IMPLICACIONES DEL VIRUS DEL ZIKA EN LA FASE FETAL.
Carlos Alfonso Martínez Cotes.
Introducción Sin duda alguna, la etapa más sensible de un ser humano es la prenatal, ya que, al estar las células del organismo, tanto de la madre como del feto se encuentran trabajando a muchas veces la velocidad normal, en una perfecta sincronía, todo esto para dar origen a un nuevo individuo. Pero al mismo tiempo todo este esfuerzo, perfección y alta sincronía da paso a que cualquier desequilibrio pueda echar toda a perder, como un reloj que a pesar de tener muchos engranes, aunque quites el más pequeño dejara de funcionar. Según Infectious Diseases. El virus del Zika es un flavivirus que se describió por primera vez en Uganda en 1947 y, hasta hace poco, era una infección relativamente leve y oscura que se limitaba a África central.1 La OMS nos determina que La microcefalia es una malformación neonatal caracterizada por una cabeza de tamaño muy inferior a la de otros niños de la misma edad y sexo. Cuando se acompaña de un escaso crecimiento del cerebro, los niños pueden tener problemas de desarrollo discapacitarte. La microcefalia puede ser leve o grave. Según los él estudios publicados por William J. Britt MD (Resultados adversos de la infección por el virus del Zika asociada al embarazo) determinan que La propagación del virus del Zika a las Américas fue acompañada por un aumento en el número de niños con anomalías del sistema nervioso central que condujeron a la declaración de una emergencia sanitaria por parte de la OMS. Pero según el artículo de revisión “Infección del virus del Zika materna y microcefalia del recién nacido: un análisis de la evidencia epidemiológica”4. Mostraron Las prevalencias de microcefalia en 2015-2016 fueron similares o inferiores a los niveles de fondo (índice de prevalencia [PR] para todas las microcefalias: 0,19; intervalos de confianza [IC] del 95%: 0,17; 0,20). Los cambios en el número de casos de infecciones por ZIKV a veces coincidiendo con 11-18 semanas de embarazo no fueron seguidos por cambios en el número de casos de microcefalia (RP para infección a las 12 semanas: 1.02, IC 95%: 0.99, 1.05). En estudios observacionales, la prevalencia de microcefalia no aumentó significativamente en los recién nacidos de madres infectadas con Zika (PR promedio: 1,30; IC del 95%: 0,84; 2,02). Todo esto queriendo decir que las evidencias existentes no eran suficientes para determinar que le virus del zika fuera un desencadenante de la microcefalia en los pre-natos. Y que es importante tener en cuenta que, aunque las respuestas de salud pública era lo más sensato había que ser coherente con los conocimientos existentes y considerar los riesgos, los posibles beneficios y daños, y las prioridades en conflicto BIBLIOGRAFIA 1. Infectious Diseases (Fourth Edition), 2017 Pages 1119–1122.e1 2. Resultados adversos de la infección por el virus del Zika asociada al embarazo William J. Britt MD Seminarios en perinatología. 3. Organización Mundial de la Salud, Microcefalia, Nota descriptiva, 2 de marzo de 2016. 4. Infección del virus del Zika materna y microcefalia del recién nacido: un análisis de la evidencia epidemiológica, Leonelo E. Bautista MD, Anales de Epidemiología, febrero 2018, páginas 111-118