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CAPÍTULO 23
POBREZA
La pobreza es entendida en este capítulo no como la carencia de recursos naturales en una sociedad, sino
como la carencia de bienes y servicios mínimos necesarios para la población y la incapacidad de ésta
para allegárselos. La pobreza es, sin duda, el mayor lastre que portan las economías atrasadas en la
década de los noventa, su presencia es cada vez más elocuente y afecta no sólo el ámbito social sino
principalmente el económico, es un freno permanente al crecimiento económico y un ancla que inhibe
toda iniciativa de desarrollo, además de que degrada la condición de vida humana. Por esto su
eliminación se presenta como un objetivo impostergable para todo gobierno que desee un entorno
económico claro y sano que respalde sus acciones con el objeto de lograr las metas económicas
planeadas.
Objetivo General: Estudiar la impostergabilidad p ara todo gobierno que desee un entorno claro y
sano en el combate a la p obreza.
Objetivos Particulares: Conocer los p rincip ales enfoques sobre la pobreza y los métodos de
identificación de la misma.
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POBREZA Capítulo 23
INTRODUCCIÓN.
Lo primero que encontraremos en este capítulo es la forma en que se hace p resente la pobreza, así
la may oría de los enfoques sobre pobreza no están libres de visiones p olíticas, teóricas, p ersonales
o hasta teológicas, hay quienes consideran a la p obreza como:
Librar de la p obreza a las p ersonas dep enderá en gran medida de un mejor conocimiento de
cuantos p obres hay, donde viven y sobre todo, p orqué lo son la resp uesta a cualquiera de estas
p reguntas no resulta sencilla. Para emp ezar, se necesita p recisar mejor lo que significa
“p obreza"realmente.
Pobreza no significa desigualdad. Es necesario destacar esta diferencia. Pobreza se refiere al nivel
de vida absoluto de una p arte de la sociedad –los p obres- mientras que desigualdad se refiere a los
niveles de vida relativos en la sociedad en general. Para el F.M.I. “la p obreza como la
imp osibilidad de alcanzar un nivel de vida mínimo.”
Para Oscar Altimir, "los concep tos de pobreza y necesidades básicas son p or su misma esencia
normativa relativos, cualesquiera que sean las normas concretas que se utilicen p ara definir la
p rivación, se relacionan con un contexto social esp ecífico y se refieren a la escala de valores
asociada a un estilo de vida "1.
1Altimir, Oscar. (1980). "La pobreza en Am érica Latina: Un exam en de la evidencia". Revista El
Economista Mexicano. Vol. XIV, No. 5, D.F, México.Altimir Oscar.
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POBREZA Capítulo 23
A continuación revisaremos algunos asp ectos necesarios p ara concep tualizar la p obreza.
Interpretaciones:
La pobreza es un concep to relativo, es decir, la pobreza es lo que cada p ersona conciba como tal,
p ero aún con la libertad existente sobre la idea que p odamos tener de ella, hay comp onentes que
no podemos soslay ar en su identificación, así p ara poder tener una definición de p obreza y
basándose en ella determinarla numéricamente, se debe tener un criterio que p ermita definir quién
debe estar en el centro de interés, los siguientes enfoques nos permitirán tener una idea más clara
de lo que es la p obreza, posteriormente considerando los ap ortes de cada enfoque arribaremos a
un concep to.
El enfoque biológico.
Este enfoque se basa en que lo determinante es cubrir ciertos requisitos mínimos alimentarios; esta
es la llamada "p obreza primaria" e implica que los ingresos totales no alcanzan a cubrir las
necesidades relacionadas con el simp le mantenimiento de la eficiencia física.
b) Elección de bienes esp ecíficos que contengan los requerimientos mínimos de alimentación:
este procedimiento para convertir los requerimientos nutricionales mínimos en alimentos,
aunque fácil de realizar con la dieta de costo mínimo, suele incorporar una canasta de costo
exageradamente bajo, y es sumamente monótona, además de no rep resentar fielmente los
hábitos alimenticios de la sociedad.
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Aún con sus desventajas, este enfoque ap orta herramientas adecuadas para determinar la
existencia de p obreza, y a que, basta saber si la p ersona cubre efectivamente los mínimos
nutricionales p ara identificar que no esta en tal situación sin necesidad de conocer el monto de sus
ingresos, también ap orta que la desnutrición es un factor muy imp ortante p ara la verificación de la
existencia de este mal.
El enfoque de la desigualdad.
La pobreza p uede ser una exp resión de la desigualdad, p ues si se dan transferencias de los estratos
altos a los estratos bajos tendrían efectos muy claros en la p obreza en muchas sociedades; también
la línea de p obreza que se instrumente estará en relación con estándares contemp oráneos de la
comunidad que se trate.
La existencia de la p obreza tiene que ver mucho con la presencia de p rivaciones, sin embargo para
el hombre el concepto de privación es relativo, y al resp ecto existen nociones distintas.
