Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
Nombre
Unidad #. Nombre
Sesión #. Nombre
Guía de actividades
Módulo 2
Estado, Constitución y gobierno
Unidad 1
Relación entre la Constitución el Estado
y el gobierno
Sesión 1
Antecedentes, conceptos y relación de
Constitución-Estado-gobierno
Texto de apoyo
Índice
Presentación.......................................................................................................................................... 3
Antecedentes y acepciones de Constitución, Estado y gobierno ........................................................... 4
Presentación
En esta primera sesión analizarás qué es el Estado, sus tipos, elementos y relación con el gobierno y
la Constitución, conociendo en paralelo a ello, los tipos de Estado y gobierno existentes en México a
partir de lo siguiente:
Idea de democracia.
Estado de Derecho.
Derechos Humanos o derechos fundamentales.
Es de señalarse que el tipo de Estado más común es el Constitucional, pues se organiza partiendo de
una Constitución, entendida generalmente como un documento solemne, dotado de principios de
supremacía y rigidez; es decir, una norma que se ubica como parámetro para revisar la validez de
todas las normas posteriores a ella y que para ser reformada, requiere de un procedimiento dificultado
que “impide” que sea el legislador ordinario (el que habitualmente hace las leyes) quien la reforme.
Con ello se exige en algunos casos, que en cambio la disolución del órgano legislativo o su aprobación
sea por parte del pueblo, a través de referéndum constitucional como se aplica en España, Alemania e
Italia o bien, como sucede en el caso de México, mediante la exigencia de mayorías calificadas del
legislador ordinario, más la participación de las legislaturas locales (artículo 135 de la CPEUM).
Es necesario tener claro que la concepción que se tenga sobre el ser humano, alterará por mucho la
justificación que se tenga del Estado. De este modo, hay quienes parten de la concepción del hombre
como un ser egoísta, competitivo, envidioso, mezquino, tal como lo concebía Hobbes, Locke o
Maquiavelo, en contrapartida con Aristóteles, quien lo consideraba como un ser sociable y gregario por
naturaleza, ante lo cual todo aquél que viviera fuera de la organización social se consideraba mal visto,
ya que se le podía tener por un ser, o bien degradado, o superior a la especie humana. Por tal razón,
existe una vinculación estrecha entre el ser humano y su comunidad y, por ello, no se puede concebir
el aislamiento del individuo, pues dada su necesidad de los otros, es como surgen las primeras
organizaciones sociales. Como a toda tesis corresponde una antítesis y una posterior síntesis, según
la dialéctica, respecto a lo expuesto la síntesis la encontramos en la aportación de Jeremy Bentham,
quien consideraba que la conducta de todo ser humano se ejecuta produciendo placer o evitando el
dolor. De acuerdo a lo anterior, se puede decir que cualquiera que sea la concepción de hombre, éste
se agrupa por interés individual, redundando en un interés colectivo, tales como la obtención de
alimento y la defensa contra los elementos naturales, los animales salvajes o el ataque de sus
semejantes.
Como primera organización natural se tiene a la familia, para luego desarrollarse la horda y la tribu,
surgiendo de esa necesidad gregaria la imposición de reglas de conducta. Aunado a lo anterior, con el
correr de los siglos, todo parece demostrar que existió la necesidad de expandir el territorio,
aumentando su potencia ofensiva y defensiva. Hasta eso momento, los vínculos de parentesco se
fueron sustituyendo paulatinamente por el de subordinación a una autoridad, que toma a cargo la
disciplina y organización de la vida social de los integrantes de un mismo territorio, aun sin que
existiesen vínculos familiares o de cualquier otro parentesco.
La subordinación a un jefe común podría entenderse de una manera simple, como el origen del
Estado, que posteriormente se iría desarrollando en torno a elementos fundamentales como la
población, el territorio y el gobierno. Todo esto, dentro de un marco de normas jurídicas que establece
la organización de dicho Estado, así como los derechos y los deberes de cada persona frente a él.
