El Peruano
103894 CASACIÓN
tener en cuenta los alcances de los principios de pluralidad de
instancias, congruencia y/o vinculación, y derecho de defensa,
tutelados a través del artículo 139 numerales 5, 6 y 14 de la
Constitución Política del Estado, y que dan un sentido distinto al
que el Ad quem le ha otorgado al enunciado, agrega que incurre en
error en su fundamento 3.10, en relación al hecho de haberse
declarado el abandono en segunda instancia, el cual restringe el
derecho de la administrada demandante de poder recurrir y/o
impugnar para que sea revisado precisamente en segunda
instancia. 3.3.2 En este caso se advierte que la recurrente
ASOCIACIÓN GRANJA INDUSTRIAL AGROPECUARIA “SANTA ROSA” – AGROPISAC,
formula su recurso en forma defectuosa y como si fuera un recurso
impugnatorio de apelación, no cumpliendo con los supuestos del
artículo 388 del Código Procesal Civil, en tanto señala que la Sala
Superior ha interpretado erróneamente el artículo 191 de la Ley del
Procedimiento Administrativo General; sin embargo no precisa de
manera concreta ni cumple con desarrollar con claridad la norma
denunciada, pues, la recurrente debe explicar en qué consistió la
infracción de manera específica y de qué modo afectó a la decisión
de la cuestión, objeto del proceso2, y más bien sus alegaciones
están dirigidas a expresar su discrepancia con la decisión de la
sentencia de vista al respecto (considerando 3.10), agréguese que
de manera extensa se limita a desarrollar normas de orden procesal
sin demostrar incidencia alguna. Por lo tanto el recurso no cumple
el presupuesto de claridad y precisión en la descripción de la
infracción normativa y no demuestra incidencia, conforme a la
exigencia de los numerales 2 y 3 del modificado artículo 388 del
Código Procesal Civil, razón por la cual deviene en improcedente.
3.3.3 Como se tiene señalado en el considerando segundo de esta
resolución, en nuestro ordenamiento jurídico el recurso de casación
como medio de impugnación es de carácter especial, y en función
nomofiláctica no constituye una posibilidad de acceder a una
tercera instancia, no se orienta a verificar un reexamen de la
controversia ni a la obtención de un tercer pronunciamiento por otro
tribunal sobre la misma pretensión y proceso; es más bien un
recurso singular que permite acceder a una Corte de Casación con
cognición especial para el cumplimiento de determinados fines,
que en nuestra legislación procesal civil, aplicable supletoriamente
al caso de autos, se ha previsto como tales la adecuada aplicación
del derecho objetivo al caso concreto, la uniformidad de la
jurisprudencia nacional por la Corte Suprema de Justicia. En este
orden el recurso de casación se encuentra sometido a estrictas
exigencias de procedibilidad previstas en el modificado artículo 388
del Código Procesal Civil; por lo que en este caso, el incumplimiento,
de la descripción clara y precisa de la infracción normativa acarrea
la declaración de improcedencia, como lo sanciona el artículo 392
del mismo Código: “El incumplimiento de cualquiera de los
requisitos previstos en el artículo 388 da lugar a la improcedencia
del recurso”, de aplicación supletoria a los procesos contenciosos
administrativos. III. DECISIÓN Por tales consideraciones, y de
conformidad con lo previsto en el artículo 36 del Texto Único
Ordenado de Ley N° 27584, Ley que Regula el Proceso
Contencioso Administrativo, concordante con el artículo 392 del
Código Procesal Civil, modificado por el artículo 1 de la Ley N°
29364, de aplicación al caso de autos, declararon: IMPROCEDENTE
el recurso de casación de fecha veintiuno de abril de dos mil
dieciséis, interpuesto por la demandante ASOCIACIÓN GRANJA
INDUSTRIAL AGROPECUARIA “SANTA ROSA” - AGROPISAC obrante a fojas
doscientos treinta y ocho del expediente principal, contra la
sentencia de vista expedida el cinco de abril de dos mil dieciséis,
obrante a fojas doscientos diecinueve del expediente principal;
ORDENARON la publicación de la presente resolución en el Diario
Oficial “El Peruano”, conforme a ley; en los seguidos por la
ASOCIACIÓN GRANJA INDUSTRIAL AGROPECUARIA “SANTA ROSA” –
AGROPISAC contra el Gobierno Regional de Tacna, sobre Acción
Contencioso Administrativa; y los devolvieron. Interviene la señora
Juez Suprema Ponente: Rueda Fernández.- S.S. LAMA MORE,
VINATEA MEDINA, RUEDA FERNÁNDEZ, WONG ABAD,
TOLEDO TORIBIO.
