; Ray
1999) y en países Occidentales. Por ejemplo, grassroots las movilizaciones
medioambientales han probado una característica constante de democracias
Occidentales, parando proyectos amenazantes en ocasiones innumerables (Rootes
2003; della Porta y Rucht 2002). Al mismo tiempo, dependiendo tan fuertemente
en sus miembros' participación voluntaria, grassroots organizaciones' capacidad de
actuar con la continuidad con el tiempo es evidentemente limitó. Muchos de ellos
de hecho ven una alternancia de fases de activismo y latencia, com-parcapaces a
aquellos identificados por Melucci y suyos asocia (Melucci 1984un) para
movimientos sociales globalmente. Operan estructuras “tan intermitentes,” i.e.,
“organi-zations o unidades organizativas qué está desplegado y entonces “plegado
arriba” hasta su periodo de unctivity llega otra vez” (Etzioni 1975: 444, citado en
Lindgren 1987). “Organizaciones de movimiento sociales intermitentes” (Lindgren
1987), que resur-afrontar cada vez sus asuntos de preocuparse devenido temas
políticos salientes otra vez, recordarnos que establo permanente structures no es
necesariamente un requisito para éxito.
Grassroots Las organizaciones pueden también problemas de cara si confían
demasiado fuertemente encima ideología para asegurar sus miembros' cohesión y
compromiso. Ideológico incen-tives es un importante surrogate para la carencia de
recursos materiales, pero su uso
150 SOCIAL MOVEMENTS Y O RGANIZATIONS

Aumentos la rigidez del modelo organizativo porque las transformaciones


tienen que ser incorporadas al orden normativo del grupo (Zald 1970).
Además, organizations empleando los incentivos simbólicos correrán un riesgo
más grande de conflicto interno (McCarthy y Zald 1987b [1977]: 33).
Especialmente para grassroots grupos con vistas muy críticas de mainstream
sociedad, la clausura al mundo externo ayuda la formación of identidad pero
también reduce la capacidad de manejar realidad e iden-tify razones para
fracaso.6

6.3 Qué Hacer Cambio de


Organizaciones de Movimiento
Social?

6.3.1 Patrones de cambio

Tan las características organizativas de movimientos sociales varían, hay no


contabilidad de modelo solo para cambios organizativos. Un Weberian
aproximación, centrando principalmente encima burocratización, inicialmente
dominado en la sociología de movimientos sociales tan en otras áreas. Michel' “ley
de hierro de oligarquía,” el cual declara que para survive como una organización
un partido político cada vez más paga atten-tion a adaptar a su entorno más que a
sus objetivos originales de cambio social, 7 era también aguantado válido para
movimientos sociales. La institucionalización utilizó para ser considerado un
natural evolution para organizaciones de movimiento social. Vida recurrente-los
ciclos estuvieron identificados en las historias de un número de movimientos.
Herbert Blumer (1951: 203), por ejemplo, distinguido cuatro etapas en el
movimiento social típico lifecycle. El primero, o “social ferment,” la etapa sería
caracterizada por unorganized, unfocused la agitación durante qué atención grande
está pagada a la propaganda de “agitators.” En la segunda fase, de “emoción
popular,” las causas subyacentes de disgusto y los objetivos de acción son más
claramente definió. En la tercera fase, de “formalización,” coordinación y
participación disciplinadas de estrategias para conseguir los objetivos del
movimiento están llegados en por crear una organización formal. Finalmente, en la
“institucionalización” escenifica el movement deviene una parte orgánica de
sociedad y cristaliza a una estructura profesional.
Otros han cuestionado el “necessity” de tal una evolución, aun así. Incluso punto
de sociólogos organizativos fuera de aquella adaptación es sólo uno posibilidad
evolutiva entre muchos. De hecho, una organización necesita no reaccionar por
moderar sus objetivos cuándo el conflicto con el entorno circundante surge.
También pueda devenir más radical, esperando que un pequeño pero núcleo
potente de disiente formará de este modo (Jackson y Morgan 1978). Además, más
que adaptar a demandas externas sencillamente pueda reducir contactos con el
mundo exterior (Meyer y Rowan 1983). A pesar de que refiera al Michelsian
hipótesis (y enfatizó que “ hay características organizativas que dictate organiza-
SOCIAL MOVEMENTS Y O
RGA
NIZATIONS 151

tion Mantenimiento sobre cada otro objetivo posible”), Ted Lowi (1971: 31)
notó que “el fenómeno ha poco para hacer con cubicaje de objetivo. Bastante,
los objetivos de una organización han devenido outwon con la necesidad de
mantener la organización.”
De hecho, SMOs raramente conseguir institucionalizado. En primer lugar,
pocos de ellos actu-el aliado sobrevive para un período de tiempo significativo
(Minkoff 1995: ch. 3). Algunos disuelven porque sus objetivos han sido
achieved. Las organizaciones formaron para coordinar spe-cific campañas, por
ejemplo, tiende para desaparecer apenas aquella campaña es encima (Zurcher
y Curtis 1973).8 rupturas de Liderazgo durante downturns en movilización, y
los procesos resultantes de desintegración y realignment causa otros a dis-
aparecer. En el caso de SMOs, cuya expectación de vida es corta y cuyos
objetivos están limitados, un interés en la organización está continuando la
existencia ni siquiera puede desarrollar. En otras palabras,, sus miembros'
primera lealtad continúa a be al movimiento y la organización es sencillamente
visto como instrumento provisional para intervención.
Moderación de los objetivos de una organización no es, naturalmente, el
desarrollo posible único incluso para aquellas organizaciones que de hecho
sobrevive en el plazo largo. Otras organizaciones de movimiento sociales devienen
más radicales. Sus objetivos devienen más ambiciosos, las formas de acción
adoptaron menos convencionales, y devienen cada vez más aislados del mundo
exterior. Un resultado de 1968, a pesar de que ciertamente no el únicoen e, ni la
mayoría de importante, era la formación de clandestine organizaciones qué creció
fuera del movimiento estudiantil en Italia y Alemania y adoptó cada vez más
formas radicales de acción, incluyendo en algunos casos asesinando adversarios
políticos. Son un ejemplo trágico y extremo de cómo reaccionando a un entorno
hostil puede traer sobre una clausura creciente de canales de comunicación con el
mundo exterior (della Porta 1995). En menos casos extremos, grupos espontáneos
como el alemanes Spontis y el Indiani Metropolitani (literalmente, “metropolitanos
indians”) en Italia, descendencia ilegítima del movimiento estudiantil en
disminución, aumentado más que disminuyó su uso de incentivos simbólicos,
principalmente para reforzar solidaridad interna (Lumley 1990; della Porta
1996un).
La dirección tomada por un movimiento social, por tanto, puede ser que de
moder-ation, pero igualmente que de radicalization; de formalización más grande,
pero también de pro-gressive destructuration; de contacto más grande con el
entorno circundante, o de implosión “sectaria.” Uno no tiene que olvidar que
cambios en órgano concreto-izations no necesariamente todo toma la misma
dirección: la institucionalización de una organización puede estar de acuerdo el
radicalization de otro, y el perfil global of un sector de movimiento social puede
quedar relativamente estable con el tiempo como resultado. Por ejemplo, en su
análisis de cambios en organizaciones medioambientales en el 1990s, Diani y
Donati (1999) mostró que tendencias hacia institucionales-ization y
professionalization estuvo de acuerdo la aparición de nuevo grassroots actores
radicales, y aquello estableció las organizaciones habían jugado una función clave
en
152 SOCIAL MOVEMENTS Y O RGANIZATIONS

Movimientos medioambientales desde el aumento de movilización


medioambiental en el tardío 1980s.
Mapeo todos los factores posibles detrás de cambios en movimientos
sociales' orga-nizational las formas supera el alcance de este volumen (ve p. ej.
Scott 1981). Aquí centraremos encima tres determinantes de cambiar aquello
ha atraído unlo t de atención recientemente. Dejado nos mirada primero en la
función de factores institucionales (Edwards y McCarthy 2004).

6.3.2 factores Institucionales y


cambio organizativo

La disponibilidad de público o semipublic los recursos pueden facilitar la


creación de powerful lobbies con enlaces a movimientos sociales. Búsqueda
en el movimiento de derechos civil en los Estados Unidos, por ejemplo, ha
mostrado que fondos de gobierno federal y local agencias y programas como
los Programas de Acción Comunitarios o Voluntarios en Servicio to América
estimuló la creación de movimiento-ment organizaciones al mismo tiempo
como el Cuerpo de Paz y el servicio militar alternativo proporcionaron pagó
posiciones para activistas. Las condiciones que gobiernan acceso a
financiación pública y privada, exenciones de impuesto, o advantageous
índices de franqueo influ-ence la estructura organizativa de grupos quiénes
desean beneficiar de estos pos-sibilities. Por ello los plazos “financiados”
(McCarthy y Zald 1987un: 358 ss.) o “organizaciones de movimiento sociales
registradas” (McCarthy, Britt, y Wolfson 1991: 68) ha sido utilizado.
En muchos países, las organizaciones que desean acceso a una serie de recursos
materiales tiene que respetar una lista larga de leyes y controles, en primer lugar
en su estructura organizativa. En los EE.UU. estos incluyen “leyes de impuesto
federal y poli-cies y su aplicación por el Servicio de Ingresos Interno, las acciones
de coaliciones formales de fundraising grupos, Estados Unidos Controles de
Servicio Postal y sus consecuencias para acceder a los correos, las reglas y acciones
de órgano privado-izations grupos de control, la dinámica de apelaciones de
caridad combinada, y nivel estatal y local fundraising controles y su aplicación”
(McCarthy et al. 1991: 46; Andrews y Edwards 2004). En particular, “no-para-
beneficio” o “nonpar-tisan” organización status, normalmente necesario para
acceder a los recursos antes mencionados, implica la adhesión a modelos consideró
legítima para tal organi-zations, como la presencia de un cuerpo de gobernar y una
auditoría anual (McCarthy et al. 1991: 61). De este puntode vie w ciertamente,
disponibilidad aumentada de insti-tutional los recursos acentúa la presencia de
formal, centralizó organizaciones, tan americanos grupos de interés público (como
Causa Común), con miles de colaboradores y centenares de ramas locales,
demonstíndice (McFarland 1984: 61–92; Andrews y Edwards 2004; para una
perspectiva comparativa, Salamon y Anheier 1997).
SOCIAL MOVEMENTS Y O
RGA
NIZATIONS 153

La transparencia de otras estructuras institucionales también pueden favorecer


el desarrollo de organizaciones formales (Rucht 1994). En Europa, en contraste a
los EE.UU., los partidos que originan de los movimientos sociales a menudo han
obtenido resultados notables gracias en parte a las reglas que regulan challengers'
acceso a que hace decisión pro-cedures. Proporcional representation, por ejemplo,
puede promover la formación de partidos de movimiento, cuando pasados cuándo
las varias organizaciones del nuevos dejados en Italia fielded candidatos en
elecciones administrativas y políticas en el 1970s,9 o cuándo partidos verdes éxito
disfrutado in a países les gusta Bélgica, Alemania, o Italia en el 1980s (Richardson
y Rootes 1994).
Al mismo tiempo, aun así, organizaciones formales con una estructura clara no es
necesariamente el resultado de un abierto, inclusive entorno político. A menudo, formal,
hierarchical las estructuras han sido establecidas a lucha mejor un estado hostil appara-
tus. Un repressive, el estado centralizado bien puede producir bien-organizó
movimientos (Rootes 1997), con alianzas sólidas entre movimientos y organizaciones
diferentes (McCarthy y Zald 1987b), a veces con repertorios radicales de acción (della
Porta 1995). Por ejemplo, el movimiento estudiantil italiano del 1970s encontrado él
implicado en un conflicto político extremadamente polarizado. La clausura del sistema
político y frecuente físico clashes con neofascists y la policía favoreció el desarrollo de
las organizaciones centralizadas y burocráticas del nuevos dejó. Aun así, 30 años más
tarde, los acontecimientos en Genoa 2001, y el comportamiento violento de policía
incluso hacia manifestantes pacíficos, no result en una militarización de crecer del
movimiento de justicia global y en la adopción de formas organizativas convino a con-
ducting enfrentamientos violentos con policía (della Porta et al. 2005).
En cambio, un abierto, el sistema político descentralizado puede también
facilitate tendencias similares hacia descentralización e informalidad entre
movimiento organiza-tions. En Alemania, otra vez en el 1970s, y en contraste a
Italia, institucional abierto-ness (particularmente cuándo Demócrata Social Willy
Brandt era canciller) aparentemente favorecido tél proliferación de organizaciones
de movimiento descentralizado, como el Bürgerinitiativen (della Porta 1995: ch.
4). Las consideraciones similares también han sido sugeridas en relación al sector
de movimiento social americano (Rucht 1996), en contraste al hypothesis que el
sistema institucional americano tendría que ser con-ducive único a organizaciones
formales , burocráticas. A suma arriba, más que postular-ing una relación rígida
entre la forma que activistas de movimiento social dan a sus organizaciones, y el
traits de tél sistema institucional en qué operan, es más sensato de reconocer que
las formas organizativas múltiples pueden ser acomodadas dentro del mismo
sistema.

6.3.3 culturas Organizativas y cambio


organizativo
A pesar de que actores de movimiento social tienen márgenes de elección cuándo
están intentando adaptar creativamente a su entorno, tales márgenes son subject a
limitaciones.
154 SOCIAL MOVEMENTS Y O RGANIZATIONS

Tan podemos hablar de repertorios de formas de protesta (capítulo 7),


podemos hacer tan para formas organizativas (Clemens 1996). En cualquier
país dado y en cualquier tiempo dado, el repertorio de formas organizativas
está restringido. Pueda ser expandido por tomar prestado de otros países o
ámbitos, pero tal transforma-tions es lento. Un modelo organizativo particular
es más probablemente para ser adoptado, “a la extensión que el modelo
propuesto de organización está creído para trabajar, implica prácticas y
relaciones organizativas que es ya familiar, y es consonante con el
órganoization del resto de aquellos individual' mundos sociales” (Clemens
1996: 211).
Así, los recursos organizativos ya presentes dentro del movimiento social-
ment el sector tiende para influir la evolución de organizaciones solas y, más
generalmente, las formas de protest adoptó. Las organizaciones dominantes en
cualquier fase dada tienden para contribuir recursos organizativos a
movilizaciones más tardías, por ello contribuyendo también a la definición de
sus estrategias. Adoptando la terminología de la aproximación de movilización
del recurso, el SMOs creó durante una fase particular de recursos “de
fabricación” de la movilización para tener éxito fases, influyendo, o al menos
intentando para influir, su carácter (ve también capítulo 9 abajo).
Elecciones organizativas, por tanto, está influido porth e preexisting estructuras
dentro de qué forma de movimientos, heredando ideas, constreñimientos, e
instalaciones así como aliados y adversarios. Así movimientos históricos más
tempranos o “tempranos riser” movimiento-ments la ayuda produce su “espín-
offs.” Durante periodos de mobilization nuevos insur-gents asimila entradas de
existir movimientos. El movimiento estudiantil proporcionó los recursos
organizativos para la formación de grupos con objec-tives como diversos cuando
defendiendo los derechos del pobres (Delgado 1986) y aquellos de animales (Jaspe
y Nelkin 1992). De modo parecido, el movimiento de las mujeres, formado dentro
de su predecesor estudiantil, más tarde transmitiría marcos ideológicos, tac-tical
innovaciones, estructuras organizativas, y liderazgo al movimiento de paz-ment
(Meyer y Whittier 1994). Hoy, organizaciones de movimiento de justicia globales
también sorteo, si a menudo critically, en las experiencias de las organizaciones
que en el recientes y no-tan-el pasado reciente ha mobilized transnationally en
asuntos como el entorno, derechos humanos, o Thirld el mundo desarrollament
(Anheier y Themudo 2002). Con el tiempo, entonces, una clase de la memoria
colectiva en posibilidades organizativas está pasada abajo de una generación de
militantes al próximos o de un movimiento a otro: “un movimiento puede influir
movimientos subsiguientes tanto de exteriores y de dentro: por alterar condiciones
políticas y culturales afronta en los entornos externos, y por cambiar los individual,
grupos y normas dentro del movimiento él ” (Meyer y Whittier 1994: 282; Isaac y
Christiansen 2002). Por esta razón, pueda ser muy difícil de cambiar seguro inicial
organizativo traits, cuando vienen para formar una clase de genético patrimony
para organizaciones de movimiento (ve, entre otros, Panebianco 1988).
SOCIAL MOVEMENTS Y O RGA NIZATIONS 155

6.3.4 Modernización, innovación tecnológica, y


cambio organizativo

Uno también tendría que considerar la relación entre modernización y organi-


zational cambio. En términos generales, el progreso económico puede tener un
efecto beneficioso en el o ganizingcapacidad de movimientos sociales, desde
entonces “como la cantidad de dis-cretionary recursos de masa y públicos de élite
aumentos, la cantidad absoluta y relativa de los recursos disponibles al SMS
[Sector de Movimiento Social] aumentos” (McCarthy y Zald 1987b [1977]: 25).
Estos recursos incluyen tiempo y dinero, pero también libertad política, significa
de comunicación, transporte, etc. Cuando crecen, la cantidad de los recursos
disponibles para movimientos y organizaciones nuevos es también probablemente
para aumentar. Desarrollo económico, y el económico y recursos de tiempo crea,
tendría que dirigir a un crecimiento en professionalized, grupo formal-ings: “El
más grande el flujo de ingresos a un SMO, el más probablemente que cadre y el
personal es profesional y el más grande estos agrupa es” (McCarthy y Zald 1987b
[1977]: 35).
Aun así, el cambio tecnológico ha atraído la mayoría de atención de tardío,
cuando ha influido la estructura organizativa de movimientos sociales así como su
táctica. La expansión de ambos medio imprimido y electrónico de comunicación
ha permitted una “exteriorización” de costes seguros (Tarrow 1994: 143–5). Si las
organizaciones eran anteriormente requeridas para ser altamente estructurados para
conseguir un mensaje a través de, hoy un ligero uno puede ser adecuado, lo
proporcionó puede obtener atención de medios de comunicación. El impacto of el
internet en el movimiento social que organiza es beauti-plenamente ilustrado por
un autoritario, nonacademic fuente como el canadiense Secu-rity Servicio de
Inteligencia: “El internet continuará una función grande en el éxito o fracaso de
antiglobalization protests y manifestaciones. Los grupos utilizarán el internet para
identificar y publicize objetivos, solicita y animar soporte, órgano-ize y comunicar
información e instrucciones, recluta, recauda fondos, y como medios de promover
su varios individual y collective objetivos” (citados en Furgoneta Aelst y Walgrave
2004: 121).
Los sitios web operan con información, movilización, o comunitario-
orientó funciones (Rosenkrands 2004: 72–3). En el caso de antiglobalization
sitios, proporcionan una manera fácil para información a circulate no sólo a
través de listas de email pero a través de enlaces entre sitios web (furgoneta
Aelst y Walgrave 2004). Parece razón -capaz de sugerir que las iniciativas no
globales importantes del tardíos 1990s y temprano 2000s ha sido hecho posible
por el internet (Bennett 2004un: 133), incluso aun así, cuando Seattle
demuestra, es combinación de local grassroots organizando y web-difusión
de información basada aquello ha hecho el truco (Bennett 2004un: 145;
Furgoneta Aelst y Walgrave 2004: 101; ve también activistas de Seattle'
cuentas en www.wtohistory.org).
156 SOCIAL MOVEMENTS Y O RGANIZATIONS

En algunos casos, ordenador-la comunicación mediada sencillamente expande


el capac-ity para actuar de ya organizaciones sólidas como Greenpeace u Oxfam;
en otros casos, aun así, traetog redes de éter de activistas con muy informales orga-
nizational estructuras, si cualquiera. Dos ejemplos son el Cokespotlight o
McSpotlight sitios web, los cuales exponen Coca Cola registro medioambiental o
McDonald indif-ference a trabajadores' derechos y calidad alimentaria; unotro
ejemplo es la red de información independiente Indymedia, el primer sitio del cual
nació durante la 1999 campaña de Seattle, y entonces extendido para formar otras
redes, incluyendo el Euro-pean Red de Contador que conecta anarquistas y
autonomists y centri sociali (Wright 2004). En quieto otros casos, las
organizaciones concretas están creadas que no existiría sin el internet: p. ej., las
empresas Subversivas Internacionales, el cual es de hecho poco más de un sitio
web que conecta likeminded personas interested en mobilizing soporte para el
anticapitalist movimiento, sin jerárquico struc-ture de cualquier clase (Anheier y
Themudo 2002: 210).
Ha sido sugerido que cambios en ambas tecnología y las concepciones de actividad
política resultarán en el disappearance de formas organizativas tradicionales. Algunos
han acentuado la función de medios de comunicación como fuentes independientes de
organi-zational recursos. Por ejemplo, Walgrave y Massens (2000) mostrado cómo los
medios de comunicación jugaron una función autónoma importante en el éxito de la
marcha Blanca que tuvo lugar en Bruselas en 1996 a la rabia de personas de voz en las
autoridades' manejando del Dutroux pedophilia caso. Las oportunidades para la
formación de grupos de afinidad, constando de personas quiénes comparten una visión
ancha de político y social engagement, y venir junto en asuntos concretos de interés y
campañas de plazo corto, también ha sido mucho realzado por comunicación nueva
technolo-gies. Por ejemplo, comunicaciones de teléfono celular entre particulares han
sido abonadas con el éxito de las manifestaciones que en enero 2001 forzó Philippine
presidente Joseph Estrada para dimitir (Tilly 2004un: ch. 5). Para algunos críticos
radicales de la función de organizaciones políticas tradicionales, “grupos de afinidad”
(i.e., self-organizados y self-gobernando groups basó en un commonality de valores e
inter-ests) representa un importante organizando principio detrás del movimiento de
justicia global, el cual niega cualquier espacial a identidad organizativa y a
organizaciones ellos (McDonald 2002; ve también Finnegan 2003). Skeptics
Contrarrestaría, aun así, aquella afinidad agrupa' intentos de solucionar el problema de
mantener miembros' lealtad en un nonbureaucratic ventaja de manera a decisión difícil-
haciendo y finalmente inef-fective rendimiento (Gamson 1990; para un insider cuenta,
ve alasí que Klein 2002).

6.4 De Organizaciones de Movimiento a Redes de


Movimiento Social
La naturaleza de red de los movimientos sociales mucho tiempo ha sido
destacados. En unas cuantas contribuciones seminales, Luther Gerlach
señalados fuera de aquellos movimientos sociales son:
SOCIAL MOVEMENTS Y O RGANIZATIONS 157

Cooperación Carencia de cooperación


Competición
para Competitivo
Factionalism
Similar constituency Cooperación

Carencia de
Noncompetitive
competición Neutralidad
Cooperación

Figura 6.1 Patrones de interorganizational relaciones entre organizaciones de


movimiento

(1) segmented, con grupos diferentes numerosos o células en continual aumento y


disminución; (2) polycephalous, habiendo muchos dirigentes cada mandando sólo
un limitados siguiendo; y (3) reticular, con enlaces múltiples entre las células
autónomas que forman una red indistintamente acotada (Gerlach 1971; Gerlach e
Hine 1970). Recientemente cualifique su argumento por acentuar el undirected,
acéfalo, más que polycephalous, naturaleza de tales redes (Gerlach 2001).
Movimientos tan frecuentemente tomar formas de red porque las
organizaciones políticas raramente dirigen monopolizar la representación de
un complejo seguro de inter-ests y valores. Cuándo esto pasa, que normalmente
deletrea elen d de un movimiento social-ment proceso y su sustitución con
procesos organizativos. Normalmente, una multiplicidad de organizaciones
opera en los mismos asuntos y en behalf de similares, si no idénticos, proyectos
políticos y éticos. Explorando la naturaleza de las relaciones entre ellos es
cruciales para nuestro entendiendo de movimientos sociales.
Incluso aunque que construye alianza parece una opción generalmente
sensata y deseable, en práctica, aun así, interorganizational las relaciones
pueden variar markedly en ambos contenido e intensidad. Una manera para
capturar aquellas diferencias es por preguntar si las organizaciones son en
competición para el acknowledgment y soporte de la misma base social; si,
aquello es, están intentando adquirir recursos esenciales para acción por tocar
elsam e (limitado) potencial de movilización. Por combinar la presencia o
ausencia de cooperación y presencia o ausencia de competición podemos
elaborar una tipología de formas de interorganizational relaciones (figura 6.1).
Hemos ante todo para reconocer que muchos ciudadanos' organizaciones, a
pesar de en términos generales tratando problemas similares, es básicamente
implicado en una relación de neu-trality (o indiferencia) a cada cual otro, por el
cual una ausencia de cooperación corre-sponds para carecer de de competición.
Tales situaciones ocurren worganizaciones de gallina' definiciones de cooperación
de marca de los asuntos difícil, pero al mismo tiempo no tienen que competir para
miembros y soporte, porque apelan a sectores diversos de opinión pública. El
movimiento medioambiental del 1970s en Italia era close
158 SOCIAL MOVEMENTS Y O RGANIZATIONS

A este modelo. Su conservación y componentes de ecología política eran


ideolog-ically lejos bastante aparte para hacerlo difícil para ellos para cooperar
con cada otro. Esto no dirigió para chocar, however, cuando ambos sectores
eran un poco excéntricos en relación al principal, clase-basó conflictos en aquel
periodo (Diani 1995un). Los comentarios similares pueden aplicar a
ecologismo en un país con un lejano más bajo salience del izquierdo–correcto
divide gusta Gran Bretaña. ThAntes de, un sector de ecología política
difícilmente desarrollado en absoluto en el 1970s, tan nuevo los grupos
izquierdos centraban estrictamente en asuntos de clase tradicional mientras
pagando poca atención a problemas medioambientales (Lowe y Goyder 1983).
Niveles altos de competición y niveles bajos de la cooperación entre
organizaciones de movimiento es en cambio probablemente para producir
factional relaciones. En tales casos, la lucha para representar el mismo
constituency ventajas a fragmentación y sec-tarian divisiones. Cooperación
entre movimiento organizations es así obstaculizado, a pesar del proximity de
sus modelos culturales y estilos de acción. Donatella della Porta (1990) y
Sidney Tarrow (1989un) ha mostrado cómo la dinámica competitiva dentro de
los movimientos italianos finalmente produjeron resultados de este tipo ent
acabe del 1970s. La situación italiana estuvo caracterizada en aquel tiempo por
transición de modelos qué era predominantemente cooperativo, a pesar de que
también competitivo, a modelos donde la cooperación era ausente. La
reducción del potencial a mobilize jugado una función crucial en este contexto,
cuando traiga varias organizaciones a competición abierta con cada otro,
enfatizando sus diferencias ideológicas. Como resultado, el potencial para
chocar dentro áreas de movimiento crecieron (para otros casos de factional
dynamics, ve p. ej. Lichterman 1995b; Balser 1997).
Intercambios intensos entre organizaciones con diferentes naturales
constituen-cies producto noncompetitive cooperación. Organizaciones de
movimiento no están apelando al mismo mercado político pero tener, enel
mismo tim e, suficiente inter-ests y motivos para convergencia para activar
movilizaciones de junta. La cooperación es, además, limitado, a la extensión
que lo tampoco presupone ni requiere el devel-opment de un homogeneous
perspectiva o de un “fuerte” y (semi)exclusive idea de identidad colectiva.
Relaciones entre organizaciones centrales con preocupaciones diversas en el
campo de ecologista italiano en el 1980s era cercano a este modelo: grupos de
ecología política como Legambiente cooperados con conservationist groups
como Italia Nostra sin venidero a competición, inasmuch como sus fuentes
potenciales de apoyar diferido sustancialmente (Diani 1995un: ch. 5).
Dónde la colaboración desarrolla entre las organizaciones que compiten para la
misma base de soporte, situaciones which definiremos cooperación tan
competitiva ocurre. En tales casos, dos (o más) organizaciones de movimiento se
preocuparon con los mismos asuntos son entusiastas de desarrollar iniciativas de
junta, basados en definiciones compatibles de los asuntos y algún grado de
identidad; peroun t el mismo tiempo les encuentran-selves de frente a competición
mutua rígida para la misma base de soporte, y para similar
SOCIAL MOVEMENTS Y O
RGA
NIZATIONS 159

Sectores de opinión pública cuyos intereses desean representar. El resultante


model de la interacción puede ser caracterizada por un grado de
interorganizational polémico, pero aquello no dirige a un desglose de
intercambios de recurso y com-munication. La izquierda nueva agrupa cuál en
el 1970s competido para control de movimientos de juventud radical enyo taly
adecuadamente ilustrar este modelo (Tarrow 1989un; della Porta 1995); tan
hacer las relaciones entre las organizaciones de las mujeres sup-porting
derechos de aborto en los EE.UU. (Staggenborg 1991). Cuándo la colaboración
entre organizaciones tiene lugar, los lazos pueden ser grandesly instrumentales,
restringidos al intercambio de recursos para propósitos prácticos, o puede
implicar mutuo obliga-tion y una identidad compartida. Esto proporciona la
fundación para la distinción entre coalitional y el movimiento social procesa
que introdujimos en capítulo 1 (ve también Diani y Bisonte 2004). Ambos
coalitional y procesos de movimiento social generan extendió redes de
interacción entre actores sociales distintos.
Acción de movimiento social a gran escala siempre ha sido organizada en formas de
red. Los ejemplos pueden ser encontrados durante la historia de contienda moderna, de
decimonoveno-siglo clase laborable (Thompson 1963; Ansell 1997, 2001) y las
organizaciones de las mujeres (Rosenthal et al. 1985, 1997), a antiwar o antipoverty
coaliciones (Bagguley 1991; Hathaway y Meyer 1993–4; Barkan, Cohn, y Whitbaker
1995; Rochon y Meyer 1997; Lavalette y Mooney 2000), a envi-ronmental o los
movimientos de las mujeres (Philips 1991; Sawer y Groves 1994; Diani 1995un; Ansell
2003), para mencionar justo unos cuantos. Recientemente, aun así, el spread de
movilizaciones de justicia global ha hecho la función de las redes particularmente
visibles. Increas-ingly, vemos ejemplos de coaliciones que implica ambos actores
transnacionales y redes y actores locales en asuntos como protección medioambiental,
depriva-tion, o derechos humanos, por ello expandiendo la gama de formas de
transnacionales con-tention (Bennett 2004b; Rothman y Oliver 1999; Reimann 2001;
Subramaniam, Gupte, y Mitra 2003; Rohrschneider y Dalton 2002).
En muchos casos, dinámica de red queda puramente informal. A menudo,
aun así, un modelo híbrido de “organización de red” desarrolla, combinando
elementos de para-mality con aquellos apropiados a una estructura de red
suelta. En contraste a organizaciones formales clásicas, los cuales están
basados en la integración vertical de multiple unidades, el “modelo de
organización” de la red en puntos de teoría de la organización en otra manera
de coordinar actividades, basados en la independencia del solo compo-nents,
integración horizontal, flexibilidad en objetivos y estrategias, y niveles
múltiples de enteraction con la posibilidad de communitarian elementos
(Powell 1990; Podolny y Página 1998; Gulati y Gargiulo 1999). Más
frecuentemente asociado con las formas noveles de la producción introducida
por empresas como Benetton o IBM (Castells 1996: ch. 3), el “modelode
organización de” trabajo neto, cuándo está aplicado a un movimiento social
globalmente, también deja un grado más grande de speci-ficity y una definición
más concreta de objetivos que la metáfora de red (Diani 2003un).
160 SOCIAL MOVEMENTS Y O RGANIZATIONS

Red los modelos organizativos son útiles de coordinar esfuerzos alrededor de


spe-cific campañas o asuntos de política, en qué muchos activistas diferentes y
organiza-tions tiene una participación. Hacen tan mientras siendo tampoco
dependientes en las organizaciones que originalmente instalados les, ni capaces de
ejercer una función de liderazgo allende las fronteras de su ámbito concreto.
Muchas organizaciones de red son inherently provisionales – no sobreviven la
movilización concreta o campaña están supuestos para coordinar; quénunca,
algunos de ellos pueden convertir a organizaciones de pleno derecho, cada vez más
independientes de sus fundadores originales, y con una identidad distinta. Por
ejemplo, en el movimiento de justicia medioambiental del 1990s, muchos
grassroots los grupos prefirieron a coordinate a través de un informales networking
estrategia, más que confiar en la intermediación del rígido envi-ronmental
burocracias quién tuvo tan propiedad asegurada “lejos” de aquellos asuntos (Taylor
1995; Schlosberg 2002: ch. 5). Muchas organizaciones mobilizing enun t
ransnational la escala también tiene una forma de red. Los ejemplos recientes
incluyen la Lluvia-Red de Acción del bosque, aquellas campañas para proteger la
selva tropical y objetivos finan-cial los actores que respaldan proyectos
destructivos; la red de Acción Global de las Personas, aquello conecta hundrojos
de grassroots organizaciones en todo el mundo; o la Alianza para Trabajos
Sostenibles y el Entorno, aquello jugó una función pública visible en la 1999
Seattle anti-WTO manifestaciones en amistar ecologistas, activistas de clase
trabajadora, y locales community organizadores (Bircham y Charlton 2001: 271–
89; ve también Aumentó 2000 encima cruz-coaliciones de clase). El ejemplo más
visible de organización de red, aun así, es probablemente el modelo de Foro Social.
Inspirado en la experiencia del Foro Social Mundial en Porto Alegre, este modelo
entonces ha sido extendido para coordinar en una manera flexible y negociada el
mul-tiplicity de los actores implicaron en campañas de justicia global en el
continentales, nacionales, y niveles locales (ve capítulo 9 abajo para una discusión
minuciosa).
Just Para hacer la diferencia clara: hablamos de “organizaciones de red” en ref-
erence a relativamente formas organizativas acotadas como la Red de Contador
europea o la Red de Acción del Clima (Waddell 2003), definido por el interés en
asuntos concretos o por una perspectiva cultural distinta; pero también hablamos
de netos-trabajos en referencia a movimientos enteros, como el movimiento de
justicia global o el movimiento medioambiental. Cualquier manera, muchos mucho
tiempo han considerado red flexible y descentralizada formas de organizar uns
particularmente eficaz en conseguir los objetivos de protestors. La capacidad de
coordinar acción y promover junta cam-paigns facilita la difusión de protesta, y
aumenta la pertinencia de temas seguros en el orden del día político y las
oportunidades de diseminar nuevas inter-pretations de conflicto político y social.
La existencia de un número significativo de aliados aumenta las posibilidades de
éxito para los grupos que promueven protesta (Laumann y Knoke 1987: 387;
Knoke 1990un: 208). Enlaces de red también marca movement las organizaciones
mejores equipados para tratar las emergencias y las amenazas que provienen su
entorno. En particular, tales estructuras tendrían que evitar el peligro de sup-
pression por adversarios (tanto más fáciles cuándo el liderazgo está concentrado en
un
SOCIAL MOVEMENTS Y O
RGA
NIZATIONS 161

Pocas personas), maximize adaptabilidad, dejar el escalation de acción por


distribuir los efectos de las actividades de un grupo a todo de ellos, promueve
innovación, y reducir el efecto negativo de failures (Gerlach 1971). Una
organización de red también deja alguna clase de mediación entre el participativo
ethos detrás hierba-las raíces que organizan y la coordinación guaranteed por
estructuras formales.
Por otro lado, los problemas asociaron con este modelo – así como con varias
formas de coalición – también ha sido destacado. Por ejemplo, suelto neto-los
trabajos aumentan los recursos disponibles a organizaciones de movimiento social
pero también el peligro de conflicto interno, ambos entre unidades organizativas
diferentes und facciones ideológicas diferentes (Kleidman 1993: 39–40). En
general, la vida de muchas organizaciones de red es más corta y menos estable – si
a menudo muy eficaz a corto plazo – que que de las organizaciones que adoptan
formas más burocráticas. Para caso, Jubilee 2000, una red qué originado en el
Reino Unido en 1996 y entonces extendido en todo el mundo, y qué campañas para
anulación de deuda, recogió aproximadamente 24 millones de firmas encima uno
petition, pero fallado para asegurar la cohesión del dif-ferent componentes delne
twork. En el temprano 2000s caiga aparte y estuvo reemplazado por Caer la Deuda
y otras organizaciones que actúan en asuntos similares, todavía con un altogether
impacto más limitado (Anheier y Themudo 2002: 192–3).

6.5 Resumen

Las organizaciones comprometieron en sociales movements a menudo ha sido


descrito tan loosely estructurado, descentralizado, y prone para comprometer en
retos políticos contenciosos o countercultural prácticas. Aun así, la búsqueda ha
mostrado que, en realidad, una pluralidad de modelos organizativos co-existir
dentro de cualquier movimiento social. Las organizaciones difieren, a veces a un
grado muy alto, en su respuesta a dilem-mas como si centrando en la movilización
de personas u otros tipos de recursos, adoptando alguna clase de jerarquía formal
o un totalmente informal struc-ture, apuntando sus esfuerzos en adversarios o
también proporcionando servicios y vida oppor-tunities a sus electores propios. En
este capítulo presentamos un número mínimo de modelos básicos, fuera de muchos
más aquello podría ser identificado: el profes-sional social movement organización
y el movimiento participativo organiza-tion (más específicamente, dos versiones
de él, la organización de masa y el grassroots organización, aquello difiere en
niveles de burocratización).
Más tarde, mostramos que ni siquiera la evolución de tancial movimiento
organiza-tions es unidireccional: algunas organizaciones devienen
institucionalizadas, torneado ellos a interés o partidos políticos grupos; otros
devienen más radicales y vuelta a formas violentas de acción; algún anuncio de
vuelta e implicarles-selves en el mercado; aún así otros giran inward, deviniendo
similares a sectas religiosas. Otra vez, más que buscar leyes generales o todo
abarcando cuentas, identificamos algunos factores probablemente para afectar
cambio organizativo: en particular, el
162 SOCIAL MOVEMENTS Y O RGANIZATIONS

El impacto de las oportunidades ofreció por las configuraciones del sistema


político; el peso de culturas organizativas; y la función de cambio tecnológico, más
notablemente, el spread de informatiencima y tecnología de comunicación.
En la parte final del capítulo, hablamos la naturaleza de formas de red de
organización como útil corrective a las deficiencias de ambos formales y
modelos organizativos sueltos. A pesar de que siempre presente en historia
contemporánea, aquellas formas han probado particularmente adecuadas de
coordinar y movilización de soporte en la justicia global y otros movimientos
transnacionales.
7
FORMAS de ACCIÓN,
REPERTORIOS, Y
CICLOS DE PROTESTA

Noviembre 30, 1999. Seattle, una ciudad qué, gracias a Microsoft, ha


devenido emblemático de la Economía Nueva, vio algunos 50,000 protesta
de manifestantes contra el tercer WTO la conferencia reunió para lanzar la
Ronda de Milenio, una serie nueva de negociaciones apuntó en mercado
creciente liberal-ization, en particular de inversión y servicios públicos. La
protesta se había apellidado para unos cuantos meses antes de que en Geneva
por un comité de órgano-izations de varios fondos que hubo ya
(exitosamente) mobi-lized para impedir el fichaje de the Multilateral
Acuerdo encima Inversión (MAI). Cuando con el MAI, el WTO las
negociaciones estuvieron criticadas para restringir-ing estados individuales'
poder de intervenir en asuntos sociales y medioambientales en el nombre de
comercio libre. Ningún menos que 1,387 grupos (incluyendo NGOs,
sindicatos, ecologistas, y un número de organizaciones religiosas de varias
afiliaciones) firmó la llamada para demostrar contra el Millen-nium Ronda.
Miles de reuniones en muchos países y una campaña de información global
estuvieron organizados para preparar para las protestas. Los manifestantes
marched a eslóganes como “el mundo no es para venta”; “Ninguna
Globalización Sin Participación”; “ Somos Ciudadanos , No Sólo Con-
sumers”; “WTO = Capitalismo sin Conscience”; “Comercio: Limpio, Verde
y Feria.”
From La mañana del muy primer día, una serie de sentar-ins, coordinado
por la Red de Acción directa (DAN), paró la mayoría de los 3,000 delegados
de 135 países de lograr la ceremonia inaugural. Organizado a “la afinidad
agrupa” única loosely enlazó with cada cual otro, algunos 10,000
manifestantes sentaron ligados juntos en cadenas en la tierra, utilizando tan-
cerradura “llamada abajo” y “técnicas” de trípode que hizo el trabajo de la
policía en sacar el blockages más difícil (Herrero 2000). Cuándo la policía
llegó para aclarar las calles que dirigen a la cumbre, los manifestantes
hicieron ningún movimiento para resistir pero aplicó la táctica habían
aprendido durante cursos
164 UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST

En nonviolence. En las calles de Seattle, thronged con teatro y bandas


musicales grupos, activistas de Greenpeace aparecieron con los
preservativos gigantescos que aguantan la Práctica “de leyenda Comercio
Seguro,” mientras los labradores franceses dieron fuera algunos 250 kilos de
queso de roquefort, tema a deberes de aduana en los Estados Unidos, en una
teta-para-tat medida contra la UE restrictive legislación en contra “ternera
de hormona.” Activistas de Jubilee 2000, una coalición de grupos
(incluyendo muchos religiosos-basó unos) de quién objetivo era para
cancelar tercer-deuda extranjera mundial, enlazó arriba en una cadena
humana. Una marcha masiva se apellidó por el AFL-CIO (Federación
americana de Trabajo–Congreso de Organizaciones Industriales) mobilizing
encima 20,000 trabajadores, en particular dockers y trabajadores de servicio
público, reclamando en todo el mundo aplicación de trabajadores' derechos.
Granja-trabajador organizationes banded junto con activistas de consumidor
y ecologistas para reclamar que productos alimentarios ser mantenidos fuera
de acuerdos de liberalización en el nombre de precaución.
Más de 200 manifestantes vistieron tan tortugas de mar – un
endangered especie – vagó through la multitud con la tarea de
troubleshooting cualquier violencia. Cuando Ben White, diseñador de
los trajes coloridos y un activista con el Proyecto de Restauración de
Tortuga de Mar, explica: “Desde el alborear de tiempo, las tortugas
siempre han sido un símbolo de cordura. Ellos nunca lucha, no utilizan
violencia. Les representamos y tenemos que ser su voz . . . Cualquiera
quién actúa agresivamente, incluso si es sólo vocal, tiene que tomar su
traje fuera . . . No somos sólo nonviolent nosotros, somos también contra
el uso de violencia por otros. Wherever Las tortugas encuentran
violencia intentan hacer paz” (en Reimon 2002: 73). En los flecos de las
manifestaciones, aun así, los grupos pequeños giraron violentos,
rompiendo las ventanas de las tiendas que tratan en productos de
multinacional como Nike, Levi es, unnd McDonald es, acusado de
utilizar trabajo de niño o unhealthy productos. Antes de los anarquistas
empezaron para averiar propiedad, la policía dio un paso en en masse
contra el nonviolent blockages, desplegando gas de lágrima y espray de
pimienta (Herrero 2000: 13; también Morse 2001). After Las autoridades
locales declararon un curfew, los bloqueos y la policía cobra continuados
para tres días y noches hasta el intergovernmental la cumbre rompió
arriba sin cualquier acuerdo habiendo sido logrado. Entre las 600
personas arrestaron era activistas de Globales Exchange quién había
utilizado sus pases para conseguir a la ceremonia inaugural y habló del
podio al pocos delega quién había dirigido entrar, criticando el WTO. Un
petition el ser circulado sobre el internet en protesta contra la carencia de
trans-parency de las charlas dirigieron reunir en justos 24 horas las
firmas de 1,700 grupos de varias clases, muchos del mundo Del sur
(Kaldor 2000: 112).
UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST 165

Seattle ha sido definida como punto de inflexión pero también el punto culminante
de un aggre-gation el proceso que implica los grupos y las organizaciones activos
en países en todo el mundo: trabajadores de cuello azul y trabajadores de granja,
consumidores y ecologistas, iglesias y feministas, pacifistas y humanos-derechos
associationes. De hecho incluso antes de que Seattle, heterogéneo e inicialmente
loosely conectó los grupos hubieron mobi-lized juntos, principalmente contra
organizaciones internacionales, utilizando diferentes strate-gies: de cabildeo a
marchas, de boicots a petitions, de huelgas a netstrikes. En Seattle y después,
manifestantes de muchos países chal-lenged la legitimidad de las decisiones de
algunas organizaciones gubernamentales internacionales y buscados para
obstaculizar sus planes. No hicieron tan a través de canales diplomáticos normales
o a través de elecciones. Bastante, buscaron a influ-ence opinión pública en varias
maneras.
De hecho, cuando veremos en sección 7.1, una característica de protesta es su
capacidad a mobilize opinión pública a través de unorthodox formas de acción y
tan puesto pres-seguro on decisión-fabricantes. El esbozo breve dado encima de la
protesta en Seattle describe una serie de acciones diferentes qué, tomados juntos,
formar qué definiremos en sección 7.2 como repertorio de acción colectiva. En
sección 7.3 la justicia global movement será referido a para ilustrar aquella táctica
muy dif-ferent en plazos de su radicalismo y la “lógica que” les conduce co-existir
dentro de repertorio contemporáneo de protesta. Para actores de movimiento social,
elecciones con-cerning las formas de acción para adoptar son importantes pero
decisiones difíciles, involv-ing cálculos estratégicos pero también consideraciones
de valores y cultura. De hecho, cuando veremos en sección 7.4, el necessity a
simultáneamente dirigir tipos diferentes de públicos crea un número de tactical
dilemas. Además, tales elecciones están influidas ambos por variables internas y
por interacciones con otros actores (sección 7.5), interior así como fuera de
fronteras nacionales (7.6). El mutable carácter de estas ventajas de decisiones, en
sección 7.7, a un análisis del cyclical dinámica de protesta y la naturaleza de
cambios con el tiempo.

7.1 Protesta: Una Definición

En la protesta en Seattle y después, activistas marched y arregló bloqueos; había


conciertos y vigils. Las personas fueron alrededor enmascaradas tan casi tortugas
extintas; otros llevaron máscaras negras. Ocuparon espacios reales y virtuales. Qué,
entonces, todo estas acciones haber en común? En primer lugar, son formas de
protesta: i.e. nonroutinized maneras de afectar político, social, y cultural processes. De
hecho, “los movimientos sociales emplean métodos de persuasión y coercion cuáles
son, más a menudo que no, novela, unorthodox, dramático, y de cuestión-legitimidad
capaz” (Wilson 1973: 227). Las protestas son sitios “ de contestation en qué cuerpos,
símbolos, identidades, prácticas, y los discursos suelen perseguir o impedir cambios en
relaciones de poder institucionalizado” (Taylor y furgoneta Dyke 2004: 268).
166 UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST

Según los principios de democracia representativa, las decisiones de un


gobierno pueden ser desafiadas inmediatamente por la oposición parlamentaria o
castigó posteriormente por las elecciones de votar de ciudadanos en elecciones.
Aparte de intervención militar, los canales para ejercer prensaure en un gobierno
extranjero incluye negociaciones o diplomacia bilaterales en uno del muchos
internacional gov-ernment organizaciones (IGOs). Aun así, particularmente desde
el 1970s, aumentando los números de ciudadanos han venido para afirmar la
legitimidad de otro params de pres-seguro en gobiernos. Cuándo afrontado con las
leyes o las decisiones consideraron para ser unjust estos ciudadanos adoptan formas
de acción que el reto estableció normas. Especialmente del 1960s encima, un
“conjunto nuevo de actividades políticas ha sido añadido al citi-zens' repertorio
político” (Barnes et al. 1979: 149).1 De hecho, los investigadores añadieron una
lista larga de nuevo y unconventional formas de participación política – incluyendo
fichaje petitions, manifestación lícita, boicots, withholding de alquiler o impuesto,
ocupaciones, sél-ins, bloqueando tráfico, y huelgas de gato montés – al más
tradicionales unos, como política siguiente en los diarios, hablando política con
otros, trabajando para partidos políticos o sus candidatos, atendiendo reuniones
políticas, con-tacting oficiales públicos, o persuadiendo amigos y acquaintances
para votar en par-ticular maneras. Estas formas más nuevas han devenido cada vez
más legitimized: “En las sociedades industriales adelantadas dirigen técnicas de
acción política no de hecho aguantan el estigma de deviancy. Ni are ellos vistos
tan antisystem-orientación dirigida” (1979: 157).
Esta expansión del repertorio de participación política apareció para ser una
“característica duradera de públicos de masa democrática” (1979: 524). De hecho,
más de dos décadas más tarde, Pippa Norris (2002: 221) observó, en las bases de
encuestas de Encuestas de Valor Mundiales, que “ hay muchos razona para creer
que el cambio de tradi-tional grupos de interés a movimientos sociales nuevos ha
influido las agencias, repertorios, y objetivos de participación política . . . El
análisis de protesta pol-itics espectáculos que muchos de estas formas de actividad,
como petitions, demonstra-tions, y boicot de consumidor, es bastante dominante y
ha devenido cada vez más popular durante décadas recientes. Política de protesta
es en el aumento como canal de polit-ical expresión y movilización.” Según Norris
dato (2002: 197), en “democracias más viejas” 60.7 por ciento de la población han
firmado un petition, 19.1 por ciento han atendido una manifestación, y 17.1 por
ciento han unido en boycotts. En ocho postindustrial sociedades (Gran Bretaña,
Alemania Del oeste, el Netherlands, Austria, los Estados Unidos, Italia, Suiza, y
Finlandia), el porcentaje de quienes han firmado petitions aumentó de 32 en el mid-
los años setenta a 60 en el mid-nineties; de quienes habían demostrado, de 9 a 17;
de quienes participaron en chico-cotts de 6 a 15, de quienes ocuparon edificios de
1 a 2, quienes participaron en huelgas oficiosas de 2 a 4 (ibid.: 198).
Una característica importante de protesta es el uso de canales indirectos a influ-
ence decisión-fabricantes. Cuando Michael Lipsky notado (1965), la protesta es un
recurso político del impotente. Los acontecimientos que sacudió los Estados
Unidos en el 1960s
UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST 167

Recompensas
simbólicas

Medios
de
comunica
Protesta Referencia
Dirigentes ción
constituency Público

Recompensas Objetivos de protesta


materiales

Figura 7.1 El proceso de comunicación de Fuente de


protesta: Adaptado de Lipsky 1965: 163–82.

