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CAPITULO I
La geología minera trata del estudio de los principios básicos de la geología económica. Los
depósitos de minerales metálicos y no metálicos constituyen la geología económica. La geología
económica es la rama de la geología que se encarga del estudio de los recursos naturales que se
encuentran sobre la corteza terrestre concentrados por procesos geológicos acumulados
principalmente como sustancias minerales de explotación industrial y conocido como yacimiento o
deposito mineral.
La actual necesidad de hallar grandes depósitos de alta calidad exige que exista una mayor
ampliación y profundización de las investigaciones geológicas, para aumentar las reservas minerales
en los depósitos de explotación y descubrir otros nuevos depósitos.
La geología minera en el presente curso trata de los conocimientos sobre la génesis de los minerales,
la exploración y explotación de los yacimientos minerales metálicos y no metálicos.
Es importante, por lo tanto, entender la naturaleza de su formación y los procesos contiguos que
hicieron posible la existencia de los minerales tal como lo conocemos en la actualidad, pues tuvieron
que pasar muchos miles de años para que ello ocurriera. Estos hechos de la formación tienen
asociados una serie de factores favorables, es decir condiciones óptimas de formación que en la
actualidad los conocemos como las guías de mineralización, claro está que estas guías pueden ser
litológicas, mineralógicas, fisiográficas, estructurales, etc.
Finalmente, la explotación previa una evaluación que consiste en la determinación de sus valores
de los minerales a través de una serie de actividades como son el muestreo, análisis, cubicación y
estimación de las reservas minerales que pueden ser económicamente rentables o no.
Petrología. – es importante conocer las diferentes clases de rocas, para de esta manera diferenciar
cuales con las que contienen mineralización y cuales son estériles. Para poder realizar la exploración
será de vital importancia estar en la capacidad de clasificar y diferenciar las rocas ígneas,
sedimentarias y metamórficas con bastante facilidad.
Geología estructural. – esta rama de la geología es muy útil en la consecución de elementos que
nos hagan discernir los tipos de estructuras en los que se han depositado los yacimientos minerales,
es decir; los minerales indudablemente, obligadamente estarán alojados en estructuras geológicas,
como son las fracturas, fallas, pliegues o estratos, así como para poder ubicar los yacimientos y la
calidad de ellos.
Informática. – en el estado actual de los conocimientos no se puede dejar de estar de la mano con
los avances tecnológicos de la informática, tal es así que existen programas establecidos para
determinar mapas de isovalores en base a datos estadísticos, que nos permitirán deducir
rápidamente los contenidos de leyes y realizar evaluaciones con mayores precisiones y rapidez.
El hombre ha sido minero desde los albores de la humanidad. Primero a través de las industrias
líticas: fragmentos de rocas o minerales mas o menos trabajados para su uso como herramientas o
armas: luego continuo con los metales, extrayéndolos desde los minerales (Era del Cobre, Era del
Bronce, Era del Hierro), refinándolos y combinándolos en aleaciones a medida que progresaba, de
paso, inventado la metalurgia. Esta es una historia de búsqueda de recursos, de su minería, y de las
aplicaciones tecnológicas de los productos obtenidos.
Si escribiéramos una pequeña lista con los principales hitos minero-metalúrgicos (y tecnológicos
asociados) de la humanidad ésta incluiría:
La humanidad progreso vertiginosamente durante el siglo XX, generando falsas ilusiones sobre lo
que pasaría un futuro muy alejado de sus balbuceantes comienzos industriales hacia fines del siglo
XVIII, comienzos del XIX. ¿Pero cuál es la realidad presente? La sociedad sigue siendo
absolutamente dependiente de los recursos minerales, con ejemplos tan clásicos como el hierro,
cobre, zinc, y así un largo etc. El advenimiento de las nuevas tecnologías (e.g., microelectrónica) es
complementario, y no alternativo en la mayoría de los casos. Basta con poner de ejemplo los
materiales requeridos para la construcción de un edificio o una carretera (arena, grava, cemento,
acero, zinc, cobre, etc.), aviones o coches (una larga lista de metales comunes o especializados,
materiales cerámicos), el tendido eléctrico (acero para las torres, cobre en el cableado). Analice por
un momento el ordenador que tiene al frente: componentes de cobre, piezas de aluminio, un cable
de cobre para enchufarlo al tendido eléctrico, una pantalla de cristal (sílice), un armazón de acero
(la torre), o el mismo chip procesador (¡silicón chips!!!). sí lo ha pensado por un momento llegara a
la conclusión que detrás de casi cada aspecto de la vida moderna esta esa actividad oculta, a veces
no bien entendida, que es la minería.
