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LA ARTESANÍA COMO INDUSTRIA CULTURAL: DESAFÍOS Y

OPORTUNIDADES

Autor: Dra. Silvana Navarro-Hoyos


Afiliación: Pontificia Universidad Javeriana, Departamento de Diseño, Facultad de
Arquitectura y Diseño, Bogotá D.C., Colombia, S.A.
Datos de www.silvananavarro.com
contacto: info@silvananavarro.com
navarrosilvana@javeriana.edu.co

RESUMEN

La artesanía se está reinventando de la mano de jóvenes creadores y diseñadores, así como


de maestros artesanos, que con su frescura y osadía, la están convirtiendo en un
laboratorio de experiencias sensoriales, emocionales y simbólicas. La actividad
económica artesana no es importante solo por sí misma, sino por la conexión que tiene
con otras actividades y sectores económicos. Incluir el sector artesano dentro de las
industrias culturales, denota la importancia económica que tiene su desarrollo para una
región.

La artesanía, como parte de las industrias culturales, es un factor importante a considerar


en las economías modernas; ya que no solo contribuyen con el crecimiento económico de
los países, generando empleo e ingresos, sino que también ayuda a transmitir y mantener
las raíces culturales e identidad de las naciones. La artesanía está resurgiendo.
Paralelamente al declive de la artesanía folclórica, el mundo del diseño, está
redescubriendo, desde diferentes perspectivas, los valores emocionales, sensoriales y
sociales contenidos en el saber artesanal. Ello está provocando la diversificación de
demanda artesanal en diferentes mercados, utilizando diferentes canales comerciales y
estrategias de comunicación diferenciadas.

Además, muchos artesanos han replanteado su actividad desde una perspectiva de


animación sociocultural, con talleres de formación, divulgación y de ocio, así como con
su implicación en mercadillos temáticos, actividades cuya demanda no para de crecer.
Pero esta alternativa, no resulta satisfactoria para aquellos artesanos más comprometidos
con actividades creativas.

Palabras clave: Artesanía, Industria cultural, desarrollo artesanal, identidad, Kankuamos

1
1. INTRODUCCIÓN:

El sector artesano como parte integrante de la cultura se encuentra en continua


modificación y evolución. A partir de esta premisa, se desarrolla el interrogante de partida
de este articulo; ¿Cómo se reinventa y reinterpreta la artesanía de mano de sus creadores
en las industrias culturales?

Estas páginas trataran los términos artesanía e industria cultural. Se reflexionará en torno
al producto artesanal como producto folclórico, así como en torno al dilema arte o
artesanía. Se analizaran los procesos de trasformación del producto artesanal en las
industrias culturales y se reflexionara sobre los procesos de intervención (diseño,
comercialización) aplicados a la artesanía popular y la relación entre artesanos,
comercializadores y usuarios. Finalmente se sugerirán propuestas de actuación que
mantengan la simbología del objeto y a la vez exploren nuevos imaginarios sociales.

La investigación se realizó desde diferentes niveles:

Nivel general: en donde se dispuso de una sólida base documental con el fin de
conceptualizar términos artesanía e industria cultural.

Casos: la información ha sido completada con estudios de caso, donde se combinó la


información oral con la documental y la observación directa, lo que permitió una mayor
profundidad analítica. El estudio de caso se centró en el estudio de la artesanía de la
comunidad Indígena Kankuama, en Colombia.

Es notable la relación existente entre artesanía y comercio. El sector artesano se encuentra


inmerso en un mundo donde los valores culturales están sometidos a las leyes del
mercado, la propia supervivencia de este bien cultural depende de la capacidad de
organizarse adecuadamente como empresa en cuanto a su producción, canales de
comercialización y venta.

Las modificaciones del producto están a la orden del día bien por petición de un cliente
específico o bien por la intervención de profesionales de diseño. Pero hasta donde puede
sufrir modificaciones un producto artesanal sin alterar su componente cultural, es una
pregunta abierta a múltiples interpretaciones.

Tratar a la artesanía como parte de las industrias culturales, nos lleva a la socialización
del objeto y posiblemente a alejarnos del producto tradicional, pero al mismo tiempo dota

2
a este sector de una notoriedad que ayuda a su organización y reconocimiento por parte
de la sociedad.

La mayor parte de los artesanos latinoamericanos no están organizados como empresas


legalmente constituidas y comparten su actividad con otras ocupaciones remuneradas,
puede tratarse de tareas del campo, o bien en el caso de las mujeres compartir esta
actividad con las labores de cuidado del hogar y los hijos. Todo ello lleva a una
infravaloración de la producción artesana.

Por otro lado encontramos que el gobierno trata a los artesanos como cualquier otra
industria de cualquier sector, sin tener en cuenta las características diferenciales que
reviste el sector artesano.

La artesanía es una actividad económico-cultural, por lo cual es importante comenzar por


definir claramente el término, además de reflexionar sobre su valor folclórico, su relación
con el arte, el comercio o las industrias culturales.

2. EL CONCEPTO DE LA ARTESANÍA

La artesanía, como producto folklórico, ha conformado rasgos distintivos de nuestra


identidad, como individuos y como colectivo. Ese proceso ha estado determinado por el
medio ambiente y la realidad cultural, social y económica. Las creencias, artes, valores,
prácticas y tradiciones que se transmiten de generación en generación, sugieren una
memoria que vive el presente poniendo en valor las experiencias ancestrales en la
cotidianidad de su quehacer.

Podemos concebir la artesanía desde tres dimensiones:

 El artesano: como creador y constructor de cultura.


 La actividad artesanal: como proceso en el que se aplican técnicas y prácticas
artesanales tradicionales y contemporáneas y como proceso productivo que
provee medios de vida al artesano.
 El producto artesanía: expresión de identidad y de la cultura autóctona nacional,
regional y local.1

1
En este punto hay que aclarar que al hablar del producto artesanía, está implícito su comercialización y su
apertura a mercados, y por lo tanto está influenciado por un consumidor, es quien al final hace que el objeto
cotidiano devenga en artesanía.

3
Al hablar del sector artesanal estos tres componentes no pueden separase, están
interrelacionados unos con otros y son la fuente de valor como producto folklórico.

La definición del sector artesano es un tema complejo ya que no existe un criterio


unificado sobre qué tipo de actividades económicas pueden considerarse como artesanas.

