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PSICOLOGÍA EDUCATIVA
“TEORÍAS DEL APRENDIZAJE”
AUTORES:
CALERO LOPE, DIANA
DOCENTE:
MG. NADIA TOLEDO CHOQUEHUANCA
CICLO ACADÉMICO:
IV CICLO
SECCIÓN:
A1
2012 – II
Dedicamos este trabajo a nuestros padres, que nos dieron la vida y la fortaleza, en cada paso
que hemos dado y seguiremos dando para cumplir nuestro objetivo.
A dios que nos cuida y nos protege en todo momento de todo peligro que nos asecha.
INDICE
INTRODUCCIÓN……………………………………………………………… 1
BIOGRAFÍA……………………………………………………………………..... 2
3.1 Autorreforzamiento.…………………………………………………………. 10
3.2 Autoeficacia………..………………………………………………………… 10
4.1 Niñez………………………………………………………………………… 12
4.2 Adolescencia………………………………………………………………… 12
4.3 Adultez………………………………………………………………………. 12
4.4 Vejez…………………………………………………………………………. 13
CONCLUSION………………………………………………………………… 14
BIBLIOGRAFIA………………………………………………………………... 15
INTRODUCCION
Por lo tanto, a efecto de ilustrar más detenidamente el tipo de investigación que surge de la
teoría de Bandura, incluimos a continuación trabajos representativos sobre la autoeficacia y el
efecto que los modelos de la televisión tienen en la conducta agresiva, y cuan influyente puede
ser un incentivo y/o motivación en un preescolar para el reforzamiento de su enseñanza.
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BIOGRAFIA
Bandura tiene dos hijas, además de la investigación le gusta ir de excursión a las montañas y
asistir a la opera
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I. TEORIA COGNOSCITIVA SOCIAL DE BANDURA
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1.1 TEORIA COGNOSCITIVA SOCIAL DE BANDURA
La teoría cognoscitiva social plantea que los factores sociales y cognoscitivos, así como la
conducta, tienen papeles importantes en el aprendizaje. Los factores cognoscitivos pueden
incluir las expectativas de éxito del estudiante, y los factores sociales la observación de los
estudiantes de la conducta de sus padres.
Bandura desarrollo un modelo del determinismo reciproco que consiste en tres factores
principales: conducta, persona cognoscitiva y ambiente.
También llamado imitación o modelamiento es el aprendizaje que ocurre cuando una persona
observa e imita la conducta de otros. La capacidad para aprender patrones de conducta a través
de la observación elimina el tedioso aprendizaje por ensayo y error. Este proceso de
aprendizaje por observación requiere de menos tiempo que el condicionamiento operante.
La idea básica de Bandura es que también se aprende por medio de la observación o el ejemplo
y no solo en razón del reforzamiento directo no niega que este ultimo influya en la conducta,
sino que se limita a rechazar la idea de que la conducta solo se aprende o modifica por medio
del reforzamiento directo, señala que el condicionamiento operante, en cuyo caso la conducta
por ensayo y error prosigue hasta encontrar la respuesta correcta, es un medio ineficiente y
hasta peligroso para aprender habilidades según Bandura, casi toda la conducta humana se
aprende intencionalmente o accidentalmente, por medio del ejemplo aprendemos observando
a otros e imitándoles.
C
CONDUCTA
B A
FACTORES
COGNOSCITIVOS DE LA AMBIENTE
PERSONA
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1.3 LOS ESTUDIOS CON EL MUÑECO BOBO
Se asignó al azar a la misma cantidad de alumnos de jardín de niños a ver una de tres
filmaciones en la que una persona (el modelo) golpea a un juguete de plástico del tamaño de un
adulto llamado Bobo que mide entre 1 y 1.20 metros de altura. En la primera filmación, el
agresor fue recompensado con dulces, refrescos y elogios por su conducta agresiva. En la
segunda filmación, el agresor fue criticado y golpeado por la conducta agresiva. Y en la tercera
filmación, no se presentaron consecuencias por la conducta del agresor.
Posteriormente se dejó a cada niño solo en una habitación llena de juguetes, incluyendo el
muñeco bobo. La conducta de los niños se observó a través de una cámara gessell. Los niños
que observaron las filmaciones en que la conducta del agresor fue reforzado o no recibió
castigo imitaron más la conducta agresiva que los niños que observaron al agresor castigado.
Como era de esperarse, los niños fueron más agresivos que las niñas.
