ALBERT CAMUS

Albert Camus nació en Algeria el 7 de noviembre de 1913 y falleció en

un accidente automovilístico a la edad de 46 años, justo cuatro años
después de recibir el premio nobel de literatura. Su padre, Lucien Camus
era un inmigrante francés que falleció durante la batalla de Le Marne, en la
Primera Guerra Mundial. Su madre de origen español, era prácticamente
sorda y analfabeta, cuando su esposo murió, regresó a su lugar de origen,
en Argel, y la abuela se hizo cargo del pequeño Albert, mientras su madre
Catherin, trabajaba como criada durante el día. Estos recuerdos de su
madre, Camus los tendrá presentes y hasta los plasmará en algunas de sus
obras como «El primer hombre» donde un hijo describe a su madre con
cierta ternura y algo distante, que pasaba largos ratos en soledad1.
Albert Camus creció en Argel y su abuela era la encargada de la familia,
hizo que su nieto completara sus estudios y gracias a Louis Germain, su
tutor, Camus pudo completar sus estudios hasta llegar a matricularse en la
Universidad de Argel, pero sus estudios se vieron interrumpidos por un
brote de tuberculosis en 1930. Tras reponerse se interés+ por el teatro, a tal
grado que organizo varias presentaciones y se dedicó al periodismo. Como
escritor dejó obras tan importantes como “La peste”, “El extranjero”, “El
mito de Sísifo” o “Calígula”, por lo que fue premiado con el Premio Nobel
de Literatura en 1957.

1. Pensamiento de Albert Camus

Camus nunca quiso que le asociaran o relacionaran con el

existencialismo, al referirse a su propia propuesta filosófica llegó a
afirmarse como un “absurdista”2.Su filosofía es existencial, es un
pensamiento vivo, que va junto con la vida misma y se acaba sólo en ella.
Su pensamiento está en favor de defender al ser humano en su existencia
plena aquí en la tierra, como escribiría en el libro La peste: « La salvación
del hombre es una expresión muy grande para mí. No voy tan lejos. La

1
C. M. PINEDA, “Albert Camus «Le premier homme»”, [29 mayo 2018]
2
Ídem.,
 salud me interesa, antes que nada su salud»3, el interés de Camus por el
hombre está en la pequeña felicidad de aquí en la tierra. Así se ocupará en
describir las actitudes concretas de la existencia personal, una filosofía
vivencial para nada abstracta. Una de las exposiciones fundamentales de
sus ideas es que el hombre es existencia y su realización se da en su
proyecto de vida, un proyecto de vida que el hombre va construyendo con
su libertad.
Importante es entender el contexto histórico en el que Albert Camus
estaba inmerso, donde el hombre respiraba angustia debido a la guerra, lo
rodeaba la desesperación y la muerte se veía por todos lados, como si la
muerte fuera la dueña y la vida se perdiera por cualquier cosa. Todo esto
hacía que el hombre se incomunicara y perdiera la esperanza en un mundo
donde no se veía una solución o un soporte para el hombre. El filósofo de
Algeria en medio de todo esto trato de dar soluciones y ayudar al ser
humano, «hay un humanismo existencial en ambos, el cual consiste en
darle al hombre la oportunidad de vivir dignamente. Se trata de realizarse
para llevar a cabo el proyecto de la vida y de servir al prójimo sin otra
satisfacción más que la solidaridad»4 Camus, por tanto, es considerado un
humanista. En sus obras hay algunos puntos o temas importantes como: la
felicidad sensible, el absurdo, la libertad; son símbolos de su humanismo.

1.2 La felicidad

Este es un tema importante para Camus del cual tiene dos visiones de la
felicidad: la felicidad sensible y la felicidad de la solidaridad. En sus obras
relata la felicidad sensible que es aquella en donde expresa su gran paz y
sosiego al estar en contacto con la naturaleza, con las olas del mar,
buscando una felicidad humana y solamente humana aquí en la tierra sin
buscar la trascendencia, entregado al placer de los sentidos pero con una
indiferencia hacia lo espiritual «El mundo es bello y fuera de él no existe la
salvación »5.
Otro tipo de felicidad diferente a la felicidad sensible, es aquella
felicidad de solidaridad, donde muchas veces se sacrificará la propia
felicidad por el bienestar de los demás. Consistirá en gozar de la salud y
ayudar a los enfermos que son excluidos o apabullados por la enfermedad.
Como lo expresa Camus en la peste donde se lucha por salvar a la
3
A. CAMUS, La peste, p.
4
F. GUTIÉRREZ, «Camus y el existencialismo», [28 mayo 2018]
5
A. CAMUS, Bodas, p. 873
 humanidad afectada por la epidemia, entre la desesperación de los
oprimidos «La felicidad no lo es todo, y los hombres tienen su deber…»6.

