Foto 1: Yamila Osorio, presidenta del GRA va a pedir investigaciones

FOTO 2: Iren Sur, la institución más castigada por la corrupción

¡Qué tal conciencia!

La red criminal vinculada a Rodolfo Orellana le ha robado a Arequipa. La víctima es el

Instituto de Enfermedades Neoplásicas Iren- Sur, donde pacientes de cáncer llegan para su
tratamiento. Yamila Osorio va a “exigir” explicaciones, como si no supiera de la gente con
la que estuvo rodeada. GRA pagó 7 de los 44 millones por cuestionado laudo arbitral. ¿Por
qué al Gobierno Regional fue a perdedor?

Por: Pilar Rivera Ramos

El Tercer Juzgado de Investigación Preparatoria de la Sala Penal Nacional procedió a la

detención de Guillermo Alarcón, expresidente del Club Alianza Lima y Eddy Manfreda
gerente de Oncoserv Ambos estarían vinculados a la red de estafa y lavado de activos de
Rodolfo Orellana

Según la fiscalía, Alarcón fue el lobbista que indujo al Gobierno Regional de Arequipa a
suscribir el contrato con Oncoserv Inc en el 2006, para que de una serie de servicios en el
Instituto de Enfermedades Neoplásicas del Sur, pero acabó estafando al Estado. ¿De qué
manera?

En el contrato la empresa se comprometió a invertir S/. 2,8 millones y el Gobierno

Regional garantizaba que el 100 por ciento de los enfermos de cáncer de Arequipa se
atenderían con Oncoserv Inc. Posteriormente el GRA canceló el contrato debido a que la
firma no cumplió con invertir la suma dispuesta.

Entonces Oncoserv pidió un embargo por incumplimiento de contrato, el cual le fue

concedido por el tribunal arbitral que presidía Hernando Talavera Díaz. Oncoserv Inc.
cobró S/. 7 millones 192 mil 623 nuevos soles ¿cómo? Embargando cuentas (ingresos
propios) a las instituciones dependientes del GR (hospitales General y Goyeneche,
Autodema, hasta al Instituto Carlos Baca Flor).

Frente a esta situación la presidenta regional, Yamila Osorio, sostuvo que los asesores del
Gobierno Regional de Arequipa ya establecen las estrategias a fin de investigar los hechos y
determinar a los responsables y árbitros del tribunal que causaron un perjuicio de más de 7
millones de soles a la región (que debieron pagar por acción de amparo), afectando al
principal hospital del sur del país en atenciones de casos de cáncer.
Sin embargo, es pertinente cuestionar: ¿por qué se permitió que las audiencias sobre los
laudos arbritrales de este caso se realizaran en forma privada en la ciudad de Lima y no
aquí donde correspondía, por ser públicas?

¿Por qué no se inhibió de participar como representante del Gobierno Regional en el

tribunal arbitral, la doctora Sheyla Tejada, de abierta filiación aprista?

¿Es posible que exista complicidad del procurador del Gobierno Regional Jesús Vilca
Iquiapaza?

¿Acaso, los laudos arbitrales no son revisables en el fondo?, o debemos esperar a que el
Gobierno Regional tenga que pagar los 44 millones en forma total y absoluta? El Gobierno
Regional de Arequipa, no sabía de esto y, ahora, recién pide investigaciones?

Oncoserv tenía un árbitro fundamental: Pablo Iglesias Palza (ahora detenido), de quien se
dice sería fundador de la Coopex (cooperativa financiera que firmaba las cartas de
garantía) y amigo personal de Orellana.

Lo que está claro, según las investigaciones, que las decisiones de los laudos arbitrales,
coincidentemente, siempre favorecieron a Oncoserv. Y que fue por determinación del
tribunal que se embargaron las sumas antes mencionadas y que el Gobierno Regional no
hizo nada para proteger sus cuentas.

Para los árbitros la decisión de embargar las cuentas de los hospitales e institutos y dejar
sin recursos a pacientes y estudiantes, fue una medida legal, que ni siquiera el procurador
del Gobierno Regional pudo defender.

Inicialmente la presidenta regional sostuvo que el tema de laudo arbitral fue cosa juzgada;
sin embargo, la investigación que se realiza en la ciudad de Lima, provocó que las
investigaciones se trasladen nuevamente a Arequipa y se continúen con las indagaciones a
las municipalidades de Alto Selva Alegre y Uchumayo, donde también habría participado
como garante Coopex, es decir, la red de Orellana.