Vous êtes sur la page 1sur 10

UNIVERSIDAD MAYOR

DE SAN ANDRES
FACULTAD DE INGENIERIA
INGRNIERIA PETROLERA

TRABAJO FINAL FRACKING EN EL MUNDO Y BOLIVIA , PROYECTOS


EN BOLIVIA

Nombre: Callisaya Yampara Fernando Daniel


Docente: Ing. Marin Dominguez Reynaldo
Auxiliar: Univ. Espinal Abel
Materia: Fluidos de perforación
Fecha: 29 de mayo del 2018

La paz - Bolivia
LOS ORÍGENES DEL FRACKING
Lo curioso es que esta técnica no es nueva, sino que viene de muy lejos. En los años 40 se
empezaron a hacer algunas investigaciones, pero el experimento no fue a más. Luego
apareció la figura de George Mitchell, un empresario petrolero de Texas que luchó durante
años por aumentar la eficiencia y la sostenibilidad de la industria, al tiempo que financió
investigaciones en el campo de la fractura hidráulica.
Durante más de quince años, Mitchell fracasó en su intento de pasar de la teoría a la
práctica. A comienzos de los 90, sus socios estaban hartos de oír hablar de una técnica que
no terminaba de arrojar resultados. En 1998, su situación personal era muy complicada:
tenía casi 80 años, sufría un cáncer de próstata, lidiaba con el Alzheimer de su mujer y
enfrentaba dificultades para retener el control de su empresa, Mitchell Energy.
En ese momento llamó a sus puertas un ingeniero llamado Nick Steinseberger, que propuso
a Mitchell una versión low cost de su concepto de fracking. La idea era infiltrar las rocas con
un compuesto mucho más natural, hecho en un 99% de agua. El viejo empresario de Texas
dio luz verde al experimento y, en apenas dos años, su producción de gas se había
multiplicado un 250%. Poco a poco, productores de Oklahoma, Louisiana y otros territorios
se fueron sumando. Mitchell murió en 2013, a los 94 años de edad. Por suerte, vivió lo
suficiente para ver su sueño hecho realidad.

EN EL MUNDO
En Latinoamérica, bajo este sistema no convencional se perforaron 300 pozos en el norte
de la Patagonia argentina, y Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF) junto con la petrolera
Chevron proyectan nuevas exploraciones y explotaciones, la mayoría de los casos en
territorios indígenas, sin previo proceso de consulta ni participación de las poblaciones
afectadas, de acuerdo a el periodista e investigador del Observatorio Petrolero Sur, Hernán
Scandizzo. Así como Estados Unidos va camino de recuperar el auto abastecimiento
energético gracias al fracking, Argentina también espera lograrlo con Vaca Muerta a finales
de esta década o principios de la próxima.

Actualmente la mitad de los pozos de hidrocarburos no convencionales perforados fuera de


EEUU y Canadá están en Argentina, aunque es Paraguay el país con mayores reservas pero
que tiene al fracking en agenda, haciendo exploraciones con más mesura.

En Argentina, YPF es dueña de un tercio de Vaca Muerta y lidera la inversión con unos 1.800
millones de dólares aportados por año. De ellos, la mitad vienen de la norteamericana
Chevron, que se asoció en 2013 a la petrolera argentina “Yo creo que existe una tendencia
a nivel de América Latina de una disminución de los estándares sociales y ambientales para
permitir una profundización de las actividades extractivas. Está pasando en Perú, en Bolivia,
en Colombia, Paraguay, Chile, Brasil y en México, ni qué decir Argentina”, dice Ariel Pérez
Castellón, abogado ambientalista y asesor del Programa de Agua Dulce de la Asociación
Interamericana para la Defensa del Ambiente (AIDA), de Bolivia.

En Europa la conclusión del primer Foro de Energía y Medio Ambiente organizado


conjuntamente por el Instituto Superior de Medio Ambiente y la Fundación Renovables en
España, dice que el fracking “supone perpetuar los principales errores del actual modelo
energético –impactos ambientales y utilización de recursos finitos– además del deterioro
añadido que conlleva esta técnica”

Sin embargo, tiene gran peso que el aprovechamiento de las reservas propias de gas pizarra
o de esquisto esté permitiendo a EEUU, segundo consumidor mundial de gas natural,
avanzar hacia la independencia energética, algo que la potencia del norte busca
desesperadamente desde hace mucho.