– De la “campaña de Verano” de la Libertad para registrar votantes negros en el


Del sur-ern estados, lanzados por activistas de derechos civiles en 1964, a la
“Marcha encima Lavando-tonelada” en soporte de minoría étnica derechos civiles
– todo tuvo algo en común: “ estuvieron comprometidos en por relativamente
podermenos grupos; y dependieron para éxito no a utilización directa de poder,
pero a activar otros grupos para introducir el arena político. Porque la protesta es
exitosa a la extensión que otros partidos están activados a implicación política, es
uno de las pocas estrategias en qué incluso políticamente empobreció los grupos
pueden aspirar para comprometer” (Lipsky 1965: 1). De hecho, en Seattle las
personas que participó en las manifestaciones les sintieron-selves para ser los
“perdedores” de económicos neoliberal políticas. Incluso si no exactamente
“impotente,” las uniones, NGOs y grassroots agrupaciones que lanzó la protesta
era outsiders (o, en Tilly palabras, challengers) en una política mundial donde
representantes de IGOs, naciones potentes, y las empresas grandes son insiders.
Protesta, entonces, conjuntos en movimiento un proceso de la persuasión
indirecta mediada por medios de comunicación de masas y actores potentes.
Cuando figura 7.1 sugiere, los actores impotentes tienen que mobilize el soporte
de grupos más potentes. De hecho, protesta mobilizes una variedad de actores.
Aquellos directamente interested en las decisiones políticas comprenden una
protesta constituency. De este constituency un liderazgo emerge para dirigir acción
y mantener relaciones externas. Los medios de comunicación de masas extiende su
mensaje, un mensaje dirigido en el primer caso en la referencia public de la
decisión-fabricantes. El último es los objetivos ciertos de protesta. Para tener éxito,
la protesta tiene que producir estímulos positivos, ganando las compasiones de
quienes tienen más recursos para invertir en los arena donde las decisiones están
tomadas. Mientras colectivo unction por grupos quién ya posee el poder puede ser
apuntado directamente en decisión-fabricantes, el mosto impotente busca para
implicar quienes tienen la posibilidad de influirles. Además, la influencia ejercida
por los movimientos sociales pueden ser cualquier positivos, creating compasión
para su causa, o negativo, acechando (para
168 UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST

Ejemplo) para crear desorden. Esto es por qué las características de los medios
de comunicación de masas, y de canales de comunicación en general, es
particularmente pertinente para movimientos sociales: su capacidad de dirigir
la opinión pública es de hecho un crucial compo-nent de su acción.
Los movimientos sociales ciertamente no utilizan protesta sólo y no tiene
un monopolio encima protesta. Otros actores, como presión o partidos políticos
grupos, también uso de marca de acción de protesta y ocasionalmente alianzas
de marca con movimiento social-ments para campañas particulares. Aun así,
protesta (particularmente en su más inno-vative y radical) ha sido considerado
una forma de la acción típicao f movimientos sociales porque, a diferencia de
presión y partidos políticos grupos, tienen menos canales a través de qué para
acceder decisión-fabricantes. Las formas de acción son particu-larly
importantes para ellos desde entonces los movimientos sociales son “a menudo
recordados más para el methods de la persuasión adoptada por ellos que para
sus objetivos” (Wilson 1973: 226).

7.2 Repertorios de Acción

Las marchas, boicots, ocupaciones, y otras formas de la acción utilizada en el cam-


paigns para la justicia global tiene algo más en común. Son toda parte de un
repertorio moderno de acción colectiva, definido como el “conjunto entero de
medios [un grupo] tiene para hacer reclamaciones de tipos diferentes en individual
diferente” (Tilly 1986: 2). Charles Tilly ha hecho una contribución importante al
estudio de col-lective acción por identificar las diferencias en tipos de acción
contenciosa2 en par-ticular periodos históricos. La protesta era ciertamente no
unheard de con anterioridad a la formación de la nación-estatal: los campesinos
quemaron abajo molinos en protesta contra aumentos en el precio of pan; los temas
acicalaron para simulados su sup-eriors; los funerales podrían ser convertidos en la
ocasión para denuncias de injusticia.3 La táctica adoptada por protestors variado
de la utilización de música y símbolos irreverentes (cuando en charivari) a field
invasiones y seizure de grano. Aun así, ellos todo tuvo dos características en
común: “En términos generales hablando, el repertorio del mid-decimoséptimo al
mid-decimonoveno siglo tuvo un parochial alcance: dirija actores locales o los
representantes locales de actores nacionales. Él también confiado fuertemente
encima que apela patronaje a inmediatamente titulares de poder disponible para
transportar grie-vances o resolver disputas, temporalmente actuando en el sitio de
indigno o inactive titulares de poder sólo para abandonar poder después de la
acción” (Tilly 1986: 391–2).
Las formas tomadas por la acción colectiva empezó para cambiar en el
decimonoveno siglo cuándo el viejo parochial y patronaje-el repertorio
dependiente estuvo reemplazado por uno cuál era nacional (“aun así disponible
para enemigos y asuntos locales, se deja fácilmente a coordinación entre
muchos localities”) y autónomo (“en vez de quedarse en la sombra de existir
titulares de poder y adaptando las rutinas sancionaron por ellos, las personas
que utilizan el repertorio nuevo tiende
UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST 169

Para iniciar sus declaraciones propias de quejas y demandas” – Tilly 1986: 391–
2), implicando acciones como huelgas, rallys electorales, reuniones públicas,
petitions, marchas, insurrección, y la invasión de cuerpos legislativos. Ent él
pasado, assem-blies convergido en las residencias privadas de los enemigos de la
multitud, mientras que hoy el prefirió los objetivos son los asientos y símbolos de
poder público nacional (Tilly 1986: 392–3). El repertorio más viejo tendió para
utilizar el mismo tipo de acción como el unuthorities, cualquiera en la forma de
caricatura o sustitución provisional; el nuevo uno inventó formas autónomas. Las
personas utilizaron para participar en el repertorio tradicional de acción colectiva
como miembros de preconstituted comunidades, mientras que hacen tan tan
representatives de intereses particulares en el modernos reper-toire. El repertorio
viejo aprovechó ocasiones o celebraciones oficiales; el nuevo implica la
organización deliberada de asambleas y ocasiones para acción. Esta transformación
en la forma de protestar seguido de la creación de la nación-estatal, el desarrollo
de capitalismo, y la aparición de medio moderno de comunicación. Cuando Tilly
(1986: 395–6) lo pone:

Cuando el capitalismo adelantó, los estados nacionales devenían más potentes y


asuntos locales centralizados y cercanos patrons importó menos a los destinos de
personas normales. Cada vez más, titulares de las capitales grandes y el poder
nacional hicieron las decisiones que les afectó. Como resultado, seizure de grano,
invasiones colectivas de campos y el gusta deveníaen eficaz, irrelevante,
obsoleto. En respuesta a los cambios de poder y capital, las personas normales
inventadas y formas nuevas adoptadas de acción, creando la campaña electoral,
la reunión pública, el movimiento social, y el otro ele-ments del más nuevo
repertoire.

El repertorio nuevo respondió por tanto a una situación nueva en qué política
era cada vez más nacional en carácter, la función de comunidades asociación
disminuida y organizada spread, particularmente entre el laboring clases (Tilly
1984b: 309). Hay otra característica propio del repertorio moderno además su
escala nacional y carácter autónomo: su calidad modular, i.e. la posibilidad de ser
utilizado por una variedad de actores para conseguir una variedad de objetivos. En
tradicional societies el repertorio era concreto, directo, y rígido: “En una sociedad
dividida a órdenes, aislados por carencia y comunicación pobres de alfabetización
y organizado a grupos corporativos y comunales, sea raro de encontrar formas de
col-lective la acción distinta del conflicts aquello dio aumento a ellos” (Tarrow
1994: 35). La consolidación de la nación-estatal, la expansión del medio de com-
munication (si carreteras o diarios), y el crecimiento de privado associa-tions
favoreció en cambio el desarrollo de un nuevo, general, flexible, y repertorio
indirecto. Esto en su vuelta facilitó la difusión de protesta y el mobiliza-tion de
grupos nuevos y diversos dentro de la población.
Según Tilly y Tarrow, el repertorio moderno qué emergido con la Revolución
francesa hcuando cambió poco desde entonces. Boicots, barricadas, petitions,
170 UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST

Y las manifestaciones son todo presente quieto (y de hecho probablemente


dominantes) en el panorama de protesta. Aun así, si miramos atrás enth e ejemplo
que abrió este capítulo, un número de elementos nuevos puede ser identificado –
elementos que puede ser explicado por transformaciones en el muy las
características aguantaron para ser esenciales para la aparición del repertorio
moderno. Primero, el capitalismo desarrollado de nación-estatal-basó industrias a
empresas de multinacional. Segundo, mientras la nación-estatal ciertamente ha
desaparecido no, es ahora flanked por sub- y supra-las entidades nacionales que
poseen poderes crecientes (ve capítulos 2 y 9 en el volumen presente).
Mobilizations Como el en Seattle es transnacional en naturaleza. Tercio, medios
de comunicación nuevos como televisivos, pero especialmente más recientemente
fax, teléfonos celulares, y el internet, ha transformado las ambiciones y capacidad
de comunicación de movimientos sociales. Enpar ticular, el internet está explotado
para actos y movilización on-line de disentir: el plazo “electrónico advocacy”
refiere a “el uso de tecnología alta para influir el proceso que hace decisión, o al
uso de tecnología en un esfuerzo para apoyar política-esfuerzos de cambio” (Hick
y McNutt 2002: 8). También, en parte gracias al internet, las campañas
transnacionales han crecido más largas, menos centrally controlados, más difíciles
de girar encima y fuera, y para siempre mutable en plazos de redes y objetivos
(Bennett 2003).

7.3 Las Lógicas y Formas de Protesta

Los ciudadanos y organizaciones opposing neoliberal la globalización hizo tan en


una variedad de maneras. Primero, las formas de la acción presentada a principios
del capítulo era más o menos radical en naturaleza, variando de más convencional
petitioning a más conflictual bloqueos, e incluyendo un número de episodios de
violencia. Búsqueda de encuesta de la opinión ha ordenado forma de participación
en un solo continuum de menos a la mayoría de extremo, singling fuera de varios
umbrales: “El primer threshold indica la transición de convencional a
unconventional política. Firmando petitions y participando en las manifestaciones
lícitas son unorthodox actividades políticas pero todavía dentro del bounds de
normas democráticas aceptadas. El segundo umbral representa el cambio a técnicas
de acción directa, como chico-cotts. Un tercer nivel de actividades políticas implica
ilegal, pero nonviolent, actos. Huelgas oficiosas o una ocupación pacífica de un
edificio typify este paso. Finalmente, un cuarto umbral includes actividades
violentas como daño personal o daño físico” (Dalton 1988: 65).
Segundo, a pesar de que las formas de acción adoptaron concentradas en gran
medida en el sistema político, tenga que ser notado que movimientos uso hecho
también (a dif-fering degrees) de las estrategias culturales apuntaron en cambiar
sistemas de valor. Mientras las estrategias políticas buscan, sobre todo, para
cambiar realidades externas, las estrategias culturales buscan una transformación
de interior. Tan ya notado, algunos los movimientos sociales están dirigidos
principalmente a value sistemas, mientras otros concentran en el políticos
UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST 171

Sistema (por ejemplo, Rucht 1994). Además, movimientos ellos alterna entre
fases de más grandes “politicization” y retiro a countercultural activ-ity
(Melucci 1984un; encima Italia, della Porta 1996un). Además, ambas
estrategias culturales y políticas son también caracterizadas por grados
variables de extremeness, variando de moderados subcultural evolución a
radical countercultural chal-lenge en el primer caso y de negociación a
confrontación en el segundo (Rucht 1990un).
Aun así, cuando buscaremos para demostrar más plenamente en lo que
sigue, formas de la acción también puede ser distinguida según la “lógica,” o
modus operandi, el cual los activistas les asignan.

7.3.1 La lógica de números

La lógica de números, a qué James DeNardo refirió en Poder en Números (1985),


underlies formas numerosas de protesta. Desde entonces “allí siempre parece para
ser poder en números” (1985: 35), un movimiento destiny depende a una extensión
grande en el número de sus seguidores. Tan DeNardo notas, la “medida de los
disidentes' las manifestaciones afecta el régimen tanto directamente e
indirectamente. Naturalmente el dis-ruption de aumentos de rutinas diarias con
números, y el regime capacidad de controlar las multitudes inevitablemente padece
tan crecen más grandes. Además del immedi-comió disrupción causan,
manifestaciones por su medida también da el régimen una indicación de cuánto
soporte los disidentes disfrutan” (1985: 36). Tan political intento de partidos para
aumentar el número de electors quiénes les apoyan y pres-los grupos seguros
buscan a maximize el número de sus partidarios, los movimientos sociales tendrían
que buscar a mobilize el número más grande de los manifestantes posibles.
De este punto de vista, posiciones de protesta en para elecciones. La lógica
detrás es el mismo tan aquello detrás de democracia representativa:
implementación del importante-ity decisiones. La protesta sirve para dibujar
la atención de eligió representantes al hecho que, al menos en certaen asuntos,
la mayoría en el país no es igual como la mayoría en parlamento. Así, el miedo
de perder el soporte electoral tendría que empujar los representantes de las
personas a cambiar su posición, realigning les-selves con el país “en grande.”
Marches es uno de la táctica principal diseñó para demostrar la fuerza numérica
detrás protesta. La manifestación de Seattle empezó una ola nueva de “pol-itics en
la calle” con marchas grandes que había parecido justo una memoria del pasado.
Las manifestaciones grandes están organizadas durante countersummits, definidos
como arena de “iniciativas de nivel internacional durante cumbres oficiales y en
los mismos asuntos pero de un críticos standpoint, aumentando concienciación a
través de protesta e información con o sin contactos con elo fficial versión” (Pianta
2002: 35). Después de que algunos experiencias preliminares en el 1980s,
countersummits multiplicó sobre la década de tener éxito, simultáneamente con
conferencias de ONU de escala grande,
172 UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST

supported Por el frenetic activismo de NGOs aquello reclamó para representar


no sólo sus centenares de miles de miembros, pero más generalmente los
intereses de bil-leones de ciudadanos sin una voz pública. Los millones de
personas unieron el interna-tional día de protest contra la guerra de Iraq encima
febrero 15, 2003 (della Porta y Diani 2005; Waalgrave y Rucht próximo).
Petitions (Así como referéndums) es también utilizado para demostrar el
numeri-cal fuerza de soporte para movimientos. En los años ochenta, petitions
y demands para los referéndums estuvieron presentados en todo de los países
afectó por el desplegar-ment de crucero y pershing misiles. Los millones de
firmas estuvieron recogidos en Italia, el Netherlands, Alemania, y los Estados
Unidos. En 1984 y 1985, paci-grupos de puño en un número de países europeos
sugirió que garantías de demanda de los votantes encima asuntos de paz de los
candidatos electorales de todos los partidos. En el nineties, la campaña dirigida
por Jubilee 2000 recogió 24 millones de firmas bajo un petition preguntando
para caer la deuda de los países más pobres (Anheier y El-mundo 2002). El uso
de petitions ha sido facilitado por el internet: transna-tional campañas en contra
empresas de multinacional como De Cervezas, Microsoft, Monsanto, Nike,
etc., corrido especialmente vía on-line petitions, con la colección de firmas vía
mailing listas y sitios web.4
Netstriking También sigue una “lógica de números,” y es otra forma de protesta
on-line aquello ha proliferado en años recientes entre organizaciones radicales
como “práctica virtual pararea l conflictos” (según la asociación StranoNetwork:
ve Freschi 2000: 104; della Porta y Mosca 2005). Un netstrike es “comparable a
una procesión física que ocupa una carretera para hacerlo inaccesible” (www.net-
strike.it). Netstriking Consta de unl arge número de las personas que conectan
simulta-neously al mismo ámbito en un prearranged tiempo, para “mermelada” un
sitio consideró un objetivo simbólico, y para hacerlo imposible para otros usuarios
para lograrlo. La movilización y su motivación son normalmente communicated
por adelantado al dueño del sitio apuntado por el protestors. Cuándo un netstrike
es en progresar on-line protestors activar un canal de comunicación (generalmente
una charla-línea o un mailing-lista) para coordinar su acción de protesta.
Netstriking Puede accom-pany nonvirtual protesta que idealmente enlaza entornos
off-line y on-line – para caso, un netstrike estuvo promovido contra el WTO sitio
web durante las protestas en Seattle (T. Jordania 2002). Similar al netstriking, pero
menos utilizado, es correo-bombing, el cual consta de enviar emails a un sitio web
o un servidor hasta que sobrecarga y consigue jammed.
La lógica de números es coherente con los principios de representativos democ-
racy: un intento está hecho para influir opinión pública, el repositorio final de polit-
ical poder. Dado que los manifestantes son también votantes, está supuesto que
sus representantes cambiarán su posición más que arriesga no siendo reeligió. Aun
así, el bombardeando de Iraq por la coalición de guerra internacional dirigida por
el americano administration, en defiance de protesta masiva, demostró que la lógica
de números no siempre trabajo. A pesar de encuestas de opinión en la mayoría del
UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST 173

Los países implicaron demostrar que una mayoría opposed la guerra, el


gobernar-ments de países europeos (como Italia y España) ofreció sus tropas
en soporte de la ocupación americana.
De hecho sea naive para suponer que las opiniones de eligió representa-tives
sencillamente seguir aquellos del público general en cada ocasión (McAdam y Su
2002). Primero, votando está estructurado por una serie entera de cuestiones y
depende de un equilibrio entre motivaciones diferentes. Dista mucho de seguro
que un indi-vidual abandonará su tradicional electoral elección en la base de una
preferencia en un asunto particular, incluso cuándo el individual está de acuerdo
con el movimiento en aquel asunto. Activistas de movimiento tienen, por tanto, no
sólo para aumentar soporte, pero también para producir “preferencias fuertes” a
favor de su reclamacións. Segundo, campañas de protesta tienen una duración
limitada y, como resultado, su influencia política es menos directo. De hecho, “el
problema con todas alianzas de movimiento, pero especialmente aquellos con los
partidos, es cómo para mantener empresa de compromiso una vez el persuasive
sounds del marching los miles han devenido un eco distante” (Rochon 1988: 174).
Tercio, incluso acontecimientos de masa – como on-line petitions, campañas, y
netstrikes – es a menudo ignorado por aquellos apuntan (Rucht 2003un), su
impacto en los observadores que dependen de quém uch capturan la atención de
los medios de comunicación de masas (Gurak y Logie 2003: 26). Además, cuando
los acontecimientos de Seattle otra vez signaled, el poder está cambiando hacia
decisión-fabricantes que es menos y menos responsable a opinión pública y citi-
zens–electors (ve capítulo 8 abajo). Cuando las derrotas numerosas en movimiento
social-ment-los referéndums inspirados demuestran, un más lejanos y quizás factor
más decisivo cuentas contra la lógica de números: protestors (a veces referido a
minorías “tan activas”) no siempre reflejar el opiniones de una mayoría del público
(Wisler y Kriesi 1998). Así, sea extremadamente peligroso para movimiento
social-ments para depender sólo en tal lógica; una lógica cuál no de todas formas
plenamente reflejar su concepto propio de democracia, el cual enfatiza
participation, no voto de mayoría (ve capítulo 9 abajo). Podemos añadir, aun así,
aquello allende exter-nally consideraciones estratégicas orientadas, la lógica de los
números también juega una función simbólica importante para los activistas de
movimiento ellos. Manifestaciones grandes emparticipantes de poder por extender
los sentimientos de pertenecer a una comunidad grande de equals.

7.3.2 La lógica de daño

La lógica de causar daño material, en un modus operandi análogo a guerra, tiene


que ser considerado junto a la lógica de números. Este logic está reflejado, en su la
mayoría de forma extrema, por violencia política. El Bloque Negro en Seattle y
más-dónde tiene utilizó apuntado, violencia de escala pequeña. Mucho tiempo
antes de que Seattle, disturbios de pan urbano en Latinoamérica así como en África
dramáticamente había disputado free-políticas de comercio, y las medidas de
austeridad conectaron con ellos, reclamados por el
174 UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST

Fondo Monetario Internacional, y Trabajo “pedido, pan, justicia y libertad”


(Walton y Seddon 1994; see también Eckstein 2001 encima Latinoamérica y
Bennani-Chaibri y Fillieule 2003 en países islámicos). En violencia en contra
propiedad los costes son todavía en gran parte económicos, pero la lógica deviene
cada vez más “militar” en violencia contra personas. En todo estos eventilaciones,
aun así, la violencia tiene ambos objetivos simbólicos e instrumentales. La
violencia está justificada a menudo como negativa simbólica de un oppressive
sistema, pero es también utilizado, cuando en el anti-disturbios de austeridad, para
ganar batallas concretas, o para obtener atención de medios de comunicación. En
las palabras de un Bloqueador Negro, “Como táctica de protesta, la utilidad de
destruir la propiedad está limitada pero significativo. Consigue reporteros de diario
corriendo a dónde está teniendo lugar y envía fuera del mensaje que seguro
aparentemente unassailable las compañías no son realmente tan unassail-capaces
después de todo. Quienes participan en la protesta y el otros sentando en la casa
delante de la televisión puede ver cómo uno ladrillo pequeño en las manos de un
realmente disuadir-mined la persona puede romper abajo una pared simbólica.
Rompiendo una ventana de Nike no coloca cualquiera es vida en jeopardy” (citado
en Notarbartolo 2001: 81). Los disturbios urbanos escenificaron por minorías
étnicas excluidas así como exclusionary disturbios contra las minorías étnicas
normalmente han apuntado en concesiones concretas, y rioters normalmente
practicados mucho más self-restricción que es a menudo admitido (Hobsbawm
1952; Bergmann 2002).
Utilizando la violencia también tiene muchas limitaciones y constreñimientos.
En primer lugar, la acción violenta puede causar un escalation en represión y
alienar sympathizers. La violencia polariza el conflicto, transformando “relaciones
entre challengers y autoridades de un confundidos, muchos-sided juego a un
bipolar uno en qué personas está forzado para escoger lados, defecto de aliados,
bystanders retiro y el estado repres-sive cambios de aparato a acción” (Tarrow
1994: 104). A pesar de que es cierto que una carencia de recursos puede animar el
uso de táctica más extrema, “este impulso está apremiado . . . Por la erosión de
soporte occasioned por represión y moral backlash. La cuestión crucial, por tanto,
es si el gobierno adicional responsiveness a la protesta violenta proporcionará
compensación suficiente para la medida más pequeña del movimiento” (DeNardo
1985: 219). Mientras la acción directa tiene en occa-sion sido asociado con éxitos
sustantivos, ha también seren notó que la acción violenta a menudo dirige a un
escalation en conflicto.5 En un régimen democrático los controles estatales un
monopolio en el uso legítimo de fuerza y más los retos a aquel monopolio están
condenados para fallar, transformando conflicto político a una confrontación
militar en qué el estado tiene por lejano la potencia de fuego más grande (della
Porta 1995). Esto es por qué, en el movimiento de justicia global en el hemisferio
del norte, nonviolence domina tan ambos una opción de valor y una elección
estratégica. Refiere-ences a Gandhi y Martin Luther King es frecuentemente hecho
por los grupos espe-cially concerned con el desarrollo de nonviolent técnicas, el
cual a menudo requiere formación concreta.
Dejando aparte violencia, aun así, una cantidad segura de disrupción material
es presente en muchas formas de protesta. La acción tomada por los movimientos
sociales es a menudo
UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST 175

inherently disruptive En el sentido que obstruye el curso normal de


acontecimientos por desorden amenazante (Tarrow 1994: 103). Su reto a las
élites accen-tuates incertidumbre y por tan haciendo los productos tangibles, y
de vez en cuando materiales, pérdidas. Algunas estrategias de protesta
acentúan daño económico. Típico es la huelga de trabajo, orientado para
suspender producción, y por tanto reducir los beneficios de los dueños de
fábrica. Por llamativo, los trabajadores paran producción y causar daño en su
empresario; este coste económico tendría que dirigir un empresario racional
para lograr está de acuerdo-ment con el personal. Formas más extremas de
acción como gato montés o rodando las huelgas y el sabotaje industrial son a
veces utilizados a increase presión en el empresario por exacerbar el coste
económico.
La lógica qué underlies la huelga industrial es difícil de traducir a contienda no
industrial. En estos casos el opposing el partido es menos fácilmente identificado,
y la disrupción tiende para trabajar a través del problema causa a terceros partidos
no directamente responsables para las decisiones públicas y quién pueden girar
contra el protestors como resultado. Huelgas en público los servicios son, de hecho,
particulares delicados como su imme-diate las víctimas son la ciudadana -users.
Así, uno de los dilemas principales de mentiras de protesta en los requisitos a
menudo contradictorios de desorden amenazante por un lado, mientras en el otro
buscando para evitar estigmatización por opinión pública. De hecho, las uniones
en el sector terciario sonth emselves deviniendo más cautelosos aproximadamente
utilizando la arma de huelga, sabiendo que arriesgan perder soporte público más
que socavar la legitimidad de decisiones de gobierno.
Boicots (una táctica que devenía muy popular en el movimiento de justicia
global) también aim en reducir las ventas, y por lo tanto los beneficios, de apuntó
empresas. La lógica subyacente de muchas campañas de movimiento está
“nombrando y shaming” cuál, especialmente cuándo conducido contra
multinacionales, objetivos en hacer público la opinión consciente de especialmente
glarincasos de g de ignorar derechos humanos por extender información detallada
aproximadamente les, y a menudo preguntando personas para castigar las
compañías implicaron por boicotear sus productos. Para caso, la Campaña de Ropa
Limpia
– Lanzado en 1993 por una coalición de asno estudiantilociations, grupos
religiosos, organizaciones de derechos humanos, y sindicatos – a tiendas de
departamento boicoteado les gusta&C Un, Peek&Cloppenburg, y M&S Modo,
quien, esté alegado, vendía prod-ucts fabricó utilizar explotación de trabajador
extremo, con salarios bajos y unsafe condiciones, en a países les gusta Corea del
Sur, Bangladesh, Hong Kong, México, Guatemala, y Honduras (Mies 2002). Otros
ejemplos más tardíos de boicots apuntaron en las multinacionales eran para
implicar Concha, criticado para contaminar el Mar Del norte y el río de Níger (e
indirectamente para la represión brutal de protestas escenificó por el Ogoni
personas); Nike, acusado de subcontratar producción a pequeño introducir-prises
en Indonesia y Vietnam que trabajo de niño del uso así como altamente
contaminando productos; Nestlé, el cual porp romoting el uso de leche pulverizada
en países en desarrollo, estuvo acusado de instigar el spread de las enfermedades
de los niños por bajar su respuesta inmune; Monsanto, para producir sterile
semillas; Unilever, de intro-ducing soja modificada genéticamente alubias al
mercado; Del Monte, después del
176 UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST

Retransmitiendo de un videotape mostrando el slaughter de delfines durante


los atunes que pescan; McDonald es, para presuntamente utilizando la carne
de animales levantó extensamente en antibióticos (cuál produce un efecto de
adicción en consumidores); Puente-piedra/Firestone, quién estuvo obligado a
rehire trabajadores habían despedido; y el Pfitzer compañía farmacéutica a
relinquish propiedad industrial encima que salva vida anti-fármacos de
AYUDAS en países pobres en África y Brasil. El boicot, produciendo daño
directo a las empresas económicas apuntadas, adapta a una situación en qué
compañías de multinacional tiene crecer poder (según los activistas, aún más
poder que mucha nación-estados). El boicot de specific multinacional com-
panies sigue esta lógica, también explotando la necesidad para, aquello confía
más en su logotipo que en la calidad de sus productos, para tener una imagen
limpia. Una táctica similar está utilizada por activistas on-line que
organizaciones internacionales simuladas by sitios web de falsificación del
edificio para atraer los usuarios que buscan los sitios web oficiales o crear sitios
web con nombres similares.
Estas formas de protesta, a pesar de que no tan estigmatizado como el
violento unos son, tiene algún shortcomings. Para caso, el boicot esv ery
mucho dependiente encima masa-cobertura de medios de comunicación para
ser eficaz en producir una “pérdida de cara” (Vegh 2003; Gamson 2004: 258).
Además, tienen que ser dirigidos cuidadosamente para limitar el riesgo de
efectos negativos en los trabajadores de boicoteó empresas o coun-prueba. De
hecho, incluso los aliados potenciales pueden devenir el unplanned víctimas
de un boicot: el boicot contra queso de roquefort francés acechado durante una
ola de protesta contra testaje nuclear francés en el nineties arriesgó pegar los
campesinos franceses, quién era para protestar contra el WTO en Seattle.
Además, cuándo practicado por ciudadanos individuales, inconexos a cada
cual otro, boicoteando puede devenir solipsis-tic, y “una manera pobre de
sostener un sentido de injusticia e indignación” (Jaspe 1997: 265).

7.3.3 El logic de aguantar testigo

Formas de protestar cuál podría ser definido tan basado en una lógica de
aguantar el testigo ha desarrollado junto a aquellos basado en la lógica de
números o la lógica de causar daño, particularmente desde el 1970s. Tal acción
no es diseñada a con-vince el público o decisión-fabricantes que el protestors
constituir una mayoría o una amenaza. Bastante, busca para demostrar un
compromiso fuerte a un objetivo consideró vital para el futuro de la
humanidad. Esta lógica es quizás más en acuerdo con el concepto de
democracia participativa que es extendido entre activistas de movimiento
social (ve capítulo 9 abajo). El correcto de influir procesos que hacen decisión
proviene tampoco investidura formal ni poder intrínseco pero de fuerza de
com-mitment. En acciones de thes amable, los activistas son dispuestos de
correr riesgos personales para demostrar sus condenas y reforzar el mensaje
moral que es transportado por su protesta.
UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST 177

Aguantando el testigo está expresado, en el primer caso, a través de


participación en acciones qué implicar riesgos personales serios o coste.
Desobediencia civil, saber-ingly rompiendo qué está considerado para ser unjust
leyes, restos en esta lógica. Acciones típicas de este tipo de repertorio ha sido la
destrucción de campos de geneti-cally modificados maize por el Confédération
Paysanne, redadas de Greenpeace contra barcas balleneras, el blockages de sitios
nucleares, pero también episodios de pasivos resistir-ance a intervención policial.
Mientras intentando para penetrar “zonas rojas” durante countersummits,
manifestantes en Praga, Gothenburg, y Genoa era por-fecting qué en Gran Bretaña
se apellida “empujar y shoving,” concretamente el shoul-der-a-el hombro que pulsa
que la policía y los percusores hacen en líneas de piquete. La provocación
simbólica es también crucial en el resurgimiento de desobediencia civil en
manifestaciones en contra globalización. En las palabras del activista prominente
Naomi Klein, “Con-frontations está escenificado en la valla – pero no sólo los
implicando palos y ladrillos: lágrima-gasista canisters ha sido flicked atrás con
palos de hockey, cañón de agua ha sido irreverently desafiado con agua de juguete
pistols y buzzing helicópteros, mocked con enjambres de aviones de papel” (Klein
2002: xxv). Parte del movimiento de justicia global, el Disobedients stconflictos
de edad por cubrir sus cuerpos con materiales protectores y utilizando escudos
plásticos para los proteger contra batutas policiales, pero proceden con sus manos
arriba en el aire como señal de nonaggres-sion. En muchos tales acciones, el riesgo
de arresto testifies a la condena que algunos-la cosa tuvo que ser hecha sobre una
decisión consideró profundamente unjust, incluso si esto implicó correr costes muy
serios de hecho.
Una característica más lejana de la acción basada en la lógica de aguantar el testigo
es su sensibilidad a cultura y valores alternativos. Conferencias, revistas, conciertos, y
los documentales tienen la tarea de educador el público a un diferente entender-ing del
mundo. A pesar de que en la mayoría de casos movimiento social contemporáneo-ments
busca para traer sobre political transformaciones comparten la condena que la reforma
no puede provenir encima. Los cambios en consciencia individual tienen que
acompañar la transformación de estructuras políticas. Así cultural así como las
estrategias políticas tienen que ser adoptadas. Esta lógica ese especialmente visible en
el con-sumer activismo que de hecho “desafía nuestro sentido que el dinero y la
moralidad no pueden ser mezclados” (Micheletti 2003: 3). Presentando consumo como
potencialmente acto político, el consumismo ético acentúa la función central de
individual en responsabilizarse para los bienes comunes en su vida diaria. Boicots de
malos prod-ucts, pero también comprarcotts de justo unos (ambientalmente amistosos
y solidaristic) así como socialmente las inversiones responsables son maneras no sólo
de resocializing wrong-doers y cambiando actividades empresariales, pero también de
practicar valores seguros (Follesdal 2004). Cuando Micheletti (2003: 150) tensiones, el
consumismo político defiende un normativo stance; “las virtudes tendrían que ser
embedded en transacciones de mercado. Demo-cratic political El consumismo es una
virtud practicando actividad.” Además, es una forma de acción que resonates con un
individualized cultura (Stolle y Hooghe 2004: 273), tan “cosmopolitan los ciudadanos
en sociedades globales procesan sus elecciones políticas
178 UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST

Cada vez más en plazos de cómo aquellas elecciones afectan sus estilos de vida
propios” (Bennett 2004un: 102).
La capacidad de directamente transmitiendo su mensaje es una característica de
formas de acción qué confiar más fuertemente en la lógica de aguantar testigo.
Porque ellos oppose la idea que los fines justifican el medio, los movimientos
sociales contemporáneos han buscado forma de acción que refleja el objetivo de
ser obtenido tan estrechamente tan posible. La atención pagó al immediate el
impacto de símbolos busca a facil-itate la difusión del mensaje de movimiento
social en una situación donde los medios de comunicación tiende para informar
superficially: “Si el mensaje es embedded en la actividad, entonces un informe de
las personas de marcas de la actividad piensa sobre el asunto también” (Rochon
1988: 120). “Teatro de guerrilla” y otros usos de obra “encarnan prefirió marcos
en el simbolismo utilizaron – en efecto actuando el marco a través de traje, props,
títeres, y otras imágenes visuales” (Gamson 2004: 253).
La lógica de aguantar el testigo también dirige a una acentuación de la
intensidad emocional de participación. El movimiento de paz a menudo ha tomado
prestado de y adaptó el repertorio viejo de manifestación pública en esta dirección.
Tradición religiosa inspirada en (y, enpartic ular, el modelo de peregrinaje), órgano
de pacifistas-ized marchas de distancia larga numerosas, así como masas, vigils,
torchlight pro-cesiones, oraciones comunales, y las Estaciones de la Cruz en
viernes Bueno. Las cadenas humanas conectaron sitios de importancia simbólica,
meetings de los dirigentes del mundo eran simbólicamente asediados, y
manifestaciones de calle estuvieron convertidas en teatrales “happenings,”
actuando fuera de las consecuencias de guerra nuclear. Más tarde encima, el
movimiento de justicia global “utiliza algunos del tropes de más tempranos reper-
tories – títeres gigantes, máscaras satíricas . . . – Pero él slants estos en maneras
innovadoras, a menudo a raíz de participación de coalición ancha en protestas”
(Whittier 2004: 539). La acción directa era, para caso, heredado por el movimiento
de las mujeres, pero con el attempt de “el complejo en desarrollo significa de
asegurar participación igual por todos miembros de grupo en decisión de consenso-
haciendo, y enfatizando ambas conexiones logísticas y emocionales entre
participantes” (ibid.).

7.4 Opciones Estratégicas y Protesta

Formas de protesta, entonces, es extremo a grados diferentes y, muy en particular,


sigue tipos diferentes de lógica. Cómo y por qué es uno forma de protestar escogido
más que otro? Una primera respuesta puede ser buscada en la complejidad y la
multiplicidad de la protesta de objetivos está significada para conseguir. Si
miramos otra vez en figura 7.1, Lipsky nota que “mosto de dirigentes de la protesta
nurture y sostener una organización comprendida de personas con quien pueden o
no puede compartir valores comunes. Tienen que articular objetivos y escoger
estrategias con objeto de maximize su exposición pública a través de medios de
comunicación de comunicaciones. Tienen que maximize el impacto de terceros
partidos en el conflicto político. Finalmente, tienen que probar a maximize
posibilidades de
UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST 179

Éxito entre aquellos capaz de conceder objetivos” (Lipsky 1965: 163, énfasis en el
original). Cuando Rochon (1988: 109, el énfasis añadido) observa en conexión con
el movimiento de paz, “la estrategia de movimiento ideal es una aquello está
convenciendo con respetar a político authorities, legítimo con respetar a seguidores
potenciales, premiando con respetar a aquellos ya activo en el movimiento, y
novela en los ojos de los medios de comunicación de masas. Estos no son
enteramente demandas compatibles.”
Primero, dado que cada acción tiene un sujetado cost pero también puede ser un
beneficio en y de él (Hirschman 1982), es importante para movimientos sociales
para encontrar táctica qué es también propio para darse cuenta objetivos internos.
Muchas formas de protesta “tienen efectos profundos en el espíritu de grupo de su
participantes,” desde entonces “al final, hay nada como productivo de solidaridad
como la experiencia de fusionar grupo pur-poses con las actividades de vida diaria”
(Rochon 1998: 115). Acción de protesta tiene una función interna importante:
creando que sentido de identidad colectiva qué es una condición para acción hacia
un objetivo común (Pizzorno 1993). De hecho, “movimiento-ment los estrategas
son plenamente conscientes que al menos algunos de su táctica tienen que
ensanchar la piscina de activistas y desarrollar ‘solidaridades,' más que
‘meramente' teniendo un impacto en políticos” (Rochon 1998: 159). Para las
huelgas de movimiento del trabajo tuvieron más de una función sencillamente
instrumental (Fantasia 1988), y esto es también cierto de occu-pations para el
movimiento estudiantil (Ortoleva 1988), ambos reforzando un sentido de
identidad. Tanlidarity nace fuera de compartió riesgos en las barricadas: “Cuando
afrontaron fuera contra tropas hostiles o nacionales guardsmen, los defensores de
una barricada vinieron para saber cada cual otro tan camaradas, desarrolló una
división de trabajo de luchadores, constructores y proveedores, und formó redes
sociales que traería su sur-vivors junto en confrontaciones futuras” (Tarrow 1994:
44). Los campamentos de paz, los cuales extienden por todas partes Europa en el
despertar de la Primera Convención europea encima Paz y Desarme en Bruselas en
1981, similarly jugó una función importante en el elaboration de una identidad
pacifista. Según participantes, uno de los beneficios principales del muchos
transnacionales countersummits ha sido aumentando conocimiento mutuo y
comprensivo (Pianta 2001un). En particular, las Naciones Unidas-patrocinados
intergovernmental cumbres en los asuntos de las mujeres, environ-ment, y la
pobreza servida como arena para networking, marco-bridging, y formación de
protesta (para una revisión, Herrero 2004b: 322). Nonviolent La acción directa
fortalece el sentimiento de belioonging; “un comunitario aquello está formado en
el proceso de strug-gle es una cosa muy preciosa, y cumple muchas necesidades
que no es conocido en vida diaria” (Epstein 1991: 8).
Aun así, acciones que fortalece la solidaridad interna no siempre sirve para crear
support fuera del movimiento. Mirando en figura 7.1 lo puede ser remarcado que,
si dirigentes de protestar a menudo tiene que favorecer acción más radical para
mantener rango-y-soporte de archivo, estos son precisamente las clases de acción
que el riesgo que aliena poten-tial aliados. Protest Los dirigentes tienen que evitar
acción que es demasiado extremo si son para ganar sobre sus grupos de objetivo
dentro del público, pero en hacer tan corren el riesgo de perder la confianza de su
protesta constituency.6 encuestas de Opinión han mostrado
180 UnCTIÓN FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST

Aquello el más pacífico e institucional un curso de unconventional la acción


política es (petitioning, por ejemplo) el más grande el nivel de aprobación
pública. Caídas de aprobación donde la acción tomada es directo pero
nonviolent, y es mínimo donde la acción violenta está preocupada (Barnes et
al. 1979).7 Si la protesta en justicia global sensibilizó la opinión pública a los
objetivos de los activistas, sus formas de protesta eran a menudo criticados tan
demasiado radicales (della Porta, Andretta, Mosca, y Reiter 2005).
Especialmente en relación a gobiernos comprensivos, ser de riesgo de táctica
radical counterproductive (Cress y Nieve 2000: 1097–8).
Los problemas similares desarrollan en las relaciones entre activistas y los
medios de comunicación, cuando el juego último un important función en
determinar la resonancia dada a, y por lo tanto la efectividad de, protesta. Incluso
aunque es discutible a qué acontecimientos de protesta de la extensión son ante
todo “manifestaciones de diario,” i.e. orientados principalmente en cobertura de
medios de comunicación (Neveu 1999: 28 ss.), los medios de comunicación son de
hecho el más obvios shaper de sensibilidad pública (Jaspe 1997: 286). El éxito de
acción de protesta es indudablemente relacionado a la cantidad de atención de
medios de comunicación recibe, y esto también afecta el carácter de
organizaciones de movimiento social (Gitlin 1980).
Búsqueda tan prudente encima cobertura de protesta ha demostrado (McCarthy,
McPhail, y Herrero 1996), para obtener cobertura de medios de comunicación, la
acción tiene que implicar un grande muchas personas, utiliza táctica radical, o ser
particularmente innovador. Tenga que serrem embered que es el contenido del
mensaje transmitido así como la cantidad de publicidad recibió qué es importante
para un movimiento social. Jour-nalists Puede ser particularmente reclamando
como protesta de preocupaciones: por un lado reclaman “noticiosos,” y
therefnovedad de mena; en el otro, tienden para conformar a aceptó estándares de
“gusto bueno” (ve también capítulo 8 abajo). Aunque su obli-gation a la comunidad
más ancha puede dirigir muchos periodistas a sympathize con demandas seguras,
ellos , empero, condena formas extremas de acción. Por otro lado, acción más
moderada, a pesar de que pueda garner soporte más grande, es raramente
“newsworthy.”8 Por ello, “Conformidad a estándares de noticiosos worthiness en
estilo político, y conocimiento de los prejuicios y deseos del endividuals quiénes
determinan cobertura de medios de comunicación en habilidades políticas,
representa determinantes cruciales de efectividad de liderazgo” (Lipsky 1965:
170). Los movimientos exitosos son a menudo los que es capaz de desarrollar
controversias de tal manera que son más newsworthy por utilizar símbolos e
imágenes que atención de captura – “el secreto de acceso de movimiento a los
medios de comunicación es para comprometer en protesta colorida” (Rochon 1998:
180).
Más allá visibilidad, los movimientos sociales tienen el problema de habiendo
su mes-las salvias extendidas por medios de comunicación a menudo más
interesados en escándalos que información:
Una dificultad para movimientos políticos es que los medios de comunicación
generalmente imágenes presentes de su protesta sin cualquier elaboration de los
asuntos sustantivos implicaron. Demonio-strations está descrito como grande o
pequeño, bien-behaved o unruly, una sección de cruz del populace o compuesto de
elementos de fleco. Pero los asuntos que trajo el pro-
UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST 181

testors Junto está presentado en plazos de uno-eslóganes de línea, si en absoluto.


El problema no es tanto uno de sesgo político cuando es un asunto del exacting
los criterios utilizaron por los medios de comunicación para determinar qué es
newsworthy. Medida, novedad, y militancy es noticioso-digno. Perspectivas de
política crítica no son.
(Rochon 1988: 102)

En conclusión, mayoritariamente formas de uso de movimientos sociales de


acción cuáles pueden ser descritos tan disruptive, buscando para influir élites a
través de un demonstra-tion de ambas fuerza de números y activistas'
determinación para tener éxito. Al mismo tiempo, aun así, la protesta está
preocupada con construir soporte. Tenga que ser inno-vative o newsworthy
bastante para repetir en los medios de comunicación de masas y,
consiguientemente, lograr el público más ancho qué movimientos sociales (como
“minorías activas”) está buscando para convencer de la justicia y urgencia de su
causa. Las formas de protesta tienen que allí-fore adapta tan la ocasión requiere a
las necesidades de potencialmente chocando objetivos como élites amenazantes y
ganando sobre el público (a través de la intervención de un tercer actor, los medios
de comunicación, el cual tieneun n orden del día de su propio).
Para vencer estas limitaciones, organizaciones de movimiento social de
hecho prueban a hone sus habilidades comunicativas y pagar atención prudente
a communica-tion campañas, ruedas de prensa, y, especialmente, dossieres
escritos cuidadosamente (para caso, en asociaciones ecológicas, ve della Porta
y Diani 2004). Además, los movimientos desarrollan sus medios de
comunicación propios: movimientos de trabajo hubieron dailies y publicar-ers;
movimientos más recientes han desarrollado sus estaciones radiofónicas
propias así como sitios web (ve chmás apto 8 abajo).

