Vous êtes sur la page 1sur 25

INTRODUCCIÓN

El Derecho se encuentra en la obligación de ir acorde con la realidad social y regular las

situaciones que necesiten amparo legal. Tal es el caso de las sociedades con un solo

socio existentes en el Perú, a las cuales se le atribuye perjudicialmente la consecuencia

de responder ilimitadamente, disolverse y extinguirse si no logra reconstituirse.

Para esto el Estado ha dotado de mecanismos que pretenden corregir esa situación como

son acaso la ¿la Reestructuración, la Disolución y Liquidación o incluso,

simplemente la constitución de una Empresa Individual de Responsabilidad Limitada

son opciones que satisfacen a la realidad peruana ante la pérdida de la pluralidad de

socios? O sería conveniente regular una modalidad societaria de la sociedad unipersonal

con el afán de no dilatar el normal desarrollo de las actividades económicas de tal

sociedad, ya que, teniendo una diversidad de opciones, el empresario será el que opte

por tal o cual modalidad, según su conveniencia, fomentando de esta manera, la

legalidad de las empresas, la inversión privada y, por ende, el crecimiento económico

del mercado nacional.

1
1. Problemática de la disolución y liquidación

En la realidad peruana, se dan casos donde el empresario con el afán de

cumplir con la formalidad de la pluralidad de socios, ha recurrido a prestanombres,

los que, en los hechos, sólo cuentan con participación formal, ya que no tienen

participación real o esta se encuentra limitada a un porcentaje mínimo de acciones,

no obteniendo participación en las decisiones sociales.

Partiendo de la problemática de una sociedad que ha perdido la pluralidad de

socios, y el socio restante cuenta con los recursos suficientes para continuar

ejerciendo sus actividades económicas, sin embargo, por haber incurrido en esta

causal es pasible de extinguirse si no se reconstituye en el plazo establecido por ley.

En este caso encontramos que el valor del negocio en marcha es mayor que

el valor del negocio en liquidación, puesto que las actividades comerciales se venían

desarrollando con normalidad bajo la dirección del socio mayoritario y su

permanencia en el mercado será más productiva que su disolución.

Sin embargo, la consecuencia que la Ley General de Sociedades estipuló

para este caso es que esta adquiere la calidad de sociedad irregular, donde el socio

restante adquirirá responsabilidad ilimitada frente a terceros, por lo que sus actos no

tendrán protección de la ley y se dará la disolución de pleno derecho si no logra

reconstituirse dentro de seis meses.

El único caso en el que se acuerda la liquidación en derecho concursal es

cuando la empresa o sociedad deviene en crisis, esto es, cuando no cuenta con

suficientes recursos para pagar sus pasivos o deudas, en otras palabras, el valor del

negocio en liquidación es mayor que el valor del negocio en marcha, se obtendría

más ganancia liquidándose la empresa que manteniéndola en el mercado, razón por

2
la que, los acreedores en junta, convienen disolverla. Este no es el caso del socio

restante que cuenta con los recursos para continuar desarrollando sus actividades

comerciales,

Antes, es preciso señalar en palabras de Montoya, (2003) la diferenciación

entre disolución y liquidación:

La disolución representa el momento y la causa que


suponen el cese de la actividad ordinaria de la sociedad, la
liquidación la fase dirigida a saldar las deudas pendientes y
a repartir el activo remanente entre los socios y la extinción
o desaparición definitiva de la sociedad de la vida
económica y jurídica. (p. 1274).

Entonces la disolución se inicia con el acuerdo de voluntades de los

accionistas y luego se da la liquidación, el cual es el acto donde se venden los

bienes sociales para posteriormente, inscribir su extinción con la cancelación de

su partida registral.

La razón por la que se le atribuye esta consecuencia cuando se pierde la

pluralidad de socios es que se prioriza el acuerdo del socio prestanombres como

parte de la sociedad. Así: Montoya (2003) nos señala la razón: “Cuando la causa

de disolución deviene de un acuerdo voluntario, compete al órgano societario

adoptar el acuerdo con las mayorías establecidas calificadas por ley. Es la

voluntad de la sociedad la que se antepone al interés individual de los socios”

(p.1303). Sin embargo, el socio prestanombres no significaba la mayoría y

tampoco tenía interés en constituir una empresa, por lo que no resulta apropiado

atribuírsele la voluntad de la sociedad en su conjunto.