El concepto de artesanía ha evolucionado de forma diversa a lo largo de la historia y ha


adoptado diferentes definiciones. En la actualidad, su definición sigue siendo
heterogénea pudiendo ser analizada desde diferentes perspectivas. En la tabla 1, podemos
ver una aproximación al termino realizada por la Fundación Española para la Artesanía,
en un informe publicado en el año 2009 en conjunto con el Ministerio de Industria,
Turismo y Comercio y La Dirección General de Política de la Pyme del Gobierno Español
titulado “El sector artesano español en las fuentes estadísticas y documentales”.

TABLA 1. Aproximaciones a la definición del concepto de artesanía

Tecnológica: Esta aproximación lleva a una definición que incluye actividades de


carácter fundamentalmente manual y con cierto sentido artístico.
Antropológica: La tradición es la que asigna a estos productos una función dentro de
la comunidad. Desde esta perspectiva, cabe entender por artesanía toda actividad,
retribuida o no, que no haya sido afectada por los principios de especialización,
división y mecanización del trabajo.
Cultural: El concepto artesanía se confunde con el de “arte popular”, entendido
como aquel conjunto de actividades productoras, de carácter esencialmente manual,
realizadas por un solo individuo o una unidad familiar, transmitidas por tradición de
padres a hijos y cuyos productos, generalmente de carácter anónimo, están destinados
a la cobertura de necesidades concretas.
(Dirección General de Política de la Pyme, DGPYME 1997)

De acuerdo a esta definición existe una división entre la aproximación antropológica y


la cultural, que en la realidad no es tal ya que el punto de vista antropológico incluiría por
supuesto el estudio de aspectos culturales y en cierto sentido también tecnológico. A mi
parecer, los componentes irrefutables de la artesanía serian; el componente tecnológico,
incluyendo herramientas y maquinas utilizadas; las formas de producción, incluyendo
técnicas y materiales tradicionales y finalmente las formas de creación, que incluiría las
características artísticas, estéticas y culturales que influyen de manera directa sobre el
artesano.
4
A nivel internacional, la UNESCO define la artesanía de la siguiente manera:

“Los productos artesanales son los producidos por artesanos, ya sea


totalmente a mano, o con la ayuda de herramientas manuales o incluso de
medios mecánicos, siempre que la contribución manual directa del artesano
siga siendo el componente más importante del producto acabado. Se
producen sin limitación por lo que refiere a la cantidad y utilizando
materias primas procedentes de recursos sostenibles. La naturaleza
especial de los productos artesanales se basa en sus características
distintivas, que pueden ser utilitarias, estéticas, artísticas, creativas,
vinculadas a la cultura, decorativas, funcionales, tradicionales, simbólicas
y significativas religiosa y socialmente”. (UNESCO 1997)

Esta definición, es bastante amplia no define categorías artesanales, hace énfasis en la


preponderancia del trabajo hecho a mano y los diferentes usos que puede llegar a tener
un producto, sin hacer énfasis en el legado “tradicional”, lo cual permite entrever la
característica de transformación y adaptación que tiene el producto artesanal, pero sin
comprometerse en ninguna afirmación. De acuerdo a esta definición todo producto
elaborado en su mayor parte a mano puede ser considerado un producto artesanal.

De manera general en Colombia se acepta la siguiente definición, según Artesanías de


Colombia S.A.2 ,

“Actividad de transformación para la producción creativa de objetos finales


e individualizados (productos específicos) que cumplan una función utilitaria
y tienden a adquirir el carácter de obras de arte; actividad que se realiza a
través de la estructura funcional e imprescindible de los oficios y sus líneas
de producción, que se llevan a cabo en pequeños talleres con baja división
social del trabajo y el predominio de la aplicación de la energía humana,
física y mental, generalmente completada con herramientas y máquinas
relativamente simples; actividad que es condicionada por el medio
geográfico, que constituye la principal fuente de materias primas, y por el

2
Artesanías de Colombia S.A, es una empresa de economía mixta adscrita al ministerio de Comercio,
industria y turismo del gobierno colombiano, creada en el año 1964 con el fin de promocionar, fomentar y
exportar las artesanías Colombianas y tiene como objetivo principal incrementar la participación de los
artesanos en el sector productivo nacional, logrando un desarrollo integral sostenido que se manifieste en
el mejoramiento del nivel de vida.

5
desarrollo histórico del marco sociocultural donde se desarrolla y al cual
contribuye a caracterizar” (Herrera, 1996).

Los oficios artesanales constituyen ramas de especialización dentro de cuya estructura


funcional se objetualiza una rama del saber transformador de un determinado género de
recursos materiales (materias primas), mediante la aplicación de unos procedimientos e
instrumentos específicos que permiten la obtención de unos bienes.

“De acuerdo a esta perspectiva que presenta a la artesanía como una


actividad concreta y observable, el oficio, dentro de la que debe darse de
manera imprescindible y que le sirve de marco de ordenación y
sistematización del saber, se define como el conjunto operativo de factores
del saber y del hacer productivos que conforman la estructura de un sistema
generalizado de trabajo en el que se aplica la misma clase de conocimientos
y destrezas como consecuencia de utilizar el mismo tipo de máquinas,
herramientas y procedimientos para la transformación de un mismo tipo, es
decir, de la misma familia biológica ( o industrial, en algunos casos, pero
tradicionalmente aplicados en la producción artesanal) y obtener productos
de función y usos semejantes, lo cual conforma clases de producción que a
su vez pueden comprender líneas específicas de producción”. (Herrera 1996)

Esta visión tiene dos elementos fundamentales, la primera, la importancia que adquiere
el oficio y su especialización como forma de división del trabajo (Artesanías de Colombia
al estar inscrito al ministerio de industria tiene un marcado interés por ver la artesanía
como fuerza de trabajo, creación de empleo y microempresas), y la segunda la necesidad
de elevar a obra de arte el objeto (con el fin de que el producto sea más apreciado y mejor
pagado tanto en mercados nacionales como internacionales).

De acuerdo a las características de la producción, técnicas y productos artesanales


desarrollados Artesanías de Colombia, realiza una clasificación de la artesanía en
indígena, de tradición popular y contemporánea o neoartesanía. Estudiaremos ahora esta
clasificación, con el fin de conceptualizar la forma en que se abordará el término es esta
investigación.

