Vous êtes sur la page 1sur 24

2013

Guía de normativa y
estilo

TALLER DE COMUNICACIÓN PERIODÍSTICA |CÁTEDRA ROCCO-CUZZI


LIC. ALEXIS BURGOS
Puntuación
(guía)

La coma
La coma indica una pausa breve y permite delimitar los distintos componentes de la
oración. Aunque generalmente se afirma que la coma representa una pausa de la lengua
oral entre las partes del discurso gramaticalmente relacionadas, no todas las pausas de la
lengua oral se transcriben en la lengua escrita, ni todas las pausas que se indican con
comas y obedecen a las normas de uso de este signo se hacen siempre en la lengua oral.
Así, por ejemplo, se dice: A nosotros, eso no nos interesa; sin embargo, en la lengua
escrita esa coma no es obligatoria.
En este sentido, es importante tener presente que la lengua escrita constituye un
código independiente y completo en sí mismo, que posee sus propias normas y
convenciones. Supeditar la puntuación a la entonación no solo induce a error, sino que
contribuye a difundir la idea hoy superada de que la escritura constituye una simple
transcripción del habla o de la modalidad oral de la lengua, que sería el código primero
y esencial. Entonación y puntuación representan mecanismos de cohesión
independientes, que corresponden a dos formas distintas de la lengua: la oral y la
escrita.
La coma es, además, el signo de puntuación de uso más arbitrario, pues a veces su
colocación depende de la apreciación o criterio personal. No obstante, a pesar de ciertos
usos facultativos, dado que las pausas que la coma señala suelen coincidir con el final
de unidades gramaticales bien definidas, su empleo está regido por ciertas normas de
validez general.

Usos de la coma
Debe escribirse coma:
a) Entre los términos de una enumeración (sustantivos, adjetivos, verbos, adverbios,
modificadores, etc.), excepto cuando vayan precedidos por las conjunciones y, e, ni, o,
u. Ejemplos:
Compró todo lo que le había encomendado: pinceles, óleos, aceites, telas, etcétera.
Reveló poseer un carácter irascible, intolerante y agresivo.
Aún no decidió si viajará primero a París, a Madrid o a Roma.
No ha llamado a su madre, a su hermano ni a mí.
• Cuando la conjunción es ni y se repite, debe colocarse coma delante de cada uno de
los miembros coordinados. Ejemplo:
No le gustan ni el aspecto arquitectónico de la ciudad, ni las costumbres de sus habitantes, ni la
lengua que hablan.

b) Entre construcciones verbales gramaticalmente equivalentes o que cumplen idéntica


función sintáctica, excepto cuando están precedidas por las conjunciones y, e, ni, o, u.
Ejemplo:
Antes de abandonar el país, visitó a sus amigos, donó sus libros a la universidad y confió sus
manuscritos a un colega.
• Sin embargo, se coloca coma delante de la conjunción cuando la construcción que
esta encabeza expresa un contenido semántico (temporal, consecutivo, etc.) diferente
del expresado por la secuencia o secuencias anteriores. Ejemplo:
Arregló la verja, cortó el césped, podó la enredadera, y se sentó satisfecho a contemplar su obra.
• O cuando la conjunción debe unir la secuencia que encabeza con toda la
construcción anterior, y no con el último de sus miembros, sobre todo si este forma
parte de una enumeración. Ejemplo:
Arrojó al fuego las cartas, unas fotografías y su diario íntimo, y huyó precipitadamente a la sala.
c) Entre proposiciones de cierta extensión que poseen distinto sujeto,
independientemente de que vayan precedidas o no por una conjunción. Ejemplo:
Los hombres se reunían para discutir temas políticos, y las mujeres solo se ocupaban de atender
que no faltasen el café y los cigarros.
Algunos gritaban, otros murmuraban, y no pudimos enterarnos de nada.

d) Delante –y también detrás, si la oración continúa– del relacionante que cuando


encabeza una proposición adjetiva explicativa, especialmente si su explicación puede
confundirse con la del que especificativo. Ejemplo:
El buey y la vaca, que se destinan a carne. (Proposición explicativa: Todos los bueyes y vacas se
destinan a ese uso.)
Confróntese con:
El buey y la vaca que se destinan a carne. (Proposición especificativa: Solo algunos de los bueyes
y vacas tienen ese destino.)

e) En todos los casos en que es necesario indicar que un elemento se relaciona, no con
la palabra inmediatamente precedente, sino con otra más alejada o con todo el
enunciado. Ejemplos:
Obligó a Pedro a hablar, con habilidad.
Cfr.: Obligó a Pedro a hablar con habilidad.
Para que no se desvíe, en su elección, de las normas señaladas.
Cfr.: Para que no se desvíe en su elección de las normas señaladas.
Logró su objetivo, felizmente.
Cfr.: Logró su objetivo felizmente.

f) Delante o detrás de un vocativo, o en ambos lugares a la vez, según su colocación en


la oración. Ejemplos:
Juan, llámame por teléfono esta noche.
Llámame por teléfono esta noche, Juan.
Te ruego, Juan, que me llames por teléfono esta noche.

g) Cuando se invierte el orden regular de los componentes de la oración, anteponiendo


palabras, construcciones o proposiciones que deberían ir pospuestas. La coma debe
colocarse después del elemento anticipado. Ejemplos:
Para no olvidarme, haré un nudo en el pañuelo. (Pero: Haré un nudo en el pañuelo para no
olvidarme.)
A los funcionarios que no cumplen con la obligación de mejorar la calidad de vida de los
ciudadanos, hay que separarlos de sus cargos.
• Esta regla se cumple especialmente en el caso de las proposiciones subordinadas
antepuestas a la oración principal. Ejemplos:
Cuando viene a visitar la ciudad, se aloja siempre en ese hotel.
Porque no la dejamos jugar con nosotros, nos pega.
Algunos autores (Moliner 1976) consideran facultativo este uso de la coma, pues
ella puede suprimirse cuando la proposición antepuesta va precedida a su vez por otra
proposición. Ejemplo:
Si te parece, cuando vengas a visitar la ciudad avísame.
• En otros casos en los que no resulta fácil establecer con exactitud si la anteposición
exige el uso obligatorio de la coma, se recomienda, en general, aplicar la siguiente
norma práctica:
Si el elemento antepuesto admite una paráfrasis con en cuanto a, debe colocarse coma. Ejemplo:
Dinero, ya no le queda. (Pues es posible decir: En cuanto al dinero, ya no le queda.)
Si, por el contrario, admite una paráfrasis con es lo que o es el que, no debe emplearse coma.
Ejemplo:
Vergüenza debería darte. (Equivale a afirmar: Vergüenza es lo que debería darte.)

