USB/MT6511
Mecanismos de acción de los aditivos utilizados en cementación de pozos
M. Rojas, G. Quercia, K. A. Gorrín, K. C. Gorrín, A. Del Toro, N. Vera. Universidad Simón Bolívar. Venezuela
Copyright 2004. USB, Departamento de Ciencia de los Materiales.
Este artículo fue preparado para la presentación de la conferencia sobre Materiales Cementantes
para pozos petroleros, que se efectúo en la sede de la USB, en el Valle de Sartenejas, Caracas,
Venezuela, los días 19 y 26 de mayo del 2004.
Cualquier información adicional se puede obtener en el Departamento de Ciencia de los
Materiales de la Universidad Simón Bolívar.
Resumen
En este artículo se presenta una revisión bibliográfica sobre todo
lo que concierne a los tipos de aditivos utilizados en las lechadas
de cemento para pozos petroleros. Se definen las funciones de
cada uno de los aditivos, así como los mecanismos físicos o
químicos por los cuales actúan cada uno. También se describen
las ventajas y desventajas del uso de diferentes formulaciones y
los efectos multifuncionales o incluso sinergísticos que
presentan muchos aditivos para el cemento petrolero.
Finalmente, se muestra en algunos casos la evolución de los
diferentes aditivos y las recomendaciones de concentración y
uso que se les dan industrialmente.
Introducción
La hidratación del cemento es un proceso que involucra
reacciones químicas complejas y numerosas. Siendo el origen
del cemento, materiales calcáreos y arcillosos cuya química es
netamente inorgánica. En forma general, los constituyentes
fundamentales del cemento son silicatos y aluminatos, que frente
al agua sufren un proceso de hidratación, dando como resultados
compuestos que le dan sus propiedades particulares, como es la
alta resistencia a la compresión. Este proceso de hidratación,
que incluye variables como el tiempo de fraguado y de
espesamiento, además de otras variables como la viscosidad,
densidad, calidad de dispersión y otras propiedades de la lechada
y el cemento fraguado, pueden ser controladas a partir del diseño
adecuado de la lechada, lo cual incluye el tipo y cantidad de
cemento y los aditivos necesarios para el trabajo a realizar. En
cementación de pozos petroleros, es además de relevancia
importancia el tomar en cuenta la formación o geología del hoyo
a cementar y otros aspectos inherentes al pozo para diseñar la
lechada de cemento a utilizar. Puede ser necesario el uso de
aditivos para el control de perdidas de flujo o de circulación o la
necesidad de una determinada densidad para soportar las
condiciones de temperatura y presión del pozo.
Es así como con la utilización de una gama de
productos desarrollados para mejorar las propiedades del
cemento en forma de lechada y fraguado. Estos productos
pueden tener mecanismos de acción diversos. Unos actúan
interviniendo en la química del cemento y por lo tanto en sus
procesos de hidratación y fraguado. Otros aditivos actúan por
mecanismos físicos, dado el carácter iónico de las partículas de
cemento o debido a la necesidad de un aumento de viscosidad o
densidad. Así, son innumerables los posibles diseños de lechada
y las propiedades finales.
Los aditivos utilizados en cemento petrolero son
clasificados por medio de su función, de la siguiente forma:
1. Aceleradores
2. Retardadores
3. Densificantes
4. Dispersantes
5. Agentes de control de pérdida de circulación
6. Extendedores
7. Inhibidores de retrogresión
8. Antisedimentantes
9. Antiespumantes
10. Aditivos Tixotrópicos
11. Antimigratorios
12. Espumantes
13. Agentes de control de filtrado
Resultados
A continuación se presenta de manera condensada los
mecanismos de acción y otros detalles de los diferentes tipos de
aditivos para cemento que se usan en la industria de cementación
de pozos petroleros:
Aceleradores
Los aceleradores son aditivos que ayudan a aumentar la
velocidad de reacción de la etapa de hidratación del cemento
Pórtland. Estos son usados para acortar o acelerar su fraguado.
Los aceleradores no aumentan la resistencia a la compresión
final del cemento, pero si ayudan a desarrollar resistencias a la
compresión de manera temprana. Normalmente son usados para
reducir el tiempo de endurecimiento del cemento a bajas
temperaturas [1]. Los aceleradores son adicionados a las
lechadas de cemento específicamente para disminuir el tiempo
de fraguado en las etapas I y II, que describen el fenómeno de
hidratación del cemento (figura 1) y/o para acelerar el proceso
de endurecimiento de este, en las etapas III y IV. También son
usados para controlar el efecto retardador producido por otros
aditivos adicionados a las lechadas como los dispersantes y los
agentes controladores de perdida de circulación [2]. Entre los
aditivos aceleradores más usados se encuentran ciertas sales
inorgánicas basadas en calcio y en cloro, como por ejemplo el
CaCl2, NaCl; las cuales son las más conocidas. También existen
otras sales utilizadas como aceleradores de fraguado como los
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carbonatos, silicatos, aluminatos, nitratos, nitritos, sulfatos,
diosulfatos y bases alcalinas de sodio, potasio y el hidróxido de
amonio [2, 3, 4, 5].
En el caso de las sales de cloro, la acción aceleradora se
hace más fuerte cuando se pasa de cloruros monovalentes a
bivalentes y trivalentes, así como, con él aumento del radio
atómico del catión que conforma la sal. Estos cationes pueden
ser agrupados en función de su poder de acción aceleradora o
eficiencia en acelerar el fraguado del cemento de la siguiente
manera [2]:
Ca2+>Mg2+>Li+>Na+>H2O
OH->Cl->Br->NO3->SO42->H2O
Adicionalmente, a las sales inorgánicas, existen
también otros compuestos orgánicos pueden producir la
aceleración o disminución del tiempo de fraguado de las
lechadas de cemento. Entre estos compuestos está el formiato de
calcio (Ca(HCOO)2), el ácido oxálico (H2C2O4) y la
trietanolamina (TEA:N(C2H4OH)3). El TEA es un acelerador de
hidratación del las fases aluminosas y un retardador de los
silicatos, esto normalmente no es usado solo, y es combinado
con otros aditivos para contrarrestar un excesivo retraso de
fraguado causado por algunos dispersantes [2].
El cloruro de calcio, es el acelerador más usado tanto
por su economía como por su disponibilidad y es normalmente
usado en concentraciones entre 2 y 4% en peso de cemento
(BWOC) [1,2,3]. A concentraciones mayores al 6% BWOC su
efecto retardador no es bien controlado o predecible[2], por lo
cual se puede producir un fraguado prematuro de las lechadas,
generando problemas en la calidad de los procesos de
cementación primaria. El mecanismo de acción del cloruro de
calcio sobre la velocidad de hidratación de las fases presentes el
cemento es complejo y no esta completamente entendido. Pero
se cuenta con varias hipótesis sobre su acción:
Efectos sobre la hidratación de las fases del cemento: la
disociación de las sales y su difusión en el medio poroso de la
lechada, produce el incremento en la velocidad de hidratación
del sistema C3A y CaSO4.2H2O producto de un mecanismo de
adsorción e intercambio iónico (Ca+2,OH-) [6], acelerando la
aparición de la etringita ([Ca3Al(OH)6)].2(SO4)3.26H2O), cuya
estructura cristalina se muestra en la figura 2. Mientras el C3A,
no consumido por la formación rápida de etringita, se transforma
en monocloroaluminato de calcio (C3A.CaCl2.10H2O), mediante
la siguiente reacción [2,6]:
C3A+CaCl2+10H2OC3A.CaCl2.10H2O
También se determinó que el aumento en la velocidad
de fraguado se produce por la formación de agujas de etringita
muy pequeñas y finas [2]. Otros estudios han demostrado que el
medio ambiente y la concentración de la sal modifican la
cinética de formación de la etringita, produciendo morfologías
diferentes que afectan la velocidad de fraguado de las lechadas
[7] (figura 3). Por otra parte, Tsivilis y colaboradores [8]
reportan que el efecto acelerador del CaCl2 se debe
principalmente a su efecto sobre la velocidad de formación,
disolución, migración y cristalización de la portlandita Ca(OH)2.
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En contraste con estos resultados, entre 1961 y 1966 Stein,
Edwards y Angstadt [2] que el CaCl2 no promueve la hidratación
del C3A, sino que promueve predominantemente la hidratación
del C3S, que posteriormente fue confirmada por estudios
realizados en 1971 por Odler [2], el cual confirmó la hidratación
acelerada de las fases C2S y C3S de forma pura en presencia de
sales de calcio[2].
Cambio en la estructura del gel C-S-H: la hidratación del
cemento Pórtland es controlada por la difusión de agua y
especies iónicas sobre la capa inicial hidratada que se forma
sobre las partículas que conforman el cemento. Por lo cual la
velocidad de hidratación depende de la permeabilidad de esta
capa [2, 9, 10]. Se ha encontrado que el CaCl2 modifica la capa
inicial de hidratación y la floculación de las partículas de gel,
produciendo estructuras muchas más abiertas en las cuales las
especies pueden difundir mucho más rápido, generando un
fraguado más rápido de las lechadas. Se ha encontrado que los
hidratos de C3S y C2S tienen mayor área superficial y presentan
un mayor grado de polimerización del ión silicato en presencia
del CaCl2. Además de modificar la distribución de poros en el
gel [2]. Diversos autores [2, 9, 10, 8] han reportado que la
difusión del ión Cl- es mucha más rápida, debido al menor
tamaño de este, en comparación al Ca+2. Por lo cual este es el ión
que viaja o penetra más rápido en las capas superficiales del gel
CSH, produciendo una contra difusión de los iones hidroxilos
para mantener el balance de cargas. Esta penetración del ión
produce un aumento de la presión interna produciendo la
abertura de la membrana que recubre al gel CSH, acelerando la
hidratación o fraguado del C3S.
Cambio a la composición de la fase acuosa: Otra hipótesis en del
mecanismo de acción del CaCl2 es que este modifica la
alcalinidad del agua, disminuyendo esta y produciendo un
aumento en el contenido de Ca+2 debido principalmente a la
rápida disolución del Ca(OH)2. Se ha encontrado que el aumento
de la solubilidad de la portlandita en la fase acuosa, produce un
incremento en la velocidad de hidratación del C3S[2].
En cuanto al mecanismo de acción de otros aditivos
aceleradores de fraguado se tiene menor literatura puesto que el
CaCl2 es el más usado. Para el NaCl se tiene un mecanismo de
acción similar al explicado anteriormente para el CaCl2, su
acción se debe principalmente a la difusión de los iones de Cl-,
que producen la hidratación temprana del C3S por la formación
de membranas más permeables de gel CSH [6, 10, 9].
El mecanismo de acción encontrado o descrito para el
formiato de sodio, Heikal [5] encontró que la aceleración de la
velocidad de fraguado se debe a la formación de di y
trisulfualumintos de calcio hidratados
(3CaO.Al2O3.CaSO4.32H2O, AFt y
2(3CaO.Al2O3.CaOSO4.12H2O), AFm). También este
retardador produce o intensifica la formación de etringita, la
hidratación del C3A y del -C2S. La alta velocidad de fraguado
se atribuye de nuevo a la formación de precipitados tipo agujas
muy finas de etringita. Por otro lado se demostró que también
que los iones formiatos pueden producir la precipitación de fases
análogas a los AFt y AFm como las fases
C3A.3Ca(HCO2)2.30H2O y C3A.Ca(HCO2)2.10H2O
respectivamente.
 Mecanismos de acción de los aditivos utilizados en cementación de pozos
Otro aditivo no comúnmente usado para acelerar la
hidratación de fase de cemento es el nitrato de calcio, usado
principalmente para aplicaciones a baja temperatura, entre su