La primera noción tendría que ver, con la comp aración entre "sentimientos de p rivación" y
"condiciones de p rivación", hay quienes consideran que la última es la mejor exp resión, pues
describe situaciones en las cuales las p ersonas p oseen bienes o atributos deseables en may or
cantidad que otras, y a sean ingresos, emp leo, etc., p ero ciertamente en ello no son ajenos los
"sentimientos de privación", con referencia a ello Amarty a K. Sen, exp lica que "los bienes
materiales no se p ueden evaluar (...) sin una referencia a la visión que la gente tiene de ellos"2 p or
ejemp lo el sentimiento de necesidad de un bien sup erfluo (televisor, alguna marca de rop a o de
alimento en esp ecial, etc) que la may oría de la gente p osee, así, se p uede p artir de la definición de
un estado de vida acep tado y comp artido en cada sociedad y determinar la existencia de un p unto
2Sen, Amartya K. (1992). "Sobre conceptos y medidas de pobreza". Revista Comercio Exterior.
Edit. Bancomex. Vol. 5. No. 4. México.
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La segunda noción tiene que ver con los grup os de referencia que se escojan como rep resentativos,
aquí se tienen que escoger aquellos con los que las p ersonas realmente se comp aran, lo cual es
difícil y más aún, este marco de comp aración no es indep endiente de la actividad p olítica de la
comunidad en estudio, y a que "el sentimiento de privación de una p ersona esta íntimamente ligado
a sus exp ectativas, a su percep ción de lo que es justo y a su noción de quién tiene derecho a
disfrutar de qué". 3
El enfoque de la p rivación relativa comp lementa más que comp etir con el enfoque de las carencias
absolutas, es decir no podemos concebir una idea de p obreza en donde se determine
exclusivamente p or desnutrición y muerte, como tamp oco p or situaciones en donde una p ersona
contando con una alimentación adecuada y bienes necesarios, se considere p obre por que no
alcanza el nivel de bienes y satisfactores de otra más favorecida.
Los dos tipos de definición rep resentan intentos de resumir normas mínimas de bienestar en líneas
de pobreza que deberían permitir identificar situaciones de p rivación con resp ecto al estilo de vida
dominante, las definiciones en términos absolutos se guían p or la enumeración de necesidades,
determinando en cada caso la p rivación en función del estilo de vida adop tado p or la sociedad, es
decir, son absolutas con resp ecto a la disponibilidad de recursos y a las desigualdades vigentes, las
definiciones relativas tienden a relacionar las diferencias sociales con el p romedio de consumo,
ingresos, recursos, etc, que sup onen líneas en las cuales, dep endiendo de la localización en ellas, se
p uede o no p articipar adecuadamente del estilo de vida.
Desde esta p ersp ectiva p ara muchos resulta convincente que la p obreza se p uede concebir como
un juicio de valor, entendido como algo que se p uede desap robar y cuya desaparición es
moralmente buena, es decir, la p obreza existe p orque se concibe moralmente, pero si no se tuviera
esa distinción ella no resultaría en lo absoluto dramática como consecuencia de sobrep oner las
convicciones morales a la estadística de p rivación.
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Existe una discusión en torno a este p unto entre Erik Hobsbawm y Amarty a Sen, pues si bien
Hobsbawm exp one que “la p obreza debe definirse de acuerdo con las convenciones de la sociedad
en donde se encuentre el individuo”, Sen argumenta que "esto no convierte al ejercicio de medirla
en una sociedad dada en un juicio de valor, ni en ningún ejercicio subjetivo de algún tip o; p ara la
p ersona que estudia y mide la pobreza las convenciones sociales son ciertas y no asuntos de
moral o búsqueda subjetiva". 4
Frecuentemente se llega a considerar a la pobreza de acuerdo a lo que la sociedad concibe como tal;
la medida de la p obreza se p uede basar en ciertos estándares estip ulados p or p olíticas p úblicas
que a p esar de que tienen algunos visos de legitimidad y realidad, ello no equivale a rep resentar
objetivos p recisos de las políticas recomendadas o imp lementadas, es decir la pobreza es algo más
objetivo que lo que p uede rep resentar la cap acidad de auxilio social en cuanto a alimentación,
salud, educación, etc., p or lo que ello nos conduce a una situación en donde, si el Estado o
Gobierno posee recursos suficientes p ara el alivio de las p enurias, el estándar adop tado de
p obreza p odrá reconocerse amp lio, p ero en una situación inversa éste sería automáticamente
disminuido aunque las carencias de la p oblación permanezcan inalteradas.
Bajo este punto de vista, la medición de la p obreza se consideraría meramente como un ejercicio
descrip tivo, que califica las p enurias en términos de estándares establecidos de necesidades, sería
un ejercicio emp írico y no ético, en el cual las acciones se relacionarían con lo que se considera
como p rivación.