7.5 Factores que Influyen Elección de Repertorio

Los dirigentes de organizaciones de movimiento social encuentran ellos afrontados


con una serie de dilemas estratégicos en escoger la forma que la protesta tendría
que tomar. Cualquier forma de necesidades de acción para cubrir una pluralidad de
a veces objetivos contradictorios. Además, las opciones estratégicas están
limitadas por una serie de los factores internos así como externos de protestar él.
Los recursos materiales apremian elecciones estratégicas, pero reper-toires no es
instrumentos justos: pertenecen a, y representar, una cultura de movimiento, y es
por tanto enlazado a los activistas' valores. Los objetivos, en este sentido, no
plenamente justificar el medio, y mucho del debate dentro de movimientos sociales
sobre asuntos de los repertorios no sólo dirigen su efficacy pero también su
significado y valor simbólico. De hecho, acentuando la euforia y el placer
implicado en protesta, James Jasper (1997: 237) observa que “la táctica representa
rutinas importantes, emocionalmente y moralmente salientes en las vidas de estas
personas'.”
El repertoire de la acción es finita, apremiado en ambos tiempo y espacial. La
“tecnología” de protesta evoluciona despacio, limitado por las tradiciones
entregaron abajo de una generación de activistas al próximos, y cristalizados en
instituciones. El
182 UnC TION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST

La marcha pública es un ejemplo bueno : a pesar de que, cuando vimos, ha


habido cambios en los rituales, es todavía uno de las formas principales de
protesta en la campaña contra neoliberal globalización. Teniendo desarrollado
fuera de la práctica de elec-toral banqueting, la técnica era despacio
perfeccionada e institucionalizado por el elaboration de rituales y estructuras
como el rally de encierro y el stewarding de marchas (Favre 1990).
Los repertorios son el byproduct de nuncayday experiencias: para caso, la barra-
ricades derivado de la tradición de utilizar cadenas para acceso de bloque a barrios
por la noche o en momentos de confusión. Cuando Traugott (1995: 47) escribe del
“Día de las Barricadas,” unas personas es repugnar contra el rey francés Henri III,
“La innovación grande de 12 mayo 1588 era para fortalecer la línea de la
demarcación representada por las cadenas y para utilizar las barreras así creadas a
impede los movimientos de King Henri III Guardias Reales.” El éxito de aquellos
primer barri-cades contribuido para mantener aquella forma de la acción viva para
más de cuatro siglos.
Así, los repertorios están entregados abajo, reprodujo con el tiempo, porque son
lo que las personas saben cómo para hacer cuando quieren protesta. Las formas
de la acción utilizada en uno protesta campaign tiende para ser reciclado en
subsiguiente unos. El anti-movimiento de Guerra del Vietnam en los Estados
Unidos adoptó táctica que tuvo más temprano sido utilizado por defensores de
derechos civiles. El movimiento de juventud en mid-1970s Italia inher-ited (en un
radicalized forma) los modos de protest utilizados por el movimiento estudiantil
del tardío 1960s (della Porta 1995). El movimiento de justicia global formas mixtas
de nonviolent la acción directa desarrollada por los movimientos de paz con las
marchas grandes y petitions las estrategias que provienen el decimonoveno-century
repertorio: “De hecho, manifestaciones que incluye violento y nonviolent facciones
y una gama de constituencies y los estilos culturales que dirigen oposición
compartida a globaliza-tion constituir una combinación innovadora de las tácticas
dibujadas de anteriormente-separated movimientos” (Whittier 2004: 539).
Además, la elección de las tácticas simbólicamente expresa proximity a
movimientos anteriores. La adaptación de formas más viejas de acción
legitimizes protesta por referir-anillo a mitos y héroes del pasado, desde “el
uso de standard formas de protesta también evoca movimientos políticos
pasados cuyas luchas mucho tiempo han sido desde entonces vin-dicated como
justos” (Rochon 1988: 110). Para caso, protestors contra la reunión de Banco
Mundial en Washington en 2001 llevó máscaras antigás para referir a un sutory
de represión policial (Whittier 2004: 540).
Tales referencias al pasado son un constreñimiento en movimientos sociales así
como un recurso. En cualquier periodo dado, conocimiento respecto de “qué es
para ser hecho” para protestar contra una decisión por aquel poder de holding está
limitada, y esto limita col-lective acción: “El repertorio de existir apremia acción
colectiva; lejos de la imagen nosotros a veces control de mindless multitudes, las
personas tienden para actuar dentro de límites sabidos, a innovate en los márgenes
de las formas de existir, y a miss muchos oppor-tunities disponibles a ellos en
principio” (Tilly 1986: 390). Arraigado en el compartido sub-activismo de cultura,
los repertorios contienen las opciones consideraron practicables, mientras
UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST 183

excluding Otros: “Estas variedades de acción constituyen un repertorio en algo


como el sentido teatral o musical de la palabra; pero el repertorio en cuestión se
parece a que de commedia dell'arte o jazz más de aquel de un estrictamente clásico
ensemble: people sabe las reglas generales de rendimiento más o menos bien y
variar el rendimiento para conocer el propósito a mano” (Tilly 1986: 390).
Estas limitaciones en la gama de formas de protesta es parte única de la historia:
a pesar de que algunas formas de acción pueden ser adaptadas a más de una
situación, muchos otros pueden no. Dividen, entre otro, a lo largo de líneas de
grupo social: los prisioneros suben a los techos de prisiones; raciones de residuos
de los soldados; el alumnado organiza “alterna-tive” cursos; los parados ocupan
una fábrica y el inicio que trabaja. Uno de las formas más comunes de la acción
colectiva tomada hoy, la huelga, era hasta que recientemente consideró una táctica
adaptó casi exclusivamente a la clase laborable. De hecho, los repertorios dependen
a una extensión grande en los recursos culturales y materiales available a grupos
particulares. Los estilos más militantes de acción serán más extendidos entre
aquellos grupos qué cara dificultad particular en obtener recompensas materiales y
para quien actos de gratificación simbólica como sustituto. Más-encima, el
particular subcultures a qué movimientos refieren contribuir al cre-ation de
repertorios distintivos. Organizaciones religiosas, por ejemplo, emplea y modificar
rituales propio de su fe. El movimiento de paz es nonviolent porque el uso de
violencia es también cerrar un reminder del militarismo desean condenar. Hackers
Busca formas de protesta on-line que expresa sus preocupaciones concretas
aproximadamente teniendo acceso libre a información (en particular, software
libre) y derechos a intimidad (Castells 2001: ch. 2; Freschi 2003; T. Jordan 2002).
Finalmente, cambio de repertorios de estatal de declarar. Es más común de
construir barricadas en Francia que en Suiza; por otro lado, la democracia directa
está recurrida a más frecuentemente en Suiza que en Francia (Kriesi et al. 1995).
Mientras el peso de tradición tiene que ser reconocido, hay también innovación
en protestar tan en otras formas de acción: “contenders experimento
constantemente con formas nuevas en el buscar ventaja táctica, pero hacer tan en
maneras pequeñas, en el borde de bien-estableció acciones. Pocas innovaciones
soportan allende un grupo solo de acontecimientos; soportan principalmente
cuándo asociados con una ventaja nueva sustancial para uno o más actores” (Tilly
1986: 7). Formas de la acción inicialmente restringida a par-ticular actores (y
condenados por otsuyos) deviene generalizado: trabajadores de cuello blanco van
en huelga, los tenderos bloquean las calles. La táctica nueva constantemente está
siendo creada para conocer criterios de medios de comunicación de
“newsworthiness.” Particularmente en fases cuándo la acción colectiva es en el
aumento, dado forms de la acción extendida de uno grupo social a otro, y a menudo
de un país a otro. Nonviolent La acción directa estuvo importada a Martin Luther
América de King de India de Gandhi (Chabot 2002). El movimiento estudiantil
trajo sentar-ins a través del océano a Europa. En el despertar de una ola masiva de
movilización de trabajo en Italia en el tardío 1960s, el uso de llamativo deprisa
devenía extendido entre muchos diferentes sec-tions de la población. En las
docenas de movimiento de la paz de campamentos saltaron arriba
184 UnC TION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST

Alrededor de bases de misil nuclear después del ejemplo inicial de Greenham


Común. El movimiento de justicia global también adoptó una serie de protesta
forma cuál había originado en otras tradiciones: vigils de grupos religiosos,
desobediencia civil del movimiento de las mujeres, y tan encima.
Tenga que ser añadido que socialización en táctica de protesta no es un
asunto de ciego reflex pero un proceso de aprendizaje crítico. Así, no todas las
formas de acción llevan encima de un periodo al próximo, uno grupo social a
otro, o de un país a otro. Es, sobre todo, aquellos consideraron exitosos o
particularmente bien adaptados al contexto o la cultura de un movimiento qué
es más fácilmente transferido de un movimiento al próximo (Koopmans 2004:
26; Soule 2004: 302). Durante la campaña contra neoliberal globalización, el
spread rápido de táctica de boicot (Micheletti 2003: 83) puede ser explicado
por su uso anterior contra empresas internacionales como Concha o Nike. La
protesta forma aquello ha probado unsuccessful ha lejos menos probabilidad
de superviviente. En Italia, por ejemplo, el movimiento en contra misiles de
crucero marcados un cambio importante en tácticas por izquierdos-
movimientos libertarios. Mientras el tardío 1970s había sido caracterizado por
violento escalation, la paz movement enfatizó nonviolence con el objetivo
concreto de marcar su dis-continuidad con el pasado y contribuyendo para
disociar la 1980s protesta de la memoria sangrienta de la década de preceder
en la imaginación colectiva (della Porta 1996un).
Junto a success, aun así, las generaciones diferentes pueden desarrollar
gustos diferentes para formas concretas de acción (Jaspe 1997: 250).
Curiosamente, el ritual de marchas ha cambiado para adaptar a moderno (o
“postmoderno”) tiempo: de aquellos pretendido para mostrar unidad y
organization a formas más teatrales, enfatizando una expresión colorida de
diversidad y subjetividad (ve, para caso, Rucht [2003b] para un análisis de las
marchas de Día del Trabajo en Alemania). En manifestaciones recientes de los
movimientos de justicia globales, el más jóvenes cohorts de los activistas han
transformado las imágenes de marchas con su más playful y punto de vista
espontáneo.
Los repertorios también emergen, y está transformado, en el curso de
interacciones físicas y simbólicas. Los cambios tienen lugar en encuentros con el
authorities, en una serie de ajustamientos recíprocos. Violencia política, por
ejemplo, es raramente adoptado por la noche o conscientemente. Bastante, repitió
enfrentamientos con policía y polit-ical adversaries gradualmente, y casi
imperceptiblemente, aumenta extremismo, dirigiendo a una justificación para
siempre formas más violentas de acción. En Italia durante la 1970s táctica
extremista emergida en el curso de un escalation del uso de fuerza durante marchas
y manifestaciones (della Porta 1995). Las intervenciones de la policía y carabin ieri
devenía cada vez más determinado, mientras grupos izquierdos y correctos
extremos chocó con nunca armas más letales: piedras, molotov cócteles,
herramientas, y finalmente pistolas. Radicalization Desarrolla en una espiral de
negativo y unfore-retroalimentación vista. Aquellos implicados (particularly la
policía y manifestantes) inter-acto, causando escalation a través de una serie de
círculos viciosos.9 En estas situaciones
UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST 185

Los participantes reaccionan según su propios worldview, gambling que el


resultado será tan esperaron. Sus elecciones, aun así, es a menudo basado en
cálculos erróneos. Este círculo de acción y reacción deviene una rutina hasta
un acontecimiento más o menos casual (como un asesinato accidental de un
manifestante o un agente policial durante enfrentamientos de intensidad baja)
produce un salto cualitativo en el nivel de vio-lence (Neidhardt 1981). La
violencia de hecho tiene un componente relacional – derivando de
intercambios entre personas – procesos tan interpersonales “promueven,
inhibit o canal violencia colectiva y conectar él con nonviolent política” (Tilly
2003: 20).
La protesta no siempre desarrolla hacia violencia, aun así: olas de con-tention
podría seguir caminos diferentes (Koopmans 2004: 29). Un proceso de aprendizaje
en la parte de ambos activistas de movimiento y la policía defused las formas de
chocar que había caracterizado el 1970s. En el 1980s, a pesar de momentos de (a
veces severos) tensión, particularmente durante acción directa como el bloqueando
de puertas en bases militares, paz activists y la policía estuvo experimentada
bastante para evitar esca-lation a violencia: “las manifestaciones son
cuidadosamente choreographed por adelantado. De modo parecido, activistas
quiénes esperan participar en acciones de desobediencia civil, como bloqueos, es
normalmente requerido para experimentar entrenando en resistencia pasiva y
nonviolence. La policía afrontan ha sido entrenado en control de multitud y en
tratar nonviolent protesta. La imagen tan frecuentemente retransmitido de policial
automovilístico-rying un manifestante fuera a la prisión parece una imagen de
conflicto. Es. Pero es también un caso de dos conjuntos de los profesionales que
llevan a cabo sus trabajos con precisión” (Rochon 1988: 186–7).
Cierto, violencia escalated en Seattle, y entonces en Praga, Gothenburg, y
Genoa. Pero había también intentos por ell arge mayoría de nonviolent activistas
para mantener violencia bajo control a través de innovación táctica: fueron de la
definición de “violencia-zona libre,” a la división de marchas a bloques, acuerdo-
ing a la táctica adoptada; y la separación, enel s ame bases, de áreas de movimiento
diferente en diferentes localities. Después del violento escalation en Gothenburg y
Genoa, un proceso de aprendizaje desarrollado dentro del movimiento de justicia
global que trae sobre la invención de formas nuevas de cuerpos de mariscal
(“armados” sólo con cámaras de vídeo) y una implementación más estricta de
nonviolent táctica (della Porta y Reiter 2004un y 2004b).
Hay una variable más lejana (para ser tratado en longitud más grande en el
capítulo próximo) aquello afecta las elecciones estratégicas hicieron por sociales
movements. Lipsky Notó que la protesta tiene que ser en una posición a mobilize
aliados potenciales e influ-ences élites. Es normal que el más grande la posibilidad
de ensanchar su gama de alianzas, el más grandes la atención los movimientos
sociales pagarán al preferir-ences de seguidores potenciales. Para el movimiento
de justicia global, el soporte de muchos bien-sabidos y respetó NGOs así como
individual prominente tanto atención de medios de comunicación atraídos y a
menudo intervención coactiva desalentada en la parte de la policía (Andrettun,
della Porta, Mosca, y Reiter 2002 y 2003).
186 UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST

7.6 El Cross-Difusión Nacional de Protesta

Particularmente pertinente en el proceso de la adaptación estratégica es procesos


de cruz-difusión nacional. Más y más, ideas sobre formas de acción (así como ide-
ology y repertorios organizativos) cruz de viaje-nacionalmente. Como
innovaciones científicas o tecnológicas, ideas de movimiento social puestas en
procesos de movimiento de dif-fusión:10 “fabricante de Protestas no tiene que
reinventar la rueda en cada sitio y en cada conflicto . . . A menudo encuentran
inspiración en otro lugar en las ideas y táctica espoused y practicado por otros
activistas” (McAdam y Rucht 1993: 58). Ideas respecto de estructura organizativa,
strategies de acción, o definiciones del viaje “mundial” de movimiento a
movimiento, sector a sector, ciudad a ciudad, centro a periferia, y, de vez en
cuando, periferia para centrar. La difusión puede ser cualquier directo o indirecto
dependiendo de si viene aproximadamente a través de unmediated contactos entre
miembros de movimiento o está mediado por los medios de comunicación de
masas (Kriesi et al. 1995: 185). Además, la difusión puede venir aproximadamente
a través de cualquier unconscious o imitación consciente. Antiguamente lo ha sido
reclamado que colectivo behavio extendido a través de “reacciones circulares,” las
respuestas de cada individuales reproduciendo los estímulos que provienen su
vecino (Blumer 1951: 170), sin mucho intento por participantes individuales para
evaluar la situación y rationally responde a él. Aun así, since el 1970s lo ha sido
reconocido que el “interpretativo interac-tions,” basado a una evaluación
consciente de las situaciones, formas más institucionales subyacentes de la
participación política es también presente en protesta. Procesos “más”
interpretativos como identificación e imitación son también presentes junto a
mecanismos como suggestibility y reacción circular (Turner y Killian 1987). La
concienciación más grande de los actores implicó tendría que favorecer, a pesar de
que pueda no automáticamente asegurar, el success de movilización.
Cross-la difusión nacional no es nueva. El movimiento estudiantil en el
1960s, el movimiento feminista en el 1970s, y el movimiento de paz y el
movimiento ecológico en el 1980s es todos los ejemplos de qué se tiene
apellidado “movimiento” global-ments, desarrollando contemporaneously
durante el mundial y mostrando semejanzas significativas en países diferentes.
Yendo más atrás en tiempo, el rev-olutions de 1848 y el antislavery el
movimiento era fenómenos colectivos qué creció para cubrir más de un
continente. Aun así, es también cierto que el proceso de la difusión no implica
todos los movimientos igualmente, ni es el intercambio siempre simétrico.
Primero, es más probablemente que la difusión tendrá lugar entre países que es
cercano junto geographically. De hecho, la interacción tenderá para ser más fuerte
entre neighboring países. hay más enlaces entre los países escandinavos que entre
Dinamarca e Italia, por ejemplo. Geográfico proxim-ity no es siempre importante,
aun así. El mosto pasado también ser tenido en cuenta. Es más probablemente que
la difusión tendrá lugar entre movimientos de coun-
UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST 187

Prueba con una historia de interacción pasada; entre movimientos en Italia y


France, por ejemplo, más que entre movimientos en Italia e Irlanda. Además
interacción directa él, el “cultural entendiendo que las entidades sociales
pertenecen a una categoría social común [también] construye un lazo entre ellos”
(Hebra y Meyer 1993: 490). Similarities En estructura social y política también
tiene que ser tenida en cuenta. Así, la difusión es más probablemente entre Gran
Bretaña y los Estados Unidos que él es entre Gran Bretaña e India, dice, incluso si
el último es una parte del británico Commonwealth. Finalmente, el estado del “país
de” transmitir también tiene una importancia segura. De hecho, a pesar de que hay
excepciones, en el sector de movimiento social cuando en otros, moviendo de
centrar a periferia, del “primer” al mundo en desarrollo, trae un reduction en
influencia.
Todo de las características influencia mencionada justo tanto la difusión
directa a través de la interacción personal enfatizada por la literatura
tradicional, y la difusión indirecta por manera de los medios de comunicación
notados en estudios más recientes (Hebra y Meyer 1993). Según lo que la
interacción directa está preocupada, geográfico proximity, interacción
histórica, y semejanzas estructurales todos tienden para producir lengua y
normas qué facilitar contactos directos entre los activistas de movimiento
paralelo-ments. UnMedió los intercambios son rendered más probables por la
existencia de cruz-asociaciones de frontera, programas de intercambio cultural,
conocimiento lingüístico, o incluso una lengua común.
Los varios niveles de proximity discutidos encima también favorecer el
desarrollo de más formal contactos y organizó canales de comunicación. Más par-
ticularly, las relaciones devendrán más formales después de los contactos
personales tienen por-mitted intercambios iniciales para tener lugar y cuando los
movimientos devienen cada vez más estructuró. Difusión de las ideas entonces
pueden tener lugar a través de la traducción de documentos de movimiento, la
organización de conferencias internacionales, el crea-tion de ordenador-medió
redes, y tan encima. Medió formas de la difusión por tanto apechuga con
importancia creciente. Ha sido notadoth en en el 1960s el proceso de la difusión
entre movimientos estudiantiles estuvo iniciada a través de contactos personales,
pero que “una vez establecidos, esta identificación difusión habilitada para tener
lugar vía una variedad de nonrelational canales. Estos canales incluidos television,
diarios, y escrituras de ambos un eruditos y una naturaleza radical” (McAdam y
Rucht 1993: 71). Countersummits Y supranational los foros sociales son de hecho
alabados por activistas, especialmente tan ocasiones para intercambiar ideas y
networking (Pianta 2002).
Geográfico y cultural proximity es también importante en producir equivalencia
funcional, semejanza en la situación del “transmitiendo” y “adoptando” los
movimientos siendo un factor en facilitar este proceso de difusión. Además, el
mismo elements facilitar la construcción social de aquella semejanza, el defini-tion
de su situación como similar a aquello del transmisor en la parte de adopters (Hebra
y Meyer 1993). A toda costa de semejanzas reales, el subjetivos percep-tion de
comunes circumstances las ventajas a un ser de idea consideraron pertinentes y
188 UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST

Adoptado. El paso de ideas del movimiento estudiantil americano (el trans-


mitter) a su alemán counterpart (el adopter) erafa cilitated por las semejanzas
en la definición de las identidades colectivas de los dos grupos (McAdam y
Rucht 1993). De modo parecido, la apelación a identidades globales facilita
cruz-campañas nacionales contra neoliberal globalización (della Porta,
Andretta, Mosca, y Reiter 2005).
Las tradiciones de los movimientos particulares también ayudan para
explicar una propensión más grande o menor para intercambiar información y
para “copiar” cada cual otro en el nivel internacional. A pesar de apelaciones
a internationalism, por ejemplo, la condena que su destinies era más
estrechamente enlazado a aquellos de capitalistas en su país propio que ellos
eran a los trabajadores en otros países aparece para tener prevalecido en
movimientos de trabajo nacional para un tiempo largo. Grupos de ecologista,
por otro lado, siempre ha sido consciente de las dificultades en proporcionar
soluciones nacionales a problemas medioambientales, el cual extendido de país
a país por manera de pol-luted ríos y aire. El rico y varios repertorio de la
acción del movimiento de justicia global es de hecho el producto de realzó
ocasiones para encuentros transnacionales.

7.7 Ciclos de Protesta, Olas de Protesta, y


Campañas de Protesta

Las elecciones estratégicas hicieron por los movimientos sociales evolucionan con
el tiempo y es el resultado de interacción entre un número de actores diferentes. De
hecho, un concepto final, particularmente útil para analizar evolución con el
tiempo, tiene que ser introducido a con-clude el análisis de formas de acción
colectiva: el ciclo de protesta. Aun así variando en dimensión y duración, ciclos de
protesta han tenido un number de comunes char-acteristics en historia reciente:
coinciden con “una fase de contienda y conflicto aumentados a través del sistema
social que incluye: una difusión rápida de acción colectiva de más mobilized a
menos mobilized sectores; un quickened pace de innovación en las formas de
contienda; nuevo o marcos de acción colectivos transformados; una combinación
de organizado y unorganized participación; y secuencias de intensificó
interacciones entre challengers y autoridades cuáles pueden acabar en reforma,
repression y a veces revolución” (Tarrow 1994: 153). Si algunos becarios critican
el uso del concepto de un ciclo cuando pareciendo para implicar un regular,
“periódicamente secuencia recurrente de fenómenos” (Koopmans 2004: 21), no
obstante confirman el desiguales distribution de contienda con el tiempo: “periodos
de relativos tranquilos alternar con olas de movilización intensa que abarca
secciones grandes de sociedades, y bastante a menudo afectar muchas sociedades
simul-taneously” (ibid.: 21). Las olas de protesta son a menudo compuestos de
enterrelated cam-paigns – i.e. una serie de interacciones conectó a cada cual otro
del punto de vista temático y orientado hacia un objetivo común (Della Porta y
Rucht
UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST 189

2002un y 2002b). Los ejemplos de campañas son protestas encima derechos de


aborto en los movimientos de las mujeres, o contra el despliegue de crucero y
pershing II mis-siles en el movimiento de paz, o para “caer el dept” de menos-
desarrollado coun-prueba en el movimiento de justicia global. The Movimiento de
justicia global ha de hecho adoptó la campaña como fórmula qué es
particularmente eficaz en enlazar het-erogeneous movimiento y movimientos
sociales organizaciones.
Los conceptos de ciclos, olas, o hace campaña todos intentan para describir
y explicar periods de protesta intensificada. Cuando en culturas y las
economías,11 hay de hecho un recurrentes dinámicos de ebb y flujo en
movilización colectiva. En par-ticular, por demostrar la vulnerabilidad de las
autoridades, los primeros movimientos para emerger más bajo the costado de
acción colectiva para otros actores. Además, las victorias obtienen socavar el
orden anterior de cosas, provocando coun-termobilization. Repetidamente,
espín-de los movimientos contribuyeron a la movilización de otros grupos,
inventando formas nuevas de acción, ampliando las reclamaciones de protesta,
y ganando algunas concesiones, pero también empujando élites y
countermovements para formar ley-y-coaliciones de orden (della Porta 1998b).
La movilización procede en olas,

De conflicto institucional a cumbre entusiasta a derrumbamiento definitivo.


Después de obtener atención nacional y respuesta estatal, lograron cumbres de
chocar aquello estuvo marcado por la presencia de organizadores de movimiento
quién probó a difuso el insur-gencies a un público más ancho. Cuando la
participación era channeled a organizations, los movimientos, o parte de ellos,
tomó una lógica más política – comprometiendo en barra implícita-obteniendo
con autoridades. En cada caso, cuando la herida de ciclo abajo, la iniciativa
cambió a élites y partidos.
(Tarrow 1994: 168)

Este patrón ha consequences para los repertorios de acción colectiva. En las


etapas iniciales de protestar el más disruptive la táctica es a menudo delante.
Los actores nuevos inventan táctica nueva cuando emergiendo las identidades
colectivas requieren acción radical (Pizzorno 1978). Cuando el ciclo de protest
continúa, la reacción del authori-los lazos produce procesos simultáneos de
radicalization e institucionalización. Evolución en táctica de protesta, por
tanto, acompaña cambios en el entorno externo:

Cuándo disruptive las formas son primero empleadas, asustan antagonistas con su
coste potencial, espectadores de shock, y élites de preocupación se preocuparon con
orden público. Pero los diarios gradualmente empiezan para dar menos y menos
espacio a protestas que habría merecido titulares de pancarta cuándo ellos primero
aparecidos en las calles. Repitiendo la misma forma de acción colectiva encima y
encima reduce incertidumbre y está saludado con una sonrisa o un bostezo.
Participantes, al principio enthused e invigorated por su solidaridad y capacidad de
desafiar autoridades, devenidos jaded o disillusioned. Las autoridades, en vez de
llamar fuera de las tropas o dejando la policía para acometer un
190 UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST

Multitud, infiltra disentir grupos y dirigentes separados de seguidores.


Routiniza-tion Sigue duro a disrupción.
(Tarrow 1994: 112)

El análisis de ciclos de protesta es particularmente útil para un entendiendo del


desarrollo de violencia política, frecuentemente un (aun así no el único ni la
mayoría de importante) de protesta outcomes. De hecho, las formas de violencia
utilizaron tender para variar según la etapa del ciclo. En el principio de protesta, la
acción violenta es normalmente limitada en su presencia, pequeño en alcance, y
unplanned. Típicamente la violencia en estas fases es un imprevisto result de acción
directa como sentar-ins u ocupaciones. Cuando la protesta desarrolla, formas
violentas de la acción inicialmente extendida más despacio que nonviolent unos.
Frecuentemente toman la forma de enfrentamientos entre manifestantes y policía o
contador-manifestantes. Inicioing fuera tan ocasional, tales episodios, empero,
tiende para ser repetido y apechugar con una calidad ritual. Durante este proceso
los grupos pequeños empiezan para especializar en cada vez más táctica extrema,
complexión arriba de un armory para tal acción, y ocasionalmente ir subterráneo.
El muy la presencia de estos grupos acelera el éxodo de modera del movimiento,
contribuyendo a una desmovilización qué sólo los grupos más violentos escapada
(al menos temporalmente). Las etapas finales del ciclo así ve ambos un proceso de
instituciónalization y un número de crecer de acciones violentas.
Una mirada en el desarrollo del movimiento de justicia global confirmaría al
menos algunos de esta dinámica. El incubatory las etapas de movilización
estuvieron caracterizadas por actividad qué concentrado prevalently encima
información cam-paigns y cabildeo, con único un handful de las manifestaciones
simbólicas llevaron a cabo por redes de activista pequeño. El movimiento
extendido allende su base inicial durante esta fase, mobilizing agrupa implicado en
movimientos más tempranos (las mujeresm ove-ment y el movimiento
medioambiental, pero también el movimiento de trabajo) o en partidos políticos y
asociaciones religiosas. Cada cual de estos actores contribuyó par-ticular formas
de acción a un repertorio común: los grupos feministas trajeron las prácticas de
civil desobediencia hubieron honed en la campaña para legalizar abor-tion; las
asociaciones religiosas trajeron con ellos los evangelios; el environmen-talists la
práctica de nonviolent ocupación anteriormente habían utilizado contra poder
nuclear-sitios de estación; el parties del dejado mobilized una masa que sigue y
ofreció canales de comunicación con instituciones públicas. A pesar de que el het-
erogeneity del varios constituencies implicó inevitablemente dirigido a
desacuerdos sobre qué formas de acción tendrían que ser adoptadas, this la
diversidad enriquecida más que obstaculizó la capacidad del movimiento para
movilización durante su fase expansiva. Después de su indecisión inicial, los
gobiernos reaccionaron por ordenar policía inter-vention, particularmente para
suprimir los intentos en bloqueadores el sites de interna-tional cumbres. Mientras
quedando en general pacífico, nonviolent desobediencia civil escalated encima
algunas ocasiones, sobre todo cuándo la policía reaccionó en una moda muscular a
ataques por fleco grupos anarquistas.
UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST 191

Al menos dos tendencias tienen que ser añadidas al cyclical la evolución


describió tan lejos. Primero, cada ciclo amplía el repertorio de acción colectiva.
Esto era tan cierto de los países de Pacto de Varsovia en los años alrededor 1989
cuando haya sido de las olas de protestar cuál barrió Europa y los Estados Unidos
en el 1930s y el 1960s. Es de hecho especialmente en la cumbre de una ola de
movilización que los ciudadanos desarrollan formas nuevas de acción colectiva:
“Las ocupaciones de fábrica que marked el franceses 1936 huelgas eran similares
al sentar-abajo huelgas de Sílex y Akron; mientras las ocupaciones universitarias
de Berlín, Turin y París en 1968 alumnado enlazado a su americano homologues.
En cuanto a Solidaridad, su la mayoría de característica llamativa probaría para ser
el roundtable discusiones entre dirigentes de Solidaridad y el gobierno que presagió
las formas de negociaciones que barrió Europa Oriental en 1989” (Tarrow 1994:
167–8).
Segundo, la mayoría de formas radicales de acción declinaron, al menos
entre izquierda unctivists. En el 1970s allí había sido una tendencia para
mantener atención de medios de comunicación y “potencial de amenaza” a
través de una acentuación de formas extremas de acción. Desde el 1980s, varias
formas de protesta han extendido a institucionales así como noninsti-tutional
actors, y más los tipos de movimientos sociales nuevos atestiguan a una
moderación de crecer en los repertorios de acción colectiva (della Porta
1996un, 1996b, y 1996c; también Raschke 1988: 322–32). De hecho, en esta
área la lógica es más dinámica, con un crecimiento en el primer caso en
acciones qué implicar riesgos personales serios o coste. Desobediencia civil,
deliberadamente rompiendo qué está considerado para ser unjust leyes, restos
en esta lógica.
Esto no significa, aun así, que el uso de la violencia como medio político
declinó. Cuando Charles Tilly (2003: 58) tristemente summarized, desde
entonces 1945 “el mundial globalmente ha tomado decisivo, asustando pasos
fuera de su dolorosamente consiguió segregaciones entre ejércitos y
poblaciones de civil, entre guerra y paz, entre internacionales y civiles war,
entre letales y nonlethal aplicaciones de fuerza. Ha movido hacia lucha armada
dentro existiendo estados y hacia estatales-asesinato patrocinado, privación, o
expulsión de categorías de población entera.”

7.8 Resumen

El capítulo presente ha sido dedicado al análisis de las formas principales de la


acción adoptada por movimientos sociales; en otras palabras,, a formas de protesta.
La protesta ha sido definida como nonroutinized acción en qué canales indirectos
de influencia están abiertos a través de la actividad de un series de actores
colectivos. A pesar de que formas de protesta son tan extendidas que sea difícil de
definirles tan unconven-tional, es todavía cierto que la protesta va allende el
routinized formas de participa-tion en democracia representativa. Ha sido dicho
then la táctica utilizada por repertorios de forma de movimientos sociales con
características concretas. En particular, un
192 UnCTION FORMS, REPERTOIRES, CYCLES DE P ROTEST

Repertorio de nacional, autónomo, y las formas modulares de protesta ha


desarrollado desde el decimonoveno siglo. Transformaciones más recientes en
ambos el distribu-tion de poder en nivel nacional e internacional y en la estructura
de comunicaciones de masa está reflejada en el desarrollo de formas nuevas de
protesta como countersummits y boicots transnacionales, así como en acciones de
protesta del internet. En distinguir en este capítulo entre las varias formas de
protesta, el hecho que las lógicas diferentes de acción eran simultáneamente
presentes en cada reper-toire estuvo acentuado: la lógica de numbers, el cual busca
para mostrar la fuerza de soporte para un movimiento; la lógica de daño material,
basado en la capacidad de interrumpir rutina diaria; y la lógica de aguantar testigo,
el cual busca para demostrar el compromiso emocional de protestors.
Tancial dirigentes de movimiento afrontan una serie de dilemas estratégicos en
escoger un u otra forma de acción, porque cada cual envía mensajes a públicos
diferentes con demandas diferentes: los activistas de movimiento quiénes buscan
para reforzar interno soli-darity; los medios de comunicación, ens earch de
“noticiosos”; aliados potenciales, quiénes prefieren más moder-comió formas de
acción; y, finalmente, decisión-fabricantes, quiénes buscan socios quien pueden
confiar en. Aun así, repertorios de las acciones no son instrumentos justos de
protesta, pero también reflejar los activistas' valores. Tradiciones históricas
fostered a través de las instituciones y la socialización limitan la gama de opciones
que puede ser considerado, pero formas de viaje de protesta de un movimiento al
otro y de un país al otro, con aprendizaje e innovación frecuentes processes.
Además, los repertorios están producidos vía mecanismos relacionales, durante
interacciones entre varios (movimiento y nonmovement) actores. Serie de cyclical
las dinámicas crean un suc-cesión de olas y troughs en protesta, y radicalization e
institutionaliza-tion en las formas de acción adoptaron. Junto a estos cyclical
fluctuaciones, aun así, dos tendencias más estables aparecen para aplicar, al menos
según lo que las democracias Occidentales están preocupadas, con un
ensanchamiento del repertorio de acción de protesta y simultaneously un rechazo
de crecer de violencia política.
8
EL POLICING DE
PROTESTA Y
OPORTUNIDADES
POLÍTICAS PARA
MOVIMIENTOS SOCIALES

El 2001 G8 cumbre estuvo aguantada en Genoa entre julio 19 y 22. Un


año más temprano, en la reunión internacional en Portuario Alegre de
qué vino para ser sabido como el movimiento de justicia global, haya
sido decidido a mobilize a escala internacional contra el neoliberal
versión de globalización. Aproximadamente 800 organizaciones
combinaron al Genoa Foro Social (GSF), el cual organizó la protesta
junto con otros grupos.1
Dado que cumbres internacionales sobre el anteriores dos años hubieron
un poco-el tiempo sido conocido con protestas violentas, las preparaciones
del gobierno para el G8 concentró encima manteniendo manifestantes fuera
del área, y la mayoría de radical fuera de la ciudad él. Además de instalar
alto barri-ers para proteger el tan-zona “roja llamada” alrededor de las
reuniones de cumbre, el aeropuerto, estaciones de ferrocarril, y salidas de
autopista estuvieron cerradas, y ambos con-firmed und sospechó los
activistas estuvieron regresados a los límites de ciudad. En su tes-timony a
una Junta Comisión Parlamentaria, Jefe De Gennaro de la Policía italiana
habló de 140,000 controles hechos y más de 2,000 personas giraron atrás.
Órdenes de expulsión solieron mantener tanme militantes de introducir
Genoa. Con el centro de ciudad cerrado y acceso a la ciudad estrechamente
controlada, Genoa emptied: dos vísperas el inicio de la cumbre, elec-trical
consumo y eliminación de residuos habían pasado por 40 por ciento.
A pesar del imponiendo show de fuerza y la tensión causada por algunos
ataques antes del inicio de la cumbre, así como un poco alarmista infor-mation
del Servicio Secreto (en la Junta Comisión Parlamentaria [minutos de agosto 28,
2001: 66], cabeza anterior de la policía política, el UCIGOS, La Barbera, habló
de “una inundación de información mayoritariamente fallando para proporcionar
cualquier resultado”), la marcha pacífica encima julio 19 incluido 50,000
personas. Aun así, esta situación cambió radicalmente el día siguiente debido a
qué diarios describió como el provocaciones del Bloque Negro radical, fol-lowed
por indiscriminate respuestas de policía. Según valoraciones de prensas,
194 TÉL POLICING DE P ROTEST

Entre 400 y 1,000 Bloque Negro los miembros estuvieron implicados; la


policía habló de 500 italianos y 2,000 extranjeros. En la mañana de julio
20 eran unchallenged en atacar bancos, tiendas, la prisión, y complexión
pública-ings. Para el día entero, los acontecimientos siguieron un patrón
similar: después de los ataques de Bloque Negros, la policía respondió
por poner a aquellos en o paz cercana-ful protestas, incluyendo doctores,
enfermeros, paramedics, fotógrafos, y periodistas.
La lucha con el tan-desobediencia “civil llamada protestors,” ceñido y
repetidamente cobrado, empezó de este modo. Después del cargo policial,
algunos grupos de manifestantes reaccionaron por echar piedras, provocando
la policía para utilizar coches blindados. Durante una incursión, un
carabinieri el jeep devino enganchado y sus ocupantes estuvieron atacados
por manifestantes. Uno del cara-binieri interior fuego abierto, asesinato de
23 años Genovese activista Carlo Giu-liani. Dentro de la zona roja, la policía
cañón de agua utilizada cargado con chemicals contra manifestantes del
transnacionales ATTAC y los sindicatos italianos, quién golpeaba en las
vallas y echando cloves de ajo. Los Demócratas de la Izquierda (DS) alcalde
Pericù, quién había intentado negociar con los organizadores, renegó unbout
la ausencia de negotia-tors de jefatura de policía. En el anochecer, el
movimiento spokesper-los hijos eran prudentes a distancia ellos del Bloque
Negro, pero también criticó las acciones policiales. Según el gobierno, el
responsi-bility para el desorden era el GSF es. El centro más grande-partido
izquierdo, el DS, retiró su soporte para la manifestación del día siguiente,
instruyendo sus miembros no para ir a Genoa.
En el julio 21 manifestación, entre 200,000 y 300,000 demonstra-tors
reunió. (Los organizadores reclamaron que 100,000 personas estuvieron
esperadas, mientras el jefe policial reclamó que no más de 40,000 atendió.)
Otra vez, había ataques por el Bloque Negro, el cual los manifestantes
intentaron impedir. La policía este tiempo utilizó lágrima y coches blindados
el gas despedido de hel-icopters y los mantuvo en una distancia de los
manifestantes. El primer cargo, en 2:25 p.m., tuvo lugar como la marcha
estuvo a punto de activada; los cargos similares tuvieron lugar en 2:50 y 5:35
p.m. Los papeles diarios – y no justo aquellos supporting las manifestaciones
– intentos numerosos informados por el movimiento, el cual había formado
su fuerza de seguridad rudimentaria propia, para empujar atrás violento
protestors y para rescatar los manifestantes y los abogados que son batidos
por policía. Los totales del día vinieron a 228 hiered (incluyendo 78 agentes
de policía) y 60 arrestos.
En el anochecer de julio 21, la policía irrumpida el Diaz Escuela, donde
el GSF, su equipo de asesoría jurídica, el Indymedia grupo de prensa, y un
dormitory para protestors estuvo basado, buscando armas. La prensa
describió el comportamiento de la policía tan particularmente brutal – una
descripción apoyada por
TÉL POLICING DE P ROTEST 195

Algunos parlamentarios quién era presente. Según el informe por


Inspector de Ministerio del Interior Pippo Micalizio: “De las 93 personas
detenidas y arrestados en el edificio, 62 (alrededor 66 por ciento) [había
sido herido y] estuvo referido con pronósticos médicos variables: 24 por
ciento hasta 5 recuperación de días; 36 por ciento entre 6 y 10 días; 11
por ciento entre 11 y 20 días; 18 por ciento de 21 a 40 días; 6 por ciento
estuvieron dados el todo-claro. Aun así, los pronósticos eran inciertos
para el restantes 5 por ciento.” El cargo era conspiración para cometer
actos de saquear; pero magistrados imme-diately liberó 92 de los 93
detenidos. El police confiscó el disco duro de los abogados' ordenador,
mientras el Indymedia los ordenadores estuvieron destruidos.
En los días que seguidos, varios testimonios estuvieron publicados
recount-ing civiles' mistreatment en el Bolzaneto cuartel, donde un centro
para identifying los detenidos habían sido instalados, operados por un grupo
de penitentiary agentes del GOM (Unidad de Operaciones Móviles).
Declaraciones de testigo, muchos de ellos de extranjeros, descritos
agresiones físicas y psicológicas. Utilizando gas de lágrima y truncheons, y
obligatoriedad detainees para quedarse en sus pies para horas, la policía
obligó aquel ser aguantó para repetir eslóganes fascistas y racistas. La policía
que maneja de las manifestaciones levantaron protestas en Italia y en el
extranjero. En diciembre 2004, 28 policías italianos, incluyendo disturbio
sénior und antiterrorist agentes, estuvo probado en cargos de abuso de
autoridad, calumnia, e implicación en daño severo para su función en la
agresión en la escuela. El anuncio de la prueba vino en el conclu-sion de
oídos preliminares, donde sea alegad que la policía había plantado dos
molotov cócteles reclamaron para tener encontrado en la escuela. La
reclamación por uno agente de policía sénior que un activista había intentado
acuchillar le era también desacreditó. Todos los activistas arrestaron durante
la redada en la escuela era released sin cargos.

El Genoa las manifestaciones representaron una rotura importante (albeit un


previsible un) con la imagen de movimientos sociales en el 1980s y 1990s, el cual
había retratado les tan integrado y “civilizado,” más en facilidad en el bargaining
mesa que en las calles. Después de que décadas de predominantemente actividades
pacíficas, el énfasis ahora ha sido puesto en los peligros del radicalization de
conflicto político y social. En reciente countersummits ha habido enfrentamientos
frecuentes entre policía y demonstrators, incluyendo en las manifestaciones contra
el WTO en Seattle en 1999; en Davos en el Foro Económico Mundial; en Praga y
en Washington en la reunión del comité internacional del Banco Mundial y el IMF
en
196 TÉL POLICING DE P ROTEST

2000; en Quebec Ciudad en el NAFTA reuniones; y en Gothenburg en la


cumbre de UE en junio 2001.
Qué cuentas para esta evolución en las características de movilización y las
respuestas a él? Naturalmente, las estrategias particulares de sociales movements
puede tener un impacto en la medida y forma de movilización. Cuando notado en
capítulos más tempranos, ide-ology, repertorios, y las estructuras constituyen
recursos materiales y culturales para acción, los cuales varían de país a país.
Además, estructura social, el degree de cultura cívica, y desarrollo económico, ha
ayudado en explicar protesta (Moore 1966; Skocpol 1979; ve también capítulo 2
encima). En intentar para seleccionar el más influyente de los muchos
determinantes de acción colectiva, bastante un número de comparative los análisis
de movimientos sociales han concentrado en variables políticas. Ya ha sido notado
que las actividades de movimiento social-ments es en separar expresivo; en separar
instrumental; en separar dirigido en sus miembros propios; en separar diseñado
para transformar tél entorno externo. En sus actividades de protesta los
movimientos sociales son eminently políticos: cuando tal son influ-enced por e
influencia en primer lugar el sistema político. Cuando estuvo notado en el capítulo
introductorio, el concepto de político opportunity la estructura ha devenido central
a interpretaciones de interacción entre institucional y actores no institucionales.
Por tomar ilustraciones principalmente de countersummits contra neoliberal
globalización, lo que sigue buscará para identificar el principal variables del politi-
cal sistema y sugerir algunas hipótesis en el camino influyen características
particulares de movimientos sociales. Un problema en la búsqueda en político
oppor-tunities es una carencia de claridad respecto del explanandum
(recientemente también discussed en Meyer 2004). La dimensión política ha sido
investigada para explicar un número de crecer de variables dependientes. Las
oportunidades políticas han solido explica movilización de movimiento social
(Eisinger 1973), la aparición de la protesta cycle (Tarrow 1983), la relación entre
aliados' actitudes y comportamiento de movimiento (della Porta y Rucht 1995), y
el predominio de cualquier confrontational o assimilative estrategias de protesta
(Kitschelt 1986: 67–8). Y, de hecho, de qué tiene sido said aquí es claro que el
carácter de instituciones, prevaleciendo estrategias, variedades de represión, y
estructuras de alianza son todo útiles para explicar un u otro de las características
de movimientos sociales. Pocos intentos han sido hechos hasta que ahora,
quénunca, para dirigir la cuestión del cual variables en el conjunto complejo de
político opportu-nities, explicar qué (del numeroso) características de movimientos
sociales. En lo que sigue, probaremos a solos fuera de los efectos concretos de
concretos opportu-nities encima aparición de movimientos, niveles de
movilización, repertorios de protesta, y posibilidades de éxito. Principio con un
análisis del policing de protesta (8.1), entonces identificaremos algunas
características del institucionales opportu-nities (8.2) así como prevaleciendo
estrategias (8.3). La función de los partidos políticos como aliados potenciales
serán hablados a fondo (8.4). Cuando acentuaremos, aun así,
TÉL POLICING DE P ROTEST 197

Las oportunidades políticas distan mucho de estructurales, en el sentido of


tanto inmutable y “dado”: no sólo es sus efectos filtraron a través de los
activistas' percepciones, pero además interaccionan con “discursive oppor-
tunity” (8.5).

8.1 El Policing de Protesta

Cuando el Genoa el ejemplo ilustra, un aspecto importante de la respuesta del


estado a la protesta es el policing de protesta, o la policía que maneja de
acontecimientos de protesta – más plazos neutros para qué protestors normalmente
referir a tan “represión” y el estatal cuando “orden público” (della Porta 1995,
1996c; Earl, Soule, y McCarthy 2003). Protesta policing es un asunto
particularmente pertinente para comprensivo la relación entre movimientos
sociales y el estado. Según Lipsky (1970: 1) el

El estudio de la policía de maneras interacciona con otros ciudadanos es de


importancia primaria para anyone preocupado con política pública y la
resolución justa de conflicto urbano contemporáneo. La policía puede ser
concebida tan ‘calle-nivel bureaucrats' quiénes ‘representan' gobierno a
personas. Y al mismo tiempo cuando implementan gobierno poli-cies, la policía
fuerza altan la ayuda define los plazos de conflicto urbano por sus acciones. La
influencia de la policía en desarrollos y actitudes políticos es fundamental debido
a la función única de agencias de aplicación de la ley en aplicar y reforzando las
normas del sistema.