Sin embargo, para dar paso a su consolidación, era necesaria su dirección y control con una adecuada
administración, por lo que fue necesaria la creación de una autoridad que la dirigiera. De acuerdo a la
anterior, se presenta a continuación los orígenes del Estado, lo cual es desarrollado con claridad por
Porrúa (1999) de la siguiente manera:
Asia oriental
En Asia Oriental se dan los antecedentes más relevantes que dan origen al Estado, fue en el siglo VIII a.C.
con sus dinastías imperiales, las que consideraban les asistía el derecho divino ya que el emperador era
considerado como un representante del cielo.
Egipto
En el antiguo Egipto, se encuentran los orígenes de lo que es el Estado, porque dan muestra de una
organización social y política, pues existía una relación entre el soberano de la comunidad política y la
divinidad.
Grecia
Cómo olvidar a Roma, donde tuvo una diversidad de gobiernos, al principio tuvo una monarquía,
posteriormente una república, pero a finales del siglo II a.C.se estableció el imperio hasta el año 476 d.C.
Edad Media
El feudalismo, la iglesia y la figura del emperador (rey) prevalecieron en la Edad Media, identificándose las
personas con la región en la que vivían o por la institución de la iglesia, en este caso se consideraban
cristianos. Debido a las necesidades de la sociedad de la época se presentaron conflictos entre los
llamados señores feudales y se empezó a considerar la existencia de una sola autoridad.
Estado moderno
En el Estado moderno, el Estado (poder temporal) está por encima de la iglesia (poder espiritual)
surgiendo el absolutismo, se nivelan las diferencias entre las clases y los ciudadanos, y logran tener
igualdad jurídica. Existe una comunidad nacional organizada de acuerdo a funciones que les
corresponden, también un orden jurídico para regular las relaciones entre el Estado y las personas, a
quienes se les reconoce libertad individual, con cierto sometimiento al poder del Estado.
Como conclusión, se puede decir que el Estado se originó de las organizaciones primitivas en cuyo
núcleo se encontraba la familia, liderada por un jefe. A esto lo podríamos llamar gobierno patriarcal.
De este modo, una comunidad subsistió por numerosas familias, las cuales por el momento no
necesitaban de instituciones o constituciones que regularan los derechos y obligaciones, pues esa
función la cubría el líder. Es evidente que la familia se vuelve la base de un Estado, pues al unirse
diversos jefes de familias, se formarían las primeras organizaciones monárquicas ante la necesidad de
tener una cabeza de grupo que representara a la comunidad, protegiera, guiara y regulara.
Posteriormente la religión toma parte esencial de la sociedad, presentándose el denominado Derecho
Divino, que justificaba la posición jerárquica de quien gobernaba.
El poder se fue dividiendo de tal suerte que los señores feudales afirmaban su posición dentro de la
comunidad, adueñándose de los terrenos que pertenecían a la comunidad, formando patrimonios
personales y heredándolos exclusivamente entre sus familiares. Esto da origen a una comunidad
desigual, haciendo perder el pretendido bien común, generando la desigualdad en la propiedad
privada. De esta forma, se fueron creando familias con mayor poder de capital y se termina así la
etapa medieval con cambios entre los órdenes de poder, abriendo paso al Estado moderno, el cual se
fundamenta en tres aspectos fundamentales:
El dominio de un territorio.
La división de la sociedad en clases sociales, ante la diferencia de poder económico.
El surgimiento de instituciones que brinden servicios internos y externos a la sociedad, buscando
legitimación entre los ciudadanos, siempre y cuando sus actos estén bajo el amparo de
instituciones jurídicas y sociales, creadas originalmente en beneficio de las personas.
