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Factores que Favorecen y se Interponen en

el Establecimiento de la Alianza Terapéutica


en Terapia de Familia y Pareja*
Factors that Foster and Intervene in the Establishment
of a Therapeutic Alliance in Family and Couples Therapy
Fatores que Favorecem e se Interpõem no Estabelecimento
da Aliança Terapêutica na Terapia de Família e de Casal

CAMILA BERMÚDEZ
CARMEN ELVIRA NAVIA
Universidad Nacional de Colombia, Bogotá, Colombia

Resumen Abstract Resumo


La alianza terapéutica (AT) es uno de los factores Prior research shows that there is a robust re- A aliança terapêutica (AT) é um dos fatores co-
comunes que ha recibido mayor soporte empí- lationship between the Therapeutic Alliance muns que vem recebendo maior suporte empí-
rico en relación con el resultado terapéutico. En (TA) and the results of therapy. Developing the rico com relação ao resultado terapêutico. Acaba
terapia de familia y pareja resulta más complejo TA is more difficult in family and couples ther- sendo mais complexo desenvolver a AT na tera-
desarrollar la AT que en la individual. Mediante apy than in individual therapeutic processes. pia de família e de casal do que na individual.
entrevistas semiestructuradas a consultantes y Semi-structured interviews with patients and Mediante entrevistas semiestruturadas a consul-
terapeutas, se exploraron los factores que ellos therapists were used to explore the factors they tantes e terapeutas, exploraram-se os fatores que
relacionaban con el desarrollo de la AT. El aná- believed to be associated with the development eles relacionavam com o desenvolvimento da AT.
lisis de contenido mostró que la participación of TA. Content analysis showed that the follow- A análise de conteúdo mostrou a participação
voluntaria y comprometida de los consultantes, ing factors, among others, foster TA: the volun- voluntária e comprometida dos consultantes, o
el asumir responsabilidad por el problema, el tary and committed participation of the patients, assumir responsabilidade pelo problema, o con-
confiar en la terapia, el desear cambiar y la con- assuming responsibility for the problem, trusting fiar na terapia, o desejar mudar e a congruência
gruencia entre intervención y expectativas hacia the therapist, wishing to change, and the coher- entre intervenção e expectativas à terapia, entre
la terapia, entre otros factores, favorecen la AT. ence between intervention and expectations. outros fatores, favorecem a AT.

Palabras clave: alianza terapéutica, terapia de Keywords: therapeutic alliance, family therapy, Palavras-chave: aliança terapêutica, terapia de
familia, terapia de pareja, resultado terapéutico. couples therapy, therapeutic results. família, terapia de casal, resultado terapêutico.

Cómo citar este artículo: Bermúdez, C. & Navia, C. E. (2013). Factores que favorecen y se interponen en el establecimiento de la alianza terapéutica en tera-
pia de familia y pareja. Revista Colombiana de Psicología, 22(2), 333-343.

La correspondencia relacionada con este artículo debe dirigirse a Camila Bermúdez, e-mail: cnbermudezd@unal.edu.co, o a Carmen Elvira Navia, e-mail:
cenaviaa@unal.edu.co. Servicio de Atención Psicológica, Dg. 40 A Bis n.° 15-38, Bogotá, Colombia.

A R T ÍC U L O D E I N V E S T IG A C IÓ N C I E N T Í F I C A
R E C I B I D O : 25 D E E N E R O D E 2 0 1 3 – A C E P T A D O : 2 6 D E S E P T I E M B R E D E 2 0 1 3

* Este trabajo forma parte del proyecto Integrando Ciencia y Profesión, financiado por la División de Investigaciones de la sede Bogotá, Universidad
Nacional de Colombia. Proyecto Número 12733.

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El lugar de privilegio que el movimien- el sistema familiar/pareja, entendido como un