1 T.U.O de la Ley N° 27584 “Ley que regula el proceso contencioso
administrativo”, aprobado por D.S. N° 013-2008-JUS.
Articulo 36.- Requisitos de admisibilidad y procedencia
Los recursos tienen los mismos requisitos de admisibilidad y procedencia regulados
en el Código Procesal Civil. En caso de que el recurrente no acompañase la tasa
respectiva o la acompañase en un monto inferior, el Juez o la Sala deberán
conceder un plazo no mayor de dos días para que subsane el defecto.
2 Montero Aroca Juan – José Flores Matiés, El Recurso de Casación Civil, Edita:
Tirant Lo Blanch, Valencia, páginas 523 y 525.
C-1595140-47
CAS. Nº 6235-2015 LIMA
Sumilla: La sentencia de vista trasgrede los derechos fundamentales
a un debido proceso, ya que no se examina la Resolución Directoral
Nacional N° 410-INC, ni las Leyes N° 24074 y N° 28296, que regulan
de forma específica la protección a los bienes integrantes del
Patrimonio Cultural de la Nación, independientemente de su
condición privada o pública. Lima, quince de septiembre de dos mil
dieciséis.- LA SALA DE DERECHO CONSTITUCIONAL Y SOCIAL
PERMANENTE DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE LA
Miércoles 3 de enero de 2018
REPÚBLICA: VISTA; Con el acompañado, la causa en audiencia
pública llevada a cabo en el día de la fecha, con los Señores Jueces
Supremos: Lama More, Vinatea Medina, Rueda Fernández, Wong
Abad y Toledo Toribio; con lo expuesto en el Dictamen Fiscal
Supremo en lo Contencioso Administrativo; y luego de verificada la
votación con arreglo a Ley, se emite la siguiente sentencia: I.-
MATERIA DEL RECURSO DE CASACION: Se trata del recurso de
casación interpuesto por la Municipalidad Distrital de San Isidro, de
fecha seis de octubre de dos mil catorce, obrante a fojas doscientos
cuarenta, contra la sentencia de vista de fecha quince de agosto de
dos mil catorce, obrante a fojas doscientos siete, que revocó la
sentencia apelada de fecha veintiocho de diciembre de dos mil diez,
obrante a fojas setenta y nueve que declaró infundada la demanda,
y reformándola la declara fundada; en consecuencia, nula la
Resolución de Gerencia Municipal N° 380-2008-0200GM/MSI, y
restablece la validez de la resolución ficta de aprobación automática
de la Licencia de Construcción N° 033-98-DDU/MSI de fecha treinta
de octubre de mil novecientos noventa y ocho, otorgada a favor del
demandante del predio ubicado en la Avenida Conquistadores
esquina con Calle Cura Béjar Manzana 37, Lote S/N de la
Urbanización San Isidro, distrito de San Isidro. II.- FUNDAMENTOS
POR LOS CUALES SE HA DECLARADO PROCEDENTE EL
RECURSO DE CASACIÓN: Esta Sala Suprema mediante
resolución de fecha diecinueve de enero de dos mil dieciséis,
obrante a fojas cuarenta y nueve del cuaderno de casación, ha
declarado procedente el recurso de casación interpuesto por las
siguientes causales: a) Infracción normativa de los artículos 90 y
92 de la Ley Orgánica de Municipalidades - Ley N° 27972,
indicando que la Sala Superior ha realizado una interpretación
errónea, no ha tenido en cuenta las normas citadas sobre la
construcción, reconstrucción, ampliación, modificación o reforma de
cualquier inmueble lo que se sujeta al cumplimiento de los requisitos
que establezca el Reglamento Nacional de Construcciones y las
Ordenanzas o Reglamentos sobre seguridad de defensa civil y otros
organismos que correspondan, para garantizar la salubridad y
estética de la edificación; asimismo, no ha considerado los estudios
de impacto ambiental, conforme a Ley. Refiere que conforme a la
Primera Disposición Transitoria y Complementaria y Final del Texto
Único de Procedimientos Administrativos de la Municipalidad Distrital
San Isidro, dispone que excepcionalmente el silencio administrativo
negativo será aplicable en aquellos casos en los que se afecte
significativamente el Patrimonio Histórico Cultural de la Nación,
siendo así, se concluye que la Resolución de Gerencia Municipal N°
380-2008-0200-GM/MSI no se encuentra incursa en alguna de las
causales de nulidad del acto administrativo; y, b) Infracción
normativa por interpretación errónea de los artículos 31 y 202
de la Ley de Procedimiento Administrativo General - Ley N°
27444, alega que las citadas resoluciones administrativas cumplen
con el debido procedimiento administrativo, fueron debidamente