Cabe destacar que existen diversas teorías que explican el origen de la sociedad,
de la cual en el desarrollo que se ha expuesto hasta este momento se ha basado
en la teoría naturalista aristotélica, en la que se afirma que el hombre es un animal
político (zoon politikón), que indica la necesidad del individuo en realizarse
plenamente en sociedad.
Otra postura que la explica es la teoría contractualista que afirman que las
sociedades se formaron en razón de un contrato voluntario celebrado por todos los
miembros integrantes, pasando así del estado de naturaleza al estado de
sociedad, destacándose entre sus principales autores Rousseau, Hobbes, Locke y
Montesquieu.
Concepto de Estado
Habiendo analizado el origen del Estado, es momento de conocer su definición, de acuerdo a los
autores que han tratado el término.
Bobbio: Precisa el concepto de Estado de la siguiente manera: “Un ordenamiento jurídico que
tiene como finalidad general ejercer el poder soberano sobre un determinado territorio y al que
están subordinados de forma necesaria los individuos que le pertenecen” (Bobbio, 1987:34). Por
otra parte, subraya desde un punto de vista formal e instrumental lo siguiente:
…la condición necesaria y suficiente para que exista un Estado es que se forme sobre un territorio un
poder capaz de tomar decisiones y de emanar las leyes oportunas, vinculantes para todos aquellos que
habitan en este territorio y efectivamente ejecutadas por la gran mayoría de los destinatarios cuya
obediencia se solicita (Bobbio, 1987:56).
Hegel: Ávalos, señala que para Hegel el Estado es una institución que garantiza el interés privado
y la libertad individual, siendo la suprema forma de organización social en la que un pueblo se
encuentra consigo mismo y está sometido a una misma autoridad legal y política. Una idea
bastante idealista al considerar que el ser humano sólo puede conseguir su plenitud en el Estado,
al cual considera como la realización de una idea moral.
Kant: Desde otra perspectiva idealista, Kant señala lo siguiente:
El acto por el que el pueblo mismo se constituye como Estado […] es el contrato originario, según el cual
todos (omnes et singuli) en el pueblo renuncian a su libertad exterior, para recobrarla enseguida como
miembros de una comunidad, es decir, como miembros del pueblo considerado como Estado (universi); y
no puede decirse que el Estado, el hombre en el Estado, haya sacrificado a un fin una parte de su libertad
exterior innata, sino que ha abandonado por completo la libertad salvaje y sin ley, para encontrar de nuevo
su libertad en general, íntegra en la dependencia legal, es decir, en un estado jurídico; porque esta
dependencia brota de su propia voluntad legisladora (Kant, 1999:145-146).
Con base en lo anterior, se puede apreciar la concepción del Estado como el pueblo, que en el
proceso legislativo hace tutelar los derechos y libertades individuales. Considera además al Estado
como un organismo natural, cuya esencia era incomprensible para el conocimiento y que se constituye
por las mutuas relaciones de los individuos persiguiendo el mismo fin al vivir en comunidad, cuya
convivencia es ordenada bajo una forma jurídicamente establecida.
Lenin: A partir de su pensamiento se logra apreciar su visión de Estado como la gran estructura de
la política dominante, ejercida desde una clase privilegiada, (la burguesía capitalista).
Notarás que todo Estado, incluso desde la polis griega pese a no ser considerado un Estado moderno,
así como la tribu, el clan o la horda, mantienen como elementos constantes la existencia de un pueblo,
entendiéndosele a éste como el conglomerado humano asentado en un territorio, que ejerce relaciones
de convivencia respaldadas por un poder político capaz de imponerse, sin recibir ninguna orden del
exterior.