to de tratamientos empíricamente soportados todo (Rait, 2000).
otorgó a la técnica en la terapia reactivó el interés Como proceso relacional, la AT es afectada
por el estudio de los factores comunes en psico- por variables del terapeuta, del sistema consul-
terapia y, en especial, por el papel de las variables tante, de la técnica y del contexto en el cual tiene
de la relación (Beutler & Castonguay, 2006; Nor- lugar la terapia. Con relación a la técnica, se ha
cross, 2001). Al respecto, la investigación indica encontrado que plantear desde el inicio las re-
que son los factores comunes, y no la técnica, los glas de la terapia, así como dar esperanza al sis-
responsables de la mayor parte de la varianza del tema consultante sobre su problema y explicar
resultado terapéutico (Beutler, 1989; Lambert, que el cambio se irá dando de manera gradual
1992; Norcross, 2001; Wampold, 2001); y entre los (Scheinkman, 2008; Weber, McKeever, & Mc-
factores relacionales, la alianza terapéutica (AT) Daniel, 1985), favorecen el desarrollo de la AT.
es tal vez la que tiene mayor soporte empírico La escucha activa; fomentar un clima de comu-
como variable predictiva del resultado terapéuti- nicación abierta entre los miembros del sistema
co, tanto en terapia individual como de familia y consultante, y entre estos y el terapeuta; validar
pareja (Ackerman et al., 2001; Bedi, Davis, & Wi- sus puntos de vista; acompañarlos; y compren-
lliams, 2005; Carrero & Escudero, 2009; Escudero der y contener sus sentimientos son algunos de
& Friedlander, 2003; Martin, Garske, & Davis, los aspectos técnicos que fomentan la participa-
2000). Según lo establecen Anker, Owen, Dun- ción de los miembros de la familia/pareja y la AT
can y Sparks (2010), la AT explica hasta el 22% de (Ackerman et al., 2001; Anker et al., 2010; Bedi
la varianza de los resultados al finalizar el trata- et al., 2005; Corning, Malofeeva, & Bucchia-
miento y el 29% durante el seguimiento; además, neri, 2007; Darwiche et al., 2008; Friedlander,
es un factor claramente relacionado con la con- Lambert, & Escudero, 2008; Scheinkman, 2008;
tinuidad del proceso terapéutico (Alcázar, 2007). Shelef, Diamond, & Liddle, 2005). Además, We-
Con base en una amplia revisión de dife- ber et al. (1985) afirman que es necesario que
rentes formas de terapia, Bordin (1979) definió el terapeuta señale, pero no enfatice, sobre los
la AT como la relación de colaboración que se desacuerdos entre los miembros de la familia/
establece entre el terapeuta y el consultante y pareja, que evite dar consejos, incluso cuando
los acuerdos sobre los objetivos de trabajo y las son explícitamente solicitados, y que ayude a
estrategias para lograrlos. Esta relación es recí- que los miembros de la familia/pareja sean espe-
proca, intencional y activa, pues se encuentra cíficos y claros en sus intervenciones.
en constante negociación y supone un esfuerzo En un estudio sobre deserción terapéutica,
conjunto de las partes a través de la terapia (Ca- Rondón, Otálora y Salamanca (2009) encon-
rrero & Escudero, 2009; Martin et al., 2000). traron que la ausencia de empatía y la falta de
En la terapia de familia y de pareja, la AT es comprensión del problema por parte del tera-
más compleja que en la terapia individual, dado peuta dificultaban el establecimiento de la AT; al
que el terapeuta interactúa con dos o más perso- no sentirse entendidos, los consultantes experi-
nas, quienes a su vez conforman un sistema de mentaban inconformidad con el terapeuta o la
interacciones en sí mismo (Escudero, 2009). De terapia, situación que llevaba a la terminación
acuerdo con Pinsof (1994) y Pinsof y Catherall temprana del proceso. De manera similar, Cor-
(1986), la AT en casos de familia y pareja implica ning et al. (2007) señalan que la empatía favorece
el establecimiento de múltiples alianzas, es decir, la continuidad del tratamiento, en la medida en
las alianzas del terapeuta con cada miembro de que permite que haya congruencia entre terapeu-
la pareja o familia y la alianza del terapeuta con ta y consultantes en relación con el problema. Por

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el contrario, la incongruencia entre la percepción En cuanto al sistema consultante, se ha en-