motivadas, por lo que no resulta válido, ni legal lo resuelto por la Sala
Superior en la resolución de vista materia de casación. III.-
CONSIDERANDO: PRIMERO: El procedimiento administrativo
tiene por finalidad la emisión de un acto que otorgue o deniegue un
derecho solicitado por el administrado o, en el caso del procedimiento
sancionador, la aplicación de sanciones por la comisión de una
infracción; procedimiento que debe cumplir con las formalidades
necesarias que exige la ley para que el acto emitido sea válido, el
mismo que también debe contener la motivación y fundamentación
del funcionario o entidad competente, por los cuales se decide
otorgar o denegar el derecho solicitado, o aplicar la sanción
correspondiente a la infracción cometida. A raíz de ello, nace el
proceso contencioso administrativo; cuya finalidad se encuentra
destinada a revisar en sede judicial, los actos que se emiten en dicho
procedimiento administrativo, ya sea porque se omitieron las
formalidades establecidas o porque la decisión del funcionario no se
encuentra ajustada a derecho. SEGUNDO: Asimismo, el artículo 1
del Texto Único Ordenado de la Ley N° 27584 -Ley que Regula el
Procedimiento Contencioso Administrativo, aprobado por Decreto
Supremo N° 013-2008-JUS1, indica que la finalidad de la acción
contencioso administrativa o proceso contencioso administrativo
prevista en el artículo 148 de la Constitución Política del Perú, es el
control jurídico por el Poder Judicial de las actuaciones de la
Administración Pública sujetas al derecho administrativo y la efectiva
tutela de los derechos e intereses de los administrados. Como se
observa; el proceso contencioso administrativo surge como la
manifestación del control judicial que debe existir sobre las
actuaciones de las entidades administrativas, los actos
Administrativos, el silencio administrativo y las actuaciones
materiales administrativas, protegiendo al administrado frente a
errores de forma y de fondo, que pueden cometerse al interior de un
procedimiento administrativo. TERCERO: Que, aún cuando las
causales declaradas procedentes versen sobre normas materiales,
corresponde examinar si la sentencia de vista se encuentra acorde
con el marco jurídico protegido por los derechos fundamentales a un
debido Proceso y la debida motivación de las resoluciones judiciales,
ya que la finalidad esencial del recurso de casación, es resguardar la
tutela de los derechos procesales con valor constitucional, con la
clara observancia de las normas sustantivas y procesales que
garantiza al justiciable el derecho de obtener de los órganos
jurisdiccionales una respuesta razonada y fundamentada,
El Peruano
Miércoles 3 de enero de 2018 CASACIÓN
respetando los principios de jerarquía de las normas, el de
congruencia procesal, la valoración de los medios probatorios;
constituyendo un deber del Juez emitir fallos de acuerdo a lo
establecido en los incisos 3 y 5 del artículo 139 de la Constitución
Política del Estado y en el inciso 4 del artículo 122, inciso 6 del
artículo 50 del Código Procesal Civil, en resguardo de los derechos
fundamentales citados en todas sus acepciones. CUARTO: Sobre el
derecho fundamental al debido proceso, el Tribunal Constitucional2
en reiterada jurisprudencia, viene sosteniendo que se trata de un
derecho –por así decirlo– continente puesto que comprende, a su
vez, diversos derechos fundamentales de orden procesal. En ese
sentido, afirma que: “(...) su contenido constitucionalmente protegido
comprende una serie de garantías, formales y materiales, de muy
distinta naturaleza, que en conjunto garantizan que el procedimiento
o proceso en el cual se encuentre inmerso una persona, se realice y
concluya con el necesario respeto y protección de todos los derechos
que en el puedan encontrarse comprendidos.”3. Por lo tanto,
podemos inferir que la vulneración a este derecho se efectiviza
cuando en el desarrollo del proceso, el órgano jurisdiccional no
respeta los derechos procesales de las partes; se obvien o alteren
actos de procedimiento; la tutela jurisdiccional no es efectiva y/o el
órgano jurisdiccional deja de motivar sus resoluciones. QUINTO: En
cuanto al derecho a la tutela jurisdiccional efectiva, exige que,
cuando una persona requiera la protección de su derecho o de sus
intereses legítimos, aquello sea atendido por los órganos