Bandura comparo la conducta de los padres de dos grupos de niños. De acuerdo con la teoría
de Bandura, la conducta de los niños reflejaba la conducta de sus padres. La investigación
mostro que los padres de los niños inhibidos y los de los chicos agresivos mostraban también
estas características.
El modelamiento verbal se utiliza a menudo para proporcionar instrucciones, una técnica que
puede aplicarse para enseñar destrezas como la conducción de un automóvil, como cuando un
instructor de manejo sirve de modelo al realizar las conductas implicadas en la conducción.
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II. LOS PROCESOS DE APRENDIZAJE POR
OBSERVACION
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2.1 PROCESO DE ATENCIÓN
El aprendizaje por observación no será posible sin que el sujeto perciba y atienda a las jugar al
tenis, nadar o adquirir habilidades jugar dice Bandura (1987, p. 73) “es una de las subfunciones
cruciales del aprendizaje por observación”, el sujeto responde solo a unas pocas de las posibles
influencias modeladoras que se dan en su entorno. Esta selección está determinada por las
percepciones y habilidades cognitivas del observador, las características del modelo, las
propiedades de la actividad y otros elementos derivados de la situación de interacción.
Los niños pequeños tienden a prestar atención solo a las conductas simples que están dentro
de su capacidad cognitiva; no obstante, como se distraen con facilidad, las acciones modeladas,
si se presentan con colores y sonidos llamativos, las aprenden mejor que en silencio. Esto ha
sido apoyado con numerosas investigaciones.
En las formas más complejas de modelado son suficientes las instrucciones verbales que
destacan aspectos importantes y el uso de ejemplos. Meichenbaum (1977) ha comprobado que
cuando el modelo ejecuta una tarea en silencio, los resultados son menos insatisfactorios que si
verbaliza los pasos que va dando en la ejecución de la terea. En el contexto escolar esto se
traduce en la presentación material, destacando los conceptos clave, analizando las semejanzas
y diferencias y usando ejemplos.
Para poder imitar la conducta que un modelo es imprescindible que se recuerde. Cuando el
observador atiende a la conducta de un modelo se produce la adquisición a través de la
presencia física y las instrucciones del modelo, pero cuando el modelo no está presente, el
observador, antes de poder reproducir la conducta, tiene que tener una representación mental
de ella por medio de la codificación simbólica, fundamentalmente de imágenes y
construcciones verbales. Estamos hablando de que se producen representaciones internas, de
carácter simbólico en la memoria. Estas representaciones guían la conducta en la ejecución de
lo aprendido.
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2.3 PROCESO DE PRODUCCION
Una vez que el sujeto adquiere la representación simbólica de la conducta observada, puede
producir un mínimo, al menos, de las pautas de actividad proporcionadas por el modelo. En
los primeros intentos se producen, generalmente, errores; estas discrepancias entre la propia
ejecución y la representación simbólica sirven de guía para corregir la propia ejecución y la
representación simbólica sirven de guía para corregir la propia actividad. Desde este punto de
vista, la enseñanza debe centrarse en proporcionar información más que refuerzo externo
para facilitar retroalimentación de las ejecuciones correctas y de las incorrectas.
Generalmente, el sujeto no puede visualizarse nada más que parte de su actividad, como ocurre
cuando intenta aprender a jugar al tenis, nadar o adquirir habilidades para interacción social.
En este caso el modelo correctivo por parte del experto o el profesor proporciona información
sobre los puntos clave para poder reproducir la conducta del modelo.
El hecho de atender, retener y tener la capacidad de reproducir conducta del modelo implica
que ha habido adquisición o aprendizaje, pero, para Bandura, a diferencia del conductismo
tradicional, la adquisición es un proceso distinto del de ejecución: “… las personas no realizan
todo lo que aprenden. Pueden llegar a adquirir y a retener las capacidades necesarias para
ejecutar adecuadamente las actividades modeladas, pero no desarrollarlas nunca o en contadas
ocasiones” (Bandura, 1987, p.89).
Para que el sujeto ejecute y mantenga una conducta aprendida es necesario que este motivado
para hacerlo. Bandura (1965) realizo una investigación que demostraba como la adquisición de
una conducta no implicaba, necesariamente, la ejecución de dicha conducta si no era
acompañada de incentivos.
