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RAEM RAEM

Volumen 42
Número 2
Revista Argentina de
Julio 2005 Endocrinología y Metabolismo

THE NATIONAL ACADEMY OF CLINICAL BIOCHEMISTRY

GUÍA DE CONSENSO
PARA EL DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO
DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA
“Reproduced with permission of the National Academy of Clinical Biochemistry, Washington, DC.”

S U M A R I O
Presentación de la Edición en Idioma Español . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3
Prefacio . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3
Traducción de la Edición en Idioma Inglés . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 5
Sección 1. Prólogo e Introducción . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 6
Sección 2. Factores pre-analíticos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 7
Sección 3. Ensayos tiroideos para el bioquímico y el médico . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 20
A. Tiroxina Total (T4T) y Triyodotironina Total (T3T) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 20
B. Tiroxina Libre (T4L) y Triyodotironina Libre (T3L) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 22
C. Tirotrofina (TSH) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 35
D. Anticuerpos Antitiroideos: . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 47
• Anticuerpos anti-Peroxidasa Tiroidea (TPOAb)
• Anticuerpos anti-Tiroglobulina (TgAb)
• Anticuerpos anti-Receptor de TSH (TRAb)
E. Tiroglobulina (Tg) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 60
F. Calcitonina (CT) y Proto-oncogen RET . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 70
G. Yodo urinario . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 77
H. Punción Aspirativa con Aguja Fina (PAAF) y Citología Tiroidea . . . . . . . . . . . . . . . . . 83
I. Screening de Hipotiroidismo Congénito . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 90
Sección 4. Importancia del contacto entre el Laboratorio y los Médicos . . . . . . . . . . . . . . . 98
Apéndices y Glosario . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 102
Referencias . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 106
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RAEM
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Revista Argentina
Editores asociados
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de Endocrinología
Director de la Carrera de Médico Especialista en
Medicina Nuclear, Facultad de Medicina UBA, Bs. As.
y Metabolismo
Héctor Jasper
Miembro de la Carrera del Investigador, Consejo Nacional
Revista Argentina de Endocrinología y
de Investigaciones Científicas y Técnicas, Bs. As.
Metabolismo.
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División Endocrinología, Hospital Durand, Bs. As. Endocrinología.
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Jefe de la Sección Diabetes y Metabolismo del Servicio de ducirse, almacenarse en un sistema de recuperación o
Endocrinología y Medicina Nuclear del Htal. Italiano, Bs. As. transmitirse en forma alguna por medio de cualquier
José Luis Mansur procedimiento, sea éste mecánico, electrónico, de
Centro de Endocrinología y Osteoporosis, La Plata fotocopia, grabación o cualquier otro, sin el previo
Hugo Scaglia permiso escrito del autor.
Hospital Italiano Humberto 1º, La Plata.
Eduardo J. Spinedi ISSN
Jefe de Unidad de Neuroendocrinología Instituto Multidisci- 0326-4610
plinario de Biología Celular (CONICET-CICPBA), La Plata.

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Revista Argentina de Endocrinología y Metabolismo Vol 42 • No. 2
Copyright © 2005 por la Sociedad Argentina de Endocrinología y Metabolismo

GUÍA DE CONSENSO PARA EL DIAGNÓSTICO


Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA.

THE NATIONAL ACADEMY OF CLINICAL BIOCHEMISTRY


“Reproduced with permission of the National Academy of Clinical Biochemistry, Washington, DC.”

Presentación de la Edición en Idioma Español


EDITORES: Liliana M. Bergoglio 1 y Jorge H. Mestman 2
1
Bioquímica Endocrinóloga, Universidad Nacional de Córdoba, Córdoba, Argentina
2
Médico Endocrinólogo, Universidad del Sur de California, Los Angeles, CA, Estados Unidos

Mencionamos con reconocimiento los nombres de los profesionales que participaron en la revisión de la traducción del
documento original sobre el cual está basada esta monografía:
Claudio Aranda, Hospital Carlos G. Durand, Buenos Aires, Argentina
Aldo H. Coleoni, Universidad Nacional de Córdoba, Córdoba, Argentina
N. Liliana F. de Muñoz, Hospital de Niños de la Santísima Trinidad, Córdoba, Argentina
Silvia Gutiérrez, Hospital Carlos G. Durand, Buenos Aires, Argentina
H. Rubén Harach, Hospital Dr. A. Oñativia, Salta, Argentina
Gustavo C. Maccallini, Hospital Carlos G. Durand, Buenos Aires, Argentina
Mirta B. Miras, Hospital de Niños de la Santísima Trinidad, Córdoba, Argentina
Hugo Niepomniszcze, Universidad Nacional de Buenos Aires, Buenos Aires, Argentina
Adriana Oneto, Hospital Carlos G. Durand, Buenos Aires, Argentina
Eduardo Pusiol, Universidad Nacional de Cuyo, Mendoza, Argentina
Gerardo C. Sartorio, Hospital J. M. Ramos Mejía, Buenos Aires, Argentina

Prefacio

Las pruebas bioquímicas constituyen el pilar fundamental para el diagnóstico y seguimiento de la enferme-
dad tiroidea. A pesar de los avances en los instrumentos de medición y las mejoras en la sensibilidad y espe-
cificidad de los ensayos actuales, todavía se observa variabilidad método a método y susceptibilidad a las in-
terferencias.
La amplia variedad de herramientas disponibles para evaluar la función tiroidea generó, por parte de nume-
rosas organizaciones profesionales, la idea de racionalizar su uso mediante recomendaciones prácticas que no
excluyeran la relación costo-beneficio.
La National Academy of Clinical Biochemistry (NACB), integrante de la Asociación Americana de Química
Clínica, continuando con el propósito de ofrecer pautas de consenso sobre pruebas de laboratorio relaciona-
das con distintas patologías, alentó y respaldó la elaboración de esta monografía; dedicada a médicos y profe-
sionales del laboratorio clínico. Sin duda, de las recomendaciones elaboradas por la NACB hasta el presente,
las de Tiroides han sido las más difundidas.
Las recomendaciones, surgieron a partir de un proceso colaborativo que involucró a múltiples organizacio-
nes de todo el mundo dedicadas a estudiar los problemas de tiroides. Miembros de la Asociación Americana
de Química Clínica, Asociación Americana de Endocrinología Clínica, Asociación de Tiroides de Asia y Ocea-
nía, Asociación Americana de Tiroides, Asociación Británica de Tiroides, Sociedad Americana de Endocrinolo-
4 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

gía, Asociación Europea de Tiroides, y Asociación Latinoamericana de Tiroides, dedicaron tiempo y experien-
cia a la elaboración o a la crítica del texto final, y son reconocidos en el apéndice A.
El objetivo era establecer pautas de consenso a nivel internacional, y paralelamente identificar los aspectos
para los cuales un consenso era muy difícil de lograr a causa de las asimetrías culturales, políticoeconómicas,
medioambientales y nutricionales entre los distintos países.
Con la conciencia de estas divergencias, el proceso de revisión global fue considerado crítico. Pero, sorpren-
dentemente, la mayoría de las pautas contenidas en esta monografía alcanzaron un consenso superior al 95%.
El proceso llevó dos años. El primer borrador se elaboró con el valioso aporte de los manuscritos solicita-
dos a los expertos reconocidos en el Prólogo y fue distribuido en el Congreso Internacional de Tiroides en
Kyoto en octubre del 2000 y exhibido en el sitio web de la NACB (www.nacb.org), durante el año 2001, para
su discusión. Las recomendaciones básicas también fueron presentadas en sesiones destinadas a edificar el con-
senso en varios eventos científicos durante el mismo año.
Los resultados de estas sesiones, junto con los de la revisión electrónica, fueron utilizados para desarrollar
un segundo borrador que fue puesto en el sitio web de la NACB, en enero de 2002, para el comentario final.
El texto fue concluido para la publicación y la visualización electrónica, en junio de 2002, y fue publicado co-
mo el número de enero de 2003 de la revista Thyroid (Thyroid 2003; 13: 4-126).
La presente traducción al idioma español corresponde a esa actualización. La monografía ha sido traducida
también a los siguientes idiomas: polaco, ruso, francés, y está en proceso la versión en chino.
Las recomendaciones están orientadas a integrar los aspectos técnicos de las pruebas bioquímicas y citoló-
gicas para evaluar la función tiroidea, con los criterios de comportamiento analítico necesarios para su óptima
utilización clínica en un entorno global cada vez más sensible a los costos. Están diseñadas para ofrecer, a mé-
dicos y bioquímicos, una descripción de la robustez y de las limitaciones de estas pruebas. En este contexto,
es deseable que la información presentada ayude a los médicos a actuar en forma conjunta y eficaz con el la-
boratorio cuando se introduzca o se cambie un método, o cuando un resultado sea discordante con la clínica
del paciente. Los laboratorios, a su vez, deberían poder definir, a partir de ellas, su perfil de eficiencia óptimo.
La importancia de esta relación entre el laboratorio y los médicos se enfatiza en cada capítulo.
La monografía provee información bioquímica y clínica actualizada contenida en secciones referidas a Fac-
tores Preanalíticos, determinación de Hormonas Tiroideas Totales y Libres, Anticuerpos Antitiroideos, TSH, Ti-
roglobulina, Calcitonina y protooncogen RET, mediciones de Yodo, Punción Aspirativa con Aguja Fina (PAAF)
y Screening para el Hipotiroidismo Congénito.
Estas recomendaciones fueron objeto de unanimidad en cuanto a su necesidad pero, de manera esperable,
apareció la primera limitación que es la de conciliar esa necesidad con su insuficiencia actual para abarcar una
realidad global.
En los intentos de consensuar nunca es posible unificar de manera ideal todas las opiniones, especialmen-
te cuando existen asimetrías como las mencionadas entre distintos países, por lo cual, realidades muy diferen-
tes deberían continuar siendo abordadas de maneras originales.
Sin embargo, los procesos de consenso conllevan una necesaria gradualidad, continuando con la cual, los
diálogos críticos podrán incrementarse en la medida en que, con la traducción a más idiomas, la información
presentada tenga aún mayor difusión.
Por otra parte, ninguna pauta debería ser estática, y es en este sentido, que se espera que los comentarios
y las críticas, que puedan sumarse luego de la lectura del texto en español, puedan contribuir al enriquecimien-
to de una futura versión.

Liliana M. Bergoglio
Jorge H. Mestman
Carole A. Spencer
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 5

Traducción de la Edición en Idioma Inglés


EDITORES: Laurence M. Demers, Ph.D., F.A.C.B. - Carole A. Spencer Ph.D., F.A.C.B.

Comisión de Redacción:
La revisión de esta monografía de su versión original en Inglés se ha logrado gracias al aporte experto de los Editores, de
los miembros de la Comisión de Recomendaciones, de los especialistas que enviaron manuscritos para cada sección y de
los revisores incluidos en el Apéndice A. El material de esta monografía representa las opiniones de los editores y no re-
fleja la posición oficial de la National Academy of Clinical Biochemistry ni de ninguna de las organizaciones copatrocinan-
tes. La National Academy of Clinical Biochemistry es la Academia Oficial de la American Association of Clinical Chemistry.

Se permite la impresión de copias individuales para uso personal de fuentes autorizadas en Internet tales como la Página
de Inicio (Home Page) de NACB (www.nacb.org), siempre que los trabajos se impriman en su totalidad y se incluya el pre-
sente aviso. Además, se permite la impresión para uso personal de párrafos extraídos del documento siempre que el usua-
rio también imprima e incluya la página inicial y las de la portada y contraportada correspondientes al material selecciona-
do, o bien que se identifique claramente a la NACB como autora del material. No se permite la reproducción total ni par-
cial de este documento bajo ninguna otra circunstancia, su almacenamiento en un sistema de búsqueda, su traducción a
otros idiomas, ni su transmisión en ninguna forma sin el permiso expreso por escrito de la National Academy of Clinical
Biochemistry (NACB, 2101 L Street, N.W., Washington, DC 20037-1526). Generalmente se otorgan permisos siempre que el
logo de la NACB y el siguiente anuncio se destaquen en la portada del documento: Reproducido (traducido) con permiso
de la National Academy of Clinical Biochemistry, Washington, DC

Es posible adquirir copias individuales o múltiples solicitándolas a la NACB en la dirección anterior o bien a través de la
Página de Inicio (www.nacb.org).
©2002 de la National Academy of Clinical Biochemistry.

Expresamos nuestro agradecimiento a los siguientes profesionales que aportaron los manuscritos originales sobre los que
se basa esta monografía:
Zubair Baloch, M.D., Ph.D., Dept. of Pathology and Laboratory Medicine, University of Pennsylvania Medical Center, Fila-
delfia, PA, EE.UU.
Laurence M. Demers, Ph.D., F.A.C.B., Pennsylvania State University College of Medicine, M. S. Hershey Medical Center,
Hershey, PA, EE.UU.
Pierre Carayon, M.D., D.Sc, U555 INSERM and Department of Biochemistry & Molecular Biology, University of the Medei-
terranea Medical School, Marsella, Francia
Bernard Conte-Devolx, M.D. Ph.D., U555 INSERM and Department of Endocrinology, University of the Medeiterranea Me-
dical School, Marsella, Francia
Ulla Feldt Rasmussen, M.D., Department of Medicine, National University Hospital, Copenhague, Dinamarca
Jean-François Henry, M.D., U555 INSERM and Department of Endocrine Surgery, University of the Medeiterranea Medi-
cal School, Marsella, Francia
Virginia LiVolsi, M.D., Dept. of Pathology and Laboratory Medicine, University of Pennsylvania Medical Center, Filadelfia,
PA, EE.UU.
Patricia Niccoli-Sire, M.D., U555 INSERM and Departments of Endocrinology and Surgery, University of the Medeiterra-
nea Medical School, Marsella, Francia
Rhys John, Ph.D., F.R.C.Path, University Hospital of Wales, Cardiff, Gales, Reino Unido
Jean Ruf, M.D., U555 INSERM and Department of Biochemistry & Molecular Biology, University of the Medeiterranea Me-
dical School, Marsella, Francia
Peter PA Smyth, M.S., Ph.D., University College Dublin, Dublín, Irlanda
Carole A. Spencer, Ph.D., F.A.C.B., University of Southern California, Los Angeles, CA, EE.UU.
Jan R. Stockigt, M.D., F.R.A.C.P., F.R.C.P.A., Ewen Downie Metabolic Unit, Alfred Hospital, Melbourne, Victoria, Australia
6 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

SECCIÓN 1. PRÓLOGO E INTRODUCCIÓN tos. Los médicos y los laboratorios del mundo se in-
clinan de manera individual por diferentes estrate-
gias para evaluar la función tiroidea (4). La presente
Los médicos necesitan el respaldo de un labora- Guía de Consenso no puede abarcar toda esta gama
torio de alta calidad para lograr un diagnóstico pre- de opiniones, sin embargo, se espera que sus lecto-
ciso y un manejo efectivo, y a un costo razonable de res aprecien los esfuerzos realizados para conciliar
los problemas tiroideos. En algunos casos, cuando algunas de estas diferencias en una estrategia reco-
hay una sospecha clínica fuerte de disfunción tiroi- mendable. El texto incluye la mayoría de los ensa-
dea, por ejemplo en el hipertiroidismo clínico en un yos y procedimientos en general realizados para
adulto joven, o ante la presencia de una masa tiroi- diagnosticar y tratar la enfermedad tiroidea, de ma-
dea de crecimiento rápido, las pruebas de laborato- nera que pueda ofrecer tanto al bioquímico como al
rio simplemente confirman la sospecha clínica. Pero médico un panorama general de la capacidad y de
en la mayoría de los pacientes, los síntomas son tan las limitaciones actuales de aquellos de uso más ge-
sutiles que la patología sólo se puede detectar me- neralizado. Las recomendaciones se acordaron con
diante una evaluación bioquímica o citopatológica. un 95% de consenso, a menos que se indique lo
Independientemente de cuán evidente o poco claro contrario. Se halla abierta la recepción de comenta-
sea el problema, es fundamental lograr la amplia co- rios que pudieran mejorar la presente monografía
laboración entre médicos y profesionales del labo- para una próxima revisión.
ratorio para alcanzar un manejo óptimo y efectivo
en costos del paciente.
La disfunción tiroidea, en especial el hipotiroidis- A. Recursos adicionales
mo causado por deficiencia de yodo, es un proble-
ma mundial de la salud pública, pero la carencia de Las recomendaciones clínicas vigentes, están pu-
yodo no es un problema que afecta de manera ho- blicadas en las referencias 4-11. Además, los libros
mogénea a la población de un mismo país. Estudios de texto “Thyroid” y “The Thyroid and Its Diseases”
tanto europeos como estadounidenses sugieren que (www.thyroidmanager.org) son también referencias
esta deficiencia debería considerarse más bien como útiles (12,13). El sitio web de la American Thyroid As-
un “problema localizado”, es decir que puede tener sociation (ATA) (www.thyroid.org) ofrece una lista
una mayor prevalencia en algunas áreas de un país de los síntomas que sugieren enfermedad tiroidea,
que en otras (1-3). La creación de esta Monografía de junto con los códigos ICD-9 recomendados a Medi-
Consenso es el resultado de un esfuerzo conjunto care. Las recomendaciones pueden variar en fun-
que involucró a muchos especialistas en tiroides de ción de las diferentes regiones del mundo. Se pue-
una serie de organizaciones profesionales mundia- de obtener mayor información en cada una de las
les dedicadas a la patología tiroidea: American As- organizaciones nacionales e internacionales de tiroi-
sociation of Clinical Endocrinologists (AACE), Asia des: Asia & Oceania Thyroid Association (AOTA:
& Oceania Thyroid Association (AOTA), American www.dnm.kuhp.kyoto-u.ac.jp/AOTA); American
Thyroid Association (ATA), British Thyroid Associa- Thyroid Association (ATA: www.thyroid.org); Euro-
tion (BTA), European Thyroid Association (ETA) y pean Thyroid Association (ETA: www.eurothyroid-
Latin American Thyroid Society (LATS). Estas organi- .com) y Latin American Thyroid Society (LATS:
zaciones son líderes en materia de tiroides y han pu- www.lats.org).
blicado normas para el tratamiento de la enferme-
dad tiroidea en cada región del mundo. Debido a
que los factores geográficos y económicos influyen B. Perspectiva histórica
en el uso de los métodos para explorar la función
tiroidea, esta monografía se centrará en los aspectos Durante los últimos cuarenta años los avances en
técnicos de dichas pruebas y en los criterios de ca- la sensibilidad y especificidad de los métodos bio-
lidad necesarios para su utilización óptima en un químicos para evaluar la función tiroidea, el desa-
entorno global cada vez más afectado por los cos- rrollo de la punción aspirativa con aguja fina (PAAF)
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 7

y las mejoras en las técnicas citológicas han tenido ción de TSH, el análisis más comúnmente utilizado
un notable impacto en las estrategias clínicas para para evaluar el estado tiroideo en pacientes ambu-
diagnosticar y tratar la enfermedad tiroidea. En la latorios. Las variables analíticas, y la presencia de
década del 50, sólo se disponía de una prueba tiroi- sustancias interferentes en la muestra, pueden in-
dea sérica, una estimación indirecta de la concentra- fluir en la unión de las hormonas tiroideas a las pro-
ción de tiroxina total circulante (TT4) (libre y unida teínas plasmáticas, y así disminuir la exactitud de un
a proteínas), mediante la técnica del yodo unido a diagnóstico basado en las determinaciones de hor-
proteínas (PBI). En la actualidad, la concentración monas tiroideas totales y libres más que en las de
urinaria de yodo se determina directamente median- TSH (ver Tabla 1). Como se discutirá más adelante
te las técnicas de cenizas secas o húmedas y se la [Sección-2 B2 y Sección-3 B3(c)viii] los valores de
utiliza para calcular la ingesta de yodo en la dieta. T4L y de TSH pueden conducir a diagnósticos erró-
El desarrollo de inmunoensayos competitivos a neos en pacientes hospitalizados con enfermedades
principios de la década del 70 y más recientemente severas no tiroideas (NTI). De hecho, estos pacien-
de ensayos inmunométricos “sandwich” no compe- tes eutiroideos, con frecuencia presentan valores
titivos (IMA) ha mejorado gradualmente la especifi- anormales de TSH y/o de hormonas tiroideas totales
cidad y sensibilidad de los ensayos tiroideos. Actual- y libres. Lo mismo puede ocurrir por ingestión de me-
mente están disponibles las determinaciones séricas dicamentos que interfieren con la secreción o la sín-
de hormonas tiroideas circulantes totales (T4T y T3T) tesis hormonal. Cuando existe una sospecha impor-
y libres (T4L y T3L) (14,15). Además se cuenta con tante de que alguna de estas variables pudiera afectar
las determinaciones de proteínas transportadoras de los resultados de los ensayos, es necesario consultar
hormonas tiroideas: Globulina transportadora de tiro- con el médico o el bioquímico especialistas.
xina (TBG), Transtiretina (TTR)/ Prealbúmina (TBPA) Además de la variabilidad fisiológica intrínseca,
y Albúmina (16). Los avances en la sensibilidad de los factores individuales, tales como anormalidades ge-
ensayos de Tirotrofina (TSH), posibilitaron su uso pa- néticas en las proteínas transportadoras, o enferme-
ra la detección tanto del hiper como del hipotiroidis- dades severas no tiroideas (NTI) pueden influir en
mo. Además, las determinaciones séricas de Tiroglo- la sensibilidad y en la especificidad clínicas de un
bulina (Tg), proteína precursora de las hormonas ti- ensayo. Asimismo, factores iatrogénicos como la ad-
roideas, y de Calcitonina (CT) se han convertido en ministración de medicamentos tiroideos y no tiroi-
importantes marcadores tumorales para el manejo de deos (por ejemplo: glucocorticoides, betabloquean-
pacientes con carcinomas tiroideos diferenciados y tes), y otros factores en la muestra, como la presen-
medulares, respectivamente. El reconocimiento de cia de autoanticuerpos anti-hormonas tiroideas, an-
que la autoinmunidad es una causa muy importante ti-Tg, y anticuerpos heterófilos (HAMA) puede afec-
de disfunción tiroidea ha conducido al desarrollo de tar la exactitud del diagnóstico al conducir a una in-
métodos más sensibles y específicos para autoanti- terpretación errónea del resultado de un ensayo. La
cuerpos anti-peroxidasa tiroidea (TPOAb), anti-tiro- Tabla 2 enumera los factores pre-analíticos que se
globulina (TgAb) y anti-receptor de TSH (TRAb). Ac- deben considerar en la interpretación de los ensa-
tualmente, los ensayos tiroideos de rutina se realizan yos tiroideos.
en muestras de suero por métodos automáticos o ma-
nuales que utilizan anticuerpos específicos (17). La me-
todología continúa evolucionando a medida que se A. Variables fisiológicas
establecen normas de calidad y se desarrollan nuevas
tecnologías e instrumentos. En la práctica, en los adultos ambulatorios, varia-
bles como edad, sexo, raza, estación del año, fase
del ciclo menstrual, hábito de fumar, actividad físi-
SECCIÓN 2. FACTORES PRE-ANALÍTICOS ca, ayuno o estasis venosa inducida por la fleboto-
mía, ejercen efectos menores sobre los rangos de re-
Afortunadamente, la mayor parte de las variables ferencia de los ensayos tiroideos (18). Dado que las
pre-analíticas tienen poco efecto en la determina- diferencias debido a estas variables fisiológicas son
8 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

Tabla 1. Causas de discordancia entra T4L y TSH en ausencia de enfermedad grave asociada

Tabla 2.
menores que las diferencias entre los distintos mé-
A. Variables fisiológicas
todos de ensayo, se las considera insignificantes, en
• Relación TSH/T4L
la práctica clínica.
• Edad
• Embarazo
1. Relación TSH / T4L
• Variación biológica
La comprensión de la relación normal que exis-
te entre los niveles séricos de T4 libre (T4L) y TSH
B. Variables patológicas
es esencial para la interpretación de los ensayos tiroi-
• Disfunción tiroidea
deos. Un eje hipotálamo-hipofisario intacto es un re-
• Disfunción hepática o renal
quisito necesario si se quieren usar las determinacio-
• Medicamentos
nes de TSH para diagnosticar disfunción tiroidea pri-
• Enfermedades sistémicas
maria (19). Varias condiciones clínicas y agentes farma-
cológicos pueden alterar la relación T4L / TSH. Co-
C. Variables propias de las muestras
mo muestra la Tabla 1 es más frecuente encontrar fal-
• Factores interferentes
sos resultados en la determinación de T4L que en la
de TSH.
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 9

Fig 1. Relación entre la TSH y la T4L séricas en individuos que pre-


RECOMENDACIÓN Nº 1. ORIENTACIÓN GENERAL sentan un estado tiroideo estable y una función hipotálamo-hipo-
PARA LOS LABORATORIOS Y LOS MÉDICOS fisaria normal. Adaptado de la referencia (20).

• Los laboratorios deberían conservar (entre 4 y 8ºC)


las muestras de suero utilizadas para los ensayos tiroi-
deos por lo menos durante una semana después de
que se hayan informado los resultados a fin de permi-
tir a los médicos solicitar pruebas adicionales.
• Las muestras provenientes de pacientes con cáncer
diferenciado de tiroides (CDT) enviadas para determi-
naciones de Tiroglobulina (Tg) sérica se deberían con-
servar (a –20°C) durante seis meses como mínimo.

Cuando la función hipotálamo-hipofisaria es nor-


mal, se produce una relación logarítmica / lineal in-
versa entre la TSH y la T4L séricas por la retroali-
mentación negativa que ejercen las hormonas tiroi- una respuesta amplificada e inversa en la secreción
deas inhibiendo la secreción de TSH hipofisaria. Por de TSH. En consecuencia, en las primeras etapas de
lo tanto, la función tiroidea se puede determinar di- la disfunción tiroidea, una anormalidad en la TSH
rectamente, midiendo el producto primario de la precederá a una anormalidad en la T4L, ya que la
glándula tiroides, T4 (preferentemente como T4 li- TSH responde exponencialmente a cambios sutiles
bre) o indirectamente, midiendo TSH, que refleja de la T4L que aún se halla dentro de los límites de
(de manera inversa) la concentración de la hormo- referencia de la población. Esto se debe a que los lí-
na tiroidea detectada por la hipófisis. De esto se mites de referencia de T4L de la población son am-
desprende que una TSH elevada y una T4L baja son plios, y reflejan los diferentes niveles individuales
características del hipotiroidismo, mientras que una de la cohorte de sujetos normales incluidos en el es-
TSH baja y una T4L elevada lo son del hipertiroidis- tudio para determinar el rango de referencia.
mo. De hecho, desde que ha mejorado la sensibili- En la actualidad, la determinación de TSH sérica
dad y especificidad de los ensayos de TSH, se acep- es el indicador más confiable del estado tiroideo a
ta que el procedimiento indirecto (determinación de nivel tisular. En los estudios de exceso o deficiencia
TSH sérica) ofrece una mayor sensibilidad para la leves de hormona tiroidea (TSH anormal / T4L y
detección de disfunción tiroidea que el procedi- T3L normales) se observan anormalidades en los
miento directo (determinación de T4L) (10). marcadores de acción de la hormona tiroidea en di-
Existen dos razones para utilizar una estrategia versos tejidos (corazón, cerebro, hueso, hígado y ri-
diagnóstica basada en la TSH para pacientes ambu- ñón). Estas anormalidades generalmente se revier-
latorios: 1) Como lo muestra la Figura 1, las concen- ten cuando se inicia el tratamiento para normalizar
traciones séricas de TSH y de T4L presentan una re- la TSH (23-26).
lación inversa logarítmica / lineal, de manera tal que Es importante reconocer las situaciones clínicas
ligeras modificaciones en la T4L producirán una res- en las que los valores de TSH o de T4L pueden ge-
puesta mucho mayor (amplificada) en la TSH (20). nerar un diagnóstico erróneo. Entre ellas se incluyen
2) Las variaciones individuales en los valores de anormalidades en la función hipotalámica o hipofi-
los ensayos tiroideos junto con estudios realizados saria, incluyendo tumores hipofisarios productores
en gemelos sugieren que cada individuo tiene un ni- de TSH (27-29). Además, como se muestra en la Figu-
vel propio de T4L genéticamente determinado (21,22). ra 2, los valores de TSH resultan equívocos para el
Cualquier exceso o deficiencia leves de T4L será de- diagnóstico durante los períodos transitorios de es-
tectado por la hipófisis con relación al valor de T4L tado tiroideo inestable, como el que se presenta en
propio de ese individuo en particular, y provocará la fase temprana del tratamiento para el hiper o el
10 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

Fig. 2. Demora en la reestabilización de la TSH hipofisaria durante


los períodos de transición con estado tiroideo inestable posteriores RECOMENDACIÓN Nº 2 ENSAYOS PARA EVALUAR LA
al tratamiento del hiper o del hipotiroidismo.
FUNCIÓN TIROIDEA EN PACIENTES AMBULATORIOS

• Pacientes con estado tiroideo estable: Cuando el


estado tiroideo es estable y la función hipotálamo-hi-
pofisaria está intacta, la determinación de TSH es más
sensible que la de T4L para detectar exceso o deficien-
cia leves (subclínicos) de hormonas tiroideas. La ma-
yor sensibilidad diagnóstica de la TSH refleja la rela-
ción logarítmica / lineal que existe entre TSH y T4L, y
la gran sensibilidad de la hipófisis para detectar las
anormalidades de T4L en relación con el nivel genéti-
camente determinado para cada individuo.
• Pacientes con estado tiroideo inestable: La de-
terminación de T4L es un indicador más confiable del
estado tiroideo que la TSH cuando el estado tiroideo
es inestable, como por ejemplo durante los 2 ó 3 pri-
meros meses de tratamiento para el hipo o el hiperti-
roidismo. Los pacientes con hipotiroidismo severo cró-
hipotiroidismo, o en el cambio de dosis de L-T4. Se
nico pueden desarrollar hiperplasia del tirotrofo hipo-
necesitan entre 6 y 12 semanas para que la TSH hi- fisario que quizás simule un adenoma hipofisario, pe-
pofisaria se reequilibre de acuerdo al nuevo estado ro que se resuelve después de varios meses de trata-
de hormonas tiroideas (30). Estos períodos de estado miento con L-T4. En pacientes hipotiroideos en los que
tiroideo inestable también pueden presentarse lue- se sospecha falta de cumplimiento con la terapia de
go de una tiroiditis, incluyendo la tiroiditis post par- reemplazo con L-T4, el seguimiento se debería realizar
to durante la cual es posible observar discordancia con ambas determinaciones: TSH y T4L, ya que estos
entre TSH y T4L. pacientes pueden presentar valores discordantes de
Las drogas que influyen en la secreción hipofisa- TSH y de T4L (TSH elevada / T4L elevada) debido a
ria de TSH (por ejemplo, dopamina, glucocorticoi- un desequilibrio persistente entre ambas.
des, etc.) o que alteran la unión de las hormonas ti-
roideas a las proteínas plasmáticas, también pueden
provocar valores discordantes de TSH [Sección-3
B3(c)vi]. tado por edad en estos individuos (31,32). Este enfo-
que conservador se justifica en base a estudios que
2. Efectos de la edad cronológica sobre los sostienen que la TSH sérica ligeramente suprimida o
rangos de referencia de los ensayos tiroideos. elevada se asocia con un aumento en la morbilidad
(a) Adultos y mortalidad cardiovasculares (36,37).
A pesar de que ciertos estudios muestran dife-
rencias leves entre individuos jóvenes y de mayor (b) Neonatos, infantes y niños
edad, no es necesario desarrollar rangos de referen- En los niños, el eje hipotálamo-hipófiso-tiroideo
cia ajustados por edad en adultos, para hormonas ti- sufre una maduración y un cambio progresivos. Es-
roideas ni para TSH. Con respecto a los individuos pecíficamente, hay una continua disminución en la
añosos eutiroideos, el valor medio de TSH aumenta relación TSH/T4L desde la mitad de la gestación
cada década, lo mismo que la prevalencia de con- hasta que se completa la pubertad (38-43). Como re-
centraciones bajas y altas, en comparación con indi- sultado, en los niños habitualmente se observan
viduos más jóvenes (18,34,35). A pesar de la amplia va- concentraciones más altas de TSH (44). Este proceso
riabilidad de TSH sérica observada a su vez en indi- de maduración determina el uso en pediatría de lí-
viduos de mayor edad, tampoco parece justificarse mites de referencia específicos para cada edad. Sin
el uso de un rango de referencia más amplio ni ajus- embargo, existen diferencias significativas entre las
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 11

determinaciones de T4L y de TSH en función de los


métodos empleados [ver Secciones 3B y 3C]. Debi- RECOMENDACIÓN Nº 3. ENSAYOS PARA EVALUAR
do a que la mayoría de los fabricantes de equipos LA FUNCIÓN TIROIDEA EN NIÑOS
de reactivos no ha establecido intervalos de referen-
El eje hipotálamo-hipófiso-tiroideo madura
cia específicos para cada edad, estos pueden ser cal- durante la infancia hasta el final de la pubertad.
culados para los diferentes ensayos ajustando los lí-
mites superior e inferior del rango de referencia • Las concentraciones de TSH y T4L son más altas en
adulto por medio de la relación entre los valores de niños, especialmente en la primera semana de vida y
niños vs adultos, como se indica en la Tabla 3. durante el primer año. No reconocer esto podría
Durante el período neonatal, la deprivación caló- provocar la pérdida del diagnóstico o el subtratamien-
rica y en las personas añosas, se observa una dismi- to de casos de hipotiroidismo congénito.
• Deberían usarse valores de referencia ajustados por
nución en la T3 sérica total y libre (determinadas por
edad para todos los ensayos. (Ver tabla 3).
la mayoría de los métodos) En el último trimestre del
embarazo la T3 libre también se encuentra disminui-
da (15). Además, es típico observar concentraciones
más elevadas de T3 total y libre en niños eutiroideos. tración de TBG. Los valores de TBG aumentan al
Esto sugiere que el límite superior de T3 para pacien- doble o triple de los niveles previos al embarazo, y
tes jóvenes (menores de 20 años) debería establecer- alcanzan un plateau hacia las 20 semanas de gesta-
se como un gradiente: entre 6,7 pmol/L (4,4 pg/mL) ción (46, 47). Este aumento de TBG provoca un cam-
para los adultos y 8,3 pmol/L (5,4 pg/mL) para los ni- bio en los rangos de referencia de T4T y T3T, hacia
ños menores de 3 años de edad (45). las 16 semanas de gestación, de aproximadamente
1,5 veces con respecto a los niveles de no embara-
3. Embarazo zadas (48-50). Estos cambios se asocian con una dismi-
Durante el embarazo, la producción de estróge- nución en la TSH sérica durante el primer trimestre,
nos aumenta progresivamente, elevando la concen- de modo que es posible observar valores subnorma-

Tabla 3*. Rangos de referencia relativos para TSH y T4L durante la gestación e infancia.

