Vous êtes sur la page 1sur 22

Presupuesto Participativo y Participación Ciudadana

Análisis del Presupuesto Participativo en la Ciudad de Río Cuarto

SEMINARIO : METODOS Y TÉCNICAS DE INVESTIGACIÓN POLÍTICA


CODIGO MATERIA: 2613
19 de junio de 2018
Autor: Pablo Acosta
Dni: 29363451
Docente a cargo: Lic. Medina Ana Laura
Presupuesto Participativo y Participación Ciudadana
Análisis del Presupuesto Participativo en la Ciudad de Río Cuarto

Índice

Portada
Índice
1- Resumen
2- Introducción
3- Problema de la investigación
4- Objetivos
4.1- Objetivos específicos
5- Justificación de la Investigación
6- Delimitación espacial
7- Delimitación cronológica
8- Viabilidad del estudio
9- Formulación de la hipótesis
10- Operacionalización de variables
11- Tipo de investigación
12- Población y Muestra_
13 Técnica de la encuesta
14- Técnica de la entrevista
15- Técnica de recolección de datos
16- Recopilación de información
17- Análisis de los datos
18- Marco Teórico
18.1 La participación ciudadana
Presupuesto Participativo y Participación Ciudadana | 19/06/2018

18.1.1 Participación, democracia y evolución social


18.1.2 La participación ciudadana vínculos con la Democracia participativa y representativa
18.1.3 Dinámica y Participación ciudadana en el Estado Democrático de Derecho
18.1.4 Ciudadanía y Participación
18.1.5 Participación política digital y gobiernos democráticos abiertos
Gobierno democrático y gobernanza
Reforma del Estado en Argentina y participación ciudadana
Democracia participativa y Presupuesto Participativo (PP)
Ciudadanía y Participación
Sistema de medición de la participación ciudadana
Niveles y formas de Participación Ciudadana
Gestión pública y la participación ciudadana
Antecedentes de la Pc. en Argentina
18.2 Presupuesto Participativo
Dinámica del Presupuesto en los Estados Democráticos
Diseño y formación del Presupuesto en la gestión pública.
Dinámica participativa evolutiva y presupuesto público

1
Gestión Municipal y presupuesto
¿Qué se entiende por PP?
Actores sociales del PP
Fundamentos de los PP.
Contexto y metodología del PP en la provincia de córdoba
Historia del PP. en Río Cuarto
Definición y alcance en Río Cuarto
Objetivos del PP. en Río Cuarto
Etapas del PP. en Río Cuarto

Presupuesto Participativo y Participación Ciudadana | 19/06/2018

2
3. Planteamiento del Problema
1- ¿Es el presupuesto participativo una herramienta que mejora el manejo de los recursos
públicos en la Municipalidad de Río Cuarto?

4. Objetivo General
Describir el Presupuesto Participativo de la Ciudad de Río Cuarto

4.1 Objetivos específicos

Analizar el origen del PP en la ciudad de Río Cuarto atendiendo sus fundamentos políticos,
planteamientos metodológicos y su desarrollo práctico;

Estudiar la participación ciudadana, las percepciones y posicionamientos que tienen los


habitantes de Río Cuarto sobre la ejecución y eficacia del PP.

4.1.1 Objetivos Secundarios


a- Conocer las características del presupuesto participativo que se implementa en la ciudad
de Río Cuarto e identificar las principales percepciones que tiene la ciudadanía sobre
este proceso político.
b- Describir la percepción que tiene la población sobre el presupuesto participativo
ejecutado en la ciudad de Río Cuarto.
c- Evaluar si el presupuesto participativo es una herramienta que permite eficiencia en el
manejo de los recursos públicos en la Municipalidad de Río Cuarto.
d- Analizar si el presupuesto participativo permite eficacia en la asignación equitativa de
los recursos públicos en la Municipalidad de Río Cuarto.
Presupuesto Participativo y Participación Ciudadana | 19/06/2018

e- Describir la relación que existe entre la participación ciudadana y el presupuesto


participativo en la ciudad de Río Cuarto.

3
Fuentes de información

Para realizar el presente trabajo se utilizará fuentes primarias como la encuesta, entrevista y
fuentes secundarias como la lectura de libros, publicaciones e informes, referente al tema.
Las fuentes primarias utilizadas para obtener información directamente de la población objetivo
son encuestas y entrevistas a los funcionarios responsables de la ejecución del programa
denominado Presupuesto Participativo de Río Cuarto y ciudadanos con aptitudes hábiles de
sufragar en las instancias deliberativas y electivas de PP. De Río Cuarto.
Las fuentes secundarias son las proporcionadas por revistas, publicaciones, páginas web,
sondeos de opinión, bibliografía general y específica y observaciones de la temática referida.

Unidad De Estudio

Se delimita que el tema propuesto, la investigación, se efectúa en la Ciudad de Río Cuarto,


Córdoba, República Argentina.

Métodos Teóricos

Entrevista

La entrevista es una técnica de investigación dedicada a obtener información mediante un


sistema de preguntas, a través de la interrelación verbal entre dos o más personas en la cual la
una interpela a la otra en base a un banco de preguntas que nos permitan obtener la información

Presupuesto Participativo y Participación Ciudadana | 19/06/2018


necesaria para la investigación.

Encuesta

La encuesta es una técnica cuantitativa, que consiste en una investigación realizada sobre una muestra
de sujetos representativa de un colectivo más amplio, o en la totalidad del universo a investigar; En ella
se utilizan procedimientos estandarizados de interrogación, con el fin de conseguir mediciones
cuantitativas sobre una gran cantidad de características objetivas y subjetivas de la población.

4
La tesis que aquí se expone se ha elaborado con un punto de partida enfocado en un diseño
metodológico que guarda relación directa al enfoque teórico y objetivos de la investigación. El
análisis teórico se desarrolla en los primeros capítulos de la exposición. En tanto que el objetivo
general de indagar y profundizar el conocimiento del proceso sociopolítico de conformación y
desarrollo del PP en la ciudad de Río Cuarto, para comprender la relación entre políticas
públicas y actores, la articulación entre el espectro de desarrollo, trayectorias, experiencias y
prácticas de participación, se expondrá en la segunda parte. En sintonía con esto, los objetivos
específicos que direccionan la investigación se centran en general sobre analizar el contexto y
las políticas públicas de participación ciudadana que han conducido a que se implemente el PP,
los actores que intervienen en el proceso participativo; tratando de comprender la experiencia
de participación de los actores sociales, y las valoraciones de estos acerca de la participación.
La investigación presente es de carácter mixta y de referencia a un caso en particular (en
adelante PPRc) que tiene como característica principal estar orientado al análisis de las
relaciones entre muchas propiedades concentradas en pocas unidades. El enfoque escogido es
el mixto ya que favorece ampliamente la escala de estudio porque en el ámbito municipal se
precisa un recorte territorial que guarde fidelidad con la relación que converge entre los niveles
micro y macro de análisis, propios del Estado Municipal. Esta tesis se enmarca en un estudio
pormenorizado de un caso donde se identifica una unidad de análisis: el municipio (en sus
características contextuales, trayectorias, aspectos institucionales y organizacionales) y los
diferentes actores estatales (su percepción del PP, sus motivaciones y experiencias) y sus formas
de interacción (los saberes que se ponen en juego, las tensiones y conflictos emergentes, las
relaciones de competencias, consensos y deliberaciones).
Seguir una tesis de metodología mixta halla su sentido al trabajar con una unidad de análisis
que contempla diversos actores y propone como resultante estratégico, integración que supera,
los análisis de investigación reduccionistas que se enfocan a ver solo políticas públicas y cómo
Presupuesto Participativo y Participación Ciudadana | 19/06/2018