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TABLA 2. Clasificación de artesanía en Colombia

Clasificación realizada por Artesanías de Colombia, tabla propia basada en la publicación


Listado General de Oficios artesanales. (Herrera, 1996)

ARTESANÍA DE TRADICIÓN ARTESANÍA CONTEMPORÁNEA


ARTESANÍA INDÍGENA
POPULAR O NEOARTESANÍA
Es la producción de bienes integralmente
Es la producción de objetos útiles y al
útiles, rituales y estéticos, condicionada
mismo tiempo, estéticos, realizada de
directamente por el medio ambiente
forma anónima por el pueblo que Es la producción de objetos útiles y
físico y social, que constituye expresión
exhibe completo dominio de los estéticos desde el marco de los oficios y
material de la cultura de comunidades
materiales, generalmente procedentes en cuyos procesos se sincretizan
con unidad étnica y relativamente
del hábitat de cada comunidad, elementos técnicos y formales
cerradas que representan la herencia viva
producción realizada como oficios procedentes de otros contextos
precolombina de un determinado nivel
especializados que se trasmiten de socioculturales y otros niveles tecno
de desarrollo y un determinado carácter
generación en generación, y constituye económicos; culturalmente, tiene una
sociocultural; producción realizada para
expresión fundamental de la cultura con característica de transición hacia la
satisfacer expectativas socialmente
que se identifican, principalmente, las tecnología moderna y/o la aplicación de
determinadas, y en la cual se integran,
comunidades mestizas y negras, cuyas principios estéticos de tendencia
como actividad práctica, los conceptos
tradiciones están constituidas con el universal y/o académicos, y tiende a
de arte y funcionalidad y se materializa
aporte de poblaciones americanas y destacar la creatividad individual
el conocimiento de la comunidad sobre
africanas, influidas o caracterizadas en expresada por la calidad y originalidad
el potencial de cada recurso del entorno
diferentes grados por rasgos culturales del estilo.
geográfico, conocimiento trasmitido
de la visión del mundo de los
directamente a través de las
originarios inmigrantes europeos.
generaciones.

Esta clasificación puede servir para la elaboración de proyectos gubernamentales o no


gubernamentales que tengan como fin el desarrollo del sector artesanal en una comunidad
determinada pero no como definición de la artesanía colombiana.

La artesanía colombiana es una expresión material de la cultura de un país donde lo


indígena, lo afro y lo europeo, se han mezclado y fundido sin tener una clara división de
donde empiezan o terminan. De esta forma cada producto aunque conserve rasgos
particulares de la comunidad productora ha sido influenciado bien sea en sus técnicas,
materiales, usos o significados, por otras expresiones culturales.

De la misma manera al hablar de artesanía, hacemos referencia directa a la introducción


de productos dentro de un mercado, lo cual nos lleva a pensar que el producto es
influenciado por elementos nacionales e internacionales.

Podemos decir que la artesanía parte de los productos “tradicionales” (lo que puede incluir
técnicas, materiales, morfologías, usos o significados), pero que adopta elementos ajenos
a la tradición provenientes de grupos externos al productor como una evolución propia de
la identidad de individuos y colectivos inmersos en un mundo globalizado.

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Concluyendo, se puede entender por artesanía, la producción de objetos materiales locales
que se introducen dentro dinámicas de mercado de compra venta, donde prevalece la
producción manual y el uso de materias primas naturales, caracterizándose por el uso de
técnicas transmitidas por tradición y por formas de creación que incluye elementos
artísticos, estéticos, culturales, morfológicos, de uso y significado a las que está expuesto
el artesano productor, bien sea por tradición o evolución, que pueden llegar a ser
consideradas una expresión de identidad y de cultura autóctona nacional y que es
influenciada tanto por el desarrollo histórico, geográfico y marco sociocultural donde se
producen, como, por elementos ajenos a la tradición provenientes de grupos externos al
productor.

Esta definición propia, pretende involucrar todos los aspectos antes mencionados y sentar
la base para el desarrollo de este artículo. Cabe destacar de acuerdo a esta definición que
la diferencia entre un producto artesanal y un objeto de la cultura material radica en la
comercialización y reproductibilidad del mismo.

Se puede concluir por tanto que el objeto tradicional se modifica para convertirse en
artesanía y que al entender a la artesanía como una oportunidad de desarrollo para una
región, ésta se incluye dentro de las industrias culturales.

3. EL PRODUCTO ARTESANAL COMO PRODUCTO FOLKLÓRICO

La cultura popular deja atrás los limites cerrados de la cultura de la elite, para contener
también los testimonios de la memoria de la comunidad, una memoria dinámica que
además de conservar los valores heredados, suma nuevos a partir de cambios,
transformaciones y sustituciones que su dinámica le ha permito conocer. Así el
patrimonio cultural de una nación está compuesto también por los productos de la cultura
popular que incluyen los bienes materiales y simbólicos elaborados por los grupos
subalternos (García Canclini 1999), es decir que abarca no sólo lo bienes materiales, sino
que involucra a los elementos naturales, culturales, materiales y/o inmateriales del pasado
o del presente en los cuales se reconoce un determinado grupo social.

Las artesanías evidencian ese proceso de construcción social del patrimonio como
proceso productivo y tecnológico asociado a las prácticas de la vida cotidiana.

En la siguiente ilustración se pueden observar algunas de las características más


sobresalientes de la artesanía como elemento cultural.

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ILUSTRACIÓN 1. Características de la artesanía como elemento cultural, Navarro-Hoyos 2013

La UNESCO reconoce a las artesanías como una de las formas que asume la cultura
tradicional y popular para representar el conjunto de creación de una comunidad cultural.
Reconoce además que se fundan en la tradición y son expresión de su identidad cultural
y social.3

Los conservacionistas del patrimonio promueven acciones para preservar lo que ellos
consideran la esencia de un producto artesanal, de esta forma se establecen unos valores
y categorías de lo que “es tradicional”. Por otro lado los mercantilistas, consideran al
patrimonio como recurso renovable cuyo valor está dado por los requerimientos del
mercado, a cuya satisfacción está orientada casi exclusivamente a la explotación del
mismo promoviendo intervenciones de corte comercial destinadas a satisfacer tales
demandas. La artesanía se debate entre inmutabilidad (condicionada por las formas de
producción, materias primas, técnicas y conocimientos heredados y aprendidos del
artesano) y su adaptación a las supuestas necesidades del mercado.

Vemos en la artesanía una dinámica que articula tradición y modernidad, un espacio único
de creación, en donde el artesano está continuamente expresando lo que encuentra en su
cotidianidad, un proceso tan cambiante como lo vivido. Efectivamente, la artesanía no
es un producto estático, está en continuo cambio de la misma forma en que la cultura
cambia, adaptándose y configurándose a nuevas realidades.

3
Recomendación sobre la salvaguardia de la cultura tradicional y popular. Paris, 15 de noviembre de 1989.
25° Conferencia General de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la
Cultura.