Por otra parte, la minería ha sido una actividad curiosa. A diferencia de otras aventuras del hombre,
presenta riesgos económicos y humanos muy superiores a los de cualquier otra actividad. La
relación éxito/fracaso en una campaña de exploración minera suele ser muy baja, lo que requiere
una combinación de una gran percepción geológica, intuición, y, sobre todo, persistencia y dinero.
Sin contar los gastos de exploración (que pueden sumar algunos millones de euros), la puesta en
marcha de una mina y su planta de tratamiento (asumiendo que la exploración haya sido exitosa y
el clima económico y político sea adecuado), puede ascender a más de mil millones de euros (e.g,
un pórfido cuprífero).
¿Qué hace entonces que las compañías mineras y sus profesionales asuman tales riesgos?: la
imperiosa necesidad de abastecimiento de recursos minerales. Hasta ahí la respuesta parece
satisfactoria, pero, ¿y porque entonces buscar oro (uno de los “clásicos” de la exploración de
metales)? El oro es una de las grandes “locuras” de la humanidad, con un valor que ha venido dado
tradicionalmente por su escasez y poco más. Sin entrar en una reseña histórica completa,
analicemos brevemente algunos hitos en “historia” del oro en los últimos 110 o 120 años.
Hacia finales del siglo XIX Gran Bretaña adopta el patrón oro para sustentar su moneda.
Durante la primera guerra mundial (1914-1918) los países europeos gastan durante el conflicto el
equivalente a unos 220.000 millones de euros, mucho más dinero de lo que tenían en sus
respectivos bancos centrales. Las economías europeas quedan arruinadas, especialmente la
Alemania.
En 1929 toma lugar el denominado “crash” de la bolsa de Nueva York, caos en la economía mundial.
Década de los años 60, los países europeos, ya están recuperados (o en franca recuperación) de los
estragos de la segunda guerra mundial (1939-1945). Algunos países empiezan a exigir una
convertibilidad directa entre sus reservas en dólares y el oro.
Estados Unidos carece del suficiente respaldo en oro como para asegurar dicha convertibilidad.
Esto tiene como resultado una nueva “fiebre de oro” (más importante en términos económicos que
la de 1849 en California). Cambio de política en las compañías mineras, ¡ahora hay que buscar oro!
Yacimientos antes considerados subeconomicos ahora son rentables si el tonelaje es el adecuado,
se pueden explotar leyes tan bajas de oro como en 1 gr/ton. Esto tiene además implicaciones
geológicas, ya que un tipo de yacimiento mineral, prácticamente un desconocido hasta la década
de los años 70, se transforma en “la joya de la corona de la exploración”, nos referimos a los
epitermales de metales preciosos.
Hoy en día la situación ha cambiado. Las estrategias económicas no son las de antes, ya no se
asegura la convertibilidad de una moneda en términos de las reservas de oro; es más, los bancos
centrales empiezan a vender sus reservas de oro.
Como podemos observar los precios del oro han sufrido fuertes vaivenes a lo largo del siglo XX, en
gran medida relacionados con crisis políticas y económicas internacionales.
CONTROL LITOLÓGICO.
CONTROL GEOQUÍMICO.
Alteración hidrotermal. – son los cambios en la mineralogía y textura de las rocas encajantes
concordantes a las estructuras mineralizadas. Sirve como guía del mineral y para indicar el carácter
de las soluciones asociadas. Es la conversión de un ensamble de minerales primarios a otra mas
estable, apropiado a las condiciones de temperatura, presión y composición de los filones
hidrotermales.