es su surgimiento o cómo funciona el aparato estatal hacia su interior y sus impactos. Ver al PP
en un aspecto amplio otorga una perspectiva que permite ver al “Estado en movimiento”, pero
que no limita el proceso a una visión “Estadocéntrica” de la misma. Un alcance mixto
sistemático y complejo como el que se plantea en la presente tesis significa incorporar la
perspectiva de los actores, concibiéndolos como productores de la política pública, es decir que
influyen en su desarrollo y que interpretan los resultados desde una visión más amplia que los
parámetros “objetivos” y “racionales” típicos de las evaluaciones de las políticas públicas.
Describir al PP y su directa relación con la Pc. es comprender que el resultado de una política
requiere analizar todo el proceso de su desarrollo y contexto, y que no basta con estudiar los
programas, los roles, los métodos de trabajo, sino que es necesario también captar la manera
con que los actores que intervienen en ella, construyen su experiencia, tejen relaciones,
promueven prácticas y elaboran significaciones, a través de los cuales se constituyen ellos
mismos.
El presente estudio tiene por finalidad conocer al PP que es ya una emergente herramienta de
participación ciudadana, centrándose principalmente, en describir y analizar sus principales
características, los actores involucrados y la opinión que éstos tienen, en relación con el proceso
de participación.

5
La investigación en su desarrollo da uso de diversas técnicas de investigación enfatizando el
uso de marco cualitativo interpretativo que emplea entrevistas en profundidad, observaciones y
análisis documental. Una característica central de la perspectiva cualitativa elegida es que
posibilita entender al PP como un fenómeno social y político desde la propia perspectiva de sus
actores y permite conservar el lenguaje original de los sujetos, indagando su definición de la
situación, la visión que tienen de la historia y de las condiciones.
En este sentido, para dar contenido a la investigación se estudiaron y utilizaron como guía las
políticas de participación en Municipios específicos como son el Rosario y La Plata en los
períodos que abarcan desde 1998 a 2014. Este punto comparativo posibilita establecer una
mirada de más largo plazo y recuperar las historicidades específicas de cada contexto respecto
de las trayectorias políticas de participación en estos municipios.
El trabajo de campo se realizó en distintas etapas guiadas por la trayectoria del municipio de la
ciudad de Río Cuarto entre el 2000 y 2015. La recolección de datos primarios se realizó a partir
de observaciones, entrevistas y análisis documental. Observaciones de las políticas de
participación como son los talleres y eventos del PpRC, reuniones de Consejos Vecinales y del
funcionamiento de las UGC), se realizaron observaciones con guiones pautados en las
asambleas, días de votaciones, recuentos de votos, encuentros de capacitación y otros eventos
vinculados a la difusión y funcionamiento del PP. En cuanto a las asambleas, fueron
seleccionadas zonas heterogéneas según criterios sociodemográficos, incluyendo barrios
céntricos como de las periferias de las ciudades, pertenecientes a distintos sectores sociales
(teniendo en cuenta el índice NBI) y cantidad de habitantes. Se realizaron ---- observaciones y
entrevistas en profundidad semi-estructuradas---- a funcionarios municipales, concejales,
personal técnico y vecinos. Se entrevistó personal técnico, funcionarios y vecinos participantes.
La selección de los entrevistados fue en base a criterios de muestreo intencional y por bola de

Presupuesto Participativo y Participación Ciudadana | 19/06/2018


nieve, buscando garantizar el mayor grado de heterogeneidad posible en cuanto a la edad, sexo,
zona de residencia, nivel educativo, años de participación, integrantes o no de organizaciones
sociales. En el caso de entrevistados contactados en las asambleas también se buscó incluir a
participantes que demostraban distinta actitud y valoración hacia el PP. Salvo algunas
excepciones las entrevistas fueron individuales y grabadas y el tiempo promedio de duración
de --------. La cantidad de entrevistas realizadas se estableció siguiendo el criterio de saturación
teórica que implica que “se debería seguir realizando entrevistas hasta tanto se alcance la certeza
práctica de que nuevos contactos no aportan elementos desconocidos con respecto al tema de
investigación, o no emergen hasta entonces no tratados” (Piovani, 2007: 223).
La fase de análisis de documentación secundaria, se realizó a partir de relevamiento de
información demográfica, económica y política del municipio a fin de caracterizar el
contexto político institucional y las trayectorias participativas; - análisis de documentos
institucionales de los municipios (reglamentos, organigramas, documentos técnicos,
memorias de gestión, boletines municipales, folletería), material normativo (ordenanzas,
decretos), página web del municipio; - análisis de documentos elaborados por
funcionarios y equipo técnico presentados en jornadas y exposiciones; - revisión de
información periodística vinculada al contexto político institucional de los municipios o
en relación a los procesos de participación. El análisis pormenorizado del caso se realizó

6
sistematizando la información obtenida de distintas fuentes y de los distintos actores,
según dimensiones acordes a los objetivos de la investigación, buscando complementar y
comparar los datos obtenidos. Asimismo, se tuvo en cuenta la presentación de situaciones
similares y heterogéneas (por ejemplo en la perspectiva de distintos actores según su rol y
en cuanto al recorte geográfico de diferentes asambleas) que dieran cuenta de la
complejidad de los procesos de participación. En este punto se emplearon diversas
herramientas analíticas, a partir de las comparaciones y el microanálisis, que permitieron
la codificación teórica del material empírico obtenido durante el trabajo de campo. Para
las dimensiones de análisis se generaron categorías en relación a la bibliografía abordada
(por ejemplo para la toma de decisiones se siguió las categorías propuestas por Urfalino,
2013 y en las motivaciones el trabajo de Weyrauch, 2008) y otras emergieron durante el
trabajo de campo (por ejemplo las experiencias más significativas o la opinión sobre los
resultados del PP). Respecto del abordaje de las experiencias de los actores se tuvieron en
cuenta algunas consideraciones metodológicas señaladas por la bibliografía. La
experiencia se ancla en la subjetividad privada y se establece una intersección con el
lenguaje público que posibilita que pueda ser aprehendida a partir del relato post facto,
en un proceso de elaboración secundaria, que la convierte en narrativa dotada de
significación. Para Carli (2005) acceder al relato de la experiencia de los actores favorece
una aproximación a su vida cotidiana, a las formas de sociabilidad, a su sensibilidad, a los
afectos y a los procesos de identificación política, sin olvidar que ello se enmarca en un
contexto caracterizado por fuertes impugnaciones a la eficacia de la democracia, a las
instituciones y al Estado. Por ello, y siguiendo a Scott (1999: 50) consideramos que los
sujetos son constituidos por medio de la experiencia, ésta se convierte entonces “no en el
origen de nuestra explicación, no en la evidencia definitiva (porque ha sido vista o sentida)
que fundamenta lo conocido, sino más bien en aquello que buscamos explicar, aquello
acerca de lo cual se produce el conocimiento”. La información obtenida de las
Presupuesto Participativo y Participación Ciudadana | 19/06/2018

observaciones consta de descripciones detalladas de las actividades, del comportamiento


y discurso de los actores estatales y sociales y de una variedad de interacciones entre
participantes, según ejes preestablecidos a partir de los objetivos de la tesis. Las mismas
se citan en el trabajo como: (Registro de observación -evento observado- y en caso de las
asambleas se menciona el lugar. Fecha o año20). En tanto, la información obtenida de las
entrevistas fue expuesta identificando el rol ejercido por el entrevistado al momento de la
consulta, cambiando el nombre y el barrio, para mantener el anonimato, tal como fue
acordado con los distintos informantes. De este modo los extractos de las entrevistas
fueron citados con el siguiente formato: (Entrevista -rol ejercido- y en el caso de que sean
vecinos el lugar de residencia. Año). Los casos de cada municipio fueron abordados como
unidades empíricas, primero presentando cada uno y luego estableciendo una
comparación según las dimensiones de análisis. De esta forma, cada caso es independiente
y permite al lector entenderlo de una manera integral. Una vez expuestos los estudios de
casos individuales el análisis avanza hacia la búsqueda de patrones comunes y
comparaciones.