Los enfoques revisados plantean ideas diferentes sobre los factores que deben incluirse en una
definición de p obreza, toman en cuenta asp ectos absolutos, y relativos, como el hambre, la
desnutrición o el sentimiento de carencia. Estos asp ectos se conjugan para una correcta definición
de pobreza, y de su adecuada interrelación p uede surgir la p lena identificación de este fenómeno,
los diversos enfoques revisados en este punto son de gran ay uda p ara dep urar la visión sobre el
tema, es decir p ermiten identificar y eliminar los factores que distorsionan el objetivo, tales como
las concep ciones basadas en juicios morales o con sop orte p olítico, así como la comp rensión de la
diferencia entre p obreza y desigualdad.
EL CONCEPTO.
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La pobreza como concepto individual, no cuenta con una única definición acep tada p or la
generalidad de las personas que se dedican a su estudio, de tal manera, este concep to dep enderá
de las p autas de comp ortamiento -tradición, cultura, etc.- de cada sociedad en p articular. El
concep to actual trata de alejarse del p lanteamiento antiguo de pobreza-desnutrición-muerte, p or
lo que se comp renderá a la p obreza con un carácter mixto, comp uesta tanto por la carencia de
mínimos alimenticios (enfoque absoluto) como por la no-obtención de otros bienes y servicios
necesarios para vivir dignamente en sociedad (enfoque relativo) y que eviten ap rovechar las
condiciones de desarrollo social -educación, capacitación laboral, empleo, etc.- La carencia de
algún satisfactor mínimo colocará a la p ersona en situación de pobreza y si dichas carencias son
mayores p odría situarla en extrema p obreza.
De esta manera bien p odemos entender a la pobreza como "La carencia de algo necesario e
indisp ensable p ara p oder desenvolverse dignamente en sociedad y p oder ap rovechar las
op ortunidades de desarrollo".
IDENTIFICACIÓN Y CUANTIFICACIÓN.
Lo anterior tiene la finalidad de presentar el grado de comp lejidad que imp lica tratar de delimitar
un concep to tan general como el de p obreza. A partir de ello se desp renden estrategias de p olítica
económica para erradicarla.
Una vez p resentada la extensa gama de elementos que intervienen en la definición de p obreza, para
p ropósito de tip o op erativo necesariamente se debe identificar quienes se consideran pobres, para
lo cual existen p or lo menos dos métodos que tienen como p remisa el conocimiento de las
necesidades básicas de la sociedad en estudio:
Estos métodos no son comp lementarios, cada uno determina cosas diferentes, el M étodo Directo
identifica a aquellos individuos cuyo consumo real no satisface las necesidades convencionalmente
aceptadas y el M étodo del Ingreso detecta a los que no tienen la cap acidad p ara hacerlo.
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Para evaluar la magnitud de la p obreza se necesita contar con un criterio objetivo que p ermita
clasificar la p oblación en distintos grup os de acuerdo con su situación de carencia.
En América Latina, han p redominado dos métodos de medición, el del Ingreso o Línea de Pobreza
(LP) y el de las Necesidades Básicas Insatisfechas (NBI), aunque p ara mediados de la década de
los ochenta, surge una metodología recomendada p or los organismos de la región, conocida como
M edición Integrada de la Pobreza (M IP).
De acuerdo con el estudio de Sen, "El método para la identificación de los pobres basado en el
ingreso, consiste en calcular el ingreso mínimo necesario p ara satisfacer todas las necesidades
básicas, y este será el que constituirá entonces la línea de p obreza, e identificará como p obres a
todos aquellos cuy o ingreso sea inferior a dicha línea”.
Este método, toma en cuenta las idiosincrasias individuales sin afectar la idea de la p obreza
basada en la p rivación, ya que permite identificar a quienes no cuentan con la cap acidad de
satisfacer plenamente sus necesidades básicas de acuerdo a los comp ortamientos y convenciones
establecidos en cada comunidad5.
Este método como todos los demás, tiene cierto grado de subjetividad, y a que los p untos de
quiebre que sep aran a los grup os p obres de los que no lo son, o aún, de los que lo son en may or
grado6, son los denominados como líneas de p obreza, y dep enden del criterio asumido para definir
el término de p obreza como talDentro del M étodo del Ingreso basado en la línea de la pobreza hay
tres enfoques p ara definirla:
5 Es en lo general por razones de tipo conceptual y otras de orden práctico (escasez de información)
que se ha utilizado ampliamente el método del ingreso para la identificación de los grupos
desfavorecidos.
6 En esta posición se encuentran las familias indigentes, esto es, aquellas que aún cuando asignaran la
totalidad de sus recursos a la compra de alimentos, no verían satisfechas sus necesidades nutricionales
mínimas.
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conforme a ello, el ingreso necesario p ara mantener este patrón mínimo de vida, constituirá
la línea de p obreza.
La ap licación del método de la línea de p obreza sup one llevar a cabo los siguientes p asos:
iii) El cálculo en términos monetarios de la CNSE que se tomará como la línea de pobreza.
iv) Comp aración de la línea de p obreza con el ingreso del hogar (otra op ción es la utilización
del consumo desagregado del hogar como variable más p recisas p ara este fin).