TSH T4L
Edad Relación Rangos de TSH Relación Rangos de T4L pmol/L
Niño/Adulto mUI/L Niño/Adulto (ng/dL)

Feto a mitad 2,41 0,7-11 0,2 2-4 (0,15-0,34)


de la gestación
Suero del cordón 4,49 1,3-20 0,8 8-17 (0,64-1,4)
de neonatos con bajo
peso al nacer
Recién nacidos a término 4,28 1,3-19 1 10-22 (0,8-1,9)
3 días 3,66 1,1-17 2,3 22-49 (1,8-4,1)
10 semanas 2,13 0,6-10 1 9-21 (0,8-1,7)
14 meses 1,4 0,4-7,0 0,8 8-17 (0,6-1,4)
5 años 1,2 0,4-6,0 0,9 9-20 (0,8-1,7)
14 años 0,97 0,4-5,0 0,8 8-17 (0,6-1,4)
Adultos 1 0,4-4,0 1 9-22 (0,8-1,8)

* Datos tomados de la referencia (42). T4L determinada por diálisis de equilibrio directa.
12 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

les de TSH en aproximadamente el 20% de los em-


barazos normales (46, 47, 51). Esta disminución en la RECOMENDACIÓN Nº 4. ENSAYOS PARA EVALUAR

TSH se atribuye a la actividad estimulante de la tiroi- LA FUNCIÓN TIROIDEA EN PACIENTES EMBARAZADAS

des de la gonadotropina coriónica humana (hCG), Es cada vez mayor la evidencia que sugiere que
que tiene homología estructural con la TSH (52, 53). El el hipotiroidismo durante los primeros meses de
pico de hCG y el nadir de TSH se producen simultá- embarazo tiene un efecto perjudicial sobre el fe-
neamente alrededor de las 10 a 12 semanas de gesta- to (pérdida fetal) y sobre el infante (menor coe-
ción. En aproximadamente el 10% de esos casos (es ficiente intelectual).
decir, en el 2% de todos los embarazos), el aumento
• Es importante realizar un screening para disfunción
de T4 libre alcanza valores supranormales, que cuan-
tiroidea determinando TSH y TPOAb antes
do se prolongan, pueden provocar un síndrome de- del embarazo o durante el primer trimestre, tanto para
nominado “tirotoxicosis gestacional transitoria” (TGT) detectar insuficiencia tiroidea leve
caracterizado por síntomas y signos más o menos (TSH > 2,5 mUI/L) como para evaluar el riesgo de ti-
pronunciados de tirotoxicosis (52-54). Esta condición se roiditis post parto (TPOAb elevados).
asocia con frecuencia con hiperemesis en el primer • Debería considerarse un tratamiento con levotiroxi-
trimestre del embarazo (55, 56). na (L-T4) si el nivel de TSH sérica es >2,5mUI/L en el
La disminución de TSH durante el primer trimes- primer trimestre de embarazo.
tre del embarazo se asocia con un modesto aumen- • Una concentración elevada de TPOAb durante el pri-
to de T4L (46, 47, 51). A partir de entonces, en el segun- mer trimestre es un factor de riesgo para tiroiditis post
parto.
do y tercer trimestres se ha consensuado una dismi-
• La TSH debería utilizarse para evaluar el estado tiroi-
nución de T4L y T3L de aproximadamente entre el
deo durante cada trimestre cuando las embarazadas re-
20 y el 40 por ciento por debajo de la media nor- ciben tratamiento con L-T4, con determinaciones más
mal, disminución que se intensifica cuando el esta- frecuentes si se cambia la dosis.
do nutricional de la madre con respecto al yodo es- • Deberían utilizarse intervalos de referencia específi-
tá restringido o es deficiente (46, 47, 51). En algunos ca- cos para cada trimestre en los ensayos para embaraza-
sos, la T4L puede caer por debajo del límite inferior das.
de referencia para pacientes no embarazadas (51, 57- • Las determinaciones de T4T y T3T pueden resultar
60). La frecuencia de concentraciones de T4L subnor- útiles durante el embarazo si no se dispone de deter-
males es dependiente del método utilizado para la minaciones confiables de T4L, siempre que los rangos
determinación (57, 59, 60). Las pacientes que reciben te- de referencia se aumenten 1,5 veces en relación con
los rangos de no embarazadas.
rapia de reemplazo con L-T4 y quedan embarazadas
• Los rangos de referencia de T3L y T4L durante el em-
pueden necesitar un aumento en la dosis para man-
barazo son dependientes del método empleado y de-
tener los niveles de TSH normales (61, 62). El estado ti- berían establecerse para cada uno de ellos.
roideo de dichas pacientes se debería controlar con • Deberían evitarse las determinaciones de tiroglobu-
TSH + T4L en cada trimestre. La dosis de L-T4 se de- lina sérica (Tg) en los pacientes con CDT durante el
bería ajustar para mantener normales las concentra- embarazo. La Tg sérica se eleva durante el embarazo
ciones de TSH y de T4L Las concentraciones séricas normal y vuelve a los niveles basales después del par-
de Tg, en general aumentan durante el embarazo to. Este aumento también se observa en las pacientes
normal (46). Las pacientes con carcinoma diferencia- con CDT, con tiroides normal remanente o con tejido
do de tiroides (CDT) con tejido tiroideo remanente, tumoral presente, y esto no debe ser necesariamente
muestran un incremento característico de dos veces una causa de alarma.
en la Tg sérica, que vuelve al nivel basal hacia las 6
a 8 semanas después del parto.
La disminución en la disponibilidad de hormo- informan aumento de pérdida fetal y déficit del coe-
nas tiroideas maternas puede ser un factor crítico ficiente intelectual en los infantes nacidos de ma-
que dañe el desarrollo neurológico del feto en las dres con hipotiroidismo no diagnosticado, T4L baja
etapas iniciales de gestación, antes de que la glán- o TPOAb positivos (63-65). Sin embargo, un estudio
dula tiroides fetal se active. Varios estudios recientes sugiere que el diagnóstico y tratamiento precoces
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 13

del hipotiroidismo leve pueden evitar los efectos a RECOMENDACIÓN Nº 5. ENSAYOS PARA EVALUAR LA FUNCIÓN
largo plazo de los niveles bajos de hormonas tiroi- TIROIDEA EN PACIENTES TRATADOS CON AMIODARONA
deas sobre los sistemas sicomotor y auditivo de los
neonatos (66). El tratamiento con amiodarona puede inducir el
desarrollo de hipo-o hipertiroidismo entre el 14
y el 18% de los pacientes con glándula tiroides
B. Variables patológicas aparentemente normal o con anormalidades
preexistentes.
1. Medicamentos
• Antes de instaurar el tratamiento. Examen físico
Los medicamentos pueden provocar efectos tan- completo de tiroides y determinaciones de TSH y
to in vivo como in vitro en los ensayos tiroideos. Es- TPOAb basales. Las determinaciones de T4L y de T3L
to puede generar una interpretación errónea de los sólo son necesarias si la TSH es anormal. Los TPOAb
resultados de laboratorio, diagnósticos inadecuados, positivos son un factor de riesgo para el desarrollo de
pruebas adicionales innecesarias y aumento en los disfunción tiroidea durante el tratamiento.
costos de salud (67, 68). • Primeros 6 meses. Se pueden observar pruebas de
laboratorio anormales en los primeros seis meses de
(a) Efectos in vivo iniciada la terapia. La TSH puede ser discordante con
En general, los medicamentos afectan más las las hormonas tiroideas (TSH elevada/T4 elevada/T3
concentraciones de hormonas tiroideas que las de baja), y generalmente se normaliza durante el curso de
un tratamiento a largo plazo si los pacientes permane-
TSH (Tabla 1). Por ejemplo, el aumento de TBG in-
cen eutiroideos.
ducido por estrógenos incrementa los niveles de • Seguimiento a largo plazo. Controlar el estado ti-
T4T pero no afecta la concentración de TSH, porque roideo cada 6 meses con TSH. La TSH es el indicador
la secreción hipofisaria de TSH es controlada por la más confiable del estado tiroideo durante el tratamien-
T4L independientemente de los efectos de las pro- to.
teínas transportadoras. Los glucocorticoides en dosis • Hipotiroidismo. Una tiroiditis de Hashimoto pree-
elevadas pueden disminuir el nivel de T3 sérica e in- xistente y/ o un valor positivo de TPOAb es un factor
hibir la secreción de TSH (69, 70). También la dopami- de riesgo para el desarrollo de hipotiroidismo en cual-
na inhibe la secreción de TSH e incluso puede en- quier momento del tratamiento.
mascarar el aumento del nivel de TSH del hipotiroi- • Hipertiroidismo. Un valor bajo de TSH sugiere hi-
dismo primario en pacientes enfermos hospitaliza- pertiroidismo. La T3 (total y libre) generalmente per-
manece baja durante el tratamiento pero puede ser
dos (71). El propranolol, a veces utilizado para tratar
normal. Una T3 alta sugiere hipertiroidismo.
las manifestaciones de tirotoxicosis tiene un efecto Durante el tratamiento, es posible que se desarrollen
inhibitorio de la conversión de T4 a T3, y adminis- dos tipos de hipertiroidismo inducido por amiodarona,
trado en dosis altas a individuos sin enfermedad ti- si bien es frecuente observar formas mixtas (en el 20%
roidea, puede provocar una elevación de TSH como de los casos). La distinción entre los dos tipos, con fre-
resultado de esta conversión alterada (72). cuencia es difícil. Un flujo sanguíneo reducido en el
El yodo, contenido en las soluciones desinfec- examen por Doppler Color y la elevación de interleu-
tantes de la piel, en los medios de contraste radio- quina-6 sugieren el Tipo II. Si la etiología es incierta di-
pacos usados en las coronariografías y en las tomo- rigir el tratamiento a los dos tipos, I y II.
grafías computadas, puede provocar hiper e hipoti- •• Tipo I = Inducido por yodo. El tratamiento reco-
roidismo en individuos predispuestos (73). Además, mendado es la administración simultánea de tionami-
das y perclorato de potasio (si está disponible). Algu-
la amiodarona (medicamento antiarrítmico que con-
nos recomiendan ácido iopanoico antes de la tiroidec-
tiene yodo) utilizado para el tratamiento de las car- tomía. La mayoría de los grupos recomienda la inte-
diopatías tiene efectos complejos sobre la función ti- rrupción de la amiodarona. El tipo I se observa con
roidea y puede producir tanto hipo como hipertiroi- mayor frecuencia en zonas de baja ingesta de yodo.
dismo en individuos predispuestos, con TPOAb po- Sin embargo, en áreas donde el aporte de yodo es su-
sitivos (74-78). Los pacientes tratados con L-T4 que to- ficiente, las captaciones de yodo radiactivo pueden ser
man amiodarona pueden tener niveles de TSH anor- bajas excluyendo al radioyodo como opción terapéutica.
14 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

de la hormona tiroidea a las proteínas transportado-


En regiones con deficiencia de yodo, las captaciones
ras en la muestra, y provocar un aumento agudo de
pueden ser normales o elevadas.
- Tipo 1a: Bocio nodular. Más frecuente en zonas geo-
T4L que resulta en una disminución de T4T por un
gráficas con deficiencia de yodo, por ejemplo en Euro- mecanismo de retroalimentación (disminución de
pa. TSH) y de una mayor eliminación de T4 [ver Sec-
- Tipo Ib: Enfermedad de Graves. Más frecuente en zo- ción-3 B3 (c)vi].
nas geográficas suficientes en yodo, por ejemplo en
EE.UU. (b) Efectos in vitro
•• Tipo II = tiroiditis destructiva inducida por amio- La administración de Heparina por vía intraveno-
darona, enfermedad auto limitada. Tratamiento reco- sa, puede liberar ácidos grasos libres (FFA), por la
mendado: glucocorticoides y/o betabloqueantes si el estimulación in-vitro de la lipoproteína lipasa, que
estado cardíaco lo permite. Cuando el hipertiroidismo inhiben la unión de la T4 a las proteínas séricas, y
es severo, se puede considerar la cirugía con pre-trata-
elevan artificialmente la T4L [Sección-3 B3(c)vii] (84).
miento con ácido iopanoico. La captación de yodo ra-
diactivo es típicamente baja o inhibida. El Tipo II se
En ciertas condiciones patológicas como la insufi-
observa con mayor frecuencia en áreas suficientes en ciencia renal, elementos séricos anormales como el
yodo. ácido indol acético, se pueden acumular e interferir
con la unión de las hormonas tiroideas (85). Los mé-
todos de ensayos tiroideos que utilizan señales fluo-
rescentes pueden ser sensibles a la presencia en la
malmente elevados en relación con su concentra- muestra de agentes fluorósforos terapéuticos o de
ción de T4L (75). Dos tipos de hipertiroidismo indu- diagnóstico (86).
cido por amiodarona (HIA), pueden desarrollarse
durante el tratamiento, aunque se observan formas
mixtas en el 20% de los casos. A veces A veces es 2. Enfermedades no tiroideas (NTI).
difícil distinguir entre los dos tipos. Un flujo sanguí-
neo reducido en el examen por Doppler Color y el Los pacientes en estado grave a menudo presen-
aumento de interleuquina-6 sugieren el Tipo II (79, 80). tan anormalidades en sus pruebas de laboratorio ti-
Si la etiología es incierta, se debe orientar el trata- roideas pero normalmente no tienen disfunción ti-
miento hacia los tipos I y II. roidea (87, 88). Estas anormalidades se observan en las
• Tipo 1: El HIA parece inducido en las glándu- enfermedades críticas tanto agudas como crónicas, y
las tiroides anormales por el exceso de yodo que se consideran el resultado de una inhibición central
contiene el medicamento. Se ha utilizado una com- “desadaptada” de las hormonas liberadoras del hi-
binación de tionamidas y perclorato de potasio pa- potálamo, incluido el TRH (89, 90). Para describir este
ra tratar estos casos. subgrupo de pacientes a menudo se utilizan los tér-
• Tipo II: El HIA parece resultar de una tiroiditis minos “enfermedad no tiroidea”, (nonthyroidal ill-
destructiva que generalmente se trata con predniso- ness o NTI) así como también “enfermo eutiroideo”
na y tionamidas. Algunos estudios informan niveles y “síndrome de T3 baja” (91). Como se muestra en la
elevados de IL-6 en el Tipo II (79). La T3 sérica (libre Figura 3, el espectro de cambios en los ensayos ti-
y total) es típicamente baja durante el tratamiento. roideos se relaciona tanto con la severidad como
Un valor de T3 paradójicamente normal o elevado con la etapa de la enfermedad, así como con facto-
es útil para reforzar el diagnóstico de hipertiroidis- res técnicos que afectan los métodos y en ciertos ca-
mo inducido por amiodarona. sos, con los medicamentos administrados a estos pa-
El tratamiento con Litio puede causar hipo o hi- cientes.
pertiroidismo en por lo menos el 10% de los pacien- Se ha demostrado que las determinaciones de
tes, especialmente en aquellos con TPOAb detecta- T4L y de TSH tienen una especificidad reducida pa-
bles (81-83). Algunos agentes terapéuticos y diagnósti- ra detectar disfunción tiroidea en los pacientes que
cos (por ejemplo, Fenitoína, Carbamazepina o Furo- tienen NTI severas, en comparación con los pacien-
semida) pueden inhibir competitivamente la unión tes ambulatorios (20, 92, 93). Generalmente se reco-
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 15

Fig. 3. Cambios en los resultados de los ensayos tiroideos durante el curso de una NTI.

mienda que la evaluación de la función tiroidea en neralmente en las sepsis). Este tipo de pacientes ha-
pacientes hospitalizados se limite a los que tienen bitualmente está en la UTI (unidad de terapia inten-
síntomas clínicos o antecedentes de disfunción tiroi- siva). Si una T4T baja no se asocia con una TSH al-
dea (93). Las razones que explican la especificidad re- ta (>20mUI/L) y el paciente no está gravemente en-
ducida de los ensayos tiroideos en estas circunstan- fermo, se debería considerar un diagnóstico de hi-
cias son multifactoriales. Muchos de estos pacientes potiroidismo central secundario a una deficiencia hi-
reciben medicamentos tales como dopaminérgicos, pofisaria o hipotalámica.
glucocorticoides, furosemida o heparina que inhi- Las estimaciones de los valores de T4L y de T3L
ben directamente la secreción hipofisaria de TSH o dependen del método utilizado, y pueden estar fal-
indirectamente la unión de T4 a proteínas, como se samente elevados o disminuidos en función de los
describió anteriormente. Además, se ha demostrado principios metodológicos en los que se basa el en-
que en ciertas condiciones patológicas, las afinida- sayo. Por ejemplo, los ensayos de T4L no son con-
des de las proteínas transportadoras están reduci- fiables si el método es sensible a la liberación de
das, posiblemente por la presencia de inhibidores ácidos grasos libres generados in vitro después de la
endógenos circulantes (60, 85, 94-96). inyección de heparina intravenosa [ver Sección-3
La mayoría de los pacientes hospitalizados tie- B3(c)vii], o a los artefactos de dilución (84, 94, 97, 98, 100,
nen T3T y T3L bajas, determinadas por la mayoría 101). Los métodos de T4L como la diálisis de equili-

de los métodos (14, 97). A medida que aumenta la se- brio y la ultrafiltración que separan físicamente la
veridad de la enfermedad, generalmente cae tam- hormona libre de la unida a proteínas, habitualmen-
bién la T4T debido a una ruptura de las afinidades te generan valores normales o elevados en pacien-
de las proteínas transportadoras, causada probable- tes en estado crítico [véase Sección-2 B2 y Sección-
mente por los inhibidores de la unión de T4 presen- 3 B3(c)viii] (94, 102). Los valores elevados, a menudo
tes en la circulación (91, 98, 99). Cabe observar que los representan los efectos de la heparina administrada
valores subnormales de T4T sólo se manifiestan por vía intravenosa (101).
cuando la gravedad de la enfermedad es crítica (ge- Las concentraciones de TSH sérica permanecen
16 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

• Un aumento de T3 total o libre es un indicador útil


RECOMENDACIÓN Nº 6. ENSAYOS PARA EVALUAR LA de hipertiroidismo en un paciente hospitalizado, pero
FUNCIÓN TIROIDEA EN PACIENTES HOSPITALIZADOS una T3 normal o baja no lo descarta.
CON ENFERMEDAD NO TIROIDEA (NTI) • La determinación de T3 reversa (r-T3) rara vez es útil
en el ambiente hospitalario, porque valores paradójica-
• Las enfermedades no tiroideas agudas o crónicas mente normales o bajos pueden resultar de un daño en
tienen efectos complejos sobre los resultados de los la función renal o de las concentraciones bajas de pro-
ensayos de la función tiroidea. Siempre que sea posi- teínas transportadoras. Además, el ensayo no está direc-
ble, las pruebas diagnósticas deberían postergarse has- tamente disponible en la mayoría de los laboratorios.
ta la resolución de la enfermedad, excepto cuando los
antecedentes del paciente o su cuadro clínico sugieran
la presencia de disfunción tiroidea.
• Los médicos deberían reconocer que ciertos ensa- dentro de los límites normales en la mayoría de los
yos tiroideos son fundamentalmente no interpretables pacientes con NTI, siempre que no se les adminis-
en pacientes gravemente enfermos o a quienes se es- tre dopamina ni glucocorticoides (87, 93). Sin embargo,
tán administrando numerosos medicamentos. en las NTI agudas, puede haber una disminución le-
• La TSH en ausencia de la administración de dopa-
ve y transitoria de TSH en el rango de 0,02-0,3
mina o de glucocorticoides, es la determinación más
confiable en pacientes con NTI.
mIU/L, seguido de un rebote a valores ligeramente
• Las estimaciones de T4 libre o las determinaciones elevados durante la fase de recuperación (103). En el
de T4 total en presencia de una NTI deberían interpre- ambiente hospitalario, es fundamental usar un ensa-
tarse con cuidado, y en conjunción con la TSH sérica. yo de TSH con sensibilidad funcional óptima: <0,02
Las determinaciones combinadas de + TSH constituyen mIU/L. Sin esta sensibilidad, es imposible diferen-
el modo más confiable de distinguir una verdadera dis- ciar de manera confiable los pacientes hipertiroi-
función tiroidea primaria (anormalidades concordantes deos enfermos con valores realmente bajos de TSH
T4/TSH) de las anormalidades transitorias resultantes (< 0,02 mUI/L), de los pacientes que simplemente
de las NTI per se (anormalidades discordantes tienen una supresión leve y transitoria originada por
T4/TSH). la NTI (0,02-0,3 mUI/L). Las elevaciones menores de
• Un ensayo de T4L anormal en presencia de una en-
TSH son menos confiables para el diagnóstico de hi-
fermedad somática severa no es confiable, ya que los
métodos de T4L utilizados por los laboratorios clínicos
potiroidismo en el medio hospitalario. Los pacientes
carecen de especificidad diagnóstica para evaluar este hipotiroideos enfermos presentan típicamente una
tipo de pacientes. combinación característica de T4 baja y TSH eleva-
• Un resultado de T4L anormal en un paciente hospi- da (>20 mUI/L) (92).
talizado se debería confirmar con una T4T “refleja”. Es Es claro que el diagnóstico y tratamiento de la
posible que exista patología tiroidea si los valores de disfunción tiroidea en presencia de una NTI severa
T4T y T4L son anormales (en el mismo sentido). Si hay no es simple y que requiere la intervención de un
discordancia entre los valores de T4T y T4L, es proba- especialista endocrinólogo. El tratamiento empírico
ble que la anormalidad en la T4L no se deba a una dis- del estado de T4T baja en las NTI no ha producido
función tiroidea sino que sea consecuencia de la enfer- mejoras (en la supervivencia por ejemplo), y aún se
medad, de los medicamentos administrados o de un
lo considera experimental (104-106). Para evaluar a es-
artefacto del método.
• Las anormalidades de T4T deberían ser interpreta-
tos pacientes, los ensayos de T4T pueden resultar
das en relación con la severidad de la enfermedad, ya más útiles que los inmunoensayos de T4L actual-
que una T4T baja en presencia de NTI generalmente mente disponibles, los cuales presentan una impor-
sólo se ve en pacientes severamente enfermos con una tante variabilidad en la eficiencia diagnóstica, siem-
alta tasa de mortalidad. Una T4T baja en un paciente pre que los valores de T4T sean interpretados en re-
que no está en la unidad de cuidados intensivos indi- lación con la gravedad de la enfermedad. Por ejem-
ca sospecha de hipotiroidismo. plo, un valor bajo de T4T en las NTI se observa fun-
damentalmente en los pacientes graves, en general
en la unidad de cuidados intensivos (71). Valores ba-
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 17

jos de T4T en pacientes hospitalizados que no se 3. Anticuerpos heterófilos (HAMA)


encuentran gravemente enfermos deberían instar a
la búsqueda de un hipotiroidismo. Aunque la espe- El suero de los pacientes puede contener anti-
cificidad diagnóstica de la TSH se reduce en presen- cuerpos heterófilos que pueden ser de dos clases
cia de enfermedades somáticas, un valor detectable (111). Algunos son anticuerpos débilmente reactivos,

en el rango de 0,02-20 mUI/L, obtenido con un ensa- multiespecíficos y polirreactivos que frecuentemen-
yo con sensibilidad funcional <0,02 mUI/L, normal- te corresponden a un factor reumatoideo (de tipo
mente excluye una disfunción tiroidea significativa, IgM), y, otros, pueden ser muy reactivos, inducidos
siempre que la función hipotálamo-hipofisaria esté por infecciones o exposición a tratamientos con an-
intacta y que el paciente no esté recibiendo medica- ticuerpos monoclonales (112, 114). Este segundo grupo
mentos que afecten la secreción hipofisaria de TSH. recibe a veces el nombre de anticuerpos humanos
Sin embargo, es mejor evitar en lo posible las prue- anti-ratón (HAMA). Alternativamente estos anticuer-
bas tiroideas de rutina en pacientes hospitalizados. pos pueden corresponder a inmunoglobulinas hu-
manas específicas anti-animal (HAAA) producidas
contra antígenos específicos bien definidos luego de
C. Variables de las muestras una exposición a un agente terapéutico que conten-
ga antígenos de origen animal (por ejemplo anti-
1. Estabilidad cuerpos murinos) o por una inmunización ocasional
Pocos estudios han examinado los efectos de la ocurrida por exposición en el lugar de trabajo (por
conservación de las muestras de sangre sobre las ejemplo, trabajadores que manipulan animales) (115).
concentraciones de las hormonas tiroideas séricas Tanto los HAMA como los HAAA afectan a los en-
totales y libres, de TSH y de Tg (107). En general, es- sayos inmunométricos (IMA) más que a los inmu-
tos estudios sugieren que las hormonas tiroideas noensayos competitivos, al formar un puente entre
son relativamente estables si la muestra es conserva- los anticuerpos de captura y de señal, y generar una
da a temperatura ambiente, refrigerada o congelada. falsa señal que provoca un valor inapropiadamente
Ciertos estudios han mostrado que la T4 sérica es alto del analito (116, 117). El resultado erróneo puede
estable durante meses a +4ºC o durante años a no ser necesariamente anormal, sino que puede ser
–10ºC (108, 109). La TSH y T4T de las gotas secas de también inapropiadamente normal. En la actualidad,
sangre total utilizadas en el screening del hipotiroi- los fabricantes de reactivos están empleando diver-
dismo neonatal también son estables durante meses sos procedimientos para abordar el problema de los
si se las conserva con un desecante. Se ha informa- HAMA y neutralizar sus efectos sobre los métodos,
do que la TSH sérica es ligeramente más estable que con resultados variables, que incluyen por ejemplo
la T4 (110). No obstante, es importante destacar, co- el uso de combinaciones quiméricas de anticuerpos
mo se discutió anteriormente, que las muestras no y de agentes bloqueantes (118).
congeladas de pacientes que reciben heparina pue-
den generar in vitro ácidos grasos libres, que pue- 4. Recolección y procesamiento de la muestra
den provocar una falsa elevación de T4L cuando es
determinada por ciertas técnicas (84). La mayoría de los fabricantes recomienda utilizar
suero preferentemente a plasma obtenido con hepari-
2. Constituyentes del suero na o EDTA. Para resultados óptimos y un máximo ren-
dimiento del suero, se recomienda que las muestras
En general, la hemólisis, lipemia e hiperbilirrubi- de sangre total se dejen coagular por lo menos duran-
nemia no provocan una interferencia significativa en te 30 minutos antes de centrifugarlas y separarlas. El
los inmunoensayos. Sin embargo, los ácidos grasos suero se puede conservar entre 4 y 8 ºC hasta una se-
libres pueden desplazar a la T4 de las proteínas de mana. Si el ensayo se realiza después de una semana,
transporte séricas, lo cual explicaría parcialmente se recomienda conservar el suero a -20ºC. La obten-
los valores de T4T bajos que se observan con fre- ción del suero en tubos con barrera de gel puede
cuencia en las NTI (100). afectar los resultados de algunos ensayos tiroideos.
18 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

RECOMENDACIÓN Nº 7. EVALUACIÓN DE RESULTADOS


sérica, porque los individuos de una población pre-
DISCORDANTES EN LOS ENSAYOS TIROIDEOS
sentan diferencias en cuanto a la masa tiroidea, el
nivel de TSH, y pueden tener patologías asociadas
Los resultados discordantes en los ensayos tiroi- con lesión tiroidea (por ejemplo tiroiditis), condicio-
deos pueden deberse a interferencia técnica o a nes que influyen en las concentraciones de Tg (122).
condiciones clínicas raras Los valores séricos de TSH también muestran gran
• Interferencias técnicas: A veces una interferencia variabilidad, tanto en el mismo individuo como en-
técnica puede ser detectada realizando la determina- tre un individuo y otro (22). Esto refleja básicamente
ción por otro método, ya que la magnitud de la mayo- la vida media de la TSH (~60 minutos) junto con sus
ría de las interferencias depende del método utilizado. variaciones circadianas y diurnas. Los niveles alcan-
Alternativamente la no linealidad en las diluciones de zan un pico durante la noche y un nadir aproxima-
la muestra pueda indicar una interferencia técnica en damente entre las 10.00 y las 16.00 horas (123, 124). La
las determinaciones de T4T, T3T o TSH. Nota: Una di- amplitud de la variabilidad diurna de TSH a lo largo
lución 1 en 100 de un suero “normal” teóricamente de un período de 24 horas es aproximadamente del
produce una reducción insignificante (<2%) en la con-
doble (123, 124). Sin embargo, como este cambio cae den-
centración de T4L. No se recomienda hacer diluciones
de las muestras en los ensayos de T4L y T3L utilizados
tro del rango de referencia normal de TSH para el
de rutina por los laboratorios clínicos, porque esos en- conjunto de la población (~0,4 a 4,0 mIU/L), no com-
sayos están influidos por la concentración de las pro- promete la utilidad de un valor individual de TSH pa-
teínas de transporte y no dan respuestas lineales a las ra diagnosticar disfunción tiroidea. Además, la TSH se
diluciones. determina habitualmente durante el día en los pacien-
• Condiciones clínicas raras: Es posible observar tes ambulatorios cuando su variabilidad es menor.
valores anormales o discordantes en los ensayos tiroi- El comportamiento de un ensayo de laboratorio
deos en ciertas patologías inusuales pero clínicamente se puede evaluar biológica y analíticamente. La Ta-
significativas como el hipotiroidismo central, los tumo- bla 4 muestra la variación biológica de diversos ana-
res hipofisarios secretantes de TSH, la resistencia a las litos tiroideos en suero, expresada en términos de
hormonas tiroideas, la presencia de anticuerpos hete-
variabilidad inter-individual e intra-individual, a lo
rófilos (HAMA) o de autoanticuerpos anti-hormonas ti-
roideas (T4 y/o T3).
largo de diferentes períodos de tiempo (22, 33, 119, 120,
125). El comportamiento analítico se evalúa típica-

mente en el laboratorio mediante los siguientes pa-


rámetros:
5. Parámetros de rendimiento • Precisión intra- e inter-ensayo evaluada a dife-
de los ensayos tiroideos rentes concentraciones del analito.
• Límite de detección (sensibilidad analítica) (126, 127).
(a) Variación biológica • Sensibilidad funcional (definida como la míni-
Los niveles séricos de las hormonas tiroideas co- ma concentración del analito que puede determinar-
mo de su proteína precursora, la tiroglobulina (Tg) se con un dado CV% interensayo, el cual está rela-
son bastante estables dentro de un mismo individuo cionado con la variabilidad metodológica y con la
en el período de 1 a 4 años de edad (Tabla 4) (22, 119). variabilidad biológica específica para ese analito.
Todos los analitos tiroideos muestran una mayor va- • Linealidad de las mediciones a lo largo del ran-
riabilidad inter-individual que intra-individual (Tabla go reportable de trabajo.
4) (33, 119, 120). La estabilidad de las concentraciones in- • Recuperación del analito agregado a la matriz
tra-individuales de T4 sérica refleja la vida media del estándar.
larga (7 días) de la tiroxina y el nivel individual de • Intervalo normal de referencia (media +/-2des-
T4L genéticamente determinado (21). La estabilidad víos estándar de los valores) para una cohorte de in-
intra-individual de las concentraciones de T3 refleja dividuos sanos.
la autorregulación del grado de conversión de T4 a • Correlación con un método de referencia.
T3 (121). La variabilidad inter-individual es particular- Aunque los parámetros analíticos de comporta-
mente importante para las concentraciones de Tg miento son el fundamento de los controles de cali-
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 19

Tabla 4. Variabilidad intra e inter-individual de los ensayos tiroideos.

Analito sérico Lapso de tiempo %CV* %CV**


T4T /T4L 1 semana 3,5 10,8
6 semanas 5,3 13,0
1 año 9,2 17,1

T3T /T3L 1 semana 8,7 18,0


6 semanas 5,6 14,8
1 año 12,0 16,8

Tirotrofina (TSH) 1 semana 19,3 19,7


6 semanas 20,6 53,3
1 año 22,4 37,8

Tiroglobulina (Tg) 1 semana 4,4 12,6


6 semanas 8,7 66,6
4 meses 14,0 35,0

*intra-individual **inter-individual

Datos tomados de las referencias (22, 33, 119, 120, 125).

Tabla 5. Desvío y Precisión ideales requeridos para los ensayos tiroideos.

