La colocación de pequeños contenedores en las aulas de la Escuela Normal para Maestros
de Música. Se realizó por medio de la colaboración de la comunidad de diálogo y personas que confiaron en nosotros. La observación del sitio donde llevamos a cabo el proyecto; presentaba un índice alto sobre el consumo de plástico, duroport, entre otros materiales contaminantes que perjudican seriamente a nuestro entorno natural. Por lo que decidimos crear este sistema de esparcimiento de residuos, tomando en cuenta la disminución de los materiales antes mencionados. La localización del lugar donde realizamos la compra de los 24 contenedores fue gracias a la intervención de los mismos integrantes de la comunidad de diálogo que después de llegar a un acuerdo monetario se dio movilización a la adquisición de estos. Seguidamente se adhirieron las estructuras, en las que se colocarán los recipientes donde se debe depositar los desechos. Estos fueron trasladados al establecimiento en la misma semana en que fueron adquiridos los contenedores. Cabe recalcar que hubo en leve inconveniente con la estructura del proyecto en general. La misma fue resuelta días después, presentado la evaluación general donde se diagnosticó el cambio específico. Fue hasta la segunda semana del mes de agosto en que se presentó el proyecto en público abierto. Esta actividad estuvo basada en un Congreso seminarista, en donde se informó sobre la importancia de prevenir desastres artificiales; esto consiste en la “evolución” de la población, y el deterioro que provoca al hacerlo. Es importante saber lo significativo que puede ser un cambio potencial enfocado al reciclaje, o a la correcta distribución de los desechos. Por lo tanto, el trabajo se realizó haciendo enfoque a los estudiantes de dicha escuela, para manejar la disminución del deterioro ambiental y así poder educar, como lo rige la ley de protección ambiental considerando que la Constitución Política de la República de Guatemala en el artículo 97 establece que el Estado, las municipalidades y los habitantes del territorio nacional están obligados a propiciar el desarrollo social, económico y tecnológico que prevenga la contaminación del ambiente y mantenga el equilibrio ecológico, por lo que se dictarán todas las normas necesarias para garantizar que la utilización y el aprovechamiento de la fauna, de la flora, de la tierra y del agua, se realicen racionalmente evitando su depredación. Nosotros como alumnos de la Escuela Normal para Maestros de Educación Musical, debemos velar arduamente por incentivar a las personas que forman parte del cambio social, en que se valore los recursos utilizados que de por sí, será para bienestar comunal; y tomando como medida principal, los seminaristas ejercemos acciones concretas. También, hacemos la exhortación a los establecimientos vecinos y demás personas, para que reconozcan la problemática que afecta considerablemente a nuestro entorno.