Por otra parte, es de señalarse que los Estados modernos además de los elementos señalados, se
estructuran en una Constitución, la cual por ejemplo establece normas sobre la nacionalidad y la
ciudadanía, el trato a extranjeros y formas migratorias, los límites geográficos, aéreos, de subsuelo,
mar, islas, cayos y arrecifes, entre otras. Es por ello que si una entidad federativa que pertenece a un
Estado, se encuentra sujeta a las normas del pacto federal, no podemos llamarla Estado y por ende,
tampoco podemos decir que tenga Constitución, pues ésta es sólo la que organiza a los elementos del
Estado y si entre esos elementos el poder que organiza tiene el adjetivo de ser soberano, en las
entidades federativas no existe la soberanía, sino una autonomía pues tienen éstas un catálogo de
facultades que pueden ejercer dentro de los límites establecidas en la propia Constitución.
El cuerpo normativo de mayor jerarquía a nivel local recibe el nombre de estatuto de autonomía, más
no el de Constitución como erróneamente les llamamos.
Con base en lo anterior, se puede concluir que el Estado es una forma de organización social
soberana y restrictiva, formada por un conjunto de instituciones, que tiene el poder de regular la vida
nacional en un territorio determinado.
Concepto de Constitución
Con base en la teoría pura del Derecho de Hans Kelsen, la Constitución es entendida en una
dimensión tanto formal como material. Desde su concepción formal se hace referencia al documento
solemne, que contiene el “conjunto de normas jurídicas que sólo pueden ser modificadas mediante la
observancia de prescripciones especiales, cuyo objeto es dificultar la modificación de tales normas”
(1995:147). Mientras que en su sentido material se constituye por los “preceptos que regulan la
creación de normas jurídicas generales y especialmente, la creación de leyes” (1995:147). Por otra
parte, Tamayo critica que la doctrina constitucional ha reducido el campo de aplicación de la expresión
Derecho, limitando el fenómeno constitucional a cierto tipo (ideal) de Constitución. La crítica es
acertada porque una Constitución puede no ser escrita, sino consuetudinaria y puede no ser un solo
documento, sino varios, como las 7 leyes de México en 1936. Incluso si esa Constitución es de un
Estado no democrático, al carecer de Derechos Humanos o fundamentales, no por ello dejaría de ser
Constitución.
Por eso una Constitución es antes que todo una función, pues su labor es dar estabilidad a las
decisiones que toman los soberanos acerca de la forma de ser del Estado. Eso por cuanto hace al
continente del pacto, pero en su esencia, la Constitución es más que una hoja de papel, pues es la
suma de los factores reales de poder. Guardando las proporciones, es como sucede en los contratos,
en donde por ejemplo los de compraventa se constituyen por un acuerdo de voluntades independiente
de que conste o no por escrito; solo que la Constitución es el pacto político de los agentes soberanos
en un mismo territorio, dentro del cual se ejerce su poder.
En su concepción jurídica, la Constitución es la norma que crea a los órganos de gobierno que deben
encargarse de conseguir los objetivos planteados por el tipo de Estado, definiéndose por esta primera
norma sus competencias y cómo deben ejercerlas desde sus límites formales y materiales (requisitos
de existencia y de validez), ordenando también la creación del resto del entramado y determinando el
contenido de las normas secundarias, incluso en su materia o contenido. También para ello sirven los
Derechos Humanos que cumplen con la función de prohibir la existencia de normas discriminatorias o
retroactivas.
Para conocer más sobre quién elabora la Constitución, en términos del orden
jurídico, se recomienda la consulta de la siguiente fuente:
Concepto de gobierno
Un cuerpo intermediario establecido entre los súbditos y el soberano para su correspondencia mutua,
encargado de la ejecución de las leyes y del mantenimiento de la libertad tanto civil como política, el
ejercicio legítimo del poder ejecutivo, príncipe o magistrado o cuerpo encargado de la administración y
debe de tener suficiente fuerza para contener al pueblo, pero a la vez una fuerza regulada por el
soberano con el propósito de que las autoridades no realicen acciones autoritarias (Rousseau, 2010:78-
79).
