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Plantas resistentes a cadmio, arsénico y mercurio
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Plantas resistentes a cadmio, arsénico y mercurio
20 de febrero de 2003
Una de las soluciones que se barajan como alternativa para la limpieza de suelos
contaminados por metales pesados es la fito-remediación, el uso de plantas que
absorban y acumulen esos contaminantes.
Las plantas toleran los metales pesados de forma
natural hasta un cierto límite. La cuestión es ¿puede
aumentarse el nivel de tolerancia? Para esa pregunta los
investigadores del Instituto de Bioquímica Vegetal y
Fotosíntesis han hallado una respuesta afirmativa y han
conseguido desarrollar, a nivel de laboratorio, plantas
que son resistentes simultáneamente a cadmio, mercurio
y arsénico (este último, un metaloide).
«Todo surgió a raíz del hallazgo de que la biosíntesis de
cisteína, un aminoácido implicado en el metabolismo de
las plantas, está regulada por metales pesados», detalla
Luis Carlos Romero, co-director del proyecto de
investigación junto a Cecilia Gotor. Cuando la planta
absorbe metales pesados, explica este investigador,
«estos desencadenan la biosíntesis de cisteína, que a su Comparación de plantas silvestres (dos fotos
vez genera la producción de fitoquelatinas, que se unen arriba) y cuatro líneas transformadas
independientes más resistentes al cadmio
a los metales pesados y los destoxifican». Este es uno
de los mecanismos de «asimilación y tolerancia» de los
metales por parte de las plantas.
A partir de esta correlación directa, los investigadores han modificado plantas de arabidopsis
para que sinteticen mayor cantidad de cisteína mediante la sobreexpresión de uno de los
genes implicados en el proceso, lo que aumentaría su capacidad de destoxificar más
cantidad de metales pesados. El resultado son plantas que toleran, a la vez, cadmio,
arsénico y mercurio. El nivel de tolerancia se ha aumentado hasta, en el caso del cadmio por
ejemplo, 400 micromolar, casi el doble del nivel de toxicidad en una planta silvestre (250
micromolar). Es, además, relevante la triple tolerancia. «Uno de los problemas típicos es que
los suelos suele haber más de un metal, y hasta ahora se han conseguido plantas tolerantes
a un sólo metal», apunta Luis Carlos Romero.
Conseguir mayor biomasa
El grupo ha
Ahora los investigadores están trabajando para conseguir
conseguido la misma modificación en plantas más grandes. La
plantas con arabidopsis, explica Romero, es un modelo clásico de
tolerancia al laboratorio pero es muy pequeña. «Se necesitan plantas
cadmio más grandes, con mayor biomasa, que podrán acumular
también más cantidad de metal».
aumentada hasta
casi el doble de lo El problema de poder aplicar la fito-remediación de forma
que tolera una efectiva pasa por resolver, además, otras cuestiones. Una
es qué hacer con las plantas una vez han acumulado el
planta silvestre metal. Y es que el metal pesado que la planta ha
acumulado no es tóxico para la propia planta pero sí lo
sería para cualquier organismo vivo que se alimentara de ella. Evitar que las plantas
modificadas entren en la cadena alimentaria, obligará a plantear métodos de control de la
superficie en la que se aplica la fito-remediación y de las propias plantas una vez
recolectadas, aunque este es un tema, confiesa el doctor Romero, que «va mucho más allá
de nuestra investigación y debe ser estudiado a nivel general».
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La contaminación por metales pesados es alta en toda Europa, sin duda directamente
causada por la actividad industrial y minera, aunque los problemas más graves se desatan
en el caso de vertidos accidentales como los de las minas Aznalcollar. Metales tóxicos como
plomo, mercurio, cadmio, arsénico y cromo, son muy dañinos para la salud humana y para
la mayoría de formas de vida. El gran handicap que presentan es que no son química ni
biológicamente degradables, con lo que se acaban acumulando en los suelos. Si se filtran a
las aguas residuales su control se hace mucho más difícil y acaban entrando en la cadena
alimentaria, bien a través del agua de bebida bien a través de los cultivos, cuando los suelos
agrícolas están contaminados. En este sentido, la fito-remediación se plantea como una
solución más o menos asequible para retener y controlar esos metales.

Más información:
OTT - Delegación del CSIC en
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Juan Martínez Armesto
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