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Tipos de Célula solar:

La variedad de materiales empleados en la fabricación de células fotovoltaicas y las


distintas tecnologías de fabricación y aplicaciones de la energía fotovoltaica es de tal
amplitud en la actualidad, que se hace necesario clasificarlos de alguna forma, nosotros
establecemos la siguiente:

o Por el tipo de materiales.


o Por estructura interna de los materiales.
o Por estructura de dispositivos.
o Por sus aplicaciones.

Por el tipo de materiales:

Dentro de esta clasificación destacamos 3 tipos:

 De material simple: el material más utilizado es el silicio (Si), aunque también se


utilizan el germanio (Ge) y selenio (Se).
 De compuestos binarios: los compuestos binarios que se han investigado han sido
muchos, aunque lo más habituales han sido: CdTe, AsGa, InP, CdS,…
 De compuestos ternarios: entre otros cabe destacar algunos compuestos como
AlGaAs, y los compuestos de estructura calcopirita basados en el Cu, como
CuInSe2, …

Esta clasificación podría ser casi interminable, puesto que el número de elementos
presentes en una aleación de materiales semiconductores y metálicos puede ser tan
grande como se quiera.

Por la estructura interna del material:

En cuanto a la estructura cristalina interna en que estos materiales se pueden fabricar y


obtener, se puede realizar la siguiente clasificación:
 Monocristalinos: la célula es crecida o procesada como un único cristal. Las más
típicas son Si, AsGa, CdTe… Las células con esta estructura cristalina suelen mostrar
buenas eficiencias pero con elevados costes de fabricación. Ejemplos de células
monocristalinas empleadas en paneles solares podrían ser, por ejemplo, la placa
solar SolarWorld Sunmodule Plus SW290 Mono. La estructura interna de una
célula solar fotovoltaica monocristalina sería como la mostrada en la figura.

 Multicristalinos: estas células sacrifican parcialmente el rendimiento final de la


célula a cambio de una disminución de su coste. La estructura interna está
formada por multitud de granos o monocristales de gran tamaño. La orientación
cristalina de estos granos es totalmente aleatoria.
 Policristalinos: aunque con una estructura basada también en pequeños cristales o
granos, el tamaño de grano en estos materiales es muy inferior al de los materiales
multicristalinos. Ejemplos de células policristalinas empleadas en paneles solares
se podrían encontrar en nuestra sección de placas solares. La estructura interna de
una célula solar fotovoltaica policristalina sería como la mostrada en la figura.
 Dispositivos Híbridos: muchas células modernas se fabrican a partir de capas o
sustratos monocristalinos sobre las que se deposita un segundo material con
estructura policristalina por medio de técnicas de lámina delgada.
 Amorfos: el único material empleado en la actualidad en esta forma es el Silicio,
normalmente con incorporación de hidrógeno en el proceso de fabricación. Uno
de los problemas presentados es la degradación que se produce en su rendimiento
tras los primeros meses de operación. La estructura interna de una célula solar
fotovoltaica amorfa sería como la mostrada en la figura.
ESTRUCTURA BASICA DE UNA CELULA FOTOVOLTAICA.

Sabemos que un fotón puede ser absorbido para crear un par eh. No basta con poner dos
cables a un semiconductor y ponerlo al Sol para que circule una corriente eléctrica. Si lo
hiciésemos lo único que conseguiríamos es que el semiconductor se calentase, ya que los
pares eh que generase la luz desaparecerían en un punto dentro del semiconductor. Para
conseguir la extracción de corriente es necesario fabricar una unión pn que consiste en
fabricar un semiconductor en el que una zona sea de semiconductor tipo n y la otra zona
de tipo p. Esta fabricación no consiste en pegar un semiconductor p a uno n sino que debe
hacerse de manera que la red cristalina del semiconductor no se interrumpa al pasar de
una región a otra. Es necesario pues, el empleo de tecnologías especiales.

Figura 3. Un semiconductor sin estructura pn (izquierda) aunque se ilumine no provoca la


circulación de corriente eléctrica. La unión pn hace posible la circulación de la corriente
eléctrica gracias a la presencia de un campo eléctrico.