h) En lugar de un verbo que se elide o se suprime por ser repetición de otro ya


enunciado en la proposición anterior o porque se sobreentiende, como en el caso de
algunos predicados no verbales. Ejemplos:
Los niños, en el jardín. Ustedes, tranquilos.
Pedro irá al teatro esta noche; María, a escuchar un concierto.
Unos prefieren una cosa; otros, otra.
• Está dentro de este caso la coma que se coloca detrás de también (u otro adverbio)
para indicar una oración sobreentendida. Ejemplo:
Cuando escribe, enciende un cigarrillo tras otro. También, cuando aguarda la opinión de algún
crítico.

i) Delante de como, cuando esta palabra no encabeza una comparación de igualdad,


sino que introduce un ejemplo. Ejemplo:
Le gustan las grandes metrópolis, como Tokio o Nueva York.

j) Delante de proposiciones coordinadas consecutivas. Ejemplos:


Ellos saben que hoy no trabajas, conque será mejor que busques otra excusa.
Llovió durante toda la semana, así que resolvimos regresar dos días antes.
Pienso, luego existo.

k) Delante de proposiciones causales lógicas y explicativas. Ejemplos:


No debe haberse dormido aún, pues veo las luces del dormitorio encendidas.
Es una persona generosa, porque nunca ha dejado de ayudar a sus amigos.

l) Delante de las proposiciones introducidas por los encabezadores pero, mas, aunque,
sino, salvo, excepto. Ejemplos:
Fueron interrogados, pero el juez no logró obtener demasiada información.
No lograrás convencerlo de que carece de argumentos válidos, aunque te lo propongas
firmemente.
Todos los legisladores asistieron a la sesión, excepto los que se hallaban en el interior del país.

ll) Delante y detrás de palabras, construcciones o proposiciones intercaladas que


interrumpen una oración para precisar, aclarar, ampliar o comentar lo dicho. Son
incisos de este tipo:
• Las aposiciones nominales. Ejemplo:
Don N.N., auditor de la empresa, presentó su renuncia.
• Las construcciones absolutas. Ejemplo:
Finalmente, superadas estas dificultadas, comenzaron las obras.
• Cualquier aclaración, precisión o comentario referido a circunstancias temporales,
fuentes de enunciación, mención de obras o autores, etcétera. Ejemplos:
Desde que se fue, hace más de un mes, no lo he vuelto a ver.
La democracia, sostiene un sociólogo, consiste en avanzar hacia la tolerancia y el derecho a la
diferencia.
La lengua, según Saussure, es una institución social que ningún individuo aislado puede modificar
por sí mismo.
En noviembre, creo yo, la crisis económica se profundizará.

m) Delante y detrás de ciertos adverbios, giros adverbiales y conectores que, cuando


están emplazados en el interior de la oración, suelen construirse como incisos: es decir,
esto es, o sea, a saber, por consiguiente, por lo tanto, además, aparte de eso, en todo
caso, en efecto, sin embargo, en realidad, en cambio, por último, finalmente,
posiblemente, así pues, en consecuencia, en resumen, etcétera. Ejemplos.
El puma, es decir, el león americano es un animal agresivo.
Llegamos, en efecto, un poco tarde.
Ellos, al menos, están de acuerdo.
El texto describe, por último, las consecuencias culturales de la Conquista.
Juan, posiblemente, no está enterado.
• Por convención, los conectores especificativos o explicativos, como esto es, en otras palabras, etc.,
se escriben entre dos comas en todos los casos, excepto en los de o sea y es decir cuando van
seguidos de que. Ejemplo:
Está decidido, o sea que nos iremos.
• Ciertos adverbios o locuciones adverbiales que funcionan como modificadores de
todo el enunciado, cuando están colocados al comienzo de la oración, se separan del
resto mediante una coma. Ejemplos:
Posiblemente, Juan no está enterado.
Por regla general, este tipo de accidentes resultan fatales.

n) Después de un adverbio de afirmación o negación colocado al comienzo de la


oración y después de una interjección igualmente emplazada en posición inicial.
Ejemplos:
Sí, juro.
No, jamás permitiré que lo hagas.
¡Oh, qué grata sorpresa encontrarlo aquí!

ñ) La palabra etcétera lleva siempre una coma adelante y, generalmente, otra detrás.
La segunda coma puede suprimirse en algunos casos. Ejemplos:
Los libros, los cuadros, los objetos de arte, etc., eran de su propiedad.
Pero también:
Durante su estadía en Buenos Aires, trabajó en comercios, oficinas, dependencias oficiales,
bancos, etc. para poder estudiar.

o) También debe colocarse coma entre el apellido y el nombre completo de una


persona o entre los términos de un sintagma cuando se presentan invertidos por integrar
una lista: bibliografía, índice, guía, registro, etcétera. Ejemplos:
Jakobson, Roman: Ensayos de lingüística general...
– oficina, muebles de
– escolares, artículos

I.2.3.2. Usos incorrectos de la coma


a) No debe ponerse coma entre el sujeto y el verbo excepto en los casos en que los
separa un inciso o frase incidental.
Constituye un error escribir:
El nuevo reglamento aprobado, entró hoy en vigencia.
La misma tradición vernácula, corría de boca en boca.
Pero:
La deslumbrante voz de la soprano italiana, quien dominaba la escena con su figura, cautivó al
auditorio.
Tampoco se coloca coma cuando el sujeto está constituido por una proposición
subordinada sustantiva. Ejemplo:
Quien no haya pagado los impuestos será severamente sancionado.
b) No debe colocarse coma entre el verbo y sus complementos fuertes (objeto directo,
objeto indirecto, circunstanciales régimen). En los siguientes ejemplos, es incorrecto el
uso de la coma:
Rawls no cree, que los lazos comunitarios sean la condición sine qua non de los sentimientos
comunitarios.
Les habló, a sus padres de su libro.
Los estudiantes tienen miedo, de que se tomen represalias.
[a partir de: García Negroni, M.M. et al., El arte de escribir bien en español. Buenos Aires, Santiago
Arcos, 2004]
Usos del punto y coma

a) Para separar los miembros de una enumeración cuando se trata de construcciones


complejas que ya incluyen comas. Ejemplos:
Cada una de las plantas de las casa fue usada para distintos fines: la planta baja, como
enfermería; el primer piso, como comedor; el último, como cuartel general.
Hay diversos tipos de artistas: los que persiguen el éxito a toda costa obedeciendo a los
gustos del público; los que tratan de imponer su gusto a un público que se vuelve fiel; por
último, los que cultivan su arte sin tener en cuenta los gustos del público.