mecanismo de acción se tiene que este nitrato forma sales
complejas con los aluminatos presentes en el clinker del
cemento Pórtland, también se encontró que este aditivo también
produce la hidratación acelerada del C2S [4].
Retardadores
Los retardadores o los envenenadores de nucleación
son aditivos que usados para aumentar el tiempo de fraguado de
las lechadas de cementación. Estos no disminuyen la resistencia
a la compresión final del cemento pero si disminuyen la
velocidad en que se logra alcanzar esta. Los retardadores son
usados a altas temperaturas para alargar el tiempo de trabajo y
bombeo de las lechadas. Los retardadores más comunes y más
usados son los lignosulfunatos (figura 4) y los azucares naturales
(figura 5). Los lignosulfunatos son usados hasta temperaturas de
circulación de 200°F (93°C). Los compuestos de azúcar son
usados para temperaturas de circulación que entre los 200 y los
350°F (177°C) [1]. También existen otros compuestos orgánicos
con propiedades retardantes como los como el ácido
hidroxicarboxílico, los organofosfonatos y los derivados de
celulosa. También existen compuestos inorgánicos que
funcionan como retardadores como es el caso del óxido de zinc
(ZnO) usado para retardar lechadas con propiedades
tixotrópicas, los ácidos bórico, fosfórico, hidrofluórico, etc.
También el NaCl a concentraciones mayores de 20 BWOC
tienen propiedades retardadoras del fraguado del cemento
Pórtland [1].
Como en el caso de los aceleradores los mecanismos de
acción de los aditivos retardadores se encuentran todavía en
estudio. Pero de manera general se considera que los factores
principales que afectan su mecanismo de acción se encuentra: la
naturaleza química del retardador y la proporción de fases
(silicatos y aluminatos) en el cemento Pórtland [2, 11, 12, 13].
Existen cuatro teorías propuestas descritas por Nelson [2] para
escribir el mecanismo de acción de estos aditivos:
Teoría de adsorción: propone que el efecto retardador es debido
a la adsorción de la especie retardadora sobre la superficie de los
productos de hidratación, disminuyendo o inhibiendo el contacto
de estas con el agua.
Teoría de precipitación: propone que el retardador reacciona con
los iones de Ca+2 y/o OH- presentes en la fase acuosa,
formando una membrana impermeable e insoluble alrededor de
los granos de cemento.
Teoría de nucleación: propone que el retardador se adsorbe
sobre los núcleos de los productos de hidratación envenenando o
inhibiendo su posterior crecimiento.
Teoría de complexación: donde se propone que los retardadores
producen un efecto de quelación sobre los iones de Ca+2,
evitando la formación de núcleos.
Dichas teoría han sido tomadas y aplicadas en gran
medida para proponer mecanismos de acción en función de la
naturaleza de cada aditivo, por lo cual a continuación se presenta
una breve explicación del mecanismo de acción de cada tipo de
aditivo retardador presentados anteriormente:
3
Lignosulfunatos: El más usados son el lignosulfunatos de sodio
y las sales de calcio de los ácidos lignisulfónicos. Estos son
polímeros derivados de la pulpa de madera y poseen cierta
cantidad de productos a base de sacarosa en su composición, lo
que le atribuye sus propiedades retardadoras debido a la
presencia de estos carbohidratos de bajo peso molecular [2]. Se
agregan en concentraciones entre 0,1 y 1,5 BWOC. Se ha
establecido que estos afectan la cinética de hidratación del C3S.
Esta modificación en la cinética se explica por la aplicación de
la teoría de adsorción y la teoría de nucleación. También se
considera que estos se adsorben sobre la superficie del gel CSH,
incorporándose a la estructura de los hidratos produciendo
cambios de morfología en las membranas exteriores
convirtiéndolas en menos permeables[2]. La figura 6 muestra el
efecto retardador de estos aditivos en función de su
concentración. También se ha observado que los lignosulfunato
disuelto en la fase acuosa de unen de manera electrostática sobre
los iones de Ca+2, disminuyendo la formación de hidróxido de
calcio. El mecanismo de acción descrito para los lignosulfunatos
ha sido corroborado recientemente por diversos investigadores
[11,12 13] conformando las teorías de adsorción en la superficie
del gel CSH y quelación del ión Ca+2.
Ácidos hidroxicarboxílicos: Estos poseen en su estructura
grupos hidroxilo y carboxilo (figura 7). Los gluconatos y los
glucoheptanatos forman parte de este grupo, así como, también
el ácido cítrico, el cual posee fuerte efecto retardante de
fraguado. Este se agrega en proporciones entre 0,1 y 0,3%
BWOC, y es eficiente hasta temperaturas de 300°F (150°C). El
mecanismo de acción retardante de estos aditivos se debe
principalmente a la presencia de especies del tipo -
hidroxicarboxilos y -hidroxicarboxilos (HO-C-CO2H y HO-C-
C-CO2H respectivamente), los cuales tienen efectos quelantes
sobre los iones metálicos como calcio. Adicionalmente estos
grupos se adsorben sobre la superficie de los hidratos del
cemento evitando el crecimiento de los núcleos. Estos aditivos
son más eficientes en cementos con bajo contenido de C3A [2].
Compuestos sacáridos o azucares: Estos compuestos o azucares
son estructuras que contiene cinco anillos funcionales como es el
caso de la refinosa y la sacarosa (figura 5). Estos no son
usualmente usados en la cementación de pozos debido a su
sensibilidad de acción con pequeñas variaciones de
concentración. El principal mecanismo de acción retardadora de
estos aditivos es producto de la hidrólisis alcalina de los
azucares produciendo ácidos sacarínicos que contienen el grupo
-hidroxicarboxil (HO-C-C=O), que se adsorbe fuertemente en
la superficies de gel CSH, inhibiendo el crecimientos de los
núcleos de este [2].
Derivados de celulosa: Los polímeros de celulosas son
polisacáridos derivados de la madera y otros vegetales, los
cuales son estables en medios alcalinos como los encontrados en
las lechadas de cementación. El aditivo a base de celulosa más
usado es el carboximetil hidroxietil celulosa (CMHEC) (figura
8). Este es un retardador efectivo a temperaturas mayores de los
250°F (120°C), y es adicionado a concentraciones entre 0,05 y
0,3% BWOC. El mecanismos de acción retardadora de este se
debe a la adsorción de del polímero sobre la superficie del gel
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CSH inhibiendo su crecimiento y alejándolo del agua de
hidratación [2].
Organofosfonatos: Las sales del ácido alquilen fosfórico (figura
9) son aditivos que también retardan el fraguado de las lechadas
de cemento. Estos son efectivos hasta temperaturas de
circulación de 400°F (204°C) y son adicionados a
concentraciones entre 0,1 y 0,7% BWOC. Una ventaja de estos
aditivos es que son insensibles a los cambios en composición del
cemento así como de producir bajas viscosidades en las lechadas
de alta densidad. Este actúa, al igual que los otros retardadores,
mediante la adsorción de este sobre la superficie del gel CSH
inhibiendo su crecimiento[2].
Densificantes
Los agentes densificantes son usados para formular
lechadas con pesos mayores a 17,5 lb./gal (2097 Kg./m3) las
cuales serian difícil de bombear sin este tipo de aditivos. Estas
lechadas de alta densidad se utilizan cuando se esta en presencia
de zonas de alta presiones de fondo [1, 14, 15]. Cuando se
requieren este tipo de lechadas se adicionan estos aditivos los
cuales poseen alta gravedad específica. Un buen agente
densificante debe cumplir con los siguientes requisitos [2]:
La distribución del tamaño de partículas debe ser compatible con
la del cemento (figura 10). Las partículas gruesas tienden a
segregarse en la lechada, mientras que las que son muy pequeñas
tienden a aumentar la viscosidad a valores en los cuales las
lechadas no pueden ser bombeables. Sin embargo, en la última
década se han logrado producir lechadas con granulometrías
controladas de diferente tamaño, sin producirse el riesgo de
segregación de las mismas [15, 14]
El requerimiento de agua de estas debe ser bajo.
Deben ser inertes con respecto al proceso de hidratación del
cemento así como compatible con los otros aditivos presentes en
las formulaciones de las lechadas de cemento.
Los materiales más usados como aditivos densificantes
para lechadas de cementación son la arena de sílice (SiO2), la
Ilmenita (FeTi2O3), la Hematita natural (Fe2O3) y la barita
(BaSO4), cuyas principales propiedades se observan en la tabla
1. La concentración en que se adicionan estos aditivos varia en
función de la densidad deseada y el requerimiento de agua
(figura 11) [2].
El primer agente densificante utilizado fue la arena de
sílice, que a pesar de poseer bajo peso específico (2,63) se
utiliza algunas veces como densificante. Esto es posible debido a
que la arena de sílice no requiere la adición de agua extra a la
lechada. Esta arena tiene pocos efectos en la resistencia o
bombeabilidad de las lechadas, pero puede causar superficies
altamente resistentes en el cemento. Debido a la tendencia a
formar cementos de alta dureza se utiliza para la formulación de
tapones de cemento en hoyos abiertos o para asentar
herramientas para la construcción de perfiles direccionales [3]
En el caso de la Ilmenita hay que realizar un ajuste
adecuado de la viscosidad de la lechada para evitar la
sedimentación al igual que para la Hematita, a la cual para evitar
su sedimentación hay que utilizar una cantidad mayor de
dispersante, esto también se utiliza debido a que esta aumenta la
viscosidad de las lechadas.
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La barita es un densificante menos eficiente debido que a
pesar de su alto peso específico (4,33), se necesita agregar una
cantidad de agua adicional para humectarla por lo cual su
efectividad como densificante se ve disminuida. El mecanismo
de acción de estos aditivos es sencillo, pues se trata de
materiales que solo funcionan como agregados entre las
partículas de cemento para darle mayor peso [2]
Dispersantes
Una buena lechada de cemento tiene una alta concentración
de sólidos que puede llegar al 70% [2]
La reología de la suspensión esta íntimamente relacionada
con la reología del líquido base, por cuanto es necesario
controlar estos los factores que interviene en ésta. Para lograr
una buena interacción entre las partículas de la suspensión y el
fluido, así como llegar a distribuir los sólidos en la lechada es
necesario el uso de dispersantes. Esto es necesario, debido a la
fuerte interacción que existe entre las partículas de cemento, que
les permite formar agregados y en presencia de agua flocular [2].
Los agentes dispersantes son adicionados a la lechada
de cemento para cambiar las propiedades reológicas de la misma
y actúan como reductores de fricción o como se les conoce en la
industria: súper-plastificantes. Lechadas dispersadas tienen baja
viscosidad y pueden ser bombeadas en régimen turbulento a
bajas presiones, minimizando la potencia requerida y la
probabilidad de pérdida de circulación y un fraguado prematuro.
Los dispersantes más utilizados en las lechadas de cemento son
basados en polímeros y sales de sodio [16].
Los dispersantes poliméricos más utilizados son los
sulfonatos, que son estructuras orgánicas altamente ramificadas
que actúan contribuyendo con sus cargas negativas al
rompimiento de la floculación de los granos de cemento. Entre
los más comunes de estos aditivos se tienen el Polinaftaleno
sulfonato (PNS) y las Polimelaminas sulfonatos (PMS).
El primero es uno de los más efectivos dispersantes que
se conoce y el segundo es ampliamente usado en cementos de
construcción. El PNS puede tener una gran variedad de grados