jurisdiccionales mediante un proceso adecuado donde se respeten
las garantías mínimas de los litigantes, esto es, de ambas partes en
el proceso. “(…) Ello es así, toda vez que no sólo se busca la defensa
de los intereses de la parte accionante sino también los del sujeto
requerido, estando sus derechos también abarcados en la tutela
jurisdiccional efectiva. Tal derecho se trata, por tanto, de un derecho
continente, esto es que abarca una serie de otros derechos
expresamente señalados o implícitamente deducidos de aquel. En la
doctrina, se ha señalado que este derecho abarca principalmente
tres etapas: El acceso a los órganos jurisdiccionales, el cumplimiento
de las normas y derechos que regula el debido proceso, y el de la
ejecución de la resolución obtenida.”4 SEXTO: En ese mismo
horizonte, el derecho a la motivación de las resoluciones judiciales,
que forma parte del contenido esencial del derecho al debido
proceso, garantiza que la decisión expresada en el fallo o resolución
sea consecuencia de una deducción razonada de los hechos del
caso, las pruebas aportadas y su valoración jurídica, siendo exigible
que toda resolución, a excepción de los decretos, contenga los
fundamentos de hecho y de derecho, así como la expresión clara y
precisa de lo que se decide u ordena. Esta garantía se respeta
siempre que exista fundamentación jurídica, congruencia entre lo
pedido y lo resuelto y, por sí misma la resolución judicial exprese una
suficiente justificación de la decisión adoptada. Su finalidad en todo
momento es salvaguardar al justiciable frente a la arbitrariedad
judicial, toda vez que garantiza que las resoluciones judiciales no se
encuentren justificadas en el mero capricho de los magistrados, sino
en datos objetivos que proporciona el ordenamiento jurídico o los
que se deriven del caso. SÉPTIMO: Que, de conformidad con el
escrito de demanda de fecha diez de junio de dos mil ocho, obrante
a fojas trece del expediente principal, en el presente caso se
pretende la nulidad de la Resolución de Gerencia Municipal N° 380-
2008-0200-GM/MSI de fecha doce de marzo de dos mil ocho, que
declara la nulidad de oficio de la resolución aprobatoria ficta a la
solicitud de Revalidación de Licencia de Construcción N° 033-98-
DDU/MSI de fecha treinta de octubre de mil novecientos noventa y
ocho, respecto del inmueble ubicado en la Avenida Conquistadores
esquina con Calle Cura Béjar Manzana 37, Lote S/N de la
Urbanización San Isidro, y en consecuencia se mantenga la validez
de la aprobación automática de la revalidación ya mencionada.
OCTAVO: Funda su pretensión, señalando que la resolución
cuestionada declara de oficio la nulidad de la aprobación automática
de la revalidación de la licencia de construcción, por encontrarse el
inmueble en la zona monumental del Olivar de San Isidro, aprobada
por Resolución Directoral N° 410/INC de fecha dos de diciembre de
mil novecientos noventa y ocho, emitida por el Instituto Nacional de
Cultura, lo cual correspondía aplicar el silencio negativo al afectar el
interés público de la resolución aprobatoria ficta, sin considerar que
desde el treinta de octubre de mil novecientos noventa y ocho cuenta
con autorización, que fue prorrogada hasta el treinta de octubre de
dos mil dos. Asimismo, no se toma en cuenta que la Resolución
Directoral Nacional N° 410/INC nunca fue publicada; que el artículo
7 de la Ordenanza N° 950-MML establece en las restricciones que se
incorporen en la reglamentación especial del Bosque del Olivar no
se incluirán los predios ubicados frente a las Avenidas Pardo y
Aliaga, Santa Cruz y Conquistadores, en donde se encuentra
ubicado su inmueble; y que el artículo 2 de la Ordenanza N° 1126 de
la Municipalidad Distrital San Isidro que aprueba la actualización de
la reglamentación especial de la zona monumental del Olivar de San
Isidro, establece la exclusión de los predios ubicados con frente a las
Avenidas Pardo y Aliaga, Santa Cruz y Conquistadores, para efectos
de zonificación de dicha zona monumental. NOVENO: Mediante
resolución de fecha quince de agosto de dos mil catorce, obrante a
fojas doscientos siete, se revocó la sentencia apelada que declaró
infundada la demanda, y reformándola declararon fundada la misma;
en consecuencia, nula la Resolución de Gerencia Municipal N° 380-
103895
2008-0200GM/MSI, y restablece la validez de la resolución ficta de