b) Para separar períodos dentro de una oración que ya incluye comas. Ejemplo:
“Platero, grana de ocaso sus ojos negros, se va, manso, a un charco de aguas de carmín,
de rosa, de violeta; hunde suavemente su boca en los espejos.” (Juan Ramón Jiménez)
• En algunos casos permite evitar ambigüedades:
Pero nada bastó para desalojar al enemigo, hasta que se abrevió el salto por el camino que
abrió la artillería; y se observó que uno solo se rindió a la merced de los españoles. (Solís)
Si después de la palabra “artillería” solo se pusiese coma, la oración “y se observó, etc.”
vendría regida por la preposición “hasta” y cambiaría mucho el sentido. (Esbozo de la
Academia, pág. 147.)
c) En períodos de cierta longitud, delante de las conjunciones y locuciones pero, mas,
aunque, sin embargo, por lo tanto, no obstante, por consiguiente, en cambio, en fin, etc.,
cuando encabezan proposiciones en las que se indican aspectos diferentes de una misma
idea o un hecho y su consecuencia. Ejemplo:
Cinco helicópteros han estado buscando a los posibles sobrevivientes durante toda la
noche, además de los equipos que trabajan en tierra; sin embargo, por el momento, los
esfuerzos han sido inútiles.
Si los miembros del período no son muy largos, se recomienda el uso de la coma (véanse
§ I.2.3.1.ll y I.2 3.2.1.n). Si su extensión es considerable, conviene separarlos con punto y
seguido.

(A partir de García Negroni, M.M. et al., El arte de escribir bien en español, Buenos
Aires, Santiago Arcos, 2006)
4.2.2. Mayúscula inicial

1.19) La primera palabra del título de una obra (libro, película, cuadro, escultura, pieza
musical, etc.). Al respecto, se tendrán en cuenta además las siguientes reglas ( infra §
4.5.1.):
 Los títulos de colecciones bibliográficas se escriben en redonda y con mayúscula inicial
en la primera palabra y en los sustantivos y adjetivos. Ejemplos:

Colección Austral
Biblioteca de Autores Españoles

 Los nombres de periódicos y revistas se escriben en cursiva (o en redonda si el resto del


texto está en cursiva) y con mayúscula inicial en la primera palabra y en los sustantivos
y adjetivos. Ejemplos:

Clarín
El País Semanal

 Los títulos de libros, de películas, de obras musicales, de obras de teatro, de programas


de radio o televisión se escriben en cursiva (o en redonda si el resto del texto está en
cursiva) y con mayúscula en la primera palabra y en los nombres propios. Ejemplos:

Pedro Páramo, de J. Rulfo


El ciudadano, de O. Wells
Las cuatro estaciones, de Vivaldi
La ciudad de la furia, de Soda Stereo
La lección de anatomía
Magdalena tempranísimo
Caiga quien caiga

 Las publicaciones periódicas se escriben también en cursiva y llevan mayúscula en la


primera palabra y en los sustantivos y adjetivos. Ejemplos:

Revista Argentina de Cardiología


Páginas de Guarda

 Los títulos de conferencias, comunicaciones, ponencias se escriben en redonda y entre


comillas con mayúscula inicial en la primera palabra y en los nombres propios si los
hay. Ejemplo:

“La negación en el discurso académico”, conferencia pronunciada en la Universidad


Complutense de Madrid.

 Los nombres de cuadros y de esculturas se escriben en cursiva con mayúscula inicial en


la primera palabra. Ejemplos:
Estanque con nenúfares
El pensador
(…)

4.5. PRECISIONES SOBRE EL EMPLEO DE LOS TIPOS DE LETRAS

Existen distintos tipos de letra: por su figura, la letra puede ser redonda o cursiva; por su
tamaño, minúscula, mayúscula o versalita; por su ojo, fina, normal o negrita. A
continuación, detallamos los empleos específicos de cada una de ellas.

4.5.1. Letra redonda y letra cursiva

La letra redonda es una letra derecha y de forma circular que se utiliza en los textos
compuestos con letra normal, como ocurre en la presente oración.
Asimismo, y tal como adelantamos más arriba ( supra § 4.2.2., 1.19), se escriben en
redonda:
 Los títulos de colecciones bibliográficas, que, recuérdese, llevan mayúscula inicial en la
primera palabra y en los sustantivos y adjetivos. Ejemplos:

Nueva Colección Labor


Colección Instrumentos
Biblioteca de Autores Españoles

 Los títulos de conferencias, comunicaciones, ponencias. Recuérdese que se escriben con


mayúscula inicial en la primera palabra y en los nombres propios si los hay:

“Educación de excelencia y desarrollo humano”, conferencia magistral pronunciada


en marzo de 2008.

 Los poemas, cuentos y títulos de artículos científicos. Ejemplos:

“Elegía”, de Miguel Hernández, fue musicalizado por Serrat.


Leyó “El cautivo”, de Borges.
En Páginas de Guarda, 7, se publicó el artículo “Estética ortotipográfica y
bibliológica”, de José Martínez de Sousa.

Asimismo, se escriben con letra cursiva:


 Los títulos de libros, de películas, de obras musicales, de obras de teatro, de óperas, de
programas de radio o televisión. Recuérdese que si el resto del texto está en cursiva,
estos títulos se escriben en redonda para marcar el resalte tipográfico (para el uso de
mayúsculas iniciales,  supra § 4.2.2., 1.19.):

La cocina de la escritura Diccionario de uso del español


La vida de los otros Entre los muros
El fantasma de la Ópera El sueño de una noche de verano
La flauta mágica Penélope
A dos voces El exprimidor

Nota: Se tendrá en cuenta que, si se mencionan partes de un libro o partes de una


publicación periódica, estas deben escribirse en redonda y entre comillas. Ejemplo:

En el capítulo 7, “Perspectivas de análisis”, el autor…

Análogamente, si se mencionan como partes de un todo (por ejemplo, de un álbum,


de una ópera, de una comedia musical, etc.), los nombres de las obras musicales
también deben ir en redonda y entre comillas ( § 3.2.10.1., c). Ejemplos:
El “Aria de amor” de la ópera Tosca, de Giaccomo Puccini, lo emocionó hasta las
lágrimas.
“En la ciudad de la furia” es una canción de Gustavo Cerati, que está incluida en
el álbum Doble vida de la banda de rock argentina Soda Stereo.