Existe una variante de este método que lleva el nombre de Canasta Normativa Alimentaria
(CNA)7, y el cual ha sido el de may or utilización en Latinoamérica p ara la detección de un grado
sup erior de p obreza, el cual consiste en:
7 La CNA es una lista de alimentos y cantidades necesarias que cubren las necesidades físicas de
alimentación.
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a) Al definir una CNA; se calcula su costo y éste se considera como frontera de indigencia o
de p obreza extrema (se p uede observar su carácter de identificación absoluta de p obreza).
b) Se calcula una frontera de p obreza relativa con el producto de multip licar el valor
monetario de la frontera de indigencia p or un factor determinado que intentará contener
algunos otros bienes mínimos necesarios (como los utensilios p ara prep arar alimentos,
utensilios p ara comerlos, el combustible p ara prep ararlos, vestuario, transporte, etc.).
Dep endiendo de la estructuración de este factor es que se le dará diferente matiz a la
cualificación de la p obreza; se debe reconocer que no existe un factor p redeterminado, este
p uede ser establecido de diferentes maneras y queda a la consideración del investigador,
aunque generalmente se suele elegir con base en el cociente observado entre el gasto total de
consumo del hogar y el gasto en alimentos (inverso del coeficiente de Engel)8, del p rimer
estrato de hogares que logre satisfacer sus requerimientos básicos, del p romedio de hogares o
de una p orción de estos.
Esta variante combina un enfoque normativo, el de la alimentación, con uno emp írico, como lo es
el de las otras necesidades, y debe tener como cualquier otra variante un concepto determinado de
p obreza, así de una manera más precisa concibe a ésta, como la imp osibilidad de una p ersona de
satisfacer sus necesidades básicas. Este método también enfrenta p roblemas serios y a que no se
encuentra al margen de adop tar determinaciones de manera arbitraria, o bien en base al criterio del
investigador el cual no obstante deberá argumentar con solidez la decisión en la cual se ap oy e.
En general, todo estudio de la línea de la pobreza distingue varios tip os de ésta, los más recurridos
son: la extrema (indigencia) y la no-extrema (moderada), de esta distinción dep enderá el tip o de
ay uda que en materia de p olítica económica requerirán los grup os p ara la sup eración de dicho
p roblema.
8Existe mayor información sobre dicho coeficiente en Barreiros Lidia (1992). La Pobreza y los
Patrones de Consumo en los Hogares en Ecuador., en Revista Comercio Exterior. Vol. 42
No. 4.
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Este método mide las diferentes formas de bienestar de manera simultánea en los hogares. Aquí se
considera a la vivienda y sus servicios y la asistencia escolar de los infantes (esta variante es
conocida como NBI-restringida). Este método fue muy recurrido en Latinoamérica a finales de la
década de los 70 e inicios de los 80, y se deriva de un trabajo anterior conocido como, el Enfoque
Sectorial de las Necesidades Básicas Insatisfechas, consistente en definir un mínimo de cada
necesidad y calcular la p oblación que se localizará con alguna necesidad insatisfecha, lo cual era
adecuado p ara el trabajo sectorial p ero no se incluía en ninguna instancia al concep to de p obreza
(esta variante fue utilizada p rincipalmente en M éxico, en los trabajos de Cop lamar). El método de
NBI cuenta con una variante más, la cual incorp ora algunas necesidades extras, p or lo que se hace
necesario reformular el concep to de p obreza. Fue p rincip almente utilizado en Inglaterra y es
conocido como el método NBI-generalizado.
Por ser el que mayor utilización tuvo en América, dada su gran acep tación entre los organismos
encargados de estudiar la pobreza, la variante que revisaremos será el método de NBI-restringido o
tradicional, el cual consiste en los siguientes p asos:
Estos map as de p obreza se han podido formular a p artir de un análisis por hogar de los siguientes
indicadores:
• Hacinamiento
• Vivienda inadecuada o imp rovisada
• Inadecuación en el abastecimiento de agua
• Carencia o escasez de servicios sanitarios
• Inasistencia a la escuela o abandono de ella p or menores
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Este método es básicamente la unión de las p rincipales características de los dos métodos
anteriores e intenta tomar en cuenta las siguientes fuentes de bienestar p ara determinar la
satisfacción de las necesidades y sus interrelaciones:
Para la integración de los métodos de LP y NBI se necesita revisar los distintos p asos que supone
su ap licación, eliminar redundancias y revisar ambos métodos para hacerlos plenamente
comp lementarios; así el Método Integrado de la Pobreza (MIP), sup one la unión de los dos
métodos anteriores, esto le p ermite conformar una tip ología de los p obres con relativa
homogeneidad, ap oy ar la diferenciación en cuanto a p olíticas que se requieran y orientar la fijación
de prioridades en el desarrollo de programas y p roy ectos.