Según la Agencia Internacional de la Energía (AIE), si el ritmo de extracción de este gas no


se detiene y la explotación prevista de nuevos yacimientos acaba en éxito, es más que
probable que Estados Unidos sea energéticamente autosuficiente en apenas un par de
décadas. De hecho, actualmente EEUU ya produce más gas natural que Rusia, de quien
dependía hasta hace unos años. Pero Estados Unidos no se destaca precisamente por su
discurso hacia la Madre Tierra y defiende el capitalismo sin ninguna fachada.

EL FRACKING EN BOLIVIA
GAS |ESTA NUEVA TECNOLOGÍA PARA EXTRAER GAS DE ESQUISTO, ES EFECTIVA PERO
ALTAMENTE CONTAMINANTE DE ACUERDO A LO QUE SE HA COMPROBADO. EL GOBIERNO
DE EVO MORALES TIENE LA INTENCIÓN DE EXPERIMENTAR CON ELLA.

El fantasma del fracking ronda la ya lastimada Serranía del Aguarague (1), en el Chaco
boliviano.

Este sistema de extracción de gas de esquisto, considerado ideal para quienes quieren
resultados inmediatos, pero letal para los que miran con más proyección, es un tema que
ha generado mucha polémica en el mundo entero. Hay países como Francia que lo
prohíben, mientras que en Estados Unidos es una práctica usual.

En Bolivia se han dado los primeros pasos para comenzar a usar esta tecnología, pero es
importante recordar que el país aprobó una Ley de los Derechos de la Madre Tierra, en
2010, y que entre los principios de esta ley está "garantizar la regeneración de la Madre
Tierra" y la "protección de las aguas contra la contaminación.

ROMPER LA TIERRA
El fracking es un sistema de extracción de gas de esquisto que rompe la tierra con una
tecnología que es considerada altamente contaminante, de acuerdo al análisis de varios
expertos. Consiste en la fractura hidráulica, (o fracking en inglés), de las rocas que albergan
los hidrocarburos (gas o petróleo) mediante la inyección a presión de un compuesto de
agua, arena y productos químicos a gran profundidad. La técnica usa ingentes cantidades
de agua, de las que luego hay que deshacerse. Una pequeña parte de los fluidos residuales
retorna de manera natural a la superficie, pero la mayoría se trata, bien en superficie (se
construyen balsas y se deja evaporar), bien reinyectándolos en el subsuelo. Un estudio
publicado en la revista “Science”, relaciona los terremotos con la inyección de aguas
residuales, una de las técnicas que usa el fracking. Los investigadores, de la Universidad de
Columbia en Estados Unidos, aseguran que seísmos ocurridos en lugares lejanos han
desencadenado terremotos en zonas de ese país donde se elimina el líquido sobrante de
las explotaciones. El estudio habla, por ejemplo, de un terremoto en Chile que provocó
actividad sísmica en Oklahoma y de otro en Japón (el del tsunami de 2011) que generó
seísmos en Texas. Nueva York ha prohibido, como estado, el uso del fracking en su
territorio.

FRACKING A LA BOLIVIANA
En Bolivia, Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos, anunció el 2013 que estaba
comenzando los estudios para identificar gas de esquisto, y en noviembre de ese mismo
año hizo una presentación en Santa Cruz sobre las probables reservas del país, donde se
identificó principalmente al Chaco boliviano.
Se firmaron convenios con Yacimientos Petroleros Fiscales (YPF) de Argentina, para evaluar
el potencial en esta región y se envió una delegación a los yacimientos en la zona de Vaca
Muerta en Argentina. YPF, que trabaja muy cercana a la trasnacional Chevron, tiene
intereses particulares en esa zona.
Por el lado boliviano también se indicó a la Unidad de Geología y Geofísica, instruir a todas
las empresas (operadoras y subsidiarias) que cuando perforen pozos saquen muestras de la
formación Los Monos, que es una formación donde se presume hay gas de esquisto para
estudios posteriores. Anteriormente, en Chuquisaca ya se hicieron pruebas de fracking a
menor escala.
Jorge Campanini, del Centro de Documentación e Información Bolivia (CEDIB), opina que
“la posibilidad de que en Bolivia comience extra-oficialmente la producción de gas no
convencional está tomando forma, porque no existe una ley que regule la fracturación
hidráulica, pero como resultado de la política de expansión de la frontera de los
hidrocarburos, es posible comenzar los estudios así como la exploración profunda porque
nada lo prohíbe."