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4. ARTE O ARTESANÍA

Arte y artesanía, artistas y artesanos han tenido una fuerte relación desde siempre. De
estas relaciones podemos diferenciar diferentes etapas a lo largo de la historia.

 Etapa 1: Identificación mutua


 Etapa 2: Subordinación del artesano al arte (desde el renacimiento hasta el
modernismo)
 Etapa 3: trabajo autónomo de cada disciplina, lo notamos en la actualidad
(coexistencia y reconocimiento)

¿Cuál es el límite entre arte y artesanía?, es una discusión en la cual los expertos no se
han puesto de acuerdo. Sin embargo parece ser que su principal diferenciación se
encuentra en lo referente a los procesos creativos. En el siguiente cuadro, podremos ver
las diferentes relaciones establecidas entre los procesos de concepción artística y
artesanal.

TABLA 3. Paralelo de los conceptos creativos arte y artesanía, cuadro propio basado en, Blas García
2005

Concepción artística Concepción artesana


Parte de una idea Parte de un objeto
La idea se desarrolla técnicamente conforme El artesano desarrolla sus ideas desde la
a la tendencia conceptual y a la personalidad materia sin cuestionarla, apoyándose en su
creativa del artista. procedimiento u oficio característico.
Refugiada en el concepto Emerge y se autentica en lo popular, función
social del trabajo.
Complejidad creativa Sencillez creativa (que no es simplicidad).

La diferencia entre arte y artesanía se delimita de acuerdo a las relaciones que el hombre
establece con el objeto producto de esta actividad. Se puede presuponer que existe un
problema de apreciación, definido por los parámetros de lectura que establezca la
sociedad receptora. Existen claras diferencias y similitudes que definen los términos arte
y artesanía (ver ilustración 2. Relaciones arte y artesanía), sin embargo hay que aclarar
que estas no son unas reglas rígidas que se cumplan en su totalidad. Los procesos son
bidireccionales y con facilidad un producto artístico podrá convertirse en artesanal y
viceversa de acuerdo a la sociedad receptora.

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ILUSTRACIÓN 2. Relaciones arte y artesanía Navarro-Hoyos 2015

La admiración que las sociedades nacionales manifiestan por la artesanía, la valora al


punto de convertirla en un referente de identidad nacional. Se reconoce en la artesanía
un legado cultural indiscutible, y es desde el discurso “intelectual” donde los objetos han
empezado a formar parte de exposiciones y museos.

En esta valoración se exalta al objeto en sí, y no al artesano, así esta valoración no ha


dado como resultado su respectiva correlación en la situación de vida de los productores.
El reconocimiento es inexistente, aunque la admiración exista, se admira la capacidad de
producción del grupo más que del individuo, que no es más que un mediador. Este es un
elemento contradictorio pues al mismo tiempo que se valora una de las expresiones
culturales de una sociedad, no se permite el acceso a una mejor calidad de vida de sus
productores.

Se otorga valor simbólico nacional a ciertos objetos que son expresiones de culturas cuyos
participantes no tienen las condiciones materiales para ejercer la libertar de creación
artística ni de decisión sobre sus obras; ambas le son expropiadas. La creación se da, de
cualquier modo, por imperativos culturales poco estudiados y menos explicados. Las

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relaciones que se establecen con la artesanía tienen la concepción tradicional de grupos
como conjuntos heterogéneos ajenos a la individualidad: primitivismo y tradicionalismo
de los grupos productores de artesanía.

Los objetos artesanales o de uso cotidiano aparecen en las salas de los museos,
repitiéndose cuatro modelos generales: 1) opción donde destacan las propiedades de los
objetos formales para promover una contemplación inmediata de su belleza física. 2)
Otra posibilidad es la de privilegiar las perspectivas de los miembros de las culturas
representadas y sus descendientes. 3) Un tercer modelo representa el encuentro colonial
en la historia, el enfoque de las circunstancias en las cuales las colecciones fueron
formadas y la historia de la producción de conocimiento sobre pueblos fuera de la órbita
cultural europea (para el caso latinoamericano). 4) Un cuarto modelo debe distanciarse
de las culturas expuestas de ambas perspectivas natales, las intrusiones del mundo
Occidental, presentándolos como las viñetas de un pre – contacto (Price 2007).

La cultura occidental ha separado la vida del arte; le es difícil comprender cuan


estrechamente integrado con toda la vida y cuan expresivo del modo de vivir puede ser el
arte. La separación ha provocado también diferenciar el arte “puro” del arte “aplicado”
(y a sus correspondientes autores, el artista y el artesano), restándole valor estético a los
objetos que tienen un uso en la vida diaria pues se considera que “la expresión más
elevada de la experiencia estética reside en objetos que no son profanados por el uso, sino
que están ahí para ser contemplados”. (Herskovits 1968:415)

En el caso de la producción artística indígena, esta no ha sido propiamente reconocida, se


les denomina como arte primitivo o arte ingenuo, o si se trata de objetos utilitarios en la
vida doméstica, no se les reconoce su creatividad y buen diseño. Paralelamente existe un
fenómeno contrario cuando el objeto se exalta de manera patriótica o nacionalista,
convirtiendo al objeto en arte popular.

En el caso colombiano podemos ver un ejemplo de ello, con el sombrero vueltiao, objeto
popular, ahora convertido en una preciada artesanía, tejido en caña flecha por la
comunidad indígena Zenú, que ha sido nombrado como Símbolo Cultural de la Nación
mediante la Ley 908 del 8 de septiembre de 2004.

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5. LA ARTESANÍA COMO INDUSTRIA CULTURAL

Es claro que la artesanía está relacionada directamente con la identidad y constituye una
pieza fundamental del desarrollo de la creatividad. Con la artesanía nos integramos a las
llamadas industrias culturales como vía de acceso a la modernidad en una plataforma
funcional de productividad.

El termino industria cultural es un concepto desarrollado por Theodor Adorno y Max


Horkheimer para referirse a la capacidad de la economía capitalista, una vez desarrollados
ciertos medios técnicos, para producir bienes culturales en forma masiva. En una
definición más amplia, es el sector de la economía que se desarrolla en torno a bienes
culturales tales como el arte, el entretenimiento, el diseño, la arquitectura, la publicidad,
la gastronomía, el turismo o la artesanía entre otros.

Hoy en día nos encontramos constantemente las palabras “globalización” y “nuevas


tecnologías”. Son como palabras mágicas que parecen reflejar la realidad de nuestro
tiempo y que inmediatamente asociamos con ideas como rapidez, cambios, comercio
electrónico, comunicaciones en tiempo real, viajes y dinamismo.