La alteración hidrotermal puede ocurrir antes, durante o después de la deposición de los minerales
metálicos. Se reconocen los siguientes tipos:
ARGILIZACIÓN. – 400-100 °C caracterizado por formar minerales arcillosos que son alterados los
feldespatos y minerales máficos. Depósitos de S, Fe, Hg, Ag-Au, U-Hg-Sb, Pb-Zn-Sb.
PROPILITIZACIÓN. – 400-100 °C se caracteriza por formar nuevos minerales de Ca y Mg. Es una zona
amplia, zona de alteración verdosa. Depósitos de minerales Pb-Zn-Cu, Pb-Ag, Ag-Au.
CAPÍTULO II
2.1.1. El Nucleo, es la zona interna de la tierra, se presenta desde los 2900 km. Hasta el centro de
la tierra a 6371 km. A una profundidad entre 4980 y 5120 km. Ocurre una discontinuidad – no muy
definida – con un nucleo externo liquido e interno probablemente sólido. Se considera que el
nucleo tiene una composición global metálica constituida por hierro y níquel.
2.1.2. El Manto, se ubica encima del nucleo y debajo de la corteza terrestre, entre la
discontinuidad de moho y una discontinuidad a 2900 km. De profundidad, debajo de la superficie
terrestre. Esta constituido por un material similar a los meteoritos pétreos y a los minerales
ferrosos. En general hay la creencia de que esta constituido por un material dunítico o peridotítico.
El manto puede dividirse en una capa superior constituida por eclogita y peridotita y una capa
inferior constituida por sulfuros y óxidos metálicos, especialmente de hierro, con una densidad
media de 5-6 gr/cm3. También se considera que tiene una composición global constituida por
sílice y magnesio, motivo por el cual este material se le denomina simático
2.1.3. La Corteza Terrestre, es una delgada capa superficial que presenta espesores que fluctúan
entre los 5-70 km. Tiene una densidad media de 3.3 gr/cm3 y una velocidad de ondas sísmicas
inferior a 8 km/seg. En la corteza terrestre se encuentran el 64% de rocas ígneas y el 35.3 % de
rocas sedimentarias y metamórficas. Entre las rocas ígneas ocurren principalmente basaltos,
gabros, anfiboliticos y eclogitas en un 42% y las granodioritas y dioritas en un 11.2%, los granitos
en un 10.4%, etc. Entre las rocas sedimentarias, las lutitas y pizarras constituyen 4.2% luego y en
porcentajes menores ocurren las calizas y areniscas, entre las rocas metamórficas predominan los
esquistos. La distribución de los minerales en la corteza terrestre es también variable,
encontrándose 63% de cuarzo mas feldespatos y el 14% de piroxenos y olivinos.
La corteza terrestre puede dividirse en una continental y una oceánica. La corteza continental se
presenta bajo los continentes, de mares someros y por debajo del talud o plataforma continental,
hasta profundidades de 2000 m debajo del agua. Su espesor varía de 50-70 km. En los cinturones
orogénicos, a 25-45 km. En las zonas de plataformas o escudos. En el Himalaya la corteza alcanza
en espesor de 70-80 km.
La corteza continental se puede dividir en tres capas: una capa superior de rocas sedimentarias de
2-3 km. De espesor, con densidad de 2.2 a 2.5 gr/cm3. Luego acurre una capa intermedia granítica,
que incluye el basamento arcaico, constituido por un complejo granítico-gnéisico y rocas
metamórficos. En algunos lugares esta capa se encuentra debajo de la sedimentaria y en otras
aflora. Finalmente se presenta la capa inferior o basáltica. En algunos lugares se encuentra una
superficie de separación entre la capa granítica y la capa basáltica, denominada Discontinuidad de
Conrad; en otros lugares esta superficie de separación aparentemente no existe, pasando de una
capa otra gradualmente.