 Los nombres de periódicos y revistas, y en general de las publicaciones periódicas.


Recuérdese que estos también se escriben con mayúscula inicial en la primera palabra y
en los sustantivos y adjetivos:

La Nacion1 Clarín El País


Noticias Para Ti Siete Días
Páginas de Guarda Discurso y Sociedad Oralia

 Los nombres de cuadros y de esculturas, que se escriben con mayúscula inicial en la


primera palabra. Obsérvese que el nombre del artista va en redonda:

Campo de trigo, de Van Gogh


La piedad, de Miguel Ángel

(a partir de García Negroni, M.M. (2010), Escribir en español. Claves para una corrección
de estilo. Buenos Aires: Santiago Arcos)

1
Se reproduce la grafía del diario, es decir, sin tilde.
Discurso referido en estilo directo y uso de comillas y de rayas
(A partir de García Negroni, M.M., Escribir en español, Buenos Aires, Santiago Arcos, 2010,
en prensa)

3.2.10.1. Usos de las comillas

Las comillas se emplean en los siguientes casos:


a) Para enmarcar citas textuales cualquiera sea su extensión. Ejemplos:

Ante esa pregunta el Presidente respondió: «No, no creo que sea una buena medida para
incrementar nuestra economía».
Según Reyes (1994: 27), la función de los evidenciales es “señalar que el conocimiento de lo
que se dice procede, no de la experiencia directa del hablante, sino de una experiencia
indirecta”.

Antes era habitual, cuando se citaba un párrafo único y aislado, colocar comillas al principio
y al final. Y si el texto transcripto se prolongaba a lo largo de varios párrafos separados por
punto y aparte, solían colocarse comillas de cierre al principio de cada uno de ellos para indicar
que la cita continuaba, y al final del último, para señalar el cierre de la transcripción. Hoy, en
cambio, en ambos casos, lo normal es reproducir la cita con sangrado respecto del texto en el
que se la incluye, en un cuerpo menor y sin comillas. Ejemplo:

En su obra Los procedimientos de cita: citas encubiertas y ecos, Graciela Reyes sostiene:
La función de un evidencial es señalar que el conocimiento de lo que se dice procede, no de la experiencia
directa del hablante, sino de una experiencia indirecta. Puede decirse que los evidenciales expresan precaución
o cautela epistemológica, o sea, que expresan los escrúpulos del hablante acerca de su conocimiento (1994:
27).

En los casos en que se introduce entre rayas un comentario de quien transcribe la cita, no es ne-
cesario cerrar las comillas para volver a abrirlas después del comentario, como ocurre en inglés.
Ejemplo:

«No creo que esa sea una buena medida –sostuvo el Presidente– para incrementar nuestra
economía».

Sin duda, en algunos casos, resulta posible introducir un texto literal entrecomillado dentro de un
enunciado en estilo indirecto. Así, por ejemplo, en:

Foucault (1984: 90) decía de la escritura que “se trata de la abertura de un espacio en el que
el sujeto que escribe no cesa de desaparecer”.
Fontanille (1987: 9) sostiene que “para la semiótica, el saber compartido entre los
interlocutores de la comunicación solo es interesante (…), si está dividido, retenido,
deformado, desviado, adulterado”.
Cuando Porrúa sostiene que Rayuela es “un enorme embudo”, “el agujero negro de un
enorme embudo”, transmite una valoración desde su lugar de editor.

Ahora bien, para que esa introducción sea aceptable deberá tenerse especial cuidado en no
incumplir las condiciones que impone el discurso referido en estilo indirecto (en particular, las
referidas a la correlación de los tiempos verbales y a los cambios en determinados pronombres o
2

adverbios de naturaleza deíctica). (Véase § 8.2.4.2. Discurso referido y correlación de tiempos).


Así, en lugar de:

La madre les pidió que “vuelvan temprano”.


El Presidente insistió en que “no aceptaré que me impongan ninguna agenda”.

se escribirá:

La madre les pidió que volvieran temprano.


El Presidente insistió en que no aceptará que le impongan ninguna agenda.
El Presidente insistió en que no aceptará que le impongan “ninguna agenda”.
El Presidente insistió en que no aceptaría la imposición de “ninguna agenda”.

b) Para reproducir, en los textos narrativos, los pensamientos de los personajes; en cambio, para
transcribir sus intervenciones directas en los diálogos, se utiliza la raya. Ejemplo:

«No mide el peligro», me dije, «jamás tiene hambre ni sed. Con un poco de sol le basta».
Me miró y respondió a mi pensamiento:
—Yo también tengo sed, busquemos un pozo.
Antoine de Saint-Exupéry, El principito.

c) ,,,

3.2.10.2. Combinación de las comillas con otros signos de puntuación

Al igual que en el caso de los paréntesis, los signos de puntuación correspondientes al enunciado
en el que se inserta el texto entrecomillado deben colocarse después de las comillas de cierre.
Ejemplos:

Se levantó y nos dijo: “Está bien”; pero al final no nos ayudó en nada.
Según esta autora, en el primer caso, la referencia permite «mostrar a los lectores que quien
escribe conoce bien la materia y/o que ha escrito también sobre el tema» (Bolívar, 2005: 85);
en el segundo, se trata de…
¿Es verdad que dijo «no vuelvo más»?
“Tengo miedo”, dijo Juan antes de entrar.

Pero el texto entrecomillado también tiene puntuación propia, de manera que si se trata de un
enunciado interrogativo o exclamativo, los signos de interrogación y de exclamación se colocarán
antes de la comilla de cierre. De esta regla, debe excluirse el punto, que siempre va fuera de las
comillas. Ejemplos:

Y en ese momento, recordó las palabras de Cicerón y les preguntó: «¿Hasta cuándo, señores
del senado, Catilina abusará de nuestra paciencia?».
Les ordenó: «¡Cierren la puerta!».
Se acercó y les dijo: “Necesito que me ayuden”.