Ensayo T4T T4L T3T T3L TSH Tg


nmol/L(µg/dL) pmol/L(ng/dL) nmol/L(ng/dL) pmol/L(ng/dL) mUI/L µg/L(ng/mL)
Rango Normal 58-160/4,5-12,6 9-23/0,7-1,8 1,2-2,7/80-180 3,5-7,7/0,02-0,05 0,4-4,0 3,0-40,0

%CV Intra individual 6,0 9,5 5,6 7,9 19,7 8,7


%CV Inter individual 12,1 12,1 14,8 22,5 27,2 66,6
W 3,5 3,8 4,0 6,0 14,3 16,8
X 1,3 2,4 1,4 2,0 5,2 2,2
Y 7,0 7,7 7,9 11,9 28,6 33,6
Z 2,7 4,8 2,8 4,0 10,3 4,4

W= Porcentaje ideal sugerido para el desvío máximo


en el ensayo usado con fines diagnósticos. en función de las necesidades clínicas (33). Se ha pro-
X= Porcentaje ideal sugerido para el desvío máximo
puesto que el error analítico total debería ser ideal-
en el ensayo usado para el seguimiento de un paciente.
Y= Porcentaje ideal sugerido para la máxima imprecisión mente menor que la mitad del coeficiente de varia-
en el ensayo usado para diagnóstico. ción biológica (% CV) intra-individual (33, 125, 128-130).
Z= Porcentaje ideal sugerido para la máxima imprecisión Para fines diagnósticos, los resultados de los en-
en el ensayo usado para seguimiento de un paciente.
sayos tiroideos se informan junto con un rango de
referencia “normal” que refleja la variabilidad inter-
dad de la mayoría de los laboratorios y de los pro- individual. Este rango provee un punto de referen-
gramas de aseguramiento de calidad, es ampliamen- cia para detectar casos anormales. No obstante, los
te aceptado que los comportamientos analíticos rangos de referencia no se pueden utilizar para de-
ideales deberían establecerse sobre la base de prin- terminar si las diferencias existentes entre los resul-
cipios biológicos (variación intra e inter-individuos) y tados de dos ensayos consecutivos realizados duran-
20 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

Los valores que se muestran se calcularon a partir


RECOMENDACIÓN Nº 8. RECOMENDACIONES de estudios de las estimaciones de precisión intra- e
PARA LA INTERPRETACIÓN DE LOS RESULTADOS inter-individuales y se basan en conceptos bien es-
DE ENSAYOS TIROIDEOS tablecidos (22, 33, 119, 120, 130, 133, 134).
• Para los ensayos tiroideos con fines diagnósticos La Tabla 5 y la Recomendación Nº 8 muestran la
(búsqueda de casos anormales), los resultados típica- magnitud del cambio en dos resultados consecuti-
mente se informan junto con un intervalo de referen- vos (que estén aproximadamente en la concentra-
cia “normal” que refleja la variabilidad entre individu- ción media del rango normal del analito) que es clí-
os. nicamente significativa para cada ensayo (22, 120). Es-
• El intervalo de referencia “normal” no indica la mag- tos patrones de referencia deberían ayudar al médi-
nitud de la diferencia que debe existir entre los resul- co a juzgar la importancia clínica de los cambios ob-
tados de dos ensayos en un paciente individual para servados durante el seguimiento seriado en el trata-
considerar en él un cambio clínicamente significativo.
miento de pacientes con problemas tiroideos.
La variabilidad analítica junto con las estimaciones de la
variabilidad biológica inter- e intra-individuales sug-
ieren que las magnitudes de las diferencias entre dos
resultados de ensayos tiroideos que sean clínicamente SECCIÓN 3. ENSAYOS TIROIDEOS
significativas, cuando se evalúa la respuesta de un PARA EL BIOQUÍMICO Y EL MÉDICO
paciente al tratamiento son:
T4T = 28 (2,2) nmol/L (µg/dL)
T4L = 6 (0,5) pmol/L (ng/dL) A. Métodos para determinar Tiroxina Total (T4T)
T3T = 0,55 (35) nmol/L (ng/dL) y Triyodotironina Total (T3T)
T3L = 1,5 (0,1) pmol/L (ng/dL)
TSH = 0,75 mUI/L
La tiroxina (T4) es la principal hormona secreta-
Tg = 1,5 µg/L (ng/mL)
da por la glándula tiroides. Toda la T4 circulante de-
riva de la secreción tiroidea. Por el contrario, sólo
aproximadamente el 20% de la triyodotironina (T3)
te el seguimiento del tratamiento del paciente, cons- circulante es de origen tiroideo. La mayor parte de
tituyen un cambio clínicamente significativo, o sim- la T3 circulante se produce por acción enzimática en
plemente reflejan la variabilidad técnica (impreci- tejidos no tiroideos por la 5’ monodeyodinación de la
sión inter-ensayo) o biológica (variabilidad intra-in- T4 (121). En efecto, la T4 aparece como una pro-hor-
dividual) de la determinación (131). El intervalo “nor- mona de la T3, biológicamente más activa. La ma-
mal” de referencia generalmente carece de impor- yor parte de la T4 circulante (~99,98%) está ligada a
tancia durante el manejo clínico post-quirúrgico proteínas plasmáticas de transporte específicas: la
cuando se utilizan marcadores tumorales como la globulina transportadora detiroxina (TBG) (60-75%),
Tg (132). Claramente el desvío del método y la preci- la TTR/ TBPA (transtiretina/prealbúmina) (15-30%) y
sión requerida no deben ser tan estrictos cuando se la albúmina (~10%) (12,16). Aproximadamente el
utiliza el ensayo para diagnóstico como cuando se 99,7% de la T3 circulante está unida a las proteínas
lo utiliza en determinaciones seriadas para el segui- plasmáticas, específicamente a la TBG, con una afi-
miento de pacientes. Si bien el intervalo de referen- nidad diez veces menor que la observada para la T4
cia “normal” que aparece en el informe habitual de (12). Las hormonas tiroideas unidas a proteínas no in-

laboratorio ayuda al médico a establecer un primer gresan a las células y, por lo tanto, se las considera
diagnóstico, no ofrece información relevante para biológicamente inertes, y funcionan como reservo-
ayudarlo a evaluar el significado de los cambios re- rios para la hormona tiroidea circulante. Por el con-
sultantes del tratamiento. trario, las pequeñas fracciones de hormona libre pe-
La Tabla 5 muestra los desvíos y las precisiones netran fácilmente en las células mediante mecanis-
ideales para los principales ensayos tiroideos utiliza- mos específicos de transporte a través de la mem-
dos tanto para diagnóstico como para seguimiento. brana para ejercer sus efectos biológicos. En la hi-
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 21

pófisis, el mecanismo de retroalimentación negativo tópicos y que usan enzimas, moléculas fluorescen-
de las hormonas tiroideas sobre la secreción de TSH tes o quimioluminiscentes como señales (135). Los
está mediado principalmente por la T3 producida in métodos para hormonas totales requieren la inclu-
situ a partir de la T4 libre que entra en las células ti- sión de un inhibidor (agente desplazante o blo-
rotróficas. queante) como el ácido 8-anilino-1-naftaleno-sulfó-
Técnicamente, ha sido más fácil desarrollar mé- nico (ANS) o el salicilato para liberar la hormona de
todos para medir las concentraciones de hormonas las proteínas transportadoras (136). El desplazamiento
tiroideas totales (libres + unidas a proteínas), que por parte de estos agentes de la unión de la hormo-
estimar las pequeñas concentraciones de hormo- na a las proteínas transportadoras, junto con la gran
nas libres. Esto se debe a que las concentraciones dilución de la muestra utilizada en los ensayos mo-
de hormonas totales (T4T y T3T) se determinan a dernos, facilita la unión de la hormona al anticuer-
niveles nanomolares mientras que las concentra- po. La determinación de T3T en una concentración
ciones de hormonas libres (T4L y T3L) se miden en diez veces menor en sangre, comparada con la de
el rango de picomoles, y para ser válidas, esas me- T4T, representa desafíos técnicos de sensibilidad y
diciones deben estar libres de interferencia por las de precisión, a pesar del uso de mayores volúmenes
concentraciones mucho más altas de hormonas to- de muestra (137). Si bien una determinación de T3
tales. confiable en el rango alto es crítica para el diagnós-
tico de hipertiroidismo, también lo es una determi-
1. Métodos para la determinación de hormonas nación confiable en el rango normal para ajustar la
tiroideas totales dosis de los fármacos antitiroideos, y detectar hiper-
Los métodos para determinar T4T y T3T séricas tiroidismo en pacientes enfermos hospitalizados,
han evolucionado a través de diversas tecnologías que pueden tener un valor paradójicamente normal
durantes las últimas cuatro décadas. Los ensayos de de T3.
PBI, de la década del 50 que estimaban la concen- A pesar de la disponibilidad de preparaciones al-
tración de T4T como “yodo unido a proteínas” fue- tamente purificadas de L-tiroxina y L-triyodotironina
ron reemplazados en la década del 60, primero por cristalizadas (de la United States Pharmacopoeia
métodos competitivos utilizando proteínas ligantes, (16201 Twinbrook Parkway, Rockville, MD 20852)
y posteriormente en la década del 70 por métodos aún no se han establecido métodos de referencia
de radioinmunoensayo (RIA). Actualmente, las con- para T4T ni T3T (138,139). La naturaleza higroscópica
centraciones de T4T y T3T se miden por inmunoen- de las preparaciones cristalinas puede afectar la
sayos competitivos que son principalmente no iso- exactitud de la medición gravimétrica (140). En segun-
do lugar, los diluyentes utilizados para reconstituir
las preparaciones de L-T4 y L-T3 que se usarán co-
mo calibradores son matrices proteicas modificadas
RECOMENDACIÓN Nº 9. PARA LOS FABRICANTES QUE
o mezclas de sueros humanos a los que se les ha ex-
DESARROLLAN MÉTODOS DE T4T Y DE T3T
traído la hormona. En cualquier caso, la composi-
Las divergencias entre métodos deberían reducirse por: ción proteica de la matriz de los calibradores no es
idéntica a la del suero del paciente. Esto puede pro-
• El desarrollo de preparaciones de referencia de L-T4 vocar que el inhibidor de la unión a proteínas (por
y L-T3 y el establecimiento de métodos de referencia ejemplo el ANS) libere diferentes cantidades de hor-
internacionales. mona de las proteínas del calibrador que de la TBG
• Asegurar que los instrumentos de medición no sean en la muestra del paciente. Esto puede afectar la
sensibles a las diferencias entre el suero humano y la
exactitud diagnóstica del ensayo cuando las proteínas
matriz del calibrador.
transportadoras son anormales, como en las NTI.
• Asegurar que durante el proceso del ensayo, la can-
tidad de hormona tiroidea liberada de las proteínas
transportadoras séricas sea la misma que la liberada en 2. Exactitud diagnóstica de las determinaciones de
presencia del diluyente del calibrador. hormonas totales
La exactitud diagnóstica de las determinaciones
22 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

de hormonas tiroideas totales sería igual a la de las


hormonas libres si todos los pacientes tuvieran ni- RECOMENDACIÓN Nº 10. DETERMINACIONES
veles idénticos de proteínas transportadoras (TBG, SÉRICAS DE T4 TOTAL Y DE T3 TOTAL
TTR/ TBPA y albúmina) con afinidades similares Las concentraciones séricas anormales de T4T y T3T se
para las hormonas tiroideas. Lamentablemente, es encuentran más frecuentemente como resultado de
más común que se presenten alteraciones en las anormalidades en las proteínas transportadoras que
concentraciones de T4T y T3T debido a alteracio- debido a una disfunción tiroidea.
nes en las proteínas transportadoras, que debido a • Los ensayos de T4 libre (T4L) se prefieren a los de
una verdadera disfunción tiroidea. En la práctica T4T cuando la concentración de TBG es anormal. Sin
clínica resulta frecuente encontrar pacientes con al- embargo, los ensayos de T4L pueden carecer de exac-
teraciones en la TBG secundarias a embarazo o tra- titud diagnóstica cuando la afinidad de la TBG por las
tamiento con estrógenos, como así también altera- hormonas tiroideas está alterada o en presencia de
proteínas ligantes de T4 anormales.
ciones genéticas (141). Las concentraciones y/o las
• Los ensayos de hormonas totales (T4T y T3T) debe-
afinidades anormales de la TBG por las hormonas
rían estar rápidamente disponibles para tener la posi-
tiroideas pueden distorsionar la relación entre las bilidad de evaluar las causas de discordancia en los en-
concentraciones de hormona total y libre (142). Ade- sayos de hormonas libres.
más, algunos sueros de pacientes contienen otras
proteínas ligantes anormales, como los autoanti-
cuerpos anti-hormonas tiroideas, que afectan la
confiabilidad diagnóstica de las determinaciones B. Métodos para estimar la concentración
de hormonas totales (143-145). Estas alteraciones en de Tiroxina Libre (T4L) y de
las proteínas transportadoras comprometen el uso Triyodotironina Libre (T3L)
de las determinaciones de T4T y T3T como ensa-
yos únicos para evaluar la función tiroidea. En lu- La T4 circulante está unida más fuertemente a las
gar de esto la T4T y la T3T en suero se determinan proteínas séricas que la T3, en consecuencia, la frac-
como parte de un panel de dos determinaciones ción biodisponible de T4 libre (T4L) es menor que
que incluyen una evaluación de la concentración la de T3 libre (0,02% versus 0,2%, T4L versus T3L,
de la principal proteína transportadora TBG, me- respectivamente). Lamentablemente, las técnicas fí-
diante un inmunoensayo de TBG o una prueba de sicas que se utilizan para separar las pequeñísimas
“captación” [Sección-3 B2(b)]. Específicamente, la fracciones de hormona libre de las fracciones predo-
relación matemática entre la concentración de hor- minantes unidas a proteínas son complejas, engo-
mona total y el resultado de la prueba de “capta- rrosas, y relativamente costosas para el uso de ruti-
ción”, se usa como “índice” de hormona libre (146). na en el laboratorio clínico. Los métodos que em-
Los índices de hormonas libres (índice de T4L e ín- plean separación física entre la hormona libre y la
dice de T3L) utilizados durante tres décadas, fue- unida (es decir, diálisis de equilibrio, ultrafiltración
ron rápidamente reemplazados por inmunoensa- y filtración con gel) suelen estar disponibles sólo en
yos que permiten estimar la hormona libre en un los laboratorios de referencia. Los laboratorios clíni-
solo ensayo. cos de rutina comúnmente utilizan una variedad de
ensayos para hormonas libres que estiman la con-
3. Intervalos de referencia normales para T4T y centración de hormona libre en presencia de hor-
T3T séricas mona unida a proteínas. Estas estimaciones de hor-
Los valores de T4T presentan una cierta variabi- monas libres emplean la estrategia de realizar dos
lidad entre los distintos métodos. Los rangos de re- ensayos independientes para calcular el “índice” de
ferencia característicos se aproximan a 58-160 hormona libre [ver Sección-3 B2] o diversos méto-
nmol/L (4,5-12,6 µg/dL). De la misma manera los dos de ensayos con ligandos (14,145,147). En realidad, a
valores de T3T son dependientes del método em- pesar de lo que sostienen los fabricantes, práctica-
pleado con rangos de referencia aproximados a 1,2 mente la totalidad de los ensayos que estiman T4L
- 2,7 nmol/L (80 –180 ng/dL). y T3L dependen en cierto grado de las proteínas
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 23

transportadoras (148,149). Esta dependencia impacta ligandos están estandarizados con soluciones que
negativamente en la eficiencia diagnóstica de los contienen concentraciones de la hormona estableci-
métodos de hormonas libres, sujetos a diferentes in- das por gravimetría, o utilizan calibradores con va-
terferencias que pueden causar resultados inapro- lores asignados por un método de separación física
piadamente anormales o una interpretación errónea (por ejemplo, diálisis de equilibrio y/o ultrafiltra-
de los mismos. (Tabla 1). Estas interferencias inclu- ción). Los métodos de separación física generalmen-
yen sensibilidad a proteínas transportadoras anor- te son manuales, técnicamente complejos y bastan-
males, efectos in vivo o in vitro de diversos medica- te costosos para el uso clínico de rutina. Los índices
mentos [Sección-3 B3(c)vi], niveles elevados de áci- y los métodos de ligandos son los que se utilizan
dos grasos libres (FFA) e inhibidores endógenos o con más frecuencia en el laboratorio clínico, donde
exógenos de la unión de la hormona a las proteínas generalmente se realizan en autoanalizadores para
transportadoras, presentes en ciertas condiciones inmunoensayos (17).
patológicas (60). Lamentablemente, un exceso confuso de térmi-
nos se ha utilizado para distinguir los diferentes mé-
1. Nomenclatura de los métodos que estiman T4 todos para hormonas libres, y la literatura está llena
libre (T4L) y T3 libre (T3L) de inconsistencias en cuanto a la nomenclatura de
La nomenclatura de los ensayos de hormonas li- estos métodos. En la actualidad, no hay una distin-
bres es bastante confusa. Tampoco se ha logrado un ción metodológica clara entre términos como “T7”,
acuerdo acerca de la validez técnica de estas medi- “índice de tiroxina efectiva”, “de un paso”, “análo-
ciones ni de su utilidad clínica en condiciones aso- go”, “de dos pasos”, “retrotitulación”, “secuencial”,
ciadas con alteraciones en las proteínas transporta- “inmunoextracción” o “inmunosecuestro”, “ensayo
doras (145,147,148,150,151). Las determinaciones de hormo- con ligandos” porque los fabricantes han modifica-
nas libres en los laboratorios clínicos se realizan uti- do las técnicas originales o las han adaptado a la au-
lizando índices que requieren dos ensayos separa- tomatización (147). Después del lanzamiento de los
dos, ensayos de ligandos en una única determina- métodos originales con “análogos” de un paso en la
ción, o métodos de separación física que separan la década del 70, el término “análogo” se volvió con-
hormona libre de la unida a proteínas antes de su fuso (147). La primera generación de ensayos con
medida directa en la fracción libre. Los ensayos de análogos de hormonas dependía en alto grado de
las proteínas transportadoras y ha sido reemplazada
por una nueva generación de ensayos de “análogos”
con el anticuerpo marcado, que son más resistentes
RECOMENDACIÓN Nº 11. NOMENCLATURA PARA a la presencia de proteínas transportadoras anorma-
LOS ENSAYOS DE HORMONAS LIBRES les (147, 152). Desafortunadamente, los fabricantes rara
vez revelan todos los componentes de los ensayos
• Los métodos para hormonas libres utilizados por la o el número de pasos involucrados en un procedi-
mayoría de los laboratorios clínicos (índices e inmu-
miento automatizado, por lo que no es posible uti-
noensayos) no emplean separación física entre la hor-
mona unida y la libre ni miden directamente las con-
lizar la nomenclatura del método (de dos pasos,
centraciones de hormona libre. Estos métodos se ca- análogo, etc.) para predecir su eficiencia diagnósti-
racterizan por un cierto grado de dependencia de las ca al evaluar pacientes con anormalidades en las
proteínas transportadoras y sería más adecuado deno- proteínas transportadoras (152).
minarlos ensayos de “Estimación de las hormonas
libres”, abreviándolos de la siguiente manera: ET4L y 2. Métodos para calcular los índices de hormona
ET3L. libre: índice de T4L y de T3L
• En general, los ensayos de estimación de hormonas Los índices permiten estimar la concentración de
libres sobreestiman el nivel de T4L a altas concentra- hormonas libres requiriendo dos determinaciones
ciones de proteínas y lo subestiman a bajas concen- independientes (146). Una, es la determinación de
traciones.
hormona total (T4T o T3T), y la otra, es la evalua-
ción de la concentración de la principal proteína
24 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

transportadora de hormonas tiroideas, ya sea me- proteínas transportadoras. El agregado de un ligan-


diante un inmunoensayo de TBG, o mediante un te o adsorbente secundario (resina de intercambio
ensayo de “captación” de T4 o de T3 denominado: de aniones, talco, esponja de poliuretano, carbón
Ensayo de Proporción de hormona tiroidea unida vegetal, perla recubierta con anticuerpo, etc.) da por
(THBR). Otra posibilidad es calcular los índices resultado una redistribución del trazador de T3 o de
combinado una determinación de T4T con una esti- T4 en un nuevo equilibrio que ahora incluye al ad-
mación de la fracción de T4 libre establecida me- sorbente. Las cuentas en el trazador secuestrado por
diante diálisis isotópica. En este caso, la calidad y el adsorbente dependen de la saturación de las pro-
pureza del trazador utilizado repercuten fundamen- teínas transportadoras: cuanto mayor es la satura-
talmente en la exactitud de los índices (149,153,154). ción de las proteínas transportadoras, mayor es la
cantidad de trazador en el adsorbente. La cantidad
(a) Índices que utilizan la determinación de trazador tomada por el adsorbente es una medi-
de TBG da indirecta de la TBG. Cuando la concentración de
El cálculo del índice de T4L utilizando la TBG TBG es baja, los sitios de unión sobre la TBG están
sólo mejora la eficiencia diagnóstica en compara- muy saturados con T4, por lo que una pequeña can-
ción con la T4T cuando la anormalidad de la T4T es tidad T3 marcada se unirá a la TBG, y una cantidad
el resultado de una concentración anormal de TBG. mayor será captada por el adsorbente. A la inversa,
Además, el método del índice T4T/TBG no es com- cuando la concentración de la TBG es elevada, la
pletamente independiente de la TBG ni corrige las saturación de la TBG con T4 es baja, más trazador
alteraciones en las proteínas transportadoras no re- se unirá a los sitios desocupados sobre la TBG, y
lacionadas con la TBG, ni las originadas en las mo- menos se unirá al adsorbente. Lamentablemente, la
léculas de TBG con afinidades anormales (141,155-158).
Por lo tanto, a pesar de las ventajas teóricas de me-
dir TBG, los índices T4T/TBG se utilizan muy poco
RECOMENDACIÓN Nº 12. ENSAYOS DE
porque la capacidad de unión de la TBG puede es-
PROPORCIÓN DE HORMONA TIROIDEA UNIDA (THBR)
tar alterada independientemente de los cambios en
O ENSAYOS DE “CAPTACIÓN”
su concentración, en especial en pacientes con NTI
(99). Además, la hormona unida a TBG refleja el 60 -
• Los ensayos de “captación” se deberían llamar
75% de la capacidad total de unión, por lo tanto, si ensayos de “Proporción de hormona tiroidea unida”,
se tiene en cuenta sólo la unión a TBG, no se po- abreviadas THBR, e incluir la hormona que se está uti-
drán detectar las anormalidades en la transtiretina y lizando, es decir THBR (T4) o THBR (T3).
en la albúmina. • Para las determinaciones de THBR se prefiere usar
T4 como trazador (en lugar de T3) para reflejar mejor las
(b) Índices que utilizan la Proporción de Hormona anormalidades de las proteínas transportadoras de T4.
• Los valores de THBR deberían informarse como una
Tiroidea Unida (THBR) o Ensayos
relación con el resultado de un suero normal que tiene
de “Captación” un valor asignado de 1,00.
Los ensayos de “captación” se han usado para • Los cálculos de THBR deberían basarse en la
estimar la hormona tiroidea unida a proteínas desde relación entre las cuentas (cpm) del adsorbente dividi-
la década del 50. Se han utilizado dos tipos de “en- das por las cuentas totales menos las cuentas del
sayos de captación”. Los “clásicos” incorporan una absorbente, más que en la relación entre las cuentas
cantidad mínima de T3 o de T4 marcadas radioacti- del absorbente y las cuentas totales.
vamente a la muestra, y permiten que la hormona • Además del valor de la hormona total y del índice de
marcada se distribuya a través de las proteínas trans- hormona libre, debería informarse el resultado de THBR.
portadoras exactamente de la misma manera que la • Los ensayos de THBR no deberían ser usados como
hormona endógena (146,154). Debido a que se utiliza parámetro independiente para evaluar el estado
tiroideo, sino en relación con la determinación de T4T
sólo una cantidad mínima de T3 y T4 marcadas, el
y/o de T3T, y para producir estimaciones de hormonas
equilibro original casi no se altera. La distribución libres (índices de T4L o T3L).
del trazador depende del grado de saturación de las
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 25

relación entre la THBR y la concentración de TBG (c) Índices que utilizan una determinación de la
no es lineal, en consecuencia, los índices general- fracción de hormonas libres
mente no corrigen las anormalidades en la T4T que Los primeros ensayos de hormonas libres desa-
surgen de concentraciones marcadamente anorma- rrollados en la década del 60 fueron índices calcula-
les de TBG (158). dos a partir del producto de la fracción de hormona
Se ha recomendado la utilización un suero nor- libre de un dializado, multiplicado por la T4T (de-
mal para normalizar la respuesta de los ensayos y terminada por PBI y luego por RIA) (159,160). El méto-
permitir el informe del resultado como una relación do del índice de la fracción libre se extendió más
con el valor normal, es decir, una “Proporción de tarde a la determinación de la velocidad de transfe-
hormona tiroidea unida” (THBR) (154). Los ensayos rencia de la hormona marcada isotópicamente a tra-
“clásicos” de captación, usaron T3 como trazador vés de una membrana que separaba dos cámaras
porque la menor afinidad de unión de T3-TBG en que contenían la misma muestra sin diluir. Los índi-
relación con T4-TBG resulta en una mayor capta- ces de hormonas libres calculados con fracciones
ción isotópica del adsorbente y por lo tanto en tiem- isotópicas libres no son completamente indepen-
pos de conteo más cortos. No obstante, como la va- dientes de la concentración de TBG y además están
lidez de utilizar ensayos de captación de T3 para co- influenciados por la pureza radioquímica, la matriz
rregir un valor de T4T es cuestionable, algunos en- del buffer y el factor de dilución utilizado (161,162).
sayos no isotópicos actuales utilizan una “captación
de T4”. Muchos fabricantes todavía utilizan el méto- 3. Ensayos con ligandos para la estimación
do “clásico” para producir ensayos de captación de de T4L y T3L
T3 en los que el porcentaje de captación normal Estos métodos emplean el procedimiento de “un
puede variar entre un 25% y un 49% (cuentas uni- paso” o de “dos pasos”. Los ensayos de dos pasos
das/ cuentas totales). Tradicionalmente, el índice de utilizan una separación física de la hormona libre de
tiroxina libre, a veces llamado “T7” deriva del pro- la unida a proteína antes de medir la hormona libre
ducto de una prueba de captación de T3 y una de- con un inmunoensayo sensible, o, como alternativa,
terminación de TT4, frecuentemente expresada co- usan un anticuerpo para inmunoextraer una propor-
mo un % de captación (cuentas unidas al adsorben- ción de ligando de la muestra antes de la cuantifica-
te divididas por cuentas totales). ción. Por el contrario, los ensayos con ligandos de
Los ensayos “clásicos” de captación de T3 o un paso intentan cuantificar la hormona libre en
THBR típicamente están influenciados por la con- presencia de las proteínas transportadoras. Los mé-
centración endógena de T4 de la muestra. Esta limi- todos de dos pasos son menos susceptibles a arte-
tación puede solucionarse utilizando un gran exce- factos no específicos. Los métodos en un solo paso
so de trazador de T4 no isotópicamente marcado pueden resultar inválidos cuando la muestra y los
con una afinidad por las proteínas transportadoras estándares difieren en su afinidad por el trazador
comparable a la de la T4. Los ensayos actuales de del ensayo (60,145,150).
THBR generalmente producen valores normales en
los índices de T4L y de T3L, cuando las anormalida- (a) Ensayos con ligandos que utilizan separación
des de la TBG son leves (por ejemplo, durante el física
embarazo). Sin embargo, algunos de estos ensayos Los métodos de T4L que separan físicamente la
pueden producir valores de índices inadecuada- hormona libre de la unida a proteínas antes medir
mente anormales cuando los pacientes tienen gran- la concentración de hormona libre mediante un in-
des alteraciones en las proteínas transportadoras munoensayo sensible, se estandarizan utilizando so-
(TBG congénitamente alta o baja, hipertiroxinemia luciones que contengan T4 preparadas por gravime-
disalbuminémica familiar (FDH), autoanticuerpos a tría. La separación física de la hormona libre de la
hormonas tiroideas o NTI) y en presencia de algu- unida a proteína se logra con una membrana semi-
nos medicamentos que influyen en la unión de las permeable que usa una cámara de diálisis, una téc-
hormonas tiroideas a sus proteínas. [Sección-3 nica de ultrafiltración o una columna de adsorción
B3(c)vi]. con resina Sephadex LH-20 (161-165). Se necesita un
26 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

RIA de T4 extremadamente sensible para medir las


concentraciones de picomoles de T4L en dializados, RECOMENDACIÓN Nº 13. PARA LOS FABRICANTES
QUE DESARROLLAN ENSAYOS DE ESTIMACIÓN
o en la fracción libre separada, en comparación con
DE HORMONAS LIBRES
determinaciones de hormona total en el rango na-
nomolar. Aunque no existe ningún método de de- • Los métodos sin separación física entre la hormona
terminación de hormona libre oficialmente recono- unida y la libre no deben extraer más del 1-2% de la
cido como “patrón”, generalmente se considera que hormona unida a las proteínas transportadoras, para
los métodos que emplean separación física son los que se preserve el equilibrio dinámico tanto como sea
menos influenciados por las proteínas transportado- posible.
ras, y por inferencia, dan por resultado los valores • Minimizar los efectos de dilución que debilitan la in-
de hormonas libres que mejor reflejan el nivel de fluencia de los inhibidores endógenos presentes en la
muestra.
hormonas libres circulantes (94,166). Sin embargo, los
• Utilizar calibradores séricos que contengan concen-
métodos de diálisis que emplean un paso de dilu-
traciones conocidas de hormona libre que se compor-
ción pueden subestimar la T4L en presencia de in- ten en el ensayo de modo idéntico a las muestras de
hibidores de la unión en la muestra, y la adsorción los pacientes.
de la T4 a los materiales de la membrana puede sig- • Realizar los ensayos a 37ºC.
nificar un problema (94,166). Por el contrario, esos mé-
todos pueden sobreestimar la T4L sérica en pacien-
tes heparinizados como resultado de la generación
in vitro de ácidos grasos libres (FFA) [ver Sección-3 de hormona libre y debería ser <1-2% para minimi-
B3(c)vii] (84,97,98,100,101,167-170). Este efecto in vitro de la zar la alteración del equilibrio hormona libre-unida.
heparina es la causa primaria de valores falsamente El secuestro activo de hormonas por los anticuerpos
altos de T4L en pacientes con NTI (101). Los métodos anti-hormonas tiroideas del ensayo, resulta en una
de separación física requieren demasiado esfuerzo y continua separación de la hormona de las proteínas
son muy costosos para su uso de rutina en los labo- transportadoras y en una alteración del equilibrio
ratorios clínicos y generalmente sólo están disponi- entre unida y libre. La clave para la validez de estos
bles en laboratorios de referencia. Los métodos de métodos es doble. Primero, es necesario usar condi-
T3L que emplean separación física sólo están dispo- ciones que mantengan el equilibrio entre la hormo-
nibles en algunos laboratorios de investigación es- na libre y la unida a proteínas y minimizar los efec-
pecializados (102). tos de dilución que debilitan la influencia de los in-
hibidores endógenos presentes en la muestra. En se-
(b) Ensayos de ligandos sin separación física gundo lugar, es importante utilizar calibradores séri-
La mayoría de los inmunoensayos para la deter- cos que contengan concentraciones conocidas de
minación de hormonas libres actualmente en uso, hormona libre, que se comporten en el ensayo de
emplean un anticuerpo específico con gran afinidad modo idéntico a las muestras de los pacientes. Se
por la hormona para secuestrar una pequeña canti- han utilizado tres métodos generales para desarro-
dad de la hormona total de la muestra. Los sitios de llar inmunoensayos comparables para la determina-
unión en el anticuerpo que se encuentran desocu- ción de T4L y T3L: (i) hormona marcada, de dos pa-
pados y que generalmente son inversamente pro- sos; (ii) análogo, marcado, de un paso; y (iii) anticuer-
porcionales a la concentración de hormona libre se po marcado.
cuantifican utilizando hormona marcada con ra-
dioactividad, fluorescencia o quimioluminiscencia. (i) Métodos de Hormona marcada, de dos pasos /
La señal luego se convierte en concentración de Métodos de Retrotitulación
hormona libre utilizando calibradores con valores Los métodos de dos pasos se desarrollaron por
de hormona libre asignados por un método de se- primera vez con fines de investigación a fines de la
paración física. La proporción real de hormona tiroi- década del 70 y luego se los adaptó para producir
dea total secuestrada varía con el diseño del méto- métodos comerciales de T4L y T3L. Durante el pri-
do, pero excede ampliamente la concentración real mer paso de incubación, estos métodos usaban un
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 27

