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Marco Teórico

(Jorge Blanco, 2004) “Los principios procesales son aquellos que rigen el
desarrollo de una instancia judicial y están orientados a tutelar las garantías
mínimas que deben estar cubiertas en todo proceso judicial. En la instancia
intervienen tanto las partes como el juez, cuyas actuaciones deben estar
inspiradas en estos principios cardinales”. Los principios del proceso han sido
concebidos como ‘criterios’, ‘ideas’ o ‘reglas’ que informan el ordenamiento
procesal de un determinado país, de dónde se infiere que su estudio nos resultará
útil, de un lado, para conocer, nuestro propio sistema procesal, así como para
examinar, de otro, la adecuación de nuestros procesos a las exigencias de la
Constitución, en aquellos supuestos en que dichos principios hubieren sido, al
propio tiempo, constitucionalizados.

Según (Moronta, 2008), “los principios procesales no son más que directrices
generales que no necesariamente están escritas, las cuales emergen de la misma
esencia del proceso, es decir de los rasgos característicos que intrínsecamente
conforman el proceso, cual que sea este”. Los principios procesales que
intervienen en la etapa judicial del proceso de saneamiento son los siguientes: el
principio inquisitivo, el dispositivo, el de oralidad, el de inmediación, el de lealtad
procesal, el de celeridad, el contradictorio, el de inmutabilidad del proceso y el
principio de publicidad.

Según (Calaza López, 2011) “Los principios del proceso han sido concebidos
como ‘criterios’, ‘ideas’ o ‘reglas’ que informan el ordenamiento procesal de un
determinado país, de dónde se infiere que su estudio nos resultará útil, de un lado,
para conocer, nuestro propio sistema procesal, así como para examinar, de otro,
la adecuación de nuestros procesos a las exigencias de la Constitución, en
aquellos supuestos en que dichos principios hubieren sido, al propio tiempo,
constitucionalizados”.
La Ley de Registro Inmobiliario en su artículo 20 define el saneamiento de la
siguiente manera: "es el proceso de orden público por medio del cual se determina
e individualiza el terreno, se depuran los derechos que recaen sobre él y éstos
quedan registrados por primera vez".

En el proceso de saneamiento inmobiliario no existen partes como en el


procedimiento relativo a las litis sobre derechos registrados, y no existen
demanda, ni demandante ni demandado, sino reclamaciones contra la cosa, es
decir, reclamantes; este procedimiento está dirigido contra el Estado Dominicano,
ya que éste es considerado como el dueño original de todas las tierras que
conforman el territorio de la República Dominicana, en virtud del Principio III de la
Ley de Registro Inmobiliario el cual dispone que "el Estado Dominicano es el
propietario originario de todos los terrenos que conforman el territorio de la
República Dominicana. Se registran a nombre del Estado Dominicano todos los
terrenos sobre los que nadie pueda probar derecho de propiedad alguno".

El proceso de saneamiento inmobiliario está previsto en el Título III, Capítulo 1,


artículos 20 al 27 de la Ley de Registro Inmobiliario, así como por los artículos 46
letra e, 50, 51, 70 al 73, 115 al 131 del Reglamento de los Tribunales Superiores
de Tierras y de Jurisdicción Original, 136 al 139 del Reglamento General de
Mensuras Catastrales.