Uno can añadir que, en su vuelta, olas de protesta han tenido efectos
importantes en organizaciones policiales (ve, por ejemplo, Morgan 1987;
Reiner 1998).
De hecho, los varios estilos de intervención policial han recibido alguna
atención en la literatura sociológica. Gary T. Marx (1979), trabajando de un
phenomeno-perspectiva lógica, actos señalados de represión según su
propósito: creando un unfavorable imagen de adversarios; información
creciente; restringiendo el flujo de recursos para movimientos; desalentando
activists; alimentando conflictos internos dentro del liderazgo y entre grupos;
sabotaging acciones concretas. Charles Tilly (1978: 106–15) regímenes
políticos clasificados según el grado de represión o “facilitación” manifiestan
hacia diferentes collective actores y acciones.
La búsqueda ha elegido fuera tres áreas estratégicas principales para control de
protesta, favoreció de manera diferente por la policía en varios periodos históricos
(della Porta y Reiter 1998un): estrategias coactivas, i.e. uso de armas y fuerza física
para controlar o dispersar manifestaciones; persuasive estrategias, significando
todos intentos de controlar protesta a través de contactos previos con activistas y
organizadores; informativo strate-gies, consistiendo en información extendida-
creciente como característica preventiva enp rotest control; y la colección apuntada
de información, incluyendo uso de
198 TÉL POLICING DE P ROTEST

Tecnologías audiovisuales modernas, para identificar ley-rompientes sin


teniendo que intervenir directamente.
Las acciones policiales pueden variar en plazos de forzar utilizado (brutal o
blando), extensión de conducir considerado como ilegítimo (variando entre
represión y tolerancia), estrategias para controlar varios actores (generalizados
o selectivos), respeto policial para la ley (ilegal o legal), momento cuándo acto
policial (preemptive o reactivo), grado de comunicación con manifestantes
(confrontación o consenso), capacidad de ajustar a emerger situaciones
(rígidos o flexibles), grado de formaliza-tion de reglas del juego (formal o
informal), grado de formación (professional o improvisado) (della Porta y
Reiter 1998b: 4).
Ha sido notado que la combinación de estas dimensiones tiende para definir dos
diferente, internamente modelos compatibles para controlar orden público. El esca-
lated-modelo de fuerza da prioridad baja a la derecha para demostrar, las formas
innovadoras de protesta son mal tolerados, comunicación entre policía y
demonstra-tors está reducido a essentials, hay uso frecuente de medio coactivo o
incluso métodos ilegales (como agentes provocateurs). El modelo de control
negociado, por contraste, ve el correcto de demostrar pacíficamente como
prioridad; incluso disruptive las formas de protesta están toleradas, la
comunicación entre manifestantes y policía es con-sidered básico a conducta
pacífica de protesta, y el medio coactivo está evitado lo más lejos posible,
enfatizando selectividad de operaciones (McPhail, Schweingruber, y McCarthy
1998, 51–4; della Porta y Fillieule 2004). A estas dimensiones un podría añadir el
tipo de fuerzas de policía de estrategia de información emplea en con-trolling
protesta, con una distinción entre control generalizado encima todo demonio-
strators y el control que centra en aquellos posiblemente culpable de un offense.
En democracias Occidentales, una transformación radical en estrategias para
controlar orden público y asociado operational prácticas y técnicas, del esca-lated-
modelo de fuerza a control negociado, puede ser notado, particularmente siguiendo
la ola de protesta grande que culminado en el tardío 1960s. Mientras el extendido
con-ception de derechos de demostrar uno es dissent ha tendido para devenir más
inclu-sive, estrategias de intervención han apartado del modelo coactivo hasta
entonces predominante. Durante el 1970s y 1980s, aun así con pausas y
provisionales reversals, podemos notar una tendencia hacia crecer tolerancia y
rupturaes del ser de ley consideró tan menor. Entre los cambios aparentes en
estrategias para control-ling el orden público es una reducción en el uso de fuerza,
énfasis más grande en “dia-logue,” y la inversión de recursos grandes en
información creciente (della Porta y Reiter 1998un). Estas estrategias, oficialmente
llamados de-escalation (o también, en el caso italiano, prevención), está basado en
un número de concreto pathways y suposiciones. Antes de que acontecimientos de
protesta, representantes de manifestante y la policía tienen que conocer y negotiate
en detalle en rutas y conducta para ser observados durante manifestaciones
(incluyendo las vulneraciones más o menos simbólicas permitted a manifestantes),
los cargos nunca son para ser hechos contra grupos pacíficos, estar de acuerdo-
ments logrado con dirigentes de manifestación nunca son para ser rotos, y líneas
de
TÉL POLICING DE P ROTEST 199

Comunicación entre ellos y la policía tienen que ser mantenidos abiertos


durante la manifestación. La policía en primer lugar tiene que garantizar el
correcto a demonio-strate pacíficamente; los grupos violentos tienen que ser
separados del resto de la marcha y parado sin endangering la seguridad de los
manifestantes pacíficos (Fillieule 1993un; Fillieule y Jobard 1998, McPhail et
al. 1998, Waddington 1994, Invierno 1998, della Porta 1998un).
WhEn estuvo visto por muchos como el correo “consolidado-68” estándar, ya
no subject de debatir, probado frágil cuándo afrontado con el reto nuevo de un
transna-tional movimiento de protesta. El Genoa G8 reignited un debate casi
olvidado en los derechos fundamentales de citizens y la cuestión de cuánto poder
el estado está dejado en proteger la regla de ley (Andretta, della Porta, Mosca, y
Reiter 2003, ch. 4). Qué producido el escalation en Genoa y anteriormente en
Seattle, Washington, Quebec Ciudad, Praga, y godoenburg, así como el muchos
accusations de brutalidad policial contra los manifestantes? Varias explicaciones
podrían ser sugeridas. Primero, incluso “policing por consentimiento”
(Waddington 1998) es una estrategia policial para controlar protesta, albeit
mientras respetando demonstrators' derechos y libertades tanto como sea posible.
Hay conflictos frecuentes entre demonio-strators y policía: las situaciones pueden
ser particularmente tensar cuándo el territorio en una protesta tiene un valor
simbólico y estratégico particular – cuando es el caso, para caso, con las “zonas
rojas” cerraron a los manifestantes alrededor de cumbres internacionales. Además,
incluso si el control coactivo es raramente utilizado, su uso fácilmente dirige a
escalation debido a la dinámica psicológica conectada con luchas físicas en
condiciones de anonimato relativo (ibid.). Los acontecimientos del 1990s dirigido
a la militarización (en plazos de tipo de equipamiento, formación, y despliegue) de
algunas unidades policiales spe-cializing en counterterrorism o luchando delito
organizado violento; estas herramientas eran entonces a menudo desplegados en
diarios policing.
Tenemos que añadir que el desarrollo de negociar la estrategia siempre ha
sido selectiva. Incluso en estableció democracias, escalated fuerza sobrevivido
en los márgenes, en particular en el control de joven squatters u hooligans. De
hecho, research ha señalado a la supervivencia, en conocimiento policial
aproximadamente protesta, de un dis-tinciones entre “manifestantes” buenos
(pacíficos, pragmáticos, con un interés directo en el conflicto y un objetivo
claro, etc.) y “manifestantes” malos (predom-inantly jóvenes, misinformó,
destructivo, profesional troublemakers sin interés directo en el conflicto, etc.)
(della Porta 1998un; della Porta y Reiter 1998b). Participantes en emerger
movimientos, como el movimiento de justicia global-ment aquello devenía
visible en Seattle y Genoa, tiende de hecho para llevar el estigma de “malo,” y
a menudo “peligroso,” manifestantes.
Pero qué es los efectos de protesta policing? Cambios en el repressive capa-
bilities de los regímenes son un factor importante en explicar la aparición de
movimientos sociales. En Francia, Rusia, y China, la revolución social rompió
fuera cuándo polit-ical la crisis debilitó control estatal y repressive poder (Skocpol
1979). Así mismo, una incapacidad para mantener el control social facilitó el
aumento de los derechos civiles
200 THE POLICING DE P ROTEST

Movimiento en los Estados Unidos (McAdam 1982).2 Y en Italia, el ciclo de


protesta del tardío 1960s primero emergido como más tolerant estilo de
policing era desarrollar-ing (della Porta 1995).
Según lo que los niveles de movilización están preocupados, tél estilos más
duros de protesta policing ought para aumentar el riesgo de acción colectiva y
disminuir el disposi-tion de actores para participar. Aun así, tenga que ser añadido
que muchas formas de represión, particularmente cuándo están considerados
ilegítimos, could crea un sentido de injusticia que aumentos el riesgo percibido de
inacción (p. ej. Khawaja 1994). No está sorprendiendo por tanto que estos dos
presiones divergentes producto contra-dictory resultados, y la búsqueda empírica
indica un radicalization de aquellos groups más expuesto a violencia policial en
algunos casos y renuncia de unconven-tional formas de acción en otros (Wilson
1976). De hecho, la relación entre el grado de violencia en protesta y la
intervención coactiva por las autoridades aparecería para ser curvilíneo (Neidhardt
1989).
Influencia de estrategias de control institucional estrategias de protesta
especialmente. Primero, afectan los modelos organizativos adoptaron dentro de
movimientos. Esto era el caso con republicanismo francés en el decimonoveno
siglo, dónde “la represión intensificada típicamente reforzó la función de
sociedades secretas y centros informales de sociability como cafeterías, vintners, y
cabarets” (Aminzade 1995: 42); por otro lado, “la extensión de sufragio macho
universal y libertades civiles así como una geografía nueva de representación
fostered el desarrollo de más formal organi-zation” (1995: 59). En tiempo más
reciente, también, la represión ha dirigido a un proceso de “encapsulación” de
organización de movimiento social, en algunos casos al punto de ir underground
(della Porta 1990, 1995; Neidhardt 1981). En el movimiento de justicia global,
grupos como el Bloque Negro que escoge utilizar estrategias violentas, adoptar un
muy fluido y semiclandestine forma de organización que es resistente a
investigación policial. Strong La represión es más probablemente para ser exitoso
cuándo un ciclo de la protesta no ha sido todavía iniciado, y solidaridades alrededor
movimiento identi-los lazos son por tanto no todavía bastante fuertes;
“indiscriminate la represión probablemente puede provocar más lejana popular
mobilizatión sólo durante la fase de ascendente del ciclo de protesta” (Brokett
1995: 131–2).
Estrategias de represión también repertorios de influencia de acción. Un estudio
comparativo de Alemania e Italia (della Porta 1995), para caso, indicó que duro
policing techniques tiende para desalentar protesta de masa pacífica y al mismo
tiempo animar los flecos más radicales de protesta. Radicalization Entre
movimientos sociales en Italia en el 1970s coincidido con un periodo de represión
más dura durante qué la policía matada un number de manifestantes en marchas
públicas. Además, la creencia que el estado conducía una “guerra sucia” envenenó
rela-tionships entre eligió políticos y activistas de movimiento. En Alemania, por
otro lado, las actitudes reformistas del socialesdemocr en y liberales gobernar-ment
y un tolerant, selectivo, y “estilo” blando de protesta policing estuvo reflejado en
un nivel comparativamente más bajo de radicalization en el sector de movimiento
social. En ambos países el punto culminante de la represión coincidida con un
encogering del
TÉL POLICING DE P ROTEST 201

Movimientos' más ala moderada, una disminución que indirectamente ayudó


los elementos más extremos para prevalecer, particularmente en Italia durante
el 1970s. Los niveles más bajos de la violencia en la 1980s correspondió en
cambio a una tolerancia creciente de protesta. En el movimiento de justicia
global, escalation desarrolló otra vez en el curso de las interacciones físicas
con la policía fuerza desplegadas para manifestantes de bloque de introducir la
parte del cities donde IGO las reuniones tenían lugar.
La intervención policial influye el muy objetivos de protestors, cuyos cambios
de foco de política y asuntos solos demandas al “meta-asunto” de lo protestar. En
su estudio del Chicano movimiento en Los Ángeles, Edward Escobar ha declarado
que en “un dialectical relación, mientras la táctica del Departamento de Policía del
Los Ángeles parcialmente consiguió el objetivo de socavar el Chicano movimiento,
la policía y su táctica devenían un asunto alrededor de qué Chicano activistas
organized la hierba comunitaria y aumentada-participación de raíces en actividad
de movimiento” (Escobar 1993: 1485). En conclusión, más tolerant y estilos
selectivos de protesta policing ha facilitado la integración de movimientos sociales
dentro de una estructura compleja de political bargaining. Esto ha legitimado
formas seguras de protesta y dirigido a la estigmatización de violencia, cada vez
más visto como forma de deviancy (della Porta y Reiter 1998b).
Finalmente, según lo que éxito de movimiento está preocupado, Tilly (1978) ha
suggested un inverse relación entre las oportunidades para acceder al sistema y
coercion. Esta relación no siempre parece para aguantar cierto, aun así. Compara-
tive Transparencia para acceder desde abajo no necesariamente corresponder a
represión menor: enel c ontrary, la disponibilidad de los instrumentos de
democracia directa pueden delegitimize protesta en los ojos del gobierno y la
opinión pública, produciendo pide orden público (cuando ha sido el caso, para caso,
en la parte que habla alemana de Suiza; ve Wisler y Kriesi 1998).

8.2 Instituciones Políticas y


Movimientos Sociales

La policía es naturalmente no autónomo: en formas y grados variables,


dependen de instituciones políticas que poder (y a menudo ) reacciona para
protestar no sólo vía policía deployment, pero también con reformas de
política. Respuestas de orden público son por tanto enlazadas a la respuesta
política dada al movimiento en cuestión. Aquí movemos a otro nivel de
análisis, dirigiendo las instituciones políticas.
Alexis de Tocqueville el contraste famoso entre “americano” débil gobierna-ment
y “el gobierno” francés fuerte es normalmente un punto de partida implícito o explícito
para análisis qué enlace los factores institucionales y el movimiento social desarrollan-
ment (Kriesi 2004: 71). Postulating Una oposición between estado y sociedad civil,
Tocqueville consideró que un sistema en qué el estado era sociedad débil y civil
202 TÉL POLICING DE P ROTEST

Fuerte (los Estados Unidos) afrontaría un constante pero pacífico flux de protestar
desde abajo. Dónde the el estado era sociedad fuerte y civil débil (Francia), por
otro lado, episodic y violento repugna resultaría. Sidney Tarrow (1994: 62–5) ha
convincentemente criticó esta hipótesis, reclamando que Tocqueville el análisis
era parcial incluso en respeto de la situación histórica al cual el autor refirió. No
sólo hace la Guerra Civil americana levanta dudas sobre la capacidad de un
“estado” débil para integrar que choca intereses, pero también los estudios
recientes de la Revolución francesa han demostrado la existencia de una sociedad
civil muy robusta en aquel país. Tan Tarrow comentarios, en ambos países el
estatales y los derechos de sus ciudadanos crecieron en pasos: conscription
mobilized ciudadanos como soldados, estimulando demandas nuevas; el sistema
fiscal unificado creó un solo target para protesta; con-flict dentro de las élites
empujaron los varios partidos implicaron para apelar a opinión pública,
extendiendo la franquicia; el medio de la comunicación construida por el estado
era también utilizado por challengers; formas nuevas de agregación y expresión
were legitimized por elecciones; la creación de unidades administrativas nuevas
dirigió al cre-ation de identidades colectivas nuevas.
Si Tocqueville aparece para tener “exagerado” las características de ambas
Francia y los Estados Unidos para construir una dicotomía entre el “bueno” y el
“estado” malo, la idea que la fuerza o debilidad de estados influ-ence estrategias
de movimiento social queda centrales a la literatura en acción colectiva en general
y en revoluciones en particular. Esta aproximación, “à la Toc-queville,”
frecuentemente ha sido enlazado a una concepción de pluralista que un número
grande de puntos de acceder al sistema político es una indicación de
“transparencia.”
Mucho caso estudia qué categorías de uso que refiere al “poder del estado” es
realmente referring al poder del ejecutivo central. En general, un sistema ha sido
considerado más abierto (y menos repressive) las decisiones más políticas están
dispersadas. El prevalent la creencia es que el más grande el número de actores
quiénes comparten poder político (elgrande er los controles y equilibrios), el más
grandes la posibilidad que acceso de beneficio de movimientos social al sistema.
Aun así, mientras un débil execu-tive puede aliviar acceso al proceso que hace
decisión, tenga poca esperanza de implementar políticas para conocer demandas
de movimiento social.3 Las hipótesis con-cerning los efectos de variables
institucionales en la evolución de cubierta de movimientos sociales tres áreas
principales: descentralización territorial de poder, funcional disper-sal de poder, y
la extensión de poder en las manos del state (Kitschelt 1986: 61–4; Rucht 1994:
303–12; Kriesi 1995).
Un primer conjunto de hipótesis se preocupa descentralización territorial. El
básico sug-gestion es que el más poder está distribuido a la periferia (gobierno local
o regional, estados dentro de una estructura federal), el más grande la posibilidad
indi-vidual los movimientos tienen de acceder el proceso que hace decisión. El
“más cercano” una unidad administrativa es a ciudadanos normales (en una
concepción de democracia muy común en ciencia social americana, pero también
dentro de movimientos sociales les-selves), el más fáciles lo será para obtener
acceso. Así, todo más siendo igual, el más grande
TÉL POLICING DE P ROTEST 203

El grado del poder pasado del gobierno nacional a las regiones, de las regiones a
las ciudades, de las ciudades a barrios locales, el más grandes la transparencia del
sistema político a presión desde abajo. Siguiendo la misma lógica, los estados
federales están considerados más abiertos que centralistas unos (ve, por ejemplo,
Kitschelt 1986; Kriesi 1995; Giugni 1996). De hecho, descentralización de poder
a cuerpos regionales y locales a menudo aumenta las oportunidades para
movimientos sociales mobilizing en el nivel local. Cuando búsqueda en, para caso,
Italia y Francia (ve, respectivamente, della Porta y Andretta 2002; della Porta
2004c) indi-cates, ciudadanos' los comités que protestan contra la construcción de
infraestructura para trenes de velocidad alta o los residuos peligrosos
significativamente aumentan sus posibilidades de victoria cuándo pueden aliado
ellos con anuncio local influyenteministrators.
Según lo que la separación funcional de poderes está preocupada, el sistema en
términos generales puede ser considerado más abierto el más grande la división de
tareas entre pierna-islature, ejecutivo, y judiciary. Además, mirando en cada de
estos poderes sep-arately, el más grandes la autonomía de actores individuales el
más numerosos será los canales de acceder al sistema. En primer lugar, el arena
parlamentario ha sido considerado más abierto el más grande el número de asientos
asignó por pro-portional representatión, así que aumentando las posibilidades para
acceso por una variedad de actores (ve, por ejemplo, Amenta y Young 1999). De
la proposición general que “un número más alto de actores autónomos equals
transparencia más grande del sistema,” sigue que, según lo que las características
de la ejecutiva son con-cerned, las posibilidades para acceso serán menos en un
sistema presidencial que en un parlamentario un porque hay menos decisión-
fabricantes. En el arena de gobierno, generalmente pueda ser esperado que élite
unttitudes a challengers dependerá de si el gobierno es homogeneous o una
coalición. El más fragmented el gobierno o el más grande las diferencias entre los
partidos que lo compone, el más fácil lo será para encontrar aliados, a pesar de que
las posibilidades of actu-el aliado que implementa las políticas serán menos.
Variables culturales como tradiciones de lealtad al liderazgo o personalistic
divisiones dentro de partidos y el preva-lence de individualistic o mediación
colectiva de consenso también influencia gov-ernment estabilidad y compactness.
La transparencia del sistema a la presión desde abajo tiene que también aumento
en proporción al poder de eligió órganos.4
Las características de la burocracia pública también influye movimiento social-
ments. Kriesi Et al. (1995: 31) nota que “el más grande la cantidad de recursos en
su eliminación, y el más grande el grado de su coherencia, coordinación interna y
professionalization, el más fuerte lo será. Carencia de recursos, fragmentación
estructural, carencia de coordinación interna y de professionalization, multiplicar
los puntos de acceso y hacer la administración dependiente en su privado inter-
locutors en el sistema de interés-intermediación.” Un elemento más lejano de rele-
vance para la distribución funcional de poder es el autonomy y poderes del
judiciary. Un poder judicial fuerte puede intervenir en ambas funciones legislativas
y ejecutivas, cuando cuando el Tribunal Constitucional o el magistracy devenido
204 TÉL POLICING DE P ROTEST

Implicado en controversias legales entre movimientos sociales y countermove-


ments o instituciones estatales. El más grande la independencia del judiciary,
el más grande la posibilidad de acceso para movimientos sociales.
El último asunto para ser tratado se preocupa la cantidad global de poder en el
hands del estado, cuando comparado con otros actores como grupos de presión,
polit-ical partidos, los medios de comunicación, y ciudadanos normales. Por
ejemplo, regresando a administración pública, la posibilidad de intervención
exterior varía un trato grande de estatal de declarar. En general, donde la
administración pública está arraigada en ley Romana, el cual rehusa contactos
externos, allí tiende para ser resistencia más grande a presión de noninstitutional
actores (no sencillamente movimientos sociales pero partidos políticos también).
El modelo anglosajón de administración pública, por otro lado, con canales más
numerosos de acceso para noninstitutional actores, tiende para ser más abierto. Al
respecto la estructura institucional de oportunidad política será más abierta (y el
estatal más débil) dónde citizens mantiene la posibilidad de inter-vening con la
legislatura y ejecutivo independientemente de mediación a través de partidos
políticos, grupos de interés, o bureaucrats. El más grande el grado de citi-zens'
participación a través de referéndums para el propositiencima o abrogación de par-
ticular medidas y los procedimientos para apelar contra las decisiones de la
administración pública, el más abierto el sistema.
En el 1990s, las tendencias generales en la evolución de instituciones
políticas, donde pueden ser dichos para existir, era de alguna manera
contradictorio en plazos del abiertos-ness/closedness de oportunidades
políticas. Devolution En el subnational niveles y una autonomía de crecer del
judiciary ha ciertamente aumentó los puntos de acceder a decisión pública-
haciendo. Aun así, el cambio de poder de las asambleas legislativas a
administraciones ha hecho que hacen decisión procesos menos transpar-ent y
decisión-fabricantes menos responsables al electorado. El neoliberal cambio
del 1990s significativamente redujo el espacio para intervención política (ve
capítulo 9 abajo). La privatización de servicios públicos y la desregulación del
mercado de trabajo ha de hecho limitó las posibilidades para ciudadanos y
trabajadores para ejercer pres-seguro vía canales políticos.
Más importantly, los movimientos afrontan un cambio en el locus de poder del
nacional al supranational (ve capítulo 2 encima), con el poder aumentado ejercido
por un número de organizaciones internacionales – especialmente económicos
unos (WB, IMF, WTO) – así como un número de macroregional organizacións (en
primer lugar la UE) (Haas 1964; Sharpf 1997). Internacional gubernamental
organi-zations ha sido ambas herramientas para globalización económica, a través
de políticas liber-alizing comercio y el movimiento de capital, y el resultado de un
intento de gobernar processes aquello ya no puede ser manejado en nivel nacional.
En este sentido, global-ization ha no justo debilitó el poder de políticas sobre
economía, pero ha gen-erated conflictos transnacionales en las políticas de
instituciones internacionales, produciendo diferentes results dependiendo de la
organización y campo de interven-tion implicó. En particular, la oposición ha
surgido al neoliberalist políticas de
TÉL POLICING DE P ROTEST 205

El tan-llamado instituciones financieras internacionales que ejerce poder


coactivo fuerte a través de la amenaza de sanciones económicas y
conditionalities en crédito internacional. Más generalmente, paralelo a la
adquisición de poder por estos en gran parte no-representativo, nontransparent
cuerpos, la crítica ha centrado en sum anifest “déficit de democracia.”
Pero qué es los efectos de todas estas propiedades institucionales en el carácter-
istics de movimientos sociales? En primer lugar, desde entonces tienden para ser
establo sobre el plazo largo mientras la protesta evoluciona cyclically, es
improbable que, allende un nivel seguro de desarrollo democrático, las ventajas
institucionales hacen mucho para explicar la aparición de movimientos. De modo
parecido, los arreglos institucionales no aparecen para tener mucho peso en
relación a niveles de movilización tampoco, desde este aparece tan más sensible a
circunstancias contingentes que a variables estructurales. Encuestas de opinión así
como cruz-análisis comparativos nacionales de movimiento concreto-ments (para
caso, el antiwar movimiento en 2003) indica que la existencia de protestas cannot
ser fácilmente explicados por variables institucionales como el grado de
distribución funcional o territorial de poder (Waalgrave y Rucht adelante-venidero;
della Porta 2004d y 2005un).
Segundo, dependiendo de si o no un movimiento tiene aliados dentro del poder
ejecutivo central, la transparencia del sistema institucional aparecería para tener
efectos ambivalentes en las posibilidades de éxito para movimientos sociales. Para
empezar con, frecuentemente ha sido observado que en descentralizó estados chal-
lengers lata rely en una variedad de actores para penetrar el sistema. Respecto del
antinuclear movimiento, Nelkin y Pollack (1981: 179) declaró que la “decisión
descentralizada alemana-haciendo el contexto ha proporcionado ecologists con
más grande polit-ical oportunidad, porque ellos cun juego una administración
contra el otro.” A diferencia de su counterparts en otros países, los ecologistas
alemanes eran exitosos en utilizar el sistema judicial. Mientras el sistema
centralizado en Francia, por ejemplo, control político favorecido por el irvernment,
en Alemania la distribución ancha de poder “dejó algunos tribunales para tomar un
muy potentes e inde-pendent función en disputas nucleares” (Nelkin y Pollack
1981: 159).
Aun así, descentralización de poder no siempre trabajo en movimiento social-
ments' favor: “los puntos múltiples de acceso es un dos-edged espada . . . , puntos
tan múltiples de acceder también significa puntos múltiples de veto” (Amenta y
Caren 2004: 472). Dispersal Del poder aumenta las posibilidades de accede no
justo para movimiento social-ments pero también para todo political actores,
incluyendo countermovements.5 Lo puede pasar que los aliados de un movimiento
encuentran ellos en gobierno en nivel nacional y tomar las decisiones favorables a
aquel movimiento, sólo para encontrar estas decisiones bloquearon por cualquier
descentralizó los cuerpos gobernaron por otras fuerzas políticas o por otras armas
del estado como los tribunales. Ambos de estas cosas pasaron en Alemania en el
1970s en los asuntos de aborto y poder nuclear. Incluso el uso de referéndums
puede favorecer los adversarios de movimientos sociales así como los movimientos
ellos.6 De modo parecido, la burocracia pública puede ser influida por
206 TÉL POLICING DE P ROTEST
Presión y partidos políticos grupos así como por movimientos sociales; la
imagen de espejo de este es que una burocracia fuerte e independiente aumenta
los puntos autónomos de acceder al proceso que hace decisión para
movimiento social-ments pero también para otros actores colectivos (Amenta
y Young 1999). Así, el temprano acomodando respuestas por institutionally
estados abiertos al antinuclmovimiento de oreja no siempre tiene mucho efecto
en desarrollos más tardíos en el con-flict. De hecho, sea precisamente en
estados más abiertos que potentes pro-nucleares inter-est los grupos podrían
regroup y recuperar tierra perdida (Flam 1994b: 317, 321; ve también Flam
1994un).
En una perspectiva más interactiva, el contexto institucional influye qué
estrategias son más eficaces, pero no si y cuándo un movimiento será éxito -
ful: “circunstancias tan políticas devienen más difíciles, más assertive o la
acción colectiva más intrépida está requerida para producir beneficios
colectivos” (Amenta y Caren 2004: 473).
Las variables institucionales pueden tener una influencia más fuerte en las
estrategias adoptó por movimientos sociales, aun así. Movimientos sociales,
de hecho, tiende para utilizar el chan-nels de acceder hecho available a ellos
por “estados” débiles. En Suiza, donde hay una tradición fuerte de
referéndums, 195 por 1,000 habitantes eran mobi-lized en formas de la acción
que implica el uso de democracia directa, comparado con único 4 por 1,000 en
Alemania y ninguno en France y el Netherlands (Kriesi et al. 1995: 45).
Cuando devendrá claro en lo que sigue, según lo que la moderación relativa
de repertorios está preocupada, la transparencia institucional tiene que ser
combinada con tradi-tional cultura política (él naturalmente codified, al menos
en parte, en legislación).

8.3 Prevaleciendo Estrategias y


Movimientos Sociales

Los movimientos sociales son permeated por la cultura política de los sistemas en qué
desarrollan. Las estrategias adoptaron por los actores colectivos están influidos por el
mutable y espíritu flexible del tiempo – el Zeitgeist – cuál repite desarrollar-ments
dentro del ciclo económico (Marca 1985), y también por seguro relativamente
características estables de culturas políticas nacionales (Kitschelt 1985: 302–3). El más
igualitario, liberal, inclusive, e individualistic la cultura política, el menos la oposición
tendría que ser antagonista y confrontational. Tomando más allá el analy-sis de aquellos
aspectos de la cultura política pertinente a interacción entre instituciones y movimientos
sociales, Hanspeter Kriesi ha enfatizado la importancia de prevalecer estrategias, el cual
define, siguiendo Scharpf (1984: 260), cuando “una comprensión global, entre quienes
ejercitan poder eficaz, de un conjunto de las premisas precisas que integran mundiales-
vistas, objetivos und medio.” Refiriendo en particu-lar a los procedimientos utilizaron
por miembros de un sistema cuándo tratando “chal-
TÉL POLICING DE P ROTEST 207

lengers,” reclama que “las estrategias nacionales puestas las reglas informales y
formales del juego para el conflicto entre movimientos sociales nuevos y su
adversaries” (1989un: 295). Según esta hipótesis, países con una estrategia de
exclusión (aquello es, represión de conflicto) tenderá para tener un ideologically
homogeneous gobernando coalición y polarization de conflicto con adversarios.
Dónde hay una estrategia de inclusión (co-optation de demandas emergentes), por
otro lado, gov-ernments será ideologically heterogéneo y abrir hacia actores
externos.
La historia democrática de un país también influences sus estrategias de
prevalecer. Autoritarismo pasado a menudo reemerges en tiempo de confusión.
Young democracias tiende para temer protesta política, y también tener la policía
fuerza cuáles quedan steeped en los valores autoritarios del régimen de preceder
(Flam 1994c: 348; encima Italia, ve Reiter 1998; della Porta y Reiter 2004un y
2004b). De hecho, ha sido argumentado que en cada país los movimientos sociales
nuevos tienen “heredó” las consecuencias de las reacciones reservaron
originalmente para el movimiento de trabajo. En Europa mediterránea, Francia, y
Alemania, absolutismo y la introducción tardía de sufragio universal dirigió a un
dividido y radicalized movimiento de trabajo. En el más pequeño, países de
mercado abierto, en Gran Bretaña y en Escandinavia, por otro lado, donde no había
ninguna experiencia del absolutismo y el sufragio universal estuvo introducido
temprano, inclusive las estrategias produjeron un trabajo unido y moderado
movimiento. Como com-parative estudio de americano, británico, y espectáculo de
uniones alemanas:

Represión estatal de los derechos de trabajadores para combinar enth e mercado de trabajo
aparece para tener tenido tres relacionó consecuencias para uniones. Primero y más
evidentemente, represión politicized uniones porque les obligue para probar para cambiar
las reglas del juego
. . . Una segunda consecuencia de represión es que, si sufficiently severo, pueda reducir
diferencias entre los trabajadores que originan en su capacidad de contrastar para formar
effec-tive uniones . . . Finalmente, . . . Represión politicized uniones en una manera
adicional y más sutil, por dar la iniciativa dentro del trabajo movement a partidos políticos.
(Marcas 1989: 14–15,
passim)

Estos (self-reproduciendo) prevaleciendo las estrategias influyeron la manera en


qué el conflicto entre trabajo y capital estuvo jugado fuera, dirigiendo a exclusión
en integración y casos seguros en otros (Kriesi 1989un). Inicialmente elaborado en
respuesta para comerciar sindicalismo, estas estrategias desarrollaron su propios
self-perpetuando lógica a través de interacción y socialización políticas: “Una vez
la relación entre la unión y partido-alas políticas del labor el movimiento había sido
molded, sea difícil de romper” (Marcas 1989: 175). La tendencia de estrategias
nacionales para mantenerse a base de allende las condiciones que dio aumento a
ellos ayudas para explicar reacción a movimientos sociales nuevos. Los sistemas
políticos caracterizaron por inclusion es más abierto a estos nuevo challengers, tan
habían sido al viejos; sistemas con exclusionary estrategias, en contraste, continúa
ser hostil a nuevamente emergiendo reclamaciones. De hecho, la diferencia en
actitudes de élite a challengers aparecería para ser enlazado a prevalecer
concepciones de relaciones con grupos de interés. El siguiente
208 TÉL POLICING DE P ROTEST

Ha sido dicho respecto del antinuclear movimiento: “El speedy y substan-tial las
respuestas entraron la nación-estados cuyo political y élites estatales burocráticas
haber tampoco mucho tiempo hace (Suecia, Noruega) o inmediatamente después
de la Segunda Guerra mundial, si no más temprano (Austria, el Netherlands,
Alemania Del oeste) aprendió a rec-ognize como interés legítimo e incluso
formalizado grupo representation y la influencia que los sindicatos y los
empresarios ejercen sobre la decisión gubernamental que hace” (Flam 1994b: 309).
Las élites en estos países tienden para reconocer la legitimidad de intereses lying
fuera del sistema de partido, sabiendo que el movimiento-ment de hoy puede ser el
grupo de interés de mañana. En otros países, Francia por ejemplo, un exclusionary
la actitud ha prevalecido.
Qué, entonces, puede ser explicado por este conjunto de variables? Primero,
tenga que ser reit-erated que un aspecto que tiende para quedar constante cannot la
ayuda explica el (cycli-cal) aparición de protesta. En plazos de su éxito, qué estuvo
dicho respecto de la transparencia institucional también aplica aquí, al menos en
parte. Mientras las estrategias de alojamiento e inclusión pueden favorecer acceso
de movimiento social al system, harán igual para sus adversarios también. En un
inclusive sistema, los gobiernos hostiles a reclamaciones de movimiento social
pueden ser forzadas a compromise; por otro lado, un gobierno inclinó para ser
amistoso también podría ser apremiado para seguir una política más moderada que
ellos otherwise.
El predominio relativo de cualquier una estrategia de inclusión o una estrategia
de la exclusión también puede tener efectos contradictorios en niveles de
movilización. Por un lado, el anticipó los costes de movilización serán más bajos
en tradicionalmente inclusive países; por otro lado, la ventaja esperada de la
protesta sería más pequeña, desde inclusive los países tienden para valorar
consenso. Cross-las comparaciones nacionales no ofrecen soporte fuerte aquí
tampoco. En el 1970s y 1980s, los niveles globales de movilización en Suiza y el
Netherlands, tanto tradicionalmente inclusive países,7 es similar a aquellos en
Francia y Alemania, países con tradiciones largas de represión (Kriesi et al. 1995).
Añadido a aquello, según opinión poll evidencia, el número de ciudadanos quiénes
han participado en la acción directa es particularmente alto en Francia; más alto
que en Gran Bretaña, un tra-ditionally inclusive país.8 Además, el tan-movimientos
“viejos” llamados, y el movimiento de trabajo en particular, ha sido más activo en
Francia y Alemania que en el Netherlands y Suiza. Esto parecería para confirmar
que tampoco el grado de exclusión ni las perspectivas para alojamiento tienen un
unequivocal efecto encima niveles de movilización. A pesar de que exclusionary
strategy altura-ens los costes de acción colectiva, él también renders él en una
manera segura más neces-sary. El otro lado de la moneda es que accommodatory
las estrategias menoscaban los costes de acción pero también los costes de
inacción.
El enlace entre prevalecer strategies y los repertorios de acción parece más
fuertes: los repertorios de protesta son más convencionales en tradicionalmente
inclusive países. En una comparación de represión política en decimonoveno-
Europa de siglo, por ejemplo, ha sido notado que “aquellos países then era
TÉL POLICING DE P ROTEST 209

Coherentemente el más repressive, brutal, y obstinate en tratar el conse-


quences de modernización y disidencia de clase trabajadora en desarrollo
reaped la cosecha por producir oposición que era tan rígido, brutal, y obstinate”
(Goldstein 1983: 340). En general, la mayoría de ideologías radicales y
estrategias devel-oped en los países caracterizaron por bajos
parliamentarization y el aislamiento político del movimiento de trabajo
(Bartolini 2000: 565–6). Por otro lado, institucionalización de colectivo
bargaining contribuyó a depoliticize conflictos en desigualdad social por
apremiarles dentro relaciones industriales (Gallie 1989). De hecho, “la
represión estimuló radicalismo de clase trabajadora; whilst relajación política
y una estructura de libre colectivo bargaining anima reformismo” (Geary 1981:
179). Aun así, participación individual en acción de protesta, incluyendo las
formas más extremas, en las ocasiones resulta para ser relativamente alto en
traditionally inclusive países y, viceversa, abajo en países con una tradición de
exclusión. Por ejemplo, en una comparación de ocho democracias, el
holandeses tuvo la propensión más alta para participar en acción directa.
También tuvieron un talante más grande que ciudadanos en muchos países con
exclusionary tradiciones, como Alemania, para participar en protesta radical:
huelgas de gato montés, escribiendo graffiti, negativa para pagar alquiler o
impuestos, daño a propiedad, y violencia contra la persona.
Mientras reconociendo un seguro influence de experiencias pasadas en
movimiento social-ment estrategias, tenga que ser recordado que las
tradiciones de “un país” son difícilmente puestos en piedra. El decimonoveno-
siglo élites francesas, por ejemplo, estuvo considerado abierto de cambiar,
mientras su alemán counterparts era hostil a cualquiera y cada reforma:

Dónde una burguesía nacional es débil o ligada a un existiendo y estado


autoritario, cuando en Rusia antes de la Primera Guerra mundial, o países en qué
la clase media cada vez más abandona valores liberales y viene para apoyar un
semi-sistema político autoritario, cuando era hasta cierto punto el caso en
Alemania Imperial y prewar España, allí la perspectiva de liberalismo de clase
trabajadora aparece para ser más débil, mientras radicalismo político en la parte
de trabajo deviene más marcada. Conversely, las tradiciones Republicanas de al
menos algunas secciones de la burguesía francesa y el buoyant el liberalismo de
la clase media británica habilitó una proporción justa de los trabajadores para
quedar en el campamento liberal.
(Geary 1989: 2–3)

Los cambios de cuadro en la segunda mitad del vigésimo siglo, aun así. De
hecho, después de la Segunda Guerra mundial, el derrumbamiento de nazismo y el
Aliado Occu-pation dirigido a un rethinking de pasado repressive tradiciones en
Alemania y el adop-tion de inclusive estrategias hacia el trabajo movement. En
Francia, por otro lado, la ausencia de tal histórico rupture dejó estrategias de
exclusión para ser mantenida hasta que al menos el 1960s. De modo parecido,
también ha sido notado que pasado
210 TÉL POLICING DE P ROTEST

Élite behavior no es bastante para explicar recourse a repressive estrategias en


rela-tion al antinuclear movimiento (Flam 1994c: 345).
En conclusión, mientras las estrategias nacionales tienen una influencia segura en
los repertorios de la acción adoptada por movimientos sociales, no son suficientes de
explicar las elecciones estratégicas hacen. En primer lugar, no son igualmente mucho
tiempo-vividos en cada país. Segundo, no tienen los mismos efectos encima todo
movimiento-ments. Tercio, aparecen para afectar algunas estrategias de movimiento y
no otros.

8.4 Aliados, Adversarios, y Movimientos Sociales

Tan lejos, consideramos relativamente oportunidades políticas constantes:


ambas instituciones y las culturas políticas cambian despacio. Para activistas
de movimiento social estos es principalmente givens. Aun así, otro conjunto
más dinámico de variables – susceptibles de cambiar a corto plazo y el objeto
de presión de movimientos sociales – es parte considerada también de la
estructura de oportunidad política. De hecho, tan ya notado, entre las primeras
definiciones del políticos opportunity la estructura era aquellos mirando en
cambios que podría causar repentino ruptures en el sistema. Atten-tion Por
tanto ha concentrado en aspectos como electorales instability o divisiones de
élite (ve, por ejemplo, Piven y Cloward 1977; Jenkins 1985; Tarrow 1983,
1989un).

8.4.1 movimientos Sociales en


un multi-campo organizativo

Movimiento de movimientos sociales en un multi-campo organizativo, interaccionando


con una variedad de otros actores. Encuentran ambos aliados y adversarios dentro del
públicos adminis-tration, el partido system, grupos de interés, y sociedad civil. Durante
un ciclo de protesta, organizaciones de movimiento social, partidos políticos, grupos de
interés, y vol-untary las asociaciones frecuentemente introducen a relaciones de
conflicto o cooperación ambos en asuntos concretos y el más generales uno del correcto
de protestar. Muchos actores, incluyendo actores institucionales, devenir implicado en
campañas de protesta en particu-lar demandas como paz o aborto, pero coaliciones
también forma en el asunto de “orden público” encima el lado, y “civil derechos” en el
otro (della Porta 1998b).
De hecho, los factores institucionales están mediados por dos interviniendo
conjuntos de variables: la estructura de alianza y la estructura de oposición.
Considerando el campo de acción dentro de qué movimiento de movimientos
social, el todoiance la estructura puede ser definida tan compuesto por aquellos
actores políticos quiénes les apoyan; la estructura de oposición cuando compuesto
por aquellos actores políticos quiénes son en contra les (Kriesi 1989un y 1991;
Klandermans 1989b y 1990; della Porta y Rucht 1995). Alliances Proporciona
recursos y oportunidades políticas para challengers; opposi-
TÉL POLICING DE P ROTEST 211

tion Les erosiona. Actores institucionales (como interés y partidos políticos grupos)
y otros movimientos sociales pueden ser encontrados en ambos lados. El configu-
ración de poder – aquello es, la distribución de poder entre los varios actores que
operan dentro del partido o sistema de grupo del interés – influirá el resultado de
los conflictos (Kriesi 1989un). Mientras es elecciones que determina whether los
aliados de partido o los adversarios de un movimiento social serán en poder, las
actitudes de los varios actores mencionaron encima está influido por otros factores.
Cuándo mirando en los adversarios de movimientos sociales, podemos empezar
observar que pueden ser eitsu institucionales o noninstitutional actores. De hecho,
el plazo countermovements ha sido acuñado en relación a estos actores últimos.
Contador-los movimientos surgen en la reacción a los éxitos obtuvo por
movimientos sociales, y el dos entonces desarrolla en simbiótico dependence
durante el curso de mobiliza-tion. En general, la relación entre movimientos y
countermovements ha sido definido cuando uno de loosely coupled conflictos, en
qué los dos lados raramente venidos a juntos frente a frente (Zald y Useem 1987;
cf. also Lo 1982). Para utilizar Rapoport tipología (1960), conflictos entre contador
y movimientos sociales-los movimientos se parecerse debate a la extensión que
están basados en un intento de persuadir adversarios y las autoridades, y juegos a
la extensión están basados encima rataional cálculos de costes y beneficios. A
veces, aun así, cuando era el caso en Italia en el 1970s, su interacción se parece a
lejos más una batalla en qué el objetivo es para aniquilar el enemigo. Interacciones
entre movimiento y countermovement ventaja a un sentido fuerte de conflicto y el
prevalence de un manichean vista de políticas (Klandermans 1989b; della Porta
1995). Además, los dos tienden para imitar cada cual otro, recíprocamente
adaptando táctica particular y la elección de arena en qué para actuar (ve, parae
xample, Rucht 1991c; Meyer y Staggenborg 1996; Bernstein 1997). La presencia
de nonviolent countermove-ments principalmente afecta las posibilidades de éxito
para movimientos sociales; la presencia de violento countermovements, por otro
lado, ventajas a radicalization de sus repertorios de acción.
En cuanto a los adversarios institucionales, tenga que ser declarado en el
principio que el estado no puede ser identificado meramente como un enemigo de
movimientos sociales. Bastante, el estado es “simultáneamente objetivo,
patrocinador, y antagonista para social movimientos así como el organizador del
sistema político y el arbiter de victoria” (Jenkins y Klandermans 1995: 3). Las
agencias estatales pueden ser cualesquier aliadas o adversarios: Gov-ernment las
agencias pueden apoyar u oppose reclamaciones de movimiento, desde entonces
algunos del agencies podría creer en objetivos de movimiento y otros aguantan
opposing creencias (Vendaval 1986: 205). Ambos pueden ofrecer recursos
importantes a sus lados respectivos. No todas las agencias públicas están alineadas,
aun así, y, cuando el capítulo que sigue hace claro, muchos de ellos become arena
para transacciones entre actores colectivos diferentes, movimientos sociales entre
ellos.
El más grande la clausura de oportunidad institucional, el más impor-tant es
la presencia de aliados para los movimientos que obtienen acceso al
212 TÉL POLICING DE P ROTEST

Proceso que hace decisión. Tales aliados entran una variedad de formas. Primero,
cuando notado en capítulo 6, el recurso-aproximación de movilización ha
enfatizado la función de “profesionales de reforma” (bureaucrats de agencias
públicas seguras, caridades, reli-gious organizaciones, y tan encima) en ayudar
algunos movimientos sociales. En los Estados Unidos, por ejemplo, las iglesias,
fundaciones seguras, y las agencias implicaron en federales antipoverty los
programas apoyados el movimiento de derechos civil (Morris 1984; McAdam
1982). Asociaciones religiosas y tercer-grupos de sector eran entre los
organizadores del Genoa Foro Social, y poco antes del G8 conociendo mucha
iglesia católica más establecida las instituciones conocieron para rogar para una
“globalización más” justa.
Además, los sindicatos a menudo han sido un aliado importante para emerger
actores, como el movimiento estudiantil o el movimiento de las mujeres,
particularmente en Europa. Con una base social ancha y muy a menudo canales
privilegiados de acceder a decisión institucional-fabricantes (ambos directly a
través de la administración pública e indirectamente a través de los partidos
políticos), los sindicatos pueden aumentar las capacidades de movilización y
posibilidades de éxito para movimientos sociales. Es prob-capaz que el más débil
el reconocimiento institucional de trabajadores' representantes en el workplace y el
proceso que hace decisión, el más grande será su propen-sity para suponer una
función política, allying ellos con movimientos sociales y participando en público
protesta. El interés más influyente agrupa unre, el más pequeño será el espacio para
relativamente unorganized movimientos porque “un bien-resourced, coherently
estructuró, y professionalized sistema de grupos de interés también pueden ser
capaces de impedir fuera de challengers de habiendo acceso al estado. Moreover,
altamente institucionalizado, abarcando arreglos de política nego-tiations entre la
administración pública y asociaciones de interés privado serán ambos bastante
inaccesible a challengers y capaz de actuar” (Kriesi et al. 1995: 31). Según este
point de vista, neocorporatism – aquello es, un modelo de representación de interés
con interés monopolizador , centralizado organizaciones (Schmitter 1974) aquello
participa en público que hace decisión (Lehmbruch 1977) – tendría que reducir la
incidencia de protesta. Acceso to el sistema institucional de decisión pública-
haciendo facilitaría acuerdo entre grupos sociales diferentes y el estado sin la
necesidad para noninstitutional formas de acción colectiva. Ambos control sobre
la formación de demanda social (Schmitter 1981) y la capacidad de satisfacer
aquella demanda (Nollert 1995) tendría el efecto de desalentar protesta. Aun así, si
un neocorporatist la estructura indudablemente reduce huelgas en industria,9 su
efecto encima la protesta en otros sectores dista mucho de clara. De hecho, guarun-
teeing los privilegios a intereses potentes podrían dirigir a rebelión por sus rivales
más débiles y así al aumento de movimientos nuevos potentes (Marca 1985).10 Por
otro lado, neocorporatism podría tan fácilmente crear una tendencia para incorporar
que emerge grupos con enla estructura de concertado policymaking. Una
comparación entre el americano y alemán antinuclear los movimientos revelaron
que el sistema americano, con sus puntos múltiples de acceso y tradicionalmente
débil
TÉL POLICING DE P ROTEST 213

Ejecutivo, estrategias legales favorecidas y movimientos pragmáticos. La


clausura inicial del estado alemán (tradicionalmente assertive de su supremacía
sobre sociedad civil) hacia intereses que atajados su corporatist punto de vista,
por otro lado, favorecido strategies de acción directa (Joppke 1993). Aun así,
“una vez intereses y asuntos nuevos pasan el altos hurdles de partido y
parlamento, el alemanes polity firmemente les institucionaliza” (Joppke 1993:
201).
En Seattle, cuando en Genoa, varias uniones unieron el demonstrations,
pidiendo protección para estándares de trabajo y políticas sociales. Movilizaciones
recientes encima asuntos de trabajo, en el Del sur y el Del norte, haber de hecho
inició una tendencia de búsqueda en “uniones de movimiento social” (ve capítulo
2 encima). Tan Beverly Plata (2003) ha bril-liantly synthesized, en la última
búsqueda de décadas en uniones ha acentuado su debilidad de crecer, atribuyéndolo
tampoco a capital hypermobility y el resultado-ing disminución en soberanía
nacional (p. ej. Castells 1997), o a correo-Fordist frag-mentation of trabajadores
(p. ej., Jenkins y Leicht 1997: 378–9). Por otro lado, algunos aproximaciones más
optimistas acentúan la función de persistir de uniones, capaces de aprovechar
globalización e imponiendo un fortalecimiento de trabajadores' derechos en países
donde capital estuvo invertido. En particular, las uniones aparecen bastante activas
en países en desarrollo – tan Plata (2003: 164) observa, “la crisis profunda a qué
movimientos de trabajo del núcleo cayó en el 1980s no fue inmediatamente repli-
cated en otro lugar. Al contrario, en el tardío 1980s y 1990s, olas importantes de
trabajo militancy el golpe ‘exhibe' de industrialización rápida en el Segundo y
terceros Mundos.” Cuando con Fordism, inicialmente consideró una fuente de
derrota inevitable para la clase laborable, correo-Fordism también presente tanto
challenges y oppor-tunities para los trabajadores' organización. De hecho, el WTO
la protesta en Seattle ha sido vista como señal del remobilization de trabajo.