Organización de la tesis

7
La tesis está organizada en cuatro partes: la primera teórica; la segunda, con el caso de
La Plata; la tercera, con el caso de Morón y la cuarta, con las comparaciones y reflexiones
finales. Por último, la bibliografía y los anexos. La primera parte está compuesta por tres
capítulos (del 1 al 3): el capítulo 1 aborda las diferentes definiciones sobre la participación,
las significaciones y fundamentos que adquieren en distintos contextos socio-políticos; el
capítulo 2 trata sobre las políticas públicas municipales y el lugar que adquiere la
participación, presentando los posibles formatos y discutiendo los sentidos, las
condiciones que requieren estos procesos y una perspectiva desde los actores y; por
último, el capítulo 3 recorre los estudios sobre PP: definición, antecedentes,
fundamentaciones, diseños, resultados y una mirada más subjetiva, sobre los actores
participantes La segunda y la tercera parte presentan cada caso municipal en forma
individual y se componen de cuatro capítulos (La Plata del 4 al 7 y Morón del 8 al 11) que
mantienen la misma esctructura: los capítulos 4 y 8 sobre las trayectorias de la
participación ciudadana en los municipios abordados; en los capítulos 5 y 9 se exponen
los PP en el ciclo de la política pública, describiendo el contexto político en el que surgen,
el ingreso a la agenda estatal, las fundamentaciones, el proceso de implementación y los
resultados desde la perspectiva de los actores; en los capítulos 6 y 10 se identifican los
distintos roles que ejercieron los actores, se analizan las relaciones socio-políticas y
prácticas de participación y, por último, en los capítulos 7 y 11, se exponen las experiencias
de participación a partir de las trayectorias, motivaciones, aprendizajes y vivencias más
significativas . La cuarta parte incluye las comparaciones de los casos (capítulo 12), donde
se ordena el texto según las dimensiones de análisis de los distintos capítulos (trayectorias
en las políticas de participación ciudadana, el PP en el ciclo de política pública, actores
identificados, relaciones entre actores, modalidades de participación, experiencias, etc).

Presupuesto Participativo y Participación Ciudadana | 19/06/2018


En este capítulo se abordan los dos niveles de análisis del proceso de las políticas públicas
que proponen Bulcourf y Cardozo (2009): uno con énfasis en la orientación política
(combinando fuertemente elementos normativos y empíricos) y el otro centrado en un
marco eminentemente empírico y hermenéutico. Estos niveles recorren las trayectorias,
el contexto y el marco político institucional, “las causas” que llevaron a la implementación
de la política pública, y el otro nivel que se centra en los “efectos”, donde hacemos énfasis
en los actores, sus relaciones y en las propias instituciones de las que forman parte, y que
adquieren significación en ese contexto analizado. Por último, se concluye con las
reflexiones finales.

18.1.1 Participación, democracia y evolución social

Los objetivos facticos sobre los que se inscribían las instituciones de la democracia
representativa han cambiado en forma y espacio eso ya es un hecho irreversible. Las bases
liberales fundantes, fueron modificándose sustancialmente en una línea que permitió ir abriendo
más oportunidades de acceso a segmentos y estratos sociales que no estaban “considerados” en
los pensamientos de partida. Las instituciones políticas del liberalismo hallaban razón de
existencia en una relación subsidiaria en conexión a las exigencias del orden económico liberal,

8
y en ese diseño, la variable de participación sea política, social o cultural se circunscribían a
aquellos considerados plenamente como ciudadanos, es decir, propietarios, cuyos umbrales de
renta variaban en relación a las fuerzas políticas, más conservadoras, más liberales, que
ocupaban alternativamente las instituciones políticas. La preocupación por la participación del
ciudadano no era un tema que se encontrase situado en la agenda de discusiones de las
instituciones. Era un tema extrapolado, hasta equivoco y sobre bases erróneas planteado
precisamente por aquellos que expresamente estaban excluidos de la vida política institucional.
Hablar de democracia en las primeras épocas institucionales formales era referirse a un anhelo
revolucionario y contradictorio con la lógica política imperante, básicamente porque hablar de
democracia era hablar de igualdad. La auto transformación del sistema económico se
acompañó, no sin tensiones y conflictos de todo tipo y dimensión, de la transformación
democratizadora del sistema político. Debería expresarse correctamente que, en la Europa
Occidental, y tras los potentes protagonismos populares en los desenlaces de las grandes
guerras, se consigue llegar a realidades desconocidas hasta entonces de democratización
política y, no por casualidad, de participación social en los beneficios del crecimiento
económico en forma de políticas sociales, a partir de 1945. Democratización y redistribución
aparecen nuevamente conectados. Ese diagrama conjuntivo, en el que coincidían ámbito
territorial del Estado, población sujeta a su soberanía, sistema de producción de masas, mercado
de intercambio económico y reglas que fijaban relaciones de todo tipo, desde una lógica de
participación de la ciudadana en su determinación, adquirió dimensiones de modelo canónico
y aparentemente indiscutido. 3 En los últimos años, muchas cosas han cambiado al respecto.
Los principales parámetros socioeconómicos y culturales que fueron sirviendo de base a la
sociedad industrial, están quedando atrás a marchas forzadas. Y muchos de los instrumentos de
análisis que nos habían ido sirviendo para entender las transformaciones del estado liberal al
estado fordista y keynesiano de bienestar, resultan ya claramente inservibles. No es el momento
Presupuesto Participativo y Participación Ciudadana | 19/06/2018

para reiterar muchos de esos elementos de cambio, pero tracemos algunas pinceladas.
Globalización económica y cambio tecnológico han modificado totalmente las coordenadas del
industrialismo. Son cada vez más raras y fugaces las situaciones productivas en que grandes
concentraciones de trabajadores elaboran ingentes cantidades de productos de consumo masivo
a precios asequibles, sobre la base de una organización del trabajo taylorista y a costa de una
notable homogeneidad en la gama de bienes producidos. Seguramente esto sólo fue cierto en
algunas partes del mundo, pero en esas partes el impacto de esos cambios ha sido tremendo. Ya
no podemos hablar de estabilidad, de continuidad, de especialización profesional única, en
relación a unas condiciones de trabajo cada vez más precarias y fluidas. El trabajo estructura
cada vez menos la vida de las gentes, y ello afecta sin duda a sus vínculos sociales, a la forma
de entender pautas de reciprocidad, o de implicación en asuntos que trasciendan al mero
individuo. 4 Los impactos de esa transformación no son menores en el campo de las relaciones
sociales. Hemos ido pasando de órdenes sociales relativamente estables, con escalas de
desigualdad conocidas y que permitían tratamientos redistributivos relativamente homogéneos
y colectivos, que se establecían además con notables garantías de continuidad, a situaciones
caracterizadas por la heterogeneidad, la fragmentación, y con complejidades sólo explicables
desde un proceso de individualización vertiginoso.

