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HIPEROSMOLARIDAD E HIPERNATREMIA

La hipernatremia se corresponde siempre con hipertonicidad, es decir, con hiperosmolaridad


y supone una relación entre sodio y agua plasmática superior a la normal. Aunque el límite
superior de la natremia es 145 mEq/L, generalmente sólo se diagnostica hipernatremia
cuando se sobrepasan los 150 mEq/L. Dado que el sodio es un soluto impermeable la
hipernatremia siempre sucede cuando existe un déficit de agua en relación a los depósitos
corporales de sodio como resultado de una pérdida neta de agua y/o una ganancia de sodio
hipertónico.

La hipernatremia puede ser el resultado de una pérdida de agua (lo más frecuente) o de un
aporte de sodio (raro). La pérdida de agua desencadena dos mecanismos para evitar la
hipernatremia: la sed y la liberación de vasopresina (ADH). Siempre hay que tener en mente
que la sed es primordial, ya que incluso la máxima secreción de ADH puede no lograr retener
agua suficiente para compensar las pérdidas si no se aumenta el aporte de agua. Así, la
hipernatremia por pérdida de agua ocurre sólo en pacientes con hipodipsia (muy poco
frecuente) o, más comúnmente, en adultos con alteración del estado mental o sin acceso al
agua, y en lactantes.

a. Hay oliguria y la osmolalidad urinaria es máxima: indica una pérdida extrarrenal de agua.
Se acompaña de normo/hipovolemia y se produce por una pérdida de agua y sal, pero
proporcionalmente más agua que sal. Se acompaña de datos clínicos de hipovolemia
(hipotensión, taquicardia, ortostatismo, sequedad de mucosas, etc.). Si no se dispone de
osmolalidad urinaria, la comparación de los electrolitos en sangre y en orina puede orientar
al diagnóstico.

b. No hay oliguria: si hay poliuria, las pérdidas de agua son de origen renal. Aquí es muy
importante medir la osmolalidad urinaria, ya que va a distinguir la diuresis osmótica y/o por
diuréticos (en la que la osmolalidad será alta o no estará muy disminuida) de la diuresis por
diabetes insípida.

Ante una diabetes insípida, el diagnóstico diferencial entre central y nefrogénica se puede
efectuar mediante un test de deprivación de agua, midiendo la ADH plasmática o
administrando ADH exógena. Lo más práctico es administrar ADH exógena, que aumentará
la osmolalidad urinaria si la secreción endógena de ADH estaba alterada, diferenciando la
diabetes insípida central de la nefrogénica, en la que no habrá respuesta. (Albalate, 2016)

Sintomatología

Los síntomas son básicamente neurológicos, con aparición progresiva de letargia, debilidad
e irritabilidad, y posteriormente movimientos anormales, convulsiones, coma y muerte. El
descenso del volumen cerebral por la salida de agua de las células cerebrales causa la rotura
de las venas cerebrales, hemorragias intracerebrales y subaracnoideas focales, y disfunción
neurológica que puede tornarse irreversible.

El cerebro se adapta a la hiperosmolalidad a causa de dos factores. Por un lado, la contracción


cerebral inducida por la hipernatremia reduce la presión del líquido intersticial cerebral y
aumenta el volumen intersticial por un gradiente a favor del desplazamiento de fluido desde
el líquido cefalorraquídeo hacia el cerebro deshidratado. Por otra parte, la osmolalidad celular
se eleva por la captación de Na+, K+, Cl− y solutos orgánicos (glutamina, glutamato e
inositol). Por ello, la hipernatremia induce una deshidratación cerebral transitoria,
relacionándose la gravedad de los síntomas neurológicos con el ritmo de aumento de pOsm
eficaz más que con el grado de aumento de ésta (pacientes con hipernatremia crónica de 170
a 180mEq/L pueden estar relativamente asintomáticos). Otra consecuencia clínica importante
estriba en que la corrección excesivamente rápida de la hipernatremia crónica puede producir
edema cerebral por aumento del agua cerebral (ya normalizada) por encima de los valores
normales. (Fundación para la formación e investigación sanitarias de la región de Murcia,
s.f.)

Bibliografía
Albalate, M. (29 de Septiembre de 2016). Algoritmos diagnósticos: Alteraciones de la Osmolaridad
y el Sodio serico. Algoritmos en nefrología, 6. Obtenido de
http://revistanefrologia.com/es-monografias-nefrologia-dia-articulo-algoritmos-
diagnosticos-alteraciones-osmolaridad-el-sodio-serico-114

Fundación para la formación e investigación sanitarias de la región de Murcia. (s.f.). Obtenido de


http://www.ffis.es/volviendoalobasico/13_hipernatremia.html

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