de ramificación y de pesos moleculares. Normalmente se usan
en concentraciones menores al 4% BWOC [2]. La efectividad
de este tipo de aditivos, depende sin embargo de las
características del cemento. Los diferentes grados de cemento
tienen diferentes comportamientos reológicos frente a la adición
de PNS. Otros aditivos de esta familia que son altamente
efectivos son los lignosulfonatos, ampliamente usados en lodos
de perforación y polisacáridos de bajo peso molecular. No
obstante, estos aditivos pueden tener efectos secundarios en las
lechadas como su acción retardadora, por lo que no deben usarse
a bajas temperaturas. Entre los polisacáridos más utilizados se
tienen las celulosas, el Poli-óxido de etileno (POE), el Polivinil
alcohol y Poliglicoles. Incluso, estructuras no poliméricas como
los ácidos carboxílicos también pueden actuar como dispersantes
eficientes, pero con el cuidado también de que su acción
retardante es importante. Normalmente estos aditivos
poliméricos se agregan en proporciones de 0.3 a 0.5 lb./saco de
cemento [16].
Como se verá más adelante muchos de estos aditivos
poliméricos son utilizados en para el control de pérdidas de
fluido, debido a sus excelentes propiedades formando geles.
 Mecanismos de acción de los aditivos utilizados en cementación de pozos
El mecanismo de acción de los dispersantes, esta
relacionado a las características químicas del cemento. Cuando
el cemento es mezclado con agua, las partículas de éste pueden
interactuar electrostáticamente, formando agregados. Las
interacciones electrostáticas que se producen entre las partículas
se deben a que éstas tienen en su superficie cargas positivas y
negativas. Las cargas positivas de una partícula interactúan con
las cargas negativas de otra y viceversa, formándose los
agregados antes mencionados. El dispersante es básicamente un
polianión que actúa como apantallador de las cargas positivas de
las partículas, impidiendo que exista interacción y por lo tanto
aglomeración. Los policationes podrían funcionar bajo el
mismo principio apantallando las cargas negativas, pero no
pueden apantallar el calcio (Ca++) libre que también se encuentra
en las formulaciones de cemento y que pueden formar puentes
electrostáticos con las cargas negativas de las partículas [2] (Ver
Figura 12).
Bajo el mecanismo físico de apantallamiento, actuan
todos las familias de dispersantes presentados anteriormente,
dependiendo su efectividad de las estructuras y por lo tanto la
fuerza de su ión negativo.
Las sales de sodio, especialmente NaCl, pueden actuar
como dispersantes al producir aniones que funcionan como
apantalladotes de las cargas de las partículas de cemento, en
concentraciones que van de 1 a 16 lb/saco de cemento [16].
Desde el punto de vista reológico, cuando existe una
deformación en el flujo tal que se pueden romper las
interacciones y las partículas se dispersan disminuye la
viscosidad de la lechada. La velocidad a la cual se rompen los
agregados es el punto de cedencia.
La idea del uso de dispersantes es precisamente hacer
que la fase agregada de cemento sea mínima y la fase dispersa
máxima, con el fin de disminuir el punto cedente y la viscosidad
de la lechada, lo que se traduce en una mayor capacidad de
bombeo [2,16, 17].
Agentes de control de circulación
Cuando se observan pérdidas durante o después de una
perforación brusca o un cambio repentino en la formación, esto
significa que puede haber fracturas naturales presentes (Ver
figura 13) [18]. Esto puede deberse a la que la formación sea
altamente porosa, presente fracturas, cavernas o drusas
La pérdida de circulación en la cementación de pozos
ocurre con frecuencia debido a la presencia de zonas con
fracturas o cavidades que originan pérdida de presión
hidrostática. Un gran número de materiales se aditivan a las
lechadas con el fin de controlar e incluso prevenir la pérdida de
circulación. [17,18]. Estos materiales se pueden clasificar en:
fibrosos, granulares, lamelares y semisólidos.
Los materiales fibrosos incluyen el uso de aserrín y
astillas de madera, fibras de nylon. Estos materiales se agregan
en proporciones de 1/4 a 1/8 lb./saco, sin requerir adición de
agua por su presencia. Muchos de estos materiales,
especialmente si son de origen natural no son convenientes para
el cemento debido a que contienen sustancias que pueden actuar
como retardadores del fraguado del cemento, por lo que su
adición debe ser controlada, así como sus efectos colaterales. El
5
mecanismo de acción de este tipo de materiales es bastante
simple, ya que actúan de manera física contribuyendo al
taponamiento de las zonas incompletas o agrietadas, favorecido
esto por la adherencia con la formación [2, 16].
Los materiales granulares más utilizados son la
gilsonita, microesferas de plástico, conchas de nueces y semillas
de algodón. Entre todos el mejor resultado lo brinda la
gilsonita, que puede ser utilizado en proporciones entre los 5 a
50 lb./saco con una adición de agua de 2 gal/lb. de gilsonita.
Este aditivo actúa como entendedor, lo que provee propiedades
muy convenientes en las lechadas. Otros aditivos efectivos
pero que están dentro del tipo de materiales lamelares son las
hojuelas de celofán que se usan en proporciones que van de 1/8 a
2 lb./saco de cemento, sin adición de de agua. El tamaño de
estas hojuelas puede llegar a 1 cm y su espesor normalmente
0.02 a 0.06 mm. Las semillas de algodón pueden ser utilizadas
de igual manera que las hojuelas de celofán, para casos de
pérdidas de circulación muy graves.
Los materiales granulares y lamelares actúan formando
un entramado o aglomeración en la cara de la fractura de la
formación, proporcionando igual que los fibrosos, especies de
tapones que solventan el problema de pérdida de circulación.
Una opción que entra dentro de lo que se conoce como
aditivos semisólidos son las formulaciones de cementos gypsum,
cementos bentoníticos y cementos con silicatos de sodio. Estas
formulaciones se agregan al cemento petrolero a utilizar como
parte de la lechada en cantidades que pueden llegar al 20%,
necesitando la adición extra de agua. En el caso del uso de
silicatos es necesario mezclar éstos con agua antes de agregar el
cemento [16].
Este tipo de cementos, inducen un comportamiento
tixotrópico, es decir cambian el comportamiento reológico de la
lechada, provocando que en las zonas de pérdida de circulación,
donde las velocidades del fluido disminuyen y por lo tanto la
tasa de corte. Allí se forma una especie de gel que obstruye la
fractura o caverna y la sella. De igual forma actúan otros
aditivos como la bentonita en combustible diesel y algunos
aditivos poliméricos como celulosas entrecruzadas, como es el
caso de la Hidroxietil celulosa (HEC), Carboximetil hidroxietil
celulosa (CMHEC) y el Polivinil alcohol [16]. Estos geles se
logran debido a la formación de redes transitorias que pueden
deshacerse a grandes tasas de corte o velocidades de flujo.
Actualmente la tendencia es el uso de fluidos lo menos
contaminantes posible, por cuanto el diesel usado como base
para mezclar la bentonita, usualmente es sustituido por aceites
vegetales que son más amables con el ambiente. El gran reto de
las compañías que fabrican estos productos es precisamente
producir los aditivos más efectivos, al menor costo y con el
menor daño ecológico asociado.
Extendedores
Son comúnmente usados para desarrollar una o ambas
de las siguientes propiedades en las lechadas:
Reducir la densidad de la lechada: Una reducción en la densidad
de la lechada, reduce la presión hidrostática durante la
cementación. Esto ayuda a prevenir la pérdida de circulación
induciendo la falla de formaciones débiles.
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Aumentar la fluidez de la lechada: Los extendedores reducen la
cantidad de cemento requerido para producir un volumen dado
de producto solidificado. Esto resulta en una gran economía.
Los extendedores pueden clasificarse en tres categorías,
dependiendo del mecanismo reducción de densidad/incremento
de fluidez. Frecuentemente, más de un tipo de extendedor es
usado en la misma lechada [2].
 Extendedores base agua: Extendedores similares al
barro y varios agentes viscosificantes (base agua) permiten
añadir exceso de agua para lograr la extensión de las lechadas.
 Agentes disminuyentes de la densidad: Las densidades
de los materiales en estas variadas categorías son mas bajas que
las de Cemento Pórtland (3,2 g/cm3). Entonces, la densidad de la
lechada es reducida cuando cantidades significantes de
extendedores parecidos son presentes.
 Extendedores gaseosos: Nitrógeno o aires son usados
para producir cementos espumados, con densidades
excepcionalmente bajas, aún con suficiente resistencia a la
compresión. La preparación y posicionamiento de sistemas de
cementos parecidos son complejos [2].
Barros: El término barro se refiere a materiales compuestos
mayormente de uno o mas barros minerales. El extendedor base
barro que se usa mas frecuentemente es la bentonita, también
conocida como gel, la cual contiene al menos 85% del barro
mineral smectita, también llamado montmoritonita. La smectita,
NaAl2(AlSiO10)(OH)2, esta compuesta de dos hojas planas de
sílica tetraédrica y en el medio de ellas una hoja de alumina
octaédrica. La bentonita tiene la propiedad de expandir su
volumen cuando es colocada en agua, lo que resulta en una
viscosidad alta, esfuerzo de gel y habilidad para suspender
sólidos. La bentonita es añadida en concentraciones sobre el
20% BWOC. Por encima de 6%, la adición de un dispersante se
hace necesaria para reducir la densidad de la lechada y el
esfuerzo de gel. La API recomienda que se añadan 5,3% de agua
adicional (BWOC) por cada 1% de bentonita, par todos los tipos
de cementos de la API. Sin embargo, se debe hacer una prueba
para determinar el contenido de agua óptimo. La densidad de la
lechada disminuye y la fluidez aumenta rápidamente con la
concentración de bentonita. Igualmente, la permeabilidad del
cemento se incrementa con la concentración de bentonita. Por lo
tanto, cementos parecidos son menos resistentes a las aguas
sulfatadas y fluidos corrosivos, sacrificando también el esfuerzo
a la compresión. Altas concentraciones de bentonita tienden a
mejorar el control de la pérdida de fluido. Además, la bentonita
es un extendedor efectivo a elevadas temperaturas. Altas
concertaciones de Ca2+, en una fase de la lechada, inhibe la
hidratación de la bentonita.
Silicatos de sodio: Como extendedores, los silicatos reaccionan
con la cal en el cemento o con el cloruro de calcio, para formar
un gel de silicato de calcio. La estructura del gel provee la
viscosidad suficiente para permitir el uso de grandes cantidades
de mezclas de agua sin excesiva separación de agua libre. Este
es un proceso totalmente distinto del exhibido por los
extendedores tipo barro, el cual absorbe agua. Los silicatos de
sodio son los extendedores mas frecuentemente usados y están
disponibles en forma sólida o líquida. Una ventaja mayor que
presenta el silicato es su eficiencia, la cual facilita el almacenaje
USB/MT6511
y la manipulación. Sin embargo, por su tendencia a acelerar,
tienden a reducir la efectividad de otros aditivos, en particular
los retardadores y los agentes que evitan la perdida de fluidos. El
silicato de sodio sólido es normalmente seco con el cemento. Si
es añadido a una mezcla de agua fresca previo a la separación de
la lechada, el gel puede no formarse, a menos que se añada una
porción de cloruro de calcio. La concentración recomendada de