El Estado Dominicano como reclamante en el proceso de saneamiento


inmobiliario, participa por diversas razones. La primera de ella es, en virtud de la
parte capital del Principio III de la Ley de Registro Inmobiliario el cual dispone lo
siguiente: "el Estado Dominicano es el propietario originario de todos los terrenos
que conforman el territorio de la República Dominicana". También puede reclamar
en las condiciones siguientes: cuando el Estado Dominicano como persona de
derecho privado al ser propietario de una masa de bienes adquiridos por compras,
permutas, donaciones, legados, sucesiones, en virtud del artículo 768 del Código
Civil, el cual dispone que: "a falta de cónyuge superviviente, recaerá la sucesión
en el Estado". Por cuota parte, en virtud de la Ley No. 126, que consiste en el
pago que realizan los propietarios de terrenos que utilizan o quedan en posibilidad
de utilizar las aguas de un canal construido por el Estado, los cuales pagarán en
naturaleza por este concepto un cincuenta por ciento (50%) de sus tierras
regables (Superficie que tiene derecho al uso de las aguas otorgadas por una
concesión para riego) que sean dedicadas al cultivo, y un ochenta por ciento
(80%) de sus tierras baldías; por aplicación de la Ley No. 344 del 29 de julio de
1943, que establece un procedimiento especial para las expropiaciones intentadas
por el Estado, el Distrito de Santo Domingo, o las Comunes, en el caso de que el
terreno o inmueble objeto del proceso de expropiación no se encuentre registrado
y éste requiera ser sometido al proceso de saneamiento; o por derechos
originados de los terrenos que en el curso de un saneamiento no sean reclamados
o no puedan probar derechos de propiedad alguno, de conformidad con la
parte final del Principio III y el artículo 26 Párrafo 5 parte infine de la Ley de
Registro Inmobiliario, de que "en caso de que ningún particular pueda probar su
derecho de propiedad sobre el inmueble, el mismo debe adjudicarse al Estado
Dominicano".

El representante del Estado Dominicano en todo proceso de saneamiento


inmobiliario por ante los Tribunales de la Jurisdicción Inmobiliaria lo es el Abogado
del Estado por ante esta jurisdicción, en virtud del artículo 11 de la Ley de Registro
Inmobiliario, modificada por la Ley No. 51-07; este funcionario judicial deberá
participar en todas las audiencias, en representación del Estado, en todos los
procesos de saneamiento inmobiliario y adjudicación del derecho de propiedad
como consecuencia de este proceso de orden público, en los que tenga interés o
aparente tenerlo, no pudiendo hacerla en nombre de ninguna otra persona moral o
física.

En el proceso de saneamiento inmobiliario por ante los Tribunales de la


Jurisdicción Inmobiliaria no se requiere el ministerio de abogado, salvo que el
mismo técnica y jurídicamente se torne litigioso, es decir, cuando un terreno sea
reclamado por más de una persona física o moral.

El elemento fundamental en todo proceso de saneamiento inmobiliario lo


constituye la posesión, y para ello el artículo 21 de la Ley de Registro Inmobiliario
consagra que "a los fines del saneamiento, hay posesión cuando una persona
tiene un inmueble bajo su poder a título de dueño o por otro que ejerce el derecho
en su nombre. Para que la posesión sea causa más de un derecho de propiedad,
debe ser pública, pacífica, inequívoca e ininterrumpida por el tiempo fijado por el
Código Civil según la posesión de que se trate. Se consideran actos posesorios
cuando los terrenos se hallen cultivados o dedicados a cualquier otro uso lucrativo,
la percepción de frutos, la construcción que se haga en el inmueble, la
materialización de los límites".

La posesión es un hecho que en principio se caracteriza por la ocupación o


la aprehensión material de la cosa. Es un hecho inicial que sirve de fundamento
para adquirir por prescripción, siempre que se reúnan las demás características
exigidas por la ley.

De acuerdo con el artículo 136 del Reglamento General de Mensuras


Catastrales mensura para saneamiento es el acto de levantamiento parcelario por
el cual se individualiza, ubica y determina el inmueble sobre el que se reclama un
derecho de propiedad.

La mensura se inicia con la autorización para la realización de la misma


otorgada por la Dirección Regional de Mensuras Catastrales territorialmente
competente, la cual debe estar precedida por la solicitud de autorización hecha por
el reclamante.

La solicitud de autorización hecha por el reclamante para la autorización de


la mensura constituye el inicio de la competencia exclusiva de la Jurisdicción
Inmobiliaria para conocer todo lo relativo a derechos inmobiliarios y su registro
en la República Dominicana, en virtud de la parte capital del artículo 3 de la Ley de
Registro Inmobiliario.

Además de la autorización para iniciar los trabajos de mensura e indicar la


designación catastral o número que le corresponde a la parcela que surge como
consecuencia de la autorización para la mensura, durante el proceso de
saneamiento, la Dirección Regional de Mensuras Catastrales aprueba el aspecto
técnico de los trabajos, sin invadir la parte legal o reglamentaria, que es atribución
del Tribunal de Jurisdicción Original que resulte competente.