Se tendrá en cuenta, asimismo, que si el fragmento entrecomillado constituye el final de un


enunciado o de un texto, el punto debe colocarse detrás de las comillas de cierre, incluso si delante
de las comillas aparecen signos de cierre de interrogación o de exclamación o puntos suspensivos.
Ejemplos:
3

«No posee valores literarios». Con esas palabras, dio por concluida la discusión.
«¿Te sientes satisfecha con lo que haces?». La pregunta la desestabilizó y no supo qué
responder.
«¡Hago lo que puedo!». Y el grito se oyó en toda la casa.
«Si me hubiera escuchado...». Juan no podía dejar de lamentarse.

3.2.7. Raya

También llamada guion largo o guion mayor, la raya se representa mediante un trazo horizontal
(—) de mayor longitud que el correspondiente al guion (-). Puede emplearse como signo simple (i.
e., una sola raya en forma aislada), o bien como signo doble para enmarcar un término o un frag-
mento de discurso. En este segundo caso, las rayas se escriben pegadas a la primera y a la última
palabra del segmento textual enmarcado, y separadas por un espacio de la palabra o signo que las
precede o las sigue. Si lo que sigue a la raya de cierre es otro signo de puntuación, no debe dejarse
espacio de separación.
Nota 1: Dado que en los teclados normales no existe una tecla para la raya, algunos autores
utilizan dos guiones seguidos para representarla, lo que no resulta normativo. Si se desea insertar
raya desde el teclado, puede hacerse con Ctrl + Alt + guion del teclado numérico.
Nota 2: En algunas ediciones, y por cuestiones estéticas, a veces se utiliza, en lugar de las
rayas comunes (—), el menos, es decir una raya del tamaño de la letra n (–). Como sostiene
Millán (2005: 57), “En vez de rayas, tampoco queda mal en un texto utilizar el menos que se
consigue directamente con Ctrl + guion del teclado numérico”.

3.2.7.1. Usos de la raya

La raya se utiliza en los siguientes casos:


a) Para intercalar incisos o aclaraciones. Se tendrá en cuenta que los incisos entre rayas tienen
una menor conexión semántica con el resto del enunciado en el que se insertan que los incisos que
aparecen entre comas, pero una mayor relación que los que se escriben entre paréntesis. En este uso,
siempre se emplea como signo doble: la raya de cierre no debe suprimirse, aun cuando detrás de ella
aparezca un punto u otro signo de puntuación. Ejemplos:

Me presentó a Pedro –un viejo amigo de la familia–, pero lamentablemente, no pude hablar
mucho con él.
Me presentó a Pedro –un viejo amigo de la familia–. Lamentablemente, no pude hablar
mucho con él.

Si el texto en el que se desea incluir una aclaración o un inciso ya está encerrado entre
paréntesis, la nueva aclaración debe colocarse entre rayas. Si se desea, en cambio, intercalar alguna
precisión o dato incidental en un inciso escrito entre rayas, deberán utilizarse paréntesis. Ejemplos:

El poema “Muere lentamente” (atribuido por error –según los especialistas– a Neruda) circula
desde hace años por Internet.
“La Gioconda” –el famoso cuadro pintado por Leonardo da Vinci (1452-1519)– está en el
Museo del Louvre.

b) Para enmarcar los comentarios del transcriptor de una cita en estilo directo. Ejemplo:

«El nuevo gobierno de Israel –aseguró hoy el ministro español de Asuntos Exteriores y
4

Cooperación, Miguel Ángel Moratinos– no descarta la creación de un estado palestino».

c) En los diálogos, para señalar el cambio de interlocutor. En este caso, la raya precede cada una
de las intervenciones de los personajes, sin que sea necesario mencionar su nombre. Entre la raya y
el comienzo de cada parlamento, no debe dejarse espacio. Ejemplos:

— ¿A qué hora sale el tren? —Dentro de tres horas. — ¿Ya tienen todo listo? —Sí, claro. —
¡Qué suerte!

— ¿Cómo dice usted que se llama el pueblo que se ve allá abajo?


—Comala, señor.
— ¿Está seguro de que ya es Comala?
—Seguro, señor.

Juan Rulfo, Pedro Páramo.

d) En la edición de obras teatrales, para separar el nombre de cada uno de los personajes del
texto de sus intervenciones. En este caso, la raya siempre va precedida de un punto (.—):

MADRE. —Espera
NOVIO. — ¿Quiere algo?
MADRE. —Hijo, el almuerzo.
NOVIO. —Déjelo, comeré uvas. Deme la navaja.
MADRE. — ¿Para qué?
Federico García Lorca, Bodas de sangre.

e) En las narraciones, para encerrar las aclaraciones y comentarios del narrador a las intervencio-
nes de los personajes.
Si las palabras del personaje no continúan después del comentario del narrador, solo se escribe
una raya delante del comentario, sin necesidad de cerrarlo con otra; si, en cambio, el comentario del
narrador interrumpe la intervención del personaje y luego este continúa su parlamento, deben
escribirse dos rayas, una de apertura y otra de cierre. Ejemplos:

—Despertémonos —decía Oliveira alguna que otra vez.


—Para qué —contestaba la Maga, mirando correr las péniches desde el Pont Neuf—. Toc,
toc, tenés un pajarito en la cabeza. Toc, toc, te picotea todo el tiempo, quiere que le des de
comer comida argentina. Toc, toc.
—Está bien —rezongaba Oliveira—. No me confundás con Rocamadour. Vamos a acabar
hablándole en glíglico al almacenero o a la portera, se va a armar un lío espantoso. Mirá ese
tipo que anda siguiendo a la negrita.
Julio Cortázar, Rayuela.

El comentario del narrador puede estar introducido por un verbo de habla (como decir, añadir,
preguntar, etc.) o por otro tipo de verbos. En el primer caso, su intervención se iniciará siempre con
minúscula y si ella ha interrumpido el parlamento de un personaje, el signo de puntuación que
corresponda al enunciado interrumpido deberá colocarse después de la raya que cierra el inciso del
narrador. Ejemplo:

—Sí —contestó la mujer—, el vuelo está confirmado.

