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Detoxificación hepática

noviembre 9, 2015 by Paula Pencef Pérez Deja un comentario

Conociendo cómo funciona nuestro hígado


Citocromo P450
Fases I y II de desintoxicación hepática
En esta primera fase el tratamiento ortomolecular de desintoxicación hepática
se centrará en:
Una dieta hipotóxica ortomolecular para una potente desintoxicación hepática
consistirá principalmente en:
Alimentos que se han de incorporar en el tratamiento detoxificante hepático
ortomolecular:
Pautas nutricionales para la detoxificación hepática:
Suplementos ortomoleculares necesarios en la detoxificación hepática
Fase II de la detoxificación hepática
En esta fase los suplementos más importantes son:
Síntomas más comunes presentes en un hígado sobrecargado de toxinas
Entre los síntomas más evidentes de un hígado recargado de toxinas podemos
mencionar:
La detoxificación hepática como acción preventiva en el desarrollo de
enfermedades
Bibliografía:
Conociendo cómo funciona nuestro hígado

El hígado es el órgano-glándula más grande del cuerpo humano, con un peso


medio de kilo y medio y situado en su mayor parte en el lado derecho
abdominal. Sus funciones son vitales para el ser humano, pues se encarga
principalmente de desintoxicar el organismo y sintetizar un importante número
de sustancias imprescindibles para el mantenimiento de la vida y la salud. Entre
ellas podemos contar con la producción de enzimas digestivas, hormonas y bilis
(digestión de los alimentos). Almacena importantes cantidades de vitaminas
liposolubles (A, D, E, K), glucógeno y sintetiza ácidos grasos y proteínas
plasmáticas (cuyas funciones son la de transportar hormonas, nutrientes, iones,
etc. y de regular algunas funciones del organismo como el sistema inmunitario)
las globulinas y la albúmina son algunas de estas conocidas proteínas. Es un
colaborador activo en la producción de energía (juega un importante papel en el
metabolismo del azúcar) y la depuración de la sangre en el organismo filtrando
una importante cantidad de toxinas endógenas. También sintetiza el colesterol y
metaboliza prácticamente todo aquello que ingerimos a través de la dieta,
incluidos los medicamentos y las toxinas. El hígado es el único órgano que posee
la capacidad de regenerarse a sí mismo casi por completo, filtra alrededor de 60
litros de sangre por hora siendo el órgano más importante en el proceso de
desintoxicación de nuestro cuerpo.

Detoxificación hepática ortomolecular

Citocromo P450

El hígado es el primer protagonista frente a las funciones de desintoxicación de


nuestro organismo, siendo el citocromo P450 (grupo de proteínas) la principal
responsable de la correcta función depurativa realizada por este órgano. El
citocromo P450 sintetiza un grupo de enzimas compuestas por
aproximadamente unas 100 enzimas con variaciones en cada persona. Su papel
es fundamental en el proceso de desintoxicación del organismo, pues cataliza los
tóxicos como los fármacos, polucionantes medioambientales (humo, metales
pesados, etc.). Transforma las sustancias tóxicas (oxidación, Fase I de
desintoxicación) en otras formas menos tóxicas para que puedan ser degradadas
mediante otros procesos consecutivos a la fase inicial (conjugación o Fase II) que
facilitarán la excreción de los tóxicos a través de las diferentes vías disponibles
en el organismo (orina, bilis, sudor, heces, etc.). Es en esta fase cuando se
producen los radicales libres como consecuencia de la biotransformación de
toxinas a formas hidrosolubles, lo cual requiere de la introducción de
antioxidantes para minimizar el efecto indeseable de los mismos en el
organismo.

Actualmente existen estudios de análisis clínicos específicos para medir la


capacidad detoxificante del hígado en cada persona. Concretamente se realizan
pruebas dentro de la Fase I y II de la detoxificación, midiendo en la primera la
eficacia del citocromo P450 en cada persona y en la segunda se analizan las
subfases por las que ha de pasar todo el proceso hasta ser completado. La
detoxificación hepática se halla condicionada por diversos factores tales como la
herencia genética, el estilo de vida, la carga farmacológica, etc. y con el fin de
optimizar el tratamiento individualizado se llevan a cabo esta clase de pruebas
especiales para una mejor planificación de la detox hepática. Estas pruebas
específicas aunque son aptas para todo aquel que desee gestionar eficazmente su
salud, están especialmente indicadas en casos de personas con sensibilidad
química múltiple, fatiga crónica, fibromialgia, alteraciones metabólicas e
inmunitarias e inflamaciones crónicas.