Na2SiO3 está entre 0,2–3% BWOC, la cual provee una densidad
de 14,5 y 11 lb/gal. Si el cloruro de calcio ha sido incluido en la
lechada, debe añadirse una mezcla de agua antes de que el
silicato de sodio obtenga suficientes propiedades extendedoras.
Otros materiales pueden ser añadidos en cualquier momento.
Puzolánicos: Los puzolánicos son tal vez el grupo mas
importante de extendedores de cemento y son definidos de
acuerdo con la designación ASTM C-219-55 como sigue: “Un
material de sílica o aluminio el cual, en si, posee poco o no
posee valor de cementación, pero que finalmente en forma
dividida y en presencia de humedad, reaccionará químicamente
con hidróxido de calcio a temperaturas ordinarias para formar
compuesto que poseen propiedades cementantes. Entonces, los
puzolánicos no sólo extienden los sistemas de Cemento
Pórtland, además reaccionan y contribuyen al esfuerzo de
compresión del producto solidificado. Hay dos tipos de
puzolánicos: Los puzolánicos naturales que incluyen cenizas
volcánicas y tierra con sedimentos fósiles; y puzolánicos
artificiales como lo son por cierto las cenizas ligeras. Cuando un
agente puzolánico está presente en el cemento, la sílica se
combina con el Ca(OH)2 para formar un compuesto cementante
estable, el cual es muy duradero. La permeabilidad del sistema
cemento/agente puzolánico fraguado es usualmente menor que
0,001 md, si el sistema no es extendido a través de adición de
una gran cantidad de agua. La baja permeabilidad del cemento
fraguado, también como decrece el contenido de hidróxido de
calcio libre (Ca(OH)2), resiste el ataque de aguas sulfatadas y
otros agente corrosivos.
Tierras con residuos fósiles: Las tierras con residuos fósiles
están compuestas de esqueletos de silicio de de fósiles
depositados, proveniente de tierras frescas o agua de mar. El
principal componente de las tierras con residuos fósiles es ópalo
y formas amorfas de sílica hidratada conteniendo más de un 10%
de agua. Para usarse como un extendedor puzolánico, las tierras
con residuos fósiles es fundamentada en el acercamiento de la
finura de las partículas a las del Cemento Pórtland;
consecuentemente, el material tiene una gran área superficial y
una demanda de agua alta. Las tierras con residuos fósiles
imparten propiedades a la lechada que son similares a las
lechadas de bentonita; de igual forma, no incrementa la
viscosidad de la lechada. La desventaja principal de este tipo de
extendedor es su costo. Las típicas propiedades de las lechadas y
el comportamiento de las lechadas de tierras con residuos fósiles
son mostrados en la tabla 2.
Cenizas livianas (fly ashes): Las cenizas son el residuo de
plantas de energía, las cuales queman carbón pulverizado. Estas
cenizas son llevadas en gases como partículas fundidas, las
cuales solidifican en forma de esferas ásperas. El mayor
constituyente de las cenizas es el vidrio, compuesto en su
mayoría de sílica y alumina con un poco de oxido de hierro, cal,
etc. La composición y propiedades de las cenizas pueden
 Mecanismos de acción de los aditivos utilizados en cementación de pozos
cambiar salvajemente dependiendo de la fuente de carbón y la
eficiencia de la planta de energía, acorde con que la gravedad
especifica de la ceniza puede variar. Acorde con las
especificaciones de la ASTM, hay tres tipos de cenizas
reconocidas; tipo N, F y C.
El tipo F es que se usa más comúnmente. Para mezclas de
Cemento Pórtland con cenizas de este tipo se acostumbra a
agregar un 2% de bentonita, para mejorar las propiedades de las
lechadas y evitar el desarrollo de aguas libres. La ceniza tipo C
tiene menos silicato y contiene más de un 10% de cal. El uso de
este tipo de cenizas es relativamente nuevo, ya que la cantidad
de cal tiene efectos sobre la reología que deben ser
cuidadosamente monitoreados. Algunas cenizas tipo C son
suficientemente cementantes para ser usadas como principal
componente de un cemento. El desarrollo de la resistencia a la
compresión es más rápido que el que generalmente se observa en
los sistemas de Cemento Pórtland convencional. (Ver tabla 3)
Cementos comerciales de bajo peso: Los cementos petroleros
comerciales, son formulaciones especiales compuestas de
Cemento Pórtland y agregados de silicio de bajo peso,
consecuentemente algunas actividades puzolánicas ocurren. La
distribución del tamaño de partículas de cementos semejantes es
muy fina y la densidad normal de la lechada está en el rango de
11,9 a 13,7 lb/gal (1,43 a 1,64 g/cm3).
Sílica: Dos formas de sílica son usadas en cementos de pozos:
cuarzo y vapores de sílica condensados. La sílica como cuarzo-a
es usada más comúnmente en la prevención de resistencia a la
retrogresión cuando los sistemas de Cemento Pórtland son
posicionados en pozos térmicos. Dos tamaños de partículas son
usados rutinariamente; arenas de silicio con un tamaño de
partícula promedio de cerca de 100 m y harina de silicio con
un tamaño de partícula promedio de 15 m. La principal razón
por la cual estos materiales son usados raramente para extender
la lechada, es su costo. Los vapores de sílica condensados
(llamados también microsílica), es un producto secundario de la
producción de silicona, ferrosilicona y otras aleaciones de
silicona. Las partículas individuales son microesferas amorfas y
vidriosas. El tamaño de partículas está entre 0,1 y 0,2 m, cerca
de 50 y 100 veces mas fino que el Cemento Pórtland o cenizas
livianas y por consecuencia el área superficial es
extremadamente alta (15.000 a 25.000 m2/Kg.). Los vapores de
sílica condensados son altamente reactivos y debido a su pureza
y finura es un material puzolánico más efectivo comúnmente
disponible. El alto grado de actividad puzolánica ha permitido la
introducción de sistemas de cemento de baja densidad con un
alto desarrollo de resistencia a la compresión. La alta área
superficial de los vapores de sílica condensados, incrementan la
demanda de agua para preparar una lechada bombeable. Por ello,
pueden ser preparadas lechadas con densidades tan bajas como
11 lb/gal (1,32 g/cm3), la cuales tendrán muy poca, o no tendrán
agua libre. La concentración normal de este material es cerca de
15% BWOC, de igual manera, sobre el 28% BWOC es posible
su uso. La finura de las partículas de los vapores de sílica
condensados también promueve una mejora en el control de
pérdida de fluido. Quizás se deba por la reducción de la
permeabilidad del filtro inicial de cemento. Por esta razón,
también es usado para la prevención de la migración de fluido
7
por el anular. También es introducido como fuente de sílica en
sistemas de cementos térmicos.
Partículas de peso ligero: Los extendedores de partículas de
peso ligero reducen la densidad de la lechada porque ellos bajan
la densidad con respecto a las partículas de cemento. Ellas
incluyen perlita expandida, carbón pulverizado, gilsonita, y
también microesferas de vidrio o cerámica. Como una regla
general, en esta categoría los extendedores son inertes ante la
matriz de cemento.
Perlita expandida: La perlita es un vidrio volcánico presionado
el cual se expande cuando es calentado sobre el punto de fusión
incipiente. Una pequeña cantidad de bentonita (2%) es
agregada para prevenir la segregación de las partículas de
perlitas por la lechada. La perlita expandida contiene poros
abiertos y cerrados y una matriz. Sobre la presión hidrostática
los poros abiertos son ocupados con agua y algunos de los poros
cerrados son presionados y como resultado la perlita resulta más
pesada. Por ello, para preparar una lechada con perlita expandida
la cual tiene una densidad dada en el fondo del pozo, es
necesario mezclar una lechada de menor densidad en la
superficie.
Gilsonita: El agua que es requerida por la gilsonita es baja cerca
de 2 gal/ft3, entonces es posible preparar sistemas de cemento de
de baja densidad los cuales desarrollen alta resistencia a la
compresión. El uso de la gilsonita no es recomendado en pozos
con temperaturas estáticas sobre 300 ºF (149ºC).
Carbón pulverizado: Como extendedor, el desempeño del carbón
pulverizado es muy similar al de la gilsonita. Su gravedad
específica es ligeramente mayor que la de la gilsonita . Igual que
la gilsonita, es frecuentemente cono u material que previene la
pérdida de circulación. A diferencia de la gilsonita, el carbón
pulverizado tiene un punto de fusión 1.000 ºF (538ºC), el cual
permite el uso de este material en ambientes de pozos térmicos.
Microesferas: El extendimiento de las lechadas de cemento
usando microesferas es un desarrollo relativamente reciente. Las
microesferas son pequeñas cuentas llenas de gas las cuales
tienen una gravedad especifica entre 0,4 y 0,6. Gravedades
especificas bajas semejante permiten la preparación de de
cementos de alta resistencia y baja permeabilidad con
densidades tan bajas como 8,5 lb/gal (1,02 g/cm3). Hay dos tipos
de microesferas disponibles: de vidrio y de cerámica. Una
limitación importante en las microesferas es su inhabilidad de
resistir altas presiones hidrostáticas, por lo que no puede ser
usado en pozos profundos. Los sistemas de cemento con
microesferas requieren un especial cuidado en el diseño y la
mezcla. Es importante mencionar que las microesferas no se
separan de las partículas de cemento durante el proceso de
mezclado. La microesferas debe mezclarse secas con el cemento
y no ser premezclarlas en agua. Cualquier variación en el radio
de las microesferas, para el cemento resultará en densidades
errática durante el mezclado. Las microesferas son compatibles
con cualquier clase de cemento.
Nitrógeno: El cemento espumado es un sistema en el cual el
nitrógeno, como medio reductor de densidad, s incorporado
directamente en la lechada para obtener un cemento de baja
densidad. Este sistema requiere el uso de lechadas de cemento
base especialmente formulada para crear un sistema homogéneo
8 M. Rojas, G. Quercia, K. A. Gorrín, K. C. Gorrín, A. Del Toro, N. Vera
con alta resistencia a la compresión y baja permeabilidad. El
nitrógeno permite la preparación de sistemas de cemento
competentes con densidades tan bajas como 7 lb/gal
(0,84 g/cm3). El diseño , preparación y posicionamiento del
cemento espumado es suficientemente complejo para garantizar
una separación dedicada enteramente al objetivo.
Inhibidores de retrogresión
Agentes espesantes son usados en el Cemento Pórtland para
incrementar la densidad de la lechada e inhibir la retrogresión.
Estos materiales, en general, son partículas químicamente inertes
las cuales tienen una alta gravedad específica. Estos no afectan
el tiempo de espesamiento de la lechada de cemento, pero
pueden mejorar significativamente la resistencia a la compresión
[2].
Los agentes espesantes son predominantemente usados para
combatir altas presiones en el fondo de los pozos. La harina de
silica es comunmente usados en formulaciones de cemento sobre
los 230 ºF para combatir el esfuerzo de retrogresión . Es usado
un agente espesante en algunos casos. El uso de disperantes es
aconcejado para reducir el volumen de la mezcla de agua
requerida para mezclar el cemento con agentes espesantes.
1. CA-HT/S100: 100 redes de silica para incrementarla
densidad de la lechada y eliminar el esfuerzo de retrogresión
(>230° F.).
2. CA-HT/S200: La harina de silica para incrementar la
densidad de la lechada y elimina los esfuerzoz de
retrogresión (>230° F.).
3. CA-WH1: Se usa la hematite como agente espesante en un
grado de, S.G.= 4,95, Se requiere agua adicional mara
humedecer.
4. CA-WH1-C: Un agente espesante de grado basto, S.G.=
4,95, un poco de agua extra se necesita para humedecer.