La existencia de la unión pn hace posible la aparición de un campo eléctrico en la célula


(con la dirección del lado n al lado p) que separa los pares eh: los huecos, cargas positivas,
los dirige hacia el contacto del lado p lo que provoca la extracción de un electrón desde el
metal que constituye el contacto; los electrones, cargas negativas, los dirige hacia el
contacto del lado n inyectándolos en el metal. Esto hace posible el mantenimiento de una
corriente eléctrica por el circuito exterior y en definitiva el funcionamiento de la célula
como generador fotovoltaico. Otro concepto importante en la estructura de una célula
solar es el concepto que hace referencia a lo que llamamos malla de metalización frontal.
Los contactos metálicos superficiales son necesarios para extraer la corriente eléctrica de
la célula. El metal es un material opaco a la luz, en consecuencia, al menos el contacto
frontal (el del lado de la célula expuesta directamente al Sol) no puede recubrir
completamente la superficie de la célula. Puede pensarse entonces que el contacto frontal
debe ser lo más pequeño (en superficie) posible, pero si se hace excesivamente pequeño
uno de los parámetros de los que hablaremos posteriormente, la resistencia serie,
aumenta y esto significa una pérdida de eficiencia de la célula. Así pues ha de llegarse a
una solución de compromiso para que la superficie del contacto frontal sea lo
suficientemente baja para permitir el paso de la luz del Sol y lo suficientemente alta para
que la resistencia serie de la célula sea tolerable.

La tecnología del Silicio como material de base para la fabricación de células fotovoltaicas,
está sujeta a constantes variaciones, experimentando diferencias importantes según los
distintos fabricantes.

PROCESO DE FABRICACIÓN: De forma muy resumida, el proceso de fabricación de una


célula mono o policristalina se puede dividir en las siguientes fases:
PRIMERA FASE: OBTENCIÓN DEL SILICIO
A partir de las rocas ricas en cuarzo (formadas principalmente por SiO2, muy abundantes
en la naturaleza) y mediante el proceso de reducción con carbono, se obtiene Silicio con
una pureza aproximada del 99%, que no resulta suficiente para usos electrónicos y que se
suele denominar Silicio de grado metalúrgico.

La industria de semiconductores purifica este Silicio por procedimientos químicos,


normalmente destilaciones de compuestos colorados de Silicio, hasta que la
concentración de impurezas es inferior al 0.2 partes por millón. El material así obtenido
suele ser llamado Silicio grado semiconductor y aunque tiene un grado de pureza superior
al requerido en muchos casos por las células solares, ha constituido la base del
abastecimiento de materia prima para aplicaciones solares, representando en la
actualidad casi las tres cuartas partes del abastecimiento de las industrias de fabricación
de células.

Sin embargo, para usos específicamente solares, son suficientes (dependiendo del tipo de
impureza y de la técnica de cristalización), concentraciones de impurezas del orden de una
parte por millón. Al material de esta concentración se le suele denominar Silicio grado
solar.

Existen actualmente tres posibles procedimientos en distintas fases de experimentación


para la obtención del Silicio grado solar, que proporcionan un producto casi tan eficaz
como el del grado semiconductor a un coste sensiblemente menor.
SEGUNDA FASE: CRISTALIZACIÓN
Una vez fundido el Silicio, se inicia la cristalización a partir de una semilla. Dicha semilla es
extraída del silicio fundido, este se va solidificando de forma cristalina, resultando, si el
tiempo es suficiente, un monocristal. El procedimiento más utilizado en la actualidad es el
convencional método Czochralsky, pudiéndose emplear también técnicas de colado. El
Silicio cristalino así obtenido tiene forma de lingotes. También se plantean otros métodos
capaces de producir directamente el Silicio en láminas a partir de técnicas basadas en la
epitaxia, en crecimiento sobre soporte o cristalización a partir de Si mediante matrices.

Se obtienen principalmente dos tipos de estructuras: una la monocristalina (con un único


frente de cristalización) y la otra la policristalina (con varios frentes de cristalización,
aunque con unas direcciones predominantes). La diferencia principal radica en el grado de
pureza del silicio durante el crecimiento/recristalización.

TERCERA FASE: OBTENCIÓN DE OBLEAS


El proceso de corte tiene gran importancia en la producción de las láminas obleas a partir
del lingote, ya que supone una importante perdida de material (que puede alcanzar el
50%). El espesor de las obleas resultantes suele ser del orden de 2-4mm.

CUARTA FASE: FABRICACIÓN DE LA CÉLULA Y LOS MÓDULOS


Una vez obtenida la oblea, es necesario mejorar su superficie, que presenta
irregularidades y defectos debidos al corte, además de retirar de la misma los restos que
puedan llevar (polvo, virutas), mediante el proceso denominado decapado.