También se debe precisar que necesidades son suscep tibles de cubrir por NBI y cuales p or LP,
así, el p rimer método cubrirá las que dependan del gasto p úblico (consumo e inversión) y de la
inversión acumulada del hogar (incluy endo niveles de educación), quedarían para la medición en
LP las que dep enden fundamentalmente del consumo p rivado corriente.
Se añaden al estudio de las NBI, el nivel educativo de los adultos y la electricidad (sup oniendo
p reviamente disp onibilidad de información) p ero la educación de los adultos supondrá una nueva
delimitación de la pobreza, así, también serán p obres las p ersonas que además no tengan el nivel
adecuado de educación.
En algunos p aíses habrá necesidades que se p odrán satisfacer gratuitamente por el Estado, estas
requerirán un tratamiento mixto, son los casos de seguridad, reproducción biológica y salud; si las
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p ersonas no gozan de ellos o sus ingresos no les p ermiten alcanzarlas se les considerará como
necesidades insatisfechas.
Las necesidades de alimentación, vestido y cuidado personal, calzado, transp orte p úblico y
comunicaciones básicas serán necesidades cuy a satisfacción estará verificadas p or la LP.
Este método sugiere la construcción de una canasta normativa completa p ara las necesidades
p ertinentes.
La línea de p obreza se construirá p ara cada hogar tomando en cuenta que los requerimientos de
ingresos de los hogares son una función del tamaño de la familia, de la estructura de edades y sexo,
del acceso a servicios gratuitos, de tiempo disp onible p ara labores domésticas y de la p rop iedad
de activos de consumo básico.
Estos grup os también suelen ser identificados de la siguiente manera; los p rimeros, como p obres
crónicos, los segundos serán inerciales y los terceros como p obres recientes.
Este método no está excento de variantes, la utilizada es conocida como variante original y fue
utilizada a finales de los 80 y p rincip ios de los 90, la variable refinada es un reajuste de la p rimera
imp lementada p or Julio Boltvinik. Tenemos que todas las metodologías enumeradas están
encaminadas a la determinación de la condición de carencia de satisfactores necesarios p ara vivir
dignamente en sociedad, todos, aunque encaminados a un solo fin, ap ortan cosas diferentes y a sea
en cuanto a características o cuantitativamente. Ningún método subsume a otro, todos tienen
validez y en cada uno de ellos p odemos encontrar los objetivos que más se ajustan a cada
concep ción de p obreza.
CAUS AS .
No resulta difícil entender p or qué tanto la región africana como la latinoamericana registran los
más altos niveles de p obreza, p orque en su desarrollo histórico ésta ha sido siemp re una de sus
características p rincip ales, quizas sea más p alp able tal situación en el continente africano debido a
la carencia de recursos naturales. Ambos desarrollos históricos se encuentran enmarcados en un
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atraso constante, se debe tomar en cuenta que tanto esa región como la americana fueron
sup editadas a los requerimientos de economías hegemónicas en la conquista en esp ecial p ara el
caso de América (y M éxico en p rimera instancia) el p rincip al interés fue la extracción de recursos
minerales, dando paso a un p roceso de generación de clases socialmente desprovistas (al surgir
durante los p rocesos de conquista la imp osición de estilos de vida diferentes, cimentados en la
p ercep ción de ingresos monetarios y el atesoramiento de ellos, las nuevas comunidades nativas
enfrentan tal situación con una desp osesión absoluta.) aunadas a las naturalmente desp rovistas,
estos grup os serán conocidos como p obres "estructurales"9, esta desigualdad social es identificada
p or la escuela neoclásica como un p roblema de dotación de recursos, donde la mayoría de los
individuos solamente p oseen su fuerza de trabajo. Se p uede reconocer también la existencia de un
grupo de p obres llamados "inerciales" los cuales rep resentarán el incremento de la p oblación en tal
situación y que son resultado del tip o de modelo de desarrollo adop tado.
Encontramos que las causas p rincip ales de la existencia de p obreza son: en p rimera instancia una
ineficiente dotación de recursos personales p ara una adecuada inserción en el mercado laboral, lo
que genera un desequilibrio en otro determinante del nivel de vida, la distribución del ingreso, en la
generalidad de las economías subdesarrolladas la distribución del ingreso es en suma desigual
incrementando la brecha entre los pequeños grup os más favorecidos y su contrap arte.
IMPLICACIONES.
Si se sitúa la p obreza en su entorno social encontraremos que aquélla quedará inmersa en lo que
conocemos como niveles de bienestar social donde a menor cantidad y calidad de satisfactores
obtenidos menor será dicho nivel (p resentándose - si es el caso - el nivel más bajo conocido como
p obreza). Los niveles de bienestar social a “grosso modo” los podemos entender como la calidad
de vida que un individuo se p uede allegar dep endiendo del estándar de vida generalmente acep tado
p or la sociedad (costumbres, cultura, idiosincrasia, etc.) y p or las reivindicaciones sociales
(derechos y obligaciones adquiridos mediante la lucha social), generalmente el nivel de vida estará
determinado p or el ingreso de los individuos.