anticuerpo anti hormona de alta afinidad (>1x1011 sencia de concentraciones anormales de albúmina,
L/mol) unido a un soporte sólido (Sephadex ultrafi- FDH, NTI, niveles altos de FFA o autoanticuerpos
no, partículas o tubos recubiertos) para secuestrar anti hormonas tiroideas. Durante la década del 80 se
una pequeña proporción de la hormona total de la realizaron esfuerzos considerables para corregir es-
muestra sérica. Después de un breve período de in- tos problemas mediante el agregado de productos
cubación, los constituyentes del ensayo no unidos, químicos patentados para bloquear la unión del
se eliminaban por lavado antes del segundo paso en análogo a la albúmina o ajustando empíricamente
el que se agregaba suficiente hormona marcada pa- los valores del calibrador para corregir las desviacio-
ra unirse a todos los sitios de ligadura desocupados nes dependientes de las proteínas. No obstante, des-
del anticuerpo. Después del lavado, la cantidad de pués de una década de críticas, la mayoría de los mé-
hormona marcada unida al anticuerpo en fase sóli- todos del análogo de la hormona se han abandonado
da se cuantifica con relación a estándares gravimé- porque no fue posible resolver estos problemas (147).
tricos o a calibradores que tienen valores de hormo-
na libre asignados por un método de referencia. Los (iii) Métodos de anticuerpo marcado
métodos del análogo de la hormona marcado de un Los métodos de anticuerpo marcado también mi-
paso se introdujeron también a fines de la década den la hormona libre en función de la fracción de
del 70. Estos nuevos ensayos eran menos laboriosos los sitios de unión del anticuerpo para la hormona-
que las técnicas de dos pasos. Como resultado, los ocupados. Estos métodos competitivos utilizan in-
métodos en dos pasos perdieron popularidad a pe- munoabsorbentes específicos en la mezcla de reac-
sar de que los estudios comparativos mostraron que ción para evaluar los sitios del anticuerpo no ocu-
estaban menos afectados por la concentración de al- pados. Un método relacionado consiste en el uso de
búmina y las anormalidades en las proteínas trans- complejos hormona/proteína en fase sólida sin mar-
portadoras, las cuales ejercen un impacto negativo car (a veces también denominados “análogos”) que
en la eficiencia diagnóstica de los ensayos de un so- no reaccionan significativamente con las proteínas
lo paso (147, 171-173). séricas, para cuantificar los sitios no ocupados del
anticuerpo en fase líquida. El fundamento fisicoquí-
(ii) Métodos de análogos marcados de la hormona mico de estos métodos de anticuerpo marcado su-
de un paso giere que pueden ser tan susceptibles a los mismos
La validez fisicoquímica de los ensayos de aná- errores como los métodos más antiguos de análogos
logos de hormonas marcados de un paso dependía de hormona marcados. Sin embargo, las diferencias
del desarrollo de un análogo de la hormona con fisicoquímicas que surgen de la fijación del análogo
una estructura molecular que fuera totalmente no al soporte sólido generan diferencias cinéticas que
reactiva con las proteínas séricas pero que pudiese dan por resultado una disminución en la afinidad de
reaccionar con los sitios no ocupados del anticuer- este análogo por las proteínas transportadoras y una
po para la hormona. Cuando estas condiciones se determinación más confiable de la hormona libre.
cumplen, el análogo de la hormona, químicamente En la actualidad, el método de anticuerpo marcado
acoplado a una molécula de señal como un isótopo es el preferido por la mayoría de los autoanalizadores.
o una enzima, puede competir con la hormona libre
por un número limitado de sitios de unión en el an- (c) Comportamiento de los ensayos de T4L y T3L
ticuerpo, en un formato clásico de inmunoensayo en diferentes situaciones clínicas
competitivo. Aunque conceptualmente atractivo, es- La única razón para seleccionar ensayos de hor-
te método es técnicamente difícil de lograr en la monas tiroideas libres (T4L o T3L) en vez de hormo-
práctica, a pesar de los supuestos éxitos iniciales. nas tiroideas totales (T4T o T3T) es lograr una me-
Los métodos de análogos de la hormona se crearon jor eficiencia diagnóstica en la detección de hipo-e
principalmente para proporcionar valores normales hipertiroidismo en pacientes con anormalidades en
de T4L en estados de TBG elevada (por ejemplo, las proteínas de transporte que comprometan dicha
durante el embarazo). Sin embargo, se demostró eficiencia en las determinaciones de hormona total
(60). Lamentablemente, la eficiencia diagnóstica de
que tenían una pobre exactitud diagnóstica en pre-
28 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

los métodos actuales para la determinación de hor-


• Una T3 sérica alta normalmente precede a la tiroto-
monas libres no se puede predecir en base a las ca- xicosis inducida por yodo cuando los pacientes tienen
racterísticas del método (de un solo paso, de dos bocio multinodular de larga data.
pasos, de anticuerpo marcado, etc.) ni tampoco por • Una T3 sérica alta se ve frecuentemente en los tumo-
su validación técnica por medio de procedimientos res hipofisarios secretantes de TSH.
como la prueba de dilución de la muestra. Tanto los • Una T3 sérica alta se ve frecuentemente en los sín-
índices (FT4I y FT3I) como los métodos que involu- dromes de resistencia a las hormonas tiroideas que ge-
cran ligandos, son en cierto grado proteína-depen- neralmente se presentan sin hipertiroidismo clínico.
• La determinación de T3 sérica es útil para controlar
el cumplimento de la terapia supresiva con L-T3 pre-
via al centellograma con 131I en el carcinoma diferen-
RECOMENDACIÓN Nº 14. UTILIDAD CLÍNICA DE LOS ciado de tiroides (CDT)
ENSAYOS DE ESTIMACIÓN DE T3 LIBRE SÉRICA • La determinación de T3 sérica es útil para distinguir
el hipertiroidismo leve (subclínico)(con TSH baja y T4L
La medición de T3 sérica tiene escasa especifici- normal) de la toxicosis por T3, a veces causada por su-
dad o sensibilidad para el diagnóstico de hipoti- plementos dietéticos que contienen T3.
roidismo ya que el aumento en la conversión de • La determinación de T3 sérica es útil para detectar
la T4 a T3 mantiene normales las concentracio- deficiencia de yodo (caracterizada por T4 baja y T3 alta).
nes de T3 hasta que el hipotiroidismo alcanza • La determinación de T3 sérica puede ser útil duran-
un grado severo. Los pacientes con NTI o depri- te el tratamiento con antitiroideos para detectar la per-
vación calórica generalmente presentan valores sistencia del exceso de T3 a pesar del nivel normal o
bajos de T3 total y libre. Las determinaciones de bajo de T4.
T3 sérica, interpretadas conjuntamente con la • La determinación de T3 sérica se puede usar para
T4L, son útiles para el diagnóstico de presenta- detectar recurrencia temprana de tirotoxicosis después
ciones complejas o inusuales de hipertiroidismo de la suspensión del tratamiento con antitiroideos.
y de ciertas condiciones clínicas raras: • La determinación de T3 sérica se puede usar para es-
tablecer el grado de exceso de T3 durante el tratamien-
to supresivo con L-T4 o después de una sobredosis in-
• Una elevada T3 sérica a menudo es un signo tem-
tencional de T4.
prano de recurrencia de hipertiroidismo por Graves.
• La relación T3T/T4T se puede utilizar para investigar
el hipertiroidismo por Graves versus el no-Graves.
Concretamente, una elevada relación T3T/T4T > 20 dientes, y pueden dar resultados no confiables
(ng/µg) o >0,024 (nmol/nmol) sugiere el estímulo tiroi- cuando las proteínas transportadoras son significati-
deo característico de la enfermedad de Graves. vamente anormales (148). Los ensayos de hormonas
• La T3 sérica se puede utilizar para controlar la res- libres deberían realizarse a 37ºC ya que a tempera-
puesta aguda al tratamiento de la tirotoxicosis de Gra- tura ambiente muestran valores falsamente altos
ves. cuando las muestras tienen una concentración muy
• Una T3 sérica alta o paradójicamente normal puede baja de TBG (174, 175).
indicar hipertiroidismo en un paciente con enfermedad El fuerte impulso por desarrollar ensayos de hor-
no tiroidea con TSH suprimida (< 0,01 mUI/L).
monas libres, se ha debido a la alta frecuencia de
• Una T3 sérica alta o paradójicamente normal puede
anormalidades en las proteínas transportadoras que
indicar hipertiroidismo inducido por amiodarona.
• Los pacientes con bocio que viven en áreas de defi- causan discordancia entre las hormonas totales y li-
ciencia de yoduro deberían controlar su T3L además bres. Desafortunadamente, ningún método actual de
de la TSH para detectar tirotoxicosis por T3 provocada T4L es válido en todas las situaciones clínicas. Cuan-
por autonomía focal o multifocal. do la concentración de TBG es anormal, la mayoría
• Una T3 sérica alta se encuentra frecuentemente en el de los métodos de T4L dan resultados más útiles
bocio congénito debido a un defecto en la organifica- que la determinación de T4T. Sin embargo, en mu-
ción del yoduro (defecto de TPO), o a un defecto en chas situaciones asociadas con anormalidades de
la síntesis de tiroglobulina. proteínas transportadoras aparecen artefactos pre-
analíticos o analíticos: cuando la unión del trazador
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 29

a la albúmina es anormal, en presencia de medica-


mentos que desplazan la T4 de la TBG, durante fa- RECOMENDACIÓN Nº 15. EFECTOS DE LAS PROTEÍNAS
ses críticas de las enfermedades no tiroideas, y en el TRANSPORTADORAS DE HORMONAS TIROIDEAS ANOR-
embarazo (ver Tabla 1). La frecuencia de estos arte- MALES SOBRE LOS ENSAYOS DE T4L
factos en los ensayos de T4L sugiere que la TSH o
la relación TSH / T4L es un parámetro tiroideo más Las anormalidades en las proteínas transporta-
confiable que la sola estimación de la T4L. doras provocan artefactos pre-analíticos o
analíticos en los ensayos de T4L. La función
Un resultado discordante de T4L, se debería con-
tiroidea se debería evaluar a partir de la
firmar utilizando un método de otro fabricante (ge- relación TSH-T4T cuando:
neralmente determinado en otro laboratorio). Adi-
cional o alternativamente, se puede confirmar la dis- • La unión del trazador del ensayo a la albúmina es
crepancia con la relación T4L / T4T ya que la inter- anormal (por ejemplo en la FDH).
ferencia rara vez afecta ambas determinaciones en • El paciente recibe medicamentos que desplazan la
T4 de la TBG, por ejemplo Fenitoína, Carbamazepina
el mismo grado y en la misma dirección.
o Furosemida.
• El paciente tiene una enfermedad no tiroidea crítica
(i) Embarazo o severa.
El aumento de TBG sérica y las concentraciones
de albúmina bajas asociados con el embarazo pro-
vocan amplias variaciones en las determinaciones
de T4L, dependiendo del método. [ver Sección-2 A3] (iii) Anormalidades genéticas en las proteínas trans-
(47,59). Los métodos que dependen de la albúmina
portadoras
pueden producir valores bajos de T4L hasta en un Las variaciones hereditarias y adquiridas en la al-
50 por ciento de pacientes y no son adecuados pa- búmina o en la TBG con afinidades alteradas para
ra evaluar el estado tiroideo durante el embarazo, la T4 o la T3 pueden provocar concentraciones
debido a la marcada desviación negativa atribuible anormales de hormona total en sujetos eutiroideos
a la progresiva disminución de la concentración de que tienen concentraciones normales de hormona
albúmina sérica en el tercer trimestre (59). Por el con- libre (141). La variante de la albúmina responsable de
trario, los métodos como la diálisis de equilibrio la hipertiroxinemia disalbuminémica familiar (FDH)
suelen mostrar una desviación positiva en relación tiene una afinidad marcadamente aumentada por la
con los métodos estándares, posiblemente debido a T4, y por numerosos trazadores análogos de T4, lo
impurezas en el trazador (60). El uso de rangos de re- que provoca estimaciones falsamente altas de T4L
ferencia específicos para el método y para cada tri- sérica con estos trazadores (145,177). En la FDH, los va-
mestre podría mejorar la eficiencia diagnóstica de lores de la T4T y del Índice de T4L, al igual que al-
los ensayos de hormonas libres en el embarazo. Sin gunos ensayos de T4L con ligandos, dan valores por
embargo, prácticamente ningún fabricante ha desa- encima de los normales, mientras que la T3T, T3L,
rrollado dicha información para sus métodos. TSH y T4L determinadas por otros métodos, inclui-
da la diálisis de equilibrio, dan valores normales (177).
(ii) Infantes prematuros La falla en reconocer la presencia de la variante
Es frecuente encontrar un nivel bajo de tiroxina anormal de albúmina en la FDH que puede tener
sin aumento de TSH en recién nacidos prematuros una prevalencia hasta de 1:1000 en algunas pobla-
de menos de 28 semanas de gestación (39,176). Exis- ciones de América Latina puede llevar a una inter-
te cierta evidencia clínica que sugiere que el trata- pretación errónea de los ensayos tiroideos que deri-
miento con L-T4 puede mejorar el resultado neuro- ven en la ablación de la glándula (178).
lógico (176). No obstante, según se describió ante-
riormente, es probable que las diferencias metodo- (iv) Autoanticuerpos
lógicas en los ensayos de T4L comprometan la Los sueros de algunos pacientes contienen au-
confiabilidad de la detección de hipotiroxinemia toanticuerpos anti-hormonas tiroideas que originan
en los prematuros. artefactos metodológicos en las determinaciones de
30 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
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hormonas totales o libres (143, 145). Estas interferencias la depuración de la hormona. No obstante, con el
por anticuerpos son método-dependientes. La T4 o T3 tiempo el sistema restaura el equilibrio “normal” y
marcadas ligadas al anticuerpo endógeno se interpre- se normalizan los niveles de T4L a expensas de una
tan erróneamente como fracción unida si se usan mé- disminución en la concentración de T4T. La suspen-
todos de adsorción, o como fracción libre si se usan sión del fármaco en este momento causaría una caí-
métodos de doble anticuerpo, lo cual lleva a falsos va- da inicial de T4L a medida que aumenta la disponi-
lores bajos o altos de T4T o T3T séricas, respectiva- bilidad de la proteína transportadora, con la renor-
mente. Los análogos de T4 usados como trazador en malización de la T4L a medida que el equilibrio se
algunos ensayos de T4L pueden fijarse a estos autoan- reestablece mediante una liberación incrementada
ticuerpos y producir resultados falsamente altos de de la hormona desde la glándula tiroides. El tiempo
T4L. Hay publicaciones que informan interferencia que duran y la magnitud de los efectos de estos
por anticuerpos anti-fase sólida, en los ensayos de an- competidores difiere según su vida media.
ticuerpos marcados para hormonas libres (179). Una serie de medicamentos y otros factores com-
piten con la T4 y la T3 por la unión a la TBG y pro-
(v) Tirotoxicosis e hipotiroidismo vocan un aumento agudo en la disponibilidad de
La relación entre T4 total y libre y T3 en la tiro- T4L y T3L. Muchos de estos competidores son me-
toxicosis no es lineal. En los casos de tirotoxicosis dicamentos prescriptos que tienen una afinidad di-
severa, los aumentos de T4T y T4L son despropor- ferente por la TBG que la T4 (96, 184). La furosemida,
cionados. Esta falta de linealidad refleja una dismi- por ejemplo, se une a la TBG pero con una afinidad
nución de los niveles de TBG y una saturación de la aproximadamente tres veces menor que la T4, mien-
capacidad ligante de la TBG a pesar del aumento de tras que la aspirina se une con una afinidad siete veces
la unión a TTR y albúmina (180). Asimismo, las con- menor que la T4 (170, 185). La competencia in vivo que
centraciones de T3L se pueden subestimar como re- se observa con estos agentes se relaciona con su afi-
sultado de una unión T4-TBG elevada. En casos de nidad por la TBG más que con sus niveles terapéu-
hipotiroidismo severo se presenta la situación ticos, la fracción libre o su afinidad por proteínas di-
opuesta, es decir, una reducción de ocupación de ferentes de la TBG, en especial la albúmina (170, 186).
todas las proteínas transportadoras (180). En esta si- Los ensayos actuales de T4L que emplean un fac-
tuación, el exceso de sitios de unión desocupados tor de dilución pueden no detectar el aumento de
puede anular la respuesta de la T4L al tratamiento T4L secundario a la presencia de competidores por
sustitutivo. Esto sugiere que una dosis inicial de des- la proteína transportadora. Por ejemplo, una mues-
carga de L-T4 es el método más rápido para restau- tra que contenga tanto T4 (fracción libre 1:4000) co-
rar terapéuticamente el nivel normal de T4L en un mo un inhibidor competitivo (fracción libre 1:100)
paciente hipotiroideo. sometida a una dilución gradual, mantendrá una
(vi) Fármacos que compiten con las hormonas tiroi- concentración de T4L hasta una dilución de 1:100
deas por la unión a las proteínas transportadoras. secundaria a la disociación progresiva de la T4 de
Ciertos agentes terapéuticos y de diagnóstico co- las proteínas transportadoras. Por el contrario, la
mo la Fenitoína, Carbamazepina o Furosemida pue- concentración del competidor libre disminuiría marca-
den inhibir competitivamente la unión de las hor- damente sólo después de una dilución de 1:10. Por lo
monas tiroideas a las proteínas transportadoras. La tanto, los ensayos para determinar T4L que empleen
reducción de la disponibilidad de la proteína trans- una dilución alta de la muestra subestimarán el efec-
portadora origina un aumento agudo de T4L y en to de desplazamiento de la hormona por los com-
ciertos casos un incremento en la acción hormonal petidores. Este artefacto se puede minimizar me-
que se manifiesta por un descenso en la TSH (181). El diante la utilización de diálisis de equilibrio simétri-
aumento en las concentraciones de T4L está influi- ca y de ultrafiltración de suero sin diluir (94,165,187,188).
do por la dilución utilizada en el método y ocurre
también en los métodos por diálisis de equilibrio (vii) Artefactos inducidos por el tratamiento con he-
(182,183). Durante la administración crónica de fárma- parina
cos competidores de este tipo, hay un aumento en Se sabe que en presencia de concentraciones
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 31

normales de albúmina, los ácidos grasos no esterifi- les de T4L obtenidas con algunos métodos en el 20
cados (FFA) en concentraciones > 3mmol/L aumen- al 40% de los pacientes, reflejaran el efecto in vitro
tarán la T4L al desplazar la hormona de su unión a de la heparina intravenosa descripto anteriormente
la TBG (84,97,98,100,101,167-170). El suero de los pacientes [Sección-3 B3(c)vii]. Contrariamente, los métodos
tratados con heparina, incluida la de bajo peso mo- del análogo, sujetos a la influencia de la unión del
lecular, puede presentar valores de T4 libre falsa- trazador a la albúmina, produjeron estimaciones
mente aumentados secundarios a la actividad in vi- subnormales de T4L en el 20 al 30% de los pacien-
tro de la lipasa inducida por la heparina, que pro- tes (101). Estos artefactos en las determinaciones de
voca un aumento de los ácidos grasos libres. Este T4L, originan discordancia entre los resultados de
problema se presenta con dosis de heparina tan ba- T4L y TSH, aumentan el riesgo de un diagnóstico
jos como 10 unidades y se exacerba con la conser- erróneo de tirotoxicosis o de hipotiroidismo secun-
vación de la muestra. Otros factores, como el au- dario, y sugieren que las determinaciones de T4T
mento en los triglicéridos, las concentraciones bajas pueden ser más confiables en el marco de una en-
de albúmina, o una incubación prolongada del en- fermedad crítica.
sayo a 37ºC, pueden acentuar este problema.
(d) Validación de los métodos de T4L
(viii) Enfermedades no tiroideas graves Desafortunadamente, la mayor parte de los mé-
Hay un gran número de observaciones recolec- todos de estimación de hormonas libres reciben una
tadas durante más de dos décadas con respecto a la
especificidad de diversos métodos de determinación
de T4L en pacientes hospitalizados con NTI. [Sec- RECOMENDACIÓN Nº 16. PARA LOS FABRICANTES:
ción-2 B2]. La literatura puede resultar confusa y EVALUACIÓN DE LA EXACTITUD DIAGNÓSTICA DE LOS
complicada por la heterogeneidad de las poblacio- ENSAYOS DE ESTIMACIÓN DE T4L
nes de pacientes estudiadas y la dependencia de los
resultados con respecto a los métodos. Los fabrican- • La eficiencia diagnóstica del método se debe anali-
tes han modificado progresivamente sus métodos a zar utilizando muestras de pacientes ambulatorios con
lo largo del tiempo en un intento de mejorar la es- antecedentes documentados de los siguientes proble-
pecificidad en esta y otras situaciones en las que se mas en las proteínas transportadoras:
• anormalidades de la TBG (estrógenos elevados,
presentan anormalidades en las proteínas transpor-
exceso y deficiencia de TBG congénita)
tadoras. Sin embargo, la composición exacta de los
• Hipertiroxinemia disalbuminémica familiar (FDH)
equipos de reactivos comerciales actuales sigue • Aumento en la afinidad de la transtiretina (TTR)
siendo confidencial y es difícil que los fabricantes • Autoanticuerpos anti-T4 y anti-T3
obtengan muestras con antecedentes documentados • Factor reumatoideo
de este tipo de pacientes para el análisis riguroso de • Evaluar la interferencia del método con muestras de
sus métodos. En un trabajo comparativo reciente de suero normal a las que se le agreguen concentraciones
métodos de T4L, se observó una diferencia marca- relevantes de inhibidores comunes, en concentracio-
da, dependiente del método, el séptimo día poste- nes que provoquen el desplazamiento de la hormona
rior al transplante de médula ósea en individuos eu- de las proteínas transportadoras en suero sin diluir,
rotiroideos que recibían tratamiento con múltiples efectos que se pierden después de la dilución:
• Furosemida 30 µM
fármacos (incluidos heparina y glucocorticoides)
(101). En este estudio, las concentraciones de T4T fue- • Ácido disalicílico 300 µM
• Fenitoína 75 µM
ron normales en la mayoría de los individuos (95%) • Carbamazepina 8 µM
y la TSH sérica fue < 0,1 mUI/L en aproximadamen- • Enumerar todas las interferencias conocidas con la
te en la mitad de los individuos, en relación directa magnitud y la dirección de los errores resultantes.
con el tratamiento de glucocorticoides que recibían. • Documentar los efectos in vitro de la heparina intra-
Por el contrario, tanto valores altos como subnorma- venosa sobre la generación de ácidos grasos no esteri-
les de T4L se informaron usando diferentes méto- ficados (NEFA), durante la incubación del ensayo.
dos. Es probable que las estimaciones supranorma-
32 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

evaluación inapropiada antes de que se los incorpo- tro completo de muestras de individuos con y sin
re al uso clínico. Los fabricantes rara vez extienden disfunción tiroidea asociada con anormalidades en
la validación de sus métodos más allá del estudio de las proteínas transportadoras o con medicamentos
pacientes ambulatorios con hipo o hipertiroidismo, que afecten la unión de las hormonas tiroideas a las
embarazadas y una categoría general denominada proteínas plasmáticas. La detección de una interferen-
“pacientes hospitalizados /enfermedades no tiroi- cia inesperada se puede lograr sólo después de que
deas”. Sin embargo, en la actualidad no se ha logra- los métodos se hayan usado durante un cierto tiem-
do un consenso acerca de los mejores criterios para po, como en el caso del factor reumatoideo que pue-
la evaluación de estos métodos de estimación de T4 de producir estimaciones de T4L falsamente altas (112).
libre. Cabe mencionar que no es suficiente lograr la La fluorescencia no específica debido a sustancias en
simple demostración de que un nuevo método pue- sangre como ácidos orgánicos en pacientes con ure-
da distinguir entre valores hipotiroideos, normales e mia, puede ser otra causa de interferencia (190).
hipertiroideos, ni que ofrezca la posibilidad de com- El procedimiento más adecuado es prestar parti-
paración con métodos vigentes ya que cualquier cular atención a las muestras que probablemente
método de estimación de hormona libre satisfará es- causen interferencia no específica en el resultado
tos criterios sin que necesariamente aporte informa- (98). Idealmente, en pacientes ambulatorios se debe-

ción acerca de la verdadera concentración fisiológi- rían incluir muestras que tengan: a) anormalidades
ca de hormona libre. de la TBG (embarazo, anticonceptivos orales, exce-
Se deberían evaluar los nuevos métodos con so y deficiencia congénitos de TGB); b) Hipertiroxi-
muestras clínicas con antecedentes documentados, nemia disalbuminémica familiar (FDH); c) autoanti-
en especial con aquellas que pudieran representar cuerpos anti-T4 y anti-T3; d) sustancias interferentes
un desafío para la validez del ensayo, o alternativa- como el factor reumatoideo y e) el amplio espectro
mente, mediante la manipulación de los constitu- de drogas terapéuticas. En pacientes hospitalizados,
yentes de una muestra de suero normal para evaluar se deberían evaluar tres categorías: a) pacientes sin
un criterio particular (148). Cualquiera sea el método disfunción tiroidea pero con T4T baja o alta debido
que se adopte, los problemas clave se relacionan a NTI b) pacientes con hipotiroidismo documentado
con la similitud entre las muestras y los estándares, asociado con NTI severas y c) pacientes con hiper-
porque todos los métodos son generalmente com- tiroidismo documentado asociado con NTI. Sin em-
parables. Otros procedimientos incluyen probar la bargo, la obtención de muestras con antecedentes
recuperación de L-T4 agregada, o los efectos de la documentados de este tipo de pacientes resulta ex-
dilución del suero, ya que una dilución al 100% de cesivamente difícil para los fabricantes. Como nin-
un suero “normal” teóricamente provocaría una re- gún fabricante ha probado su método en pacientes
ducción insignificante (menor al 2%) en la concen- críticamente enfermos, es difícil para los médicos
tración de T4L (94,152) (58,189). Sin embargo, estos proce- confiar en que un resultado de T4L anormal en esos
dimientos, simplemente evalúan la “dependencia pacientes refleje una disfunción tiroidea más que
proteica” del método, es decir, el grado en que la T4 una NTI. Por lo tanto, en pacientes hospitalizados
libre depende de la disociación de la hormona libre con sospecha de disfunción tiroidea, una combina-
de la unida (148). Podría predecirse que estos proce- ción de determinaciones de TSH y de T4T puede
dimientos evaluarán desfavorablemente los métodos proveer más información que un único ensayo de
que impliquen un elevado grado de dilución de la T4L, siempre que el valor de T4T se interprete en re-
muestra comparados con aquellos que minimicen la lación con el grado de severidad de la enfermedad.
dilución. Sin embargo, no hay evidencia que docu- Concretamente, un valor bajo de T4T en las NTI
mente si estos procedimientos reflejan verdadera- normalmente se restringe a pacientes graves que es-
mente la eficiencia diagnóstica del método cuando tán en unidades de cuidado intensivo. Un valor ba-
se los usa para evaluar muestras clínicas complica- jo de T4T en un paciente que no está críticamente
das. En última instancia, como en cualquier método enfermo debería sugerir que se considere una dis-
diagnóstico, la especificidad de un método de T4 li- función hipofisaria. En pacientes ambulatorios, las
bre sólo será evidente después de evaluar un espec- determinaciones de T4L suelen tener mayor exacti-
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 33

tud diagnóstica que las de T4T. Sin embargo, cuan- dad, redujo la reactividad cruzada de los ensayos ac-
do una T4L anormal no coincide con el cuadro clí- tuales de T4 y T3 a menos de un 0,1 % para todos
nico, o cuando haya una discordancia inexplicable los precursores yodados y metabolitos de L-T4. No
en la relación TSH /T4 L, puede ser necesaria una obstante, se han informado interferencias por el áci-
T4 T confirmatoria. Alternativamente el laboratorio do 3-3’,5-triyodotiroacético (TRIAC), en ensayos de
podría, enviar la muestra a otro laboratorio que use T3L,y por D-T4 en ensayos de T4L (14,135).
un método de T4L de otro fabricante, o a un labo-
ratorio de referencia que pueda realizar T4L utilizan- (ii) Autoanticuerpos endógenos
do un método de separación física como la diálisis Autoanticuerpos endógenos anti-T4 y anti-T3 se
de equilibrio o la ultrafiltración. han encontrado frecuentemente en el suero de pa-
cientes con autoinmunidad tiroidea, y con enfermeda-
(e) Interferencias con los ensayos tiroideos des no tiroideas. A pesar de su alta prevalencia, la in-
Idealmente, un ensayo de hormonas tiroideas terferencia por este tipo de autoanticuerpos es relati-
debería carecer de la interferencia de cualquier vamente rara y se caracteriza por valores falsamente
compuesto, fármaco o sustancia endógena (por bajos o altos, según el diseño del ensayo utilizado (193).
ejemplo bilirrubina) en cualquier muestra y a cual-
quier concentración. Los estudios disponibles de los (iii) Interferencias por fármacos
fabricantes varían ampliamente en el número de Las interferencias por drogas pueden derivar de
compuestos estudiados y en las concentraciones la presencia in vitro de agentes terapéuticos o de
evaluadas. Generalmente el laboratorio sólo puede diagnóstico en la muestra en cantidad suficiente pa-
detectar interferencia mediante la “comprobación de ra afectar la prueba (67, 68). Los ensayos tiroideos que
validez” de la relación entre la T4L y la TSH. Si se emplean señales fluorescentes pueden ser sensibles
hace solamente un ensayo, generalmente el médico a la presencia en la muestra de agentes terapéuticos
es el primero en sospechar una interferencia, cuan- o de diagnóstico relacionados con el fluoróforo (190).
do observa una inconsistencia entre el valor infor- En el caso de administración de heparina intraveno-
mado y el estado clínico del paciente. Los procedi- sa, la activación in vitro de lipasas de lipoproteínas
mientos de control clásicos de laboratorio de com- genera ácidos grasos libres in vitro que pueden ele-
probar la identidad de la muestra y realizar dilucio- var falsamente los valores de T4L [ver Sección-3
nes, no siempre detectan interferencias. General- B3(c)vii] (84,97,98,100,101,167-170).
mente, las interferencias en las determinaciones de
T4T o de T4L generan valores inadecuadamente (f) Intervalos de referencia de T4L y T3L
anormales en presencia de TSH normal (Tabla 1). Las Los métodos de separación física se utilizan pa-
interferencias en los inmunoensayos competitivos y ra asignar valores a los calibradores empleados en
no-competitivos son de tres clases: (i) problemas de la mayoría de los ensayos de estimación de T4L.
reactividad cruzada, (ii) anticuerpos contra el analito Hay más similitud entre los intervalos de referencia
endógeno e (iii) interacciones farmacológicas (191). de los diversos ensayos con ligandos que entre los
métodos que emplean separación física. Los inter-
(i) Reactividad cruzada valos de referencia para los inmunoensayos de T4L
Los problemas de reactividad cruzada son el re- son aproximadamente 9-23 pmol/L (0,7 –1,8
sultado de la incapacidad del anticuerpo para discri- ng/dL). Por el contrario, el límite superior de T4L
minar entre el analito y una molécula estructural- para los métodos que emplean separación física,
mente relacionada (192). Los ensayos de hormonas ti- como la diálisis de equilibrio, supera los 30 pmol/L
roideas son menos susceptibles a este tipo de inter- (2,5 ng/dL). Los intervalos de referencia para los
ferencia que la TSH, porque los anticuerpos anti-yo- inmunoensayos de T3L se aproximan a 3,5-7,7
dotironinas se seleccionan para una mejor especifi- pmol/L (0,2 – 0,5 ng/dL). En la actualidad, los mé-
cidad enfrentándolos con preparados purificados. todos para determinar T3L que emplean separa-
La disponibilidad de anticuerpos monoclonales, y ción física sólo están disponibles como ensayos de
de anticuerpos policlonales purificados por afini- investigación (102).
34 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

