Vous êtes sur la page 1sur 9

FACULTAD DE INGENIERÍAS Y ARQUITECTURA

ESCUELA PROFESIONAL DE INGENIERÍA CIVIL


“AÑO DEL DIALOGO Y LA RECONCILIACION NACIONAL”

FISICA
LA TORRE DE PISA Y LOS MUROS INCAS

 Presentado por el estudiante:

Castillo Miranda Paul Gudiel ,

Cusco – Perú

2018
TORRE DE PISA

La Torre de Pisa (o Torre Inclinada), situada en la Plaza de los Milagros es el


símbolo de la ciudad; al igual que el Duomo (la Catedral), el Baptisterio y
el Camposanto. Son también algunos de los monumentos más famosos del
mundo.
Aunque ha suscitado polémicas acerca del nombre de la torre, sabemos con
precisión que remonta al año 1173. Por muchos años, hasta excavaciones
recientes, el diseño había sido atribuido a los Vasari, a los de Bonanno Pisano,
pero probablemente se cree que la torre fue construída por 'Gherardo di
Gherardo'.
Durante la Edad Media, la gente que pertenecía a la clase aristocrática visitaba
y escalaba la Torre. Por esta razón, los materiales de las escaleras eran de
mármol en lugar de madera. Cuando el tercer aro o círculo fue construído, el
edificio comenzó a inclinarse debido a la estructura del peso en las bases. Esto
fue la razón principal por la cual interrumpieron la construcción y luego la
continuaron en 1275. Otra causa de la inclinación es la condición del suelo
debajo del Campanario. En el pasado, el área era una recuperación de tierras y
en la actualidad una parte de la construcción se apoya en un pantano, mientras
que la otra en un terreno más arenoso. Los otros tres pisos fueron construídos
con una inclinación opuesta con el fin de mantener el equilibrio de la torre.
Durante siglos pasados, los arquitectos trataron de enderezarla en vano, sin
ningún éxito.
Aunque en 1944 un terrible bombardeo amenazó la estabilidad de la torre,
afortunadamente resistió hasta el día de hoy.
Finalmente, desde el año 2001 la torre ha abierto sus puertas de nuevo al público
y se puede visitar (después de 11 años de trabajos durante los cuales se ha
logrado reducir la inclinación de la torre de 5,5 a 5). En el balcón hay 7 campanas.
Aquí, Galileo Galilei realizó los experimentos para estudiar las ecuaciones sobre
la caída de un objeto o cuerpo. Actualmente la torre está controlada através de
una moderna y sofisticada tecnología.
TAMAÑO DE LA TORRE DE PISA

El punto más alto de la torre inclinada es de 56,70 mt a partir del suelo y 55,86
mt en la parte inclinada. Pesa aproximadamente 16.000 toneladas, con 294
escalones en la escalera hacia el sur y 296 escalones en la escalera hacia el
norte. Sus paredes tienen un espesor de 14 mt en la parte inferior y 2,44 mt en
la parte superior.

COMO SE EMPESO A INCLINAR

Te propongo que pienses en algo.


Imagina que estás de pie sobre la arena de la playa con las piernas juntas y
enterradas sólo hasta los tobillos.
¿Qué crees que pasaría si de repente, el suelo comenzara a moverse?
Posiblemente te costaría mantener el equilibrio, te inclinarías en alguna dirección
e incluso podrías caerte. El movimiento y la poca sujeción de tus pies son la
causa. Si por el contrario, estuvieras enterrado hasta las rodillas, te mantendrías
derecho y el peligro de venirte abajo sería mínimo ¿verdad?
Bien, este es un sencillo ejemplo casero que se me ocurre para explicarte la
razón de que la torre se haya desplazado con respecto a su eje vertical.
La clave está en el suelo. El lugar donde se asienta la torre es muy poco estable.
El subsuelo es pantanoso y está formado sobre todo por arena y arcillas, por lo
que no es muy compacto y tiende a deformarse y a moverse.
Al problema del suelo se unió que la parte de la torre que está enterrada, es
decir, donde va anclada, que son los cimientos, tienen sólo 3 metros de
profundidad. ¡Muy poca fijación para una torre de 55 metros de altura y casi 15
mil toneladas de peso!
Ambos factores unidos dieron como resultado una construcción que cada año
iba alejándose de la perpendicular y acercándose al suelo peligrosamente.
Ante el riesgo de derrumbe, no hubo más remedio que parar su construcción y
dejarla a medias durante un largo tiempo.