La corteza de la zona orogénica andina tiene un grosor de mas de 90 km. Debajo de la cordillera
occidental y en la parte oeste del altiplano sur peruano, adelgazando a 30 km a lo largo de la zona
costera. Del mismo modo, hacia el este de la cordillera oriental tiene en su parte superior una
capa volcano-sedimentaria, de aproximadamente 10 km. De espesor; luego una capa media
constituida por rocas graníticas y metamórficas de aproximadamente 20 km de espesor, e infra
yaciendo la capa inferior basálticas de aproximadamente 50 km de espesor (James, 1971).
La corteza oceánica se caracteriza por presentar dos capas: una sedimentaria superior y otra
basáltica inferior, por la ausencia de la capa granítica. Esta corteza se localiza debajo de los
océanos, donde la profundidad del agua excede los 2000 m. superficialmente presenta una capa
de rocas sedimentarias constituidas por chert, lutitas y calizas pelágicas. Inmediatamente debajo
se encuentra una capa basáltica toleítica con un espesor promedio de 5 km.
Geosinclinales.
Tectónica de placas.
2.2.1. GEOSINCLINALES.
1. Sedimentación y subsidencia.
2. Orogénico.
3. Estabilización progresiva y el mas largo conocido como Estadio de las plataformas. (Tricard
1968, Auboin 1965).
Es este estadio la sedimentación se inicia al mismo tiempo que la subsidencia de la cuenca, hasta
que ocurren las primeras fases del plegamiento e inversión del eje geosinclinal. Durante este
estadio ocurre la acumulación sedimentaria y volcano sedimentaria. Este proceso esta
acompañado de intrusiones episódicas de composición máfica y ultramáfica. Entre las rocas
sedimentarias se encuentran las rocas sedimentarias detríticas, carbonatadas acompañadas de
formaciones silíceas, de hierro y bituminosos.
En este estadio ocurren movimientos corticales que ocasionan plegamientos débiles en algunos
lugares.
La mineralización en este estadio es principalmente de Fe, Mn, Cr, Ti, Pt, Cu, etc. Relacionada
directamente a los intrusivos máficos y ultramáficos.
En este estadio ocurren plegamientos y formaciones batoliticas, dándole un aspecto móvil en lugar
de un geosinclinal propiamente dicho.
En este estadio se emplaza y consolida los magmas formando batolitos calco alcalinos (de gabro a
granito). Las rocas sedimentarias son formaciones de flysch desarrollados en los flancos de los
geosinclinales.
La mineralización en este estadio es principalmente de Cu, Pb, Zn, Ag, Au, etc. Relacionada al
emplazamiento de los intrusivos de composición félsica a intermedia.
También llamada estadio tardío, post plegamiento o post orogénico. Este estadio corresponde a la
transición de un cinturón plegado móvil hacia una plataforma joven no consolidada.
La mineralización que presentan es principalmente de Pb, Cu, Zn, W, Mo, Sn, Au, U, relacionada a
las rocas volcánicas y a las intrusiones hipo abisales.
Se les puede dividir en tres niveles: inferior metamórfico, de rocas ígneas y superior sedimentario.
La corteza terrestre esta formada por cierto numero de placas en movimiento, que se deslizan
sobre un sustrato viscoso denominado Astenosfera. A consecuencia de este desplazamiento
ocurren en la corteza terrestre una serie de fenómenos que explican su evolución histórica. Estas
placas litosféricas son generadas en las dorsales meso-oceánicas, desplazándose hacia otra placa
continental, donde subduyen debajo de los continentes, a lo largo de la zona de Beni off,
profundizando hasta los 80 km. Estas placas normalmente son oceánicas y tienen un espesor de 5
km promedio. También existen placas constituidas por litosferas continentales o mixta
continental-oceánica. (Mitchell y Garzón 1981).
Según la tectónica de placas, la formación de las zonas orogénicas ocurre como producto de la
interacción de dos placas, siendo la más clásica la subducción de una placa oceánica debajo de una
placa continental. Tal es el caso de la placa de Nazca que se introduce debajo de la placa
sudamericana.
Los depósitos minerales metálicos están constituidos por metales de valor económico comercial
en minerales o rocas de la corteza terrestre. Para que lleguen a tener valor económico comercial
es necesario una concentración metálica que ocurre como resultado de la conjunción de uno o
varios procesos geológicos.