1.3 El absurdo

El absurdo en la filosofía existencial de Camus es clave para definir el

sin-sentido de la vida en donde el hombre se encuentra como arrojado, el
absurdo nace de la confrontación entre el llamado ser humano y el silencio
irrazonable del mundo7. La cuestión más importante para Camus se
encuentra en El mito de Sísifo donde expone que la cuestión más
importante y urgente es el sentido de la vida: juzgar si vale o no la pena
vivir la vida. La angustia de la existencia se presenta en las circunstancias
complicadas de la vida, el absurdo se presenta en formas donde ninguna
lógica puede dar respuestas al hombre de por qué pasa dicha situación.
El hombre que presenta Camus en cada una de sus obras es un hombre
que es consiente del absurdo de la vida pero no se deja vencer por él y se
revela con su peculiaridad, es el llamado Hombre rebelde que no se deja
atrapar por las circunstancias adversas. El rebelde no opta por el suicidio
porque el suicidio no es propio de la grandeza del hombre, sino que busca
las formas que le conduzcan a cambiar las condiciones que, de cierta
manera, afectan su vida; «La rebelión funge como principio explicativo al
intento de encontrarle un sentido a la existencia»8, la rebelión hace frente a
la opresión y no se deja llevar por una ideología ni por un sistema, la
rebelión tiene su base en la responsabilidad moral teniendo un compromiso
con la humanidad.
Camus como gran opositor del suicidio, expone que hay dos tipos de
suicidio: el físico y el filosófico. El suicidio físico destruye la propia vida,
una vida que confiesa que no tiene sentido la existencia y que por ello la
abandona. El suicidio filosófico es aquel donde el hombre se abandona en
la irracionalidad como lo es la fe religiosa. En la razón no se haya más que
contradicciones, como diría Miguel de Unamuno en del sentimiento trágico
de la vida: «la razón construye sobre irracionalidades»9 esto porque
criticaba el aforismo de Hegel de que «todo lo real es racional», pero
pareciera que la razón poco podría decir de la vida y es así como el hombre
rebelde que en su afán de buscar el bienestar de la humanidad da respuestas

6
A. QUESADA, «El humanismo de Albert Camus», p. 132
7
A. CAMUS, Le Mythe de Sisyphe (1942),
8
S. HERNÁNDEZ, «Albert Camus: Los caminos de la existencia», [28 mayo 2018]
9
MIGUEL DE UNAMUNO, Del sentimiento trágico de la vida, p. 10
 a la vida, claro que no negando la racionalidad, acaso buscando o
reformulando una explicación que lo satisfaga racionalmente, una
respuesta que no venga de la trascendencia sino del hombre mismo.

1.4 La libertad humana

Si Dios es omnipotente, el hombre queda despojado de toda su

responsabilidad y la libertad humana es aparente10, para que el hombre
tenga su libertad es necesario quitar a Dios, porque si Dios no existe todo
depende del hombre. El hombre por medio de la rebeldía debe rescatar la
justicia y libertad dañadas por la opresión. Camus como un humanista no
permite que la libertad se vuelva libertinaje, el considera la libertad como
una abertura al otro, donde se busca la solidaridad. Quitando al hombre la
esperanza en el más allá podrá centrarse y vivir el aquí y ahora,
empeñándose en la construcción de un mundo más humano.
El descubrimiento del absurdo llevo al hombre a quitarse los velos que
le mostraban cierta libertad que en realidad eran prejuicios o costumbres
que daban a su vida un falso objetivo. El hombre debe mostrarse
indiferente ante el porvenir porque lo único que tiene es el presente, el
hombre se encadena sin darse cuenta al porvenir en medio de la
desesperación y eso le quita su libertad. El hombre rebelde entonces será
aquel que sabe aceptar el absurdo pero que no se deja influenciar por él,
sino que lo enfrenta, aun sin razones para explicar el absurdo de las
situaciones adversas es hombre de acción que en respeto de la libertad
lucha por la libertad de ellos en lo que consideramos solidaridad, dar la
vida por los demás.

CONCLUSIÓN

El trabajo de Albert Camus está impregnado del espíritu que aquejaba a

una civilización en gran crisis. Una civilización que se encontraba perdida,
que tenía su confianza puesta en la ciencia y la técnica, una civilización
que se creía inmune a las barbaries y atrocidades de las que es capaz el
hombre y que al no encontrar respuestas a sus penas, no encontraba refugio
en la razón ni en un Dios todopoderoso. Por tanto Albert Camus trató de
salvar al hombre con la ayuda del hombre con el amor a la humanidad.

10
R. LUCAS, Horizonte vertical, p. 28
 BIBLIOGRAFÍA
CAMUS A., La peste, Mirlo, México 2017.
—, Bodas, Mirlo, México 2017.
—, Le Mythe de Sisyphe (1942),
DE UNAMUNO, M., Del sentimiento trágico de la vida, Austral, Buenos Aires 1937.
GUTIÉRREZ, F. «Camus y el existencialismo», [consulado: 28 mayo 2018] Espiga.org
HERNÁNDEZ, S., «Albert Camus: Los caminos de la existencia», [28 mayo 2018]www.uam.org
PINEDA, C. “Albert Camus «Le premier homme»”, [consultado: 29 mayo 2018] www.mercaba.org
QUESADA, A., «El humanismo de Albert Camus», p. 132
R. LUCAS, Horizonte vertical, BAC, Madrid 2016.