del terapeuta y la percepción de la familia o pa- contrado que las expectativas sobre la terapia,
reja sobre la gravedad de su problema debilita el beneficio percibido, la claridad sobre el pro-
la alianza (Alcázar, 2007; Corning et al., 2007; ceso y ciertas características personales e inte-
Scheinkman, 2008). Así mismo, Celano, Oyes- raccionales se relacionan con el establecimiento
hiku y Kaslow (2010) plantean que es necesario de la AT. Rondón et al. (2009) reportan que los
que los objetivos de trabajo y las estrategias para consultantes continúan asistiendo, si sus expec-
lograrlos satisfagan tanto las expectativas del tativas sobre el proceso se cumplen en las pri-
conjunto como las de cada uno de los individuos. meras sesiones. Alcázar (2007) y Corning et al.
En lo que respecta al terapeuta, el grupo de (2007) encontraron que hay mayor continuidad
trabajo de la División 29 de la American Psycho- del tratamiento, cuando los consultantes tienen
logical Association (APA, 2001) reportó que la claridad con respecto a lo que pueden esperar de
AT está relacionada con su nivel de formación, la terapia y experimentan bienestar como resul-
experiencia y destreza técnica, así como con la tado de las sesiones.
credibilidad que trasmite y la confianza que tie- Sobre las características personales e inte-
ne en sí mismo (Ackerman et al., 2001). Facto- raccionales, los estudios indican que la actitud
res como la presentación personal (vestimenta), hostil entre los miembros de la familia/pareja,
la edad, el sexo y el origen étnico del terapeuta, los comportamientos hirientes, como la críti-
así como variables contextuales e institucionales ca, el desprecio, la actitud defensiva y evasiva, y
(e.g., el ambiente terapéutico, el tamaño y la de- las expresiones de negatividad hacia el proceso,
coración del consultorio), pueden alterar la mo- ponen en peligro el desarrollo de la alianza, al
tivación de los consultantes hacia la terapia, pues complicar la relación con el terapeuta y generar
afectan la credibilidad profesional del terapeuta un ambiente de malestar entre los integrantes de
y la confianza que genera en los consultantes la familia o pareja (Celano et al., 2010; Cox &
(Alcázar, 2007; Bedi et al., 2005). Paley, 1997).
Vásquez (2007) y Hatcher y Barends (2006) Con base en los resultados de estudios
señalan que los sesgos culturales y los estereo- sobre la deserción terapéutica, Corning et al.
tipos pueden llevar al terapeuta a trasmitir jui- (2007), Rondón et al. (2009) y Jo y Almao (2002)
cios negativos, en especial mediante el lenguaje listan una serie de variables socio demográficas
corporal. Por ello, invitan a los terapeutas a ser relacionadas con la AT. Los autores señalan que
conscientes de sus propias creencias, estereoti- la falta de dinero para cubrir los costos de la con-
pos y prejuicios y a reconocer la influencia que sulta, las dificultades para cuadrar horarios para
pueden tener en el desarrollo de la AT. asistir y los costos de traslado de varias personas
Por último, tanto en estudios de psicotera- son algunos de los impedimentos de tipo situa-
pia individual (Alcázar, 2007) como de pareja y cional que atentan contra la permanencia en el
familia (Anker et al., 2010), se ha observado que tratamiento.
los consultantes que perciben al terapeuta como La psicoterapia se enmarca en un contexto
poco agradable, prepotente, agresivo, impuntual, socio cultural particular que afecta su desarrollo
autoritario, inexperto, criticón, nervioso, dis- y el papel que juegan las diferentes variables téc-
traído o poco interesado tienden a abandonar el nicas y relacionales en el resultado terapéutico.
tratamiento; mientras que los consultantes que Dado que la mayoría de los trabajos sobre AT, en
perciben al terapeuta como experto, puntual, especial en familias y parejas, se ha realizado en
confiable, capaz y amable continúan asistiendo contextos diferentes al latinoamericano, se con-
después de la tercera sesión. sideró oportuno y necesario explorar los factores

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que motivan a las parejas y familias colombianas manera concomitante. La edad promedio fue
a iniciar y permanecer en un proceso de psico- 31 años (rango = 8 a 74 años); los participantes
terapia, así como aquellos que interfieren en su pertenecían a estratos socioeconómicos entre 2
compromiso y participación. Como lo plantea y 3 (estratos determinados por la ubicación de
Krause (2011), estudiar en condiciones contex- la vivienda y el recibo de pago de servicios pú-
tuales naturales los procedimientos técnicos y blicos); el 20% tenía estudios universitarios, el
a quienes los aplican permite acortar la brecha 30% formación técnica, el 40% era bachiller y el
entre la clínica y la investigación, haciendo a esta 10% había cursado hasta primaria. Participaron
última relevante en el ejercicio práctico. En línea 13 terapeutas: 10 estudiantes de pregrado con
con lo anterior, la investigación inició con un 6 meses de práctica clínica, 1 profesional con 3
estudio de corte cualitativo, que permitiera es- años de experiencia y 2 profesionales con maes-
tudiar estos factores desde la experiencia de los tría y más de 10 años de experiencia profesional.
terapeutas y de las parejas y familias consultan- La edad promedio de los terapeutas fue 25 años
tes. Se buscaba así ir construyendo un conoci- (rango = 22 a 55 años) y pertenecían a estratos
miento para establecer si las variables que se han socioeconómicos entre 2 y 5 (estratos determi-
encontrado como favorecedoras de la AT siguen nado por la ubicación de la vivienda y el recibo
siendo las mismas en un contexto cultural dife- de pago de servicios públicos).
rente. Además, el estudio pretende ofrecer suge-
rencias para que los terapeutas puedan abordar Instrumento
mejor las dificultades en el desarrollo de la AT Se elaboró una guía de entrevista semies-
en nuestro contexto. tructurada que contemplaba datos de identi-
ficación demográfica, motivo de la consulta,
Método orientación psicoterapéutica, años de experien-
cia y formación, y los factores del proceso tera-
Participantes péutico, el terapeuta y los consultantes asociados
La selección de los participantes se realizó con la AT. Más específicamente, la entrevista se
teniendo en cuenta que las familias y parejas estructuró alrededor de cuatro tópicos: (a) fac-
estuvieran dispuestas a participar en una entre- tores del terapeuta, entendido como todos los
vista semiestructurada y que hubieran asistido aspectos relacionados con la persona del tera-
mínimo a tres sesiones, momento en el cual los peuta, su destreza clínica y su forma de estable-
estudios indican que la AT está consolidada. cer relación con los consultantes; (b) factores del
Para la selección de la muestra, se les preguntó sistema consultante, tales como las expectativas
a terapeutas de diferentes centros universitarios de la familia y la pareja hacia la terapia, el acuer-
de atención psicológica y algunos que trabajan a do entre los miembros respecto a participar en el
nivel privado si deseaban participar y si tenían proceso, su relación con el terapeuta y la terapia;
casos de familia o pareja. De los centros con- (c) aspectos institucionales, entendidos como
tactados, solo aceptaron participar terapeutas y los factores contextuales: políticas de atención,
consultantes del servicio de atención psicológica infraestructura y condiciones físicas del consul-
de una universidad pública colombiana. torio; y (d) aspectos relacionados con sentirse
Inicialmente, se estableció contacto con ayudado, tópico que incluía los factores relacio-
26 familias y parejas, 11 accedieron a programar nados con la percepción de bienestar y resulta-
una entrevista (42.30%) y 15 se negaron a par- dos logrados a través de la terapia.
ticipar (57.69%). De los 11 casos de la muestra La guía definitiva para la entrevista se or-
final, 4 tenían sesiones familiares y de pareja de ganizó alrededor de siete subtemas, tomando en

