El cáncer de cuello de útero y su

prevención.
La prueba de Papanicolaou: preguntas y
respuestas

La infección por el virus de papiloma humano (VPH) es muy común en las personas, pero
sólo la infección persistente por los tipos VPH de alto riego son un factor de riesgo para
desarrollar cáncer de cuello de útero, porque la gran mayoría de las infecciones por este
virus son transitorias y se curan solas.
Cualquier persona que ha tenido relaciones sexuales puede contraer o haber contraído el
VPH, pero no es necesario hacer una prueba para saber si lo tuvo.
El cáncer de cuello uterino se puede evitar con la realización periódica del Papanicolaou
(PAP).
El PAP es una prueba rápida y sencilla que permite detectar, para luego tratar, las
lesiones del cuello del útero “precancerosas” es decir, con riesgo de evolucionar a cáncer
con el paso de los años sin el adecuado control.
La decisión de hacer el PAP es individual, pero es una prueba que se recomienda hacer.
Es aconsejable que se hagan un PAP todas las mujeres mayores de 21 años y luego de 2 a
3 años de haber iniciado relaciones sexuales vaginales. Y, continuar haciéndolo cada 1 a 3
años, según lo indique su médico.
Las mujeres vacunadas contra el VPH así como las mujeres embarazadas, lesbianas,
postmenopáusicas y quienes ya no mantengan relaciones sexuales también deben realizar
el PAP.
Las mujeres a quienes se les ha extirpado el útero de forma completa, (mujeres operadas
y sin útero) no necesitan continuar realizando la prueba, pero esta decisión debe ser
consensuada con el médico tratante.
A partir de los 65/70 años, las mujeres que han realizado los controles de forma habitual,
que tienen los últimos 3 PAP normales/negativos y que no han tenido en los últimos 10
años un PAP anormal no es necesario que lo continúen haciéndolo.
Si el PAP detecta una anomalía, es posible que requiera realizar pruebas adicionales o
administrar algún tratamiento, por lo que es muy importante retirar el resultado del PAP
y consultarlo con el médico.
La mayoría de las mujeres con resultados anormales en el PAP no desarrollaran cáncer si
realizan los controles y los tratamientos recomendados por su médico.

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 Índice

1- ¿Qué es el Papanicolaou?
2- ¿Qué relación existe entre el virus del VPH y el cáncer de cuello?
3- ¿Cómo se transmite el VPH?
4- ¿Cómo puedo evitar infectarme y enfermar por VPH?
5- ¿En qué consiste el Pap?
6- ¿Quién realiza el Pap?
7- ¿Quiénes deben realizarse el pap?
Mujeres vacunadas contra el VPH
Mujeres embarazadas
Mujeres lesbianas
Mujeres menopáusicas
Mujeres con extirpación del útero (histerectomía)
8- ¿Quiénes no deben realizar el Pap?
9- ¿Es obligación hacerse el Pap?
10- ¿Cuándo debo empezar a hacerme el Pap?
11- ¿Cada cuánto debo hacerme el Pap?
12- ¿Hasta cuándo debo hacerme el Pap?
13- ¿Qué preparación debo tener antes de hacerme el Pap?
14- ¿Qué resultados puede dar el Pap?
15- ¿Qué sucede si el resultado del Pap es anormal?
16- ¿Detecta el Pap siempre todas las lesiones?
17- ¿Puede el Pap dar un resultado anormal si estoy sana?

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 1- ¿Qué es el Papanicolaou?
El Papanicolaou (también llamado PAP o citología cervico-vaginal) es una prueba o un
estudio que se realiza como parte del control de salud en mujeres y que sirve para prevenir el
cáncer de cuello uterino.

El cáncer de cuello uterino es una enfermedad que, la mayoría de las veces, se

desarrolla muy lentamente a partir de lesiones inicialmente benignas, pero que a veces
requieren control y seguimiento puesto que, si persisten y no son detectadas y tratadas a
tiempo, pueden evolucionar a cáncer. El cáncer de cuello uterino no da síntomas hasta que
llega a una etapa avanzada. El PAP permite detectar a las mujeres que tienen estas lesiones,
ofrecerles tratamiento y evitar que se transformen en enfermedad maligna. Mediante el PAP
también se pueden detectar cáncer invasor, pero en estadios iniciales y que pueden ser
tratados con más éxito que si se lo diagnosticara en estadios avanzados.

