LA VALENTÍA DE CARMELO

Personajes:
 Roberto, el hermano mayor de la familia.
 Padre de Roberto, hombre trabajador y responsable.
 Héctor y Jesús, hermanos de Roberto.
 Carmelo, gallo de pelea muy querido
 Ajiseco, gallo joven
 Protectora de animales, personas que defienden a los animales en la sociedad.
Esta obra teatral se desarrolla en San Andrés de los pescadores, Pisco, en la costa del Perú.
Nos muestra una de las tradiciones más representativas de nuestro país, que es la pelea de
gallos y además el mensaje que nos muestra es la valentía y el coraje.

ACTO N°1
(Roberto, el hermano mayor, llega después de algunos años a casa. Ello motiva regocijo en la
familia Valdelomar).

Padre: (Emocionado grita) ¡Roberto! ¡Roberto!

(Roberto aparece en la puerta y es recibido con regocijo por toda su familia)
Roberto: (Alegre) Familia me encanta volverlos a ver después de mucho tiempo.
Roberto: (Preocupado y angustiado) ¡Madre!¿Y la higuerilla?
Era el árbol que plantó el mismo, antes que se fuera de viaje.
Madre: (Riéndose) Estás bajo la higuerilla, hijo.
(Todos se dirigen al comedor)
Roberto: Miren todos los regalos que les traje: quesos frescos y blandos envueltos en paja de
cebada; chancaca hecha con cocos, nueces, maní, frijoles colados; bizcochuelos; santitos de
“piedra de Guamanga” tallados en la feria serrana; cajas de manjar blanco y tejas rellenas.
(Todos reciben el obsequio, uno por uno)
Roberto: Para mamá…. Para Rosa…. Para Jesús…. Para Héctor….
Jesús: (Sorprendido) ¿Y para papá?
Roberto: (En tono de burla) Nada.
Héctor: ¿Cómo? ¿Nada para papá?
Roberto: (Pide que traigan a Carmelo)
Jesús: (Sorprendido) ¡Para papá!
Roberto: Sí, esto es para papá.
Así entró en nuestra familia, Carmelo, que está presente su memoria en nuestro hogar y
siempre lo recordaremos como un héroe.

ACTO N°2
(Todos los integrantes de la familia se encuentran almorzando y el padre de Roberto les tiene
una noticia, que a todos va a sorprender).
Padre: ¡Familia, familia! He aceptado una apuesta para una pelea de gallos en San Andrés, el
28 de julio. Carmelo tendrá que pelear contra el Ajiseco.
Héctor: (Angustiado) ¿Cómo padre?
Roberto: Padre, Carmelo no está en condiciones para pelear.
Padre: Bueno lo sé, pero ya hice la apuesta y vendrá una persona a entrenar a Carmelo.
(Todos se encontraban tristes y sorprendidos porque Carmelo iría a un combate y a luchar a
muerte)
Roberto: (Observaba cómo todos los días un hombre entrenaba a Carmelo)
Roberto: (Apenado) ¡Qué crueldad!
(Lloran los hermanos de Roberto)
Jesús: (En secreto se dirige a Roberto) Oye, anda junto con él. Cuídalo…… ¡Pobrecito!
(Roberto junto a su padre llegan a San Andrés. El pueblo estaba de fiesta. Banderas peruanas
agitándose en las casas por el día de la patria. Allí se iba realizar la pelea de gallos.
(Roberto junto a su padre se dirigen a la “cancha” para la pelea de gallos)
Roberto: Padre coloquémonos en esa esquina. Allí esta nuestro contrincante y ese gallo debe
ser el famoso Ajiseco.
(Sonó la campana y los sus adversarios se miran fijamente)
Padre: ¡Vamos Carmelo! (Gritaba con emoción)
Adversario: Ajiseco, tú le puedes ganar a este pobre gallo achacoso.
(Todas las apuestas se inclinan al adversario porque Carmelo era un gallo viejo)
Protector: (Aparece en la escena) ¡Esta pelea de gallos no puede continuar!
Adversario: ¿Por qué? ¡Esta es una tradición!
Protector: (Alterado) Yo lo sé señor, pero no se debe maltratar salvajemente a los animales.
Así que si quieren seguir esta pelea, lo tienen que hacer sin navajas.
Adversario: Esta bien, señor estamos de acuerdo.
Padre: Para mí también está correcto.
(Después de una dura batalla y sangrienta que daba como primer ganador al Ajiseco pero
Carmelo supo defenderse y al final salió victorioso de esta contienda)
Roberto: (Alegre) Yo sabía que Carmelo sería el ganador.
Padre: ¡Bravo Carmelo!
Roberto: Padre tenemos que ir a recoger nuestro premio. ¡Somos los ganadores!
(Regresaron a su domicilio cómo los triunfadores).

ACTO N° 3
Al llegar a casa fueron recibidos con alegría por la familia que los esperaban con ansia.
Héctor: ¡Roberto, fueron los vencedores!
Roberto: Sí hermano, el Carmelo fue el triunfador.
Jesús: Yo sabía que Carmelo era el mejor.
(Todos se funden en un tierno abrazo)
Roberto: Carmelo se encuentra un poco lastimado, tenemos que cuidar de él.
Héctor: Sí, Roberto yo te ayudaré a cuidarlo.
(Dos días estuvo el gallo sometido a toda clase de cuidados)
Roberto: Creo que Carmelo ha mejorado y ya puede empezar a ganar más peleas.
Padre: ¡Claro hijo! El Carmelo fue el mejor regalo que me pudiste dar.
Roberto: De nada padre usted se merece lo mejor al igual que mi madre.
(Roberto siguió entrenando a Carmelo, así fue que puedo conseguir muchos triunfos con este
preciado animal)
Roberto: (Hacia Carmelo) Tú eres mi mejor amigo y nosotros hacemos un gran equipo juntos.