PORQUE NO SE CAE

El centro de gravedad de cualquier objeto se encuentra en el mismo lugar que


su centro de masa. Éste, como bien indica su nombre, se encuentra en el centro
del objeto. Es decir, en el centro de la masa total. Este lugar no siempre es
simétrico con el objeto mismo, dado que éste puede tener forma irregular y
contener más masa de un lado que de otro. De este modo, la gravedad actúa de
manera que toda su masa se concentrará en ese centro de gravedad. Imagina
una recta perpendicular al piso que pase por el centro de masa del objeto. Esa
flecha indica la dirección de la gravedad.
Este centro es quien determina el equilibro o caída de un objeto. Para que un
objeto no se caiga, la recta perpendicular del centro de gravedad debe abarcar
el soporte del mismo. Si esa línea lo abarca, el objeto se mantendrá en equilibrio,
dado que la gravedad está sustentada. Pero si la recta no abarca el soporte, éste
se caerá. De este modo, la condición para que se un objeto se mantenga en
equilibro es que la recta perpendicular al suelo de su centro de gravedad abarque
el apoyo del mismo.
La manera más sencilla de encontrar el centro de gravedad de un objeto es usar
sus simetrías. Para ello, trazando las diagonales de la torre, de forma
aproximada vemos que el centro de gravedad cae más o menos donde indica el
punto rojo.
Pues mientras la vertical (en azul) de ese punto rojo se encuentre dentro de la
base de la torre (su "sombra" caiga dentro de la base), la torre no volcará. Su
centro de gravedad se encuentra encima del apoyo de la Torre, de modo que se
encuentra equilibrada. Es decir, la recta del centro de masa, perpendicular al
suelo, abarca su base.
MUROS INCA

SENCILLEZ

Las construcciones incas carecen de adornos o decoraciones complicadas. El tallado,


escultura, altos o bajos relieves no se utilizaron de manera excesiva o decorativa. Esta
austeridad se refleja también en la disposición de los ambientes dentro de los templos,
ambos o incluso dentro de la misma habitación del Inca gobernante.

A pesar de esta sencillez, las crónicas hispánicas hablan de un decorado especial en


el Coricancha en donde destacaban los relieves y esculturas en oro. Al parecer este
templo sería el único que ostentaba este tipo de decoraciones.

SOLIDEZ Y MATERIALIDAD

Emplearon la piedra en grandes bloques sin ninguna necesidad de utilizar argamasa.


Las piedras eran usadas de tal manera que encajaba una con otra. Un ejemplo de esta
arquitectura se encuentra en el templo de Sacsayhuaman.

SIMETRÍA

Las partes de sus construcciones eran iguales a partir de su eje. En planta, la simetría
es difícil de apreciar ya que los espacios están superpuestos, aunque suelen converger
en un ápice o en algunos casos, en una sala principal.

MONUMENTALIDAD

Por sus grandes proporciones. Las piedras, que eran muy grandes, ayudaban a que las
construcciones fueran también grandes, por lo que se puede encontrar varios sitios en
la ciudad del Cuzco con monumentos de piedra bastante grandes. Tenía una adaptación
a la topografía y los accidentes geográficos de la zona. Los incas, querían demostrar
que ellos podían hacer lo que ellos quisieran con la piedra, por lo que hicieron una de
sus más grandes obras: la piedra de 12 ángulos.
MATERIALES

Muchos de los materiales empleados en la construcción de la arquitectura inca no


pertenecían exclusivamente al Cuzco. Por las fuentes etnohistóricas, se creía que
muchas de las estructuras incas contenían materiales totalmente foráneos, entre ellos
la piedra o el adobe (ladrillo de barro cocido).