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cuenta los aspectos anteriormente mencionados. las transcripciones y, posteriormente, se discu-


Cada uno fue definido operacionalmente y se tieron y acordaron las categorías básicas sobre
elaboraron posibles preguntas que podían em- factores relacionados con la AT. Se organizó la
plear los investigadores. Sin embargo, siempre se información en cuatro tendencias generales de
mantuvo abierta la posibilidad de ampliar cada factores: (a) los asociados al proceso terapéutico,
subtema tanto como se considerara necesario. (b) los relativos al terapeuta, (c) los relacionados
con los consultantes y (d) los factores contextua-
Procedimiento les, tales como políticas de atención, condicio-
Se realizó un estudio exploratorio de tipo nes físicas e infraestructura.
cualitativo mediante entrevistas semiestructura-
das a terapeutas, parejas y familias consultantes. Factores asociados al proceso terapéutico.
Se estableció contacto telefónico con los tera- Las respuestas de los participantes apuntaron
peutas y algunos de los miembros de la familia o hacia cuatro aspectos: (a) el encuadre inicial, (b)
pareja que estuvieran asistiendo a terapia, o que el método de intervención terapéutico, (c) la re-
la hubieran finalizado en un período no mayor a lación terapéutica y (d) los beneficios percibidos
12 meses. Con quienes accedieron a participar, se del proceso.
firmó el consentimiento informado y se concre- Para los consultantes es fundamental que
tó una entrevista familiar o de pareja y una indi- en el encuadre inicial los objetivos sean claros,
vidual para el o la terapeuta. La duración de las respondan a sus necesidades y expectativas y
entrevistas fue de aproximadamente 1 hr 30 min tengan sentido para cada miembro de la familia.
cada una, todas fueron grabadas y transcritas, y Para ellos, la reformulación del problema en tér-
se identificaron con un número para garantizar minos comprensibles y que la terapia responda
la confidencialidad de la identidad de los parti- a sus inquietudes favorecen la AT. Asimismo lo
cipantes. Las preguntas eran dirigidas a toda la señalaron los terapeutas, quienes además indi-
familia, lo cual permitía la libre participación caron que era necesario contar con un plan de
de cualquiera de los miembros; sin embargo, los acción claro desde el inicio del caso. Cuando los
consultantes que no habían participado fueron consultantes no pueden percibir un hilo con-
abordados con preguntas directas. Posterior- ductor a través de las sesiones, se dificulta el pro-
mente, se realizó análisis de contenido de las en- ceso terapéutico y el avance hacia los objetivos,
trevistas, identificando tendencias principales. distanciando la relación con los consultantes.
En cuanto al método de intervención, los
Resultados consultantes señalaron que es importante la
Para el análisis de datos se siguieron los participación activa por parte del terapeuta,
pasos expuestos por Sandoval (1996) para la in- conocer la metodología del proceso y que esta
vestigación cualitativa: reducción, preparación sea diversa, a través de técnicas creativas y lú-
y análisis de los datos mediante un software de dicas, además de las tradicionales mediadas por
análisis cualitativo de textos, que en este caso el diálogo. Métodos confusos, poca informa-
fue el ATLAS.ti. El análisis de la información se ción sobre estos y monotonía en los procesos
realizó, en primera instancia, a partir de códi- de intervención entorpecen el desarrollo de la
gos mínimos de base tomados de las preguntas AT. Con relación a lo anterior, la madre de la
de la entrevista y categorías emergentes a partir familia 4 indicó: “yo esperaba que hiciéramos
del análisis. Esta codificación inicial se reali- algo diferente porque ya era muy reiterativo que
zó entre las dos investigadoras, de manera que hiciéramos siempre lo mismo”, y el padre de la
ambas realizaron un análisis por separado de misma familia añadió: “yo esperaba que ella [la