aprobación automática de la Licencia de Construcción N° 033-98-
DDU/MSI de fecha treinta de octubre de mil novecientos noventa y
ocho, otorgada a favor del demandante en el predio ubicado en la
avenida Conquistadores esquina con Calle Cura Béjar Manzana 37,
Lote S/N de la Urbanización San Isidro– San Isidro. Señala que las
condiciones y reglas valoradas para la emisión de la Licencia de
Construcción N° 033-98-DDU/MSI de fecha treinta de octubre de mil
novecientos noventa y ocho no pueden ser variadas por la expedición
de una norma posterior, como la Resolución Directoral N° 410/INC
de fecha dos de diciembre de mil novecientos noventa y ocho, por lo
que se transgrede la garantía de la irretroactividad normativa,
previsto en el artículo 103 de la Constitución Política del Perú. La
resolución administrativa impugnada no explica las razones por las
que considera que el otorgamiento de licencia y, su posterior
ampliación, afectan de manera significativa el interés público
(previsto en la Primera Disposición Transitoria Complementaria y
Final de la Ley N° 29060, Ley del Silencio Administrativo) o el
Patrimonio Histórico de la Nación, tampoco hace un desarrollo
conceptual respecto al detrimento que importaría el permiso
concedido a favor de la actora. La aplicación del silencio negativo
implica la afectación al derecho que válidamente obtuvo la
accionante, lo cual no se encuentra justificado, y determina que la
resolución administrativa se encuentre inmersa en causal de nulidad
prevista en el artículo 10.1 de la Ley del Procedimiento Administrativo
General -Ley N° 27444. DÉCIMO: En el presente caso, examinando
la sentencia de vista se verifica que como fundamento de su decisión
expone que la resolución administrativa cuestionada transgrede la
garantía de la irretroactividad normativa porque las condiciones y
reglas valoradas para la emisión de la Licencia de Construcción N°
033-98-DDU/MSI de fecha treinta de octubre de mil novecientos
noventa y ocho, no pueden ser variadas por la Resolución Directoral
N° 410/INC publicada el seis de diciembre de mil novecientos
noventa y ocho, por ser posterior; Sin embargo, no se tuvo en cuenta
que la autorización concedida por la referida licencia de construcción
tuvo como fecha de caducidad tres años, que venció el treinta de
octubre de dos mil uno; fecha en que estuvo vigente la Resolución
Directoral Nacional N° 410/INC, que declaró como zona monumental
del Olivar de San Isidro los sectores S-1 a S-12, dentro del cual se
encontraba inmerso el inmueble; motivo por el cual resultaba exigible
para la revalidación pretendida, contar con la autorización previa del
Instituto Nacional de Cultura, conforme lo prescribía el artículo 12 de
la Ley General de Amparo al Patrimonio Cultural de la Nación
aprobada por Ley N° 240475 de fecha cinco de enero de mil
novecientos ochenta y cinco, y lo prescribe en la actualidad el
artículo 22 de la Ley General del Patrimonio Cultural de la Nación -
Ley Nº 282966. UNDÉCIMO: Por otro lado, si bien la Sala Superior
indica que se debe tomar en cuenta la conducta de la Municipalidad
demandada, quien efectuó prórrogas sucesivas a la licencia de
construcción, conforme queda demostrado con la Licencia de
Construcción N° 21-01-26-DDU/MSI de fecha quince de junio de dos
mil uno, que concedió prórroga hasta el treinta de octubre de dos mil
dos; cierto es, que omite evaluar que el otorgamiento de la Licencia
de Construcción se encuentre emitida acorde con el ordenamiento
legal vigente, toda vez, que el goce de los derechos presupone que
estos hayan sido obtenidos conforme a Ley, ya que el error no
genera derecho; más aún, cuando las normas antes descritas
(artículo 12 de la Ley General de Amparo al Patrimonio Cultural de la
Nación aprobada por Ley N° 24047, concordante con el artículo 22
de la Ley General del Patrimonio Cultural de la Nación aprobada por
Ley Nº 28296), establecen expresamente que las licencias que
carezcan de la autorización previa del Instituto Nacional de Cultura
son nulas, sin perjuicio de las responsabilidades legales que
correspondan a los funcionarios; dispositivos legales que deben
analizarse porque regulan de forma específica la protección a los
bienes integrantes del Patrimonio Cultural de la Nación,
independientemente de su condición privada o pública.
