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Alumnas:
CHICLAYO – PERÚ
2018
I Situación Problemática
Los países desarrollados producen los mejores chocolates del mundo y son más
valorados los que tienen un alto porcentaje de cacao. El Perú contribuye al mercado
de los cacaos orgánicos y finos del mundo, según las estadísticas somos el segundo
país productor de cacao después de República Dominicana; además de que el 90%
de la producción de cacao y su preparación se exportan, siendo los principales
destinos Europa (Bélgica, Alemania, Suiza e Italia), Estados Unidos y Canadá.
Estos países generan una gran cantidad de ingresos para el estado peruano, ya
que poseemos una de las mejores materias primas para utilizarlos en diferentes
productos finales y así lanzarlo al mercado.
A nivel nacional e internacional el segmento de mercado del chocolate orgánico
corresponde al nivel socioeconómico alto de la población ya hay personas que son
amantes del sabor puro del verdadero chocolate, y que están dispuestos a pagar un
mayor precio por obtener una calidad superior a lo que ofrece normalmente la
industria masiva del chocolate; a la vez, los precios generales de los chocolates
finos son altos y similares en las distintas chocolaterías. (CIMS). Esta demanda
actual de chocolate orgánico ha mostrado un comportamiento de consumo del 20%
anual, esto debido a las características propias que posee este producto y a la
exigencia del consumidor de adquirir productos de calidad y que sean saludables.
Perú es una de las naciones con mayor calidad en la producción de cacao, la cual
llegó en el 2016 a 56,500 toneladas, generando alrededor de 5.7 millones de
jornales anuales, y beneficiando directamente a más de 30,000 familias e
indirectamente a 150 mil personas. Sus principales zonas de producción son: Jaén,
Bagua Alto Huallaga, Huallaga central, Satipo, Valle del Río Apurímac y La
Convención. Entre las zonas potenciales se puede mencionar las zonas de Pichis y
del Palcazú. (Gestion, 2017).
La tendencia de la demanda en toneladas de chocolates que se pronostica en
diferentes partes del país es positiva, con una tasa promedio anual de 22%. La
cantidad de toneladas de chocolates que se proyectó para el fin del año 2016 en el
país fue más de 51 mil TN, lo cual se llegaría para el 2020 con más de 75 mil
toneladas de consumo de chocolate en nuestro país. Por ello, las oportunidades de
crecimiento en este sector son importantes, más aún, la expectativa es mayor ahora
que China ha empezado a consumir cacao. En poco tiempo habrá mil 300 millones
de chinos a quienes alegrarles la vida con un chocolate fabricado a base de un fino
cacao orgánico peruano.
Por otra parte, el consumo del chocolate industrial llevo a que algunas empresas no
fabriquen este producto con la cantidad necesaria del cacao que se sugiere según
el reglamento para el chocolate. Por ello surgió un debate que se orientó aldedor de
Codex Alimentrius que establece que el 35% es el mínimo de cacao para que el
producto pueda denominarse chocolate; y un 25% para el chocolate con leche.
Posteriormente esta noticia paso por desapercibido por los encargados de verificar
la producción de chocolate. Esto trae como consecuencia que las personas opten
por consumir productos naturales y saludables.
Por ello el consumo de chocolate está aumentando debido a los beneficios que nos
ofrece el grano de cacao en estado puro y es uno de los productos más consumidos
a nivel mundial por sus propiedades sensoriales y el placer que ocasiona al
consumirlo. Ya que el Perú cuenta con el mejor cacao del mundo para elaborar
chocolates de excelencia y a pesar que el consumo en el país es bajo, la demanda
de chocolates a base de cacao con certificación orgánica, albergando el 60% de las
variedades de cacao que existen en el mundo, y es poseedor de una increíble
diversidad y variabilidad genética.
II METODOLOGIA
2.1. Técnica
Esta investigación tuvo un enfoque de tipo descriptivo, el cual midió la realidad de
acuerdo al contexto actual y potencial de mercado de chocolate orgánico en la
ciudad de Chiclayo. El diseño de esta investigación fue mixta. Por la parte
cuantitativa se emplearon encuestas que permitiran medir los elementos
conductuales como lugar, frecuencia de compra, cantidad de consumo de chocolate
entre otras.