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Jesús, el hombre que satisfizo las O

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implicaciones del título “Cristo”. N
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Introducción:
╬ La Biblia dice que Jesús es el Cristo (San Juan 20:31). El título “Cristo” es la traducción
griega de la palabra hebrea “Mesías”, que significa “El ungido”. Cristo=Mesías=Ungido.
Jesús es el ungido de Dios, el Cristo de Dios (San Lucas 9:20).
╬ En el antiguo Israel se efectuaron diferente tipos de ungimiento: se ungían a los Reyes,
Sacerdotes y Profetas, como también se hacían ungimientos ordinarios que
consistían en perfumarse para ocasiones especiales o festivas. (Éxodo 28:41) (1er
Samuel 16:13) (1er Reyes 19:16).
╬ El ungimiento de Cristo es de carácter único, pues fue un ungimiento como Rey,
Profeta y Sacerdote.

Para Israel, a pesar de sus múltiples rebeliones ante Jehová, era importante el hecho de estar
bajo el gobierno y amparo de Él. Por lo cual, los israelitas, esperaban la promesa de Jehová de
que les daría su Ungido en quien cumpliría todos sus deseos reinando en la recta final de la
historia.
Así pues los judíos esperaban que:
╬ El ungido de Jehová ejercería una soberanía mundial en nombre de Jehová como Rey
supremo.
╬ El ungido de Jehová respondería ante Jehová, o daría cuentas acerca de su obra como
soberano ungido.
Jesús, sin embargo, interpretó su unción en relación con su pasión y muerte, haciendo las obras
del Padre para la salvación de los pecadores (San Juan 10:25, 32,37).

Los judíos tenían en alta estima y reverencia la ley mosaica, aunque de manera equivocada;
ya que no pudieron conciliar lo que ellos comprendían acerca de la ley con lo que Jesús decía.
Sin embargo, Jesús les hace ver que la esencia de la ley es él mismo, y que por tanto, seguir la
ley es esencialmente seguirle a él. Es decir, no hay contradicción alguna entre seguir a Jesús y
seguir la Ley pues Jesús es el corazón de la ley.
╬ Jesús aclaró que, en sus escritos, Moisés habló de él. (San Juan 5:46)

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 ╬ Algunos no comprendieron la relación esencial del Mesías con la ley porque veían la ley
según la carne, entre tanto que Jesús la proclamaba según el Espíritu. La ley como letra
mata, pero en el Espíritu da vida. (Jeremías 31:33) (2 Corintios 3:6).
╬ El fin de la ley es Cristo mismo, de lo que se concluye que una vez llegado el Ungido, la
ley ya cumplió su propósito. (Romanos 10:4). La ley exige justicia, justicia que ha sido
completada en Cristo para los que en él creen.
╬ La frase “Yo os digo”, que Jesús usaba en sus declaraciones, no es una simple
introducción, sino más bien la nueva fórmula autoritativa que ha cobrado lugar por
encima de las frases “Como está escrito” y “Así dice el Señor”. Jesús como el ungido,
como el corazón de la ley y de las profecías dice “Yo os digo”.
╬ Todo el desarrollo progresivo de la ley y de las profecías alcanzó su manifestación
cúspide y esencial en Cristo. (San Juan 1:45)
Existe una estrecha relación entre la nueva ley escrita en el corazón y el Cristo que habita en
nuestros corazones (Efesios 3:17).

Cuando Jesús anuncia su muerte, muchos comenzaron a cuestionarle con suposiciones. Le

decían que el Cristo habría de permanecer para siempre (San Juan 12: 27-36). En efecto, los
judíos sabían que significaba morir levantado en una cruz, pues para ellos era claro lo que la
ley decía al respecto, que quien fuese colgado en un madero sería maldito.
╬ Un militar victorioso, con un reinado lleno de esplendidez humana, era el concepto judío
acerca del Mesías.
╬ Muerte de los pueblos enemigos, gobierno déspota sobre los pueblos de la tierra era lo
que todos esperaban de parte del Mesías.
╬ Algunos pocos, como la mujer de Samaria esperaban a un Mesías profeta y sacerdote
que los guiaría a la adoración verdadera (San Juan 4:21-26).
╬ Difícil era encontrar alguno que esperara al Mesías para recibir el perdón de primera
mano (San Mateo 9:1-8).
Como Mesías, Jesús tenía claro que se había encarnado para morir en la cruz por los pecados
dignos de muerte de los súbditos de su reino.