La actividad del artesano se caracteriza económica y técnicamente por la individualidad


del trabajo, con identidad propia, a la hora de producir el bien o servicio, frente al carácter
seriado de las producciones industriales.

Ahora bien, frente a toda consideración puramente economista a la hora de analizar y


regular la actividad artesanal, habría que fijarse no tanto en, como sucede en las
economías de mercado en la obtención de beneficio, sino que habría que buscar que la
empresa artesana se modernice, se adapte a las nuevas tecnologías sin perder la
autenticidad y los valores que estos trabajos aportan.

La artesanía con todo su acervo cultural y técnica, es parte también de otras actividades
económicas modernas, configurando lo que se ha llamado la “nueva artesanía”, es decir,
la artesanía como industria cultural.

La actividad económica artesana no es importante solo por sí misma, sino por la conexión
que tiene con otras actividades y sectores económicos. Incluir el sector artesano dentro
de las industrias culturales, denota la importancia económica que puede tener su
desarrollo para una región.

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La artesanía, como parte de las industrias culturales, se ha convertido en un factor
importante a considerar en las economías modernas; ya que no solo contribuyen con el
crecimiento económico de los países, generando empleo e ingresos para miles de familias,
sino que también ayuda a transmitir y mantener las raíces culturales e identidad de las
naciones.

La UNESCO sostiene que existe una industria cultural cuando los bienes y servicios se
producen, reproducen, conservan y difunden según criterios industriales y comerciales,
es decir se producen en serie y aplicando estrategias de tipo económico (Anverre, 1982).

Otros autores como Zallo en su libro “Economía de la comunicación y la cultura” (1988)


se refieren a las industrias culturales como el conjunto de ramas industriales productoras
y distribuidoras de mercancías con contenido simbólico, concebidas gracias a un trabajo
donde interviene la creatividad e imaginación, organizadas por un capital que se valoriza
y destinadas a un mercado de consumo, con fines de producción ideológica y social.

En el ámbito de la producción artesanal como parte de las industrias culturales, algunos


países industrializados otorgan mucha importancia a las artesanías, un ejemplo de ello se
encuentra en Italia. Se estima que para el año 2001 el 24% de sus empresas eran
artesanales, además que la exportación de las artesanías representaba el 17% del PIB. En
Colombia la producción de objetos artesanales produjo para el mismo año unos 400
millones de dólares, además de que las exportaciones de estos objetos ascendieron a 40
millones de dólares. Para la misma época, se estimaba que México, contaba con 2.8
millones de artesanos de tiempo completo, además de 4 millones más de tiempo parcial,
lo que hace un total de 6.8 millones de artesanos (Vargas-Hernández 2014).

Sin duda el sector artesano no solo es representante de nuestra identidad cultural, sino que
además se convierte en eje fundamental para economías en desarrollo.

Hablar de cifras económicas nos lleva a plantearnos la competitividad del sector artesano.
De acuerdo con Porter (1985), para crear ventaja es necesario percibir las nuevas formas
de competencia, además de asumir riesgos y hacer inversiones para ponerlas en práctica.
De esta manera, la ventaja competitiva se origina de la forma en que las empresas
organizan y llevan a cabo actividades discretas. Por lo que las empresas crean valor para
sus compradores por medio de la realización de estas actividades.

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La ventaja competitiva a la que Porter hace referencia, puede verse reflejada en tres
aspectos fundamentales, el liderazgo en costos, la diferenciación y el enfoque. El
liderazgo en costos se centra en los bajos costos y bajos precios para atraer más clientes,
los artesanos pueden liderar este aspecto ya que tiene el poder de fijar precios por sus
artesanías, al controlar los medios de producción. La diferenciación, se basa en el
desarrollo de técnicas tradicionales, utilización de materias primas naturales y
expresiones culturales que dotan a cada objeto artesanal de un diseño único. Por último
el enfoque, que cubre las necesidades de un segmento particular o nicho de mercado,
aspecto importante a considerar ya que el desarrollo de productos dependerá de a quien
se quiera dirigir el objeto.

6. LA ARTESANÍA EN LA COMUNIDAD INDÍGENA KANKUAMA,


TRADICIÓN, COMERCIALIZACIÓN Y APROPIACIÓN

Como estudio de caso, para ver cómo se reinterpreta la artesanía de la mano de sus
creadores como parte de las industrias culturales, estudiaremos la producción artesanal
de la comunidad indígena Kankuama.

Kankuamo, kankuaka, kankui o kankuané es la manera como se conoce al pueblo


amerindio de la familia chibcha que habita en la región Caribe colombiano. Si bien su
lengua ha estado en peligros de extinción, esfuerzos se hacen para mantenerla viva entre
sus pobladores contemporáneos. El área geográfica de influencia de los kankuamos es
Atánquez, Chemesquemena y Guatapurí, en la vertiente oriental de la Sierra Nevada de
Santa Marta, entre los ríos Badillo y Guatapurí en el departamento del Cesar (Molina
Rodríguez, 2013)

Los kankuamos son uno de los cuatro pueblos que habitaban la Sierra Nevada, junto con
los Koguis, los Arahuacos y los Wiwas. Según su cosmología, cada una de las tribus
representa una pata de la mesa, que es la Sierra, y ellos son los guardianes del equilibrio
del mundo desde esta montaña que nace casi en el mar Caribe y se eleva hasta las cumbres
nevadas.

Esta comunidad estaba ubicada en la parte más baja y más accesible de la montaña y se
mezclaron con españoles y negros, perdiendo poco a poco características de su cultura
como lengua, religión y costumbres, sin embargo cabe aclarar que fue gracias a ellos que
las otras 3 comunidades pudieron mantener su identidad nativa al servir como barrera de

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la inmigración colona. A principios del siglo XX los antropólogos los consideraban un
pueblo mestizo.

Su población artesanal se ha cifrado en un 7%, de los cuales un 41.5% se dedican al oficio


la tejeduría, desempeñado principalmente por mujeres entre los 18 y 30 años (SINIC,
2015).

Los artesanos en su gran conjunto pertenecen a los estratos 1,2 y 3 4. La mayoría de ellos
son mujeres cabeza de familia quienes sostienen sus hogares con su trabajo. Todas ellas
se hallan asociadas a nivel local, por su pertenecía a una comunidad indígena, es decir
trabajan de forma mancomunada para un bienestar común.