Con la oblea limpia, se procede al texturizado de la misma (siempre para células


monocristalinas, ya que las células policristalinas no admiten este tipo de procesos),
aprovechando las propiedades cristalinas del Silicio para obtener una superficie que
absorba con más eficiencia la radiación solar incidente.

Posteriormente se procede a la formación de un unión PN mediante deposición de


distintos materiales (compuestos de fósforo para las partes N y compuestos de boro para
las partes P, aunque normalmente, las obleas ya están dopadas con boro), y su integración
en la estructura del silicio cristalino.

El siguiente paso es la formación de los contactos metálicos de la célula , en forma de


rejilla en la cara iluminada por el Sol, y continuo en la cara posterior. La formación de los
contactos en la cara iluminada se realiza mediante técnicas serigráficas, empleando más
reciente mente la tecnología láser para obtener contactos de mejor calidad y
rendimiento.

El contacto metálico de la cara sobre la cual incide la radiación solar suele tener forma de
rejilla, de modo que permita el paso de la luz y la extracción de corriente
simultáneamente. La otra cara está totalmente recubierta de metal.

Una célula individual normal, con un área de unos 75cm2 y suficientemente iluminada es
capaz de producir una diferencia de potencial de 0.4V y una potencia de 1W.

Finalmente, puede procederse a añadir una capa antirreflexiva sobre la célula, con el fin
de mejorar las posibilidades de absorción de la radiación solar.

Una vez concluidos los procesos sobre la célula, se procede a su comprobación,


previamente a su encapsulado, interconexión y montaje en los módulos.

En cuanto a la eficiencia de las diferentes tecnologías fotovoltaicas se pueden indicar


ciertos valores aproximados. Para el caso del Silicio monocristalino ésta se sitúa en,
aproximadamente entre un 16 y un 25% mientras que en el policristalino actualmente es
del 12-13% siendo posible que se eleve a corto plazo en un nivel similar al alcanzado ya
para el monocristalino.

Como resumen, en relación a la tecnología solar del silicio mono o policristalino, se puede
indicar que su situación es madura, pero no obstante existe un amplio aspecto de posibles
mejoras, muchas de ellas analizadas y verificadas en profundidad en laboratorios.

Otros posibles materiales para la fabricación de células solares es el Silicio amorfo. Esta
tecnología permite disponer de células de muy delgado espesor, lo cual presenta grandes
ventajas. Adicionalmente su proceso de fabricación es, al menos teóricamente, más
simple y sustancialmente más barato. La eficiencia es comparativamente algo menor que
en los casos anteriores (6-8%) y todavía no se dispone de datos suficientes en cuanto a su
estabilidad. Su principal campo de aplicación en la actualidad son los relojes, juguetes,
calculadoras y otras aplicaciones de consumo. Dentro de las aplicaciones energéticas
equivalentes a las de la tecnología del Silicio cristalino, su versatilidad es muy adecuada
para la confección de módulos semitransparentes empleados en algunas instalaciones
integradas en edificios.
Componentes de un panel solar fotovoltaico
TERMINOLOGÍA DE ´PANEL SOLAR´

Un módulo solar o placa solar es mayormente conocido como “panel solar”.

Un “panel solar” puede ser 1) el de la línea de energía térmica para calentar el agua y
afines y 2) el de la generación eléctrica para el trabajo de los artefactos y equipos
eléctricos en general.

Entonces, si deseamos orientar correctamente nuestro objetivo, debemos mencionar


“panel solar térmico” o simplemente “solar térmico” cuando nos referimos a calentar el
agua y “panel solar fotovoltaico” o “solar fotovoltaico” para generar la electricidad.

Los módulos o paneles fotovoltaicos están formados por un cristal o lámina transparente
superior y un cerramiento inferior entre los que queda encapsulado el sustrato conversor
y sus conexiones eléctricas.

La lámina inferior puede ser transparente, pero lo más frecuente es un plástico de tedlar.

Para encapsular se suele añadir unas láminas finas y transparentes de EVA que se funden
para crear un sellado antihumedad, aislante, transparente y robusto.
Veamos con más detalles:

Componentes de un panel solar fotovoltaico

• Cubierta de Vidrio

Vidrio templado y antireflectante con cualidades de transmisión de luz a más de 90%,


resistente a la abrasión e impactos de naturaleza “antibalas”.

Es importante esta cubierta porque reduce significativamente el reflejo, de manera que


entra más luz en la célula solar, lo cual se traduce en una mayor conversión de potencia.