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III. AUTORREFORZAMIENTO Y AUTOEFICACIA
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3.1 AUTORREFORZAMIENTO:
Es tan importante como el reforzamiento aplicado, por otros particularmente en el caso de los
niños mayores y adultos. Establecemos normas personales de conducta y de logro. Nos
recompensamos cuando los cumplimos. A veces, el reforzamiento auto administrado es
tangible (un nuevo par de tenis o un automóvil de último modelo). Otras veces es emocional
(el orgullo o la satisfacción que procura un trabajo bien hecho). El castigo auto administrado se
expresa por medio de la vergüenza, la culpa o la depresión por no habernos portado como
quisiéramos. En el aspecto conceptual, el autor reforzamiento se parece a lo que otros teóricos
llaman conciencia o superyó, pero Bandura niega que sean idénticos.
3.2 AUTOEFICACIA:
Lo bien que cumplamos nuestros estándares conductuales determina nuestra auto eficacia. En
el sistema de Bandura, la autoeficacia se refiere a los sentimientos de adecuación, eficiencia y
capacidad al afrontar la vida. Alcanzar y mantener nuestros estándares de desempeño mejora la
autoeficacia; el fracaso para alcanzarlos y mantenerlos la reduce.
Bandura describió también la autoeficacia en términos de nuestra percepción del control, que
tenemos de nuestra vida.
Los individuos se fuerzan por ejercer control sobre los acontecimientos que afectan su vida. Al
ejercer influencia en las esferas en que pueden tener cierto control, son más capaces de realizar
los futuros deseados y de impedir los no deseados. El esfuerzo por controlar las circunstancias
de la vida permea casi todo lo que la gente hace, porque puede asegurarle innumerables
beneficios personales y sociales.
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IV. ETAPAS DEL DESARROLLO DEL
MODELAMIENTO Y DE LA AUTOEFICACIA
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4.1 NIÑEZ
Alrededor de los dos años, los niños han desarrollado el proceso de atención, retención y
producción para empezar a imitar la conducta cierto tiempo después de observarla, en lugar de
hacerlo en forma inmediata. Las conductas que vemos com0 reforzamos y que decidimos
imitar, cambiaran con la edad
Los niños pequeños son reforzados sobre todo por estímulos físicos como comida, afecto o
castigo. Los niños mayores se asocian los reforzadores físicos con signos de aprobación o
desaprobación las conductas de los padres que conducen a una mayor autoeficacia difieren
para niños y niñas. Algunos estudios han demostrado que los hombres con alta autoeficacia
tuvieron en su niñez relaciones cálidas con sus padres, pero las madres eran más exigentes que
los padres y esperaban mayor nivel de desempeño y logro. En contraste las mujeres de alta
autoeficacia experimentaron, cuando eran niñas presión de sus padres por un alto desempeño.
4.2 ADOLESCENCIA
4.3 ADULTEZ
Bandura dividió la adultez en dos periodos: la juventud y los años de la madurez. El primero
implica ajustes como el matrimonio, la paternidad y el progreso en la carrera. Se requiere una
alta autoeficacia para obtener resultados exitosos en esas experiencias. La gente con baja
autoeficacia no será capaz de manejar adecuadamente esas situaciones y es probable que no
logre ajustar.
Los años de la madurez también son estresantes en la medida que la gente revalora su carrera,
la familia y vida social. Conforme confrontamos nuevas limitaciones y redefinimos las metas
personales, debemos revalorar las destrezas propias y encontrar nuevas oportunidades de
mejorar nuestra autoeficacia.
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4.4 VEJEZ
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CONCLUSION
Para tener una buena etapa de desarrollo deben de haber tenido un buen nivel de
autoeficacia establecido en la niñez y se puedan desarrollar en las siguientes etapas de la
adolescencia, adultez y vejez sin fracasar y llegar al éxito
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BIBLIOGRAFIA
LIBROS:
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Trianes, M. & Gallardo, J. (2004). Psicología de la educación y del desarrollo en contextos
escolares. Madrid: Pirámide
Schunk, D. (1997). Teorías del aprendizaje. México: Pearson Educación
Arancibia, V., Herrera, P. & Strasser, K. (2005). Manual de psicología educacional. Santiago
de Chile
Woolfolk, A. (2006). Psicología Educativa. México: Pearson Educacion
Reed, D. & Kipp, A. (2007). Psicología del desarrollo: Infancia y Adolescencia. México:
Thomson
Hernández, P. (2007). Psicologia de la educación: Corrientes actuales y Teorías aplicadas.
México: Trillas
LIBROS DE INTERNET:
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Cloninger, M. (2003).Teorías de la personalidad: teoría cognoscitiva del aprendizaje
social. Recuperado el 8 de septiembre de 2012 de
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