Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
a
Pediatra. CS La Rivota [Servicio Madrileño de Salud, Área 8], Alcorcón, Madrid. b Neumología Infantil, Servicio de
Pediatría, Hospital General de Móstoles [Servicio Madrileño de Salud, Área 8], Móstoles, Madrid.
Guía_ABE_Neumonía (v.2/2008)
1/7
Guía_ABE. Infecciones en Pediatría. Guía rápida para la selección del tratamiento antimicrobiano empírico [2008]
Guía_ABE_Neumonía (v.2/2008)
2/7
Guía_ABE. Infecciones en Pediatría. Guía rápida para la selección del tratamiento antimicrobiano empírico [2008]
Niños ingresados
Niños graves o con
Edad Tratamiento ambulatorio Niños sin condensación lobar ni condensación lobar o
derrame pleural importantes22 derrame pleural
importantes23
Guía_ABE_Neumonía (v.2/2008)
3/7
Guía_ABE. Infecciones en Pediatría. Guía rápida para la selección del tratamiento antimicrobiano empírico [2008]
Dosis recomendadas
Antibióticos El tratamiento con antibióticos orales en pacientes con neumonía leve/moderada es eficaz y
parenterales seguro. Se recomienda revisar la evolución en los niños tratados de forma ambulatoria a las
/ orales 24-48 horas del diagnóstico e inicio del tratamiento
En los niños con neumonía grave y en aquéllos con criterios de ingreso hospitalario está
Guía_ABE_Neumonía (v.2/2008)
4/7
Guía_ABE. Infecciones en Pediatría. Guía rápida para la selección del tratamiento antimicrobiano empírico [2008]
Duración del NAC leve-moderada con buena evolución: 7-10 días (azitromicina: 5 días)
tratamiento Neumonías graves: según evolución, 10 a 14 días
Según patógenos: Chlamydia trachomatis: 14 días. Streptococcus agalactie: 10 a 14 días.
Staphylococcus aureus: 3 semanas parenteral y 3-4 semanas oral. Streptococcus
pneumoniae y Haemophilus influenzae tipo b: 7 a 10 días. Mycoplasma pneumoniae: 7-10
días (azitromicina: 5 días)
Referencias bibliográficas
Atkinson M, Lakhanpaul M, Smyth A, et al. Comparison of oral amoxicillin and intravenous benzyl penicillin for
community acquired pneumonia in children (PIVOT trial): a multicentre pragmatic randomised controlled
equivalence trial. Thorax. 2007;62:1102-6.
British Thoracic Society of Standards of Care Committee. BTS Guidelines for the Management of Community
Acquired Pneumonia in Childhood. Thorax. 2002;57:i1-i24. [consultado el 26/08/2008]. Disponible en
http://thorax.bmjjournals.com/cgi/content/full/57/90001/i1
Cardoso MRA, Nascimento-Carvalho CM, Ferrero F, et al. Penicillin-resistant pneumococcus and risk of
treatment failure in pneumonia. Arch Dis Child. 2008;93:221-5.
Cincinnati Children's Hospital Medical Center: Evidence-based care guideline for medical management of
Community Acquired Pneumonia in children 60 days to 17 years of age. [actualizado el 01/07/2006; consultado
el 26/08/2008]. Disponible en www.cincinnatichildrens.org/svc/alpha/h/health-policy/ev-based/pneumonia.htm
Heiskanen-Kosma T, Korppi M, Jokinen C, et al. Etiology of childhood pneumonia: serologic results of a
prospective, population-based study. Pediatr Infect Dis J. 1998;17:986-91.
McIntosh K. Community-acquired pneumonia in children. N Engl J Med. 2002;346:429-37.
Tabish Hazir, Yasir Bin Nisar, Shamim A Qazi, et al. Chest radiography in children aged 2-59 months diagnosed
with non-severe pneumonia as defined by World Health Organization: descriptive multicentre study in Pakistan.
BMJ. 2006;333;629-33.
Guía_ABE_Neumonía (v.2/2008)
5/7
Guía_ABE. Infecciones en Pediatría. Guía rápida para la selección del tratamiento antimicrobiano empírico [2008]
Abreviaturas: BAAR: bacilos ácido/alcohol resistentes. CMV: citomegalovirus. Hib: Haemophilus influenzae tipo b. Ig:
inmunoglubulina sérica. IM: vía intramuscular. IV: vía intravenosa. NAC: neumonía adquirida en la comunidad. PCR: reacción
en cadena de la polimerasa. PrCR: proteína C reactiva. rpm: respiraciones por minuto. Rx: radiografía. Sat O2: saturación de
oxígeno. Tbc: tuberculosis. TC: tomografía computarizada. VHS: virus herpes simple. VRS: virus respiratorio sincitial. VO: vía
oral.
Notas31
1
De esta definición se excluyen los casos que afectan a niños portadores de inmunodeficiencias u otras
situaciones que los hacen más vulnerables a patógenos excepcionales en la población general, la tuberculosis
pulmonar y las neumonías neonatales.
2
Manifestaciones clínicas: fiebre, tos y con menor frecuencia dolor torácico/abdominal. Entre los hallazgos físicos
destacar: hipoventilación, presencia de crepitantes, aumento del trabajo respiratorio y taquipnea. La ausencia
de taquipnea (más de 50 respiraciones/minuto -rpm- en lactantes de 2 a 11 meses; más de 40 rpm en niños de
1 a 5 años; más de 30 rpm en mayores de 5 años) y la ausencia de aumento del trabajo respiratorio,
conjuntamente, discrimina a los niños que muy probablemente no tienen neumonía (alto VPN).