Durante siglos, esta comunidad ha elaborado diferentes objetos para su uso cotidiano,
como los vestidos, mochilas, utensilios domésticos y chinchorros entre otros. No
obstante, con el tiempo se han visto obligadas a elaborar otros productos con los que
intercambiar por otros que no se producen en la zona o bien para su venta al tratarse de
objetos atractivos para el turismo5.

Desde que se tiene conocimiento, en las 12 comunidades de la etnia Kankuama, son las
mujeres quienes tejen el fique y la lana para la elaboración de productos artesanales, en
especial de mochilas y chinchorros. Esta práctica forma parte de la riqueza cultural de los
Kankuamos donde “el tejer para sus mujeres es una labor del pensamiento que se plasma
en puntadas y colores” (Aura Montero6, 2003)

Ingrid Moreno, una artesana Kankuama, entrevistada en el año 2008 afirma que, “Todo
el tiempo tejemos, desde que uno nace le van inculcando eso”

La importancia que tienen los tejidos tradicionales y entre ellos la mochila (como el
producto más representativo) se ve reflejado en toda su cultura; muestra de ello es el mito
de creación de la comunidad:

4
La estratificación socio-económica en Colombia se realiza principalmente para cobrar de manera
diferencial los servicios públicos, permitiendo asignar subsidios y cobrar contribuciones. El artículo 102 de
la ley 142 de 1994 dispone la siguiente clasificación: 1) bajo – bajo, 2) bajo, 3) medio – bajo, 4) medio, 5)
medio – alto, 6) alto.
5
Cabe señalar, que no existe ningún tipo de turismo en el resguardo kankuamo debido a las dificultades de
acceso y a los problemas de seguridad derivados de la presencia de grupos armados. No obstante, en la
ciudad de Valledupar, en especial gracias al festival folclórico de la leyenda vallenata, que tiene lugar una
vez al año, si se pueden adquirir artesanías de esta zona.
6
Entrevista personal, maestra artesana Kankuama.

16
“En un principio todo era tinieblas. El supremo creador “kankanuarúa”,
“Espíritu, memoria, pensamiento, vida, alma”, estaba con los ojos cerrados,
como dormido. Su mente también dormía. De pronto como al despertarse de
un sueño se alzaron sus párpados, se abrió su mente y se desbordó su
sabiduría. Sus ojos miraron, su cabeza se fue abriendo y se dio cuenta que
existía la diferencia entre la oscuridad y la claridad. En el principio solo
existían las piedras. La misma tierra tenía sus cimientos en una gran roca
candente. Pensó: Estos cerros con sus piedras son el mundo, es lo que mis
ojos miran.

Pero su sabiduría vio mucho más lejos. El mundo era una pirámide (la Sierra
Nevada de Santa Marta). La sierra estaba sola, despoblada. Kankanuarúa
también se sintió solo dijo: Me hace falta compañía, para que se acompañe
y habite la tierra.

Entonces miró y miró, y, a lo lejos encontró a la mata de Maíz. Tomó la


mazorca, quitó las hojas y los granos se desparramaron por toda la tierra.
El creador hizo al Kogui, al Arhuaco al Wiwa e hizo de una mata de güiro al
Kankuamo: lo hizo hombre; luego de una mata de guandú hizo a la mujer
para que acompañara al hombre. Después Docara (Dugao) les dio vestidos
y les enseñó a tejer mochilas; y algunos les dio poderes para hacer todas las
cosas que necesitaban. Los trajo a estas tierras y los puso a vivir en la orilla
de los ríos Guatapurí, Chiskuindya, Candela, Potón, Yergaka; les dio su
lengua y les dio orden de organizar a los hombres de la sierra…”
(Organización Indigena kankuama s.f.)

A principios del siglo pasado Atánquez, considerada la capital kankuama, contó con una
floreciente economía agrícola y artesanal. En ella se establecieron comerciantes que se
encargaron de la comercialización y distribución de sus productos artesanales hechos con
fique: mochilas, chinchorros y diversos tipos de lazos.

A causa de la ausencia de un sistema monetario, los comerciantes establecieron un


sistema de intercambio que en un principio favoreció la economía local, pero que muy
pronto se convirtió en un desventajoso sistema de trueque que en algunos casos sigue
vigente hoy en día. Sin duda alguna, este sistema es el principal responsable del continuo
deterioro del poder adquisitivo de las familias artesanas.

17
El valor de cambio de los objetos artesanales se estancó, y provocó el empobrecimiento
y deterioro de la calidad del producto. Mientras la elaboración de los elementos
artesanales fue desapareciendo, la mochila sobrevivió y se convirtió en una artesanía
tradicional popular, con un mercado nacional y extranjero7(Echavarría Uscher y Vergara
Gómez, 1999).

A todo ello hay que sumarle el deterioro de las tierras, la desaparición de fuentes de agua
y el crecimiento de la población. Como es de suponer, la consecuencia inmediata fue la
escasez de alimentos, que a su vez puso sobre la producción artesanal casi todo el peso
de la subsistencia familiar.

En 1986 un grupo de trabajo comunitario “corporación Murundúa” se dedicó a promover


la unión de las artesanas. Uno de sus objetivos fue mejorar la calidad de la mochila
mediante la recuperación de los tintes naturales y puntadas tradicionales, para lograr un
precio más justo que contribuyera a mejorar su nivel de vida (Echavarría Uscher y
Vergara Gómez, 1999)

Poco a poco la artesanía kankuama fue tomando un papel protagónico en la vida de la


comunidad. Por un lado constituía una importante fuente de ingresos y por otra, como
parte de la estrategia de reivindicación étnica.

Así, desde 1998, dentro del proceso de


fortalecimiento de la identidad cultural, la
Organización Indígena Kankuama (OIK)
impulsó el rescate de la artesanía con la
creación del centro artesanal Chimbuchique.
Dicho centro agrupó a unas 300 artesanas,
quienes diseñaban, elaboraban y
comercializaban productos en fibra de fique y
ILUSTRACIÓN 3. Artesanas kankuamas. Fotografía,
Navarro-Hoyos, Silvana 2008 lana.

Después de 8 años de trabajo, los jóvenes líderes Kankuamos formados por distintas
entidades gubernamentales y no gubernamentales, crearon un espacio de organización del

7
Por esta época, y promovido por estos comerciantes externos, el diseño de la mochila sufrió un gran
deterioro. Las técnicas artesanales tradicionales se vieron afectadas puesto que se tejía con un punto amplio,
solo se hacía diseño de rayas y se teñía con colorantes industriales, así se lograba un producto de bajo costo
y aumentar la producción. Ésta se asemejaba más a la producción seriada que a la artesanía.