Los fabricantes de paneles se decantan cada vez más por los revestimientos
antirreflectantes y garantizan un óptimo equilibrio entre rendimiento óptico, resistencia y
costes.

Gracias a su aplicación por una sola cara, se consigue también una correspondencia
perfecta entre el índice de refracción del aire y del vidrio, al mismo tiempo que se impide
el desequilibrio entre el índice de refracción del vidrio y de la capa de EVA (etileno vinil
acetato) que algunos usan como revestimientos en ambos lados.

• Láminas de Plexiglás

Mucho más flexible que el vidrio templado pero considerado como “vidrio orgánico”
porque son efectivamente láminas de vidrio polimerizado con resinas y compuestos
acrílicos. Tiene propiedades mecánicas de gran estabilidad a los agentes atmosféricos y
químicos.

• Marco de aluminio o de acero inoxidable

Se usan tornillos y anclajes para asegurar la rigidez del panel en sí. Yo he fabricado con
marcos de madera tornillo totalmente seco para lograr también la rigidez exigida y sobre
todo resistencia a la humedad del ambiente (en caso de madera)

• Células Solares

El corazón del mismo módulo, la razón de su calidad coladas en filas y columnas, unos

seguidos de otros en grupos por panel cuya cantidad varía


ampliamente por la naturaleza y objetivos a rendir su energía desde un simple cargador
de pilas de 1.5V hasta mega producciones tanto en forma independiente como formando
parte de las redes eléctricas convencionales.

Son “galletas” de cristal, variando su forma y tamaño. Comercialmente los más usados
actualmente son los de 3"x6" y los de 6"x6" siendo su espesor al rededor de los 300
micrones (0.012 pulg aprox.) y resistencia frágil a los golpes.
Las ´células solares` están hechas de un material químico que abunda en la corteza
terrestre conocido como SILICIO cuyo símbolo conocido es “Si”.

El silicio es un elemento químico que se encuentra en la naturaleza formando grupo con el


carbono, germanio y el estaño, y es considerado como “no metálico” como el carbono a
excepción del germanio y estaño que sí son metales.

Este silicio no está libre en la Tierra. Se encuentra como óxidos en formas de cuarzo
llamados: Amatista, cuarzo o simplemente ´cristal de roca`.

Cómodamente se dice también que el silicio se encuentra en abundancia en las rocas y en


los minerales.

Vale la pena mencionar que el dióxido de silicio (SiO2) es la fórmula del conocido como
SILICE mientras que el SILICIO (Si) es el símbolo del elemento silicio acotado arriba.

La sílice (SiO2) se encuentra en formas diversas de ´cuarzo`conocida a la vez como


simplemente ´arena` pero todo este interesante conocimiento será motivo de otro
artículo especial.
El silicio en las células solares actúa como fuente de fotoelectrones, y proporciona el
campo eléctrico para separar las carga y crear una corriente. En la superficie de la celda
dirigida hacia el sol la más alta radición solar incidente promedio es de 1000 W/m².

• Plancha Base

Consisten en una simple estructura en forma de caja, en forma de fondo que puede ser de
madera, de alumnio o de vidrio cuyo tamaño varía acorde al número y tamaño de células.

Sobre esta plancha descansan las células pegadas perfectamente con silicona el mismo
que es un perfecto sellador para evitar ingreso de aire, agua o partículas en suspensión
incluso menores al tamaño M10 hacia el grupo de las células mencionadas.

Hay costumbre de algunos hacedores de paneles fotovoltaicos usar como plancha base de
panel, el vidrio con revestimiento de un material polímero termoplástico conocido como
“goma EVA” (Etileno Vinil Acetato)
• Salida línea a tierra

Estar preparado para adversidades atmosféricas sobre todo cuando se instalen más
módulos de mayor potencia porque estamos sujetos a las derivaciones eléctricas.
Obviamente se tiene que utilizar enchufes con ´tomas de tierra`.

• Caja de terminales

Pequeña caja que va asegurada en la parte posterior del panel y cuenta con bornes de
salido para la conexión del panel con otros como batería, regulador o carga directa de
consumo.

Es usado para corriente eléctrica derivada producida por el panel donde está asegurada y
debe ser resistente a cambios de clima rigurosos.

• Diodos de Protección

Protectores de los paneles porque son los “guardianes” para que el flujo de corriente
eléctrica se dirija sólo en una dirección, es decir a donde se le indique menos de retorno a
las células solares o paneles propiamente.

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