La mayoría de los metales ocurren dentro de los minerales en forma solida encontrándoseles
como elementos nativos y como compuestos (oro, plata, etc.) y en forma cristalizada (diamante).
Los depósitos metálicos pueden subdividirse en depósitos de elementos ferrosos (hierro, titanio,
cromo, manganeso), no ferrosos (cobre, zinc, plomo, antimonio, níquel), raros (tungsteno,
molibdeno, estaño, cobalto, mercurio, bismuto, zirconio, cesio, niobio, talio), nobles (oro, plata,
platino, osmio, iridio), radioactivos (uranio, radio, thorio), dispersos (escandio, galio, germanio,
rubidio, cadmio, indio, hafnio, renio, teluro, polonio, actino), y elementos de tierras raras (lantano,
cerio, praseodimio, neodimio, samario, europio, terbio, holmio, erbio, iterbio y lutecio).
Los minerales metalicos son denominados también minerales Mena y los no metalicos minerales
de Ganga (cuarzo, calcita, etc.).
Los minerales metalicos pueden ser primarios endógenos e hipógenos cuando cristalizan
conjuntamenmte con la roca o por intermedio de los procesos hipógenos (de profundidad)
formadores de minerales.
Se puede considerar dos orígenes primarios importantes para la generación de los depósitos de
minerales metalicos:
a) Magmatico y
b) Sedimentario.
2.3.1. TIPOS ESTRUCTURALES
Estructuras filoneanas.
Estructuras estratiformes.
Estructuras stock work.
Estructuras volcánicas.
Estructuras brechadas.
Conocidas como filon de fisura o veta. Tiene la forma y dimensiones de la fisura o grieta receptora.
La mayoría de filones son estrechos u sus longitudes varian entre decenas de metros a algunos
kilómetros y anchos de pocos centímetros a varias decenas de metros. Las grandes fallas
raramente están mineralizadas.
Están asociados a las fracturas y fallas de tensión, presentan paredes quebradas y desgarradas
dependientes del tipo de roca que atraviesan. Se encuentran formando grupos enlas curvaturas de
los estratos, en zonas de seudo-estratificacion de declive suave, en los domos de rocas eruptivas,
en las cavidades de disyunciones transversales de los diques volcánicos, etc. Estos filones no son
muy largos acuñándose tanto en extensión como en buzamiento. Una característica principal de
estos filones es la ausencia de desplazamiento, ya que están formados por esfuerzos de traccion
perpendiculares a las paredes de la grietas.
Se presentan paredes rectas, esmeriladas e independientemente del tipo de roca que atraviesan.
Estas grietas sufren desplazamientos (fallas normales, inversas y de rumbos), y presentan brechas
y arcillas tectónicas, siendo su desplazamiento de gran extensión. Están acompáñadas por grietas
ramificadas y cimoides.
Las grietas ramificadas ocurren principalmente en las fallas de rumbo y en las normales,
como grietas secundarias (de ruptura o separación) que salen de la grieta principal
alejándose y desapareciendo rápidamente. Estas grietas ramificadas secundarias pueden
rellenarse de mineral y crear una estructura mineralizada. Esta estructura mineralizada se
caracteriza por presentar una mayor mineralización en la unión de las grietas secundarias
con la principal formándose columnas mineralizadas.
Los cimoides ocurren cuando una falla de desplazamiento se divide en dos ramales,
desviándose una lateralmente formando una curva cimoide, mientras la otra continua en
línea recta durante una corta distancia para liuego describir una curva similar y reunirse
con el primer ramal, de esta manera los dos ramales encierran un lente de roca entera o
parcialmente brechada y comúnmente rellenada o reemplazada por mena. Los dos
ramales del cimoide pueden estar mineralizados o ser mas ricos que el promedio o ser
esteriles. En tercera dimensión la mineralización en los cimoides toma la forma tubular.
Estas estructuras cimoidales terminan en una estructura denominada “cola de caballo”.
Estos cimoides también son conocidos como filones lenticulares.