Conclusión:
Ungido para ejercer autoridad en nombre de Jehová, ungido para dar a conocer el
corazón de la ley, ungido para morir en la cruz, son enunciados que pudieron escandalizar a
muchos judíos que esperaban al Mesías. Pero escuchar que el Mesías ha venido a morir para
dar vida a los que le aceptan como el Cristo de Dios (San Juan 20:31), fue uno de los
enunciados más extraños para los que esperaban a un Mesías diferente.
╬ Si vives el verdadero mesiazgo de Cristo, hallarás vida, y vida eterna.

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 Jesús, el hombre que confirmó ser L
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“El Cristo” por su carácter. E
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Introducción:
╬ La convicción del cristiano respecto a Cristo es que Cristo es lo que dice ser. A diferencia
de muchos en su tiempo que se hacían llamar como él, Jesús confirma con su mismo
carácter que es quien él mismo dice ser.
╬ El carácter de Jesús es exclusivo, no solo es el único Hijo de Dios sino que su ser es único
(monogenés=único ser) incluso no es comparable con el carácter de muchos personajes
grandes de la historia; el carácter de Jesús es único. (San Juan 3:16)
╬ No estamos diciendo que Jesús es el mejor de todos los demás hombres, más bien que
no hay hombre que se le compare, que Jesús es un hombre incomparable, o
simplemente él es El Hombre.

Jesús se veía a sí mismo como humano sin pecado, distinto de los demás seres humanos
hundidos en las tinieblas del pecado.
Jesús se entendió a sí mismo como: la luz del mundo que disipa las tinieblas, como el pan
vivo que vino del cielo, como el verdadero maná que sacia del hambre de vida a los humanos.
╬ Jesús se concibió a sí mismo como un verdadero humano, sin pecado, y único en
comparación con los demás. Su ojo que podía ver la falsedad e hipocresía de los
humanos, no la vio en sí mismo porque simplemente no la había.
Esta es la característica única, y propia de aquél que habría de venir como el Mesías, el
enviado de Dios. Además, Jesús fue consciente de que su naturaleza sin pecado, como El Cristo
de Dios, obedecía al plan de redención de sus hermanos humanos.
A través de su carácter como El Cristo de Dios, y por naturaleza sin pecado, Jesús se distinguió
del resto de los humanos.

El círculo de íntimos amigos de Jesús pudo haber dicho lo contrario respecto de su carácter
si Jesús hubiese estado equivocado, sin embargo, el concepto que los discípulos tuvieron
de Cristo es el de un humano sin los pecados de ellos. (1 Juna 3:5; 1 Pedro 2:22; Hebreos
9:28; 2 Corintios 5:21)
Pudiéramos pensar que los amigos de Jesús no tenían un parámetro digno para juzgar la
impecabilidad de Jesús, pero recordemos que estos íntimos amigos eran judíos de nacimiento
y por lo tanto habían crecido bajo el parámetro de la ley perfecta de Dios, y desde ese punto
3
de vista, los discípulos juzgaron la impecabilidad de Jesús como un hombre que cumplió la ley
(San Mateo 5:17)
╬ Pedro: Cristo no cometió pecado, ni engañó jamás. (1ra de Pedro 2:22)
╬ Juan: Cristo apareció para quitar los pecados, y no hay pecado en él. (1ra de Juan 3:5)
╬ Pablo: Cristo no conoció pecado, pero Dios lo hizo pecado por nosotros. (2da a los
Corintios 5:21)
También, Jesús fue sometido a las mismas pruebas que nosotros, pero aun así, no conoció
pecado (Hebreos 4:15).
Los amigos de Jesús, crecidos e instruidos en la perfecta ley, lo calificaron como sin engaño y
sin pecado, es decir, del carácter digno del Cristo.