(g) Estandarización o calibración con suero humano que contiene una capacidad li-
No existen estándares ni métodos internaciona- gante de TBG normal. Esto le permite al fabricante
les para determinaciones de hormonas libres (139). producir calibradores y controles de concentracio-
Aunque algunos métodos de referencia han sido su- nes prefijadas.
geridos para T4 T, resulta difícil adaptarlos para las Además, el uso de calibradores preparados se-
hormonas libres. Cada método y cada fabricante en- gún se ha descripto, permite compensar la extrac-
focan el problema de la estandarización desde su ción excesiva de la hormona de sus proteínas trans-
perspectiva individual. portadoras. Concretamente, en el caso de la tiroxina
Los métodos de estimación de T4L que requieren y la triyodotironina, el anticuerpo del ensayo puede
dos ensayos independientes (diálisis de equilibrio unirse a la hormona libre y al mismo tiempo extraer
con trazador y ultrafiltración, al igual que los méto- una cantidad significativa (~1-2%) de la hormona
dos de índices) usan una determinación de hormo- unida a proteínas. Si se realizara un ensayo directo,
na total y una determinación de la fracción libre. Los se produciría un aumento en la concentración de
ensayos de hormonas totales se estandarizan con hormona libre debido a esa extracción excesiva. Sin
calibradores preparados gravimétricamente a partir embargo, el uso de calibradores de concentraciones
de preparaciones hormonales altamente purificadas conocidas de hormona libre preparados a partir de
disponibles comercialmente. La fracción libre se de- suero humano permite asociar valores específicos
termina registrando las cuentas radiactivas en el dia- de señales que el sistema lee (isotópicas, enzimáti-
lizado o ultrafiltrado. Alternativamente, en el caso cas, fluorescentes o quimioluminiscentes) a concen-
de los métodos que utilizan índices, la saturación o traciones conocidas de hormona libre. No obstante,
la capacidad ligante de las proteínas transportadoras esto sólo será válido si el porcentaje de hormona
se determina utilizando ensayos de proporción de extraída del calibrador es idéntico al extraído de la
hormonas tiroideas unidas (THBR), a veces conoci- muestra del paciente. Esto no sucede con frecuen-
dos como pruebas de “captación”. Los ensayos cia en el caso de muestras que presentan anormali-
THBR están estandarizados contra sueros con pro- dades en las proteínas transportadoras (por ejemplo,
teínas transportadoras normales a los que se les TBG congénitamente alta o baja, FDH, NTI etc.).
asigna un valor de 1,00 [Sección-3 B2(b)].
La situación más complicada ocurre con los en-
sayos de estimación de hormonas libres con ligan- 4. Determinación de hormonas libres: el futuro
dos. En general, estos ensayos se comercializan con
estándares que tienen valores conocidos o asigna- La era de los inmunoensayo para cuantificar hor-
dos de hormona libre determinados por un método monas tiroideas y esteroideas en fluidos biológicos
de referencia (generalmente diálisis de equilibrio se inició en la década del 70 y está alcanzando su
con RIA de la concentración de T4L del dializado). etapa final. Emerge progresivamente la aplicación
Los fabricantes generalmente realizan esto para es- de espectrometría de masa avanzada para la cuanti-
tablecer valores de hormonas libres para los calibra- ficación de hormonas en fluidos biológicos (138). No
dores con matriz de suero humano que contenga la hay razones para dudar que la espectrometría de
hormona y la(s) proteína(s) transportadora(s) para masa ofrecerá una mejor cuantificación ya que su
incluirlos en el equipo. Alternativamente, en el caso especificidad analítica es mayor y su interferencia
de hormonas fuertemente unidas, como la tiroxina, analítica menor que la de los inmunoensayos. Por el
se puede usar la Ley de acción de las Masas para momento, este tipo de técnicas sólo se ha aplicado
calcular la concentración de hormona libre (194). La a las determinaciones de T4T (139). No obstante, pa-
concentración de hormona total, que es una medi- ra los ensayos de hormona total, se mantendrá el re-
da de la capacidad ligante total para la hormona en quisito de la liberación completa de la hormona de
esa muestra sérica, y la constante de equilibrio pro- los complejos proteína-hormona. Para los ensayos
veen la información necesaria para calcular la con- de hormona libre, también se mantendrá el requisi-
centración de hormona libre. Este procedimiento es to de una separación física de la hormona libre de
válido para los calibradores y controles elaborados la ligada a proteínas, antes de la cuantificación. Pa-
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 35

tiroidismo. Estos nuevos métodos son ensayos in-


RECOMENDACIÓN Nº 17. PARA LABORATORIOS QUE munométricos no isotópicos (IMA), disponibles pa-
REALIZAN ENSAYOS DE T4L Y T3L ra una variedad de autoanalizadores para inmu-
noensayos. La mayoría de los métodos actuales está
• Los médicos deberían estar informados acerca de los
en condiciones de alcanzar una sensibilidad funcio-
efectos de las drogas y de la exactitud diagnóstica de
nal de 0,02mUI/L o menor, necesaria para la detec-
los ensayos utilizados para evaluar el estado tiroideo
en los pacientes que presentan anormalidades de las ción de todo el rango de valores de TSH compren-
proteínas transportadoras y enfermedades severas. didos entre el hipo y el hipertiroidismo. Esta sensi-
• El laboratorio debería estar preparado para confir- bilidad permite distinguir entre una TSH francamen-
mar un resultado dudoso mediante una determinación te suprimida típica de la tirotoxicosis severa de Gra-
de hormona total, o una nueva determinación de T4L ves (TSH < 0,01 mUI/L) y los grados menores de su-
realizada con un método de referencia que separe físi- presión (TSH 0,01 – 0,1 mUI/L) que se observan en
camente la hormona libre de la unida, como la diálisis el hipertiroidismo leve y en ciertos pacientes con
de equilibrio o la ultrafiltración. enfermedades no tiroideas (NTI).
• Se debería verificar cualquier interferencia en resulta- En la última década, la estrategia diagnóstica pa-
dos cuestionables con una nueva determinación realiza-
ra el uso de las determinaciones de TSH ha cambia-
da con un método de otro fabricante. (En caso de ser ne-
do como resultado de los avances en la sensibilidad
cesario, la muestra debería enviarse a otro laboratorio).
de los métodos. En la actualidad, se reconoce que
la determinación de TSH es más sensible que la de
T4L para la detección tanto de hipo como del hiper-
ra lograrlo, se necesitará una nueva tecnología de tiroidismo. En consecuencia, algunos países pro-
separación antes de que se pueda considerar cual- mueven la determinación de TSH como estrategia
quier método como patrón. La dilución implícita de primaria para el diagnóstico de la disfunción tiroi-
pequeñas moléculas es una limitación de la diálisis dea en pacientes ambulatorios (siempre que el mé-
de equilibrio que necesita ser resuelta. La ultrafiltra- todo de determinación tenga una sensibilidad fun-
ción es una técnica con amplias posibilidades, pero cional £ 0,02 mUI/L). Otros países, prefieren aún la
los métodos actuales son demasiado poco robustos combinación de TSH + T4L, ya que la determinación
o demasiado imprácticos para tal fin. La calidad de de TSH como estrategia primaria no siempre detec-
las mediciones por espectrometría de masa de las ta a los pacientes con hipotiroidismo central [Sec-
hormonas que forman complejos con las proteínas ción-3 C4(f)] ni los tumores hipofisarios secretantes
séricas está en relación directa con los pasos de pre- de TSH [Sección-3 C4(g)i] (19,195-197). Otra desventaja
paración de la muestra para la cuantificación. Sin de la estrategia basada en la determinación de TSH
embargo, el método de referencia ideal para hormo- es que la relación TSH-T4L no se puede utilizar co-
nas libres sería una técnica que emplee ultrafiltra- mo “parámetro de validación clínica” para detectar
ción a 37ºC, para evitar los efectos de la dilución, y interferencias o condiciones poco habituales caracte-
la medición directa de la hormona libre en el ultra- rizadas por discordancias en dicha relación (Tabla 1).
filtrado por espectrometría de masa.
1. Especificidad
(a) Heterogeneidad de la TSH
C. Tirotrofina u Hormona estimulante La TSH es una molécula heterogénea con dife-
de la tiroides (TSH) rentes isoformas que circulan en sangre y que están
presentes en los extractos hipofisarios utilizados pa-
Durante más de veinticinco años los métodos pa- ra la estandarización de los ensayos (Medical Re-
ra la determinación de TSH han sido capaces de de- search Council (MRC) 80/558). En el futuro, las pre-
tectar los aumentos de esta hormona característicos paraciones de TSH humana recombinante (rhTSH)
del hipotiroidismo primario. Sin embargo, los méto- se podrían utilizar como estándares primarios para
dos modernos más sensibles, también posibilitan la los inmunoensayos de TSH (198). Los métodos TSH
detección de valores bajos de TSH típicos del hiper- IMA actuales utilizan anticuerpos monoclonales que
36 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

eliminan virtualmente la reactividad cruzada con


otras hormonas glucoproteicas. Estos métodos, sin RECOMENDACIÓN Nº 18. INVESTIGACIÓN DE
embargo, pueden detectar epitopes de isoformas VALORES DISCORDANTES DE TSH SÉRICA

anormales de TSH secretadas por algunos indivi- EN PACIENTES AMBULATORIOS

duos eutiroideos, así como por algunos pacientes Un resultado de TSH discordante en un paciente
con patologías hipofisarias. Por ejemplo, los pacien- ambulatorio con estado tiroideo estable, puede
tes con hipotiroidismo central provocado por dis- deberse a un error técnico. La pérdida de espe-
función hipofisaria o hipotalámica, secretan isofor- cificidad puede ser el resultado de un error de
mas de TSH con glucosilación anormal y reducida laboratorio, de sustancias interferentes (por
actividad biológica. La mayoría de los métodos, pa- ejemplo anticuerpos heterófilos) o la presencia
radójicamente miden estas isoformas de TSH como de una isoforma inusual de TSH (ver Recomen-
normales o incluso elevadas (195,197,199). Asimismo, es dación Nº 7 y Tabla 1). Los médicos pueden soli-
citar que su laboratorio realice las siguientes
posible observar niveles paradójicamente normales
comprobaciones:
de TSH en pacientes con hipertiroidismo debido a
tumores hipofisarios, secretan isoformas de TSH con • Confirmar la identidad de la muestra (por ejemplo
aumento de la actividad biológica (196, 200, 201). que el laboratorio verifique si se ha cambiado una
muestra de posición en la corrida).
(b) Problemas técnicos • Cuando la TSH es inesperadamente alta solicitar al la-
boratorio que vuelva a medir la muestra diluida, preferen-
Los problemas durante el desarrollo de la técni-
temente en suero tirotóxico, para confirmar paralelismo.
ca, como los pasos de lavados mal realizados, pue-
• Solicitar que el laboratorio analice la muestra con un
den dar resultados falsamente elevados de TSH (202). método de otro fabricante (enviarla a otro laboratorio
Además, cualquier sustancia interferente en la si fuera necesario). Es posible que haya un interferen-
muestra (por ejemplo, los anticuerpos heterófilos te si la variabilidad entre métodos para la misma mues-
HAMA) que produzca un ruido de fondo elevado o tra es > 50%.
un falso puente entre los anticuerpos de captura y • Las verificaciones biológicas pueden ser útiles una
de señal creará una señal alta en el soporte sólido vez que se hayan descartado los problemas técnicos.
que se interpretará como un resultado falsamente • Realizar una prueba de TRH para investigar un
elevado [véase Sección-2C3] (203, 202). resultado bajo discordante de TSH, y esperar un in-
cremento de dos veces (≥4 mUI/L) en la respuesta
en individuos normales.
(c) Métodos para detectar interferencia en un re-
• Realizar una prueba con supresión de hormona
sultado de TSH
tiroidea para verificar un valor alto discrepante de
El método convencional de laboratorio para ve- TSH. La respuesta normal a 1mg de L-T4 o 200µg
rificar la concentración de un analito, como la dilu- de L-T3 administrados por vía oral es una supre-
ción, no siempre detecta un problema de interferen- sión de la TSH de más del 90% a las 48 horas.
cia. Como los métodos varían en su susceptibilidad
hacia la mayoría de las sustancias interferentes, el
modo más práctico de evaluarla es medir la concen-
tración de TSH en la muestra utilizando un método eleve la TSH a más del doble (incremento ≥ 4 mUI/L)
de otro fabricante y comprobar si hay una discor- en individuos normales (204). En los casos de TSH ina-
dancia significativa entre los valores. Cuando la va- propiadamente elevada, se esperaría que una prueba
riabilidad de las determinaciones de TSH en la mis- de supresión con hormona tiroidea (1mg L-T4 o 200
ma muestra con métodos diferentes supera los valo- µg L-T3, por vía oral) suprima la TSH en más de un
res esperados (>50% de diferencia), es posible que 90 % a las 48 horas en individuos normales.
haya interferencia. Los controles biológicos también
pueden resultar útiles para verificar un resultado 2. Sensibilidad
inesperado. Los valores inapropiadamente bajos de
TSH se pueden verificar con una prueba de estimu- Históricamente, la “calidad” de un método para
lación de TRH (200 µg I.V), el cual se espera que determinar TSH se ha establecido a partir de un pa-
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 37

de 0,02 mUI/L o menos (ensayos de “tercera gene-


RECOMENDACIÓN Nº 19. DEFINICIÓN DE
ración”) (202).
SENSIBILIDAD FUNCIONAL
Casi todos los fabricantes han abandonado el
La sensibilidad funcional debería usarse para uso del parámetro “sensibilidad analítica” para ex-
determinar el límite de detección más bajo del presar la sensibilidad de un ensayo de TSH, que se
ensayo. calcula a partir de la precisión intraensayo del cali-
• La sensibilidad funcional del ensayo de TSH se defi-
brador cero, porque no refleja la sensibilidad del
ne como la concentración que puede ser determinada método en la práctica clínica (126, 127). Como alterna-
con un coeficiente de variación (CV) interensayo del tiva se ha adoptado el parámetro “sensibilidad fun-
20% determinada con el protocolo recomendado (ver cional” (202). que se calcula a partir del coeficiente de
Recomendación Nº 20). variación (CV) interensayo del 20% para el método
y que se utiliza para establecer el valor mínimo que
se puede informar para esa determinación (202).
RECOMENDACIÓN Nº 20. PROTOCOLO PARA La sensibilidad funcional se debería determinar
OBTENER LA SENSIBILIDAD FUNCIONAL DE TSH con un estricto seguimiento del protocolo recomen-
Y EL PERFIL DE PRECISIÓN dado que se diseña para evaluar el límite de detec-
ción de un ensayo en la práctica clínica (Recomen-
Medir la TSH en mezclas s de suero humano que
dación N°20) y garantizar que el parámetro real-
cubran el rango del ensayo en por lo menos 10
corridas diferentes. El valor de la mezcla más mente represente el mínimo valor del ensayo que se
baja debería estar un 10% por encima del límite puede informar de manera confiable. El protocolo
de detección y el valor de la mezcla más alta de- está diseñado para tener en cuenta la variedad de
bería estar un 90% por sobre el límite superior factores que pueden influir en la imprecisión del
del ensayo. método de TSH. Estos incluyen:

• El fenómeno de “arrastre” se debería evaluar anali-


zando primero la mezcla más alta seguida de la más
baja. RECOMENDACIÓN Nº 21. PARA LABORATORIOS QUE
• Utilizar el mismo modo de prueba que para las
REALIZAN ENSAYOS DE TSH
muestras de pacientes (por ejemplo, simplificado o du-
plicado) La sensibilidad funcional es el criterio de calidad
• El operador debería desconocer la presencia de más importante que debe influir en la selección
mezclas de sueros de prueba en la corrida. de un método para la determinación de TSH. Los
• Las corridas se deberían distribuir en un intervalo clí- factores prácticos como el instrumental, el tiem-
nicamente representativo (por ejemplo 6 a 8 semanas po de incubación, el costo y el soporte técnico, si
para TSH en pacientes ambulatorios). bien importantes, son consideraciones secunda-
• Utilizar por lo menos dos lotes diferentes de reacti- rias. Los laboratorios deberían utilizar interva-
vos y dos calibraciones distintas del instrumento du- los de calibración que optimicen la sensibilidad
rante el período de prueba. funcional, incluso si la re-calibración se debe
• Cuando se corra el mismo ensayo en dos instrumen- realizar con mayor frecuencia que la recomen-
tos similares, periódicamente se deberían correr dupli- dada por el fabricante:
cados ciegos en cada instrumento para verificar la co-
rrelación. • Seleccionar un método para TSH que tenga una sen-
sibilidad funcional £ 0,02 mUI/L.
• Establecer la sensibilidad funcional independiente-
mente del fabricante utilizando la Recomendación Nº 20.
trón clínico: la capacidad del ensayo para discrimi- • No hay justificación científica para realizar el ensayo
nar niveles eutiroideos (~ 0,4 a 4,0 mUI/L) de con- con un método menos sensible y luego si es necesa-
centraciones extremadamente bajas (<0,01 mUI/L) rio, con uno más sensible. (La menor sensibilidad ge-
típicas de la “tirotoxicosis” de Graves. La mayoría de nera valores falsamente elevados no falsamente bajos.)
los métodos de TSH declaran un límite de detección
38 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

• Diferencias en la matriz entre el suero del pa-


ciente y el diluyente de los calibradores. RECOMENDACIÓN Nº 22. INTERVALO DE REFERENCIA
PARA TSH
• Disminución de la precisión con el tiempo
• Variabilidad entre los diferentes lotes de reac- Los intervalos de referencia para TSH se debe-
tivos provistos por el fabricante rían establecer a partir de los limites de con-
• Diferencias entre las calibraciones de los ins- fianza del 95% de los valores logarítmicamente
trumentos y los operadores técnicos transformados de por lo menos 120 individuos
• Arrastre desde las concentraciones altas hacia voluntarios normales eutiroideos seleccionados
las bajas (205) rigurosa y selectivamente que no presenten:
El uso de la sensibilidad funcional como límite • Autoanticuerpos tiroideos detectables, TPOAb o
de detección es un enfoque conservador para ga- TgAb (determinados por inmunoensayos sensibles)
rantizar que cualquier resultado de TSH informado • Antecedentes personales ni familiares de disfunción
no sea simplemente “ruido” del ensayo. Además, el tiroidea
coeficiente de variación del 20 % entre corridas se • Bocio visible ni palpable
aproxima a la máxima imprecisión requerida para • Medicamentos (excepto estrógenos)
los ensayos usados con fines diagnósticos (Tabla 5).

3. Intervalos de referencia de TSH res se vuelve más normal cuando se los transforma
logarítmicamente. Para los cálculos del rango de
A pesar de las diferencias en los niveles de TSH referencia, es común la transformación logarítmica
relacionadas con el género, la edad y la etnicidad de los resultados de TSH, para calcular el interva-
que reveló la encuesta NHANES III US recientemen- lo de referencia del 95% (valor de la media de la
te publicada, no se considera necesario ajustar el in- población típica ~1,5 mUI/L, rango entre 0,4 y 4,0
tervalo de referencia para estos factores en la prác- mUI/L en poblaciones sin deficiencia de yodo) (202,
tica clínica (18). Los niveles de TSH sérica muestran 206). Sin embargo, debido a la elevada prevalencia

una variación diurna con respecto al pico que se de hipotiroidismo leve (subclínico) en la población
produce durante la noche y el nadir, que se aproxi- general, es probable que el límite superior actual
ma al 50% del valor máximo y ocurre entre las ho- del rango de referencia de la población sufra un
ras 10:00 y 16:00 (123, 124). Esta variación biológica no sesgo por la inclusión de personas con disfunción
influye en la interpretación del resultado ya que la tiroidea oculta (18).
mayoría de las determinaciones de TSH se realizan
en pacientes ambulatorios entre las horas 08:00 y (a) Límites superiores de referencia para la TSH
18:00 y los intervalos de referencia de TSH se esta- Durante las últimas dos décadas, el límite supe-
blecen para las muestras recolectadas durante ese rior de referencia para la TSH ha disminuido cons-
mismo lapso. Los intervalos de referencia de TSH se tantemente de ~10 a aproximadamente ~4,0-4,5
deberían establecer utilizando muestras de indivi- mUI/L. Esta disminución refleja diversos factores
duos con TPOAb negativos, ambulatorios, eutiroi- que incluyen las mejoras en la sensibilidad y espe-
deos, sin antecedentes personales ni familiares de cificidad de los ensayos inmunométricos actuales
disfunción tiroidea, ni bocio visible. La variación en basados en anticuerpos monoclonales, el reconoci-
los intervalos de referencia para los distintos méto- miento de que los valores normales de TSH se dis-
dos refleja las diferencias en el reconocimiento del tribuyen logarítmicamente y, en especial, las mejo-
epitope de las diferentes isoformas de TSH por los ras en la sensibilidad y especificidad de los ensayos
componentes del equipo de reactivos, y en el rigor de anticuerpos antitiroideos que se utilizan para la
aplicado a la selección de individuos normales. preselección de los individuos. El reciente estudio
Las concentraciones de TSH determinadas en de seguimiento de la cohorte de Whickham ha en-
sujetos eutiroideos normales se desvían con una contrado que los individuos con TSH sérica >2.0
“cola” relativamente larga hacia los valores más al- mUI/L en su primera evaluación tenían una mayor
tos de la distribución. La distribución de los valo- probabilidad de desarrollar hipotiroidismo durante
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 39

los próximos 20 años, en especial si sus anticuerpos cional igual o menor a 0,02 mUI/L (4, 10, 210). Determi-
antitiroideos eran elevados (35). También se observó nar la sensibilidad del ensayo de TSH es fundamen-
un aumento en la probabilidad en sujetos con anti- tal para la detección confiable de valores por deba-
cuerpos negativos. Es probable que esos individuos jo de lo normal, ya que los ensayos menos sensibles
tuvieran niveles bajos de anticuerpos antitiroideos tienden a producir resultados falsamente normales
que no se pudieron detectar con los métodos insen- en muestras con concentraciones de TSH por deba-
sibles de aglutinación de anticuerpos microsomales jo de lo normal (202). La relación logarítmica / lineal
utilizados en el estudio inicial (207). Es posible tam- entre la TSH y la T4L determina que la TSH sérica
bién que incluso los inmunoensayos actuales sensi- sea el ensayo de elección, ya que sólo la TSH pue-
bles de TPOAb no puedan identificar a todos los in- de detectar grados leves de exceso o deficiencia de
dividuos con insuficiencia tiroidea oculta. Quizás en hormona tiroidea (Figura 1) [Sección 2 A1]. La pre-
el futuro el límite superior del rango de referencia valencia de disfunción tiroidea leve (subclínica), ca-
eutiroideo para la TSH sérica se reduzca a 2,5 mUI/L racterizada por una TSH anormal asociada a una
ya que >95% de los voluntarios normales eutiroi- T4L en el rango normal informada en estudios de
deos sometidos a una rigurosa selección tienen va- población es de ~10% y 2%, para el hipo e hiperti-
lores de TSH sérica entre 0,4 y 2,5 mUI/L. roidismo subclínicos, respectivamente (10, 18, 25, 211). A
pesar de la sensibilidad clínica de la TSH, una estra-
(b) Límites inferiores de referencia para TSH tegia diagnóstica basada en TSH tiene dos limitacio-
Antes de la era de los ensayos inmunométricos, nes fundamentales. En primer lugar, requiere que la
los métodos de determinación de TSH eran dema- función hipotalámica hipofisaria sea normal. En se-
siado insensibles para detectar valores en el extre- gundo lugar, que el estado tiroideo del paciente sea
mo inferior del rango de referencia (209). Sin embar- estable, es decir que al paciente no se le haya admi-
go, los métodos actuales pueden medir TSH en el nistrado un tratamiento para el hipo ni el hipertiroi-
extremo inferior y situar los límites inferiores entre dismo recientemente [Sección-2 A1 y Figura 2] (19). Si
0,2 y 0,4 mUI/L (202). Como la sensibilidad de los mé- alguno de estos dos criterios no se cumplen, los re-
todos ha mejorado, ha aumentado el interés por de- sultados de la TSH sérica pueden llevar a un diag-
finir el verdadero límite inferior del rango normal nóstico confuso (Tabla 1).
para determinar con mayor precisión la presencia Cuando se investiga la causa de una TSH anor-
de hipertiroidismo leve (subclínico). Los estudios mal en presencia de T4L y T3L normales, es impor-
actuales sugieren que los valores de TSH en el ran- tante reconocer que la TSH es una hormona lábil y
go entre 0,1 y 0,4 mUI/L pueden representar un ex- sujeta a influencias hipofisarias no tiroideas (gluco-
ceso de hormona tiroidea y en los pacientes añosos corticoides, somatostatina, dopamina, etc.) que pue-
podrían estar asociados con un aumento en el ries- den alterar la relación TSH/T4L (69, 70, 71, 212). Es impor-
go de fibrilación auricular y mortalidad cardiovascu- tante confirmar toda anormalidad de la TSH en una
lar (36, 37). Por lo tanto es importante excluir cuidado- nueva muestra extraída después de ~3 semanas an-
samente a los individuos con bocio y cualquier en- tes de hacer un diagnóstico de disfunción tiroidea
fermedad o estrés de la cohorte normal selecciona- leve (subclínica) como causa de una anormalidad
da para el estudio del rango de referencia. aislada de la TSH. Después de confirmar una TSH
alta, la determinación de TPOAb es útil para estable-
cer la presencia de autoinmunidad tiroidea como
4. Uso clínico de las determinaciones de TSH causa de hipotiroidismo leve (subclínico). Cuanto
mayor es la concentración de TPOAb, más rápido es
(a) Búsqueda de disfunción tiroidea en pacientes el desarrollo de disfunción tiroidea. Después de
ambulatorios confirmar una TSH baja puede ser difícil establecer
La mayoría de las sociedades profesionales reco- inequívocamente un diagnóstico de hipertiroidismo
mienda que se utilice la TSH para determinar dis- leve (subclínico), especialmente si el paciente es
función tiroidea en pacientes ambulatorios, siempre añoso y no recibe tratamiento con L-T4 (34). En pre-
que el ensayo utilizado tenga una sensibilidad fun- sencia de bocio multinodular, es probable que la au-
40 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

tonomía tiroidea sea la causa de hipertiroidismo le- roidea (218). Un estudio reciente realizado por Parle y
ve (subclínico) (213). colaboradores mostró un aumento en el índice de
No hay consenso con respecto a la edad óptima mortalidad cardiovascular en esos pacientes (37). Es-
para iniciar la investigación de disfunción tiroidea. to sugiere que la causa de un valor persistentemen-
Las recomendaciones de la American Thyroid Asso- te bajo de TSH se debería investigar activamente (37).
ciation sugieren comenzar a los 35 años y, a partir El bocio multinodular se debería descartar como
de ese momento, cada 5 años (10). El análisis de de- causa en especial en zonas de deficiencia de yodo
cisión parece reforzar la relación costo/efectividad (213). Los medicamentos que ingiere el paciente, se

de esta estrategia, especialmente en mujeres (215). La deberían revisar cuidadosamente (incluidos los de
estrategia de utilizar TSH para investigar hipo e hi- venta libre, algunos de los cuales contienen T3). Si
pertiroidismo leves (subclínicos), seguirá debatién- no hay presencia de bocio y los antecedentes de
dose hasta que se logre un mayor acuerdo acerca de medicamentos son negativos, se recomienda volver
las consecuencias clínicas y el resultado de tener a controlar la TSH sérica junto con TPOAb después
una TSH crónicamente anormal. Además, se necesi- de 4 a 6 semanas. Si la TSH aún se mantiene baja y
ta llegar a un acuerdo con respecto al nivel de anor- los TPOAb son positivos, se debería considerar la
malidad de TSH que indicaría la necesidad de trata- posibilidad de una disfunción tiroidea autoinmune.
miento (216, 217). El tratamiento ante una TSH baja se debería deter-
Cada vez más evidencia sugiere que los pacien- minar según cada caso.
tes con una anormalidad persistente de TSH pueden
estar expuestos a un mayor riesgo si no reciben tra- (c) Tratamiento de reemplazo con L-T4
tamiento. Específicamente, un estudio reciente in- En la actualidad existe amplia documentación
formó un aumento en el índice de mortalidad car- que demuestra que los pacientes hipotiroideos tie-
diovascular cuando los pacientes tenían una TSH sé- nen valores de T4L sérica en el tercio superior del
rica crónicamente baja (37). Además, un creciente nú- intervalo de referencia cuando la dosis de reempla-
mero de informes indica que el hipotiroidismo leve zo con L-T4 se ajusta para situar a la TSH dentro del
en las primeras etapas del embarazo aumenta la rango del objetivo terapéutico (0,5-2,0 mUI/L) (219, 220).
pérdida fetal y daña el coeficiente intelectual del be- La levotiroxina (L-T4), y no la tiroides disecada,
bé (63-65). Estos estudios apoyan la eficacia de una es la medicación de reemplazo a largo plazo prefe-
evaluación temprana de la función tiroidea, espe- rida para el hipotiroidismo.
cialmente en mujeres en edad fértil. Generalmente, con una dosis promedio de L-T4
equivalente a 1,6 µg/kg de peso corporal/día en los
(b) Pacientes ancianos adultos se logra un estado eutiroideo. Los niños ne-
La mayoría de los estudios apoyan la investiga- cesitan dosis más elevadas (hasta 4,0µg/kg de peso
ción de disfunción tiroidea en personas ancianas (10, corporal/día) y los individuos ancianos dosis meno-
35, 214). La prevalencia tanto de TSH baja como alta
res (1,0 µg/kg de peso corporal/día) (221, 222). La do-
(asociada con T4L normal) aumenta en los pacien- sis inicial y el período de tiempo óptimo necesario
tes ancianos en comparación con los más jóvenes. para establecer la dosis total de reemplazo se debe-
A medida que se envejece, aumenta la prevalencia rían personalizar en función de la edad, el peso y el
de tiroiditis de Hashimoto, asociada con elevación estado cardíaco del paciente. Se debe aumentar la
de TSH y TPOAb detectables (35). En los pacientes dosis de L-T4 durante el embarazo [Sección-2 A3] y
ancianos, también se produce un aumento en la in- en mujeres post-menopáusicas que recién comien-
cidencia de TSH baja (35). Una TSH baja puede ser zan el tratamiento hormonal de reemplazo (223).
transitoria, pero es un hallazgo persistente en apro- Un resultado de TSH sérica entre 0,5 y 2,0 mUI/L
ximadamente el 2 % de los individuos ancianos, sin es generalmente considerado el objetivo terapéutico
ninguna otra evidencia aparente de disfunción tiroi- para una dosis de reemplazo estándar con L-T4 pa-
dea (36, 214). Esto puede deberse a un cambio en el ra el hipotiroidismo primario.
valor de ajuste con la T4L, un cambio en la bioacti- Una concentración de T4L sérica en el tercio su-
vidad de la TSH, o un leve exceso de hormona ti- perior del intervalo de referencia es el objetivo tera-
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 41

péutico del tratamiento de reemplazo con L-T4 na, sulfato ferroso, proteína de soja, sucralfato, an-
cuando los pacientes tienen hipotiroidismo central tiácidos que contengan hidróxido de aluminio, anti-
debido a disfunción hipofisaria o hipotalámica. convulsivantes o rifampicina) (4, 226).
El esquema habitual para aumentar la dosis gra-
dualmente hasta llegar a la dosis de reemplazo com- (d) Tratamiento de supresión con L-T4
pleta consiste en administrar la L-T4 con incremen- La dosis de L-T4 destinada a suprimir los niveles
tos de 25 µg cada 6 a 8 semanas hasta alcanzar la de TSH sérica a valores subnormales se reserva ha-
dosis objetivo (TSH sérica 0.5-2.0 mUI/L). Como se bitualmente para los pacientes con carcinoma tiroi-
muestra en la Figura 2, la TSH es lenta para equili- deo bien diferenciado para los que la tirotrofina se
brarse otra vez ante un nuevo nivel de tiroxina. Los considera un factor trófico (227). La eficacia del trata-
pacientes con hipotiroidismo crónico grave pueden miento supresivo con L-T4 se ha determinado a par-
desarrollar hiperplasia tirotrófica hipofisaria que tir de estudios retrospectivos sin control que han
quizás simule un adenoma hipofisario, pero que se aportado resultados conflictivos (228, 229).
resuelve después de varios meses de tratamiento de
reemplazo con L-T4 (224). Es posible que los pacien-
tes a quienes se administra rifampicina y anticonvul- RECOMENDACIÓN Nº 23. TRATAMIENTO DE
sivantes que influyen en el metabolismo de la L-T4 REEMPLAZO CON LEVOTIROXINA (L-T4)
también necesiten un aumento en la dosis para PARA EL HIPOTIROIDISMO PRIMARIO
mantener la TSH dentro del rango del objetivo tera-
péutico. • La levotiroxina (L-T4), no la tiroides disecada, es el
Tanto la T4 libre como la TSH deberían utilizar- medicamento preferido para el tratamiento de reem-
se para el control de pacientes hipotiroideos con plazo a largo plazo en el hipotiroidismo.
• Generalmente, se logra un estado eutiroideo en los
sospecha de discontinuidad o falta de cumplimien-
adultos con una dosis promedio de L-T4 de
to con el tratamiento con L-T4. La asociación para- 1,6 µg/kg de peso corporal/día. La dosis inicial y el pe-
dójica de T4L alta y TSH alta a menudo indica que ríodo de tiempo para alcanzar el reemplazo completo
puede haber problemas con el cumplimiento del se debería personalizar en función de la edad, el peso
tratamiento. Concretamente, la ingestión aguda de y el estado cardíaco del paciente. Normalmente la do-
L-T4, que no se tomó cuando correspondía-, realiza- sis inicial de L-T4 es de 50-100 µg diarios. La determi-
da antes de una visita clínica elevará la T4L pero no nación de TSH sérica después de seis semanas indica-
normalizará la TSH sérica debido al efecto “demora rá la necesidad de ajuste de dosis con aumentos de 25
en la respuesta” (Figura 2). Se necesitan por lo me- a 50 µg.
nos 6 semanas antes de volver a determinar la TSH • Los niños requieren dosis más elevadas de L-T4, has-
después de un cambio en la dosis de L-T4 o en la ta 4.0 µg/kg de peso corporal/día, debido a la rapidez
de su metabolismo. Los valores de TSH y de T4L se de-
marca comercial. Se recomienda una determinación
berían evaluar utilizando rangos de referencia especí-
de TSH anual en los pacientes que reciben una do- ficos para cada edad y método (Tabla 3).
sis estable de L-T4. El momento del día óptimo pa- • Un nivel de TSH sérica entre 0,5 y 2,0 mUI/L, gene-
ra determinar TSH no está afectado por la hora en ralmente se considera el objetivo terapéutico óptimo
que se ingiere la L-T4 (133). No obstante, cuando se para una dosis estándar de reemplazo con L-T4 para el
utiliza T4L como estrategia de evaluación, la dosis hipotiroidismo primario.
diaria debería omitirse, ya que la T4L sérica au- • La TSH demora en re-equilibrarse luego de una nue-
menta significativamente (~13%) sobre el nivel ba- va dosis de tiroxina (Recomendación Nº 2). Se necesi-
sal, durante 9 horas después de la toma de la últi- tan entre 6 a 8 semanas antes de volver a evaluar la
ma dosis (225). TSH después de un cambio de dosis de L-T4 o de mar-
Idealmente se debería tomar la L-T4 antes de co- ca comercial.
• La discontinuidad o la falta de cumplimiento con el
mer, a la misma hora y con por lo menos 4 horas de
tratamiento de reemplazo con levotiroxina (L-T4) re-
separación con otros medicamentos o vitaminas. sultará en valores discordantes de TSH y T4L (TSH ele-
Muchos medicamentos pueden alterar la absorción vada / T4L elevada) debido a la persistente inestabili-
o el metabolismo de la T4 (en especial colestirami-
42 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

dad del estado tiroideo (Recomendación Nº 2). Tanto RECOMENDACIÓN Nº 24. TRATAMIENTO
la TSH como la T4L se deberían utilizar para controlar SUPRESIVO CON LEVOTIROXINA (L-T4)
a dichos pacientes.
• Los requerimientos de tiroxina disminuyen con la • LA TSH sérica se considera un factor de crecimiento
edad. Los individuos mayores quizás requieran menos para el carcinoma diferenciado de tiroides (CDT). La
de 1.0 µg/kg de peso corporal/día y se los debe ajus- dosis habitual de L-T4 utilizada para suprimir la TSH
tar muy progresivamente. Se recomienda una dosis ini- en los pacientes con CDT es 2,1µg/kg de peso corpo-
cial de 25 µg para los pacientes con evidencia de car- ral/día.
diopatía isquémica seguida de aumentos de 25 µg en • El nivel de TSH a alcanzar para el tratamiento supre-
la dosis cada 3 a 4 semanas hasta que se alcance la do- sivo con L-T4 para los pacientes con CDT se debería
sis de reemplazo completa. Algunos médicos conside- personalizar en función de la edad y del estado clíni-
ran que un valor más elevado de TSH (0,5-3,0 mUI/L) co (incluidos los factores cardíacos y el riesgo de reci-
puede ser adecuado para los pacientes ancianos. diva de CDT).
• En casos de hipotiroidismo severo una dosis inicial • Muchos médicos utilizan un valor objetivo de 0,05-
mayor de L-T4 es el medio más rápido para restaurar 0,1 mUI/L de TSH sérica para los pacientes de bajo
el nivel terapéutico de T4L porque el exceso de sitios riesgo y de <0,01 mUI/L para los de alto riesgo.
de fijación sin ocupar puede bloquear la respuesta de • Algunos médicos utilizan un objetivo terapéutico
la T4L al tratamiento. dentro de un rango bajo-normal para la TSH cuando
• Los requerimientos de tiroxina aumentan durante el los pacientes tienen niveles no detectables de Tg séri-
embarazo. El estado tiroideo se debe controlar con ca y no han tenido recidiva entre 5 y 10 años después
TSH + T4L en cada trimestre del embarazo. Se debería de la tiroidectomía.
aumentar la dosis de L-T4 (generalmente 50 µg/día) • Si la ingesta de yodo es insuficiente, el tratamiento
para mantener la TSH sérica entre 0,5 y 2,0 mUI/L y de supresión con L-T4 rara vez es una estrategia de tra-
una T4L sérica en el tercio superior del intervalo nor- tamiento eficaz para reducir la magnitud del bocio.
mal de referencia. • Con el tiempo, el bocio multinodular habitualmente
• Las mujeres post menopáusicas que comiencen un desarrolla una autonomía caracterizada por un nivel de
tratamiento de reemplazo pueden necesitar un aumen- TSH subnormal. La TSH sérica se debería controlar an-
to en la dosis de L-T4 para mantener la TSH sérica den- tes de iniciar un tratamiento de supresión con L-T4 en
tro del objetivo terapéutico. esos pacientes.
• Se recomienda una determinación anual de TSH en
los pacientes que reciben una dosis estable de
L-T4. El momento óptimo para realizar la determina- Es importante personalizar el grado de supre-
ción de TSH no está influido por el momento del día sión de la TSH considerando los factores del pa-
en que se ingiere la dosis de L-T4.
ciente, como: edad, cuadro clínico, incluidos los
• Idealmente se debería tomar la L-T4 antes de comer,
a la misma hora y con por lo menos 4 horas de sepa-
factores cardíacos y riesgo de recurrencia del car-
ración con otros medicamentos o vitaminas. La dosis cinoma diferenciado de tiroides, contra los efectos
nocturna debería tomarse dos horas después de la úl- potencialmente dañinos de un hipertiroidismo ia-
tima comida. trogénico leve sobre el corazón y los huesos (36).
• Es posible que los pacientes que inicien tratamiento Muchos médicos utilizan un valor entre 0,05-0,1
crónico con colestiramina, sulfato ferroso, carbonato mUI/L de TSH para los pacientes de bajo riesgo y
de calcio, proteína de soja, sucralfato y antiácidos que de <0,01 mUI/L para los de alto riesgo. Algunos
contengan hidróxido de aluminio, que influyen en la médicos reducen la dosis de L-T4 para obtener va-
absorción de L-T4 necesiten una dosis más elevada pa- lores normales-bajos de TSH cuando los pacientes
ra mantener la TSH dentro del rango del objetivo tera- no tienen niveles detectables de tiroglobulina (Tg)
péutico.
sérica ni recidiva 5 ó 10 años después de la tiroi-
• Es posible que los pacientes a quienes se administra
rifampicina y anticonvulsivantes que influyen en el
dectomía. El tratamiento de supresión para el bo-
metabolismo de la L-T4 también necesiten un aumen- cio no endémico se considera generalmente inefi-
to en la dosis para mantener la TSH dentro del rango caz (230). Además, los pacientes con bocio nodular
del objetivo terapéutico. a menudo ya tienen la TSH suprimida como resul-
tado de la autonomía tiroidea (213).
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 43

Fig. 4. Relación TSH / T4L séricas característica de diferentes condiciones clínicas.

