Observar una ciudad puede causar muchas sensaciones, tal como miramos una
obra arquitectónica la ciudad también es una construcción en el espacio, pero en
escala mayor. Todo ciudadano tiene vínculos con una parte de la ciudad, su imagen está embebida de recuerdos y significados. Nuestra percepción de la ciudad no es continua sino, más bien parcial, fragmentaria, mezclada con otras preocupaciones. Casi todos los sentidos están en acción y la imagen es la combinación de ellos. La Legibilidad del paisaje urbano, la facilidad con pueden reconocerse y organizarse sus partes es una pauta coherente. Un paisaje llamativo es el esqueleto que aprovechan muchos pueblos primitivos para erigir sus mitos de importancia social. Un medio ambiente característico y legible no solo brinda seguridad sino también realza la profundidad y la intensidad potenciales de la experiencia humana. Perderse por completo sin podernos apoyar en la presencia de los demás y en medios específicos de orientación, como mapas, calles numeradas, señales de ruta y letreros de autobuses.