3
Nuestro propósito y el del Estado, es incentivar la inversión privada para

un mayor crecimiento económico del mercado, fomentar las actividades

económicas a través de la libre empresa, y dado que ella es producto de la

libertad que el Estado reconoce a las personas en el campo económico y social,

en su conformación confluyen el ejercicio de diversos derechos, entre ellos: el

de asociación, la libertad de trabajo, de contratación, a la propiedad y de

propiedad (Osenbuhl, 1991, p.27). Con el fin de fomentar el crecimiento

económico, se tiene que dotar al derecho de opciones con el fin de elegir

preservar las empresas. Confirmando esta posición, Echaiz (2012) señala que:

“El derecho empresarial procura ser una lex mercatoria, precisamente por su

practicidad, su postulado esencial es ofrecer un abanico de alternativas para que

sea el empresario quien elija la que más le conviene, un abanico de modalidades

empresariales” (p.74). Teniendo una diversidad de opciones, el empresario será

el que opte por tal o cual modalidad, según su conveniencia, fomentando de esta

manera, la inversión privada y, por ende, el crecimiento económico.

En ese sentido Huáscar (1996) señala que:

El mecanismo tradicional de liquidación del patrimonio


ya no es viable en el contexto actual por los serios costos
sociales que suele implicar. En la generalidad de los
casos resultará más beneficioso de mantener la empresa
en funcionamiento y procurar salvarla, antes que
liquidarla (…), ya que si la empresa se recupera todos
los intereses que conjuntamente con ella habían entrado
en crisis, también se recuperarán: los acreedores ven
satisfechos sus créditos, los trabajadores, además de
cobrar sus créditos, mantienen su empleo y, con ello, la
fuente de sus ingresos, el Estado continúa contando con

4
una empresa que tributa, los consumidores mantienen
una alternativa de elección en el mercado, etc (p.159).

Vemos entonces que los beneficios de que una empresa siga en marcha son

mayores incluso cuando enfrente periodos de crisis, más aún si la única

razón por la que se le pretende disolver es la falta de un socio para

completar el mínimo exigido por ley. Asimismo, la ley General del Sistema

Concursal interpreta el principio de conservación de la empresa, en tanto

sea posible su viabilidad (Del Águila, 2003, p.68).

Actualmente en el Perú, no es posible hablar de sociedades con un solo

socio por dos limitantes estipulados en la ley. Uno de ellos es la exigencia de la

pluralidad de socios y el otro es que la consecuencia jurídica de la pérdida de la

pluralidad de socios, es la disolución de la sociedad.

Cabe señalar que las normas de liquidación societaria son distintas a las

que regula la liquidación concursal. En palabras de Montoya (2003):

En el primer caso la disolución y liquidación se inician a


instancia de parte, cuyo sustento no es precisamente la
situación de insolvencia. En cambio, cuando se trata de
disolución y liquidación de la sociedad al amparo de la Ley
General del Sistema Concursal, la causa está dada en la
insolvencia del deudor, y la decisión la adoptan los
acreedores, desplazando en este supuesto a los accionistas o
socios, quienes dejan de tener un papel relevante en la
sociedad. (p. 1301)

Sin embargo, en el supuesto que estamos analizando, donde el socio

mayoritario, que siempre estuvo a cargo del movimiento económico, puesto que

el prestanombres no tenía derecho a voto, queda como único en la sociedad,

resulta perjudicial que la ley le imponga su disolución.

5
La disolución de la persona jurídica viene condicionada por dos factores:

la voluntad de las partes y la disposición de la ley. Cuando la sociedad pierde la

pluralidad mínima de socios incurre en causal de disolución estipulada por ley y

no queda otra alternativa que recurrir al artículo 409 de la Ley General de

Sociedades la que indica que el Directorio debe convocar a Junta General en un

plazo máximo de treinta días para subsanar o adoptar el acuerdo de disolución,

con el fin de corregir la situación de la actual sociedad irregular. La

consecuencia si no lo hace, como señala Montoya (2003):

Dicha convocatoria se hará por el juez de domicilio social,


conforme a las normas del proceso sumarísimo y en caso de
la sociedad anónima abierta, según el artículo 253 de la
LGS, dispone que la Comisión Nacional Supervisora de
Empresas será la encargada de supervisarla y controlarla. (p.
1302)

Ante tales situaciones, el socio restante con el afán de no inscribir la

liquidación, puesto que sería irreversible al ser la causa de disolución de orden legal, y

seguir sus actividades económicas se ve en la necesidad de utilizar artificios jurídicos,

como el propuesto por Echaiz (2012):

Una persona natural podría constituir una empresa


individual de responsabilidad limitada de la cual es
obviamente su único titular y, con dicha persona jurídica,
podría posteriormente construir una sociedad, puesto que la
sociedad se constituye cuando menos por dos socios, que
pueden ser personas naturales o jurídicas, y sabemos que,
jurídicamente la persona natural difiere de la persona
jurídica, aún en el supuesto en que el titular de este sea
aquélla (p.72).