8.4.2 movimientos Sociales y partidos

Dónde aliados de movimiento social están preocupados, aun así, es enel po litical
partidos que, especialmente en Europa, la atención ha principalmente centró.
Movimientos sociales' rela-tionship con los partidos evolucionaron en tiempo: de
articular posiciones de partido a perme-ating partidos para intentar influirles; de co-
optation a independence (Hanagan 1998un). Los movimientos a menudo han
desarrollado enlaces especiales con un partido político o familia de partido: el aumento
de movimientos del trabajo de, o dio nacimiento a, partidos socialistas; los movimientos
étnicos a menudo refieren a regionalist partidos para soporte; ecologists tiende para
votar para los Verdes; el pro-movimiento de elección en los EE.UU. tiende para apoyar
los Demócratas, mientras el pro-la vida está orientada hacia los Republicanos. Tan
estricto ha sido sus relaciones recíprocas que “de hecho en los Estados Unidos y Europa,
los partidos políticos y los movimientos sociales han devenido overlapping,
mutuamente actores dependientes en shaping política” (Goldstone 2003: 4). La
búsqueda pasada ha espe-cially centrado en movimientos sociales nuevos, los cuales
han tenido, a pesar de que con tensiones,
214 TÉL POLICING DE P ROTEST
El dejado como un aliado. Por ejemplo, una encuesta de grupos medioambientales
reveló que mientras sólo 11 por ciento reclamaron para tener contactos frecuentes con
partidos políticos, tanto los verdes y la izquierda vieja y nueva estuvieron mencionados
(por 21, 38, y 29 por ciento respectively de aquellos entrevistados) cuando tendiendo
para representar los intereses del movimiento (únicos 2 por ciento mencionaron partidos
conservadores en este contexto) (Dalton 1995: 308). De hecho, la configuración de
poder en el izquierdo es particularmente importante para social movements (Kriesi
1989un: 296). Más particularmente, una serie entera de intercambios potenciales
desarrolla entre izquierda y movimientos sociales partidos. Cuando mediadores entre
sociedad civil y el estado, los partidos de la necesidad izquierda a mobi-lize votantes y
opinión públicos. Por esta razón distan mucho de indiferentes a presión de movimiento
social. De hecho, los programas y afiliación de la izquierda institucional, serlo Trabajo
británico, Demócratas Sociales alemanes, Socialistas franceses, o Comunistas italianos,
tiene todo sido alterado por interaction con movimientos sociales (ve Maguire 1995;
Duyvendak 1995; Koopmans 1995; Koelble 1991).
La estrategia adoptada por el dejado hacia los movimientos sociales tiene, aun
así, no ser unchanging con el tiempo y espaciales. La hostilidad a veces ha
prevalecido, algunos-negociación de tiempo y a veces co-optation. Recientemente,
algunos partidos de izquierda (entre ellos prominently Trabajo Nuevo británico) ha
apoyado la guerra de Iraq; otros (como los Demócratas Sociales alemanes) ha
firmemente opposed lo. Hasta el Genoa marchas, la mayoría de la Europauna
izquierda institucional consideró globalización de mercado libre como la manera
principal y única para luchar paro; después de que Genoa algunos duda emergidos,
para caso entre los Demócratas Izquierdos italianos y los Socialistas franceses
(Andretta, della Porta, Mosca, y Reiter 2002: ch. 5). Qué explica las elecciones
estratégicas hicieron por los partidos en el izquierdos? Y segundo, qué es las
consecuencias de sus actitudes para la aparición, movilización capac-ity,
repertorios, y posibilidades para éxito de movimientos sociales?
En intentar para contestar la primera cuestión, la atención ha sido dirigida a
polit-ical cleavages. Mientras algunos han sugerido que un rígidos izquierdos–
la división correcta atrasa el desarrollo de movimientos sociales nuevos (Marca
1985: 319), otros haber alto-encendió el estímulo proporcionado por partidos
comunistas fuertes. Entre el último, Tarrow ha argumentado que los partidos
del izquierdos, en particular el italianos Commu-nist Partido (PCI), actuado
como “offstage pero apuntadores creativos en los orígenes, la dinámica, y la
institucionalización definitiva of los movimientos nuevos” (1990: 254). En
general la izquierda vieja aparece más colocada para apoyar movimientos
sociales donde exclusionary estrategias haber impeded el estrechamiento del
izquierdo– correcto divide. En Europa del sur, para caso, gobiernos de
izquierda hicieron several concesiones a un movimiento feminista que apoya
izquierdo (della Porta 2003un; Valiente 2003).
Segundo, la existencia de divisiones de partido dentro de las actitudes de
influencias izquierdas tradicionales a movimientos sociales. Dónde el izquierdo
está dividido entre un social-demo-cratic (o socialista) y un partido comunista, esto
aumenta la pertinencia del voto de clase trabajadora, desalentando el dirigiendo
postmaterial asuntos (Kriesi 1991:
TÉL POLICING DE P ROTEST 215

18). Al contrario, el movimiento de justicia global, acentuando las demandas


tradicionales de justicia y derechos sociales, parece a ha sido más capaz de
influir el institucional dejado en países como Italia, Francia, o España, donde
el mod-erate dejó temido la competición de comunista más radical o Trotskyite
partidos.
De hecho, la competición electoral es una variable importante en explicar el reac-
tion de aliados potenciales hacia movimientos sociales. La propensión para apoyar la
protesta ha sido conectada con electoral instability, el cual renders el ganando de los
votos nuevos particularmente importantes. De hecho, miembro–challenger las
coaliciones son más probables en estrechamente divididos y situaciones políticas
competitivas (Tilly 1978: 213–14). Político instability movimientos de protesta de los
favores: “el impacto político de institutional las disrupciones depende de las
condiciones electorales. Incluso serio dis-ruptions, como huelgas industriales, forzará
concesiones sólo cuándo el cálculo de electoral instability favorece el protestors” (Piven
y Cloward 1977: 31–2). El éxito del United Trabajadores de Granja en los Estados
Unidos, por ejemplo, ha sido explicado por el electoral realignment cuál trajo a poder
el ala liberal del Partido Democrático, particularmente bien colocado hacia
movimientos sociales (Jenkins 1985). Del 1950s encima, el blanco, protestante, clases
medias superiores y el electorado negro de las ciudades grandes empezó para abandonar
los Republicanos y devenía cada vez más volátil. Cuando política de patronaje devenía
menos y menos eficaz, el tradicional constituencies de política de Trato Nuevo
(trabajadores de cuello azul, blanco ethnics, la comunidad judía, y Sureños) también
movía hacia el centro (Jenkins 1985: 224). Sea sobre todo incertidumbre electoral que
empujó el Partido Democrático para trabajar con movimientos sociales. Más tarde
encima, también en Élaly, así como en España y Francia, la esperanza de ganador el
trozo grande del electorado que soportado los movimientos de paz, así como algunos
de los muchos activistas que había participado en la manifestación para justicia global,
empujó el institucional left hacia posición más crítica en asuntos como privatización de
servicios públicos, desregulación del mercado de trabajo, o enviando tropas a Iraq.
Cuarto, la posición del dejado hacia los movimientos sociales pueden ser
influidos por si o no son en government. Kriesi (1991: 19; ve también Kriesi
1989b: 296–7) ha sugerido que cuando en oposición los demócratas sociales
aprovechan el empujón proporcionado por movimientos sociales; en poder, por
otro lado, están forzados por presupuestarios y otros constreñimientos a limit su
transparencia a emerger demandas. A maximize sus posibilidades de reelección
tienen que privilegio aquellos eco-nomic cuestiones que interés su hardcore voto.
Fuera de poder, la disposición del dejado para apoyar los movimientos sociales
crece con sus necesidades a mobilize personas alrededor demandas de izquierda.
Aun así, no hay siempre un perfecto correspon-dence entre participación en
gobierno y hostilidad hacia movimiento social-ments. En ambas Italia y Alemania,
por ejemplo, partidos de izquierda han sido relativamente sympathetic hacia
protestar a toda costa de su “proximity” a gov-ernment (della Porta y Rucht 1995).
Tampoco hace la búsqueda empírica
216 TÉL POLICING DE P ROTEST

Conducido por Kriesi y sus colegas proporcionan unequivocal respuestas respecto


del grado al cual la protesta soportada izquierda en o fuera de gobierno. De hecho,
a pesar de que en ambas Alemania y el Netherlands la acción de protesta facilitada
izquierda más frecuentemente cuando en oposición que cuando en gobierno
(fuertemente y visiblemente en el primer caso, más débilmente en el segundo), el
exacto opuesto era cierto de Francia (Kriesi et al. 1995: 79). Esta ambigüedad en
la relación entre los aliados en poder y protesta es particularmente ciertos según lo
que los movimientos cierran al tradi-tional dejados, el movimiento pacifista, o el
movimiento en contra racismo, es con-cerned.11 En los Estados Unidos, la
frecuencia de protesta estudiantil decreased cuándo el presidente o los
gobernadores estatales pertenecieron al Partido Democrático, pero aumentado con
control Democrático sobre legislaturas (van Dyke 2003).
Más allá siendo en gobierno o no, las actitudes de los partidos del dejados hacia
los movimientos sociales están relacionados a una quinta variable: su transparencia
para reformar política. Según un análisis comparativo de movimientos sociales en
Italia y Alemania, cuándo ambos el PCI y el SPD movía hacia el centro entre el
1970s y el 1990s, devenían menos disponibles a canal movimientos sociales
nuevos' demandas al proceso que hace decisión (della Porta y Rucht 1995). A pesar
de que el SPD–FDP coalition presided encima por Willy Brandt en el temprano
1970s en Alemania, el cual tuvo un programa ancho de reformas, era abierto a
diálogo con movimientos sociales, más tarde en la misma coalición, ahora dirigido
por Helmut Schmidt, estuvo conducido para moderar su programa de reformas por
un económicos abajo-vuelta, y al mismo tiempo devenía “fresco” hacia
noninstitutional actores. Más generalmente, si en la oposición o en gobierno, el
centro europeo-partidos izquierdos desde el tempranos 1990s ha tendido para
confiar en mercado-conducido económico poli-cies y rehusado tradicional
Keynesian intervenciones. Cuándo el movimiento de justicia global emergido con
sus demandas de inversiones más públicas, esté saludado por escepticismo y crítica
abierta por sus aliados potenciales.
Tenga que ser añadido que las acciones de left-partidos de ala en gobierno
dependen de su peso dentro de la coalición de gobernar. Son evidentemente más
libres de tomar decisiones cuándo gobernando sólo. Cuando en coalición con
partidos más moderados serán forzados para adoptar políticas menos favorables
hacia el izquierda movimientos sociales. Cuándo gobernando con otros partidos
del izquierdos, por otro lado, tenderán para adoptar las actitudes más cercanas a
algunos actores colectivos nuevos. En Francia, por ejemplo, los gobiernos
tempranos debajo la presidencia de François Mitterrand (coaliciones con el Partido
Comunista y con una mayoría en parlamento) era más abierto de reformar que los
gobiernos más tardíos implicaron en “cohabitación” con un correcto-ala mayoría
parlamentaria. Muchos ejemplos también pueden ser encontrados del alemanes
Länder, donde Rojos–Green las coaliciones han mostrado más disposición para
aceptar demandas de movimiento social que coaliciones del SPD y FDP o, incluso
peores al respecto, coaliciones del SPD y CDU.
Algunos cambios importantes recientes en partidos políticos, especialmente en
Europa, haber sig-nificantly afectó sus interacciones con movimientos sociales.
Antiguamente, partici-
TÉL POLICING DE P ROTEST 217

pation A menudo desarrollado dentro concentrar partidos políticos, donde valores


comunes por-mitted la formación de colectivo identities. Movimientos sociales,
por tanto, devel-oped en conexión fuerte con partidos: el movimiento de trabajo
tuvo relaciones simbióticas con los partidos socialistas, movimientos étnicos con
partidos de minoría étnica. Aun así, especialmente desde el 1980s, incluso
izquierda los partidos políticos han movido de un modelo organizativo basado a
una afiliación grande y una función importante para activistas, quién tuvo una
presencia extendida a través de los rangos de partido, para ser “partidos” electorales
que votantes de dirección a través de medios de comunicación de masas, activa
sympathizers sólo durante periodos electorales, y moderar su ideología hacia el
centro (Pizzorno 1978, 1981; Manin 1993; della Porta 2001). El debilitamiento de
las funciones que construyen identidad de los partidos políticos ha en cambio
aumentó la función autónoma of movimientos sociales como arena de debate
público en construcción y asuntos políticos de identidades colectivas (ve también
capítulo 9 abajo).
Girando a la segunda cuestión, lo que las consecuencias hacen las actitudes
de poten-tial los aliados tienen para movimientos sociales? Él is ampliamente
aguantó que los partidos del juego izquierdo una función importante, aliviando
acceso al proceso que hace decisión e increas-ing movimientos sociales'
capacidad para movilización y posibilidades de éxito. Cuándo la izquierda
tradicional es hostil, por otro lado, social los movimientos son políticamente
marginalized.
La alianza con la izquierda tradicional tiene, en primer lugar, movimientos sociales
reforzados' capacidad para movilización. Ha sido notado que colocando oneself en el
dejado generalmente correlates positivamente con unw illingness para utilizar protesta,
particu-larly desobediencia civil (Wallace y Jenkins 1995: 126). Porque “Leftism es
con-sistently asociado con soporte de partido izquierdo” (ibid.), la posición tomada por
partidos de izquierda tiende para influir los niveles de mobilization de su electorado, el
cual es en general más a punto para utilizar protesta que el electorado de ala correcta.
De hecho, activistas de izquierda son frecuentemente implicados en movimientos
sociales así como su partido político propio (ve, por ejemplo, Kriesi y furgoneta Praag
1987). En cambio, dejando aparte la cuestión de su transparencia para influir por
movimientos sociales, partici-pation por partidos de izquierda en gobierno aparecerían
para tener un efecto negativo en movilización colectiva porque parece para desalentar
de real protest quienes son potencialmente más protesta-prone. En analizar dato encima
Alemania, Francia, Gran Bretaña, y el Netherlands entre 1975 y 1989, y encima
Alemania entre 1950 y 1991, Koopmans y Rucht notó que aumentos de protesta de ala
correcta bajo izquierdos-ganargobiernos de g y viceversa. Desde el correcto es
generalmente menos dado a utilizar protesta, la movilización tiende para ser más grande
cuándo hay un gobierno de ala correcta que cuándo hay un gobierno de izquierda (dos
tiempo más grande bajo Canciller Demócrata cristiano Helmut Kohl que era el caso
bajo el Demócrata Social Helmut Schmidt) (Koopmans y Rucht 1995). Si la literatura
de movimiento social ha considerado movilización principalmente como respuesta a
crecer esperanzas para cambio (ve, por ejemplo, Tarrow 1989un), estos results sugerir
la importancia de los riesgos potenciales de inacción. Cuándo afrontado con un
gobierno
218 TÉL POLICING DE P ROTEST

Al cual sienten movimientos más cercanos , sociales (ya no “impotentes”) tiende


para aumentar su uso de presión directa y reducir el uso de protesta. Por otro lado,
el riesgo posado por un políticamente opposed el gobierno les dirige para
considerar la movilización inevitable. No por casualidad, las marchas de paz más
grandes encima febrero 15, 2003, pasado en aquellos países (como el Reino Unido,
Italy, y España) de quién los gobiernos apoyados la guerra en Iraq. El antiwar
stances de los gobiernos franceses y alemanes redujeron el número de protestors
en aquellos dos países.
Las actitudes de los aliados potenciales también afectan las estrategias de
movimientos sociales ellos. Primero, la presencia de aliadas potentes tiende para
tener una influencia de moderar en táctica de movimiento social. Es ningún
accidente que en la segunda mitad del 1970s los momentos de violencia política
más grande en Italia y moneda de Alemania-cided con hostility en la parte del SPD
y el PCI hacia movimiento social-ments (della Porta 1995; della Porta y Rucht
1995). De hecho, aislamiento y radicalization tiende para ser mutuamente
reforzando. El más aislado un movimiento social-ment es, el más grande las dudas
que change puede ser dado cuenta a corto plazo, y el más grande la necesidad para
sustitutos ideológicos para incentivos materiales desaparecidos. Así, estrategias de
movimiento social devienen más extremas. El más radical un movimiento, el más
grande será la propensión de traditional dejó partidos, asustados por el riesgo de
alienar sus votantes moderados, para suponer una actitud hostil. El más ancho la
base de soporte, por otro lado, el más el riesgo de perder actos de soporte como
restricción en el uso de violencia.12 Lo tendría que ser añadido that intentos en co-
optation tiende para transformar la estructura organizativa e ideológica entera de
familias de movimiento social. En Italia, por ejemplo, entre el tardío 1960s y el
temprano 1980s, una tendencia hacia co-optation en la parte de un potente Com-
munist el partido causó una ideología y una estructura organizativa fuertemente
influ-enced por el tradicional dejado para prevalecer dentro del sector de
movimiento social (della Porta 1996un).
Si, entonces, soporte de los partidos del izquierdos aparece para influir niveles
de mobilization y las estrategias adoptaron, la cuestión que relaciona a las
posibilidades de éxito queda abiertas. A pesar de las dificultades implicaron en
evaluar los resultados obtuvieron por movimientos sociales (para ser tratados en el
capítulo próximo), de cada-la cosa dijo tan lejos es más de probable que un
gobierno de izquierda sería más favorably colocado hacia muchos de las demandas
puestas adelante por el izquierda movimientos sociales que un gobierno del
correcto. En particular, las memorias de represión experimentaron antiguamente
tender para hacer el dejado más liberal en asuntos de orden público (della Porta
1998b). El dejado en poder, aun así, tiende al soporte reclama cuáles son
moderados, y encima emite cuáles son compatibles con aquellos de sus votantes
tradicionales (Kriesi et al. 1995: 59).
Enconc lusion, la presencia de aliadas potentes es generalmente un factor
facilitando éxito de movimiento social. En muchas alianzas de casos con el
dejados considerablemente realzar el mobilizing poder de protesta. Aun así, el
precio de este es una clase de tutelage en la parte del dejado que puede dirigir,
particularmente cuándo el izquierdo es en poder, a un diminution en protesta.
TÉL POLICING DE P ROTEST 219

8.5 Discursive Oportunidad y el


Sistema de Medios de comunicación

Los estudios ya citaron demostrados el poder explicativo del concepto de


oportunidad política, pero también levantado algunos problemas (ve también
capítulo 1 encima). Entre ellos es el (unacknowledged) función de variables
culturales en la percepción de constreñimientos y oportunidades políticos, así como
en la elección de organiza-tional modelos y repertorios de acción. Primero,
aproximaciones de oportunidad política están criticadas para fallar para reconocer
que “procesos culturales y estratégicos definen y crear los factores normalmente
presentados como ‘estructurales' ” (Goodwin y Jaspes 2004un: 27). Los factores
culturales filtran la realidad externa, de modo que el aspecto de oportunidades
podría pasar unperceived; o alternativamente, los activistas podrían percibir cerró
oportunidades cuando siendo abiertos (Kurzman 2004). Incluso anterior
proponents del concepto de political estructuras de oportunidad recientemente han
escrito que “las oportunidades y las amenazas no son categorías objetivas, pero
depender de la clase de atribución colectiva que el orden del día clásico limitó a
enmarcar de objetivos de movimiento” (McAdam, Tarrow, y Tilly 2001: 45).

8.5.1 Discursive oportunidades

El debate, aun así, va allende la función de percepciones para dirigir el restric-


tive efecto que el foco en oportunidades políticas ha tenido en estudios de
movimiento social (Goodwin y Jaspe 2004b). El énfasis en el político tiene en
partic-ular ocultó la función de discursive oportunidades, como la capacidad
de movimiento-ments' temas a resonate con valores culturales. La estructura
de oportunidad política de hecho ha sido definida como “el campo de jugar en
qué enmarcando context ocurre” (Gamson 2004: 249).
Mientras son también estructurales (en el sentido que son allende el
movimiento-ment esfera de influencia inmediata), discursive las oportunidades
son distintas de instituciones políticas (Koopmans 2004; Polletta 2004). Cultural
environments definir la resonancia de movimientos' demandas (Williams y Kubal
1999), con los cambios posibles sólo en transitional tiempo (Schudson 1989). El
profundamente embed-ded concepción de ciudadanía como inclusive (aquello es,
la ciudadanía basada en territorial criteria – “tierra”) o exclusivo (la ciudadanía
basada en la concepción de Volk , o “sangre”) explica mucho de la movilización
del racista así como los movimientos antirracistas (Koopmans y Statham 1999): el
movimiento de abolicionista suc-ceeded cuándo pueda enlazar sus reclamaciones
morales a valores dominantes (d'Anjou y Macho de furgoneta 1998); la manera en
qué el asunto de aborto estuvo hablada en Alemania y los Estados Unidos resonated
con temas generales en su nacionales políticos cul-tures (Ferree, Gamson,
Gerhards, y Rucht 2002); el regreso de opinión pública hacia un soporte general de
la esfera pública (versus la esfera privada) ayudó
220 TÉL POLICING DE P ROTEST

El desarrollo del movimiento de justicia global (della Porta, Andretta, Mosca,


y Reiter 2005).

8.5.2 Medios de comunicación y movimientos

El asunto de discursive las oportunidades está enlazada a la función jugada por


medios de comunicación de masas como el arena principal para la expresión
pública de opiniones y formación de opinión. Ya ha sido notado que los
movimientos sociales dependen de los medios de comunicación para conseguir su
mensaje a través de (ve capítulo 7 encima). Cuando Gamson (2004: 243) observa,
“el arena de medios de comunicación de masas es el sitio importante de contexto
encima significando porque todo de los jugadores en el proceso de política suponen
su influencia dominante – cualquiera está justificado o not.” Control de los medios
de comunicación y la producción simbólica por tanto deviene ambos un essen-tial
premisa para cualquier intento en movilización política, y una fuente autónoma de
conflicto. Cada vez más, control de recursos intelectuales, tradicionalmente
indispen-sable al éxito de acción colectiva, arriesga devenir un unattainable
objetivo si no es apoyado por acceder al medio de comunicación de masa (Gamson
y Modigliani 1989; Wasko y Mosko 1992; Gamson y Wolfsfeld 1993; Eyerman
1994). El más autónomo y pluralistic la estructura de medios de comunicación, el
más grande la posibilidad de acceso para challengers.
Aun así, los movimientos sociales han sido descritos como “jugadores”
débiles en la masa-esfera de medios de comunicación, y las relaciones entre
activistas y periodistas han sido vistas como competitive (Neveu 1999). Las
demandas de medios de comunicación de dirigentes visibles pueden
distorsionar democracia de movimiento (Gitlin 1980). Tendencias generales
(periodísticos pref-erence para el visibles y dramáticos, por ejemplo, o reliance
en fuentes autoritarias de información) y specific características del sistema de
medios de comunicación (un grado más grande o menor de neutralidad en la
parte de periodistas, la cantidad de competi-tion entre los medios de
comunicación diferentes) tanto influir movimientos sociales (ve, por ejemplo,
Kielbowicz y Scherer 1986). Reciente trfines hacia periodísticos
depoliticization y comercialización creciente (Neveu 1999) más allá reducir
activistas' acceso.
Aun así, los medios de comunicación también ofrecen espaciales para el spread
de movimientos' ideas. Organizaciones de movimiento han devenido más
especializadas en influencing los medios de comunicación, desarrollando un
concretos savoir-faire así como una reputación como fuentes fiables (Schlesinger
1992). Además, los activistas también representan un mercado de objetivo para los
medios de comunicación (Neveu 1999: 59): el más extendido el soporte para los
movimientos, las más estrategias de marketing crean mediatic espacio para su
discurso, con el efecto de más lejano ensanchando el soporte para los movimientos.
Esta clase de virtuous el círculo operó, para caso, en Alemania en la oposición a la
guerra de Iraq. Los medios de comunicación también pueden actuar tan mobilizers
de protesta, especialmente encima “altamente emocional y sym-bolic emite aquello
crea una atmósfera de consenso, emoción, y togetherness” (Walgraave y Manssens
2000: 235) – como la 1996 Marcha Blanca en
TÉL POLICING DE P ROTEST 221

Bruselas, el cual mobilized 300,000 Belgians para protestar contra institucional


mis-conducta en la investigación de un asesino de serial quién había matado varios
niños. Podemos añadir que, a pesar de que el debate en la efectividad de medios
de comunicación manipula-tion no ha sido concluyente (Katz y Lazarsfeld 1955;
Noelle-Neumann 1984; Gamson 1992b; Lenart 1993), la búsqueda ha
repetidamente indicó que el público no es un auricular pasivo de noticioso:
“leyendo imaginería de medios de comunicación es un proceso activo en qué
contexto, ubicación social, y la experiencia previa puede dirigir a descodificación
bastante diferente” (Gamson, Croteau, Hoynes, y Sasson 1992: 375). Los activistas
desafían el poder simbólico de los medios de comunicación, transgrediendo las
fronteras entre “mundo de medios de comunicación” y “mundo normal” (Couldry
1999; chs. 7 y 8). Los medios de comunicación radicales han desarrollado como
alternativos (contador-) esferas públicas (Downing 2001).
Si atención a “counterinformation” es una preocupación constante para
movimientos, los desarrollos tecnológicos recientes han facilitado el desarrollo de
medios de comunicación autónomos vía el internet. El mejor-los medios de
comunicación alternativos sabidos es Indy-medios de comunicación
(www.indymedia.org), definidos en su homepage como “un colectivos de inde-
pendent organizaciones de medios de comunicación y centenares de los periodistas
que ofrecen grassroots, noncorporate cobertura. Indymedia Es unos medios de
comunicación democráticos outlet para la creación de radical, cuidadoso, y la
verdad apasionada que dice.” El raison d'être de la red es la crítica de los medios
de comunicación establecidos (Rucht 2003b) y promoción de la “democratización
de información” y “ciudadanos' medios de comunicación” (Cardon y Granjou
2003). La editorial abierta es un elemento esencial del Indymedia proyecto: desde
entonces hay ningún tablero de editorial filtrando información, todo el mundo de
inde-pendent periodistas a los activistas desconocidos instantáneamente pueden
publicar el noticiosos reúnen en un sitio web globalmente accesible (Cristante
2003; Freschi 2003). Cualquiera quién respeta unas cuantas reglas de tierra pueden
crear un nodo local de Indymedia. Durante la protesta de Seattle, el centro de
medios de comunicación Independiente reclamó para tener recibido 1.5 millones
de golpes. Meso-Medios de comunicación de nivel, los cuales circulan información
entre activistas, tiene el uneasy tarea de lograr los medios de comunicación de
masas si quieren su mensaje para ser oído exterior de las audiencias comprensivas
al movimiento (Bennett 2004b; Peretti 2004).

8.6 Resumen

El policing de protesta, los estilos de los cuales han cambiado históricamente y


balneario-tially, influye movimiento social trajectories y características. Coactivo
strate-gies a menudo ha producido escalation. Mientras movimiento de países
democráticos hacia negoció formas de control, reciente global protestas, a pesar de que
en gran parte pacíficos, ha sido conocido por duro policing. Formas de policing derivar
en parte de culturas y organizaciones policiales; aun así, son también sensibles a
políticos opportu-nities. Bajo esta etiqueta, diacrónico, cruz-nacional comparative la
búsqueda ha hablado las características y efectos de cuatro grupos de las variables que
relacionan a:
222 TÉL POLICING DE P ROTEST

(1) Instituciones políticas; (2) culturas políticas; (3) el comportamiento de


adversarios de movimientos sociales; y (4) el comportamiento de sus aliados.
Las variables institucionales más frecuentemente hablados ha relacionado a la
transparencia formal del proceso que hace decisión. Empezando de la hipótesis que
el más grande el número de puntos de acceder el más abierto el system, la
pertinencia de la distribución de poder y la disponibilidad de democracia directa
ha sido hablada. Características informales y, en particular, tradicionales strate-gies
de interacción con challengers estuvo considerado así como estructural char-
acteristics. En las últimas décadas, devolution en el subnational nivel y más
autónomo competences de las burocracias públicas (y, en particular, el judiciary)
ha aumentado los puntos de acceso, mientras el poder de crecer de multi-empresas
nacionales und IGOs ha hecho acceso a decisión-fabricantes más diffi-culto.
Tampoco de estos (tendentially estable) dimensiones, aun así, es bien adaptado a
explicar conjunctural acontecimientos como el aumento y disminución de protesta
o el mobilizing capacidad de movimientos sociales. Según lo que las consecuencias
de collec-tive la acción está preocupada, la transparencia formal o informal del
sistema que hace decisión no automáticamente privilegio demandas emergentes
porque las instituciones son también potencialmente abrir a movimientos sociales'
adversarios. A pesar de que los efectos de la estructura de oportunidad política
estable en plazos de movimiento social-ment el éxito así aparece ambiguo, los
efectos en las estrategias adoptaron por los movimientos parecen menos equívocos.
El más grande las oportunidades de acceder a la decisión-making sistema, los
movimientos más sociales tienden para adoptar estrategias moderadas y canales
institucionales.
El conjunctural las características de conflicto y alianzas aparecerían para tener
una influencia significativa en la aparición de protesta y encima movilización
potential. La fuerza de adversarios institucionales junto con movimiento/
countermovement interacción, influencia el aumento de protesta y estrategias de
movimiento. Alianzas con los partidos del izquierdos y los sindicatos haber pro-
vided recursos importantes para movimientos sociales y aumentó su posibilidad de
éxito antiguamente. La disminución de partidos de masa, y con ellos de activismo
de partido, reto las alianzas potenciales entre partidos y movimientos sociales.
Si el concepto de oportunidad política ha supuesto una función central en
búsqueda de movimiento social, poca atención ha sido pagada a percepciones
subjetivas de realidad. La búsqueda reciente ha empezado para dirigir la
manera en qué variables culturales filtra oportunidades políticas, y discursive
movimientos de influencia de las oportunidades' estrategias y posibilidades de
éxito. Pluralismo de los medios de comunicación de masas y el richness de
meso-medios de comunicación de nivel emergen condiciones tan importantes
para el spread de mensajes de movimiento.
9
DEMOCRACIA Y
MOVIMIENTOS
SOCIALES

En 1988 el gobierno de ciudad de Porto Alegre, una metrópoli brasileña con


1,360,000 habitantes, inició un proyecto de decisión participativa-haciendo
en el presupuesto de ciudad, con el objetivo de fortalecer participación a
través de la creación de un espacio público para el expression de ciudadanos'
demandas (Gret y Sintomer 2002: 26). Participativo budgeting ha sido
definido tan la innovación latinoamericana más significativa para ciudadano
creciente par-ticipation e imputabilidad de gobierno local: un experimento
en qué ciudadano unssemblies en cada distrito de ciudad determina
prioridades para el uso de una parte de los ingresos de la ciudad (Souza
2000). Es un sistema de governance donde “los ciudadanos regulares”
hacen atar decisiones en varias áreas de governmen-tal acción, más
notablemente aquellos afectaning las inversiones capitales nuevas de la
ciudad (Baiocchi 2002un). Cada año, entre March y junio, hay anchos-
extender interacciones entre ciudadanos y la administración. Asambleas de
ciudad grande así como barrio descentralizado unos hablan y voto en
spprioridades de final, eligiendo delegados al Consejo del Participativo
Budgeting así como a comités temáticos. Cada comité temático entonces
elige representantes al Consejo del Participativo Budgeting, en qué
representantes de uniones, neighborhood asociaciones, y el gobierno
también participa. En julio y agosto, expertos de ciudad, junto con las
asambleas' delegados, ayuda en traducir las demandas a proyectos. Entre
septiembre y diciembre, los delegados conocen y preparar un General
Proposal en el Presupuesto y un borrador del Plan de Inversión que será
hablado con el Ayuntamiento y entonces aprobado (Allegretti 2003: 116–
17). Los procedimientos de decisión implican ambos directos y delegado
democ-racy, con delegación obligatoria en neighborhood foros. La elección
de las delegadas estimula participación, siendo proporcional al número de
las personas que participan en las asambleas (un delegado a 10
participantes). hay también una delegación de poder a instituciones
representativas, tanto el
224 SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY

Ayuntamiento y el temático participativo budgeting comités (encima


transporte, salud y seguridad social, cultura, educación y ocio, eco-nomic
desarrollo, y desarrollo urbano).
En una prueba-y-proceso de error, participativo budgeting adquirió una
estructura compleja para conseguir dos diferente pero objetivos
complementarios: justicia más social, pero también más participación. La
empresa está centrada en el objetivo de reducir desigualdades sociales, y
unllocation tiene en cuenta ambos la prioridad establecida por los
ciudadanos, y los niveles relativos de dep-rivation en los varios barrios. El
preciso cronometrando de los objetivos de proceso en reducir el reconoció
limitaciones de assemblyism, especialmente en plazos de bloques de
decisión, sin dejar las ventajas de democracia directa, especialmente en
plazos de ciudadanos' empowerment.
A pesar de que lejos de implicar la población entera, los experimentos
tuvieron algún éxito en plazos de participación. Implicación en el participa-
tory budgeting el proceso de hecho aumentado de menos de 1,000 personas
en 1990 a más de 30,000 en 2002 (Allegretti 2004: 204). Además, deje
anteriormente excluyó grupos para decidir encima prioridades de inversión
en sus comunidades y para controlar respuestas de gobierno (Souza 2000).
A pesar de que la educación y la clase social son pertinentes en adquirir
principal posi-tions como delegados, los grupos más pobres son
overrepresented en el rango-y-asambleas de archivo. Pero la participación es
especialmente facilitada por previous implicación en asociaciones y
organizaciones de movimiento social. Distritos' la participación es de hecho
proporcional al richness de associational vida (Baiocchi 2001); aumentos de
participación individual con associational afiliación (a pesar de que el
número of participantes sin associational la afiliación creció de uno-trimestre
de los participantes en 1995 a menos de uno-tercer en 2002) (Allegretti 2003:
206). Para minimizar las desigualdades que resultan de diferencias en hablar
capacidad, el discursive encuadre (para caso, por dejar para intervención
muy corta) desalenta discurso formal-haciendo, el cual privilegios el mejores
educados (Baiocchi 2001). Autoridad dentro de las reuniones no proviene
educación o clase, pero implica otras clases de estado social como respect
dentro de la comunidad, a menudo enlazado con afiliación (o incluso
liderazgo) en varios grupos locales (Baiocchi 2002). En plazos de los efectos
concretos de los experimentos, pueda valer notar que Porto Alegre parece
para tener obtenido en plazos de estándaress de justicia social, cuando él
ahora rangos sexto de 5,507 ciudades en Brasil variaron en una escala de
exclusión social (un rango de uno siendo el menos exclusivo) y séptimo en
plazos de calidad de vida (Allegretti 2003: 74–5). La ONU ha rec-ognized
presupuesto participativoing cuando uno de las 40 “buenas prácticas del
mundo” (Allegretti 2003: 173).
SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY 225

Varias condiciones facilitan el Porto Alegre experimento. Primero, la


constitución brasileña nueva de 1988 impuesto descentralizado collection al
nivel de ciudad, proporcionando recursos para la financiación del
presupuesto participativo. Los estatutos de ciudad nuevos, siguiendo la
constitución nueva, también abrió una ventana de oportunidad para
participación en el nivel local (Allegretti 2003: 110). Más-encima, Porto
Alegre mucho tiempo ha sido gobernado por los Trabajadores' Partido, un
partido socialista en búsqueda de una base de soporte para dirigir el país
democ-ratization proceso y su pobreza extrema. Aún más importante, Porto
Alegre tiene una tradición larga de associationism, eespecialmente en el
nivel comunitario. Las asociaciones de barrio, el cual sobrevivió el autor del
país-itarian periodos, representar un ejemplo de democracia participativa en
el mundo Del sur cuál tiene raíces más profundas que modelos
representativos Occidentales de democracy (Sen 2003). A pesar de que
algunos de estas asociaciones eran parte de clientelistic redes de poder,
negociando votos con potentes patrons, una tradición de protesta no obstante
sobrevivida junto al clientelis-tic un. Al final del 1980s, una ola de
occupations de los edificios públicos fortalecieron el associative redes
(Allegretti 2003: 107). Según varios observadores, en contraste a un periodo
anterior de “tutelage” en qué asociaciones de barrio vacillated entre
acquiescence y conflicto con municigobierno de colega, las reformas
participativas haber fostered instituciones nuevas en sociedad civil, un más
grande interconnectedness entre organizaciones locales, y un “scaling
arriba” de activismo fuera de sólo vecino-capote a citywide preocupaciones
(Baiocchi 2002).
Participatory budgeting Por tanto representa un empowerment de indi-vidual
participación, pero también un arena para el desarrollo de movimiento social-
ments. No por casualidad, Porto Alegre ha también jugó una función central en
el movimiento de justicia global, hosting su primer transnational asambleas. Los
Foros Sociales Mundiales (WSF) (Schönleitner 2003) cuál tuvo lugar allí
también representar un experimento con “otra democracia” – esto cronometra
inter-nal a los actores de movimiento. Aquí, también, la participación creció de
los 16,400 participantes unt la primera reunión en enero 2001 a 52,000 en 2002
y aproximadamente 100,000 en 2003. En miles de seminarios y reuniones, más
o menos reales-istic y las propuestas originales estuvieron picadas fuera para un
inferiores-arriba de globales-ization; políticas y política alternativas estuvieron
debatidas y algunos de ellos probados (incluyendo el “presupuesto participativo”
que era activamente patrocinado por el Gráfico de los Municipios Nuevos,
formados durante el segundo WSF). Desde entonces 2002, en particular, la
experiencia de los Foros Sociales como colocar para conocer y engage en el
debate ha sido extendido al local y macro-niveles regionales. En particular, en el
otoño de aquel año, Florence hosted el primer Foro Social europeo, con tres días
de seminarios atendieron por
226 SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY

60,000 participantes. Durante el mismo periodo, debates en alternativos


devel-opment sociedades sostenibles “que construyen modelos” – estuvo
aguantado en Bamako en el Foro Social africano, en Beirut en el Oriente
Medio Foro Social, en Belem en la cacerola-versión de Amazon, y en
Hyderabad, India, en el Foro Social asiático. En noviembre 2003, un
segundo Foro Social europeo estuvo aguantado en París; el tercio estuvo
aguantado en Londres en octubre 2004.

En lo que sigue utilizaremos los experimentos democráticos en Porto Alegre


a illus-trate el potenciales y limitaciones de la búsqueda en los resultados
produjo por movimientos sociales. Un análisis de sus efectos es una parte
integral del estudio de movimientos sociales como agentes de cambio social.
Los movimientos diferentes han conseguido diferentes degrees de éxito, y
discusión respecto de qué determina los resultados consiguen ha sido central
al debate en movimientos sociales. Un número de características de
movimiento social ha sido frecuentemente citado tan particularmente
influyente al respecto. En general, la búsqueda ha concentrado en tales
cuestiones cuando: es movimientos que propone cambio radical más exitoso
que los que proponen cambio moderado o viceversa? Hace trabajo de
violencia? Es una organización centralizada y burocrática una ayuda o un
hindrance para movimientos sociales?
Primero, consideramos los movimientos de dificultades (y analistas) cara
en identificar estrategias victoriosas (9.1). Cambios en políticas (9.2) y en
políticas (9.3) entonces será hablado. Sección 9.4 entonces dirigirá el concreto
attempts de (algunos) movimientos sociales para cambiar la concepción de
democracia, hablando las interacciones entre teoría normativa de democracia
y protesta, mientras el reales inter-acciones entre procesos anchos de la
democratización y los movimientos sociales son hablaed en sección 9.5.

9.1 Movimiento Social Estrategias y Sus


Efectos

En uno del primer y estudios más influyentes en los efectos produjeron por las
estrategias los movimientos sociales adoptan, William Gamson (1990) identificó
los factores que contribuyen a éxito uns un minimalist estrategia (“pensando
pequeño”), la adopción de acción directa, y una organización centralizada y
burocrática. Otros becarios de acción colectiva han no unánimemente aceptó esto,
aun así. Tan ya notado en relación a formas de acción, violence ha aparecido un
prometedor strate-gic elección en momentos históricos seguros. Gamson Él ha
admitido (1990) que los objetivos más anchos refuerzan solidaridad interna y
favorecer la creación de
SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY 227

alliances. Finalmente, ha sido señalado fuera que cuándo organizaciones,


incluyendo organizaciones de movimiento social, devenidos bureaucratized, el
deseo para organiza-tional la supervivencia viene para prevalecer encima objetivos
colectivos declarados. Según Francis Fox Piven und Richard Cloward (1977: xxi–
xxii), el esfuerzo para construir órgano-izations no es sólo vano pero también
averiando: “por intentar para hacer qué pueden no , los organizadores fallan para
hacer qué pueden hacer. Durante aquellos periodos breves en qué personas son
roused a indignation, cuándo están preparados para desafiar las autoridades a quien
ellos normalmente defer . . . Quienes se llaman dirigentes no normalmente escalate
el momento de la protesta de las personas.” El buscar recursos materiales para
asegurar supervivencia organizativa leanuncios inexorablemente hacia las élites,
quiénes son felices de ofrecer tales recursos precisamente porque lo saben servirá
para reducir la amenaza potencial al orden social representado por sus miembros
más débiles. Aun así, ha sido remarcado que no particular strategic el elemento
puede ser evaluado en aislamiento y sin tener en cuenta las condiciones dentro de
qué movimientos sociales tienen que operar (Burstein et al. 1995) y el pres-ence
de alianzas o adversarios en poder (Cress y Nieve 2000).
De hecho, la identificación de una “estrategia para éxito” es una tarea ardua para
ambos activistas y becarios. El Foro Social Mundial en Porto Alegre proporciona
varios ejemplos de debates sobre la articulación de demandas generales para “otro
mundo posible” en concreto proposals para reformas, y el grado de aceptable
compromise. La gama de los modelos organizativos escogidos (y defendidos) varía
de altamente estructuró asociaciones (como ATTAC) a infor-mal grupos de
afinidad, incluyendo varios ejemplos de transnacionales alliances (como, para
caso, Vía Campesina, networking grupos de protesta villana de 50 países). A pesar
de que el movimiento está caracterizado por nonviolent estrategias, el uso de
formas concretas de acción directa como el desmantelando de McDonald
restaurantes, la administración de la ocupación de tierra por el Sem Terra, y la
democracia local practicada por el Zapatistas en la Sierra Lacandona es mucho-
debatió asuntos. El muy procedimientos que hacen decisión del WSF ha sido el
objetivo de crítica, el cual ha accused él de privileging efectividad encima igualdad
y transparencia.
La atribución de crédito para obtener los éxitos sustantivos también afronta una serie
de obstáculos (Tarrow 1994; Rucht 1992; Giugni 2004; Diani 1997; McVeigh, Welch,
y Bjarnason 2003). Unpri ncipal el problema es uno bien sabido a social sci-entists: la
existencia de tales relaciones cercanas entre un conjunto de variables que deviene
imposible de identificar causa y efecto. Urbanización e industrial-ization, por ejemplo,
ha facilitado organization por intensificar físico con-tacts. Han debilitado fuentes
seguras de socialización y solidaridad y favoreció el desarrollo de otros (para una visión
general, ve Sztompka 1993; también capítulo 2encima). La provisión educativa mejor
ha aumentado awareness de griev-ances e hizo defender un los intereses propios
aparecen legítimos. Unas comunicaciones cada vez más eficaces información de spread
del sistema encima movilizaciones de masa
228 SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY

Durante el mundo. Los movimientos nacen en el curso de estos transforma-


tions y contribuir a ellos. Socioeconómico, cultural, y los casos políticos de
globalización son el producto de al propio tiempo reacciones a movimiento
anterior-ments y adaptación a presiones de movimiento, resolviendo nuevos
resources y con-straints para protesta.
Tercio, la presencia de una pluralidad de actores lo hace más difícil a attrib-
ute éxito o fracaso a uno estrategia particular (Diani 1997). Los movimientos
sociales se son actores complejos, compuestos de muchos organizations
persiguiendo pro-foundly estrategias diferentes. En particular, los
movimientos recientes proceden vía cam-paigns en qué varias organizaciones
contribuyen con el repertories son más especializados en utilizar:
medioambiental NGOs lobby IGOs; huelgas de llamada de los sindicatos
contra acuerdos de comercio libre; Sem Terra los campesinos brasileños
ocupan unused tierras; hackers mermelada empresas grandes' sitios web. Es
difícil a solo fuera de la contribución concreta de cada grupo al resultado final.
Muy en particular, los movimientos nunca son los actores únicos para intervenir
en un asunto. Bastante, hacen tan en alianza con partidos políticos y, no
infrequently, con agencias públicas. Las elecciones de política de otros actores
sociales y políticos, para caso, es importante en explicar el desarrollo del
participatory expe-rience en Porto Alegre, donde el partido socialista en gobierno
invirtió sym-bolic y recursos materiales en el proyecto. Así, “el resultado de
bargaining no es el resultado de las características de cualquier partido, sino es la
función de sus recursos relativos a cada cual otro, sus relaciones con terceros
partidos, y otros factores en el entorno” (Burstein, Einwohner, y Hollander 1995:
280). Cuando hemos mencionado (ve capítulo 8), los resultados obtuvieron por
movimiento social-ments (o their fracaso de obtenerles) a menudo ha sido
explicado por environ-condiciones mentales, particularmente la transparencia de
oportunidades políticas y la disponibilidad de aliados. Es difícil empero para
identificar cuál de los muchos actores implicó en un dado policy el área es
responsable para una reacción u otro. Si, cuando sugerido más temprano, un
número grande de interacciones caracteriza un ciclo de protesta, los resultados
obtuvieron será el efecto de aquel número grande de interacciones. Así, es siempre
difícil a establish si una política dada habría sido enacted a través de otros actores
institucionales en todo caso.
Cuarto, las dificultades crearon por una pluralidad de actores está añadida a por
el dif-ficulty de reconstruir la dinámica causal público particular subyacented eci-
sions. Por un lado, los acontecimientos son tan intertwined que es difícil de decir
cuál vino primero, particularmente en momentos de movilización alta. En el otro,
los movimientos sociales reclaman mucho tiempo-cambios de plazo, pero el ciclo
de protesta estimula imme-diate “incremental” reformas. Cuándo movimientos
sociales exitosamente sitio partic-ular asuntos en el orden del día público esto “no
pasa directamente o incluso en una moda lineal. De hecho, cuando sus ideas son
vulgarized y domesticados, el tempranos risers en un ciclo de protesta a menudo
disappear de la escena. Pero una porción de su mensaje está destilada a marcos
comunes de cultura pública o privada mientras el resto es
SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY 229

Ignorado” (Tarrow 1994: 185). Esta evolución está caracterizada por pasos
adelante y pasos atrás, los momentos en qué política pública se acerca las demandas
hicieron por movimientos sociales y otros en qué la situación se deteriora.
Si los resultados de protesta tendrían que ser juzgados en el cortos o en el
plazo largo representa un problema más lejano. Los movimientos sociales
frecuentemente obtienen éxitos en las fases tempranas de movilización, pero
esto provoca opposing intereses y a menudo un backlash en público opinión.
Así, mientras es cierto que hay un ancho consen-sus encima muchos de los
asuntos raised por movimientos sociales (paz, el defensa de naturaleza, mejoras
en el sistema de educación, igualdad), la movilización puede nev-ertheless
resultado en la polarización de opinión pública. Esto normalmente produce un
crecimiento en soporte de movimiento, pero muy a menudo también un
crecimiento en oposición. Piel-thermore, cuando notado en el capítulo de
preceder, éxito de movimiento en las demandas concretas frecuentemente
dirige a la creación de countermovements: el desarrollar-ment de
neoliberalismo como una ideología de la clase capitalista ha sido explicada uns
una reacción a las victorias de movimiento del trabajo en plazos de derechos
sociales (Sklair 1995).
Particularmente cuándo uno está comparando países o movimientos
diferentes, los problemas perfilaron encima obstaculizar una evaluación de la
efectividad relativa de par-ticular movement estrategias. hay también un
problema, naturalmente, con el attri-bution de resultados particulares a más
institucionalizó actores como presión y partidos políticos grupos. 1 Factores
particulares a movimientos sociales como su distancia de las palancas de poder,
definición heterogénea de sus objetivos, y organizativos instability más allá
complicar asuntos. En lo que sigue, allí-fore, no intentaremos para identificar
estrategias ganadoras sino para considerar algunos de las consecuencias de
interacción entre movimientos sociales y su entorno.