DUODÉCIMO: Asimismo, se aprecia que la sentencia de vista
incurre en error al señalar en su octavo considerando que los
argumentos vertidos en la resolución administrativa impugnada para
declarar la nulidad de oficio de la resolución aprobatoria ficta de la
solicitud de revalidación de la Licencia de Construcción N° 033-98-
DDU/MSI, resulta insuficiente porque aún cuando la Primera
Disposición Transitoria Complementaria y Final de la Ley N° 29060
– Ley del Silencio Administrativo, indica que la aplicación del silencio
administrativo negativo se efectúa cuando se afecte el interés
público, no se precisa en qué magnitud la revalidación de la licencia
de obra se encontraría afectando este interés general. Esto porque
no efectúa una debida apreciación de este dispositivo legal, el cual
indica que: Excepcionalmente, el silencio administrativo negativo
será aplicable en aquellos casos en los que se afecte
significativamente (…) el patrimonio histórico cultural de la nación,
teniendo en cuenta que nos encontramos discutiendo la procedencia
de la autorización de construcción de un inmueble que se encuentra
ubicado en un área declarada como zona monumental. DÉCIMO
TERCERO: En ese sentido, del examen de la sentencia de vista se
aprecia que contiene una motivación insuficiente7 porque sustenta
su decisión únicamente en la aplicación del artículo 103 de la
Constitución Política del Perú, sin evaluar el contenido de la
Resolución Directoral Nacional N° 410-INC, la Ley General de

103896 CASACIÓN
Amparo al Patrimonio Cultural de la Nación aprobada - Ley N° 24047
y la Ley General del Patrimonio Cultural de la Nación - Ley Nº 28296;
siendo pertinente además que forme parte de este análisis, la
Ordenanza N° 950-MML que “Aprueba el Reajuste Integral de
Zonificación de Usos del Suelo del distrito de San Isidro y un sector
del distrito de Magdalena del Mar, que son parte del Área de
Tratamiento III de Lima Metropolitana” y la Ordenanza N° 1126 -
MML, que “Aprueba la actualización de la Reglamentación Especial
de la Zona Monumental Olivar de San Isidro”. Asimismo, se deberá
observar lo previsto en la Primera Disposición Transitoria
Complementaria y Final de la Ley N° 29060, que indica que el
silencio administrativo negativo se aplica excepcionalmente cuando
afecte el patrimonio cultural de la nación. DÉCIMO CUARTO:
Siendo ello así, por las consideraciones expuestas se debe declarar
fundado el recurso de casación, ya que se encuentra demostrado
que la sentencia de vista vulnera el deber de motivación de las
resoluciones judiciales, que forma parte del derecho fundamental al
debido proceso, previstos en el artículo 139 incisos 3 y 5 de la
Constitución Política del Perú; careciendo de objeto emitirse
pronunciamiento por las causales materiales denunciadas, por los
efectos nulificantes de la infracción antes referida. IV. DECISION:
Por estas consideraciones, declararon: FUNDADO el recurso de
casación interpuesto por la Municipalidad Distrital de San Isidro, de
fecha seis de octubre de dos mil catorce, obrante a fojas doscientos
cuarenta; en consecuencia NULA la sentencia de vista de fecha
quince de agosto de dos mil catorce, obrante a fojas doscientos
siete; ORDENARON a la Sala de mérito que dicte un nuevo
pronunciamiento en atención a los lineamientos precedentes; en
los seguidos por Constructora Carolin Sociedad Anónima, contra la
Municipalidad Distrital de San Isidro, sobre Acción Contencioso
Administrativa; DISPUSIERON la publicación de la presente
resolución en el Diario Oficial “El Peruano” conforme a ley; y los
devolvieron. Juez Supremo Ponente: Señor Vinatea Medina. S.S.
LAMA MORE, VINATEA MEDINA, RUEDA FERNÁNDEZ, WONG
ABAD, TOLEDO TORIBIO.
1 Artículo 1.- Finalidad. La acción contencioso administrativa prevista en el Artículo
148 de la Constitución Política tiene por finalidad el control jurídico por el Poder
Judicial de las actuaciones de la administración pública sujetas al derecho
administrativo y la efectiva tutela de los derechos e intereses de los administrados.
Para los efectos de esta Ley, la acción contencioso administrativa se denominará
proceso contencioso administrativo.
2 Sentencia de fecha dieciocho de maro de dos mil catorce, recaída en el Expediente
N.° 03433-2013-PA/TC. En los seguidos por Servicios Postales del Perú S.A. –
SERPOST S.A. (Fundamento Jurídico 3)
3 Sentencia de fecha tres de mayo de dos mil seis, recaída en el Expediente N°
7289-2005-AA/TC. En los seguidos por Princeton Dover Corporation Sucursal
Lima-Perú (Fundamento jurídico 5).