De este modo tenemos que en Asía Oriental (siglo VIII a.C.) empezó a tener una forma de gobierno
monárquica con lo que se conoce como dinastías imperiales, mientras que el medio oriente también
contaba con una autoridad monárquica. Mención aparte tiene Roma, que en sus primeros tiempos tuvo
como forma de gobierno una monarquía electiva.
En los primeros Estados se caracterizaron por ejercer el poder absoluto y teocrático, en el que a los
monarcas el poder les venía por derecho divino, obviamente sustentado por las creencias religiosas de
los súbditos (Porrúa, 1999:47-68).
El fin y la autoridad del Estado es lo que da vida a una organización política, entendiendo que su fin es
el interés de la población en general y en consecuencia buscan su bien común de acuerdo a lo
establecido en la Constitución, llevando a cabo por uno de los poderes primordiales el gobierno del
Estado, a través de lo que conocemos como autoridad.
Pero en la realidad el término de gobierno, ¿se refiere a una figura de autoridad o de poder?, o
¿realmente busca nuestro bien común como sociedad? ¿qué es la autoridad? ¿qué es el poder?
¿acaso son lo mismo? El poder tiene varias definiciones, según Weber “es el dominio sobre otros,
unos mandan y otros obedecen” (2002:43). También por otra parte, se puede decir que el poder
aparece como algo necesario para que exista el Estado, por la dificultad que representa llevar a cabo
una organización política sin la existencia de una autoridad que dirija el comportamiento de quien
integre esa organización. En este contexto se entiende el poder como la autoridad en la que se
encuentran sometidos los ciudadanos. El poder político, es un poder que gobierna porque así lo
aceptamos, es una dominación aceptada, que no es otra cosa que legitimar el poder. La autoridad se
relaciona con el poder, el alcance de aquélla es más restringido, ya que es como una fuerza para
alcanzar los resultados que el gobierno desea, la autoridad es la representante del poder.
Conforme a lo estudiado, es evidente la relación estrecha entre Estado, gobierno y Constitución. El tipo
de Estado define los objetivos del pueblo. Si es un Estado autocrático o democrático, en ambos casos
deben crearse estructuras de gobierno apropiadas para alcanzar su teleología. Para el primer caso, la
centralización y para el segundo la república, definiendo también las instituciones de gobierno acorde
al tipo de Estado.
El gobierno es cambiante y pasajero, es la parte encargada de llevar a cabo las funciones del Estado a
través de un conjunto de personas que lo ejecutan durante un periodo determinado, las cuales son
elegidas por los ciudadanos a través de elecciones. El gobierno, además, es uno de los tres poderes
del Estado, los otros son el poder legislativo, encargado de aprobar las leyes y el poder judicial,
encargado de aplicarlas.
Todo lo anterior es respaldado por una Constitución, también llamada Carta Magna
o Ley Suprema, la cual no es otra cosa que la forma de ser del Estado. Ciertamente
en la Constitución, se establecen tanto el tipo de Estado, sus poderes y los órganos
de gobierno.
Se tiene como tipologías habituales para analizar el Estado y el gobierno a las siguientes:
Democracia: Se distingue por la participación activa del pueblo para elegir a sus gobernantes en
las elecciones, pero también durante el desarrollo de sus facultades, a través de las instituciones
de la democracia directa como son el referéndum, el plebiscito, la revocación del mandato, la
iniciativa popular y en algunos lugares, el cabildo abierto. No obstante, la democracia no se reduce
a la toma de decisiones colectivas por la regla de la mitad más uno, ya que implica la distribución
del poder en oposición a la concentración y el control tanto ciudadano como legal.
Autocracia: El gobernante ejerce el poder sin limitación jurídica y por medio de un pequeño grupo
de personas, con la pretensión de concentrarlo. Suelen ser Estados totalitarios como los Estados
islámicos, donde gobierno y religión se fusionan.