A pesar de todas las acusaciones que le hicieron, los enemigos de Jesús lo concibieron como
un hombre perfecto a quien no pudieron ganarle a base de preguntas capciosas, ni con
argumentaciones sucias, ni con testigos falsos, y a quien finalmente llevarían a la cruz por un
asunto de carácter político).
╬ Judas, aliado con sus enemigos y acusadores judíos dijo: he pecado entregando sangre
inocente. (Inocente de Blasfemia, de malas amistades, de glotonerías, de quebrantar el
reposo, etc.) Mateo 27:4.
╬ Pilato, quien todos creen culpable de su muerte dijo: inocente soy de la sangre de este
Justo. Mateo 27:24.
╬ El ladrón, que sí sabía qué es hacer maldad dijo: este hombre no hizo nada malo. Lucas
23:41.
╬ El centurión romano, que le crucificó porque ese era su trabajo dijo: de verás, este hombre
era inocente. Lucas 23:47.

Los enemigos de Jesús, concibieron a Jesús tal como se presentaba en su carácter, pero esto era
demasiado pesado para poder aceptarlo.

Conclusión:
Distinguimos del carácter de Cristo su amor, su carácter consistente y sin cambio,
un carácter no temperamental (un temperamental pierde a menudo el control), sin
resentimientos, sin odio, servicial, y especialmente soberano que sirve.
El carácter sin pecado Jesús pesó sobre los fariseos, saduceos, y herodianos (que por
cierto no se llevaban pero se unieron para pelear contra Jesús), su amor incondicional mostrado
a todo ser humano, y el servicio humilde ofrecido a cualquiera.
La autoridad de Jesús deriva de su carácter sin pecado, y sin egoísmo. La ausencia
de egoísmo es amor, y Dios es amor, por lo que la autoridad de Cristo deriva del amor de Dios.
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Jesús, el hombre que empleó los derechos A
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derivados de su carácter. T
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Introducción:
╬ Cristo no tiene deudas con nadie, por eso, todo lo que ha hecho ha sido por derecho;
solo que Jesús no aplica sus derechos de manera egocéntrica.
╬ Puesto que creemos que Cristo Jesús es por naturaleza Dios, entonces todo lo que él
enseñó viene a ser autoritativo; El Cristo, como Dios, tiene el derecho de enseñar la
verdad y dado que él es la verdad tiene el derecho de enseñar de sí mismo (San Juan
14:6).
╬ En vista de que todo lo que Jesús enseña es autoritativo, y de que el enseña la verdad
que él mismo es, podemos afirmar que la misma persona de Jesús es autoritativa para
la nuestra.

Jesús no nos enseña una verdad distinta de sí mismo para que lo sigamos, sino que enseña
de sí mismo y nos dice: síganme. (Mateo 22:16)
╬ Yo soy el pan de vida: el pan del cielo que da vida a los hombres. Juan 6:35.
╬ Yo soy la luz del mundo: la luz que disipa las tinieblas y hace andar en la luz de la vida.
Juan 8:12.
╬ Yo soy la resurrección y la vida: en él no morimos eternamente, y aunque muertos
estaremos vivos. Juan 11:25-26.
╬ Yo soy el camino, la verdad y la vida: el verdadero camino al Padre, tanto para ir como
para conocer al Padre. Juan 14:6.
╬ La puerta: la salvación y el verdadero pastoreo se encuentran en él. San Juan 10:9
╬ El pan de vida: él es la porción suficiente para darte vida duradera. San Juan 6:35
╬ El buen pastor: él pone su vida por salvar la nuestra. San Juan 10:11
╬ La vid: la gloria del Padre se hace manifiesta sobre quien está en él. San Juan 15:5

Cristo centra su enseñanza en sí mismo Cristo, porque la verdad emana de su mismo ser.

Cuando Jesús preguntó a sus discípulos acerca de la opinión que la gente tenía de él, no lo
hizo porque en verdad no lo supiera, sino para llevar a los suyos a la conclusión verdadera:
╬ Se reconoce a sí mismo como El Mesías. Mateo 16:13-20.

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 ╬ Se reconoce a sí mismo como Dios. Juan 10:30. Deuteronomio 6:4.
╬ Se reconoce a sí mismo como el Cristo de Dios, el ungido de Dios. San Lucas 9:20.
╬ Se reconoce a sí mismo como El Mesías que es desde antes de Abraham. Juan 8:58.
╬ Se reconoce digno de recibir la adoración como Dios. Juan 20:28.
Jesús no solo reconoció ser él El Mesías, sino que demostró serlo con su carácter.