Fases I y II de desintoxicación hepática

Es en la Fase I de detoxificación cuando el citocromo P450 entra en acción


transformando los xenobióticos a formas hidrosolubles que permitirán ser
excretados a través de la orina y la bilis. No en todas las personas la función de
este grupo de proteínas se da de igual manera. En algunos casos su función se
verá disminuida y será más o menos eficiente su acción durante el proceso. Su
correcto funcionamiento y producción depende en gran medida de la situación
bioquímica interna de cada organismo y de ciertos agentes exógenos como la
ingesta de fármacos por ejemplo o la polución medioambiental. Existen factores
que influyen en su función como algunos nutrientes que en caso de ser
deficientes disminuirán también su producción y acción. Para estimular la
producción enzimática serán necesarios cofactores como algunos minerales y
vitaminas entre los que destacan el zinc, el magnesio, el cobre, selenio, cromo,
hierro, molibdeno y las vitaminas B (B1, B2, B3, B5, B6, B8, B9, B12) y vitamina C.

Fases I y II en la detox hepática y nutrientes necesarios


En esta primera fase el tratamiento ortomolecular de desintoxicación
hepática se centrará en:

Dieta hipotóxica
Suplementos depurativos hepáticos y estimuladores de la función hepática
y de la vesícula biliar

Una dieta hipotóxica ortomolecular para una potente desintoxicación


hepática consistirá principalmente en:

Suspender la ingesta de todo tipo de alimentos industrializados como:


alimentos pre-cocinados, congelados, preparados, sobres, latas, etc.
Alimentos refinados: harina blanca de trigo refinado (pan, galletas, pastas,
etc.)
Alimentos cocinados de las siguientes formas: frituras, microondas (que
degenera a nivel molecular los alimentos), asados con carbón, altas
temperaturas, comida quemada.
Azúcares: edulcorantes como aspartamo y sacarina, azúcar blanca refinada.
Alcohol y cafeína, chocolate con leche y azúcar, golosinas.
Leches de origen animal, margarina y mantequilla, nata, quesos grasos,
exceptuando el yogur natural.
Aderezos industriales, salsas, sal de mesa común, vinagres.
Embutidos y carne de cerdo, ternera y aves, exceptuando el pescado.

Alimentos que se han de incorporar en el tratamiento detoxificante hepático


ortomolecular:

Alimentos frescos, de temporada y de la región: vegetales, verduras y frutas.


Harinas integrales, harinas de espelta, kamut, quinoa, legumbres, arroz,
cuscús integral.
Legumbres (azukis, garbanzos, lentejas, judías) y cereales (arroz integral o
basmati) quinoa, amaranto, mijo, avena, trigo sarraceno.
Tortas de arroz, galletas de avena, espelta, harina integral, centeno.
Semillas: lino, sésamo, calabaza, chía, amapola, girasol.
Frutos secos, naturales y sin sal ni tostar.
Leches vegetales de avena, arroz, almendras, etc.
Sal del Himalaya, de hierbas o marina.
Aceite de oliva virgen extra, cártamo, nuez, cáñamo, aceite de germen de
trigo, vinagre de manzana o limón
Algas (todas) puesto que son altamente depurativas
Algarroba si se desea ingerir algún alimento que sepa a chocolate.
Pescados azules y blancos.
Huevos ecológicos o criados a campo.
Miel natural de abejas, azúcar moreno de caña integral, estevia.
Beber y cocinar con agua depurada, filtrada o mineral.
Yogures naturales sin sabor ni fruta ni cereales, de soja o cabra
preferiblemente (aunque también pueden ser de leche de vaca, puesto que
la leche de vaca fermentada es mucho más digestible de esta forma)
Pasta integral, de harina de arroz o espelta.
Leche de coco (como sustitutivo de la nata), queso de cabra u oveja

Pautas nutricionales para la detoxificación hepática:

Se ha de ingerir al menos una vez al día una ensalada cruda enriquecida


con semillas, preferiblemente en la comida del mediodía.
Consumir frutas fuera de las comidas, sobre todo en el desayuno y a media
mañana.
Cocinar al vapor, al horno a menos de 110ºC, al wok o a la plancha, o
escalfados.
Consumir al menos una ración de pescado al día, sobre todo en la comida
del mediodía.
Beber abundante cantidad de agua depurada (filtrada).
Cenar platos templados y cocinados (no crudos) como cereales o cremas de
verduras y legumbres.
Realizar cinco comidas al día. Comer de forma tranquila y masticar
correctamente. Realizar toma de pequeñas/moderadas cantidades de
alimento cada vez, sin exagerar.
A fin de no entorpecer el proceso digestivo, se recomienda no ingerir
bebidas frías o con hielo antes o durante las comidas.
Ingerir una infusión depurativa después de cada comida, por ejemplo de
cardo mariano, diente de león o boldo.
Incluir gran cantidad de crucíferas en la dieta puesto que su contenido en
azufre es elevado y por tanto favorecen la capacidad depurativa del hígado.
Evitar en la medida de lo posible ingerir medicamentos durante la
detoxificación (a excepción de que sea estrictamente indispensable)
Evitar la exposición a agentes tóxicos como aire contaminado, metales
pesados, productos químicos, tabaco y polucionantes de todo tipo.
Procurar descansar al menos 8 horas diarias y realizar ejercicio físico
moderado y adaptado al menos durante 30 minutos diarios.

Suplementos ortomoleculares necesarios en la detoxificación


hepática

Ante todo deberemos tener en cuenta que aunque aquí se expongan unas
recomendaciones generales, siempre es necesario acudir a la consulta de un
profesional que nos asesore y personalice los tratamientos. No todas las
personas expresan la misma eficacia a la hora de realizar una detoxificación
hepática, porque para ello se han de tener en cuenta muchos factores
importantes tales como: el estado de salud de la persona, nivel de intoxicación,
fármacos que ingiere, estilo de vida, etc. Por lo tanto cada detoxificación deberá
ser realmente adaptada a las necesidades y caso de cada persona en particular.

No obstante como normal general en nutrición ortomolecular existen


preparados de espectacular efecto sobre la primera fase de la detoxificación
hepática. Estos compuestos específicos concentran en su composición extractos
de plantas detoxificadoras del hígado como el cardo mariano, diente de león,
boldo, jengibre, bioflavonoides, vitamina C, N-Acetil-cisteína, selenio, L-
Glutation, rábano negro, equisandra, alcachofera, cúrcuma, ácido alfa lipoico,
ácidos grasos esenciales y algunos tipos de algas entre algunos otros más.

En la fase siguiente será fundamental introducir antioxidantes, quelantes de


metales pesados y complejos vitamínicos y minerales completos y aminoácidos
azufrados, así como realizar de forma complementaria una detoxificación de
riñones e intestinos.
Fase II de la detoxificación hepática

En esta segunda fase el hígado ya ha cumplido con su función de transformar


las sustancias tóxicas del organismo en formas más reactivas para que puedan
ser eliminadas por las vías de expulsión adecuadas. Es una fase muy importante
del proceso puesto que en ella se generarán radicales libres y se movilizarán
gran cantidad de metales pesados del organismo que será de fundamental
urgencia atender para evitar una intoxicación mayor. Destacan en esta fase las
subfases por las que se desarrolla: conjugación, sulfoconjugación,
sulfooxidación, conjugación de aminoácidos, metilación, acetilación y
glucuronidación, y cada fase requerirá de unos nutrientes específicos para que
sean realizadas de forma eficaz.

En la Fase II por tanto se continuará manteniendo la dieta, y se deberán


introducir suplementos específicos para ayudar al organismo a terminar
eficazmente el proceso de desintoxicación hepática.

En esta fase los suplementos más importantes son:

Complejos vitamínicos y minerales completos


Antioxidantes
Quelantes de metales pesados
Cofactores de la L-Glutation
Aminoácidos azufrados y completos

Metionina, cisteína, taurina, glicina, arginina, glutamina


Vitaminas C y vitaminas B (B1, B2, B3, B5, B6, B9 y B12 y colina)
Selenio, zinc y vitamina E
SAMe (S-adenosil-metionina)
Algas y desmodium

En una fase posterior se habrá de realizar también una depuración renal e


intestinal, que además de contemplar una dieta libre de toxinas deberá ser
suplementada con limpiadores renales e intestinales, dando así por terminada la
detoxificación completa.
Existen preparados completos que han sido desarrollados dentro del campo de
la nutrición ortomolecular con fines específicos, como por ejemplo realizar
tratamientos como el planteado de detoxificación hepática profunda.