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terapeuta] cambiara la dinámica de la sesión, Tanto los terapeutas como los consultantes
porque ella [la terapeuta] nos vio desmotivados; coinciden en que la amabilidad, tranquilidad y
pero no hizo nada al respecto”. buen genio constante del terapeuta favorecen la
Acerca de la relación terapéutica, tanto los AT, mientras que la actitud agresiva, desaten-
terapeutas como los consultantes concuerdan ta o distraída, la carencia de empatía y el ner-
en que mantener una actitud imparcial, respetar viosismo del terapeuta la perjudican. Desde la
la confidencialidad y no juzgar a los consultan- perspectiva de los terapeutas, ser curiosos, opti-
tes facilita la AT. Los consultantes añaden que mistas, pacientes, tener buen humor y confianza
la relación es más cercana cuando perciben que en las propias capacidades son algunos aspectos
el terapeuta los acepta, los respalda y tiene una del terapeuta que favorecen el desarrollo de la
actitud firme. Aunque la firmeza del terapeuta relación terapéutica. Por otro lado, mencionan
los hace sentir seguros, también señalaron como la capacidad de auto-análisis, la experiencia
importante que el terapeuta fuera flexible y com- (nivel de formación) y habilidades clínicas. Los
prendiera eventualidades, como llegar tarde por consultantes mencionaron como positivamente
situaciones fuera de su control (e.g., el mal clima relacionados con la AT otros aspectos de la per-
o un accidente de tránsito). Según los consul- sonalidad de los terapeutas, como la alegría, la
tantes, esto los acerca al terapeuta y les permite asertividad y la honestidad, y señalaron como
sentirse libres en el proceso. importante la presentación sencilla y pulcra del
El desarrollo de una relación respetuosa y terapeuta. En contraposición, la actitud de crí-
de confianza también fue señalado por los tera- tica por parte del terapeuta o la tendencia a im-
peutas como un factor importante. Además, in- poner a los consultantes su marco de referencia
dicaron que la imparcialidad era fundamental, perjudica la AT.
razón por la cual recomiendan que los terapeu- Un aspecto de la personalidad del terapeuta
tas observen constantemente si establecen alian- destacado por los participantes fue el optimis-
zas con un consultante más que con otro. mo. Cuando el terapeuta transmite una visión
De acuerdo con los consultantes, experi- pesimista sobre el problema y lo plantea como
mentar cambios como resultado de la terapia au- grave, desmotiva a los consultantes, quienes no
menta su motivación hacia el proceso y mantiene ven mucho futuro en el trabajo terapéutico. Si
la expectativa de lograr otros mayores, razón por además de la visión pesimista el terapeuta no
la cual continúan asistiendo. Por el contrario, plantea opciones o alternativas de solución y
cuando las familias o parejas no ven beneficios o define de manera confusa el problema, se afecta
resultados del proceso, se desmotivan y perciben aún más la motivación y la AT.
que su inversión en la terapia es más alta que sus Desde la perspectiva de los terapeutas,
ganancias. Así lo expresó la madre de la familia la seguridad en sí mismo y la confianza en lo
10: “Yo le dije a ella [la terapeuta]: ‘¡yo no veo que aprendido favorecen la AT, mientras que el te-
eso sea culpa suya o que usted no sepa, pero es mor la perjudica, pues comunica inseguridad y
que yo no veo resultados! ¡Yo veo antes todo más poco manejo de situaciones difíciles. Entre los
revolcado! ¡Y para mí es muy duro!’”. temores mencionaron el de experimentar o que
los consultantes experimenten emociones ne-
Factores asociados al terapeuta. En esta gativas durante la sesión, presenciar conflictos
tendencia, las respuestas de consultantes y tera- interpersonales en la familia/pareja durante la
peutas apuntaron hacia la personalidad del tera- sesión y no saber cómo resolverlos.
peuta, su presentación personal, conducta ética, Tanto para terapeutas como para consul-
prejuicios y motivación hacia el trabajo. tantes, la AT se favorece cuando el terapeuta