Una vez depositados los planos confeccionados por el agrimensor, así


como todos los otros documentos que acompañan el expediente relativo a la
mensura, dicha Dirección Regional revisará los referidos trabajos y en caso de
ajustarse en el aspecto técnico, el Director Regional otorgará la designación
catastral definitiva y la incorporará a los planos, emitirá una constancia de
aprobación, procederá a firmar los planos y registrará las parcelas, calificándolas
como aprobadas.

La Dirección Regional de Mensuras Catastrales una vez recibidos el


expediente relativo a los trabajos de mensura presentado por el agrimensor, debe
pronunciarse con relación a los trabajos dentro de los cuarenta y cinco (45) días
siguientes a la presentación de los mismos. Con la aprobación de los trabajos de
mensuras se da por finalizada la función de la Dirección Regional de Mensuras
Catastrales relativa al proceso de saneamiento inmobiliario; la que dentro de los
quince (15) días posteriores a la fecha de la aprobación, debe apoderar al Tribunal
de Jurisdicción Original territorialmente competente para el inicio del proceso
judicial del saneamiento.
La etapa judicial del procedimiento de saneamiento inmobiliario, está
prevista por los artículos 26 y 60 de la Ley de Registro Inmobiliario y 115 al 131
del reglamento de los Tribunales Superiores de Tierras y de Jurisdicción Original.

El proceso judicial es el procedimiento por ante los Tribunales de la


Jurisdicción Inmobiliaria que depura el derecho a registrar; el apoderamiento de un
Tribunal de Jurisdicción Original para el proceso judicial del saneamiento
inmobiliario, se produce por intermedio de la Dirección Regional de Mensuras
Catastrales que haya autorizado y aprobado los trabajos de mensura.

Una vez apoderado el Tribunal de Jurisdicción Original territorialmente


competente para conocer del proceso de saneamiento inmobiliario por parte del
Director Regional de Mensuras Catastrales correspondiente, en un plazo no mayor
de quince (15) días el tribunal debe notificar al Abogado del Estado, así como a los
reclamantes que se ha iniciado el proceso judicial del saneamiento para que éstos,
antes de la primera audiencia, cumplan con los requisitos de publicidad
establecido en la Ley de Registro Inmobiliario y el Reglamento de los Tribunales
Superiores de Tierras y de Jurisdicción Original.

La primera audiencia del procedimiento de saneamiento inmobiliario debe


celebrarse dentro de los sesenta (60) días posteriores a la recepción del
apoderamiento por parte del tribunal de jurisdicción original, debiendo éste poner
en conocimiento al Abogado del Estado del inicio del proceso judicial del
saneamiento e informarle la fecha de la primera audiencia, para que éste emita su
opinión. La falta de comparecencia o falta de opinión del Abogado del Estado se
considera como la falta de interés y la no objeción del Estado al proceso de
saneamiento. La falta de opinión del Abogado del Estado no impide, sin embargo,
que el inmueble sea adjudicado.
Glosario
1. Abogado del Estado: Es el funcionario que tiene la representación del Estado ante el
Tribunal Superior de Tierras.
2. Acta de Mensura: Es el relato verbal, fiel y autentica de la operación de campo practicado
por el Agrimensor.
Adjudicación: Es el proceso mediante el cual alguien obtiene que se le declare titular de un
Derecho Inmobiliario.
Agrimensor: Es aquel funcionario público encargado de realizar los trabajos de mensura
catastrales, cuya actuaciones están regida por la Ley de Registro de Tierra y el Reglamento
General de Mensuras Catastrales.
Auto-Designación: Es la decisión administrativa dictada por el Presidente del Tribunal
Superior de Tierras para designar a un Juez de Jurisdicción Original, o para constituir el
Tribunal Superior de Tierras.
Decreto de Registro: Es un mandato del Secretario del Tribunal Superior de Tierras al
Registrador de Títulos para que se registre a favor de la persona que resultare adjudicataria
como resultado del un Saneamiento.
Depuración: Es una acción dada al poseedor de un derecho real inmobiliario, propiedad o
servidumbre.
Descenso de lugares: Es una medida conservatoria consistente en traslado del Juez de
Jurisdicción Original, asistido del Secretario o delegado, para proceder a cierta verificaciones
juzgada útiles para a solución del un procedimiento de saneamiento.
Ejidos: Es la integración jurídica de todos los terrenos propiedad de los Municipios.
Hitos: Es el símbolo con que se marcan los limites de un terreno o la distancia, o dirección y
rumbo.