9
La participación ciudadana sus vínculos con la Democracia participativa y representativa

A razón de situar cronológicamente los procesos políticos que son de interés a la investigación
que aquí se expone. podemos enunciar que, a mitad de la década de 1970, comienza a observarse
la inclusión de temáticas referidas a la gobernabilidad en las agendas políticas para el desarrollo
de los países centrales en concordancia directa con la crisis del Estado de Bienestar. En la
década de los 80` en los países de América Latina comenzaría una etapa caracterizada por
procesos específicos como la reestructuración económica como consecuencia del agotamiento
fiscal y producto del pago de la deuda externa; el debilitamiento del Estado en su rol de
interventor, por ende, su crítica y minimización, y las reaperturas democráticas en los países de
la región. En este marco de relaciones conflictivas, se incorpora a la Sociedad Civil bajo un
amplio espectro pragmático de participación en el control, diseño y ejecución de políticas
públicas, la participación como mecanismo para extender la ciudadanía se ha difundido
continuamente en América Latina desde la década de 1990 bajo la órbita temática especifica de
la participación ciudadana.
En el transcurso de los últimos años, más específicamente a partir del comienzo del nuevo siglo
esta noción ha sido apropiada y estimulada desde el propio Estado creando y promoviendo
“formas diferenciadas de incorporación de los ciudadanos y asociaciones de la sociedad civil
en las deliberaciones públicas” (Avritzer,2008) que intentan garantizar la participación de
grupos organizados en función de demandas tanto generales como específicas en agendas,
decisiones y políticas. Esto puede entenderse como un mecanismo de control sobre la sociedad
y como reaseguro de la implementación de sus políticas. De este modo confluyen proyectos
participativos construidos en torno a la profundización y expansión de la democracia
participativa, y la permanencia de la lógica neoliberal y la reconfiguración del poder estatal por
medio de la sociedad. Esta promoción desde arriba sostiene para sí misma, incidencia en

Presupuesto Participativo y Participación Ciudadana | 19/06/2018


términos de autonomía, actores participantes y capacidad de decisión, ya que impone a las
organizaciones de la Sociedad Civil y a los individuos exigencias técnicas y burocráticas
propias de la lógica estatal y de quienes prestan apoyo financiero y técnico, pudiéndose generar
un alejamiento de las propias bases sociales. Esta forma de control social permite asimilar como
Sociedad Civil sólo a aquellas organizaciones que sepan amoldarse a estas lógicas y exigencias
técnicas, mostrando una “conducta aceptable” (Dagnino,2006). Así, se puede afirmar que estas
formas de vinculación representan diferentes combinaciones entre la lógica de la soberanía de
la participación ciudadana y lo gubernamental, que permite al Estado actuar resolviendo
problemas y atendiendo demandas sin expandir realmente la ciudadanía. Esta ampliación de la
esfera pública, puede ser caracterizada desde un repertorio amplio y heterogéneo de
mecanismos institucionales que en la esfera local varían en cuanto diseño, procesos y
potencialidades.
En relación al tópico mencionado Cunil Grau (1997), identifica y clasifica en materia de
participación ciudadana entre: (1) acción legislativa directa (iniciativa legislativa popular,
referendos, plebiscito, revocación de mandato); (2) formulación de intereses particulares en las
políticas públicas (cabildos abiertos, consejos consultivos, asambleas ciudadanas) y (3)
cogestión en prestación de servicios públicos. Otra tipología de estos mecanismos considera los
actores habilitados para participar (colectivos o individuos), el tipo de participación (pasiva,

10
consultiva, deliberativa) y el origen de la activación de la institución participativa. Así,
distinguimos entre instituciones (1) que conllevan: “la deliberación o toma de decisiones abierta
a todos los ciudadanos sobre un espectro de temas seleccionado por el gobierno y en un ámbito
limitado de intervención (presupuestos participativos)”; (2) de participación ciudadana semi-
representativa, con: “la consulta a órganos semi-representativos sobre políticas sectoriales o
actuaciones ligadas a subunidades territoriales (consejos vecinales, consejos sectoriales)” y (3)
de participación directa a partir de: “una participación autónoma y no controlada por el
gobierno, o acción legislativa directa” (Schneider y Welp, 2011). Realizar esta distinción nos
permite diferenciar entre democracia participativa, deliberativa o directa.
La democracia participativa involucra la intervención de los ciudadanos, en forma individual u
organizada, en los procesos de toma de decisión de la gestión pública. Implica deliberación y
negociación, además de consulta y presupone un resultado abierto. Se la suele diferenciar de la
democracia directa que comprende mecanismos que implican fundamentalmente la consulta a
los individuos, mediante el voto, para aprobar o rechazar una propuesta que puede ser iniciada
por los ciudadanos, pero una vez sometida a votación no admite soluciones intermedias
(Lissidini, 2011). Mientras la democracia deliberativa importa un modelo normativo que apunta
a que los ciudadanos puedan afinar o modificar sus preferencias en un espacio institucional, no
implicando de por sí más que un modelo alternativo de democracia. Lo central es que se propicie
el intercambio de argumentos, el flujo de comunicación no distorsionada, la atención a las
posiciones de los otros y el tiempo necesario para mejorar la calidad de la decisión. Por esto
podría ser un complemento o una corrección deliberativa de la democracia representativa. A
estos modelos de democracia, se suman la figura del ombudsman y las audiencias públicas de
los funcionarios de gobierno con los ciudadanos que buscan expandir el repertorio de la
participación en los procesos de administración y formación de políticas públicas, e incluir un
nuevo estilo de “advocacy democracy” que conllevaría el “empoderamiento” de los grupos
Presupuesto Participativo y Participación Ciudadana | 19/06/2018

sociales y de los ciudadanos (Lissidini, 2011:20). En Argentina, estos rediseños institucionales


fueron receptados a nivel nacional, provincial y municipal. Con la reforma constitucional de la
carta magna de 1994 se incorporaron mecanismos que buscan favorecer y facilitar la
participación ciudadana. Se incorporaron dos formas semi directas de democracia: la Iniciativa
Popular y la Consulta Popular. En la provincia de Córdoba desde 2005, en el marco de la Ley
de Carta del Ciudadano Nº 8835 y la Ley 9235 de Seguridad Pública se regula la participación
ciudadana a través de la conformación de Juntas de Participación Ciudadana para la Prevención
Integral (JPC) en la ciudad de Córdoba y poblaciones, comunas y municipalidades del interior
de la provincia. En la ciudad de Córdoba la sanción de la Carta Orgánica (1995) incorporó
institutos de democracia semi directa –Iniciativa, Referéndum, Consulta Popular, Revocatoria
de Mandato- y una visión de un municipio descentralizado. Con tal fin se crearon los Centros
de Participación Comunal (CPC) y el Consejo Económico Social (art. 149) y las Juntas de
Participación Vecinal (JPV) (art. 155/6). Éstas otorgan un papel central a los Centros Vecinales
como canales de participación de los vecinos para plantear sus demandas.

18.2.3 Dinámica y Participación ciudadana en el Estado Democrático de Derecho

11
Durante la última década se han extendido en el sistema político latinoamericano las
experiencias políticas de inclusión e integración de la ciudadanía en el proceso de toma de
decisiones con instrumentos y factores de realización diferentes, y en su totalidad han hallado
resultados diversos. La proliferación en la última década de estos da cuenta del protagonismo
que estas herramientas han adquirido en el seno de las administraciones públicas.
Paralelamente, en un sentido contrapuesto estas entidades, acusan una importante pérdida de
confianza por parte de la ciudadanía y se enfrentan a una crisis de representatividad que mina
en algunos casos la validación social de su actuación.
Las dinámicas de participativas surgen y se implementan, en la mayoría de los casos como
respuesta al discurso que reivindica la construcción de una identidad local más implicada y
protagonista de “lo público”. Se trata de prácticas habitualmente vinculadas a las teorías sobre
democracia participativa que, no obstante, se desarrollan y efectivizan contingentemente bajo
estructuras y dinámicas de democracia representativa en ocasiones reacias y/o limitadas a la
introducción de cambios sustanciales.
En referencia específica a la acción ciudadana a modo de concepto general se puede expresar
que es el involucramiento de los individuos en el espacio público estatal y no estatal desde su
identidad cívica, es decir, de integrantes de una comunidad política. Esta actividad está
vinculada sine qua non a los modelos de democracia y al tipo de relación gobierno-sociedad
que se quiere construir. Participar significa integrar y conectar lazos sociales, formar parte, es
decir implica un sentido de pertenecía e interacción a un grupo, cuya principal característica
consiste en que la integración a este se efectúa en orden directa a nuestra voluntad y, por lo
tanto, sujeta a un conjunto de reglas previamente existentes a nuestra llegada. Sin embargo, este
proceso de interrelación significa también la conversión de nuestro “yo” en parte de una
organización que reúne a más de una sola persona. Como consecuente es siempre una acción
política y social: nadie puede participar de manera exclusiva, privada, de acuerdo a intereses

