Este puede escogerse por decoración o por protección del contenido como los vinos. El vidrio puede obtenerse en diversos colores, según gustos o necesidades específicas, tanto para conservación del contenido, como elemento de diseño. Los colores se usan en los envases, aparte de su función decorativa, como protección contra las radiaciones luminosas que pudieran dañar su contenido; el vidrio ámbar protege el contenido en un rango de longitud de onda de 2900 a 4500 milimicrones o angrostroms; el color humo filtra los rayos ultravioleta, y el color esmeralda es efectivo para el azul-violeta visible. Los colores más comunes empleados en envases de vidrio son: El verde (60%). Utilizado masivamente en botellas de vino, cava, licores y cerveza, aunque en menor cantidad en este último. El blanco (25%). Usado en bebidas gaseosas, zumos y alimentación en general. El extra claro (1O%). Empleado esencialmente en aguas minerales, tarros y botellas de decoración. El opaco (5%). Aplicado en cervezas y algunas botellas de laboratorio. Debido a que las impurezas en las materias primas afectan al color del vidrio. Para obtener una sustancia clara e incolora, los fabricantes añaden manganeso con el fin de eliminar los efectos de pequeñas cantidades de hierro que producen tonos verdes y pardos. El cristal puede colorearse disolviendo en él óxidos metálicos, sulfuros o seleniuros, como se explica a continuación: Amarillo: Se obtiene del óxido de hierro (FeO). Toma otros colores en condiciones especiales del horno y por los materiales usados. El amarillo plata requiere de nitrato (Ag NO3) y cloruro de plata (AgCl). Ciertos tonos de amarillo se logran con el azufre, aunque también el carbonato ofrece las tonalidades de dicho color. También se logra con Óxido férrico y óxido de antimonio, plomo, cadmio, hierro más manganeso. Violeta: Se consigue con óxido de manganeso (MnO2) o con el permanganato potásico (KMnO4), que es más puro y de composición constante. Tanto el bióxido como el anhídrido per mangánico (Mn2O2) contenidos en el permanganato se disocian fácilmente por la acción del calor, generando el sesquióxido de manganeso. Mezclando con óxido de hierro, el manganeso imparte al vidrio una coloración amarilla ámbar. Verde: Se logra del óxido de cromo (CrO). Con mayor frecuencia se emplea el bicarbonato potásico (K2CrO4) que es de color naranja, aunque por la acción del calor se descompone y libera el óxido crómico que imparte al vidrio la tonalidad verde (a baja temperatura, se consigue un bello amarillo). Azul: Surge del óxido de cobalto. Existe en el comercio un polvo negro con el que igualmente se logra el color, y que se obtiene de la mezcla de protóxido de cobalto (CoO), sesquióxido de cobalto (Co2O3) y óxido salino de cobalto (Co3O4). También se usa el carbonato de cobalto (CoCO3). Café: Se consigue con el óxido de níquel (NiO). El café violáceo caracteriza a los vidrios sódicos, el violeta a los potásicos y el marrón al boro silicatos. Agua marina: Surge del óxido de cobre (CuO). Se trata de un polvo negro que imparte al vidrio esta coloración, aunque puede ser sustituido por el sulfato de cobre (CuSO4 5H2O). Rojo: El rojo oro se logra con ácido cloroáurico (HAuCl), brindando una coloración rojo rubí y violácea que tiene gran poder colorante. Por su parte, el selenio mezclado con sulfuro de cadmio produce el rojo rubí. El vidrio rojo se obtuvo desde los inicios de la industria en México, gracias a la acción de elementos químicos como el oro y estaño. La presencia del plomo favorece la formación de esta coloración. No obstante, las fórmulas para su obtención siempre se han mantenido en secreto, por lo que la producción de vidrio rojo resulta muy limitada aún en nuestros días. Ambar Se consigue con Carbón y compuestos sulfátos, azufre con carbón, niquel y compuestos de hierro Opalo Se obtiene con Fluoruro de calcio El color del vidrio tiene una gran importancia para la protección del vino de la acción de la luz. El vidrio blanco detiene la ultravioleta y parcialmente la violeta, y es atravesado por otras radiaciones. El vidrio verde detiene mejor la ultravioleta y la violeta, dejando pasar poco azul y mucho amarillo, y retiene una fuerte proporción de otras radiaciones, estando así el vino mejor protegido. Los envases de vidrio se pueden imprimir con pigmentos que mezclados con el vidrio le dan a éste una coloración determinada; otros motivos son aplicados por inmersión, rociadas o serigrafía. Las tintas deben ser resistentes a la abrasión y a los detergentes. ACABADOS Los productos de vidrio requieren a veces de operaciones de acabado como: NUEVAS TENDENCIAS Automatización La confianza en la automatización aumentará a través del periodo de tiempo de 2008-2010 para afrontar las necesidades de aumentar eficiencia y calidad, y recortar costos. En la línea de envasado, se están automatizando las operaciones manuales y las operaciones automatizadas están buscando formas para impulsar la productividad, mientras se recortan costos y requisitos de mano de obra. Esta tendencia se está traduciendo en un fuerte interés en el equipo de nivel de entrada para ayudar a los envasadores a automatizar las operaciones manuales, para reducir o controlar los costos de mano de obra, mejorar las condiciones de trabajo y eliminar los riesgos ergonómicos. Aunque muchos envasadores instalan nuevas líneas o actualizan sus líneas existentes para cubrir las necesidades cambiantes, también hay un fuerte interés en hacer contrataciones externas, en especial en la industria de los alimentos. La robótica como el desarrollo más relevante en la tecnología de envasado, y a un número importante de empresas les gustaría instalar más. El paletizado es la aplicación de envasado más común para robots, seguida por envasado en caja de cartón y actividades de pick-and-place. Sin embargo, las unidades siguen complementando su repertorio de funciones de envasado. De acuerdo con un estudio del Packaging Machinery Manufacturers Institute (PMMI), el uso del robot ha crecido rápidamente desde 2004 dando un salto del 28% en el número usado para envasado primario y un incremento del 17% en unidades que realizan tareas de envasado secundario. Cuando se adopta un robot, también hay obstáculos que vencer. Lo que se cita con mayor frecuencia entre los usuarios de robots encuestados incluye el nivel de habilidad necesario para operar y dar mantenimiento a las unidades, tiempo inactivo, costo y la necesidad de intervención humana. RFID RFID, una tecnología que automatiza la identificación de productos y habilita la serialización al nivel de artículos para la cadena de suministro, rastreo y otros propósitos, seguirá en expansión estable debido a un compromiso firme con el etiquetado de productos entrantes Black glass Es en si el vidrio negro, es una tecnología reciente en el mundo, en la que el vidrio sale de una vez absolutamente negro, generando un acabado supremamente elegante que puede dar mayor valor agregado. Además que el color completamente negro, evita aún más la penetración de los rayos UV y evita las diferencias de temperatura