Santiago, ocho de mayo de dos mil dieciocho.

Por cumplido lo ordenado y resolviendo la solicitud pendiente.

Vistos:
1°.- Que doña Carolina Quintana Poblete, en representación de su padre don
Raúl Pablo Quintana Salazar, ha deducido querella en contra del periodista Javier
Rebolledo Escobar, a quien atribuye participación de autor en un delito de injurias
con publicidad. Al efecto, la solicitante funda su pretensión señalando que el

A contar del 13 de agosto de 2017, la hora visualizada corresponde al horario de verano establecido en Chile Continental. Para Chile Insular Occidental, Isla de Pascua e Isla Salas y Gómez restar 2 horas.
periodista querellado publicó el libro “Camaleón - Doble vida de un agente
comunista” en el cual se entrevistó a Mariano Jara Leopold (de quien dice que es un
pariente cercano de la madre de la compareciente) y que el periodista mencionó en
el libro –refiriéndose a la víctima- “los detenidos lo recordaban como un tipo durísimo,
bruto, insensible y anticomunista”; que le atribuyó un hecho de atrocidad en perjuicio
de una mujer al señalar que “Según el testimonio judicial de un ex agente del
regimiento, lo vio introducir una zanahoria en la vagina de una mujer extranjera,
mientras se encontraba desnuda y tendida sobre una parrilla” (correspondería a una
declaración extraída de un expediente judicial); se sindica a la víctima como quien
tuvo una “destacada carrera en el ejército que lo coronó como teniente coronel” y que
“en sus inicios estuvo a cargo del campo de prisioneros en Tejas Verdes”. Por último,
se dice que el querellado “hizo mención a momentos muy dolorosos y difíciles que
vivimos como familia, los cuales sin nuestra autorización fueron conocidos por la
opinión pública sin autorización”, refiriéndose a la muerte de un familiar de la víctima.
2°.- Que, de acuerdo a la norma general contenida en el artículo 114 c) del
Código Procesal Penal, aplicable a todo procedimiento, previo a dar curso a la
querella corresponde determinar si los hechos expuestos en ella son o no
constitutivos de delito. Al efecto, considerando que en un procedimiento de acción
penal privada la querella hace las veces de acusación (artículo 400 en relación a los
artículos 113 y 261 del Código Procesal Penal), sólo los hechos contenidos en la
misma pueden, eventualmente, ser materia de una sentencia. De lo que se sigue
que, en esta primaria etapa puede perfectamente analizarse si la imputación es o no
constitutiva de delito, máxime si en la misma querella se relatan los hechos y el
contexto en que se habrían producido, de modo que no es necesario esperar el
avance del proceso a otra etapa si, del sólo análisis del presupuesto fáctico expuesto
(que como consecuencia del principio de congruencia no podrá alterarse en la etapa
del juicio y la sentencia), aparece indubitada la falta de tipicidad.
3°.- Que, del solo análisis de los hechos expuestos en el libelo que se analiza
se desprende claramente que tales hechos no son constitutivos de delito, toda vez
que la imputación que se efectúa al querellado dice relación con un delito de injurias,
definido en el artículo 416 del Código Penal como “toda expresión proferida o acción
ejecutada en deshonra, descrédito o menosprecio de otra persona”, en tanto que de
la sola lectura de la imputación no se divisa ninguna expresión ofensiva al honor de
la querellante, ya sea desde el punto de vista literal, así como tampoco desde el
punto de vista del contexto en que las expresiones se vertieron.
En efecto, en primer término cabe consignar que del relato de la querella se
desprende que el periodista transcribió en el libro las entrevistas realizadas a
terceras personas (particularmente a Mariano Jara Leopold) y desde esa perspectiva
cabe analizar si lo que publicó constituye o no delito.
En el referido contexto, analizadas las expresiones reprochadas desde el
punto de vista literal, en cuanto a informar que una persona es jefe de un
determinado lugar, institución o establecimiento militar; el informar sobre lo que otras
personas han dicho, o el informar sobre la muerte de un familiar sin autorización de

DANIEL EDUARDO ARAVENA PEREZ

Juez de garantía
Fecha: 08/05/2018 13:44:36

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sus deudos, resultan ser -ni siquiera potencialmente- ofensiva al honor de la
querellante en la medida que ninguna de las palabras o frases empleadas tienen, per
se, una connotación injuriosa.
Ahora bien, desde el punto de vista del contexto en que las expresiones fueron
efectuadas, en el relato de la querella (que en este procedimiento se equipara a la
acusación) solo se indica que en agosto de 2017 el periodista y querellado Javier
Rebolledo coprodujo y publicó el libro “Camaleón. Doble vida de un agente
comunista” en el cual se entrevistó a Mariano Jara Leopold y que en el desarrollo del
texto se sindicó a su padre como quien tuvo una “destacada carrera en el ejército
que lo coronó como teniente coronel” y que “en sus inicios estuvo a cargo del campo
de prisioneros en Tejas Verdes”. Sin embargo, en el libelo no se explica la manera en
que esa afirmación afecta el honor del querellante (más aún si se relata un aspecto
positivo o cualidad de la víctima en un cargo), sin que corresponda al tribunal inferirlo
ante el silencio de los elementos del delito en la pieza de cargos, en circunstancias
que la propia solicitante señaló que la víctima alcanzó el grado de teniente coronel en