(e) Determinación de TSH sérica en pacientes


RECOMENDACIÓN Nº 25. DETERMINACIÓN DE TSH
hospitalizados con (NTI)
EN PACIENTES HOSPITALIZADOS
Aunque la mayoría de los pacientes hospitaliza-
dos con enfermedades no tiroideas tienen concen- • TSH + T4L o T4T es la combinación de ensayos más
traciones normales de TSH sérica, es frecuente ob- útil para detectar disfunción tiroidea en un paciente
servar anormalidades transitorias en la TSH en el enfermo hospitalizado.
rango entre 0,02 y 20 mUI/L en ausencia de disfun- • Es más adecuado utilizar un intervalo de referencia
ción tiroidea (20, 87, 92, 93). Se ha sugerido que el uso de de TSH más amplio (0,05 a 10,0 mUI/L) en pacientes
hospitalizados. Los niveles séricos de TSH pueden vol-
un rango de referencia más amplio (0,02 –10 mUI/L)
verse transitoriamente subnormales en la fase aguda y
mejoraría el valor predictivo positivo de las determi-
volverse elevados en la fase de recuperación de una
naciones de TSH para la evaluación de los pacien- enfermedad.
tes enfermos hospitalizados (20, 92, 93, 231). La TSH se
44 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

ciones séricas de T4T y T3T pueden ser útiles para


• Un valor de TSH entre 0,05 y 10,0 mUI/L general- confirmar un diagnóstico de hipertiroidismo si se las
mente concuerda con un estado eutiroideo, o sola- analiza en función de la gravedad de la enfermedad
mente con una anormalidad tiroidea menor que se (Recomendación Nº 6). Una TSH suprimida por de-
puede reevaluar después de que pase la enfermedad. bajo de 0,02 mUI/L es menos específica para el hi-
(Esto solamente se aplica a los pacientes que no reci- pertiroidismo en individuos hospitalizados en com-
ben medicamentos como dopamina que inhibe direc- paración con los pacientes ambulatorios. Un estu-
tamente la secreción hipofisaria de TSH). dio mostró que el 14% de los pacientes hospitali-
• Un nivel normal-bajo de TSH en presencia de T4T y zados con TSH <0,01 mUI/L eran eutiroideos. No
T3T bajas puede reflejar hipotiroidismo central como
obstante, dichos pacientes tienen una respuesta
resultado de una enfermedad prolongada. Si esta es
detectable de la TSH al TRH, mientras que los pa-
una condición que requiere o no tratamiento inmedia-
to, es un tema incierto y actualmente controvertido. cientes verdaderamente hipertiroideos con NTI no
• En caso de sospecha de disfunción tiroidea, se pue- la tienen (20).
de realizar una determinación de anticuerpos anti-pe- No es fácil diagnosticar el hipotiroidismo leve
roxidasa tiroidea (TPOAb) para diferenciar enferme- (subclínico) durante la hospitalización, debido a la
dad tiroidea autoinmune de NTI. frecuencia de valores altos de TSH asociados con
las NTI. Siempre que la T4L o la T4T estén dentro
de los límites normales, es poco probable que una
anormalidad menor en la TSH (0,02-20,0 mUI/L)
debería utilizar junto con un método de estimación producida por una patología tiroidea leve (subclí-
de T4L (o T4T) para evaluar a los pacientes hospi- nica) afecte el resultado de la hospitalización, y se
talizados con síntomas clínicos o a los pacientes con puede posponer la evaluación para 2 o 3 meses
antecedentes de disfunción tiroidea (Recomendacio- después del alta. Por el contrario, los pacientes hi-
nes 6 y 25). potiroideos enfermos presentan una combinación
A veces la causa de la anormalidad de la TSH en característica de T4 baja y TSH elevada (>20
un paciente hospitalizado es evidente, como en el mUI/L) (92).
caso de los que reciben tratamiento con dopamina
o glucocorticoides (87, 92). En otros casos, esa anorma- (f) Hipotiroidismo central
lidad es transitoria, parece causada por la NTI per La relación logarítmica / lineal entre la TSH y la
se, y se resuelve cuando el paciente se recupera. Es T4L determina que los pacientes con hipotiroidismo
común observar una supresión más leve y transito- primario y una T4L por debajo de lo normal debe-
ria de TSH en el rango entre 0,02 y 0,2 mUI/L du- rían tener un valor de TSH sérica > 10mUI/L (Figu-
rante la fase aguda de una enfermedad, seguida de ra 1) [Sección-2 A1]. Cuando el grado de aumento
un rebote a valores ligeramente elevados durante la de la TSH asociado con un nivel bajo de hormona
recuperación (103). Es importante utilizar un ensayo tiroidea parece inapropiadamente bajo, se debería
de TSH con una sensibilidad funcional £ 0.02 mUI/L descartar insuficiencia hipofisaria. Normalmente no
en el ambiente hospitalario para estar en condicio- se obtendrá un diagnóstico de hipotiroidismo cen-
nes de determinar con seguridad el grado de supre- tral si se utiliza la estrategia de TSH como determi-
sión de TSH. Concretamente, el grado de supresión nación inicial (19).
de TSH se puede utilizar para discriminar a los pa- En la mayoría de los casos, el hipotiroidismo
cientes hipertiroideos con TSH marcadamente baja central se caracteriza por valores paradójicamente
(<0,02 mUI/L), de los pacientes con una supresión normales o ligeramente elevados de TSH sérica (29).
leve y transitoria por NTI (20). En un estudio realizado con pacientes con hipotiroi-
El diagnóstico de hipertiroidismo en los pacien- dismo central, el 35% de ellos tenía valores de TSH
tes con enfermedades no tiroideas puede ser un de- por debajo de lo normal pero el 41% y el 25% te-
safío porque los métodos actuales de T4L pueden nían valores inapropiadamente normales y eleva-
dar valores inapropiadamente bajos y altos en pa- dos, respectivamente (233). En la actualidad existe
cientes eutiroideos con NTI (101, 232). Las determina- amplia documentación que demuestra que los nive-
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 45

RECOMENDACIÓN Nº 26. TRATAMIENTO DE RECOMENDACIÓN Nº 27. UTILIDAD CLÍNICA


REEMPLAZO CON LEVOTIROXINA (L-T4)
TSH (SENSIBILIDAD FUNCIONAL
DE LOS ENSAYOS DE

PARA EL HIPOTIROIDISMO CENTRAL


≤ 0,02 MUI/L)
• La determinación de TSH sérica es el ensayo más
• El objetivo terapéutico del tratamiento de reem-
sensible para la detección de hipo o hipertiroidismo
plazo con L-T4 para el hipotiroidismo central debido
primario leve (subclínico) y clínico en los pacientes
a disfunción hipofisaria o hipotalámica es una T4L
ambulatorios.
sérica en el tercio superior del intervalo de referen-
• La mayoría (>95%) de los individuos sanos eutiroi-
cia.
deos tiene una concentración de TSH sérica por deba-
• Cuando se utiliza la T4L como punto final terapéu-
jo de 2,5 mUI/L. Los pacientes ambulatorios con TSH
tico para el hipotiroidismo central, la dosis diaria de
sérica por encima de 2,5 mUI/L confirmada por una
L-T4 debe suprimirse el día de la determinación de
segunda determinación realizada entre 3 y 4 semanas
T4L. (La T4L sérica aumenta (~13 %) por sobre el
después, pueden hallarse en las primeras etapas de
nivel basal durante 9 horas después de la ingestión
disfunción tiroidea, en particular si se detectan TPOAb.
de L-T4).
• La determinación de TSH sérica es el punto final te-
rapéutico para el ajuste de dosis de reemplazo con L-
T4 para el hipotiroidismo primario (ver Recomenda-
ción Nº 23) y para controlar el tratamiento de supre-
sión con L-T4 para el carcinoma diferenciado de tiroi-
les paradójicamente elevados de TSH observados en des (ver Recomendación Nº 24).
el hipotiroidismo central derivan de la medición de • Las determinaciones de TSH sérica son más confiables
isoformas biológicamente inactivas de TSH secreta- que las de T4L en pacientes hospitalizados con enferme-
das cuando hay daño hipofisario o cuando la esti- dades no tiroideas que no reciban dopamina. La TSH sé-
mulación del TRH hipotalámico es deficiente (197). rica se debería utilizar junto con la T4T o T4L para los pa-
Los valores inapropiados de TSH se deben a que los cientes hospitalizados (Recomendación Nº 6 y 26).
anticuerpos monoclonales utilizados en los ensayos • La TSH no se puede utilizar para diagnosticar hipo-
actuales de TSH no pueden distinguir entre las iso- tiroidismo central porque los ensayos actuales de TSH
miden isoformas biológicamente inactivas de TSH.
formas de TSH de diferente actividad biológica, ya
• El hipotiroidismo central se caracteriza por un nivel
que la actividad biológica de la TSH está determina- inapropiadamente normal o ligeramente elevado de
da no por la estructura proteica sino por el grado de TSH sérica y una respuesta nula al TRH (aumentos <2
glucosilación, específicamente la sialización de la veces el basal / incrementos £ 4.0 mUI/L).
molécula. Parecería que una secreción normal de • Debería ser considerado un diagnóstico de hipotiroi-
TRH es esencial para la sialización normal de la TSH dismo central en caso de disminución de T4L y míni-
y para la asociación de las subunidades de TSH pa- ma elevación de la TSH sérica (<10 mUI/L).
ra formar moléculas maduras y biológicamente acti- • Las determinaciones de TSH son una importante
vas (29, 197, 234). La actividad biológica de la TSH en el prueba de screening pre-natal y en el primer trimestre
hipotiroidismo central parece guardar una relación de embarazo para detectar hipotiroidismo leve (subclí-
inversa con el grado de sialización de la TSH y con nico) en la madre (ver Recomendación Nº 4).
• Una TSH baja en un bocio multinodular sugiere hiper-
el nivel de T4L en la circulación (29). Las pruebas de
tiroidismo leve (subclínico) debido a autonomía tiroidea.
estimulación de TRH pueden resultar útiles para el • Se requiere una determinación de TSH para confir-
diagnóstico específico del hipotiroidismo central mar que un nivel de hormona tiroidea alto se debe a
(235). Las respuestas típicas de la TSH en esas condi-
hipertiroidismo y no a una anormalidad en las proteí-
ciones están bloqueadas (aumentos menores al do- nas transportadoras como en la hipertiroxinemia disal-
ble del basal/ incrementos £ 4.0 mUI/L) y el pico buminémica familiar (FDH).
puede estar demorado (197, 204, 235, 236). Además, la res- • La TSH sérica es la determinación primaria para la
puesta de T3 a la TSH estimulada por TRH está blo- detección de disfunción tiroidea inducida por amioda-
queada y se correlaciona con la actividad biológica rona (ver Recomendación Nº5).
de la TSH (197, 237, 238).
46 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

(g) Síndromes de secreción inapropiada de TSH (i) Tumores hipofisarios secretantes de TSH
Como se muestra en la Tabla 1, las anormalida- Los tumores hipofisarios que hipersecretan TSH
des de las proteínas transportadoras o los problemas no son frecuentes y representan menos del 1% de
técnicos de los ensayos son las causas más comunes los casos de secreción inapropiada de TSH (27, 28). Es-
de una relación T4L/TSH discordante. La disociación tos tumores a menudo se presentan como un ma-
aparentemente paradójica entre los niveles altos de croadenoma con síntomas de hipertiroidismo, aso-
hormonas tiroideas y una TSH sérica no suprimida ciado a TSH no suprimida y evidencia mediante re-
ha llevado al uso generalizado del término “síndro- sonancia magnética (MRI), de masa hipofisaria (28).
me de secreción inapropiada de TSH” para describir Después de descartar una razón técnica para la
estas patologías. Cada vez más están siendo identi- elevación paradójica de TSH (por ejemplo anticuer-
ficadas muestras que presentan una relación pos heterófilos HAMA), el diagnóstico de tumor hi-
TSH/T4L discordante, dada la disponibilidad y uso pofisario secretante de TSH generalmente se realiza
generalizados de ensayos de TSH sensibles, que sobre la base de:
pueden detectar en forma confiable concentraciones • Falta de respuesta de la TSH al TRH
de TSH subnormales [Sección-3 C2]. Como se mues- • Una subunidad alfa de TSH alta.
tra en la Tabla 1, es fundamental descartar primero • Una relación subunidad alfa/TSH aumentada
las causas probables de una discordancia en el índi- • La demostración de una masa hipofisaria me-
ce TSH/T4L (por ejemplo, interferencia técnica o diante resonancia magnética
anormalidades en las proteínas transportadoras). Es-
ta confirmación se debería realizar sobre una nueva
muestra determinando TSH junto con las hormonas
tiroideas libres y totales, con el método de otro fa- RECOMENDACIÓN Nº 28. PARA LOS FABRICANTES DE
bricante. Patologías menos frecuentes, como tumo- EQUIPOS DE REACTIVOS DE TSH
res hipofisarios secretantes de TSH o resistencia a
• Es necesario que los fabricantes que comercializan
las hormonas tiroideas sólo deberían considerarse
los reactivos para determinación de TSH con diversas
después de eliminar las causas más comunes de dis-
sensibilidades interrumpan la comercialización del
cordancia. producto menos sensible.
Una vez confirmada la anormalidad en el perfil • No se justifica que el precio de los ensayos de TSH
bioquímico, se debería descartar primero la posibi- se establezca en función de la sensibilidad.
lidad de que un tumor hipofisario secretante de • No existe justificación científica para realizar prime-
TSH sea la causa de los valores paradójicos de TSH ro un ensayo de TSH menos sensible y luego pasar a
antes de efectuar el diagnóstico de resistencia a las otro más sensible.
hormonas tiroideas. Cabe observar que es posible • Los fabricantes deberían ayudar a que los laborato-
la coexistencia de ambas patologías (247). Los tumo- rios puedan establecer la sensibilidad funcional inde-
res hipofisarios secretantes de TSH tienen perfiles pendientemente de ellos, suministrándoles mezclas de
suero humano con TSH adecuadamente baja cuando
bioquímicos similares a la resistencia a las hormo-
se les solicite.
nas tiroideas pero se los puede distinguir de éstas
• Los fabricantes deberían indicar el uso de factores de
mediante la determinación de subunidad alfa de calibración, en especial si estos factores dependen de
TSH y diagnóstico por imágenes. Además, las prue- cada país.
bas de estimulación con TRH pueden ser ocasio- • Los fabricantes deberían citar la el porcentaje de re-
nalmente útiles para desarrollar el diagnóstico dife- cuperación de la preparación de referencia de TSH a
rencial. Concretamente, una prueba de estimula- la concentración indicada como sensibilidad funcional.
ción de TRH y una prueba de supresión de T3 con • Los folletos con los procedimientos técnicos dentro
respuesta bloqueada son características de la mayo- de la caja del equipo deberían:
ría de los tumores hipofisarios secretantes de TSH, • Documentar la sensibilidad funcional real de los
mientras que en la mayoría de los casos de resisten- métodos utilizando el protocolo de la Recomenda-
ción Nº 20.
cia a las hormonas tiroideas se observa una respues-
ta normal (245).
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 47

te que se considere el diagnóstico de resistencia a


• Citar la sensibilidad funcional que se puede al- las hormonas tiroideas al encontrar un paciente con
canzar a través de un rango de laboratorios clínicos aumento en los niveles de estas hormonas asociado
utilizando el mismo equipo de reactivos. con un nivel paradójicamente normal o elevado de
• Mostrar el perfil de precisión interensayo típico TSH (242, 246). A menudo esos pacientes han recibido
que se espera de un laboratorio clínico. un diagnóstico erróneo de hipertiroidismo y se los
• Recomendar el uso de sensibilidad funcional y ha sometido a una cirugía tiroidea innecesaria o a la
no analítica para determinar el valor más bajo repor- ablación de la glándula con radioyodo (242).
table. (La sensibilidad analítica insta a los laborato-
rios a que adopten límites de detección no reales).
D. Autoanticuerpos Antitiroideos
(TPOAb, TgAb y TRAb)

(ii) Resistencia a las hormonas tiroideas La enfermedad tiroidea autoinmune (AITD) cau-
Generalmente, la resistencia a las hormonas tiroi- sa daño celular y altera la función tiroidea por me-
deas es provocada por una mutación en el gen del canismos humorales y celulares. Se produce daño
receptor de las hormonas tiroideas (TR-beta), que celular cuando los linfocitos-T sensibilizados o los
ocurre en 1:50.000 nacimientos vivos (239-242). Aunque autoanticuerpos se fijan a las membranas celulares
la presentación clínica puede variar, los pacientes tiroideas provocando lisis celular y reacciones infla-
tienen un perfil bioquímico similar. La T4L y la T3L matorias. Las alteraciones en la función tiroidea se
están típicamente elevadas (desde un grado mínimo producen por acción de los autoanticuerpos estimu-
hasta duplicar o triplicar el valor por sobre el límite lantes o bloqueantes sobre los receptores de mem-
normal superior) y se asocian con una TSH normal brana de las células. Tres autoantígenos principales
o ligeramente elevada que responde a la estimula- participan en la AITD: Tiroperoxidasa (TPO), Tiro-
ción con TRH (242, 243). Sin embargo, se debería reco- globulina (Tg) y Receptor de TSH. También se han
nocer que la secreción de TSH no es inapropiada ya descripto otros autoantígenos, como el co-transpor-
que se reduce la respuesta de los tejidos a la hor- tador Na+/I-(NIS), pero todavía no tienen un rol
mona tiroidea y en consecuencia se requieren nive- diagnóstico en la enfermedad tiroidea autoinmune
les más altos de hormonas tiroideas para mantener (248). Los anticuerpos anti-receptor de TSH (TRAb)

el estado metabólico normal. Los pacientes con re- son heterogéneos y pueden simular la acción de
sistencia a las hormonas tiroideas suelen tener bo- TSH y causar hipertiroidismo, como se observa en
cio como resultado de la hipersecreción crónica de la enfermedad de Graves, o pueden antagonizar la
una isoforma de TSH híbrida con mayor actividad acción de TSH y causar hipotiroidismo. Esta segun-
biológica (199, 244). La manifestación clínica del exceso da posibilidad se produce en el neonato como re-
de la hormona tiroidea cubre un amplio espectro. sultado del pasaje trasplacentario de los anticuerpos
Algunos pacientes parecen tener un metabolismo de la madre con AITD. Los anticuerpos anti TPO
normal con valores casi normales de TSH y en ellos (TPOAb) parecen participar en los procesos tisula-
el defecto del receptor parece estar compensado res destructivos asociados con el hipotiroidismo que
por un aumento en los niveles de la hormona tiroi- se observan en la tiroiditis de Hashimoto y en la ti-
dea (resistencia generalizada a las hormonas tiroideas). roiditis atrófica. La aparición de TPOAb generalmen-
Otros pacientes parecen ser hipermetabólicos y tie- te precede al desarrollo de disfunción tiroidea. Al-
nen un defecto que afecta selectivamente a la hipó- gunos estudios sugieren que los TPOAb pueden ser
fisis (resistencia hipofisaria a la hormona tiroidea). citotóxicos para la tiroides (249, 250). El rol patológico
Los rasgos distintivos de la resistencia a las hor- de los TgAb no está aún del todo claro. En áreas su-
monas tiroideas son la presencia de una TSH no su- ficientes de yodo, los TgAb se determinan principal-
primida junto con una respuesta adecuada al TRH a mente como ensayo adjunto a la determinación de
pesar del aumento en los niveles de hormonas tiroi- Tg sérica, porque la presencia de estos anticuerpos
deas (242, 245). Aunque no sea frecuente, es importan- puede interferir con los métodos de Tg [Sección-3
48 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

E6]. En áreas deficientes de yodo, las determinacio- tiroideos para el control del tratamiento de la AIDT
nes de TgAb pueden resultar útiles para la detección (263), ya que este se dirige a la consecuencia (disfun-

de enfermedad tiroidea autoinmune en pacientes ción tiroidea) y no a la causa (autoinmunidad) de la


con bocio nodular y para el control del tratamiento enfermedad. Sin embargo, en las concentraciones
con yodo en el bocio endémico. de los autoanticuerpos reflejan con frecuencia una
Los métodos de laboratorio que determinan los modificación en la actividad de la enfermedad.
procesos autoinmunes mediados por células no es-
tán disponibles por el momento. Sin embargo, en la
mayoría de los laboratorios clínicos se dispone de 2. Nomenclatura de los Ensayos de Anticuerpos
ensayos para evaluar la respuesta humoral, por Antitiroideos
ejemplo los anticuerpos antitiroideos. Lamentable-
mente, el uso diagnóstico y pronóstico de las deter- La nomenclatura utilizada para los autoanticuer-
minaciones de anticuerpos antitiroideos está afecta- pos antitiroideos ha sido muy variada, en particular
do por los problemas técnicos que se discutirán. Si en el caso de los anticuerpos anti-receptor de TSH
bien los ensayos de autoanticuerpos tienen utilidad (LATS, TSI, TBII, TSH-R y TRAb). Los términos in-
clínica en una serie de patologías, se los debe em- cluidos en esta monografía, TgAb, TPOAb y TRAb
plear selectivamente. son los recomendados internacionalmente. Estos
términos corresponden a las entidades moleculares
(inmunoglobulinas) que reaccionan con los autoan-
1. Significado Clínico de los Autoanticuerpos tígenos específicos reconocidos por la prueba de la-
Antitiroideos boratorio. Las diferencias entre métodos pueden
sesgar la medición de estas entidades moleculares;
Los TPOAb y/o TgAb están presentes frecuente- por ejemplo: los métodos pueden detectar sólo IgG
mente en el suero de pacientes con AITD (251). Sin o IgG más IgM; TPOAb o anticuerpos dirigidos con-
embargo, a veces los pacientes con AIDT tienen an- tra TPO y otros autoantígenos de membrana; TRAb
ticuerpos negativos. Los TRAb están presentes en la inhibidores de la unión de TSH y/o estimulantes del
mayoría de los pacientes con enfermedad de Graves receptor de TSH.
pasada o presente. Durante el embarazo, la presen-
cia de TRAb es un factor de riesgo de disfunción ti-
roidea fetal o neonatal a causa del pasaje trasplacen- 3. Especificidad de los Ensayos de Anticuerpos
tario de los mismos. (252, 253). La prevalencia de au- Antitiroideos
toanticuerpos tiroideos aumenta cuando los pacien-
tes tienen enfermedades autoinmunes no tiroideas, Ciertos problemas específicos han obstaculizado
como diabetes tipo 1 y anemia perniciosa (254). El en- el uso de los ensayos para anticuerpos antitiroideos.
vejecimiento también se asocia con la aparición de Los estudios muestran que los resultados varían am-
anticuerpos antitiroideos y con un aumento en la pliamente dependiendo del método utilizado. Esto
prevalencia de AITD (255). El significado de los valo- se debe a diferencias tanto en la sensibilidad como
res bajos de anticuerpos antitiroideos en individuos en la especificidad, y a la ausencia de una estanda-
clínicamente eutiroideos no se conoce (256). Sin em- rización adecuada. En los últimos años, los estudios
bargo, estudios longitudinales sugieren que los a nivel molecular han demostrado que los autoanti-
TPOAb pueden ser un factor de riesgo de futura dis- cuerpos reaccionan con sus autoantígenos blanco,
función tiroidea incluyendo tiroiditis post parto uniéndose a dominios o epitopes “conformaciona-
(TPP) y complicaciones autoinmunes después del les”. El término “conformacional” se refiere al requi-
tratamiento con algunos agentes terapéuticos (50, 257, sito de una estructura tridimensional específica para
258). Estos incluyen amiodarona para las cardiopatías, cada epitope reconocido por los autoanticuerpos.
interferón-alfa para la hepatitis C crónica, y litio pa- En consecuencia, los resultados de los ensayos de-
ra los trastornos psiquiátricos (75, 259-262). Generalmen- penden fundamentalmente de la estructura molecu-
te no se recomienda el uso de los anticuerpos anti- lar del antígeno utilizado en el mismo. Los peque-
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 49

topes en comparación con los anticuerpos heterólo-


RECOMENDACIÓN Nº 29. DIFERENCIAS DE gos. Los métodos actuales presentan amplias dife-
SENSIBILIDAD Y ESPECIFICIDAD ENTRE MÉTODOS PARA rencias en cuanto al reconocimiento de epitopes.
DETERMINACIÓN DE ANTICUERPOS ANTITIROIDEOS Específicamente, que pueden provenir de un reco-
nocimiento erróneo de un epitope que introduce un
• Conocer que los resultados de los anticuerpos anti sesgo en la población de autoanticuerpos analizada.
tiroideos son dependientes del método.
Esto genera intervalos de referencia muy diferentes,
• Los anticuerpos antitiroideos presentes en suero son
heterogéneos (reconocen diferentes epitopes antigéni-
incluso cuando los métodos están estandarizados
cos), y diferentes métodos reconocen diferentes pobla- contra la misma preparación de referencia internacio-
ciones de anticuerpos. nal. Cualquiera sea el autoantígeno, los anticuerpos
• Las diferencias entre ensayos de anticuerpos anti- antitiroideos claramente no son entidades molecula-
tiroideos reflejan diferentes preparaciones de recep- res únicas sino más bien mezclas de inmunoglobu-
tores (ensayos de radiorreceptor) o de células (bioen- linas que solamente tienen en común su capacidad
sayos) usadas en el ensayo. de interactuar con Tg, TPO o el receptor de TSH.
• Las diferencias entre ensayos pueden ser el resulta- Las diferencias en la sensibilidad de los métodos
do de contaminación del reactivo que contiene el para autoanticuerpos pueden derivar del diseño del
antígeno con otros autoantígenos. ensayo (por ejemplo RIA (competitivo) versus IMA
• Las diferencias entre ensayos pueden provenir del
de dos sitios (no competitivo), como del tipo de se-
diseño del ensayo (por ejemplo, inmunoensayo com-
petitivo versus no-competitivo) así como de la señal
ñal (por ejemplo radioisotópica versus quimiolumi-
utilizada. niscente). Las diferencias en especificidad pueden
• Las diferencias entre ensayos pueden ser el resulta- ocurrir como resultado de la contaminación de la
do del uso de diferentes estándares secundarios. preparación del autoantígeno con otros autoantíge-
nos (por ejemplo, microsomas tiroideos versus TPO
purificada). Además, el error en el reconocimiento
ños cambios en la estructura de un determinado de un epitope puede llevar a la subestimación de la
epitope pueden resultar en una disminución o pér- cantidad total de autoanticuerpos circulantes pre-
dida de reconocimiento del autoantígeno por parte sentes, y a una disminución en la sensibilidad.
del anticuerpo dirigido hacia ese epitope. Última- La sensibilidad funcional se debería determinar
mente, se ha demostrado la especificidad doble de con mezclas de suero humano que contengan una
los anticuerpos TGPO, que reconocen tanto Tg co- concentración baja de autoanticuerpos. El protocolo
mo TPO en el suero de pacientes con AITD (264). para la sensibilidad funcional debería ser el mismo
Se conoce desde hace mucho tiempo que los au- que se describió para TSH (Recomendación Nº 20).
toanticuerpos están dirigidos contra unos pocos epi- La precisión inter-ensayo de los ensayos de TgAb
utilizados para el seguimiento de los pacientes con
CDT y TgAb positivos se debería evaluar durante un
lapso más prolongado (entre 6 y 12 meses) acorde
RECOMENDACIÓN Nº 30. SENSIBILIDAD FUNCIONAL
con la frecuencia con que se los solicita para el con-
DE LOS ENSAYOS DE ANTICUERPOS ANTITIROIDEOS
trol seriado en la práctica clínica.
La sensibilidad funcional de los ensayos de
autoanticuerpos antitiroideos debería:
4. Estandarización de los Ensayos de Anticuerpos
• Determinarse con mezclas de suero humano que
contengan una concentración baja de autoanticuerpos. Antitiroideos
• Determinarse utilizando el mismo protocolo descrip-
to para TSH (Recomendación Nº 20) pero analizando La estandarización de los ensayos de anticuerpos
la precisión entre ensayos durante un lapso entre 6 a antitiroideos no ha alcanzado todavía un nivel ópti-
12 meses que represente una adecuada frecuencia mo. Se dispone de las Preparaciones Internaciona-
clínica de evaluación. les de Referencia MRC 65/93 para TgAb, y MRC
66/387 para TPOAb) del National Council for Biolo-
50 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

un dominio intracelular corto. La TPO participa de


RECOMENDACIÓN Nº 31. PARA LA ESTANDARIZACIÓN la síntesis de hormonas tiroideas en el polo apical
DE LOS ENSAYOS DE ANTICUERPOS ANTITIROIDEOS de la célula folicular. Se han descripto varias isofor-
POR LOS FABRICANTES. mas relacionadas con empalmes alternativos del
mRNA de TPO. Las moléculas de TPO también pue-
• Los ensayos se deberían estandarizar contra las den diferir en su estructura tridimensional, grado de
Preparaciones Internacionales de Referencia MRC.
glucosilación y unión a grupos hemo. La mayoría de
MRC 65/93 para TgAb, MRC 66/387 para TPOAb y
MRC 90/672 para TRAb
las moléculas de TPO no alcanzan la membrana api-
• Se deberían elaborar nuevas Preparaciones cal y son degradadas intracelularmente.
Internacionales de Referencia para TgAb y TPOAb. Los anticuerpos anti TPO se describieron inicial-
• Los estándares secundarios se deberían caracterizar mente como autoanticuerpos anti-microsomales
completamente para evitar el desvío entre diferentes (AMA) ya que se encontró que reaccionaban con
métodos. preparaciones crudas de membranas de células ti-
• Cuando fuera posible se deberían utilizar prepara- roideas. Más tarde, el antígeno microsomal se iden-
ciones de referencia o preparaciones con antígeno tificó como TPO (265). Los antiguos métodos inmuno-
recombinante. fluorescentes para AMA así como los métodos de
aglutinación pasiva con glóbulos rojos tanados, o
micropartículas de gel sensibilizadas, todavía se uti-
gical Standards and Control en Londres, Reino Uni- lizan en la actualidad, además de los nuevos inmu-
do (www.mrc.ac.uk). Estos Estándares de Referen- noensayos de TPOAb, más sensibles, tanto compe-
cia se prepararon y se liofilizaron a partir de una titivos como no competitivos. Estos nuevos inmu-
mezcla de suero de pacientes con enfermedad tiroi- noensayos para TPOAb han venido reemplazando
dea autoinmune ¡hace 40 años! en gran medida a los antiguos métodos de aglutina-
Se sabe que los anticuerpos liofilizados tienden ción para AMA porque son cuantitativos, más sensi-
a degradarse con el tiempo. Esta degradación pue- bles y se los puede automatizar con facilidad. Sin
de introducir un sesgo en la capacidad de unión de embargo, su variabilidad en cuanto a sensibilidad y
estas preparaciones de referencia hacia anticuerpos especificidad es muy amplia. Parte de esta variabili-
más estables, de importancia clínica desconocida. dad proviene de las diferencias en las preparaciones
Debido a la escasez de estas preparaciones, sólo se de TPO utilizadas en los diversos equipos de reacti-
las utiliza como estándares primarios para calibrar vos. Cuando se extrae la TPO de tejido tiroideo hu-
los métodos de ensayo. Los equipos comerciales mano, se puede usar como preparación de membra-
contienen estándares secundarios que difieren para na cruda o puede ser purificada por diferentes mé-
cada método. Con las calibraciones actuales, los en- todos. La especificidad de los ensayos también pue-
sayos varían según las condiciones experimentales y de diferir debido a la contaminación con otros antí-
la preparación antigénica usada por el fabricante.
Esto puede introducir un sesgo adicional en la de-
tección de anticuerpos heterogéneos presentes en RECOMENDACIÓN Nº 32: METODOLOGÍA
las muestras de pacientes. En el caso de los TRAb, QUE SE PREFIERE PARA TPOAB
la preparación de referencia MRC 90/672 es más re-
ciente (1990) pero actualmente es usada por unos • Los inmunoensayos de TPOAb sensibles y específi-
pocos fabricantes. cos, que utilizan como antígeno preparaciones ade-
cuadas de TPO humana nativa o recombinante alta-
mente purificada deberían reemplazar a los antiguos
métodos de aglutinación, insensibles y semicuantita-
5. Determinaciones de TPOAb tivos, para determinar anticuerpos
anti-microsomales (AMA). (Nivel de consenso 90%)
La Peroxidasa tiroidea (TPO), de 110 KD es una • El significado clínico de las concentraciones bajas
hemoglucoproteína unida a membrana, con un gran de TPOAb requiere más estudio.
dominio extracelular, un dominio transmembrana y
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 51