9.2 Cambios en público Política

Una primera área para medir los efectos produjeron por los movimientos sociales
es que de política real, cuando el ejemplo con qué el capítulo abre mostrado.
Generalmente, movimientos sociales are formó para expresar insatisfacción con
existir política en una área dada. Grupos de ecologista han reclamado intervención
para proteger el entorno; pacifistas haber opposed la cultura de guerra; los
estudiantes han criticado selección y autoritarismo ene ducation; el movimiento
feminista ha luchado discriminación contra mujeres; los foros sociales mundiales
criticaron neoliberal glob-alization. A pesar de que es habitual de hacer una
distinción entre movimientos políticos y culturales, el primer siguiendo un más
instrumental lógica, el segundo más sym-bolic, todos los movimientos tienden
para hacer demandas en el sistema político.
Una demanda particular frecuentemente deviene nonnegotiable, siendo la base
para la identidad de un movimiento. Por ejemplo, en muchos países el movimiento
feminista tiene
230 SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY

Sido construido alrededor del nonnegotiable derecho de mujeres para “escoger”


con-cerning parto; el parando de la instalación de misiles nucleares DE LA OTAN
ful-llenó una función similar para el movimiento de paz. En la primera
movilización de caso era pro-activo, buscando para obtener algo nuevo, el correcto
a aborto libre; en el segundo sea reactivo, buscando para bloquear una decisión
(para instalar misiles de crucero) cuál ya había sido tomado. Uno de la organización
de fundars del Foro Social Mundial en Porto Alegre, ATTAC, emergido alrededor
de las demandas de un impuesto en transacciones transnacionales; también
presente en Porto Alegre, la campaña de alivio de la deuda pidió la deuda extranjera
de países pobres para ser totalmente escritos fuera. En todo cases, cambios
considerables en público la política era reclamó. Característica de estos
nonnegotiable los objetivos es su función en los movimientos sociales'
definiciones de ellos y del mundo externo (Pizzorno 1978). Demandas cuyo sym-
bolic el valor esver y alto, como la Enmienda de Derechos Igual en el caso del
movimiento feminista americano, queda central para un movimiento incluso
cuándo su efectividad potencial es cuestionable (Mansbridge 1986). La
importancia de tal nonnegotiable los objetivos está confirmado por el hecho que a
pesar de que los activistas pueden ser dispuestos de negociar en otras demandas,
incluso victorias parciales en estos asuntos, como una mujer correcto a
voluntariamente interrumpir embarazo, está considerado como derrotas. A pesar
de que la campaña Jubilee 2000 ha sido defined tan “estratégicamente desafiando,
políticamente complejo, relativamente exitoso,” habiendo “eficazmente pres-sured
gobiernos de acreedor para hacer movimientos significativos para escribir de
unplayable tercera deuda mundial,” y teniendo “centrado escrutinio público sin
precedentes eno fficial macroeconomic políticas” (Collins, Gariyo, y Burdon 2001:
135), muchos activistas han sido insatisfechos con las respuestas institucionales a
sus reclamaciones.
Mientras nonnegotiable las demandas son particularmente importantes en la
construcción de colectivo identilazos, los movimientos sociales raramente se
limitan a justo estos. En el caso del movimiento de justicia global, el objetivo
general de “construir otro mundo posible” ha sido articulado en peticiones
concretas, de la oposición a privatización de servicio públicos y bien público (i.e.,
la campaña para acceso libre para abrevar) a los derechos de gobiernos nacionales
para organizar el bajo-costado pro-duction de medicinas en casos de emergencia;
de la oposición a proyectos concretos de construcción de dique a una reforma
democrática de las Naciones Unidas. Cooperando en campañas de protesta global,
las asociaciones ecológicas acentuadas el medioambientales unsustainability de
neoliberal capitalismo, sindicatos el nega-tive consecuencias de comercio libre
encima derechos de trabajo y niveles de ocupación, femi-nist agrupa el sufrimiento
de mujeres bajo cortes al estado de bienestar.
Del punto de vista de política pública, los cambios trajeron aproximadamente
por los movimientos sociales pueden ser evaluados por mirar en las varias fases del
proceso que hace decisión: la aparición de asuntos nuevos; escritura y aplicando
nuevo legis-lation; y análisis de los efectos de políticas públicas en aliviar las
condiciones de aquellos mobilized por acción colectiva. Cinco niveles de
responsiveness a collec-tive las demandas dentro del sistema político pueden ser
distinguidas:
SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY 231
La idea de “acceso responsiveness” indica la extensión a qué autoridades es dispuesta
de oír las preocupaciones de tal grupo . . . Si la demanda . . . Está hecho a un asunto
y colocado en el orden del día del sistema político, allí ha ocurrido un segundo tipo
de responsiveness cuáles aquí pueden ser labeled “orden del día responsiveness”
. . . Cuando la propuesta . . . Está pasado a ley, un tercer tipo de responsiveness está
logrado; la idea of “política responsiveness” indica el grado al cual aquellos en el
sistema político adoptan la legislación o la política congruentes con el manifestar
demandas de grupos de protesta . . . Si las medidas están tomadas para asegurar que
la legislación es plenamente aplicada, entonces un fourth tipo de responsiveness está
logrado: “producción responsiveness”
. . . Sólo si la queja subyacente está aliviada un quinto tipo de responsive-ness
ser logrado: “impacto responsiveness.
(Schumaker 1975: 494–5)

La búsqueda en movimientos sociales ha concentrado en la producción de legis-


lation. Como la revisión reciente de la literatura notó, más “los estudios centran
encima política responsiveness, menos encima acceder responsiveness, y muy
pocos en el orden del día político, producciones, impacto de política, o cambio
estructural” (Burstein et al. 1995: 285). Teniendo identificado una serie de las áreas
en qué movimientos intervienen, análisis cuantitativos y cualitativos intento de
medir la respuesta de parlamentos y gov-ernments. Regresando al ejemplo del
movimiento de derechos humanos, transna-tional las normas emergieron para la
protección de indigenous personas en contra tortura y defendiendo sus libertades
democráticas (Risse y Sikkink 1999). Estas normas democratización ayudada por
dar resonancia en supranational foros a movimientos nacionales de authoritarian
países (Keck y Sikkink 1998).
Un análisis de los efectos concretos de movimientos sociales pueden empezar,
por tanto, de la producción de legislación. Esto no es bastante, aun así. Cuando
notado en discusión de movimientos sociales y políticos opportunilazos, los
estados diferentes tienen capacidades diferentes para implementar legislación, y es
precisamente de la implementación de legislación que los beneficios concretos
están conseguidos. Aún más rele-vant, las normas transnacionales puestas en los
acuerdos internacionales requieren leys para ser enacted en el nivel nacional.
Cuando los casos de acuerdos en proliferación de armas y minas de tierra, o el
Kyoto Acuerdo para controlar cambios de clima, indica, muy a menudo
superpowers (ante todo, los Estados Unidos) residuos para firmar o implementar
internoational acuerdos. Para evaluar los resultados produjeron por un movimiento
social, por tanto, es también necesario de analizar cómo las leyes o acuerdos
ayudaron traer aproximadamente es de hecho aplicó.
Cambio real, los efectos produjeron por legislación however implementó, es
aún más difícil de juzgar. Leyes qué buscar para conocer seguro de las demandas
de movimientos sociales pueden ser limitadas en efecto o incluso
counterproductive, ningún asunto qué bien implementó. El Porto Alegre
experimento, con su prima para más participatory distritos, arriesgó producir
imbalances en gastar. Durante el participativo budgeting, la inversión inicial en
construcción de carretera, orientado a
232 SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY

Mejorando la condición del más pobre y most áreas insignificantes, tuvo lado
negativo-efectos en plazos de sostenibilidad medioambiental (Allegretti 2003:
226). Sólo más tarde hizo un programa de urbanización basado en la creación
de espacios abiertos que podría facilitar sociability plenamente desarrollar
(ibid.: 281).
Hablando sobre las normas ya implica considerar que, junto a cambios
estructurales en la condición de aquellas categorías o grupos sociales mobilized
por col-lective acción, la transformación cultural es un elemento importante más
lejano en achiev-ing y consolidando nuevo gains. A pesar de que es cierto que
todos los movimientos tienden para querer cambio legislativo, esto es tampoco su
único, ni incluso quizás su primario, objetivo. Los movimientos son de hecho
transportistas de mensajes simbólicos (Gamson 2004: 247): apuntan para influir
bystanders, spleyendo su concepción propia del mundo, y luchan para tener las
identidades nuevas reconocieron. Los efectos de movimientos sociales son también
conectados con cambio cultural difuso, el elaboration de “códigos nuevos”
(Melucci 1982, 1984un). Típicamente, ideas nuevas emerge dentro de
comunidades críticas, y es entonces extendido vía movimientos sociales – tan
Rochon (1998: 179) observa, “La tarea de traducir el problema crónico cuando
descrito por el criti-cal comunidad a un problema agudo que atraerá atención de
medios de comunicación es el province de movimientos sociales y políticos.”
Mientras la capacidad de movimientos sociales para la realización de sus objetivos
generales ha sido considerada abajo, están vistos tan más eficaces en el importation de
asuntos nuevos a debate público, o thematization. Para caso, después de que Seattle, el
movimiento de justicia global parece a ha sido exitoso en colocar en el orden del día
público los temas de desigualdades sociales y la opacidad de decisión transnacional-
haciendo. En junio 2001, tiempo a escaso antes del G8 cumbre en Genoa, una encuesta
nacional (corrido por CIRM) reveló que cuando muchos cuando 45 por ciento de
italianos sympathized con los argumentos del movimiento, 28 por ciento no, y 27 por
ciento no tuvieron ninguna opinión (La Repubblica 17/6/01). Una encuesta más tardía
por Búsqueda de Inteligencia del Simulacro mostró una mayoría grande de los
ciudadanos italianos a favor de movimientos' objetivos, como cancelar tercera deuda
mundial (81 por ciento), estableciendo “igualdad de condiciones económicas y
laborables para trabajadores en todo el mundo” (80 por ciento), incondicionales opposi-
tion alw ar (74 por ciento), haciendo fuera con paraísos fiscales (70 por ciento),
prohibiendo genéticamente modificó comidas (70 por ciento), introduciendo un Tobin
Impuesto (64 por ciento), y libertad de movimiento para emigrantes (55 por ciento). En
general, 19 por ciento de aquellos surveyed respondió que el “movimiento no” global
era “muy positivo” y 50.9 por ciento “bastante positivos.” Sólo 16.1 por ciento sentían
él era bastante o muy negativo (para más detalles, ve della Porta, Andretta, Mosca, y
Reiter 2005, ch. 7).
Es útil, por tanto, para mirar en un movimiento está sensibilizando impacto, i.e. el
“pos-sibility que un movimiento provocará un sensibilizando de algún actor social en
el arena político o el arena público, el cual entra la dirección de los objetivos del
movimiento” (Kriesi et al. 1995: 211). Además, los movimientos sociales son más
conscientes que algunos mejores-resourced actores de su necesidad para soporte
público. Desde entonces movilización de protesta es corta movimientos vividos ,
sociales no se pueden contentar con reformas legislativas que siempre puede ser
invertido más tarde. Tienen que asegurar aquello
SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY 233

El soporte para su causa es tan ampliamente diseminado cuando para


desalentar cualquier intento de rodar reformas atrás.
Tenga que ser añadido que los movimientos sociales no apuntan sólo para
cambiar opinión pública. Ellos alasí que busca para ganar soporte entre aquellos
responsable para imple-menting política pública, y cambiar los valores de élites
políticas así como aquellos del público. A pesar de que movilización de masa
temporalmente puede convencer partidos políticos para pasar una ley, aquella ley
tiene que also ser implementado. En este caso, también, los movimientos sociales
no siempre tienen medio suficiente de acceder a las menos áreas visibles de
implementación de política, y sus posibilidades del éxito por tanto depende de
influir las agencias públicas responsables para implementing las leyes qué
preocupárseles. Para caso, vía contactos directos o brokers, expertos dentro o los
movimientos cercanos han sido capaces de infiltrar el internacionales advocacy
comunidad, y spread de ayuda disiente respecto de neoliberal estrategias dentro del
political y nonpolitical élite. En el mid-1990s, dirigentes de muchos los estados
Occidentales apartaban del liberalismo puro del Thatcher y Reagan años. En el
inter-arena nacional, opiniones, a veces de trimestres inesperados, los está haciendo
oyó, llamando atención a los asuntos de mercado y servicios sociales reregulation
(O' Brian, Goetz, Scholte, y Williams 2000: 9).

9.3 Movimientos Sociales y


Cambios Procesales

Los movimientos sociales no limitan sus intervenciones a políticas solas.


Frecuentemente influyen la manera en qué el sistema político globalmente
funciones: sus procedimientos institucionales y formales, reclutamiento de
élite, el informal con-figuration de poder (Kitschelt 1986; Rucht 1992).
Demanda de movimientos, y a menudo obtener, descentralización de political
poder, consulta de interesado citi-zens en apelaciones o decisiones particulares
procedimientos contra decisiones de la administración pública. Cada vez más
interaccionan con la administración pública, pre-senting ellos como
instituciones de “democracy desde abajo” (Roth 1994): preguntan para ser
dejados para atestiguar antes de instituciones representativas y el judiciary,
para ser escuchados a tan counterexperts, para recibir reconocimiento legal e
incentivos materiales.
Protesta, sólo una parte pequeña de movimiento social globalment actividad, es
indudablemente considerado importante, pero también ineffectual a no ser que
acompañado por más tradi-tional actividades de cabildeo. A pesar de que contactos
con ministerios de gobierno y la burocracia pública no pueden ser vistos en su
propios cuando particularmente effective en influ-encing política, están
considerados útiles para información-creciente y para contrarrestar la influencia de
grupos de presión: para caso, el movimiento medioambiental ha sido capaz de
contrarrestar anti-ecologistas por construir alianzas dentro de la burocracia de
Comisión europea (Ruzza 2004). Cuando veremos en lo que sigue, los
movimientos sociales aumentan las posibilidades de acceder al
234 SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY

Sistema político, ambos a través de los canales ad hoc que relacionan a asuntos
seguros y a través de instituciones que es abierto a todo noninstitutional
actores.
En el vigésimo siglo tardío, los movimientos sociales eran de hecho sido
capaces de introducir cambios que tiende hacia más grande grassroots control sobre
público insti-tutions. En muchos países europeos, la descentralización
administrativa ha tenido lugar desde el 1970s, con la creación de canales nuevos
de acceder a decisión-fabricantes. Varias formas de participación en que hace
decisión ha sido probado dentro de social movement organizaciones. Si el aumento
de concentrar los partidos políticos ha sido definidos como “contagio del
izquierdo” y la democracia de los medios de comunicación de masas como
“contagio del correcto,” los movimientos sociales nuevos han sido aclamados
como “contagio desde abajo” (Rohrschneider 1993un). Los movimientos sociales
han traído sobre un pluralization de las maneras en qué decisiones políticas están
tomadas, empujados por cyclical insatisfacción con centralizado y burocrático
representa-tive democracia (ve abajo). En este sentido, social movements ha
producido un cambio en cultura política, en el conjunto entero de normas y
referencia maquina cuáles definen los asuntos y significa de acción que es
políticamente legítimo. Reper-toires De acción colectiva, el cual era una vez
condenado y trató sencillamente tan problemas de orden público, haber despacio
devenir aceptable (della Porta 1998b).
En muchos países actos de democracia directa como canal suplementario de
acceder a aquellos abierto dentro de democracia representativa. En asuntos como
divorcio, aborto, o disco de génerorimination, por ejemplo, el movimiento de las
mujeres era en muchos casos capaces de apelar directamente a las personas que
utilizan tampoco legislación iniciada popularmente o referenda para la abrogación
de existir leyes o el implementa-tion de tratados transnacionales. Referenda Ha
devenido un instrumento cada vez más importante de expresión directa para
ciudadanos normales, particularmente en asuntos que no es directamente
relacionado al social cleavages alrededor de qué partidos políticos han formado. El
referéndum hace campaña presente social movements con una oportunidad a
publicize los asuntos que se les preocupa, así como la esperanza de ser capaz a
bypass el obstáculo representado por los gobiernos hostiles a sus demandas.
Los movimientos sociales también contribuyen a la creación de arena nuevos
para el devel-opment de política pública. Estos nuevo loci de que hace decisión
varía en plazos de su transparencia, duración, y extensión de poder. Tienen dos
cosas en común, aun así: su legitimation no es basado en los principios de la
democracia representativa y ellos tieneng reater visibilidad que esferas
institucionales de que hacen decisión. Varios arena nuevos de que hacen decisión
puede ser identificado.
Las comisiones expertas son frecuentemente formadas en los asuntos levantaron
por protesta, y representantes de movimiento social pueden ser dejados para
participar, posiblemente tan observadores. La comisión del “Presidente encima
Malestar de Campus” qué William Scranton presided encima en los Estados
Unidos (en 1970) es un ejemplo. Otros son la comisión dirigidos por Señor
Scarman a amotinarse en el Reino Unido en el 1980s y la comisión de la
investigación instalada encima “Protesta de Juventud en el Democra-Estado de tic”
en Alemania (Willelms et al. 1993). Después de que Seattle, comisiones de inde-
SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY 235

pendent Los expertos han sido puestos para investigar el social efectos de
globalización (como la Comisión Parlamentaria en Alemania) así como el
policial behav-ior durante acontecimientos de protesta transnacional (ve la
Comisión de Ayuntamiento de la Seattle en los acontecimientos de Seattle).
Común a ellos todo es el reconocimiento que the problemas dirigen es en
alguna manera extraordinario, y requerir soluciones extraordinarias. A pesar
de que tales comisiones expertas normalmente tienen un mandato limitado y
cónsul-tative poder sólo, introducen un diálogo con opinión pública a través
de contacto de prensas y the publicación de informes.
Además comisiones de consulta, otros canales de acceso están abiertos por la
creación de las instituciones consultivas en asuntos relacionaron a demandas de
movimiento social. Ministerios estatales, agencias de gobierno local, y otros cuerpos
similares ahora existen en las mujeres es o asuntos ecológicos en muchos países, pero
también en IGOs. Tales instituciones, los cuales son frecuentemente instalados en una
base permanente, tiene sus presupuestos propios y poder de implementar políticas.
Algunos los cuerpos administrativos reguladores han sido established bajo la presión
de movilizaciones de movimiento, y ver activistas de movimiento como aliados
potenciales (Amenta 1998); activistas de movimiento han sido cooptados por cuerpos
públicos concretos cuando miembro de su personal (o viceversa). Oportunidades
nuevas para un “conflictual la cooperación” desarrolla dentro de agencias reguladoras
que está puesto para implementar objetivos que es también apoyado por activistas de
movimiento (Giugni y Passy 1998: 85). Los administradores públicos que trabajan en
estas instituciones median demandas de movimiento sociales particulares a través de
ambos canales formales e informales y frecuentemente aliado ellos con movimiento
represen-tatives para aumentar la cantidad de los recursos públicos disponibles en las
áreas de política encima cuál tienen autoridad. Tienden para tener contactos frecuentes
with los representantes de los movimientos sociales implicaron en sus áreas, las
organizaciones de movimiento que apechugan con una función de asesoría en muchos
casos, y ellos algunos-el tiempo desarrolla intereses comunes. La colaboración puede
tomar varias formas: de consulta, a incorporation en comités, a delegación de poder
(ibid.: 86).

La negociación informal ha habilitado algún internacional gubernamental


organiza-tions para cooptar asociaciones de movimiento social que apalabra
trabajo a través de canales discretos. Nongovernmental Organizaciones have así
ser accorded el estado de actores, y de vez en cuando importantes unos, en
mundiales governance, reconocidos como participantes en el desarrollo de normas
internacionales (como aquellos en derechos humanos) y en su implementación
(Pagnucco 1996: 14). “InterLas instituciones públicas nacionales están
modificando en respuesta a presión de movimientos sociales, NGOs y actores
empresariales, pero esto varía a través de las instituciones que dependen de institu-
tional cultura, estructura, función de la cabeza ejecutiva y vulnerabilidad a presión
de sociedad civil” (O' Brien, Goetz, Scholte, y Williams 2000: 6). Tan temprano
cuando 1948, el nongovernmental Conferencia de NGOs con estado consultivo
(CONGOS) estuvo instalado en las Naciones Unidas, y por el 1990s lo había
logrado cuando muchos cuando 1,500 miembros (Rucht 1996: 33). En la Unión
europea, el parlia-ment en particular pero otros cuerpos también han aguantado
intercambios informales de
236 SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY

Información con varios tipos de asociaciones (p. ej. Marcas y McAdam 1999;
Mazey y Richardson 1993; della Porta 2004b; Ruzza 2004; Lahusen 2004). Los
movimientos sociales han sido reconocidos respecto a processual entrada en el
Banco Mundial, con más énfasis encima participación y el reclutamiento de algún
personal progresivo (Chiriboga 2001: 81). Además un grado seguro de
reconocimiento institucional, NGOs especializando en asistencia de desarrollo ha
recibido financiación para los programas de desarrollo han presentado, o para unir
en los proyectos ya presentados por nacionales o internacionales governments
(O'Brien, Goetz, Scholte, y Williams 2000: 120). Muchos son también implicados
en oreja de fondos gestores-marcado para emergencias y ayuda humanitaria, el cual
ahora hace más de medio los proyectos del Banco Mundial (Brecher, Costello, y
Herrero 2000: 114). WhEn es más, los movimientos sociales han participado en
que construyen institución en el nivel internacional (en particular, en derechos
humanos así como medioambientales pro-tection), utilizando su “poder blando” en
la forma de conocimiento e información (Purdue 2000; Smith 2004b: 317).
En particular, activistas de movimiento social mantienen contactos directos con
decisión-fabricantes, participando en las comunidades epistémicas hicieron de
representantes de gobiernos, partidos, y grupos de interés de varios tipos y
persuasiones. Enparticu lar, NGOs crítico de neoliberalist la globalización ha
recurrido a presión ambos en los niveles nacionales e internacionales, cultivando
pericia concreta. De los derechos humanos agrupa a ecologistas, comunidades
epistémicas – compuestos de activistas y bureaucrats pertenencia a organizaciones
internacionales, así como políticos de muchos países – ha ganado beneficios
significativos en un número de áreas: por ejemplo, descontaminación de residuos
radioactivos, el establecimiento de un internacional tribunal encima derecho
humanos vulneraciones, y una prohibición en antipersonnel minas (Khagram,
Riker, y Sikkink 2002; Klotz 1995; Risse y Sikkink 1999; Thomas 2001). Algunos
NGOs no ha aumentado sólo en medida, pero también fuerza-ened su influencia en
varias etapas de internacionales policymaking (Sikkink y Herrero 2002; Boli
1999). Sus ventajas incluyen una credibilidad creciente en público opinión y la
disponibilidad consiguiente de financiación privada,2 también su raíz-edness en el
nivel local. Su conocimiento concreto, combinado con útil con-tacts en la prensa,
marca muchos NGOs parece particularmente fuentes fiables. Con un personal
profesional a mano, son también capaces de mantener un nivel justo de actividad
incluso cuándo movilización de protesta es abajo. Independencia de gobiernos,
com-bined con un reputation construyó a trabajo sólido en el nivel local, habilita
algún NGOs para actuar una función importante en mediar interethnic conflicto
(Friberg y Hettne 1998). Finalmente, realzan pluralismo dentro de internacional
institu-tions por representar agrupa quién otherwise ser excluido (Riddel-Dixon
1995) y por girar el spotlight en procesos transnacionales, haciendo gover-nance
más transparentes (Schmidt y Tomar 1997).
La mayoría de importante, tan-llamado deliberative los arena han desarrollado
en las últimas dos décadas, especially en el nivel local. Estos están basados en el
principio de partici-
SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY 237

pation De “ciudadanos normales” en público arena para debate, facultado por


informa-tion y reglas para comunicación de calidad alta. Hay varios ejemplos por
todas partes Europa: Ciudadanos' Jurados en Gran Bretaña y España, Planungzelle
en Alemania, la Conferencia de Consenso en Dinamarca, Conférences de Citoyens
en Francia, así como Orden del día 21 y varios experimentos en plan urbano
estratégico-ning. En el supranational nivel, nongovernmental las organizaciones
han recibido reconocimiento como socios informales en consulta encima
decisiones de política y partici-pation en implementación de política. Entre otros,
el Papel Blanco en europeo Governance (2001) defiende el principio de
participación mediante consulta abierta con ciudadanos y sus asociaciones cuando
uno de las pilares fundamentales de governance en la Unión europea. Los actores
asociaron con los movimientos sociales han intervenido en el desarrollo de algunos
de estos experimentos, a veces participantes tan críticos, a veces adversarios tan
externos.
Además de participativo budgeting, los experimentos diversos están
presentados tan la parte de un modelo de democracia participativo facultado centró
encima participación, calidad de discurso, y ciudadanos' empowerment (Fung y
Wright 2001). Examen-ples incluir el barrio de Chicago de ciudad interior
governance consejos para polic-ing y escuelas públicas, trabajo de junta–esfuerzos
de administración para dirigir mercados de trabajo industrial, stakeholder
development de ecosistema governance arreglos bajo los EE.UU. Endangered Acto
de Especie, y pueblo governance en Del oeste Bengal, India. El foco de estos
experimentos es el solucionando de problemas concretos a través de la implicación
de normal, afectó personas. Implica la creación de nuevo insti-tutions y devolution
de poder que hace decisión, pero también incluye coordinación con instituciones
representativas. Los objetivos de estas instituciones incluyen effec-tive que
solucionan problema y equitable soluciones así como anchos, deep, y participación
sostenida. En particular, el presupuesto participativo ha sido abonado con cre-ating
un contexto positivo para asociación, fostering activismo más grande, networking
asociaciones, y trabajando de un citywide orientación (Baiocchi 2002un).
But Qué exactamente hace estos arena nuevos ofrecen movimientos sociales?
Según algunos autores, la presencia de tales canales de acceso presenta más riesgos
que ventajas. En primer lugar, los movimientos están inducidos para aceptar el
cambiando de conflicto de las calles a menos congenial arena, donde recursos en
qué están careciendo de, como pericia técnica o científica, es particularmente
importante. La organización de una comisión puede ser nada más de un simbólico,
gesto de élite a constituencies y un medio of retrasando una decisión hasta tiempo
más tranquilo prevalece (Lipsky 1965). De hecho, la creación de los
procedimientos nuevos y los arena institucionales pueden ser vistos como medios
de cooptar élites de movimiento y demobilizing el grassroots (si son naive bastante
no para notar el engaño) (Piven y Cloward 1977: 53). Mistrust En la independencia
real de NGOs está indicado por la proliferación de tales acrónimos como GONGOs
(Gobierno-Organizado NGOs), BONGOs (Empresarial-Organizado NGOs), y
GRINGOs (Gobierno-Correr/Iniciado NGOs). ONGs es predominantemente
basado en el Del norte del mundo
238 SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY

(Dos-tercios de ONU-registró NGOs tener su sede en Europa y América del Norte)


(Sikkink 2002); y asociaciones importantes, en particular, es organized hier-
archically con transparencia limitada en la manera trabajan (Schmidt y Tomar
1997; Sikkink 2002). Intergovernmental Las organizaciones tienen, además, pre-
ferred tratando más grandes, más superiores-pesados NGOs, aquello es menos
controlado por su base de suppuerto (Chandhoke 2002; Guiraudon 2002). Mientras
algún NGOs era el primer a mobilize contra instituciones financieras
internacionales (en particular el Banco Mundial, IMF, y WTO), protesta
desarrollado debido a escepticismo con respecto a la eficacia de cabildeo, coupled
with una percepción que grande NGOs' la aproximación reformista había fallado
(Marca y Wissen 2002). En un tiempo de cutbacks en público gastando, NGOs
corrido el riesgo de ser explotado a supplant un cada vez más fallando servicio
público (Chandhoke 2002: 43). Además, hábilly manipuló los expertos pueden
soler legitimar tan más “científicamente apropiado” aquellas soluciones qué
gobiernos de traje. Referenda La dirección limitó cuestiones y mobilize opinión
pública sólo para periodos muy cortos; también llevan el riesgo que decisions será
hecho por la “mayoría silenciosa,” uninterested en (y uninformed
aproximadamente) los asuntos y los problemas levantaron por movimientos
sociales, y por tanto fácilmente influ-enced por aquellos con el más recursos para
dedicar a manipular consenso. Algunos estudia conclude que participación de
ciudadano en policymaking eficacia de aumentos, pero otros expresan dudas sobre
su capacidad de solucionar libre-jinete prob-lems y producir optimal decisiones o
facilitar la consecución del bien público (Renn et al. 1996; Petts 1997; Hajer y
Kesselring 1999; Grant, Perl, y Knoepfel 1999).
Además, los modelos participativos alternativos de democracia son difíciles de
implementar. Los niveles de participación eficaz, pluralidad, y eficacia de arena
nuevos de que hacen decisión es diverso y far de satisfactorio. En cuanto al plural-
ism de los arena participativos nuevos, desde los recursos para movilización
colectiva son unequally distribuidos entre grupos sociales, grupos y áreas más
pobres arriesgan ser excluidos por las instituciones nuevas de policymaking. Elir
capacidad eficaz para que hace decisión es a menudo mínimo: para varias razones,
canales nuevos de la participación normalmente ha sido limitada a “consulta” de
ciudadanos. Si la participación creciente deja para más visibilidad – e
imputabilidad – de policymaking, paralelo (y más eficaz) que hace decisión parece
a bypass arena públicos.
Por otro lado, los movimientos sociales frecuentemente han sido capaces a
beneficio (en parte a través de alianzas con expertos y policymakers) del
cambiando de que hacen decisión a un d hoc comisiones, ciertamente más abiertos
a escrutinio público que los arena normales de implementación de política. Los
asuntos nuevos han sido traídos al orden del día público a través del trabajo de tales
comisiones: “las comisiones se eran separa del proceso durante which los
problemas estuvieron definidos y el conjunto de orden del día . . . Su muy la
creación indicó que el normal praxis del sistema político para hacer las decisiones
era insuficientes, y que sea por tanto nec-essary para apelar a los expertos que
pertenecen a las instituciones científicas”
SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY 239

(Willelms Et al. 1993). A pesar de que los movimientos sociales no han sido
siempre en el lado ganador en referenda, el último empero ha contribuido a poner
asuntos nuevos en el orden del día público y a crear compasión pública para actores
emergentes. La capacidad de transformar las reglas del juego político, entonces, es
un precondition para influir política pública. En otras palabras,, las victorias
procesales vienen (al menos en parte) antes de que, y es indispensable para, éxitos
en un nivel más sustantivo (Rochon y Mazmanian 1993). Ampliando policymaking
para abarcar participación de ciudadano – en las formas de auditar, los jurados de
las personas, etc. – a menudo ha ayudado en solucionar los problemas crearon por
oposición local to localmente uso de tierra indeseada (LULU) (Bobbio y Zeppetella
1999; Sintomer 2005). Cuando hemos mencionado, el partic-ipatory énfasis en
bueno governance, así como su confianza en popular edu-catión (Baiocchi 2001),
parece para tener resultados positivos producidos in plazos de empowerment de
ciudadanos así como mejora de su calidad de vida.

9.4 Movimientos Sociales y


Teoría Democrática

Dejando aparte los resultados obtuvieron en demandas particulares, tenga que ser
añadido que el spread de arena de política nueva ha contribuido a la realización de
qué tiene sido considerado uno de los objetivos principales, si no el objetivo
principal, de muchos (si no todo: ve abajo) movimientos sociales: el desarrollo de
una concepción nueva de democracia. De hecho, ha sido reclamado que
movimientos sociales not limitarles-selves a canales especiales en desarrollo de
acceso para ellos pero que, más o menos explícitamente, ellos expound una crítica
fundamental de política convencional, por ello cambiando sus esfuerzos de
políticas él a metapolitics (Offe 1985). From Este punto de vista, los movimientos
sociales afirman la legitimidad (si no la primacía) de alternativas a democracia
parlamentaria, criticando ambas democracia liberal y la “democracia organizada”
de los partidos políticos: “Las participaciones y la lucha del left y los movimientos
sociales libertarios así invocan un elemento antiguo de teoría democrática que pide
una organización de la decisión colectiva que hace referido a en maneras variables
como clásicos, populistas, communitarian, fuertes, hierba-raíces, o democracia
directa contra una práctica democrática en democracias contemporáneas labeled
tan realistas, liberales, élite, republicano, o representativo democ-racy” (Kitschelt
1993: 15).
Según esta interpretación, los movimientos sociales afirman que un sistema de
democracia directa esc perdedor a los intereses de las personas que democracia
liberal, el cual está basado encima delegación a representantes quiénes pueden ser
controlados sólo en el momento de la elección y quién tienen autoridad total para
decidir entre una elección y otro. Además, cuando portadores de un
neocommunitarian concepción de democracia, los movimientos sociales critican el
“modelo” democrático organizado, basado en la mediación por concentrar partidos
políticos y la estructuración de “fuerte”
240 SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY

Intereses, y buscar para cambiar que hace decisión a más transparente y


control-lable sitios. En la concepción de movimiento social de democracia las
personas les-selves (quiénes son naturalmente interesados en políticas) tiene
que suponer responsabilidad directa para intervenir en el political proceso que
hace decisión.
Es ciertamente el caso que la idea de la democracia desarrollada por movimiento
social-ments desde el 1960s está fundado en bases al menos en parte diferentes a
representa-tive democracia. Según el modelo de democracia representativo,
citizens elige sus representantes y control de ejercicio a través de la amenaza de su
no siendo reelegido en elecciones subsiguientes. La democracia directa favorecida
por movimiento social-ments rehusa el principio de delegación, visto como un
instrumento de oligarchic power, y afirma que los representantes tendrían que ser
subject de recordar en todo momento. Además, la delegación es comprensible en
una democracia representativa, donde rep-resentatives decide en unos asuntos de
gama enteros para ciudadanos. En comparación, en un sistema de directo
democracy, la autoridad está delegada en un asunto-por-base de asunto. Mientras
que democracia representativa envisages la creación de un cuerpo especializado de
representantes, la democracia directa opta para continual facturación. La
democracia representativa está basada en formal equality (una persona, un voto);
la democracia directa es participativa, el correcto de decidir el ser reconoció sólo
en el caso de quienes demuestran su compromiso a la causa pública. Mientras la
democracia representativa es a menudo burocrática, con que hace decisión
concentrated en la parte superior, la democracia directa está descentralizada y
enfatiza que las decisiones tendrían que ser tomadas tan cerca tan posibles a las
vidas de las personas normales.
El movimiento de justicia global critica el funcionamiento de adelantado
democ-racies. Dirige enparticul ar el oligarchic funcionamiento de partidos
políticos, el exclusionary implicaciones de regla de mayoría, el monopolization
de esferas públicas de comunicación, y la exclusión de asuntos y grupos
insignificantes de su práctica de democracia. Decisión pública-making los
procesos tienen un grado bajo de transparencia; la simplificación extrema de
los mensajes políticos indujo por formatos de medios de comunicación de
masas es también criticó. Aun así, organizaciones de movimiento no
normalmente objetivo en abolir el existiendo partidos políticos, ni buscan para
fundar nuevo unos; reclaman la democratización de la política vieja e
instituciones, partidos, y sindicatos, y proponen la constitución de alternativo,
esferas públicas abiertas donde las posiciones diferentes pueden ser devel-
oped, analizados, y compared en un abiertamente-base ética declarada (como
justicia social, en el caso del presupuesto participativo en Porto Alegre). Un
effec-tive, concurso de medios de comunicación del pluralista sería un
requisito mínimo para el desarrollar-ment de este tipo de esfera pública. En
este sense, los movimientos sociales son también una respuesta a problemas
qué tiene emergido en el sistema de interés representa-tion, “compensando”
para la tendencia de partidos políticos para favorecer intereses qué paga fuera
en plazos electorales, y de grupos de interés para favorecer tmanguera los
estratos sociales mejores dotados con recursos mientras marginalizing el resto
(ve capítulo 8 encima).
SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY 241

El principio de una democracia participativa facultada, mencionó encima,


enlaza la concepción tradicional de democracia participativa y directa con polit-
ical teóricos' emergiendo interés en deliberative democracia – en particular, la
calidad de comunicación.3 Deliberative las teorías han desarrollado de
preocupaciones con el funcionamiento de representative instituciones; aun así,
becarios de deliber-ative la democracia discrepa en el locus de deliberative
discusión, algunos siendo preocupados con el desarrollo de instituciones liberales,
otros con esferas públicas alternativas gratis de intervención estatal (della Porta
2005b). El análisis de la calidad comunicativa de democracia es central al trabajo
de Jürgen Haber-mas (1996), quién postulados un proceso de pista doble, con “la
deliberación” informal que tiene lugar fuera de instituciones y entonces, cuando
deviene público opinion, afectar-ing deliberación institucional. Según otros
autores, aun así, las deliberaciones tienen lugar en grupos voluntarios
especialmente (Cohen 1989). Un seguidor fuerte de la posición última y un experto
en política de movimiento, John Dryzek (2000), tiene argumentad que los
movimientos sociales son más colocados para construir deliberative espacios que
puede mantener un ojo crítico a instituciones públicas. Jane Mansbridge (1996) ha
también argumentó que la deliberación tendría que tener lugar en un número de
enclaves, gratis de poder institucional – incluyendo que de movimientos sociales
ellos. Si movimientos sociales nurture actitudes cometidas , críticas hacia
instituciones públicas, deliberative la democracia requiere ciudadanos “embedded”
en associative redes capaces de construir habilidades democráticas entre su
anuncioherents (Offe 1997: 102–3). Cuando el experimento de Porto Alegre indica,
en los movimientos para globalización desde abajo, deliberative prácticas haber de
hecho atrajo un interés más o menos explícito.

Probando a summarize varios y no siempre coherente definitions,


sugerimos que la democracia participativa está facultada cuándo, bajo
condiciones de igualdad, inclusiveness, y transparencia, un proceso
comunicativo basó encima razón (la fuerza de un argumento bueno) es capaz
de transformar preferencias individuales y reach las decisiones orientaron al
bien público (della Porta 2005d). Algunos de las dimensiones de esta
definición (como inclusiveness, igualdad, y visibilidad) repite aquellos
incluidos en los modelos participativos hemos descrito tan propio de
movimientos sociales nuevos, mientras otros (sobre todo, la atención a la
calidad de com-munication) emerge preocupaciones tan nuevas.
Primero, cuando en la tradición de movimiento, la democracia participativa
facultada es inclusive: requiere que todos los ciudadanos con una
participación en las decisiones para ser tomadas be incluyó en el proceso y
capaz de expresar su voz. Esto significa que el delib-erative el proceso tiene
lugar bajo condiciones de una pluralidad de valores, donde las personas tienen
perspectivas diferentes en sus problemas comunes. Tomando el presupuesto
participativo uns un ejemplo, las asambleas están aguantadas en todos los
distritos y es abierto a todo cit-izens; la elección del tiempo y objetivo de sitio
en facilitar participación de todo inter-ested personas (incluso las guarderías
están organizadas para madres de ayuda y padres a participate).
242 SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY

Además, todos los participantes son equals: la deliberación tiene lugar entre
ciudadanos libres e iguales (como “deliberación libre entre equals,” Cohen 1989:
20). De hecho, “todos los ciudadanos tienen que ser capaces a develop aquellas
capacidades que les da acceso eficaz a la esfera pública,” y “una vez en público,
tienen que ser respeto suficiente dado y reconocimiento con objeto de ser capaz
de influir decisiones que les afecta en una dirección favorable” (Bohman 1997:
523–4). La deliberación tiene que excluir el poder que deriva de coercion, pero
también de una ponderación desigual de participantes como representantes de
organizaciones de influencia o medida diferentes. En este sentido, delib-erative
democracia opposes jerarquías y acentúa rango directo-y-archivo partici-pation. En
el presupuesto participativo, reglas como el tiempo limitado para cada intervención
o la presencia de facilitators está diseñado para dejar igual opportu-nities para todos
ciudadanos para participar.
Además, el concepto de transparency resonates con democracia directa ,
participativa. En la definición de Joshua Cohen, un deliberative la democracia
es “un associ-ation cuyos asuntos están gobernados por la deliberación pública
de sus miembros” (1989: 17, el énfasis añadido). En deliberative democrático
theory, debate público strives para “reemplazar la lengua de interés con la
lengua de razón” (Elster 1998: 111): teniendo que justificar una posición antes
de unas fuerzas públicas un para buscar las justificaciones enlazaron a
principios y valores comunes.
Qué es nuevo en elco nception de deliberative democracia, y en algunos de los
movimientos contemporáneos' prácticas, es el énfasis encima preferencia
(trans)para-mation, con una orientación a la definición del bien público. De hecho,
“delib-erative la democracia requiere el transformatiencima de preferencias en
interacción” (Dryzek 2000: 79). Es un proceso “ a través de qué preferencias
iniciales son trans-formados para tener en cuenta los puntos de vista del otros”
(Molinero 1993: 75). En este sentido, deliberative la democracia difiere de
conceptions de democracia como una agregación de (exogenously generado)
preferencias. Algunas reflexiones en democracia participativa han también
prácticas incluidas de consen-sus: las decisiones tienen que ser approvable por
todos los participantes (unánimes) – en contraste con majoritarian democracia,
donde las decisiones están legitimadas por votos. Deliber-ation (O incluso
comunicación) está basado en la creencia que, mientras no dejando mi perspectiva,
podría aprender si escucho a otro (Young 1996).
El consenso es, aun así, posible sólo en la presencia de compartió valores y
un compromiso común a la construcción de un bien público (como el valor
común de justicia social en el participativo schema). En un deliberative modelo
de democracia, “el debate político está organizado alrededor de concepciones
alternativas del bien público,” y sobre todo, “dibuja en identidades y
ciudadanos' intereses en maneras que contribuye a edificio público de bien
público” (Cohen 1989: 18–19). Un deliberative el encuadre facilita el buscar
un fin común o bueno (Elster 1998).
Sobre todo, deliberative razón de tensiones de la democracia: las personas están
convencidas por la fuerza del argumento mejor. En particular, la deliberación está
basada en horizontal
SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY 243

Flujos de comunicación, productores múltiples de contenido, oportunidades anchas


para interactivity, confrontación en la base de argumentación racional, y actitud a
recíproco escuchando (Habermas 1981, 1996). En este sentido, deliberative
democ-racy es discursive. Según Joven, aun así, el discurso no excluye protesta:
“procesos de comprometidos y la participación democrática responsable incluye
manifestaciones de calle y sentar-ins, historietas y trabajos musicales, tanto como
par-liamentary discursos y letras al editor” (2003: 119).
La democracia participativa facultada de hecho ha sido hablada como un alterar-
nativo a superior-abajo imposition de decisiones públicas, el cual es cada vez más
visto como legitimidad falta y deviniendo más difícil de dirigir, dado tanto la
complejidad creciente de problems y la capacidad creciente de uninstitutional-ized
actores para hacer sus voces oyeron. Deliberative Los procesos de hecho tendrían
que dejar la adquisición de información mejor y producir decisiones más eficaces,
así como fostering la participación y trust en instituciones que los modelos
representativos son menos y menos capaces de proporcionar. De hecho, los
becarios destacan un “efecto de moralizar de la discusión pública” (Molinero 1993:
83) aquello “anima personas no a meramente expresar opiniones políticas (a través
de encuestas o referéndums) pero para formar aquellas opiniones a través de un
debate público” (ibid.: 89). Deliberación como “dispas-sionate, tipo razonado ,”
lógico de promesas de comunicación para aumentar ciudadanos' confianza en
instituciones políticas (Dryzek 2000: 64).
Cuando el Porto Alegre ejemplos de ambos Foros Sociales Mundiales y
participativos budgeting ilustrar, experimento de movimientos con participativo,
discursive modelos de democracia ambos en su decisión interna-haciendo y en su
inter-acciones con instituciones políticas. Internoly, los movimientos sociales
tienen – con grados variables de éxito – intentado para desarrollar una estructura
organizativa basó encima participación (más que delegación), consenso-edificio
(más que voto de mayoría), y redes horizontales (más que centralizó jerarquías). El
buscar un modelo participativo de democracia interna supone una función aún más
central para el “movimiento global” que tiene mobilized transnationally, respecto
al governance del proceso de liberalización de mercado, con demandas for una
“globalización desde abajo.”
La democracia interna también representa un reto para movimientos sociales,
posando el dilema siempre vívido de equilibrar participación y representación,
fuerza-ening los compromisos de activistas e incluyendo miembros nuevos,
identity-construyendo y eficacia. Organizaciones de movimiento social,
tradicionalmente pobres en compañero-rial recursos, tiene que confiar al trabajo
voluntario de sus miembros – por ello desarrollando una “lógica de afiliación.” Los
modelos participativos están adoptados para realzar el distribution de incentivos de
identidad; en particular, la asamblea repre-sents la oportunidad ideal para un
abierto y (en principio) espacio igualitario, mientras los grupos “de afinidad”
pequeños estimulan el desarrollo de solidaridad entre equals. Cuando con otras
formas de “democracia” aplicada, aun así, la función práctica-ing de estas
estructuras organizativas es mucho menos que perfectos. Unstructured
244 SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY

Las asambleas tienden para ser dominados por minorías pequeñas que a
menudo estratégicamente explotar las debilidades de democracia directa con
manipulación abierta; “recursos” de discurso distan mucho de igualmente
distribuyó; el más comprometido, o órgano mejor-ized, control el piso; enlaces
de solidaridad tienden para excluir recién llegados. Consensual Los modelos
desarrollaron para contrastar la “tiranía” de organizó las minorías tienen sus
problemas propios, principalmente atados arriba con extremadamente mucho
tiempo (y a veces “bloqueados”) procesos de decisión.
Cuándo disminuciones de protesta (y con él, recursos de militancy), órgano de
movimiento-izations tend para sobrevivir por institucionalizar su estructura:
buscan dinero, cualquiera por construir una afiliación de papel de la masa,
vendiendo productos a un público comprensivo, o buscando dineros públicos, en
particular en el tercer-economía de sector. Organizaciones de movimiento –
búsqueda tan reciente ha indicado – tender por tanto para devenir más y más similar
a grupos de cabildeo, con un personal pagado, profesional; empresa comercial, con
un foco encima eficacia en el mercado; y volun-tary asociaciones, proporcionando
servicios, a menudo contracted fuera por instituciones públicas (della Porta 2003b).
Estos cambios normalmente han sido interpretados tan institución-alization de
organizaciones de movimiento, con moderación ideológica, especializó
identidades, y el desvaneciéndose de disruptive protesta. Estee volution productos
crit-ical efectos: burocratización, mientras eficacia creciente, desalenta participa-
tion desde abajo; las interacciones con las instituciones estatales y públicas
levantan la cuestión del “representativity” de estos nuevo lobbyists.
Según lo que la crítica de movimiento social de existir la democracia está
preocupada, su buscar una alternativa no puede ser considerada para tener
concluido. No todos los estudiantes de organizaciones de movimiento social están
de acuerdo que han vencido los riesgos de producir oligarquías y liderazgos
carismáticos, el muy problemas en el centro de su crítica de política tradicional. A
pesar de que él maximizes respon-siveness, el modelo de democracia directo tiene
debilidades según lo que la representación y la eficacia están preocupadas
(Kitschelt 1993). Problems De la eficacia afecta el éxito de organizaciones de
movimiento ellos; los problemas de representación se preocupan el legitimation de
formas nuevas de democracia. La negativa por movimientos sociales para aceptar
los principios de democracia representativa pueden socavar timagen de heredero
como actores democráticos, particularmente cuándo empiezan para apechugar con
oficial y semi-funciones oficiales dentro de instituciones representativas,
suponiendo la forma de partidos o grupos de interés público. Foros sociales,
amistando actores heterogéneos, paga atención grande a la calidad de
comunicación interna, pero con resultados desiguales.
Estas limitaciones notwithstanding, tenga que ser reconocido que movimiento
social-ments ha ayudado para abrir canales nuevos de acceder al sistema político,
con-tributing a la identificación, si no la solución, de un número de los problemas
de la democracia representativa. Más generalmente, la búsqueda reciente ha
acentuado la función los movimientos sociales pueden jugar en ayudar para dirigir
dos relacionó retos a dem-
SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY 245

ocratic governance. En el lado de entrada, la democracia contemporánea afronta


un problema de participación política decreciente, al menos en sus formas
convencionales. La capacidad reducida de partidos políticos a sociedad de puente
y el estatal undds a este problema, mientras la comercialización de los medios de
comunicación de masas reduce su capacidad de actuar como un arena para debatir
decisiones públicas. Por otro lado, la efectividad de democracias en producir una
producción justa y eficaz es jeopardized, en parte por los riesgos crecientes en
complejos (y globales) sociedades. Los dos problemas están relacionados, desde el
debilitamiento en la capacidad de actores institucionales para intervenir en la
formación de identidades colectivas reduce su capacidad de satisfacer (más y más
fragmented) demandas. Cuando Fung y Wright (2001) ha acentuado, “trans-las
estrategias democráticas formativas” están necesitadas para combatir el creciente
inade-quacy de democracia liberal para darse cuenta sus objetivos de implicación
política de las personas, consenso a través de diálogo, y las políticas públicas
apuntaron en proporcionar una sociedad en qué todo beneficio de ciudadanos de la
riqueza de la nación.