3
El diagnóstico basado solo en los datos clínicos tiene una especificidad muy baja. El uso de la radiología para
establecer el diagnóstico evita el empleo de tratamiento antibiótico innecesario en muchos casos.
4
Adquirido por vía transplacentaria (CMV) o intraparto (VHS).
5
Habitualmente infección de origen nosocomial.
6
VRS, influenza, parainfluenza, adenovirus, rinovirus, metapneumovirus, bocavirus.
7
El uso de la vacuna antineumocócica conjugada en el calendario vacunal infantil ha disminuido la carga global
de la enfermedad neumocócica invasora, aunque se ha constatado la emergencia de cepas de neumococos no
vacunales especialmente agresivos (S. pneumoniae serotipo 19A).
8
Causa excepcional en niños que han recibido al menos 3 dosis de vacuna conjugada frente a Hib.
9
Chlamydia trachomatis: se trata de lactantes en general afebriles, con síntomas respiratorios y taquipnea/tiraje
e imagen radiológica con un patrón intersticial difuso.
10
Particularmente frecuentes en los menores de 2 años de edad.
11
Niños ingresados en unidades de cuidados especiales, bajo ventilación mecánica, con catéteres centrales,
sometidos a antibioterapia de amplio espectro.
12
A valorar de forma individual en general en niños hospitalizados.
13
En los niños susceptibles de tratamiento ambulatorio valorar de forma individual en función de: la facilidad de
acceso al laboratorio, si hay dudas del diagnóstico etiológico y si va a determinar el tratamiento a seguir. La
leucocitosis, neutrofilia, PrCR mayor de 50-100 mg/l y procalcitonina mayor de 1-2 ng/ml sugieren una etiología
bacteriana. Hemocultivo: baja sensibilidad (menos del 5-10% de los hemocultivos son positivos), especificidad
cercana al 100%.
14
Pueden permanecer positivas varios días tras el tratamiento antibiótico. Especialmente útil en la infección por
VRS y gripe (ver “Gripe. Pruebas de detección rápida” en www.infodoctor.org/gipi/guia_abe/). Se dispone
actualmente de test rápidos para la detección de diversos virus en las secreciones nasofaríngeas, aunque su
utilidad en la práctica no se ha establecido aún.
15
Extraer una muestra y reservar. Si la evolución no es buena y/o interesa, precisar el diagnóstico etiológico
analizar junto con una segunda muestra obtenida 3-4 semanas después.
16
Atención primaria y hospital: si sospecha (o conveniencia de descartar) de Tbc en función de datos
epidemiológicos individuales.
17
Sospecha de Tbc, adenopatía hiliar o derrame pleural con características de exudado.
18
Útil en el diagnóstico de los virus respiratorios, M. pneumoniae y C. pneumoniae. Detección de Ig específicas
en una (IgM) o dos muestras seriadas (IgG) con un intervalo de 4-8 semanas.
19
En pacientes con derrame pleural importante, graves o con mala evolución clínica.
Guía_ABE_Neumonía (v.2/2008)
6/7
Guía_ABE. Infecciones en Pediatría. Guía rápida para la selección del tratamiento antimicrobiano empírico [2008]
20
Si sospecha de derrame pleural paraneumónico.
21
En niños previamente sanos, con neumonía leve o moderada, con posibilidad de buen control familiar y acceso
a cuidados médicos, el límite de edad puede ser inferior.
22
En niños ingresados por motivos no relacionados con su estado clínico puede hacerse el mismo tratamiento
que en pacientes ambulatorios. La eficacia de los tratamientos con amoxicilina por vía oral y ampicilina
parenteral es similar en niños mayores de 6 meses con neumonía no grave y sin factores de riesgo.
23
Incluir también niños con mala respuesta al tratamiento inicial. En pacientes graves considerar siempre incluir
tratamiento para el Staphilococcus aureus.
24
Salvo en los neonatos, la ceftriaxona puede sustituir a la cefotaxima.
25
Macrólidos: preferentemente eritromicina o azitromicina, de segunda línea claritromicina. No usar eritromicina
en menores de 1 mes de edad por el riesgo de estenosis hipertrófica de píloro. Usar la vía intravenosa en los
casos graves.
26
En niños no inmunizados correctamente con al menos 3 dosis de la vacuna conjugada contra H. influenzae tipo
b (niños inmigrantes o de colectivos con escasos contactos con el sistema sanitario), debe utilizarse
amoxicilina/clavulánico (o cefotaxima en pacientes hospitalizados).
27
Niños previamente sanos, con neumonía leve o moderada, buen control familiar y acceso a cuidados médicos.
28
Tratamientos siempre hospitalarios.
29
Sospecha de infección por hongos. El antifúngico de elección dependerá de las características de los pacientes,
enfermedad subyacente y gravedad del cuadro. A veces, puede ser necesaria la asociación de dos fármacos.
30
Aunque en los últimos años se ha observado una cierta disminución en la proporción de neumococos
resistentes a penicilina, sigue siendo importante la prevalencia de cepas con sensibilidad intermedia.
31
Notas: la Guía ABE se actualiza al menos una vez al año. Próxima revisión prevista en 2009. Los autores y editores
recomiendan aplicar estas recomendaciones con sentido crítico en función de la experiencia del médico, de los
condicionantes de cada paciente y del entorno asistencial concreto; así mismo se aconseja consultar también otras fuentes
para minimizar la probabilidad de errores. Texto dirigido exclusivamente a profesionales.
Guía_ABE_Neumonía (v.2/2008)
7/7