Las implicaciones de ser El Mesías, para Jesús, no eran cuestiones que aun debían discutirse
sino más bien emplearse como testimonio de sí mismo y de su señorío:
╬ El derecho de perdonar pecados. Mateo 2:5. Lucas 7:48.
╬ El derecho de otorgar vida. Juan 6:35. Juan 4:10, Marcos 10:17-21. Juan 6:68.
╬ El derecho de enseñar la verdad. Marcos 6:2-3. Juan 7:15. Lucas 4:32,
╬ El derecho de juzgar al mundo. Juan 5:22-29.
╬ El derecho de sanar en sábado. San Mateo 12:10
Todo lo que Jesús otorgó, lo dio bajo el concepto de dádivas divinas.

Conclusión:
Los milagros de Jesús no tienen la función de demostrar su poder, sino la intención de
revelar su carácter mesiánico:
╬ Transformó el agua en vino como señal de la instauración del evangelio sobre la base de
la ley. El agua era símbolo de purificación para los judíos, Jesús la transforma en vino
como señal de su sangre que limpia de pecados al hombre (Juan 2:1-12).
╬ Multiplicó los alimentos, para luego darse a conocer como el pan que para vida eterna
permanece. Juan 6:35.
╬ Dio vista a los ciegos, porque es la luz del mundo. Juan 8:12.
╬ Resucitó muertos, porque puede dar vida eterna ahora mismo. Juan 11:25.
Los derechos que Jesús ejerció derivaron y estuvieron respaldados por su carácter, fueron
acciones respaldadas por su carácter. Él, ahora se nos ha dado para que nuestras obras sean
hechas en él, respaldadas por él.

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Jesús, el hombre que definió el É

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concepto del término “Amigo”. O

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Introducción:
╬ La amistad de Jesús con Lázaro, Martha y María, fue una amistad distintivamente marcada
por los hechos que emanaron de esta, por ejemplo el ungimiento de Jesús con perfume
caro de parte de María previo a su entrada gloriosa en Jerusalén para muerte, y la
resurrección de Lázaro de parte de Jesús como manifestación de la gloria de Dios. En
ambos casos, una estrecha relación con la gloria de Dios definió el modo de ser
amigos. (San Juan 12: 1-36)
o En el caso se la resurrección de Lázaro recordemos que Jesús fue claro cuando dijo
el propósito de lo que acontecía con su amigo: esta enfermedad no es para muerte
sino para que la gloria de Dios se manifieste. (Juan 11:2-4)
o En el caso de su ungimiento por parte de María, Jesús también fue claro cuando
dijo que para su sepultura había sido guardado el perfume (12:7), luego, cuando
anuncia su muerte dijo que había llegado la hora de que el Hijo del Hombre fuese
glorificado (23-26)
╬ Jesús obró muchas señales de la gloria divina, las cuales siempre apuntaron hacia el acto
de amor más sublime: el acto de entregar su vida por sus amigos a fin de que viviesen
eternamente. Así, la amistad de Jesús con sus amigos fue una amistad por la gloria y para
la gloria de Dios, consistente en dar su vida para dar vida a sus amigos.
╬ Detrás de la amistad de Cristo, está el amor de Dios, pero más que solo el amor de Dios,
detrás de la amistad de Jesús está Dios como amigo que ama al mundo; en
consecuencia de lo cual mandó a su Hijo para que todo el que creyera en él fuese salvo.
Y todo para glorificación del nombre de Dios. (Juan 12:23, 12:28, 3:16)

Jesús, es el Hijo de Dios, en quien habita corporalmente toda la Deidad. Y como Verbo
encarnado, se mostró amigo, se enfocó en dar el conocimiento del Padre a sus amigos; todo
como un gesto de amistad y para elevar el estatus de ellos, de siervos a amigos que saben los
secretos del Señor (San Juan 15:15).
Pero ante todo, Jesús es ese sabio amigo de carne real, un amigo que recibió un fino
ungüento a fin de preparar su carne para el sepulcro, un amigo de carne tan real que Juan no
titubea al decir que en la cruz, el cuerpo de su amigo derramó agua y sangre al ser traspasado
con una lanza.
╬ Jesús, es un amigo de carne y hueso reales, de modo que tuvo sed, sed humana.
7
 ╬ Jesús fue tan de carne que en el pozo de Samaria anhela saciar su sed humana, aunque
tiene una comida y bebida verdaderas. Así mostró que es Dios, que tuvo sed en la carne
sin dejar de ser Dios. Esto es muy profundo para ser entendido con facilidad, pero
nuestro amigo de carne, mostró a Dios en carne, siendo amigo de personas de carne.
╬ Jesús, de carne también llora, no simplemente por la compasión divina hacia la tragedia
humana sino por el dolor real de un humano real de carne real.
El propósito de la relación filial de Jesús es dar lugar una manifestación más clara del Dios
cercano a los hombres, Dios en carne humana.