Están relacionados con los elementos sedimentarios y tectónicos surgidos durante el proceso de
formación de las capas sediementarias, destacándose la formación de arrecifes dentro de las rocas
carbonatadas favorables para la concentración de los minerales por procesos metasomaticos
(depósitos dePb-Zn en Missouri EEUU) la formación de pliegues causados por los corrimientos de
lodo sedimentario desarrollados en los lechos inclinados durante el proceso de sedimentación,
dando lugar a la formación de los cuerpos mineralizados. Estas estructuras ocurren principalmente
en charnelas, flexuras y en fallas interestratificadas.
Son lugares favorables para la formación de menas, en los que se emplaza la mineralización por
metasomatismo formando zonas estratificadas, o por relleno de cavidades en las zonas de
agrietamiento y de trituración formando cuerpos en forma de silla de montar y en forma de “S” en
las charnelas de los pliegues. (Mina Bendigo-Australia). Estos depósitos ocurren en rocas
permeables (areniscas, calizas y tufos).
Pueden generar depósitos estratiformes, laminares y/o lenticulares. También ocurren por la
existencia de zonas de trituración en rocas de diferente competencia como calizas y esquistos,
areniscas, tufos y rocas efusivas, etc. Formándose en las rocas frágiles un brechamiento,
agrietamiento y trituración. Se presentan en depósitos polimetálicos de antimonio, de cobre, etc.
También pueden ocurrir por la existencia de estyratos impermeables que obstaculizan la
expansión de los soluciones hidrotermales y que contribuyen a la concentración de la mena.
Se caracterizan por presentar una red entrelazada de vanillas portadoras de mineral que
atraviesan una masa rocosa. Las estructuras stock work conforman cuerpos mineralizados que
pueden alcanzar áreas mayores de un kilometro cuadrado (pórfidos de cobre). Relacionada a estas
estructuras se conocen depósitos de Cu-Mo, Mo, Pb-Zn, asbesto, etc., y filones y zonas
mineralizadas de trituración con Pb-Zn, Au, U, etc.
Las estructuras stock work ocurren principalmente en las rocas intrusivas de composición
intermedia, a veces rocas extrusivas de composición félsica, y raramente en rocas sedimentarias.
Las venillas presentes en el stock work alcanzan una longitud promedio de pocos metros y un
ancho de algunos milímetros de decimetros. A esta mineralización puede considerársele como
diseminada.
Conocidas también como estrato volcán o cono compuesto. Estos aparatos volcánicos ocurren
durante las erupciones de un volcanismo del tipo central, alcanzan áreas de 100 km cuadrados y
alturas de 2-+3 km. Están constituidos por horizontes lávicos, tufáceos, etc. Atravesados por
chimeneas y cuerpos subvolcanicos. La mineralización ocurre en forma de filones, vetas
entrelazadas, cuerpos tubulares y en chim,eneas volcánicas; las chimeneas pueden tubulares de
sección circular u ovalada, asociados a una mineralización de Hg, U, polimetálicos, etc. Cónicas
asociadas a depósitos auro-argentiferos.
Están constituidas por fragmentos rocosos y una matriz. Los fragmentos generalmente son
angulosos, a veces subangulares y raramente redondeados, presenta diámetros que varian desde
algunos milímetros a varios metros. La matriz es rocoso pulverizado y fino que cementa a los
fragmentos.
CAPITULO III
Estos factores son principalmente favorables para la descomposición de las rocas y ocurren en
un clima tropical húmedo, generándose un manto de intemperismo y un rápido transporte de
los materiales lixiviados y detríticos.
Ocurren en fallas inversas de bajo angulo de carácter regional y son conductoras de mineral,
pudiendo ocurrir entre estas fallas y sin reaperturas considerables, una mineralización de
filones estrechos de potencia promedio de 0.2-0.5 metros y que pueden alcanzar distancias de
1-2km, con angulo de buzamiento suave, 45°-55°.
3.1.3.a. Charnelas.
3.1.3.b. Flexuras.
Ocurren en las rocas sedimentarias, especialmente en los esquistos y tufos. Se presentan bajo
la forma de lentes que buzan a lo largo del eje de las rocas estratificadas. Se caracterizan por
presentar una gran extensión.