2- ¿Qué relación existe entre el virus del VPH y el cáncer de cuello?

La infección con virus VPH de alto riesgo es el principal factor de riesgo para el
desarrollo de un cáncer cervical, es una condición necesaria pero no suficiente porque sólo
unos pocos casos desarrollaran lesiones.

Existen más de 100 subtipos de VPH, tipos que producen verrugas en manos y pies,
otros causan verrugas genitales, a diferencia de los considerados de alto riesgo que se asocian
al cáncer de cuello uterino. La infección por VPH no da molestias, muy frecuente, se estima
que el 70% de las mujeres han tenido contacto con el virus en algún momento de sus vidas. Sin
embargo la mayoría de estas mujeres no desarrollarán lesiones y mucho menos cáncer de
cuello. Porque la gran mayoría de estas infecciones son transitorias y se curan
espontáneamente. En muy pocos casos la infección persiste por largo tiempo y, si además se
agregan problemas de salud (como fumar, tener enfermedades de trasmisión sexual, etc.),
pueden aparecer alteraciones con riesgo de evolucionar a cáncer. El PAP no detecta el virus del
VPH sino las lesiones que el virus produce en las células, ya que son las lesiones provocadas
por el virus lo que se quiere prevenir.

3- ¿Cómo se transmite el VPH?

El VPH se transmite principalmente por contacto sexual. La mayoría de las personas
con VPH no lo saben porque no da molestias y puede pasar desapercibida durante mucho
tiempo, por lo cual no se puede conocer y no tendrá sentido buscar la fuente del contagio.
Como el VPH es muy transmisible por contacto sexual, todas las personas que han tenido

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relaciones sexuales se han expuesto alguna vez a este virus, por eso las mujeres deben hacer
sus controles con PAP, para prevenir el cáncer de cuello uterino.

4- ¿Cómo puedo evitar infectarme y enfermar por VPH?

Para prevenir la infección por VPH es importante usar siempre preservativo en las
relaciones sexuales heterosexuales y se sugiere el campo de látex para las mujeres que tienen
sexo con mujeres, aunque no hay mucha información sobre su eficacia.

Existen vacunas que previenen la infección por los subtipos virales (2 tipos de VPH)
más frecuentemente relacionados con el cáncer de cuello. En nuestro país la vacuna es
obligatoria y gratuita para todas las niñas de 11 años. El resto de las mujeres pueden decidir
aplicarse la vacuna de forma voluntaria, teniendo en cuenta que la máxima eficacia la obtienen
quienes no han tenido contacto con el virus, o sea aquellas mujeres que no hayan iniciado
relaciones sexuales.

En caso de infectarse con el virus, es importante no alarmarse, porque es una infección

sumamente común en hombres y mujeres que cede sola .La realización del PAP va a permitir
detectar de forma temprana las lesiones por VPH, si las hubiere.

5- ¿En qué consiste el Pap?

La prueba de Papanicolaou o citología cérvico-vaginal consiste en tomar células de la
superficie del cuello del útero con una espátula especial para examinarlas luego al
microscopio. Para ver el cuello uterino se utiliza un espéculo que separa las paredes de la
vagina. Es una prueba sencilla, rápida y no dolorosa, aunque en algunas ocasiones puede
resultar incómoda o provocar sangrado y/o secreción, aunque ello no debe ser motivo de
alarma. Se realiza en un ámbito en el que se cuida y respeta la intimidad de la mujer.

6- ¿Quién realiza el Pap?

La muestra del PAP se toma en consultorio, ya sea por el médico de cabecera o por el
ginecólogo/a general. Luego es enviada al laboratorio de anatomía patológica en donde es

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procesada y analizada en microscopios por médicos especialistas. El resultado suele tardar
cerca de un mes.