Si el signo de puntuación que corresponde poner luego del comentario del narrador son los dos
5

puntos, estos se escriben también después de la raya de cierre:

—Ayer fui a la casa de Ana —le comentó, y agregó—: Me divertí mucho.

En el segundo caso, cuando la aclaración del narrador no está introducida con un verbo de habla,
las palabras del personaje deben cerrarse con punto y el inciso del narrador debe iniciarse con
mayúscula. Ejemplo:

—Me voy. —El hombre se levantó indignado.

Finalmente, si el discurso del personaje continúa luego de un comentario no introducido por un


verbo de habla, se colocará punto tras la raya de cierre para marcar el final del inciso narrativo.
Ejemplo:

—Me voy. —El hombre se levantó indignado—. No se levanten. Conozco la salida.

Algunas equivalencias

“Espero que XXX”, dijo María.


–Espero que XXX –dijo María.
(sin raya de cierre porque no continúa el discurso del personaje)
–Espero que X –dijo María–. No quisiera que ZZZ.
(con raya de cierre porque continúa el discurso del personaje)
–Espero que X. – Se puso de pie y se fue.
(punto y raya porque el comentario del narrador, que sigue, no es introducido con
un verbo de habla)

“Es necesario”, dijo el ministro, “que XXX”.


“Es necesario –dijo el ministro– que XXX”.

“Juan”, dijo María, “no te olvides de XXX”.


“Juan –dijo María–, no te olvides de XXX”.
–Juan –dijo María–, no te olvides de XXX.
VERBOS Y CORRELACIÓN DE TIEMPOS

8.2.3. LA CORRELACIÓN DE LOS TIEMPOS VERBALES

8.2.4.1. Consideraciones generales

Como señalamos en § 8.2.1.1., la categoría de tiempo implica una relación entre el evento denotado por el
verbo y un momento tomado como punto de referencia. Ahora bien, dado que este punto de referencia puede regir
tanto indicativo como subjuntivo en el verbo correlacionado, analizaremos por separado cada una de las dos
posibilidades. Para comenzar, consideraremos los casos en los que el modo regido es el indicativo.
Si el punto de referencia es el momento de la enunciación del hablante, el tiempo en torno del cual se establecen
las distintas relaciones temporales es el presente de indicativo.
Para la expresión de la simultaneidad, se utiliza el presente; para la de la anterioridad, los pretéritos imperfecto,
perfecto simple y perfecto compuesto, y para la de la posterioridad, el futuro simple o la perífrasis de futuro ir a +
infinitivo. Ejemplos:

Simultaneidad
Juan está enfermo.

Anterioridad .
En abril, había más gente.
Ayer vino su hermano.
Los investigadores han encontrado las pruebas.

Posterioridad
Mañana no podré ir.
Mañana no voy a poder ir.

Si el punto de referencia es, en cambio, el pasado (pretérito perfecto simple o compuesto, pretérito imperfecto),
las relaciones de simultaneidad se expresan mediante esos mismos tiempos; las de anterioridad, mediante el
pretérito pluscuamperfecto y el pretérito anterior; y las de posterioridad, mediante el condicional simple. Ejemplos:

Simultaneidad
Cuando llegó, lo vio. / Cuando ella llegó, él estaba ocupado.
Cuando vivía en Mendoza, era feliz. / Cuando vivía en Mendoza, conocí a Pedro.
Nos ha dicho que nunca ha estado allí.

Anterioridad .
Ignoraba cuándo había llegado el profesor.
Olvidaron que los investigadores habían encontrado las pruebas.
Cuando hubo terminado de comer, se retiró a descansar.

Posterioridad
Creyó que no vendría.
Le pareció que te gustaría.

Finalmente, si el punto de referencia es el futuro, las relaciones de simultaneidad se expresan mediante el futuro
simple. Con ese mismo tiempo, se expresan también las relaciones de posterioridad. Para la expresión de la
anterioridad, por su parte, se utiliza el futuro compuesto, es decir un tiempo que es posterior al presente de la
enunciación, pero anterior a otro tiempo futuro. Ejemplos:

Simultaneidad
Mañana iré a la facultad, pero no podré recibirte.

Anterioridad .
Para cuando llegues, ellos ya se habrán ido.

Posterioridad
Mañana le comunicará que renunciará al trabajo la semana próxima.

Pero el punto de referencia temporal puede exigir el modo subjuntivo. En ese caso, si el punto de referencia es
el presente de la enunciación, para las relaciones de simultaneidad se utiliza el presente de subjuntivo. Con ese
mismo tiempo, se expresan también las relaciones de posterioridad. Las de anterioridad, por su parte, se expresan
mediante el pretérito perfecto de subjuntivo. Ejemplos:

Simultaneidad
Desea que la mires.
Lamenta que no te sientas bien.
No creo que Juan viva en Londres.

Anterioridad .
Espero que haya llegado bien a su casa.
Le preocupa que hayamos salido.
No confían en que les haya dicho la verdad.

Posterioridad
Temo que mañana no puedas venir.
Te lo doy para que lo leas.
Te pido que me escuches.

Si el punto de referencia temporal es, en cambio, el pasado, las relaciones de anterioridad se expresan mediante
el pretérito pluscuamperfecto de subjuntivo, y las de simultaneidad y posterioridad, mediante el pretérito imperfecto
de subjuntivo.

Simultaneidad
Deseaba que la miraras.
Lamentó que no te sintieras bien.
No creía que Juan viviera en Londres.

Anterioridad .
Esperaba que hubiera llegado bien a su casa.
Le preocupaba que hubiéramos salido.
No confiaban en que les hubieran dicho la verdad.

Posterioridad
Temía que no pudieras ir al día siguiente.
Te lo di para que lo leyeras.
Te pedí que me escucharas.

Nota: Como se constata, el subjuntivo posee las mismas formas para indicar la simultaneidad y la posterioridad:
presente de subjuntivo para la simultaneidad y la posterioridad en relación con el presente de la enunciación,
e imperfecto de subjuntivo para la expresión de la simultaneidad y posterioridad respecto de un tiempo en
pasado.