genos tiroideos, en especial Tg y/o por variaciones


en la estructura tridimensional de la TPO. El uso de RECOMENDACIÓN Nº 33. INTERVALOS DE REFERENCIA
TPO humana recombinante (rhTPO), elimina el ries- PARA ENSAYOS DE ANTICUERPOS ANTITIROIDEOS
go de contaminación pero no soluciona el problema Los intervalos de referencia para los ensayos de
de las diferencias en la estructura de la TPO que de- anticuerpos antitiroideos se deberían establecer
penden de la técnica utilizada para aislarla. La ma- a partir de 120 individuos “normales” sin ante-
yoría de los ensayos actuales para TPOAb se cuan- cedentes de enfermedad tiroidea: La selección
tifican en unidades internacionales usando la prepa- de los individuos debería minimizar la inclusión
ración de referencia MRC 66/387. Lamentablemente, de personas con predisposición a enfermedad
el uso de este estándar primario no disminuye las tiroidea autoinmune. Los individuos normales
variaciones entre métodos como resulta evidente al deberían ser:
observar la amplia variabilidad en los límites de sen- • Varones
sibilidad que declaran los diferentes fabricantes de • Jóvenes (< 30 años de edad)
reactivos (rango <0,3 a <20 kUI/L), como así tam- • Tener niveles de TSH sérica entre 0,5 y 2,0 mUI/L
bién las diferencias en los intervalos de referencia. • Sin bocio
• Sin antecedentes personales ni familiares de enfer-
(a) Prevalencia e Intervalos de Referencia de los medad tiroidea
TPOAb • Sin enfermedad autoinmune no tiroidea (por ejem-
plo: lupus o diabetes)
La estimación de la prevalencia de los TPOAb
depende de la sensibilidad y especificidad del mé-
todo utilizado. El reciente estudio NHANES III en
EE.UU de ~17,000 individuos sin enfermedad tiroi- y es posible que no tengan significado patológico.
dea aparente, informó niveles detectables de El estudio de seguimiento de la cohorte de
TPOAb en el 12% de los individuos utilizando un in- Whickham realizado durante 20 años informó que la
munoensayo competitivo (18). Aún no está claro si presencia de títulos detectables de TPOAb (medidos
los valores bajos de TPOAb detectados en indivi- como AMA) no sólo era un factor de riesgo para hi-
duos sanos o en pacientes con enfermedades au- potiroidismo sino que la detección de AMA prece-
toinmunes no tiroideas reflejan la fisiología normal, día el desarrollo de un aumento en la TSH (Figura
preceden a la enfermedad tiroidea autoinmune o 5) (35). Esto sugiere que TPOAb detectables constitu-
son un problema de especificidad del ensayo. yen un factor de riesgo para AITD (Recomendación
Los valores de referencia para los ensayos de Nº 34). Sin embargo, individuos con niveles bajos de
TPOAb son altamente variables y a menudo se esta- TPOAb hubieran tenido AMA no detectables con los
blecen arbitrariamente, de modo se obtengan resul- métodos más antiguos utilizados en este estudio (35).
tados positivos en una amplia mayoría de pacientes De hecho, los individuos AMA negativos con valo-
con AITD y negativos en la mayoría de individuos res de TSH > 2 mUI/L tuvieron un aumento en el
sin evidencia clínica de AIDT. El límite inferior nor- riesgo a largo plazo de hipotiroidismo, lo que sugie-
mal parece estar relacionado con factores técnicos. re que niveles bajos de TPOAb pueden ser clínica-
Específicamente, los ensayos que tienen un límite mente significativos (35). En consecuencia, todavía si-
de detección bajo (<10 kUI/L) informan valores no gue debatiéndose si los individuos con niveles bajos
detectables de TPOAb en individuos normales es- de TPOAb y/o TgAb debieran considerarse norma-
trictamente seleccionados. Estos métodos sugieren les hasta que estudios de seguimiento a largo plazo
que la presencia de TPOAb es un hallazgo patológi- de estos individuos demuestren que no tienen un
co. Por el contrario, los ensayos de TPOAb que re- riesgo incrementado de desarrollar disfunción tiroidea.
portan límites de detección más altos (>10kUI/L) ci- Recientes estudios sugieren que un número sig-
tan un “rango normal de referencia”. Como estos úl- nificativo de individuos con TSH entre 2,6 y 4,0
timos, no parecen tener una mayor sensibilidad pa- mUI/ml tienen un perfil hipoecoico al ultrasonido,
ra detectar AITD, estos valores del “rango normal” sugestivo de infiltración linfocítica (Figura 5) (496, 497),
pueden representar “ruido” inespecífico del ensayo por lo cual el examen morfológico de la tiroides por
52 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

ultrasonido es actualmente el modo más sensible de de hipotiroidismo secundario a la tiroiditis de Has-


determinar de manera temprana AIDT (496, 497). Sin himoto. De hecho, cuando se determinan los
embargo, el TPOAb es el marcador de riesgo de TPOAb mediante un inmunoensayo sensible, más
AIDT más fácilmente accesible, aunque la especifi- del 95% de los individuos con tiroiditis de Hashimo-
cidad y sensibilidad de los inmunoensayos actuales to tienen valores detectables de TPOAb. Estos mé-
sean aún subóptimas para detectar enfermedad tem- todos también detectan TPOAb en la mayoría de los
prana en individuos con hipoecogenicidad (497). pacientes con enfermedad de Graves (~85%) (254).
El criterio empleado para seleccionar sujetos pa- Las pacientes con TPOAb detectados a comienzos
ra la cohorte normal utilizada para establecer el ran- del embarazo presentan riesgo de desarrollar tiroidi-
go de referencia para autoanticuerpos es crítico. Di- tis post parto (50). Los pacientes con síndrome de
cha cohorte debería estar constituida por varones jó- Down tienen un mayor riesgo de desarrollar disfun-
venes, bioquímicamente eutiroideos (TSH 0,5 a 2,0 ción tiroidea debido a enfermedad tiroidea autoin-
mUI/L) sin bocio ni antecedentes familiares de mune y es importante que se sometan a una evalua-
AITD. Este riguroso proceso de selección tendría ción anual de TSH y TPOAb (267, 268).
mínimas probabilidades de incluir individuos con Informes recientes sugieren que puede existir
predisposición a enfermedad tiroidea autoinmune. compromiso del coeficiente intelectual en niños na-
cidos de madres con TSH alta o TPOAb detectables
(b) Usos Clínicos de las Determinaciones de durante el embarazo (63, 65). Este hallazgo ha llevado
TPOAb a la recomendación de que todas las embarazadas
La determinación de TPOAb es el método más se realicen TSH y TPOAb en el primer trimestre.
sensible para la detección de enfermedad tiroidea [Sección-2 A3 y Recomendación Nº 4]. Además, los
autoinmune (266). Como se muestra en la figura 5, los TPOAb pueden jugar un rol en la infertilidad, ya
TPOAb habitualmente son la primera anomalía bio- que su presencia se ha asociado con el aumento de
química que aparece en la evolución del desarrollo riesgo de aborto espontáneo y de la dificultad para

Fig. 5. Etapas del desarrollo de la disfunción tiroidea autoinmune.


BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 53

tructura inmunológica de la Tg es extremadamente


RECOMENDACIÓN Nº 34. USOS RECOMENDADOS PARA
compleja. Las características de las preparaciones de
LAS DETERMINACIONES DE TPOAB
Tg pueden variar ampliamente en función del tejido
• Diagnóstico de Enfermedad Tiroidea Autoinmune tiroideo humano inicial y del proceso de purifica-
• Como Factor de riesgo de Enfermedad Tiroidea Au- ción utilizado. Esta es la primera clave para explicar
toinmune el motivo por el cual los ensayos de TgAb, al igual
• Como Factor de riesgo de hipotiroidismo durante el que los de Tg [Sección-3 E2] sean tan difíciles de es-
tratamiento con Interferón alfa, Interleuquina 2 o Litio tandarizar.
• Como Factor de riesgo de disfunción tiroidea duran-
te el tratamiento con amiodarona (a) Metodología para TgAb
(ver Recomendación Nº 5)
Al igual que con los métodos de TPOAb, el dise-
• Como Factor de riesgo de hipotiroidismo en pacien-
tes con síndrome de Down
ño de los ensayos de TgAb ha evolucionado desde
• Como Factor de riesgo de aborto espontáneo y fra- los ensayos por inmunofluorescencia de secciones
caso de la fertilización in vitro de tejido tiroideo, a los métodos de aglutinación pa-
• Factor de riesgo de disfunción tiroidea durante el siva de eritrocitos tanados, y en la actualidad a los
embarazo y de tiroiditis post parto inmunoensayos competitivos y no competitivos. Es-
ta evolución técnica ha mejorado tanto la sensibili-
dad como la especificidad de las determinaciones
concebir mediante fertilización in vitro (269). de TgAb. No obstante, debido a que los métodos
La presencia de TPOAb está sólidamente estable- más antiguos y los más nuevos todavía se utilizan si-
cida como factor de riesgo para la disfunción tiroi- multáneamente en los laboratorios clínicos, la sensi-
dea cuando los pacientes están en tratamiento con bilidad y especificidad de los métodos disponibles
litio, amiodarona, interleuquina 2 o interferón alfa puede variar considerablemente en función del la-
(75, 259, 260, 261, 270). Durante el tratamiento con interferón
boratorio en donde se realicen. Los ensayos están
alfa, una enfermedad tiroidea autoinmune preexis- calibrados contra preparaciones purificadas o crudas
tente o TPOAb detectables, son factores predispo- de TgAb que se obtienen de una mezcla de sueros
nentes para el desarrollo de enfermedad tiroidea de pacientes o de preparaciones de inmunoglobuli-
(262). No obstante, parece no haber aumento en la
nas de donantes de sangre. Esta diversidad de están-
frecuencia de disfunción tiroidea en el tratamiento dares secundarios a menudo, pero no siempre, se
con interferón beta (271). La presencia de TPOAb pre- calibra contra el estándar primario (MRC 65/93). Sin
via al tratamiento presenta una sensibilidad del 20%, embargo, la estandarización con MRC 65/93 no ga-
una especificidad del 95% y un valor predictivo po- rantiza que los diferentes métodos guarden similitud
sitivo del 66,6% para el desarrollo de disfunción ti- cuantitativa ni cualitativa. Otras razones para las di-
roidea (272). ferencias entre los métodos pueden estar relaciona-
das con la heterogeneidad de los TgAb en sí mis-
mos. Esta heterogeneidad es restringida en pacien-
6. Determinaciones de Anticuerpos Anti Tiroglo- tes con AITD comparada con otras enfermedades ti-
bulina (TgAb)

La tiroglobulina (Tg), globulina protiroidea, es


una glucoproteína soluble de alto peso molecular RECOMENDACIÓN Nº 35. PARA LOS FABRICANTES
(660 kDA) constituida por dos subunidades idénti- QUE DESARROLLAN MÉTODOS PARA TGAB
cas. Está presente con un alto grado de heterogenei- • La especificidad de epitopes de los métodos para
dad debido a diferencias en las modificaciones post- TgAb debería ser amplia y no restringida, ya que
translacionales (glucosilación, yodinación, sulfata- puede ser más amplia para los pacientes con TgAb
ción, etc.). Durante el proceso de síntesis y libera- positivos con CDT en comparación con los pacientes
ción de la hormona tiroidea, se produce polimeriza- con enfermedad tiroidea autoinmune.
ción y degradación de la Tg. En consecuencia, la es-
54 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

roideas como el carcinoma diferenciado (CDT) en


que aparece como menos restringida (273). Este he- RECOMENDACIÓN Nº 36. DETERMINACIÓN DE TGAB
cho refleja diferencias en la expresión de los dife- EN PATOLOGÍAS NO-NEOPLÁSICAS

rentes autoanticuerpos que normalmente pueden • En áreas suficientes en yodo, en general no es nece-
estar presentes en niveles muy bajos en individuos sario ni costo-efectivo solicitar ambas determinaciones,
sanos (274). La variabilidad inter-método en los TgAb TPOAb y TgAb, porque los pacientes con TPOAb neg-
también puede reflejar diferencias cualitativas en la ativos y TgAb detectables rara vez presentan disfun-
afinidad y en la especificidad de epitopes de estos ción tiroidea.
anticuerpos en suero de pacientes con diferentes • En las áreas con deficiencia de yodo, las determina-
patologías tiroideas e inmunológicas subyacentes. ciones de TgAb séricos pueden ser útiles para la detec-
Otra razón para las diferencias inter-métodos es que ción de enfermedad tiroidea autoinmune cuando los
algunos diseños de ensayos son susceptibles a inter- pacientes tienen bocio nodular.
• Para control del tratamiento con yodo en casos de
ferencias por altos niveles de antígeno circulante
bocio endémico.
(Tg), como ocurre generalmente en la enfermedad
de Graves y en el CDT metastásico (275).

(b) Prevalencia e Intervalos de Referencia de los logía que con el potencial de interferir con el mé-
TgAb todo de Tg sérica.
Al igual que con los anticuerpos anti TPO, la
prevalencia y los valores de corte para la normali- (c) Sensibilidad y Precisión de las Determinacio-
dad de los anticuerpos anti tiroglobulina depende nes de TgAb
de la sensibilidad y especificidad del método de Las determinaciones cuantitativas de TgAb por
ensayo (276). El estudio NHANES III mostró una pre- un método sensible constituyen un ensayo comple-
valencia de TgAb del ~10% para la población en mentario esencial para la determinación de Tg séri-
general, determinada con un inmunoensayo com- ca. Los métodos cualitativos de aglutinación no son
petitivo (18). La prevalencia de los TgAb en pacien- lo suficientemente sensibles para detectar concen-
tes con CDT parece ser dos veces mayor que para traciones bajas de TgAb que pueden interferir con
la población normal (~20 versus 10%, respectiva- las mediciones de Tg sérica (276). Al igual que con los
mente) (276). Al igual que con los TPOAb, aún no se ensayos de TPOAb [Sección-3 D5(a)], la amplia va-
ha esclarecido la importancia clínica de los niveles riabilidad en los valores absolutos informados por
bajos de TgAb, que no serían detectables median- los diferentes inmunoensayos de TgAb excluye el
te los antiguos métodos de aglutinación. Se ha su- uso de ensayos realizados con equipos de diferen-
gerido que los niveles bajos pueden representar tes fabricantes para el control seriado de pacientes
anticuerpos “naturales” en individuos normales o con CDT. Existen dos clases de inmunoensayos pa-
una respuesta de anticuerpos “rescatadores” frente ra la determinación de TgAb. Una clase se caracte-
a la liberación de antígeno posterior a una cirugía riza por sus bajos límites de detección (<10 kUI/L)
tiroidea o al tratamiento con yodo radioactivo. Otra y un valor normal de referencia no detectable. Estos
alternativa, es que los niveles bajos representen métodos sugieren que la presencia de TgAb es un
AIDT silenciosa subyacente (256). Diferentes méto- hallazgo patológico. La otra clase de ensayos repor-
dos de TgAb informan diferentes líneas de corte de ta límites de detección más elevados (>10kUI/L) y
positividad, igual que para TPOAb [Sección citan un “rango normal de referencia” para los
3D5(a)]. Específicamente, algunos métodos infor- TgAb. Estos valores detectables del “rango normal”
man que individuos normales deberían tener valo- probablemente representen “ruido” no específico
res por debajo del límite de detección del ensayo, del ensayo provocado por la insensibilidad del mis-
mientras que otros informan un “rango normal”. mo o por problemas de especificidad ya que estos
Cuando se usan las determinaciones de TgAb jun- valores bajos del “rango normal” no muestran evi-
to con la Tg sérica, la importancia de los valores dencia de interferencia con las determinaciones de
bajos de TgAb se relaciona menos con la fisiopato- Tg sérica [Sección-3 E6].
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 55

áreas con deficiencia de yodo, sin embargo, se cree


RECOMENDACIÓN Nº 37. DETERMINACIÓN DE TGAB que la determinación de TgAb es útil para detectar
CARCINOMA DIFERENCIADO DE TIROIDES (CDT)
EN EL
AITD, en especial para pacientes con bocio nodular.
Las determinaciones de TgAb también son útiles pa-
La concentración de TgAb debería determinarse ra el control del tratamiento con yodo para el bocio
en los sueros de TODOS los pacientes antes del endémico, ya que las moléculas yodadas de Tg son
análisis de Tg ya que los niveles bajos de TgAb más inmunogénicas.
pueden interferir con las determinaciones de Tg Los ensayos de TgAb se solicitan fundamental-
sérica produciendo valores ya sea falsamente mente junto con las determinaciones de Tg sérica.
bajos o no detectables, o falsamente elevados se-
La utilidad clínica de los TgAb en los pacientes con
gún el método utilizado.
CDT es doble. En primer lugar, la búsqueda de
• Los TgAb se deberían medir en cada muestra sérica TgAb, por métodos sensibles y específicos en estos
enviada al laboratorio para evaluación de Tg. pacientes con cáncer es necesaria porque incluso
• Las determinaciones seriadas de TgAb se deberían bajas concentraciones de anticuerpos pueden inter-
realizar en todos los pacientes con resultados positivos ferir con las mediciones de Tg realizadas por la ma-
de TgAb con CDT utilizando un método del mismo fa-
yoría de los métodos [ver Sección-3 E6] (275, 276). En
bricante, porque los valores seriados de TgAb tienen
significado pronóstico para el control de la respuesta
segundo lugar, las determinaciones de TgAb en sí
al tratamiento del CDT. pueden servir como marcadores tumorales sustitutos
• Se deberían utilizar inmunoensayos y no métodos de para los pacientes TgAb positivos en los que no se
aglutinación para determinar TgAb ya que los niveles pueda confiar en la determinación de Tg (276). Espe-
bajos de TgAb no detectados por aglutinación pueden cíficamente, los pacientes TgAb positivos considera-
interferir con las determinaciones de Tg realizadas por dos libres de enfermedad típicamente se convierten
la mayoría de los métodos, y las determinaciones se- en TgAb negativos entre 1 y 4 años (276, 277, 278). Por el
riadas deben ser cuantitativas y no cualitativas. contrario, los pacientes con enfermedad persistente
• Los ensayos de recuperación de Tg sérica no detec- después del tratamiento mantienen concentraciones
tan en forma confiable la presencia de TgAb y no se detectables de TgAb. De hecho, un aumento en la
debería recomendar su uso. (Recomendación Nº 46).
concentración de TgAb es a menudo el primer indi-
• Antes de cambiar el método de determinación de
TgAb, el laboratorio debería informar al médico solici-
cio de recidiva en esos pacientes (276).
tante, y los pacientes deberían volver a tener estable-
cidos sus niveles basales con el método nuevo. Valo-
res absolutos obtenidos con diferentes métodos no 7. Autoanticuerpos anti-Receptor de TSH
pueden ser usados para el control seriado de pacien- (TRAb)
tes con CDT y TgAb positivos.
El receptor de TSH integra la superfamilia de re-
ceptores con siete dominios transmembrana unidos
a las proteínas G. El gen del receptor de TSH (peso
(d) Usos Clínicos de las Determinaciones molecular 60kb) ubicado en el brazo largo del cro-
de TgAb mosoma 14q31 ha sido clonado y secuenciado (272).
Todavía se debate sobre la utilidad clínica de las Los exones 1 a 9 codifican para el dominio extrace-
determinaciones de TgAb para evaluar la presencia lular del receptor (397 aminoácidos) y el exón 10
de autoinmunidad tiroidea. El estudio NHANES III codifica para la región transmembrana (206 aminoá-
en EE.UU. informó que el 3 % de los individuos sin cidos). La activación de las proteínas G por el com-
factores de riesgo de enfermedad tiroidea tenían plejo hormona receptor resulta en la estimulación
TgAb detectables sin presencia asociada de TPOAb de la producción de AMPc por la adenilato ciclasa y
(18). Debido a que esta cohorte no presentaba un au- en el recambio de fosfato de inositol por las fosfoli-
mento asociado de TSH, las determinaciones de pasas (280). La mutagénesis sitio-dirigida ha demostra-
TgAb no parecieran ser ensayos diagnósticos útiles do que la estructura tridimensional del receptor es
para AITD en áreas suficientes en yodo (256, 279). En importante para la interacción con la TSH y/o los
56 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

TRAb. Existen tres tipos generales de TRAb determi- sayo explica por qué los bioensayos y los ensayos
nados por bioensayos o ensayos de radiorreceptor de radiorreceptor normalmente presentan una co-
(Tabla 6). Los ensayos de radiorreceptor, o ensayos rrelación débil (r = 0,31-0,65) (283, 285).
de Inmunoglubulinas inhibidoras de la unión de
TSH (TBII) no miden actividad biológica directa- (a) Metodología para TRAb
mente sino que determinan si la muestra contiene En 1956 se publicó el primer trabajo referente a
inmunoglobulinas que puedan bloquear la unión de la existencia de un estimulador tiroideo diferente de
TSH a una preparación in vitro del receptor. Los an- la TSH cuya vida media era más larga (Estimulante
ticuerpos estimulantes de TSH (TSAb) parecen fijar- tiroideo de acción prolongada o LATS), utilizando
se a la porción N terminal del dominio extracelular un bioensayo in vivo (286). El LATS se identificó más
y mimetizar las acciones de TSH induciendo la tarde como una inmunoglobulina. Al igual que la
transducción de la señal post receptor y la estimula- TSH, los TRAb estimulan tanto el AMPc como las
ción celular. En contraste, la región C terminal es vías del fosfato de inositol de la célula folicular tiroi-
más importante para los anticuerpos bloqueantes dea y, en consecuencia, estimulan y bloquean la
del receptor de TSH (TBAb o TSBAb) que impiden síntesis de la hormona tiroidea y el crecimiento de
la estimulación por TSAb o TSH, provocando hipo- la glándula (283). Los tipos de métodos desarrollados
tiroidismo (281). Con respecto a esto, las inmunoglu- para determinar TRAb se clasifican en relación con
binas estimulantes del crecimiento tiroideo (TGI), su actividad funcional, según se muestra en la Tabla
están menos caracterizadas. 6. Los estudios en ratones y líneas celulares FRTL-5
Se ha demostrado que la falta de correlación en- al igual que en humanos, muestran que una elevada
tre las concentraciones de TRAb y el estado clínico concentración de gonadotrofina coriónica humana
de los pacientes se debe principalmente a la hetero- (hCG) también es un agonista débil de los TRAb y
geneidad de los TRAb circulantes. El hecho de que puede estimular el cAMP, el transporte de yodo y el
esta heterogeneidad pueda coexistir dentro de un crecimiento celular (56). Las elevaciones marcadas de
mismo paciente y cambiar con el tiempo, es una de hCG secundarias a coriocarcinoma pueden en casos
las razones por las que ha sido difícil desarrollar mé- raros causar un falso resultado positivo de TRAb Sin
todos diagnósticos eficientes para los TRAb (282, 283) embargo, el aumento de la hCG habitualmente obser-
De hecho, el cuadro clínico de los pacientes con en- vado en el embarazo normal o en pacientes con mo-
fermedad de Graves que presentan tanto TSAb co- la hidatiforme tratados no es lo suficientemente alto
mo TBAb/TSBAb depende de la concentración rela- como para provocar un falso resultado positivo.
tiva y de la afinidad del anticuerpo predominante. El
pasaje de TRAb estimulantes a TRAb bloqueantes (b) Bioensayos (TSAb, TBAb/TSBAb y TGI)
podría explicar la remisión espontánea de la enfer- La mayoría de los ensayos actuales se basan en
medad de Graves durante el embarazo al igual que la activación por el receptor de TSH de la produc-
la inducción de hipotiroidismo transitorio por yodo ción del segundo mensajero (AMPc) a partir de una
radiactivo (281, 284). Es importante observar que los línea celular (FRTL-5/ CHO TSH-R) expuesta a una
bioensayos que utilizan preparaciones celulares pa- muestra de suero que contiene los anticuerpos o a
ra medir los efectos biológicos de los TRAb (estimu- una preparación de IgG (287-289). El reciente clonado
lación o inhibición de la actividad de TSH o del cre- del receptor de TSH ha beneficiado los bioensayos
cimiento celular) pueden detectar cambios funcio- facilitando el desarrollo de líneas celulares transfec-
nales en la heterogeneidad de los TRAb. Por el con- tadas del receptor de TSH (290, 291). Aunque estos
trario, el ensayo de radiorreceptor, o de inmunoglo- bioensayos están disponibles en muchos laborato-
bulinas inhibidoras de la unión de TSH (TBII), utili- rios comerciales en los Estados Unidos y Asia, están
zados por la mayoría de los laboratorios clínicos, menos disponibles en Europa por las regulaciones
simplemente miden la capacidad del suero o de una que afectan el uso de organismos genéticamente al-
preparación de IgG de bloquear la unión de TSH al terados, y no lo están aún en Latinoamérica. Lamen-
receptor, y no miden la respuesta biológica (Tabla tablemente, la correlación entre los resultados de los
6). Esta diferencia fundamental en el diseño del en- TRAb y el cuadro clínico es aún deficiente. Por
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 57

Tabla 6. Métodos para Anticuerpos del Receptor de TSH (TRAb)

Anticuerpo Función Método directo


TSAb Estimula la producción de AMPc, bioensayo celular (FRTL-5/ CHO TSH-R)
la captación de yoduro, % de estimulación de síntesis de AMPc
y la síntesis de tiroglobulina inducida por TSH comparada con una
mezcla de suero normal

TBAb/ Inhibe la producción de AMPc bioensayo celular (igual que anterior)


TSBAb inducida por TSH, % de inhibición de síntesis de AMPc
la captación de yoduro y la inducida por TSH comparada con una
síntesis de la tiroglobulina mezcla de suero normal

TGI Estimula el crecimiento de células FRTL-5, captación de timidina H3/


la célula tiroidea ensayo de detención mitótica

TBII Inhibe la unión de I125 TSH al Ensayo de radiorreceptor con TSH-R


receptor soluble porcino o TSH-R recombinante
humano

TSAb: anticuerpos estimulantes del receptor de TSH


TBAb/TSBAb: anticuerpos bloqueantes del receptor de TSH RECOMENDACIÓN Nº 38. ENSAYOS PARA ANTICUERPOS
TGI: Inmunoglobulinas estimulantes del crecimiento tiroideo
TSH-R: receptor de TSH ANTIRECEPTOR DE TSH (TRAB)
TBII: Inmunoglobulinas inhibidoras de tirotrofina Ensayos de TRAbs en el laboratorio clínico:
• Ensayos de Radiorreceptor o de Inhibición de la
unión de TSH (TBII) que no miden actividad estimu-
ejemplo, la sensibilidad diagnóstica de los bioensa- lante directamente sino que detectan inmunoglobuli-
yos para TRAbs en la enfermedad de Graves presen- nas en el suero que bloquean la unión de TSH marca-
ta un rango entre 62,5 y 81% (283). Es posible que los da a una preparación in vitro del receptor de TSH.
nuevos métodos que emplean moléculas quiméricas Estos ensayos son los que se utilizan con mayor frecuen-
puedan detectar los locus de los epitopes de los cia para determinar TRAb en los laboratorios clínicos.
TRAb y los sitios de unión de la TSH, y en conse- • Bioensayos del receptor de TSH (TSAb) que utilizan
cuencia mejorar la correlación entre la respuesta del células (células FRTL-5, o más recientemente CHO
ensayo y el resultado clínico (281, 284, 292-294). transfectadas con el receptor de TSH humana) para la
detección de inmunoglobulinas estimulantes de
(c) Ensayos de Radiorreceptor (TBII) tiroides (TSAb) que estimulan la producción de cAMP
o la captación de yodo. Estos ensayos no están
Los ensayos de inmunoglobulinas inhibidoras de
disponibles de manera rutinaria en todos los países.
la unión de TSH al receptor (TBII) se encuentran co- • En general, la correlación entre los resultados de los
mercialmente disponibles y se los utiliza en muchos TSAb y los TBII (60-75%) es pobre Los ensayos TSAb
laboratorios. Estos métodos cuantifican la inhibición declaran dar resultados positivos entre el 80 y el 100%
de la unión de TSH marcada con 125I a receptores de los pacientes hipertiroideos por Graves no tratados,
porcinos solubilizados o, más recientemente, a re- mientras los ensayos TBII lo son entre el 70 y el 90%.
ceptores de TSH humana recombinante (295-297). Este Ninguno de los dos ensayos tiene una alta especifici-
tipo de método no distingue entre TRAb estimulan- dad ni sensibilidad para predecir remisión.
tes y bloqueantes. La actividad de TBII es cuantifi- • Se sabe que tanto la producción normal de hCG,
cada a partir de un suero TRAb positivo calibrado como la producción anormal en el coriocarcinoma
contra un estándar de referencia sérico. El calibra- interactúan con el receptor de TSH lo que podría resul-
tar en falsos valores positivos. Esto se podría observar
dor más frecuentemente utilizado ha sido el suero
en casos poco frecuentes de coriocarcinoma pero no
de referencia MRC, LATS-B. También se dispone del en embarazos normales o en la mola hidatiforme trata-
estándar de la OMS (MRC 90/672). La heterogenei- da, en la que el nivel de hCG no es lo suficientemente
dad de los TRAb en el suero de pacientes y el ori- alto para causar un falso resultado positivo.
58 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

gen del receptor utilizado (porcino versus humano


recombinante) son causas probables de la amplia RECOMENDACIÓN 39. USOS CLÍNICOS DE LAS DETER-
variabilidad observada entre los métodos de TBII, a MINACIONES DE TRAB
pesar del uso del mismo estándar (283, 298). Aunque en
• Para investigar la etiología del hipertiroidismo cuan-
la actualidad los métodos TBII basados en el recep-
do el diagnóstico no es clínicamente evidente.
tor de la TSH humana recombinante pueden tener
• La disminución en la concentración de TRAb duran-
una mayor sensibilidad diagnóstica para la enferme- te el tratamiento con drogas antitiroideas a largo plazo
dad de Graves, no parecen ofrecer mayor especifi- sugiere remisión. No obstante, las determinaciones de
cidad ni sensibilidad para predecir la respuesta al TRAb pueden dar resultados confusos en el 25% de es-
tratamiento con medicamentos antitiroideos (297, 299). tos pacientes.
• Las determinaciones de TRAb son útiles para diag-
(d) Intervalos de Referencia de los TRAb nosticar enfermedad de Graves y para relacionar los
A pesar de la adopción de una nueva prepara- valores de TRAb con un algoritmo de tratamiento.
ción internacional de referencia MRC 90/672, los va- • Para evaluar pacientes con sospecha de “oftalmopa-
lores de TRAb todavía dependen del método, y los tía eutiroidea de Graves”. No obstante, no se debe des-
cartar la patología en caso de TRAb no detectables.
intervalos de referencia dependen de la población
• Aunque los ensayos de TSAb presentan ventajas teó-
“normal” seleccionada para determinar el nivel de
ricas, algunos sostienen que los TBII que detectan tan-
corte para un resultado positivo. Este corte se defi- to anticuerpos estimulantes (TSAb) como los casos po-
ne en general como dos desviaciones estándar por co frecuentes de anticuerpos bloqueantes (TBAb/TS-
encima de la media de los individuos normales. BAb), son igualmente útiles.
• Para mujeres embarazadas con antecedentes o enfer-
medad de Graves actual. Nota: Las embarazadas euti-
8. Usos Clínicos de las Determinaciones de TRAb roideas después de la administración de drogas antiti-
roideas (ATD) para la enfermedad de Graves tienen un
El uso clínico de las determinaciones de TRAb riesgo insignificante de hipertiroidismo fetal o neonatal.
para el diagnóstico y seguimiento de la enfermedad • Los TRAb en las embarazadas eutiroideas (con o sin
tratamiento con L-T4) que han recibido tratamiento
tiroidea autoinmune sigue siendo controvertido y
previo con yodo radioactivo para la enfermedad de
difiere mucho de un país a otro. El diagnóstico di-
Graves se deberían determinar a comienzos del emba-
ferencial de hipertiroidismo se puede resolver en la razo, cuando un aumento en el valor es un factor de
mayoría de los pacientes sin recurrir a los TRAb. De riesgo para el hipertiroidismo fetal (2-10%) y durante
todos modos, la presencia de TRAb puede estable- el tercer trimestre para evaluar riesgo de hipertiroidis-
cer una diferencia entre la enfermedad de Graves y mo neonatal.
la tirotoxicosis ficticia y otras manifestaciones de hi- • Se debería realizar una determinación de TRAb en el
pertiroidismo como la tiroiditis subaguda o post par- tercer trimestre a las embarazadas que son tratadas con
to y el bocio nodular tóxico. ATD por enfermedad de Graves para mantener el es-
También se ha sugerido que las determinaciones tado eutiroideo durante el embarazo. Un valor alto de
de TRAb son útiles para predecir la evolución de la TBII debería instar a una evaluación clínica y bioquí-
mica de hipertiroidismo en el neonato, tanto al naci-
enfermedad de Graves. A menudo se observa una
miento (sangre del cordón) como entre los 4 y 7 días,
disminución en el nivel de TRAb en pacientes hiper-
después de que los efectos del pasaje transplacentario
tiroideos en remisión clínica luego del tratamiento de los ATD hayan desaparecido.
con fármacos antitiroideos (ATD). Después de la • La evaluación del riesgo de disfunción tiroidea fetal
suspensión de los mismos el aumento de TRAb co- o neonatal requiere la detección de TRAb bloqueantes
rrelaciona bastante bien con la recidiva rápida, pero o estimulantes cuando las madres no tienen la tiroides
esta situación involucra a muy pocos pacientes. Por intacta luego de un tratamiento previo para el hiperti-
el contrario, un número significativo de pacientes roidismo de Graves.
con niveles no detectables o bajos de TRAb va a re- • Para identificar neonatos con hipotiroidismo transitorio
cidivar. Un metanálisis de la relación entre los nive- debido a anticuerpos bloqueantes del receptor de TSH.
les de TRAb y el riesgo de recidiva ha demostrado
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 59