6
Sin embargo, detrás de todo este artificio jurídico, está a la cabeza

una sola persona, el no regular a la sociedad unipersonal sobrevenida implica

que se encubra al socio dentro de mecanismos ingeniosos.

Ante el caso que una sociedad esté a punto de disolverse, se presentan

la sociedad unipersonal sobrevenida como alternativa de solución, la cual ha

sido estudiada analizada gracias al derecho comparado, la cual se utilizará

cuando la sociedad fue constituida inicialmente por varios socios, pero que al

perder dicha pluralidad queda solo con uno, quien pasa a ser propietario de la

totalidad de participaciones.

Esta modalidad resultaría una alternativa pública y eficiente el tener

al alcance una disposición que regule y ampare al socio que continúa con el

ánimo y la posibilidad de continuar con sus actividades económicas en virtud

del principio de conservación de la empresa, de la autonomía del derecho

empresarial, del fomento de la inversión privada y el posterior crecimiento de

la economía nacional.

Por todo lo visto, en la actualidad peruana, aún no es posible hablar

en sentido formal de sociedades unipersonales (salvo cuando el Estado es el

único socio), sin embargo, en la realidad se dan estos casos y, por ende, es

necesario regularlos, porque con o sin regulación jurídica van a seguir

existiendo. En ese sentido Silva (1963) indica que:

Si estas asociaciones desean actuar como entes jurídicos


capaces de ejercer derechos, contraer obligaciones, ser
representados judicial y extrajudicialmente, deben
constituirse de conformidad con la ley. No obstante, hay
que advertir que el derecho de asociación subsiste para el
grupo tenga o no personalidad jurídica. La carencia de esta

7
no importa la negación de la existencia de la asociación,
sino que implica la privación para ella de un beneficio que
puede facilitar la consecución de sus objetivos. (p. 250).

1.2.Beneficios de la Sociedad Unipersonal

Fortalecimiento de la seguridad jurídica, mediante su publicidad al ser

recogida legalmente también se le protegerá judicial y extrajudicialmente al

socio.

Fomenta la inversión privada, la creación de empresas y el crecimiento

del mercado.

Mayor agilidad en la toma de decisiones, puesto que recaerán en la

cabeza del accionista absoluto. Los administradores pueden impugnar con

arreglo a lo establecido sobre esta cuestión en referencia a los acuerdos de la

junta general (por socio único); las contrarias a la Ley, por los administradores y

por cualquier tercero que acredite interés legítimo; las anulables, exclusivamente

por los administradores.

Evita la constitución de sociedades a favor, como vimos, la creación de

una empresa individual de responsabilidad limitada simplemente para obtener la

pluralidad de socios de persona jurídica y natural, pero en el fondo, constituida

por un solo individuo.

2. La Reestructuración Empresarial

Diversos autores tienen sus propios criterios en cuanto a la definición de

lo que ellos piensan que es la reestructuración empresarial o patrimonial.

8
Reestructurar a la empresa y específicamente al patrimonio así lo

menciona Valle, V. (2009):

La reestructuración económica y financiera es el proceso por el


cual se permite a la empresa con problemas económicos
proseguir sus actividades dentro de un marco de seguridad,
tanto para la misma empresa como para sus acreedores; la ley
de Reestructuración Patrimonial tiene como interés general la
conservación de aquellas empresas viables que tienen las
condiciones para asumir el reto de la libre competencia (p.12)

Así tenemos a la nueva filosofía del Derecho Concursal tiende a

salvar la empresa antes de liquidarla prevaleciendo como pilar fundamental

la “conservación de la empresa”, siendo lo más importante para el interés

público y para los acreedores el de sanear la empresa, organizarla o

reestructurarla.

«El sistema de Reestructuración Empresarial, vigente en el Perú desde

1993 es una alternativa para las empresas viables que enfrentan problemas

económicos de diverso origen tengan la posibilidad de seguir reestructurándose»

(Valle, 2009, p.14).