3.1.3.a. La Paragénesis.
3.1.3.b. Zonamiento.
Bajo el lento e implacable ataque de la meteorización, las rocas y los depósitos minerales que
encierran a la desintegración mecánica y a la descomposición química. La meteorización es
una operación compleja que consiste en distintos procesos que pueden actuar individual o
conjuntamente. Los minerales que son inestables en condiciones de meteorización sufren
descomposición química; las partes solubles pueden ser desplazadas y los residuos insolubles
pueden acumularse, y algunos de ellos llegan a formar depósitos minerales residuales. Los
minerales estables, como el cuarzo, y el oro experimentan poco o ningún cambio quimico,
pero pueden ser liberados de la matriz que los encierra y experimentar un enriquecimiento
residual en la superficie o ser concentrados mecánicamente hasta formar depósitos o
placeres, por medio del aire o del agua en movimiento.
Cuando un yacimiento mineral queda expuesto a la erosion es meteorizado junto con las rocas
que lo encierran. Las aguas superficiales oxidan muchos minerales metalicos, produciendo
disolventes que disuelven a su vez a otros minerales. Un yacimiento metalico queda de este
modo oxidado y generalmente desprovisto de muchos de sus materiales valiosos hasta el nivel
de la capa de aguas freáticas o hasta una profundidad donde no puede producirse ya la
oxidación. La parte oxidada se denomina zona de oxidación.
Los efectos de la oxidación pueden extenderse, de todos modos, mucho mas debajo de dicha
zona de oxidación. Cuando las soluciones disolventes, frias y diluidas, se filtran hacia abajo
pueden perder una parte o la totalidad de su contenido metalico en la zona de oxidación y dar
origen a depósitos de mineral oxidado, que constituyen un tipo muy corriente, fácilmente
accesible a la explotación y que provoca unos comienzos entusiasmados de explotación de
muchos distritos mineros.
Si las soluciones que filtran hacia abajo penetran en la capa de aguas freáticas, su contenido
metalico puede precipitarse en forma de sulfuros secundarios y dar origen a una zona de
enriquecimiento sulfuroso supergénico. La parte inferior del deposito, que no resulta
afectada, se denomina zona primera o hipogéna. Esta disposición zonal es caracterizadaa de
muchos depósitos minerales que han estado sometidos a una intemperización larga y
continua. En algunos puntos, puede no presentarse la zona de sulfuros supergénicos, y en
casos raros la oxidación es poco profunda o está ausente, como ocurre en zonas heladas o
regiones que experimentan una rápida erosion. Son necesarias las condiciones especiales de
tiempo, clima, evolución, fisiográfica y minerales disponibles para darse los resultados que
hemos descrito, pero si solo nos referimos a los minerales metalicos oxidados y enriquecidos
supergenicamente, los fenomenos son suficientemente comunes en la mayor parte de las
zonas no heladas del mundo entero.
La desintegración mecánica en sí está limitada en gran parte a las regiones donde se producen
cambios anuales y diurnos acentuados en la temperatura o a regiones muy frias donde los
cambios químicos superficiales se realizan lentamente y la acción de las heladas es energica
durante gran parte del tiempo. La meteorización química es mas activa se registra en las
regiones calidas y húmedas donde la lluvia proporciona humedad y fomenta la vida vegetal, la
cual a su vez proporciona acidos humicos y organicos que contribuyen a la actividad química.
Los agentes de descomposición que actúan en la superficie son: agua, oxigeno, anhídrido
carbonico, calor, acidos, álcalis, vida vegetal y animal, y una parte de los productos de la
descomposicon de las rocas mismas.
La mayor parte de las rocas contienen hierro y en condiciones favorables una cantidad
suficiente del mismo puede acumularse como residuo y formar depósitos explotables de
mineral de hierro residual. Ello depende, en parte, de la naturaleza de la roca que lo contiene,
la forma y cantidad del hierro presente. Asi mismo deben darse determinadas condiciones
climáticas y fisiográficas.