que un 25% de pacientes son mal categorizados a


partir de los ensayos de TRAb (263). Esto sugiere que RECOMENDACIÓN Nº 40. MEJORAS NECESARIAS EN
después del tratamiento con ATD, se necesita un se- LOS ENSAYOS DE ANTICUERPOS ANTITIROIDEOS
guimiento de los pacientes independientemente del
• Los ensayos de anticuerpos antitiroideos actuales de-
valor de los TRAb al momento de la suspensión del berían someterse a estudios comparativos de sus com-
fármaco, y para este propósito la determinación de portamientos analíticos y clínicos.
TRAb no resulta costo-efectiva (263). • Un estudio comparativo de las preparaciones anti-
Hay acuerdo general en que las determinaciones génicas que se usan en la actualidad, facilitaría la
de TRAb pueden ser usadas para predecir disfun- identificación de el o los métodos para anticuerpos
ción fetal y/o neonatal en embarazadas con antece- antitiroideos más convenientes para su utilización
dentes de AITD (8, 252). Valores altos de TRAb en la clínica.
madre durante el tercer trimestre de embarazo su- • Se deberían establecer las características de las pre-
gieren riesgo de disfunción tiroidea en el bebé (8, 282). paraciones antigénicas utilizadas en el ensayo para to-
Entre el 2 y el 10% de embarazadas con TRAb muy dos los métodos de autoanticuerpos tiroideos.
• Debería poder disponerse de las preparaciones de
elevados dan a luz recién nacidos con hipertiroidis-
referencia de antígenos.
mo (8). El riesgo de hipertiroidismo neonatal es insig-
nificante luego del tratamiento satisfactorio con an-
titiroideos, pero puede desarrollarse después del
tratamiento con radioyodo si los niveles de TRAb tología parece ser exacerbada por el tratamiento con
permanecen elevados (8). Las embarazadas eutiroi- yodo radioactivo (303). Además, los niveles de TRAb
deas (con o sin tratamiento con L-T4) que han reci- y de otros anticuerpos antitiroideos aumentan signi-
bido tratamiento previo con yodo radioactivo para ficativamente después de este tipo de tratamiento
(304-306). Esto sugiere que las determinaciones de
la enfermedad de Graves deberían realizarse deter-
minaciones de TRAb a comienzos del embarazo, TRAb previas al tratamiento con radioyodo podrían
cuando un valor alto es un factor de riesgo signifi- ser útiles para predecir el riesgo de TAO aunque
cativo para el hipertiroidismo fetal, y también du- aún ningún estudio prospectivo ha documentado
rante el tercer trimestre para evaluar el riesgo de hi- esta observación.
pertiroidismo neonatal (8). Las embarazadas que re-
ciben ATD para la enfermedad de Graves, deberían 9. Tendencias Futuras
realizarse determinación de TRAb en el tercer tri-
mestre. Valores altos TRAb en estas pacientes debe- Es importante realizar un estudio comparativo
rían instar a una evaluación clínica y bioquímica ex- bien estructurado de los ensayos de autoanticuerpos
haustiva de hipertiroidismo en el neonato, al mo- tiroideos comercialmente disponibles. Esto aportaría
mento del nacimiento (sangre del cordón) y entre evidencia irrefutable de que existen diferencias en
los 4 y 7 días, después que los efectos del pasaje el desempeño de los métodos de ensayos actuales
(296). Además ayudaría a persuadir a los profesiona-
transplacentario de los ATD hayan desaparecido
(300). Cabe destacar que los ensayos de radiorrecep- les de los laboratorios clínicos de que eviten el uso
tor TBII frecuentemente se usan con este propósito, de ensayos con deficiencias en el comportamiento
ya que detectan tanto anticuerpos estimulantes clínico, e instaría a los fabricantes a mejorar sus pro-
(TSAb), como en casos poco frecuentes, anticuerpos ductos o a retirarlos del mercado.
bloqueantes (TBAb/TSBAb) que provocan hipotiroi-
dismo transitorio en 1:180.000 recién nacidos (301).
También se sugiere realizar la determinación de am-
RECOMENDACIÓN Nº 41. PARA LOS FABRICANTES QUE
bos anticuerpos estimulantes y bloqueantes porque
DESARROLLAN ENSAYOS DE ANTICUERPOS ANTITIROIDEOS
la expresión de disfunción tiroidea puede ser dife-
rente en la madre y en el infante (253). • Los métodos absolutos o “estándares de referencia”
Todavía se desconoce el papel de los TRAb en la son un objetivo para el futuro.
oftalmopatía asociada a tiroides (TAO) (302). Esta pa-
60 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

les si se utiliza un método sensible. El nivel de Tg


• El folleto dentro de la caja del equipo de reactivos sérica está influido por tres factores principales: (i)
debería documentar el método utilizado para obtener la masa de tejido tiroideo diferenciado presente; (ii)
el antígeno, el diseño del ensayo, y todas las condicio- cualquier inflamación o lesión de la glándula tiroi-
nes experimentales que afecten las interacciones antí-
des que provoque liberación de Tg; y (iii) el grado
geno-anticuerpo.
de estimulación del receptor de TSH (por TSH, hCG
• La especificidad de los estándares secundarios debe-
ría seleccionarse de acuerdo a las interacciones entre o TRAb). Una concentración elevada de Tg sérica es
los autoanticuerpos en el suero del paciente y su antí- un indicador no específico de disfunción tiroidea. La
geno específico. mayoría de los pacientes con Tg sérica elevada pre-
• Se debería controlar los efectos “gancho” de los sentan alteraciones tiroideas benignas. La Tg sérica
TPOAb y de los TgAb IMA utilizando ~20 muestras con se utiliza como marcador tumoral en los pacientes
concentraciones de anticuerpos >1.000 kUI/L y ~20 con diagnóstico de cáncer diferenciado de tiroides
muestras con valores superiores a 10.000 kUI/L. (CDT). Aproximadamente dos tercios de estos pa-
• Se deberían controlar los efectos de altas concentra- cientes presentan un nivel pre-quirúrgico elevado
ciones de antígeno (Tg) en los métodos de TgAb agre- de Tg sérica que confirma la capacidad del tumor de
gando a varios sueros con concentraciones bajas de
secretar Tg y valida su uso como marcador tumoral
TgAb, otros con niveles de Tg >10,000 µg/L (ng/ml) y
post-quirúrgico (307). Por el contrario, cuando la con-
>100,000 µg/L (ng/ml).
centración pre-quirúrgica de Tg sérica no supera los
valores normales, no existe evidencia de que el tu-
mor secrete Tg, y un valor post-quirúrgico indetec-
E. Tiroglobulina (Tg) table es menos tranquilizador. En esos pacientes una
concentración posquirúrgica detectable de Tg sérica
La tiroglobulina (Tg), proteína precursora de la podría reflejar la presencia de una importante masa
síntesis de las hormonas tiroideas se puede detectar tumoral. De hecho, en general, los cambios post-qui-
en el suero de la mayoría de los individuos norma- rúrgicos representan cambios en la masa tumoral,
siempre que se mantenga un
nivel constante de TSH me-
diante terapia con L-T4.
La Tg sérica medida duran-
te el estímulo de TSH (TSH
endógena o TSH recombi-
nante humana, rhTSH), es
más sensible para la detec-
ción del CDT residual o me-
tastásico que una determi-
nación de Tg basal realiza-
da durante el tratamiento
con L-T4 (Figura 6) (308). La
magnitud del aumento de la
Tg sérica en respuesta a la
TSH es un indicador de la

Fig. 6. Respuestas de Tg sérica a la


administración de rhTSH o a la sus-
pensión de T3. Datos de la ref. 308.
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 61

sensibilidad del tumor a la TSH. Los tumores bien di- rencias (312, 313). Un reciente esfuerzo en colaboración
ferenciados típicamente muestran una respuesta esti- patrocinado por la Community Bureau of Reference
mulada a TSH elevada equivalente a ~10 veces el va-
lor basal de Tg (309). Los tumores escasamente diferen-
ciados que no concentran yoduro pueden presentar RECOMENDACIÓN Nº 42. PARA LOS FABRICANTES QUE
una respuesta disminuida al estímulo con TSH (310). DESARROLLAN MÉTODOS PARA LA DETERMINACIÓN DE TG

1. Estado Actual de los Métodos de Determina- • Sería ideal que el diluyente utilizado para los están-
ción de Tg dares fuese suero humano libre de Tg y TgAb. Se
deberían seleccionar matrices no séricas para producir
una señal (cuentas radioactivas, unidades relativas de
Generalmente, la tiroglobulina se mide en suero, luz, etc.) que sean idénticas al suero humano libre de
pero también es posible realizar las determinaciones Tg y TgAb para evitar desvíos (bias) relacionados con
en líquido de quistes tiroideos y/o en material obte- las matrices.
nido por punción con aguja fina de masas cervica-
les no tiroideas (311). La determinación de Tg sérica
es técnicamente difícil. En la actualidad, los ensayos
inmunométricos (IMA), están superando en popula- RECOMENDACIÓN Nº 43. PARA LOS LABORATORIOS
QUE CONSIDERAN CAMBIAR SU MÉTODO
ridad a los métodos por radioinmunoensayo (RIA).
La tendencia se debe a que los métodos IMA ofre- DE DETERMINACIÓN DE TG
cen la ventaja práctica de un menor tiempo de incu- Seleccionar un método para Tg en función de las
bación, un rango dinámico más amplio y una mayor características de su comportamiento analítico
estabilidad del anticuerpo marcado, y en conse- y no de su costo o conveniencia. Antes de cam-
cuencia una menor susceptibilidad al daño por mar- biar el método para Tg el laboratorio debería
cación que los RIA (312). Hoy los laboratorios pueden consultar a los médicos que utilizan su método
escoger entre una serie de métodos IMA tanto iso- y comparar los resultados entre el método anti-
tópicos (inmunoradiométricos, IRMA) como no iso- guo y el nuevo propuesto utilizando muestras
tópicos (fundamentalmente quimioluminiscencia, de pacientes TgAb negativos y positivos.
• Pacientes TgAb negativos: Si el desvío entre los re-
ICMA). No obstante, los métodos IMA suelen ser
sultados del método antiguo y el nuevo es > 10%, se
más susceptibles a interferencias por autoanticuer- debería informar a los médicos y brindarles tiempo su-
pos antitiroglobulina (TgAb), que provocan una su- ficiente para volver a determinar los valores basales de
bestimación de los niveles de Tg sérica. En conse- los pacientes en estado crítico.
cuencia, algunos laboratorios han escogido los mé- • Pacientes TgAb positivos: El laboratorio debería ad-
todos RIA para determinarla en pacientes TgAb po- vertir a los médicos acerca de la probable dirección de
sitivos y restringir el uso de los métodos IMA a los la interferencia en presencia de TgAb.
pacientes TgAb negativos. Sin embargo, ningún mé- • Si se informan los valores de Tg sérica para las
todo puede alegar estar totalmente libre de la inter- muestras TgAb positivas, se debería incluir una adver-
ferencia por TgAb, la cual puede provocar resulta- tencia en cada informe de laboratorio:
dos inapropiados de Tg. Además de los problemas • PARA LOS MÉTODOS IMA: Los métodos IMA pue-
den dar valores de Tg sérica inadecuadamente bajos o
con la interferencia de TgAb, los actuales métodos
indetectables en presencia de TgAb. Los resultados in-
IMA tienen diferencias en la estandarización y en la detectables de Tg sérica no se pueden utilizar como in-
especificidad, deficiencias en la sensibilidad, preci- dicadores de ausencia de tumor en un paciente TgAb
sión interensayo por debajo del nivel óptimo, y po- positivo. Un valor detectable de Tg indica presencia de
tencial predisposición a sufrir efecto “hook” (gan- Tg, pero las concentraciones pueden ser subestimadas.
cho) a concentraciones elevadas (312). • PARA LOS MÉTODOS RIA: Los métodos RIA (aun-
que menos susceptibles a la interferencia) también
(a) Estandarización pueden dar resultados inapropiados de Tg sérica en
Las concentraciones de Tg sérica determinadas presencia de TgAb (dependiendo del método).
por métodos RIA o IMA presentan marcadas dife-
62 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

of the Commission of the European Communities ha a los médicos antes de que el laboratorio cambie su
desarrollado una nueva Preparación de Referencia método para Tg para que puedan realizar una nue-
Internacional para Tg, CRM-457 (298,314). Este material va determinación de valores basales en los pacien-
se puede solicitar al Dr. Christos Profilis, BCR, Rue tes con CDT.
de la Loi 200, B 1049 Bruselas, Bélgica. La adopción generalizada del estándar CRM-457
El desvío entre los diferentes métodos de deter- se proyectó para reducir, aunque no eliminar la sig-
minación de Tg puede provenir de las diferencias nificativa variabilidad inter-método que existe entre
entre las matrices libres de Tg utilizadas para la di- los inmunoensayos de Tg de los distintos fabrican-
lución de los estándares y el suero de pacientes, o tes. Se esperaba que la estandarización internacional
diferencias en el reconocimiento de los epitopes por facilitara un mayor acuerdo entre los diversos estu-
parte de los distintos anticuerpos de Tg usados por dios publicados y mejorara el uso clínico del segui-
los diversos fabricantes. Sería ideal que el diluyente miento seriado con Tg en los pacientes con CDT,
utilizado para los estándares fuese suero humano li- que a veces tienen determinaciones realizadas en
bre de Tg y TgAb o, como alternativa, una matriz no distintos laboratorios. Lamentablemente, el uso del
sérica que hubiera sido seleccionada para producir estándar CRM-457 no ha eliminado los problemas
una señal (cuentas radiactivas, unidades relativas de de variabilidad entre métodos como se esperaba. En
luz, etc.) que fuese idéntica a la del suero humano la actualidad, los niveles de Tg sérica determinados
libre de Tg y TgAb. Es fundamental que se informe por métodos que utilizan la estandarización CRM-

Fig. 7. Valores de la media ± 2 DS para la medición de 20 sueros normales TgAb-negativos mediante 10 métodos diferentes de Tg. Método
Nº1= Diagnostic Systems Laboratories, Webster, TX, EE.UU.; Método Nº2=University of Southern California RIA, Los Angeles, CA, EE.UU.; RIA
Nº3= Kronus RIA, Boise ID, EE.UU.; Método Nº4= Endocrine Sciences RIA, Calabasas, CA, EE.UU.; Método Nº5=Nichols Institute Diagnostics
ICMA, San Juan Capistrano, CA, EE.UU.; Método Nº6= Endocrine Sciences ICMA, Calabasas, CA, EE.UU; Método Nº7=Sanofi Pasteur IRMA,
Marnes-La-Coquette, Francia; Método Nº8=Kronus OptiQuant IRMA, Boise ID, EE.UU.; Método Nº9=Brahms DynoTest TgS IRMA, Berlín,
Alemania; Método Nº10=Diagnostic Products Immulite ICMA, Los Angeles, CA, EE.UU.. El asterisco señala los ensayos que declaran
estandarización CRM-457.
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 63

457 pueden presentar diferencias de más de cuatro


veces en sus resultados (Figura 7). Estas diferencias RECOMENDACIÓN Nº 44. SENSIBILIDAD FUNCIONAL Y
inter-métodos son mayores que la máxima impreci- PRECISIÓN INTERENSAYO PARA LOS ENSAYOS DE TG
sión aceptada durante el seguimiento de los pacien-
tes individuales (Tabla 5) y excluye el intercambio La sensibilidad funcional y la precisión inter-
de diferentes métodos de Tg para el seguimiento a ensayo se deberían establecer utilizando el
largo plazo de los pacientes con cáncer de tiroides. mismo protocolo que para TSH (Recomendación
Nº20) con tres consideraciones importantes:
(b) Sensibilidad • Utilización de mezclas de suero humano que no
Algunos métodos de Tg carecen de sensibilidad contengan TgAb, determinados por un inmunoensayo
para detectar el límite inferior de referencia eutiroi- sensible.
deo que, dependiendo del ensayo, se sitúa aproxi- • Se recomiendan valores óptimos para mezclas de
madamente en 1-3 µg/L (ng/mL). Los métodos que valores bajos, medios y altos:
no están en condiciones de detectar Tg en todos los Mezcla de valor bajo = (utilizada para determinar
sueros normales son insensibles para la búsqueda la sensibilidad funcional) debería tener un valor
de Tg sérica que sea entre 30 y 50 % más elevado
de recidivas en los pacientes con CDT. Al igual que
que el valor esperado de sensibilidad funcional (SF).
para TSH, la sensibilidad funcional del ensayo de Tg [Si SF = 1,0 µg/L (ng/ml) el valor de la mezcla baja
se determina con el 20% del CV inter-ensayo. El pro- debiera ser 1,3 a 1,5 µg/L (ng/ml)]
tocolo utilizado para determinar la sensibilidad fun- Mezcla de valor medio = ~10 µg/L (ng/ml) es
cional del ensayo de Tg es el mismo que se descri- decir, cercano al rango medio normal.
bió para TSH (Recomendación Nº 20) con las tres Mezcla de valor alto = ~90% del límite superior que
cláusulas descriptas en la Recomendación Nº 44. informa el fabricante.
• El período utilizado para evaluar la precisión inter-
(c) Precisión ensayo debiera ser por lo menos de 6 meses. Este
La precisión intra- e inter-ensayo, expresada co- lapso es más representativo del intervalo clínico uti-
mo porcentaje del coeficiente de variación (%CV) es lizado para el control de los pacientes con CDT que el
intervalo entre 6 y 8 semanas sugerido para TSH en la
un parámetro importante para la validación del
Recomendación Nº 20.
comportamiento analítico de un ensayo de Tg. La
precisión se debería determinar utilizando mezclas
de sueros TgAb negativos con tres niveles diferen-
tes de Tg (ver Recomendación Nº 44).
La precisión intra-ensayo en los inmunoensayos trices no humanas utilizadas para determinar la pre-
es mejor que la inter-ensayo, como cabría de espe- cisión en la zona baja pueden producir una sensibi-
rar. Esto se debe a que las mediciones realizadas lidad funcional irreal en comparación con las medi-
dentro de una misma corrida no están sujetas a la ciones realizadas con suero humano libre de TgAb
variabilidad introducida por el uso de lotes diferen- como matriz Es importante que se establezca la sen-
tes de reactivos ni por distintas calibraciones de los sibilidad funcional y la precisión inter-ensayo con
instrumentos. La precisión intra-ensayo puede ser el determinaciones distribuidas durante un período en-
parámetro más significativo cuando se evalúa la res- tre 6 y 12 meses, ya que éste es el intervalo clínico
puesta de Tg sérica al estímulo con rhTSH (308). En característico utilizado para el control de los pacien-
esta prueba, se extrae una muestra basal y una tes con CDT.
muestra estimulada con rhTSH con 3 a 5 días de in- La máxima imprecisión de las determinaciones
tervalo entre sí, y generalmente se determina la Tg de Tg sérica sugerida para el seguimiento de pacien-
de ambas muestras en la misma corrida (Figura 6) tes debe ser < 5% (Tabla 5). Es poco probable que
(308, 309). En contraste, cuando se utiliza la determina-
los ensayos actuales de Tg puedan mantener una
ción de Tg para el control seriado, cuanto más pro- precisión tan estricta a lo largo del intervalo clínica-
longado es el intervalo entre corridas mayor la va- mente relevante entre 6 y 12 meses típicamente uti-
riabilidad y peor la precisión inter-ensayo. Las ma- lizado para el control de los pacientes con CDT. Es-
64 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

te problema con la precisión se puede superar repi- • Se realizan dos determinaciones (generalmen-
tiendo la determinación en muestras previas almace- te sin diluir y con dilución 1/10) para cada muestra.
nadas del paciente en la misma corrida que la mues- Existe sospecha de efecto “hook” cuando el tubo
tra actual (9). con la dilución presenta un resultado más alto que
la muestra sin diluir. Se realizan más diluciones has-
(d) Efecto “hook” a valores elevados ta que el resultado en el tubo con la dilución dismi-
Los métodos IMA se ven afectados por el efecto nuya y las concentraciones de Tg séricas de dos di-
hook a valores elevados. Los valores falsamente ba- luciones consecutivas concuerden.
jos debido a este “efecto gancho” son particular-
mente problemáticos en los ensayos de marcadores (e) Interferencia por Autoanticuerpos Anti Tiro-
tumorales como la Tg, en donde es frecuente en- globulina (TgAb)
contrar valores muy elevados cuando los pacientes Los autoanticuerpos anti tiroglobulina (TgAb) se
presentan metástasis avanzada (307, 310, 315). Se produ- detectan con mayor frecuencia en los pacientes con
ce efecto hook cuando un exceso de antígeno satu- CDT que en la población general (~20 versus ~10 %,
ra la capacidad de unión del anticuerpo de captura. respectivamente) (276). Las determinaciones seriadas
Esto provoca una señal inadecuadamente baja que de los TgAb séricos pueden ser indicadores pronós-
se traduce en un resultado bajo o paradójicamente ticos independientes de la eficacia del tratamiento o
normal para un paciente con una concentración ex- de la recidiva del CDT en los pacientes TgAb posi-
cesivamente elevada de Tg sérica (>1000 µg/L tivos (276-278, 316). Cualquier TgAb presente en la mues-
(ng/mL) (312). Los fabricantes de métodos IMA inten- tra tiene el potencial de interferir con un método de
tan solucionar el problema del efecto hook median- Tg (317, 318). Debido a que los TgAb son heterogéneos,
te uno de estos dos procedimientos: ni la medición de la concentración de estos anti-
• Diseños de ensayo de dos pasos. Se realiza cuerpos ni un ensayo de recuperación con Tg exó-
una primera incubación de la muestra sérica con el gena permiten predecir si los TgAb causarán inter-
anticuerpo de captura antes de que los constituyen- ferencia (276, 317, 318). Probablemente el signo caracte-
tes no ligados se eliminen por lavado y se introduz- rístico más confiable de la interferencia por TgAb
ca el anticuerpo marcado, seguido de una segunda sea la presencia de discordancia entre los RIA y los
incubación. IMA. La Tg determinada por RIA se caracteriza por
valores más elevados que la Tg determinada me-
diante IMA si la muestra contiene TgAb que provo-
quen interferencia (276, 309). En la actualidad se ha lo-
RECOMENDACIÓN Nº 45. grado consenso acerca de que los ensayos de recu-
DETECCIÓN DE EFECTO “HOOK” peración de Tg no son un método confiable para la
• Se recomienda un diseño de ensayo en dos pasos detección de TgAb y se los debería eliminar (276, 318).
para minimizar los problemas hook. Los ensayos “en Los primeros estudios que informaron recuperacio-
un paso” que son más propensos al efecto hook debe- nes bajas en ausencia de TgAb en algunos sueros te-
rían medir cada muestra en dos concentraciones (sin nían el problema de la insensibilidad de los méto-
diluir y 1:10) para ver si hay discrepancias entre ambos dos iniciales para medir TgAb. Cuando se utilizan
resultados. inmunoensayos cuantitativos con sensibilidad ade-
• Se debería validar el efecto hook en todos los méto- cuada, los TgAb deberían detectarse siempre cuan-
dos (de dos pasos o de un paso) antes de su comer-
do la recuperación es baja.
cialización.
Los métodos inmunométricos no competitivos
• Para verificar el efecto hook, efectuar diluciones 1/10
seriadas de ~ 20 muestras TgAb negativas con concen- (IMA) parecen ser más susceptibles a la interferen-
traciones de Tg sérica superiores a 10.000 µg/L (ng/ml) cia producida por TgAb que los RIA, lo que se evi-
y ~ 20 muestras TgAb negativas con concentraciones dencia por el hallazgo de valores indetectables de
de Tg sérica superiores a 100.000 µg/L (ng/ml) hasta Tg en individuos con enfermedad de Graves (319, 318).
que se demuestre linealidad. Aparentemente, en algunos casos los IMA no pue-
den cuantificar la Tg acomplejada con los TgAb y
BERGOGLIO, L. M. Y MESTMAN, J. H. 65

esta omisión puede provocar subestimación de la nes con el estado clínico y el paralelismo con deter-
concentración de Tg total. Por el contrario los méto- minaciones seriadas de TgAb (276, 320). No obstante,
dos RIA parecen capaces de cuantificar las fraccio- cabe destacar que ningún método RIA es inmune a
nes de Tg de la muestra tanto libre como ligada a la interferencia por TgAb en todos los sueros TgAb
TgAb y característicamente producen valores más positivos y que la influencia de estos anticuerpos en
altos que los métodos IMA en presencia de TgAb (276, los diferentes métodos RIA es bastante variable y se
309). Existe gran variabilidad en la sensibilidad y es- relaciona con los componentes del ensayo y las
pecificidad de los diferentes ensayos de TgAb [Sec- condiciones de incubación. Específicamente, la cali-
ción-3 D6(b)]. Es esencial que la medición de TgAb dad del trazador I125 de la Tg, junto con la especifi-
sea realizada por el laboratorio que determinará la cidad del anticuerpo policlonal para Tg determinan
Tg porque ese laboratorio es responsable de selec-
cionar el método de TgAb más apropiado para de-
tectar interferencia por TgAb en el método para Tg
RECOMENDACIÓN Nº 47. PARA LOS FABRICANTES
que utilice.
Y LOS LABORATORIOS
Cuando se determina Tg en suero que contiene
TgAb con métodos RIA e IMA, con frecuencia se ob- El folleto con el procedimiento técnico incluido en
serva una discordancia RIA: IMA equivalente a [Tg la caja de reactivos para Tg debería informar so-
RIA ≥2 µg/L (ng/mL): Tg IMA = indetectable]. Esta bre las características reales de comportamiento
discordancia parece caracterizar la interferencia por analítico del método (es decir, un comportamiento
TgAb en una o ambas clases de métodos. Como el reproducible en una serie de laboratorios clínicos).
umbral actual para una respuesta de Tg positiva es- • Se deberían estandarizar los ensayos contra la prepa-
timulada por rhTSH equivale a 2 µg/L (ng/mL), el ración de referencia CRM-457. Los ensayos que no es-
grado de discordancia tiene el potencial de influir tén estandarizados contra el CRM-457 deberían pro-
en la toma de decisiones clínicas (308). Algunos pro- veer un factor de corrección.
fesionales creen que las mediciones con RIA produ- • El valor medio de Tg y los límites de 2 DS del rango
cen resultados de Tg sérica con mayor validez clíni- de referencia para los individuos normales eutiroideos
ca para los pacientes TgAb positivos que las medi- TgAb negativos (establecidos utilizando la Recomenda-
ción Nº48) se deberían citar en todas las publicaciones
ciones con IMA, según se infiere por las correlacio-
para permitir la comparación de los valores absolutos.
• Los ensayos que no pueden detectar Tg en todos los
sueros normales presentan una sensibilidad subóptima
para el control de los pacientes con CDT.
RECOMENDACIÓN Nº 46. INTERFERENCIA POR TGAB • Se debería verificar el desvío de la matriz utilizada pa-
Y ENSAYOS DE RECUPERACIÓN
ra la dilución de los estándares (Recomendación Nº 42).
• Los ensayos de recuperación no son confiables para • La sensibilidad funcional y la precisión intra- e inter-
la detección de TgAb y se los debería eliminar. Estu- ensayo se deberían establecer utilizando los protoco-
dios previos que informaron recuperaciones bajas en los descriptos en la Recomendación N° 44.
ausencia de TgAb estaban influenciados por la baja • La interferencia por TgAb se debería evaluar com-
sensibilidad de los métodos iniciales para medir TgAb. probando las discordancias RIA: IMA en los sueros
Cuando se utilizan inmunoensayos ultrasensibles, TgAb positivos [en valores de TgAb de 100 a >1000
siempre es posible detectar TgAb cuando la recupera- kUI/L (UI/ml)].
ción es baja. • Se deberían usar inmunoensayos de sensibilidad
• La discordancia entre las mediciones de Tg realiza- adecuada de TgAb, y no ensayos de recuperación con
das con IMA y RIA en una muestra TgAb positiva su- Tg exógena para detectar interferencia por TgAb (ver
giere interferencia por TgAb (si los valores habitual- Recomendación Nº 46).
mente concuerdan en las muestras TgAb negativas). • Los valores de Tg sérica para muestras TgAb positi-
• Los laboratorios no deberían informar valores inde- vas no se deberían informar si el método da valores
tectables de Tg sérica por método IMA en pacientes inapropiadamente indetectables en pacientes con CDT
TgAb positivos. con enfermedad documentada.
66 DIAGNÓSTICO Y SEGUIMIENTO DE LA ENFERMEDAD TIROIDEA RAEM • 2005
Vol 42 • No. 2

la predisposición del método a la interferencia por PCR, (b) en la sensibilidad de las técnicas de imáge-
TgAb (275, 321, 322). nes y de los inmunoensayos de Tg utilizados y (c)
Aunque no existe garantía de que ningún méto- en el nivel de TSH del paciente. Los problemas de
do actual de Tg esté libre de interferencia por TgAb, especificidad (resultados falsos positivos) constitu-
la subestimación que se produce con la metodolo- yen una conocida limitación de la metodología RT-
gía IMA es la dirección de interferencia más grave, PCR (328, 334). Se necesitan estudios adicionales para
ya que este error tiene el potencial de enmascarar la determinar si los niveles detectables de ARNm Tg
enfermedad metastásica. En consecuencia, los labo- informados para los pacientes atiróticos sin metásta-
ratorios no deberían informar valores indetectables sis conocida reflejan enfermedad clínicamente ocul-
de Tg sérica para pacientes TgAb positivos. ta, artefactos del ensayo o transcripción ilegítima.
Es necesario demostrar la correlación entre los
2. Determinación de ARN mensajero (ARNm) resultados de los ensayos de ARNm Tg y la recidiva
para Tg clínica, en especial en pacientes ARNm Tg positivos
con valores indetectables de Tg sérica antes de que
Se ha utilizado la amplificación de ARNm espe- se generalice la adopción del ensayo de ARNm Tg
cífico de tejido con la reacción en cadena de la po- en la práctica clínica. Como este método es más cos-
limerasa con transcriptasa reversa (RT-PCR) para de- toso que la determinación de Tg sérica, es probable
tectar células cancerígenas circulantes en sangre pe- que si se demuestra que las mediciones de ARNm
riférica de los pacientes con melanoma, cáncer de Tg son útiles para la clínica, se reserven para los pa-
próstata y de mama (326-328). La disponibilidad de ce- cientes de alto riesgo o TgAb positivos en quienes
badores (primers) específicos de Tg permitió la apli- las determinaciones de Tg sérica no son diagnósti-
cación de esta técnica a la detección de transcriptos camente confiables.
de ARNm Tg en sangre. El uso de RT-PCR para de-
tectar recidiva de cáncer tiroideo se informó por pri-
mera vez en 1996 (329). A partir de entonces, se ha apli- 3. Valores de Referencia de Tg Sérica
cado la técnica a material de punción de metástasis de
ganglios cervicales y se ha visto que es más sensible (a) Individuos Eutiroideos Normales
que la determinación de Tg en el aspirado (330). Las concentraciones de Tg sérica presentan una
Todavía tiene que establecerse el valor clínico de la distribución normal logarítmica en los individuos
determinación de ARNm Tg en sangre periférica. An- eutiroideos. Los valores suelen ser ligeramente más
tes de que se pueda utilizar este método para la toma elevados en las mujeres, pero no es necesario esta-
de decisiones terapéuticas en el CDT, es necesario re- blecer rangos de referencia en relación con el géne-
solver ciertas cuestiones sobre la sensibilidad y especi- ro (335). El hábito de fumar es un factor asociado con
ficidad tisular del ARNm Tg en sangre periférica (323-325). bocio y valores elevados de Tg sérica (336). Los ran-
Varios grupos han desarrollado métodos cuanti- gos de referencia de Tg varían según la zona geo-
tativos de RT-PCR para la detección de transcriptos gráfica, ya que reflejan la disponibilidad e ingesta de
de ARNm Tg en sangre (323-325, 331-333). Estos estudios yoduro (337, 338). La selección de individuos para la co-
generalmente encuentran ARNm Tg detectable en horte normal para determinar el rango de referencia
todos los individuos normales pero presentan una de Tg debería respetar los siguientes criterios de ex-
correlación pobre con la Tg sérica determinada por clusión:
inmunoensayo (331, 332). También hay diferencias en la • Bocio
correlación entre ARNm Tg y masa tumoral. Algunos • Consumo de cigarrillos
estudios han informado que la cantidad de ARNm • Antecedentes personales o familiares de enfer-
Tg se correlaciona con la presencia o ausencia de medad tiroidea
metástasis mientras que otros no informan dicha co- • Presencia de autoanticuerpos tiroideos (TgAb o
rrelación (324, 331, 333). Es probable que estas discrepan- TPOAb)
cias reflejen diferencias (a) en la sensibilidad y en la • TSH sérica < 0.5 mUI/L o >2.0 mUI/L
especificidad de los primers de Tg y los sistemas RT- • Embarazo

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