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su carrera militar.
Tampoco constituyen injurias que puedan ser atribuidas al querellado, la
circunstancia que este relata en el libro sobre un “hecho de atrocidad en perjuicio de
una mujer”. Al respecto se indica en la querella que “Según el testimonio judicial de
un ex agente del regimiento, lo vio introducir una zanahoria en la vagina de una
mujer extranjera, mientras se encontraba desnuda y tendida sobre una parrilla”. Y no
puede constituir delito por cuanto en la misma querella, si bien se dice que no hay
ninguna declaración fidedigna al respecto, lo cierto es que también se agrega que sí
existe el testimonio efectuado por un ex suboficial de Tejas Verdes en el sentido
atribuido, sin perjuicio que posteriormente fuera desestimado por los Tribunales. Vale
decir, no existe una atribución directa sino la relación de lo que otra persona dijo,
declaración cuyo contenido no se cuestiona que haya existido sino el valor o falta de
valor que le asignaron los Tribunales en su momento.
Y en cuanto a la circunstancia que el querellado describiera un hecho sensible
y doloroso, de carácter personal del querellante y sin su consentimiento, tampoco
puede constituir injuria. Por cuanto la relación de la muerte del hijo del querellante,
hecho que no se desconoce en la querella, aun cuando se trate de un hecho sensible
y doloroso de la vida de una persona, que si bien puede afectar los sentimientos de
quien viva ese lamentable episodio; sin embargo, esa circunstancia no basta para
atribuir responsabilidad penal por cuanto no se explica, ni se desprende
mínimamente de acuerdo a las reglas sociales que atribuyen sentido a las
manifestaciones de expresión, que un hecho personal y lamentable pueda causar
deshonra, descrédito o menosprecio, sino -más bien- dolor y tristeza.
En el contexto antes descrito, no se divisa, entonces, la concurrencia del
elemento del tipo, denominado por la doctrina y jurisprudencia como animus
injuriandi, propia de esta categoría de delitos, toda vez que no existen, en relación
con el caso concreto, reglas sociales que atribuyan a las palabras empleadas un
sentido injurioso, en términos de constituir manifestaciones atentatorias contra el
honor, capaces de deshonrar, desacreditar o menospreciar al destinatario.
Al respecto la doctrina ha sostenido que “Una consideración más atenta de la
injuria como acto de habla, sin embargo, debería radicar en su sentido ilocucionario
las condiciones que deben ser satisfechas para reconocer cuándo se ha proferido y
cuándo no. El animus iniuriandi, por lo tanto, no debe ser concebido como la
anticipación cognitivo-volitiva de un efecto ulterior, sino como la relación de
congruencia que debe existir entre las reglas sociales que atribuyen el sentido
injurioso por parte de quien las profiere. El catálogo usual de actitudes mentales
incompatibles con el animus injuriandi de injuriar –animus iocandi, narrandi,
criticandi, etc.- debe ser entendido en rigor como un catálogo de reglas sociales que
confieren un sentido distinto al acto de proferir esa expresión, aunque las palabras
usadas sean las mismas. En vez de indagar los estados mentales del autor de la
injuria…, o en los efectos sociales de un acto de habla, externos a él y por lo mismo
contingentes, la discusión sobre la concurrencia del animus iniuriandi debería
concentrarse en la elucidación y explicitación de las distintas reglas sociales que,
dependiendo del contexto, pueden conferir a los actos de expresión de ciertas

DANIEL EDUARDO ARAVENA PEREZ

Juez de garantía
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palabras un sentido diverso al sentido injurioso que paradigmáticamente portan
dichos actos.” (Antonio Bascuñán Rodríguez, delitos contra el honor, en 2 Rev. D UAI
(2005), página 554).
4°.- Que, a mayor abundamiento, ante este mismo Tribunal se siguió la causa
Rit N° 11.021-2017 iniciada por querella presentada por la misma víctima en contra
de Mariano Jara Leopold (mencionado en la presente como la persona entrevistada
por Javier Rebolledo Escobar) en relación a los mismos hechos que ahora se
atribuyen al periodista que produjo y publicó el libro, exponiendo la entrevista
efectuada al mencionado Jara Leopold. Causa en la cual, con fecha 8 de enero de
2018, se declaró inadmisible la querella al no ser constitutivos de delito los hechos
descritos en la misma, resolución que fue confirmada por la I. Corte de Apelaciones
de Santiago con fecha 22 de enero de 2018, Rol Corte Penal 276-2018.
5°.- Que, de acuerdo a lo razonado, corresponde declarar inadmisible la
querella, al no ser constitutivos de delito los hechos expuestos en ella.
Y teniendo presente, además, lo dispuesto en los artículos 113 y 114 c), del

A contar del 13 de agosto de 2017, la hora visualizada corresponde al horario de verano establecido en Chile Continental. Para Chile Insular Occidental, Isla de Pascua e Isla Salas y Gómez restar 2 horas.
Código Procesal Penal, se declara inadmisible la querella presentada, al no ser
constitutivos de delito los hechos expuestos en la misma.
Notifíquese al solicitante por correo electrónico.
RIT N° 3187 - 2018
RUC N° 1810018991-3

PROVEYÓ DON DANIEL EDUARDO ARAVENA PEREZ, JUEZ TITULAR DEL

OCTAVO JUZGADO DE GARANTÍA DE SANTIAGO.

En Santiago, a ocho de mayo de dos mil dieciocho, notifiqué por el estado diario la
resolución que antecede.

DANIEL EDUARDO ARAVENA PEREZ

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