Síntomas más comunes presentes en un hígado sobrecargado


de toxinas

Existe una sintomatología característica cuando el hígado se halla recargado de


toxinas y sus funciones se ven disminuidas o son ineficientes, también existen
algunos trastornos y patologías que se ven implicadas en el mal funcionamiento
hepático por altos niveles de toxinas. En estos casos conviene empezar cualquier
tratamiento específico con una profunda detoxificación hepática para continuar
luego con un tratamiento enfocado a la atención del problema de salud
concreto. Esta acción previa siempre será beneficiosa puesto que aumentará el
éxito y la eficacia de cualquier tratamiento así como acortará muy posiblemente
el tiempo de recuperación del paciente. La detoxificación hepática forma parte
de muchos tratamientos ortomoleculares de patologías donde al tratar el terreno
disminuyen por efecto de esta depuración muchos de los síntomas relacionados
con patologías en las que normalmente no se plantearía realizar una
detoxificación hepática como punto de partida.

Entre los síntomas más evidentes de un hígado recargado de toxinas podemos


mencionar:

Debilidad, fatiga, cansancio, falta notable de energía vital


Dificultad para concentrarse, bajo nivel de atención y alerta mental,
embotamiento, fatiga mental
Molestias digestivas como digestiones pesadas, hinchazón abdominal,
acidez, gases
Estreñimiento/diarrea
Dolores de cabeza frecuentes
Color amarillo en el blanco de los ojos y piel amarillenta (ictericia)
Orina de color oscuro y maloliente
Tendencia a desarrollar ojeras
Colesterol elevado
Carácter irritable, con tendencia a la ira
Factor de tolerancia a la glucosa
Trastornos en la piel (con tendencia a desarrollar sarpullidos) y cabello y
uñas débiles
Sobrepeso y envejecimiento precoz
Sensibilidad química múltiple, fibromialgia y fatiga crónica
Trastornos metabólicos crónicos y procesos inflamatorios e inmunitarios
crónicos

La detoxificación hepática como acción preventiva en el


desarrollo de enfermedades

Es importante realizar al menos una vez al año una detoxificación hepática


completa bajo la supervisión de un nutricionista ortomolecular. Hay que tener
muy en cuenta que cada persona presentará unos síntomas concretos y unas
circunstancias diferentes que serán necesarias tratar de forma personalizada
para conseguir el máximo beneficio de una detoxificación bien planificada y
adaptada de forma individual.

Es una acción preventiva que nos ayudará a evitar el posible desarrollo de


patologías y el agravamiento de otras. Como resultado obtendremos un mayor
nivel de energía, mejora de todas las funciones hepáticas, digestivas e
intestinales, un mayor nivel de concentración y alerta mental, limpieza celular
profunda del hígado, un estado anímico más elevado, y en algunos casos la
pérdida de algunos kilos demás en caso de sobrepeso.

El hígado es el órgano que nos proporciona mayor energía vital, debemos tener
presente la importancia que cumple su función en nuestra salud y cuidar
nuestra forma de alimentarnos para evitar la sobrecarga tóxica y mantenerlo en
buenas condiciones para que pueda cumplir eficazmente con sus funciones de
desintoxicación del organismo. Así podremos evitar el desarrollo de futuras
enfermedades y trastornos relacionados con un deficiente funcionamiento de
este órgano-glándula de fundamental importancia en el mantenimiento de la
salud.
Bibliografía:

Aspectos fundamentales del Citocromo P450 (Colección Docencia


Universitaria) Eptisa Salud Casta- Serie Ciencias Biomédicas. Monografías.
Coordinadora: Eva Arribas Arbiol, Autores: Antonio Gallego Fernández,
Mª Asunción de Sande García, Ana Mª Martín Fernández, Sonia Blanco
Ramos, Mª José González Galán. Fundación Tejerina.
¿Qué es el citocromo P450 y cómo funciona? de María Teresa Donato
Martín.
Modulación de la expresión de las enzimas del citocromo P450 hepáticas
durante el desarrollo humano. Laboratorio de tecnología genética del
Instituto Nacional de pediatría de México DF. Dora Molina Ortiz, Rafael
Camacho Carranza, Adriana Miriam Domínguez Ramírez y Araceli Vences
Mejía.
Lo que debemos saber sobre la detoxificación hepática e intestinal
(información exclusiva para uso profesional de Sura Vitasan)
Bioquímica hepática, metabolismo hepático de xenobióticos. Las
reacciones hepáticas de detoxificación. Profesor J.V Castell (Presentación
pp)
Artículo del blog Esencia Mágica “Sistemas de desintoxicación del hígado”
(Post, marzo 2013) Óscar René Muñiz, Naturópata
Cómo funciona el sistema de detoxificación hepática boletín exclusivo de
uso profesional de Solaray (Extraído del dossier “Desintoxícate de forma
natural” de Mikel García Iturrioz) (Enero 2015-42)

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