5. CA-WI1: Agente espesante ilmenita, S.G.=4,45, no se
necesita agua adisional.
6. CA-WB1: Agente espesante barite, S.G.= 4.20, una mezcla
de agua adicional es requerida para humedecer.
Antisedimentantes.
Los agentes antisedimentantes son agregados para
mantener uniformes las concentraciones de cemento y agua, es
decir, para mantener las condiciones de la lechada homogéneas
en todo el tramo a cementar. Los agentes antisedimentantes
tienden a modificar el valor de la resistencia a la compresión
(disminuyendo los valores reológicos del preparado de
cemento), sin alterar las condiciones de bombeo de la lechada.
El efecto principal de estos aditivos consiste en mantener a
diferentes presiones y temperaturas la formulación de la lechada
inicial, de manera que se posean las mismas propiedades
cementantes en toda la profundidad del pozo. Ejemplos de estos
materiales se muestran a continuación:
- Bentonita: posee la habilidad de absorber grandes
cantidades de agua, previniendo las diferencias de concentración
en la lechada. De esta manera, se tienen composiciones más
homogéneas. Posee un efecto de sinergismo con respecto a la
aditivación en el caso de extendedores.
Agua de mar y Silicatos: promueven la estabilidad de la
USB/MT6511
lechada, disminuyendo los cambios en la separación de fases.
Las sales metálicas contenidas en estos compuestos promueven
la formación de hidróxidos en la lechada, lo cual tiende a reducir
los valores de agua excedente en la mezcla cementante. Algunos
de los aditivos de esta familia presentan sales de níquel y
magnesio cloradas (NiCl2 y MgCl2), los cuales contribuyen a la
estabilización de la lechada formando una débil estructura
tridimensional que interactúa con los hidróxidos.
Compuestos orgánicos base silicona: estos compuestos
han demostrado una gran habilidad para absorber moléculas
pequeñas, que junto a un efecto hidrofóbico pueden mantener la
lechada a condiciones de sedimentos constantes, repeliendo el
agua que se encuentre fuera del sistema, y manteniendo la
densidad constante a lo largo de la formación por el efecto de
aislamiento.
Los compuestos tipo bentonita, agua de mar y silicatos
son agregados a la preparación en el momento de realizar la
mezcla cemento-agua. De esta manera se aprovechan sus
propiedades adicionales como aditivo (en especial para el caso
de la bentonita, la cual resulta un agente extendedor). Para los
compuestos base silicona su elevado costo hace que sean
aplicados a modo de recubrimiento aislante sobre la formación,
de manera que se prevenga el filtrado de agua desde la
formación hacia la lechada y viceversa. Estos aditivos resultan
mucho más efectivos en el mantenimiento de la formulación
inicial de la lechada, ya que evitan el intercambio acuoso entre la
mezcla cementante y el medio, además, presentan un alto efecto
antiespumante, por lo que resultaría un medio efectivo para
combatir dos efectos.
La eficiencia del antisedimentante puede ser evaluada
midiendo el gradiente de densidad en una columna de cemento.
Pequeñas muestras pueden ser sacadas de la parte superior,
central e inferior de la columna. La diferencia en peso entre las
muestras muestra el grado de deposición o sedimentación
presente en la mezcla, así como la absorción o migración de
agua entre la lechada y el medio. Con esta diferencia en la
composición de la lechada se pueden determinar propiedades a
compresión, permeabilidad, así como puntos de falla en la
estructura en función del fraguado y porosidad final del
recubrimiento cementante.
Antiespumantes
La adición de múltiples aditivos en una lechada puede
hacer que esta tienda a espumarse en exceso, disminuyendo su
resistencia a la compresión y aumentando la permeabilidad del
recubrimiento cementado, mediante un mecanismo de
gelificación (o formación de geles). Este tipo de material
conducirá a la pérdida de la presión hidráulica en los sistemas de
bombeo.
Aunado a lo anterior, la entrada de aire a la mezcla de
cemento puede originar un aumento considerable en la densidad
de la lechada (el aire se comprime al descender por la formación,
en especial si este se encuentra en la superficie del material
cementante), por lo que se tendrá un gradiente de volumen a lo
largo del foso, el cual podrá traer por consecuencia una
diferencia en las propiedades térmicas, de permeación y
mecánicas en el espacio anular.
El mecanismo de acción de los agentes antiespumantes
 Mecanismos de acción de los aditivos utilizados en cementación de pozos
se basa en dos principios: en primer lugar, se disminuye la
tensión superficial de la mezcla, de manera que se ejerza una
fuerza menor que impida la adición de aire y la formación de
burbujas (se busca liberar con facilidad el aire adicionado a la
lechada en los mezcladores). En segundo lugar, se altera la
dispersión de los sólidos (haciéndola más cerrada), de manera
que se impida la entrada de aire en la interfaz sólido-líquido.
En general, las características que debe presentar un
antiespumante para ser considerado efectivo son las siguientes:
- Debe ser insoluble en el sistema espumado, esto es, no
debe cambiar su composición química ni alterar sus propiedades
(densidad, tamaño de partícula, estructura química, etc.).
- Debe presentar una tensión superficial menor que el
sistema espumado. De esta manera, y por la regla de las mezclas,
se consigue disminuir la tensión superficial de la lechada y así se
libera el aire incluido por efectos de mezclado.
Existen dos maneras de añadir el aditivo a la lechada.
La primera consiste en distribuir el antiespumante sobre la
superficie de la lechada, formando una capa superior sobre la
espuma, y la segunda consiste en agregar el aditivo a la
preparación, para que este luego migre por efecto de la densidad
a la superficie. Como el aditivo impide la retención de aire en la
mezcla, la cantidad de espuma se minimiza.
En cementación se utilizan dos clases de
antiespumantes: poliéteres glicólicos y siliconas. Las
concentraciones usadas de estos aditivos son sumamente bajas
(en promedio se utiliza un 0.1% en peso de la mezcla acuosa).
Poli (propilen-glicol) es el aditivo utilizado con más frecuencia
debido a su bajo costo, pero siempre debe ser añadido al sistema
antes de realizar el mezclado, por lo que el cálculo del
porcentaje en peso debe ser preciso. La experiencia en campo ha
mostrado que la adición vía distribución post-mezclado resulta
ineficiente a bajas concentraciones, e incluso se ha llegado a
observar el asentamiento de la espuma bajo el aditivo.
Las siliconas son en comparación aditivos más
efectivos. Ellas son consideradas como suspensiones de
partículas finas de sílica dispersas en poli (dimetil-siloxano) o
polímeros similares. Emulsiones de agua en aceite del 10% al
30% también pueden ser usadas como agentes dispersantes. La
ventaja de utilizar este aditivo radica en que puede ser agregado
en cualquier fase de la mezcla, con una buena eficiencia de
disolución de espuma.
Aditivos tixotrópicos
Toxotropía es un término usado para describir la
propiedad exhibida por ciertos sistemas que fluyen bajo un
efecto de cizalla, pero desarrolla una estructura de gel que se
convierte autosuficiente cuando se encuentra en reposo. En
términos prácticos, las lechadas tixotrópicas de cemento son
delgadas y fluidas durante el mezclado y el desplazamiento, pero
rápidamente forma una estructura de gel autosuficiente rígida
cuando cesa el bombeado. En reagitación, la estructura de gel se
rompe y la lechada vuelve a ser fluida y bombeable. Entonces, al
cesar el esfuerzo de corte, el gel reaparece y la lechada regresa a
su estado autosuficiente. Este tipo de comportamiento reológico
es continuamente reversible con cementos tixotrópicos reales.
Como una regla, el comportamiento de las lechadas
9
tixotrópicas bajo esfuerzo de corte es tipo Bingham;
consecuentemente, su comportamiento es definido por un valor
de fluencia ( y) y una viscosidad plástica ( p). El punto de
fluencia se exhibe solamente en el retiro del esfuerzo de corte. Si
pasa un lapso de tiempo, se requerirá una fuerza más grande que
la indicada por el punto de fluencia para poner el fluido en
movimiento, como se muestra en las figuras 14 y 15. La
diferencia entre la “fuerza de gel” y el punto de fluencia da una
medida del “grado de tixotropía” del fluido.
El sistema de cemento tixotrópico tiene varias
aplicaciones importantes. Son frecuentemente usados en pozos
donde el excesivo retroceso de la columna de cemento ocurre
comúnmente y para tratar la perdida de circulación durante la
perforación. Otros usos incluyen los siguientes: reparar grietas o
corrosión en el revestidor, como lechadas guías para
cementación remedial cuando es difícil obtener una presión que
prense, en circunstancias donde se desea que la lechada se
inmovilicé rápidamente y para prevenir migración de gas.
Varios sistemas de cementos tixotrópicos corrientes
existen. La química y las consideraciones operacionales
especiales de cada uno se describen a continuación.
Sistemas a base de arcilla: El sistema de cemento Pórtland
contiene arcillas que se hinchan con agua (como la bentonita)
desarrollando fuerza de gel, y exhibiendo algún grado de
comportamiento tixotrópico. La concentración de bentonita y la
densidad de la lechada pueden variar de 0,05 a 2,0 % BWOC y
de 11,5 a 21,0 lb/gal (1,4 a 2,5 g/cm3), respectivamente.
Sistemas a base de sulfato cálcico: El material más ampliamente
usado para preparar lechadas tixotrópicas de cemento es el
sulfato de calcio hidratado (CaSO4 · ½H2O o CSH1/2). Cuando
este material es añadido al cemento Pórtland, primero se hidrata
para formar yeso (CaSO4 · 2H2O o CSH2), luego reacciona con
aluminato tricálsico (C3A) para formar un sulfoaluminato
cálcico hidratado llamado “estringita”. La ecuación química para
la reacción se muestra a continuación.
3CaS04·2H20 + 3CaO·A12O3
3CaO·A12O3·3CaSO4·32H20 (etringita)
La estringita esta formada por cristales, los cuales se
depositan sobre la superficie de los granos de cemento. La
presencia de estos cristales promueve una gran asociación física
entre las partículas de cemento, resultando en la formación de
una red suelta o gel. En agitación, la red se rompe fácilmente , y
la lechada regresa a su estado fluido. La mayoría de los
cementos Pórtland pueden usarse para preparar cementos
tixotrópicos con sulfato cálcico hidratado. Dependiendo del
cemento, la concentración óptima de CSH1/2 varía entre 8 y 12 %
BWOC. Cementos con un contenido de C3A menor al 5% no
deben ser usados, porque la cantidad de estringita que puede
cristalizar no s suficiente para impartir tixotropía. El
requerimiento de agua para lechadas con contenido de sulfato de
calcio hidratado es mayor que para el de sistemas
convencionales; consecuentemente, la densidad de las lechadas
es menor.
Los sistemas de sulfato de calcio hidratado tienen
cualidades adicionales además de la tixotropía. Tales sistemas
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son altamente resistentes a sulfatos, porque el C3A se neutraliza
con eficacia. También, después de fijar, la estringita continúa
formándose; como resultado, una significativa cantidad de
expansión de la masa ocurre dentro de la matriz del cemento.
Sistemas de sulfato de aluminio/sulfato de hierro (II): Un aditivo
integrado por una mezcla de Al2(SO4)3 y de FeSO4, también
confía en la formación del estringita para impartir la tixotropía
en las lechadas de cemento. Fue desarrollado para el uso con los
cementos Pórtland que contienen menos del 5% C3A. El material
es también eficaz con los cementos que no son de tipo Pórtland,