7- ¿Quiénes deben realizarse el Pap?

Todas las mujeres que hayan tenido actividad sexual con penetración vaginal, ya sea
durante relaciones heterosexuales o mediante la utilización de objetos, sobre todo si estos han
sido compartidos con otras personas.

Mujeres vacunadas contra el VPH

Las vacunas contra el VPH otorgan protección contra los subtipos virales de alto riesgo
que más frecuentemente se relacionan con el cáncer de cuello. No protegen contra todos los
tipos de VPH, tampoco protegen a las mujeres que al momento de la vacunación ya estén
infectadas con VPH. Por este motivo las mujeres vacunadas deben realizar el Papanicolaou
igual que las mujeres no vacunadas.

Mujeres embarazadas

El PAP puede realizarse durante el embarazo. El embarazo constituye una buena

oportunidad para realizar el PAP a aquellas mujeres que no lo realizan habitualmente. Una
mujer que ha efectuado regularmente la prueba y está embarazada cuando le corresponde
realizar el PAP debe consultar a su médico/a si corresponde realizar la prueba o si se puede
esperar hasta después del parto.

Mujeres lesbianas

El VPH se transmite al cuello del útero mediante relaciones sexuales vaginales, ya sea
con parejas hetero u homo sexuales y mediante el uso de objetos. Las mujeres lesbianas que
hayan tenido penetración vaginal de algún tipo tienen el mismo riesgo de contraer las mismas
enfermedades que las mujeres heterosexuales por lo que deben realizar los mismos controles.

Mujeres menopáusicas

La menopausia no es motivo para dejar de hacerse el PAP

Mujeres con extirpación del útero (histerectomía)

Aquellas mujeres que realizaban habitualmente sus controles ginecológicos con PAP y
a quienes se les extirpó el útero de forma completa (incluyendo el cuello) por causas benignas,
no precisan continuar realizando la prueba. Sin embargo las mujeres a quienes se les efectuó
una histerectomía subtotal (extirpación del útero sin el cuello), aquellas que no efectuaban los
controles habituales previos a la cirugía o a quienes se les extirpo el útero por lesiones
malignas o premalignas deben continuar realizando la prueba. En todos los casos la decisión
debe ser tomada en forma conjunta con su médico.

8- ¿Quiénes no deben realizar el PAP?

Las mujeres que no han tenido nunca relaciones sexuales vaginales.

9- ¿Es obligación hacerse el PAP?

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 El Pap es una práctica preventiva muy recomendada y es un derecho de las mujeres,
ahora bien la decisión de hacerse un pap es una opción individual y personal. Si todas las
mujeres con recomendación de hacerse un pap lo hicieran, disminuiría la cantidad de casos de
cáncer avanzado que se diagnostican anualmente y donde con menos posibilidades
terapéuticas, así como también morirían menos mujeres por esta causa.

10- ¿Cuándo debo empezar a hacerme el Pap?

Las pruebas de detección del cáncer cervical deben iniciarse dentro de los 2 a 3 años
del inicio de relaciones sexuales vaginales o a partir de los 21-25 años de edad según criterio
clínico. Se recomienda esperar de 2 a 3 años de haber iniciado relaciones sexuales vaginales
para evitar tratamientos excesivos por cambios celulares, que si bien son anormales, son
también muy frecuentes y transitorios en las mujeres jóvenes. No existe peligro alguno en
esperar 3 años ya que el cáncer evoluciona lentamente y requiere muchos años, por ello es
extremadamente raro en mujeres menores de 25 años.

11- ¿Cada cuánto debo hacerme el Pap?

Inicialmente se debe realizar una vez por año. A partir de los 30 años y con 3 PAP
previos normales/negativos debe hacerse cada 3 años.

Aumentar la frecuencia en la realización del PAP no mejora los resultados. La mayoría

de las mujeres a quienes se le diagnostica un cáncer de cuello de útero no habían realizado
nunca o un PAP o habían pasado más de 5 años desde el último.

12- ¿Hasta cuándo debo hacerme el Pap?