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mantiene una escucha activa durante las sesio- actitud retadora y prevenida hacia el terapeuta
nes, transmite confianza y esperanza, demuestra afectan la AT. Al respecto, se mencionó que cuan-
respeto y reconocimiento por cada uno de los do se vuelve reiterativo experimentar emociones
integrantes de la familia al escucharlos e inte- negativas durante las sesiones, los consultantes se
grarlos al proceso. Por el contrario, cuando el predisponen frente al proceso y, como lo señala
terapeuta se centra en un solo consultante y no la madre de la familia 7, se desmotivan: “nosotros
participa activamente en el proceso, se entorpe- nos la pasábamos peleando todas las sesiones, eso
ce la AT. La ausencia de prejuicios y de sesgos era muy desgastante”.
culturales por parte del terapeuta; su conducta En cuanto a las características de persona-
honesta; la seguridad en lo aprendido y en el lidad de los consultantes, se mencionaron como
dominio de la técnica; el interés y motivación factores que favorecen la AT el buen humor, la
manifestados en el seguimiento juicioso de los capacidad reflexiva y de escucha, la responsabi-
consultantes y en el gusto por el quehacer tera- lidad, la perseverancia, la tolerancia a la frustra-
péutico aumentan la credibilidad de los consul- ción, el optimismo y la sencillez. En oposición,
tantes en su terapeuta y fortalecen la AT. la pasividad, el mal genio y la terquedad fueron
mencionados por los terapeutas y consultantes
Factores de los consultantes. Se encontró como aspectos que limitan el compromiso con
que las expectativas de los consultantes en re- la terapia y la AT. Como aspectos del sistema, se
lación con el proceso, su disposición frente a la considera importante que al menos un integran-
terapia, ciertas características de personalidad te de la familia o pareja sea sociable y participati-
y la disponibilidad de horarios comunes de los vo; por el contrario, que alguno de los miembros
consultantes repercutían en la AT. de la familia o pareja se resista a reconocer el
Cuando la terapia se percibe como un es- problema o muestre desinterés en la atención
pacio y un tiempo para el diálogo y se desean psicológica se interpone en la AT.
aplicar nuevas estrategias para solucionar los La dificultad de las familias y parejas para
problemas, se construye la AT. Por el contrario, encontrar horarios comunes fue mencionada
cuando se llega con la expectativa de evidenciar por los terapeutas y consultantes como un as-
las fallas del cónyuge o de cualquier otro miem- pecto que atenta contra la terapia. Además, es
bro o miembros de la familia, se entorpece el de- más problemático en la medida en la que el nú-
sarrollo de la relación y la construcción de los mero de miembros es mayor y las condiciones
objetivos comunes de la terapia. de trabajo son dispares. Según anotaron los par-
En cuanto a la disposición de los consultan- ticipantes, cuando hay mucha diferencia de ho-
tes frente a la terapia, las respuestas indicaron que, rarios, la familia o pareja termina por asistir de
cuando los consultantes asisten de manera volun- manera intermitente o dejan de asistir por largos
taria al proceso y no por obligación o amenaza periodos, debilitando el vínculo terapéutico y,
de terceros, hay mayor receptividad hacia el tera- en consecuencia, la AT.
peuta, participan más activamente, pueden sen-
tirse libres de expresar sus inconformidades con Factores contextuales. Se exploró la in-
la terapia, están dispuestos a cambiar, se muestran fluencia sobre la AT de los factores contextuales,
flexibles y aceptan otras opiniones, confían en que tales como aspecto físico de los consultorios y
la terapia los va a ayudar y en el criterio de su tera- del servicio, atención por parte de los diferentes
peuta y le ven un sentido a lo que se hace en la te- empleados, accesibilidad al servicio o consulto-
rapia. En contraste, se encontró que la tendencia rio y algunos aspectos de los consultantes, como
a criticar el proceso y al terapeuta, así como una disponibilidad de dinero y tiempo.

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Tanto los terapeutas como los consultantes que puede indisponer a los consultantes al no
estuvieron de acuerdo en que el factor institu- sentirse recibidos o tenidos en cuenta.
cional que favorece la alianza es el prestigio de la
universidad, porque permite a los consultantes Discusión
confiar en que recibirán una atención de alta ca- El análisis de las entrevistas indicó, como lo
lidad por parte de profesionales idóneos. Como ha mostrado en general la literatura, que la AT es
lo dijo la madre de la familia 3: “pues también afectada por variables del terapeuta, del consul-
en calidad, porque no es por nada, pero es que tante y del proceso de intervención.
uno siempre ha sabido que esa universidad es Como lo reportaron Weber et al. (1985), los
muy buena”. La consideración sobre el prestigio resultados de esta investigación indicaron que es
se relaciona con el tema de la credibilidad en el necesario aclarar las reglas del proceso desde el
terapeuta y la confianza de los consultantes en inicio de la terapia para comprometer a los con-
sus capacidades como profesional. sultantes con el trabajo terapéutico. En el caso
Por otro lado, el factor institucional que de familias y parejas es importante, además,
más se interpone en la motivación de los consul- comprometer a todos los miembros del siste-
tantes es la falta de facilidades de pago, ya que los ma, conocer su punto de vista sobre el proble-
consultantes consideraban consignar en el ban- ma y explorar su motivación y expectativas en
co como una vuelta adicional que les implicaba relación con la terapia. En esta primera fase del
más tiempo y esfuerzo invertido en el proceso. proceso terapéutico es necesario que todos se
Con respecto a factores del contexto de los sientan parte de la terapia y plantear de manera
consultantes, se encontró que disponer de dine- clara los objetivos y el plan de trabajo. Hacer esto
ro para pagar la terapia y de tiempo para asistir de manera clara, concisa y ofreciendo esperanza
favorecía el compromiso con esta. Así mismo, la de cambio da seguridad a los consultantes y les
distancia entre el domicilio de los consultantes y permite ver el camino a seguir.
el lugar de la terapia fue señalada por los consul- La escucha activa y la aceptación por parte
tantes como un aspecto que atentaba contra el del terapeuta favorecen la construcción de una
proceso, al incrementar el tiempo y el esfuerzo relación cercana y cálida, pero no necesariamen-
por acudir a las sesiones. En resumen, cualquier te motivan a la gente hacia el proceso. Como lo
factor que implicara un costo adicional y un ma- señalaron algunos de los consultantes, es nece-
yor esfuerzo por parte de los consultantes para sario observar mejoría de manera más o menos
asistir a la terapia se convertía en una variable en inmediata y que el terapeuta de esperanzas sobre
contra del compromiso con la terapia. la posibilidad de hacer cambios que repercutan
En lo que respecta a la infraestructura en una mayor tranquilidad. Al respecto, Alcázar
y apariencia de los consultorios, hubo diver- (2007) y Corning et al. (2007) encontraron que
sas opiniones, pero estos aspectos parecen no cuando los consultantes saben lo que pueden
estar relacionados con el compromiso de los esperar del proceso terapéutico y experimentan
consultantes con la terapia. La mayoría de los bienestar como resultado de las sesiones, hay
consultantes consideró que la infraestructura mayor continuidad del tratamiento.
era adecuada: la describieron como un lugar Un aspecto novedoso encontrado sobre la
tranquilo, iluminado y limpio. Por otro lado, los técnica del terapeuta fue la necesidad de evitar
consultantes señalan que la atención recibida la monotonía en la técnica, incluyendo estrate-
por parte de otros miembros de la institución gias de intervención de tipo lúdico y dinámicas
(celador, recepcionista, otros terapeutas) puede que motiven a los consultantes. Pareciera que el
facilitar o interponerse en el proceso, en tanto diálogo, como única estrategia de intervención,