tales como cemento de la clase J. Puede ser provisto en forma
líquida, que es conveniente para las operaciones costa afuera.
El sulfato de aluminio reacciona con el hidróxido de
calcio en la mezcla de cemento para formar la estringita.
2 A1(OH)4¯ + 3SO42¯ + 6Ca2+ + 12OH
3CaO·A12O3·3CaSO4·32H2O
La cinética de la reacción anterior es mucho más rápida que las
observadas con el sulfato de calcio hidratado. El sulfato de
aluminio es un acelerador de gran alcance del cemento, y un
agregado solamente. El sulfato de hierro (II), un retardador débil
del cemento, se incluye en el sistema para inhibir al sulfato de
aluminio y para preservar la tixotropía a través del tiempo de
bombeo. Debido a la rápida cinética de este sistema, se forma
poca estringita después de que el cemento fija. Así, la expansión
significativa del cemento no se observa excepto a temperaturas
de curado por debajo de 100°F (38°C).
Sistemas de polímeros de celulosa entrecruzados.: Los
cementos tixotrópicos pueden prepararse por la adición de
polímeros entrecruzados solubles en agua y de un agente de
reticulación. La hidroxietilcelulosa (HEC), el carboxymetil
hidroxietil celulosa (CMHEC), polivinil alcohol, y los varios
polímeros sulfonados se pueden reticular con ciertos quelatos de
titanio o de circonio. La óptima combinación de
polímero/entrecruzante, y las concentraciones relativas de cada
uno, varían dependido de la temperatura del pozo.
Antimigratorios de gas
La migración de gas es un problema que aparece en las
operaciones de perforación y cementación de pozos petroleros,
principalmente durante la perforación de zonas con gas
superficial y presencia de gases agrios como el H2S y el CO2
[23, 24]. La migración de gas se produce principalmente por
varios factores tales como: presencia de fluidos de formación en
el anular, desbalanace de presión en la cara de la formación que
produce la introducción de gases, exceso de agua libre en las
lechadas que generan zonas de menor presión favoreciendo la
invasión, el desarrollo de fuerzas de gel tempranas, perdida de
fluidos a la formación produciendo deshidratación de las
lechadas y perdida de volumen o encogimiento producto del
proceso de hidratación del cemento portland [25] Los aditivos
utilizados para controlar la migración de gas se emplean para
contrarrestar los factores antes mencionados y su mecanismo de
acción depende de su naturaleza y efectividad. Para controlar la
migración de gas se debe mantener una presión positiva sobre la
cara de la formación lo cual se logra mediante tres mecanismos
USB/MT6511
principales [25,26]: alterando las características de la lechada,
bloqueo mecánico de los caminos o espacios de migración o
incrementando la magnitud de la presión aplicada sobre la cara
de la formación. Las vías para incrementar la presión de la
formación incluyen el aumento de la presión desde la superficie
o el incremento de la densidad de la columna de fluido del
anular [25]. Los principales aditivos utilizados para controlar la
migración de gas son los que producen alteraciones en las
características de las lechadas y estos se clasifican en función de
su acción o efecto [25,26]:
Perdida de control de filtrado: Son aditivos que
previenen la pérdida de agua hacia la formación de las lechadas
y cuyo mecanismo de acción se describió con anterioridad.
Lechadas tixotrópicas: son aditivos utilizados para
producir efectos o comportamientos tixotrópicos sobre las
lechadas de cemento produciendo fuerzas de gel lo
suficientemente altas para evitar la invasión de gases durante el
fraguado de las lechadas, entre los aditivos utilizados se
encuentran: 1) los sistemas a base de arcillas como la bentonita a
una concentración de 0,05 a 2% BWOC; 2)el sulfato de calcio
(CaSO4.1/2H2O) el cual reacciona con el agua formando yeso
que posteriormente reacciona con las fases presentes en el
cemento promoviendo la formación de etringita que promueve
una alta asociación física entre las partículas de cemento
promoviendo altas fuerzas de gel y este se usa entre 8 y 12%
BWOC; 3)mezclas de sulfatos de aluminio y hierro (Al2(SO4)3 y
FeSO4) los cuales son utilizados normalmente con el cemento
tipo “J” en aplicaciones costa afuera, estos sulfatos al igual que
los sulfatos de calcio promueven la formación de etringita y el
efecto tixotrópico mediante la reacción de estos con la
portlandita; 4) agentes puentiantes poliméricos solubles en agua
tales como la hidroxietil celulosa (HEC),
carboximetilhidroxicelulosa (CMHEC), polivinil alcohol y
varios polímeros sulfonatados junto con quelatos de titanio y
circonio [26].
Demoradores de fuerza de gel: se usan aditivos para
demorar la o extender el tiempo de hidratación de las lechadas lo
más posible para así evitar la migración de gas debido
hidratación temprana y la perdida de presión hidrostática,
generalmente son aditivos difíciles de controlar y entre estos se
encuentran los aditivos tixotrópicos y los supresores de fuerza de
gel los cuales son copolímeros o mezclas de estos que demoran
el desarrollo de fuerza de gel y cuyo mecanismo de acción no se
conoce del todo [25,26].
Aumento en la compresibilidad por la generación o
entrenamiento de gas: son aditivos generalmente usados en
aplicaciones de cementos espumados tales como nitrógeno,
esferas de vidrio, polvo de aluminio entre otros, los cuales
tienen el efecto de producir lechadas energizadas en conjunto
con el uso de espumantes y sufactantes comúnmente usados en
las aplicaciones de cementación de pozos [23, 25, 26]
Expansión del cemento durante el fraguado: son
aditivos utilizados para evitar o contrarrestar la disminución de
volumen durante la hidratación de cemento, entre estos se
encuentran: 1) el uso de sulfato de calcio (yeso) explicado
anteriormente; 2) NaCl y/o Na2SO4 que producen una
expansión del cemento debido a la cristalización de especies en
la red de poros del cemento, 3) puzolanicos que tienen el mismo
 Mecanismos de acción de los aditivos utilizados en cementación de pozos
efecto expansivo debido a especies hidratadas en los poros, 4)
MgO que al hidratarse produce hidróxido de magnesio o brucita
(Mg(OH)2) en la porosidad agregándolo en concentraciones que
varían desde 0,25 hasta 1% BWOC [25, 26, 27,28].
Disminución de la permeabilidad durante la
hidratación: se utilizan aditivos polimerícos como monomeros
tales como látex, vinilacetato, vinilcloruro, acrílicos, acronitrilo,
estireno, butadieno entre otros. Específicamente son emulsiones
con tamaños de partículas entre 200 y 500nm y 50% de sólidos
solubles en agua. Estos se ubican alrededor de las partículas del
gel CSH disminuyendo la porosidad y la generación de grietas
durante el fraguado, su concentración varía dependiendo del su
naturaleza y del sistema al cual se esta utilizando [23, 25, 26].
Espumantes.
El principal aditivo para lograr la espumación del
cemento consiste en la adición o inyección de nitrógeno puro a
la lechada de cemento, con lo cual se reduce la densidad del
preparado. El sistema requiere el uso de formulaciones
especiales que creen una matriz de cemento homogénea, con una
buena resistencia a la compresión y baja permeabilidad.
El nitrógeno permite la preparación de sistemas de
cemento con buenas propiedades mecánicas cuya densidad
oscila entre las 7 y 15 lb/gal, pero se requiere que las burbujas de
gas sean estabilizadas con surfactantes y estabilizantes (agentes
que ayudan a la emulsificación del cemento, manteniendo la fase
líquida como un contínuo, mientras que la fase gaseosa se
encuentra dispersa en esta). Una mala inyección o mezclado del
nitrógeno hará que la espuma colapse rápidamente, formando 2
fases en el anular, y trayendo por consecuencia la pérdida de la
cementación, debido al descenso en las propiedades permeables,
aislantes y de compresión de la lechada [2].
La calidad de la espuma formada se mide como un
cociente entre la relación de volumen de gas añadido entre el
volumen total de la lechada. A mayor calidad de la espuma,
mayor cantidad de gas se ha logrado añadir efectivamente al
sistema, por lo que la densidad del cemento tiende a reducirse.
Con esto, se tienen lechadas livianas, con una alta adherencia al
sustrato, fácil bombeo, baja conductividad térmica y bajo costo,
que usualmente se utilizan en las zonas menos profundas del
pozo. El problema de adicionar nitrógeno a la lechada radica en
la pérdida de la calidad en las profundidades, por efecto de la
presión y la compresibilidad del gas, alto costo operativo,
dificultad en el mezclado del proceso y estricto control en la
reología de la mezcla. Además, la adición de surfactantes puede
disminuir el radio de acción de otros aditivos y disminuir las
condiciones de cementación.
El nitrógeno puro es de bajo costo e inerte, por ello se
ha desplazado el uso de otros gases como agentes de
espumación. Además resulta no tóxico y de fácil manejo por
parte de los operarios (se transporta en tanques a presión, los
cuales facilitan la inyección del gas a la lechada), siendo este un
material no contaminante, por lo que la interacción con el medio
resulta apropiada según las normas de conservación del
ambiente.
11
Controladores De Filtrado:
Los controladores de filtrado minimizan la pérdida de
agua desde la lechada hacia la formación permeable. Esto ayuda
a mantener las propiedades de la lechada de cementación
durante la colocación, hasta fraguar el cemento.
Cuando la lechada del cemento es colocado a través de
una formación permeable bajo presión, ocurre el proceso de
filtración. La fase acuosa de la lechada migra hacia la formación,
dejando las partículas del cemento atrás. Este proceso se conoce
como perdida de fluido, el cual, de no ser controlado, podrían
ocurrir serias consecuencias, induciendo a la perdida de la
cementación. Como el volumen de la fase acuosa disminuye, la
densidad de la lechada aumenta, originando divergencias en el
desempeño de la lechada (reología, tiempo de fraguado), en
función a sus condiciones originales. Si suficiente cantidad de
fluido migra a la formación, la lechada comienza a ser no
bombeable.
La velocidad de perdida de fluido API para una lechada
de cementación bien hecha, generalmente excede los 1500 ml
/30 min. Para mantener un adecuado desempeño de la lechada de
cementación, la velocidad de perdida de fluido API
frecuentemente requerida es menor a 50 ml / 30 min. Para
alcanzar dicha reducción de velocidad de perdida de fluido, en el
diseño de la lechada se incluyen materiales “controladores de
filtrado”.
En la actualidad, el mecanismo de acción de estos
aditivos no esta comprendido completamente, sin embargo, se
conoce como ocurren varios procesos, una vez iniciado la
pérdida de fluido a la formación, una capa porosa de cemento
sólido es depositada en la superficie de la formación. Los
controladores de filtrado disminuyen la velocidad de filtrado
porque reducen la permeabilidad de la capa porosa de cemento y
/o por incrementar la viscosidad de la fase acuosa.
Dos clases de aditivos principales existen: materiales de
partículas finamente divididas y polímeros solubles en agua. La
naturaleza química y física de cada tipo de material y sus
hipotéticos mecánicos son discutidas a continuación.
Materiales de partículas finamente divididas: El primer
aditivo para el control del filtrado para lechadas de cementación
fue bentonita [2]. Por el pequeño tamaño de sus partículas, la
bentonita puede penetrar la capa porosa de cemento y
depositarse o alejarse entre las partículas del cemento. Como
resultado de ello, la permeabilidad de la capa porosa de cemento
disminuye. Además, sistemas de partículas semejantes como los
