Capítulo Uno

INTRODUCCIÓN: LOS ORÍGENES DE LOS REINOS ANGLO-SAJONES

Existe una línea de estudio según la cual la historia de los tempranos reinos Anglo-Sajones
comenzaría con la llegada de Agustín y su grupo de casi cuarenta monjes a la corte del rey
Æthelbert de Kent en el 597. Agustín y sus seguidores habían sido despachados por el Papa
Gregorio El Grande ‘para predicar el mundo de Dios entre la raza de los ingleses’ y, hasta
donde sabemos, su misión fue el primer intento sostenido de llevar el Cristianismo a estos
pueblos. No es sorpresa que la llegada de Agustín y sus monjes fuese un evento de enorme
importancia para Beda, cuya Historia Eclesiástica del pueblo de los Anglos (completada en el
731) es nuestra fuente narrativa principal para los tempranos siglos seis y siete, y comienza
con este acontecimiento. Beda, como monje que era, naturalmente creía que la conversión de
su pueblo significaba una nueva fase en su historia, pero también sería correcto decir que solo
después de la llegada de la misión de Agustín fue capaz de escribir una detallada historia de los
Anglos. Agustín y sus monjes no solo trajeron una nueva religión a la isla; también trajeron el
arte de leer y escribir.

A pesar de que la llegada de la misión Gregoriana claramente significo un acontecimiento muy

importante en la historia religiosa de estos pueblos y en la producción de archivos escritos, no
es un punto ideal para comenzar una investigación de la historia de los reinos Anglo-Sajones,
esto se debe a que es evidente que la mayoría de dichos reinos ya existían para el 597, sin
mencionar que los complejos patrones políticos de interrelaciones y fusiones que Beda
describe en su Historia Eclesiástica tienen sus orígenes en el periodo pre-Cristiano. Esto resulta
frustrante para el historiador ya que muchos acontecimientos o etapas vitales en la temprana
formación de estos reinos tuvieron lugar antes de que se comenzara con una correcta labor de
conservación de documentos escritos. Afortunadamente, el estudio de la historia del país
entre el año 400 DC y 600 DC no depende exclusivamente de archivos escritos, y la evidencia
de, por ejemplo, nombre de lugares y restos arqueológicos han transformado nuestra
apreciación del periodo. Nuevos sitios arqueológicos están constantemente saliendo a la luz, y
por más que se ha trabajado mucho aún no se ha escrito todo, por lo que el potencial que la
evidencia arqueológica brinda al estudio del período pos-romano está lejos de agotarse.

Fuentes escritas: Britanos.

El asentamiento de los Anglo-Sajones en la isla y los orígenes de sus posteriores reinos son
cuestiones muy relacionadas, pero no idénticas. La fuente escrita más cercana a nuestros días
que tiene como temática la llegada de los Anglos y Sajones a Britania es la obra homilética “La
Ruina de Britania” (De Excidio Britanniae) que data aproximadamente de mediados del siglo
sexto, en la cual un clérigo britano llamado Gildas analiza los eventos del siglo quinto desde el
punto de vista de uno de los reinos britanos sobrevivientes en la mitad occidental de la isla. El
tema principal en Gildas no resulta ser el advenimiento de los invasores Anglo-Sajones, sino
más bien los pecados de los britanos, que provocaron la ira de Dios y como forma de castigo
este envió a los salvajes piratas germánicos sobre ellos. El autor pinta una imagen donde los
sajones son utilizados por los britanos como soldados federados en la parte oriental de la isla
rememorando a las legiones romanas, de los asentamientos federados que rápidamente
crecieron en tamaño y confianza hasta que fueron lo suficientemente fuertes para derrocar a
sus pagadores y como a causa de ello los sajones sembraron el caos en los desventurados
britanos hasta la famosa victoria de Mons Badonicus (Monte Badon) unos cuarenta y cuatro
años antes de la época en que Gildas escribió. El relato es breve y carente de fechas, es
además claramente inexacto en ciertos puntos, por ejemplo, como considerar a las murallas de
Adriano y Antonino construcciones del siglo cuarto. Gildas confiaba en la tradición oral más
que en los registros escritos y da una versión impresionista de los eventos que habían tomado
lugar antes de su nacimiento; sin embargo, suya es la única narrativa que poseemos para el
período de los asentamientos anglosajones, por lo que ha proporcionado el marco para una
discusión de los eventos del período sub-romano desde el tiempo de Beda en delante.

Aunque Gildas es mejor conocido por su información sobre el advenimiento de los Anglo-
Sajones, su testimonio es igualmente importante para la naturaleza de la sociedad britana en
el siglo sexto cuando estaba escribiendo desde el conocimiento personal. El castigo que recayó
sobre la sociedad fue el foco real de su polémica y entre sus objetivos principales se
encontraban los reyes britanos gobernando en el sudoeste de Inglaterra y Gales.
Estas áreas habían sido parte de la provincia romana de Britania, pero para el siglo sexto poco
parecía sobrevivir del mundo tardío romano excepto la adhesión al Cristianismo (Aunque
según Gildas dicha permanencia en la fe se daba de “mala gana”). El control había pasado a los
reyes a quien Gildas caracterizó como 'tiranos' y cuya base de poder eran las armas de quienes
los seguían. Era una sociedad donde la violencia era endémica. El breve esbozo de Gildas sobre
la sociedad britana occidental durante el siglo sexto es en general concordante con lo que se
puede discernir de las cartas posteriores, las vidas de los santos y los Anales de Gales.
También parece haber habido muchos puntos de similitud entre el ejercicio del poder real en
Gales y en las áreas celtas del norte de Britania, y el gobernante y su partida de guerra son
retratados con una luz bastante diferente, heroica, en el poema “Y Gododdin” que narra una
incursión desastrosa hecha desde el reino de los Gododdin (en el sudeste de Escocia) contra
los Anglos de Bernicia y Deira en un lugar llamado Catraeth.

Los eventos del siglo quinto que Gildas relata, parecen poder reducirse a la afirmación de que
en la parte oriental de la isla aquellos a quienes el poder había regresado después de la
retirada de las legiones romanas intentaron defenderlo (al poder) mediante la contratación de
las fuerzas germanas que finalmente tomaron el poder de ellos, mientras que en la mitad
occidental las circunstancias llevaron al surgimiento de señores de la guerra locales que
llenaron el vacío de poder y establecieron reinos dentro de antiguas civitates romanas.