8.2.4.2. Discurso referido y correlación de tiempos

La misma correlación de tiempos se aplica en el caso del discurso referido en estilo indirecto. En efecto, cuando se
refiere un discurso ajeno mediante un verbo de decir en pasado, los diferentes tiempos utilizados en el mensaje
original deben ser modificados, pues su punto de referencia ya no es más el momento de la enunciación original,
sino el verbo de decir en pasado del discurso citante. A continuación presentamos y ejemplificamos las reglas de
transposición de tiempos del discurso original al discurso indirecto:

Discurso directo Discurso indirecto


Indicativo
Presente Pretérito imperfecto
Pretérito imperfecto Pretérito imperfecto
Pretérito perfecto simple Pretérito pluscuamperfecto
Futuro Condicional simple
Perífrasis de futuro Pret. imp. de ir + a + infinitivo
Futuro compuesto Condicional compuesto
Subjuntivo
Presente o modo imperativo Pretérito imperfecto
Pretérito perfecto Pretérito pluscuamperfecto

—Juan está enfermo.


 Me dijo que Juan estaba enfermo.
—Antes, había más gente.
 Me contó que antes había más gente.
—Ayer vine.
 Me aseguró que había venido el día anterior.
—No podré ir.
 Me confesó que no podría ir.
—Vamos a comprar un coche.
 Me contó que iban a comprarse un coche.
—Para ese entonces, me habré ido.
 Me garantizó que para ese entonces, ya se habría ido.
—No creo que venga.
 Me dijo que no creía que viniera.
—¡Vení por favor!
 Me pidió que viniera.
—Deseo que haya llegado bien.
 Comentó que deseaba que hubiera llegado bien.

Ha de tenerse presente, no obstante, que tal como señalan Suñer y Padilla Rivera (1990), en ciertos contextos
resultan posibles algunas discordancias en relación con las reglas de transposición arriba reseñadas y
ejemplificadas. En efecto, si bien la norma establece como correctas las correlaciones temporales del tipo:

Me anunció que llegaría al día siguiente.


Me aconsejó que hiciera dieta.
Me pidió que la llamara esa tarde por teléfono.

las siguientes no siempre resultan incorrectas:

Me anunció que llega hoy.


Me aconsejó que haga dieta.
Me pidió que la llame esta tarde por teléfono.

En efecto, aunque no cumplen con las exigencias de las reglas sintácticas de traslación de tiempos y deícticos,
estas oraciones son posibles y correctas:
 si la persona que enuncia se encuentra en un momento de tiempo anterior a la llegada de la que se habla (cf.
la utilización del presente y del deíctico hoy con valor de futuro), o
 si quien habla todavía no ha comenzado la dieta recomendada, o
 si el hablante todavía no llamó a la persona en cuestión (cf. deíctico esta tarde).
Las mismas oraciones serían incorrectas si la llegada que se presenta en la primera, la dieta de la que se trata en
la segunda o la llamada telefónica de la que se habla en la tercera estuvieran situadas en el pasado de la
enunciación.

A partir de García Negroni, M.M. (2010). Escribir en español. Claves para una corrección de estilo.
Buenos Aires: Santiago Arcos.
En el siguiente fragmento se han suprimido todos los signos de puntuación.
Restituya la puntuación correspondiente, a fin de construir un texto coherente y
correctamente cohesionado.

hay objetos que jamás nos pertenecerán del todo no importa que se trate de antiguas

reliquias familiares pasadas de mano en mano a través de las generaciones no importa si

los recibimos como regalo de cumpleaños o si pagamos por ellos una buena cantidad de

dinero estos objetos guardan siempre un revés una raíz que se extiende hacia otras

realidades un bolsillo secreto son objetos con rincones que no podemos limpiar ni

entender objetos que se marchan cuando dormimos y regresan al amanecer los espejos

por ejemplo no hay duda alguna de que los espejos pertenecen a esta categoría mas aún

si tuviésemos que hacer una lista de objetos fantasmales rebeldes incontrolables los

espejos ocuparían el primer lugar mucho se escribió sobre ellos poemas y cuentos

leyendas y relatos de horror se ha dicho que son puertas hacia países fantásticos se ha

dicho que son capaces de responder con sinceridad las oscuras preguntas de una

madrastra espejito espejito quién es la más hermosa pero aún así con tanta letra escrita

siempre habrá nuevas cosas que contar porque en los espejos cabe el mundo entero esta

es la historia de un espejo en particular pequeño casi del tamaño de la palma de una

mano y enmarcado en ébano un espejo que cruzó el mar para ser parte de múltiples

historias no todas buenas no todas malas un pequeño espejo que enlazó los destinos de

distintas personas en distintos tiempos en el comienzo hay un atardecer rojo y

polvoriento atravesado por una manada de cebras un paisaje extendido en su propia

soledad que aunque desde lejos puede parecer un dibujo es de carne y hueso de sed y

música
a) Pase a estilo indirecto las siguientes oraciones en estilo directo, efectuando las
correspondientes modificaciones de modo, tiempo, persona y otros elementos
deícticos:
1. Al enterarse, el padre de Stella dijo: “No quedará piedra sobre piedra”.

2. –Los niños –dijo– están muy entretenidos jugando en el jardín.

3. “Cecilia y Fernando se casan, creo, la semana que viene”, contestó apenado el


embajador de Chile.
4. –Enséñenme las fotografías ahora mismo –pidió la norteamericana.

5. Una vez en Roma, el guía les aconsejó: “No salgan a la noche ni dejen las ventanas
abiertas porque aquí resulta peligroso”.

6. “Ocupate cuanto antes de sacar tu pasaporte”, le recomienda Michael.

7. –¿Es verdad que mañana no habrá clase? –preguntó Ana Inés, pero nadie respondió.

8. “El hecho de que hoy tengas problemas no te autoriza a decirme cualquier cosa”, le
replicó su hermano.

9. Y la periodista le preguntó por último: “¿Se dio por vencido su pretendiente?”.

b) Traslade las siguientes oraciones al pasado:


1. Stella no cree que ese norteamericano haya venido por ella a Buenos Aires.

2. El padre se extraña de que la voz de su hijo cambie tanto.

3. Michael y Ana Inés se quejan de que Stella haya destrozado hoy el dintel de esta
puerta.

4. Ahora, el príncipe se lamenta de que su joven prometida haya tomado la costumbre


de vestirse de rojo.

5. Stella le aconseja que olvide esos pasatiempos infantiles y le promete que, cuando
haya dejado definitivamente ese entretenimiento, podrán ser amigos nuevamente.
6. Jacqueline se queja de que su marido la engañe con Marilyn. Pide a su marido que la
abandone y le advierte que si la relación continúa iniciará un juicio de divorcio.