La falta de regulación al respecto es evidente. Como lo es su urgencia. Hace tres años, el


Viceministerio de Exploración y Explotación de Hidrocarburos dijo que pronto se legislaría
el tema del fracking. Pero hasta ahora no hay nada oficial al respecto. "El proyecto de ley
de hidrocarburos sigue siendo oficialmente un secreto de Estado," dice Campanini. Carlos
Arze, de la Unidad de Análisis de Políticas Públicas del Centro de Estudios para el Desarrollo
laboral y Agrario (Cedla) es tácito al considerar que Bolivia no está preparada para el uso de
esta nueva tecnología. “De manera particular, hay que aclarar que la empresa estatal YPFB,
que tiene a su cargo la explotación de recursos hidrocarburíferos, no tiene el conocimiento
ni la capacidad para utilizar esta técnica, por ello el año pasado avanzó en acuerdos con YPF
de la Argentina para realizar exploración de reservas de gas no convencional. Sin embargo,
detrás de la empresa argentina se encuentra la estadounidense Chevron que sí hace uso
regular de esa técnica. En conclusión, no sería el Estado boliviano el que, eventualmente,
podría usar esa nueva tecnología, sino las empresas transnacionales. Con todo, el
desconocimiento sobre los impactos del fracking y la debilidad legal e institucional del país
elevan el riesgo de la aplicación de la misma en nuestro país.

Arze explica que los riesgos más evidentes del fracking son la contaminación general del
medio ambiente debido al carácter agresivo de la técnica, y en particular la contaminación
de reservorios de agua o de venas de agua que existen bajo la superficie debido al uso de
químicos de impactos desconocidos y problemas para la salud humana derivados del
consumo de agua contaminada.

Para Arze, otra razón expresa para prohibir o paralizar proyectos que hacen uso de esa
técnica, es la falta de transparencia de las compañías que practican el fracking acerca de los
impactos del mismo. De manera general, las prohibiciones han sido adoptadas luego de
verificarse masivas movilizaciones de las poblaciones que serían afectadas por dichos
proyectos.

Según él, como alternativa para nuestro país la explotación de gas natural convencional es
la mejor alternativa en curso. “Debido a la baja tasa de crecimiento del consumo interno de
gas natural, no se justificaría el uso de otra técnica como la del fracking; por ello, sólo la
intención de exportar para obtener divisas –como corresponde a la política extractivista del
gobierno actual- podría “justificar” su utilización. Más allá, existen fuentes de energía
alternativas y renovables que no se están aprovechando adecuadamente en Bolivia:
hídricas, eólicas, solar, geotérmica, biomasa, etc.”, explica Arze, quien también dice que
después de la firma del acuerdo con YPF Argentina, no se tuvo mayor información sobre el
tema.

REGIÓN VULNERABLE
Martin Vilela, de la Plataforma Boliviana sobre Cambio Climático, quien ha expuesto los
riesgos del fracking ante el Tribunal Internacional para los Derechos de la Naturaleza, dice
que el fracking es un riesgo inminente en Bolivia y una ofensa absoluta al discurso del
gobierno sobre la Madre Tierra. Vilela dijo ante el Tribunal, que el Chaco es una región muy
vulnerable, que el fracking plantea graves peligros para las fuentes de agua, y que
aumentaría masivamente las emisiones de carbono del país. “Los directos afectados con el
fracking serán varios pueblos indígenas como los guaraníes, los tapiete, los weenhayek y los
ayoreos”. Vilela explica que se ha calculado que por la contaminación indirecta de las aguas
en la cuenca del Chaco, que impactaría a tres de los nueve departamentos del país, se
afectaría a más de un millón de personas.

Por su parte, Rodrigo Rodríguez, del Foro Boliviano sobre Medio Ambiente y Desarrollo
(FOBOMADE), asegura que el fracking ya es una preocupación grande para los ecologistas
bolivianos por el impacto directo a la reserva del Aguarague, y también por el daño que se
haría al resto de la comunidad. “El fracking tiene connotaciones ambientales, sociales, de
los suelos y las aguas. Esta fracturación también produce problemas sísmicos, y está
relacionada con el cambio climático. El fracking es quebrar bruscamente la Tierra y eso tiene
consecuencias serias.”