El objeto de la reestructuración empresarial según Pinkas, F. (2014) afirma:

Es acceder el crédito para refinanciación de la deuda, pero eso


no basta, pues la administración de la empresa necesita crédito
fresco para iniciar una recuperación sostenida. La fuente de
financiación son generalmente los bancos, pero éstos son
instituciones renuentes a otorgar créditos a empresas en
reestructuración, considerando que no reúnen las garantías
necesarias para otorgarles préstamos o financiación (p.24).

9
2.1. El acceso al crédito:

Según las políticas bancarias las condiciones o reglas de juego mínimas para

otorgar crédito son:

 Presentar un flujo de caja futuro sustentado

 Realizar los cálculos del valor presente de dichos flujos

 Calcular la tasa de descuento en base a los tipos de riesgos considerados

 Exigir las garantías que cubran dichos riesgos

Entonces los que optan por la Reestructuración empresarial cumplen a

cabalidad con todos estos requisitos, sabiendo que la empresa es insolvente

las entidades financieras le otorgarían crédito para que esta pueda seguir

trabajando así vemos que esto conlleva a algunos riesgos como:

2.2. Los principales riesgos son:

 Riesgos de demanda del producto a financiar

 Riesgos de convertibilidad de los valores que respaldan la garantía

 La función financiera se basa en la Confianza y esta radica en la seriedad

y capacidad de la empresa para honrar sus compromisos.

3. Ventajas y desventajas de la reestructuración empresarial

Figueroa, E. (2016)

La reestructuración de las empresas es un proceso en el que una


empresa cambia la estructura organizativa y los procesos del
negocio. Esto puede ocurrir a través de romper una empresa en
entidades más pequeñas, a través de las salidas de compra y
fusiones (p.34).

Es decir, cuando una empresa utiliza uno de estos métodos, se podría fortalecer la

empresa o podría crear más problemas de lo que vale por ejemplo.

10
a. El aumento de valor de las piezas

Una de las principales razones por las que las empresas utilizan la

reestructuración corporativa es dividir la marcha de negocios para la venta. Si

una empresa está tratando de vender como un conglomerado, es probable que

obtener ofertas más bajas de los inversores. Cuando la empresa se divide en

partes separadas, a menudo puede obtener mejores ofertas para las partes

individuales. Esto puede aumentar el valor de la empresa en su conjunto y

ayudar a conseguir un precio de venta más alto para el negocio.

b. Reducir costos

Otro de los beneficios de la reestructuración de una empresa es la

reducción de costes de las empresas. Por ejemplo, una empresa podría fusionarse

con otra empresa que es muy similar y el uso de economías de escala para

funcionar con más eficiencia. Podría recortar empleados y equipo para agilizar

las operaciones comerciales. De esta manera, la empresa puede ampliar su

alcance sin añadir demasiado a los gastos generales de la empresa. Si se maneja

correctamente, la empresa puede añadir un valor significativo para los

accionistas.

A pesar de que puede reducir los costos a largo plazo mediante la

reestructuración de la empresa, el proceso de reestructuración puede ser costoso

en sí mismo. Cuando una empresa se reestructura, debe pagar los honorarios

legales y otros costos asociados con la reestructuración. Si una empresa se

fusiona con otra empresa, sino que también tendrá que venir con el dinero para

11
comprar la otra empresa. Si la reestructuración no funciona, podría costar muy

caro a la compañía y en última instancia conducir a su desaparición.

Cuando una empresa pasa por una reestructuración corporativa, puede

dañar significativamente sus relaciones con los empleados. Los empleados

temen el cambio y cuando tienen miedo de ser reducido, que pueden afectar a la

moral. En muchos de estos movimientos, las empresas tienen que liberar parte

de la fuerza de trabajo. Esto puede afectar a la lealtad de los empleados y que

podría perjudicar a la empresa en el largo plazo. Cuando los empleados no saben

si van a ser uno de los pocos desafortunados que se liberan, se puede crear

tensión.

c. Costos de Reestructuración

Aunque se puede reducir los costos a largo plazo mediante la

reestructuración de la empresa, el proceso de reestructuración puede ser costoso

en sí mismo. Cuando una sociedad se reestructura a sí misma, debe pagar los

honorarios legales y otros costos asociados con la reestructuración. Si una

empresa se fusiona con otra compañía, también tendrá que venir con el dinero

para comprar la otra empresa. Si la reestructuración no funciona, le costará a la

compañía caro y en última instancia conducir a su desaparición.

d. Daño de Relaciones con los Empleados

Cuando una empresa pasa a través de una reestructura corporativa, puede

perjudicar de manera significativa sus relaciones con los empleados. Los

empleados temen el cambio, y cuando tienen miedo de ser reducido, puede

afectar a la moral. En muchos de estos movimientos, las empresas tienen que

liberar parte de la fuerza de trabajo. Esto puede afectar la lealtad de los

12
empleados y podría afectar a la empresa en el largo plazo. Cuando los

empleados no saben si van a ser uno de los desafortunados pocos que se liberan,

se puede crear tensión.

