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BERQUEJO TEMATICO Nº 1

Oyentes: Creyentes.
Propósito general de aliento.
Propósito específico: Que los hermanos aprendan a amar a los que están perdidos.
Tema: Ganando almas para Cristo.
Texto: Mt. 9: 35-38
Proposición: Jesús les advierte a todos los creyentes que siempre estén conscientes
de que los perdidos tienen un alma eterna de valor incalculable, y que van a pasar la
eternidad en el cielo o en el infierno, y que muchos de ellos pueden salvarse si solo
alguien les presenta el evangelio.
Oración transicional: ¿Quiénes deben ganar almas para Cristo?
Título: Ganador de almas.
Introducción: un atleta cuando quiere alcanzar una meta para ganar el premio tiene
que esforzarse en su carrera sin dejar de correr. Asi como el atleta se esfuerza por
seguir en su carrera, nosotros debemos de igual modo esforzarnos para ganar almas
para Cristo que es a lo que él nos envió.
I. Hablar de la palabra de Dios
A. Predicando: Jesús compartía el evangelio por donde quiera que él iba,
caminaba mucho para que las personas conocieran su palabra, nosotros también
debemos seguir el ejemplo de predicar así como el mensaje de salvación que
llegó a nosotros como creyentes y pueblo de dios debemos compartir la palabra
poderosa para que puedan cambiar las vidas de otras personas, no debemos
callar los que dios en su amor y misericordia hizo en nosotros.
Ilustración: Jesús el maestro.
Aplicación: No solo debemos escuchar la palabra sino debemos practicarla.
B. Haciendo milagros.
Jesús además de predicar el evangelio, hizo muchos milagros para que la gente
creyera, nosotros también podemos hacer milagros en el nombre de Jesús, si
buscamos de su presencia y consagramos nuestra vida a Cristo, él pueda usar nuestra
vida para bendecir a otras personas.
Ilustración: Jesús levanta a un paralitico.
Aplicación: Cree lo que dios pueda hacer en nosotros.
C. Sanando toda enfermedad.
Jesús recorrió todos los lugares sanando todo tipo de enfermedad. Dios nos dio
autoridad de poner las manos sobre los enfermos y ellos eran sanados y de
reprender toda enfermedad, nosotros somos creyentes debemos orar con fe y
fervor para que los enfermos sean sanados en el nombre de Cristo Jesús.
Ilustración: Jesús el medico de los médicos.
Aplicación: orar por los enfermos.
II. Tener compasión por lo que están sin Cristo.
A. Por las personas que viven abandonados, a veces como creyentes solo
miramos a los hermanos en cristo y a los que están nuestro entorno, pero
nos olvidamos de aquellas personas que están en las calles, cárceles,
hospitales, pues nadie se acuerda de ellos.
Nosotros como creyentes y conocedores de la palabra de Dios es ahí
donde tenemos que llegar con palabras de aliento y más que todo
hablarles de las buenas nuevas, dejemos de ser indiferentes con nuestros
hermanos necesitados de alivio espiritual.
Ilustración:
Aplicación:

B. Por aquellas personas que están muriendo en los hospitales, hay


personas desahuciadas por los médicos y que no tienen esperanzas de
vivir, a ellos tenemos que hablarles de cristo para que sean salvos y
tengan vida eterna con Jesús para siempre. A estas personas nadie las
visita, están solas en ese lugar, pidámosles a dios que derrame de su
amor en nosotros, no huyamos de ver morir a alguien sin que antes se
hubiera arrepentido y de aceptar a cristo como único salvador de su alma.
Ilustración: En un hospital muere mucha gente.
Aplicación: Preocupémonos por estas personas para que se acerquen a
Cristo.
C. Por aquellas personas que no quieren saber de Dios.
Nosotros tenemos que tener compasión de aquellas personas que no
quieran saber nada de dios, pues estas personas van rumbo al infierno.
Sino estamos llenos del espíritu santo y una vida consagrada al señor es
muy difícil predicarles a estas personas, pues no cierran la puerta en
nuestra cara, debemos tener un tiempo de oración para que al escuchar
nuestro mensaje sean tocadas por el espíritu santo y se arrepientan, no
hay nada imposible para Dios, y en nosotros lo importante es tener amor
por estas personas y predicarles de cristo para que sean salvo.
Ilustración: Un hombre que piensa que puede solo.
Aplicación: Hablarles de Dios, orar por ellos, ayunar para que el espíritu
santo le toque y cambien de actitud.
III. Dios necesita obreros: Mt. 9. 37-38
A. La necesidad de que alguien predique el evangelio es grande.
Jesús dijo a sus discípulos que la necesidad eran muchos, hay mucha
gente sin Cristo en el mundo y pocos discípulos que prediquen la palabra
de salvación, somos pocos los creyentes en este mundo, la gente sin
Cristo sufren, por eso Jesús llamo hombres y mujeres para que anuncien
las buenas nuevas. Como creyentes debemos ganar almas para Cristo,
cada día la gente muere sin haberse arrepentido y mucho menos haber
aceptado a Cristo.
Y Dios no quiere que nadie se pierda.
Ilustración: Trabajemos con tiempo y fuera de tiempo.
Aplicación: debemos entregar nuestra vida al servicio del Señor.
B. Mt. 28:19
Como obreros, Dios nos manda a ganar almas.
El Señor nos manda a predicar el evangelio dice: Id esto significa un
mandato, no dijo si podemos o queremos, sino que nos manda y tenemos
que obedecer esa orden, como buenos cristianos que somos e hijos de
Dios, Asi demostramos nuestro amor por los perdidos, en que
prediquemos en todo tiempo y fuera de tiempo, eso significa a cualquier
hora.
Somos obreros de Cristo, trabajemos para ganar almas para el Señor y
para su Reino.
Ilustración: un empleado no se niega a obedecer las órdenes de su jefe.
Aplicación: tenemos que dejar nuestra comodidad y trabajar para Dios.
C. Enseñándoles que guarden la palabra de Dios. Mt. 28:20.
A las personas que le hablemos de Cristo no solo debemos instruirlos a la
palabra sino también que lo reciban a Cristo y que guarden los
mandamientos, y que crezcan para que ellos también aprendan a trabajar
para el Señor y perseveran en lo que han aprendido la sana doctrina y
cuiden de su salvación, nuestro deber como siervo del Señor debemos
ayudarlos, guiarlos en los caminos de Dios.
Ilustración: que guarden los mandamientos.
Aplicación: hacer discípulos para que trabajen en la obra del Señor.

Conclusión.
Asi como un día nos llegó la palabra de Dios, alguien nos predicó el
mensaje de salvación y de que dios envió a su hijo a morir por mis
pecados y no solo los míos, sino también los de todo el mundo, una
muestra de amor de parte de Dios.
De la misma forma tenemos que trabajar por la humanidad, devolver los
que otros hicieron por nosotros, no permitamos que la gente quede sin
conocer ese Cristo que obedeció al padre y fue obediente hasta la muerte
y muerte de cruz, y por su sangre somos salvos, y por sus llagas somos
sanos tanto espiritual como corporal.

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