9.5 Movimientos Sociales y Democratización

Puede lo ser dicho, entonces, aquellos movimientos sociales han contribuido a


la evolución de democracia? Charles Tilly (2004un: 125) acentúa la existencia
de

Una correspondencia ancha entre democratización y movimientos sociales. Los


movimientos sociales originaron en la democratización parcial que conjunto temas
británicos y Del norte-colonizadores americanos contra sus gobernantes durante ele
ighteenth siglo. A través del decimonoveno siglo, movimientos sociales generalmente
flourished y extender donde la democratización más lejana ocurría y receded cuándo
regímenes autoritarios democracia disminuida. El patrón continuado durante el
primer y veinte-abetost siglo: los mapas de instituciones de pleno derecho y
movimientos sociales overlap mucho.

Si la democratización promueve democracia vía el ensanchamiento de


ciudadanos' derechos y la imputabilidad pública de élites gobernantas, la mayoría,
pero no todo, democracia de soporte de movimientos social. De hecho, en empujar
para ampliación de sufragio o el recogni-tion de associational derechos, los
movimientos sociales contribuyen a democratización – “Beneficios en la
democratización de procesos estatales es quizás el más importante que social
movements puede influir y tener el más grande systemic impactos” (Amenta y
Caren 2004: 265). Esto no fue siempre el caso: algunos movimientos
– P. ej., fascista y neofascista unos – democracia negada altogether, mientras
otros – p. ej., algunos movimientos Izquierdos Nuevos en latinosUn merica –
tuvo el efecto indeseado de producir un backlash en derechos democráticos
(Tilly 2004b). Política de identidad, como aquellos conduciendo conflictos
étnicos, a menudo acabados en guerra religiosa y violencia racial (Eder 2003).
246 SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY

Dos concepciones diferentes de la función jugada por movimientos sociales en


el proceso de la democratización ha sido singled fuera (Tilly 1993–4: 1). Según
una “aproximación populista a democracia,” enfatizando participación desde
abajo, “social movements contribuye a la creación de un público espacial –
encuadres sociales, separa ambos de gobernar instituciones y de las organizaciones
dedicaron a pro-duction o reproducción, en qué deliberación consiguiente sobre
asuntos públicos tiene lugar – así como tanmetimes contribuyendo a transferencias
de poder sobre estados. Transferencias y espacio públicos del poder entonces
presuntamente promueve democracia, al menos debajo algunas condiciones. A la
“aproximación” populista es counterpoised una “aproximación” elitista según qué
democratizatel ión tiene que ser un superior-abajo proceso, mientras un exceso de
ventajas de movilización a formas nuevas de autoritarismo, desde las élites sienten
temerosas de demasiados y cambios demasiado rápidos.
Podemos estar de acuerdo que los movimientos sociales contribuyen a
democratización sólo bajo seguro conditions. En particular, sólo aquellos
movimientos que explícitamente reclamar protección e igualdad aumentadas
para minorías promueven desarrollo democrático. De hecho, mirando en el
proceso de democratización pueda ser observado que la movilización colectiva
ha frequently creó las condiciones para un destabilization de regímenes
autoritarios, pero también pueda dirigir a una intensificación de represión o el
derrumbamiento de regímenes democráticos débiles, particularmente cuándo
los movimientos sociales no se aferran a concepciones democráticas. While
Trabajo, estudiante, y los movimientos étnicos trajeron sobre una crisis en el
franquismo en España en el 1960s y 1970s, el trabajador y movimientos
villanos y el fascistas coun-termovements contribuidos al fracaso del proceso
de democratización en Italia in el 1920s y 1930s (Tarrow 1995).
Aun así, movimientos sociales a menudo abiertamente mobilized para democracia.
Formaron alianzas transnacionales para derrocar regímenes autoritarios. En
Latinoamérica así como en Europa Oriental, a pesar de que en formas diferentes,
movimientos sociales democratización pedida, produciendo un desglose final de
neofas-cism así como gobiernos autoritarios socialistas. La búsqueda en varias regiones
ha acentuado que los primeros pasos de democratización incluyen una desmovilización
de sociedad civil y los desarrollos de más institucionalizados actores políticos, fol-
lowing el abriendo arriba de oportunidades institucionales. En procesos de
democratización reciente, la disponibilidad de fondos públicos y privados en el tercer
sector con-tributed a una orejaly institucionalización de organizaciones de movimiento
(Flam 2001). Aun así, esto no necesariamente parece para ser el destino de
movimientos en fases de consolidación democrática (Hipsher 1998). Presencia de una
tradición de movilización, así como movimientos que es independiente de partidos
políticos, puede facilitar el mantenimiento de un nivel alto de protesta – tan ilustrado
por la barriada dwellers' movimiento en Chile (Hipsher 1998); el movimiento urbano
en Brasil (Sandoval 1998); o los movimientos medioambientales en Eastern Europa
(Flam 2001).
A pesar de que con roturas e irregularidades, la democracia ha traído
aproximadamente desigualdades de decrecimiento y protección de intervenciones
de gobierno arbitrario
SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY 247

(Tilly 2004un: 127). Puede decimos que, en luchar para democracia,


movimiento social-ments ha tenido éxito en radicalmente cambiando la
distribución de poder en sociedad? Muchas señales desalentan uno de
optimismo excesivo. La protesta entra ciclos, y qué está ganado durante las
cumbres de movilización eso nce otra vez jeopardized durante momentos de
latencia. El movimiento de trabajo contribuyó a crear muchos derechos
sociales y políticos, pero el neoliberal vuelta al final del vigésimo siglo llamado
a cuestionar el estado de bienestar que había aparecido para ser un
institutionalized consecución del 1970s. Las desigualdades sociales son otra
vez en el aumento. Si la protesta es más y más aceptada como “política
normal,” algunas formas de contenciosos pol-itics es más y más estigmatizado
tan uncivilized en público opinión y es repressed por la policía.
En una nota más optimista, queremos acentuar que una condición que es
consid-ered para limitar potencial de movimiento social, al menos según lo que
la acción instrumental está preocupada, es en el proceso de cambiar: estructuras
organizativas débiles. Yon hecho, la movilización aparecería para ser un
recurso replenished por uso. Análisis de la evolución de izquierdo-los
movimientos libertarios ha concluido que los movimientos diferentes han
desarrollado en una dirección similar, de la formación de una identidad
colectiva a su utilización en el sistema político (ve, por ejemplo, della Porta
1996un). Organizaciones de movimiento nuevo han emergido durante este
proceso y tener, en ocasiones, sobrevivió la disminución en movilización.
Mientras grupos de interés público explotan la oportunidad offered por la
creación de canales nuevos de acceso, núcleos de contracultura pequeña
mantienen vivos y reelaborate valores de movimiento dentro de una estructura
de redes. Este proceso tiene efectos importantes en movimientos sociales.
La mayoría de movimientos sociales sobreviven la disminución de
mobilization, oscilando entre visibilidad y latencia (Melucci 1989: 70–3),
continuando dentro de una familia más grande de movimientos, las infraestructuras
organizativas y movilización poten-tial del cual ayudan para aumentar. La
“fuerza” de identidades colectivas puede variar, algunos más fuertes (el
movimiento de las mujeres), otros más débiles (el movimiento de juventud);
algunos relativamente visibles (el movimiento de ecologista), otros menos así que
(el movimiento de paz); algunos tienen una presencia más fuerte en el nivel
nacional (el antinuclear movimiento), others en nivel local (los movimientos
urbanos); algunos son más politi-cal (federalist movimientos), otros culturales
(punks y skinheads). Raramente pasa que un movimiento desaparece dejar ningún
rastro cultural u organizativo cualquier cosa. En cambio, los movimientos tienden
para los reproducir en clases de virtu-ous (o viciosos) círculos. Cuando
mencionado, durante ciclos de protestar temprano-riser movimiento-ments puesto
los ejemplos para activar otros movimientos tampoco en soporte, imitación, u
oposición a ellos. Algunos movimientos departe de otros, para perseguir más
concreto u otherwise relacionó objetivos, con un spillover efecto; otro aumento de
rupturas internas, cuando espín-offs (Whittier 2004: 534).
Recursos de movimiento social aumentan con el tiempo, por tanto, y los
movimientos devenidos institutionalized, construye subcultural redes, crear
canales de
248 SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY
Acceso a policymakers, y alianzas de forma. Esta continuidad organizativa significa
que las experiencias de “tempranos-riser” los movimientos son ambos recursos y con-
straints para los que siguen (Tarrow 1994; McAdam 1995). Procesos de imitación y
diferenciación, aprendizaje y repetición aplicados, tiene lugar contem-poraneously.
Activistas de movimiento heredan estructuras y modelos de su prede-cessors. Al mismo
tiempo, aun así, aprenden de los errores de movimientos que les ha precedido y buscar
para ir más allá les. El más grande el éxito conseguido por temprano-riser movimientos
y el más grandes la participación de ex-activistas en sub-sequent mobilizationes, el más
grandes será la continuidad con el pasado.
La tendencia hacia la institucionalización de movimientos sociales y su difusión
como forma de organizar y mediando los intereses pueden ser explicados por la
difusión, con cada ola de movilización, de las capacidades requirieron para collec-
tive acción. De hecho, la movilización está facilitada por la presencia de redes de
los activistas dispuestos a mobilize alrededor de asuntos nuevos – donde estos son
“compatibles” con sus identidades originales, naturalmente. Además, los
beneficios sustantivos hicieron por un movimiento puede tener consecuencias
beneficiosas para las demandas de otro movimiento-ments, y su éxito anima
movilizaciones más lejanas. Pueda ser concluido, por tanto, que la importancia de
movimientos sociales tiende para crecer inasmuch tan hay una cantidad nunca
creciente de recursos (ambos técnicos y estructurales) disponibles para acción
colectiva. Esto seguramente contribuido al spread de participa-tory concepciones
de democracia.

9.6 Resumen

Movilización de movimiento social ha sido seguida por cambio en una variedad de


áreas. Según lo que la política pública está preocupada, un trato grande de
legislación ha sido producido en los asuntos levantaron durante campañas de
protesta. Cualquier evaluación de la importancia de los cambios introdujo por estas
leyes requiere análisis de su implementación así como de transformaciones en el
sistema de valor y en el comportamiento de ambos ciudadanos normales y élites.
Cambios en público la política y la opinión pública han sido acompañadas por
cambios procesales, con la creación de decisión nueva-haciendo los arena ya no
legitimados por el modelo de democracia representativa. Comisiones ad hoc,
ministerios de gobierno nuevo, y gobierno local com-mittees constituye canales de
acceder al que hace decisión process frecuentemente utilizado por organizaciones
de movimiento social. Los experimentos participativos facultados han desarrollado
del orden del día participativo en Porto Alegre, caracterizado por atención a
participación, comunicación buena, y decisional poder. Empha-sis En participation
encima la representación así enriquece el concepto de democracia. De hecho, con
varios grados de éxito, los movimientos sociales recientemente han parado
atención a inclusive y participación igual, así como que construye consenso y
comunicación buena.
SOCIAL MOVEMENTS Y D EMOCRACY 249

A pesar de que la variedad de objetivos, estrategias, y los actores implicaron


en este proceso renders lo difícil de identificar estrategias ganadoras para
actores colectivos nuevos, pueda, no obstante, ser dicho que en décadas
recientes la estructura del poder en democracias liberales aparece a ha sido
transformado en la dirección de más grande recog-nition para actores nuevos.
Los movimientos sociales han ayudado democratización en autor-itarian
regímenes, pero también contribuidos a aproximaciones más participativas en
democracias representativas.
NOTAS

Capítulo 1: El Estudio de Movimientos Sociales

1 Teorías de frustración y privación – al cual haremos únicos fugaces referir-ence


en el curso de este libro – haber decreased en importancia del 1970s en adelante, y
ha devenido en gran parte insignificante en el análisis de movimientos sociales en
sociedades democráticas. Tienen, aun así, mantenidos alguna pertinencia en
compara-tive, análisis de escala grande de conflicto social (Gurr y Harff 1994), y
en el análisis de adhesión a movimientos no democráticos (Anheier 2003). Para
cuentas recientes, ve Crossley (2002); Buechler (2004).
2 Ve Scott (1990: particularmente ch. 3) para una síntesis excelente de las
posiciones principales desarrolló por esteun pproach durante su la mayoría de
fase creativa.
3 Para varias aplicaciones de esta perspectiva en búsquedas empíricas en
movimientos contemporáneos, ve, por ejemplo, Touraine, Dubet, Hegedus, y
Wieviorka (1981, 1983); Touraine, Hegedus, Wieviorka, y Strzelecki (1983).
4 En la edición más reciente de este libro, Turner y Killian (1987) integrado
algunas contribuciones de la escuela de movilización del recurso a su modelo.
5 Atención al enlace entre comportamiento colectivo y varios indicadores de cambio
social (por ejemplo, la tendencia hacia organizaciones de escala grande, movilidad
de población, innovación tecnológica, la pertinencia de crecer de los medios de
comunicación de masas, la caída de formas culturales tradicionales) conecta esta
vista a functionalist perspectivas, pero el interpretation proporcionados es
diferente. Los procesos de cambiar revisado está considerado para ser emergiendo
condiciona cuáles animan individual a mobilize, no para restablecer un equilibrio
cuál ha sido perturbado, sino para desarrollar modos de vida nuevos y tipos nuevos
de relación social.
6 Blumer Comentarios: “la sociología en general está interesada en estudiar el orden
social y sus electores (aduana, reglas, instituciones, etc.) cuando son. Colectivo
behav-ior está preocupado en estudiar la manera en qué el orden social viene a
existencia en el sentido de la aparición y solidificación de formas nuevas de
comportamiento colectivo” (Blumer 1951: 169).
7 Ve, por ejemplo, Gusfield búsqueda (1963) al movimiento prohibicionista,
considerado como una área de conflicto between sistemas sociales, culturas, y
grupos de dif-ferent estado.
NOTES 251

8 “Comunitario” es aquí definido como “relativamente comunidad pequeña de


pensadores críticos quiénes han desarrollado una sensibilidad a algún problema,
un análisis de la fuente del problema, y una prescripción para qué tendría que ser
hecho sobre el problema” (Rochon 1998: 22).
9 Charles Tilly (1978: 53) ha hablado, en este contexto, de movimientos como
“challengers,” contrastándoles a estableció miembros de un dados polity.
10 En nuestra idea, la idea de “bienes colectivos” comprende ambos bienes públicos
à la Olson y bienes de club. Para Samuelson (1954) las características claves de
bienes públicos son: (1) no-excludability y (2) nonrivalrous consumo, i.e., ningún
scarcity una vez el bueno is produjo. Un bien de club es: (1) no-excludable para
miembros de club pero excludable para outsiders, (2) posiblemente (pero no
necesariamente) nonrivalrous para aquellos con acceso (Buchanan 1965).
11 Vemos movimientos de consenso como formas de acción colectiva que “es
distinguished de movimientos de conflicto en plazos del grado al cual cada cual
reconoce y actos en oposiciones de intereses sociales objetivos y busca en moda
directa y detallada para cambiar política social” (Lofland 1989: 163). Preferimos
esta definición analítica a otros, sencillamente tomando la proporción de las
personas que apoyan una causa dada como el defin-ing elemento (McCarthy y
Wolfson 1992: 274).
12 Ve Hinckley (1981: 4–6), Lemieux (1997, 1998), Pakulski (1988), Jones, Hutchinson,
furgoneta Dyke, y Gates (2001). De course nada impide un coalitional dinámico de
evolucionar a un movimiento social un, pero es todavía importante de reconocer el ana-
lytical diferencia entre los dos procesos (ve p. ej. Warren 2001).
13 Esto lo hace necesario de tratar con alguna amonestación el results de encuestas
qué reclamación para medir la extensión de afiliación de movimiento (Kriesi
1992).
14 Va sin decir que la influencia real de participantes individuales dependerá en gran
parte en sus recursos personales (competence, prestigio etc.).
15 Esta lógica de la investigación también puede ser oportunamente aplicado a la
formación de muchos partidos contemporáneos, sin duda aquellos cuál emergió de
la agregación de anteriormente organizaciones autónomas (Panebianco 1988;
Hedström, Sandell, y Popa 2000).
16 Incluyen, first, analiza dedicado a varios tipos de comportamiento colectivo: de
movimientos religiosos (Wilson 1982; Robbins 1988) y contracultura (Yinger 1982) a
acción voluntaria (Pearce 1993; Wilson 2000); de terrorismo y violencia políticos (della
Porta 1990) a movimientos de ala correcta (Lo 1990; Ignazi 1994); no para mencionar
análisis de acción de clase trabajadora él (por ejemplo, Pizzorno et al. 1978; Touraine
1985; Kimeldorf y Stepan-Norris 1992; Franzosi 1995; Stepan-Norris y Zeitlin 2003;
Fantasia y Voss 2004). A estos tenemos que añadir búsqueda, conducido de un su-
torical perspectiva, a los fenómenos que varían de nacionalismo (Herrero 1981; Breuilly
1993; Hobsbawm 1991) a revoluciones (Skocpol 1979; Tilly 1993, 2004b); de conflicto
social en el premodern edad (Valdstone 1991; Somers 1993) a “nonclass” movimiento-
ments del periodo moderno (D'Anieri et al. 1990; Amenta y Zylan 1991; Calhoun 1993;
D'Anjou 1996). Ve también el cuerpo creciente de trabajar dedicado a movimientos
contemporáneos fuera de democracias Occidentales (Eckstein 2001; Escobar y Alvarez
1992; Shah 1990; Omvedt 1993; Joppke 1994; Foweraker 1995; Zirakzadeh 1997; Ray
1999; Osa 2003un; Ferree y McClurg Mueller 2004; Reifer 2004).
252 NOTES

Capítulo 2: Cambios Sociales y


Movimientos Sociales

1 Ve Markoff (1996) para una cuenta histórica ancha del desarrollo de movimiento
social-ments en sociedad contemporánea.
2 La experiencia de tan-distritos “industriales llamados” – las áreas pequeñas
caracterizaron por spe-cific actividades industriales, los cuales están basados
encima densamente enterwoven redes de relaciones sociales (Piore y Sabel 1984;
Streeck 1992; Trigilia 1984) – parece a contra-dict la reclamación con respecto al
delocalization de economía. Aun así, las condiciones para la acción de clase
trabajadora no aparece para ser favorable en aquellos contextos, dados la densidad
de lazos entre grupos sociales diferentes y el resultantes aumentó oportunidades
para control social (Oberschall 1973).
3 En la clase media nueva – o clase de servicio, cuando algunos refieren a él – ver
entre muchos otros Bell (1973); Gouldner (1979); Goldthorpe (1982); Lash y Urry
(1987); Esping-Andersen (1993); Brint (1994).
4 Ve Giddens (1990) para un tratamiento conciso de este punto.
5 Ve, por ejemplo, la crítica de hospitales psiquiátricos qué desarrollados en el
curso del 1960s; ve Crossley (1998, 1999).
6 Históricamente la afirmación del estado de bienestar marca el paso de una idea de
(civil y político) los derechos entendieron, primero, cuando “contra” el estado, a
una idea de derechos qué presuponer cooperación “con” el estado (Barbalet 1988).
Con el aumento de mul-ticulturalism, aun así, y más generalmente con la crítica
del colonialization de la esfera privada, la relación con bienestar y en general con
estatal inter-vention deviene al mismo tiempo uno de cooperación (inasmuch
cuando uno puede identificar elementos positivos en la expansión de acción de
bienestar) y de antagonismo (en la necesidad de limitar los efectos de
estandarización y control).
7 El tratamiento más sistemático de la relación entre movimientos sociales y
transformatlos iones en la esfera privada es todavía que de Alberto Melucci, al cual
referimos lectores (1989, 1996).
8 Ve, entre otros, Garofalo (1992); Pelirrojo (1993); Jordania (1994); McKay (1996).
Referencia a reciente countercultural o subcultural fenómenos como rap o rave no
tendría que esconder la relación más ancha cuáles pueden ser encontrados entre géneros
musicales y tipos diferentes de protesta política (Eyerman y Jamison 1994, 1997).
9 Entre estudiantes de movimientos sociales, incluso quienes reconocen la
importancia persistente de procesos estructurales difiere en su uso del concepto de
clase. Algunos (por ejemplo Eder 1995) consideración quieta él como dispositivo
heurístico útil, proporcionado uno refrena de llenar él con referencias a la
experiencia histórica de sociedad industrial; otros (por ejemplo Melucci 1995) lo
rehusa precisamente en la tierra que la experiencia histórica ha infused él con
significados qué impedir su aplicación útil a un contexto modificado.
10 En el curso de su carrera intelectual larga, Touraine ha propuesto un número of ver-sions de
su aproximación (1977, 1981, 1984, 1985, 1992). Aquí estamos refiriendo principalmente a
la formulación puesta adelante durante el 1970s, el cual inspirado la Intervención de
programa “de la búsqueda Sociologique” (Touraine et al. 1983un; Touraine et al. 1983b).
NOTES 253

Para un synthesizing pero presentación sistemática de Touraine la contribución


ve Rucht (1991b), así como Touraine respuesta (1991).
11 Los temas similares están encontrados en el trabajo de Habermas (1976); Melucci
(1989); Giddens (1990); entre otros. Para una síntesis crítica ve Scott (1990).
12 Ve, en particular, Melucci (1989, 1994, 1996). Para un crítico pero comprensivo discus-
sion, ve Bartholomew y Mayer (1992). Tiene que ser dicho que desarrollos más tardíos
en Melucci el trabajo parece a focus mucho más en los procesos estructurales – en
particular, el proceso de individualización – cuáles impiden la reproducción de
tradicional collec-tive acción, más que en el estructural preconditions para el desarrollo
de formas nuevas de acción colectiva. The Último es, bastante, explicado en la luz de
la presencia de las redes interpersonales que actúan tan facilitators, la relación del cual
a struc-tural la dinámica es, aun así, un poco subdesarrollado.
13 Mientras el aumento de la clase media nueva ha sido un tema central de debate
sociológico desde el 1970s, la investigación empírica de su relación con acción política
ha sido un importante, albeit no exclusivo (p. ej. Bechofer y Elliott 1985), interés de
científicos políticos. Ve, entre muchos otros, Dalton (1988, 1994); Kitschelt (1989),
Kitschelt y Hellemans (1990); Jennings et al. (1990), Poguntke (1993), Nas (1993),
Rohrschneider (1988, 1993b), Inglehart (1990un), y Wallace y Jenkins (1995).
14 Individual quiénes cumplen una función supervisora, más que directores en un
sentido estrecho, y semi-profesionales y altamente trabajadores de oficio
cualificado están incluidos en la clase media nueva (Kriesi 1989b, 1993).
15 Esta definición incluye profesionales de servicio humano con otro sociocultural
spe-cialist representa quién era previously trató en una manera diferente (Brint
1984). Ve también Cotgrove y Duff (1980).
16 Ve Crompton (1993) para un resumen de este dilema tradicional en análisis de clase,
opposing ideas de clases como conjuntos a ideas de clases como actores colectivos.
17 Esta incertidumbre también podría depender de el varios operationalizations del
concepto de la clase media nueva adoptada por los estudios citados aquí, no para
mencionar el depender-ent la variable seleccionó. Mientras Kriesi analizó el
potencial para movilización en varios types de movimientos sociales nuevos,
estudios como aquel de Wallace y Jenkins concen-trate en una forma de acción –
protesta política – cuál, aun así particularmente extendido entre movimientos, es
ciertamente no limitado a ellos. Amonestación extrema en el com-parison de
results obtenido en los estudios diferentes está requerido. Ve Kriesi (1992) para
una discusión de cómo criterios diferentes para el operationalization del potencial
para la movilización de los varios movimientos sociales puede influir los resultados
del análisis.
18 Ve, por ejemplo, Pizzorno (1981) y Tarrow (1994). De una perspectiva diferente,
ve también Calhoun (1993) y D'Anieri et al. (1990).

Capítulo 3: La Dimensión Simbólica de


Acción Colectiva
1 Utilizamos la generación “de plazo” aquí en el sentido originalmente propuesto por
Karl Mannheim (1946), no como grupo de edad concreta pero como cohort de la
población qué
254 NOTES

Ha experimentado y los restos influyeron por acontecimientos históricos


particulares. Ve también en este tema Braungart y Sujetadorungart (1992), Turner
(1994), Pakulski (1995), Whittier (1995, 1997), Johnston y Aareleid-Tart (2000).
2 Este aspecto de Inglehart el análisis también ha sido criticado, para desatender
analogías entre el desarrollo de cambio cultural en el periodo que sigue la Segunda
Guerra mundial y otros periodos sobre los últimos dos siglos en qué expresivos
orien-tations ha dirigido para cambiar (Marca 1990; Inglehart 1990b).
3 Dato encima cambio de valor de 1970 en adelante es disponible para seis países
europeos (Francia, Gran Bretaña, Italia, Alemania Del oeste, Bélgica, y el
Netherlands; Inglehart 1990b). Las encuestas gradualmente han sido extendidas a
un número nunca creciente de coun-prueba, dentro y fuera del mundo Occidental
(Inglehart 1997; Inglehart y Norris 2003, 2005).
4 According A algunos críticos: “Porque [Inglehart es] el índice supone que uno puede
no simultáneamente abrazar ambos postmaterialist y valores materialistas, el fundamen-
tal cuestión de si postmaterialist y los valores materialistas necesariamente excluyen
uno otro . . . is Sencillamente supuesto” (Brooks y Manza 1994: 546).
5 La referencia inevitable aquí es a Utopía, utilizado por Karl Mannheim (1946) para
denotar el complejo de retos simbólicos presentó en varios periodos históricos a ideol-
ogy cuando constituidos en el tiempo. Analogous Los temas también han sido tocados
a por Ralph Turner (1969, 1994), refiriendo explícitamente a Ideología y Utopía; y Karl-
Werner Marca (1990), quién tiene asoció ciclos de insurgency en acción colectiva con
el Zeitgeist cuál caracteriza el general climate del tiempo.
6 Derloshon Y Potter (1982); Aploma (1993). Esto no es para olvidar el elemento fuerte
de económico, redistributive, y presente de conflicto de la clase en movimientos
norteamericanos
– Especialmente en los movimientos americanos africanos (Morris 1984) y
generally en movimiento-ments del pobre (Piven y Cloward 1977).
7 Esto es, adicionalmente, una razón por qué la recepción de mensajes de movilización
de actores virtuales – p. ej. a través de sitios web – es problemático a no ser que sus
fuentes también tienen una “identidad” tangible (Diani 2000b; furgoneta de Donk,
Loader, Nixon, y Rucht 2004).
8 Ve Tarrow (1998) para un análisis ancho de los procesos de producción de
interpreta-tive schemata en la parte de varios movimientos en el decimonoveno y
vigésimos siglos.

Capítulo 4: Identidad y Acción Colectivas

1 Hemos informado las fuentes de las varias menciones cuando publicados en los
textos originales. Esto explica la discrepancia en el estilo de referencing.
2 Roseneil (1995); ve también Johnston (1991b: ch. 7) en la relación entre nación-
alist e identidad de clase trabajadora en Catalunya.
3 Ve Seligman (1992) en la función de confianza en la aparición de sociedad civil y
Tilly (2002: ch. 14; 2004b) encima redes de confianza en procesos de
democratización.
4 Pero hay interpretaciones sugiriendo la identidad necesita not necesariamente ser
asociado con las dimensiones de tiempo, p. ej. Somers' (1993) análisis del edificio
de ciudadanía en Inglaterra moderna.
NOTES 255

5 Esto no es siempre cierto, aun así: el proyecto de búsqueda dirigido por Alberto
Melucci en Milan en el temprano 1980s mostrado cómo partidarios a locales neo-
los grupos orientales a menudo habían sido convertidos en menos maneras
drásticas (Diani 1984, 1986).
6 Calhoun (1994un: 26) ha hablado, en este punto, de “en-grupo essentialism.”
7 Para una crítica ahora clásica de esta vista: Touraine (1981); Melucci (1982, 1989,
1996).
8 Ve Stoecker (1995) para una discusión interesante de la relación entre diferir-ent
niveles de identidad: individual, comunidad, movimiento, y organizativo.
9 Ve DeNardo (1985) y Chong (1991) para discussions de la racionalidad de acción
colectiva. Ve también Hargreaves Heap et al. (1992) para una introducción a
teorías de elección racional.
10 Esta sección es parcialmente John inspirado en Lofland es (1995: 192 ss.) análisis
del cul-tural formas de movimientos.

Chapter 5: Individual, Redes, y


Participación
1 A lo largo de líneas similares, Kitts (2000) ha diferenciado entre información, identidad,
y mecanismos de intercambio. “La información” refiere a la capacidad de redes para
crear oportunidades para participación; “identity,” al hecho que lazos sociales a
significativos otros crean y reproducir solidaridad; “intercambio,” a la circulación
informal de aprobación social, recompensas, y sanciones a través de redes. McAdam
(2003) ha iden-tified cuatro mecanismos cruciales: intentos de reclutamiento,
identidad–conexiones de movimiento, influencia positiva y negativa intentos (ve
también Klandermans 1984; Opp, 1989; Opp y Gern 1993; Passy 2001; della Porta
1988).
2 Para divergir vistas en la función persistente de la clase en políticas ve entre otros
Esping-Andersen (1993); Pakulski y Aguas (1996); Devine (1997); Evans (1999).
3 Analistas de red definen cliques como los grupos de actores caracterizaron por una
intensidad particularmente alta de relaciones internas: en el caso más extremo, por
la presencia de direct contacto entre todos los componentes del grupo en cuestión
(Knoke y Kuklinski 1982: 56).
4 El proyecto estuvo coordinado por Stefaan Walgrave en la Universidad de Antwerp y
cubrió Bélgica, Inglaterra, Alemania, Holanda, Italia, Escocia, España, Suiza, y los
EE.UU. (Walgrave y Rucht próximos; della Porta y Diani 2005).

Capítulo 6: Organizaciones y
Movimientos Sociales
1 Fuentes de financiar y medida de afiliación es también relacionada aquí.
2 Mientras bastante frecuente para grupos de interés establecido, la movilización de
recursos de grupos pequeños de ricos – individuales o corporativos – los
patrocinadores tradicionalmente ha sido raros en el caso de movimientos sociales.
Aun así, en cooperación de años recientes entre organizaciones de movimiento y,
por ejemplo, el mundo empresarial ha gradu-aliado, albeit despacio, aumentado en
áreas como medioambientales o protección de consumidor (Donati 1996).
256 NOTES

3 Roth (1994) ha analizado la función de tales contraculturas en el alemanes Alterna-


tivenbewegung. Tenga que ser notado, aun así, que el fenómeno no es extraño a
movimientos sociales nuevos. En el movimiento de trabajo, por ejemplo, “el
partido, uniones y culturales y asociaciones de servicio proporcionaron el espacio
físico y social en qué una comunidad alternativa podría desarrollar” (Nolan 1981:
301).
4 McCarthy y Zald (1987b [1977]) distingue entre potencial beneficiaries, quién
directamente beneficio del movimiento que cumple sus objetivos, y conscience
partidarios, quiénes son parte de un movimiento social pero no directamente
beneficio de su éxito. En esta base entonces diferencian entre “clásicos SMOs,” los
cuales centran a ben-eficiary partidarios para recursos, y “profesionales SMOs,”
los cuales apelan principalmente a un conscience constituency e implicar muy
pocos de sus miembros en organiza-tional trabajo.
5 Similarly, James Q. Wilson (1973) distingue entre organizaciones primarias, donde
hay un grado alto de participación de miembro, y caucus organizaciones, en qué
un grandes pero inactive la base financia un número pequeño de dirigentes activos.
6 Esto ha sido notado de la evolución de organizaciones extremistas (della Porta
1995), pero también de otras organizaciones de movimiento sociales,
particularmente el más identidad ori-ented. En el movimiento de las mujeres de
Estados Unidos, por ejemplo, ve Mansbridge (1986: 191) y Krasniewicz (1992).
7 La institucionalización de partidos políticos implica un paso de un sistema de
ración-ality en qué ideología dicta objetivos organizativos, incentivos colectivos
predomi-nate, y el control está ejercitado sobre el entorno, a uno de intereses, en
qué el objetivo principal es supervivencia , los incentivos son selectivos, y el
entorno está adaptado a (Panebianco 1988).
8 En la dinámica organizativa durante campañas de protesta ve Gerhards (1991,
1993), Gerhards y Rucht (1992).
9 La sugerencia que proporcional representation los sistemas electorales favorecen
el emer-gence de los partidos políticos enlazaron a movimientos sociales (p. ej.
Marca 1985: 324) ha sido confirmado por búsqueda comparativa en partidos verdes
europeos. Cuando Chris Rootes notas: “En general, en países con federales
constitutions y proporcionales repre-sentation sistemas electorales, la matriz
institucional es mucho más favorable para el desarrollo y éxito de partidos Verdes
. . . Que es en estados unitarios centralizados con majoritarian sistemas
electorales” (Rootes 1994: 6).

Capítulo 7: Formas de Acción, Repertorios, y


Ciclos de Protesta
1 Barnes Et al. (1979), hubo ya notó que en Gran Bretaña, los Estados Unidos, y Alemania
Del oeste el porcentaje de quienes respondidos “unconventional acción política, gusta
manifestación” al cuestionar “Qué puede un ciudadano hace sobre un local reg-ulation
considerado unjust o nocivo?” Había sido aumentando. En Gran Bretaña el por-centage
así respondiendo había crecido de 0.2 por ciento en 1959–60 a 7.1 por ciento en 1974
(6.9); en los Estados Unidos la figura había aumentado de 0.5 por ciento a 6.9 (6.4); y
en Alemania Del oeste haya aumentado de 0.7 por ciento a 7.8 (7.1) (Barnes et al. 1979:
NOTES 257

143). Una tendencia similar existida en respuestas respecto de unjust legislación


nacional, con el porcentaje de aquellos dispuesto de considerar unconventional la
acción que aumenta de 0 a 4.3 por ciento en Gran Bretaña, 0.3 a 3.6 por ciento en
los Estados Unidos, y 1.9 a 9.5 por ciento en Alemania Del oeste (1979: 144).
2 Tilly Define contienda como common la acción que aguanta directamente en los
intereses de otro grupo suplente (Tilly 1986: 382).
3 Ejemplos del parochial y patronaje-el repertorio basado incluye disturbios
alimentarios, collec-tive invasiones de propiedad, destrucción de puertas de peaje
y otras barreras, rotura de máquina-ing, charivaris y serenatas; expulsión física de
agentes de impuesto, trabajadores extranjeros, u otro outsiders; tendentious
desfiles de vacaciones; batallas entre pueblos; el abatiendo o despidiendo de casas
privadas; pruebas simuladas o populares y concurrencias (Tilly 1986: 392–3).
4 Entre otros, Carty 2002 en el antisweatshop movimiento y boicot de Nike;
Rosenkrands 2004 en anticorporate actividades on-line.
5 En búsqueda en la integración política de minorías étnicas, “efectos de flanco radicales
positivos” han sido mencionados: “los grupos radicales pueden traer sobre un nivel más
grande de responsiveness a las reclamaciones de modera, cualquiera por hacer el último
aparecer más ‘razonable' o por crear una crisis cuáles pueden ser solucionados por las
concesiones menores requirieron por el modera” (Haines 1988: 167; ve también Botón
1978). Estos efectos positivos están asociados con acción directa más que amotinarse
(Haines 1988: 171). Gamson (1990) de modo parecido notó que sea disposición para
utilizar noninstitutional más que violento significa cuál favoreció victorias de
movimiento social.
6 En considerar el debate extendido en el movimiento de derechos civil del tiempo,
Lipsky observó que los dirigentes de protestar a menudo afrontar una elección entre dos
caminos igualmente arriesgados: radicalismo, el cual aliena soporte externo, y
moderation, el cual socava la solidaridad de su base. Un estilo de liderazgo radical, el
objetivo del cual es para ganar estado a través de “suplente duro,” será eficaz en realzar
interno cohe-sion. Un estilo de liderazgo moderado, el cual apunta para ampliar el
estado de bienestar a través de acción pacífica, tomará cuenta más grande de objetivos
externos.
7 Mientras acción más moderada ha devenido cada vez más legítima, esto no es
cierto de formas más radicales. De 1974 a 1981 soporte para petitioning había
crecido de 22 por ciento a 63 por ciento en Gran Bretaña y soporte para
manifestaciones legales de 6 por ciento a 10 por ciento. Las figuras equivalentes
eran 30 por ciento a 46 por ciento y 9 por ciento a 14 por ciento en Alemania.
Soporte para la acción directa como ocupaciones quedó arraigada enar ound 1 a 2
por ciento (Dalton 1988: 65). Ve también Norris 2002, citado encima.
8 Una observación más lejana puede ser hecha. Hasta que ahora, en las discusiones sobre
las elecciones estratégicas abren a movimientos sociales, sus dirigentes generalmente
han sido tratados como grupo unitario. En realidad, los movimientos sociales son
composite actores: sus organizaciones y las redes interaccionan, escogiendo al menos
parcialmente direcciones diferentes. Tan ya notado, Greenpeace especializa en acción
directa mientras la agrupación Verde en el Euro-pean parlamento follows la lógica de
democracia parlamentaria; algunas organizaciones pidieron un boicot de bienes
franceses mientras otros consideraron tal contador de acción-productivo. Esta
diversidad de estrategia puede ser positiva desde las organizaciones diferentes serán
capaces de hablar a different sectores de opinión pública. Aun así, necesita ser
258 NOTES

Recordado que las organizaciones solas dentro de un movimiento compiten con


cada otro así como cooperando. La elección de una organización particular de la
estrategia es también motivard, por tanto, por la necesidad a carve fuera de un
nicho en el mercado “más ancho” del movimiento (McCarthy y Zald 1987b
[1977]). Estas elecciones no son siempre benefi-cial al movimiento globalmente,
cuando los efectos de averiar de terroristas organiza-tions en el menos radical
grupos de qué saltaron trágicamente atestigua (della Porta 1995).
9 Para un ejemplo de tal escalation ver la descripción muy detallada de protesta
estudiantil en Berkeley en 1964 por Max Heirich (1971).
10 El concepto de “difusión” ha sido importado a ciencia social de físicas, más
exactamente de estudios de la difusión de clases seguras de olas de un sistema a
otro. En las ciencias sociales ha solido explicar la transferencia a través de tiempo
y espacio de particulares culturales traits, información, o ideas.
11 Cyclical Los patrones han sido observados en actividad de huelga, por ejemplo; y su
rela-tionship con Kondratieff ”s los ciclos económicos estudiaron. De modo parecido,
los ciclos de revolución han sido enlazados a crecimiento de población y disminución
(Frank y Fuentes 1994).

Capítulo 8: El Policing de Protesta

1 La reconstrucción de acontecimientos está basada a Andretta, della Porta, Mosca,


y Reiter 2002: ch. 1.
2 McAdam (1982) identificó tres factores importantes en la aparición y desarrollar-
ment del movimiento: su ingenio de alineaciónhin el contexto político más grande
(estructura de oportunidad política); el nivel de organización del aggrieved
población (potencial de organización); y su valoración de las posibilidades de éxito
(consciencia insurgente).
3 En su comparación del francés, alemán, sueco y americano antinuclear
movimiento-ments, Herbert Kitschelt (1986: 61–4) distinguido entre las
condiciones qué influencia reclama introducir el sistema político y aquellos
influyendo su producción en plazos de política pública. En el lado de entrada, un
número grande de partidos políticos, la capacidad de la legislatura para desarrollar
y política de control independientemente del exec-utive, patrones de pluralista de
mediación entre grupos de interés y la rama ejecutiva, y la posibilidad de construir
política coalitions (i.e., mecanismos para agregación de demanda) es indicadores
de transparencia. En el lado de producción, la capacidad del polit-ical sistema para
implementar las políticas está indicada por un aparato estatal centralizado, gov-
ernment control sobre el mercado, y un nivel bajo de independencia judicial de las
otras armas del estado.
4 De hecho, en los Estados Unidos Eisinger (1973) encontró un grado más grande
de transparencia en regímenes de gobierno local donde electors tuvo más control
sobre administradores.
5 Kriesi Nota que mientras en el enlado puesto el grado de acceso formal a los aumentos
estatales con descentralización territorial; la separación de ejecutivo, legislatura, y
judiciary; niveles bajos de coherencia, coordinación interna, y professionalization en la
administración pública; und la presencia de procedimientos democráticos directos, los
mismos factores producen los efectos opuestos en el lado de producción: “Federal,
fragmented
NOTES 259

Y los estados incoherentes con instituciones democráticas directas lo encuentran


particularmente difíciles de llegar en decisiones y para imponerles encima
sociedad” (Kriesi 1995: 172).
6 Durante la ocupación de un centro comunitario en Zurich, por ejemplo, las
autoridades locales' decisión para dejar administración de las instalaciones con las
personas jóvenes en ocupación era twhielo overturned por un referéndum popular
(Kriesi 1984).
7 Ambos países pequeños abren a mercados internacionales, el Netherlands y
Switzer-aterrizar adoptado un sistema de consensual democracia, caracterizado por
protección especial para derechos de minoría, el cual ha evitado la fragmentación
del estado bajo el pres-sures de diferencias étnicas (religiosos en el Netherlands,
lingüísticos en Suiza). En consensual democracia, ve Lijphart (1984); en las
“democracias” pequeñas, Katzen-stein (1985).
8 Según una encuesta tomada en 1981 comparando Francia y Gran Bretaña, 26 por
ciento en el anteriores y 10 por ciento en el últimos había participado en
manifestaciones legales. había también tolerancia más grande en Francia para
nonviolent acción ilegal como huelgas oficiosas (10 y 7 por ciento) y ocupaciones
(7 y 2 por ciento) (Dalton 1988: 65).
9 El número de los días por 1,000 trabajadores perdieron a través de huelgas entre
1965 y 1974 era un trato grande más alto en países con un sistema de pluralista
(1,660 en Italia, 1,330 en los Estados Unidos, 740 en GrandesBr itain, y 810 en
Finlandia) que sea en países con un neocorporatist un (270 en la República Federal
alemana, 70 en el Netherlands, 40 en Suiza, y 20 en Austria) (Wallace y Jenkins
1995: 106).
10 Según Franco L. Wilson (1990), aun así, el nivel de neocorporatism tiene ninguna
influencia en indicadores de movilización como actitudes públicas hacia un
movimiento social, inclinación para apoyar una causa, o disposición para utilizar
nonconventional táctica de protesta.
11 Además, cambios en las actitudes de social partidos democráticos no siempre
moneda-cide con introducir o dejando oficina. Pueden ser anticipados dónde una
percepción de electoral instability o el conflicto dentro de élites abre una “ventana
de oportunidad” para movimientos sociales. Por otro lado, un cambio in la actitud
puede ser retrasada después de dejar gobierno, particularmente dónde demasiada
transparencia hacia movimientos nuevos está responsabilizada para desgracia
electoral.
12 Según DeNardo, la efectividad de violencia está influida por régimen respon-siveness
y the distribución de preferencias respecto de disidentes' demandas: “Cuándo el bulk de
las mentiras de soporte potencial del movimiento se acercan sus demandas, aun así, los
constreñimientos en escalations está relajado considerablemente” (DeNardo 1985:
223).