4. Beneficios de la Sociedad Unipersonal

Según Figueroa, E. (2016) afirma:

«Puede ser originaria en caso de ser creada por una sola persona o

sobrevenida cuando cae en dicha situación por muerte, pérdida o

incapacidad del otro socio» (p.56).

Como podemos apreciar el beneficio que trae consigo el hecho de regular la

sociedad unipersonal es que si se pierde la pluralidad de socios estos no solo

tengan la opción de reestructurar la empresa, como lo hemos vistos esta es una

de las alternativas que te impone la ley lo cual conlleva riegos que ya hemos

mencionado, sino que este socio teniendo las capacidades económicas y técnicas

pueda optar por solventar la sociedad siendo el socio único y no llegar a la

disolución de la sociedad.

5. Limitaciones de la E.I.R.L
5.1.La E.I.R.L. esta creada para actividades económicas de pequeña
empresa

El artículo primero del Decreto Ley 21621, señala textualmente lo

siguiente: “La Empresa Individual de Responsabilidad Limitada es una persona

jurídica de derecho privado, constituida por voluntad unipersonal, con

patrimonio propio distinto al de su Titular, que se constituye para el desarrollo

exclusivo de actividades económicas de Pequeña Empresa, al amparo del

Decreto Ley Nº 21435”; cómo podemos observar, la norma limita el accionar de

13
las E.I.R.L dirigida a una actividad económica de pequeña empresa, pero esta

situación no refleja la realidad de la E.I.R.L, desde nuestro punto de vista la

norma no debería encuadrar el desarrollo de una persona jurídica con normas

dirigidas al desarrollo de una actividad empresarial, a una actividad específica

dado que de esta manera de alguna forma no permite crecimiento económico de

la empresa y asimismo condiciona a los titulares de la E.I.R.L a escoger otros

tipos de figuras jurídicas para desarrollar actividades económicas más grandes.

Asimismo con el surgimiento de la Ley 28015, Ley de Promoción y

Formación de la micro y pequeña empresa, el Estado, ha condicionado en su

artículo 3, la definición de estas al número de trabajadores y al volumen de venta

de la empresa, ¿pero acaso una E.I.R.L no podría contar con más trabajadores

que los indicados en la norma, o no pueden sus ventas superar lo señalado en la

Ley de Micro y Mediana empresa, es necesario que el titular de una E.I.R.L que

supere los, limites, que indica la Ley, cambie de forma empresarial y se vea

obligado a formar una sociedad aun cuando no esté dentro de sus planes tener un

socio?.

Creemos que no, el marco normativo nacional no debería restringir el

accionar de las E.I.R.L al ámbito de la Micro o Pequeña empresa, más aun

cuando ya existe normativa específica que regula a las Micro y Pequeñas

empresas como es la Ley 28015, en ese sentido concordamos con lo señalado

por Montoya, S. (2010).

Si bien es cierto que el Decreto Ley 21435 fue derogado y


hoy no existen limitaciones de índole particular a las
actividades que puede desarrollar una empresa que califique
como micro o pequeña empresa en el marco de la
legislación vigente, se mantiene la concepción generalizada

14
según la cual la EIRL es una forma jurídica apropiada sólo
para negocios de pequeña envergadura. Esta concepción no
tiene hoy un sustento normativo, sin embargo consideramos
que persiste al momento de escoger la forma jurídica para el
desarrollo de actividad empresarial (p.185).

5.2.El que constituye la EIRL y el titular de la misma solo pueden ser

personas naturales

En el artículo 4° del Decreto Ley se señala que Sólo las personas

naturales pueden constituir o ser Titulares de Empresas Individuales de

Responsabilidad Limitada, es decir no se encuentra permitido que una persona

jurídica pueda ser titular de una E.I.R.L., esta situación es evidentemente si

tomamos en cuenta que la E.I.R.L, fue concebida con el propósito de otorgar al

llamado empresario individual de una figura por medio de la cual se le permita

limitar su responsabilidad, es entendible que la norma no permita a una persona

jurídica constituir una E.I.R.L.