TRABAJO DE PRECISIÓN
El historiador Garcilaso de la Vega el Inca, nacido en Perú es hijo de un español
y una princesa inca, escribió en 1609 que los incas daban forma a los bloques
de construcción golpeándolos con unas piedras negras”, sin cortarlos.
Esta aseveración fue corroborada por el arquitecto estadounidense Jean-Pierre
Protzen, que comenzó a estudiar la mampostería inca en 1982. Mientras
trabajaba en una antigua cantera situada cerca de Cuzco, logró labrar ciertas
piedras abandonadas allí con unos rudimentarios martillos de piedra; algunas de
esas piedras eran de cuarcita y no provenían de la cantera sino de las riberas de
un río cercano.
Descubrió que los incas usaban tres tipos de martillos para labrar y ajustar las
piedras: primero las desbastaban con los grandes, que pesaban 8 o 9 Kg.; luego
alisaban las caras con los de tamaño mediano, de 2 a 5 Kg. de peso, y con los
pequeños, que pesaban 1 Kg. escuadraban los bordes.
Protzen tardó casi 90 minutos en labrar tres caras y cinco bordes
de un bloque de 25 x 25 x 30 cm.
El martillo mediano se usaba con ambas manos en un ángulo de 15 a 20 grados
para sacar lajas chicas; al girar los puños justo antes del impacto, el ángulo se
duplicaba y producía un mejor corte. Como el martillo rebotaba de 15 a 25 cm.
después de cada golpe, la labor no exigía mucho esfuerzo.
Como el martillo más liviano no podía rebotar, tenía que ser sostenido
firmemente y golpeado con fuerza para escuadrar cada borde del bloque antes
de alisar la cara adyacente con el martillo grande; de esta manera se evitaban
las resquebrajaduras.
El apretado ajuste de las juntas se lo graba mediante un paciente trabajo de
embone gradual. Casi todas las piedras tenían labrada una superficie convexa
en una cara, así que una vez que se tendía una hilera de bloques, a la cara
superior de cada piedra se le daba forma cóncava para que embonara con la
piedra de la hilera siguiente.
El bloque superior se colocaba en su lugar varias veces hasta que ajustaba a la
perfección. El polvo acumulado en la piedra inferior tal vez servía de guía de
corte: la marca dejada en él por la superficie de la piedra superior mostraba en
dónde se requería un corte más hondo. Los lados de cada bloque se labraban
de la misma manera, mediante comparación y corte aproximativos.

LO QUE LAS PIEDRAS NO REVELAN


No se sabe cómo los incas lograron trasladar los grandes bloques de piedra
hasta los sitios de construcción, a menudo situados a muchos Kilómetros de
distancia. En algunos bloques hay señales de haber sido arrastrados, pero se
habría necesitado un número muy grande de personas para subirlos de ese
modo por las estrechas rampas de acceso que aún se conservan en varios
lugares.

EMBONE PERFECTO
Aunque muy pocos de los bloques de piedra usados por los incas eran de forma
o tamaño uniforme, cada uno se ajustaba a la perfección a la piedra adyacente.
Los rebordes quizá servían para izar las piedras durante la obra; eran de dos
formas, una para atar cuerdas y la otra para apoyar una palanca.
Jean-Pierre Protzen calculó que se necesitarían 2.400 hombres para arrastrar el
bloque más grande de las ruinas de Ollantaitambo por una de dichas rampas de
acceso: el bloque pesa unas 138 toneladas.
En una fosa de la antigua cantera del Rumicolca situada al suroeste de Cuzco
hay algunas piedras labradas, pero no hay pruebas de que materiales de dicha
cantera fueran arrastrados hasta sitios de construcción. Si se usaron troncos y
trineos de madera, quedan pocas huellas de ellos. Tal vez se dejó que los
bloques se deslizaran por las laderas por su propio peso.

Vous aimerez peut-être aussi