Presupuesto Participativo y Participación Ciudadana | 19/06/2018


personales. Por su parte, el adjetivo calificativo ciudadana “hace explicito el sentido de esa
participación compartida entre miembros de la misma categoría política, los ciudadanos, lo que
equivale a expresar que participación ciudadana implica la conformación de grupos de manera
voluntaria con base en un interés común: la ciudad. Al involucramiento de los ciudadanos en
los asuntos públicos suele llamarse participación ciudadana. Sin duda, la intervención más
conocida y analizada es la electoral. Pero existen otras formas que trascienden la asistencia a
las urnas y que tiene relación con el ejercicio de los derechos fundamentales, como las consultas
públicas sobre prioridades en la realización de obras públicas, definiciones presupuestales,
temáticas ecológicas, generación de leyes, la exigencia de impartición de justicia e incluso el
desarrollo de los medios electrónicos de comunicación ha dado lugar a nuevos espacios de
participación ciudadana como las redes sociales. En un concepto restrictivo, es el conjunto de
procesos políticos mediante los cuales los sujetos sociales con capacidades políticas activas,
ejercen influencia en la toma de decisiones. La acción de formar parte de un proceso, no
significa decidir, sino “tener la posibilidad de influenciar las decisiones que deberán ser
tomadas por las instancias de autoridad” establecidas en cada caso.

La actividad privada en relación a lo público refiere siempre a los diversos mecanismos e


instancias que posee la sociedad para incidir en las estructuras estatales y en las políticas
públicas. Por lo tanto, el estudio de los movimientos dentro del sistema político es social ya que

12
es el estudio de las mediaciones entre Estado y sociedad. Para analizar los parámetros de toda
acción debe de observarse la mediación entre sociedad y gobierno para que los distintos sujetos
sociales intervengan, con base en sus diversos intereses y valores, los cuales influyen en las
políticas públicas y en las estructuras de gobierno, fundamentándose en el reclamo del derecho
a la intervención en los asuntos que les competen.
Existe un amplio espectro de mecanismos de actividades, su involucramiento parcial o
completo en las políticas públicas es fundamental en los asuntos de la administración pública.
La categoría aquí estudiada es un marco de definición para la esfera de asuntos públicos; Es un
proceso político resultante de las acciones de los actores, con sus identidades, orientándose a la
incidencia en el Estado como garante de reglas que hagan factible la inclusión social y es como
consecuente necesario, un resultado, ya que el Estado incorpora en su institucionalidad los
mecanismos forjados por la sociedad para que la atención a las demandas sociales sea
sustentable y duradera en la promoción de la equidad y la confianza. Es un acto, acción de inicio
de tomar parte en donde subyace una concepción instrumental y una normativa; es un espacio
para la apertura y una oportunidad para evitar la concepción tecnocrática y verticalista que se
adopta en la elaboración de los presupuestos públicos; es protagonizar, y protagonizar implica
el desarrollo como ciudadano, puesto que permite el ejercicio del derecho de los ciudadanos a
tomar parte en la decisión de la gestión de los recursos físicos, económicos y sociales. Es un
proceso político y social complejo cualitativo de apertura de espacios donde la ciudadanía
puede influir en las políticas públicas, fomentando la responsabilidad ciudadana hacia su
comunidad y proporcionando una mayor capacidad resolutiva tanto de las Asociaciones
Vecinales, así como de la población no organizada, en los asuntos de su comuna, construyendo
de esta manera una democracia más participativa, se extiende siempre fuera de los límites
nominales del ejercicio de los derechos civiles y políticos, es más amplia, completa y compleja
en su composición que la participación política, porque re significa el concepto de involucrarse
de manera activa y consciente en la eliminación de los obstáculos a la igualdad, en la tarea de
garantizar la plena vigencia y protección de los derechos humanos y la vida en democracia, así
como en la construcción de una igualdad real para todas las personas que integran la sociedad,
es una intervención activa y responsable en las decisiones y acciones relacionadas con el
Presupuesto Participativo y Participación Ciudadana | 19/06/2018

desarrollo y el mejoramiento de nuestras condiciones de vida que se da en espacios muy


variados como el hogar, el vecindario, la escuela, la empresa o el trabajo y no siempre tiene que
ver con asuntos relacionados con el gobierno, es la integración de la ciudadanía en el complejo
proceso de adopción de decisiones del gobierno de su ciudad, departamento o país; está ubicada
en un terreno que presupone a priori la existencia de un poder público, el cual tiene la pretensión
siempre de expresar el interés general de una unidad social, y de la administración que orienta
el poder público. Desde ahí tiene dos objetivos, uno correspondiente a la esfera política y otro
a la esfera administrativa. En su aspecto político, apunta al tema del régimen político, en cuanto
a procedimiento de constitución de la voluntad política; en concreto, ella ha estado referida a la
sustitución o complementación de la democracia representativa. En cuando a la administración,
la participación ciudadana es impulsada como una forma para mejorar su funcionamiento. Es
para todo individuo libre un instrumento para conseguir algo, es decir nace como voluntad de
influir en la realidad. Es un proceso político mediante el cual se desea influir, crear o modificar
situaciones y/o tomar decisiones en el entorno del individuo o colectivo en el espacio público
y político, de donde se deriva su contenido político.
La actividad electoral es la forma de participación política con mayor índice de ejecución
primaria y que supone menos costes que otras formas de acción y se da dentro de un contexto
político altamente movilizador (votar, mítines, colaborar en el desarrollo de la campaña,
etcétera) y la no electoral se refiere al resto de formas de participación que, se desarrollan fuera
del marco electoral (por ejemplo, cuando los ciudadanos contactan con los representantes
electos, o trabajan en un grupo de acción política con ese objetivo, etcétera.). En referencia a

13
los Estados Municipales, entes descentralizados autónomos, la participación ciudadana se
vuelve en un elemento clave en los procesos de gobernabilidad y de planificación del desarrollo
porque contribuye a formar mecanismos de inserción de la voluntad ciudadana que genera un
poder compartido. Esto implica integración y conexión, en distintos niveles y formas, en los
procesos de toma de decisiones, en la ejecución de acciones de carácter estratégico junto con el
gobierno y otros actores. La participación ciudadana es la integración de la ciudadanía en el
proceso de adopción de decisiones del gobierno de su ciudad, departamento o país; es el
involucramiento, en distintos niveles y formas, de los individuos, así como de las
organizaciones e instituciones que los agrupan, en el proceso de toma de decisiones y ejecución
de acciones de desarrollo, dentro de la Municipalidad, para convertir cada Municipio en una
ciudad segura, próspera y saludable.