La existencia de p obreza en una sociedad tiene imp licaciones de gran rep ercusión en la estructura
p roductiva de un p aís, es p or esto que su p resencia es muy marcada en economías
9Algunas ideas sobre este tipo de pobreza pueden ser encontradas en los artículos presentados por Carlos Vilas y por
Armando Labra, en la revista Economía Informa número 246, publicada por la Facultad de Economía de la UNAM,
donde el primero nombra a los pobres inerciales como pobres sistémicos.
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De manera sencilla (explicación causal) revisaremos las rep ercusiones circulares de este
desequilibrio social. Es de sup onerse (aunque no tiene p or que ser así necesariamente) que el
p rimer efecto de la p obreza es sobre los niveles nutricionales de la p oblación más desproveída, es
de sup onerse también que a may ores niveles de desnutrición los individuos destinan may or
tiemp o a actividades que les remunere el ingreso necesario p ara sobrevivir (p aradójicamente estas
actividades le requieren de un esfuerzo físico may or, lo que a su vez necesita de un desgaste
sup erior de energía con el consabido requerimiento de may or cantidad y calidad en la alimentación,
más aún, las rep ercusiones a nivel hogar son mayores, ya que las familias -hogares- se ven en la
necesidad de tener un mayor número de percep tores es decir de p ersonas que generen un ingreso
extra al hogar, estos p erceptores nuevos en la may oría de los casos serán los menores de edad, los
cuales a su vez utilizarán su tiempo y vida p ara buscar sobrevivir, cerrando y p erp etuando así el
micro-círculo p erverso de la p obreza) y una cantidad menor a otras actividades que les retribuyera
en mejoras sociales (p or ejemp lo educación). Una nutrición deficiente trae aparejado una escala
creciente del deterioro de la salud (las economías subdesarrolladas p resentan gran evidencia
empírica resp ecto a esta situación).
Diversos estudios argumentan que un individuo mal alimentado tiene menores p osibilidades de
asp irar a un nivel educativo adecuado (aunado esto a la imp osibilidad económica), el contar con
cuadros crecientes de p oblación con mala alimentación y con carencias graves en la formación
educativa (también es muy claro que a menores niveles de educación corresponden tasas de
natalidad may ores creando núcleos laborales con una baja cap acitación p ara el trabajo lo que a su
vez redundará en una baja p roductividad general (y la creación de una especialización en la
p roducción de bienes de bajo valor agregado -caso rep resentativo de los p aíses tercermundistas-)
una economía al contar con grandes núcleos p oblacionales en esta situación ve dañado el nivel de
consumo interno (este será en may or medida destinado a los bienes de consumo final
desprotegiendo en nivel creciente la p roducción de bienes de cap ital del p aís) lo cual influy e en
que la demanda agregada decline afectando invariablemente el nivel de p roducto nacional, al
p resentarse esta situación una economía estará en incapacidad de ampliar (incluso mantener) su
acervo de inversión p rogramada generando una disminución del ingreso p er cáp ita (fenómeno
ap untalado p or el tip o de desarrollo adop tado por los p aíses subdesarrollados que ap oy an una
distribución desigual del ingreso) cerrando de esta manera la situación p erniciosa derivada de la
existencia de p obreza.
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POBREZA Capítulo 23
Todo p lan y p rograma implementado p ara aliviar la p obreza debe de generar una reversión en el
círculo vicioso descrito antes activando un círculo virtuoso p ara la economía, p or esto existe una
necesidad imp eriosa de sup eración de toda condición de carencia que signifique un freno al
desarrollo.
⇑ ⇓
∇ Ingreso ∇ Productividad
⇑ ⇓
Los efectos de la crisis de 1982, la de finales de 1994, y la que estamos viviendo en el 2001,
forman un entorno regresivo que aleja las p osibilidades p ara lograr una situación de may or
equidad en las condiciones económicas y sociales en México. Por otra p arte, la p articip ación
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desigual de los diversos estratos de la p oblación en el costo social de la crisis, agudiza las
diferencias.
Ap arejada a la crisis, las carencias en materia de bienestar social de las may orías han crecido. La
magnitud de estas insuficiencias es lo que se ha concep tualizado como "deuda social", esta deuda
social tiene una dimensión histórica, que se refiere a las carencias que de manera p ermanente ha
tenido la p oblación en condiciones de p obreza; y una dimensión coy untural, que alude a la forma
desigual en que los distintos grupos sociales sobrellevaron el costo del ajuste económico en la
década de los ochenta.
La ap licación de p rogramas urgentes cump len con una única función, la de aliviar la situación de
carencias extremas p ero tiene un escaso efecto en la eliminación del p roblema. Es cierto como
exp onen algunos estudiosos del problema p ara México, Enrique Hernández Laos, y por su parte
Armando Labra M. "El problema central no consiste en diseñar acciones p ara redimir a los
p obres, sino en revertir el proceso de p obreza-emp obrecimiento cada vez más agudo"10, p ero no
se puede soslay ar que los niveles de pobreza actuales (p obreza extrema en p articular) y la
coy untura económica vivida p or el p aís hacen necesario la elaboración de p lanes y p rogramas de
ay uda inmediata.