7. Stella quiere saber si el norteamericano tiene buenas intenciones.

8. En el Consulado, informan que ayer se presentaron cuatro hombres muy extraños.

9. Dicen que aportarán las pruebas necesarias.

c) Agregue comillas o guiones cuando sea necesario:

1. Vete de aquí, ya mismo, le ordenó enojada su madre.


2. Le preguntó: ¿Qué cualidad se cotiza más en el periodismo norteamericano?
3. Pero usted, suelen decirme por aquí, no es un verdadero amigo de la Florida.
4. Y él le contestó:
No. No soy amigo de ninguna región ni de ninguna provincia. Yo creo que se puede
ser amigo de una muchacha, de un compañero y hasta de un senador vitalicio. Pero
las amistades con las provincias me parecen demasiado presuntuosas. Jamás, agregó,
he comido con ninguna.
5. ¡Socorro!, gritaban todos.
6. Ella le preguntó qué le gustaría ser en la vida.
7. Jack, contestó Stella, déjame en paz, no me atormentes.
8. Declaro ante Dios, en quien creo, que mi amor por ti es verdadero, le susurró al
oído.

d) ¿Cuáles, de los incisos que aparecen en negrita en los siguientes enunciados,


colocaría entre comas y cuáles entre guiones largos o paréntesis?
1. Anoche, un grupo de legisladores, sindicalistas y dirigentes leales al ex presidente
organizaba los últimos detalles de una concentración convocada para hoy en la
puerta de los Tribunales de Comodoro Py. La idea es esperar a Menem la cita con el
juez Jorge Urso es a las 10 y ofrecerle una ruidosa muestra de solidaridad.
2. Durante la movida jornada que se vivió ayer en el Hotel Presidente, donde Menem
cerró la tarde con un mensaje sobre su situación ver página 7, los celulares ardieron.
3. El hotel del empresario Aldo Elías quien supo ser un puente entre el menemismo
y Alfredo Yabrán lucía en su frente una bandera argentina de 50 metros, tan
gastada como desteñida.
4. Algunas empresas de electricidad Edesur, Edenor y Edelap se pronunciaron en
contra de la medida, argumentando que tendrán un costo mayor cuando deban
actualizar, cada semestre, los medidores de aquellos clientes que pagan tarifa
diferenciada.

2
5. Para Federico Norte investigador del Conicet de Mendoza el cambio "es malo para
algunas compañías eléctricas, las que van a tener que facturar un poco menos, sobre
todo en el oeste de la Argentina".
6. Este general, que dentro de seis días cumplirá 67 años, exhibe una apariencia
apacible que condice con su niñez campesina en Salto, en el noroeste de Buenos
Aires. Con la misma tranquilidad ayer dijo y sonó extraño que toma su prisión
como "un retiro espiritual”.
Balza perdió a su padre español y republicano cuando tenía 6 años. (...) Como
tantos militares se casó con la hija de un militar María Inés Serrano, 16 años
menor que él con la que tiene cuatro hijos. Fuera de la vida castrense Balza se
declara fanático del tango la Asociación Gardeliana le otorgó la Orden del
Porteño, de River y de la natación, y deja una porción de sus pasiones para
Baudelaire y Bach.
7. Paradojas de la historia, ahora Seineldín vuelve a ser su compañero de prisión
aunque en distintos edificios en Campo de Mayo.
8. Blair cobrará unas 47.000 libras más al año aproximadamente 70.500 dólares, lo
que sitúa la cifra global en 163.000 libras unos 245.000 dólares.

3
Coloque las comas necesarias

1. Pese a esa autonomía moral que la mayoría de edad significaba los niños carecían
de derechos.
2. Sigmund Freud el padre del psicoanálisis y del determinismo psíquico y sus muchos
seguidores argumentaron metódicamente que las vivencias traumáticas de la
infancia y en particular las experiencias de seducción sexual reales o imaginarias
eran la causa de los conflictos y comportamientos neuróticos de la edad adulta.
3. Más allá del ámbito del hogar los niños forman su grupo social.
4. Algunas parejas todavía usan los elementos tradicionales del mito del amor
romántico perfecto e inagotable para describir sus relaciones pero cada vez más
estos conceptos están siendo reemplazados por los heroicos esfuerzos que se
consideran necesarios para mantener una buena unión.
5. Aunque esta concepción histórica de la infancia subyace todavía en el inconsciente
colectivo de nuestra sociedad hoy la evolución imparable de la humanidad y los
frutos de la civilización nos desafían a enfrentarnos con el insólito protagonismo de
la infancia y con el extraordinario poder de los niños.
6. Las aventuras amorosas se dan incluso entre parejas que disfrutan de una relación
relativamente estable y feliz a pesar de que suponen un grave riesgo para la
estabilidad de la familia.
7. En conclusión cada cultura construye sus propias justificaciones de las conductas
violentas de sus miembros y provee las normas de licencia que les va a permitir
desatar impunemente sus impulsos agresivos.
8. Por otra parte de no haber sabido en su día lo que representaba Atenas lo mismo me
habría ido de viaje de novios a Roma.
9. En su discurso inicial Cascos no aludió al compromiso público que el pasado 5 de
abril adquirió el presidente Juan Pérez de atender con 8.000 millones de pesos las
necesidades urgentes de los deportados.
10. En el campo demócrata el único rival hasta el momento del vicepresidente Al Gore
el ex senador por Nueva Jersey Bill Bradley hizo público un comunicado que refleja
las dudas que se pueden observar en la mayoría de las opiniones publicadas.
11. En este país la cultura empresarial es escasa y los incumplimientos de las normas
preventivas por parte de las empresas son generalizados.
12. Primero se desprenden los Países Bajos y el Milanesado; luego Nápoles.
13. Afortunadamente todo ha terminado bien.
14. La igualdad escribe el político es una condición necesaria para la participación.
15. Vida y cultura no deberían ser cosas diferentes pero si llegaran a serlo y hubiera que
elegir uno preferiría quedarse con la cultura.
16. Ya en el Occidente el último factor económico el capitalismo ha servido de arma a
la masonería y ahora los banqueros se han apoderado diestramente de esa arma.
17. Habló con los coordinadores de área jefes de sección y trabajadores y aceptó todos
los acuerdos.

Vous aimerez peut-être aussi