18
sector de artesanías. De esta manera se comenzó a concientizar a las artesanas de la
importancia de la asociatividad para comercializar sus productos, mejorar el proceso de
la cadena productiva del fique y lograr proyectos de beneficio común. También se trabajó
en fortalecer la imagen corporativa, la sostenibilidad y garantizar la calidad y pertenencia
cultural de la producción artesanal. En consecuencia, se inició un proceso de socialización
y concientización de las artesanas de las diferentes comunidades del resguardo,
motivándolas a formar parte de la asociación.

Dicho proceso se vio fortalecido cuando el Cabildo Mayor (ente directivo y


representativo) avaló la formación de la Asociación de Artesanas – os. Indígenas
kankuamas – os “ASOARKA”, el 30 de julio de 2006. Esta asociación agremio a 200
artesanas de las diferentes comunidades del resguardo indígena Kankuamo.

ASOARKA, se constituyó para fortalecer los procesos de producción, transformación y


comercialización de los productos artesanales y de esta manera generar mayores ingresos
a las familias kankuamas.

La asociación se autofinancia con la comercialización propia de productos artesanales y


además solicita financiación de entidades externas a través de proyectos.

En 2013 la comunidad inicio un proceso para la certificación del


sello de calidad “Hecho a mano” otorgado, en su fase inicial a 22
artesanas del resguardo. Con la ayuda de Artesanías de Colombia
S.A. han registrado la marca colectiva mixta Kankui – Mochilas
para identificar productos comprendidos en la clase 18 de la
clasificación internacional de Niza, especialmente: “mochilas

ILUSTRACIÓN 4.
tejidas en fique”. Esta marca fue registrada el 31 de marzo de 2009
Logotipo marca registrada
kankui mochilas.
por la Superintendencia de Industria y Comercio a favor de la
asociación de artesanas Indígenas Kankuamas – Asoarka.

En cuanto a su caracterización, la comunidad artesanal está compuesta en su totalidad por


mujeres, aunque también existen algunos artesanos hombres, éstos prefieren dedicar su
tiempo al trabajo en cultivos. La mujer también destaca como cabeza de familia,
encargada de las labores de la casa, cuidado de los hijos y soporte económico del hogar.

19
Según los datos obtenidos de las encuestas realizadas a más de 200 artesanas de la
comunidad8, el 38% de las mismas cuenta con más de 10 años de experiencia en el
desarrollo de la técnica. Tal y como se ha señalado las mujeres aprenden a tejer desde la
niñez. El trabajo artesanal es constante, por lo general las mujeres tejen unos 6 días a la
semana puesto que el domingo suelen descansar. En cuanto a los tiempos de trabajo, este
es de entre 2 y 4 horas al día (Navarro-Hoyos, 2002).

Más de la mitad de las artesanas comercializan sus productos en Valledupar, en diferentes


almacenes locales, incluido uno propio de la comunidad. La mayor parte de la producción
se vende en eventos como el festival Vallenato y Expoartesanías, que se desarrollan una
vez al año, en los meses de abril y diciembre respectivamente. Aunque el producto más
desarrollado por la comunidad es la mochila, las artesanas han diversificado su
producción con la elaboración de objetos para el hogar y han mantenido las técnicas de
elaboración de tejeduría y tinturado natural.

A continuación se pueden observar algunos de los productos desarrollados por esta


comunidad (Navarro-Hoyos, 2003).

TABLA 4. Productos artesanales, comunidad indígena kankuama.

8
En el marco del proyecto de fortalecimiento del sector artesanal de la comunidad Kankuama, financiado
por la gobernación del Cesar y PNUD (Navarro Hoyos, 2002)

20
La mochila es la artesanía representativa del pueblo kankuamo. La mochila nació con la
cultura, representa la feminidad, y es el deber de la mujer tejerla, culturalmente e
históricamente.
La base de la mochila es comparada con
los cuatro puntos cardinales de la tierra y
es obligación de las mujeres desde los 8
años empezar a tejer la mochila, para que
brote toda la imaginación constructora de
la cultura. La primera mochila de la niña
es considerada sagrada, ahí están
imantadas las energías positivas, sueños,
ILUSTRACIÓN 5. Base de una mochila tradicional, en su inicio se
puede ver como el círculo es la base de su tejido. Silvana
anhelos de la vida y por esta razón se lleva
Navarro-Hoyos 2003.
donde el “mamo9” para ser bendecida y
guardada en el templo.

La mochila representa la madre cósmica (fertilidad) elemento simbólico de la feminidad,


y son elaboradas por la mujer, para sus esposos, hermanos y amigos especiales.

Los tejidos son elementos fundamentales para su cultura, porque una cultura sin tejidos y
sin diseños no es constructora, está muerta culturalmente, el tejido los lleva hacia la
tolerancia y es considerado responsabilidad de la mujer dejar brotar su imaginación y todo
el sentimiento positivo, la belleza y la armonía de una cultura que conduzca hacia la paz.

Actualmente su producción, se ha utilizado como sustento económico mediante la


comercialización sirviendo de ingreso para las mujeres cabeza de familia, de forma tal,
que puedan suplir las necesidades básicas para sus hogares.

9
El mamo o mamu es la máxima expresión de sabiduría de la cultura. El mamo está destinado desde el
momento de su gestación por fuerzas superiores del universo y desde que nace aprende los secretos de la
naturaleza y se relaciona con todo el conocimiento que desde origen le asigna Kaku Serankua (dios) y
Seynekun (la madre tierra). Desempeña un papel importante en el campo espiritual y es la cabeza visible
de la política. Están destinados a predicar y hacer cumplir la armonía y el equilibrio del universo. Palabras
del Mamo Kaso Kaku Busintana de la cultura Iku o Vintukua, conocidos como Arahuacos.

21
7. LA HISTORIA DE UNA INTERVENCIÓN, ARTESANÍA, COMERCIO E
INDUSTRIA CULTURAL
Gracias a un programa de fortalecimiento artesanal, diseñado especialmente para esta
comunidad por el gobierno nacional y ONG internacionales, tuve la oportunidad de
conocer de manera personal y entrañable a los kankuamos.

Se trataba de una comunidad que había sufrido por la colonización y más recientemente
por el conflicto armado colombiano y que pese a todas las dificultades seguía
manteniéndose unida y buscando la mejora de sus condiciones y respeto de su cultura.