10 Labra Armando M. (1996). De pobres, pobreza y empobrecimiento. en Revista Economía Informa, No. 246,
abril. Edit. Facultad de Economía. Universidad Nacional Autónoma de México. Pp. 11.
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En el corto p lazo la p obreza "inercial" y más aún la extrema, p ueden atenderse mediante
p rogramas que generen un mejor ingreso (creación de empleos, por ejemp lo), apoy os sociales (vía
transferencias gubernamentales, subsidios dirigidos, p rogramas de salud, alimentación, educación,
etc). En general estos p rogramas estarán restringidos a las p osibilidades de ayuda gubernamental
p revalecientes.
11 La investigación fue llevada a cabo por David Romero, la cual lleva el nombre de Pobreza: Una cuantificación
para México 1984 - 1992, Dicho trabajo fue llevado acabo por el método de la Línea de la Pobreza en la variante
Canasta Normativa Alimentaria sub-variante Factor Propio de Expansión, y con una línea de pobreza igual al valor
actualizado para cada año de la Canasta Normativa de Satisfactores Esenciales propuesta por Coplamar en 1982.
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POBREZA Capítulo 23
El cuadro número 23.1, nos muestra que durante el p eriodo el total de p obres creció en términos
absolutos (aunque dicho crecimiento fue en un ritmo menor al reportado p or la p oblación
catalogada como no p obre) llegando a ser p oco más de 73 millones en 1992, del total de p obres el
mayor número de pobres no extremos se registró en 1989, donde llegaron a ser casi 56 millones de
p ersonas (70.55% de la población total), también se p uede observar que la p obreza extrema
mantiene un ritmo de crecimiento inverso al de la p obreza no extrema (también conocida como
p obreza p rimaria) y durante los años de análisis siemp re registra un nivel superior a 15 millones
de individuos (aunque su tendencia es decreciente, lo es en un ritmo muy pequeño llegando a
rep resentar en 1984 más de 20 millones de individuos).
En términos generales sé observar que la p oblación no pobre (aunque rep resenta un mínimo de la
p oblación ap enas sup erior al 10%) mantiene un crecimiento sup erior al de la p oblación p obre y
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POBREZA Capítulo 23
que de ésta los p obres en extremo mantienen una tendencia inversa a la p oblación en p obreza
p rimaria, lo cual hace sup oner que la p oblación que alcanza a beneficiarse con algún programa de
ay uda gubernamental p ronto ve bloqueadas sus p ersp ectivas y retoma su ubicación de extrema
p obreza.
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POBREZA Capítulo 23
El cuadro número 23.2, nos p resenta la p oblación en situación de p obreza y extrema p obreza
dep endiendo de su ubicación, y a sea en alta (zona urbana) o baja densidad (zona rural).
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POBREZA Capítulo 23
Este cuadro en p rimera instancia nos p ermite ver, que la mayoría de la p oblación se encuentra
asentada en las zonas urbanas del p aís 12, siendo esta para 1992 más del doble de la p oblación
rural. Se p uede observar que la may or cantidad de p oblación p obre (en general) se encuentra
localizada en las zonas de alta densidad, y que del total de p obres la may oría de los p obres no
extremos radica en zonas urbanas, siendo durante el período, más del doble de la p oblación en
dicha situación asentada en zonas de baja densidad ( incluso 1992 registra casi cuatro veces más
p oblación p obre en la zona urbana que en la rural). La p obreza extrema rep orta un
comp ortamiento diferente al anterior, p ues tal situación es más evidente en las zonas rurales del
p aís, y a que durante todo el p eriodo de análisis, más del 41% de la población asentada en baja
densidad se catalogaron como p obres en extremo (en 1992 el p orcentaje llegó al 48.1%).
Se pueden prop oner algunas conclusiones tales como, se p resentó una marcada migración camp o-
ciudad p or p arte de la p oblación que así buscaba mejores condiciones de vida, además de que la
p obreza se caracterizó como una situación p articular de las zonas urbanas y la pobreza extrema se
p resentó más claramente en las zonas rurales del país.
El cuadro número 23.3, nos exp resa, al conocer la p rop orción de la frontera de p obreza extrema,
qué logran cubrir los hogares durante el periodo, en qué grado o con qué "intensidad"13 fueron en
extremo p obres los hogares mexicanos.
Se observa que en las zonas de alta densidad, a p artir del segundo decil de población, se logra
cubrir en su totalidad el costo de la línea de p obreza extrema, y que la may or intensidad de este
tip o de p obreza se registró en 1984 siendo esta de 32.09%.