Capítulo 9: Democracia y Movimientos Sociales

1 A pesar de que uno habla de los “éxitos” obtuvieron por un partido socialista en
gobierno o por un sindicato, los mismos problemas identificaron respecto de los
movimientos sociales son también probablemente para ser conocidos en tales casos.
2 Justo para dar un ejemplo, Amnistía International – cuál a menudo ha adherido a
antiglobalization protestas – podría en 2000 cuenta en el soporte, incluyendo
financiación, de
260 NOTES

Encima un millón de miembros organizaron en ramas nacionales formales en 56


países (Schneider 2000; Anheier y Themudo 2002: 193).
3 De modo parecido, conceptos como associative democracia (Hirst 1994) o
democracia radical (Mouffe 1996) también acentuar la necesidad para
complementar democracia representativa con modelos alternativos de democracia.
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ÍNDICE DE NOMBRES

Aarelaid-Tart, Aili, 254n1 Bagguley, Paul, 40, 56, 60, 61, 159
Abramson, Paul R., 69 Bainbridge, William S., 117, 123
Agnoletto, Vittorio, 107, 141 Baiocchi, Gianpaolo, 141, 223, 224, 225,
Aguiton, Christophe, 144 237, 239
Ajanaku, Femi, 109 Panadero, Wayne, 70
Alberoni, Francesco, 28, 77, 83, 142 Balme, Richard, 19
Allegretti, Giovanni, 223, 224, 225, 232 Balser, Deborah B., 158
Alvarez, Sonia, 251n16 Bandy, Joe, 4, 89, 90, 91, 107
Amenta, Edwin, 203, 205, 206, 235, Barbalet, Jack, 48, 252n6
251n16 Barkan, Steven E., 159
Ames, Ruth E., 102 Barker, Colin, 10, 87
Amin, Ceniza, 36, 38 Barnes, Barry, 143
Aminzade, Ronald, 200 Barnes, Samuel H., 56, 120, 166, 180,
Ancelovici, Marcos, 82, 147 256n1
Anderson, Benedict, 95, 108 Bartholomew, Amy, 9, 112, 253n12
Andretta, Massimiliano, 2, 10, 41, 49, 60, Bartolini, Stefano, 37, 43, 58, 112, 209
64, 71, 75, 76, 78, 81, 83, 84, 95, 106, Basaglia, Franco, 108
108, 109, 132, 153, 180, 185, 188, 199, Bechofer, Frank, 253n13
203, 214, 220, 232, 258n1 Beck, John, 68
Andrews, Kenneth, 137, 152 Beck, Ulrich, 43
Anheier, Helmut, 27, 64, 77, 78, 82, 118, Becker, Penique E., 125
126, 147, 152, 154, 156, 161, 172, 250n1, Cerveza, William R., 83, 106
260n2 Behrens, William W., 3
Ansell, Christopher, 159 Beissinger, Mark R., 2
Arditi, Jorge, 108 Bell, Daniel, 55, 252n3
Armstrong, Elizabeth, 107 Bello, Walden, 3

Ceniza, Roberta, 14, 126 91, 94


Augustin, Boguslaw, 2 Bennani-Chraïbi, Mounia, 2, 5, 72, 174
Auyero, Javier, 42, 107, 112, 122 Bennett, W. Lance, 95, 100, 132, 133, 155,
Ayers, Jeffrey, 40, 60, 64 159, 170, 178, 221
330 yoNDEX DE N AMES

Berezin, Mabel, 87, 93, 109 Brysk, Alison, 44


Berger, Peter, 17, 92, 111 Buchanan, James, 251n10
Bergmann, Werner, 174 Buechler, Steven M., 35, 250n1
Bernstein, Mary, 93, 107, 211 Bukowski, Jeannie, 43
Béroud, Sophie, 46 Burdon, Tony, 230
Más, Joel, 73 Burns, Gen, 83
Bew, Paul, 97 Burstein, Paul, 140, 227, 228, 231
Bianchi, Marina, 90, 92, 98, 99 Botón, James W., 257n5
Bickham-Mendez, Jennifer, 89, 90, 91, 107 Bystydzienski, Jill M., 4
Billig, Michael, 92, 98, 108
Bircham, Emma, 64 Cadena-Roa, Jorge, 86
Bisonte, Ivano, 15, 20, 132, 136, 159 Caiani, Manuela, 45
Bjarnason, Thoroddur, 227 Calhoun, Craig, 11, 38, 60, 62, 91, 92, 95,
Blee, Kathleen M., 83, 108, 111, 126 98, 100, 106, 109, 117, 133, 251n16,
Blumer, Herbert, 12, 75, 150, 186, 250n6 253n18, 255n6
Bobbio, L., 239 Callinicos, Alex, 107
Bohman, James, 242 Campbell, Jane, 48
Boli, John, 15, 43, 236 Canciani, Domenico, 106
Bolton, Charles D., 120, 127 Caniglia, Elisabeth Schafer, 15, 103,
Bonazzi, Tiziano, 48 131
Bosk, Charles, 75 Capek, Stella M., 61, 115
Bourdieu, Pierre, 11, 49, 50, 54, 56, 66 Cardon, Domenique, 221
Bourneau, François, 34 Carroll, William K., 70, 128, 129
Bove, Jose, 137 Carson, Rachel, 108
Boyte, Harry C., 142 Cartuyvels, Yves, 49
Marca, Karl-Werner, 17, 206, 212, 214, Carty, Victoria, 257n4
254n2, 256n9 Castells, Manuel, 10, 36, 38, 39, 40, 41, 44,
Marca, Ulrich, 238 45, 61, 94, 117, 133, 159, 183, 213
Braungart, Margaret M., 57, 69, 254n1 Catanzaro, Raimondo, 96, 112
Braungart, Richard M., 57, 69, 254n1 Ceccarini, Luigi, 3
Brecher, Jeremy, 2, 43, 61, 236 Cerulo, Karen, 133
Breiger, Ronald L., 115 Cesarani, David, 48
Breines, Wini, 141 Chabanet, Didier, 34
Breuilly, John, 61, 251n16 Chabot, Sean, 183
Brint, Steven, 252n3, 253n15 Chandhoke, Neera, 238
Brissette, Martha B., 46 Charlton, John, 64
Britt, David W., 152 Chatfield, Charles, 45
Broadbent, Jeffrey, 149 Chesler, Mark, 48
Brokett, Charles D., 200 Chiriboga, Manuel, 236
Brooks, Clem, 54, 61, 70, 254n1 Chong, Dennis, 255n9
Brooks, Rachelle, 143 Christiansen, Lars, 154
Brown, David L., 2 Cinalli, Manlio, 97
Brown, Helen M., 143 Clark, Terry N., 54
Brown, Kerry, 133 Clemens, Elisabeth S., 146, 154
Bruce, Steve, 53, 80, 83, 97 Cleveland, John W., 10
YoNDEX NAMES 331
DE
Cloward, Richard, 16, 18, 35, 57, 60, 121, Derloshon, Gerald, 254n6
146, 210, 215, 227, 237, 254n6 Desai, Manisha, 149
Cohen, J., 212, 242 Desario, Jack, 48
Cohen, Jean L., 91, 105 Devine, Fiona, 255n2
Cohen, Robin, 94 Dhingra, Pawan, 125
Cohn, Steven F., 159 Di Maggio, Paul, 104, 127
Coleman, James, 12, 116 Diani, Mario, 15, 18, 20, 22, 24, 26, 31, 56,
Collins, Carole J. L., 230 58, 61, 80, 83, 85, 93, 98, 102, 103, 112,
Connolly, Linda, 97 116, 117, 118, 119, 123, 125, 127, 128,
Connor, Walker, 61, 83 129, 132, 133, 135, 136, 138, 140, 142,
Costello, Tim, 2, 43, 61 143, 144, 146, 147, 151, 158, 159, 172,
Cotgrove, Stephen, 58, 253n15 181, 227, 228, 254n7, 255n4, 255n5
Couldry, Nick, 221 Cena, Nicholas, 144
Cramer, Jacqueline, 58 Dixon, Marc, 118
Cress, Daniel M., 61, 86, 180, 227 Doherty, Brian, 49, 139, 149
Cristante, Stefano, 221 Donati, Paolo R., 74, 103, 135, 142, 143,
Crompton, Rosemary, 45 146, 147, 151, 255n2
Sinvergüenza, Stephen, 57, 59, 60 Downing, D. H., 221
Crossley, Nick, 7, 8, 11, 67, 108, 250n1, Downs, Anthony, 75
252n5 Downton, James, 91, 96, 142, 143
Croteau, David, 221 Doyle, Timothy, 81
Crouch, Colin, 43, 45 Drobnic, Sonja, 118
Curtis, Russell L., 126, 127, 151 Drury, John, 92, 93, 112, 149
Dryzek, John S., 241, 242, 243
Dale, Gareth, 10 Dubet, François, 83, 250n3
Dalton, Russell, 24, 28, 40, 54, 58, 68, 69, Duff, Andrew, 58, 253n15
112, 159, 170, 253n13, 257n7, 259n8 Dunleavy, Patrick, 45
Daniels, Cynthia, 143 Dunne, Michael, 48
D'Anieri, Paul, 11, 60, 251n16, 253n18 Duyvendak, Jan-Willem, 24, 86, 111, 214
D'Anjou, Leo, 65, 219, 251n16
Davies, James, 7 Earl, Jennifer, 103, 197
de Graaf, Nan Dirk, 70 Eckstein, Susan, 11, 40, 42, 174, 251n16
De La Pierre, Sergio, 106 Eder, Klaus, 49, 53, 59, 60, 245, 252n9
Delgado, Gary, 154 Borde, David, 143
della Porta, Donatella, 2, 11, 17, 18, 19, Edwards, Bob, 15, 116, 137, 152
41, 45, 46, 47, 49, 59, 71, 91, 96, 100, Einwohner, Rachel L., 76, 107, 140, 228
111, 112, 118, 125, 132, 134, 141, 142, Eisinger, Peter, 16, 196, 258n4
147, 149, 151, 153, 158, 159, 171, 172, Ekland-Olson, Sheldon, 117
174, 180, 181, 182, 184, 185, 188, 189, Ellingson, Stephen, 86
191, 196, 197, 198, 199, 200, 201, 203, Elliott, Brian, 253n13
205, 207, 210, 211, 214, 215, 216, 217, Elster, Jon, 242
218, 220, 232, 234, 236, 241, 244, 247, Emirbayer, Mustafa, 66, 116
251n16, 255n1, 255n4, 256n6, 258n1, Epstein, Barbara, 60, 148, 179
258n8 Escobar, Arturo, 251n16
DeNardo, James, 171, 174, 255n9, 259n12 Escobar, Edward J., 201
332 yoNDEX DE N AMES
Esping-Andersen, Gosta, 39, 252n8, 255n2 Gallie, Duncan, 209
Etzioni, Amitai, 25, 149 Gamson, Josh, 48
Evans, Geoffrey, 70, 255n2 Gamson, William, 16, 18, 21, 48, 72, 75,
Evans, Peter, 40 79, 82, 86, 87, 94, 102, 103, 104, 105,
Evans, Sara M., 142 112, 141, 142, 145, 156, 176, 178, 219,
Everett, Kevin D. 220, 221, 226, 232, 257n5
Eyerman, Ron, 13, 31, 58, 69, 80, 84, 85, Gans, Herbert, 109
220, 252n8 Gargiulo, Martin, 159
Gariyo, Zie, 230
Fabbrini, Sergio, 46 Garofalo, Reebee, 252n8
Fantasia, Rick, 31, 33, 38, 40, 58, 93, 100, Gates, Leslie, 251n12
102, 105, 179, 251n16 Gaventa, John, 75
Favre, Pierre, 182 Geary, Dick, 209
Feagin, Joe R., 61 Gerhards, Jürgen, 86, 219, 256n8
Featherstone, Mike, 60 Gerlach, Luther, 94, 156–7, 161
Fernandez, Roberto, 123, 124, 125 Gern, Christiane, 105, 255n1
Ferree, Myra Marx, 16, 86, 107, 219, Giddens, Anthony, 36, 48, 51, 52, 66, 94,
251n16 252n4, 253n11
Fillieule, Olivier, 2, 5, 35, 72, 174, 198, 199 Gill, Stephen, 60
Dedo, Matthias, 44 Girling, John, 54
Finnegan, William, 156 Gitlin, Todd, 103, 180, 220
Bombero, Bruce, 104, 105, 112 Giugni, Marco, 2, 17, 19, 23, 41, 203, 227,
Flacks, Richard, 142 235
Flam, Helena, 24, 59, 104, 206, 207, 208, Glasius, Marlies, 64
210, 246 Goetz, Anne Marie, 233, 235, 236
Foley, Michael, 116, 137 Goffman, Erving, 74
Follesdal, Andreas, 3, 144, 177 Goldstein, Robert J., 209
Forbes, James D., 50 Goldstone, Jack Un., 213, 251n16
Forno, Francesca, 3, 22 Goldthorpe, John, 55, 252n3
Foucault, Michel, 77 Goodwin, Jeff, 17, 86, 87, 91, 93, 104, 109,
Foweraker, Joe, 251n16 116, 122, 219
Fox, Jonathan, 2 Gould, Deborah, 147
Frank, Andre Gunder, 258n11 Gould, Roger V., 105
Franklin, Mark, 54 Gouldner, Alvin, 55, 252n3
Franzosi, Roberto, 108, 251n16 Goyder, Jane, 158
Freese, Jeremy, 93 Magnífico, Steve, 2
Freschi, Anna Carola, 133, 172, 183, 221 Granjou, Fabien, 221
Friedman, Debra, 103, 141 Granovetter, Mark, 104
Fuchs, Dieter, 72 Grant, W., 238
Fuentes, Maria, 258n11 Gret, Marion, 223
Fulbrick, Mary, 48 Gronmo, Sigmund, 50
Fung, Arconte, 237, 245 Groves, Abigail, 159
Guiraudon, Virginie, 238
Galaskiewicz, Joseph, 129 Gulati, Ranjay, 159
Vendaval, Richard P., 211 Gupte, Manjusha, 159
YoNDEX DE N 333
AMES
Gurak, Laura J., 173 Hoynes, William, 221
Gurr, Ted R., 7, 250n1 Hughes, Michael, 50, 60
Gusfield, Joseph, 7, 12, 13, 26, 60, 74, 75, Caza, Lynn, 109
250n7 Caza, Scott Un., 74, 91, 94
Huntington, Samuel, 72
Haas, Ernst B., 204 Hutchinson, Richard, 251n12
Haas, Peter M., 28
Habermas, Jürgen, 9, 47, 241, 242, 253n11 Ignazi, Piero, 251n16
Haines, Herbert H., 257n5 Imig, Doug, 19, 45
Hainsworth, Paul, 39 Inglehart, Ronald, 2, 57, 68, 69, 70, 71, 72,
Hajer, Maarten, 238 84, 253n13, 254n2, 254n3
Hampton, Keith, 133 Isaac, Larry, 154
Hanagan, Michael, 65, 213
Harff, Barbara, 250n1 Jackson, John Harold, 150
Hargreaves Heap, Shaun, Jamison, Andrew, 13, 58, 69, 80, 84, 85,
255n9 Hathaway, , 159 Haunss, 252n8
Sebastian, 111, 131 Haydu, Janda, Kenneth, 140, 142
Jeffrey, 76 Haythornwhyte, Jansen, Robert, 85
Carolin, 95, 117 Calorh, Jasper, James, 13, 14, 16, 17, 86, 87, 91, 93,
Anthony, 54, 58 Heckathorn, 96, 104, 121, 154, 176, 180, 181, 184,
Douglas D., 105 Hedström, 219
Peter, 251n15 Hegedus, Zsuzsa, Jenkins, J. Craig, 16, 146, 210, 211, 213,
83, 250n3 Heirich, Max, 258n9 215, 217, 253n13, 259n9
Aguantó, David, 43, 51 Jennings, M. Kent, 56, 69, 120, 253n13
Hellemans, Personal, 253n13 Jenson, Jane, 31, 112
Herman, Didi, 83 Arenque, Jobard, Fabien, 199
Cedric, 1 Hertz, Noreena, 82 Johnson, Erik, 15
Hewitt, Lyndi, 86 Hick, Steven, Johnston, Hank, 2, 13, 31, 44, 67, 74, 85,
170 Holalgartner, Stephen, 75 96, 110, 144, 254n1
Hinckley, Barbara, 251n12 Jones, Andrew, 251n12
Hine, Virginia, 94, 157 Joppke, cristiano, 213, 251n16
Jordania, Grant, 19, 62, 103
Jordania, John, 132
Jordania, Tim, 132, 172, 183, 252n8
Hipsher, Patricia L., 246
Hirsch, Eric, 93, 100, 105 Kaase, Max, 120
Hirsch, Joachim, 38 Kaldor, Mary, 64, 164
Hirschman, Albert O., 179 Kaplan, Jeffrey, 111
Hirst, Paul, 260n3 Kaplan, Laura, 143
Hobsbawm, Eric, 65, 108, 174, 251n16 Katz, Daniel, 221
Hoffman, Lirio M., 48 Katzenstein, Peter J., 259n7
Hollander, Jocelyn Un., 140, 228 Keating, Michael, 43
Hooghe, Marc, 128, 177 Keck, Margaret, 28, 133, 231
Horton, Lynne, 91 Kertzer, David, 73, 109
Howard, Judith Un., 92, 106 Kesselring, Sven, 238
334 yoNDEX DE N AMES

Llaves, Jennifer, 86 Lash, Scott, 36, 38, 53, 55, 252n3


Khagram, Sanjeev, 236 Latouche, Serge, 52
Khawaja, Marwan, 200 Laumann, Edward O., 160
Kielbowicz, Richard B., 220 Lavalette, Michael, 10, 159
Killian, Lewis, 1, 12, 13, 25, 67, 104, 122, Lazarsfeld, Paul, 221
129, 142, 186, 250n4 Lixivia, Darcy, 111, 131
Kim, Hyojoung, 104, 105 Lehmbruch, Gerhard, 212
Kimeldorf, Howard, 251n14 Leicht, Kevin, 213
King, Martin Luther, 84, 108, 109, 137 Lemert, Charles, 98
Kitschelt, Herbert, 17, 26, 27, 196, 202, Lémieux, Vincent, 251n12
203, 206, 233, 239, 244, 253n13, 258n3 Lenart, Silvo, 221
Kitts, James, 118, 120, 124, 146, 255n1 Lenin, Vladimir Ilich, 108
Klandermans, Bert, 13, 31, 59, 72, 85, 96, Levi, Margaret, 40
210, 211, 255n1 Lewis, Tammy L., 147
Kleidman, Robert, 161 Lichterman, Paul, 120, 143, 149, 158
Klein, Naomi, 3, 108, 156, 177 Lijphart, Arendt, 259n7
Klotz, Audie, 236 Lindgren, Elaine H., 149
Kniss, Fred, 83 Lindsay, Isobel, 136
Knoepfel, P., 238 Linton, abril, 140
Knoke, David, 19, 118, 129, 160, 255n3 Lipset, Seymour M., 36, 54, 58, 119
Koelble, Thomas Un., 214 Lipsky, Michael, 166, 167, 179, 180, 185,
Kolb, Felix, 147 197, 237
Koopmans, Ruud, 11, 18, 39, 86, 184, 185, Livesay, Jeff, 11, 67, 116
188, 214, 217, 219 Lo, Clarence Y. H., 46, 211, 251n16
Kornhauser, Un., 7, 66, 68, 119 Loader, Brian, 117, 254n7
Kousis, Maria, 41 Lodhi, Un. Q., 38
Krasniewicz, Louise, 256n6 Lodi, Giovanni, 117, 119, 123, 125,
Kriesi, Hanspeter, 2, 17, 31, 57, 58, 68, 71, 127
112, 123, 125, 127, 140, 143, 144, 145, Lofland, John, 25, 73, 85, 140, 141,
146, 173, 183, 186, 201, 202, 203, 206, 251n11, 255n10
207, 208, 210, 211, 212, 214, 215, 216, Logie, John, 173
217, 218, 232, 251n13, 253n14, 253n17, Lööw, Helène, 111
258n5, 259n6 Lowe, Philip, 158
Kubal, Timothy J., 219 Lowe, Stuart, 45, 61
Kull, Steven, 2 Lowi, Theodore, 111, 151
Kuklinski, James H., 255n3 Lubeck, Paul M., 5
Kumar, Krishan, 36 Luckmann, Thomas, 17, 92, 111
Kurzman, Charles, 219 Luker, Kristin, 122
Kuumba, M. Bahati, 109 Lumley, Robert, 80, 97, 147, 151
Lyons, Matthew Nemiroff, 49
Lahusen, cristiano, 133, 146, 236
Laing, Ronald, 108 Mach, Zdzislaw, 91
Lang, Gladys, 142 Maguire, Diarmuid, 97,
Lang, Kurt, 142 214 Maheu, Louis, 10
Langman, Lauren, 5 Mair, Peter, 37, 58, 112
YoNDEX DE N 335
AMES
Malcolm X, 108, 109 Melucci, Alberto, 2, 9, 13, 16, 18, 21, 22,
Maloney, William, 19, 62, 103 24, 44, 47, 49, 51, 53, 59, 61, 67, 72, 73,
Manconi, Luigi, 96, 112 74, 77, 83, 87, 91, 92, 93, 94, 95, 96, 98,
Manin, Bernard, 217 99, 104, 106, 110, 117, 131, 142, 143,
Mannheim, Karl, 253n1, 254n5 149, 171, 232, 247, 252n7, 253n11,
Mansbridge, Jane J., 230, 241, 256n6 255n7
Manza, Jeff, 54, 61, 70, 254n4 Meyer, David S., 1, 2, 18, 150, 154, 159,
Markoff, John, 252n1 196, 211
Marcas, Gary, 45, 207, 236 Meyer, John, 187
Marshall, T. H., 48 Micheletti, Michele, 3, 50, 144, 177, 184
Martin, Andrew, 103 Michel, Robert, 146, 150
Martin, Virginie, 34 Middendorp, C., 70, 71
Marullo, Sam, 15 Mies, Maria, 174
Marwell, Gerald, 102, 103, 105, 118, Miliband, Ralph, 54
141 Miller, David, 242, 243
Marx, Gary, 133, 197 Minkoff, Debra C., 15, 138, 143, 146,
Massens, Jan, 49, 156, 220 151
Maurer, Sophie, 34, 35, 75 Mische, Ann, 66, 86, 116
Mayer, Margit, 9, 112, 253n12 Mitra, Debarashmi, 159
Mayer, Robert, 50 Mitterrand, François, 35
Mazey, Sonia, 236 Mizruchi, Mark, 128
Mazmanian, Daniel Un., 239 Moaddel, Mansoor, 72, 110
McAdam, Doug, 15, 16, 17, 18, 19, 20, 25, Modigliani, Andre, 82, 220
32, 41, 45, 72, 80, 84, 96, 103, 117, 119, Moody, Kim, 10
123, 124, 125, 126, 141, 173, 186, 187, Mooney, Gerry, 10, 159
188, 200, 212, 219, 236, 248, 255n1, Moore, Barrington Jr., 196
258n2 Moore, Kelly, 143
McAllister, Ian, 97 Morgan, C. P., 150
McCaffrey, Alborea, 86 Morgan, Jane, 197
McCammon, Holly, 86 Mormino, Maria, 90, 92, 98, 99
McCarthy, John, 2, 14, 15, 18, 25, 103, 119, Morrill, Calvin, 140, 145
129, 134, 137, 140, 145, 146, 150, 152, Morris, Aldon, 1, 143, 145, 212,
153, 155, 180, 197, 198, 251n11, 256n4, 254n6
258n8 Morse, David, 164
McClurg Mueller, Carol, 107, 251n16 Mosca, Lorenzo, 2, 41, 49, 172, 199, 214,
McDonald, Kevin, 24, 132, 139 258n1
McFarland, Andrew, 50, 103, 152 Mosco, Vincent, 95
McGarry, John, 98 Moscovici, Serge, 92
McGrew, Anthony, 43 Mouffe, Chantal, 260n3
McKay, George, 252n8 Mouriaux, René, 46
McNutt, John, 170 Mudu, Pierpaolo, 144
McPhail, Clark, 2, 13, 180, 198, 199 Mueller, Carol, 96
McPherson, Molinero, 118, 127 Mullins, Patrick, 122
McVeigh, Rory, 227 Mushaben, Joyce Marie, 143
Prados, Donella H., 3 Myers, Daniel J., 103
336 yoNDEX DE N AMES

Nas, Masja, 253n13 Panebianco, Angelo, 19, 154, 251n15,


Neal, Caren, 205, 206 256n7
Nederveen Pieterse, Jan, 64 Papadakis, Elim, 45
Neidhardt, Friedhelm, 2, 185, 200 Passerini, Luisa, 91, 96
Nelkin, Dorothy, 154, 205 Passy, Florence, 23, 41, 42, 102, 118, 119,
Nepstad, Sharon E., 84, 122 120, 126, 235, 255n1
Neveu, Eric, 180 Paulsen, Ronnelle, 124
Nicholson, Michael, 43 Pearce, Jone, 61, 142, 251n16
Nip, Joyce Y. M., 133 Peretti, Jonah, 221
Nixon, Paul, 117, 254n7 Perl, Un., 238
Noelle-Neumann, Elisabeth, 221 Perrow, Charles, 16
Nolan, Mary, 256n3 Petts, J., 238
Noland, Marcus, 2 Philips, Susan, 159
Nollert, Michael, 212 Pianta, Mario, 2, 4, 39, 132, 171, 179,
Noonan, Rita, 80 187
Norris, Pippa, 40, 56, 70, 71, 72, 84, 120, Piattoni, Simona, 43
166, 254n3, 257n7 Pichardo, Nelson, 59
Notarbolo, N., 174 Pickerill, Jeremy, 133
Pickvance, Chris, 27, 45, 62, 120
Oberschall, Anthony, 14, 15, 37, 50, 60, 83, Pierru, Emmanuel, 34, 35
105, 119, 120, 137, 252n2 Pilger, John, 3
O'Brien, Robert, 233, 235, 236 Pinard, Maurice, 120
Offe, Claus, 9, 11, 59, 239, 241 Pini, Barbara, 133
Ohlemacher, Thomas, 124 Pinto, Louis, 50
Okamoto, Dina, 122 Piore, Michael, 252n2
Olesen, Thomas, 22 Piven, Frances F., 16, 18, 35, 57, 60, 121,
Oliver, Mike, 48 146, 210, 215, 227, 237, 254n6
Oliver, Pamela, 13, 25, 67, 81, 102, 103, Pizzorno, Alessandro, 21, 51, 91, 92, 94,
105, 118, 122, 141, 159 100, 102, 179, 189, 217, 230, 232,
Olson, David, 40 251n16
Olson, Mancur, 100, 102 Platt, Gerald M., 84
Olvera, Jacqueline, 54 Arados, Alex, 139, 149
Olzak, Susan, 39 Aploma, Lawrence, 254n6
Omi, Michael, 112 Podobnik, Bruce, 4
Omvedt, Gail, 251n16 Podolny, Joel, 159
Opp, Karl-Dieter, 56, 101, 102, 105, 255n1 Poguntke, Thomas, 253n13
Ortoleva, Peppino, 179 Pollack, Michael, 205
Osa, Maryjane, 110, 251n16 Polletta, Francesca, 86, 87, 91, 93, 131, 141
O'Sullivan Ve, Catherine, 39, 97 Popielarz, Pamela, 118
Owens, Timothy J., 91 Potter, James, 254n6
Poulsen, Jane, 104, 121
Página, Karen, 159 Powell, Brian, 93
Pagnucco, Ron, 235 Powell, Walter, 104, 127, 159
Pakulski, Jan, 54, 56, 251n12, 254n1, Prakash, Sanjeev, 116
255n2 Previte, Josephine, 133
YoNDEX DE N 337
AMES
Princen, Thomas, 44 Roth, Roland, 233, 256n3
Purdue, Derrick, 136, 137, 236 Roth, Silke, 107
Rothman, Franklin D., 81, 159
Ranci, Costanzo, 50 Routledge, Paul, 139
Randers, Jorgen, 3 Rowan, Brian, 150
Ranger, Terence, 108 Roy, Arundhati, 3
Rao, Hayagreeva, 140, 145 Royall, Frédéric, 34
Rapoport, Anatol, 211 Ruane, Janet M., 133
Raschke, Joachim, 191 Rubington, Conde, 75
Ratner, R. S., 70, 128, 129 Rucht, Dieter, 1, 2, 4, 28, 72, 86, 117,
Ray, Raka, 107, 149, 251n16 134, 140, 149, 152, 153, 171, 172,
Pelirrojo, Steve, 252n8 184, 186, 187, 188, 189, 196, 202,
Reger, Jo, 98 205, 210, 211, 215, 216, 217, 218,
Reicher, Steve, 92, 93 219, 221, 227, 235, 253n10, 254n7,
Reifer, Thomas E., 5, 10, 251n16 255n4, 256n8
Reimann, Kim D., 159 Rüdig, Wolfgang, 11, 59
Reimon, Michel, 164 Ruggiero, Vincenzo, 144
Reiner, Robert, 197 Rupp, Leila, 11, 18, 87, 91, 96, 111, 149
Reiter, Herbert, 2, 41, 49, 185, 197, 198, Russett, Bruce, 44
199, 201, 207, 214, 258n1 Ruzza, Carlo, 233, 236
Renn, O., 238 Ryan, Barbara, 143
Rheingold, Howard, 117, 133 Rytina, Steve, 112
Richardson, Dick, 26, 153
Richardson, Jeremy, 236 Sabel, Charles, 252n12
Rihoux, Benoit, 49 Safran, William, 106
Riker, James V., 236 Salamon, Lester M., 152
Risse, Thomas, 231, 236 Salmón, Jean Marc, 34, 35
Ritzer, George, 52 Samuelson, Paul, 251n10
Robbins, Thomas, 25, 97, 251n16 Sandell, Rickard, 118, 251n15
Robertson, Roland, 41, 52 Sandoval, Salvador Un. M., 246
Robnett, Belinda, 94, 96 Sartori, Giovanni, 17
Rochford, E. Burke, 97 Sassen, Saskia, 39, 94
Rochon, Thomas R., 13, 18, 86, 159, 173, Sasson, Theodore, 221
178, 179, 180, 181, 182, 185, 232, 239, Sassoon, Joseph, 74, 109, 111
251n8 Saunders, P., 45
Rohrschneider, Robert, 69, 159, 253n13 Sawer, Marian, 159
Rokkan, Stein, 6, 36, 37, 58 Schacht, Steven, 4
Rootes, Christopher, 11, 22, 24, 26, 56, Scharpf, Fritz, 206
132, 148, 149, 153, 256n9 Scheff, Thomas, 104
Rose, Fred, 160 Scherer, Clifford, 220
Rose, Richard, 45 Schlesinger, Paul, 220
Roseneil, Sasha, 62, 89, 90, 254n2 Schlosberg, David, 160
Rosenkrands, Jacob, 155, 257n4 Schmidt, Hilmar, 236, 238
Roscigno, Vincent, 118 Schmitt-Beck, Rüdiger, 130, 143
Rosenthal, Naomi, 130, 141, 143, 159 Schmitter, Philippe, 212
338 yoNDEX DE N AMES

Schneider, Volker, 260n2 Soysal, Yasemine N., 48


Schnittker, Jason, 93 Staggenborg, Suzanne, 31, 143, 146, 159,
Scholte, Jaan Aart, 233, 235, 236 211
Schönleitner, Gunther, 225 Stamatov, Peter, 85
Schou, Arild, 131, 143 Duro, Rodney, 117, 123
Schudson, Michael, 219 Starr, Harvey, 44
Schumaker, Paul D., 213 Statham, Paul, 18, 219
Schwartz, Michael, 128, 141 Acero, Brent S., 70
Schweingruber, David, 198 Steinberg, Marc, 86
Scotch, Richard, 48 Stepan-Norris, Judith, 33, 40, 251n16
Scott, Alan, 55 Stern, Charlotta, 118, 251n15
Scott, W. Richard, 137, 138, 152 Stieglitz, Josef, 3
Seddon, David, 2, 42, 174 Stoecker, Randy, 255n8
Seligman, Adam, 254n3 Stokman, Frans N., 128
Selle, Por, 116 Stolle, Dietlind, 3, 144, 177
Sen, Amartya, 225 Stott, Clifford, 93
Sewell, William H. Jr., 11, 67, 116 Hebra, David, 187
Shah, Ghanshyam, 251n16 Streeck, Wolfgang, 252n2
Shemtov, Ronit, 75 Stryker, Sheldon, 91
Shiva, Vandana, 137 Strzelecki, Jan, 83, 250n3
Sikkink, Kathryn, 28, 133, 231, 236, 238 Su, Yang, 173
Plata, Beverly, 10, 213 Subramaniam, Mangala, 159
Simeant, Johanna, 41 Swidler, Ann, 67, 73, 85, 108
Simmel, Georg, 93, 106, 115, 118 Szasz, Andrew, 23
Sintomer, Yves, 223, 239 Szelenyi, Sonia, 54
Sklair, Laskie, 229 Sztompka, Piotr, 227
Skocpol, Theda, 146, 196, 199, 251n16
Smelser, Neil J., 7–8, 11 Toma, Ingo, 236, 238
Smith, Anthony D., 42, 56, 61, 108, Tarrow, Sidney, 1, 2, 11, 16, 17, 18, 19,
251n16 20, 32, 41, 45, 59, 73, 79, 81, 102,
Smith, Brendan, 2, 43, 236 155, 158, 159, 169, 174, 175, 179, 188,
Smith, cristiano, 72, 83, 110, 122 189, 190, 191, 196, 202, 210, 214,
Smith, Jackie, 2, 4, 15, 108, 132, 146, 180, 217, 219, 227, 229, 246, 248, 253n18,
236 254n8
Smyrl, Marc, 43 Taylor, Bron, 149, 160
Snow, David, 13, 28, 31, 61, 66, 67, 73, 74, Taylor, Ian, 144
79, 80, 81, 82, 86, 87, 94, 97, 103, 117, Taylor, Verta, 11, 16, 18, 24, 49, 87, 91, 94,
124, 125, 180, 227 96, 99, 104, 107, 110, 111, 142, 143, 144,
Snyder, David, 38 149, 165
Somers, Margaret, 86, 109, 251n16, Taylor-Gooby, Peter, 45
254n4 Thayer, Millie, 107
Sommier, Isabelle, 11, 46 Themudo, Nuno, 147, 154, 156, 161, 172,
Soros, George, 64 260n2
Soule, Sarah, 13, 103, 184, 197 Thomas, Daniel, 236
Souza, Celina, 223, 224 Thomas, George, 15, 43,
YoNDEX DE N 339
AMES
Thompson, Edward H., 8, 38, 58, 96, Vertovec, Steven, 94
159 Virnoche, Mary, 133
Thompson, John B., 52 Voss, Kim, 251n16
Tilly, Charles, 6, 14, 16, 17, 18, 19, 20, 21,
25, 31, 32, 37, 38, 41, 65, 79, 81, 106, Waddell, Steve, 160
119, 121, 133, 156, 168, 169, 182, Waddington, P. Un. J., 199
183, 185, 191, 197, 201, 215, 219, Walby, Sylvia, 39, 62
245, 246, 247, 251n9, 257n2, Walgrave, Stefaan, 4, 49, 133, 155, 156,
257n3 172, 205, 220, 255n4
Tilly, Chris, 41 Paseoer, Jack L., 146
Tilly, Louise, 79 Pared, Derek, 132, 139, 149
Tilly, Richard, 79 Wallace, Michael, 217, 253n17, 259n9
Tindall, David, 118, 126 Wallerstein, Immanuel, 10, 41, 65
Titarenko, Larissa, 2 Wallis, Roy, 50, 83, 97, 126
Tocqueville, Alexis de, 201–2 Walsh, Edward, 102
Tondeur, Alain, 49 Walton, John, 2, 42, 174
Touraine, Alain, 7, 8, 9, 21, 54, 58, 63, 83, Warland, Rex, 102
92, 93, 94, 106, 250n3, 251n16, 252n10, Warren, Mark, 251n12
253n10, 255n7 Washbourne, Neil, 133
Tranvik, Tommy, 133 Wasko, Janet, 95
Traugott, Mark, 182 Aguas, Malcolm, 255n2
Trigilia, Carlo, 252n2 Wehr, Paul Ernest, 91, 96, 143
Triunfo, Thomas, 71 Weinberg, Martin S., 75
Turk, Herman, 129 Welch, Michael R., 227
Turkle, Jerez, 133 Wellman, Barry, 94, 95, 117, 133
Turner, Bryan, 60 Westby, David L., 78
Turner, Ralph, 12, 25, 60, 67, 104, 122, Whalen, Jack, 142
186, 250n4, 255n1 Whitbaker, William H., 159
Blanco, Harrison, 104
Urry, John, 36, 38, 53, 55, 58, 59, 60, Blanco, Robert W., 91
252n3 Whittier, Nancy, 16, 49, 89, 90, 91, 93, 94,
Useem, Bert, 211 96, 104, 107, 110, 111, 149, 154, 178,
182, 247, 254n1
Vakaloulis, Michel, 46 Whutnow, Robert, 109
Valiente, Celia, 214 Wieviorka, Michel, 2, 83, 250n3
Furgoneta Aelst, Peter, 133, 155 Willelms, Helmut, 234, 239
Furgoneta de Donk, Wim, 117, 254n7 Williams, Marc, 233, 235, 236
Furgoneta Deth, Jan, 120 Williams, Rhys H., 79, 81, 84, 87, 219
Furgoneta Dyke, Nella, 165, 216, Wilson, Bryan, 97, 251n16
251n12 Wilson, Frank L., 259n10
Furgoneta Gennep, Un., 111 Wilson, James Q., 142, 256n6
Macho de furgoneta, John, 219 Wilson, John, 19, 25, 118, 165, 168, 200,
Furgoneta Praag, Philip, 217 251n16
Furgoneta Willigen, Marieke, 144 Winant, Howard, 112
Furgoneta Zoonen, Liesbet, 103 Invierno, Martin, 199
Vegh, Sandor, 176
340 yoNDEX DE N AMES

Sabiamente, Nancy, 118, Yinger, J. Milton, 251n16


129 Wisler, Dominique, Young, Iris Marion, 242, 243
173, 201 Wissen, Markus, Young, Michael P., 206
238
Wolfsfeld, Gadi, 103, 220
Wolfson, Mark, 152, Zald, Mayer N., 14, 15, 18, 25, 67, 119,
251n11 Madera, Elizabeth, 126, 129, 134, 137, 140, 145, 146, 150,
84 Madera, Lesley, 2 152, 153, 155, 211, 256n4, 258n8
Madera, Michael, 50, 60 Zeitlin, Maurice, 251n16
Woodberry, Robert D., 72, Zeppetella, Un., 239
83 Llave inglesa, John, 39 Zirakzadeh, Cyrus E., 251n16
Wright, Erik, 57, 237, 245 Zurcher, Louis Un., 117, 126, 127,
Wright, Steve, 133, 156 151
Zylan, Yvonne, 251n16

X, Malcolm, 108, 109


ÍNDICE DE TEMAS
Movimiento de derechos civiles,
EE.UU., 72, 152, 166–7, 182, 212

Comisiones ad hoc, 238–9


advocacy redes, 236
grupos de afinidad, 132
estructura de alianza, 210
Aliados de movimientos, 25, 34,
173, 179, 210–18; transnacional,
227
La amnistía Internacional, 259n2
antiglobalization, ve justicia global
Movimiento
antinuclear Movimiento, 59, 205–6,
208, 210, 212, 258n3
Movimiento antirracista,
216 antiroad movimiento,
49 antitoxic movimiento, 3,
23 ATTAC, 4, 82–3, 147,
230

Baltic Países, 110


barricades, 182
Bloque negro, 173–4, 193–
4, 200 boicot, 40, 175–7,
184

Campañas de protesta,
229 categorías, 37
catnet, 120
Celebraciones, público, 169
Escuela de Chicago, 12
Los derechos de los niños, 48–9
Iglesias, cuando aliados, 212
Ciudadanía, derechos de ciudadanía,
48–9
Desobediencia civil, 177
Clase, 52–62; conflicto de clase, 36, 38,
40; ubicación de clase, 58, 120–1
Campaña de Ropa limpia, 175
cleavages, 36–7; a la izquierda–
correcto, 71, 214;
Político, 36; centro–periferia, 36, 42–
3; y postmaterialism, 70
clique, 127
Coaliciones, políticos, 23–4
Acción colectiva, y la producción de
bienes colectivos, 100–2; cuando
conjunto de comportamientos
individuales, 12; tan cognitivo praxis,
73–4; conflictual y consensual, 22–3;
lógica de, 14–15, 100–5
Comportamiento colectivo, 11–13
identidad colectiva, ve identidad
partidos comunistas, cuando
aliados, 214 ordenador-
comunicación mediada
(CMC), 132–4; y subculturas de
movimiento, 132; y cambio
organizativo, 155–6
Configuración de poder, 211
Consenso, 242
Consumismo, ético, 50, 53, 177
Convencional vs. unconventional
política,
170
Conversión, 97
Cooperación, competitivo, 158;
noncompetitive, 158
cooptation, 235
Corporativismo (neo), 212–13
Contraculturas, 49, 111, 131–4, 144
counterframing, 76
342 YoNDEX DE S UBJECTS 56 Foro Social europeo, 95,
225–6 Unión europea, 18, 235
countermovement, 189–90, 205,
211, 229
countersummit, 171, 179, 195
control de multitud, ve protesta
policing cambio cultural, 232–3
Cultura y acción colectiva, 13–14, 65–7
ciclos de protesta, 188–91

Descentralización, 38, 43;


administrativo, 234
deliberative Arena, 236
deliberative Democracia, 242;
facultado, 237, 241; fuerza del
argumento mejor, 242–3
Demandas, nonnegotiable, 229 teoría
democrática, 239 democratización,
245–6 demonstration derechos, 201
manifestantes, imagen policial de, 199
difusión de protesta, 183; cruz-
nacional,
186–8, 258n10
Acción directa, 179, 183, 185
Democracia directa, 234, 239–40; vs.
democracia representativa, 240;
crítica de, 244
discursive Democracia, 243
discursive Oportunidades, 17, 47, 219–
20

Movimiento ecológico, ve movimiento


medioambiental
Cambio económico y acción colectiva,
37 electoral instability, 210, 215
electrónico advocacy, 170
Élites, y dirigentes de movimiento
social, 227
Norma emergente theory, 12
Emociones, 13, 16, 87, 148
Movimiento medioambiental, 37, 50, 58,
81,
148, 188, 233–4; en Italia,
157–8 comunidades
epistémicas, 28, 236 igualdad,
242
escalation, ve radicalization
conflicto étnico, 39, 44, 48, 52,
149–50 partidos verdes, 148, 247n8,
256n9 Greenpeace, 135–7, 138, 257n8
Acontecimientos,
público, 169 expertos,
143, 233–5, 237
Expresivo vs. acción instrumental, 196

factionalism, 130, 157


Movimiento feminista, ver el
movimiento de las mujeres
Fundaciones, cuando aliados, 121
Alineación de marco (bridging,
amplificación, extensión,
transformación), 81–3
Teoría de marco, critica 85–7
Marcos, elementos de, 74–9; cambios en,
86; interpretativo, 74–81; interpretativo,
y “credibilidad empírica,” 81–2;
interpretativo, y oportunidades políticas,
85–6; maestro, 79–81; realignment, 85;
revitalización, 87
Enmarcando procesos,
83–5 Francia, 33–5
Verano de libertad, 117–18, 123,
124, 167
Revolución francesa, 169
amistades entre activistas, 128
separación funcional de poder, 203
funcionalismo, 7–8
fundamentalismo, 52, 87, 100, 110

Conflicto de género, 39, 48


Genoa, protesta en contra G8,
193–5 Alemania, 200, 216
Movimiento de Justicia global, 2–5; y
democracia, 230, 232, 240; y
movimientos sociales nuevos, 60; y
formas organizativas (Bristol ejemplo),
135–7; y el estado de bienestar, 46;
Genoa protestas, 193; control
institucional, 200–1; ciclos de protesta,
190; repertorios, 178, 180, 182, 184–5
Globalización, 44; cultural, 51–2;
económico, 41–2; enmarcando de,
64–5
Bienes, colectivos, definición de,
251n10 grassroots organizaciones,
Latencia, 95–6, 131, 141, 149, 247
liderazgo y protesta, 142–3, 257n6
hackers, 183
historicity, 8, 54
homeless Movimientos, 61, 86,
145 movimiento de derechos
humanos, 231

Identidad, 50–2, 55, 179; y continuidad de


acción colectiva, 95–7; y confianza
mutua, 94; y oportunidades políticas,
111–13; y acción racional, 100–5;
cuando invención, 107–11; cuando
rediscovery, 107–11; colectivo, 21;
componentes de, 93–4; conflictos over,
106–7; exclusivo vs. inclusive, 98–100,
102–3; movimiento y grupo, 99;
múltiple, 98–100; nacional, 52, 107;
privado y público, 90–2; self- y hetero-
definición de, 105–6; estático vs.
dinámico, 92–3
Ideología, 66–7; versus marcos,
79 inmigración, 48, 112
incentivos, 100
indigenous Movimiento, 42, 44
acción industrial, 37, 175
conflicto industrial, ve conflicto
de clase sociedad industrial, 8–9
Indymedia, 144, 221
Grupos de interés, 207, 208;
cuando aliados, 212
Organizaciones gubernamentales
internacionales (IGOs), 43–5, 146–7,
204–5, 235
Irán, 110
Islam, valores en, 72
Italia, 80, 200

Periodistas y protesta, 180


Jubilee 2000, 161, 172,
230 judiciary, 203–4

Conocimiento, 53, 62; y


repertorios de protesta, 182

Movimiento de trabajo, 40–1, 183,


188, 207–10, 217
YoNDEX DE S UBJECTS neocorporatism, 212
343 neoliberal Cambio, 204
Neoliberalismo, 43
Aprendiendo procesos, 184–6
netstriking, 172
Partidos de izquierda, 214–15,
Organizaciones de red, 159–61
259n11; dejado en gobierno, 215–
16
Legislación, 231
Estilos de vida, 49–51
Cabildeo, 233–4
Lógica de aguantar testigo, 176; de
daño, 173–6; de números, 171–3

Que bombardea correo, 172


Directores, 48, 57
Marchas, 171, 182
Marxismo, 6, 8, 10
Medios de comunicación de masas,
167, 220; y protesta, 173, 178, 180
Activismo de medios de comunicación,
221
Medios de comunicación,
movimientos', 181; ve también
medios de comunicación de masas
Clase media, nuevo, 38, 55–62,
253n14; relación con clase
laborable, 60; clase media
tradicional, 59
Movilización, individual y redes
sociales de, 121–6; nivel de
movilización, 205, 208, 217; de
recursos materiales, 103, 141–2; de
participación, 103, 141–2
Códigos morales, 50
Mayoría moral, 50
Protesta moral, 59–60
Asociaciones de movimiento, 143–4;
estrategias, 206; éxito, 203, 208, 211,
218
multi-Campo organizativo, 210;
estructura de alianza, 210;
estructura de oposición, 210
Afiliaciones múltiples, 127

Nacionalismo, 31, 83; ethno-, 112


Movimientos nacionalistas, 31, 52
Nación-estatal, 36; crisis del, 42–5
344 YoNDEX DE S UBJECTS
Redes, 15–16, 21, 37, 114–17; y Partidos, cuando aliados, 213–18
ordenador comunicación mediada, Movimiento de paz, 172, 178, 179,
132–4; y participación individual, 183–4, 205, 215–16, 218
117–26; associational, 126–31; petitions, 172; on-line, 172
movimiento informal, 131–2; Oportunidades políticas, 16–19, 196,
interorganizational, 157–60; 219, 258n2, 3, 5
interpersonal, 117; privado, 125; Estructura de oportunidad política, 16,
subcultural, 110–11, 131–4 196 participación política, 56–8, 166,
Política nueva, 1 256n1,
Nuevo professions, 38, 257n7; educación y, 56–7
253n14 conflictos sociales partidos políticos, transformación
nuevos, 8–11 de,
Movimiento social nuevo, 61–2; y 216–17
clase media nueva, 8–11; modelos Teoría de proceso político, 16–19
ideológicos de nongovernmental El movimiento de las personas pobres,
organizaciones (NGOs), 235, 237–8 33, 61
nonviolence, 174, 179, 184–5 Democracia populista, 246
Porto Alegre, y participativo
Ocupación, 179, 191 cambio budgeting, 223–5, 228, 231, 240, 241;
organizativo, 150–2; und y foro social mundial, 225, 227, 243
Cultura, 154; y ordenador postindustrial Sociedad, 8–9
comunicación mediada, 155–6; y postmaterialism, 67–73 distribución de
factores institucionales, 152–3 poder, 247 transformación de
Funciones organizativas, 143–4 preferencia, 242 prevaleciendo
infraestructura organizativa de social estrategias, definición, 206; y
Movimiento, 247–8 Democracia, 207; inclusionary vs.
Modelos organizativos, 127–31, 145–50, exclusionary, 207–8
200 relaciones organizativas, tipos de 157– Esfera privada, conflicto en, 47–8,
9 estructura organizativa, jerárquico o 53, 252n6; vs. esfera pública, 47–8,
Horizontal, 142–3 53
Resultados de movimientos sociales, Cambio procesal, 233
226–9; política pública, 229–33; Protesta policing, 164, 171, 173, 184–5,
procesal, 223–39 190, 193–5; definición de, 197;
overlapping Afiliaciones, 127– efectos de, 200–1, 207; escalated
31 Oxfam, 135 fuerza en, 198; militarización de, 199;
control negociado en, 198; estrategias
Democracia parlamentaria, ve de,
democracia representativa 197–8
Participación y redes sociales, 126–31 Protesta, como political recurso, 29–
incentivos de participación, 100–5 30, 166–7; campaña, 188;
participativos budgeting, 223–5, 228, definición, 165; acontecimientos,
231–2, 237, 242–3 23–4; función simbólica de, 173–4,
Democracia participativa, 176, 239, 178–9, 181; ve también ciclo de
243–5, 248 protesta
Organizaciones de movimiento Burocracia pública, 203, 206
participativo, 147–50 interés público grupos, 50,
123 políticas públicas, 229–33
esfera pública, 240

radicalization, 151, 174, 184, 189–90,


195, 211
Estatal: fuerte y débil, 201–2
política de estado, 60
Teoría de elección racional, 14–16; opciones estratégicas, 178
críticas de, 16
realignment, político, 69, 112
Reclutamiento, 117–21
Referéndum, 173, 206, 234, 238–9
Profesionales de reforma, 212
Repertorio(s) de acción, 168, 200, 208–
9,
218; moderno, 169; aceptación
pública de, 234; dilemas estratégicos,
181–2
Democracia representativa,
234, 239–45
Movilización de recurso, 13–16, 34,
141–2
responsiveness, 231
Disturbios, 173–4
Rituales, 108–11; protesta cuando, 182

Seattle, protesta en 163–5, 185;


resultados, 232, 234–5
Secta, religioso, 25, 97, 117, 126–7
incentivos selectivos, 101–2, 141; externo
Vs. interno, 101 sentido
de injusticia, 200
compartió creencias, 7
cambio social, 35–7 clases
sociales, ve clase
fragmentación social, 37–
41 desigualdad social, 39
justicia social, 224

Organización de movimiento social


(SMO), definición de, 140;
evolución de, 150–2; profesional,
25, 145–7; transnacional, 146–7
Movimientos sociales, y coaliciones
políticas, 23–4; y partidos políticos, 25–
7; y acontecimientos de protesta; y
grupos de interés público, 25–7;
concepto de, 20–2, 54
Problemas sociales, definición de, 74–7
estratificación social y acción colectiva,
6, 58
Solidaridad, 15, 95
squatters, 49
Agencias estatales, 211
YoNDEX DE S UBJECTS 243
345
Juventud movements, 49
Huelga(s), 33, 175, 179, 183, 212,
258n11, 259n9
Movimiento estudiantil, 188
Subculturas, 110–11, 131–4, 144
Éxito, ver resultados
Conflicto simbólico, 75
Etnicidad simbólica, 109
Simbólico vs. recursos materiales, 54

Tecnología, 41, 155–6, 170


descentralización territorial,
202 sector terciario, 31
Teoría, el americano vs. europeo,
6–7 movimientos de sindicato, 46,
212 alianzas transnacionales, 246
campaña transnacional, 34, 40
transnationalization de protesta,
42–4 transparencia, 242

Parados, movimientos del, 33–5, 38, 50,


61
Uniones, 34, 40, 41, 46–7, 207–8;
cuando aliados, 213, grassroots, 40,
46; uniones de movimiento social,
213
Trabajadores de granja unida, 215
Estados Unidos, 80, 83; antitoxic
movimiento, 3, 23; homeless
movimientos, 86; ve también
movimiento de derechos civiles
Conflictos urbanos, 174, 197

Valores, y acción colectiva, 67–73;


cambio, 67–73; materialista, 67–
73; postmaterialist, 67–73
Violencia, 173–4, 184, 191, 218,
257n5, 257–8n8, 259n12
Asociación voluntaria, 19, 127

Estado de bienestar, 45–6, 252n6


El movimiento de las mujeres: 89–91,
130, 214, 229–30, 234; estructura
interna de, 132
Los derechos de las mujeres, ver el
movimiento de las mujeres Foro Social
Mundial, 4, 75, 225, 227,

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