4 CAS. Nº 405-2010, LIMA-NORTE, del quince de marzo de dos mil once,
considerando octavo. En esta oportunidad la Sala de Derecho Constitucional y
Social Permanente declaró infundado el recurso de casación interpuesto por
la Asociación de Propietarios de la Urbanización Sol de Lima; en los seguidos
contra la Municipalidad Distrital de San Martín de Porres y otro; sobre proceso
contencioso administrativo. (negrita y subrayado nuestro).
5 Artículo 12.- Los planes de desarrollo urbano y rural, los de obras públicas en
general y los de construcciones o restauraciones privadas que de un modo u
otro se relacionen con un bien cultural inmueble serán sometidos por la entidad
responsable de la obra a la autorización previa del Instituto Nacional de Cultural.
Las licencias que carezcan de tal autorización son nulas, sin perjuicio de las
responsabilidades legales que correspondan a los funcionarios y particulares
respectivos.
Las obras no autorizadas serán suspendidas de inmediato por la autoridad
municipal de la circunscripción.
6 Artículo 22.- Protección de bienes inmuebles
22.1 Toda obra pública o privada de edificación nueva, remodelación, restauración,
ampliación, refacción, acondicionamiento, demolición, puesta en valor o cualquier
otra que involucre un bien inmueble integrante del Patrimonio Cultural de la
Nación, requiere para su ejecución de la autorización previa del Instituto Nacional
de Cultura.
2.2 Es nula la licencia municipal que carezca de dicha autorización, sin perjuicio de
las responsabilidades administrativas, civiles y penales que correspondan. (…)
7 “La motivación insuficiente. Se refiere, básicamente, al mínimo de motivación
exigible atendiendo a las razones de hecho o de derecho indispensables para
asumir que la decisión está debidamente motivada. Si bien, como ha establecido
este Tribunal en reiterada jurisprudencia, no se trata de dar respuestas a cada una
de las pretensiones planteadas, la insuficiencia, vista aquí en términos generales,
sólo resultará relevante desde una perspectiva constitucional si es que la ausencia
de argumentos o la “insuficiencia” de fundamentos resulta manifiesta a la luz de
lo que en sustancia se está decidiendo” (Fundamento Jurídico 13). Expediente N°
04298-2012-PA/TC. Sentencia de fecha diecisiete de abril de dos mil trece. En los
seguidos por Roberto Torres Gonzales Cisneros.-
C-1595140-48
CAS. Nº 14243-2015 LIMA SUR
SUMILLA: Existe motivación insuficiente, cuando no existe el
mínimo de motivación exigible atendiendo a las razones de hecho
o de derecho, indispensables para asumir que la decisión está
debidamente motivada; lo cual se ha configurado en la sentencia
de mérito. Lima, dieciocho de mayo de dos mil diecisiete.- LA
SALA DE DERECHO CONSTITUCIONAL Y SOCIAL
El Peruano
Miércoles 3 de enero de 2018
PERMANENTE DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE LA
REPÚBLICA: - VISTA la causa, en audiencia pública realizada en
la fecha, integrada por los señores Jueces Supremos: Walde
Jáuregui - Presidente, Vinatea Medina, Rueda Fernández, Toledo
Toribio y Bustamante Zegarra; y producida la votación conforme a
ley, se ha emitido la siguiente resolución: I.- MATERIA DEL
RECURSO: Se trata del recurso de casación interpuesto por el
demandante Tony Américo Esplana Huamán, de fecha dieciséis
de abril de dos mil quince, obrante a fojas cuatrocientos sesenta y
siete, contra la sentencia de vista de fecha treinta de enero de dos
mil quince, obrante a fojas cuatrocientos cincuenta y uno, expedida
por la Sala Civil de la Corte Superior de Justicia de Lima Sur, que
revocó la sentencia de primera instancia de fecha treinta de abril de
dos mil catorce, obrante a fojas trescientos veintisiete, que declara
fundada la demanda, y reformándola la declaró infundada. II.-
FUNDAMENTOS POR LOS CUALES SE HA DECLARADO
PROCEDENTE EL RECURSO: El recurso de casación ha sido
declarado procedente mediante resolución de fecha veintinueve de
abril de dos mil dieciséis, obrante a fojas ciento noventa y uno del
cuaderno formado por esta Sala Suprema, por las siguientes
causales: a) Infracción normativa del artículo VII del Título
Preliminar del Código Procesal Civil; precisa el recurrente, que
en la sentencia recurrida se afirma que la representante de la