18.1.4 Ciudadanía y Participación

En expresión formal se entiende al concepto de ciudadano como una parte integrante de la


comunidad política y su pertenencia a dicha comunidad es lo que concede en lo material la
condición de ciudadanía, lo que a su vez implica una lista de derechos, pero también de deberes
por cumplir. La ciudadanía se puede definir como "El derecho y la disposición de participar en
una comunidad, a través de la acción autorregulada, inclusiva, pacífica y responsable, con el
objetivo de optimizar el bienestar público.” (Marshall T.h. y Bottomore, Madrid 1998)
Toda referencia a la facultad de ejercicio de derechos está cifrada en el acceso y en la
participación de los beneficios comunes, lo común entendido como lo público y de todos,
participación que se sitúa también en la esfera de lo político (el voto como derecho). Se
habla también de un esquema de deberes por cumplir en esa llamada comunidad, y
encabezando la lista desde luego debe estar el deber de respetar la vida en conjunto, ello
conlleva al respeto por los derechos de los otros componentes, ciudadanos, de esa común
unidad, aceptar el esquema común de valores positivamente construidos en ese acuerdo
social, el cual, es entonces en mayor medida legítimo en tanto se integran a él un mayor
número de ciudadanos que conviven, lo que hace que se perciba que la ciudadanía se

Presupuesto Participativo y Participación Ciudadana | 19/06/2018


conforma a través de la inclusión de todos los individuos que están relacionados con un
espacio común sin exclusión. La formación de ciudadanía conlleva a una activación de la
misma al sumirla como una praxis, es decir la ciudadanía es un rol intencional y/o
premeditado por tal razón formar ciudadanía requiere, en principio, reconocer los otros roles
en los cuales estamos inmiscuidos en la vida pública y que tienen que ser superados por lo
cívico. La ciudadanía como elemento estructural del sistema político es integrado por
personas que se reúnen en torno a una comunidad en la cual producen un esquema de reglas
y normas de convivencia, que atienden y aceptan de manera voluntaria, en donde existen
unos derechos que deben ser respetados, promovidos y exigidos por todos sus integrantes,
y también, pero en contraprestación existen un conjunto de deberes que deben ser
cumplidos; en donde el ser ciudadano implica que: “a) existe voluntad inicial a
concebir activamente la solidaridad natural, la libertad y la equidad, b) es necesario que los
individuos sean formados en habilidades y prácticas de ciudadanía y que estén dispuestos a
asumir la ciudadanía como oficio, difundir y practicar lo aprendido en las condiciones y
situaciones que lo rodean, c) aprender la importancia del liderazgo organizacional y del ser
orgánico, d) estar dispuesto a ser contestatario y e) tener clara la diferencia entre interés
privado y público, y saber que el segundo es necesario construirlo.
Los Estados democráticos han dado forma y definición a sus instituciones a partir del
reconocimiento y ampliación de los derechos individuales o civiles, para alcanzar los derechos
políticos y más recientemente los derechos sociales incluido el derecho a la protección y

14
conservación de los servicios ambientales. La ampliación de derechos y el libre ejercicio de
estos ha dependido y depende del fortalecimiento de los partícipes que integran la sociedad
civil, así como de los avances en su inclusión como ciudadanos y ciudadanas, a sectores o
grupos poblacionales tradicionalmente excluidos. En consecuencia, la edificación de
ciudadanía va relacionada directamente al reconocimiento de los derechos de sectores sociales
que no gozaban de ellos y que han conquistado su reconocimiento y con ello ampliado el
concepto de ciudadanía.
Los regímenes democráticos, para avanzar en su consolidación como tales, deben generar
procesos de inclusión y favorecer la constitución de sujetos sociales y ofrecer garantías de
cumplimiento de los derechos, particularmente los derechos sociales.
El Estado como unidad organizada de decisión y sanción con mayor o menor número de
funciones es un elemento político necesario en la sociedad toda. Los sistemas democráticos
implementan y articulan la dirección del Estado, a través de la designación y elección de
representantes por parte del pueblo. Durante más de un siglo la democracia en la Argentina ha
vivido evoluciones e involuciones, es decir, crecimientos y retrocesos democráticos en los que
se han hecho latentes los conflictos relacionales entre los representantes políticos y el pueblo.
En la actualidad, este sistema de conflictividad se sumerge dentro de un concepto más amplio,
la crisis de la Democracia Representativa y en la anomía política participativai que viven los
ciudadanos. Aunque se han intentado implantar modelos guiados, como el Corporativismo, para
alinear los intereses de los ciudadanos y el Estado o la Gobernanza, la cual propugna una
participación protagonista de los ciudadanos, lo cierto es que la crisis de la Democracia
Representativa, está más fuerte que nunca.
La definición de la ciudadanía y su relación conexa a la participación como concepto se articula
al contexto del proyecto político que se intenta imponer como hegemónico.
La actividad política es el contexto donde el reconocimiento del valor de la democracia se
generaliza; la concepción que se tenga del ciudadano y de su papel como sujeto histórico son
la clave para la construcción de la democracia. Esta centralidad se expresará siempre en
términos de una tensión permanente entre la ciudadanía (o ciudadanos) que tenemos y la
ciudadanía (o ciudadanos) y en la participación que necesitamos. La ciudadanía activa hace
Presupuesto Participativo y Participación Ciudadana | 19/06/2018

referencia a una tensión que se expresa más en el plano de las ideas, de las concepciones, de las
perspectivas teóricas con que tratemos de construir un contexto que le de sustento y naturaleza
hegemónica al concepto. Es, si se quiere, una lucha por incluir, o excluir aspectos claves como
la participación o la pluralidad que puedan reconocerse en terrenos como la legalidad o los
valores que le den un sello democrático, neoliberal, comunitarista, etc; a la ciudadanía que
queremos construir.
El concepto de ciudadano hace referencia más a una tensión que se expresa en la concreción
histórico – social de los hombres y mujeres de carne y hueso, que, con sus comportamientos,
condiciones reales de vida, valores, interacciones, ideas, etc., ejercen o reclaman derechos y
deberes, libertades y restricciones, poderes y responsabilidades para actuar dentro (o incluso
fuera) de los referentes aceptados como los marcos propios de la ciudadanía.
En el informe del PNUD sobre la democracia en América Latina de 2004, La democracia en
América Latina. Hacia una democracia de ciudadanas y ciudadanos: Contribuciones para el
debate, se opta por definir a la ciudadanía en los siguientes términos:

La ciudadanía es un tipo necesario y obligatorio de igualdad básica asociada al concepto de


pertenencia a una comunidad, que en términos modernos es equivalente a los derechos y
obligaciones de los que todos los individuos están dotados en virtud de su pertenencia a un
Estado nacional. La ciudadanía debe de definirse en base siempre a su carácter expansivo,
basado en la concepción, moral y legalmente respaldada, del ser humano como responsable,

15
razonable y autónomo; b. condición legal, de estatus que se reconoce al individuo como
portador de derechos legalmente sancionados y respaldados; c. sentido social o intersubjetivo
que suele resultar de la pertenencia a un espacio social común; d. carácter igualitario, sustentado
en el reconocimiento universal de los derechos y deberes de todos los miembros de una sociedad
democráticamente organizada; e. inclusividad, ligada al atributo de nacionalidad que implica la
pertenencia de los individuos a los Estados nacionales.
Este informe, como el informe de Latinobarómetro de 2007, permite observar la tipología de
ciudadano que presenta Latinoamérica. En primer lugar, tenemos ciudadanos pobres y míseros,
viviendo en sociedades demasiado desiguales e inequitativas: las cifras señalan que mientras en
Europa el índice de Gini es de 0,290 y en EE.UU es de 0,344 en América Latina es de 0,552.
La medición de la pobreza arroja también resultados desalentadores: en Europa el 15, 0% de
sus habitantes son pobres; en EE.UU el 11,7%, mientras que en América Latina la cifra es del
42, 2%. El PIB per capita de los europeos es de 22.600 dólares corrientes; en EE.UU de 36.100
dólares corrientes, mientras que en América Latina solo es de 3.856 dólares corriente (PNUD:
2004). Por su parte Latinobarómetro señala aspectos como “las tensiones que sufren las
sociedades latinoamericanas están marcadas por la desequilibrada distribución del ingreso,
brecha que ha aumentado con la democracia. El conflicto entre ricos y pobres, la brecha de
distribución, son los elementos que explican por qué los ciudadanos se han vuelto al estado para
la solución de sus problemas. La economía de mercado no les ha entregado los instrumentos
para insertarse a la velocidad esperada. Existe la percepción de que los ricos son quienes se
llevan los beneficios del desarrollo mientras los necesitados están a la deriva, sin protección”
(2007: 66).

