Dumoulin

En el siglo XVI apareció en Francia un jurista eminente, perteneciente también a

la Escuela Italiana de los Estatutos: CHARLES DUMOULIN. A pesar de su
nacionalidad francesa, se constituyó en defensor y campeón de la escuela
italiana, continuando y perfeccionando la obra iniciada por Bartolo. El principal
título científico de Dumoulin consiste en haber formulado por primera vez el
principio de la autonomía de la voluntad. Siendo la voluntad de las partes
soberana en principio en materia contractual, para determinar la ley aplicable a
los contratos hay que ante todo a la intención de las partes contratantes. Las
partes son por regla general libres para fijar la ley que debe regir las clausula,
efectos y consecuencia de los contratos que celebran. Este principio de la
autonomía de la voluntad, formulado por Dumoulin, ha sido aceptado en principio
por la ciencia moderna e incorporado expresamente en varias legislaciones y
tratados internacionales.

La escuela Estatuaria Francesa

Tuvo su origen en Francia en el siglo XVI. ¿cuál fue la causa del nacimiento de
esta nueva escuela? Ella no fue otra que el liberalismo de la escuela italiana, que
fue considerado incompatible con los principios feudales. La doctrina Italiana de
los Estatutos admitía en efecto ampliamente que un estatuto recibiera aplicación
fuera de su territorio propio. Pues bien, esta solución era contraria al principio
feudal que estaba entonces en pleno vigor en Francia, según el cual las
costumbres son territoriales y no tienen fuerza más allá de los límites del territorio
(“leges non valen extra territorium”), lo que se hizo aún más notorio cuando llegó
el momento de redactar oficialmente las costumbres en el siglo XVI. Para
conciliar la Teoría Italiana de los Estatutos con el principio feudal de la
territorialidad de las costumbres fue creada, pues, en el siglo XVI, la Escuela
Estatutaria Francesa.

El fundador de esta nueva doctrina fue Bertrand D´Argentré. Señor bretón,

profundamente imbuido de los prejuicios feudales, D´Argentré se constituyó en
el campeón de la independencia de las respectivas costumbres y especialmente
de la costumbre de Bretaña, de la cual hizo el comentario. Y fue a propósito del
art. 218 de esta última costumbre que desarrolló la nueva doctrina, teniendo
como adversario a Dumoulin, quien permaneció fiel a la escuela italiana.

La escuela estatutaria francesa formula las tres siguientes reglas fundamentales:

1.- Todos los estatutos o leyes se dividen en dos categorías: reales o personales.
Los estatutos reales se refieren a los vienes exclusivamente y solo tienen
aplicación dentro de un territorio determinado; son pues rigurosamente
territoriales. Los estatutos personales se refieren a la persona haciendo
abstracción de la cosa, especialmente a su estado y capacidad, y siguen al
individuo dondequiera que se traslade; pueden pues extra territorializarse;
recibiendo aplicación fuera de los límites del territorio.

2.- El principio general es que los estatutos sean reales o territoriales; solo
excepcionalmente son personales o extra territoriales.

3.- La personalidad excepcional de los estatutos descansa en una idea de

justicia.

En estas tres ideas podemos condensar los principios fundamentales de la

escuela francesa de los estatutos. Como se ve, el método de esta escuela es
enteramente diferente del que había seguido la escuela italiana. Esta última se
resistía en efecto a elaborar reglas de carácter general que constituyesen una
especie de panacea que sirviera para solucionar todas as cuestiones del
Derecho Internacional Privado. Por el contrario, dividía y subdividía las distintas
materias, formulando respecto de cada una de ellas reglas especiales. La
escuela francesa, en cambio, formula unas pocas normas de carácter general y
cree que mediante ellas pueden resolverse todos los conflictos legislativos.