Las mujeres entre 65 y 70 años que han realizado los controles de forma habitual, que
no han tenido resultados anormales en los últimos 10 años y con los últimos 3 PAPs
negativos/normales pueden optar por no realizar más PAP tras consultar a su médico.

Sin embargo, las mujeres de 65 o más años que nunca han realizado PAP o lo han
hecho de forma irregular o han tenido resultados anormales en los últimos 10 años deben
continuar realizándose la prueba.

Las mujeres con antecedentes de cáncer de cuello, HIV + o inmunodepresión

(trasplantadas, tratamientos crónicos con corticoides o inmunosupresores, etc.)

13- ¿Qué preparación debo tener antes de hacerme el PAP?

Es importante no estar menstruando, y el momento ideal es de 10 a 20 días después
del primer día de menstruación

Dos días antes de la prueba se debe evitar:

Realizar duchas vaginales (bidet),

Colocar en vagina óvulos, cremas, lubricantes, espermicidas, etc.
Mantener relaciones sexuales con penetración vaginal.
Ecografías transvaginales

14- ¿Qué resultados puede dar el PAP?

El PAP puede ser:

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 a) normal/negativo,

b) insatisfactorio

c) anormal.

Si el PAP resulta normal o negativo para lesión intraepitelial deberá repetir con la
periodicidad que corresponda al control de salud.

Un PAP puede ser insatisfactorio por una preparación inadecuada de la paciente, por
la presencia de sangre o inflamación, por no tener suficientes células en la muestra o por
defectos en la preparación y/o conservación de la muestra. Estos factores no siempre se
pueden evitar, incluso en manos de profesionales muy expertos. Un PAP insatisfactorio debe
repetirse, por ello, para evitar repeticiones innecesarias, es importante concurrir a la
realización de la prueba en condiciones adecuadas.

Un PAP anormal no significa cáncer; hay anomalías que tienden a desaparecer

espontáneamente y solo requieren control, mientras que en otros casos es necesaria la
realización de otras pruebas como colposcopía y/o biopsias para confirmar el diagnóstico y
programar el tratamiento.

Se calcula que de cada 100 mujeres que se hacen un PAP, 93 tendrán resultados
normales, 2 requerirán repetir la prueba porque la muestra fue insatisfactoria, 4 necesitarán
seguimiento y sólo 1 precisará tratamiento.

15- ¿Qué sucede si el resultado del PAP es anormal?

Si el resultado es una anomalía menor, el médico podría indicar repetir la prueba en un
tiempo prudencial. Muchas veces los cambios en las células del cuello son transitorios y
desaparecen sin tratamiento. En otros casos puede estar indicado un tratamiento con óvulos o
cremas.

Si el resultado es una anomalía mayor, se requiere completar el estudio con

colposcopia y/o biopsias. Si estos estudios confirmaran la presencia de una lesión maligna o
premaligna será necesario realizar tratamiento. Los tratamientos dependen del tipo de lesión,
del tamaño y de las características de la paciente pero en general consisten en extirpar o
destruir la lesión.

16- ¿el PAP detecta siempre todas las lesiones?

Aunque la citología cervico-vaginal es una prueba muy efectiva para prevenir el cáncer
de cuello de útero, ningún método de screening tiene una precisión del 100%. La citología
puede no identificar lesiones que sí están presentes por varias razones:

- La muestra se recogió de una zona sin lesión y contiene células normales aunque sí
haya células anormales en el cuello
- Algunas lesiones son más profundas y no accesibles a la toma del PAP.
- Algunas muestras contienen sangre o flujo abundante y no se ven bien al
microscopio.

El cáncer de cuello es una enfermedad lentamente evolutiva, por lo que repetir el PAP
con la periodicidad recomendada brindará más oportunidades para el diagnóstico temprano.

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 17- ¿Puede el Pap dar un resultado anormal si estoy sana?
Si. Existen algunas situaciones que pueden generar cambios en las células similares a
los que se observan cuando hay lesión, aunque no lo haya. Muchas de estas situaciones se
pueden evitar si se realiza la toma del PAP con la preparación recomendada (del punto 13).