FRACKING Y AGUA
Mientras que el biólogo y ecologista Marco Octavio Ribera, explica que para fracturar cada
pozo, hace falta introducir mucha agua, lo cual puede afectar la disponibilidad del recurso
para las poblaciones locales, “adicionalmente, el fluido de retorno contiene las sustancias
químicas o aditivos utilizados al introducirla, más los metales pesados que retornan a la
superficie. Entre los aditivos más utilizados se mencionan los ácidos, bactericidas y/o
biocidas, estabilizadores de arcilla, inhibidores de corrosión, reticulantes, reductores de
fricción, agentes gelificantes, controladores de metal, inhibidores de sarro y surfactantes.”
Dado que el proceso requiere una inmensa cantidad de agua, ésta solo puede ser
recuperada en menores porcentajes para someterla a procesos de tratamiento, sin
embargo, el proceso de tratamiento no purifica totalmente el agua y se acumulan grandes
cantidades de contaminantes. “El gas se mezcla con el agua potable y ha llegado a producir
explosiones y llamaradas en los grifos de las casas. Hay reportes de ganado que enferma y
muere. Los suelos se vuelven tóxicos y la desertificación avanza. Las personas que recibieron
sumas de dinero para arrendar sus campos a los pozos de fractura, ven morir sus tierras y
acabarse tarde o temprano su dinero. Por si todo esto fuera poco, las explosiones en la
profundidad de la roca, provocan temblores y movimientos de tierra”, explica el experto.

LAS VOCES EN CONTRA


Los detractores del fracking cada vez hacen sentir su voz más fuerte, y por ejemplo el
informe “Impacts of unconventional gas extraction on the environment and human health
(Impactos de la extracción de gas no convencional en el medio ambiente y la salud
humana)” sirvió como base al Parlamento Europeo para alertar sobre los peligros de la
fracturación hidráulica y pedir a los estados miembros ser cautos con la concesión de los
permisos, aunque no hubo prohibiciones tangibles al respecto, varios estados europeos han
prohibido el fracking en su territorio (Austria, Italia, Alemania, Bélgica, etc.).
La Comisión Europea ha presentado ya el programa que resume su visión de cómo la Unión
Europea debe afrontar los retos energéticos y medioambientales en las próximas tres
décadas. La propuesta prevé que en 2030 las emisiones de CO2 sean un 40% inferiores
respecto a 1990 y aunque ha renunciado a fijar objetivos vinculantes que obliguen a los
países a recortar sus emisiones de carbono, establece que las energías renovables deberán
alcanzar al menos el 27% del total al final de la década.
Sin embargo, entre tanta regla, existe un gran ausente: el fracking.
Al respecto el texto aprobado por el Ejecutivo europeo sólo se limita a recomendar a los
Gobiernos unos principios tan generales como “planear los desarrollos y evaluar los
posibles efectos antes de conceder las licencias”, “evaluar cuidadosamente el impacto
medioambiental y los riesgos” o “comprobar la calidad del agua, aire y suelo antes de
empezar las operaciones”. Así que mientras el Reino Unido ‘ ofrece’ el 64% de su territorio
al fracking, con Polonia como seguidora, Francia y Bulgaria lo prohíben.
¿Será el fracking el nuevo dolor de cabeza de los ambientalistas y de los defensores de los
derechos de la Madre Tierra? ¿Será la próxima reunión de las Naciones Unidas sobre Medio
Ambiente (COP21), un escenario para tratar el tema o se pasará por alto porque es
incómodo para muchos? Pero sobre todo ¿Seguirá el gobierno boliviano en esta senda
absolutamente contradictoria con su discurso ambiental?

(Con datos de El País, The Guardian,

CEDLA, Observatorio Petrolero Sur, PIEB,


Sinembargomx).

PROYECTOS DE FRAKING EN BOLIVIA


En las ultimas noticias de 14/04/2018
Tras el convenio suscrito el jueves entre Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB)
y la empresa canadiense Cancabria Energy Corp, que busca iniciar estudios para exploración
no tradicional de gas (“fracking”) en el área de Miraflores, Villa Montes (Chuquisaca), los
especialistas en hidrocarburos advierten que el tipo de gas que existe en la región demanda
estudios complementarios que requieren más tiempo y suponen mayor riesgo ambiental.
Por otro lado, destacaron que los países que lideran el desarrollo de la técnica (Estados
Unidos, Canadá, Australia y Argentina) no abandonan sus proyectos de exploración por los
beneficios económicos y energéticos, a pesar del alto costo que demandan, el tiempo de
ejecución y el permanente riesgo al medio ambiente. Contrariamente, Francia e Irlanda,
países con potencial no convencional, prohibieron el “fracking” por riesgos ambientales.