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ALIANZA TERAPÉUTICA EN TERAPIA DE PAREJA Y FAMILIA 341

puede llegar a ser tedioso para los consultantes, terapeutas entrevistados propusieron como es-
lo que hace recomendable ser más creativos en trategia para poder plantear un plan de acción,
la intervención. definir desde el principio con quiénes se iba a
Ahora bien, con relación a los terapeutas, trabajar en la terapia y tomarse un tiempo de
los datos indicaron que la calma que muestran reflexión y de análisis de los motivos expuestos
frente a la ansiedad de los consultantes, así como problema en esa primera sesión. De esa
como su disposición a escuchar las reacciones manera, se podrían plantear hipótesis sobre el
de inconformidad y a poder hablar sobre ellas, problema y proponer posibles estrategias para
contribuyen al desarrollo de la AT. Aunque la preparar el desarrollo de las sesiones de manera
experiencia favorece el manejo de estos aspec- que sea más claro el proceso, para ellos mismos
tos (Shelef et al., 2005), sería importante incluir, y para los consultantes.
como parte del entrenamiento de los terapeutas, Así mismo, los terapeutas consideraron
el manejo de la ansiedad que puede generar con- necesario instaurar una estrategia de monitoreo
frontar los conflictos familiares, y ayudarlos a sobre la motivación de los consultantes con el
construir una gran seguridad en sí mismos, que proceso. Esto coincide con lo expuesto por Safran,
les permita escuchar las inconformidades de los Murran, Sanstag y Stevens (2002) con respecto a
consultantes con el proceso y enfrentarlas. que es probable que a lo largo del proceso haya
En la misma dirección, y como lo mencio- cambios sutiles en las expectativas, que pueden
naron algunos de los terapeutas, disponer de un obedecer a la interacción de diferentes factores,
plan claro de acción desde el principio orienta y como los cambios alcanzados y por alcanzar, la
guía al terapeuta, dándole una mayor seguridad. relación terapéutica, el compromiso con el proce-
Así lo expresó el terapeuta 6: so y la disposición para cambiar, entre otros.
Si hubiera tenido un plan desde el principio… La literatura ha mostrado que la calma,
de pronto hubiéramos podido plantearles a ellos seguridad, autoestima y confianza en sí mismo
[los consultantes], las estrategias, ver si estaban de parte del terapeuta favorecen la AT (Alcázar,
de acuerdo, eso hubiera por ejemplo fortalecido 2007; Bedi et al., 2005; Scheinkman, 2008). Sin
mucho más la alianza, mirar, corregir el plan, embargo, en este trabajo los participantes indi-
una vez iba andando, y hacer correcciones según caron otros aspectos que no suelen mencionarse,
los resultados, pero como era como muy sesión a como lo son la alegría, tener mente abierta —en
sesión entonces pues no había una organización el sentido de estar dispuesto a respetar formas
clara, de pronto si hubiera habido un plan desde diferentes de ser—, tener gusto por su trabajo, el
el comienzo hubiera sido más efectivo, de pronto optimismo y ser creativo.
se hubieran notado más los cambios… Con respecto a los consultantes, se encontró
que la timidez y estar a la defensiva hacia el pro-
Comprender el problema de manera frag- ceso y el terapeuta son aspectos que se interpo-
mentada y no tener un hilo conductor dificulta nen en la alianza y en el desarrollo de la terapia.
el establecimiento de objetivos de trabajo, y ello Esto se relaciona con lo encontrado por Morde-
se traduce en que los consultantes no compren- chai (1998) sobre el peligro que puede correr la
den la relación entre lo que se trabaja en las se- relación terapéutica, dada la actitud defensiva
siones y sus necesidades. Al respecto, Corning y evasiva de los consultantes, la crítica hacia el
et al. (2007) señalan que es importante explicar terapeuta y el desprecio que le manifiesten al
el proceso y los objetivos de manera que todos terapeuta. Por el contrario, la disponibilidad de
los miembros de la familia se sientan inclui- los consultantes a escuchar, el ser flexibles, tener
dos y compartan una visión del problema. Los buen humor y ser perseverantes permiten la AT.