Jesús es un hombre normal que disfruta de relaciones humanas normales y reales: va a las
fiestas y tiene amigos. Como humano, Jesús es ese hombre capaz de amar a los humanos, pues
a consecuencia de que el pecado no está en él, no ha sufrido ninguna distorsión en el concepto
de ser “amigo” de los humanos.
Jesús siempre mostró el interés de hacer la voluntad del Padre por salvar del pecado y del
egoísmo a los que amaba, y todo como un servicio de amor desinteresado por sus amigos.
Jesús amó no solo con el amor generalizado que como Dios tiene por la humanidad, sino
que amó de manera que estableció una conexión filial para salvación con los que amó. (San
Mateo 9:2)
╬ El amor manifestado por Cristo vino a ser esencial del Cristianismo. Es el centro que da
sentido a todo, de modo que no se puede entender lo que es Cristianismo si no es
definido por el amor de Cristo.
Toda la historia de la comunión de Dios con los humanos dice que fue necesario una
relación personal, pero en Cristo nos dice que era personal y de amor. De manera general el
Padre amó al mundo, pero Cristo de manera particular al pobre, al huérfano, al enfermo, al
desnudo, al que sufre. Etc.
El propósito de la relación filial de Jesús es dar lugar una manifestación más clara del Dios
cercano a los hombres, el Dios que entiende el sufrimiento de la vida en la carne.

Si Jesús lloró, no se debió simplemente a la común compasión divina por la tragedia

humana, lloró por el dolor que un humano de carne real experimenta por el dolor de sus
semejantes: lloró por Lázaro (San Juan 11:32-37); pero también lloró por causa de la ceguera
humana que impide ver la gloria del Dios que se hace amigo de los hombres: lloró por Jerusalén
(San Lucas 19:41-44).
Conclusión:
La Biblia dice que Dios es amor, lo cual tiene relación con la religión de amor de Jesús, pues
Jesús dio a conocer a Dios como el Dios que ama, pero también como el Dios del amor
que se vive.
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 Jesús, el humano “íntimo” que J
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cambio lo ordinario en extraordinario V
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por su muerte. S

Introducción:
╬ Un día, cuando Jesús encontró a Juan remendando sus redes para seguir pescando,
Juan comenzó una relación de intimidad con Jesús tan normal como nunca los
humanos habían experimentado (San Marcos 1:19), una relación que se haría más
íntima y duradera por y después de la muerte de Jesús (San Juan 21:22).
╬ Jesús llegó a la vida de Juan para llevarlo a un nivel marcado por lo extraordinario, en
un ministerio extraordinario. Para lo cual, Juan simplemente debería comenzar a
familiarizarse con los nuevos elementos extraordinarios: El amor de Jesús y el
evangelio del amor.
o Pero, Juan debía aprender a no pasar por alto un elemento ordinario, algo
común de la vida diaria: las personas perdidas, extraviadas, y necesitadas del
amor de Jesús y del evangelio.

Los males de nuestro mundo son el resultado de la expresión de vida de personas dañadas
por la falta de amor y por causa del pecado, pero esos males pueden ser resueltos por el amor
de Jesucristo, ese humano genuino, sin daño ni contaminación alguna que se ofreció en
sacrificio mortal por nosotros (1 Pedro 1:19).
╬ Jesús fue humano. En la genealogía de Jesús encontramos su origen humano en Adán,
siendo humano de raíces más allá de Moisés, de Abraham, de Matusalén y de Enoc. De
modo que Jesús fue humano verdadero, humano tan real que no olvidó que lo era
aun sabiendo que era también Hijo del Altísimo. Y es precisamente por eso que Jesús
manifestó su humanidad genuina al entregarse a la muerte por amor absolutamente
humano y amor absolutamente divino en favor de los suyos.
╬ Así, Juan aprendió que sólo Jesús, y el humano restaurado por su amor sacrificial, podría
expresar verdadera humanidad ante otros humanos amando al modo de Jesús, amando
hasta la muerte.
Jesús demostró que los humanos verdaderos, completos e íntegros, los que son restaurados
por su amor humano y divino, vienen a ser humanos verdadero que aman hasta la muerte.