5.3.El titular de la E.I.R.L no puede formar parte de una sociedad

Dado que el Titular es el único, responsable da la E.I.R.L, según la

norma es inviable que ésta integre los intereses de otros grupos dedicados al

comercio, esta incorporación de nuevos intereses solo podría darse a través de un

proceso de trasformación, esto resulta perjudicial para el desarrollo empresarial

de la E.I.R.L, esta digamos limitación trae consigo el surgimiento de las

llamadas sociedades de favor o de cómodo, sociedades muy comunes en la

práctica empresarial peruana, fenómeno el cual trataremos más adelante.

15
5.4.Otras Limitaciones de la E.I.R.L

 El artículo 20° del D.L 21621 indica que los aportes dinerarios deben

realizarse obligatoriamente en un Banco, esto limita que cualquier tipo

de aportes sea realizado en otra Institución financiera que no sea una

entidad bancaria lo que puede quitar dinamismo al desarrollo

empresarial.

 El artículo 19° del D.L 21621 de la norma señala que para la constitución

del capital de la E.I.R.L., se deben efectuar aportes que transfieran la

propiedad, es decir no se permite aportar bienes en uso o en usufructo

como cualquier otra sociedad.

 El capital que por el cual se constituye y se forma la E.I.R.L debe ser

necesariamente nacional, la norma no permite que se obtengan capitales

extranjeros en la E.I.R.L.

 La Actividad de la E.I.R.L, solo puede ser desarrollada en el territorio

nacional, no pudiendo expandirse al extranjero.

 La norma no prevé beneficio o preferencia, en la gestión de la actividad

empresarial, respecto a una sociedad, debe llevar la contabilidad similar a

como lo hace una sociedad.

6. El fenómeno de las sociedades de cómodo o sociedades de favor

Se puede llamar una Sociedad de favor o de cómodo a aquella Sociedad que,

es constituida por una pluralidad de personas, pero buscando el interés o el beneficio

de una sola persona la cual es parte de esta Sociedad, es decir se aparenta un

affecctio societatis inexistente, con la finalidad de dar un real cumplimiento a los

requisitos exigidos por la Ley General de Sociedades la cual señala que es requisito

16
indispensable para la creación de una sociedad, la pluralidad de socios en el

nacimiento de la misma.

Ante esto podemos afirmar que, las personas que se asocian para formar las

llamadas sociedades de favor o sociedades de cómodo, no se asocian pensando en

realizar una actividad en la cual a través de un espíritu de colaborar y de forma

coordinada lograr el fin original perseguido por la sociedad constituida, en la cual

cada uno de los socios adquiere derechos y obligaciones para con la persona jurídica

creada en el cual se debe buscar en todo momento el bien de la sociedad antes que el

beneficio particular, si no que se establece a fin de que una sola persona, con un

interés particular, a fin de posiblemente gozar de los beneficios y potestades que

brinda la figura jurídica de la Sociedad, realice una actividad comercial que solo le

brindara beneficios a ella misma.

Normalmente el fenómeno del surgimiento de las sociedades de cómodo o de

favor, son consideradas como una anomalía jurídica, la cual es tratada de regularizar

o controlar por los diferentes ordenamientos jurídicos mediante diversas figuras que

permitan el ejercicio individual del comercio con responsabilidad limitada,

mayoritariamente en Europa, se prefirió admitir la unipersonalidad societaria dentro

de las figuras como opción para evitar las Sociedades de favor, en cambio en el Perú

como en la gran mayoría del ordenamiento latinoamericano se optó por crear la

figura de la Empresa de Responsabilidad Limitada, la cual pretende dar una salida

diferente a la problemática de las Sociedades de Cómodo o de Favor, velando de

una forma no transgredir el afecctio societatis, necesario para la formación de la

sociedad.

17
Sin embargo y a pesar de la opción dada por la figura de la E.I.R.L, en el

Perú es muy común, que los empresarios con una voluntad de realizar un negocio o

comercio de forma unipersonal opten por esta digamos figura anómala, vista las

ventajas que tiene la sociedad respecto a la ya reseñada empresa individual de

responsabilidad limitada, sobre este fenómeno en particular Robilliard D’Onofrio

señala (2009) señala:

Un muestreo muy simple de la realidad Peruana nos permite


encontrar indicios de la efectiva presencia del fenómeno de
la constitución de sociedades de favor, en la experiencia del
público en general, en la información disponible en los
Registros Públicos, en lo comunicado por las empresas
participantes en el mercado de valores, en la experiencia de
los abogados especializados y en las afirmaciones de las
propias personas que optan por la constitución de las
sociedades de favor (p.45).