REVISTA COLOMBIANA DE PSICOLOGÍA VOL. 22 N.º 2 JULIO-DICIEMBRE 2013 ISSN 0121-5469 IMPRESO | 2344-8644 EN LÍNEA BOGOTÁ COLOMBIA - PP. 333-343
342 CAMILA BERMÚDEZ & CARMEN ELVIRA NAVIA

Aunque se observó que los factores insti- Referencias


tucionales pueden afectar la motivación de los Ackerman, S. J., Benjamin, L. S., Beutler, L. E., Gelso,
consultantes, estos no parecen incidir directa- C. J., Goldfried, M. R., Hill, C., …Rainer, J. (2001).
mente en la AT, pues no constituyen una razón Empirically supported therapy relationships:
fundamental para que las personas asistan o Conclusions and recommendations of the Division
dejen de asistir a la terapia. Sin embargo, algu- 29 Task Force. Psychotherapy: Theory, Research and
nos aspectos como la falta de dinero o las difi- Practice, 38(4), 495-497.
cultades en el transporte pueden interactuar con Alcázar, R. (2007). Expectativas, percepción del
otras variables que afecten la motivación de los paciente hacia su terapeuta y razones para asistir a
consultantes hacia la terapia, afectando la AT. dos o más sesiones. Salud Mental, 30(5), 55-62.
Aunque de manera preliminar, este tra- Anker, M., Owen, J., Duncan, B., & Sparks, J. (2010).
bajo ilustra sobre algunos factores que son im- The alliance in couple therapy: Partner influence,
portantes al establecer la AT en las terapias de early change, and alliance patterns in a naturalistic
pareja y de familia. Sin embargo, hay algunos sample. Journal of Consulting and Clinical Psycho-
aspectos que pudieron afectar la riqueza de la logy, 78(5), 635-645.
información obtenida; por ejemplo, el hecho Bedi, R., Davis, M., & Williams, M. (2005). Critical in-
de que las entrevistas fueron realizadas en los cidents in the formation of the therapeutic alliance
escenarios cotidianos de los consultantes y en from the client´s perspective. Psychotherapy:
horas de la noche, lo que generó algunas in- Theory, Research, Practice, Training, 42(3), 311-323.
terferencias como ruido, llamadas telefónicas, Beutler, L. E. (1989). Differential treatment selection:
presencia de otras personas ajenas a la familia The role of diagnosis in psychotherapy. Psychothe-
y cansancio de los participantes. Así mismo, rapy, 26, 271-281.
aunque los terapeutas y los consultantes seña- Beutler, L. E. & Castonguay, L. G. (2006). The task
laron que era posible que los sesgos o prejui- force on empirically based principles of therapeutic
cios culturales interfirieran en la formación de change. Principles of therapeutic change that work
la AT, la mayoría de participantes y terapeutas (pp. 3-10). New York: Oxford University Press.
pertenecían a la ciudad de Bogotá y a la misma Bordin, E. S. (1979). The generalizability of the
tradición cultural, por ende, se consideraba que psychoanalytic concept of the working alliance.
no había diferencias culturales entre ellos. Por Psychotherapy: Theory, Research and Practice, 16,
otra parte, la mayoría de los terapeutas entre- 252-260.
vistados se encontraban en nivel de formación, Carrero, A. & Escudero. V. (2009). Género del clien-
e hizo falta contar con la participación de tera- te y alianza terapéutica. Revista de la federación
peutas más experimentados y de otros centros española de asociaciones de terapia familiar, 41,
de atención psicológica, tanto universitarios 72-82.
como de otra índole. Celano, M., Oyeshiku, Ch., & Kaslow, N. (2010). A
En este trabajo se han descrito los factores competency-based approach to couple and family
que pueden estar relacionados con la AT. Un therapy supervision. Psychotherapy: Theory, Re-
paso a seguir sería poder ver cómo interactúan search, Practice, Training, 47(1), 35-44.
estos factores entre sí, para determinar la cali- Corning, A., Malofeeva, E., & Bucchianeri, M. (2007).
dad de la AT. Así mismo, se deben explorar otros Predicting termination type from client- therapist
factores, como las variables culturales que fue- agreement on the severity of the presenting pro-
ron mencionadas varias veces por terapeutas y blem. Psychotherapy: Theory, Research, Practice,
consultantes. Training, 44(2), 193-204.

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