poderosos carbonatos, sulfatos, resinas termoplásticas, etc., son
usadas para controlar la perdida de fluido.
Se conoce que cementos látex presentan excelente
control del filtrado de fluido. Su celda o enlaces son emulsión de
polímeros, usualmente son suministrados como suspensiones
lechosas de partículas de polímeros esféricas pequeñas
(generalmente entre 200 y 500 m de diámetro). Más
dispersiones látex contiene sobre 50 % de sólido. La bentonita,
por su pequeño tamaño de partícula, actúa físicamente como
tapones en los pequeños poros de la capa de cemento porosa de
la superficie de la formación.
Las más comunes practicas para una buena
cementación son aquellos de cloruro vinilo, acetato polivinilo y,
12 M. Rojas, G. Quercia, K. A. Gorrín, K. C. Gorrín, A. Del Toro, N. Vera
más recientemente, estireno-butadieno. Los dos primeros
materiales están limitados por temperaturas por debajo de los
122°F(50°C). Estireno-butadieno látex ha sido a temperaturas
mayores a 350°F (176°C).
Polímeros solubles en Agua: Los polímeros solubles en
agua son considerados como agentes controladores de filtrado
desde principios de 1940, cuando fueran usados por primera vez
como fluido de perforación. Hoy este tipo de material son
ampliamente empleados como agentes controladores de filtrado
en la lechada para cementación de pozos.
En términos generales, ellos operan de forma
simultánea en el incremento de la viscosidad de la fase acuosa y
en la disminución de permeabilidad de la capa porosa de
cemento en la formación.
La viscosidad de una solución polimérica depende de la
concentración y del peso molecular, puede haber una viscosidad
de 500cP, pero la viscosidad de una solución de la misma
concentración pero de alto peso molecular de HEC, puede llegar
a estar por encima de 50000cP. Esta alta viscosidad ciertamente
podría disminuir la velocidad de filtrado, sin embargo, esta
estrategia no puede ser aplicada en sí como agente controlador
de filtrado porque sería imposible mezclar la lechada.
La reducción de permeabilidad de la capa porosa de
cemento en la formación es el parámetro más importante a
considerar en el control de filtrado. Cuando la lechada contiene
suficiente agente controlador de filtrado para proporcionar una
velocidad de pérdida de fluido API de 25ml / 30min, el resultado
en la capa porosa de cemento es aproximadamente 1000 veces
menos permeable que lo obtenido para una lechada limpia sin
aditivos., mientras que, la velocidad del agua intersticial
incrementa, cuando mucho, 5 veces. [2].
El tamaño de los poros de la capa de cemento en la
formación puede ser determinado como mercurio por poro
simetría. La distribución de tamaño muestra que el tamaño
promedio es de 1 Mm. El radio típico de rotación de una
molécula de polímero es menor a 1000 A (0,1 mm); por lo tanto,
sólo un grupo de moléculas podrían ser suficiente para obstruir
un poro de la capa de cemento porosa en la formación. Los
polímeros solubles en agua pueden formar enlaces coloidales
débiles unidos en la solución, los cuales son suficientemente
estables para formar construcciones en la capa de cemento en la
formación. Algunos polímeros pueden también adsorber en la
superficie de los granos del cemento, reduciendo de esta forma
la medida de los poros. Probablemente, una superposición de
estos dos fenómenos, adsorción y unión, es el verdadero
mecanismo de acción de los agentes poliméricos controladores
de filtrado.
La lechada de cementación que contiene polímeros
solubles en agua podrían ser dispersantes en la pozo para obtener
un control de filtrado optimo. Polímeros aromáticos sulfatados o
sales son casi siempre añadidos en conjuntos con estos
materiales. Los dispersantes mejoran el empaquetamiento de los
granos de cemento (y quizás la unión de polímeros) en la capa
de cemento en la formación. De esta manera, los dispersantes
reducen la permeabilidad de la capa de cemento y puede
suministrar algún grado de control de filtrado en ellos mismos.
Sin embargo, se debe mantener atención en que sobre dispersión
USB/MT6511
y sedimentación de la lechada puede mejorar artificialmente los
resultados de la prueba de pérdida de fluido API.
Diversos tipos de polímeros solubles en agua han sido
identificados como útiles como agentes controladores de
filtrado. Las propiedades químicas y el desempeño de cada uno
de ellos son discutidos.
Derivaciones Celulosas: El primer polímero usado
como un agente controlador de filtrado fue una proteína extraída
desde la semilla de una habichuela. Rápidamente carboximetil
hidroxietil celulosa (CMHEC) fue introducida como un aditivo
para el control de filtrado de la lechada de cementación,
empleada hasta la actualidad.
El funcionamiento de CMHEC ha sido mejorado por
grados de sustitución (DS) desde 0.1 hasta 0.7 (carboximetil) y
la relación de moles de óxido de etileno y anhidro glucosa (MS)
desde por encima de 0.7 hasta por encima de 2.5.
al es tártaro.
El más común aditivo controlador de fluido es el
hydroxietil celulosa (HEC), con un DS en el rango entre 0.25 y
2.5. A altos pesos moleculares, el HEC es usado para lechadas
de baja densidad (2% viscosidad de solución, 180 cP). HEC,
tanto en el pozo como con hidroxi propil celulosa (HPC), con un
rango de DS por encima de 0.9 hasta 2.8, y un rango MS por
encima de 1 hasta 6, son considerados aditivos controladores de
filtrado cuando son usados en conjunto con un alto peso
molecular de goma Xantano (MW 2.000.000). Todo aditivo de
control de filtrado celuloso presenta cierta desventaja. Ellos son
efectivamente viscosos en agua, como resultado, ellos pueden
incrementar la dificultad de mezcla de la lechada, y en última
instancia causando una viscosificación de la lechada de
cementación. A temperaturas por debajo de los 150F (65C), los
aditivos celulosos son eficientes retardadores, de esta manera,
este inconveniente debe ser considerado como una sobre-
retardación de la lechada.
Polímeros Sintéticos no iónicos: Polivinil pirrolidona
(PVP) puede ser usado con dispersante condensado naftaleno
sulfonato. También se conoce que la acción de controlar el
filtrado mejora adicionando con CMHEC.
Mezclas complejas conteniendo polivinil pirrolidona,
ha sido reportados como eficientes aditivos controladores de
filtrado. En adición, N-vinil pirrolidona puede ser
copolimerizado con estireno sulfonato para formar un producto
con propiedades de control de filtrado satisfactorias.
Poli (vinil alcohol) (PVAL) es frecuentemente usado como un
aditivo de control de filtrado. Este material es particularmente
ventajoso para aplicaciones a bajas temperaturas, por debajo de
100F (38C), porque no tiene efectos retardadores y es
compatible con aceleradores como el cloruro de calcio. Es
importante observar el efecto asociado al umbral de la curva,
cuando el rango de concentración es muy corto, la velocidad de
pérdida de fluido disminuye desde 500ml/30min hasta
20ml/30min.
Polímeros Sintéticos Aniónicos: El gran grupo de
polímeros aniónicos agentes controladores de filtrado es
compuesto de terpolimeros derivados de acrilamida.
Poliacrilamida es no iónica y no es usado en la lechada de
cementación por esa razón. El poliacrilamida parcialmente
hidrolizada contiene varias proporciones de ácido acrílico (AA)
 Mecanismos de acción de los aditivos utilizados en cementación de pozos
o unidades de acrilato si es frecuentemente añadido en el lodo de
perforación; sin embargo, de la fuerte interacción entre el grupo
carboxilo y la superficie de los granos de cemento,
frecuentemente resulta en la retardación de la fraguado, lo cual
dificulta su uso en la lechada de cementación de pozos. Sin
embargo, algunas aplicaciones han sido reportadas usando un
material con una baja relación AA/Am, sobre 0.1.
Los copolímeros de acrilamida más frecuentemente descritos en
la literatura contienen un monómero sulfonato: ácido 2-
acrilamido-2-mehtylpropanonesulfonico (AMPS). La AMPS ha
sido copolimerizado con los siguientes materiales para producir
agentes controladores de filtrado:
 Acrilamida (AAm)
 N,N-dimethylacrylamide (NNDMA)
 Terpolimeros de AMPS son también usados, como se
describe a continuación:
 AMPS + AAm + ácido itaconico (IA)
 AMPS + AA + N-methyl-N-vinyl acetamide (NMVA)
 AAm + vinyl sulfonate + NMVA
 AA (AAm) + NMVA + AMPS.
AMPS puede ser parte de un copolímero o de un
terpolímero, asociado con acrilonitrilo, NNDMA o AA. Estos
complejos polímeros son empleados por ser eficientes en la
lechada salada.
El Sulfonato poli (vinyl aromáticos) tal como sulfonatados
poliestireno (SPS) y sulfonatado polivinil tolueno (SPVT) han
sido identificados como frecuentes agentes controladores de
filtrado. Una mezcla de SPVT, PNS y un copolímero
sulfonatado de estireno y anhídrido maléico es un sistema
efectivo como agente controlador de filtrado [2].
Polímeros Catiónicos: Poli(etileniminas), es un ejemplo
de un polialquilenos poliaminas la cual ha sido muy utilizada
como aditivo controlador de filtrado. Su estructura es probable
que sea altamente ramificada, por lo tanto, los tres grupos de
aminas (primaria, secundaria y terciaria) podrían ser presentadas
en la cadena.
Una asociación insoluble es hecha entre los dos
polímeros para crear partículas proveen control de la perdida de
fluido.
La principal desventaja del poli(etileneimina) como un agente
controlador de fluido es su eficacia a altas temperaturas. El
poli(etilenenimina) provee excelentes propiedades de control de
perdida de fluido a altas temperaturas, alrededor de 436F
(225C). Una notable desventaja del poli(etileniminas) es su
tendencia a promover la sedimentación de la lechada. Aunque la
sedimentación es evitable, la designación de la lechada puede ser
muy compleja.
Polialquilaminas ha sido reportada como un efectivo
agente controlador de filtrado. En lugar de continuar creando la
cadena, un grupo de aminas se guinda. Este material también
puede ser insignificantemente enlazado para disminuir la
sedimentación de la lechada.
Conclusiones
Los mecanismos de acción de los aditivos para cemento
petrolero pueden ser diversos, desde mecanismos físicos debido
a propiedades como la adherencia o por mecanismos químicos,
13
como la inhibición de la hidratación. Estos mecanismos pueden
ser muy complejos o bastante simples, además que la mayoría de
los aditivos presentan multifuncionalidad, proporcionando varios
efectos, unas veces deseados y otras no tanto.
Es necesario tomar en cuenta esto a la hora de usar un aditivo en
especifico para solucionar un problema de la cementación en
particular o mejorar propiedades, ya que normalmente es
necesario hacer un balance de propiedades y establecer un
compromiso entre el efecto deseado o provocado por el aditivo y
el efecto secundario, en algunos casos no muy conveniente.
Finalmente hay que señalar que muchos son los esfuerzos por
mejorar las propiedades del cemento petrolero y por lo tanto, los
aditivos utilizados en sus formulaciones, sin embargo la
orientación de estos esfuerzos debe estar dirigida también a
producir el menor efecto ecológico, dado el impacto que de por
si tiene la industria de explotación petrolera en el medio
ambiente. Los aditivos deben ser no solo económicos y
efectivos, sino también poco agresivos, para así tener un valor
real.
Agradecimientos
Los autores agradecen a la Universidad Simón Bolívar por el
apoyo brindado para la realización de este trabajo y su
contribución para el desarrollo de nuestras investigaciones.
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 Mecanismos de acción de los aditivos utilizados en cementación de pozos 15