Así se puede aseverar que el empresario peruano, aun teniendo una

herramienta legal para limitar su responsabilidad en la realización de una

actividad comercial unipersonal, la cual es la E.I.R.L, opta por digamos

aparentar la formación de una sociedad, creemos nosotros por las ventajas que

una sociedad tiene en comparación con la E.I.R.L, tal como lo señala Robilliard

D’Onofrio (2009):

Entonces si te tiene en cuenta que las personas recurren a las


sociedades de favor no para obtener un beneficio que ha
sido negado individualmente por las normas, sino porque
prefieren efectuar una simulación antes de acudir a la forma
pensada por el ordenamiento jurídico para dar cabida a sus
propósitos empresariales, salta a la vista que existe un
problema pues el derecho no está dando a las personas el
mecanismo adecuado para la satisfacción de sus intereses
(p.134).

18
7. Ventajas de la sociedad unipersonal

Intentaremos reseñar algunas ventajas que se podrían dar en caso se

legisle permisivamente la sociedad unipersonal comparándola inevitablemente con

la E.I.R.L, la cual es la alternativa que se encuentra normada actualmente para los

casos de iniciativas de negocios unipersonales, a continuación mencionamos

algunas de ellas:

 Podría ser formada por personas naturales o jurídicas

 No estaría necesariamente limitada solo a realizar actividades de pequeña

empresa, teniendo la potestad el socio de elegir el tipo de actividades que

desea desarrollar para su sociedad

 Podría nacer de un capital extranjero y le estaría permitido captar tanto

capital extranjero o nacional lo que le permitiría ampliar el ámbito de la

actividad empresarial

 Tendría la capacidad para administrar un grupo de sociedades o convertirse

en un holding, sin ninguna limitación.

 Al ser reconocida como una sociedad y regirse bajo las normas de la Ley

General de Sociedades, el Socio unipersonal podría escoger la forma

societaria que más le convenga pudiendo por ejemplo contar con acciones si

se inclina formar una sociedad anónima o participación si es una sociedad

de responsabilidad limitada.

 Podría convertir sus acciones en títulos valores de ser el caso esto le

permitiría facilitar la transmisión de derechos de la sociedad a terceros y

hasta vender su negocio sin limitación alguna.

19
 El socio único tendría la potestad de realizan la delegación del control y

administración de la sociedad a una persona natural o jurídica, cuando no

pueda hacerse cargo el socio.

Asimismo cabe mencionar que la sociedad unipersonal también traería

ventajas en el aspecto económico del desarrollo de las sociedades los que a decir

de Fernández Vázquez (2010) serían las siguientes:

 Incremento del dinamismo empresarial.

 Mayor agilidad en la toma de decisiones

 Facilita la transmisión de empresas

 Facilita la constitución de filiales

 Evitar la constitución de sociedades de favor

 Fortalecimiento de la Seguridad Jurídica

 Estímulo para el espíritu empresarial” (p.78).

7.1. ¿Es necesario entonces derogar la figura de la E.I.R.L?

De todo lo expuesto y respondiendo la interrogante que nos

hicimos al inicio del mismo podríamos decir que a nuestro parecer se

hace, más que evidente y sumamente necesario regular positivamente en

la Ley General de sociedades la figura de la sociedad unipersonal, dado

el desfase y la desventajas comparativas de la E.I.R.L, pero es necesario

derogar en forma inmediata la figura de la E.I.R.L y aplicar tajantemente

la figura de la sociedad unipersonal, al respecto reseña No consideramos

que sea necesaria la existencia de dos figuras jurídicas similares

unipersonales, la E.I.R.L, como hemos indicado fue una buena idea pero

dada la evolución del derecho mercantil, se ha vuelto obsoleta, aunque

20
tenemos claro que derogarla en forma tajante tampoco es solución

eficiente. (p.91).

Complementando lo señalado el mismo Figueroa Reinoso (2016)

comenta:

Consideramos así que, una E.I.R.L es el halo, la génesis del


que será la futura sociedad unipersonal. Es el tubo de
ensayo que demuestra la necesidad de una forma jurídica
que no solo es práctica sino sumamente funcional.
Lamentablemente la E.I.R.L a la fecha está limitada por una
normatividad totalmente desfasada en el tiempo pero que no
implica algo malo en su totalidad, si no que pone en
discusión la posibilidad latente, viable y evidente de una
actividad unipersonal bajo una figura jurídica de sociedad
(p.87).