Monarquía: Encabezada por un monarca, destaca por la sucesión hereditaria. Sin embargo, a
pesar de lo extraño que pueda resultar la existencia de un Rey y la sucesión del trono por
consanguinidad, no es la nota característica de la monarquía, ya que el Monarca es el Jefe de
Estado, pero no de gobierno. La monarquía divide el poder en vez de concentrarlo como sucede
con el presidencialismo.
Sobre este tópico deberá consultarse El espíritu de las leyes” de Montesquieu, donde
claramente expresa la división de poderes, la intención de concentrar el poder
ejecutivo en una sola persona y dividir el legislativo en dos Cámaras antagónicas, la
de los nobles y los comunes.
- Monarquía absoluta: No existen límites al poder del monarca, no existiendo tampoco los
Derechos Humanos, pues más bien se hacía referencia a derechos como la vida y la libertad,
privativos de los humanos.
- Monarquía Parlamentaria: En éste el Parlamento es un órgano que hace frente al monarca
limitando su poder. Surge la premisa de que el rey reina, pero no gobierna. Se crea la cámara
República: Es una forma de gobierno en la que el poder se divide para su ejercicio, en la que su
configuración como en su ejercicio participa todo el mundo. Por ello es res pública, es decir, la
cosa pública, lo que es de interés común.
Aunque el autor más conocido sobre este tema es Montesquieu, se sugiere consultar
la obra original para advertir que en realidad proponía la concentración del poder y
que el verdadero autor de la división de funciones y no poderes fue John Locke, quien
claramente advirtió que en un Estado solo se hacen leyes y se aplican las leyes, de
modo que sólo conciben dos funciones ejercidas por tres tipos de órganos, donde el
legislador hace las leyes y el ejecutivo y judicial las aplican, con la diferencia de que el
último lo hace dirimiendo litigios.
Cierre
Cierre
Fuente: Flaticon
¡Felicidades! Has concluido esta sesión identificando el concepto y las características de Estado y
Gobierno, distinguiendo sus diferencias y similitudes. También has analizado la relación que nuestra
Carta Magna tiene tanto con el Estado como con el Gobierno a partir de las características de estos
tres elementos.
Fuentes de consulta
Fuentes de consulta
Fuente: Flaticon
Educatina. (2013). Origen y evolución histórica del Estado I. [Video]. Recuperado de:
https://www.youtube.com/watch?v=hs5MhOVXXjM
Educatina. (2013). Origen y evolución histórica del Estado II. [Video]. Recuperado de:
https://www.youtube.com/watch?v=i7IZEHC1DQ4
Educatina. (2013). Origen y evolución histórica del Estado III. [Video]. Recuperado de
https://www.youtube.com/watch?v=Cvpp9RxSMzM
Kant, I. (1999). La Metafísica de las Costumbres. Madrid: Tecnos.
Lenin. (1957). OEuvres. T. XXV. Paris: en Lenguas Extranjeras.
Ozollo, J. (2005). Marx y el Estado.Determinaciones sociales del pensamiento de Karl Marx.
Buenos Aires: Libronauta. Recuperado de: http://bdigital.uncu.edu.ar/objetos_digitales/2687/marx-
y-el-estado-final-1.pdf
Porrúa, F. (1999). Teoría del Estado (35ª ed.). México: Porrúa.
Rousseau, J. (2010). Contrato social. España: Tecnos.
Kelsen, Hans. (1995). Teoría general del Derecho y del Estado. México: UNAM. Recuperado de:
http://bit.ly/2eNkYmX
Burgoa O. I. (1977). Derecho constitucional mexicano. (11ª ed.). México: Porrúa. Recuperado
de: http://www.iapqroo.org.mx/website/biblioteca/DER.%20MEX%201.pdf
Carré de Malberg, R. (1998). Teoría general del Estado. (2ª edición). México: FCE.
Schmitt C. (2001). Teoría de la constitución. España: Alianza Universidad.
Tamayo y Salmorán R. (2002). Introducción al estudio de la Constitución. (2ª ed.). México:
Fontamara.
Legislación