Figura 4: Estructura básica de los lignosulfunatos [2]

Figura 1: Caracterización del proceso de hidratación del

cemento Portland [2].

Refinosa

Figura 2: A) Estructura cristalina de la etringita, celda unitaria

de una columna, B) Representación del plano entre columnas de Sacarosa
etringita [7]
. Figura 5: Estructura básica dos azucares naturales, refinosa y
sacarosa respectivamente [2]

Efecto retardador del lignosulfunato

Cemento clase G (15.5 lb/gal)
Tiempo de espesamiento (hr)

Concentración del retardador (% BWOC)

Figura 6: Efecto retardador de los lignosulfunatos [2]

Figura 3: Morfología de las agujas de etringita A) sin aditivos,

barra=20m, B) en ácido arábico, barra=2m C) en rojo
Alizarin, barra= 20 m [7].
16 M. Rojas, G. Quercia, K. A. Gorrín, K. C. Gorrín, A. Del Toro, N. Vera USB/MT6511

A) B) Densificación de lechadas de cemento con varios agentes

densificantes
Hematita
H2O: 32% BWOC

Densidad de lechada (lb/gal)

Ilmenita
H2O: 35% BWOC

Barita

44% H2O+0.024 gal H2O/lb barita

Figura 7: Estructura molecular de algunos retardadores lechada con contenido de
hidroxicarboxílicos, A) ácido cítrico, B) ácido glucónico [2] di t PNS 0 5% (BWOC)

Concentración de densificante (%BWOC)

Figura 11: Esquematización de la densificación de lechadas con

diferentes agentes densificantes [2].

Figura 8: Estructura molecular del CMHEC [2].

Figura 12: Esquematización de las interacciones entre las

partículas de cemento y los polianiones y el Ca++ [2].

Figura 9: Estructura molecular del los alquilenfosfonatos [2].

Sílice Cemento Cemento

Hematita
Densificantes
Estabilizadores

Figura 10: Esquematización de incorporación de densificantes

en las lechadas de cemento [15].

Figura 13: Representación esquemática de la pérdida de

circulación en pozos [18].
 Mecanismos de acción de los aditivos utilizados en cementación de pozos 17

Figura 14: Comportamiento reológico generalizado de fluidos

tixotrópicos [2].

Figura 15: Presión de bombeado y tasa de flujo para fluidos

tixotrópicos [2].