En baja densidad sucede otra cosa, aquí logran cubrir dicha línea sólo a p artir del decil quinto, es
decir el 40% de la población en estas zonas consume menos del mínimo necesario p ara mantener la
eficiencia física, más aún, el menor grado de intensidad de p obreza extrema se registró en el cuarto
decil en 1989, siendo de solamente 1.67%, p ero el p rimer decil de 1984 registró una intensidad del
60.74% (con una tendencia no muy favorable durante el p eriodo), es decir esta gente vive
consumiendo menos de la mitad del "mínimo" de subsistencia.
12 Se debe dejar en claro que el porcentaje de población registrada como pobre o pobre en extremo es el respectivo a
su total de población.
13 La "intensidad" de la pobreza hace referencia al inverso del porcentaje del valor de la canasta que indique el nivel
de pobreza extrema, es decir si un hogar logra cubrir el 75% del valor de dicha canasta, este hogar tendrá una
intensidad de pobreza extrema de 25%.
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POBREZA Capítulo 23
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FUENTE: Romero Zavala David I. "Pobreza: Una cuantificación p ara M éxico 1984-1992".
Del análisis general del cuadro anterior p odemos reconocer que los niveles de pobreza extrema en
M éxico, durante el p eriodo son alarmantes. Se requiere de medidas de auxilio inmediato, la
elaboración de p lanes y p rogramas de atención dirigida a estos sectores de la p oblación se
p resentan como medidas primordiales indep endientemente de las que se p uedan p oner en marcha
p ara no sólo aliviar la p obreza sino eliminarla.
Resumen y Conclusiones:
Del p resente cap ítulo p odemos resumir que, en todo intento p or analizar la p obreza como tal,
debemos p artir de reconocer que ésta es por su misma esencia normativa relativa, es decir ésta será
determinada p or las normas de existencia establecidas en cada sociedad a analizar, además de que
no existe un concepto generalmente acep tado sobre p obreza, p ero se p uede identificar a ésta como
la carencia de algo necesario e indisp ensable p ara subsistir; se señala que el concep to de p obreza
deja de tener un carácter de absoluto, p ues este traerá aparejado tanto el significado de carencia de
satisfactores que garantizen la simp le eficiencia física (enfoque absoluto), como de bienes y
servicios que p ermitan al individuo p oder vivir dignamente en sociedad y ap rovechar las
op ortunidades de desarrollo que ésta p resente (enfoque relativo).
La pobreza ha sido identificada y medida en Latinoamérica, princip almente p or tres vías, los
métodos de medición, Línea de Pobreza, Necesidades Básicas Insatisfechas y el M étodo Integrado
de la Pobreza (aunque existen muchos otros de escasa utilización), estos métodos miden y
determinan cosas diferentes y ninguno subsume a otro. De los dos tip os de p obreza identificados
(niveles de p obreza p uede haber cuantos se desee -p obreza, pobreza extrema, etc.-) la p obreza
estructural está determinada p or un p roblema de dotación de recursos p ara la p roducción lo que
generará el crecimiento de la brecha entre los de may ores y menores ingresos, mientras la p obreza
inercial (sistémica) será la resultante de la adopción de algún modelo de desarrollo determinado
(existe evidencia de que ésta ha tenido gran relevancia en M éxico, desde mediados de los años
ochenta a raíz de la adopción de un modelo neoliberal). La formación y fortalecimiento de un
círculo p ernicioso p ara la economía en su conjunto que rep resenta un serio obstáculo p ara la
obtención de metas de crecimiento y desarrollo, siendo ésto una de las p rincipales implicaciones
de mantener niveles de p obreza elevados. La redistribución de los recursos p roductivos así como
el mejoramiento del instrumento de distribución del ingreso son los p rincip ales mecanismos para
no sólo aliviar sino eliminar la p obreza.
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POBREZA Capítulo 23
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POBREZA Capítulo 23
Pobreza
Pobreza absoluta (enfoque biológico)
Pobreza relativa
M étodo "directo" de identificación de la pobreza
M étodo del "ingreso" de identificación de la p obreza
Princip ales métodos de medición de la p obreza
Pobreza estructural
Pobreza inercial
CUES TIONARIO
1. ¿Qué es la p obreza?
2. ¿Por qué el concep to de p obreza tiene un carácter "relativo"?
3. ¿Qué diferencia existe entre el enfoque absoluto y el relativo de la p obreza?
4. ¿Pueden éstos dos enfoques ser comp lementarios?
5. ¿Qué métodos son los más requeridos p ara "identificar" situaciones de p obreza?
6. ¿Estos métodos son comp lementarios?
7. ¿Cuáles son los p rincipales métodos de "medición" de la p obreza utilizados en Latinoamérica?
8. ¿Cuáles causas se reconocen como p rincip ales generadoras de p obreza?
9. ¿Qué diferencia existe entre p obreza estructural y p obreza inercial?
10.¿Cuáles son las p rincip ales imp licaciones económicas y sociales que trae aparejada la
existencia de p obreza?
11.¿Existen alternativas concretas p ara la erradicación de la p obreza? ¿De qué dep enden?
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POBREZA Capítulo 23
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