Las tensiones que sufren las sociedades latinoamericanas están marcadas por la
desequilibrada distribución del ingreso, brecha que ha aumentado con la democracia. El
conflicto entre ricos y pobres, la brecha de distribución, son los elementos que explican por qué
los ciudadanos se han vuelto al estado para la solución de sus problemas. La economía de
mercado no les ha entregado los instrumentos para insertarse a la velocidad esperada. Existe la
percepción de que los ricos son quienes se llevan los beneficios del desarrollo mientras los

Presupuesto Participativo y Participación Ciudadana | 19/06/2018


necesitados están a la deriva, sin protección” (2007: 66).

En la visión de Eduardo Bustelo, Latinoamérica y Argentina presenta una ciudadanía


participativa asistidas y no una ciudadanía fuerte, emancipada.

El modelo de CA (Ciudadanía Asistida) se ubica en la tradición más conservadora de


política económica y social y puede reconocerse más recientemente en las formulaciones
teóricas de Friedrich Von Hajek (Hajek, 1944) y Milton Friedman (Friedman, 1962). Es la
concepción hegemónica asociada a los ajustes económicos y modelos de apertura económica
predominantes hoy en América Latina, particularmente relacionados con el denominado
“Consenso de Washington” (Williamson, 1996). Se parte de una concepción atomística de la
sociedad en la que se reconocen sólo individuos con intereses como el principio básico
organizador de toda asociación humana. El arquetipo de modelo es el “hombre económico”, el
cual maximizando su beneficio personal, automáticamente beneficia al conjunto social” (1998:
245). Es en últimas la ciudadanía impuesta por el proyecto político neoliberal hegemónico de
los últimos años.

Participación política digital y gobiernos democráticos abiertos

16
El proceso continuo y evolutivo de las tecnologías digitales, la expansión de Internet y el
crecimiento de las redes de telefonía móvil han generado profundos cambios en las formas
políticas a nivel global. Las arquitecturas abiertas, libres y de producción colaborativa, han
permitido que, millones de personas (usuarios finales, ciudadanos) a nivel global puedan
informarse, comunicarse, expresar sus preferencias, gestionar parte de sus derechos ciudadanos
y colaborar para producir, disponer y compartir todo tipo de bienes y obras intelectuales. Estas
tecnologías han ocasionado un nuevo panorama donde el trasfondo lleva a nuevas formas de
ejercicio político: desde las campañas y sus diferentes formas de financiamiento, hasta las
mismas bases de la participación política ciudadana. Al analizar estos procesos vemos que, han
renovado y fortalecido el ejercicio directo e inmediato de derechos fundamentales: la libertad
de expresión, el derecho a peticionar a las autoridades, el derecho de autor y el derecho de copia,
el derecho de libre acceso y la disponibilidad de la información pública; (Vercelli, 2009). Estas
tecnologías también han servido para generar nuevas formas de censura, menoscabos a
derechos intelectuales, la desaparición de la privacidad, formas autoritarias de control, la
privatización de informaciones de carácter público o la formación de gobiernos totalitarios
(Vercelli, 2009). Las promesas y reivindicaciones de mejores formas de gobierno estuvieron
presentes en los inicios de la digitalización: desde la informatización de las administraciones
públicas, hasta los más sofisticados y ambiciosos proyectos de gobiernos electrónicos1 (Naser
y Concha, 2012). En la actualidad todavía sigue en pie la pretensión de construir gobiernos más
democráticos, republicanos, con una ciudadanía digital fuerte y, en suma, lograr una nueva y
mejor relación entre los ciudadanos y sus gobernantes. La idea de alcanzar “gobiernos
electrónicos abiertos” ha surgido recientemente como una vía, una alternativa, un camino
posible que conduzca a la construcción de mejores formas de gobierno en la era digital. Estas
iniciativas procuran ser más transparentes, confiables, participativas y colaborativas en la
administración de la cosa pública (Obama, 2009). En este sentido, los gobiernos abiertos
parecen enfrentarse al secretismo, la clausura y, sobre todo, a la brecha que separa a los
ciudadanos y a sus gobernantes dentro del sistema de representación política (Orszag, 2009).
En pocos años los gobiernos abiertos se pusieron “de moda”. El primero de los gobiernos —
autodenominado— “abierto” a nivel mundial se inició a principios del año 2009 en los Estados
Presupuesto Participativo y Participación Ciudadana | 19/06/2018

Unidos; Barack Obama, ha sido el principal impulsor de esta modalidad de gobierno


electrónico. Obama inició su proyecto de gobierno abierto desde su misma campaña a la
presidencia. Para ello, utilizó blogs y redes sociales —como Facebook y Twitter—, diseñó toda
una nueva forma de financiar su campaña política, convocó insistentemente a la participación
ciudadana y, en pocos meses de gestión, resignificó profundamente las formas de gestionar la
cosa pública (Beas, 2011). Para Obama y la corriente de pensamiento que lo sigue, la apertura
de gestión democratiza los datos e informaciones públicas y como resultante se mejora la vida
cotidiana de los ciudadanos (Obama, 2009; Orszag, 2009).

Los gobiernos abiertos se caracterizan por, al menos, utilizar las tecnologías digitales y las
plataformas tecnológicas para buscar mejores niveles de: 1) transparencia en las formas de
gestionar el patrimonio público; 2) participación política activa de los ciudadanos en la
elaboración y deliberación de iniciativas, políticas y leyes —en forma directa o a través de
organizaciones de la sociedad civil—; 3) colaboración entre gobiernos, ciudadanos, partidos
políticos, sindicatos, empresas, organizaciones de la sociedad civil, etcétera. Estos tres
elementos están presentes y caracterizan todas las iniciativas a nivel global, son los pilares sobre
los que se asienta la apertura en las formas de gobierno (Orszag, 2009; Vercelli, 2010).
Un cuarto elemento presente en estas iniciativas es la gestión de bienes intelectuales. Los bienes
intelectualesii, estas formas de valor intelectual, se expresan de diferentes maneras y pueden
presentarse mediante los más diversos soportes (materiales). En este sentido, las experiencias