Comunidad Campesina de Llanavilla, actuó excediéndose de las
facultades que le fueron otorgadas; sin embargo, se agrega que la
calificación jurídica que le atribuyó a dicho hecho ha sido errónea,
pues se solicitó la nulidad del acto jurídico cuando lo adecuado era
solicitar la “anulabilidad del acto jurídico”, derivando en una
invocación errónea de su pretensión, lo cual no modifica su
petitorio; no obstante en la sentencia recurrida no se emite un
pronunciamiento sobre los hechos atribuidos y probados en el
proceso, apartándose de lo dispuesto por el artículo VII del Título
Preliminar del Código Procesal Civil y vulnerándose su derecho a
la tutela jurisdiccional efectiva. b) Infracción normativa del
artículo 139 incisos 3 y 5 de la Constitución Política del Estado;
argumenta, que existe una motivación insuficiente en la resolución
impugnada, por cuanto hace referencia, en el punto diecisiete, que
los diversos cuestionamientos constituyen la condición suspensiva
prevista en el artículo 978 del Código Civil, sin que dicha conclusión
sea precedida de una motivación, respecto a explicar las razones
por las cuales el “acto material” de identificación del área de
terreno, que no constituye un acto jurídico previsto para los
supuestos del artículo 978 del Código Civil, debe ser considerado
un acto de propiedad exclusiva. c) Infracción normativa de los
artículos V del Título Preliminar, 156, 161 y 162 del Código
Civil; y del artículo 10 inciso b) de la Ley N° 26505, refiere, que
ello ha ocurrido esencialmente cuando en la sentencia recurrida se
menciona que existe manifestación de voluntad en la dación en
pago; sin embargo, la voluntad de la Asamblea General de la
Comunidad Campesina de Llanavilla, reunida el día seis de junio
del dos mil uno, en ninguna parte y en ningún momento fue
transferir vía dación en pago a la codemandada Ruta de Manchay
Perú Sociedad Anónima, el 6% del predio inscrito en la Ficha
Registral N° 222-H del Registro de Propiedad Inmueble de Lima,
por el contario, solo se acordó entregarle una contraprestación, en
caso se beneficie patrimonialmente a la Comunidad, incluso del
futuro beneficio material se le retribuiría, tan es así, que jamás
existió el deseo de transferirle la propiedad, y que lo acordado por
la Asamblea General era pagar a esta empresa con el veinte por
ciento (20%) de lo que recupere, es decir, primero debía demostrar
que es lo que se había recuperado, y luego de esos terrenos
recuperados se le pagaría con el 20% de los mismos. d) Infracción
normativa del artículo 219 numerales 1 y 3 del Código Civil; el
recurrente afirma que no ha existido manifestación de voluntad de
de parte de la Comunidad y que su objeto era jurídicamente
imposible, por ser contrario a las normas legales imperativas
contenida en los artículos 156 del Código Civil y el inciso b del
artículo 10 de la Ley N° 26505, precisando que al no existir la
voluntad de la Comunidad de disponer de las acciones y derechos
de su propiedad, vía dación en pago, obviamente, tampoco existe
la expresión manifiesta de la Asamblea General de delegar a la
codemandada Jhon Robles & Jhon Lojas S.A. (actualmente Ruta
de Manchay Perú Sociedad Anónima) la facultad de disponer de un
bien que había sido transferido parcialmente en forma previa a los
comuneros, y tenía la calidad de bien indiviso, al menos con más
de veinte copropietarios, y que la supuesta delegación efectuada
para independizar o sub-dividir, son actos nulos, por ende la
identificación de los predios, en el acto efectuado en forma
unilateralmente por la demandada, también es nulo al sustentarse
en actos inexistentes. III.- CONSIDERANDO: PRIMERO: Mediante
escrito de fecha tres de octubre de dos mil once, obrante a fojas
treinta y seis, Tony Américo Esplana Huamán, interpone demanda
de nulidad de acto jurídico, contra la Comunidad Campesina de
Llanavilla y Ruta Manchay Perú Sociedad Anónima, a fin que: a) Se
declare la nulidad de la transferencia de propiedad, vía dación en
pago, celebrada por la Comunidad Campesina de Llanavilla a favor
de Ruta Manchay Perú Sociedad Anónima, del seis por ciento (6%)
de las acciones y derechos del inmueble inscrito en la Ficha N°
222-H, continuada en la Partida Registral N° 11090794 del Registro
de Propiedad Inmueble de Lima; b) se declare la ineficacia de la