Las coberteras de oxidación indican lo que hay debajo de la superficie. Llaman la atención y
despiertan el interés sobre lo que pueden esconder. Salvo en las regiones heladas, la mayor
parte de los yacimientos minerales presentan un sombrero o cobertera de oxidación; de ahí
que el hallazgo de uno de ellos pueda anunciar el descubrimiento de una riqueza enterrada.
De todos modos, las masas minerales no comerciales también presentan estas coberteras. Es
de vital importancia saberlas distinguir; pero para ello se necesita experiencia, conocimientos
y cuidadosa observación. Se distinguen por delicadas diferencias de color y forma que son
difíciles de explicar por escrito.
Las masas de agua poco profundas como las lagunas, lagos, y estrechos, son los
emplazamientos adecuados para mayor depositacion de minerales de hierro, manganeso,
fosfatos, azufre, carbonatos comerciales y arcillas.
3.2.2. EVAPORACIÓN.
Cuando se producen lentas oscilaciones de la tierra o del mar, grandes porciones de oceanos
pueden quedar incomunicados, y se evaporan gradualmente hasta el punto de depositar yeso
y sal común en muchas partes del mundo. Una concentración todavía mayor de sales
producida por evaporación creó los ricos depósitos de potasa que son una continua fuente de
riqueza.
La depositacion de capas de sal proporciona cerca de las tres cuartas partes de toda la sal
consumida. Las capas de sal son generalmente lenticulares y su espesor oscila entre unos
centímetros y unos metros. Sin embargo se hallan capas de 45 m de espesor en Ohio, de 100
m en Michigan y de unos 200 m en nuevo Mexico.
DOMOS DE SAL, los domos de sal no son comunes y constituyen un objeto de discusión. Se
conoce su existencia en la costa del golfo (EEUU), Alemania, España, Rumania e Irán, pero los
de EEUU tienen especial interés por estar asciados a yacimientos de petróleo. En la superficie
no puede haber indicio de ellos. Pero a veces se ven indicados por pequeños montículos de
poca altura o depresiones. La mayoría han sido localizados por métodos geofísicos y
comprobados por perforación.
De las sales marinas, se obtiene también pequeñas cantidades de boratos y bromo. Aunque
los boratos se forman con frecuencia en otras condiciones, algunos precipitan junto a los
minerales de potasio de las aguas residuales marina. Asi, se encuentra boracita y otros boratos
junto a la sal potásica de Alemania, asociados a la carnalita y minerales potásicos
suprayacentes. Los boratos de magnesio son considerados como típicos de condiciones
marinas.
En la formación de placeres, la naturaleza ha actuado de tal manera que logra los resultados
alcanzados por el hombre cuando éste extrae, tritura y concentra minerales. Los minerales de
placer se liberan de su matriz por meteorización. Los materiales desmenuzados son arrastrados
lentamente por las aguas, laderas abajo, hacia el rio o playa mas próximos. Las aguas en
movimiento de los ríos barren los materiales ligeros que constituyen la matriz y los materiales mas
pesados caen al fondo o son desplazados aguas abajo, relativamente a cortas distancias.
En lo que respecta a la velocidad del agua debe ser favorable, si es demasiado lento los materiales
mas ligeros no se separan de los pesados y si es muy grande los pesados también serán
arrastrados. Una disminución de velocidad permite una deposición y acumulación.
Se pueden considerar como una fase intermedia en la formación de placeres de playa o de los
fluviales. Se forman sin intervenir la corriente en las laderas de los montes a partir de los filones
liberados y meteorizados.
Los placeres fluviales son del tipo de placer mas importante, los mismos han producido grandes
cantidades de oro, casiterita, platino y piedras preciosas.
LUGARES DE ACUMULACIÓN, en una corriente que circula rápidamente por meandros, el agua
mas rápida es la que esta en la parte exterior del mismo, y la mas lenta es la de la orilla opuesta.
Cuando los ríos atraviesan rocas muy inclinadas o dispuestas en capas verticales, como pizarras y
esquistos o alternancia de capas duras y blandas, formando rastrillos naturales en donde se
depositan los minerales pesados.