17
de gobiernos abiertos implican siempre una gestión estratégica de las diferentes formas de valor
intelectual.
Las características y elementos de los gobiernos abiertos descritos están íntimamente
relacionados con la arquitectura, la política y la cultura que ha definido históricamente el
desarrollo de las tecnologías digitales e Internet. Así, el concepto de gobierno abierto también
deriva de la apertura de las redes electrónicas y sus protocolos, de la libertad/apertura de los
movimientos por el software libre (free software) y software de fuente abierta (open source),
del movimiento por el acceso abierto (open access), de los movimientos por la liberación y
disponibilidad de la cultura (free culture) y, en suma, de toda una cultura abierta/libre que
caracterizó el desarrollo de Internet desde sus inicios (Castells, 2000, 2009; Vercelli, 2004,
2009; Stallman 2004).
Los cambios en las formas de gobierno y sus correlatos en las formas de participación y gestión
de derechos ciudadanos están atravesados por tensiones, negociaciones y luchas, muchas de
estas son cotidianas y se encuentran presentes a cada momento como al escribir un correo
electrónico o una entrada en un blog, dejar un comentario en una red social, chatear,
intercambiar archivos en redes de pares, construir un avatar en un mundo virtual, enviar un
mensaje de texto por teléfono móvil, jugar en la red mediante consolas de videojuegos o
participar políticamente en un portal web gubernamental. Sin embargo, a pesar de su
cotidianeidad, muchas veces la ciudadanía no alcanza a percibir cuánto se afectan sus derechos
por el uso de ciertas tecnologías y plataformas digitales.
La participación política ciudadana es uno de los cuatro elementos sobre los que se establecen
y construyen los gobiernos abiertos, es la piedra basal y fuente de la soberanía popular, es quien
favorece, permite y construye los diferentes gobiernos, sean estos más o menos abiertos. En la
era digital, si hay gobiernos abiertos, entonces estos tienen que nacer, articularse y sustentarse
mediante las diversas formas de participación política de sus ciudadanías (Serrano y Serrano,
2009; Beas, 2011; Naser y Concha, 2012).

Presupuesto Participativo y Participación Ciudadana | 19/06/2018

Bibliografía

Avritzer, Leonardo 2008 “Instituições participativas e desenho institucional: algumas


considerações sobre a variação da participação no Brasil democrático”, en Opinião Pública.

Baño, R. (1998). Participación Ciudadana. Elementos Conceptuales. En FLACSO, Nociones


de una Ciudadanía que Crece. Santiago, Chile: LOM Ediciones.

18
Beas, D. (2011). La re-invención de la política. Internet y la nueva esfera pública. Avellaneda.
Buenos Aires: Editorial Planeta.

Calderón, C. y Lorenzo, S. (Eds.). (2010). Open Government - Gobierno Abierto. Algón


Editores,Alcalá la Real (Jaen).

Castells, M. (2001). La Galaxia Internet. Madrid: Areté. Castells, M. (2009). Comunicación y


poder. Madrid: Alianza.

LATINOBAROMETRO, (2007). Informe Latinobarómetro 2007. Disponible en línea:


www.latinobarometro.org.

Irekia. (2010a). Irekia, Gobierno Abierto. Irekia, Gobierno Vasco. Recuperado de: http://www.
irekia.euskadi.net/es/pages/798-acerca Irekia. (2010b). Irekia, Gobierno Abierto. Irekia,
Gobierno Vasco. Recuperado de http://www.irekia. euskadi.net/

Ocampo, José A., 2004, “Economía y democracia”, texto preparado para PRODDAL, en
PNUD, La democracia en América Latina. Hacia una democracia de ciudadanas y ciudadanos:
Contribuciones para el debate, Buenos Aires, Aguilar, Altea, Taurus, Alfaguara.

Ortiz Sandoval, Luis (2012), “La instancia pública de la gestión. Algunas consideraciones sobre
la participación ciudadana en el Estado”, en Reforma y Democracia, Caracas, clad, núm. 54.

Mitchell, W. (1995). City of Bits: Space, Place and Infobahn. Cambridge, MIT Press.
Presupuesto Participativo y Participación Ciudadana | 19/06/2018

Naser, A. y Concha, G. (2012). Panorama de Gobierno Electrónico en la región: resultados e


impactos. En Gastón, C. y Naser, A. (Ed.). El desafío hacia el gobierno abierto en la hora de la
igualdad. Santiago de Chile: Naciones Unidas. Recuperado de:
http://www.cepal.org/ddpe/publicaciones/ xml/9/46119/W465.pdf

Obama, B. (2009). Transparency and Open Government. The White House. Recuperado de:
http://www.whitehouse.gov/the_press_office/Transparency_and_Open_Government

Orszag, P. (8 de diciembre de 2009). Open Government Directive. The White House.


Recuperado de: http://www.whitehouse.gov/open/documents/open-government-directive

Restrepo, Darío, 1992, Descentralización y neoliberalismo. Balance de un proceso, Bogotá,


Ceir.

Marshall T.H. y Bottomore Tom. Ciudadanía y clase social, Alianza Editorial, Madrid 1998.

19
Naser, A. y Concha, G. (2012). Panorama de Gobierno Electrónico en la región: resultados e
impactos. En Gastón, C. y Naser, A. (Ed.). El desafío hacia el gobierno abierto en la hora de la
igualdad. Santiago de Chile: Naciones Unidas. Recuperado de:
http://www.cepal.org/ddpe/publicaciones/ xml/9/46119/W465.pdf

Nohlen, Dieter (2006), Diccionario de ciencia política, México, Editorial Porrúa.

Serrano, J. L. y Serrano, J. L. (2009). La participación política ciudadana; sus límites y controles


institucionales en el caso mexicano. Revista Estudios Políticos, 9 (16), Recuperado de:
http://www.revistas.unam.mx/index.php/rep/ article/view/18769

Stallman, R. (2004). Software libre para una sociedad libre. Madrid: Traficantes de Sueños.
Recuperado de: http://www.traficantes.net/index.php/ trafis/content/download/
18110/185232/file/ softlibre%20enriquecido.pdf.

Serie Módulos Educativos. Nº 2 Participación Ciudadana, Instituto Interamericano de Derechos


Humanos. San José de Costa Rica, agosto 2002.

Zurita Leonardo Valdés, “Cambio institucional y participación ciudadana”, en Benjamín


Revuelta Vaquero; Fernando Patrón Sánchez, Democracia Participativa, visiones, avances y
provocaciones, México, colección universitaria de la democracia mexicana, Instituto Federal
Electoral, 2010, p. 7.

Presupuesto Participativo y Participación Ciudadana | 19/06/2018

Anomia participativa política prefijo de ausencia de estructuras, a la falta de normas se le adiciona la incapacidad de la
estructura sistémica política de proveer a ciertos individuos de lo necesario para estimular las acciones que posibiliten la
estabilidad de la sociedad. El término es utilizado en sociología y ciencias sociales. Las estructuras políticas representativas

20
ejercen una presión deliberada y definitiva en ciertas personas de la sociedad, de tal manera que producen una conducta
inconformista en vez de una conformista. término fue introducido en primer lugar por el sociólogo Émile Durkheim en La
división del trabajo en la sociedad (1893) y posteriormente por el sociólogo estructuralista Robert K. Merton (Social Theory
and Social Structure, 1949; "Teoría social y estructura social") y en (1964) en Anomie, anomia and social interaction:
contexts of deviant behavior.
ii El concepto de bien/bienes indica aquello que tiene puede tener un valor, un interés, una utilidad, un mérito y que, a su

vez, recibe o puede recibir protección jurídica. Bienes son todas aquellas cosas materiales o entidades intelectuales en cuanto
objetos de derecho. La definición de bien/bienes alcanza a todo lo que sea o pueda ser jurídicamente tutelado más allá del
reconocimiento expreso en una ley positiva o de las interpretaciones jurídico-políticas dominantes. Existe una diferencia de
los bienes de calidad material con los datos, las informaciones o las obras intelectuales que se definen como bienes de calidad
intelectual. Si bien se expresan en soportes materiales, estos bienes intelectuales más aun los que se encuentran en formatos
digitales son abundantes y pueden compartirse libremente entre diferentes grupos sociales sin generar relaciones de escasez.
Por su calidad, todos los bienes intelectuales tienen un carácter común. Se puede disponer de ellos para cualquier propósito
de forma directa, inmediata y sin mediaciones (Vercelli, 2009).
Presupuesto Participativo y Participación Ciudadana | 19/06/2018

21

Vous aimerez peut-être aussi