Para este tipo de exploración, se requiere implementar una técnica denominada fractura
hidráulica que consiste en la inyección de lodo con componentes químicos y explosivos a
profundidades donde se estima están los reservorios para explotación.

El especialista en hidrocarburos de la Fundación Jubileo, Raúl Velásquez, y el exinvestigador


del Centro de Documentación en Información Bolivia (Cedib), Jorge Campanini, advirtieron
que la exploración de gas no tradicional puede contaminar el suelo y agua de las zonas de
exploración, de no contar con la tecnología y los recursos necesarios. Velázquez afirmó que
Miraflores puede contener “tight gas”, un hidrocarburo que se caracteriza por su
impermeabilidad. “Son rocas con menor impermeabilidad, requiere que el estudio sísmico
sea mucho más detallado, y posiblemente se puedan entrar a perforaciones un poco más
profundas que la del shale gas”, explicó.

Durante la firma del convenio del jueves, el ministro de Hidrocarburos, Luis Alberto
Sánchez, dijo que la empresa canadiense estima que el área de Miraflores tiene un potencial
de 100 Trillones de Pies Cúbicos (TCF).

El analista en hidrocarburos Bernardo Prado señaló que el servicio geológico de Estados


Unidos identificó potencial de gas no convencional en Bolivia, por lo que el convenio
adscrito con la compañía canadiense pretende profundizar en detalle el potencial.

Añadió que los riesgos medioambientales pueden ser controlados si posee la tecnología
adecuada y se encarga un manejo “serio y responsable”. Sin embargo, indicó que se
necesita una ley que garantice las grandes inversiones y evidenció que Bolivia continúa con
una Ley de Hidrocarburos que data del 2005 y que no fue adecuada.

“La intención es buena, pero creo que estamos a mucho tiempo de poder realizar este tipo
de exploraciones”, añadió.

Velázquez y Prado indicaron, por separado, que se avanza en las intenciones de “fracking”
para atraer nuevas inversiones, sumarse a la corriente de países que incursionan en la
técnica y demostrar que se trabaja en exploración de hidrocarburos.
100 TCF es el potencial que la empresa Cancabria estima que posee el área de Miraflores,
que está ubicada en el departamento de Chuquisaca.

CONTINÚA EL DEBATE INTERNACIONAL


Los especialistas en hidrocarburos consultados por Los Tiempos explicaron que los pocos
países que avanzaron en el desarrollo del “fracking” presentan un debate al interior de su
territorio. En este sentido el especialista de la fundación Jubileo, Raúl Velazquez, dijo que
muchos estados de Estados Unidos prohibieron la medida en sus jurisdicciones.
DATOS
Estimaciones de potencial no convencional. En 2013, YPFB anunció que Bolivia tenía un
potencial de gas no convencional de 48 Trillones de Pies Cúbicos (TCF), según estudios de
la Agencia Internacional de Energía (AIE). El jueves, la empresa Cancabria estimó que el
potencial es de 100 TCF.
Existen 100 pozos perforados desde 2010. De acuerdo con la BBC, desde 2010 se perforaron
al menos 100 pozos usando “fracking”, la mayoría de ellos pertenecientes a YPF. En
Sudamérica, la mayoría pertenece a Argentina.
Promulgan ley en encuentro de gas. Evo Morales Ayma promulgó la Ley 1051, que autoriza
a Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) suscribir los contratos para la
exploración y explotación en el área de Iñiguazu, durante el encuentro “Inversiones, Gas y
Petróleo” de Tarija. Entre 2018 y 2022, las petroleras invertirán 3.500 millones de dólares.

CONCLUSIÓN DEL FRACKING EN BOLIVIA


A la opinión personal acerca del fracking en Bolivia, cuando se acabe el gas en Bolivia sera
necesario usar este medio ya que será lo ultimo que se realice, en otras palabras sera el
ultimo recurso que tendremos aunque esto llevaría a contaminar nuestro medió ambiente
para ello tendríamos que impulsar la gestión de peritaje regional ambiental para controlar
el uso de los polímeros que seran usados y que las empresas que accedan ala explotación
de gas mediante fracking cumplan todas las seguridades ambientales que serán sometidas
por el

Vous aimerez peut-être aussi