A mi llegada, encontré una comunidad en búsqueda de sus elementos culturales, y que


veían en la artesanía una forma de re-encontrarse con su identidad. En esa primera fase,
toda la intervención se centró en rescate de elementos tradicionales, estudio de diseños,
significación y tinturado con plantas naturales.

Se trataba de dignificar un producto tradicional, inscrito dentro de la cultura material de


una comunidad.

Con la finalización de esta etapa, se presentó la oportunidad de presentar los productos


en una feria internacional de artesanía. La comunidad acogió con gran entusiasmo su
participación, ya que veían en ello la oportunidad de reconocimiento y la apertura de
canales de comercialización que repercutirían en beneficio económico para la comunidad.

El producto escogido para participar, como no podía ser otro, fue la mochila. Los
resultados no pudieron ser mejores. Se creó una gran expectativa en el mercado gracias a
los elementos de identidad, calidad y precio competitivo característicos de este elemento.

En esta feria se realizaron algunos contactos comerciales. Entre ellos el de una gran
multinacional especializada en muebles y decoración. Esta empresa mostro gran interés,
en la compra de productos en grandes cantidades, pero pidiendo realizar cambios en el
producto para que estos fueran utilizados en un espacio de hogar y así ser de acuerdo a
palabras de uno de sus directores de compra “adecuados al mercado”.

Gracias a esta propuesta me encomendaron la tarea de regresar a la comunidad para


“Desarrollar un nueva colección de productos” que estuvieran de acuerdo a los
requerimientos del posible comprador. Esto por supuesto requería realizar intervenciones
en el producto tradicional, diversificándolo.

22
Al llegar a la comunidad y plantearles la situación hubo una gran polémica, ya que el
realizar alguna modificación en su producción, iría en contra del proceso de rescate
cultural en el cual se encontraban. Fue así que se reunieron los líderes de la comunidad
para tomar alguna decisión, decidiendo realizar algunas muestras para evaluar la
respuesta del potencial cliente.

La comunidad trabajo con gran creatividad y experticia de técnica, dando como resultado
una serie de nuevos productos, que cumplían los requerimientos específicos establecidos.
En la tabla adjunta se pueden ver algunos ejemplos de los desarrollos.

TABLA 5. Paralelo entre productos tradicionales y nuevos desarrollos de acuerdo a requerimientos


del mercado, comunidad indígena kankuama

Mochila tradicional Producto de la nueva Producto de la nueva Producto de la nueva


de la comunidad colección. Panera colección. Panera colección. Panera
indígena Kankuama cuadrada con ovalada con bordes cuadrada con
rebordes. irregulares. aperturas laterales.

Aunque los productos conservaban elementos característicos de su producción artesanal,


como materiales, técnica, tejido y diseños gráficos, se alejaban completamente de algo
primordial en su materialidad, la simbología e importancia del círculo como inicio del
tejido.

Las nuevas propuestas de producto fueron bien acogidas en el mercado, dando como
resultado un negocio, que representaba trabajo para la comunidad por más de un año, y
el beneficio económico que esta estabilidad laboral traería a la comunidad.

Al interior de la comunidad surgió una gran controversia, en si aceptar o no esta


alternativa, por la pérdida de identidad que significaba para ellos, pero al final llevados
por la necesidad economía decidieron aceptar, pensando que solo lo realizarían en esta
oportunidad.

23
Esta circunstancia comercial trajo grandes beneficios para la comunidad, pudiendo
organizar formalmente una cooperativa de artesanas, mejorando procesos internos de la
cadena productiva desde el cultivo de la materia prima hasta el producto terminado,
organizando un almacén para la comercialización propia de productos en la ciudad de
Valledupar (Ciudad más cercana al resguardo), dándole a las mujeres una libertad
económica de la cual no habían gozado, y en forma generalizada, mejorando las
condiciones de vida de la comunidad.

Con el tiempo, algunas de las nuevas propuestas de producto fueron introducidas a la


producción, ampliando el portafolio de “productos tradicionales”.

Vemos en este caso un ejemplo de la continua evolución del producto artesanal. Los
creadores kankuamos, reinventaron y reinterpretaron su producción artesanal con el fin
de alcanzar nuevos mercados, y ello los ha llevado a introducir su producción dentro de
las industrias culturales.

A largo plazo no podemos tener una certeza de que la introducción de elementos nuevos
en una cultura material, remplace por completo a los tradicionales, solo que estos son
reflejos de la realidad de los pueblos, de sus vivencias y del mundo en el cual se
desarrollan.

Conservacionismo de la producción artesanal o introducción de lleno en las dinámicas de


mercado, son materias que hay que tomar con cautela y que sin duda seguirán siendo un
tema de debate.

Como vemos la artesanía está dotada de todas las cualidades necesarias para considerarse
una industria pujante. El concepto de industria cultural nos lleva a pensar en la artesanía
como un bien de consumo masivo, lo que no está mal desde el punto de vista económico
por el beneficio que puede tener su fomento al interior de las sociedades productoras. Sin
embargo hay que prestar atención a no olvidar el componente cultural de la artesanía.

Hay que apoyar la difusión y el acceso de las artesanías al mundo, pero no por su modelo
económico sino por su carácter identitario. Propongo una política alternativa en el que
vender o ampliar el público consumidor no sea su único objetivo, ni siquiera un
consumidor consiente del valor del producto artesanal. La industria artesana debe hacer
posible la experiencia de apropiación y de invención, debe ser capaz de producir un
movimiento de recreación permanente de su identidad.

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En el análisis hecho a lo largo de este artículo, se ha visto como las industrias culturales
han tomado un papel muy importante en la preservación de la cultura e identidad nacional,
además de que el impulso de las mismas es un factor a considerar como parte del
crecimiento económico de los países.

Retomando el título de este artículo “la artesanía como industria cultural: desafíos y
oportunidades”, podemos ver en la artesanía una actividad que da empleo a muchas
comunidades, además puede verse como una alterativa para el desarrollo comunitario.

El sector artesanal colombiano conjuga grandes problemas socioeconómicos, pero a la


vez tiene un gran potencial de comercialización y exportación. Son necesarias políticas
para mejorar las condiciones y mucha capacitación para la generación de estrategias
empresariales para la demanda interna y el mercado externo.

En la actualidad, la industria cultural es un sector incipiente en Colombia. El desarrollo


limitado de las industrias culturales en el país, no significa de modo alguno, dar la espalda
a una actividad productiva, más bien debe ser un espacio para actuar oportunamente
planeando su desarrollo y crecimiento.

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