9
 ╬

Juan descubrió en Jesús el amor que nutre al ser humano desde la raíz del ser y así lo
hace libre.
Conclusión:
Jesús entrego su vida para hacernos morir, para luego darnos una vida nueva con la
capacidad de amar con el amor de Dios y sanar la vida de los seres humanos heridos por la
falta de amor.
Un día, a la puerta del Templo, Juan que fue íntimo de Jesús y transformado por el amor
de Jesús, usó aquellas herramientas extraordinarias para restaurar la vida ordinaria de una
persona enferma, un hombre que vivía a expensas de lo que la gente quisiera darle.
El amor y el poder del evangelio operados en nosotros por la muerte y resurrección de
Cristo producen cambios para toda la vida en nosotros y a favor de las personas que amamos.
El amor y poder del evangelio, hicieron que nada volviera a ser igual en aquel cojo de la
puerta, y pueden hacer lo mismo en cualquiera que esté a tu alrededor. Esto, gracias a que
Cristo un día dio su vida por ti, por amor a ti.

10
 Jesús, el hombre que Dios tomó para V
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fundar la religión del rescate: El R
N
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Cristianismo. S

Introducción:
╬ La Biblia es evangelio y el centro de esta es Cristo; por eso Jesús es el centro del
evangelio.
╬ El cristianismo es la religión que se centra en la vida y obra de la persona de Cristo, el
cual es el centro del evangelio, por eso el cristianismo es una religión evangélica.
╬ Todo lo que se logró por la vida y obra de Cristo tuvo su origen en la mente de Dios, por
eso la religión evangélica es de Dios.

Desde el principio, desde el sacrificio agradable de Abel, Dios se ha agradado de sacrificios,

de sacrificios de sangre. Génesis 4:4. De hecho todo judío estaba instruido así:
Porque la vida de la carne en la sangre está, y yo os la he dado para hacer expiación sobre
el altar por vuestras almas; y la misma sangre hará expiación de la persona (Levítico
17:11).
Bajo ese precepto, sin la muerte de Cruz de nuestro Jesús, la expiación de nuestros pecados
no hubiese sido posible.
╬ Jesús vivió consiente de que moriría en la cruz para derramar su sangre con el propósito
de expiar tu persona de todo pecado. Marcos 8:31.
╬ Cada momento de la vida del Jesús estuvo definido por el propósito de su muerte en la
cruz, sin embargo, en los últimos momentos vivió al máximo su muerte sacrificial. Juan
12:27-28.
La muerte de cruz de nuestro Jesús, no fue un plan alterno, fue un plan diseñado en la
eternidad para rescatar a los pecadores.

Lo primero que debemos afirmar referente a la muerte de cruz de nuestro Salvador es que
todavía hay mucho bajo misterio. Sin embargo, históricamente, la muerte de Cristo en la cruz
representa más que un acontecimiento en la historia, más bien significa el centro de la historia.
Mateo 16:13-20.
Como significado de algo, la muerte de Cristo en la cruz significa mucho para el cristiano:

11
 ╬ En la vida práctica, significa un ejemplo de padecimiento humilde bajo la voluntad de
Dios, aunque la vida cristiana sacrificial parezca incompresible en el mundo cristiano
definido por la comodidad. 1ra de Pedro 2.21.
╬ La cruz de Cristo nos invita a vivir el dolor no solo de lejos, sino en lo más oscuro de las
pruebas, como Jesús en el huerto de Getsemaní.
╬ Cristo murió en la cruz como portador de nuestros pecados. 1ra de Pedro 2:24. Aun de
aquellos pecados que no aceptamos como tales.
╬ Cristo en la cruz es el verdadero cordero de Dios que quita el pecado del mundo.
El Padre, en su amor, se dignó en traer por sus propias manos, en sus propios hombros el
cordero que propiciaría nuestros pecados. En realidad Dios hizo todo en nuestro lugar para
rescatarnos.
La cruz significa soportar injurias, a amar a nuestros enemigos y a dejar nuestros problemas de
pecado en las manos de Dios.

