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Idealmente, el estudio de sistemas (especialmente de los que tienen que ver con seres
humanos) debe ser lo más simple y claro posible, pero haciendo justicia a las complejidades
que se estudian o que se intentan cambiar. De hecho, una de las principales discusiones en
“teoría de sistemas” es sobre si es posible o no obtener todos los datos necesarios para
predecir con un grado razonable de certidumbre qué haría un sistema. Puesto que el “todo es
mayor que la suma de sus partes” (Aristóteles), y dado que incluso las partes tienen partes,
probablemente es imposible tener certeza sobre algo con un relativo grado de complejidad .
Irónicamente, para tener una comprensión completa de un sistema, se tendrían que conocer
todos los datos posibles sobre cada una de las partes. Para obtener eso, se necesitaría
virtualmente duplicar el sistema que se estudia, lo que es una imposibilidad. Por ejemplo, para
poder predecir con certeza lo que hará un individuo en una circunstancia particular, se tendría
que saber todo sobre esa persona, inclusive todas las influencias que ha tenido. ¡Es decir, se
tendría que tener más información sobre la persona que la que tiene esa persona sobre sí
misma! La predicción con un alto nivel de certidumbre sobre conducta humana es,
virtualmente, imposible.
Don Riso ha desarrollado este material, aunque, como sucede con muchos otros elementos del
eneagrama, Óscar Ichazo fue el primero en sugerir que los nueve puntos (comparados
frecuentemente con los tipos de personalidad) se podrían considerar como “dominios.” Sin
embargo, Ichazo tomó esta idea en una dirección muy diferente a la de Don Riso.
En vez de interpretar cada punto como una indicación de uno de los nueve tipos de
personalidad únicos del eneagrama, los nueve puntos se pueden tomar como “dominios” para
la acción de uno de los principios universales necesarios para que un sistema o una entidad
entera esté presente y sea operacional. Entendido de esta manera, el eneagrama puede
revelar los principios de organización de cualquier sistema complejo e interdependiente, a
cualquier escala.
Los sistemas débiles o carentes de alguno de los dominios, no son susceptibles a funcionar
bien o a sobrevivir en el largo plazo.
La especificidad ofrecida por este acercamiento permite descubrir en qué medida cada
principio se incorpora con eficacia, o si un sistema se está torciendo o si carece totalmente del
principio (dominio). Así, los dominios se pueden considerar componentes necesarios (o
inversamente, “piezas perdidas ") de un sistema orgánico completamente funcional, a
cualquier escala que se considere.
Para poner esto de una manera un poco diferente, los nueve dominios se pueden interpretar
como arquetipos universales presentes en todo sistema exitoso.
Interesante: se puede decir que los nueve tipos de personalidad del eneagrama son ejemplos
específicos de los dominios más generales. Es decir, los tipos son los dominios en un nivel
individual y psicológico. Son los dominios los que son fundamentales, no los nueve tipos de
personalidad del eneagrama. Los dominios funcionan en un nivel muy alto de generalización, y
no son rasgos para cada tipo.
Por ejemplo, el análisis de los nueve dominios se puede aplicar desde la forma de diseñar una
casa, hasta tomar vacaciones, o a los elementos de una buena pintura, o a las facultades de la
naturaleza humana, o a los nueve dominios del amor y a muchos centenares –sin duda alguna,
millares– de ejemplos más.
En términos prácticos, los dominios se pueden utilizar como “verificación cruzada de que algo
está completo” en un sistema, una organización, o una actividad compleja de cualquier tipo o
escala. Los dominios responden a preguntas fundamentales como:
Y, desde el punto de vista de los tipos de personalidad del eneagrama , “¿de qué se trata
realmente cada tipo ?”
Todo esto puede entenderse fácilmente con un ejemplo, como es el caso de “los dominios de
necesidades humanas fundamentales”.
Tres de los dominios tienen que ver con el individuo (2, 3, y 4), tres con “el otro” (5, 6, y 7), y 3
con el mundo (8, 9, y 1). ¡Todos son necesarios!
La aproximación de los nueve dominios es especialmente valioso en los negocio porque los
resultados se pueden aplicar objetiva y rápidamente a lo largo de los elementos de un grupo
completo de cualquier tamaño, y las soluciones a los problemas pueden diseñarse de forma
muy específica para el grupo(os) implicado(os). La esperanza es que con esa nueva
comprensión, y con la aplicación adecuada de los dominios faltantes, débiles o torcidos, el
grupo o el equipo mejore de maneras específicas, comprobables y valiosas.
Vale la pena destacar que, aunque los nueve dominios se relacionan con los tipos de
personalidad del eneagrama, los dominios se aplican más fácilmente al mundo de los negocio
que a los tipos de personalidad. Los dominios no se basan en la identificación de los tipos de
personalidad de los individuos en un equipo (El acercamiento por “tipos de personalidad”
causa a menudo problemas tales como el encasillamiento de la gente, la clasificación en
estereotipos, la creación de profecías autocumplidas, el despertar de prejuicios, etc., por
nombrar sólo algunos de los problemas de este tipo de aproximación). El acercamiento de los
nueve dominios trabaja tomando en cuenta simultáneamente todas las características
arquetípicas más altas de los tipos, de modo que se pueda ver cómo el equipo en su conjunto
incorpora todas las capacidades y los valores significativos en un momento dado.
Una discusión completa de la teoría y del uso de los nueve dominios será presentada en el
entrenamiento de facilitadores de los nueve dominios donde, entre otros materiales nuevos
inéditos, se incluirá “El espectro completo de ser”, guía de los términos clave de los nueve
dominios. Sin embargo, esto sería demasiada información para esta breve introducción sobre
por qué los nueve dominios son tan prácticos, útiles y beneficiosos en el mundo de los
negocios.
Un último punto: los nuevos test, los TOLAT (equipo y herramienta de la evaluación
organizacional), y los 9DAT (herramienta de evaluación de los nueve dominios) son las
evaluaciones básicas que permitirán a los facilitadores 9D medir el nivel de dominio de un
grupo o equipo y obtener un panorama coherente del grado de funcionamiento de los nueve
dominios.
En fin, los puntos y las ideas discutidos brevemente en este artículo no son consideraciones
abstractas sobre qué sucedería al utilizar el eneagrama más eficazmente en los negocios, así
como de otras aplicaciones prácticas. Existen pruebas y se han usado ya en la práctica (y están
en proceso de probarse continuamente en circunstancias pertenecientes al “mundo real”). El
grupo de los nueve dominios se ha trasladado de la teoría a la práctica, de la idea de dominios
a resultados explícitos de cuáles son y de cómo funcionan juntos. Esto no sólo abre nuevos
caminos para el eneagrama, sino también para el desarrollo de la organización, la teoría de
sistemas, la psicología, y otras áreas de gran interés en todo el mundo en una gran variedad de
situaciones –personal, comunitaria, organizacional y académica– . Seguramente irá creciendo
el interés por los nueve dominios.