Antecedentes

Análisis del impacto de la titularización como opción de


financiamiento en el sector de la construcción, Santo Domingo
2008-2009/ Sustentante : Jesús Manuel Ayala Núñez
Por: Ayala Núñez, Jesús Manuel.
Tipo de material: LibroEditor: Santo Domingo : UNAPEC, 2009Descripción: 47 h.Tema(s): Vivienda -- -
República Dominicana | Registro de la propiedad | Títulos de garantía | Escrituras de propiedad | Construcción
-- -República Dominicana | Universidad APEC -- -Tesis
Contenidos:
INTRODUCCION -Planteamiento del problema -Formulación del problema -Justificación del estudio MARCO
TEORICO -Importancia de la información para la toma de decisión en el momento del financiamiento -Qué es un
emisor de valores de oferta pública -¿Qué es la titularización? ASPECTOS METODOLOGICOS -Tipo de
investigación -Métodos a utilizar -Fuentes y técnicas para la recolección de la información -Tratamiento de la
información -Presentación de la información RESULTADOS Y DISCUSION -El sector de la construcción en la
economía nacional -Visión sobre el mecanismo de titularización como opción de financiamiento -Beneficios que
aportaría el sistema de titularización al sector de la construcción en Santo Domingo -Analizar los mecanismos
tradicionales de financiamiento de la construcción en Santo Domingo contra el sistema de titularización propuesto
CONCLUSION
.

Bibliografia
PECES-BARBA MARTÍNEZ, Gregorio. Los valores superiores: Madrid, Sociedad
Española de Filosofía Jurídica y Política; Ministerio de Justicia; Boletín
Oficial del Estado, 1987. Anuario de filosofía del derecho, p. 385.
BASSOLS COMA, Martín. “Los principios del estado de derecho y su aplicación a
la administración en la constitución”. Revista de administración pública,
Madrid, Centro de Estudios Constitucionales (1978), pp. 133-159.
JORGE BLANCO, Salvador. Introducción al derecho: Santo Domingo, Ediciones
Capeldom, 2004.
MORONTA, Alberto A. Hacia la comprensión de los principios rectores del proceso
civil: Santo Domingo, Editora Corripio, 2008.
CALAZA LÓPEZ, Sonia. “Principios rectores del proceso judicial español”. Revista
de Derecho UNED (2011), p. 49.
PATIÑO MARIACA, Daniel Mauricio. La constitucionalización del proceso, la
primacía el derecho sustancial y la caducidad contencioso administrativa:
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas UPB, 2013, p. 669.
MORONTA, Alberto A., ob. cit., p. 21.
PÉREZ MÉNDEZ, Artagnan. 2016. Procedimento Civil, 13.ª ed.: Santo Domingo,
Amigo del Hogar, 2016, t. I, vol. I, p. 195.

LIC. DIAZ, MAXIMO A. “Ley de Registro Inmobiliario (108-05) Promulgada el 23 de


marzo del 2005 (mod. Por la Ley 51-07, del 23 de abril del 2007) G.
O. 10316”. Reglamentos de los tribunales Superiores de Tierras y de
Jurisdicción Inmobiliaria. General de Registro de Títulos”.
LIC. SANTANA POLANCO, VICTOR A. “Derecho Procesal para la Jurisdicción
Inmobiliaria”, Editora Corripio, Santo Domingo, República
Dominicana, Segunda edición 2008.
LIC. TEJADA ANTONIO “El Nuevo Proceso de Saneamiento Catastral”, Editora
JAL Computer, Santo Domingo, República Dominicana, 2009.
HENRY CAPITANT, “Diccionario Jurídico”.

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