Al respecto Montoya Stahl (2010) señala:

Cabe entonces preguntarnos si la regulación de la E.I.R.L


hace innecesario el debate sobre una regulación permisiva
de la unipersonalidad. Sin restarle importancia a la E.I.R.L
como forma de canalizar el desarrollo de actividades
empresariales por parte de empresarios individuales,
importancia confirmada por las estadísticas antes citadas.
consideramos que la regulación permisiva de la
unipersonalidad es conveniente en nuestro ordenamiento.
Ello porque la E.I.R.L no es la forma única de canalizar los
intereses de los empresarios individuales para el desarrollo
de actividades empresariales a partir de una estructura
jurídica que les permita limitar su responsabilidad. En
efecto, a pesar de que la regulación de la EIR L en el Perú
tiene aproximadamente 34 años es fácil notar que se siguen
empleando las sociedades de favor (p.184).

21
Entonces de lo expresado vemos que si bien es cierto es necesaria la

regulación de la sociedad unipersonal en el ordenamiento legal peruano, esta no

debe realizarse en una forma tajante si no paulatina a fin de evitar trastornos con

las E.I.R.L ya existentes y también para que los empresarios se convenzan y

tomen conciencia respecto a las ventajas de la sociedad unipersonal la cual como

ya lo ha expresado alguno de los autores reseñados, vendría a ser la evolución de

la E.I.R.L

22
CONCLUSIONES

 Los beneficios de que una empresa siga en marcha son mayores, más aún si la

única razón por la que se le pretende disolver es la falta de un socio para

completar el mínimo exigido por ley, por lo que atendiendo a la realidad peruana

y con el fin de dotar de un abanico de opciones al Derecho mercantil se propone

la regulación de la sociedad unipersonal.

 Como podemos apreciar el beneficio que trae consigo el hecho de regular la


sociedad unipersonal es que si se pierde la pluralidad de socios estos no solo

tengan la opción de reestructurar la empresa, como lo hemos vistos esta es una

de las alternativas que te impone la ley lo cual conlleva riegos que ya hemos

mencionado, sino que este socio teniendo las capacidades económicas y técnicas

pueda optar por solventar la sociedad siendo el socio único y no llegar a la

disolución de la sociedad.

 Entonces de lo expresado vemos que si bien es cierto es necesaria la regulación

de la sociedad unipersonal en el ordenamiento legal peruano, esta no debe

realizarse en una forma tajante si no paulatina a fin de evitar trastornos con las

E.I.R.L ya existentes y también para que los empresarios se convenzan y tomen

conciencia respecto a las ventajas de la sociedad unipersonal la cual como ya lo

ha expresado alguno de los autores reseñados, vendría a ser la evolución de la

E.I.R.L

23
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

1. Del Águila, P. (2003). Poniendo los puntos sobre las íes: objetivos, principios y

líneas matrices del Sistema Concursal. Lima, 2° edición, Revista Foro Jurídico-

PUCP.

2. Echaiz, D. (2012). Manual Societario. Lima, 2° edición, Editorial Grijley.

3. Huáscar, (1996). El superprivilegio del crédito laboral vs. el sistema de garantías

reales. Lima. Edición N°36. Themis Revista de Derecho.

4. Montoya, H. (2003). Las causales de disolución y la liquidación societaria en la

Ley General de Sociedades. En: Tratado de Derecho Mercantil. Tomo I, Lima.

Editorial. Gaceta Jurídica.

5. Silva, A. (1963). Tratado de Derecho Constitucional. Santiago, Editorial Jurídica

de Chile.

6. Ancalle, S. (2012). La soledad es el mejor aliado cuando no se encuentra

compañía. Sociedades unipersonales y su necesidad de regulación en la Ley

General de Sociedades. Dialogo con la Jurisprudencia Comercial. tomo 160.

Lima: editorial Gaceta Jurídica.

7. Figueroa, E. (2016). La Sociedad Unipersonal. Lima, Editorial UPC.

8. Albujar, L. (2009). La sociedad unipersonal en el derecho societario peruano.

Revista Derecho y Negocio. Centro de Estudios de Derecho Corporativo.

Recuperado de:

http://www.derecho.usmp.edu.pe/cedec/ediciones_anteriores/ano2009/alumnos

investigan.htm

24
25

Vous aimerez peut-être aussi