El pecado nos había separado de Dios, pero Cristo decide llevarnos de vuelta a Él aunque tuviera
que pagar el precio con su propia vida.
╬ Murió por los pecadores culpables, el justo por los injustos. 1ra de Pedro 3:18.
╬ Murió una sola vez para siempre, haciendo a los injustos justos por siempre (a los injustos
por los que murió). Hebreos 9:28.
La obra de Cristo es RECONCILIACIÓN, por eso nos encargó ese ministerio.

Conclusión:
Los dos testamentos afirman que Cristo Jesús es el siervo sufriente anunciado por el
profeta Isaías, testifican que Cristo fue enviado para llevar en la cruz la maldición de la ley,
maldición que habría de recaer sobre nosotros, pero Cristo nos rescató de ella.

1ra de Pedro 2 Isaías 53

Sin pecado y sin engaño. V. 22 Sin maldad y sin engaño. V. 9.
Fue ultrajado. V. 23 Fue desechado y despreciado. V. 3
Llevó nuestros pecados. V. 24. Llevó el pecado de muchos. V. 12.
Éramos como ovejas descarriadas. V. 25. Nos descarriamos como ovejas. V.6.

No olvidemos que para Jesús, cumplir su encomienda de siervo sufriente, le costó el

mayor sufrimiento que haya experimentado un humano en todos los aspectos y sentidos que
Cristo vivió.
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 D

Jesús, el hombre que relacionó a las O

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mujeres. N
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Introducción:
╬ Existen pensamientos tan pobres que suponen que entre un hombre y una mujer no
puede existir otro amor más fuerte que el amor pasional o carnal. Pero en el ministerio
de Jesucristo, en realidad hubo, no una, sino varias mujeres que amaron a Jesús más
allá de su muerte, lo amaron en el sepulcro; y lo amaron con amor puro, amor
verdadero, amor que salió del corazón de mujer de cada una de ellas. Y Jesús por su
parte, demostró que se puede vivir con mujeres sin que tenga que ser
pasionalmente.
o Sin embargo, no fue el amor sucio que la mayoría, a veces, solo espera de una
mujer.
o En la historia del ministerio de Jesús “aprendemos” que la mujer puede amar
limpiamente.

En la mañana de la resurrección, fue pronunciado un nombre: ¡¡María!!. Y fue pronunciado

con tal peculiaridad que sólo decirlo fue suficiente; seguramente, Jesús acostumbró a llamar
de esa forma familiar a las mujeres que le seguían (San Juan 20:11-18).
“María”, fue el nombre con el que seguramente Jesús siempre se refirió a ella. Por eso,
inmediatamente, al escuchar esa voz familiar, pronunciando su nombre familiar, María se arrojó
una vez más a los pies del Maestro (ya lo había hecho el día que le perdonó sus pecados) y sin
dudarlo.
╬ Dos cosas llaman la atención en María, como dice lo que dice y lo que hace:
o Le dice “mi Maestro” (Realmente la forma de decirlo puede ser entendida por
un corazón de mujer).
o Y le abraza (quizá de los pies, quizá le besó los pies).
Esa voz tan familiar fue capaz de difuminar el miedo que pesaba sobre aquella mujer, fue
la voz que una vez le dijo: tu fe te ha salvado, anda en paz (San Lucas 7:50); y ahora era la
voz familiar que la llama una vez más por su nombre: ¡María!, aunque muchos la habrían
llamado por otro nombre…
Quizá nunca nadie la habría llamado por su nombre sino por lo que era…
(San Lucas 7:37)

13
 ╬

Cristo ha resucitado, y esa es más que la razón, la fuente para una vida fundada en la suya.

Conclusión:
Vivamos a Cristo resucitado, porque como la palabra de Jesús en los discípulos, nuestra
vida en Cristo será un poderoso mensaje amor, caridad, y fe.
╬ Aquel “caminante desconocido” no los obligó a creer, solo sembró la Palabra y se
dispuso a seguir su camino. La Palabra dio frutos por sí misma, los llevó a que
recordaran en un solo relámpago las explicaciones del viajero, que les había
asegurado que el desenlace de la vida de Jesús no era la muerte. Que pasaría por ella
para cumplir las Escrituras, pero que ése no sería su final.

╬ Entonces, después de recibir la Palabra, no dudaron: era él, y era él resucitado, ni

siquiera sintieron la tristeza por haberse separado de él de nuevo; la alegría de saberle
vivo era más importante que la de verle por un momento.

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